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on cara y con alma de fiesta. Porque a unole digan una y otra vez que ponga cara de fies-ta, puede saberle a una broma de mal gusto y,peor aún si recientemente se le ha muerto sumarido, o su hija de diez años, o está acaban-do sus días en una residencia, sin visitas, roí-da por la soledad entre quienes van perdiendola cabeza: “sonría, abuela, sonría por favor”.La alegría brota de adentro hacia afuera; no esla sonrisa de circunstancias para las visitas ouna mueca para la foto.

Y sin embargo, tengo palabras y razones para decirle con cariño

y de verdad: “Alegra esa cara, abuela;que no estás sola”

“Yo no estoy nunca sola, Dios está conmigo”,me decía una sencilla mujer que tenía sobra-dos motivos para quejarse. Vaya lección de feque me dio aquella campesina. Recuerdo tam-bién con frecuencia a santa Gema Galgani, aquien no le cabían más cruces en el cuerpo nien el alma, que acabaron con ella a los veinti-cinco años. Es para afirmar que un rostro dolo-rido puede florecer y transmitir una alegría se-rena y una paz envidiables. Como la sonrisa,son cosas que nacen de dentro, y se asomana la mirada y al rostro, aunque los sentidos su-fran. Y son felizmente contagiosas

Un horizonte resucitador

Desde la Pascua podemos cambiar el tétricopensamiento “me estoy muriendo”, por un

Con cara de fiesta

C

ORACIÓN POR LA FAMILIA

Reina y madre de la Familia, óyenos:que en nuestra casa, cuando se hable,

siempre nos miremos a los ojos y busquemos crecer juntos;

que nadie esté solo ni en la indiferencia o el aburrimiento;

que los problemas de los otros no sean desconocidos o ignorados, que pueda entrar quien tiene necesidad y sea bienvenido.

Reina y madre de la Familia, óyenos:que en nuestra casa sea importante el trabajo,

pero no más importante que la alegría; que la comida sea el momento de alegría y de

conversación; que el descanso sea paz del corazón y del cuerpo; que la riqueza mayor sea estar juntos.

Reina y madre de la Familia, óyenos:que en nuestra casa el más débil sea el centro de

la atención; que el más pequeño y el más viejo sean los más queridos;que el mañana no nos dé miedo, porque Dios siempre

está cerca; que cada gesto esté lleno de significado; que te demos gracias por todo lo que la vida nos ofrece

y tu amor nos da.

Reina y madre de la Familia, óyenos:que nuestra casa sea el lugar de acogida, como la casa

de Marta, María y Lázaro en Betania. Amén.

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Mario Melgosa

Diosdado, cp.

viaje o peregrinación, especialmente la quese hace por devoción, a un santuario. O ro-mería es – esta es la otra versión- fiesta po-pular que con merienda, bailes, etc., se cele-bra en un campo inmediato a una ermita osantuario el día de la festividad religiosa dellugar.

Teniendo presentes ambas definiciones,podríamos tener una idea exacta de la ro-mería que los fieles del Valle de Gobea yaledaños celebran en Angosto, por devo-ción a su Patrona la Virgen María: una jor-nada alegre y festiva de oración, de camino,mesa sabrosa colectivamente compartida,música y danza.

Así son las romerías, las peregrinacio-nes anuales a la Virgen de Angosto. Ellasguardan entre todas las visitas un lugar pre-eminente, diríamos que los romeros sonaquí el cuadro de honor entre todos los visi-tantes. No se sabe cuándo y cómo se origi-naron. Podemos pensar naturalmente quela Virgen de Angosto desde su aparición alpastor Hernando Martín en el lejano 1089hizo valer su gran protección sobre estosvalles y sus sencillos campesinos, que sin-ceros creyentes comenzaron a invocar aMaría representada en la imagen salvadaprodigiosamente de las aguas de Angosto; ysiguieron correspondiendo a los beneficiosrecibidos.

¿CUÁL ROMERÍA?

Romero significa “romano”. Así eran llama-dos los occidentales que acudían a defen-der los santos lugares en la Edad Media; ymás tarde los que viajaban por devoción re-ligiosa y penitencial, no turística, a Santiagode Compostela y a Roma.

Ni de Tierra Santa, ni de Santiago, nide Roma, aquí se trata de romeros de An-gosto. Pero, ¿de qué romería se trata? Depequeño observé y entendí que se llamabaasí la tarde de diversión dominguera de gru-pos y parejas que convergían en un puntopara bailar y pasarlo bien, sin ninguna rela-ción de tinte religioso.

En el Diccionario de la Real Academiade la Lengua Española la romería tiene dosacepciones, a cual más interesantes anuestro objeto. Una es que romería es un

LAS CAMPANAS DE ANGOSTO LLAMAN A ROMERÍALAS CAMPANAS DE ANGOSTO LLAMAN A ROMERÍA

AS CAMPANAS DE ANGOSTO llaman a rome-ría. Pasó el crudo invierno. Apareció una

primavera prometedora. Y un llamado circu-la misteriosamente desde el Santuario deAngosto a las almas todas de Valdegovía,Losa, Cuartango, Ribera Alta y Baja: vasiendo hora de acudir al Santuario. Y vandespertándose todos y tomando concienciade que, conforme a una tradición multisecu-lar que les compete, deben visitar a la Pa-trona y protectora, Santa María de Angosto.

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alentador “me estoy naciendo” (la verdad es que desdeque a uno le empiezan a correr los días ya en el senomaterno, se está naciendo). Lo que digo, me lo avala mife en la resurrección. La fe cristiana tiene la osadía degritarlo hasta en las mismas puertas de la muerte: ¡Je-sucristo ha vencido a la muerte! ¡Pasamos de la muer-te a la vida! ¡La muerte ha sido muerta!

Paradójicamente, el grito pascual nace del se-pulcro, donde dejaron muerto, y muy muerto, el cuerpode un ajusticiado crucificado. Dios nos ha nacido no pa-ra destinarnos a la muerte, sino a la vida. Este es elDios de nuestro Credo. Por eso, en los funerales el cre-yente percibe este olor a Pascua y rompe el duelo ydespide a los que han muerto cantando: “Las puertas dela nueva ciudad se abren para ti…”

La soledad, la muerte seguirán ahí amedrentan-do a los hombres, y seguiremos sufriendo y llorando, pre-cisamente porque somos seres para el abrazo y la vida;y todo nuestro ser, nuestras entrañas y nuestra sangrea gritos los reclaman: ¡Quiero vivir! La fe nos viene aconfirmar lo que ya en esta vida presentíamos.

La noticia Pascual nos deslumbra, porque tanta luz nosciega, hiere por exceso a la razón y a los sentidos. Es-tamos en el centro del ciclo que nos arrastra hacia unavida nueva. Jesucristo nos ha abierto y enseñado el ca-mino de la vida, camino que hay que andar en el amory que Él recorrió primero.

Y para más alegría, con una imagen que dice más quemil palabras celebramos la Fiesta de la Ascensión: latrayectoria del misterio humano divino de Jesús y delnuestro. Es el final de una etapa y el comienzo de otradefinitiva. Es la fiesta de la cosecha: merece la penasembrar, vivir y morir, porque hay cosecha y abrazo. Yla fiesta de Pentecostés con el Don más grandioso de laPascua: el Espíritu de Dios que nos habita.

LAS PUERTAS DE LA NUEVACIUDAD SE ABREN PARA TI. Y DIOS TU AMIGO TE SALVARÁ.

Verás el nuevo día, el nuevo Sol.

Verás la nueva vida, Resurrección.

La gran noticia: ¡Dios es amor! ¡Dios es amor!

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Comenzaron a venir, agradecidos so-bre todo por tres atenciones y dones experi-mentados por los devotos: quienes solicita-ban salud para los niños, lejos entoncesdel margen de sobrevivencia actual de la in-fancia; venían las madres gestantes a im-plorar el estado feliz de buena esperanza;venían los campesinos, llenos de fe, supli-cando protección sobre sus campos, de-dicados desde la baja Edad Media al cultivodel grano y de la vid; venían a agradecer losfavores recibidos y suplicar otros deseados.

EN EL ADN DE NUESTRA CULTURA

Hay documentado que desde un antañomultisecular se asentó aquí, como una par-te importante de la vida de Angosto y la his-toria de estos valles, una firme y constantetradición cristiana: la celebración de estasperegrinaciones, que testimonian el recono-cimiento de la Madre de Dios de Angostoparticularmente como “abogada de los par-tos, protectora de los niños y conservadorade los campos”. Se trata de un testimonio evidente del an-cestral y fuerte arraigo del cristianismo enestos valles que nos complace destacar enesta hora, en que, como otrora las inva-siones árabes con su política y su Islam,actuales políticos y educadores, fuerte-mente ideologizados o con motivacionessolo aparentemente inocuos, tratan de pe-netrar nuestros valles y distraerlos haciaunas ideas y programas saturados dematerialismo y secularismo nocivos a la fe.

Para los que se permiten ver las cosas sinprejuicios, la tradición de la que tratamos,es la hora de valorar y actualizar nuestrastradiciones, sobre todo las que llevan inscri-to en el ADN de su existencia. Y bien losmuestran nuestras romerías, en cuya almaviven y animan la Eucaristía y la Virgen Ma-ría, junto con la penitencia y la oración.

LA ROMERÍA TIENE SU RITUAL

Comienzan las peregrinaciones en la pri-mavera, pasados los hoscos fríos del invier-no. Al mismo tiempo que la suavidad de laatmósfera alienta la vida de la naturalezaembelleciéndola con su calor, colores y aro-mas, se despierta y anima el diálogo de loshijos de este valle con su Patrona; y que talserán de agradables y bellos los aromas yflores que brotarán en la presencia de la Se-ñora de Angosto desde la presencia y la ple-garia de tantos hijos.

La celebración de una peregrinaciónguarda su ritual, desde que salen de sus ca-sas hasta que se reintegran nuevamente ensus hogares. Días previos se hizo el seña-lamiento del día y de las horas. La vísperase empleó para preparar las viandas, la co-mida campestre, el ocio, etc. Años pasados,al despuntar el día un alegre repique decampanas daba la señal para salir de lascasas con objeto de encontrarse, vestidoscon aires domingueros, con los contertuliosdel día. Todos -o la representación- de cadapueblo se encaminan hacia el santuario,precedidos del sacerdote. Hoy en día, la

merma de la población, los coches y la ilu-sión de la caminata van facilitando, y tam-bién condicionando, la antigua marcha co-lectiva. En todo caso, las campanas a vueloa la llegada al Santuario infunden y cercioranla alegría y el gozo de reunirse y reencon-trarse con la Madre buena de todos.

EL GOZO DEL EVANGELIOEl sacerdote se esmera en animar la santamisa. Los fieles se pueden acercar al sacra-mento de la Penitencia. Gozosos de disfrutarde tan hermosos dones, al concluir la Euca-ristía es tradicional la procesión a la Gruta dela Aparición entre cantos y misterios del ro-sario y el canto de la Salve; es el número es-pecífico de la fiesta religiosa. Viene a conti-nuación el resto alegre del compartir; lamesa, la música y el baile, y de cuanto elpueblo haya organizado para una jornada deamistad, de fiesta y alegría.

Suenan las campanas de Angosto, convo-can a la romería, a la fiesta de la fe. Y no medigan que la frescura y la lozanía que tradi-cionalmente rezumaron estas peregrinacio-nes vengan menguándose. El papa Francis-co nos recuerda -¿es que lo habíamosolvidado?- “La Alegría del Evangelio”; Cristoes la alegría del mundo y María endulza laspenas de la vida. Esto lo saben bien los Ro-meros de Angosto. Y que sigan sonando lascampanas de su Santuario. (DIOSDADO, CP.)

Tal vez sientas en tu interior la necesidad dehablar de Dios a tus amigos, a tus compañe-ros de trabajo, a tus familiares…, y no te sien-tas capacitado para ello o que, al hacerlo, nohaya ido bien. Lo más importante es ponerseen las manos de Dios. El apostolado no esuna tarea más, sobre todo es un encuentrocon Cristo, que nos transforma.. Alegría. La alegría «es contagiosa y grita elanuncio, y ahí crece la Iglesia», (papa Fran-cisco). «La Iglesia no crece por proselitismo,crece por atracción; la atracción testimonialde este gozo que anuncia Jesucristo». (Be-nedicto XVI). Un católico que se presentatriste y enfadado ante la vida y ante los quele rodean no atrae a nadie; al contrario, ge-nera rechazo, necesariamente.. Naturalidad. La naturalidad se hace querer.Cuando uno es natural, genera atracción.Cuando uno es coherente y vive su vida defe con naturalidad ya está ofreciendo un tes-timonio evangelizador. Sus obras, las que lesalen del corazón, estarán ofreciendo ungran ejemplo para los que le rodean.. De tú a tú. Dios llama a todos los hombres,uno por uno, a cada uno por su nombre. Deesta forma Jesús llamó a los Doce, o se en-contró, en el pozo, con la Samaritana. Y es-to no es en detrimento de la atención aten-der a grandes multitudes.. Saber escuchar. La actitud de escucha esfundamental para comprender a la gente ysus circunstancias. La gente tiene necesi-dad de ser escuchada, de poder desahogar-se con el hermano, de poder compartir susmiedos y alegrías. También la gente necesi-ta una palabra de esperanza. Y nosotros ne-cesitamos escuchar a Dios. «Hagamos si-lencio para escuchar a Dios» (José Calderero)

4 virtudes del evangelizador

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ERESA DE JESÚS NACIÓ EN ÁVILA EN 1515.Hija de Beatriz de Ahumada y AlonsoSánchez de Cepeda, de ancestro judío;

su abuelo había sido penitenciado por la In-quisición toledana. Mujer vivaracha e inteli-gente, si hubo alguna, cuando, ya adulta enel punto más brillante de sus realizaciones,alguien tan importante como el Nuncio Feli-pe Sega la definirá con un exabrupto precio-so que le honra: ”Fémina inquieta, andarie-ga, desobediente y contumaz”. Bien que, almomento fue un insulto doloroso para ella,la describe mejor que muchas alabanzasque ha merecido a lo largo de la historia.

Desde su infancia lectora voraz, ya sesalía ampliamente de la norma. En la ado-lescencia la llevan a las agustinas de SantaMaría de Gracia, en Ávila, con intención deencauzar bien su precoz y brillante desper-tar a la vida. A los 17 años comienzan susprimeras preocupaciones religiosas serias ytambién las primeras crisis de salud. A los20 años decide entrar en el monasterio de la

Encarnación. A través de un largo procesose fue definiendo su proyecto reformador.En 1562, a sus 47 años, se desencadena-rá su aventura fundacional.

Una luz cierta y un impulso inconte-nibles le harán caminar miles de kilómetrosy escribir obras iluminadas, autodidacta pe-ro gran conocedora de la vida humana y delos caminos del espíritu. En medio de gran-des contradicciones y persecuciones, co-mo todo aquel que pasa por el fuego delEspíritu, se forjó su brioso temperamento ysu carácter, con lo que pudo afrontar gene-rosamente su misión encomendada.

EXCESIVA, PERO EN ORDEN

Veo que a algunos les gusta la Teresa delos “excesos”; una mujer excesiva en todoslos sentidos, en lo humano y en lo sobre-natural, en lo intelectual y en lo práctico, ensu retiro místico y en la comunicación araudales; una perla de humanidad. Sin em-bargo, admira cómo en medio de una ex-periencia humana desbordante surge enella una persona, toda centrada en Dios.Su hablar fresco, llano y que rezuma gra-cejo en medio de la más elevada mística; laagudeza, prontitud y precisión de su idearefleja mucha luz; el juicio osado sobre lasautoridades religiosas podría significar re-beldía, pero tiene tanta gracia y tino, que setorna en ternura y provoca sonrisa.

A sus 50 y 60 años, todo se iluminaen ella. Lo que se mueve y camina, hace,piensa y siente; lo que comunica a travésde sus cartas y demás escritos no solo esfluidez verbal sino bien sentido, meditado,

valioso. Ciertamente en su corazón rige unsol y la sabiduría y el poder de Dios, que semanifiesta de manera admirable. Sinceramente, yo prefiero pensarla así y re-coger de su abundancia una lección de vida.Teresa de Jesús es el ejemplo de cómolo sobrenatural no mortifica ni reduce lonatural, sino al revés,lo natural es elevadoy se potencia y difunde. Aprendo en ella elvalor de lo cotidiano, de lo sencillo, de có-mo lo pobre y ruin puede convertirse enjoya. Pues que todo es redimido y santifi-cado por la presencia y acción de la gra-cia de la Encarnación, en Teresa toda ex-periencia humana se convierte en oracióny alabanza a Dios. Así cuando estampasus experiencias en su mesa de escritora,o se mueve por los caminos de Castilla enun carromato o aparece en una esquinadel claustro toda maternal y sonriente ycomenta con gracejo sus historias, Teresaes de Jesús o es Jesús de Teresa.

¿SUSPICACIA O SABIDURÍA?

Otros, a nivel periodístico o filosófico, es-criben de Teresa una persona “suspicaz”,siempre en “sospecha”. ¿Qué querrán decircon ello? Ha aprendido tanto andando por lavida, ella inteligente y aguda observadora;sobre todo, siempre que ha tenido que ex-plicar y defender su oración, su pensamien-to y sus proyectos ante gente importante,como los Nuncios, los Superiores mayores ymenores, o los prohombres de la teología olos jueces de la Inquisición. Su mirada delince y la palabra aguda e inteligente partíandesde la convicción profunda de su ruindadontológica ante el poder y la gracia de Dios;contemplaba la obsesión y osadía de suépoca por los temas de la honra y prestigio

o reputación en que abundaba la vida so-cial, política y la eclesiástica y religiosa.

“Sospechas” ante las “autoridadespostizas”. Arrancando como hacía desde latransparencia de su vida, vivía en estadopermanente de sospecha frente a ellas yfrente a todo lenguaje afectado; desconfian-za habitual frente a todo fundamentalismoespiritual o religioso; incluso hasta resenti-miento frente a la situación de sometimien-to de la mujer en una cultura crasamentemachista. Teresa veía claro y afrontaba to-do con criterio.

Estado de “sospecha” en medio deldesengaño y desencanto ante la vida. “Es-ta vida es todo mentira y falsedad”. Es eldesengaño que proviene de arriba ante lascosas abusivas de este mundo; se com-prende desde su experiencia profunda deDios, único real, única belleza, única ver-dad; desencanto, por fin, existencial ante lafinitud de todo. Los dones del Espíritu obra-ban profusamente en ella; de ahí su clarivi-dencia para sopesar lo verdadero, apreciarlo valioso, discernir entre lo bueno y lo ópti-mo y trocar en luz todo lo que tocaba.

yo llamo a estas “sospechas” don y graciade discernimiento permanente de alguienque ha integrado la prudencia de la palomacon la astucia de la serpiente, de quien hacontactado la verdad de Dios y de las cosasde la tierra y contempla todo desde la pazdel santo temor de Dios. Y claro, se le per-mite el juicio atinado sobre lo que es real-mente verdadero y bello y santo.

Estoy pensando en Teresa de Jesús y leruego me consiga alguna partecita de cuan-to apunto de ella, Maestra en los caminosde la vida cristiana. D. Alday, pasionista

Desde la Casa de Espiritualidad de An-gosto, pienso en Teresa de Jesús…Entre la lectura de autores que tratan so-bre ella con gran erudición, pienso enTeresa, para descubrírmela y meditar eneste V Centenario su talla humana y espi-ritual y el ejemplo de vida cristiana queella constituye para los fieles de todos si-glos y para cada ser humano.

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V Centenario de Santa Teresa de Jesús

Pienso en Teresa...

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ucia Annunziata, directora del diario Huf-fington Post en su versión italiana, ha es-

crito un artículo que ha generado un grandebate en Italia: "La solicitud del PapaFrancisco, el silencio de la izquierda conlos cristianos". Lo chocante es que An-nunziata dirige un diario on line calificadode izquierda progre y con mucho predica-mento entre la intelectualidad y la políticade la llamada "sinistra". Ella se declara ateay ajena a lo católico, pero recalca: "Pode-mos ser ateos, pero no sin valores".

La directora del HUFFINGTON POST explicaasí a revista Tempi el porqué en su últimoartículo regañó a la izquierda su rostro desilencio ante la masacre de cristianos enÁfrica y el Medio Oriente.

"¿Por qué -escribió- no recibo demandaspara firmar (cuando me las envían de todotipo)? ¿Por qué nadie promueve, no digosiquiera una manifestación, pero al menosun “sit-in” (sentada), o alguna cosa? No es-cucho consignas, no llegan documentos, nidemandas, ni propuestas".

CUESTIÓN DE IZQUIERDASY DERECHAS

Debido a que la izquierda se ha limitado adefender solo algunas categorías de losdébiles, "desde hace años, tiene dos gran-des problemas: uno político y otro cultural",dice Annunziata.

"El primero surge por el temor a ser por-tadora de las cuestiones normalmente tra-tadas por la derecha; el segundo por unadeterminada laicidad... una especie de anticlericalismo obsoleto, de anti cristianismo".No es solo una limitación de la izquierda,sino también "de los estados occidentales,culturalmente cercanos a ella, que temendefender a los cristianos por las mismas ra-zones", argumenta la profesional.

EL OPIO DEL PUEBLO

“Hay un tercer problema -continúa Annun-ziata -, que proviene de lo que el periodismollama "anti cristianismo", una especie de"secularismo agnóstico": "La izquierda

-precisa- ha dejado de lado la identidad religio-sa cristiana por considerarlo algo malo. Ella haregresado así a Marx y su definición de "opiodel pueblo". Pero ha terminado poniendo todoen el mismo avión y tirando todo en la mismaolla; donde un musulmán, un cristiano u otroson considerados la misma cosa" .

“El Occidente y "sus gobiernos de izquierda"-dice la directora del Huffington Post- piensanque "defender a los cristianos es el medio paraestablecer una plataforma que eleva la cues-tión a una guerra de civilizaciones y religiones.Se teme desencadenar un mecanismo igual deviolento en oposición al provocado por los mu-sulmanes".

TRASFONDO CULTURAL MORAL

“Por lo tanto, si hoy usted dice: ‘Tenemos quedefender a los cristianos’, le dirán: Bueno, ¿porqué no hemos defendido a los zoroastrianos’?Por amor todos los seres humanos deben serdefendidos, pero con esa excusa estamos evi-tando enfrentar un gran problema. La izquierdatiene que entender que la religión es tambiénuna cuestión de valores, de una historia y unpatrimonio cultural que no se puede ignorar sinacarrear más problemas. Podemos ser ateos-lo destaco-, pero no sin valores".

Cantamos nuestra fe1 Juan 4:16

“Nosotros hemos conocido y creídoel amor que Dios tiene para con no-so-tros. Dios es amor; y el que per-manece en amor, permanece enDios, y Dios en él”.

Hablamos de Dios en términos de amor -con palabras y obras- o estamos creando ateos.

DONDE REINA LA VERDADdonde existe libertad,donde hay paz está presente el Señor. Porque Dios es la verdad, porque Dios es libertad, porque Dios es justicia y amor.Dios nos convoca en el amor.Dios nos reúne en el amor.Porque Dios es Amor, es Amor.Vino a nosotros en el Amor.Vive en la tierra en el Amor.Porque Dios es Amor, es Amor.Nos ilumina en el Amor,nos da la vida en el Amor, porque Dios es Amor, es Amor.El nos conduce en el amor,a un mundo nuevo en el amor.Porque Dios es Amor, es Amor.Nos hizo un pueblo en el amor,un pueblo libre en el amor, porque Dios es Amor, es Amor

DONDE REINA LA VERDADdonde existe libertad,donde hay paz está presente el Señor. Porque Dios es la verdad, porque Dios es libertad porque Dios es justicia y amor.

Lucia Annunziata se declara atea y ajena a lo católico; pero recalca: “Podemos ser ateos, pero no sin valores”

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HIN delató a su madre por planear fu-garse y la asesinaron ante sus ojos.Pensó que merecía morir. Este joven

de 33 años es el único norcoreano nacidoen un campo de concentración que ha lo-grado escapar y contar su historia. La re-coge, en el libro Evasión del Campo 14, elnorteamericano Blaine Harden. Asesinatosde bebés y niños pequeños, torturas hastael desmayo, ejecuciones públicas… sonsólo una muestra de lo que se está vivien-do, hoy, en los seis campos vigentes enCorea del Norte.

SHIN DONG-HYUK nació en 1982 en el“Campo 14”. «Creo que aún estoy evolucio-nando de bestia a ser humano», le dijo aBlaine Harden, corresponsal de The Econo-mist en Asia durante una de sus entrevistas.

Nació de una madre a la que robabacomida y de la que recibía palizas constan-tes. Conoció a un padre «escogido por losguardias para ser el marido de mi madre»,como pago por su habilidad al manejar untorno de metal en el taller mecánico delcampo. Shin nunca asoció «el calor, la se-guridad y el afecto con las palabras madrey padre». Los guardias le inculcaban, tantoa él como a los otros niños, que eran prisio-neros por los pecados de sus padres, yellos se sentían avergonzados de ser unostraidores.

«La única forma de lavar el pecado in-herente era trabajar duro, obedecer e infor-mar sobre sus padres», cuenta Harden.

LOS ASESINATOS

El libro recoge infinitos episodios de tortu-

ras, maltratos y abusos dentro del “Campo14”. Uno de ellos ocurrió en una suerte deescuela, a la que iba Shin con 6 años. Unprofesor –guardia– encontró, tras un regis-tro sorpresa, unos granos de maíz en el bol-sillo de una niña. «Blandiendo adelante yatrás su largo puntero de madera, la golpeóen la cabeza una y otra vez. Mientras Shiny sus compañeros observaban en silencio,se derrumbó sobre el suelo de cemento.Esa misma noche, murió». Shin reconoció,años después, que en aquel momento pen-só que el castigo había sido justo.

Harden recoge varias declaracionesde otros prófugos. Uno de ellos, An MyeongChul, era hijo de un agente de los serviciossecretos norcoreanos. An huyó a Corea delSur, pero, hasta que vio la luz, fue guardiade uno de los campos. El hombre, que firmóun documento en el que aseguraba quenunca revelaría la existencia de los cam-pos, contó a Harden cómo disponían de li-bertad para satisfacer sus apetitos sexualescon reclusas. «Si tenían como resultado unbebé, tanto éste como su madre eran ase-sinados», explica An, quien reconoce habervisto cómo golpeaban con barras de metalhasta la muerte a recién nacidos. La teoríaque se aplicaba era purgar hasta la tercerageneración las familias de quienes no pen-saban de forma adecuada.

LA PRISIÓN

La madre de Shin y su hermano planeabanfugarse. Él los oyó decirlo, escondido tras lapuerta, y como la primera regla del Campo14 es que “todo aquel que sea testigo de unintento de fuga y no informe de la misma se-

rá ejecutado inmediatamente”, no dudó encorrer hasta el colegio e informar a un pro-fesor. Al día siguiente, Shin fue conducidoa una prisión subterránea, y se le aplicarontorturas hasta la extenuación –una de ellasconsistía en colocar una bañera llena decarbón debajo de él, y avivar el fuego conun fuelle– para que explicara los motivosque habían llevado a su familia a tomar esadecisión. Tenía 13 años y pasaron meseshasta que vio la luz. Días después de susalida, ejecutaron a su madre y a su her-mano, «y Shin, mientras los veía, pensóque merecían morir».

A los 23 años conoció a alguien que,por primera vez, le habló de lo que habíamás allá de las vallas. Nueve años des-pués del ahorcamiento de su madre, atra-vesó una valla electrificada y se adentrócorriendo en la nieve. Era el 2 de enero de2005. Un mes más tarde, entró andando enChina. Dos años después, estaba viviendoen Corea del Sur. Pasados otros cuatro, re-sidía en el sur de California y era el emba-jador de Liberty in North Korea.

LOS CAMPOS DE LA VERGÜENZA

Los campos de trabajo de Corea del Nor-te llevan existiendo ya el doble de tiempode los gulags soviéticos, y unas doce ve-ces lo que duraron los de los nazis. «Cen-tros de corrección moral e ideológica», losllama Alejandro Cao de Benós, el españolque ejerce de relaciones públicas de hablahispana para el Gobierno norcoreano. ElDepartamento de Estado USA calcula quehay cerca de 200.000 presos en los seiscampos vigentes hoy. El más grande tiene50 kilómetros de largo y 40 de ancho.

Cristina Sánchez Aguilar

LA VIDA EN LOS CAMPOS DE CONCENTRACIÓN EN COREA DEL NORTE

«Pensé que mi madre merecía morir»

S

«A mí, ¿qué me importa?»En varias ocasiones he definido este tiem-po como un tiempo de guerra, como una ter-cera guerra mundial por partes, en la queasistimos cotidianamente a crímenes atro-ces, a sangrientas masacres, a la locura dela destrucción. Todavía hoy oímos el gritoangustiado y desamparado de muchos her-manos indefensos que, a causa de su fe enCristo o de su etnia, son pública y cruel-mente asesinados –decapitados, crucifica-dos, quemados vivos– o bien obligados aabandonar su tierra.También hoy estamos viviendo una es-pecie de genocidio causado por la indi-ferencia general y colectiva, por el si-lencio cómplice de Caín que clama: «Amí, ¿qué me importa?», «¿Soy yo elguardián de mi hermano?»La humanidad conoció en el siglo pasadotres grandes tragedias inauditas: la primera,que generalmente es considerada como «elprimer genocidio del siglo XX» afligió al pue-blo armenio -primera nación cristiana -juntoa los sirios católicos y ortodoxos, los asirios,los caldeos y los griegos. Fueron asesina-dos obispos, sacerdotes, religiosos, muje-res, hombres, ancianos e incluso niños y en-fermos indefensos. Las otras dos fueronperpetradas por el nazismo y el estalinismo.Más recientemente ha habido exterminiosmasivos, como los de Camboya, Ruanda,Burundi, Bosnia...Da la impresión de que la familia humanano quiere aprender de sus errores, causa-dos por la ley del terror; y así aún hoy hayquien intenta acabar con sus semejantes,con la colaboración de algunos y con elsilencio cómplice de otros que se con-vierten en espectadores. No hemos apren-dido todavía que la guerra es una locura,una masacre inútil. Papa Francisco: Homilia, II de Pascua

Jakiteko1. Emakumea gizonezkoaren menpe bizizen Jesusen garaian2. Elizan, politikan, gizartean … gizonezkoak agintzen zuen.3. Jende aurrean emakumeek ez zeukaten hitz egiterik.

Otoitz egiteko1. Eseri zaitez aulkian, lasaitu eta baretu

zure barrua.2. irakurri poliki-poliki Mateo ebanjela-

riak kontatzen diguna. Bi-hiru aldiz irakurri.

Pentsatzeko1. zer iruditzen zaizu Jesusek

emakumearekin daukan jarrera?

ESAN OTOITZ HAUJesus, zu zera gure itxaropen.zure Ebanjelioak argitzen gaitu une ilunetan.Jainkoak zorioneko nahi gaitu.Eta gure barruko bakeakgure ingurukoak poztu ditzake.

JESUS emakumearen alde

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SALUDSALUD

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Aldalur Ibarbia

BENEFICIOS DEL APIO

Erakuts iEzaguzu otoitz EgitEn

<Idazlari eta fariseuek, ezkontza nahasten aurkitutako emakume bateraman zioten Jesusi, eta erdian zutik ipinirik, esan zioten: “Maisu,emakume hau ezkontza nahasten aurkitua izan da, eta horrelakoakharrika hiltzeko agindu zigun Moisesek Legean. Zuk zer diozu? Eta Je-susek: Zuen artean bekaturik ez duenak bota diezaiola lehenengo ha-rria”> (Mateo 8, 1-11)

na y otra vez se demuestra que los secretos de la buena salud están en la natura-leza. Muchos de estos potentes ingredientes y aniquiladores de enfermedades se

encuentran en nuestros jardines o en nuestros mercados locales. El apio no es la excep-ción. Se ha utilizado por sus propiedades medicinales mucho antes de que se consideraraun alimento. Los beneficios para la salud del apio son enormes.

EL APIO CONTRA EL CÁNCER. Con al menos ocho familiasde compuestos contra el cáncer, incluyendo compuestos aceti-lénicos, ácidos fenólicos y cumarinas, el apio ha demostradoser eficaz en la prevención del cáncer y en estimular los gló-bulos blancos. Los cumarinas, fitoquímicos que se encuentranen el apio, son especialmente útiles en la prevención de loscánceres de colon y estómago.

BAJA LA PRESIÓN ARTERIAL. Facultativos de salud naturalrecomiendan tomar jugo de apio todos los días durante unasemana, deteniéndose durante tres semanas y luego comen-zar de nuevo. Y reduce el colesterol malo (LDL)

LA INFLAMACIÓN. Alivia el asma, la artritis, la gota y la bronquitis. Tiene efectos calman-tes y sedantes. Mejora la función renal, ayudando a romper cálculos renales y en la vesí-cula. Es útil para el tratamiento de infecciones de la vejiga.

ALIVIA LOS SÍNTOMAS DE ALERGIAS. Toma un jugo de zanahoria, apio y jengibre sisufres de alergias (como al polvo o al pelo de animal) o fiebre del heno.

PÉRDIDA DE MEMORIA. La luteolina que contiene, puede reducir los niveles de las pro-teínas formadoras de placas en el cerebro. Se cree que reduce el riesgo de enfermedadescomo el Alzheimer.

AYUDA A LA DIGESTIÓN. Los minerales en el apio, particularmente en el jugo de apio,ayudan a equilibrar el pH de sangre del cuerpo y neutralizar la acidez, mientras que tam-bién ayudan para la digestión y úlceras estomacales.

CALMA EL SISTEMA NERVIOSO. Minerales alcalinos orgánicos, que también se encuen-tran en el jugo de apio y el té de semillas de apio, tienen un efecto muy relajante en el sis-tema nervioso, lo que es ideal para las personas con ansiedad, trastornos relacionados alestrés e insomnio.

Sarah Schwager

U

1716

S. Ruiz de Loizaga

enedicto XVi fue elegido Pa-pa el 19 de abril de 2005; tu-vo un pontificado de casiocho años de duración. Fue

sumo pontífice número 265 de laiglesia católica y soberano de laCiudad del Vaticano. resultó serelegido tras el fallecimiento del hoysanto, Juan Pablo ii. En febrero de2013 anunció su renuncia por suedad avanzada (85 años). Hoy es elPapa emérito de la iglesia.

José ratzinger nació en un pueblode Baviera en abril de 1927. Era eltercer hijo del matrimonio de Maríarieger y de José ratzinger.

El 13 de marzo, el argentino Jorge

La actual vida delex Papa eméritoBenedicto XVI

Mario Bergoglio es electo sumoPontífice adoptando el nombre deFrancisco, primer Papa hispanoa-mericano de la historia.

¿CÓMO ES LA VIDA DEL EX PAPABENEDICTO XVI EN EL VATICANO?

su actual secretario, el arzobispogeorge gänswein (de 59 años), enuna entrevista reciente no duda enafirmar cómo Benedicto XVi estáconvencido de que la decisión to-mada y comunicada en su día hayasido la más justa. Está muy serenoy cierto de esto: su decisión era ne-cesaria, tomada “después de haberrepetidamente examinado la con-ciencia delante de Dios”. El consta-tar que las fuerzas del cuerpo y delánimo disminuían día tras día, el he-cho de deber mirar no tanto a supropia persona sino al bien de laiglesia fue lo que le movió a hacersemejante renuncia. Fue un grandí-simo acto de gobierno en favor de laiglesia, pues, la iglesia tiene necesi-dad de un timonel fuerte. Fue, pues,Benedicto XVi quien tomó esta de-

cisión de modo libre, sin ningunapresión, afirma su secretario.

Benedicto XVi vive actualmente–junto con su secretario- en un pe-queño convento denominado MaterEcclesiae sobre la colina del Vatica-no asistido por algunas monjas se-glares. Este pequeño edificio dondereside el ex Papa incluye una capi-lla, una biblioteca y habitaciones pa-ra sus ayudantes y una habitaciónde huéspedes para su hermano ma-yor, Jorge, que es un monseñor.

Benedicto XVi es hoy un hombrede 88 años. Como es normal porsu edad, de cuando en cuando suspiernas le dan algún que otro pro-blema. su ritmo diario es muy me-tódico. Y su cabeza funciona muybien, pues conserva una menteformidable.

“Cuando la universidad urbanianade roma –que le ha dedicado unaaula (sala)- y el cardenal Filoni (rec-tor de dicha universidad) le ha pro-puesto en octubre pasado una lec-ción para el inicio del cursoacadémico, Benedicto XVi ha escri-to una texto bellísimo sobre “la

cuestión de la verdad, que me hapedido leerla yo en vez de él…”.

¿CÓMO PASA SUS JORNADAS?

su jornada tipo comienza con la mi-sa a la mañana, como siempre, a las7,45. Después el agradecimiento, elrezo del breviario, un breve desayu-no. Durante la mañana reza, lee, es-tudia, arregla y despacha la corres-pondencia y algunas veces recibealgunas visitas.

Hacia la una y media come junto asu secretario y posteriormente pase-an en la terraza dos o tres vueltas,antes de ir a reposar. “a las cuatro ycuarto bajamos a los Jardines Vati-canos. a Benedicto XVi le gusta,ama pasear: caminamos hacia lagruta de Lourdes, rezamos, recita-mos el rosario. Más tarde hay toda-vía tiempo para la oración, para elestudio. Cenamos a las siete y me-dia y vemos el telediario italiano.Luego, Benedicto XVi reza Comple-tas en la capilla y después se retira.alguna que otra vez suena el piano,sobre todo Mozart, pero asimismo

B

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Agradecidos

Difuntos

otros autores que le vienen a lamente, suena de memoria”.

ratzinger eligió llamarse, de pontí-fice, como el padre del monaquismooccidental: San Benito. sus jorna-das, por tanto, recuerdan, evocanlas de un monje… sí, ha elegidouna vida monástica, recoleta. salesólo cuando se lo pide el papa Fran-cisco. Por lo demás no acepta otrasinvitaciones. se regula como ha de-cidido: ha elegido esta vida -dice- y

debo permanecer coherente con midecisión.

Benedicto y Francisco son diver-sos, como es natural. Pero, ¿quécosas, qué aspectos les unen, lesaúnan? sí, son diversos, distintos,incluso muy diferentes, sobre todoen los modales y modos de expre-sarse. Pero les une la sustancia, elcontenido, el “depósito de la fe” deanunciar, de promover y de difundirlos valores del Evangelio.

Vitoria - María Pilar Sáez de Ybarra - Inés Zabalza MendicuteBilbao - Andresa López de Iturrate - Antonio de PabloLogroño - Emilia Sanchidrián

Puerto Rico - Florencio Landa, pasionistaAraia - José VallejoBilbao - Amalia Abascal AbascalCárcamo - José María Beltrán de Salazar VaronaMenagaray - María OriveTertanga - Javier Oqueranza OrtizVillanañe - Emilio López SalazarVitoria - Gerónimo Iturrate - Serapia Plágaro Ullivarri -

Francisca Barrón Mardones

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PAGINA para la SONRISA y para la VIDA

SustraianCuento-Parábola

EL GRAN ÁRBOL

n el centro de un bosque había un gran árbol, un magnífico árbol para los que lo veían. Asu sombra se sentaban a descansar los caminantes y en sus ramas los pájaros construíansus nidos. Pero un día las ramas dijeron: - «¿Veis lo importantes que somos? Causamos la

admiración de todos los que nos ven y los pájaros están muy contentos de vivir con nosotras...Además, ¡qué colorido tan maravilloso tienen nuestras hojas! ¿Qué tenemos nosotras que ver conese sucio y gordo tronco, tan feo y horrible, y cuánto menos con esas apestantes raíces queestán todo el día bajo tierra?». Y decidieron que desde aquel día vivirían solas sin necesitar denadie.

El tronco por su lado dijo: - «¿Qué sería del árbol sin mí? Soy quien sustenta a las ramasy doy vigor a todo el árbol. Si yo no estuviese aquí las ramas no tendrían fundamento ni saviaque les diese colorido y vida... Soy, ciertamente, el más fuerte e importante».

- «Nosotras sí que somos bien importantes, -dijeron las raíces-. El árbol no podría subsistirsin nosotras, que absorbemos de la tierra la sustancia con la que producimos el alimento que sus-tenta al tronco y a las hojas. Por eso, no tenemos nada que ver con ese tronco tan antipático ygordo, y menos con esas ramas tan creídas. Desde hoy nos alimentaremos nosotras solas y no da-remos nuestra savia a nadie».

Y así hicieron. El gran árbol comenzó a secarse. Las hojas se cayeron y el tronco se quedó sin unagota de savia. Las raíces estaban más tristes que nunca. Los pájaros abandonaron los nidos cons-truidos en las ramas y la gente que pasaba por el bosque ya no se sentaba a tomar un descansoa su sombra... Todo el bosque estaba muy triste porque el gran árbol se estaba muriendo.

Pero, poco a poco, las raíces, las ramas y el tronco se dieron cuenta de que no podían vi-vir separados, que estaban hechos unos para otros y que la importancia no era de cada uno, sinodel árbol que todos formaban... Así que las raíces dejaron de guardarse la savia sólo para ellas yse la dieron al tronco. Éste, al principio, se negaba a participar, pero al fin también colaboró. Lasramas se alegraron al recibir la primera gota de savia y pidieron perdón al tronco y a las raíces porhaberlos despreciado. Todo volvió a ser como antes. Los pájaros siguieron anidando en las ramasy la gente sigue tomando la sombra bajo su copa.

El árbol ya está de nuevo feliz y el bosque se alegra con él.

COMPROMISO DE VIDA.No está nada mal este cuento-parábola para ir terminando el curso, realizar una evaluación per-sonal y grupal y ser consecuentes con lo descubierto. ¿Te animas? ¿Nos animamos?

E