Merton, Robert - Teoría y Estructura Social, Cap 2

download Merton, Robert - Teoría y Estructura Social, Cap 2

of 21

Transcript of Merton, Robert - Teoría y Estructura Social, Cap 2

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    1/21

    Teora y Estructura Social - Merton, Robert

    II. Sobre las Teorias Sociolgicas de Alcance Intermedio

    Como muchas palabras excesivamente usadas, la palabra teora amenaza quedar vaca de sentido. Lamisma diversidad de cosas a que se aplica, desde pequeas hiptesis de trabajo, pasando porespeculaciones generales pero vagas y desordenadas hasta los sistemas axiomticos del pensamiento elempleo de la palabra con frecuencia oscurece el entendimiento en vez de aclararlo.

    A lo largo de este libro, el trmino teora sociolgica se refiere a grupos de proposiciones lgicamenteinterconectados, de los que pueden derivarse uniformidades empricas. Constantemente enfocamos lo quehe denominado teoras de alcance intermedio: teoras intermedias entre esas hiptesis de trabajos menorespero necesarias que se producen abundantemente durante las diarias rutinas de la investigacin (1) y losesfuerzos sistemticos totalizadores por desarrollar una teora unificada que explicara todas lasuniformidades observadas de la conducta, la organizacin y los cambios sociales. (2)

    La teora intermedia se utiliza principalmente en sociologa para guiar la investigacin emprica. Es unateora intermedia a las teoras generales de los sistemas sociales que estn demasiado lejanas de l os tiposparticulares de conducta, de organizacin y del cambio sociales para tomarlas en cuenta en lo que seobserva y de las descripciones ordenadamente detalladas de particularidades que no estn nadageneralizadas. La teora de alcance intermedio incluye abstracciones, por supuesto, pero estn lo bastantecerca de los datos observados para incorporarlas en proposiciones que permitan la prueba emprica.

    Las teoras de alcance intermedio tratan aspectos delimitados de los fenmenos sociales, como lo indic ansus etiquetas. Se habla de una teora de los grupos de referencia, de la movilidad social, o de conflicto depapeles y de la formacin de normas sociales, as como se habla de una teora de los precios, de una teorade los grmenes o de una enfermedad, o de una teora cintica de los gases.

    Las ideas germinales en tales teoras son caractersticamente sencillas: pinsese en Gilbert acerca delmagnetismo, en Boyle acerca de la presin atmosfrica, o en Darwin acerca de la formacin de los atolonesde coral. Gilbert comienza con la idea relativamente sencilla de que puede concebirse la Tierra como unimn; Boyle, con la idea sencilla de que puede concebirse la atmsfera como un "mar de aire"; Darwin, conla idea de que se pueden concebir los atolones como crecimiento, hacia arriba y hacia abajo, de coral, enislas que desde haca tiempo se haban sumergido en el mar. Cada una de estas teoras nos ofrece unaimagen que origina inferencias. Para tomar un solo caso: si se piensa en la atmsfera como un mar de aire,entonces, como infiri Pascal, debe haber menos presin de aire en la cima de una montaa que en su

    base. La idea inicial sugiere as hiptesis especficas que se someten a prueba al ver si sus inferencias sonconfirmadas empricamente. La propia idea se prueba por su fertilidad al observar la gama de problemastericos e hiptesis que permiten identificar nuevas caractersticas de la presin atmosfrica.

    De la misma manera, la teora de los grupos de referencia y la privacin relativa comienza con la sencillaidea, iniciada por James, Baldwin y Mead, y desarrollada por Hyman y Stouffer, de que la gente toma lasnormas de otras personas importantes como base de su propia apreciacin y evaluacin. Algunas de lasinferencias extradas de esta idea van contra lo que pudiera esperar el sentido comn, basado en un grupono examinado de supuestos "evidentes". El sentido comn, por ejemplo, sugerira que cuanto mayor sea laprdida real experimentada por una familia en un desastre general, ms agudamente se sentir privada.Esta creencia se basa en el supuesto, no examinado, de que la magnitud de la prdida, objetiva estrelacionada linealmente con la apreciacin subjetiva de la prdida y que esta apreciacin se limita a laexperiencia propia. Pero la teora de la privacin relativa nos conduce a una hiptesis muy distinta: que laspropias apreciaciones dependen de las comparaciones que la gente hace de su propia situacin con la deotra gente, las cuales se perciben como comparables entre s . Esta teora, por tanto, sugiere que, encondiciones especificas, las familias que sufren serias prdidas se sentirn menos privadas que las quesufren pequeas prdidas si estn en situaciones que las llevan a compararse con gente que sufrenprdidas an ms graves. Por ejemplo, hay personas en la zona de mayor dao de un desastre, que, auncuando considerablemente afectadas, son las ms capaces de ver otras a su alrededor que han sido msseveramente afectadas. La investigacin emprica sostiene la teora de la privacin relativa, antes que lossupuestos del sentido comn: "el sentimiento de haber salido relativamente mejor que otros se incrementacon la prdida objetiva hasta la categora de la prdida mayor", y solamente entonces disminuye. Esta pautase refuerza por la tendencia de las comunicaciones pblicas a centrarse en "las vctimas ms extremas[que] tiende a fijarlas como grupo de referencia, frente al cual incluso otras vctimas pueden compararsefavorablemente". A medida que se desarrolla la investigacin, se encuentra que estas pautas deautoapreciacin a su vez afectan la distribucin de la moral en la comunidad de los sobrevivientes y sumotivacin para ayudar a otros (3). Dentro de un tipo de conducta particular, por tanto, la teora de laprivacin relativa nos conduce a un grupo de hiptesis que pueden someterse a prueba emprica. Laconclusin confirmada puede darse entonces bastante simplemente: cuando pocos estn daados casi enel mismo grado, el dolor y la prdida de cada uno parecen grandes; cuando muchos estn daados en

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    2/21

    grado sumamente variado, incluso prdidas bastante grandes parecen pequeas cuando se comparan conlas mayores. La probabilidad de que se hagan comparaciones es afectada por la visibilidad diferente de lasprdidas de mayor o menor grado.

    La especificidad de este ejemplo no debe oscurecer el carcter ms general de la teora de alcanceintermedio. Obviamente, la conducta de la gente que se enfrenta a un desastre general solamente es partede una serie infinitamente vasta de situaciones particulares, a las que la teora de los grupos de referenciapuede aplicarse de manera instructiva, como ocurre con la teora del cambio en la estratificacin social, la

    teora de la autoridad, la teora de la interdependencia institucional, o la teora de la anomia. Pero esigualmente claro que tales teoras de alcance intermedio no se han derivado lgicamente de una sola teorade aplicacin general de los sistemas sociales aunque, una vez desarrollada, aqullas puedan serconsistentes con una. Adems, cada teora es ms que una mera generalizacin emprica, una proposicinaislada que resume las uniformidades observadas de las relaciones entre dos o ms variables. Una teoracomprende un conjunto de suposiciones de las cuales se han derivado las generalizaciones empricas.

    Otro caso de teora de alcance intermedio en sociologa puede ayudarnos a identificar su carcter y sususos. La teora de los grupos de papeles (4) comienza con la imagen de cmo se organiza la posicin socialen la estructura social. Esta imagen es tan sencilla como la imagen de Boyle de la atmsfera como si fueraun mar de aire, o la de Gilbert de la Tierra como si fuera un imn. Pero como con todas las teoras dealcance intermedio, sin embargo, la prueba radica en no valerse de la respuesta inmediata a las ideas quelas originaron como obvias o extraas, sino como derivadas de una teora ms general, o concebidas para

    tratar un tipo particular de problemas .A pesar de los significados tan diversos dados al concepto de posicin social, una tradicin sociolgicaconstantemente la utiliza para referirse a una posicin en un sistema social, con su serie distintiva dederechos y obligaciones designadas. En esta tradicin, como lo ejemplifica Ralph Linton, el conceptorelacionado de papel social se refiere a la conducta de los que ocupan una situacin, conducta orientadahacia las expectaciones pautadas de otros (quienes otorgan los derechos y exigen las obligaciones) .Linton, como otros de esta tradicin, lleg a formularla desde hace tiempo reconocida observacin bsicade que cada persona en la sociedad inevitablemente ocupa mltiples categoras y que cada una de stastiene su papel asociado.

    Es en este punto donde las imgenes de la teora del grupo de papeles se apartan de esta tradic in largotiempo establecida. La diferencia inicialmente es pequea-algunos diran tan pequea que llega a serinsignificante, pero el cambio del ngulo de la visin produce diferencias tericas cada vez ms

    fundamentales. La teora del grupo de papeles comienza con el concepto de que cada situacin socialimplica no un solo papel asociado, sino una serie de papeles. Este rasgo de la estructura social origina elconcepto del grupo de papeles: ese complemento de las relaciones sociales en las que las personas estninvolucradas sencillamente porque ocupan una situacin social particular. As, una persona de la categorade estudiante de medicina desempea no slo el papel de estudiante frente a la situacin correlativa de susmaestros, sino tambin una serie de otros papeles que lo relacionan de manera diversa con otros en elsistema: otros estudiantes, mdicos, enfermeras, trabajadores sociales, tcnicos, mdicos y dems.Asimismo, la situacin de maestro de escuela tiene un grupo de papeles distintivos que lo relacionan noslo con la relacin correlativa, la del alumno, sino tambin con los colegas, el director de la escuela y elsuperintendente, la Junta de Educacin, las asociaciones profesionales y, en los Estados Unidos, con lasorganizaciones patriticas locales.

    Obsrvese que el grupo de papeles difiere de lo que los socilogos han descrito ampliamente como"papeles mltiples". Este ltimo trmino tradicionalmente se ha referido no al compIejo de papelesasociados con una sola situacin social, sino a va rias situaciones sociales (a menudo, en diferentes esferasinstitucionales) en que se encuentra la gente; por ejemplo, una persona podra tener diversas categoras,como mdico, marido, padre, profesor, feligrs, miembro del Partido Conservador y capitn del ejrcito.(Este complemento de categoras distintas de una persona, cada una con su propio grupo de papeles, es ungrupo de situaciones. Este concepto origina su propia serie de problemas analticos, que se examinan en elCapitulo Xl ).

    Hasta este punto, el concepto de grupo de papeles es solamente una imagen para pensar en uncomponente de la estructura social. Pero esta imagen es un principio, no un fin, pues nos conducedirectamente a ciertos problemas analticos. La nocin del grupo de papeles nos lleva al punto a lainferencia de que las estructuras sociales enfrentan a los hombres con la tarea de articular los componentesde innumerables grupos de papeles; es decir, la tarea funcional de arreglrselas de alguna manera paraorganizar stas de modo que se obtenga una grado apreciable de regularidad social, suficiente para permitir

    a la mayora de las personas la mayor parte del tiempo continuar con sus asuntos sin llegar a paralizarsepor los conflictos extremos de sus grupos de papeles.

    Si esta idea relativamente sencilla del grupo de papeles tiene un valor terico, generar problemas

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    3/21

    diferenciados para la investigacin sociolgica. El concepto de grupo de papeles lo hace (5). Plantea elproblema general pero definido de identificar los mecanismos sociales -es decir, los procesos sociales quetienen consecuencias designadas para partes designadas de la estructura social, los cuales expresan lasexpectativas de los del grupo de papeles, lo suficiente para reducir los conflictos del que ocupa unacategora. Origina el problema ulterior de descubrir cmo surgen estos mecanismos de manera quepodamos tambin explicar por qu los mecanismos no operan eficazmente o no surgen en algunossistemas sociales. Por ltimo, al igual que la teora de la presin atmosfrica, la teora del grupo de papelesseala directamente la investigacin emprica pertinente. Se han escrito monografas sobre las funciones dediversos tipos de organizacin formal, empricamente basadas de las dimensiones tericas de cmo operanen la prctica los grupos de papeles.(6)

    La teora de los grupos de papeles ilustra otro aspecto de las teoras sociolgicas de alcance intermedio.Frecuentemente son congruentes con una diversidad de los llamados sistemas de la teora sociolgica.Hasta donde se puede decir, la teora de los grupos de papeles no es incongruente con orientacionestericas tan amplia como la teora marxista, el anlisis funcional, el conductismo social, la sociologa integralde Sorokin o la teora de la accin de Parsons. Esta puede ser una horrenda observacin para aquellos denosotros que hemos sido preparados para creer que los sistemas del pensamiento sociolgico sonconjuntos de doctrina estrechamente enlazados y mutuamente excluyentes. Pero en realidad, comoobservaremos posteriormente en esta introduccin, las teoras sociolgicas generales son losuficientemente laxas, internamente diversificadas y traslapadas mutuamente que una teora dada dealcance intermedio, que tiene una medida de confirmacin emprica, puede a menudo subsumirse en

    teoras comprensivas, ellas mismas discrepantes en algunos aspectos.Esta opinin razonablemente heterodoxa puede ilustrarse al volver a examinar la teora de los grupos depapeles como teora de alcance intermedio. Nos apartamos del concepto tradicional al suponer que unasola categora en la sociedad implica, no un slo papel, sino una serie de papeles asociados, que relacionanal que ocupa una categora con otras diversas. Segundo, observamos que este concepto de grupo depapeles origina problemas tericos distintivos, hiptesis y, por tanto, la investigacin emprica. Un problemabsico es el de identificar los mecanismos sociales que articulan el grupo de papeles y reducen losconflictos entre ellos. Tercero, el concepto de grupo de papeles dirige nuestra atencin hacia el problemaestructural de identificar arreglos sociales que integran y tambin oponen las expectativas de variosmiembros del grupo de papeles. El concepto de papeles mltiples, por otra parte, limita nuestra atencin aun problema distinto y sin duda importante: los individuos que ocupan categoras, cmo resuelven lasmuchas demandas a veces conflictivas que resultan de dichas categoras? Cuarto, el concepto de grupo de

    papeles nos lleva a otra interrogante de cmo surgen estos mecanismos sociales; la respuesta a estapregunta nos permite explicar muchos ejemplos concretos en los cuales el grupo de papeles funcionaineficazmente. (Esto no supone que todos los mecanismos sociales son funcionales, as como la teora dela evolucin biolgica no implica el supuesto comparable de que no hay desarrollos disfuncionales). Porltimo, la lgica del anlisis que muestra esta teora sociolgica de alcance intermedio es desarrolladatotalmente en trminos de los elementos de la estructura social, ms que para proporcionar descripcioneshistricas concretas de sistemas sociales particulares. As, la teora de alcance intermedio nos permitetrascender el falso problema de un conflicto terico entre lo nomottico y lo idiottico, entre lo general y lototalmente particular, entre la teora sociolgica generalizadora y el historicismo.

    Por todo esto, es evidente que segn la teora del grupo de papeles siempre hay un potencial paradiferentes expectacin es entre los del grupo de papeles, en lo que se refiere a cul es la conductaapropiada para quien ocupa una categora. La fuente bsica de este potencial para el conflicto y esimportante observar una vez ms que en este punto estamos a la par con tericos generales tan distintoscomo Marx y Spencer, Simmel, Sorokin y Parsons se encuentra en el hecho estructural de que otrosmiembros de un grupo de papeles son capaces de ocupar varias posiciones sociales que difieren de las delque ocupa la categora en cuestin. En la medida en que esos miembros de un grupo de papeles estnsituados diversamente en la estructura social, pueden tener intereses y sentimientos, valores y expectativasmorales, que difieren de los del que ocupa una categora. Esto, despus de todo, es uno de los principalessupuestos de la teora marxista, como lo es de muchas otras teoras sociolgicas: la diferenciacin socialgenera intereses distintos entre los individuos situados diversamente en la estructura de la sociedad. Porejemplo, los miembros de un consejo escolar con frecuencia pertenecen a estratos sociales y econmicosque difieren significativamente del estrato del maestro de escuela. Los intereses, valores y expectati vas de los miembros del consejo han de diferir, por consiguiente, de los del maestro, quien puede ser as sometidoa expectaciones conflictivas de estos o aquellos miembros de su grupo de papeles: colegas profesionales,miembros influyentes del consejo escolar y, digamos, el Comit Americanista de la Legin Americana. Unelemento educativo esencial para uno puede ser juzgado como secundario por otro, o como una clarasubversin, por un tercero. Lo que sin duda es conveniente para una categora lo es, en un gradoidentificable, para los ocupantes de otras categoras que estructuralmente estn relacionados a travs de sugrupo de papeles con otros que, por su parte, ocupan diferentes posiciones en la sociedad.

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    4/21

    Como teora de alcance intermedio, pues, la teora de los grupos de papeles comienza con un concepto ysus imgenes asociadas y genera una serie de problemas tericos. As, la supuesta base estructural para laperturbacin potencial de un grupo de papeles plantea una doble pregunta (la cual, como lo muestra lahistoria, no haba surgido en ausencia de la teora): Qu mecanismos sociales, si los hay, funcionan paracontrarrestar la inestabilidad, tericamente supuesta, de los grupos de papeles? Y, correlativamente, enqu circunstancias no funcionan estos mecanismos sociales, con la resultante ineficacia, confusin yconflicto? Como otras cuestiones que histricamente han brotado de la orientacin general del anlisisfuncional, stas no suponen que los grupos de papeles invariablemente funcionan con una eficacia esencial. Esta teora a de alcance intermedio no est interesada en la generalizacin histrica del grado en queprevalece un orden o conflicto social en el mundo, sino, en cambio, en el problema analtico de identificarlos mecanismos sociales que producen un grado mayor de orden o menor de conflicto de lo que seobtendra si estos mecanismos no entraran en juego.

    SISTEMAS COMPLETOS DE LA TEORA SOCIOLGICA

    La bsqueda de las teoras de alcance intermedio exige del socilogo un compromiso diferente que labsqueda de una teora totalizadora. En las siguientes pginas supongo que esta bsqueda de un sistematotal de teora sociolgica, en que toda suerte de observaciones de cada aspecto de la conducta,organizacin y cambios sociales, encuentren desde luego su lugar prefijado, implica el mismo desafo

    jubiloso y la misma pequea promesa que los grandes sistemas filosficos totalizadores que han cado enmerecido desuso. El problema puede unirse fcilmente. Algunos socilogos todava escriben como si

    esperasen, aqu y ahora, la formulacin de la teora sociolgica general, lo bastante amplia para abarcargrandes cantidades de detalles exactamente observados de la conducta y organizacin sociales, y lobastante fructfera para dirigir la atencin de miles de investigadores a problemas de investigacin emprica.Yo considero sta como creencia prematura y apocalptica. No estamos listos. An no se ha hecho eltrabajo preparatorio suficiente.

    Un sentido histrico de los cambiantes contextos intelectuales de la sociologa debe ser lo bastante humildepara liberar a aquellos optimistas de esta esperanza extravagante. Por una parte, algunos aspectos denuestro pasado histrico todava permanecen en gran parte con nosotros. Debemos recordar que la primerasociologa se desarroll en una atms fera intelectual (7) en la que se introducan por todos lados sis temasfilosficos generales. Cualquier filsofo del siglo XVIII y de los albores del XlX que se respetara, tena quedesarrollar su propio sistema filosfico; siendo los ms conocidos nicamente Kant, Fichte, Schelling yHegel. Cada sistema era una apuesta personal por la concepcin definitiva del universo, de lo material, dela naturaleza y del hombre.

    Estos intentos de los filsofos por crear sistemas totales sirvieron de modelo a los primeros socilogos , y as el siglo XIX fue un siglo de sistemas sociolgicos. Algunos de los padres fundadores, como Comte ySpencer, estaban imbuidos del esprit de systeme, expresado en sus sociologas y en el resto de susfilosofas de largo alcance. Otros, como Gumplowicz, Ward y Giddings, posteriormente trataron de dar unalegitimidad intelectual a esta "nueva ciencia de un tema muy antiguo". Esto requera que se construyera unmarco general y definitivo del pensamiento sociolgico en lugar de desarrollar teoras especiales destinadasa guiar la investigacin de problemas sociolgicos especficos dentro de un marco provisional y enevolucin.

    Dentro de este contexto, casi todos los pioneros de la sociologa trataron de modelar su propio sistema. Lamultiplicidad de sistemas , cada uno de ellos con pretensiones de ser genuina sociologa, llevaron, muynaturalmente, a la formacin de escuelas, cada una de ellas con su grupo de maestros, discpulos yepgonos. La sociologa no slo se diferenci de otras disciplinas, sino que se diferenci internamente. Estadiferenciacin no era, sin embargo, cuestin de especializacin, como en las ciencias, sino ms bien comoen filosofa, cuestin de sistemas completos, tpicamente sostenidos como mutuamente excluyentes ydispares. Como lo observ Bertrand Russell a propsito de la filosofa esta sociologa total no capt "laventaja, comparada con las [sociologas] de los constructores de sistemas, de ser capaz de resolverproblemas uno a la vez, en lugar de tener que inventar de una plumada un bloque terico de todo eluniverso [sociolgico]" (8)

    Los socilogos han seguido otro camino en su deseo de establecer la legitimidad intelectual de su disciplina:han tomado su prototipo de sistemas de la teora cientfica en lugar de sistemas filosficos. Esta va tambinha llevado a veces al intento de crear sistemas totales de sociologa, meta que frecuentemente se basa enuna o ms de tres bsicas concepciones errneas sobre las ciencias.

    La primera concepcin errnea supone que los sistemas de pensamiento pueden desarrollarseefectivamente ante una gran masa de observaciones bsicas que se han acumulado. Conforme a estaopinin, Einstein podra haber seguido de inmediato a Kepler, sin necesidad de los siglos de investigacin ypensamiento sistemtico acerca de los resultados de la investigacin que se necesitaron para preparar elterreno. Los sistemas de sociologa que parten de este supuesto tcito son muy parecidos a los introducidos

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    5/21

    por los hacedores de sistemas en medicina en un lapso de 150 aos: los sistemas de Stahl, Boissier deSauvages, Broussais, John Brown y Benjamin Rush. Hasta bien entrado el siglo XIX, personajes eminentesde la medicina pensaron que era necesario desarrollar un sistema terico de la enfermedad mucho antesque la anterior investigacin emprica se hubiera desarrollado adecuadamente. (9) Estos senderos ya sehan cerrado en medicina, pera esta clase de esfuerzo todava resurge en sociologa. Es esta tendencia laque llev al bioqumico y socilogo por vocacin, L. J. Henderson, a observar:

    En su evolucin, se observa una diferencia entre la mayora de los sistemas construdos en las ciencias

    sociales y los sistemas del pensamiento y clasificacin en las ciencias naturales. En las ciencias naturalestanto las teoras como los sistemas descriptivos se desarrollaron mediante la adaptacin al incremento delconocimiento y experiencia de los cientficos. En las ciencias sociales, los sistemas a menudo surgencompletamente formados de la mente de un hombre. Entonces pueden ser muy discutidos si atraen laatencin general, pero es rara la modificacin progresiva de adaptacin como resultado de los esfuerzosconjugados de un gran nmero de hombres. (10)

    La segunda concepcin errnea sobre las ciencias fsicas radica en el supuesto equivocado de lacontemporaneidad histrica, de que todos los productos culturales que existen en el mismo momento de lahistoria tienen e/ mismo grado de madurez. En realidad, para percibir aqu las diferencias se deberaalcanzar un sentido de la proporcin. El hecho de que la disciplina de la fsica y la disciplina de la sociologason, ambas, identificables en la mitad del siglo XX, no significa que los logros de una deban ser medidapara la otra. Cierto, los cientficos sociales de hoy viven en un tiempo en el que la fsica ha alcanzado un

    grado comparativamente alto y una precisin de la teora y el experimento, un gran arsenal de instrumentosde investigacin y una abundancia de productos laterales tecnolgicos.

    Viendo esto muchos socilogos toman los logros de la fsica como norma para su propia apreciacin.Quieren comparar sus bceps con sus hermanos ms grandes. Ellos, tambin, quieren contar. Y cuando sehace evidente que no tienen el rudo fsico ni la capacidad de asestar el golpe mortal de sus hermanosmayores, algunos socilogos desesperan. Comienzan a preguntarse: Es realmente posible una ciencia dela sociedad sino instituimos un sistema total de sociologa? Pero esta perspectiva no toma en cuenta elhecho de que, entre la fsica del siglo XX y la sociologa del siglo XX, se levantan miles de millones dehoras-hombre de investigacin contnua, disciplinada y acumulativa. Quizs la sociologa todava no hamadurado para tener su Einstein porque todava no ha encontrado su Kepler, sin hablar de su Newton,Laplace, Gibbs, Maxwell o Planck.

    Tercero: en ocasiones, los socilogos interpretan mal el estado real de la teora en las ciencias fsicas. Este

    error resulta una irona, pues los fsicos estn de acuerdo en que no han logrado un sistema terico queabarque todo, y la mayora ve pocas perspectivas de ello en un futuro cercano. Lo que caracteriza a la fsicaes una serie de teoras especiales, de mayor o menor grado, junto con la esperanza, histricamentefundamentada, de que stas continuarn conjuntndose en familias de teoras. Un observador seala:"Aunque la mayora de nosotros abriga la esperanza, es cierto, de poseer una futura teora que lo abarquetodo, unificando los diversos postulados de la fsica, no la espera antes de proseguir con los importantesasuntos de la ciencia" (11) Ms recientemente, el fsico terico Richard Feynmann inform con desmayoque: "Hoy nuestras teoras de la fsica, las leyes de la fsica, son una multitud de partes diferentes y depiezas que no embonan todas muy bien". (12) Pero quizs sea ms elocuente la observacin hecha por unode los tericos ms generales, quien dedic los ltimos aos de su vida a la bsqueda incansable, perovana, "de una teora unificadora para todas estas disciplinas particulares, consistente en un mnimo deconceptos y relaciones fundamentales, del que todos los conceptos y relaciones de las disciplinasparticulares pudieran derivarse por un proceso lgico". A pesar de su propio compromiso profundo y solitario

    con esta bsqueda, Einstein observ:La mayor parte de la investigacin fsica se dedica al desarrollo de las diversas ramas de la fsica, en cadauna de las cuales el objeto es la comprensin terica de campos ms o menos restringidos de laexperiencia, y en cada uno de los cuales las leyes y los conceptos siguen relacionados lo msestrechamente posible con la experiencia. (13)

    Estas observaciones podran ponderarlas aquellos socilogos que esperan un slido sistema general de lateora sociolgica en nuestra poca, o poco despus. Si la ciencia de la fsica, con sus siglos de a mpliadasgeneralizaciones tericas, no ha conseguido desarrollar un sistema terico que comprenda todo, entonces afortiori la ciencia de la sociologa, que slo ha comenzado a acumular generalizaciones tericas basadasempricamente, de grado modesto, hara bien en moderar sus aspiraciones de un sistema tal.

    PRESIONES UTILITARIAS PARA SISTEMAS TOTALES DE SOCIOLOGA

    La conviccin existente entre algunos socilogos de que debemos, desde ahora, lograr un gran sistematerico no slo es resultado de una comparacin fuera de lugar con las ciencias fsicas, sino que tambin esuna respuesta a la posicin ambigua, de la sociologa en la sociedad contempornea. La mismaincertidumbre acerca de si el conocimiento acumulado de la sociologa es adecuado para satisface r las

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    6/21

    grandes demandas que le hacen los polticos, los reformadores y reaccionarios; los hombres de negocios yel gobierno, los rectores y estudiantes de las universidades; provoca una conviccin excesivamente celosa ydefensiva por parte de algunos socilogos de que, de alguna manera, a ellos deben estar al nivel de estasexigencias, por prematuras y extravagantes que sean.

    Esta conviccin su pone, errneamente, que unas ciencia debe ser adecuada para satisfacer todas lasexigencias, inteligentes o estpidas, que se le hagan. Esta conviccin se basa implcitamente en elsupuesto sacrlego y masoquista de que se debe ser ominisciente y omnicompetente, de que reconocer

    menos que el conocimiento total es reconocer la ignorancia total. As, sucede a menudo que los exponentesde una disciplina nueva muestran pretensiones extravagantes de sistemas totales de teora, adecuados atoda la gama de problemas que esa disciplina abarca. Es a este tipo de actitud al que se refiri Whiteheaden el epgrafe de este libro: "Es caracterstico de una ciencia en sus primeras etapas. . . ser ambiciosamenteprofunda en sus propsitos y trivial en el tratamiento de los detalles."

    A semejanza de los socilogos que irreflexivamente se cornparan con los cientficos fsicoscontemporneos, porque viven en el mismo instante de la historia, el pblico comn y sus tomadores dedecisiones a menudo yerran al hacer una apreciacin definitiva de la ciencia social sobre la base de sucapacidad para resolver los problemas urgentes de la sociedad actual. El masoquismo fuera de lugar delcientfico social y el sadismo involuntario del pblico resultan, ambos, de no recordar que las cienciassociales, como toda ciencia, se desarrollan continuamente y que no existe ninguna disposicin providencialque asegure que en cualquier momento dado se adecuar a toda la serie de problemas que confrontan los

    hombres. En la perspectiva histrica esta expectacin equivaldra atener prejuzgados para siempre lacategora y el futuro de la medicina en el siglo XVII conforma a su capacidad para dar, en ese entonces, unacuracin o incluso un preventivo para las enfermedades cardacas. Si el problema se hubiera reconocidoampliamente -vase la tasa creciente de muertes por trombosis coronaria!- su importancia misma habraoscurecido la cuestin enteramente independiente de cun adecuado era el conocimiento mdico de 1650(o 1850 o 1950) para resolver una serie de otros problemas de la salud. Y es precisamente esta falta delgica la que subyace en tantas demandas prcticas que se hacen a las ciencias sociales. Como la guerra,la explotacin, la pobreza, la discriminacin racial y la inseguridad psicolgica son plagas de las sociedadesmodernas, la ciencia social debe justificarse aportando soluciones a todos estos problemas. Empero loscientficos sociales pueden no estar mejor equipados para resolver estos problemas urgentes hoy da de loque estaban los mdicos, como Harvey o Sydenham, para identificar, estudiar y curar la trombosis coronariaen 1655. Sin embargo, como lo atestigua la historia la insuficiencia de la medicina para enfrentarse a esteproblema particular no significa que careciera de posibilidades de desarrollo. Si todo el mundo apoya

    solamente lo que es seguro. quin apoyar, en cambio, lo que est por ve nir?Mi hincapi en la brecha que existe entre los problemas prcticos asignados al socilogo y el estado de suconocimiento acumulado y su capacidad no significa, por supuesto, que el socilogo no deba tratar dedesarrollar de manera creciente la teora general, o que no deba trabajar en la investigacin directamenteaplicable a los problemas prcticos urgentes. Sobre todo, no significa que los socilogos deban buscar portodos lados el problema pragmticamente trivial. Los diferentes sectores de la gama de la investigacinbsica y de la teora tienen diferentes probabilidades de ser afines a problemas prcticos particulares;poseen diferentes potenciales de pertinencia (14), Adems, es importante restablecer el sentido histrico dela proporcin. La urgencia o magnitud de un problema social prctico no implica su inmediata solucin. (15)En cualquier momento dado, los hombres de ciencia estn cercanos a la solucin de algunos problemas yalejados de otras. Debe recordarse que la necesidad es slo la madre de la invencin; el conocimientosocialmente acumulado es el padre. A menos que ambos se conjuguen, la necesidad es estril. Porsupuesto, en un futuro puede concebir, cuando se haya acoplado adecuadamente. Pero el consortenecesita tiempo (y mantenimiento) si ha de alcanzar el tamao y el vigor necesarios para satisfacer lasdemandas que se le harn.

    La orientacin del libro hacia la relacin de la sociologa actual y los problemas prcticos de la sociedad escasi la misma que su orientacin hacia la relacin de la sociologa y la teora sociolgica general. Es unaorientacin de desarrollo, ms que una que descanse en las sbitas mutaciones de un socilogo querepentinamente produce soluciones a los grandes problemas sociales o a una simple teora general.Aunque esta orientacin no tiene pretensiones maravillosamente dramticas, ofrece una valoracinrazonablemente realista de la condicin actual de la sociologa y de los caminos por los que en realidad sedesarrolla.LOS SISTEMAS TOTALES DE LA TEORA Y LAS TEORAS DE ALCANCE INTERMEDIO

    Por todo esto, parecera razonable suponer que la sociologa avanzar en la medida en que su intersprincipal (aunque no exclusivo) est en el desarrollo de las teoras de alcance intermedio, y se retardar sisu atencin primordial se centra en el desarrollo de los sistemas sociolgicos totales. Tan esto es as que,en su discurso en la Escuela de Economa de Londres, ... H. Marshall abog por los "peldaos sociolgicosintermedios". (16) Nuestra tarea principal de hoy es desarrollar las teoras especiales aplicables a gamas

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    7/21

    conceptuales limitadas; teoras, por ejemplo, de !a conducta divergente, las consecuencias imprevistas de laaccin intencionada, la percepcin social, grupos de referencia, control social, la interdependencia de lasinstituciones sociales, en lugar de buscar inmediatamente la estructura conceptual total que sea adecuadapara derivar estas y otras teoras de alcance intermedio.

    La teora sociolgica, si ha de avanzar de manera significativa, debe proceder sobre estos planesinterrelacionados: 1) desarrollando teoras especiales de las cuales derivar hiptesis que se puedaninvestigar empricamente y 2) desarrollando, no revelando sbitamente, un esquema conceptual

    progresivamente ms general que sea adecuado para consolidar los grupos de las teoras especiales.Concentrarse totalmente en las teoras especiales es arriesgarse a salir con hiptesis especficas que sirvenpara aspectos limitados de la conducta social, organizacin y cambio, pero que son mutuamenteincompatibles .

    Concentrarse totalmente es un. esquema maestro conceptual para derivar todas las teoras subsidiarias esarriesgarse a producir equivalentes sociolgicos del siglo X) (de los grandes sistemas filosficos del pasado,con toda su sugestiva variedad, su esplendor arquitectnico y su esterilidad cientfica.El terico sociolgico que se compromete exclusivamente con la explotacin de un sistema total con susabstracciones extremas corre el riesgo de que, al igual que con la decoracin moderna, el mobiliario de sumente ser exiguo e Incmodo.

    El camino hacia los esquemas generales efectivos en sociologa solamente se obstruir, como en los

    primeros das de la sociologa, si cada socilogo carismtico trata de desarrollar su propio sistema ge neralde teora. La persistencia de esta prctica slo puede causar la balcanizacin de la sociologa, con cadaprincipado regido por su propio sistema terico. Aunque este proceso ha marcado peridicamente eldesarrollo de otras ciencias -notablemente la qumica, la geologa y la medicina no necesita reproducirse ensociologa si aprendemos de la historia de la ciencia. Nosotros los socilogos podemos contemplar unateora sociolgica progresivamente general, que, en lugar de partir de la cabeza de un hombre, consolidegradualmente las teoras de alcance intermedio, de manera que stas se vuelvan casos especiales deformulaciones ms generales.

    El desarrollo de la teora sociolgica sugiere que es necesario hacer hincapi en esta orientacin.Obsrvese cun pocas, cun diseminadas y cun insignificantes son las hiptesis sociolgicas especificasque se derivan de un esquema conceptual maestro. Las proposiciones de una teora generalizadora van tanadelante de las teoras especiales confirmadas que siguen siendo programas irrealizados y noconsolidaciones de teoras que al principio parecan discretas. Por supuesto, como han indicado TalcottParsons y Pitirim Sorokin (en Sociological Theories of Today), recientemente se ha logrado un avancesignificativo. La convergencia gradual de las corrientes de la teora en sociologa, psicologa social yantropologa, registra grandes avances tericos, y promete an ms. (17) Sin embargo, una gran parte de loque ahora se describe como teora sociolgica consiste en orientaciones generales hacia datos, sugiriendotipos de variables que las teoras deben, de alguna manera, tomar en cuenta, ms que declaracionesverificables, claramente formuladas, de las relaciones entre las variables especificadas. Tenemos muchosconceptos pero pocas teoras confirmadas; muchos puntos de vista, pero pocos teoremas; muchas"aproximaciones" pero pocas terminaciones. Quizs algunos cambios ulteriores de hincapi sern para bien.

    Consciente o inconscientemente, los hombres destinan sus escasos recursos tanto a la produccin de lateora sociolgica como a la produccin de accesorios de plomera, y su destinacin refleja sussuposiciones subyacentes. Nuestra discusin sobre la teora de alcance intermedio en sociologa pretendehacer explcita una decisin poltica a la que se enfrentan todos los tericos sociolgicos. A cul dedicar la

    mayor parte de nuestras energas colectivas y recursos?: a la investigacin de las teoras confirmadas dealcance intermedio o a la investigacin de un esquema conceptual que lo incluya todo? Creo -y lascreencias estn, por supuesto, notablemente sujetas a error que las teoras de alcance intermedio son lasque prometen ms, con tal que su bsqueda se conjugue con un inters continuo por consolidar las teorasespeciales y convertirlas en grupos ms generales de conceptos y proposiciones mutuamente consistentes.Aun as, debemos adoptar la concepcin provisional de nuestros hermanos mayores y de Tennyson:

    Nuestros pequeos sistemas tienen su da;tienen su da y dejan de ser.

    RESPUESTAS POLARIZADAS A LAS TEORAS DE ALCANCE INTERMEDIO

    Puesto que la poltica de centrarse en las teoras sociolgicas de alcance intermedio se propugn porescrito, comprensiblemente se han polarizado las respuestas de los socilogos. De manera general, parece

    que estas respuestas estuvieron regidas ampliamente por las propias normas de trabajo de los socilogos.La mayora de stos que haban emprendido una investigacin emprica tericamente orientada estuvieronconformes con una poltica que meramente formulaba lo que ya haba elaborado la filosofa. Y a la inversa,la mayora de los que estaban comprometidos con el estudio humanista de la historia del pensamiento

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    8/21

    social o que trataban de desarrollar una teora sociolgica total, aqu y ahora, describieron la poltica comoun retroceso de aspiraciones correctamente elevadas. La tercera respuesta es intermedia. Reconoce que elhincapi en teora de alcance intermedio no significa la atencin exclusiva a este tipo de teorizacin. En sulugar, ve el desarrollo de una teora ms general, que surgira mediante las consolidaciones de las teorasde alcance intermedio, antes que brotar, de una sola vez, del trabajo de tericos individuales de granescala.

    EL PROCESO DE POLARIZACIN

    Como la mayora de las controversias en las ciencias, esta disputa sobre el destino de los recursosintelectuales entre las diferentes clases de trabajo sociolgico, abarca un conflicto social, y no meramenteuna crtica intelectual. (18) Es decir, la disputa es menos una cuestin de contradicciones entre ideassociolgicas substantivas que de definiciones que compiten sobre el papel del socilogo que se considerams efectivo en esta poca.

    Esta controversia sigue el curso clsicamente identificado del conflicto social. El ataque va seguido por elcontraataque, con la alienacin progresiva entre las partes en conflicto. A su debido tiempo, puesto que elconflicto es pblico, se convierte en un combate de categoras ms que en una bsqueda de la verdad. Lasactitudes se polarizan, y entonces cada grupo de socilogos empieza a responder en gran parte a versionesestereotipadas de lo que el otro dice. Los tericos de alcance intermedio son estereotipados como merosolfateadores o descubridores de hechos o como meramente socigrafos descriptivos. Y los tericos cuyoobjetivo es la teora general son estereotipados como inveteradamente especulativos, completamente

    desinteresados de la apremiante evidencia emprica o como comprometidos inevitablemente con lasdoctrinas que estn formuladas de tal manera que no pueden comprobarse.

    Estos estereotipos no estn totalmente desligados de la realidad; como la mayora de los estereotipos, sonexageraciones inflexibles de las tendencias o atributos reales. Pero en el curso del conflicto s ocial, llegan aser estereotipos auto-confirmados a medida que los socilogos se apartan de la experiencia que podraobligarlos a modificarlos. Los socilogos de cada campo desarrollan percepciones altamente selectivas delo que realmente sucede en el otro campo. Cada campo ve en el trabajo del otro primordialmente lo que elestereotipo hostil le ha preparado a ver, y entonces toma una observacin ocasional como filosofapermanente, un hincapi como un compromiso total. En este proceso, cada grupo de socilogos llega aestar cada vez menos motivado a estudiar el trabajo del otro, puesto que, de manera patente no contieneninguna verdad. Escudrian los escritos del grupo externo nada ms para encontrar municiones paranuevas descargas de fusilera.

    El proceso de alienacin y estereotipacin recproca probablemente se refuerza por el gran aumento de lapublicacin de escritos sociolgicos. Como muchos otros cientficos y acadmicos los socilogos no pueden"mantenerse al paso de lo que se est publicando en ese campo. Deben hacerse ms y ms selectivos ensu lectura. Y esta creciente selectividad lleva de inmediato, a aquellos que inicialmente eran hostiles a untipo particular de trabajo sociolgico, a dejar de estudiar las publicaciones que podan haberlos llevado aabandonar su estereotipo.

    Estas condiciones tienden a estimular la polarizacin de las ideas. Las orientaciones sociolgicas que noson sustancialmente contradictorias son consideradas como si lo fuera. Conforme a ests posiciones detodo o nada, la investigacin sociolgica debe ser estadstica o histrica; o bien las grandes cuestiones yproblemas de la poca deben ser los nicos objetos de estudio, o bien estas cuestiones reacias debenevitarse totalmente porque no son propias para la investigacin cientfica, etc., etc.

    El proceso del conflicto social se detendra a la mitad y se convertira en una crtica intelectual si se pusieraun alto al desdn recproco que a menudo caracteriza estas polmicas. Pero las batallas entre socilogosordinariamente no ocurren dentro del marco social que se requiere para que la no reciprocidad del afectoacte con regularidad. Este contexto requiere una diferenciacin conjuntamente reconocida de categoraentre las partes, al menos con respecto al asunto en cuest in. Cuando esta diferenciacin de categora estpresente, como en el caso del abogado y su cliente o el psiquiatra y su paciente, una norma tcnica ligada ala categora de ms autoridad de la relacin impide la reciprocidad de los sentimientos expresados. Pero lacontroversia cientfica, tpicamente, tiene lugar dentro de una compaa de iguales (por mucho que lassituaciones de las partes puedan diferir) y, an ms, tiene lugar en pblico, sujeta a la observacin deiguales. As, la retrica se enfrenta a la retrica, el desdn al desdn, y las soluciones intelectuales sesubordinan a la batalla por la categora.

    Todava ms, en las controversias polarizadas no hay lugar para un tercero no comprometido que pudieraconvertir el conflicto social en una crtica intelectual. Cierto, algunos socilogos no adoptarn la posicin de

    todo o nada que se espera en el conflicto social. Pero, tpicamente, stos seran los no combatientesatrapados en el fuego cruzado de los campos hostiles. Se les cuelga la etiqueta de "meros eclcticos",haciendo as innecesario para los dos campos el examinar lo que esta tercera posicin afirma, o cun vlidaes; o, se les llama "renegados" que han abandonado las verdades doctrinarias; o quizs lo peor de todo,

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    9/21

    son tibios o simples mirones, y por timidez o conveniencia, huyen del conflicto fundamental entre el biensociolgico puro y el mal sociolgico puro.

    Pero las polmicas en la ciencia tienen sus funciones y sus disfunciones. En el curso del conflicto social, losasuntos cognoscitivos se tergiversan al ponerse al servicio de la victoria sobre el contrario. S in embargo,cuando el conflicto se regula por una comunidad de iguales, incluso las polmicas con sus distorsiones, queagotan las energas de los enfrascados en remedos de batallas intelectuales, pueden ayudar a enderezar eldesequilibrio acumulativo en la ciencia. No hay una forma fcil de determinar el empleo ptimo de los

    recursos en un campo de la ciencia, en parte debido al desacuerdo esencial que existe sobre los criterios delos ptimo.(19) El conflicto social suele enconarse en sociologa siempre que una lnea particular deinvestigacin -digamos, de grupos pequeos o de sociedades mundiales-, o un grupo particular de ideas -digamos, anlisis funcional o marxismo-, o un modo particular de investigar -digamos, encuestas sociales osociologa histrica- ha absorbido la atencin y las energas de un nmero rpidamente creciente desocilogos. Esta lnea de desarrollo podra llegar a ser popular debido a que ha demostrado ser efectiva altratar ciertos problemas intelectuales o sociales, o porque es ideolgicamente anloga. Los campos o tiposde trabajo actualmente impopulares se quedan con pocos reclutas de calidad , y, con conocimientosdisminuidos , este tipo de trabajo llega a ser menos atractivo. Si no fuera por estos conflictos, el reino de lasortodoxias y los desequilibrios tericos en la distribucin del trabajo sociolgico sera, incluso, ms notablede lo que es. As las ruidosas protestas que aseguran que problemas, mtodos y orientaciones tericasdescuidados merecen una atencin ms concertada-incluso cuando esas protestas van acompaadas porataques extravagantes contra la lnea dominante de desarrollo- pueden ayudar a diversificar el trabajo

    sociolgico al modificar la tendencia a concentrarse en un rango estrecho de problemas. Una mayorheterodoxia, a su vez, aumentan las perspecti vas de aventuras cientficamente productivas, hasta que stasse convierten en nuevas ortodoxias.

    RECONOCIMIENTO DE LA POLTICA DE LA TEORA DE ALCANCE INTERMEDIO

    Como hemos observado previamente, la resonancia del hincapi hecho en la teora de alcance intermedioes especialmente notable entre los socilogos que estn realizando investigaciones empricas orientadastericamente. Por ello, la poltica de las teoras sociolgicas de alcance intermedio ha tomado arraigo hoyda, mientras que las primeras versiones -que examinaremos ahora- no lo hicieron. Es un sentido bastantepreciso de la frase familiar, "el tiempo no haba llegado". Es decir, hasta las dos ltimas dcadas, conexcepciones notables, los socilogos tendan a dedicarse ms a la bsqueda de la teora totalizadora,unificada o al trabajo emprico descriptivo, con poca orientacin terica en ambos casos. El resultado eraque pasaran inadvertidos los alegatos en pro de la poltica de la teora de alcance intermedio.

    Empero como lo he observado en otra parte,(20) esta poltica no es nueva ni extraa; tiene races histricasbien establecidas. Ms que nadie antes que l, Bacon hizo hincapi en la primordial importancia de los"axiomas intermedios" en la ciencia:

    Sin embargo no conviene permitir que la inteligencia salte y se remonte de los hechos a las leyes mselevadas y generales (tales como los primeros principios de la naturaleza y de las artes, como se les llama),y dndoles una incontestable autoridad, establezca segn esas leyes generales, las secundarias, comosiempre hasta ahora se ha hecho, a causa de estar inclinado el espritu humano por tendencia natural, yadems por estar formado y habituado a ellos desde largo tiempo por el uso de demostracionescompletamente silogsticas. Mucho habr que esperar de la ciencia cuando el espritu ascienda por laverdadera escala y los grados sucesivos, de los hechos a las leyes menos elevadas, despus a las leyesmedias, elevndose ms y ms hasta que alcance al fin las ms generales de todas.

    Las leyes menos elevadas no difieren mucho de la simple experiencia; pero esos principios supremos y muygenerales que la razn en la actualidad emplea, estn fundados sobre nociones abstractas y carecen desolidez. Las leyes intermedias, al contrario, son los principios verdaderos, slidos y vvidos en cierto modo,en los que descansan todos los negocios y las fortunas humanas; por encima de ellos, finalmente, estn losprincipios supremos, pero construdos de tal suerte, que no sean abstractos y que los principios intermedioslos determinen. (21)

    Bacon a continuacin, cita una versin ms antigua:

    Y Platn, en su Teetetes, observ: "Que los particulares son infinitos, y las generalidades ms elevadas nodan la suficiente direccin; y que el meollo de todas las ciencias, lo que hace que difiera el artista delinexpertos estn en las p roposiciones intermedias, las que, en todo conocimiento particular estn tomadasde la tradicin y la experiencia." (22)

    As como Bacon cita a Platn como su predecesor, as lo hacen John Stuart Mill y George Cornewall Lewiscitando a Bacon como el suyo. Si bien Mill difiere de Bacon sobre el modo lgico de conectar "las leyes msgenerales" con los "principios intermedios", le hace eco en estas palabras:

    Bacon ha observado juiciosamente que los axiomata media de toda ciencia constituyen principalmente su

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    10/21

    valor. Las generalizaciones ms bajas, en tanto explicadas y resueltas por los principios intermedios de losque son las consecuencias, tienen slo la imperfecta exactitud de las leyes empricas; mientras que lasleyes ms generales son demasiado generales e incluyen demasiado pocas circunstancias para darsuficiente indicacin de lo que sucede en los casos individuales, donde las circunstancias son casi siempresumamente numerosas. Por tanto, en la importancia que Bacon asigna, en toda ciencia, a los principiosintermedios, es imposible estar en desacuerdo con l. Pero c onsidero que ha estado radicalmenteequivocado en su doctrina respecto a la forma en que ha de llegarse a estos axiomata media ... (es decir, lainveterada adiccin de Bacon a la induccin total, que no deja lugar alguno para la deduccin) (23)

    Escribiendo casi al mismo tiempo que Mill, pero, como lo muestra la experiencia histrica, sin tener elmismo efecto sobre sus contemporneos, Lewis recurre a Bacon para fundamentar las "teoras limitadas" enla ciencia poltica. Plantea la idea ulterior de que un gran nmero de teoremas vlidos pueden desarrollarseal restringir la observacin a determinadas clases de comunidades:

    . . . podemos formar teoras limitadas, predecir tendencias generales y leyes predominantes de causas lasque podran no ser ciertas en su mayora, si se hacen extensivas a toda la humanidad, pero que poseenuna presunta verdad si se limitan a ciertas naciones...

    ...es posible ampliar la regin de las polticas especulativas, consecuentemente con la verdadera expresinde los hechos, al estrechar el grado de la observacin, y al confirmarnos nosotros mismos a una claselimitada de comunidades. Mediante la adopcin de este mtodo, podemos aumentar el nmero de losverdaderos teoremas polticos los cuales pueden tomarse de los hechos, y, al mismo tiempo, darles ms

    plenitud, vida y sustancia. En lugar de ser meras generalidades vacas y pobres, se parecen a los MediaAxiomata de Bacon, los que son expresiones generalizadas del hecho, pero que sin embargo, estn losuficientemente cerca de la prctica para servir de guas en las cuestiones de la vida. (24)

    Aunque estas primeras formulaciones difieren en los detalles -el contraste entre Bacon y Mill esparticularmente notable- todas hacen hincapi en la importancia estratgica de una serie graduada deteoras intermedias empricamente confirmadas.

    Despus de aquellos primeros das, formulaciones similares, aunque no idnticas, han sido avanzadas porKarl Mannheim, en su concepto de "principia media" por Adolf Lowe, en su tesis de que "los principiossociolgicos intermedios" relacionan lo econmico con el proceso social; y por Morris Ginsberg, en suexamen del tratamiento que da Mill a los principios intermedios en la ciencia social. (25) Por el momento,pues, existen suficientes pruebas para indicar que las teoras de alcance intermedio en sociologa han sidodefendidas por muchos de nuestros antecesores intelectuales. Pero para modificar el credo de lososcurantistas, si la filosofa funcional encarnada en esta orientacin no es totalmente nueva, es por lomenos cierta.

    Casi nadie discute que las formulaciones bien conocidas de Bacon no fueron adoptadas por los socilogosporque no haba socilogos para examinar la pertinencia de sus concepciones. Apenas es msproblemtico que las formulaciones de Mill y Lewis, casi 240 aos despus, tuvieran poca resonancia entrelos cientficos sociales; las disciplinas estaban entonces solamente en sus inicios. Pero por qu lasformulaciones de Mannheim, Lowe y Ginsburg, hechas en los treinta de este siglo, encontraron tan pocarespuesta en la bibliografa sociolgica del perodo inmediatamente siguiente? Slo despus deformulaciones similares hechas por Marshall y por m en los ltimos aos de la dcada de los cuarentas,encontramos una amplia discusin y aplicacin de esta orientacin a la teora sociolgica. Sospecho,aunque no he realizado todo el trabajo necesario para investigar esta cuestin, que la difundida resonanciade la teora de alcance intermedio en las ltimas dcadas se debe en parte al surgimiento de una gran

    nmero de investigadores sociolgicos que realizan investigaciones basadas empricamente y tericamenteaplicables.

    Una pequea nuestra del reconocimiento de la poltica de la teora de alcance intermedio ilustrar la basede esta resonancia. Revisando el desarrollo de la sociologa en las pasadas cuatro dcadas, Frank Hankinsconcluye que:

    Las teoras del alcance intermedio parecen ... tener mayor significacin explicativa [que las teorassociolgicas totales]. Aqu se ha hecho mucho en relacin con la comunicacin de masas, la estratificacinde las bases, la burocracia, los grupos pequeos de varios tipos y otros aspectos importantes de la totalidadsocial. [Y entonces, en la forma polarizante de todo o nada, Hawkins concluye]: Acaso encontremos quesolamente sas tengan un valor realista y prctico. (26)

    Esta resonancia de la teora del alcance intermedio acontece entre los socilogos con una variedad de

    orientaciones tericas generales, con tal de que tengan inters en la importancia emprica de la teora. As,Arthur K. Davis, orientado hacia la teora marxista, sugiere que el caso de

    "las teoras de alcance intermedio" en contraste con el enfoque ms general de Parsons, estaba bienconcebido ... Un enfoque de alcance intermedio -anlisis emprico en un medio conceptual limitado- parece

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    11/21

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    12/21

    compleja; Hillery, una consolidacin de las uniformidades demogrficas. (37)

    Existe, sin embargo, una base mucho ms considerable que esta lista de escasos ejemplos para evaluar lapresente orientacin de los socilogos hacia las teoras de alcance intermedio. Es simblico que Sorokin,aunque comprometido personalmente con el desarrollo de la teora sociolgica en gran escala, repetidasveces otorga un lugar importante a la teora de alcance intermedio. En su ltimo libro, peridicamentereconoce los desarrollos tericos actuales por su capacidad para ser tomados en cuenta para las"uniformidades de gama media". Por ejemplo, revisa una serie de investigaciones estadsticas en sociologa

    y las encuentra insuficientes porque "no nos dan uniformidades generales o de 'gama intermedia', leyescausales, o frmulas vlidas para todos los tiempos y para las diferentes sociedades". En otra parte utilizaSorokin este criterio para valorar la investigacin contempornea, que sera reivindicada si "hubieradescubierto un grupo de uniformidades universales, o. por lo menos ... 'de gama intermedia' aplicables amuchas personas, grupos y culturas". Y en otro sitio ms considera aceptables las tipologas seleccionadasde sistemas culturales si "como ... 'generalizaciones de gama intermedia' ... no son exageradas ygeneralizadas excesivamente". En su revisin de la reciente investigacin en sociologa, Sorokin diferenciacategricamente entre "descubrir hechos" y "uniformidades de generalidad de 'grado-medio" '. Lo primeroengendra "material puramente local, temporal, 'informativo', sin valor cognoscitivo general". Lo segundo,hace

    inteligible una selva de acontecimientos histricos caticos que de otra manera son incomprensibles. Sinestas generalizaciones, estamos completamente perdidos en esa selva y sus hechos interminables tienen

    poco sentido en sus cmo y sus porqu. Con unas cuantas reglas principales que nos sirvan de gua, nospodemos orientar en la oscuridad de la selva. Tal es el papel cognoscitivo de estas reglas y uniformidadeslimitadas, aproximadas y prevalecientes. (38)

    Sorokin repudia as esa formidable pasin por los hechos que antes bien oscurece que revela las ideassociolgicas que estos hechos ejemplifican; recomienda las teoras de gama intermedia como guas para lainvestigacin; y contina prefiriendo, para s mismo, la bsqueda de un sistema de sociologa general .

    RECHAZO DE LA TEORA DE ALCANCE INTERMEDIO

    En virtud de que tanta tinta sociolgica se ha derramado en el debate sobre las teoras de alcanceintermedio, puede ser til examinar las crticas que se le han hecho. A diferencia de los sistemas sencillosde la teora sociolgica, se ha dicho, las teoras de alcance intermedio apelan a las bajas ambicionesintelectuales. Pocos han expresado esta opinin con ms elocuencia que Robert Bierstedt, cu ando escribe:

    Hasta nos ha invitado a renunciar a aquellos grandes problemas de la sociedad humana en que seocuparon nuestros antecesores en la historia del pensamiento social y, en su lugar, buscar lo que T. H.Marshall denomin, en su conferencia en la Universidad de Londres "peldaos intermedios" y otrossocilogos a partir de entonces, "teoras de alcance intermedio". Pero qu ambicin tan anmica es sta!Nos empearemos en obtener una victoria a medias? Dnde estn las visiones que nos atrajeroninicialmente al mundo del conocimiento? Siempre haba pensado que los socilogos tambin saban soar yque crean, con Browning, que la ambicin de un hombre debera exceder a su capacidad. (39)

    Se podra inferir de esta cita que Bierstedt preferira aferrarse a la optimista ambicin de desarrollar unateora general totalizadora antes que aceptar la "ambicin anmica" de la teora de alcance intermedio. Oque considera las soluciones sociolgicas a los grandes y urgentes "problemas de la sociedad humana"como la piedra de toque tericamente importante de la sociologa. Pero ambas inferencias evidentementeserian equivocadas, pues la teora de alcance intermedio a menuda. es aceptada por aquellos queostensiblemente la rechazan. As, Bierstedt contina para decir que "en mi opinin una de las obras msgrandes de la investigacin sociolgica jams conducida por alguien es The Protestant Ethc and the Spiritof Capitalism, de Max Weber". Yo no cuestiono esta apreciacin de la monografa de Weber -aunque yopropondra Suicidio, de Durkheim para esa elevada posicin pues, al igual que muchos otros socilogosfamiliarizados con la biblioteca de crticas que se ha acumulado en torno al trabajo de Weber, continoconsiderndola una contribucin importante. (40) Pero encuentro difcil reconciliar la apreciacin deBierstedt sobre la monografa de Weber con la retrica que desterrara a las teoras de alcance intermediopor ser en fermizante plidas y singularmente sin ambicin, ya que seguramente esta monografa es u nexcelente ejemplo de teorizar en el rango medio; trata un problema tajantemente delimitado, que resultaejemplificado en una poca histrica particular con implicaciones para otras sociedades y otros tiempos;emplea una teora limitada sobre las formas en que estn relacionados el compromiso religioso y laconducta econmica; y contribuye a una teora en cierta forma ms general de los modos deinterdependencia entre las instituciones sociales. Se ha de acusar a Weber de ambicin anmica, o emularsu esfuerzo por desarrollar una teora empricamente fundamentada de alcance delimitado?

    Bierstedt rechaza dicha teora, sospecho que por dos razones; primera: su observacin de que las teorasde alcance intermedio estn alejadas de las aspiraciones de nuestros antecesores intelectuales da aentender claramente que este concepto es comparativamente nuevo, y por tanto nos es ajeno. Sin

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    13/21

    embargo, como previamente ya he observado en este captulo y en otras partes, (41) la poltica de la teorade alcance intermedio ha sido repetidamente anticipada.

    Segunda: Bierstedt parece suponer que la teora de alcance intermedio excluye completamente lainvestigacin macrosociolgica en que una teora particular genera hiptesis especficas para serexaminadas a la luz de datos sistemticamente reunidos. Como hemos visto, este supuesto es infundado.En realidad, el trabajo principal en la macrosociologa comparativa se basa, hoy da, principalmente enteoras especficas y delimitadas de las interrelaciones entre los componentes de la estructura social que

    pueden someterse a la prueba emprica sistemtica, utilizando la misma lgica y casi los mismos tipos deindicadores que los empleados en la investigacin microsociolgica. (42)

    La tendencia a polarizar los problemas tericos en trminos de todo-o-nada la expresa otro crtico, quienconvierte la posicin del terico de alcance intermedio en la pretensin de haber encontrado una panaceapara una teora sociolgica contempornea. Despus de reconocer que la "mayora de los trabajos deMarshall y Merton s muestran el tipo de inters en los problemas por el que yo abogo aqu", Dahrendorfcontina diciendo: "Mi objecin a sus formulaciones no est, por tanto, dirigida contra estos trabajos sinocontra su suposicin explcita [sic] de que todo [sic] lo que est mal en la teora reciente es su generalidad yque simplemente [sic] reduciendo el nivel de la generalidad, podemos resolver todos [sic] los problemas."(43)

    Empero, debe estar claro, por lo que hemos dicho de que los tericos del alcance intermedio no sostienenque las deficiencias de la teora sociolgica sean exclusivamente resultado de que sea excesivamente

    general. Lejos de ello. Las verdaderas teoras de alcance intermedio -teora de la disonancia, teora de ladiferenciacin social o teora de los grupos de referencia- tienen una gran generalidad, extendindose msall de una poca histrica o cultura particular. (44) Pero estas teoras no se derivan de un sistema nico ytotal de la teora. Dentro de lmites vastos, concuerdan con una variedad de orientaciones tericas. Lasconfirma una variedad de datos empricos, y si cualquier teora general en efecto asevera que tales datos nopueden ser, tanto peor para esa teora.

    Otra crtica sostiene que las teoras de alcance intermedio fragmentan el campo de la sociologa en teorasespeciales y desconectadas. (45) Es cierto que en sociologa se han desarrollado tendencias hacia lafragmentacin. Pero esto difcilmente puede ser resultado de trabajar hacia las teoras de alcanceintermedio. Por el contrario, las teoras de gama media consolidan, no fragmentan, los hallazgos empricos.He intentado mostrar esto, por ejemplo, con la teora del grupo de referencia, la cual une hallazgos decampos tan dispares de la conducta humana como la vida militar, la raza y las relaciones tnicas, la

    movilidad social, la delincuencia, la poltica, la educacin y la actividad revolucionaria. (46)Estas crticas representan claramente los esfuerzos por situar a la teora de alcance intermedio en elesquema contemporneo de la sociologa. Pero el proceso de polarizacin empuja a la crtica mucho msall de este punto, a la distorsin de la informacin ya disponible. Por otra parte, parecera imposible quealguien pudiera observar la posicin anunciada por Riesman en apoyo a la teora del alcance intermedio yseguir sosteniendo que "las estrategias de gama intermedia de exclusin" incluyen un

    ataque sistemtico dirigido contra aquellos artesanos sociolgicos contemporneos que tratan de trabajaren los problemas de la tradicin clsica. Este ataque generalmente toma la forma de clasificar dicho trabajosociolgico como "especulativo", "impresionista" o incluso directamente "periodstico". As los sutilesesfuerzos por interpretar la sociedad moderna hechos por hombres como C. Wright Mills y David Riesman,los cuales estn en una relacin orgnica con la tradicin clsica solamente porque se atreven a tratarproblemas que estn en el centro de la tradicin, sistemticamente son menospreciados dentro de la

    profesin. (47)Segn esta pretensin, Riesman es "sistemticamente menospreciado" por los defensores de, mismo tipode teora que l defiende. Asimismo, aunque esta afirmacin sugiere que es la "estrategia de exclusin" dealcance intermedio la que "menosprecia" el trabajo de C. Wright Mills, es un hecho que uno de los tericosde la teora de alcance intermedio dio fuerte apoyo a esa parte del trabajo de Mills que ofrece anlisissistemticos de la estructura social y de la psicologa Social, (48)

    Los ltimos socilogos soviticos han llegado a interpretar "la conocida 'teora del alcance intermedio' "como una concepcin positiva. Segn G. M. Andreeva, dicha teora est concebida

    al nivel de un orden relativamente bajo de abstraccin, el cual en principio no va ms all de los datosempricos. El conocimiento "terico" a este nivel est nuevamente en la categora del conocimientoemprico, pues la propia teora se reduce en esencia al nivel de las generalizaciones empricas... (49)

    Esta falsa idea sobre la teora de alcance intermedio requiere aqu poca discusin. Despus de todo, elcaptulo sobre el "influjo de la teora sociolgica sobre la investigacin emprica" reimpreso en este volumenest en prensa desde hace cerca de un cuarto de siglo. Desde entonces, yo distingua entre una teora, ungrupo de suposiciones lgicamente interrelacionadas del cual se derivan ,hiptesis comprobables

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    14/21

    empricamente, y una generalizacin emprica, una proposicin aislada que resume las uniformidadesobservadas de las relaciones entre dos o ms variables. Empero, los acadmicos marxistas construyenteoras de alcance intermedio en trminos que estn deliberadamente excludos por estas formulaciones.

    Esta idea falsa puede basarse en un compromiso con una teora sociolgica total y en el miedo a que estateora sea amenazada por el papel de las teoras de alcance intermedio. Debe observarse, sin embargo,que en la medida en que la orientacin terica general proporcionada por el pensamiento marxista llega aser una gua para la investigacin emprica sistemtica, debe hacerlo as mediante el desarrollo de teoras

    especiales intermedias. De otra manera, como parece haber sido el caso de estudios como !a investigacinde Sverdlov de las actitudes y conducta de los obreros, esta orientacin llevara cuando ms a una serie degeneralizaciones empricas (como la relacin del nivel de educacin logrado por los trabajadores con elnmero de sus afiliaciones organizativas, nmero de libros ledos, y cosas semejantes)

    El captulo precedente sugera que los socilogos que estn convencidos de que existe una teora total queabarca el alcance completo del conocimiento sociolgico pueden creer que la sociologa debe adecuarseaqu y all a todas las demandas prcticas que se le hacen. Esta concepcin est por el rechazo de lateora de alcance intermedio, como se ve en la siguiente observacin de Osipov y Yovchuk:

    Es bien conocida la opinin de Merton de que la sociologa an no est para una teora comprensivaintegral y que solamente hay unas cuantas teoras disponibles en un nivel intermedio de abstraccin, cuyasignificacin es relativa y temporal . Nos sentimos justificados a creer que esta definicin no puede aplicarsea la sociologa cientfica marxista. La comprensin materialista de la historia! descrita por vez primera por

    Marx hace aproximadamente 125 aos, ha sido comprobada por el tiempo y por todo el proceso deldesarrollo histrico. La comprensin materialista de la historia se basa en el estudio concreto de la vidasocial. El surgimiento del marxismo en la dcada de 1840 y su ulterior desarrollo se ha ligadoorgnicamente y apoyado en la investigacin de problemas sociales especficos. (50)

    Esta investigacin de problemas sociales especficos -lo que los socilogos soviticos denominan"investigacin sociolgica concreta"- no se deriva lgicamente de la orientacin terica general delmaterialismo histrico. Y cuando no se han desarrollado teoras intermedias, estas investigaciones hantendido hacia el "empirismo prctico"; la recoleccin metdica de slo la informacin suficiente para tomarseen cuenta al tomar decisiones prcticas. Por ejemplo, ha habido varios estudios de presupuesto del tiempode los trabajadores, parecidos a los estudios de Sorokin en los primeros aos de la dcada de 1930. Sepidi a los trabajadores que llevaran un registro de cmo distribuan su tiempo entre categoras como horasde trabajo, deberes caseros, necesidades fisiolgicas, descanso, tiempo dedicado a los nios y "trabajo

    social til" (incluyendo la participacin en consejos civiles, tribunales obreros, asistencia a conferencias o"trabajo cultural de masas"). El anlisis de los presupuestos de tiempo tiene dos objetivos: el primeroidentificar y luego eliminar los problemas en la eficiente distribucin del tiempo. Por ejemplo, se encontrque un obstculo para la educacin en escuelas nocturnas para los trabajadores era que el tiempo fijadopara los exmenes requera que se liberara a ms trabajadores de sus trabajos de lo que se poda hacer. Elsegundo objetivo de los presupuestos es hacer planes guas para cambiar las actividades de lostrabajadores. Por ejemplo, cuando los datos de los horarios se ligaron con la investigacin de lasmotivaciones de los trabajadores, se concluy que poda contarse ms con los trabajadores jvenes paraestudiar y ser "ms activos para elevar la eficiencia del trabajo". Estos ejemplos demuestran que esempirismo prctico, ms que formulaciones tericas, lo que impregna esta investigacin. Sus hallazgosestn en el mimsmo bajo nivel de abstraccin, como el de la investigacin de los mercados en otrassociedades. Deben incorporarse a teoras ms abstractas de alcance intermedio si ha de salvarse la brechaentre la orientacin general del pensamiento marxista y las generalizaciones empricas.(51)

    RESUMEN Y CONSIDERACIONES

    La revisin precedente de los pros y contras polarizados de las teoras de alcance intermedio es suficientepara llegar a una conclusin: cada uno de nosotros es vulnerable perpetuamente al farisesmo. Damosgracias por no ser como otros socilogos que nicamente hablan en lugar de observar, o slo observan envez de pensar, o solamente piensan en lugar de poner sus pensamientos a prueba con la investigacinemprica sistemtica.

    Dadas estas interpretaciones polarizadas de la teora sociolgica de alcance intermedio, puede ser deutilidad reiterar los atributos de esta teora:

    1. Las teoras de alcance intermedio consisten en grupos limitados de suposiciones, de las que se derivanlgicamente hiptesis especficas y son confirmadas por la investigacin emprica.

    2. Estas teoras no permanecen separadas, sino que se renen en redes ms amplias de teoras, como seilustra con las teoras del nivel de aspiracin, grupo de referencia y estructura de oportunidad.

    3. Estas teoras son lo bastante abstractas para tratar diferentes esferas de la conducta social y de laestructura social, de modo que trascienden la mera descripcin o la generalizacin emprica. La teora del

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    15/21

    conflicto social, por ejemplo, ha sido aplicada a conflictos tnicos y raciales, al conflicto de clases y aconflictos internacionales.

    4. Este tipo de teoras para al travs de la distincin entre problemas microsociolgicos, como l o demuestraen la investigacin de pequeos grupos, y los problemas macrosociolgicos, como se prueba con losestudios comparativos de la movilidad social y la organizacin formal, y la interdependencia de lasinstituciones sociales.

    5. Sistemas sociolgicos totales de las teoras -como el materialismo histrico de Marx, la teora de lossistemas sociales de Parson y la sociologa integral de Sorokin. representan orientaciones tericasgenerales, ms que sistemas rigurosos y bien construdos, contemplados en la bsqueda de una "teoraunificada" en fsica.

    6. Como resultado, muchas teoras de alcance intermedio concuerdan con toda una variedad de sistemasdel pensamiento sociolgico.

    7. Las teoras de alcance intermedio estn tpicamente en lnea directa de continuidad con el trabajo de lasformulaciones tericas clsicas. Todos somos herederos residuales de Durkheim y Weber, cuyos trabajosproporcionan ideas a seguir, ejemplifican tcticas de teorizacin, aportan modelos para saber seleccionarlos problemas, y nos instruyen a plantear cuestiones tericas que se desarrol lan a partir de las de ellos.

    8. La orientacin de alcance intermedio conlleva la especificacin de la ignorancia. En lugar de pretender unconocimiento donde en realidad est ausente, reconoce expresamente lo que debe aprenderse an, con el

    objetivo de sentar las bases para un mayor conocimiento. No supone, por s misma, que est a la par de darsoluciones tericas a todos los problemas prcticos urgentes del da, sino que se aboca a aquellosproblemas que podran esclarecerse ahora a la luz del conocimiento existente.

    PARADIGMAS: LA CODIFICACIN DE LA TEORA SOCIOLGICA

    Como hemos observado previamente, el principal inters de este libro radica en la codificacin de la teoraesencial y de los procedimientos del anlisis cualitativo en sociologa. Como se elabora aqu, la codificacines la disposicin ordenada y compacta de los procedimientos frtiles de la investigacin y de los resultadosesenciales que se obtienen con esta utilizacin. Este proceso contina la identificacin y organizacin de loque ha estado implcito en el trabajo del pasado, y no la invencin de nuevas estrategias de investigacin.

    El siguiente captulo, que trata del anlisis funcional, propone un paradigma como base para codificar eltrabajo previo en este campo.(52) Creo que tales paradigmas tienen un gran valor propedutico. En primer

    lugar, exponen a la vista el conjunto de supuestos, conceptos y proposiciones bsicas que se emplean enun anlisis sociolgico. De esta suerte, reducen la tendencia inadvertida a ocultar el ncleo del anlisisdetrs de un velo de comentarios y pensamientos hechos al azar, aunque posiblemente muy ilustrativos. Apesar de la apariencia de inventarios de proposiciones, la sociologa todava tiene pocas frmulas; es decir,expresiones simblicas muy abreviadas de relaciones entre variables sociolgicas. En consecuencia, lasinterpretaciones sociolgicas tienden a ser discursivas. La lgica del procedimiento, los conceptos clave ylas relaciones entre variables se pierden no pocas veces en un alud de palabras. Cuando esto ocurre, ellector crtico tiene que buscar laboriosamente por s mismo los impl citos supuestos del autor. El paradigmareduce esta tendencia del terico al empleo de conceptos y supuestos tcitos.

    A esta tendencia de la exposicin sociolgica a hacerse prolija y no lcida contribuye la tradicin -heredadaun poco de la filosofa, sobre todo de la historia, y buena parte de la literatura- que sostiene que lasexposiciones sociolgicas deber escribirse vivaz e intensamente, manifestando toda la rica plenitud de laescena humana. El socilogo que no rechaza esta elegante pero extraa herencia se apasiona en buscar laexcepcional constelacin de palabras que expresen mejor la particularidad del caso sociolgico de que setrate, y no en destacar los conceptos y relaciones objetivos y generalizables que ejemplifica; el ncleo deuna ciencia, como distinta de las otras. Con excesiva frecuencia, lo animan en ese mal uso de susverdaderas habilidades artsticas los aplausos de un pblico profano, que le dice, agradecido, que escribecomo un novelista y no como un superdomesticado y acadmicamente sumiso Doctor en Filosofa. No rarasveces, paga por ese aplauso popular, porque cuanto ms se acerca a la elocuencia ms se aleja de lainteligencia. Pero hay que reconocer, como sugiri San Agustn hace mucho tiempo en una suaverefutacin, que "...una cosa es necesariamente cierta porque est mal dicha, ni falsa porque estmagnficamente dicha".

    Sin embargo, en forma notoria se oscurecen las exposiciones cientficas con cosas si n importancia. Encasos extremos, el duro esqueleto de hechos, inferencias y conclusiones tericas se recarga con la carneblanda de la ornamentacin estilstica. Pero otras disciplinas cientficas -la fsica y la qumica van aqu

    acompaadas por la biologa y la estadstica- escaparon de este inters desplazado por las graciasliterarias. Aferradas a los propsitos de la ciencia, esas disciplinas prefieren la brevedad, la precisin y laobjetividad a tipos exquisitamente rtmicos de lenguaje, a la riqueza de connotaciones y a la imagineraverbal sensible. Aun si no se est de acuerdo con la teora de que la sociologa debe en todos respectos

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    16/21

    ajustarse a la lnea sealada por la qumica, la fsica o la biologa; no se necesita argum entar que debeemular a la historia, a la filosofa discursiva o a la literatura. Cada uno a su tarea, y la tarea del socilogo espresentar con lucidez el derecho a proposiciones lgicamente interconectadas y empricamente confirmadasacerca de la estructura de la sociedad y sus cambios, la conducta del hombre dentro de esta estructura ylas consecuencias sociales de esa conducta. Los paradigmas para el anlisis sociolgico tienen por objetoayudar al socilogo a realizar su tarea.

    Puesto que la interpretacin sociolgica slida implica de manera inevitable algn paradigma terico, lo ms

    discreto parece exponerlo al aire libre. Si el verdadero arte consiste en ocultar todas las huellas del arte, laverdadera ciencia consiste en revelar su andamiaje as como su estructura terminada.

    Sin pretender que esto sea toda la historia, sugiero que los paradigmas para el anlisis cualitativo ensociologa tienen por lo menos cinco funciones estrechamente relacionadas ent re s. (53)

    En primer lugar, los paradigmas tienen una funcin anotadora. Proporcionan una ordenacin compacta delos conceptos centrales y de sus interrelaciones tal como se utilizan para la descripcin y el anlisis. Elexponer los conceptos en una extensin lo bastante pequea para permitir su inspec cin simultnea es unaayuda importante para la autocorreccin de las interpretaciones sucesivas, meta difcil de alcanzar cuandolos conceptos estn diseminados por toda la exposicin discursiva. (Como lo indica el trabajo de Cajori, staparece ser una de las funciones importantes de los smbolos matemticos: proporcionan lo necesario parala inspeccin simultnea de todos los trminos que entran en el anlisis.)

    En segundo lugar, los paradigmas disminuyen la probabilidad de incluir sin advertirlo supuest os y conceptosocultos, ya que cada nuevo supuesto y cada concepto nuevo lgicamente debe derivarse de loscomponentes previos del paradigma o introducirse explcitamente en l. El paradigma suministra as unagua para evitar hiptesis ad hoc (es decir, irresponsables desde el punto de vista lgico) .

    En tercer lugar, los paradigmas promueven la acumulacin de interpretacin terica. En efecto, elparadigma es la base sobre la cual se construye un edificio de interpretaciones. Si no puede construirse unnuevo piso directamente sobre estos cimientos, entonces debe tratrsele como una nueva ala de laestructura total, y la base de los conceptos y supuestos debe ampliarse para sostener esta ala. Adems,cada nuevo piso que pueda construirse sobre los cimientos originales fortalece nuestra confianza en sucalidad esencial, as como cada nueva ampliacin, precisamente porque requiere cimientos adicionales, nosmueve a sospechar de la solidez de la estructura original. Un paradigma que merezca gran confianzasoportar en el momento oportuno una estructura interpretativa de dimension es de rascacielos,testimoniando cada piso sucesivo de la calidad sustancial y bien sentada de los cimientos originales, entanto que un paradigma defectuoso soportar una destartalada estructura de un solo piso, en la cual cadaconjunto nuevo de uniformidades requiere que se echen cimientos nuevos, ya que el original no puedesoportar el peso de pisos adicionales.

    En cuarto lugar, los paradigmas, por su disposicin misma, sugieren la tabulacin cruzada sistemtica deconceptos importantes y pueden sensibilizar al analista para problemas empricos y tericos que de otromodo podra no advertir. (54) Los paradigmas promueven el anlisis ms que la descripcin de detallesconcretos. Dirigen nuestra atencin, por ejemplo, hacia los componentes de la conducta social, a los posibles esfuerzos y tensiones entre los componentes, y de ah a las fuentes de desviacin de la conductaprescrita en forma normativa.

    En quinto lugar, los paradigmas favorecen la codificacin del anlisis cualitativo de una manera que seacerca al rigor lgico, si no al rigor emprico del anlisis cuantitativo. Los procedimientos para computarmedidas estadsticas y sus bases matemticas estn codificados como cartabn; sus supuestos yprocedimientos estn abiertos al escrutinio crtico de todos. En contraste, el anlisis sociolgico de datoscualitativos a menudo reside en un mundo privado de ideas penetrantes pero insondables y deconocimientos inefables. En realidad, las exposiciones discursivas que no estn basadas en paradigmas amenudo incluyen interpretaciones perceptivas; como dice la frase, son ricas en "atisbos iluminadores". Perono siempre est claro qu operaciones, con qu conceptos analticos estaban implcitas en esos atisbos. Enalgunos crculos, la mera sugestin de que esas experiencias de ndole tan privada tienen que serremoldeadas dentro de procedimientos pblicamente certificables si han de tener valor cientfico , seconsidera como una profanacin. Empero, los conceptos y procedimientos incluso del ms perceptivo de lossocilogos deben ser reproducibles, y los resultados de sus atisbos comprobados por otros. La ciencia, yesto incluye a la ciencia sociolgica, es pblica, no privada. No es que nosotros los socilogos comunesqueramos reducir todos los talentos a nuestra propia pequea estatura, es slo que las contribuciones delos grandes y tambin las de los pequeos, deben ser codificadas si han de promover el desarrollo de lasociologa.

    Todas las virtudes pueden convertirse fcilmente en vicios por el hecho de llevarse al exceso, y esto esvlido para el paradigma sociolgico. Es una tentacin para la indolencia mental. Equipado con suparadigma, el socilogo puede cerrar los ojos ante datos estratgicos que no se exigen de manera expresa

  • 8/6/2019 Merton, Robert - Teora y Estructura Social, Cap 2

    17/21

    en el paradigma. Puede transformarlo, de anteojos de campaa sociolgicos en anteojeras sociolgicas. Elmal uso es consecuencia de la absolutizacin del paradigma y no utilizarlo como punto de inmediato comolo han sido en el pasado partida a ttulo de ensayo. Pero si se le reciente, estos paradigmas son preferiblesa reconoce como provisionales y cambiantes, destinados a ser modificados en el futuro

    NOTAS

    (1) Una 'hiptesis de trabajo' es algo ms que el procedimiento del sentido comn utilizadopor todos nosotros todos los das. Al encontrar ciertos hechos, ciertas explicacionesopuestas nos vienen a la mente, y procedemos a comprobarlas", James B. Conant, OnUndestanding Science, New Have: Yale University Press, 1947, p. 137, n. 4.

    (2) Esta discusin se basa en una crtica del artculo de Parsons, y la ampla, sobre laposicin de la teora sociolgica en las reuniones de 1947 de la American SociologicalSociety como se public en forma resumida en American Socio logical Review, 1949, pp. 13,164-8. Tambin se basa en discusiones subsecuentes: R. K. Merton , "The role -set:problems in sociological theory", The british Journal of Sociology, junio de 1957, 8, 106 -20,en108-10; R.K.Merton, "lntroduction" a Social Organization under Stress: A SociologicalReview of Disaster Studies, de Al len Barton, Washington, D. C.: Academia Nacional deCiencias - Consejo Nacional de Investigacin, 1936, XVII-XXXVI en XXIX-XXVI.

    (3) Barton, op. cit., pp. 62-63, 70-72 y la Introduccin, XXIV-XXV.(4) Las pginas siguientes estn tomadas de Merton, "The role -set", op. cit.

    (5) Para una primera versin de esta idea en desarrollo, vase a Merton, "The social-culturalenvironment and anomie", en la edicin de Helen L. Witmer y Ruth Kotinsky, NewPerspective for Research on Juvenile Delinquency, Informe de una conferencia sobre laimportancia e interrelaciones de ciertos conceptos de la sociologa y la psiquiatra en ladelincuencia, realizada el y 7 de mayo de 1955. (Washington, D. C. Dep artamento deSalud, Educacin y Bienestar de los Estados Unidos, 1956), pp. 24-50; en 47-48.

    (6) Si hemos de juzgar a partir de la dinmica del desarrollo en la ciencia, esbozada en laparte precedente de esta introduccin, las teoras de alcance intermedio, estando cerca delfrente de investigacin de la ciencia, son particularmente buenas para ser productos dedescubrimientos mltiples y aproximadamente simultneos. La idea central del grupo depapeles fue desarrollada independientemente en la importante monografa emprica de NealGross, Ward S. Mason y A. W. McEachern, Explorations in the Role Analysis: Studies of theSchool Superintendency Role (Nueva York: John Wiley & sons, Inc. 1958). Importantesampliaciones de la teora junto con la investigacin emprica se encontrarn en lasmonografas siguientes: Robert L. Kahn, et al., Organizational Stress: Studies in Rolepassim; Daniel Katz y Robert L. Kahn, The Social Psychology of Organizations (Nueva York:John Willey & Sons, 1966), p. 172 y passim.(7) Vase el trabajo clsico de John Theodore Merz, A History of European Thought in theNineteenth Century (Edinburgo y Londres: William Blackwood, 1904), 4 vls.

    (8) Bertrand Russell, A History of Western Philosophy (Nueva York: Simon and Schuster,1945) p. 834.

    (9) Wilfred Trotter, Collectes Papers (Oxford University Press, 1941), p. 150. La historia delos hacedores de sistemas se relata en cada historia de la medicina; por ejemplo, FieldingH. Garrison, An Introduction to the History of Medicine (Filadelfia: Saunders, 1929), y RalphH. Major, A History of Medicine (Oxford: Blackwell Scientific Publications, 1954), 2 vols.

    (10) Lawrence J. Henderson, The Study of Man (Filadelfia: University of Pennsylvania Press,1941), pp. 19-20. Subrayado de R. K. Merton. Por cierto, todo el libro puede leerlo conprovecho la mayora de los socilogos.

    (11) Henry Margenau: "The basis of theory in physics". Manuscritos inditos, 1949. pp. 5 -.

    (12) Richard Feynman, The Character of Physical Law (Londres: Cox & Wyman, Ltd., 19 65),p. 30.

    (13) Albert Einstein, "The fundamentals of theoretica phy