La Soberbia De La Ingratitud Pastor Milton Méndez Guatemala, 25 de octubre del Año De La Revelación

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La ley de la primera mención dice que es, como la base de lo que se derivará aquello que estemos estudiando. Partiendo de ahí, podemos decir que también existe en la alabanza y adoración, por eso necesitamos ver cuándo es que aparece por primera vez la adoración, lo cual debe ser cuando entregamos lo que tenemos en el corazón, de igual forma en la alabanza, entonces debemos ver cuál es el inicio de la palabra alabanza; lo que nos lleva a la Biblia para ver que nace en una persona, que al nacer, su mamá lo nombró Judá después de haber pasado mucho tiempo buscando el agrado de su esposo; fue precisamente por el hecho de estar agradecida con Dios lo que hizo entonces nombrar Judá a su hijo; dicho en otras palabras, Judá, nombre que significa alabanza, es sinónimo de agradecimiento (Génesis 29:34). Por otro lado, surge la interrogante de ¿cuál es el peor pecado que una persona puede cometer?, es la arrogancia de la ingratitud, olvidándonos con eso que Dios es infinitamente bueno, la bondad del Señor es inmensa; sin embargo cuando recibimos una mala noticia, lo primero que pensamos en que Dios se ha olvidado de nosotros, en lugar de agradecerle por estar en Su perfecta voluntad. Salmos 100:5 (LBLA) Porque el SEÑOR es bueno; para siempre es su misericordia, y su fidelidad por todas las generaciones. 1 Crónicas 16:34 (LBLA) Dad gracias al SEÑOR, porque El es bueno; porque para siempre es su misericordia. 1 Tesalonicenses 5:18 (LBLA) …dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús. ¿Qué misterio puede haber en dar gracias a Dios, aun cuando las cosas no salen como esperamos?, agradecemos aunque no conocemos a Dios, porque si lo conociéramos, todo lo que sucede a nuestro alrededor no tendría duda; por eso necesitamos caminar por fe sabiendo que todo lo que podamos recibir, si estamos en la voluntad de Dios, tendrá un propósito debidamente definido porque El es bueno. Hechos 12:23 (NVI) Al instante un ángel del Señor lo hirió, porque no le había dado la gloria a Dios; y Herodes murió comido de gusanos. Dios cortó la vida de aquel hombre porque se llenó de arrogancia por algo que no había hecho, realmente no tenía ningún crédito que le correspondiera. 1 Corintios 4:7 (NVI) ¿Quién te distingue de los demás? ¿Qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué presumes como si no te lo hubieran dado? DEJAMOS DE DEPENDER DE DIOS Lucas 11:13 (NVI) Pues si ustedes, aun siendo malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¡cuánto más el Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo pidan! A veces los silencios o tardanzas que Dios permite en nuestra vida, puede provocarnos cierto nerviosismo; sin embargo deberíamos comprender cuando Dios nos está diciendo NO, quizá

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porque no es el tiempo para darnos lo que le estamos pidiendo, su silencio es sinónimo de AÚN NO. Además recordemos que Dios manifiesta Su voluntad a nuestra vida, muchas veces en una voluntad permisiva la cual nos deja que hagamos lo que queramos hacer, aunque nos sea es precisamente Su voluntad, porque cuando El responde manifestando Su voluntad absoluta, sin importar lo que pensemos, tenemos que hacer lo que Dios diga y sin importar lo que hagamos, terminaremos haciendo lo que El desea que hagamos. Es por eso que debemos aprende a esperar el tiempo del Señor en todo lo que le pidamos. ME VUELVE PESIMISTA SOBRE EL FUTURO El problema que a veces tenemos es que el hecho de esperar el tiempo del Señor, nos lleva a pensar de forma pesimista, pero no porque Dios quiere que seamos pesimista, sino que es nuestro carácter el que nos lleva a ese punto. Salmos 27:13 (LBLA) Hubiera yo desmayado, si no hubiera creído que había de ver la bondad del SEÑOR en la tierra de los vivientes. Cuando vemos entonces la respuesta de Dios a nuestra vida, dejamos de hacer oraciones con signos de interrogación, para sustituirlas por oraciones con signos de admiración. Salmos 27:14 (LBLA) Espera al SEÑOR; esfuérzate y aliéntese tu corazón. Sí, espera al SEÑOR. CIERRAS LA PUERTA QUE DIOS TE CONTINÚE BENDECIDO Esta es otra razón por la que no debemos perder de vista la bondad de Dios, de esa manera nos convertiremos en un testimonio vivo de la bondad de Dios. Lucas 17:17 (LBLA) Respondiendo Jesús, dijo: ¿No fueron diez los que quedaron limpios? Y los otros nueve… ¿dónde están? Aquí lo que podemos ver es que existía un diezmo de un todo; el que fue agradecido solamente fue uno; ese uno es el que representa el agradecimiento de aquellos que Dios restauró eternamente, porque los 9 leprosos que recibieron sanidad, fue una bendición pero solamente para tenerla en la Tierra, mientras que aquel leproso que fue sano pero regresó con Jesús, recibió bendición eterna. Juan 5:12-14 (LBLA) Le preguntaron: ¿Quién es el hombre que te dijo: “Toma tu camilla y anda”? 13 Pero el que había sido sanado no sabía quién era, porque Jesús, sigilosamente, se había apartado de la multitud que estaba en aquel lugar. 14 Después de esto Jesús lo halló en el templo y le dijo: Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te suceda algo peor. Una pregunta: ¿qué había llegado a hacer al templo el hombre que era paralitico? Porque ya era sano, pero llegó para recibir el milagro que Jesús había de hacer en él eternamente; le había solucionado su problema físico, pero eso era temporal, lo que él necesitaba era que le solucionara su vida eterna. De aquí podemos ver entonces que los que amamos al Señor, toda las cosas que sucedan en nuestra vida se tornarán para bien.

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1 Crónicas 16:34 (LBLA) Dad gracias al SEÑOR, porque El es bueno; porque para siempre es su misericordia. Recordemos que aunque las cosas a nuestro alrededor no sean positivas, Dios no cambia porque Su misericordia es para siempre, Su amor es eterno, Dios es bueno en todo momento. Si nos va bien… Dios es bueno, si nos va mal… igualmente Dios es bueno; El no depende de los problemas que estemos viviendo, Dios seguirá siendo bueno y por eso nos extenderá la mano para sacarnos del problema en el que estemos sumidos, por consiguiente procuremos un corazón agradecido en nuestra vida porque sin importar las circunstancias que vivamos, siempre veremos la bondad del Señor.