Luis Guillermo Coronado - Uno de Tres. La Cosmologia en Tres Temas de Filosofia de Roberto Murillo

download Luis Guillermo Coronado - Uno de Tres. La Cosmologia en Tres Temas de Filosofia de Roberto Murillo

of 5

Transcript of Luis Guillermo Coronado - Uno de Tres. La Cosmologia en Tres Temas de Filosofia de Roberto Murillo

  • 7/22/2019 Luis Guillermo Coronado - Uno de Tres. La Cosmologia en Tres Temas de Filosofia de Roberto Murillo

    1/5

    orientales antiguas y de contenido y forma enlos griegos. En ese siglo XVII, Murillo insisteen que se usa el mtodo de dicha ciencia y setrata de definirlo.Desde la perspectiva de la clarificacin delmtodo cientfico, Murillo introduce el smilbaconiano de las hormigas, araas y abejas.Bacon usaba su smil para diferenciar los emp-ricos que como hormigas simplemente acumulaninformacin o datos, los dogmticos que comoaraas extraen de s mismos todo el conocimien-to y, finalmente, los inductivista-gradualistas quecomo las abejas recogen el nctar para elaborarloen miel. Este autntico quehacer de las abejases lo que se plasmara en el Novum organum,y por ende manifiesto metodolgico del nuevopensamiento filosfico-cientfico, segn Bacon.Murillo, por el contrario, asigna la funcin de lashormigas a la propuesta baconiana, aunque seala de un inductivismo gradualista y abierto mssofisticado que el inductivismo ingenuo clsicocon su paso radical y definitivo de lo particulara lo universal. El caso de Descartes dice relacincon las araas y su autoproduccin de la tela, esdecir, con el deductivismo innatista del enfoqueaxiomtico de la nueva episteme cartesiana.Finalmente, Galileo correspondera con las abe-jas, en virtud de su mtodo que no se reduce auna simple yuxtaposicin de razonamiento yexperiencia sino por suponer un procedimientoconstructivo mucho ms sutil: lo que tradicio-nalmente en filosofa del mtodo se denominahipottico-deductivo. Y que por otra parte, lodir Murillo ms adelante en el contexto de otroproblema, relaciona el enfoque matemtico deArqumedes con la vocacin por la experienciade un ingeniero como es el caso de Galileo,

    Guillermo oronado

    Uno de tres La cosmologa enres tem s de filosofi de Roberto MurilloMi exposicin se basa en la obra de RobertoMurillo, Tres temas de filosofa (San Jos:EUNED, 1982). Esta es una obra de carcter

    didctico dadas las condiciones editoriales, peromuy representativa de los intereses acadmicosy personales de nuestro autor. Los tres temastratados en el libro son los del filosofar, elconocimiento y finalmente el de la ciencia y lanaturaleza, es decir, la cosmologa. Pero comoestablece el ttulo de mi trabajo: de los tres temastrataremos solamente uno, el tercero, el de laciencia y la naturaleza.El tema, la cosmologa, como engarce de laciencia y la naturaleza, ocupa las pginas 65 a 112del libro, y el autor lo divide en cuatro secciones,a saber, una introduccin narrativa -como aper-tura- como es el caso en los temas anteriores, ytres desarrollos conceptuales, en su orden, deluniverso antiguo al mundo moderno, sentido ymtodo de la ciencia moderna, y hacia la cienciacontempornea. Las secciones tienen una estruc-tura compleja, menos la segunda; la primera seconstruye sobre un smil de Francis Bacon, la ter-cera remite a Descartes, Galileo y Newton-Kant,la cuarta considera a Maxwell y Einstein.

    La introduccin narrativa se divide en dospartes, primero, una zoologa laboral epistemo-lgica que sirve de arranque temtico (67-69);una segunda que trata del problema de la medi-cin de las longitudes (69 a 71). Ahora bien, eltema especfico es la ciencia fisicomatemticapropia del siglo XVII, a la que se le recono-cen antecedentes de contenido en las culturas

    Rev. Filosofa Univ Costa Rica, XLII (105), 137-141, ISSN: 0034-8252, Enero-Abril 2004

  • 7/22/2019 Luis Guillermo Coronado - Uno de Tres. La Cosmologia en Tres Temas de Filosofia de Roberto Murillo

    2/5

    138 GUILLERMO CORONADO

    discpulo a su vez de un discpulo de Tartaglia,agregamos nosotros.La segunda parte de la introduccin narrati-va trata de un caso tcnico-cientfico-tecnolgicotomado de Gusdorf, su director de estudios enFrancia, y que hace referencia a latitudes, lon-gitudes y relojes, es decir, al problema de esta-blecer la posicin espacial en el mar mediante laposicin de las estrellas y el tiempo medido porrelojes, procedimiento clave para la navegacinde gran escala. Aparte de los detalles histricos,a Murillo le interesa resaltar su importancia parala gnesis de una racionalizacin del espacioabsoluto y de la presencia simultnea, o desdeotra perspectiva, de la geometrizacin del planetatierra que a su vez se relaciona con el proyecto deDescartes y su materiae espacioegeometra. Aqutambin se siente, adems de la obvia presenciade Gusdorf, ecos del pensamiento de RobertoSaumells -otra muy importante influencia en elpensamiento de Roberto Murillo-.

    La segunda seccin lleva como ttulo Deluniverso antiguo al mundo moderno , y no tienesubdivisiones. Su tema central es el desarrollo dela teora astronmico-cosmolgica desde la anti-gedad hasta el siglo XVII (72-75). En este caso,el pensamiento clsico se divide en dos enfoques,a saber, el helnico, con su astronoma de mode-los geomtricos y una cosmologa realista, enparticular un universo jerarquizado; el helens-

    tico, representado por Hiparco y Ptolomeo y, enespecial, por el llamado a salvar las aparienciasdel ltimo, esto es, con un espritu positivistaavant la lettre . Murillo tambin considera undesarrollo paralelo, el de la axiomatizacin de lageometra, los Elementos de Euclides.A continuacin (76), se discute la revolucincopernicana, luego de una breve referencia alinfinitismo de Nicols de Cusa como doctri-na contrapuesta a la cosmologa centrista. Delcopernicanismo se enfatiza su realismo. El aporteparticular de Galileo lo resume el autor en variosniveles. Primero, en la astronoma telescpica ysus grandes descubrimientos: manchas solares,fases de Venus, lunas de Jpiter Por cierto, agrega

    los anillos de Saturno pero esto es discutible puesel aspecto tricorpreo de Saturno no queda firmepara Galileo dada la variabilidad de las observa-ciones, y tampoco es totalmente equivalente a losanillos, que seran un descubrimiento posterior(Huygens). Segundo, y ello es muy llamativo, enel compromiso tico con la verdad como raznde ser de la investigacin y del realismo queGalileo asume. Claro que est el hecho histricode la retractacin en 1633 por parte del viejo yenfermo Galileo, pero para Murillo esto no anulael compromiso tico que lo llev a sus grandesenfrentamientos con los conservadores de sutiempo. Tercero, el aporte a la transformacin dela imagen tradicional de un mundo unitario, divi-dido en sub y supralunar con distintas materias, lacorruptible y la incorruptible, mientras formulaleyes matemticas para el comportamiento de lamateria en la tierra, que no tardarn en extender-se a la totalidad del universo (77). Esta valora-cin es plenamente aceptable excepto si ponemosnuestra atencin a la afirmacin anterior a la cita,en la que el autor deja la duda de si el paso delcosmos cerrado al mundo infinito, con ecos dela famosa obra de Koyr, la hace en general o enreferencia a Galileo; en referencia a Galileo sim-plemente no sera correcta pues Galileo mantuvola finitud esfrica del cosmos.A continuacin (78), Roberto plantea unaconsideracin muy interesante: una triloga epis-temolgica en la historia de la astronoma comoejemplificacin de una importante vertiente delconocimiento. Dado que ninguna teora cientficapuede ser radicalmente empirista , para conectarlo terico con lo emprico se plantea una de las tressiguientes posibilidades: un instrumentalismo conPtolomeo; un realismo con Coprnico y Galileo; yun soporte racional-matemtico con Kepler.De este ltimo, Murillo destaca dos aspectosque astronmicamente tienen gran significado:uno el rechazo de la circularidad y la unifor-midad del movimiento planetario, tal como sedesprende de las primeras dos leyes keplerianas;otro la unidad o simplicidad matemtica, cuandolas elipses y la igualdad de reas en tiemposiguales se ven desde la perspectiva de la simpli-cidad algebraica. Del nuevo ropaje del enfoquepitagrico agregaramos nosotros. Por ello llamamucho la atencin que no se haga referencia a

    Rev. Filosofa Univ. Costa Rica, XLII (105), 137-141, ISSN: 0034-8252, Enero-Abril 2004

  • 7/22/2019 Luis Guillermo Coronado - Uno de Tres. La Cosmologia en Tres Temas de Filosofia de Roberto Murillo

    3/5

    UNO DE TRES. LA COSMOLOGA EN TRES TEMAS DE FILOSOFA.

    tercera ley de Kepler, puesto que ella denotara demanera ms profunda ese sentido de unidad.Finalmente, en el caso de Newton, a Murillole interesa destacar el cambio de perspectiva fun-damental, que por una parte refleja el cambio demtodo iniciado por Galileo, y por otra, el cam-bio en el contenido, que tuvo sus races en Nicolsde Cusa, como se apunt ms arriba.Lo que por ahora queremos retener es el objeto deNEWTON: ese mundo moderno que amanece conNicols de CUSA y que ha de sustituir al universo anti-guo, que era un gran individuo unitario y total, cons-tituido por un sistema de esferas cristalinas giratoriasconcntricas, geocntrico, limitado, finito. El mundomoderno ya no es un universo , en el sentido de queya no es sensible o imaginativamente unitario; ya no esdable construir su maqueta total. Lo llamamos mundo,siguiendo a un autor reciente, porque esta palabra sueleemplearse en la filosofa contempornea para designar,no la totalidad de la naturaleza, independiente de laexistencia o inexistencia del hombre, sino precisamen-te el mundo del hombre, el ser-en-el-mundo co mouna dimensin del hombre. (79)

    Significativa referencia a CndidoCimadevilla y su obra Universo antiguo mundomoderno (1964), que constituye otra de las fuen-tes de inspiracin para los modos de interpreta-cin de Murillo. O bien, como lo resume Murilloal cierre del captulo en consideracin yellibro:Pero no se puede orillar una importante enseanzade la historia de la ciencia: el mundo es, en ltimoanlisis, el mundo-del-hombre, no ciertamente creadopor el hombre desde la nada, sino recreado gracias ala anticipacin terica y a esas teoras materializadasque son los instrumentos de observacin. El tema delmundo en la filosofa nos conduce as hacia el temadel hombre, pues no es arriesgado decir que la historiade la cosmologa es la historia de las imgenes de smismo que el hombre ha proyectado en el cosmos.Mediante el mito, la filosofa y la ciencia, el hombre harecreado el mundo a su imagen y semejanza, de mane-ra que su interpretacin terica del cosmos es ya unamanera de hacerlo suyo y de habitar la tierra. (111)

    Pero volviendo al anlisis de Newton, sehace nfasis en que se supone no un universo,parte-todo, sino mundo, absoluto-relativo. Enel universo antiguo, explicar es referir la parteal todo, integrarla en l. En el mundo moderno,

    139

    explicar es referir lo relativo a lo absoluto 80).En consecuencia, Murillo profundiza los con-ceptos de espacio y tiempo como absolutos encontraposicin a relativos; aclara las relacionesteolgicas de los absolutos en tanto sensoriosdivinos; la prioridad ontolgica en contraposicina la dependencia, por ejemplo, aristotlica en elcaso del tiempo. En consecuencia, a la trilogaepistemolgica antes apuntada, Murillo enfatizaque Newton incorpora un cuarto elemento:Si los astrnomos alejandrinos salvaban las apa-riencias con artificios aceptados como tales, si elastrnomo polons ve tras las apariencias sensiblesuna realidad material, si el alemn piensa tras ellasuna realidad racional, a la manera pitagrica, el fsicoingls imagina, como marco de las cosas, una espacioy un tiempo que hacen posible su conocimiento abso-luto, fundamento del conocimiento relativo propio dela experiencia inmediata. (81)

    La misma condicin epistemolgica seencuentra si se analiza el tema de la ley de la iner-cia, y ello conforma el tratamiento en las pginas81 a 83. El estudio que lleva a cabo le permite aMurillo reiterar la anterior conclusin, y a su vezrelacionarla con la filosofa de Kant.A la ciencia de NEWTON, repetimos, no le bastanni artificios explicativos, ni la mera postulacin dela realidad de los movimientos, ni la formulacin deecuaciones: requiere adems un mbito de una sensi-bilidad absoluta, condicin de posibilidad de las cosas,condicin de la comprensin racional de ellas -no desu mera percepcin por un observador finito, ubicadoen un punto-, y atribuible a Dios por el NEWTONtelogo. Veremos luego ... que la sensibilidad divinapensada por el fsico ingls llega a ser, en manos deKANT, la imaginacin constructiva del hombre. (83)

    La tercera seccin, sentido y mtodo de laciencia moderna , desarrolla, en primer lugar, losplanteamientos de Descartes, luego de Galileo

    Galilei, y cierra con el trnsito de Newton a Kant.Roberto inicia el tratamiento del asunto nue-vamente a partir de la narrativa baconiana. Noobstante, el autor establece que primero le interesael considerar a cada autor individualmente para

    Rev. Filosofa Univ. Costa Rica, XLII (105), 137-141, ISSN: 0034-8252, Enero-Abril 2004

  • 7/22/2019 Luis Guillermo Coronado - Uno de Tres. La Cosmologia en Tres Temas de Filosofia de Roberto Murillo

    4/5

    140

    sustituida por una explicacin temporal, correctay fundamental; al problema de verificar dichaley de la cada y su relacin con el tiempo queimplicar una relacin indirecta; finalmente, lacorrelacin del conocimiento cientfico con lascualidades primarias u objetivas y no con lassecundarias o subjetivas. Concluye afirmandoque lo que la nueva ciencia recoge de las cosases lo que de alguna manera puede ser preesta-blecido, lo que es objeto de una anticipacina la que la experiencia responder despus,mediante un proceso indirecto, en forma nega-tiva o afirmativa (95).El trnsito de Newton a Kant se conside-ra en pginas 95 a 99, para concluirlo con lassiguiente palabras:

    GUILLERMO CORONADO

    hacer nfasis en el aspecto con que contribuya la interpretacin final del mtodo y sentido dela ciencia.Descartes (85-89), es visto primero desde laperspectiva del mtodo axiomtico de la geome-tra, pero en este caso desde una nueva geometraque trascienda el sentido sensible, eidtico, ima-ginativo de su objeto tradicional. Por ello, la geo-metra analtica con su reduccin de las figurasa ecuaciones algebraicas en un espacio definidopor las coordenadas cartesianas es objeto de cui-dadoso anlisis. Luego, Descartes se consideraa partir de la certeza, criterio de verdad, y de lacorrelativa identificacin de materia con exten-sin que presupone la primaca de los principiosmatemticos respecto de los correlatos fsicos. Enefecto, segn Descartes las matemticas no sonel mtodo de la fsica, sino que las leyes de lanaturaleza, fsicas, se deducen de los enunciadosgeomtricos (88). Agrega al respecto todavams dado que la geometra se reduce a la geome-tra analtica como se ha dicho antes:As, pues, la materia tiene por esencia los nmeros lafsica no ser ciencia mientras no se reduzca por com-pleto al lgebra. Una vez ms, lo exterior queda incor-porado a lo interior, la araa teje la naturaleza consus internos principios matemticos, no aprendidos defuera, sino reputados ideas innatas, es decir, partedel equipo mental con que venimos al mundo. (88)

    Una breve consideracin sobre el origen delerror segn Descartes, a saber, su correlacincon la voluntad, no en tanto intencionalidad sinopor premura y falta de previsin, lleva a consi-derar igualmente la cuarta regla del mtodo, nocitada explcitamente, sino a partir de una citade los Principia.Galileo Galilei se trata en las pginas 89-95.El tpico galileano ms significativo sera el dela ley de la cada de los graves como primerainstancia del mtodo cientfico. Murillo nueva-mente insistir en el carcter construido, nodado, mediato, no inmediato, de las leyes fsicasrepresentadas aqu por esta de la cada libre (92).Ofrece tres observaciones pertinentes a la cues-tin: breves referencias histricas al proceso deconformacin de la ley y su explicacin espacial,en primera instancia pero errnea, para ser luego

    Por ello entendemos que, en alguna medida, losTiempos Modernos se inician con la revolucin coper-nicana en astronoma se cierran con esta otrarevolucin copernicana de KANT en la teora delconocimiento. (99)

    IVLa cuarta y ltima seccin del texto deMurillo se titula hacia la ciencia contempo-rnea , y se subdivide en dos partes, a saber,Maxwell y Einstein: la relatividad restringi-da . Es la ms dbil de todas y da la sensacin deno estar terminada.En la primera se discute el significado eimportancia del campo electromagntico resul-tante de las investigaciones de Maxwell -y de

    Faraday, insistimos nosotros-o Se contrapone lamecnica clsica a la nueva fsica del electro-magnetismo con sus rasgos de la interaccin,el continuo, la crisis de las relaciones externasentre los tomos [lo que Whitehead sola lla-mar la falacia de la simple ubicacin , y quetambin discute en el contexto de Maxwell]. Enespecial, Murillo trata de la irreductibilidad delcampo electromagntico al vaco y tomos delnewtonianismo; la dimensin temporal de lasecuaciones del campo; finalmente, el abandonode la accin a distancia que s tiene una funcinen la interpretacin mecnica. En fin, Murillo

    Rev. Filosofa Univ. Costa Rica, XLII (105), 137-141, ISSN: 0034-8252, Enero-Abril 2004

  • 7/22/2019 Luis Guillermo Coronado - Uno de Tres. La Cosmologia en Tres Temas de Filosofia de Roberto Murillo

    5/5

    UNO DE TRES. LA COSMOLOGA EN TRES TEMAS DE FILOSOFA.

    Rev. Filosofa Univ. Costa Rica, XLII (105), 137-141, ISSN: 0034-8252, Enero-Abril 2004

    insiste en el factor del tiempo esencial en lafsica de Maxwell.En la segunda, Murillo se dedica a la teo-ra de la relatividad especial o restringida deEinstein, desde la perspectiva del problema cl-sico de diferenciar entre un sistema inercial yuno acelerado (102). Solucin desde el campo deMaxwell, que en ltima instancia nos lleva a laaceptacin de un continuo tiempo-espacio, poruna parte, a la constancia de la velocidad dela luz en el vaco, independiente de la velocidadde la fuente emisora (103). O bien, desde otraperspectiva, un no rotundo al espacio tiempoabsolutos de Newton.

    Murillo hace una breve alusin a la relativi-dad generalizada de Einstein, con su superacinde la gravitacin como fuerza fundamental en lanaturaleza su explicacin a partir de la rela-cin de curvatura del espacio por la presenciade las masas.Reconoce, sin embargo, omisiones importan-tes en su exposicin, a saber, la mecnica cunticaen sentido estricto y la biologa con la evoluciny el factor tiempo.

    Para cerrar este trabajo dentro de los lmitespreestablecidos, cabe hacer una observacin gene-ral de importancia para comprender plenamentelos planteamientos interpretativos de Murillo.

    Ahora bien: ningn progreso se realiza sin prdida,el progreso, al menos en la filosofa y en la ciencia,

    141

    no es lineal, sino por flujos y reflujos, ms bien enespiral. (l08)Ejemplo de ello es, apunta nuestro autor, la

    superacin del universo pleno de Descartes porel vaco de Newton, espacio absoluto; mientrasque la nocin de campo y la relatividad generales una superacin de Newton que supone uncierto regreso a Descartes, aunque en un nivelcategorial ms rico y poderoso. Roberto Murillohace uso del pensamiento de Einstein para con-firmar esta aseveracin. Aunque ello no suponeuna vuelta, un retroceso, al realismo anterior a lacrtica kantiana (110).Ello lo lleva a concluir con las palabras antescitadas pero que volvemos a reproducir en sus dosoraciones finales:

    El tema del mundo en la filosofa nos conduce ashacia el tema del hombre, pues no es arriesgado decirque la historia de la cosmologa es la historia de lasimgenes de s mismo que el hombre ha proyectado enel cosmos. Mediante el mito, la filosofa y la ciencia,el hombre ha recreado el mundo a su imagen y seme-janza, de manera que su interpretacin terica delcosmos es ya una manera de hacerlo suyo y de habitarla tierra. (111).O bien en otros trminos:

    Del estudio de las sucesivas imgenes que el hombre seha hecho del cosmos, y de los aspectos a la vez creado-res y reductivos, de su mtodo para elaborarlas, puedeobtener el hombre una imagen objetiva de s mismo, dela capacidad creadora de su ser finito. (112)