Libro_Conflictos y Desigualdades Horizontales

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Desigualdades horizontales

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  • CONFLICTOS Y DESIGUALDADES

    HORIZONTALES La violencia de grupos en sociedades multietnicas

  • FRANCES STEWART, editora

    CONFLICTOS Y DESIGUALDADES HORIZONTALES La violencia de grupos en sociedades multietnicas

    Presenraci6n de Kofi Annan Traducci6n de Javier Flores Espinoza

    f ~ FONDO a ~ l EDITORIAL ii'Qf'ffft:l-' UHIVERSIDAO CAT61..1CA oe. I'MI

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    GmjlictoJ l drsigualdadr.r horiwflfilkJ LA viokflria dr grupos m tocirdadn mululmiras Franco ~lcw;m, edirora

    hances Srcwart, 2014 De c:sra edicion: Fondo Cdi10rial deb J>onrificia L'ni>Trsidad Ca1olou dd J>eru, 2014 Av. Unover\uaria 180 I, I inu 32, Peru lelefono: (51 I) 626-26'i0 f'aJC: (51 I) 626-2913 [email protected] www.fondocditonal.pucp.cdu.pe

    Di>tilo y cuidadu dt Ia edici6n: Fondo Edimriaii'UCP

    Primera edJoon: nO\iembre de 2014 l1raje: 600 CJCmplarcs ProhibidJ . .1 reproduccion Jc este libro por cualquicr medio, 1oul o pi:ci.llmeme, sin permiso expi'C'O de los edi1orc.

    ISBN: 978-612-317-061-5 I [echo d Dcpito Legal en Ia Bibliotea Nacional del Peru N 2014- 17981 Regisuo dell'royecro Editoril: 31501361401133

    lmprero en Tarea Ascxi2Ct6n GciJica l:.duetuva Pasaje Maria Auxiliadora I 56, Lima 5, Pcni

    J>r6logo

    J>rcfacio

    (.AI'ITIJIO I

    fndice

    PRIMI.RA PARTE CONCEPTOS Y PR08Ll:..\1AS

    DllSICUALOAOFS HORI?;ON ft\I.ES Y CON~IIC lOS: UNA INTRODIJCCION Y 1\.I.CIJNAS HIPQTr.SIS Fnmrts Sttuart

    (.AIiTULO 2

  • CA~iTLLO 7 DESIGUALOADES, ENTORNO ~OUl'ICO Y CONFLICTOS CIVILES: F.VI 0NCIAS DE 55 PA(SEs O:.N ViAS DE DESARROLLO Gudrun 0stby 159

    TERCERA PARTE OESIGUALDADE5 HORIZONTAL$ Y CONFLICTO EN TRES RF.GIONF.S CA~iTuo_o 8 CUANOO L\S OESICUALOADES HORIZONTALES CONOUCEN A CONFLlCTOS LECCIONES 0 UN STUDIO COMI'ARATIVO EN GHANA y COSTA DE MARFIL Arnim Langrr

    CAJ>iTUJ.O 9 DESICUALDADF..~ HORJZON'rALEs v voot.ENCIA ETNICA: LAS EVIDENCIAS DE UL,8AR y DE WARRI, N IGERIA Ukoba Ukiwo

    C..JiTULO I 0 ETNICIOAO, J\ELIGION y ESTAOO EN GHANA v NIGERIA: LA PERCEPCION DESDE LA CALLE

    Amim Longer y Ukoba Ukiwo

    CAf>iTULO II DESJGUALD.,D, ETNICIDAD v VJOLENCIA roLincA EN AMERICA lATINA: LOS CASOS DE BOI.IVJA, GUATEMALA y PERU

    Corimu Caumartin, George Gray Moli1111 y Roumary Tborp

    CAI'i'IULO 12 0.ESIGUALDADES HOIUZONTALES Y SEI'ARATISMO EN EL SUOESTE ASL~TICO: UNA PERSPECTIVA COMI'ARA'riVA Gruham K Broum

    C.rhuLO 13

    CUARTA PARTE CONCLUSIONES Y POLJTICAS

    PRINCJI>AU:S HALLAZCOS Y CONCLVSIONF.S ACEA.CA DE LA A.El.AC!ON ENTRE DESIGUALDADES HORIZDNTAI.ES Y CON~LJCTO Fmrues Suwart, Gmham K Brown y Amim Longer

    C..oiTut.o 14 POUTICAS DIIUGIDAS A LAS DESICUALDADES ti0JU2.0NTALES Frances Stewart, Graham Broum y Arnim La11gtr

    (NOICF. DE AVTORES

    BIBLIOGRAFlA

    SosRE Los AUTOnS

    187

    215

    231

    25S

    281

    317

    .H5

    363

    371

    405

    PR6LOGO

    La crecieme globalizaci6n, las cunsecuencias del colonialismo y las migracione\ han hecho que casi wdos los palses del mundo alberguen mttltiples grupos ernico~ y religiosos. Por ello es indispensable enconrrar Ia mtjor manera de organiza.r Ia~ sociedades a fin de que puedan Rorcccr ranro en rerminos econ6micos como poll ricm y culrurales. La mayor parre de Ia.~ socicdades mulriemicas logran el exira en cl esrablccimicnto de las condiciones que permitan un desarrollo padfico y esrablc; sin embargo, muchos paises no lo consiguen y m:is bien sc cnfrcnran a violencia etnica o rcligiosa. con consecuencias inaccptables en perdidas de vidas y de medio~ de susrcnro, migrnciones fon.adas, F.tmilias destruidas y ruprura de relaciones y confianza denrro de las comunidades.

    Desde mi posicion de Secrerario General de las Naciones Unidas he sido restigo de primcra mano, en muchas oporrunidadcs, del terrible daiio que acarrean CStO$ conflicros. Acrualmenre, los casas deSudin. Afganist:in e lrak nos rccucrdan dia a dl.t esws cosros devasradores. l.amentablerncnre, Ia lisra de paise.~ que se encuenrran en riesgo de tener conAicros armadoses cada vr-L mas amplia. y preocupaespecialmenre Ia siruaci6n de esros paises despues de los conAictos. lncluso aquellos que han logrado manrenerse relativamenre esrahlcs y pr6speros durance muchos anos, como Costa de Marfil, puedcn verse envueltos en Ia violencia, con consccuendas socioecon6mic::t5 desasrrosas.

    Es, asi, viral y urgenre no solo rnejorar nuesrra comprensi6n de las caru.aJ> subyaccnrcs a los con Aicros violemos sino tam bien idenrificar las poli ricas que pueda n conrrihuir a evitar estas caubtrofes y asegurar Ia paz end mundo.

    Estc libro es una contribuci6n muy imponanre para ambas cuestiones. Dcmuestra, sobre Ia base de una cuidadosa y sustenrada invesrigaci6n, que una causa principal de los conAicros violencos entre distintos grupos se encuenua

  • llr .. t(.l;\1 :Httb UOUZO!'i t"l F\ \ t'O't-LIC Ul

    en las desigu.tld~des entre cllos cott rc~pecw J l.t parricip.td6n pol it it.t y los re.:ursos ccon6rnicu~ y cl bienestar. asi como con respt:uo J sm difcrencias tulwrale~. E,t,t> dc,tgw.ldade> \On llam.tuA\ .1qui 'dniguaJdadt...,. horiz.om.Ucs'.

    Las inv~tigacioncs \l ttc presem.t este libra ticne clara.~ lccciones para las politicas publicas: lo principal t:s l.t necesidad de establccer sociedadc; inclusiv:t~. }'a partir de etc sencillo mandata ~urboen mulliplc-; idea. y \ugerencias 'Obre politic.~> c-;peciflo.:.l,,

    Evitar Ia violencia c' muchu mejur y menos costoso que in tentar control.ul.t una vez que o;c ha dcs:mdo; a.~i como evitar Ia destrucci6n cconomica que t.tl violcncia aarrca es daramcme prefc:rible a Ia dolorosa y dificil recomuuccion de las oconomias devast:adas porIa gucrr.1. Las politk.1s que contrihuyan J Ia prcvenci6n de los confl ictos debcn ser, por canto, Ia priori dad de Ia~ polrricas de dcs:urollo.

    bpero que: este libra sea leido por .1luoridades inrernacionales y nJdonales, y que el tipo de politic~ que aqui ~ recomiendan ~e wme en comideracion. La necesid.1d dt: crcar socicdades inclu.~ivas v evit.u Ia~ profund.ts deigualdadcs horiwmab debe comcnirse en una norma de Ia toma de dc'Cistoncs y Ia elaboracion d~ poliuca.' en socicdadcs muhiemica;.

    Kofi Annan

    10

    PREFACIO

    fsre libra cs d resultado del esfuerw de un equipo global y rcunc algunos de lm plincipale~ hallazgo~ de las investigaciones de CRJSE-Cemrc for Research on Inequality, Human Scx:urity and Echniciry, un ccmro de invcstigadon en desarrollo financiado por el Oepartamemo de Desarrollo lmernadonal de Ia Universidad de Oxford. E~rc rrabajo no hubiera ~ido posible sm su apoyo. CRISE~ una asociaci6n mundial: d Centro deb Universidad de Oxford rrabaja con acadcmicosen Bolivia. Costa de \1.ufil. Ghana, Guatemala. Indonesia, Maktsia, Nigeria y Peru. t\o,

    sentimo~ muy agradecidos por ;us comribuctones y pc:r~pectivas, asi como por l.t!. discusioncs en talleres llcvados a cabo en csos pa/scs que han inAuendado fuertemcnrc t:Sre libro. Queremos mencionar de manera e~pedfica a los jcfcs de equip de lo'

    grupo~ de inveSigaci6n regionales: Adolfo Hgueroa, George Gray Molina, Rmimi Suheru, Riwanto Tinosudarmo y Dwdzi Tsikata. A travcs de rodo cl t rabajo hcmo' disfrurado y agradecernO\ d indcsmayable y enrusiasra apoyo del Dcparramcnto de Dc'>.urollo lnrernacional, cspecialmcme de Barbara Harriss-White, Julia Knight v Rachel Crawford. T;tmhien queremos agmdecer el excelcntc soporce adrninistrativo de CRISE, a rraves de Nicola Shepard y ]o Boyce Jo, que junto a William Danny han contrihuido al uabajo ediroual. 1\:o c~ nL'Cesario decir que los crrores que aun sc pueden encontmr ~on respomabilidad de los autorc~. aunquc muchas de Ia., rcHexioncs provienen de Ia red dt: academicos imernadonales junto a los cu.tlc\ tuvimos cl privilegio de: rrabajar

    Varias partes de csre libro han sido prcsentadapc:cialmcmc agradecidos a las idc:1~ y comemarios que nos hicicronlos panicipance> del primer t.Uicr PEG Net en Kiel. d 28 de abril de 2006; el Seminario de lnvesrigacion Fcon6mica en ISS en La Haya, c:n mar1.0 de 2005; d railer de PIODCP (Political [mrirmions, Development and a Domestic Civil Peace), en Oxford, dell 0 al 12 de novicmbrc de 2005; Ia Confcrencia Nacional en Ciencia Politica en Bergen, Norucga.

  • Of..SICt."IOAOU fiOIIUZO!'oiTAif\ VOO!
  • CAPITULO 1 DESIGUALDADES HORIZONTALES Y CONFUCTOS: UNA INT RODUCC16N Y ALGUNAS HIP6TESIS

    Fram:~ Stnuart

    1. INTROOUCCI6N

    Los conlliuos violentos en pafses multiernicm y mulrirreligioso' consrintyen hoy en dia un problema fUndamental en el mundo; dcsde las ex Yugoslavia )' URSS a lrlanda del t\orte y cl pais Vasco. de Ruanda a Darfur, de lndon~iJ a Fiyi. ~on

    numero~os los conAicros amargos y leralcs que ~e lib ran siguiendo lmcas etniCL\ o rdigiosas. Ademi~ de las lcsiones direct:l!> y de las pcrd.idas de vidas que rc~ultan de estos conAicm~ tanto end campo de batalla como fuera de el,los conAictos violenw., y organizados son tambien una causa importame de Ia pobre-za, a mcnudo llevan .1 Ia regresion econc'lmica, y una gran parrc de Ia m:\s alta incidcncia de tales conAicro' se produce en los parses m:\s pobres del mundo. Por cnde. buscar una forma dt prevenic dichos .:onRietos es de imponancia suprema.

    ~o rodas !.ts sodedades multiernicas o multirreligiosas, sin embargo, son violema.s. En efc:uo, Ia tnmensa mayoria no In son (Fearon & Lailin. 1996). De modo que no ~c trata de que las sociedadcs que denen difcrencias culturales, etnicas,

    religiosa.~ o mcialcs no puedan vi vir padlicamente, como sugicrc Ia idea de que hay un incvirablc "choquc de civilizaciones (Huntington, 1993). La pregunta cs, m:\s bien, por que raz6n lo, conHicros ernicos o rcligiosos esrallan en algunas circunstancias y no en orr. Si podcmos responder esta prcgunta, tal \'C'Z logn:mo~ identilicar forma~ de prevenir rale~ conRiuos y su cnorme cosro en tcrminos de muenes, lesiones r colapso economico y social.

    Este libro cxplora una causa imporunte de tales conllicros: Ia exil.rencia de grandes dcsigualdade~ horizonralcs (DH). M;ts son desigualdades en ccon6mica.~. sociales o poliritarus culrural. entre grupos definidos culturalmenrc. J.:.l libro con~idcra cl papel que rienen las dcsigualdades horizontale~ en Ia generacion

  • ()1 'IU.t >\I 0.\0n HOJUI'.(l'-lAI I'' l.U!I.I I It hi de conAicws, y policicas que ;tyudarfan a reducir las Dll y con dlo las posibilid,tdc~ de que esrallc:n los conlliuo,,

    C.tc capirulo prc..cnta d nurco general de nue~rro cxJmen: Ia siguiemc ..ecdon 1ndicar:i bre.emcme Ia importJncia del problema Jd conlliao emre grupo~ Jc idcntidad, emre y dentro de n.tcionl'lo; Ia cerccra scxcion examin.tla compleja cucsuon lk como C> que se forman}' movili7A'ln los grupo~ que brindan porencialmentc I~ ba.,c.o, pam el conAicro; Ia cuarra sccdon define I.L\ DH con m;is derenimiento y cxplica por que rnon pucdcn llcvar a una violcma 111oviliz:tci6n grupal, recurricndo p.tra dlo .tl ejemplo de Suc.l.ifrit:a; Ia quinta seccion dcs;trmlla (....., hiporesis principale:. acerc;t de Ia relacion entre Ia\ DH y d conAicw que ~cr.in considcrada~ en el resto del l1bro; y Ia secci6n fin.tl cxplcca Ia forma en que cosros indirecros debidos a Ia~ pc:rturbaciones econ6micJ5 y scxiales que produce Ia guerra. Lo.s conRiccos violemm son uno de los mayores ob\r,kulo; para el desarrollo, rcducen el ingreso y Ia.~ inversiones y minan d desarrollo humano, ademas de t

  • llt~l~\ \.I.OA-0_\ Htlltii'O'-'T-\Lb l ( ~l"'iF"I IC:Tt

    en lrl.md.1 Jd Norte y una ~eric de conAictos en Oriente Medio (entre criniJnn~ y musulm.111e.~ en ell ihano, sunnitas y chiitas en lrakllr:in, y judios y musulm.me~ en Pabtina/brad) . uf como los recurrences conHictm emico.o. de Burundi y Ngcri.1. F.\ mj.o., en much as de Ia,., guerras ideologicas, los conAicms tuvieron un~ ha~c ctnicl o r.Kial implicita. Este Fue por ejemplo el caso de Mo1. ndau Jd ~ur y centro combaticron contra ctnias nortenas. o en Guatemala y Pcrt'1. doncle los conllictos fueron preseruados como ideologicos y fueron lidcrado.'> por intck-t.tua.lcs de origen curopeo. pcro Ia in mensa mayorfa de los mucrtos fucron indigcna.o. (C.umartin. 2005; Figueroa & Barron. 2005).

    l~1 base de lo; conHictos en Ia identidad se ha vuelto mucho m.is cxplki dc.o.dc d lin.tl de h1 Guerra Fria, puesto que las d iferencias idcologicas han disminuido )' d \ociali>mo ya no parece ser una alternativa scria, y usarlo como bander.ll.llllp mOll\ 'OS grupa.les son una fuer.za impulsor.1 vital. Para que esro succda, las fromcra\ grupalcs deben esrar ddinidas con rdativa daridad y rener cicrta cominuidJd a lo largo del ticmpo.

    19

  • Ui.S1(..l:,U).,OL$ H(.)ktJ'.D:"'.tAU\ \ CO~FU~ lO

    Las pcrson.lS pueden dividid.lS en grupos de rnuchos rnodos: segunla geografia. el cornportamicniO. ellc:nguajc. las caracteristJcas flsic.u y as por el esulo. Pc:ro es probable que sol.uncme aqucUas divisioncs 4ue lien en o pueden Jdquirir una vigorosa signilicacion sod.t! ---e~10 es, tal significado para sus micmbros y para orros en Ia sociedad, que innuyen en el cornponamiemo y d biencstar de modo significadvo--sean las que confonnen Ia b~ de los conAicros de idenridad. La~ idcnridades

    grupale~ surgen en parte debido a Ia propia pcrccpcion que las personas tienen de ~u pertenc:ncia a, c identidad con. un grupa particular ---esm cs.la auto-perccpci6n de quiencs se hallan dcmro del grupo-. pcro tambien seven dcrenninadas por las percepciones que quienes nrlin fomt tkl gr11po rienen de orroi. Enronces, Ia prcguma unponame es por que y cu:indo es que algw1:1.~ difcrencias l>On percibidas como socialmemc significarivas y orcas no, ramo par los mismos micmbros del grupo como por arras personas.

    Los ;mrrop del Africa precolonial dccimon6nica han subrayado que lcjos de haber una unica tdc:nridad 'tribal". Ia mayoria de los african as

    a~umia y dejaba m(lltiples idenridadcs, dcfiniendose a sl mismo~ en un momcnto como sulxLros de ~"'te jefe, en otro como m1embros de dicho culro. en orro momenta como parte de esre clan, yen orro momenta m:is como un miciado en dscho gremio

    profe~ional (Ranger, 1983. p. 248). La:. criblU modcrnib del Africa central no 2 l-:>ro se pucd~ n:sumir en d cnn>cjo qu< un judlo lc diera su hijo en Pru>i> en 1858: Sitmpre rauerda que errs un orgulloso ciucbdann de Pru.\13. que ticnc d derccho a u igu>lcbd de dcm:hos. Y ja_m.is cl\'tJc., qut." c:m un judlo. Si lo hdccs. sstrnpre h.1b~ orro~ que te rccorda.rin uH nrigc:ncs (Friltew>n

    son tanto supervivencias de un pasado precolonial, como creaciones coloniales de fUncionanos coloniales e mcelectuales africanos (van Binsbergen 1976. cirado en R..1nger. 1983. p. 248). Un ejemplo de clio es Ia distinci6n emre huttiS y rucsis. que ~un algunos historiadores sostienen fue invemada par las potcncias coloniales por comodidad adminisrrativa (Lemarchand, 1994).

    Los in~trumentalisras. en cambio, conciben Ia ernicidad como algo que: se desarrolla urilitariameme yes usada por los grupos y sus jcfes a fin de alcanz.ar mer as poliricas o cconomicas. Cohen. a qui en cir:amos ya. cxplic6 de estc modo el desarrollo de Ia concicncia y las costumbres hausa;l. Del mismo modo, Glazer y Moynihm (1975) so~ruvieron que Ia ernicidad era conservada y mejorada por los grupos inmigrantcs a EE.UU. a fin de promover sus interesesecon6micos. Sc:gUn Ia posrura

    in~rrumenralisra,las invenciones coloniales sirvieron fines adminisrrativos. AUn m:is, lo; simbolos emicos y Ia mejora de las idenridades emicas -algo que a menudo se logra reconfigurando las memorias hist6ricas-son utili1.ados frecuenrementecos;no poderosos mecans~mos con para moviliza.r respaldo para el conAicro. Numeroo;os ejemplos. presenrados en Alexander y orros (2000), asi como por Cohen (I 96?; 1974), Turton (1997) y orros mis, mostraron c6mo es que Ia etnicidad fuc usad;t por las elites polrticas e intelecruales ante> de las guerras yen el transcurso de Ia~ mismas. En las gucrras internacionaJes. esro toma Ia forma de un remozamienro de l.t conciencia nacional. agirando Ia bandera, con refercncias hist6ricas, dcsfiles mililarcs y asf par el csrilo. En las guerras civiles, de lo que se trata es de devar Ia concicnci,t ernica o religiosa. Un cjemplo aqui serian las emisionc~ radiale-~ de los exrremist. hurus antes de Ia masacre de 1994 en Ruanda, en Ia cuallos rursis fUeron pimados repctidas vcces como subhumano;, como raras a ser eliminadas, haciendose asi em de Ia propaganda nazi contra lo~ judios en Ia decada de 1930. Osama Bin Laden apel6 del mismo modo a Ia conciencia musulmana, alirmando que d conAicro que el y sus seguidores librab.m contrJ Occidenre era en esencia una guerra religiosa.

    Una rcrcera pe~~criva, que ttene mucho en comlin con Ia instrumental, es 1.1 de los construcrivistas sociales. FJios ram bien piensan que Ia ernicidad es a menudn usada urilitariamcnre con fines politicos, pc:ro su cnfasis esci en Ia 'conformaci6n' y Ia 'reconfiguraci6n' de las fronteras ernicas que dcbcn rener Iugar para que dicho irutrumemalismo sea posible. Los lideres enfatizan e incluso inveman las diferencia.s para asi con;rruir gnspos sociales. Semejanre consrrucci6n es un proceso en marcha que puede refonar las fronteras grupales exisremes o desarrollar arras nuev;c., siguiendo las morivaciones poliricas y sociales de los lideres responsables por dich.t

    } Cohtn sostitnc: qut 411a identidad hau)oJ y ~u c:xclusividad Ctn ica en lbad:in \On manife.\tacionc.:~. no r01m0 de un knrimiento uib.al' puticul.umcmc v1goroso. como de 1macso tcon6mteos crcado" (Cohen, 1%9. p. 14). ' /Itt Obsm'fr, 41111200 I.

    21

  • [)t,U,l-"-Lh~Ul.,. HC,RI71l' T.U.Jo-'' 1-\l,..ft..lcn

    construcd frontaas de lo.1 grupos ;on acadas y nadtas J cre-Ar iAnderM>n. 1983). l'or ejemplo, Akand~ (2003) an,tlizo como es que en el ulra ctsi imposiblc hacerlo" .

    1' Juynal-Querol (200 I. p. 2) sosuene que en los pm

  • r)t (1\0l-"l..OAI. :-. tf0N:()~1~1b' (;I)I'I.IIICIO

    !loy en Ji.l en P~ni .. tlguicn de ori~cn indigcna puc:Jc dccidir Jefinir-.c a si mi,mo como mmu.o, peru atin no puedc c:legir cvirar rodo cipo de r.lCismo. f-., alii Jonde hny un.1 libercad limicada para camniar de grupo. que i:L' fromcr;L\ de lo~ mismo' son parcicularmeme imporcames en u:rmmos de crc:ar podcrosos J.gravio~ grup.d .. s. y por cncle en rcrminu~ de Ia rnovili?.Kicin politica. Las de otros gnr(X>S ~tnico> porqr.c SU)'.ll. Pero no luchan tin icamemc en rorno d tale~ diferend.tl. Cuando lor hombr~ ri [ ... Jiurh.m a tr.ub tk hn~.u itntrl' rNulta raH rmnprr 'I"~ fo harm m rorno a alguna wntttin jimdmnmra! rtftridr a /11 dt'I d enfash ~ nuestro).

    r~n otrJ.\ palabra,, las dili:renci.~> causas economrc.LI o politicas.

    La mmivacion de lo> parricipantes clar,Jmente consrituye Ia raiz de toda situaW. crcencias o lcalrades cs tal ljuc estan dbpuestos a sacrificar ;us propios inrereses --en casos cxrrcmos su propra vida- a los objeti vos mas amplios Jet grupo. A mcnudo esdn invol ucrado~ gohierno~ dominados por un grupo de identidad parncular. a veces imrigando los ataqucs contra orros grupos y a veces bajo ataque. Asi, Holsri (2000) sostiene que Ia nnyoria de las wt.D Ia violencia esratal fue Ia causa dewnante de recientes conAicro>.

    En los conflictos contcmpor:ineos. Ia~ ;tnliaciones grupalcs sedan a lo l,ugu de diversas lineas. En algunos caso> es Ia afi liacion rdigiosa Ia que proporcion.1 Ia idemidad vinculanrc y caregoriLJdora relevanrc para lo> grupos involucr.ulm (vcansc. por ejcmplo, los conAictos de lrlanda del None, los que >c p roduu::n emre musulmanes c hinduisras en Ia lndi.1, y emrc musulmanes y criqiano~ en Ia> filipina5). En otros casos Ia fi~ura pmmmenre parecc ser racial (por ejemplu en Fiyi). La ernicidaJ cs un factor vinculanre en algunos conAictos (como en Ru;~nda y Sri Lanka), en tanto que en otro~ casos los danl~ son b principal Fuente de .Jfi liacion (como en Somalia). Hay tam bien much;L' distincioncs superpuesta~: en algunas siruacione~. por ejcmplo, son pertincnres tanto las :ililiaciones C:micas difercnd.L' c=conomicas, social~ y pollticas entre grupo~ culruralmcnte ddinidos. lo que aqu llamamos Ia~ de.igualdades horiromalC' multidimemionalcs.

    Debe senalars~ que

  • ( )f"J(,t ~I Tl~llf-'1 IU\Itl7n' ' '\It\\ I ~l,.,.f'U~ l U

    Ia violc:nci.l.ltiSpict.lda pm el f.,tJdo. In que w d.t .:on mir.t.~ a ~uprimir Ia opo~icion Y COII\CfVJr cl podn.

    4. DESIGUALDAOES IIORIZONTAU.S Y MOVILJZACION

    Corno ya set"1alamo;, bs dcsigu.Jidade, horizomab son dc:sigualdades c:nrre grupo' culrur.tlmente ddinido; o enrrc agrupacione' con 1denud.1des c.omparridaJo. Sc lc:, dcnomina hurizom.1les para dbtingtllrl.tl d

  • ()r~~~~' ~-'Ill\ HOtll't' 'AfU\ ()~fJ .U..:-ro

    Dcsigualdadcs horiwmales en Suda&ica

    El t.tso dt Sud.ifrica ilustrJ d p.tpcl de Ia~ Dll, su n.trur.tleza ornniprc~enre y mulridimemion,tl, y dm1o e.. que dlas pueden ser poliriZJda:., lo qu >tglos que prc:tedieron a Ia transicion dtrnotrdtica de 1993.

    Como scrialara un imt-srigador.

    I ,t hi>roria del \i~remJ politico sud.tfricano c>1a dominad.t por d u.o;o del podtr politico p.1r.1 .Jic.unar )' mantcncr fines sodoecon6micm. Una minoria hlan~~ hcredo docho podcr en 1910 y durJntc las ~iguienres ocho decad.u lo u...O para .trr.11gar~ politiMt"" Burundt

    Alutcnua

    EjJ:rc;iu:../rolida Af~;.a,ni~r.in. ~ud.ln, fi:n lrtand. del R,....,.u N(_)rrc. P-uruuL.

    Rttuf605: llatvnlcs 1c-Kmplro Suc!Jflt(~ ldmd.l

    dd(';onc

    Agva4C"'JUta Uc;onob do-' Non..

    Cl1upu

    V.n

  • f)r-~IGllA..liHIIU IIONI /ONI \1 r.\ \ tUNIIIl'hl

    Lucgo de unas infruuuosas prorest.~ p.Kifica,, l.t> agud.l\ DH en rod.~ bs dimcnsiones llcvaron a l.t rebel ion .trnuda ,, p.mirde I 'J76, b queM: prulong6 htesis r.:rcrid~ a !.1 relacion cnrre IJS [)JI y los conOiCJOS violemos. a e~ploranc end reModel libro.

    En cl present de confl iuos violcnros e.>l:llllo> rcfiriendonos a una >eri.t violenci;t polirica. esro c,, 1.! que ticne objctivo' fUndamental mente poliricos. Por cndc, no no:. c\lamos rdirkndo a 1.1 nimin~J.d.td, Ia violencia dome>rica o epi.>odios rebtivamcntc menorcs de violend.r polirka, de los cuak-s hJ)' ramos. Los conHicros politicos vioknro:. pucden ser de disri mo ripo. Una distindon imporr;mre cs Ia que sc rraza entre los conflictos en lo1 cuale:. Ia repreto de que l.1s pcrccpciones rcfleJ.Ht en lineas generale> Ia realid.1d ohservad.1. Esrc supuesro vicnc siendo invcstigadu con encucst.ts de pcrccpdon en siere paiscs. El c.1pirulo I 0 presenta los rcsulr;ldm de dos de csra.1 encucsras -en Ghana )' Nigeri.J. . que no\ permiten rener cicrra pcrcepcion de Ia relation exhtcnre emr.- );~, DH observa&1\ y las percibrda:..

    Nul'stra primml hipotms I'S q111' 1'1 conjluro I'S nuis probabll' alii dondl' ht~y DH politicm o l'cnn!imicas stgnificatitJits, o aml1111.

    ' lamo las d

  • f>P1U.t "'f llf\ltt \ 1101(1/0.-.. IAI I \ \' t'C)NI- I .IC Ill

    'iOCiO estan incluidos pohricamcnte, pucsto que su; posibb lidercs sc bcnefician con \u inclusion politica ~ Ia masa del pueblo puede comeguir ~icna s'uisfaccion con clio r con Ia posibilidad de: que e:.ta indusaon le confier.t benefidos econ6micos. bto describe Ia \ituacion en .'iudifric,t despucs del .tpanhcid.

    ~ Nurura lt'Tt"era lrtpousu es qur Lt it!ra dr ruonocimunto _r t't]Uidttd cultuml, o las D/1 m rl rsratus m!tuml, rrsu!ttzrri prot'octtdora, I'll tan/ II qtu /11 im fusion rultuml nyutlnrd ,, sustt't/far Ia pnz. Un rambio 01 walquiu dirucron podria rrmltar pnrticulnrmmu relt't'llllfe ptzm Iff motiltzocion grupal.

    A mcdida que: avarrzamm con nuesrra inve.srigacion de las DH, se hi10 evideme que adcmas de 1.15 DH poliricas y ;ocioccon6mic.u, lo~ acomccimiemos y los valorc:~ culwrale, cran sumamcntt: rclcvames para los a!:r.J,ios grupal~. f:Sros mcluycn cue.qion~ rales como Ia polirica linguasrica )' educ,uiva, d reconocimiento d.tdo a grupos particul.trc.> en tcrminos de Ia~ fiesta~ nacionalcs. l.1s actitudes formalcs e informale.,cn Ia v~rimcma y otro' tipo~ de componamiento grupal. Aunquc n-sulia dificil mcd1r las 'I)H culrurales', eli as si ton forman un componeme del cuadro global que Brown y Langer exploran con mayor detcnimiemo end capiiUio 3.

    1. Nuesrm cuttrttl hiporrru t'I qtu 1,1 mot~tlizrroon poliuca, .Y posiblr-mmu tnmbiill los conjlictos. urnn mds probt~blrs dol/tl~ u ampft'a11 las DH.

    E.; a.~imismo probable que: Ia dirctci6n del cambio en las DH \Ca relcv.tnrc para los desenlaoes poliricm, pue;to a Ia situ.aci6n empeor.a sto probablcmentc sera una provoc.tci6n, y si mcjora rc,ult.u.i apadguador .

    . U

    r-

    [)cstgu~M.;u.lcs hotuont;tll'\ \ confli"-w\: .1lguna.' IHpt)u.-,,~ J '-llf\\Jn

    Ademis de estas hip6tesh form.tlcs, tambien intport.l d comexto en el cual se d:Ul las OH. Las condiciones polfticas (entre dla.1 Ia naturalez.t dd Estado), de demografia cultur.tl y c:wnomicas en particular, afectanla probabtlidad de que sc de un conflieto, en walquier est.tdo dado de dcsiguald.1des horiLOnt~lcs.

    5.1. Condiciones poHticas La naturakn del Esrado cs de fundamental imponancia para esrablecer tanlo l:.t causa como Ia duracion del conAicto. Diver)(!\ aspntos son relevame:s:

    L1 estructu ra del Estado y dd poder. Algunos sisrem;t~ politicos escin al tame nrc concem

  • Dl\ll;l!AIIl!!Ut-~ lttlM170N""I .. I t'\ \' f:f)NII ft"I'H

    con una dura rcprc~lt1n al cnconrrar opo~i~ion, lo tual.t \U ve-;. t.1l w1 provoqut mas reaccionts violcnras.

    5.2. Demografia culrural

    La forr.tlez.l potendal de rodo movian.cnro violenw dependc ~imi~mo de Ia ubicacion geografic.1 y del camano relatim de Ia pob!Jcion en distinros grupos. Alii donde escos se encucmr,m concentrados gcogr:ilicamcnu: (o lo csdn en gran pane). d scpar.ttismo o cl irredenrismo a mcnudo ~ convic:rren en unJ meta pollnc-a. l'cro e~ta no cs un.t posibilidad cuando los miembros de cadJ grupo esr;in disper~o~ por todo el pals. En ~~re t'altimo c.1so, los grupos puc:d~n mo"ilizarw a fin de consr:-guir el ~ontrol dell~tado o mcjorar sus derecho~ pollricos y cwnomiws, ~in amhi ". La presen..:ia de unos cuamos grupos grande.~ pod.n

  • r)f"l;l(.' \I"IAJJ(S HCUU/1''' \L-S \(..,_),II

    Much.ts invesng.tdone.s cconometrict'r rcltvante. l'or cjernplo, d conl!kto cnrre none)' sur en el Sud.ln fue ta.nro un ejemplo de dcsigualdad horizon raJ (donde el sur c:stab.t en fuerre des,cntaja) como de fUcncs ganatKi.IS pri,-ad.I.S que pcrpctuaban Ia lucha (Keen. 1994), }' si bten"" ba sostcnido plaLL~iblemcnre que Ia pobrna rnedioambiental fuc un clcm~nro significarivo en cl conflicto de Ru:uada (Andre & J>lancau, 1996), las destgu.tldades hori10nrales tambien fueron daramenre imporranrcs.

    36

    r [)oagwlJ.-Jc honLA\f1flh ~- cvntli.::~ - --.,un.l~ hlflOCC ' '\c~.Jn

    Se siguc asi que no dcbieramo~ ~sperar u11.1 rclacion ,\lltolllatica entre las 011 )' d conflicw. no solo porquc unos fa~tores pankul.ues imervicnen para hacerquecsre seJ mas

    0 mcnos probable ;ino ram bien debido a 9ue hay mros factorc' que podri,,n

    descncadenar los conAictO~ :Uii dondc las dt::.igu

  • Ot,H,l \1 0\0t.\ ttOILIIIl!
  • I )t-\l(,f. '.\1 1"'1\llL"' IIORI/.A, ... l~ .. LU ' ( .. U ..... lh IU

    ferozmcnre Ia narurab.t Jc IJ.s imurucion~ poliricas .tpropi.uJ.\S para IJ~ sockwdes divit!id.t~ (~hapno, I ')99; Ejohnwalt. 200 I) fllos propustcron una \.:ric de di~rinro~ modelo~ que bu~aban reducir b promincnct,t de l.ts idenridade.l t:mtcas (Dorl~ 2004). reorgani74r las imritulion.-.. polin~as en rorno .1 ell.b CltJph.m, I 977) o brind.tr inccnrivo~ p.tra efccn1.1r c.unpJiias decrorales a rrav6 de Ia.~ dtvisiones crniws. con miras a modcrar el dominio poll rico (Horowitz. I 99 I).

    F.so' han sido imporr.tnrcs dcharc~ poliriws. Lllos ayudamn a idenrific.u los valorc.-s d,t,e~ -y ;t mcnuJo wnAtuivm- involucrado~ en d di.~no de I,,, insuruciones poliricas en socit-Jades con profunda.s divisioncs ernica.s. Pero una limiracion significariva de dicho~ dch;ues es que sc con,cnrra.ron exdusivamcnte en l.t cucsri6n de como rcprcscnrar rncjor un.1 ciudaclania l'stablccida aunquc dividida; por CJc:mplo. si rc:prcsentar J grupos crnicos, a rcgiones o a Cllldall1no; individuales. l.n consecuencia, se ha ignorado l'n general Ia cucsrion de como c.\ que Ia ciud.td.mta mism.t ~ ronsmuit/.1. F.,ra lllrima pn.-gunra exige que reAexionemo~ en mmo a 1.1 posibllidad de que en Ia' soctcd:tdes divididas. Ia cuesric\n de quicn forma parte del dm1os-l.t ciudadania- podria ~er una cutslion de inrcres v morivo de disputa.~.

    En csrc capitulo mctoncmrrarc de modo prelimtnaren e>tc .t>unto cormovertido e imporrame. Lo hare cnnsidcrando Ia cuesrion dd acceso a l.1 ciudadJnia y los derechos t)IIC: ella muaJmeme conlleva de pane quiencs no son Cllldadanm en socied.tde~ divididas. En Ja sctcion 2.2 deli nod

  • I )(:\ll.l ,\~UAill .\ IIClJU/.0 ... l
  • I h'\U:C 'II\IU.\ lloKIIH'IAI.f_,' Hl~fiJt 1u

    Sol.m1enre los Esrado~ m.i\ aurorit.trim pri,an de Ia ciudad.mi.J .1 pcf\on.ts llue no cuentan con orra na.:ionalidad. to dc;pues de haberlos .:onwrudo pri111ero en ciudadanos de

  • 1 lr .. t!F"-11'111 \ unauo .. t.uu \ co:-.f_JC..;Jo

    Ello> puedcn no rcner prueba; de \u Iugar de nacimiento o evi(lcncia\ dcluempo (jUt: han re.,idido en dl:.st.tdo dd cuallk"otJn tonvcrtirse en ciudadanll\. 1:11 csrr1ctb .1 l.a c.tpacidad de acceder a Ia ciudadania a qUicnes no pencnccian a Ia crnia Uoppkc. 2005). Sin embargo, Ia exclusion en CMOS pafsts no ~"!>t:i necesariamcme irnpub.td,t por cl tipo de interes politico de conn pla.w dcbido al jul.'gO de Ia polirica domc~uca descrito arriba. Ella mas bien se debe a un.l5 ideas la rgamentc mantcnidas de Ia autodeterminacion nacional o a cosrumbrc~ de un chauvinismo nacional. 'l:1lc., pal"'' 11p1camenre hacen que sea igualmcnte diflcil para los miembros de todo; lo~ dcm.h gruposemicos o nacionales accedcr a IJ ciud,tdania. Por cieno que d hedto de tJUC C\t~ upo de exclusion no sea d mismo que aquclla 1mpulsada por los objcrivo~ politicos de cono plazo. 0 que ~ca aplicablc unicamenre a grupos emicos desfavun:c.:idos. no h.1cc que sus efecros roulren mis placenreros par.l aquellos =identes a qUiencs se les niega Ia ciudadania.

    Un \himo grupo de obmkulos es ccon6mico. La exclusion de Ia tiudad.tnfJ pucde no solo debilirar cl podcr polf!ico de lo; no ciudadanos sino que pucdc t.unbicn dcbilitar su poder de negociacil'ln ccon6mico En una economia capitalisra lo1 no ciudadanos (especial mente aqucllos sin cMalll~ ulicial) pueden conformar una fucrta

    47

  • J)t-~lGl'.o\J U."lt-' llilltlftJ.'-11-\1 H V (()~fli'IO

    !aboral tlril y malc:,lble, porque lcs estj nc~;ad.t Ia proreccion del s.ll.Hio nunimo, los sindicatos y los 1 rihunales. Muchos obscrvadores han sosrcnido qut hoy en dia lo.s inmigranre.s ilc:g.1b conform an una pane grandee imporranre (Hmquc usualmenre no rc:conocidJ) de Ia fuerza !aboral de: mndlo\ paises, enrrc dlo\ f.tpon, Malasia. Tailandia, l:.s1ados llmdos y el Reino Un1do (Castlt>s & Milli6n cui rural del grupo excluido. segun Ia cuaJ csre de algun modo no csr;i capacirado o es poco id6neo para rencr una parricipacion plt11:1. Dichas justilicaciones incluyen - peru no qucdan lirniradas-a las prerensioncs de superioridad inrdcctual o a una subordinaci6n divinamcnre prcscrira aJ grupo dominantc. Podriamos considerarorras formas de una ciudadania de segunda dalribuidos rienc un gran impacro \Ohn: d hiencsrar de per-.on~ y grupos. Si bien lo 4ue {> del poder del gobicmo )' Ia d1R'Ccion de Ia

  • llt.\lc,c .,aaunr: .. IKt41/u...,~ .... .__,' f"Cl"fi.k:.lu

    pU rcideme~ no ciudadanm ~on tapacc~ Je pc:rturhar el orJen soci:1l y Ia p.lt (y l.,.to frecuememcntc: parece ~er asi, porI,., r.azones arriba citadas), hay enconcc:~ podcrosa~ r;rLOnes para fomemar su panicipacion en inMicuciones polit icas discii,tda> pMa que ofrezcan una ahcrnativa a l.t violcnda. b vcrJad que las bases sobre bs cu;lb pod ria incluirseles en el proce.o politico gcner.m cuestiones dificiles y contencimas ;Jcc:rca de Ia membresia que aun no he cnml'nudo a examinar. Pero el mc:jor pun to de panida para Ia exploracion de dicha~ lUCstionl-,; es prcgunrando si alguno~ de lo., que no son ciudadanos podrian tcner un jtmo dcrc:cho a .er induidos como ciudadanos plenos.

    6. PRJNCI!'IOS JUSTOS J>ARA El. ACCFSO A LA CIUDADANIA

    H.tsta aqui he sugerido que en mucho~ pai.">C, Ia disrribucion de Ia ciudad.111i.t c:~ una Jctividad almmencc puliri1~1d,1, l'Mtc:chameme ligada a Ia compctencia tnrrc grupo~ ctnicos; que ella conficre el comml ~obre bienes claws sociales, economicm )' poliriro;, q11t' tiencn un fi.acne impacw sohrc I,,, po;ibiltJ..tdes viralcs individu.tlcs y d bicnc>t.u grupal; y que aqucllos a quicne!l les prc:ocupan las desigualdades hori7onaab hari,tn baen en mirar de cerca como cs que 'e dimibuyc: Ia ciudadania.

    Fn csta ~c:cci6n deseo conccnrr.trme exdmivameme en Ia >ituadon de .1qudlos que no cuenran con Ia ciudadania. Examinare, de modo rudimemario,lo~ principios para Ia incorporacion de los no ciudad~nos. Si algunJ.S pricticas acruales son percibidas correctamemc como mjmt~. (Cui! seria una b~e superior con l.t cual cstJ.blecer quienes de los no ciud.1danos debieran ser incluidos en d dnno;? P.ua

    rc~ponder a esta pregunta esbontre rrcs re~puestas distimas, cada un;a de cll~s m.b indusivaquc Ia orra: el principio de Ia raltJ dnma membresia altcrnativa; cl prindpto de 1.1 mcmbresfa informal; )' cl pri tlcipio de Ia inclusion democdtiCl.

    so

    Jlllll""""'

    ~o-ciud.ki.tncMo~ (.onllkcu \ ~othHCDt._,,.' n J, ~ .. '"ud.-.hn.a I t...,i-1:wt'

    6.1. La falta de una membresla poHtica altcmativa La primera y menos indusiva b,t,c del dcre que d prindpio de Ia carcncia de una memhrcsia polfdca alternativa. Estc sugierc que Ia membrcsfa formal (ciudadania) dchcria e>tar a disposicion de aquellos residences del El.t:tdo que ya lo son de facto o que, .1iguiendo a Baubock (1997, p. 21 0), son micmbros 'sociales'.

    )I

  • Jlt \ILI 1>\I11AlL\ llt)~l/ll,_,nll ~' ~ 01\1-1 It TO

    (Como j'> qut l.l r~"ona (o d grupo) ha conrribuido a Ia '>OCicd.rd. AI igu.tl que In~ ciud:rdanos, lo> .rp.ilridas rr.lb.rJ.IIl, pagan impucMos e induw cmprl'nden '>crvili o~ mihrares en form~ que re>ulran indislinguibles de los mocmhro'> formalc-. En ~~undo Iugar. uno pod ria .ugumemar que lo, .rparrida.. ramhicn al igual que In, uudadanos. ricnen l.tzos podtro'o' y duradcro> con d pais m d que residen. Pueden 1encr sus hijm en e1 colegio ln~.1l, ~tar acrivanwn1c involucrado~ en Ia socicdad civol y h.rber esrablecido una.s dcmas rttb sociab de .rmigos y a>enlidos.l.t~ implicaciones de eHe principiu son m;is radicales que las del anrcrior. Es1e principio de pcrrencncia informal rcqucriria del ,tcccso a Ia ciud.tdmia para 1odo aqud que ~ca un miembro de Ia sociedad, ,e.m o no .tparridao.. o por presuncion de hecho si ~u rc,idencia c> leg;tl a ojos del f.51ado. En c.unbio d principio no m~

  • Ot '''"' '\I 11,.'1' U(I.J/'(l''"U-' \' '-U'fl..IC_t\l

    lo que podriamos quererdL-corcu.lndo d~'Cribimo~ a alguno~ gnopo> comuc:xduido, onJmtameme d miembros de su estatus de memhresb plena.

    Segun algunos observadorcs, Ia idea de Ia persona pre-porradora de dercdw~ 'oci.tlcs. que conforma Ia base del i n1er~s y respno equirarivos de Ia.~ :.ocicdades ocddcntaJcs, no riene raiccs en rnuclus ~oci edades postcolonia les (Adcjumobi, 200 l ; Kal>eer. 2002). Se sosricne que cl desarrollo de Ia ciudadania en rnuchos paises dd Africa se vio configur.1do pm d 1nreres que los coloniLadorcs tenian en con:.ervar las rradicionales jcrarquias de c~wm y de gnopo para facili1ar un dominio cficicnte (Kabeer. 2002. pp. 17-18). F., mas, dichas sockdades jarnas expc:rimcnwon d ripo de tramformaciones socialc~ y cconomica.:. que ayudaron a des.urollar Ia conccprualizacion, en lo; paises occidental, de Ia persona como algo indcpc:ndieme de Ia identidad grupal. En con~cucnciJ, en muchos paises en via~ de de~arrollo, l.t pertencncia al grupo resuh6 ~cr mutho m;b signillcariva que Ia ciudatbnia pam dctcrmin:u e1 acceso a los dcrecho~. los privilcgios y Ia seguridad. Ello pod ria implicar que, dado que alguno~ pafscs carcccn de Ia idea rn isrna de un imcrc~ y rc.~pcw cquitalivos por el individuo en ramo individuo, es posiblc que no haya ninguna

    S4

    ,......-

    N"H.IUd.td . .UM'K. o..untl~h- \ fun,llh.l..: u:~ ~ u : u.d.k.L iJ. ' Clb'"'ft'

    base princtpi5ta sobre Ia cual cx1cndc:r Ia tiuJad.moJ .1 cienos grupos c:xcluiJch. G mh. incluso si Ia dudadaniJ htcra cx1cnclida, c:.to no !levari a a un 1rato cquiwivu

    Un segundo problema es simplemc:mc que J.un si Ia exclusion de Ia ciud.td,mi result. uno debe rambicn enfrenrar Ia realu.lo~d de que clio a mcnudo sirvc: a podcrmos tntc:rc:;cs. Defi nir al dtmo; de una form.1 u otra pod ria c distima:. de aquelLt~ asoctac.l.~> con cnfremar las dc,igualdades horiwnralc~ mtr( ciudadanos. l.a mayoria de Ia:. dcsigualdadcs horizontales sirvcn a los mJerc;es de los grupo> dominamc~ y por ende los intentos de reducirla~ o eliminarlas probable mente scran impugn ados. La preguma real podria scr si es acaso posible convencer a los grupos dominame> de que lo; agravio:. generados porIa ~xclusion arbi~raria de Ia ciudadania \levan al conflteto y ~ Ia inesrabilidad, lo que no est:i en su~ inrcrescs. En esre capitulo he inremado

    mo~trar por que raz6n el acceso a Ia Ctudadania es un rema de an:ilisi~ imporrante para aquellos a quienes les prcocupan I.~> d~'Sigualdades enue grupos. p~ro si ~c: va a hacer frente a las desigualdades gcnerada1 porIa ciudadania, tal vez sea ne.:l-.ario comar con una comprension empiriw dctali:!JJ de las rdaciones cxisremes cnrrc el conAicto y Ia exclusion de Ia mi5ma.

    55

  • r--

    CwiTuLO 3 OESIGUALDADES EN EL ESTATUS CULl URAl: UNA DIMENSI6N IMPORTANTE DE LA -"l0YiliZACJ6!'l GRUPAL

    Arnim Langrr y Graham K. Brown

    ). I NTRODUCCION

    Los rccienres en Ia India, tipilicado por su cCichrc e~tribillo dclrobo de un tdolo> (Brass, 1997; 2003). Esm no quiere decir que Br~s no accptc Ia imporuncia que Ia culrura ricne para Ia vida de las personas y su sentido de ~i mbmo~. pcro comidcra lJUC su papel en los conAictos es principalmenre instrumcnral.

  • Dt"l.t AI n"uh lfOttl.r.o.:.;t,o,l fS' ( '()NH rcro

    Dd otro !ado renemos l.t hiporesis de Samud Hunrin1;ron del .. chuque de civilizaciones, que enf.u iza la.s diferencia.s culrurab como Ia raiz dd conAicw en b era posterior a b Guerra Fria: La fueme fundamental del confl icto en esre nuevo mundo no ,era principa.lrneme ideologic! u cconomica. Lt~ grandesdivisiones emre Ia humanidad y b fuenre dominanre de los conAictos ser:in cultu rales .. (Hunringron, 1993. p. 2.2).

    En el present

  • Jh-... !Gl o\lJHUl~ ~lctRI ."'H"-~T' " l-\ \ - n ... tl WlH

    c.'rnka~ m:i\ llagr:~nrcs. que induyo Ia prohihici6n de nombrc~ y ~.tr;Ktere' chinm duranre lo~ pnmcrm alios del regimen. wu cl Nue,o Orden lo~ chino~ fiteron considcrado' un 'ono' conraminanre c1ue .unen:t1.1b.t Ia Jutcnticidad del proyecro nacionalisra (lbkindo, 1975; Hery .J.\imila y dar forma a sus lc.lcs )' politicas, incomcic:nrementc adopra. instiructonJIJZ.l c impone las catcgorias, pr,kucas y valores de Ia cultura dominanre. AJ hanre:.w discrimina contra otr& cuhuras y (r('a un dima inhospito par.1 su llorecimiemo o induso para su ;upcrvivencb (Parekh. 2004, p. 20 J ).

    HastJ ahor.1 hcmo~ examinado lo~ dl'tmtm grados en los que di\rinro~ f.qados han dado preccdencia a grupos culturall~ particulares, explicira o implicirameme. En cambio orrm E~tados implemcmaron divcrsas medidas y pracricl) con miras a ao;egurarquc: lo, di,rimos grupos culrur.lles dc:nrro de un pais tengan igu.tl visihilidad y reconocimiemo. Un ejemplo de tal neutralidad c. " ser ir;ual de accc~ihb en cualquicra de las tres lenguas oficialcs; los parl.tmCil!

  • tlt ... h~'-\lll\rlh IIC-a.l/'.(,.,1 \II - \ I (l:-.it-1 ..,,,

    1:1 concepto de de;~gu;t.ldad en cl c~taru' l'ultural, r.t l como h,t 'ido dilucid.tdo .tqul, se enlUCntra d.tramcncc vin,ul.tdo con las idea!> dd mulri,ulruralismo v b diKrimn~ion cuhural pero t.unbien dilic:re de df.t~ de modo imponJrHc:. II proyccto Minorias en Riesgo define que lo., grupm >on denigradm o supnnudos por d btado. I )c: esre modo Ia presencia de Ia discrimmacion y Ia cxclu.,ion cultural indica Ia cxhtcncia de un.ts sevcras desigualdadc.s en cl c>t:m.t~ cui t ural. pero 1.t ausenci,t de dicha discri mi nacion } cxdusion no neccariamenre signilica que no hayan diferencias rc-.tle~ o percibtda' en Ia ''tsibilidad. d reconocimienro y d esratu.s publicus entre disunros grupos y pdcricas cult males.

    E.s impon.mrc adamr como o qu~ las de~igualdades en el estatus culrur.U sc rebcionan con ot ras form.~ de desigwldad horiromaJ. Es probahle que la.1 primer:~!>~ encuemren a~od.tdas con b exclusion y l,t desiguaiJad en Ia.~ dimensionel economic:~> y poliricas (veut!>t" los capitulos 8 ,. 1.!). W,, misma. DH poll rica. ysocioeconomiu.1 usu,tlmenre surgm all donde hay difnenciJ.'> culturab en rorno a las cuab se forman los grupos. f...sro en .~i mismo nn implk.t ncccsariamcme una de.,igualdad en el c~ratu' cui rural. Sin embargo, Ia presencia de una forma de dcsiguald.td .1 mmuc.lo IJevJ .t orras. Ast. l.ts dotgu.tld,tdes pol lucas mu1.has vece~ son respon..,tblc:o por l.t' c.le~tgu.tldade~ en cl estarm cultural, y esras uhinu1 pueden a su vcz ser una fuemc de deoigu.tldades pollcicas o sodoeconomica.. Un buen ejemplo an una serial para el motln (llorowirz. 200 I, p. 289). Sin embargo. ad esramos mh intere~dos en el ~r.uus relanvo otorgado a Ia~ disnma' rdigiones por el Estado. ;1\i como sus actos, loo wales put-denser pc:rdhidos por los miembros de lu~ di.!.timos wupos rdigioso' como un indicio del estatu~ cultural de su grupo denrro de dicha socicdad

    En Ia~ soticd.1des mulrirreligiosas, los dbtinros nivclcs de rt'l.onocimicnto o resrricciones formalcs a Ia observancia de las pr;lcticas rcligiosas son a menudo una fucnre imporrame de de,tgualdad en cl estatus cultural. l...t rclaci6n del F.stado con 1.1 religion van.1 emre un.t ausenctJ roral de rclatt6n oficta.l (secularismo complcto) y una coral inrcgracion (rcocrada). Esra.1 ulrim:1s invierten legitimidad politica en un marco religioso especifico, incorporando asi una jerarquia vigoros.1 y form.1l de reconocimicmo rdigiow. Las desigualdades en cl esratu> cultural en Ia dimemion religiosa pucdcn a.\umir formas extrcmas incluso alii donde los estados no Mill teocriticos. lo que incluye Ia prohibicion total de religiones paniculares. como los Judios y mu~ulman~ cn Ia F~paria cristiana del sigto XV, ode los protest.unc:s hugonotes en Ia Franda del XVI. M:is recienremente, Egipto prohibio Ia reconstruccion de las iglesi~ cristi;~nas coptas en Ia db:ad.t de 1990.

    En =~ menos oaremos, lo~ Esrado~ pnvilegian una religion por encima de orr~ adopt.indola como l.t 'religion nacional', lo que conlleva distimos grados de privilegio. En Malasia. por cjcmplo. ellslam est.\ designado como Ia rdigion olicial. pcro Ia commuci6n garanti7.a Ia libcrtad de culto a quienes no son musulmanes. Ello no ob~tante, Ia conversion de musulmancs por parte de quicncs no lo ~n ~ti prohibida )' si bien no es tecnicameme ilcgal. el reconocimiento oficial de 1.1 apostasta ~ enla pr:ictiu virrua.lmcme impostble para los ex musulmanes.lndonc,ia

    ~ un imere~ante cj~mplo de un Esrado expliciramente no ~ecular. que ~in embargo rcconocio oficialmeme a wdas l.!l. grandes religiones dd pais bajo Ia ideologia narional de PancmiLt (R.tmage, I 9?S).

    Las pr.itticas informales pueden asimismo privikgiar a cicrt.!l. religioncs por cncima de otras, incluso cuando d Esr.tdo e.1 oficialmentc neutr.ll y secular. Por ejemplo, cuando el emonces presideme marlileno Felix Houphouet-Botgny ordeno Ia conmucci6n de una basilica carolica en Yama.wkro en l.t dC:cada de I 980 a un costo de aproximadamente \CiscicntOS miliones de doJarcs, que afirmaba haber p:tgac.Jo cl mismo, mucho~ musulmancs perctbicron esto como un elMO indicio de Ia supremada crisriana en Costa de .Marfil (Langer, 2005). En cftcto. en los Estados oficialmente scculares a mcnudo hay a pesar de rodo un sesgo hacia Ia religion mayorit.tria. l:J crisrianismo conscrva una po~icion publica privilegiada en Ia mayoria de lm pai>es secularcs de Europa occidental, por ejcmplo a rrav6 de Ia designacion de I~ fiestas publicas e incluso de los nombres de pila permitidos. Ademas, cl que muchos parridos politicos en los esrados st:culares de todo el mundo rengan una aliliad6n

    63

  • (ll,f.Lr.\:Jo\h .. > 1-hM"I):'\I>\l .f.\ \ (O ... Hh U

    )' cosmovisit)n rdig1osa p.lrricular podri.ttcnerwmo R'\tdtJdo 1.1 :1lu:nacion Jc otro' grupm religiosos. en caso thcho, paruJo, gan.1ran eJ podcr. LJ .bo de Jo, demi'>u~u,t' uisti.tnos (( '()U) tlt." t\lemania, o a'ociath a. como end del Parudo Republica no )' Ia derL'-ha uisriana Jc btados Un1dos.

    3.2. Reconocimiento de Ia lengua y dercchos lingiilsticos

    Pri\ilegiar una o una' cuamas lenguas por mcim.t de las dema\ a menudo indica d dominio de aquello.s en algunos paiscs como Siria, que limit,, d uso del kurdo. Una situaci6n mas comun C\ Ia dctem1inali6n de una lengua 'n.tcional' u 'ofictal'. Designar a un unico idioma como Ia lcngua nacion.u puedc scr considcrado una forma de prom over una idemidad 'nacion.11' cohes1onad;1 }'global, pero tambicn podria gener.tr el rc:\entimlento de los h.tblantes de lcnguas minoritarias que: raJ vc1 se siem;ln simbolic.Jmentc c:xcluidos. adcm:i~ de posiblemente enconrra~e t;lmbien materi.Umentc desavenrajados.

    Los conflictos que giran en rorno a Ia ltngua han sido notables c:n Ia India. donde un elt.'vado ni,eJ de di,ersidad lingiii,rica cre6 problema\ de estarus dc,de Ia indepcndenda. En efecro, en el pcriodo posterior J I activistas del

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    .,....-

    (4'tg\-~l.u,ln end C'\Ullb~uhu:.al 1 l:l.ngc..r & Ulo:ll',:n

    roro Unido p.tra 1.1 S.Jvaguardia de Ia E.scritura y Ia Lengua Manipurie:. (MEELAL. 0 Mm~i ron f)ar Lom11Sinlo11 Apu11ba Lup) prendic:ron fuego a Ia bibliotcca central del cstado, dewuyendo unos 150 000 libros en protesm por d uso de Ia escrirura bengali en sulcngua (l.:.grete-au, 2006).

    3.3. El reconocimiento de pricticas etnoculrurales Otro aspccro importance de Ia desigualdad en el estatm cui rural e> cl reconocimienro del Emdo a las pricticas culrurales de los dislinro~ flU [lOS y cl res pal do que les prcsta. .En csre scnrido son tam bien imponamcs las practicas y ooscumbr~ etnoculturales empleadas en cl funcionamicnro del Esrado mi.>mo, que expresan Ia 'ide:ttidad' de dicha insriwci6n. Como ya vimos, las pnlcticas oficialcs pueden privilegiar al grupo cultural domin,lntc incluso cuando los estados son bastanrc tolerame> de Ia diversidad cultural, por ejemplo mediame Ia incorporacion de su idenridad y prkticas culruralcs a los rituales y slmbolo5 del gobierno. 1as fienas nacionales, las convendones con que se asignan los nombrcs (a edificios, calles y asi por el estilo), y Ia promulgaci6n de 'heroes' e historias nacionalc:~. Lo~ inremm efecmados por el Est ado p.ua permanecer 'neutral' puedcn a veces sa imerpretados de modo negarivo por los grupos minorirarios, que asocian Ia 'ncurralidad' con el dominio de facro de Ia culrura mayorirariJ. Puede decirsc que esre fue el caso cuando d gobierno frances imroduJO una prohibici6n al uso de todo simbolo rcligio-;o evidcnte en las escuclas y orros espacios publico~, lo cual fue malinrerpretado por los musulmancs como un ataque a Ia.\ panoletas i~l:imic.t.S y no como un movtmiento secular mas am plio. La falta de rcconocimiento de disrincas pr:icticas culturales por parte del E!.tado pucde alimenrar pr.icttcas informale~ mas amplias d.:ntro d~ Ia oociedad como un rodo; un ejemplo de ello cs Ia prc~i6n asimilacionista cjcrcida en Guatemala concra el u.>O de una vesrimema indigena por p.me de las escolues nativas. Aqui evidcmememe resulra parricularmcnre import.mtc Ia formacion de csrereoripo~ por parre de los medios, pue.\lo que ello desempena un papcl vital en Ia '(re)produccion de Ia idenudad cultural del Esrado. En Cosra de Marlil, por ejcmplo. algunos diarios estrcchameme vinculado con el partido gobernante tcnian y aun tienen un papel dccisivo para Ia promoci6n del conccpro de l'Ivoiritl, que fue introducido aproximadamcme alrededor de lob clecciones presidenciales de 1995, para dasificar a los resideme~ de esre pais en marfileftos 'autcmico~ y 'extranjeros' (I anger, 2005). Aunquc esto tuvo implicandas politicas inmediatas para las deccioncs prc>idenciales, t.ambien alimcm6 proccsos mas amplios de formaci6n de esrereotipos wlturales.

    Cn f.1uor imporrante en muchos paiscs concier~e altrato dado a Ia> pr.ictiC3.1 y los principios del derC'-ho consuctu sistemas legales plurales

    6S

  • ()1 ,H,lt ... 1 t"JAfll' IIURIZt)N JAII \ \' t:ONfll(.'fO

    pu~'tlen no solo incremc::nt.u cl .Kceso de esra.s minori.l, al sisrema legal, ~ino ramhtcn ~u scnsacon gloh.1l de ser valorad.t> cultural mente. l:.n Guau:mal:t, por cjcmplo, d Acucrdo sohn: idenudad y dcrechos de lm pueblos imligen,ts de 1996 a/irma que el

    d~-.conocimicmo por parte dd merpo k'gi~larim nacintul. de l.l.'o norma.s trndJcionak-. que regulan Ia vida cnmunal indigcna. asi wmo Ia f.ura de acceso que Ia poblad6n nativa riene .rlos recursos del sistem.r de justid.t nacional provoc.tron Ia ncgaciO se oripulc: sobre el hombro (a Ia us.tnza rhaJ) ant'S que \Obre b C:Jbcla (Ia co~tumbre mhya) ... I E."a' meJidas] conrribuyeron Cparatistas mabyo.

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    ,........

    llc."gualdJdc.~t"n d ot.ann: cultut-11/(.;a_,,f.:.cr I\ HrcJWn

    Tabla 3.1. Dimensioncs de: Ia desigualdad por estarus cuh:ural

    RcconocimietHo t..lc I;~ rcligit;n y La ob~~r\'ancia

    rdi~iosa

    Rclogi6n o6ci.tle idcntidad rd~ dd W>do

    Apoyo del Estodo a diitin wrdi&ionie< rdig~o'"" R.onocimknco de: kria-dos y r...mdad.s rdt5""""

    Lcngua y reconocimicnto de Ia lengua

    Unsua.s ofic:i.1!u y ou:io-nales PoHticas hacia I oducoci6n V ~r:in relevanres en todo~ lo> conro.tos. Adem as, es importantc seiialar que en algunos casos, Ia prohibici6n de cosrumbres c:ulturalcs p:miculares, Ia implcmentdci6n de reMricciones a algunas de las pr:kricas culturales grupales. o incluso eltrato espec1.ll dado a c1ertos grupos culturales en Ia c:.\fera legal, pueden ser comidcrado~ indicatives de que d &tado promueve Ia igualdad en cl estatus cultural, ames que Ia desigualdad de esrarus y Ia exclusion. Son e1emplos de ello Ia prohibici6n de que lao marchas de Orange pascn por cierros dtstriros cat61icos en Wanda dd None, las restricciones impuoras al uso del ingl6 en Quebec, o Ia dispens.1 del mode ca~cos para morociclisras dada a los sijcs tn divcrM>s paises occidemalc:s. Ademis de enttnder Ia.~ desigualdades en d csr:nus cultural, tal como las practica el E~tado, los m~ios umbien dcsempeiian un papel viral en Ia rcpresenraci6n -y en cicrta medida en Ia configuraci6n- de las desigualdadcs en d esraws cultural, con lo cual :.on tambien un :irea importante de investigaci6n y polirica. 'Jooo esto mdiGtla necesidad de que tsta> cucstiones scan analizadas} estudiadas en contexto~ espt.-cificos a paises.

    67

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    4. ANSIFOAO DE ESTATUS: VTNCULANDO LAS DESIGUALDAOES EN EL ESTATUS CUUURAL, LAS MOVTLIZACIONES Y LOS CONFLICTOS

    Hay dos f(nmas en las cualcs las desigu:tldadcs en el e"t.ttus cullllr.tl conslituyen una fuenre imponame de movilizaciones grupalt'S y de conllictos p01enci.Umeme v10lcmo". !:n primer Iugar, e>t~s dcsigualdades a menudo "on en si mtsmas una c.tu>.t imporramc de: los agravios grupak'S. Sid E.srado lc .trribuyc: un estarus inferior a CICrtas idcntidadc:o. culturab, ~ci m.L\ probable que los rnicmbros de esros gmpos culwrale-. sc sientan alienados del Est,tdn y que se movilicen siguiendo linea.s culturalcs, p.ua J\i mcjorJr dicho csratus de 'u g.rupo. Por ejernplo, en Costa de Marfil, dondc 1.1 exclusion poliuca y Ia privacion socioccon6mtca rdanva de los grupos emicos nonerios hacron ambos f.'lcwres csencialcs que comribuyeron aJ >urgunienw de un violemo conllicto,la.s percepdoncs dd no reconodmiemo y dd estatU> ~undano de Ia rdigi6nmusulman.t. sobrc todo cn las rc~giones nonefias (entre ell:l.'> laconsrru y e1 c.~tallido sub~iguiente de Ia

    r~bcli6n (Langer, 200'l). En segunJo lug.tr, las desigualdadc" en el est.uus cultural pueden dc.sempcnar

    un papd tmporrame en .tfect.tr Ia promincncia polirica de orras dimcnsioncs de Ia d~sigualdad horiwmal, ran to polirica como sociocwnomica. Si hien cs cicno que las ~cveras desigu.udade~ hori.wmales socio~~onomica\ pueden pcr~istir du rnnre decadas sm despcn.tr respuota.s violcm.L\ (capitulo -l), lo~ c.tmbios en 1~ de5igualdades en cl eMarus cultural, aJ igual que lo; cambio.; en Ia.~ DH politicas, pueden scr imporwnres p.tr.t Ia poliw.aci6n de las de5igualdades )' pueden ser un f.mor en Ia movilizacion de un grupo .1 (,, violencia. Alii donde las desigualdades socioecon6mic3.'> se combman con politic.." c.statales que p.trcccn privilegiar un conjw1t0 de norma.> v pr.icticas cuhurales por encima de otro, ~ hace ma.' probable Ia movilizaci6n grupal a lo largo de lineas culwrales. La presencia ~imulranca de uno15 ,cveras dcsigualdade> en e1 e>t.1nas r:ultural all.tJn de desigualdadc.\ horiwnl

  • llr_..n.tAIUAilUUUMIIOI'o'TAit~\ t.O'Ir1Jl1t1

    5. CoNCLUSIONES

    En elite capitulo hemm sostenido que d Ira to difcrcncial y d reconocimiemo de las pracuw.~ y nurm.c. culturales de Jo, distimos grupm por pane del f.....1ado comtiruyen dcsigualdadcs en el e>tatm culrur.tl. Aunque no cuc.,rionamos Ia importanlia de lo~ agrav1o> politicos y scxiocconomico> como impulsorcs de: Ia movili1.aci6n grupal violent a. hemo' \oqenido que lm agravios grupalc:.> rambtcn pucdcn surgir a partir del rraro o estatus inferior ororgado a Ia> dbrimas pdcticas culruralc.> de lo> grupo> por parre del hrado. So'ruvimm adem,h las trcs dimcnsiones de dcsigualdad hori1onral -socioeconomica, pollric.1 y estatus culrural- van en Ia m~ma dircccion o son conshtemcs.

    A lin de evaluar el grrarus culrural de 1111 pats, clasificarnos d mto diferencial en politicas y practica.s -form,tb, informalcs y simb- m rres elementos: religion > observancta religtnsa; idiomas y reconocimicmo de lenguas; y reconocimicmo de pnlcrica> ernocuhuralcs.

    l..Js dcsiguJ.Idades en el etarus cultural son particul.umcnte proclives a Ia movilttacion grupal, y potcncialmcnre violcnras, dcbido al vinculo inherence con Ia identid,Jd grupal. F~to puI mcnudu recurrc a Ia~ cucsdones del esmrus cultural precis.unente por c1 grado en que elias imporr.m a Ia poblacion rn:is amplia. f.... mh probable que los grupos se d1stancicn del F.\t.tdo y rc.-curran .1las movilizacion~s. que pucden volver>c violcmas. alii domlc sienrcn que su idcnridad no ra:ib

  • 'JL,I -liJh.()f..-,lltml/...l)"'--,.A-1.,\ 'U'f)-.-1,1

    Un pH:rrequi>ito .t fi n de considcrJr Ia pcristcncia Jc Lts OH end tiempo. e~ que podamo~ idemificar mart.l\ mismas fromeras sc manriencn prominenres con el pa~o delliempo. Con d paso del tiempo. los matrimonios imcrgrupab,la migration y lm camhtos culturalt>s y rdigiosos pueden significar que las frontcras grupales previas se haccn imignificantcs o se disuclvcn por completo, en ramo que nucvos grupos promincnre~ pueclen emcrger. Asi, en Ia lngbrcrra del siglo \\!Ia diferencia cmre anglosajones y normandos era tmponante poliricamcme. pero para el siglo XXl las difcrcnci.ts entre estos g upos han poco me nos que desaparecido, surgkndo en cambio nuevas fronrera.s grupab prominenrcs (por ejemplo emrc musulmJncs y cristianos, o grupm definidos scgtin \U esrarus migratorio y su pal~ de origen).

    La cuorion de las DH persistemcs ~ol.1.r11eme :.urge dondc las fronteras grupales tambien pcrsisu:n a lo largo del riempo, csto es, dondc los mismos grupos conunuan :.iendo una carcgoria prominent c. Aqui podrfa haber cierra cirtularidad, pucsro que Ia pcrsistencia de Ia prominencia de una idcnridad pod ria ser en sf mbma parcial mente dcpendiente de Ia pcrsiqenci,t de dcsigualdades honzonrales, dado que unas DH fuerrcs rienden a e~timular Ia conciencia del grupo. Dcbier.tmos scrialar que por csra r:uon 1.~ investigaciones t'mpiriC~J> tcnderan a sobrecstimar Ia persistentia de

    Ia~ Oil, pucs nose explorar:in los casos en los cualc~ l.ts fronreras grupales de jan de :.er importances o desap.trecen por completn, y son cstos en lo'> que cs probable que

    1~ OH no pcrsistan. Pcro inclu~o ~i lo, cjemplo, que encomremo~ de persistcncia exagcran Ia cuesrion para Ia socit>rlad como un todo, ellos son impuHanres en i mismos. tal veL cspcci.1lmenre dchido a orros casas en los cuab se da un.1 nivelacion.

    Las DH wn muludimcnsionales, como ya ~c: indico en el capillllo I, y ~u~ pnndpales dimcnsioncs son cc:onomtc,J:., socialc,, poliricas y culwrales, con numerosos elementos dcnrro de cada c.ucgorfa. CMJ multidimcnsionalidad es de particular imponaneta para comprendcr Ia persbtt:ncia, porque la.s intcraccioncs entre las dimcnsione~ y los elementOS derHrO de cl la.s Son un f:tuor imporrante tjlll determina Ia privacion pcrsistcnte. asi como el pcf\isrenrc de5cmpeno por encima dd promedio. Por ejcmplo, Ia falra de acceso a Ia edu..:acion (una desigualdad soci01l) puede llevar .t bajos ingresos (una dcsigualdad economica). y ambos puedcn :,cr responsables -y a Ia ve-t ;er cau,ado~- porIa falra de poder politico. M.h adelanrc dcsarrollaremos mucho mas estas inreracctOt1cs causales.

    L1 desigu.1ldad verrical, o entre rod.t\ las per'>Onas o unidades domesricas de una sociedad, es ram bien algo ttptumenu: pcr..isreme (csto es, a menudo se observa un coeficiente Gini conrinuamente elcvado), no ohsranre lo cual las persona.~ o familias pucdcn cnrrar y $alirde Ia pobrcra, en lo que se ha definido como 'rotacion'.

    72

    l)o-it:HJIJ.td~ h.lrilonub: n ; tf1 .10do Ia f'IC"''f!n~u )' d t.Jmhto '-c\\JU 6t l..mp::cf

    Porcjemplo, un esrudio realizado en Chin.t halloque d 50% de Ia pobrt"ta en cuatro provincias rurales era tr .tn>iroria Ualan & R.wallion, 2000). En Uganda. un csrudio de las rcgiones central y ou.idemal mostro que cl24'~" de todas las un idade~ domesw . .a.\ dejo Ia pobrct.l en un lo~pso de 25 aiws (Krishna & otros, 2006). en ramo que [e]n Ia maroria de los p f."lmili~ cviraran Ia privacion relativa aJ menm ocasionalmcntc (Duncan & otro.. 1993, p. 215).

    Con Ia.~ DH perstsrenres, en cambto, las pei"\\nas y familias se cncuemran 'arr.1padas' en mayor mcdida debido a Ia.> dilicultades que h.ty para desplazar$C cmre los grupos, de modo ral que una proporcion mas alta de familias en lo grupos dcs:tvemajados mamiene Jicha condtcion a lo largo del riempo. F..sto qucda confirmado por una serie de estudios. Por cjcmplo, Duncan y orros (I 993), Devine y ocros {1992) y Corcoran (1995) hallaron una pcr..isrencia mucho maror de l01 pobrt'7.a entre Ia poblaci6n negra de EE.UU. que en otros grupos de dkhu pais. Sc enconrro una diferenciadon similar seglin Ia r.tu.en un escudio rural de Appalachia (Biec & Bill in~. 1996). Adem.U, las evidencias de Kenia y Madagasca.r mucsrran que las persona.~ en lugares agroccologicos rcmotos y pobres mue

  • II llt ,.H,lL\1 0.'\Ui_ \ HORJ/UNr.o\LJ-_\ \ t ONfLICh l m.is av;lnt.ada de lo que l!l>la con respecto a otras dcsiguald.1de~. Sm emb.ugo. podemos en principio extender d cnfoquc: par.1 abarcar otra.\ desigu.tld.tde,. )' Ia \cccion c:mpinca contiene informacion sohrc una gama mucho m;b ampli.1 de llcsigualdades, Jdem,b del ingreso.

    Para comcm.ar. considcrarcmo~ Ia~ causa~ inmediaras de Ia dc~iguaload e

  • Dt.Htoli.\U1.UU' HORl/O..,ro\lt., l U)l'Htt u

    Ia 'cantidad' del c1pit.U social de un grupo, conracms que d grupo tienc como un todo, de ),r .. alidad de dicho obre dicho capiral, pueden explicar Ia presencia de Ia mequidad entre las persona~ o grupos en un memento d.tdo. Pero esro no ex plica que sucede a lo largo dd riempo. En el o;egundo periodo r+ I. 1;15 DH 'er.in:

    (,"'(!"""" )r11111 SSH1tll) Ill = . I 'u~/ ~ ... , ~-,I /tch~.~.' ..... p~;~.~~ ~ .s;~:.'~~) (4.5)

    !'or lo umto,los cam bios en l.t, DH (HI, /H) dcpcndcn de lascamhiances tasas rcl.Jtiva\ de acumul.ttion de ctd.rupo de capit;tl. as[ como lm cambiann:> re10rnos de cada uno deellos. E.o. asi posiblt que los grupos '>C nivelen con el riempo, porejemplo acumulando md5 que los grupo' m~i cualcs cau~an entoncL.., los retorno~ no cquirauvos de lm orros tipo' de capital que acabamos de seiialar. Si bien e cierto que b asimeui.t en c.1p1tal social se d.t entre personas -los pobres tienden .1 rcner mas conractos con Otr como agntpaciones de persona' cuyas rnn'klcciones > conracros en ~u imerior wn signincati,.Jmenre rna yore~ que sus tramacciones fucra Je el (Bbu, 1977). l:.stc cfecto fue modelado por Lundberg

    77

  • 0t~ hMn.omalo: expltondo U pe:r$aSI enci;~. y d omhio I '\tcw:ut & Langer

    despidan. Los negros, en consecuencia, podrian decidir que no vale Ia pen a trabajar duran1eme porque es probable que se les dcspida de todos modos, sin que importc su erica !aboral individual. Si Ia genre negra se adecua a un esrereotipo negativo, su uato relativ;unenre pobre podria parecer estar jusrificado y no scr identificado como algo debido a Ia discriminaci6n, y sin embargo esra t'urima subyace a Ia situaci6n mediante esrercotipos negativos.

    e v c; c: "' c:

  • D.\U,liAIIlAnu unR.t~.ONTAl r' v co"' uc,.u

    los gobicrnos cicnden a tom.tr mcdidas para corrcgir Ia~ DH socioeconomica~. de modo tal que se puede t>pcrar que con el pa!.o se vayan haciendo m~nos marcada>.

    Volviendo a Ia~ variable, d.aves que dererminan Ia dm:ccion en Ia cuall.u DH ccon6micas se movcran con d tiempo:

    h ,.,/h, (o Ia acumui.Kaon relativa de capiral humJno): es probable que csto diverja en las cr:apas tempranas de desarrollo debado a la.s disrimas rasas de :acumulaci6n, pero podri.m converger a medid,t que los grupos mas ricos alcanzan alros nivcb de educacion. Podrian ramhien convcrger debido a !.1 polirica gubernamemal de propagar Ia eduatcion ampliamenre.

    /',.. lp, (o Ia acumulacicin rdativa de capital financaero): csto podria divergir debido a las dislintas rasas de ahorro. Los planes t:rt'diticios dirigido, pod ria lograr cierta convergcncaa.

    s,,. ,js, (o Ia acurnulacion reba iva de capital social): esro podri;l con verger con Ia mayor movilidad que se da con el desarrollo a medic.la que los conractos sc incrememan, aunquc con cl tiempo los grupos mas ricos podrian cambicn rncjorar sus comactm (por ejemplo, inrernacionalmcntc).

    H.,.,lH, (o los cambia~ en lo) reromos relarivo~ del capital humano); a.qui nos enconrramos en territorio algo incierto. Los resultados dependcran de qu~ suceda con otro> upos de capital y con Ia discrimmacion.

    f'.,.,/Pt (o los camh1os en los rerornos rel ativo~ del capital financiero): e~ probable que las difcrcncias enuc los grupos ricos y pobres persiMan por las ra.zones arriba stiialadas. pcro resulra diflcil clccir si con el riempo c~rJ.\ difcrencias crecer:in o disminuirin. ElstJpuesto ncodasico normal de retorno\ dc:creciemes de Ia acumulacaon de capiral, pod ria ve~c cornpensado con I,J\ indivisibilidades y lo~ cam bios tccnologicos. Aqu1 Ia polirica gubernamemal nucvamenre e' porcntialmcme relevante, puesro que ella puede brindar :c.istenci:l recnologica fO, lo cual a su VC1. inhibe d mccani\mo reductor de Ia rtt de un ,;,,em politico dicu (Mandai. ~Oo.i. p. 58). l...a.i limi(.J(-iunc:'\ infomu~ dt la rotigr.xi6n in fur nul 1ndurcn los uquisiw)-lingUisti(Q6.}' firunci('fO'-.

    81

  • lll~k.LAI .IM.IJI' IHlRI1;()!'o.JAI "~ Y CO:O..fU, lo' grupos como tales 'on atecrado> por J. 1 y 5. La., orras razon~-s I I y 2) \e aplic10 .1 per..ona.s a.si como a grupos, )' cxplic.Jn l.t desiguald.td consume en :.odedade, homogene:~s. Los trabajos previos sobrc l,l\ pcr:.i:.renres desigua.ldade, grup,1les se C.:tHICcntraron en disrinros clemcnro; de c:stos cinco facrorcs Por ejemplo, d unport.lfltc mbajo de Tilly ( 199!!) d.tMfico las causas de Ia perststencia en discriminacion, acaparamienco y cmulacicin. l.,t dblrimin.Kion c:mi induida explkiramcme en Ia raton 4 arriba. El acaparamic:nto y Cuter (2005) modd.uun las asimerrias en el capital social (rauin 3) wmo Ia.\ responsables de Ia persisrenrc: do:sigualdad grupal. Fn gmeral, cl sistema poliriw no ha ,ido incluido expliciramentc en 1.1 m.t;ona de los examenes. y sin embargo los gobiernos riencn un papeltmponanrc en profundizar o reducir las dcsiguald.tdcs ccon6micas por lo cual es import;tntc que esro ram bien int;rcsc si,remarkamemo: al .tnali\is.

    82

    .,..--

    ll.:-si~ualcbJ~.~ h.;lllmm.tll \: r'I'IK.mdo l..1 llt.'fii,I01t.la v d utnhto I \ttw.nl & t .Jn ..... , Tornados en cOn Junto. e-ros facto res !levan a Ia posibtlidad de cm:ulos V~rruo>OS

    r ,iciosos, donde aquello> grupos que: pMten de una posicion privi]cgiad.l pue .tlto> para los aaivos y mamener a.i sm privilegios, en ramo que quienes comicn~m en un.t posicion desfavorecida cacn en un drculo vicioso o rrampa de Ia pobrcta (vce tambien Galer & Zcira, 1993). ~to en t;encr-al es lo mismo que Ia acumulaci6n y desacumulaci6n analiz.1d.1s por Brown y orros (2005), al explicar I,, pcr>isrentc desigualdad racial en EI~.UU. ~by aqui un paralclo con el dcsempeiiu pai,, en cl cual el mal desempciio economicn perjudic.1 a1 desarrollo y Ia acumulacion human a, y el deficieme desarrollo humane pcrjudica el crecimiemo econ6mico (vca>e Ranis y otros, 2000).

    Lo que esros cinco tacroR"' no nos dicen cs que causa Ia desiguald;td micial que pone en man.ha l.ts imcracciones que: llcvao a !a persisrencia de Ia> I)H. Como scilala Figueroa. una causa tmponanrc: y omnipr~nte entre los p.1iSl'S en vias de desarrollo es un choquc fi.mdacional que puede ser rdorzado por difcrc:ncias climiricas (Figueroa y orros, 1996). Gte dpicamenrc es un aconrecimtenro politico masivo, por cjemplo una inva,icin ~cguida por el colonialismo. En cl ca>o de lrlanda del Norte, por ejemplo, las dc,iguald.1dcs inicialcs entre proresramcs y carolicos fueron cl resulrado de una cxpcricnda colonial, a lo cualsiguiola division de lrlandHn una rcpt'tblica independicnrc yen lrbnd.1 dd Norte, controlada por cl Rei no Unido; en el caso de los E.sradm Unido,, cl rrafi..:o de esclavos brind6 el choque fundacional, y tn el de Ghana, Ia. dcsi~uald.tdcs entre norte y sur se derivan de Ia poliriw colonial que fa,orecia a cierros gtupo\ cuucos y rcgiones. pero rambicn reAcja diferem.ias en eldima.

    3. V1Dl:.NCIAS PARA LA (>[RSISTENCIA y EL CAMBIO DE LAS DH

    Una invesrigaci6n complcta de pm que raz6n las DH persisrcn dcbcri.1 c:xplorar aqudlas que no son dur.ldcr,\s, a~i como aquellas que silo son. Es por dlo que en csta s

  • I )nu.tiAIIJJc cstc choque, una\ gr.mdcs desigualdade~ en cl tngrcso yen mucho~ 01ros mJic;1dOR-s socioeconomi..os h.tn persistido, no oh\lante Ia expansion y uc:na nivd.tcion en el acceso .1 Ia edtl('aci6n. En ),, soticdad hetcrogenea del Peru -- ~-

    - -'

    l'ol~tl-- -

    Pnm:uia

    Fucn(e: Flguo(~. !t_IO(,

    --+- flbnc..us M(,l.tO\ .___. IAdioi

    -. .... -

    Secundario1 TCcnic.1

    Nivd cducauvo

    3.2. DesiguaJdades none-sur en Ghana

    Um\'c.'r\iur iJ

    AI igual que orrm p.1fscs del Africa Occidental (como Cosra de Marfil, Togo, Benin y Nigeria), Chana enfrema una scvcra brccha de desarrollo entre norre y sur. Las desiguald.tdes r

  • ( h\IGliA.U)t\0"-" HORIZ.C)NTAI.t-' \ CONi'l ll ro

    dccircunsmncias y politicas (vease, enrrc orros, Rimmer, 1992; Songsore, 2003; Roe & Schneider. 1992; Dickson, 1975). Podemos idcnriflc.1r rres facrorcs imporrantcs en esre senrido: en primer Iugar, Ia conccmracion geogdnca en las rcgiones SUIOn culrivos de subsisrencia.

    Una scgunda razon se reliere a Ia polirica colonial brit:inica de inverrir mas en aqucllas regiones donde habia recursos explotables disponibles como oro. diamanres, mangancso, lcfta y cacao, o bien se les podia producir con facilidad, y descle do nde se les podia cxporrar a men or precio. En consccuencia, adem as de b region administrativa nuclear (Gran Accra), fueron las regiones ricas en oro (Ashanri y Occidental) }'en cacao (Oriental, Central y Ashanri) las que recibieron cl grueso de las invcrsiones de capital efecruadas durance Ia epoca colonial.

    Un tercer factor sc reliere a los patroncs de inversion y las pollricas economicas postcolonialcs. Los programas de ajuste estrucrural (PAE) implememados desde mcdiados de Ia dccada de 1980. en especial, reforzaron las dcsigualdades regionales de desarrollo existences. Especillcamemc, en comonancia con los objetivos de los PAE de resraurar el crecimicnro econ6mico por media de Ia rchahiliraci6n de Ia econornia cxponadora de Ghana, Ia mayoria de los fondos exrernos fueron a Ia region de Gran Accra -Ia 'region industrial nuclear' de Ghana-, asi como a las indusrrias del cacao, Ia lelia y minerales en las regiones Occidental, Orienral. Ashami y Brong Ahafo (Songsore, 2003). Las rcgiones septentrionales de Ghana, en cambio, se beneliciaron muy poco con esrc renovado csrimulo econornico. Sin embargo, par.t reverrir Ia exclusion econ6mica de las regiones del norre, consecurivos regimenes posrcoloniales emprendieton proyecros especilicos en elias, lo que incluyo Ia ampliaci6n de Ia red nacional de electricidad, Ia rehabilitaci6n de los caminos gue unen norre y sur, y un mayor gasro en educacion.

    Sin embargo, los daros de largo plazo (tabla 4.2) mucstran Ia persisrencia de las diferencias emre none y sur. En efecro, desde 1931 las dcsigualdadcs han empeorado en varios aspecms. Por ejemplo, una comparacion de las rasas de morrandad de infuntesy nilios en las regioncs seprenrrional y meridional en 1931 y 1993 mostraron el empeoramiento de las diferencias enrre norte y sur en terminos relativos. En los rerrirorios septentrionales de Ia emonces Costa del Oro, dichas rasas estuvieron considerablemcnre m:is cerca del promedio nacional de lo que lo est:in enla misma zona hoy. en Ghana COJl!Cmporanea.

    86

    ,....-

    DcsitttLaldad~ horiumtalc.:s: cxp!it.'o1Jlt.IO la pc:rsillt~n(ia y d cuubao I S(c..-wan & 1..-mgcr

    Tabla 4.2. Tasas de mortalidad de infanres y ninos para 1931 y 1993 en Ghana

    Provincia Oriental, Colonia

    Provincia Ccncral, Co\Qnia

    Provincia Occldent2l, Colonia

    A.shanrl

    Ttrritorios del norre

    J>romcdio naciunal

    Ghana. 1993 I R Niitos

    1,09 J.o7

    0,88 0,77

    1,20 0,74

    0,85 0,70

    0,98 0,60

    0,74 0,84

    1.73 2,44

    1,29 1,98

    \,59 1,47

    1,00 l,OO

    Fuc:mc~ Lu cifta.s deb Costa del Oro provicncn dd ccnso de 1931. Las ta.u.~ de monalu.hul de 1?993 han sido exuaida) dd lnforrne de Dcs:urollo Hum.mn de Ghana de 19?7. 1) L'l ta:.a de mon.alidad in(~mll de J

  • lh.'>lt;l,"IU>\ItH HUAI/.t),,-'1 '\ ( ("fl ~~ -- tl

    Tabla 4.3. DcsiguaJdades sociocconornicas por regionc,; en Ghana en Ia dccada de 1990

    lncJdOio 10% m.i!. alto de lo que era en 1947. cuando el ralio era de 52% (Brown y otros, 2005, p. 13). En termino; .lhsolutos. Ia brecha del ingreso real entre negro' y blancos sc duplic6 de US$1 0 3H6 a US$20 -169 en el pcriodo 1917-2001.

    . l Aai''O' Patrimonio finrut~ieros ncto ncto!'i

    QUJnril 133 GO? 40 465 .supcriur

    Segundo qu1n"l 6~99b 13.\62 superior

    Qumtil 50 350 6800 iJHemu:dio

    Sq;undo qu10td 39~(1H 3599 inferior

    Quiotil mfcriur 110()6 ?400

    Ac1ivu) Pauimonio financieros

    m:to nelo~

    43806 7448

    29 851 2699

    14902 800

    61179 l49

    2400 100

    t l Okulu~ h.a."UJt.I!S. m ~h:.tpirn &: Kt:nn-Ounc. :DOS. r 1""'1

    Rario n~.;gro~/bJancos1 :

    I i\cti\'OS

    Patnmunio financtc:ros' nc:to n~tus . ~

    0,33 0,18

    0.45 0.20

    0.30 0.12

    0.17 0.07

    0.14 0,01

    Las dcsigualdades r,Kiales c:>nla riqucza yen los .1crivo~ linancicros son ,u'111 rna\ pronunciad.IS que 1.1\ d~.,igualdadt~ en los ingresos famihare. Segt'm Shapiro y Kcn(V Drane (2005). en I ')')9 el ratio de Ia brecha de Ia riqueu entre negros y blanws era de 0,1. rmiendo Ia ripia unidad domeslica blanca una mediana del valor glohal

    89

  • Df:J,I(Ot1AII)>\11U lt0RI7..0N IA.lt'i \ ( ONfiiCIO

    ncto de casi U!>S 81 4 'iO )' lm ncgros una mcdi.ln.l de apena~ USS 8000. !.1 r.uio de Ia brecha de .u.uvos linancicrm entre blancos y negros era anduw menor: 0,09. Si bien en 1999 Ia mediana dt.'lo~ .tcrivos linancieros nctos de l.ts familia~ blanca; cr.a de US$ 33 '500, las familias negra~ poscian apenas USS 3000 en promedio. bta ;cvcrJ disparidad en l.t riquc-La cxhlia incluso emrc negros y blancos en Ia caregoria del 20Qo de ingre Ia tabla 4.4). Aunque Ia F111r Housing An (Ley de Vi,iendaJusta) de 1968 prohihe l,1 discrimin.1don en Ia vivienda,los ncgros dcnen m,is probabilidadcs de vi vir en barrios segregado\ que los a.~i:iticm .uncricano~ n los Iatinos (Massey & Demon. 1993).

    Otro F..cmr importante que .tflxta el ingrc;o racial y bs

  • o._\!t;tiAI hAUlS HORI;te)NT ... It .\ \- ~-H"'I-'LI(TO

    Miller ( 1983) hallo para Ia decada de 19'"'0 qu~ Ia dewemaJa inou.tl de los ctrt)loco~ cmJX'Oro aun 111.11> a lo largo de 1.1~ gencradone~. La tasa de dc,empleo en esre grupo pcrmanecic\ consiMenremcntc m:h .ol ta qut' Ia de los proresramc, duranre Ia mnyor pane del siglo XX.

    Los car61icm c~ruvieron combrenremenrc ~ubrcpresemado~ en los nivck~ m.ts alto~ de Ia admmimacion ptiblic.o. En 1927. cl6% de las amoridades era carolico kn tanto que ~u p

  • 0..~1C;., \IIl;\:.J._~ HOII7f1'-lf-'lti \. ("C')NFUt l(.

    el empleo, al mi(mu tiempo que en 1997 rcptc!.enrahan I ,2 veccs c1 tamai10 de !.1 poblacion), y una proporcion mas alta de wu'>licos ~igue con el sub"do otorgado a las per:.onas de m.U bajos ingn:so~. Es m.i~. un eswdio gubernamental de 2004 sobre Ia desigualdaJ en el cuidado de Ia ~alud y Ia seguridad social, hallo que lo, carolkos ~e enconrraban significathamentc en desvenraja en cada una de las .ire;tl reportadas (McWhirter, 2004).

    3.5. Desigualdades entre malayos y chinos en Malasia

    En ,\lal.t.~la los bumipuum (un termjno gencrico para lo~ grupos indgenas), que dan cuema de Ia mayor parte de ~u poblaci6n, sc enconrraban en scvera dewemaja econ61llica con respccro a los chinos al momento de Ia independendJ, en I 957. lo que llevc:i a una ~ituacic:in porcncialmeme explosiva. J>ero Ia acci6n alirmaliva sistem.itiw dilUmino csra tension exitosamcnre. Un toral de 62% de lo~ malayos son bumiputera. 30Wo son chino~ y 8% indios. AI momento de Ia indcpendencia, las Dl I econc:imita.~ y wciales foworccian sisrcm:iricamentc .1los chinos; porejemplo, el ingre~o familiar de los bumiputera era mcnos de Ia mitad del de los chinos: ellos ~:bban cuema de apcnas el 801o de los proft:)ion.lles regisrrado~. meno~ del 2o,i> de Ia propicd;ad de capiral en Ia bolsa de valorcs, y sus tasas de m.u ricula en IJ educaci6n eran menorcs en cada nivel (veasc Ia ligura 4.4).

    g .::

    1

    hgura 4.1. E'oluci6n de distintos indkadores de desigualdad hori1ontal en Malasia, 1970-1990

    ... . ,,..., --------------------~

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    r"''NM..k' Fuc:n~c: 0.!0'\ ~c- Cain U.....,.rh \nv,.._~ . d;~huro~~ it in pmpia.

    94

    M.nr""i" rnm.n.

    M.-.,~ -....

    I?~!)

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    0t"'lglLIIt.ladcs homun!,,J. . .,: cxplic..ndo I" pcol)tt'O< a \' f'l t..1rUb10 I Sctw;~n & L..nger

    La desventaja economica de Ia comunidad malaya se origino en el periodo colonial. Bajo cl dominio colonial brirjnico, el merodo de prodtKcion fue Org.IOIL.tdo en dos tipm distinros y paralelo~. el cu.1l se complcmenrc:i con una division ctnica de la mano de obra (vca~c Faaland & uuos, 2003; Abraham, 1997; Brown, 1997). Para mediados del siglo XX los chino) dominaban Ia economia, en ranro que Ia numericamcnte dominante comunidad malaya sc enconrraba en severn dL>s\Cnta)a econ6mica. Por ejemplo, en 1967 cl ingreso mcdio en cermino) absolmo~ cr-.1 de aproximadamcme US$ 3000 para los no malayos, en comparacion con alrcdedor de USS 1750 para quieno ~i lo eran (Faaland & otrm, 2003, p. 62).

    Luego de que las clccciones generales de mayo de 1969 degeneraran en una scric de moline~ ernicos, cl gobierno idcntilic6 las scvcras desigualdades economica, c:Kisrenres entre malayos y chinos como Ia causa fundamental del estallido de Ia v10lencia crnica, e inrrodu1o una politica redisrributiva ambiciosa y global, Ia Nueva Politica Econ6mica (NI'l:.). La NPE buscAba crear las condicionessocioecon6mic~ para Ia unidad nacional reduciendo Ia pobre1a y las disparidadcs econ6n1ica~ interemicas, en especial cmre los indigenas bumipurcra (IUndamenralmeme malayos. especial mente en Malasia peninsular) v quienes nolo eran (principal mente mala)os chinos e indaos) Uomo, 1990, p. 469).

    Puedc decirse que la N PEes elm:h C>.itoso program a de rcducci6n de Ia desigu:tldad ctnica que haya )ido implcmemado por un pais en vias de desarrollo. E.nrre Ia., politicas que ~iguieron eo;ruvtcron las cuotas, mctas y acciones afirmativas con resp codzadas en bolsa. Las polldcas fucron indudablememe exirosas. Lt proporci6n de profesionales en los bumipurera subio de 8 a 54%; In,

    esrudiant~ bumiputera en Ia educaci6n terciaria subieron de 43 a 54% del tot nivelcs educarivos. La participaci6n en 1.1 propiedad de acciones corporJtivas subio de 1,5% en 1969 a 20,6% en 1995 ( Vl~ l.:t figura 4.4 arriba). Aunquc los bumipurera conservaron su posicion domin de l.1 dcsigualdad boriz.onral en Malasia (cl indicc de disparidad cbino-malayo y cl in dice de desigualdad horiz.onral), a lo largo dd periodo transcurrido d~e Ia contc:pci6n de Ia NEP en 1970 (Brown, 200).1)'. Amba.~ medidas mue~rran considerable, reduccioncs en Ia desigualdad.

    \ l.a. pnm~n. mc:tfiJa (S UO.l rolliO simple" ~in pnnJerar dd ingrr..a f'amili,u rromcdiochino .a nu.byo. V 1.1 scgund.L grup3lcs con rc!lpcno .1 la rntdi.t nacional . Ambas mt:dic.:iout) fueron indcx.1da\ a 1970.

    95

  • 0F hijos de personas mas cducadas tienden elias mismas a hacerse mas educadas-, las difercncias grupales en la.1 n ormas y aspiraciones tambien parccen habcr tenido un papel importance. A mcnudo sc sosticnc que los asiatico-americanos. en particular, tienen altas aspiracioncs y expectativas de exito ccon6mico para sus hijos (Sakamoto & Xic, 2006, p. 56). En consecucncia , ... los padres asiatico-amcricanos tienen mayores cxpcctacivas de que sus hijos consigan una mejor educaci6n que los padres de otros grupo~ raciales (p. 58). Se dice que a fin de alcanzar las metas que los padres y clio~ mismos se lijaron, los niflos asi;itico-americanos reponan haber hecho, en promedio, casi una hora mas de rareas escolarcs a Ia semana que los mnos blanco~ (p. 58).

    97

  • ()f\lti.l'4 2,14

    2.16

    0,53 0,52

    1.60 1,79

    1,89 2,3!

    1,83 1.24

    Muchos de los ~iatico-esradounidcnses sumamcntc cducados que arribaron despues de Ia Ley de Inmigraci6n de 1965 pareccn tambicn habcr sido capaces de convcnir s~ altos ni,elo educat:ivos en ocupaciones y cmpleo; de alw escacus. Mien teas que duranre Ia primera mitad del siglo los asiaticos estuvicron concentrados al pie de Ia cscald cconomica, restringidos a Ia venta al por menor, los .servicios alimenricios,los ~rvicios de baja categoria y las ocupaciones agricolas, en el Escados Unidos acrual est an hien rcpresemados en el sector de Ia fuen.a lahoral bien pagada, educada y profcsional (E.~piriru, 1996, p. 65). Por cjemplo, Sakamoto y Xie (2006) muesrran que el J.'l% de los varones asiat:ico-americanos csran cmpleados como profesionales (ocupJcionc~ alramcnte calilicadas que tipicamenrc requieren de una capaciraci6n cspc:cialiuda o unal icencia acreditada), en comparaci6n con 2 I% de los blancos y apenas 13% de los afroamericanos.

    Lo~ diferc:ncialcs de ingreso entre asiatico-amcricanos y blancos han desaparccido casi por completo: en 2000, el ingreso promedio de los blancos era de aproximadamente USS 46 000, en tanto el de lo~ asiatico-americano~ nacidos en el pais era de aproximadamcnrc US$ 43 000. FJ ingreso promedio de los afroamericanos era sustancialmenre mcnor, apcna.~ US$ 30 000. Sin embargo, esra~ cif= agregadas para los asi:ltico-amcricanos csconden diferencias sustancialcs en el ingreso entre las dist:imas comunidadc:~ dr.: esradounidenses emigrados del A~ia (v6Jse Ia rabla 4.7).

    98

    r DoigtUld.a~ htum1u.dC1o ~'pl.c:ando b. fXn.r.tenua \' d c.;unb, I \lc\\'.UC 6.: Un~r

    Por cjemplo, mientr:t\ los cstadounidcnses coreanos (US$ -10 000) y vietnam itas (USS 24 000) ganaban en promcdo considerablemente mcnos que los blancos (USS 46 000), los emdoun~tlenses chinos (USS S6 000) y japoneses (US$ S3 000) ganaban sustanciaJmente rna~ que CSIOS WUmOS.

    El ejemplo de lo~ mmigrantes asi:iticos en los EE.UU. mucwa que las DH no necesariameme per~istcn. Lo~ facrores que parecen explicar Ia capacidad de los grupos de inmigrantes asi:\dcos de nivclarse, al igual que los inmigrames curopcos lo habian hecho ya antes (Alba y orros, 200 I), son: (i) sus nivdes educativo~ in ida! mente alms; (ii) sus valores de grupo, asociadas ral va a estos niveles cducativos, que llcvaron a aspiraciones m.is altas y a una fuene presion grupal en pos de logros en Ia educacion y d uabajo ---el capiral wcial y oms presiones grupales er.m asi ~tmetricamencc vemajo.sas para esto~ grupo>, antes que una desventaja-; )' (iii) el hccho de que la.o. poliricas migratorias .selecrivas asegur.tron que los puesms rdativameme bien pagado~ escarian a disposicion de Ia mayoria de los inmigrant.

    Cuadra 4.7. Salarios promcdio e ingresos de trabajadores de sexo masculino, 2000

    Bbncoo 23

    Ncgros 18

    Aillti

  • Uf51GCo\fiM.rn~ ttoltr?c" l-\1 h' CO!'ooFIWlH

    imperi:tl sino tambicn el movimitnto de Ia mano de obra wnrrarada de una pane dd mundo a otra- son los m.i; imponante choques que ere-an d~1gualdadcs. Contra las prcdicc10nes de l.t cconomi.t neocl:i.sica dd equilibria, donde los

    retorno~ decrccicntc.\ deberian cquiparar el ingreso con el paso del tiempo, esras desigu,udades inici.tles frecuentcmenre persi:.tieron, a vt-ces ango>dndose pero a menudo permaneciendo muy amplias. Esra deigualdad ~ indeseable porque cage a Ia~ per~onas de cicrra~ emicid,tdcs o razas en Ia pobre?;t rclativa y Ia imporencia :-' porquc amen am Ia c~rabilidad polrrica, puesto que las dircrencias culwrales brindan un mccanismo podc:roso de movilil:lci6n polirica. Es por csra; razonts que las OH tiencn un impacto mas adverso que las DV. de las cuales son una causa. Es mas, en cierto> ca.sos resulca t'Xtremadamentc: difici l rcducir Ia pobreza sin reducir las Oi l. puesro que las rnedidas generales que buscan reducirb no roman en cuenra Ia., circunstancias espcciab de lo~ grupos des.1vc~nrajados.

    Nuestro an:ilisi; sugierc que Ia; OH son iniciada.s por las desigualdades de gnrpo en diversos tipos de capital. asi como en los retornos de este capital, pero ello a mcnudo se perpetua por Ia inequidad de Ia acumulacion y por los retorno~ diferenciales emre grupos, dado que los retornos de cualquier tipo de capital son mamen1dos bajos por las delicicnci~ en Ia cuidad y canridad de orros tipo> de capital. asi como porIa discriminacion, pa.~ada y prescnre. El sistema politico d~cmpe1ia un papd cenrral, puc:s las polirka~ gubernamemales puedcn refor7.ar o compensar orras fuemes de doiguaJdad.

    Sin embargo, en .1lgunos ca~os los grupo~ ~~ logran nivclarse: en los caso~ de Malasia y de lrland.1 del None, con el vigoroso r~paldo de l .. tS politicas, yen el de algunos grupos de inmigrante> asi,iticos a EE.UU. medjante sus propio~ csfuenos, asisridos por polirica.~ migramria; selectivas. F.sras hisrorias de exito nos brindan demenws con los cu,tlcs onJS puedan movilizarse a mros grup~ m.i; privilcgiados, pas.1ndo hacia un equi l1brio en cl cual o bien Ia; fronteras grupales se vudven invisiblcs, quedan sin imponancia .Uguna. o bien las desiguJldades grupab son eliminadas gradualmente.

    Procc.sos qut rcducen las mcquidades en l.1 acumulaci6n de capiral. Aqui, las politi de ;ulCcccdentes sin educaci6n,los que no h:1hbn Ia lcngua dominanre y :t~i

    suce.~ivamenre. De ahi que usualmenre sea necesario ir m~ all:i de prohibir las pr:i~ticas discrinunatorias exisrentes y pasar .1 una discriminaci6n pos1riva acrual (o ,lCci6n afirmadva), a fin de compen~ar las desvcnrajas en que se incurn6 con Ia discnminaci6n p.~>adJ.

    Proceso~ para meJorar los retornos de los di~rintpaldo simulraneo a di~rintos ripo~ de acumulaci6n de capital en e1 grupo neccsirado, puesro que invcrcir unicamentc en un solo tipo poJria tener poco impacto: por ejemplo, Ia.!> politilJs de extender Ia educaci6n en Ghana ~eptentrional mvieron poco impatto ~obre el ingreso de quienes asislian :1 Ia escucla, pucsro que cJredan de

  • 0~1C~l1At O"UF.~ IIOIIUZO' r"l.L\ \" COSFUrrn

    algunu~ intcnro; de corrq~ir las DH en los lJSos de los ghaneses del none y de lm negro\ de EE.UU .. pero ruvieron un impac.rn marginal, pmbablemenre porque no fucron lo ~ulicicnrememe glob.Jfes: en oda caso :;e concenrraron fundamcntalmencc en Ia educaci6n, de modo ral que rc,ultaban insulicienres para compensar cllegado de Ia discriminacit'ln previa, asi cumo las dcwentajas impuesras por las deliciencias en orro., tipos de capiral.

    FJ papel de Ia politica es crucial para Ia explicacion del fracaso en e1 combate dt> fa. DH socioecon6mic:b. Se rcquiere e,fucn.os concerr~dos que impliquen que d si;rema respalde plenamenrc Ia~ politicas. Es probable

  • r

    CAi>lTULO 5 APROXJMACIONES A LA MEDICI6N D E. LAS DESIGUALDADES HORJZONTALES

    Luca M41Jcini, Fra11ces Stewart y Graham K Brown

    l. lNTROOUCCU)N

    La mayoria de las mediciones de Ia desigualdad conciernen Ia dc~tgualdad vertical o entre personas (DV), y gencralmcnte quedan limlt,tdas a una~ cuantas vanablc" econ6micas, como el ingreso, el consumo y a vece.l l> activos. Fn esre ambito, las curvas de Lorenz y el codiciente Gini fueron usado) exrensa y poderosamentc como mcdidas de desiguald.1d Se ha prcsrado mucho mcnos arencion a Ia mtdki6n de desigualdadcs encre grupos o desigualdadcs hori7ontalcs (011). Aunquc ciertas medida.1 de Ia desigualdad vertical pueden descomponerse en grupos, esras son dificiles de mterprctar, y ademas miden Ia conrribuct6n de las inequidades grupales a Ia desigualdad vertical global antes que a Ia desigualdad de grupo como tal. Esrc capirulo considera form~ altcrnarivas de medir las desigualdadcs horiwmales y prcsema algunas aplicaciones empiricas de disrintas mtdidas, momando cuanto se corrdacionan entre sf.

    La sigutcntt secci6n cxamina algunas cucsriones gencralc. referidas a los concepros y Ia mcdici6n. La sccci6n 3 esra dcdicada a mcdidas agregadas de la.s DH que no son sensibb a Ia disrribud6n denrro de cada grupo; a csto lc sigucn aplicacionc:. de medidas alrcrnativas en unos cuantos casos empiricos en Ia sccci6n 4; Ia secci6n 5 considera mcdidas que ~r permiren ver las DH en disrinros segmenrosde Ia disrribucion, junto con un ejemplo (lllpirico; Ia set.d6n 6 presema lasconclusiones.

    2. PROBLEMAS DE MEOICJ6N DE LAS D.ESICUALDAD.ES HORIZONTALES

    FJ primer paso en Ia comprensi6n del estarus y Ia din:lmic

  • llf.\H~H't IHOCS UO .. I./.(_l ... lAU~\ l '0,.11\ IU

    o d fuvorirismo. E~u) pbmea muchos problemas puc,to que, como~ exploro en e1 capirulo I, dJd.u multiples odentidades y ~u conmucdon i iJ adopcion de disrimos

    crircri o~ de caregori7acion cambia los resultados. En Ia pr:ictica, las Jdiciencias de los dams significan que usu:tlmenre solo se cucnra con cla~i(icacioncs algo roscas. Pero t:s posiblc que mtllriplcs