MANIFIESTO DE LA RED ANDALUZA DE EDUCADORES Y EDUCADORAS

PARA UNA CIUDADANÍA GLOBAL.

La Red de Educadores y Educadoras para una Ciudadanía Global de Andalucía somos un grupo de docentes que compartimos formación, iniciativas y experiencias y que creemos que nuestros centros y nuestras prácticas educativas pueden ser trasformadoras de la sociedad.

Estamos convencidos de que con una escuela más participativa, crítica, integradora y abierta al mundo desde una perspectiva de lo “glocal”; con una escuela que no pierda de vista los derechos humanos y que forme auténticos ciudadanos y ciudadanas, se puede construir una sociedad más justa y solidaria.

Así que, compartimos la gran preocupación de muchos compañeros y compañeras, y de diversos colectivos del profesorado, alumnado, padres y madres por los recortes que están sufriendo los servicios públicos, en general, y la educación sostenida con fondos públicos, en particular; porque así no se avanza hacia la escuela que queremos.

Denunciamos las medidas aprobadas, como son el aumento de las horas lectivas del profesorado, que reduce radicalmente el número de profesorado por Centro, el criterio de nombramiento de sustitutos, la modificación de la ratio en las aulas, la disminución drástica del presupuesto de funcionamiento de los centros, los recortes en becas y en salarios, etc.

Estas medidas solo van a llevar a un aumento de la precariedad entre los docentes y un empeoramiento significativo de la calidad de la enseñanza, y están poniendo en peligro el futuro de nuestro país, de nuestros alumnos y alumnas. El resultado es evidente: cada vez estamos peor. Ese no es el camino.

La Educación es un derecho básico establecido en nuestra Constitución. Y esta debe ser de calidad y generadora de la igualdad de oportunidades de toda la ciudadanía. Además, todos los expertos indican que el gasto en Educación es la mejor inversión posible para el futuro de los pueblos, y más aún en un país como el nuestro, que llegó tarde al desarrollo de las sociedades europeas avanzadas, que sigue por debajo del gasto en educación de muchos de nuestros socios europeos; y que, hasta hace pocos años, tenía muy graves carencias educativas, incluso en la formación básica de la ciudadanía.

No podemos olvidar que la enseñanza sostenida con fondos públicos es la única que garantiza la igualdad de oportunidades, la cohesión social, la superación de las desigualdades de origen, la vertebración de toda la sociedad en un objetivo común y el progreso individual y social de todos y todas, no de unos pocos. El gasto social destinado a mantener y mejorar la red pública educativa, además de la sanitaria y del resto de servicios sociales, es la mejor inversión que las administraciones públicas pueden hacer para favorecer el desarrollo social.

Además, pensamos que el objetivo de la Educación no es solamente formar mano de obra cualificada, y no compartimos la idea neoliberal, que hay detrás de todas estas medidas, de que no es necesaria la Educación para los que van a servir como mano de obra no cualificada (como precarios explotados y sin derechos).

El objetivo de la Educación es formar ciudadanos y ciudadanas libres, críticas,

transformadoras y comprometidas, capaces de enfrentarse al futuro desde una posición de búsqueda del bien común, y no sólo de los intereses particulares. Y esto es lo que nos estamos jugando con estas medidas y recortes: si como sociedad, aceptamos formar mano de obra que sirva al sistema pero quede excluida del bienestar; o por el contrario apostamos por una ciudadanía capaz de construir su futuro en común y hacer un mundo mejor, basado en el respeto de los Derechos Humanos.

Por eso, rechazamos las medidas adoptadas; porque estamos convencidos de que no van a servir para sacarnos de la crisis, sino para desmontar el Estado de Bienestar. Y pedimos al gobierno de la Junta de Andalucía que no las aplique, sino que tenga en cuenta otras opciones más justas y equitativas. Por ejemplo, la revisión de la política presupuestaria que suprima agencias como la Agencia Andaluza de Evaluación de Evaluación Educativa (AGAEVE), cuyas funciones son perfectamente asumibles por el funcionariado como la Inspección Educativa o revise aquellas partidas prescindibles en todos los ámbitos de la Junta de Andalucía, especialmente en otras Consejerías que no afecten a los servicios públicos básicos como la Educación y la Sanidad. A nivel del Estado, ya que se nos imponen los recortes como necesarios, se deberían hacer especialmente en lo más superfluo, como son las partidas de inversión militar o la revisión de instituciones cuya función es meramente testimonial o consultiva, pero que no revierte en servicios sociales para la ciudadanía ni garantiza sus derechos.

Se deben implementar medidas que pidan responsabilidad a los que causaron

esta crisis, y aquellos que se han beneficiado de la misma, que devuelvan la mayoría de sus beneficios a la sociedad. Porque con las “soluciones aplicadas”, no se nos pide a toda la sociedad aportar en función de nuestras riquezas, sino que sólo castigan a una mayoría de la ciudadanía a través de recortes presupuestarios en derechos básicos como la educación o en sanidad, mientras se mantienen jubilaciones millonarias, un sistema financiero construido desde la especulación, promotor de evasiones fiscales de las grandes fortunas o respaldado con amnistías fiscales, necesitado de rescates bancarios sin límite y sin control por parte de la ciudadanía.

Invitamos a toda la comunidad educativa, educadores y educadoras, padres y madres, alumnado, personal de servicios, etc. a unirse a todas las posibles actuaciones que vayan surgiendo en defensa de la educación pública. Porque creemos también que otra escuela es posible, ¡No a los recortes en educación! ¡Que no nos roben el futuro!

Red Andaluza ECG