“Las cosas te irán tan bien o tan mal como tú lo decidas”

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62 PSICOLOGÍA ENTREVISTA [ ] Hay un motivo para tu existencia más poderoso que la agota- dora lucha del día a día por la supervivencia. Las ilusiones y mentiras sobre tu insignificancia dejarán de importarte cuando vuelvas a tus orígenes para liberar los bloqueos y recuerdos in- conscientes no resueltos que quedaron almacenados en la me- moria celular de tu cuerpo desde tu nacimiento u vida profesional gira en torno a la influencia del nacimiento en la conducta humana. María Luisa Be- cerra había asistido más de tres mil partos hasta que, en un congreso de ginecología y obstetricia, conoció al creador del rebirthing (renacimiento), Leonard Orr, y con él aprendió cómo la forma de venir al mundo es crucial, porque condi- ciona nuestra manera de ser. Partos por cesárea, con fórceps, con anestesia, prematuros, inducidos… la energía del nacimiento se manifiesta en nuestras rela- ciones y en cualquier proyecto de vida que tengamos. Si quieres saber cómo condiciona tus circunstancias y tus relaciones tu forma de nacer, lee esta entrevista con la autora de Nacimos para triunfar... PSICOLOGÍA PRÁCTICA: Al leer en la contrapor- tada de su libro Nacimos para triunfar, a uno le da un subidón anímico, pero al mismo tiempo aparece la duda: ¿Será cierto? Mª LUISA BECERRA: Creo que estamos viendo el triunfo desde concepciones diferentes, de otra manera no lo dudarías. El triunfo al que me refiero tiene que ver con un proceso personal e íntimo. Un viaje hacia nuestra alma. Un encuentro con lo que “Las cosas te irán tan bien o tan mal como tú lo decidas” María Luisa Becerra S Por Marta Bellmont nos da placer de nosotros y también, con lo que no nos gusta tanto y que, de alguna manera, hemos de aprender a saber cómo gestionarlo. Para ello es preciso conocerse profundamente. Saber acompañar nuestro dolor, trascenderlo a veces y, sobre todo, dejar de sufrir, eso es triunfar. ¿De dónde parte esta idea? Son muchos años de entrega apasionada, de búsqueda para descubrir la verdadera esencia de mí misma y de los demás. Recibí el rebirthing o renacimiento de manos de Leonard Orr, su creador. Viví la experiencia, y mi corazón la recibió como una gran luz en mi camino. Me he formado con él y con otros grandes renacedores, al igual que trabajé durante quince años con el doctor Thomas Verny, psiquiatra que, a través de la ciencia, llega a las mismas conclusiones que el renacimiento. De todos aprendí mucho: el poder de la respiración consciente, el valor de la observación, la escucha del cuerpo, la presencia y las sensaciones y emociones unidas a pensamientos.Todos tenemos el poder de re-crear nuestra vida. Triunfar en un mundo tan competitivo no es fácil. Además, hacerlo hoy (con la que está cayendo) nada tiene que ver con triunfar hace quince años Foto Andrés Sunyer

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ENTREVISTA[ ]

Hay un motivo para tu existencia más poderoso que la agota-dora lucha del día a día por la supervivencia. Las ilusiones y mentiras sobre tu insignificancia dejarán de importarte cuando vuelvas a tus orígenes para liberar los bloqueos y recuerdos in-conscientes no resueltos que quedaron almacenados en la me-moria celular de tu cuerpo desde tu nacimiento

u vida profesional gira en torno a la influencia del nacimiento en la conducta humana. María Luisa Be-cerra había asistido más de tres mil partos hasta que, en un congreso de ginecología y obstetricia, conoció al creador del rebirthing (renacimiento), Leonard Orr, y con él aprendió cómo

la forma de venir al mundo es crucial, porque condi-ciona nuestra manera de ser. Partos por cesárea, con fórceps, con anestesia, prematuros, inducidos… la energía del nacimiento se manifiesta en nuestras rela-ciones y en cualquier proyecto de vida que tengamos. Si quieres saber cómo condiciona tus circunstancias y tus relaciones tu forma de nacer, lee esta entrevista con la autora de Nacimos para triunfar...

PSICOLOGÍA PRÁCTICA: Al leer en la contrapor-tada de su libro Nacimos para triunfar, a uno le da un subidón anímico, pero al mismo tiempo aparece la duda: ¿Será cierto? Mª LUISA BECERRA: Creo que estamos viendo el triunfo desde concepciones diferentes, de otra manera no lo dudarías. El triunfo al que me refiero tiene que ver con un proceso personal e íntimo. Un viaje hacia nuestra alma. Un encuentro con lo que

“Las cosas te irán tan bien o tan mal como tú lo decidas”

María Luisa Becerra

SPor Marta Bellmont

nos da placer de nosotros y también, con lo que no nos gusta tanto y que, de alguna manera, hemos de aprender a saber cómo gestionarlo. Para ello es preciso conocerse profundamente. Saber acompañar nuestro dolor, trascenderlo a veces y, sobre todo, dejar de sufrir, eso es triunfar.

¿De dónde parte esta idea? Son muchos años de entrega apasionada, de búsqueda para descubrir la verdadera esencia de mí misma y de los demás. Recibí el rebirthing o renacimiento de manos de Leonard Orr, su creador. Viví la experiencia, y mi corazón la recibió como una gran luz en mi camino. Me he formado con él y con otros grandes renacedores, al igual que trabajé durante quince años con el doctor Thomas Verny, psiquiatra que, a través de la ciencia, llega a las mismas conclusiones que el renacimiento. De todos aprendí mucho: el poder de la respiración consciente, el valor de la observación, la escucha del cuerpo, la presencia y las sensaciones y emociones unidas a pensamientos. Todos tenemos el poder de re-crear nuestra vida.

Triunfar en un mundo tan competitivo no es fácil. Además, hacerlo hoy (con la que está cayendo) nada tiene que ver con triunfar hace quince años

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[ ]ENTREVISTA

cuando las cosas iban algo mejor. Sin embargo parece ser que esa capacidad de alcanzar el triunfo es atemporal e incondicional. ¿Estoy en lo cierto?Las cosas van tan bien o mal como tú lo decidas. Es cuestión de creencias. La fuente de tu triunfo no está en ninguna situación externa. Ciertamente es atemporal e in-condicional, pues es la fuerza del amor lo que lo mueve dentro de ti.

Dice en su libro que la energía de nuestro nacimiento se proyecta conti-nuamente en nuestro día a día actual. ¿Puede explicarlo? Preconcepción, concepción, gestación, nacimiento, primera respiración aérea y vinculación son las etapas primordiales de nuestra vida, en donde las experiencias, tanto físicas como emocionales o menta-les, van impactando en nuestra memoria celular, despertando así nuestro guión de esta vida, que, en una persona consciente, se convertirá en la guía hacia la reconexión con nuestra vibración luminosa. Teniendo en cuenta que no existen dos personas iguales, cada uno de nosotros tendrá unapredisposición hacia determinadas con-ductas según la manera de haber vivido esas etapas y las decisiones tomadas.

Usted se define como renacedora de adultos. ¿Por qué y para qué renacer?Soy terapeuta renacedora y de constela-ciones familiares sistémicas. No le pongo edad a los que desean aprender a liberar su respiración. Tengo alumnos de todas las edades, incluyendo niños.

¿Cómo es, a grandes rasgos, la técnica de renacimiento que practica?Es una meditación dinámica a través de la respiración circular y consciente. Dicha respiración activa los principales centros energéticos, estimulando una rápida reno-

Es pedagoga y doula. Comenzó su trabajo sobre la influencia del nacimiento en la conducta en el Hospital de Caricuao (Venezuela) y se formó como renacedora con Leonard Orr, creador de la técnica del renacimiento. Durante 15 años lideró la Escuela Internacional de Renaci-miento. Terapeuta de constelaciones familiares sistémicas, master teacher del Proyecto Inter-nacional de Autoestima y fundadora de Amor y Vida, empresa de servicios para la evolución del ser humano, es madre de seis hijos. www.marialuisabecerra.com

EL AUTOR

María Luisa Becerra

vación celular al permitir que la energía fluya libremente por el cuerpo. Como resultado de esto, el sistema cerebro-es-pinal debe expandirse radicalmente. La expansión del mismo hace que el sistema nervioso central se libere de bloqueos, de recuerdos subconscientes no resueltos. Una vez integrado el proceso, la persona sentirá un aumento de energía física, al mismo tiempo que los fluidos del cuerpo circula-rán con mayor libertad. Los cambios en la conducta del individuo son inmensos.

Uno de los objetivos de esta práctica es aceptar que somos valiosos por lo que somos y no por lo que hacemos. ¿Está conforme? ¿Usted conoce a alguien que haya sido celebrado por ser? En mis seminarios siempre lo pregunto desde hace 25 años y todavía no lo he encontrado. Nues-tra educación fue tremendamente des-aprobadora, nos decían que nos amaban siempre por lo que hacíamos o si nuestra conducta era favorable a padres, maestros y educadores, aunque nosotros, como niños, nos sintiéramos anulados. De esa tierna edad parte en nuestras mentes la confusión del amor. Fuimos valorados por el hacer, adentrándonos así en una carrera para obtener reconocimientos afuera de nosotros, funcionando como títeres de una sociedad, para colocarnos en puestos llamados de poder y muy lejos del mismo, pues donde se encuentra es en nuestro centro cardíaco. Una persona que haya aprendido a reconocerse a sí misma y a amarse incondicionalmente sabrá llevar el barco de su vida, eligirá lo que día a día le ayudará a expandirse poderosa y, a la vez, amorosamente, y todo ello sin que nada que suceda en el exterior lo pueda cam-biar. Conocerá sus talentos, su propósito de vida y cómo ligarlo a su trabajo para así poderlo dar a los demás.

¿Cree usted que los niños nacidos por cesárea sufren menos que los nacidos por vía vaginal?Totalmente un mito. Todos tenemos nues-tro “paquetito” que o nos hará sufrir, o un día despertaremos a la conciencia de que esa herencia es un regalo para ver nuestro camino. Los nacidos por cesárea tienen predisposición a tener conductas ligadas a sentimientos de culpabilidad, desamparo, baja vitalidad, a veces mucha violencia y separación de su propio poder personal. También depende del motivo de la cesá-rea. Más habría que explorar la manera de vincularse de esa familia. Hoy en día creo que nuestra manera de nacer, sea la que sea, igual que la familia en la que hemos na-cido, son perfectas para aquello que hemos venido a aprender de nosotros mismos.

¿Cómo es la conducta de los nacidos de nalgas?Esta posición se llama podálica, bien sea de nalgas o de pies. Pueden tener mu-cha lucha a lo largo de su vida, así como sentimientos de inadecuación, e incluso, algunas veces, conflictos con su conducta sexual.

¿También nos condiciona la forma en que somos concebidos?La historia personal de un ser humano concebido con deseo, con amor, con una sexualidad sana, deseado sin condiciones, no será igual que la de aquel al que se rechazó desde un inicio, fuera por la causa que fuera.

El pensamiento puede alterar hasta los procesos fisiológicos ¿Tanto poder tiene?Cualquier científico sabe que es así. Creo que todos conocemos a algunas perso-nas que, al diagnosticarles un cáncer, han dicho con convicción: “No me muero”,

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y han sanado. El pensamiento tiene un poder de atracción, de proyección y de manifestación. Si crees que puedes, po-drás. Si piensas que eres una víctima de una situación,así vivirás, y si no te haces responsable de que tu pensamiento es creativo, vivirás cul-pabilizando a los demás de todo lo que te suceda. Detente por un momento y observa si en este instante sientes paz o te estás alterando. ¿Qué piensas?

Si lo que vivimos es una proyección de lo que pensamos, ¿cómo trascender las vivencias negativas que nos suce-den? ¿Se puede hacer desde el pen-samiento?El pensador somos nosotros mismos, por lo tanto, está bien cambiar la manera agresiva de pensar. Sin embargo, estos decretos han dejado huellas en nuestra memoria. Si nos separamos de nosotros mismos a través de experiencias, es también a través de ellas que nos podemos unir.

¿Para qué sirven las afirmaciones de las que habla en su libro?Para que constituyan el faro de nuestro

Becerra asegura que el pensamiento tiene un gran poder de atrac-ción: “Si crees que puedes, podrás”.

NACIMOS PARA TRIUNFAR.María Luisa Becerra.Editorial: Ob Stare.Páginas: 172.Precio: 11,25 e.

EL LIBRO

camino, aquel espacio en donde queremos alojarnos, desde donde queremos vivir, más sin embargo, no basta solo con cambiar el pensamiento, ya lo expresé con anterio-ridad, es necesario un trabajo profundo en el cuerpo, de renacimiento o de otras disciplinas.

¿De qué manera nos ayuda perdonar?Perdonar significa poner la mirada en lo que es, hacerte responsable de todo lo creado y aprender a deshacerlo. So-lamente te puedes perdonar a ti mismo. No lo supiste hacer de otra manera mejor. Responsabilízate entonces y, si has hecho daño a alguien, mírale a los ojos y dile “Lo siento”. Perdonar es el camino hacia la libertad.

¿Qué importancia le da usted al amor?Toda, absolutamente toda. Amor es la ener-gía que vibra en nuestros cuerpos cuando respiramos, es lo que somos, es el orden, la vida, la creatividad. Nuestra cultura nos ha alejado del amor inmenso que somos, entonces el primer paso es rescatarlo para que luego lo podamos dar a los demás.

Finalmente ¿qué es para usted la fe-licidad?Es un estado de paz, de presencia de alegría y confianza, en el que a veces estoy instalada y otras no, pero sé que existe porque ha vibrado en mí y en mis clientes.