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LA CORONA Y LOS CUERPOS TÉCNICOS DEL REINO
LA RECUPERACIÓN DE SU DIGNIDAD Y LA DEL RESTO DE
TITULADOS UNIVERSITARIOS A TRAVÉS DE FÓRMULAS
ACADÉMICAS COMPLETAS DE REPRESENTACIÓN
CEREMONIAL EN EL MARCO DE BOLONIA.
R.ORANTOS PhD.
UNIVERSITAS EXTREMATURENSIS
NORBA CAESARINA 2018
EL PAIS LITERARIO EDITORIAL
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El País Literario Editorial
LA CORONA Y LOS CUERPOS TÉCNICOS DEL REINO. LA RECUPERACIÓN DE
SU DIGNIDAD Y LA DEL RESTO DE TITULADOS UNIVERSITARIOS A TRAVÉS DE
FÓRMULAS ACADÉMICAS COMPLETAS DE REPRESENTACIÓN CEREMONIAL
EN EL MARCO DE BOLONIA.
Rodolfo Orantos Martín
Copyright
Rodolfo Orantos Martín
El País Literario Editorial
Derechos reservados anti copia
ISBN 978-84-090-19558
Depósito Legal CC-000026-2018
Cáceres.
Comunidad Autónoma de Extremadura
Reino de España
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BIBLOS
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Plaza Culturas de América
Cáceres
Fecha de fin de la revisión para impresión
15 de septiembre de 2018
78 páginas
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expresa o con permiso previo y por escrito de los titulares.
(Las fotos no reseñadas son del autor)
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Rodolfo Orantos Martín
(Extremadura, 1962)
- Mediador Civil y Mercantil Titulado
Inscrito en el Registro Oficial de Ministerio de Justicia
Reino de España
- Grado Arquitecto Técnico.
Escuela Politécnica Superior
Universidad Alfonso X el Sabio.
- Economía y Dirección de Empresa.
Programa de Desarrollo de Directivos. Residencial.
Instituto de Estudios Superiores de Empresa. IESE.
Universidad de Navarra.
- Máster Oficial Universitario de Investigación en Ciencias Sociales y Jurídicas.
Especialidad de Empresa y Especialidad de Turismo.
Premio Encina de Oro al mejor Trabajo de Fin de Máster.
Facultad de Empresa, Finanzas y Turismo.
Universidad de Extremadura.
- Doctor por la Universidad de Extremadura.
Programa Oficial de Doctorado de Derecho Público.
Premio Extraordinario de Doctorado
Facultad de Derecho.
Universidad de Extremadura.
En la portada la uniformidad de un Ingeniero de Edificación que además es
Doctor, Máster Oficial Universitario, Grado Oficial Universitario y cuenta con un
título propio de una universidad, portando los pasadores académicos
correspondientes, respectivamente, rojo, naranja, marrón y granate.
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INDICE
Página 07
1.- A modo de introducción. La Corona, impulsora del reconocimiento social de los
cuerpos técnicos profesionales.
Página 11
2.- Primera Parte. Bolonia, un cambio sustancial.
Página 15
3.- Segunda Parte. Varias cualificaciones académicas y una sola capacitación
profesional.
Página 23
4.- Parte Tercera. De la recuperación del acto de aceptación de la responsabilidad
derivada de la titulación de Bachiller, Grado, Máster y Doctor.
Página 29
5.- Parte Cuarta. La identidad y la dignidad de los Cuerpos Técnicos del Reino. La
Uniformidad Civil
Página 60
Conclusiones
Página 61
Bibliografía
Página 63
Anexo Primero
Página 87
Anexo Segundo
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LA CORONA Y LOS CUERPOS TÉCNICOS DEL REINO. LA RECUPERACIÓN DE
SU DIGNIDAD Y LA DEL RESTO DE TITULADOS UNIVERSITARIOS A TRAVÉS DE
FÓRMULAS ACADÉMICAS COMPLETAS DE REPRESENTACIÓN CEREMONIAL
EN EL MARCO DE BOLONIA. 1
Rodolfo Orantos Martín 23
Doctor por la Universidad de Extremadura
Programa Oficial de Doctorado de Derecho Público
Premio Extraordinario de Doctorado
Resumen
La reforma del Espacio Europeo de Estudios Superiores ha supuesto en el Reino de
España una importante modificación de la relación entre titulaciones universitarias y
actividades profesionales que hace necesaria una correcta explicación. Entre estos
estudios los más afectados son los de carácter técnico, que por otra parte gozan de
importante tradición y reconocimiento. Analizamos y hacemos propuestas relacionadas
con una de sus más genuinas formas de presencia social: la uniformidad civil.
Abstract
The reform in the European Higher Education Area has been in the Kingdom of Spain
a major modification of the relationship between university degrees and professional
activities, which makes necessary a correct explanation. Among these studies, the
most affected are those of technical nature that, on the other hand, have an important
tradition and recognition. We analyze and make proposals releated to one of its most
genuine forms of social presence: civil uniformity.
1 Ceremonia (Ceremony) Una Ceremonia es un conjunto de acciones, de naturaleza esencialmente simbólica, que se
desarrollan dentro de unas circunstancias definidas y apropiadas para provocar un conjunto de sentimientos entre los
que participan o asisten a ellas. Como tal, la mayoría de las veces sirve para expresar la cohesión de un grupo social y
para reforzarlo. La ceremonia sirve igualmente para confirmar el sistema de valores del grupo manifestando sus
símbolos. ( Cazeneuve et Victoroff, 1975, 47) 2 Al citar a la Corona queremos establecer una dualidad, por una parte la vinculación de Su Majestad el Rey con la
concesión de los Títulos Académicos y por otra como expresión globalizante de todas las Administraciones del
Reino. 3 Ordinario dell’Accademia Tiberina Già Pontificia di Roma. Fondata il 9 aprile 1813. Istituto universitario italiano
dal 8 aprile 1949. Correspondiente del Instituto de Historia Balear. Máster Oficial Universitario de Investigación en
Ciencias Sociales y Jurídicas por la Universidad de Extremadura, especialidad de Empresa y especialidad de
Turismo. Facultad de Empresa, Finanzas y Turismo. Grado Arquitecto Técnico por la Universidad Alfonso X el
Sabio. Escuela Politécnica Superior. Economía y Dirección de Empresa Programa de Desarrollo Directivo por la
Universidad de Navarra. Instituto de Estudios Superiores de Empresa. IESE. Mediador Civil y Mercantil Titulado
por la Asociación Española de Mediación. Presidente de la Cámara Europea de Mediación Internacional.
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1. A modo de introducción. La Corona, impulsora del reconocimiento social de los
cuerpos técnicos profesionales.
El destacado interés de la Corona, desde tiempos de Su Majestad el Rey de
España Don Felipe V, por el desarrollo de la ciencia y la tecnología ha tenido distintos
escenarios que van desde la fundación de las Reales Academias - en especial la de
San Fernando - no solo en este ámbito técnico sino también en el de las humanidades,
hasta una prolija y detallada normalización y reglamentación de las capacidades,
actividades, competencias profesionales y modos de representación de lo que hemos
venido en llamar los Cuerpos Técnicos del Reino, es decir los Aparejadores, los
Arquitectos y los Ingenieros, ordenados alfabéticamente de preferencia.
Interés que arranca en época moderna en 1802 y 1814 respectivamente. En la
primera fecha se crea el Colegio Científico, precursor del Cuerpo de Ingenieros Civiles
y en la segunda, con la fundación del Conservatorio de Artes, se crea el precedente
directo de la primera Escuela de Ingeniería Industrial de España, el Real Instituto
Industrial de Madrid (Silva Suárez, 1999, 15)
En 1835 con el Real Decreto de 30 de abril del Ministerio del Interior se crea el
Cuerpo de Ingenieros Civiles, con el decisivo impulso de la Corona. Así bajo mandato
de Francisco de Paula Martínez de la Rosa se dicta la disposición integradora de todas
las competencias técnicas de la administración del Reino en un único Cuerpo de
Ingenieros Civiles, organizado en cuatro Inspecciones: Bosques; Caminos; Geógrafos
y Minas, también citados en orden alfabético. (Silva Suarez, 1999, 17)
El impulso tiene su mayor expresión en el reinado de Su Majestad el Rey Don
Alfonso XIII, que llega a presidir en uniforme de Ingeniero Civil la celebración del
primero Congreso Nacional de la Ingeniería en Madrid entre el 16 y el 25 de noviembre
de 1919.
Es el distintivo del Rey, el de las ramas de laurel, con las tres barras o galones que
las entrelazan y que indican categoría de Inspector General, proclamando la serreta
que es de primera clase. (Silva Suárez. 1999. 14)
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Posteriormente, con legislaciones derivadas y hasta bien entrado el siglo XX, se
desarrolla todo un eficaz cuerpo normativo identificador de aquellos que pueden
definirse como titulados técnicos, los Técnicos del Reino, produciéndose después y a
finales de ese siglo una pérdida del espíritu de cuerpo, de su tejido identificador y
conformador en la sociedad civil, que se confunde en una constante complicación de
competencias profesionales y el fin de la referencia de prestigio que habían hecho
hasta el momento de los técnicos unos verdaderos agentes de cambio social, de
conocimiento intelectual, de generación de infraestructuras, de activación económica y
de creación de empleo.
Analizaremos aquí tres cuestiones básicas, relacionadas con el futuro de los
Cuerpos Técnicos del Reino; la primera relacionada con la explicación de la nueva
configuración académica de los estudios universitarios, con ejemplo particular los de
Aparejador y los de Arquitecto; la segunda en relación con la necesaria definición de la
actividad en la que los Colegios Profesionales están llamados a una nueva e
interesante labor de control y capacitación que se suscita desde el momento en que la
independencia universitaria a la hora de definir titulaciones hace posible que varias de
estas sean competentes para una sola actividad técnica y profesional; y la tercera,
relativa a la adecuación a los tiempos de la uniformidad civil de los Cuerpos Técnicos
del Reino, que como en el caso de los diplomáticos y los militares, pero sin ser
exclusivamente para los que son funcionarios, cuentan también con esta distinción que
caracteriza su identidad profesional.
Es esta una reglamentación en vigor, que necesita una revisión y unificación, sin
olvidarnos por último de una importante referencia al ceremonial de ingreso en la
universidad y la necesidad de adecuación y revisión también de la normativa
reguladora del traje académico.
Con todo ello pretendemos hacer primero el estudio y luego realizar una propuesta
de puesta en valor de la identidad profesional técnica, con la uniformidad, y por otro
lado de la académica, con el ceremonial adecuado. Y esto lo hacemos porque no es
fácil tener un título universitario, lo que se consigue con un duro trabajo, disciplina y
dedicación no exclusivamente personal, sino también familiar. Ello hace necesaria una
simbólica y representativa presencia social que no otorga derecho ni establece
desigualdad alguna, pero que identifica a quien ha interiorizado en forma de título
académico un innegable esfuerzo intelectual.
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Su Majestad el Rey Don Alfonso XIII con uniforme de gala de Ingeniero Civil
Inspector General de Minas
1925
(Silva Suárez, 1999, 66)
Su Majestad el Rey Don Alfonso XIII con uniforme de gran gala de Ingeniero Civil
Inspector General de Caminos
1918
(Silva Suárez, 1999, 73)
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2. Primera Parte. Bolonia, un cambio sustancial.
La unificación del espacio universitario europeo está causando y está por causar
beneficios insospechados en materia de movilidad laboral e integración social y
económica en la Unión Europea, pero sin embargo en España quizás el país que más
grandes acomodos ha tendido que hacer al nuevo sistema, está pendiente de
explicación suficiente y causa sorpresa y casi vergüenza como multitud de organismos
públicos siguen acudiendo a la terminología y clasificaciones académicas
desaparecidas en convocatorias oficiales de empleo público. Ha desaparecido la
distinción entre titulaciones, así Arquitectos, Arquitectos Técnicos, Diplomados,
Ingenieros, Ingenieros Técnicos y Licenciados, ya son sólo titulados universitarios. Las
antiguas titulaciones de tres o cuatro cursos académicos se han integrado en los
nuevos ciclos formativos de tres o cuatro años y mínimos de 180 o 240 créditos, a
razón de 60 créditos por curso. Es lo que se llama ahora el Grado Oficial Universitario,
siendo el mismo en unos casos habilitante para el ejercicio profesional y en otros, sin
embargo, es necesaria la continuidad hasta el Máster para alcanzar esta habilidad.
Una parte de las profesiones a ejercer son además, profesiones reguladas, no siendo
sólo suficiente el título académico para ejercer la profesión o donde las competencias
profesionales están minuciosamente establecidas en leyes y reglamentos. El Máster,
concretamente el título de Máster Oficial Universitario, al que se equiparan las
antiguas titulaciones de cinco o seis cursos académicos, con la desaparición de las
licenciaturas que van cayendo en desuso como otras titulaciones homologadas en el
pasado, peritos, y profesores mercantiles por ejemplo, puede ser de uno o de dos
años y contar por tanto con 60 o con 120 créditos, y a su vez puede ser habilitante
para el ejercicio profesional o de investigación, o mixto de ambos, permitiendo sólo el
de investigación o esta parte del mixto con un mínimo de 60 créditos calificados como
de ejercicio investigador, el acceso al doctorado. Para aclarar bien: Un Máster es un
título no oficial otorgado por quien no es una universidad; Máster Universitario, es una
titulación no oficial otorgada por una universidad, título propio de la misma se entrega
por el Rector o en su nombre; Máster Oficial Universitario, titulación universitaria que
se entrega en nombre de Su Majestad el Rey, las antiguas licenciaturas son sus
homólogas. El Máster Oficial Universitario si es sólo de formación o habilitante para el
ejercicio profesional no da acceso al doctorado; pero cuando es de investigación, si
permite doctorar. Este Máster de Investigación dura un curso académico, con unas
veinte horas semanales de clase, exámenes y trabajos, además de la lectura del TFM.
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Por último el estado de mayor grado es el del título de Doctor, que mantiene su
denominación tradicional, aunque se ha endurecido el acceso al mismo. Pero el
cambio sustancial y definitivo en este grado es el del paso al doctorado a través de la
trayectoria vertical, llámese diplomatura, licenciatura y doctorado en una materia, a
otro sistema muy distinto
Efectivamente en el nuevo concepto, quien es Máster Oficial Universitario de
Investigación, puede presentar su proyecto – programa – memoria de tesis doctoral en
cualquier departamento universitario, que no tiene que ser necesariamente
relacionado con la materia estudiada en el Grado o en el Máster. Aprobado el proyecto
de tesis en el departamento, cuando este crea que tiene entidad para ello, se pasa a
doctorar en el Programa Oficial de Doctorado vinculado a ese departamento. Se pasa
así de ser Doctor en algo, a ser Doctor por una Universidad con mención a
continuación al Programa Oficial de Doctorado en el que se ha leído y defendido la
tesis, es la nueva fórmula de trayectoria horizontal.
Entrando en el campo concreto de los Cuerpos Técnicos del Reino, todas las
ingenierías se han integrado, siendo las competencias profesionales de los antiguos
Ingenieros Técnicos asumidas por los nuevos Grados Ingenieros, cuentan con un
Grado Oficial Universitario en una ingeniería, que pueden continuar con sus estudios
de Máster. Obtenido el título de Máster Ingeniero, Máster Oficial Universitario, se
adquieren las competencias profesionales de los antiguos Ingenieros. El proceso, que
no es complicado pero no está cerrado en su totalidad y ha tenido excepciones.
Así en el caso de los Arquitectos es el único titulado competente profesionalmente
el Máster Arquitecto, siendo la titulación académica de Grado Arquitecto una
excepción profesional, dado que no tiene competencia alguna, si bien faculta para el
acceso opositor a la función pública. Así mismo la generación de la titulación
académica de Grado Oficial Universitario en el ámbito de la Arquitectura Técnica, ha
motivado la aparición del Máster Oficial Universitario y del Doctorado en esta rama del
conocimiento técnico mixta de la arquitectura y la ingeniería, pero en todos los grados
con las mismas competencias profesionales, siendo la mayor novedad la que permite
a estos titulados realizar estudios de ciclo completo universitario: Grado, Máster y
Doctor.
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Es por tanto que la falta de, digamos fusión, de Arquitectos y Arquitectos Técnicos al
modo de Ingenieros e Ingenieros Técnicos provoca estas especialidades, un Grado
Oficial Universitario sin competencias profesionales para los Arquitectos, y un
Doctorado, un Máster Oficial Universitario y un Grado Oficial Universitario con las
mismas competencias profesionales en el caso de los Aparejadores, entendida esta
denominación como la profesional con independencia de las titulaciones académicas,
lo veremos.
Esta explicación general, no siempre dada, es necesaria, pues existe confusión en
homologación de los títulos antiguos, que caerán poco a poco en desuso, y los
nuevos. Algunas administraciones públicas consideran el Máster Oficial Universitario
una especialidad y no un título pleno, o no saben de la distinción del Máster Oficial
Universitario de otros estudios, que se llaman también Máster pero que no son
oficiales, aunque pueden ser universitarios y que no son otorgados en nombre de Su
Majestad el Rey por el Excelentísimo y Magnífico Rector que corresponda. También se
equiparan erróneamente las antiguas licenciaturas al Grado Oficial Universitario,
incurriendo en una evidente rebaja del nivel de las mismas, desconociendo la
legislación aplicable en la Unión Europea y en el Reino de España. Y decimos
rebajando el nivel en contraposición e ignorancia de lo dispuesto en el Real Decreto
967/2014, de 21 de noviembre, por el que se establecen los requisitos y el
procedimiento para la homologación y declaración de equivalencia a titulación y a nivel
académico universitario oficial y para la convalidación de estudios extranjeros de
educación superior, y el procedimiento para determinar la correspondencia a los
niveles del marco español de cualificaciones para la educación superior de los títulos
oficiales ya desaparecidos de Arquitecto, Ingeniero, Licenciado, Arquitecto Técnico,
Ingeniero Técnico y Diplomado.
Efectivamente, los Diplomados, Arquitectos e Ingenieros Técnicos son
correspondientes y homologados con el rango MECES 2, nivel 6 en el marco europeo
de cualificaciones (EQF), es decir son Grado Oficial Universitario; los Licenciados,
Arquitectos e Ingenieros son correspondientes y homologados con el rango MECES 3,
nivel 7 en el marco europeo de cualificaciones (EQF), es decir son Máster Oficial
Universitario; y los Doctores tienen todos, el rango MECES 4, nivel 8 en el marco
europeo de cualificaciones (EQF).
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No es que los diplomados y licenciados reciban la titulación académica de Grado o
Máster, que solo pueden recibir quien cursa estos nuevos estudios, sino que son a
todos los efectos legales y profesionales como los Grado o Máster, cada uno en su
caso y a todos los efectos oficiales, administrativos y públicos, tanto en España como
en el resto de la Unión Europea. Es una inteligente salida que se ha gestionado bien
para evitar que los antiguos títulos, en algunos casos sin años ya de vigencia en
nuestro entorno europeo, no fuesen considerados profesionalmente en el resto del
continente. Sin embargo lo hecho para salir fuera, sigue encontrado resistencias en
nuestro país. Ya no hay más que Grado o Máster, titulados u homologados, según los
casos. Otra cosa es la relación entre la titulación académica y el ejercicio profesional,
cuestión a la que pasamos a continuación y en la que los Colegios Profesionales
tienen mucho que decir.
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3. Segunda Parte. Varias cualificaciones académicas y una sola capacitación
profesional.
La independencia que tienen las universidades para establecer e impartir distintas
titulaciones académicas para una sola actividad profesional, así como la de establecer
ciclos de Grado de tres o cuatro cursos, o de Máster de uno o dos años abre una
incidencia que es necesario resolver, dado que ya no existe la correspondencia directa
entre la titulación académica y la profesión, por lo que definidas las primeras en el
marco universitario es necesario concretar la segunda y en ese papel tienen una
importante misión los colegios profesionales.
Son las universidades y no el Gobierno quien decide la duración y contenidos de
las titulaciones, que establecen su rango en el nivel de créditos ects (European Credit
Transfer and Accumulation System / Sistema Europeo de Transferencia y Acumulación
de Créditos) Así puede haber mismas titulaciones de Grado, o de Máster, que tengan
distinta carga de créditos por haber decidido una universidad complementar sus
titulaciones con otros conocimientos que ha considerado interesantes, si bien siempre
habrá un mínimo de 180 créditos para el Grado, 240, para el Máster, 60 para el Máster
con investigación y 300 para el Doctorado, niveles mínimos y oficiales imprescindibles.
Nos encontraremos con una calidad en la titulación, vinculada a la universidad de
origen, que es modelo en Norteamérica y buena parte de Europa desde hace años
pero desconocida hasta la reforma de Bolonia en España. Podrán tener estas
titulaciones denominaciones similares en distintas universidades, pero para un análisis
comparativo habrá que estudiar su carga académica, dado que puede no ser la
misma.
Igual ocurre con los estudios de Máster, que ya cuentan según las ofertas con uno
o dos años, con 60 o 120 créditos y pueden ser sólo habilitantes para el ejercicio
profesional, habilitantes y de investigación, o sólo de investigación. Como ya hemos
dicho en todo caso sólo un mínimo de 60 créditos de investigación son los únicos que
dan acceso a los estudios de doctorado.
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Esto hace necesaria estudiar la vinculación de las diferentes titulaciones
académicas con la profesión a ejercer, sobre todo en las profesiones reguladas, para
determinar qué programas oficiales universitarios de Grado o Máster habilitan para su
ejercicio. Utilizando como ejemplo el ejercicio de la profesión de Aparejador, profesión
regulada desde 1855, Real Decreto de 24 de enero y 1895, Real Decreto de 20 de
agosto, que se puede ejercer con las titulaciones académicas de Grado, Máster o de
Doctor, se cuenta en el Reino de España con la siguiente oferta universitaria de
acceso en el primero de esos niveles:
- Grado en Ingeniería de Edificación
- Grado en Ingeniería de la Edificación
- Grado en Edificación
- Grado en Arquitectura Técnica
- Grado en Ciencias y Tecnologías de la Edificación
- Grado en Ciencias y Tecnologías de Edificación
- Grado Ingeniero de Edificación
- Grado Ingeniero de la Edificación.
Tenemos así por tanto ocho denominaciones académicas para la misma actividad
profesional en la oferta universitaria española, ello sin contar con los antiguos
Aparejadores, Arquitectos Técnicos y Arquitectos Técnicos en Ejecución de Obra,
ahora homologados al Grado.
Contamos además con los siguientes estudios de Máster Oficial Universitario:
- Máster Universitario en Gestión de la Edificación
- Máster en Ciencia y Tecnología de Edificación en Arquitectura
- Máster Universitario en Investigación en Ingeniería y Arquitectura
- Máster en Sostenibilidad y Gestión de la Edificación
- Máster en Intervención Sostenible en el Medio Constructivo
También las Escuelas de Arquitectura, continuando con un segundo ejemplo,
cuentan ya con denominaciones distintas para una única profesión regulada desde
1821, Real Decreto de 29 de junio y 1886, Real Decreto de 29 de enero: la de
Arquitecto, que se puede ejercer con las titulaciones académicas de Máster o de
Doctor, un estudio como el anterior nos da los siguientes resultados:
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- Grado en Fundamentos de Arquitectura y Urbanismo
- Grado en Fundamentos de la Arquitectura
- Grado en Arquitectura
- Grado Arquitecto
- Grado en Estudios de Arquitectura
- Grado de Arquitectura
- Grado en Arquitectura para Titulados Universitarios
- Grado en Arquitectura y Edificación
- Grado en Estudios en Arquitectura
Y al menos los siguientes estudios de Máster habilitantes para el ejercicio de la
profesión de Arquitecto:
- Máster en Arquitectura y Construcción
- Máster en Arquitectura e Ingeniería
- Máster Universitario en Urbanismo
- Máster en Arquitectura y Energía
- Máster Habilitante en Arquitectura
- Máster Universitario en Arquitectura
- Máster Arquitecto
- Máster en Arquitectura
- Máster en Diseño Arquitectónico
Se agrava en el caso de los arquitectos la situación por ofrecerse algunos de los
Grados citados con 300 créditos, y hasta 330 en alguno casos, entendiéndose
unilateralmente en esas universidades que son directamente habilitantes para el
ejercicio de la profesión de Arquitecto, en otros casos con una carga similar de
créditos se otorgan en el mismo curso académico el título de Grado y de Máster a la
vez y, por último en otros se quedan en los citados 240 créditos y no cumplen los
requisitos para el ejercicio, debiéndose cursar obligadamente uno de los estudios de
Máster citados para conseguir la capacitación profesional.
Supone un nuevo elemento de confusión añadida a una oferta de nueve Grados y
otros nueve títulos de Máster, además de los antiguos Arquitectos, todos homologados
y correspondientes a este último nivel, para un solo ejercicio profesional.
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Por el contrario en análisis de los estudio de Grado Ingeniero Civil (cuatro cursos y
240 créditos ETCS así como los de Máster Ingeniero de Caminos, Canales y
Puertos (uno o dos cursos y 60 ó 120 créditos ECTS) arroja una situación
sustancialmente distinta.
En el primer caso, el Grado, de veinte y siete Universidades estudiadas sólo dos
tienen una titulación distinta a la de Grado Ingeniero Civil (Grado Ingeniero de Obras
Públicas y Grado Ingeniero Territorial) y en lo que se refiere al Máster, todas
mantienen exactamente la misma denominación: Máster Ingeniero de Caminos,
Canales y Puertos, titulaciones universitarias que han asumido las competencias
específicas de profesión regulada en ambas casos que ejercían los antiguos
Ingenieros Técnicos de Obras Públicas y los antiguos Ingenieros de Caminos, Canales
y Puertos.
Denota lo anterior un mayor cuidado en la identificación social del título académico
y su perfecta asociación con la profesión regulada, lo que supone un indudable
beneficio para el ejercicio de la misma y evita la escalada de confusión que
padecemos. Sin embargo hemos comprobado en un nivel menor, el de las
especialidades, el comienzo del problema que analizamos.
Así mientras en Madrid las especialidades son cuatro con las siguientes
denominaciones:
Cimientos y Estructuras
Hidráulica y Energética
Transportes
Urbanismo y Ordenación del Territorio
En Barcelona son siete, parecidas pero no iguales algunas de ellas
Ingeniería de Estructuras y Construcción
Ingeniería del Terreno
Ingeniería Computacional
Ingeniería del Agua
Ingeniería del Transporte y Urbanismo
Ingeniería Ambiental y Sostenibilidad
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Mientras que en Alicante encontramos tres, también no coincidentes:
Ingeniería Estructural y Construcción
Ingeniería del Agua, Energía y Medio Ambiente
Ingeniería del Transporte y del Territorio
Pero en Valencia aparecen otras distintas también:
Hidráulica y Energética
Cimientos y Estructuras
Territorio, Urbanismo y Transportes
Sin olvidar por último las especialidades del Grado Ingeniero Civil, que sí son
siempre las mismas en todas las opciones:
Hidrología
Transportes y Servicios Urbanos.
En reflexión final, no parece imposible la coordinación de las denominaciones de
las especialidades, posiblemente con los mismos contenidos y distintos nombres en
muchos casos, así como el mantenimiento de la tensión en el sostenimiento de la
denominación única de la titulación académica, plenamente coincidente con el nombre
de la profesión regulada, de amplia trayectoria y absoluto reconocimiento social.
Parece ser el Camino, nunca mejor dicho, adecuado.
Pero para la solución general del problema tenemos un instrumento suficiente: los
Colegios Profesionales, que primero deberían definir el nombre de la profesión, sin
vínculo ya a la titulación académica, es por ello que, volviendo a los ejemplos de
mayor grado de dispersión en el campo técnico español, en la profesión de Aparejador
darían acceso las once titulaciones universitarias citadas y otras más que puedan
aparecer, pero con una única denominación social, técnica y profesional: Aparejador;
siendo la solución idéntica en el caso de los Arquitectos, con varias titulaciones para
una sola profesión y denominación social y técnica: Arquitecto.
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Efectivamente, nuestra Constitución, en su artículo 36, alude a los Colegios
Profesionales, al establecer que “La Ley regulará las peculiaridades propias del
régimen jurídico de los Colegios Profesionales y el ejercicio de las profesiones
tituladas. La estructura interna y el funcionamiento de los Colegios deberá ser
democrático”. (Ibáñez, 1995, 14).
Nada más acertado y de actualidad en el trabajo que nos ocupa que la referencia a
las profesiones tituladas y reguladas: antes una profesión asociada a un título
académico; ahora, una profesión asociada a distintos títulos académicos. Con su
intervención, los Colegios Profesionales establecerían una identificación sectorial
suficiente que se sostiene en su especialidad, como ha sido siempre habitual por otra
parte basándonos en la denominada “barrera de entrada” de la titulación (Ibáñez,
1995, 111)
Esto establece una restricción a la colegiación para quien no tenga una titulación
académica habilitante para ese ejercicio profesional, regulación que en el caso de las
ingenierías que nos ocupa queda en manos de los Colegios, lo que unido a la
imposibilidad de crear colegios al margen de una ley, legislación autonómica o del
Reino según los casos, conforma un sistema de garantías reales y eficaces frente a la
dispersión o a la falta de detalle y conocimiento que aparece ya entre aquellos que no
distingan, o no tengan porqué distinguir, entre profesión regulada y título académico.
Es esta la modificación más importante relacionada con la entrada en vigor de las
reformas de Bolonia: la que nos impone la diversidad de títulos universitarios que dan
acceso a una profesión, frente a la situación estática y de relación directa entre un
título y una profesión.
Se salvan con nuestro estudio dos conceptos distintos: la identificación profesional,
residenciada en los Colegios, y la independencia académica de oferta de estudios,
residenciada en la universidad, superando la confusión, incluso administrativa, que
empieza a generalizarse, siendo labor fundamental de los colegios profesionales la
definición del acceso a una profesión regulada a partir de distintas titulaciones
universitarias.
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Afirmamos que como consecuencia de las innovaciones habidas, hace falta
acometer una reforma de la denominación colegial en algunos casos y en todos los
sistemas de acceso a la colegiación, identificando las titulaciones habilitantes para
ello, reconociendo la nueva situación académica y asignándoles competencias
profesionales claras e independientes, que deben ser equiparables a las existentes en
el resto de la Unión Europea.
Es por tanto que la titulación académica, no es coincidente en su denominación con
la de la actividad profesional, así por ejemplo los antes licenciados y ahora Máster en
Derecho no eran y no son Abogados sino tras su colegiación y lo mismo puede ocurrir
con los Aparejadores o Arquitectos, denominación profesional que debe sólo
adquirirse tras la colegiación para la que debe acreditarse la superación de una de las
titulaciones académicas indicadas u otras similares que sin duda se irán creando en el
futuro.
Los Colegios Profesionales justificarían así la dualidad público privada de sus
funciones conforme a lo previsto en el artículo tercero de la Ley de Colegios
Profesionales que les otorga la capacidad de ordenar la profesión dentro de los límites
marcados por la propia norma (Ibáñez, 1995, 15).
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4. Parte Tercera. De la recuperación del acto de aceptación de la responsabilidad
derivada de la titulación de Bachiller, Grado, Máster y Doctor.
La universidad, como otras organizaciones e instituciones de su tiempo, precisa
difundir o hacer pública la función social que tiene asignada, tanto dentro como fuera
del ámbito que le es propio, al objeto de darse a conocer y reafirmar su existencia y su
forma de existir. Se genera, así, en el marco del protocolo y ceremonial de la
universidad, el ritual de las ceremonias universitarias de graduación, como medio de
expresión y representación de la corporación en lo que le es más propio y
característico y que presenta importantes connotaciones simbólicas. (Polo Rodríguez
et Hernández de Castro, 2004, 7)
Sin embargo el proceso de implantación, mantenimiento y desarrollo de este tipo de
ceremonias, que se ha mantenido con notable auge hasta bien entrado el siglo XIX, ha
sido abandonado, degradado u olvidado en el ámbito, tal y como ha pasado con el
valor de los titulados técnicos, como consecuencia de la articulación de nueva
normativa oficial o la práctica de otras costumbres, que sin derogar expresamente la
vigencia de estos procedimientos, sencillamente los han apartado de la vida
académica ordinaria en un proceso de relajación y de falsa igualdad mal enfocados.
No obstante todo lo anterior y tras la autonomía universitaria se ha producido en el
siglo XX una restauración del ceremonial. (Polo Rodríguez et Hernández de Castro,
2004, 57)
Todo ello nos induce a pensar y a proponer una recuperación del protocolo y
ceremonial propios de la adquisición de una titulación académica, que quedo recluida,
en un absurdo proceso de reducción del protocolo, ceremonial y tratamientos al ámbito
de los Doctores y los Doctores Honoris Causa y; en aspectos concretos y
profesionales relacionados con el Derecho, con el juramento o promesa realizada al
incorporarse al ejercicio. Protocolo mantenido y cuidado con rigor en su ceremonial, en
este excepcional caso, por los Ilustres Colegios Profesionales de Abogados.
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Acudiremos por tanto a la necesidad de una norma, que restablezca y conforme un
serie de actos ceremoniales con el doble objetivo de reforzar el papel social de la
universidad y por otro el de reafirmar el sentido y responsabilidad que se deriva de la
titulación adquirida, que en la sociedad que vivimos y en muchos casos es cosa
desconocida entre quienes terminan sus estudios, en una ignorancia irresponsable de
lo que son y significan donde parece de una menor importancia conforme a la
relajación de usos, costumbres y responsabilidades haber realizado tan importante
esfuerzo. No nos cabe duda que el ceremonial y el protocolo indicado, revestido del
mayor rigor, seriedad y esplendor posibles, en el fondo de su significado y en las
formas del mismo, afirmarán y reforzarán los conceptos, dando a conocer la verdadera
importancia de lo que se ventila a los propios interesados, al resto de la comunidad
universitaria y a la sociedad en general.
Así proponemos la celebración de un acto de incorporación de los Bachilleres a la
universidad, TRISTE ES LA SITUACIÓN ACTUAL DONDE LA ÚNICA EVIDENCIA DE
SU INCORPORACIÓN A LA ACADEMIA SON LAS NOVATADAS, y otros para las
titulaciones de Grado y Máster en los que se fija un ceremonial que prestigie social y
personalmente el proceso que se degrada día a día. Vemos así tribunales en mangas
de camisa o examinandos en pantalón corto y chanclas - porque hace calor - o las
mismas situaciones con la pelliza puesta – porque hace frío - cosa impensable en
cualquier universidad, por ejemplo y sin ir más lejos de Portugal donde en buena parte
de las mismas se acude uniformado a las clases.
Este abandono estúpido de las formas en el vestir, en el tratamiento - el tuteo
informal – en la presentación de uno mismo, como decimos impensable en cualquier
otro sistema universitario del mundo occidental, redunda en una degradación del fondo
en cuanto a la eficacia del sistema, siendo uno, reconocemos que no el más
importante, pero uno de los síntomas de la falta de calidad de nuestra enseñanza
superior y en general de nuestra sociedad donde, sin ir más lejos, algunos cuando nos
representan a todos van en vaqueros y mangas de camisa a ver a Su Majestad, pero
cuando se representan a ellos – por ejemplo en una gala de cine o en su casamiento –
van de rigurosa etiqueta, lo que evidencia un profundo problema de conceptos y de
educación. Perder el protocolo es el primer síntoma de la caída de la educación en
una sociedad.
Por último, para el caso de los Doctores simplemente fijamos normativamente un
protocolo que básicamente ha sido el único que se ha mantenido en el tiempo, veamos
la propuesta:
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- Para el caso de los Bachilleres y en el momento de su incorporación a la
universidad se celebraría un acto académico solemne en cada Facultad o
Escuela, presidido por su Decano o Director y en presencia de toda la
comunidad del centro debidamente revestida de sus atributos, trajes,
vestimentas y uniformes en el que quien preside, tras concluir la comitiva
académica conforme al protocolo universitario, dará la bienvenida a los
Bachilleres y les dirá, tras impartirse una lección magistral: “Por cuanto habéis
acreditado vuestro saber, haciendo uso de la autoridad que me está confiada y
en nombre del Excelentísimo y Magnífico Rector os reconozco como Bachiller
con la calificación que se os ha otorgado por haber considerado quien ha
juzgado vuestro conocimiento que sois dignos de este honor”. (Polo Rodríguez
et Hernández de Castro, 2004, 54)
- Para cuando se obtenga el título de Grado el ceremonial será idéntico al
anterior si bien en este caso tras la lección magistral y en llamamiento personal
cada nuevo titulado será requerido para formalizar el siguiente compromiso
académico: “Por cuanto habéis acreditado vuestro saber académico, haciendo
uso de la autoridad que me está confiada y en nombre de Su Majestad el Rey
os reconozco como Grado con la calificación que se os ha otorgado por haber
considerado quien ha juzgado vuestro conocimiento que sois dignos de este
honor y en consecuencia: ¿Juráis por Dios o prometéis solemnemente por
vuestro nombre y honor, cumplir con las obligaciones que impone el título de
Grado que se os va a conferir?” El nuevo Grado responderá: “Así lo Juro” o
“Así lo Prometo” o “Así Aseguro” o “Así Quiero”. Tras la respuesta afirmativa el
presidente intervendrá diciendo: “Si así lo hiciereis, que se os premie, y si no se
os demande; y además seréis responsable en el ejercicio de vuestro título con
arreglo a las leyes” (Polo Rodríguez et Hernández de Castro, 2004, 55)
- Para cuando se obtenga el título de Máster el ceremonial será idéntico a los
anteriores, si bien en este caso cada titulado tendrá que ser acompañado por
un padrino, miembro de la comunidad académica y que tendrá el grado de
Doctor. Tras la lección magistral y en llamamiento personal cada nuevo titulado
será requerido para dos cosas; primero leer desde la tribuna un discurso que
previamente habrá sido entregado por su padrino al Decano o Director para su
revisión formal y temporal, pudiendo ser - si los candidatos son numerosos -
un solo discurso, leído por uno de ellos a quien eligen entre sí de antemano; en
segundo lugar y leído este se formaliza el siguiente compromiso académico:
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“Por cuanto habéis acreditado vuestro saber académico y habéis investigado
en vuestra Ciencia, haciendo uso de la autoridad que me está confiada y en
nombre de Su Majestad el Rey os reconozco como Máster con la calificación
que se os ha otorgado por haber considerado quien ha juzgado vuestro
conocimiento que sois dignos de este honor y en consecuencia: ¿Juráis por
Dios o prometéis por vuestro nombre y honor, cumplir con las obligaciones que
impone el título de Máster que se os va a conferir?” El nuevo Grado
responderá: “Así lo Juro” o “Así lo Prometo” o “Así Aseguro” o “Así Quiero”.
Tras la respuesta afirmativa el presidente intervendrá diciendo: “Si así lo
hiciereis, que se os premie, y si no se os demande; y además seréis
responsable en el ejercicio de vuestro título con arreglo a las leyes” (Polo
Rodríguez et Hernández de Castro, 2004, 55)
- Para cuando se obtenga el título de Doctor y en la apertura del curso
académico o cuando lo indique el Rectorado de la Universidad y en presencia
de la comunidad universitaria plena revestida de sus atributos y honores serán
llamados los nuevos doctores individualmente, precedidos del Doctor Maestro
de la Ceremonia escoltado de dos bedeles en uniforme de gala y tras cada uno
de ellos el padrino que les corresponda. Llegados a presencia del
Excelentísimo y Magnífico Rector de la Universidad, que tendrá a su derecha al
Decano o Director del centro al que pueda corresponder el Programa Oficial de
Doctorado, estos se pondrán en pie y recibirán el birrete, medalla y guantes de
manos del doctorando. A continuación el Excelentísimo y Magnífico Rector,
que sólo podrá ser sustituido en esta atribución por Su Majestad el Rey si está
presente y preside el acto, pronunciará las siguientes palabras: “Por cuanto
habéis empleado años de juventud o madurez en largos e incesantes estudios
e investigaciones, habiendo creado y acreditado doctrina y conocimiento. Por
cuanto vos habéis dado prueba de constancia, laboriosidad y aplicación en
muchos cursos académicos; por cuanto en los títulos de Bachiller, Grado y
Máster, que anteriormente os han conferido, habéis acreditado vuestro saber y
doctrina; por cuanto después de los exámenes, ejercicios y tribunales
prescritos por los reglamentos y leyes vigentes, vuestros Profesores Doctores,
jueces y censores de vuestro conocimiento, os han considerado, constituidos
en tribunal, digno y merecedor de obtener el último y superior grado académico
de Doctor por esta Universidad; en uso de la autoridad que me está conferida y
en nombre de Su Majestad el Rey - salvo que excepcionalmente sea el
Monarca quien confiere por presidir el acto –
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Os declaro solemnemente investido como Doctor de esta Universidad e
integrados en su Claustro, en testimonio de lo cual vais a recibir y se os
confiere la facultad de enseñar, comprender, interpretar e investigar, recibiendo
el abrazo de fraternidad de los que se honran y congratulan de ser vuestros
hermanos y compañeros”. (Polo Rodríguez et Hernández de Castro, 2004, 57)
Y afirmado todo lo anterior seguirá con lo siguiente: “Acercaos, habéis sido
investido Doctor en testimonio de vuestros méritos académicos, por ello y en
virtud de la autoridad que ostentamos atestiguamos, en todas partes y para
siempre vuestra dignidad doctoral y como símbolo de tan alto honor, os
imponemos este birrete tantas veces laureado, honrado sin cesar por tan
grandes, tan ilustres y tan excelsos maestros en los Reinos de Las Españas,
sobre vuestra cabeza, cual Corona de vuestros estudios y méritos. Ostentadlo
siempre y llevadlo a todas partes”.
Y sigue: “Vuestro padrino o vuestra madrina os va a entregar los atributos de
este nombramiento, cual símbolos de la Ciencia y la Sabiduría, que es preciso
cultivéis y difundáis sin descanso para que tengáis presente que por grande
que sean vuestros talentos, siempre deberéis manifestar reverencia, respeto y
toda consideración a vuestros maestros que han sido vuestros predecesores.
Recibid así del mismo la medalla que supone los privilegios que en pasados
tiempos se entregaban y por conferidos se tenían de firmar y sellar todos los
dictámenes, arbitrajes y consultas de vuestra ciencia, y recibid también la
fortaleza del color blanco en vuestros guantes, pues vuestras manos han de
conservar, como signo de vuestra altísima dignidad”. Y añadirá: Prestad ahora
con la más plena conciencia el juramento o promesa que os voy a tomar:
¿Juráis por Dios o solemnemente prometéis por vuestro nombre, conciencia y
honor, cumplir con las obligaciones que impone el título de Doctor y defender y
respetar todos los derechos, privilegios y honores de esta Universidad en
cualquier parte del mundo que os hallaréis, así como favorecerla y ayudarla
cuantas veces se os demande?”
El nuevo Doctor responderá: “Así lo Juro” o “Así lo Prometo” o “Así Aseguro” o
“Así Quiero”.
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Tras la respuesta afirmativa quien preside intervendrá diciendo: “Si así lo
hiciereis, que la memoria de todos los Claustrales os lo pague; y si no que os
demande; y además seréis responsable en el ejercicio de vuestro título con
arreglo a las leyes” (Polo Rodríguez et Hernández de Castro, 2004, 55)
Y por último: “Ilustrísimo Señor, os admito e incorporo al Claustro de esta
Universidad con todos los derechos, exenciones y privilegios inherentes a los
demás doctores; y en señal de la paz, benevolencia y amistad con que siempre
habéis de ejercer vuestro ministerio, os abrazo con la mayor cordialidad en
nombre de todos los doctores de este Claustro aquí presentes”.
- Finalizado el abrazo, concluirá con: “Que el nuevo Doctor que ha sido
proclamado ocupe el asiento a él asignado”.
Concluye esta parte estableciendo que este ceremonial propuesto debe ser
enriquecido por el protocolo particular de cada Universidad que recoge un legado
cultural de siglos de existencia y es establecido conforme a su autonomía, pudiendo
hacerse las reclamaciones, juramentos, promesas y manifestaciones en cualquiera de
las lenguas oficiales del Reino o en lengua latina, la tradicional de la academia a lo
largo de la historia.
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5. Parte Cuarta. La identidad y la dignidad de los Cuerpos Técnicos del Reino. La
Uniformidad Civil
En una primera y quizás precipitada reflexión puede sorprender la existencia de
uniformes civiles y más concretamente uniformes que identifican a los profesionales
técnicos. Esta valoración desconoce que el uso del uniforme es frecuente y cotidiano
en nuestra sociedad en ámbitos ajenos al militar, quizás el más conocido. Pero
también en la actualidad, y lo ha sido siempre el marco de la Administración del Reino
cuando se asignaban funciones públicas a determinados profesionales, para que se
manifieste así su categoría y las responsabilidades derivadas de la misma se les
atribuía una uniformidad civil, que luego se hizo extensiva a todos los titulados fuesen
o no funcionarios. Como ya hemos dicho es necesaria la puesta en valor de las
profesiones técnicas y las titulaciones académicas y para las primeras un modo, que
también indicamos no es el más importante pero es el objeto de este estudio y puede
aportar algo al respecto, es la adecuación a los tiempos de la uniformidad de los
Cuerpos Técnicos del Reino, que como en el caso de los diplomáticos, los militares,
los abogados, los jueces y fiscales, los médicos y sanitarios en general, los policías y
otros funcionarios y profesionales cuentan con esta distinción civil que caracteriza su
ejercicio. No es una cuestión menor si queremos recuperar la autoestima y dignidad de
unos profesionales devaluados socialmente, como en general ocurre con todos
aquellos cometidos que requieren de un importante esfuerzo personal e intelectual. La
regeneración de la sociedad civil, el fortalecimiento de sus estructuras y el
sostenimiento de las referencias profesionales hace necesario conocer y mantener los
propios signos de identidad, como bien ocurre en otros países de la Unión Europea, en
otro país vecino, en Francia sin ir más lejos. El uso de uniformes, civiles en este caso,
es una práctica social extendida, que nada tiene que ver con planteamientos
militaristas o conservadores en el sentido político del término, siendo justo todo lo
contrario, pues es una reafirmación de la sociedad civil de su presencia colectiva y de
su identificación basada exclusivamente en el trabajo, el mérito y la capacidad
personal. En la actualidad también organizaciones juveniles, de protección civil,
bomberos o los otros colectivos ya citados y sobre los que volveremos, junto con los
miembros de la comunidad académica por citar algunos más, llevan distinciones
peculiares y particulares, vestimentas, que sólo pueden calificarse como uniformes sin
mayor connotación o como uniformes civiles, en contraposición pero no enfrentados a
los uniformes militares.
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Uniformes, emblemas, banderas y estandartes, himnos, advocaciones religiosas se
emplean como distintivos para denotar pertenencia a un cierto colectivo social.
Distintivos de muy variada naturaleza y objeto son profusamente usados en ámbitos
como el institucional, el empresarial, el deportivo, el musical, el académico, el religioso
o el gastronómico. En las esferas profesionales también se han empleado y se
emplean distintivos. (Silva Suárez, 1999, 15)
El origen de los uniformes civiles, que como hemos dicho no tiene nada que ver
con la tradición militar, tiene su origen en la École Central des Arts et Manufactures de
París, fundada en 1828 con carácter privado, que en 1857 pasó al sector público,
donde sigue en la actualidad sin novedad con la uniformidad civil que le corresponde
que incluso se ha especializado en formas reglamentadas masculinas y femeninas
cuando estas se incorporaron al campo de la ingeniería. Esta fundación tuvo como
objetivo prioritario el formar un nuevo tipo de ingenieros no militares, que denominaron
Ingenieros Civiles por contraposición a los Ingénieurs du Roi, siempre ingenieros
militares en Francia. A sus alumnos les imprimió un perfil de ingeniero generalista,
orientado al desempeño de su profesión en la industria francesa. Desde su fundación
la École Central representó un claro talante liberal y civil, muy alejado de las
conexiones castrenses de otras escuelas de ingeniería como la Politécnica o la de Arts
et Métiers. No contaban, a diferencia de estas, de uniforme distintivo alguno.
Un hecho puntual y singular, en el París de la época, cambia radicalmente la
situación: al funeral de Monsieur Benjamin Constant, jefe de la oposición liberal,
asisten en gran número los alumnos de la Escuela Politécnica, militar, y de la École
Central, civil, los primeros uniformados militarmente, pero no los segundos. La prensa
recoge la indiscutida presencia de los alumnos del centro militar, vistosos como no
podía ser de otra manera, y olvida la presencia de los alumnos del centro civil,
difuminados con sus vestimentas ordinarias entre la masa de gentes que acudió al
evento. Inmediatamente y a los efectos de la perfecta localización de sus miembros en
actos públicos y sociales fueron dotados los mismos de un uniforme civil de ingeniero,
uniformes con los que sólo una semana más tarde depositaron una bandera en la
tumba de Constant. (Silva Suárez, 1999, 27)
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El uso de uniformes civiles en España en los que hemos denominado Cuerpos
Técnicos del Reino tiene su origen en la asignación de funciones públicas a los citados
técnicos, identificando a sus integrantes como servidores del Estado, si bien
posteriormente el uso de los uniformes se hizo extensivo su uso a todos los técnicos
fuesen o no funcionarios, sin mayor limitación que la de estar en posesión del
correspondiente título.
En España, sólo la uniformidad de los Ingenieros Navales, militares hasta 1933, y
los Aeronáuticos, que lo son hasta 1939, tienen origen reglamentario castrense y no
civil. La regulación legal del uso de los uniformes civiles se extiende desde principios
del siglo XIX hasta nuestros días y continúa en pleno vigor en la actualidad y nos
permite reflexionar sobre su valor sociológico e incluso estético en la cambiante y
relajada, en formas y maneras, sociedad actual.
Su uso en la actualidad está vinculado a actos sociales, institucionales o familiares
relevantes, siendo legalmente obligatorio para los actos y solemnidades oficiales en
que expresamente se imponga conforme a lo dispuesto en el Decreto del Ministerio de
Industria - en vigor y extensivo a todas las uniformidades técnicas civiles - de 16 de
noviembre de 1973.
El uniforme civil de los componentes de los Cuerpos Técnicos del Reino, perdió la
opción del uso representativo universitario frente al traje académico en 1967, lo
veremos, si bien propondremos una recuperación limitada del mismo en determinadas
circunstancias de protocolo intermedio y siempre que la universidad así lo estime. En
primer lugar vamos a relacionar la legislación aplicable, de la que se derivan normas
de menor rango u otras aclaratorias y definitorias, referidas a la uniformidad de los
integrantes de los Cuerpos Técnicos del Reino. El recorrido normativo completo al
respecto es el siguiente:
Real Decreto de 30 de abril de 1835 que define el uniforme del Cuerpo de
Ingenieros Civiles.
Real Orden de 7 de enero de 1842 que define el uniforme de los Ingenieros de
Caminos, Canales y Puertos.
Real Orden de 10 de diciembre de 1857 que define el uniforme de los
Ingenieros de Montes y Plantíos.
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Real Orden de 2 de abril de 1878 que define el uniforme de los Ingenieros
Agrónomos
Real Orden de 5 de octubre de 1886 que define el uniforme de los Ingenieros
de Minas.
Real Orden de 7 de marzo de 1891 que define el uniforme de los Ingenieros de
Montes.
Real Orden de 26 de junio de 1924 que define el uniforme de los Ingenieros
Industriales.
Orden de 24 de abril de 1942 que define el uniforme de los Ingenieros de
Telecomunicaciones.
Decreto de 2 de abril de 1948 que define el uniforme de los Arquitectos.
Orden de 28 de febrero de 1950 que define el uniforme civil de los Ingenieros
Aeronáuticos.
Orden de 14 de diciembre de 1954 que define el uniforme de los Ingenieros
Geógrafos y Geodésicos.
Orden de 17 de marzo de 1958 que define el uniforme de los Aparejadores.
Instrucción del Ministerio de Educación de 7 de abril de 1961 que define el
uniforme de los Ingenieros Electromecánicos.
Orden de 2 de diciembre de 1964 que define el uniforme de los Ingenieros del
Instituto Católico de Artes e Industrias (ICAI)
Orden de 30 de noviembre de 1967 por la que se regula el traje académico de
los Ingenieros y los Arquitectos y el color marrón como identificativo de todos
los titulados técnicos.
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Reseñado lo anterior, vemos la naturaleza civil de las reglamentaciones, incluso los
Aeronáuticos prescinden del origen militar de la suya adoptando otra distinta en 1950
(no así los Navales que continúan con sus uniformes militares de la Segunda
República) y podemos hacer algunas consideraciones al respecto del color
identificativo, tipología de los uniformes y rangos en los mismos, veamos:
1.- Desde 1910 se adopta como color distintivo único de todas las ingenierías civiles el
morado oscuro en la faja o fajín del uniforme, si bien la incorporación de las Escuelas
Especiales de Aparejadores, Arquitectos, Ingenieros y Peritos a la Universidad (Ley de
reforma de las Enseñanzas Técnicas de 1954 y Ley de Reordenación Universitaria de
1964) obligó en 1967 a adoptar el marrón como color académico genérico de las
Escuelas Técnicas y sus titulados, dado que el color morado oscuro, púrpura en
heráldica, entraba en colisión directa con los farmacéuticos que lo tienen como
referencia académica desde hace siglos.
2.- Como excepción la Orden del Ministerio de Educación de 30 de noviembre de
1967, permitía el empleo pero sólo en la placa doctoral, de los antiguos colores de las
Escuelas Técnicas, cada una tenía el suyo, veamos: Aeronáuticos, azul ultramar;
Agrónomos, verde claro; Arquitectos blanco; Caminos, morado oscuro; Industriales,
gris; Minas, rojo; Montes, verde oscuro; Navales, azul marino o turquí y
Telecomunicaciones, naranja. Esta especialidad cromática causaba problemas con los
farmacéuticos como ya hemos dicho, con los titulados en Derecho, rojo; con los
veterinarios, verde; con los titulados en Ciencias, azul marino o turquí y con los
titulados en Económicas y Empresa, naranja. (Silva Suarez, 1999, 74)
3.- Es la placa doctoral una distinción que se usa exclusivamente sobre uniforme o frac
por lo que las posibilidades de permanencia del uso reglamentado eran muy limitadas.
No era y no es correcto su uso sobre el traje académico que en estos casos siempre
es, desde 1967, con la muceta, puñetas y birrete marrón. Con la implantación de
Bolonia y la vinculación del color académico de los doctores a la ubicación de su
programa oficial de doctorado en un área de conocimiento el problema ha
desaparecido. Por ejemplo, un Ingeniero de Caminos que realice un programa oficial
de doctorado de geografía y ordenación territorial utilizará en su traje académico y en
su placa doctoral el color azul claro y no el marrón, que sólo será posible en un
programa de ingeniería, en ningún caso el morado oscuro, exclusivo ya
académicamente de farmacia, quedando este color residenciado, como para el resto
de Aparejadores, Arquitectos e Ingenieros en la faja o fajín de su uniforme civil.
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4.- Los uniformes civiles de ingeniero, que podían ser de campo, de obra, de servicio,
de residencia, de a diario, de gala y de gran gala, han mantenido como referencia
general el paño azul marino o turquí como base de la casaca, levita o chaqueta, con
excepción de la primera reglamentación de los Ingenieros de Caminos, que era verde
oscura y los de campo y obra, marrones, grises y similares. El pantalón, sin embargo
era siempre del azul descrito, al igual que el sombrero o la gorra de plato en la que
evoluciona. Los guantes siempre blancos, como también la chaqueta para algunos
uniformes de verano. La corbata siempre negra, como el calzado. El uniforme de los
Ingenieros Navales, único en el que se da el origen militar, también es azul marino o
turquí, evidenciando su procedencia de la Armada Española. (Armada y no Real
Armada en 1933)
5.- En cuanto a las distinciones de uso cabe indicar que las reglamentaciones
establecen las tipologías de uniformes citados que en ocasiones incorporaban abrigos
o capotes y bastones o espadas, en desuso primero y derogado después, en las
normativas más recientes. Siempre se usaba el fajín con el color distintivo, que a partir
de mediados del siglo XX se convirtió en la referencia entre el uso de gala, que recogió
en uno sólo todos los modos señalados, sin fajín, frente al uno de gran gala siempre
con fajín, siendo generalizado como hemos comprobado el uso de bandas sin la faja,
pero no con ella (creemos que por economía de esfuerzos del uniformado dado que
era complicado manejarse con ambas y sus bellotas, además de una complicada
sincronización cromática). Hemos recogido esta costumbre en nuestra propuesta en la
que también hemos prescindido de las palas marineras como charreteras, que
incorporaban el distintivo de cada ingeniería, volviendo al modelo de 1836 de los
Ingenieros de Minas y de los Ingenieros de Caminos de 1842, conforme a la imagen
que sigue:
(Silva Suarez, 1999, 43)
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6.- Respecto a los rangos los más homogéneos han sido los de Ingeniero, Ingeniero
Jefe e Inspector General, correspondientes con la función pública de los integrantes de
los Cuerpos Técnicos del Reino, identificándose en las bocamangas generalmente y
en menor medida en las palas de los hombros o en las gorras de plato. Hoy, superada
normativamente la jerarquización profesional, si nos han servido sus distintivos de
bocamanga para la identificación de los niveles académicos: el de Ingeniero para el
Grado, el de Ingeniero Jefe para el Máster y el de Inspector General para los Doctores,
tengan o no estos títulos vinculación con la ingeniería en aplicación de la doctrina de la
horizontalidad de la enseñanza universitaria derivada de Bolonia. Se establecía con la
siguiente descripción que hemos recogido en esos términos: Los distintivos de las
distintas categorías se establecen con bordados de hilillo de oro en la bocamanga,
bajo un grupo corrido de ramas de laurel o de pino o robles según las especialidades,
que era general e idéntico para todas las clases del cuerpo, con cinta para la segunda
clase y con serreta para la primera. El rango venía marcado generalmente con un rio o
barra de oro centrado en las hojas y cinta o serreta de siete milímetros en el borde
para los ingenieros, igual con dos ríos o barras para los ingenieros jefes y con tres ríos
o barras para los inspectores generales.
7.- Por último unos uniformes utilizaban botonadura y bordados de oro y otros de plata.
Los botones incorporaban el escudo de la ingeniería en oro. Hemos simplificado todo
ello en los acabados más sencillos, asequibles y baratos, así en nuestra propuesta la
bordura será siempre de hilo de oro y los botones de latón dorado con el vigente
escudo del Reino de España (la alternativa en oro es costosísima) El bordado de los
uniformes con hojas de laurel, típico y aromático árbol mediterráneo simboliza la
buena fama, la honra y el éxito de los cuerpos de la ingeniería civil (Silva Suárez,
1999, 46)
8.- La faja lo era con bellotas y borlas de canutillo de oro para los Inspectores
Generales; con bellotas de canutillo de oro y borlas de seda para los Ingenieros Jefes;
y con las bellotas y borlas únicamente de seda para los Ingenieros subalternos. (Silva
Suárez, 1999, 56)
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9.- Con carácter general la uniformología y emblemática en general estaba dividida en
dos grupos, el civil y el militar, y dentro del primero en:
- Usados al servicio de la Real Familia
- Usados en el conjunto de las Corporaciones de Derecho Público
- Usados por los Funcionarios Civiles
- Usados por los Titulados Académicos
- Usados por la Nobleza y estamentos caballerescos
- Usados por la Iglesia
En la actualidad algunas de estas utilidades han caído en desuso o han sido
sustituidas por otras (como el caso del despacho ordinario con Su Majestad que se
hace con uniforme militar o vestimenta ordinaria civil, aunque no es así en las
ceremonias de Palacio donde se conserva el uso de los uniformes previstos para ese
servicio).
El resto está vigente y se mantiene reducido a un limitado ámbito ceremonial de
carácter oficial o privado en reuniones de evidente trascendencia familiar. Así no sólo
no ha perdido vigencia, sino que la recupera con el impulso de las universidades
privadas que arrastran en la calidad de su representación a las públicas el uso del traje
académico. También las corporaciones de Derecho Público que tenían regulación al
respecto la mantienen: el Cuerpo Diplomático, los Abogados del Estado y los
Inspectores de Hacienda y revisan sus reglamentaciones con cierta frecuencia. Mayor
cambio se ha producido en relación con los de los Funcionarios Civiles y los Titulados
Académicos conforme a la extensión de la formación universitaria a amplias capas de
la sociedad.
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Así, antes, un funcionario civil con derecho a uniformidad era, y es en la actualidad
un titulado académico universitario, pero no había muchos más titulados de este tipo
que no lo fueran, cuestión que cambió de forma sustancial desde mediados del siglo
XX, haciéndose costumbre social y luego reglamentaria en las últimas disposiciones
de esa centuria que el uso de la uniformidad civil se diese en función de la titulación y
no de la pertenencia a la Función Pública, lo que produce una generalización que hace
que cualquier titulado universitario.
Así, no sólo los egresados de ingeniería y arquitectura, puedan hacer uso de la
uniformidad civil, habiendo encontrado reiterados ejemplos de ello entre los del ámbito
mercantil y de empresa, así como entre los de Derecho (generalmente el uniforme de
diario con el fajín del color académico correspondiente). Por último la nobleza, los
estamentos caballerescos y la Iglesia han continuado con sus uniformidades, si bien
todas estas han pasado del ámbito público del Estado al privado de las referidas
instituciones.
A modo de resumen y con el acompañamiento gráfico ilustrativo podría
establecerse el siguiente desarrollo:
- Uniformes de diario. Utilizados por todas las Ingenierías y luego por todas las
titulaciones académicas de rango universitario, con la sola variación del color
del fajín, el propio del color académico de la titulación, los de las antiguas
escuelas técnicas o en generalista de color púrpura para los Ingenieros y
Arquitectos desde 1910. La diferencia se establecía exclusivamente en los
emblemas de las gorras y de las palas de los hombros, siendo los distintivos de
una, dos o tres barras con hojas de robles usados indistintamente a ser
modificada los niveles funcionariales sin el acompañamiento del cambio
reglamentario y más tras la extensión del uso de la uniformidad a todos los
titulados, funcionarios o no, no habiendo norma en las últimas
reglamentaciones.
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(Silva Suarez, 1999, 89)
En las imágenes uniformes de diario. El primero de invierno sin faja, el segundo de
verano con faja y el tercero de invierno con faja también.
Detalle de las palas
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- Uniforme de etiqueta. Fue quedando reducida al ámbito de la Ingeniería.
Vemos algunos ejemplos que mantienen elementos comunes que hemos
puesto en valor en nuestro trabajo y propuesta:
(Silva Suarez, 1999, 43)
Detalles de las bocamanga.
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- Uniformes de Gran Etiqueta. De uso muy reducido en la actualidad y
circunscrito a ceremonias de carácter familiar.
www.sastreriaserna.com Consulta realizada el 1 de octubre de 2017
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Antes de terminar pasamos a la descripción de algunas consideraciones legales
respecto al uso de la uniformidad civil en España que tradicionalmente y hasta fecha
reciente ha tenido limitaciones de orden penal. Así era considerado delito y objeto de
sanción penal el uso de uniformes y condecoraciones indebidos, lo que quedó
reducido a falta contra el orden público en la reforma del Código Penal de 1995 (Ley
Orgánica 10/1995 de 23 de noviembre) y está también derogada al dejar de ser de
aplicación el artículo 637 del citado Código tras la reforma de 2015 (Ley Orgánica
1/2015 de 30 de marzo) quedando en la actualidad a lo previsto en el artículo 402 bis:
“El que sin estar autorizado usase pública e indebidamente uniforme, traje o insignias
que le atribuye carácter oficial será castigado con la pena de multa de uno a tres
meses”. Es por tanto que la incorrección en la actualidad se circunscribe al uso de la
uniformidad civil sin tener el título académico universitario que la soporta o utilizando
simbología expresamente regulada para supuestos que no se poseen, no existiendo
limitación en el uso de otras no reguladas que no interfieran con terceras en diseño y
colocación, siempre que sean fiel reflejo de los niveles académicos, colores y origen
oficial o privado, del rango académico que se quiere expresar simbólicamente. Con
este objeto reseñamos cuadro explicativo de la educación superior en España con
origen en fuente del ministerio competente en la materia:
Es por todo que los trajes para actos oficiales o de etiqueta, podemos decir que
desde hace un tiempo están siendo objeto de atención algunos vestuarios de
miembros de la alta administración del Estado o del Gobierno. (Clemente Garcia,
2011, 71)
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No queremos terminar sin una breve descripción y mención del origen
reglamentario de otras titulaciones, fundamentalmente Mercantiles, de Empresa y de
Derecho, que con origen en los Cuerpos del Estado, ahora se extienden a todos los
titulados universitarios en las citadas materias. La reglamentación de la uniformidad de
los Abogados del Estado data de la Real Orden de 14 de marzo de 1929 que
establece la misma y que no ha sido derogada. Se corresponde con un uniforme de
etiqueta o gran etiqueta del que vemos su representación en la imagen de la izquierda:
(BOE, 1942)
Más interesante y de mayor difusión ha tenido la prevista en el Decreto del
Ministerio de Hacienda de 12 de diciembre de 1942, donde se establece la uniformidad
de sus funcionarios, que luego se hizo extensiva a todos los titulados universitarios en
las disciplinas reseñadas en este Decreto. Así Licenciados en Derecho y Titulados
Mercantiles, Peritos y Profesores; ahora Grados y Másteres en Ciencias de la
Empresa o Empresariales, adoptaron este uniforme, idéntico al de diario de las
ingenierías, salvo los emblemas, de los que se disponía una regulación específica, que
con el tiempo fue abandonada por la de las palas de los ingenieros, arquitectos y
aparejadores con la sustitución de sus emblemas por los correspondientes a Derecho
o a Empresa, antiguos titulados mercantiles, como ya hemos dicho.
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Vemos en la imagen que continua, publicada en el Boletín Oficial del Estado de
referencia, la configuración de las palas, bocamangas y gorra correspondiente a los
letrados y titulados mercantiles del Ministerio de Hacienda, emblemática que fue
revisada parcialmente en lo concerniente a los escudos tras la aprobación de la
Constitución en 1978.
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Acabada aquí la descripción preliminar, en la actualidad asistimos a la buena noticia
de la recuperación de la simbología académica y profesional que tiene su mejor
exposición en la puesta en marcha de acciones para la celebración de protocolos y
ceremonias abandonadas o en desuso desde hace años. La restauración del
ceremonial en la Universidad de Salamanca, acometida desde los años cincuenta del
pasado siglo XX, o la mucho más reciente adaptación del ceremonial de 1720 en la
Facultad de Geografía e Historia de esta Universidad que se llevó a cabo por primera
vez el 13 de mayo del año 2000, son ejemplos de un camino a seguir. (Polo Rodríguez
et Hernández de Castro, 2004, 67)
Así visto todo lo anterior, cabe hacer una propuesta de revisión y adaptación a las
nuevas circunstancias académicas derivadas de Bolonia que ponga en valor la
uniformidad de los Cuerpos Técnicos, Aparejadores, Arquitectos e Ingenieros y del
resto de titulados académicos universitarios (Grado, Máster y Doctor) de otras
disciplinas, generando una de carácter generalista adaptada a los tiempos y usos
actuales, pero articulando la continuidad de los antiguos uniformes para aquellos que
de ellos disponen.
Queremos abandonar la distinción de uniformes de diario, de etiqueta y de gran
etiqueta, quedándonos en la definición intermedia de estos tres niveles, dejando por
una parte las versiones marinas, uniforme de diario, chaqueta cruzada azules o incluso
blancas en verano, con palas en los hombros y botones dorados o plateados; y
renunciado por otra a la recuperación de la complejidad y diversidad de los primeros
uniformes, que denominamos napoleónicos, con abundancia de bordados y
entorchados, sombreros de dos picos y plumaje, los de gran etiqueta. Dejamos así la
distinción entre uniformes de diario, de etiqueta y de gran etiqueta u otros,
complicando la representación y encareciendo el presupuesto.
No valoramos un uso del uniforme civil fueran de un limitado ceremonial público o
familiar y nos remitimos a un modelo único, siguiendo los antecedentes históricos, de
gala sin fajín y con bandas y de gran gala con fajín y sin bandas. Estimados que,
siendo necesaria la recuperación del valor del uniforme de los técnicos, su diseño
debe permitir la multifuncionalidad con bocamangas practicables e intercambiables,
definiendo la ingeniería en cuestión sólo por su escudo colocado en la gorra de plato,
de diseño moderno y sin recargos adicionales, donde la galleta que lo soporta puede
también ser sustituida por otra con el escudo de otra rama técnica sin dificultad alguna.
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Es por tanto que, buscando la versatilidad y la multifunción citada, hemos acudido
como soporte a varios antecedentes, el más importante del reinado de Su Majestad el
Rey Don Alfonso XIII, que representamos en la siguiente página, junto con otros que
también veremos y con las charreteras de 1836 y 1842 de los Ingenieros de Minas y
de Caminos compone el conjunto que hace posible la optimización del recurso y une la
economía de esfuerzos a un gran resultado estético sin romper con los modelos
tradicionales, en este caso el color azul marino o turquí como base fundamental de los
uniformes civiles. La chaqueta es la misma siempre, con la sola modificación de las
barras en la bocamanga según se pasa de Grado a Máster y de Máster a Doctor; el
distintivo de la ingeniería sólo está en la galleta de la gorra y son los pasadores
académicos, de quita y pon, los que completan la información académica.
Como decíamos, no ha sido esta una decisión alejada de la investigación y la
objetividad, dado que hemos encontrado el precedente suficiente en un uniforme de
ingeniero civil, de chaqueta cerrada y cuello alto y duro, que coincide básicamente con
la propuesta que hacemos, recuperando del mismo el galón de oro que discurre por el
todo del pantalón, veámoslo :
www.todocoleccion.net
Consulta realizada el 11 de junio de 2016
Conforme a la información aportada en la página web de referencia se trata de un
uniforme de Ingeniero Civil (lo que es coincidente con el rango que expresa la única
barra entre las hojas de laurel de su bocamanga, que en nuestra propuesta
corresponde al Grado Ingeniero) que perteneció, pero que no estrenó, Su Majestad el
Rey Don Alfonso XIII. Lo peculiar del mismo es que recupera en su diseño normativa
más antigua lo que evidencia una cierta flexibilidad. Evita la doble abotonadura y
cuello abierto en una levita de frac, presentándose una chaqueta cerrada más sencilla
que nos ha servido de perfecto antecedente.
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Por último incorporamos con la fórmula de los pasadores académicos, la
información del nivel o niveles del técnico en este ámbito, en una disposición
novedosa y ajena a la castrense, suficientemente explicativa, muy descriptiva y
económica. Nuestra propuesta es la de modalidad única de chaqueta, pantalón y gorra
de plato azul oscuro, tejido de lana en la chaqueta y de algodón en el pantalón.
Veamos:
Chaqueta con tirilla y puños blancos, cerrada hasta el cuello que será alto y llevará
en ambas márgenes del mismo el escudo identificativo de la titulación técnica en
dorado. Charreteras de hilo dorado en dos vueltas entrecruzadas y abotonadas en su
parte superior con botones dorados pequeños. Abierta en el centro y atrás con dos
botones dorados grandes donde acaba la espalda. Cierre único y centrado compuesto
por siete botones dorados grandes. Botones pequeños dorados en el vértice de la
bocamanga. Todos los botones timbrados con el escudo del Reino de España,
redondos, con volumen semiesférico y lisos en su fondo.
Pantalón recto y liso, con galón dorado de dos centímetros y medio de ancho en
ambos exteriores laterales y costura, desde la cintura hasta el zapato. El galón es de
dibujo único, con dos líneas laterales. Bolsillos marcados pero cerrados, excepto el
posterior, siempre abotonado en azul marino. Sin pasos de cinturón, siempre con
tirantes.
Gorra de plato con aro rígido, lleva cinturón con galón tejido en oro en la parte
superior del aro. La visera es lisa y sin adorno alguno. Todas las costuras son de oro.
La gorra es elevada y no plana en su parte central delantera, en el frontis, se coloca en
ángulo interior de 60 grados con la visera un óvalo o galleta con el escudo
identificativo de la titulación técnica, soportado en una pieza forrada del mismo paño,
practicable e intercambiable. La visera va forrada del mismo tejido que el resto sin más
adornos. El barbejo, de cordón y color dorado, se sujeta con dos botones pequeños
con el escudo del Reino de España y siempre va sobre la visera.
Zapatos negros de cordones, brillantes pero no de charol, calcetines negros y
guantes blancos de hilo o cabritilla, pero sólo los que sean doctores, usando e resto
guantes negros del mismo material.
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Distintivos del rango académico: Primero, cordón de oro en la bocamanga en
ángulo de noventa grados exterior y superior. A continuación una serreta también
dorada de siete milímetros que discurre paralela y pegada al cordón, aunque sin
confundirse con el mismo. A continuación un grupo corrido de tres por dos ramas de
laurel compuestas por manojos de una, dos y tres hojas, conforme a un diseño sencillo
y simplificado de las antiguas categorías técnicas que será general e idéntico para
todas las titulaciones. Llevará una barra estrecha de oro bajo las ramas para el Grado
Oficial Universitario, igual con dos barras estrechas para el Máster Oficial Universitario
y con tres barras para quien sea Doctor. Se incorporan las distinciones de Máster o
Doctor al uniforme civil aun cuando no tengan relación con la ingeniería de referencia,
explicando el contenido de estas titulaciones con los pasadores académicos.
(Silva Suarez, 1999, 96)
La Faja o fajín, que será siempre de seda morada, color distintivo de todos los
ingenieros civiles desde 1910, siempre con bellotas y borlas del mismo color. Sólo
para actos de gran gala y no compatible con bandas bajo charretera. El color morado,
púrpura en heráldica, tiene su origen en la Real Familia de los antiguos Reinos de
Asturias y León, donde se conserva en el escudo de armas de esta ciudad, pasando
por esto a ser el color representativo de la Real Familia Española con independencia
de los propios de su origen extra peninsular (amarillo y negro para los Austria, blanco
para los Borbón, amarillo y blanco para los Bonaparte y blanco y rojo para los
Saboya). Es el color del Estandarte de la Real Familia Española y nunca lo fue del
antiguo Reino de Castilla, que es el rojo carmesí. Fue enarbolado por los Comuneros
de Castilla en reivindicación de Su Majestad la Reina Doña Juana, frente a los colores
de su hijo Don Carlos y de ese momento viene su confusión con el color heráldico de
Castilla (Doña Juana fue Reina de Castilla, la primera, y Reina de Navarra, la tercera,
pero nunca Reina de Aragón). El morado fue, por estas circunstancias, el distintivo de
los Ingenieros Militares desde el siglo XVIII, de los Ingenieros de Caminos desde 1835
hasta 1967 y de todas las Ingenierías Civiles en el fajín o faja de su uniforme desde
1910 hasta la fecha.
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Pasadores Académicos, de tres centímetros de largo por uno y medio de ancho,
colocados centrados y justificados sobre el corazón. La primera fila, cuando se tenga,
con cuatro pasadores, el primero de derecha a izquierda con la Corona, con el color
que corresponda al Doctorado. En la segunda fila que será primera cuando no se
tenga el Doctorado, con tres pasadores, el primero de derecha a izquierda con la
Corona, con el color que corresponda al Máster Oficial Universitario. En la tercera fila,
que será primera cuando no se tenga el Máster o segunda cuando se cuente con este
sin el Doctorado, dos pasadores, el primero de derecha a izquierda con la Corona, con
el color que corresponda al Grado Oficial Universitario. Por último, en la cuarta fila, o la
que corresponda según los casos, un pasador, sin corona, que represente un solo
título universitario no oficial de postgrado, siempre en color de la universidad que lo
expide.
La Corona simboliza el mandato constitucional de expedición de los títulos oficiales
universitarios en nombre de Su Majestad el Rey. Por esa misma razón, al no ser título
oficial, aunque si universitario se permite un solo pasador de este tipo, pero sin timbrar
con la el símbolo regio.
Placa y medalla doctoral, siempre en lugar destacado la primera, el de la primera
condecoración, y la medalla colgando sin cordón del cierre del cuello. Tras estas
Collares, Condecoraciones y Bandas, que se llevarán en tamaño normal y con arreglo
a lo dispuesto en las normas de protocolo del Reino y en sus respectivos Reglamentos
excepto que no será compatible la banda con el fajín para gran gala, pudiendo lucir la
banda de forma ordinaria sin fajín y el fajín en la gran gala sin la banda.
.
Respecto al uso de uniformes antiguos, se podrá hacer por quienes los tengan y
conforme a la normativa que establece su regulación cuando hubiesen sido técnicos
titulados antes de la propuesta de la presente normativa. 4
4 Conforme a las normativas reseñadas cada uniformidad civil de ingeniería constaba de dos equipos, el de gala, que
es muy similar al de la Armada, y el de etiqueta. En este caso es siempre un frac cruzado con bordados en el cuello
(tapa), que se corresponden con el emblema que corresponda a la ingeniería. Los bordados en los puños, solapas y
carteras son relativos al rango. El uniforme de Ingeniero en ocasiones también era un frac cruzado, con solapas
totalmente distintas, amplias y pronunciadas, solapas napoleónicas. El cuello, con siete centímetros de altura, daba la
cota necesaria para poder realizar los bordados, que aparte del emblema de la ingeniería, tiene un desarrollo
decorativo de media Corona de laurel y otra media es una espiga de trigo, timbrado con la Corona. Por último todo el
perfil del cuello llevaba bordado un cordón y una serreta. Una de las mayores especialidades era la de la botonadura
siempre con los la heráldica de la ingeniería, es un producto, salvo coleccionista o anticuario, inexistente en la
actualidad. Hemos simplificado todos estos procesos con el objeto de conseguir un producto más asequible.
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Además, teníamos que pasar, como es nuestra costumbre, de la teoría a la
práctica, para lo que además de incorporar como anexo el borrador de un Real
Decreto que normalice, fije y regule tanto los uniformes civiles de los Cuerpos
Técnicos del Reino, como el traje académico, también carente de regulación
actualizada.
Por último fijamos la composición y colocación de los pasadores, centrados en el
pecho sobre el corazón y en paralelo el primero al segundo ojal de la chaqueta y lo
hicimos sobre un ejemplo concreto que podrá observarse en el reportaje fotográfico
que sigue:
- Pasador de Doctor. Programa Oficial de Doctorado de Derecho. Cuatro cajas
(MECES 4). Con Corona, título oficial universitario. Rojo.
- Pasador de Máster. Ciencias Sociales y Jurídicas, especialidad de Empresa y
especialidad de Turismo (MECES 3). Tres cajas. Con Corona, título oficial
universitario. Naranja.
- Pasador de Grado. Arquitecto, Aparejador o Ingeniero Técnico (MECES 2).
Dos cajas. Con Corona, título oficial universitario. Marrón.
- Pasador de título universitario no oficial. Una caja. Sin Corona. Rojo burdeos.
Y con estos antecedentes, investigación y colaboraciones pasamos a la acción, a la
confección material del proyecto propuesto, vemos primero otros antecedentes, visto
ya el del reinado de Su Majestad el Rey Don Alfonso XIII, de nuestra propuesta y
luego, en las fotos el resultado práctico de la misma:
Otros antecedentes son:
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(Silva Suarez, 1999, 49)
(Silva Suarez, 1999, 43)
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Veamos ahora las fotografías de nuestra propuesta:
Foto 01 Cuello de la Chaqueta
Chaqueta propuesta para el uniforme civil de ingeniero, común a todas las
especialidades, mismas charreteras, misma abotonadura - en este caso con el escudo
del Reino de España - emblemas identificativos de la titulación técnica en los cuellos y
los pasadores académicos y la placa de doctor son desmontables. En la bocamanga,
desmontable también, se observa la única distinción, en este caso el distintivo de
doctor, tres barras que se van incorporando conforme se superan los hitos
curriculares, una barra Grado, dos barras Máster y tres barras Doctor.
Foto 02. Fajín
Vemos el fajín de ingeniero civil, con el primer y más antiguo color morado
conforme a lo dispuesto en el año 1910, común para todas las ingenierías, que
mantenemos para todas las especialidades técnicas. Un titulado en Farmacia utilizaría
el mismo fajín en su uniforme, pero se distinguiría por los emblemas de su gorra y el
cuello de su chaqueta
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Foto 03. Pantalón
Foto 04. Gorra de Plato
Gorra de Plato. Es el único elemento en el que se distingue la especialidad de la
ingeniería junto con los emblemas del cuello. La galleta con el escudo es desmontable
y se puede sustituir por otra de cualquier especialidad. Se ha prescindido de hojas y
barras que aparecen en las dos primeras y no en la última a efectos de simplificación y
evitar cambios con el paso de un grado académico a otro. Así el cordón y los vivos son
los mismos siempre, en todas las ingenierías y en cualquier nivel académico, Grado,
Máster o Doctor. En la imagen respectivamente de izquierda a derecha, Caminos,
Industriales y Edificación.
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Debajo gorra del uniforme civil de titulado en Derecho (Grado, Máster o Doctor)
como puede comprobarse todas idénticas salvo la falta de las hojas y barras en la de
Edificación, como ya se ha dicho en favor de la simplificación.
Foto 05. Detalle exterior de la bocamanga
En la bordadura se van incorporando barras, del exterior al interior, conforme se
van superando los niveles académicos de Grado, una, Máster, dos, y Doctor, tres. El
puño va incorporado pues la chaqueta de cuello cerrado se viste sin camisa ni corbata.
Es botón, de tamaño pequeño, repite el motivo de los de tamaño grande: El Escudo
del Reino de España. Es la misma bordura para todas las ingenierías.
(Bordado a mano realizado por Costumatic. Cáceres)
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Foto 06. Detalle interior de la bocamanga
La bordadura de la bocamanga es completa en todo su desarrollo.
(Bordado a mano realizado por Costumatic. Cáceres)
Foto 07. Detalle de la medalla de Doctor. Dorada
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Foto 08. Detalle de la medalla de Máster o Licenciado. Plateada
Foto 09. Detalle de la Placa de Doctor
Doctor en Derecho o de Derecho; en el primer caso los titulados antes de
Bolonia, en el segundo los titulados después.
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Detalle de Placas de Doctor
Derecho; Empresa; Ingeniería y Arquitectura; Medicina; Farmacia; Veterinaria
www.insigniasprofesionales.es Consulta realizada el 14 de septiembre de 2018
Foto 10. Detalle de la charretera
La misma para todas las ingenierías y la misma que la de Minas de 1836 y
Caminos de 1842. Se prescinde de las palas “marineras” que se presentan a
continuación con los distintivos de la gorra de los que hemos prescindido, como ya
hemos explicado:
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(Silva Suárez, 1999, 96) (Silva Suárez, 1999, 96)
(Silva Suárez, 1999, 89) (Silva Suárez, 1999, 91)
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Foto 11. Detalle de los pasadores académicos
El modelo presentado luce la máxima posibilidad posible, Doctor de un programa
de Derecho, MECES 4, cuatro pasadores en rojo. Máster de un Programa de Ciencias
Sociales y Jurídicas, MECES 3, tres pasadores en naranja. Grado Aparejador,
Arquitecto o Ingeniero, MECES 2, dos pasadores académicos en marrón (la
especialidad se verá en el escudo de la galleta del a gorra). Además ostenta un
pasador granate correspondiente a un título propio, no oficial, de una universidad
española con su color. En el caso de ser Grado, Máster o Doctor en la misma Ciencia
o rama del conocimiento se disponen los mismos, cuatro, tres y dos pasadores, pero
todos del mismo color académico, o los pasadores de Grado y Máster del mismo color
y el de Doctor de otro que pueda corresponderle. Los antiguos Licenciados,
Arquitectos e Ingenieros podrían colocar el pasador de Grado y el de Máster, siempre
del mismo color. 5
5 Los pasadores académicos nunca pueden confundirse con los militares u otros de naturaleza civil. Estos completan
filas y columnas, hasta ocho las primeras e indefinidas las segundas, los pasadores académicos no las completan
nunca, siendo como máximo cuatro, tres dos o una caja en cuatro filas correspondiendo al rango de Doctor, Máster,
Grado o título propio de una universidad. Un solo pasador verde, correspondiente al título propio de una universidad,
podría confundirse con la medalla de mutilado o la de sufrimientos por la patria. Un solo pasador rojo con Corona o
rojo sin ella podría confundirse con la Gran Cruz de la Orden de Alfonso X o con la medalla de la misma Orden
respectivamente y sin Corona también con la medalla al mérito de la protección civil con distintivo rojo; pero estos
pasadores académicos nunca se llevan así, el color rojo corresponde a Derecho y Criminología, y siempre se llevarían
como mínimo dos cajas una con Corona y otra sin ella correspondientes al Grado, lo que nunca puede ocurrir con las
dignidades civiles citadas. Si se es Máster, tres cajas rojas, una con Corona, o Doctor, cuatro cajas rojas, una con
Corona, la confusión siempre es imposible. Lo mismo ocurre respecto al color morado, de Farmacia, con respecto a la
Gran Cruz de la Orden de Cisneros que se presenta con una placa como pasador morado con Corona; la medalla de
esta Orden con placa morada sin Corona. Por último la placa de un pasador azul claro podría confundirse con la
medalla de la ONU, una azul oscura con la medalla del trabajo o con la medalla al mérito de la protección civil con
distintivo azul, en los tres casos sin Corona y por ello sólo en correspondencia a títulos propios de universidades. La
coincidencia es muy improbable. Además los militares sobre la chaqueta de uniforme cerrado no llevan pasadores,
sino miniaturas de las condecoraciones y ha sido esa prenda la se ha tomado, con modificaciones, como base del
uniforme civil que se describe. Ver al respecto la ORDEN del MINISTERIO DE DEFENSA 3594/2003, de 10 de
diciembre.
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Foto 12. Detalle de la botonadura
De Ingeniería Industrial en este caso
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Conclusiones
1.- La nueva configuración de las titulaciones nos acerca a los modelos
norteamericanos y europeos de evidente éxito profesional y académico. La decisión
gubernamental de la homologación y correspondencia de las antiguas titulaciones con
el Grado Oficial Universitario y la de Máster Oficial Universitario es un acierto que
permite la plena integración de estos titulados en el marco de Bolonia y su
participación plena en el mercado laboral y profesional europeo.
2.- La independencia universitaria en el momento de definir y designar los estudios
académicos así como la carga crediticia y de calidad de los mismos en un sistema
flexible de Grado y Máster que permite duraciones e intensidades distintas para las
mismas titulaciones es un modo muy interesante de diversificación formativa y de
competencia en el ámbito de la educación universitaria europea. Sin embargo este
positivo proceso rompe la equivalencia entre titulación académica y ejercicio
profesional, pudiendo varias titulaciones referirse a una sola profesión. Es en este
momento en el que creemos que los colegios profesionales vuelven a jugar un
decisivo papel, primero para fijar el nombre de la profesión, que podrá o no ser
coincidente con alguna de las titulaciones académicas y en segundo lugar para
determinar, en su función pública – privada, que titulaciones dan acceso, en calidad y
garantía, a su profesión.
3.- La identificación social de las actividades es uno de los elementos constitutivos de
nuestra forma de ser y estar como ciudadanos de un Reino moderno y democrático.
Los símbolos ponen de manifiesto estas identificaciones y estos en general y los
uniformes en particular así lo han hecho, lo hacen y lo harán en el futuro. El
ceremonial universitario, el traje académico y los uniformes de los Cuerpos Técnicos
del Reino y del resto de los titulados académicos universitarios cumplen esa función y
es el momento de solucionar el cierto abandono normativo y de perfeccionamiento que
han padecido, estableciendo nuevas propuestas, sencillas y económicas que permitan
la puesta en valor y reconocimiento social de estas funciones, haciendo extensiva esta
reflexión a otros estamentos sociales que también gozan de uniformidad, que debe ser
amparada, respetada, actualizada y valorada.
.
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Bibliografía
Cazeneuve J. et Victoroff D. (1975) La Sociología. Bilbao. Ediciones
Mensajero
Clemente Garcia E. (2011) La Indumentaria Civil. Zaragoza. Emblemata
Revista Aragonesa de Emblemática.
Galino Mateos M.T. et Saraiva González F. de P. et Hernández de Castro
J. (2010) Catálogo de orientaciones sobre el uso del traje académico y sus
colores. Salamanca. Conferencia de Rectores de las Universidades
Españolas/Asociación del Estudio e Investigación del Protocolo
Universitario.
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Profesionales. Madrid. España. Editorial Dykinson.
López Nieto F. (2006) Honores y Protocolo. Parte Especial. Madrid.
España. Wolters Kluwer.
Polo Rodríguez J.L. et Hernández de Castro J. (2004) Ceremonia y Grados
en la Universidad de Salamanca. Una aproximación al protocolo
académico. Salamanca. España. Ediciones Universidad de Salamanca.
Silva Suárez. (1999) Uniformes y emblemas de la Ingeniería Civil española.
Zaragoza. España. Institución Fernando el Católico.
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ANEXO. BORRADOR DE REAL DECRETO:
REAL DECRETO
DISPOSICIONES GENERALES
PRESIDENCIA DEL GOBIERNO
Real Decreto por el que se aprueba el diseño y condiciones de uso del traje
académico y del uniforme civil de los Cuerpos Técnicos del Reino y sus complementos
de honores, así como el ceremonial universitario.
El protocolo y el ceremonial de las universidades, tienen su origen en la tradición de
los usos académicos, en la normativa que regula estos centros de enseñanza superior
y en las actividades y competencias que les son propias, que las hacen diferentes de
cualquier otra institución. Preservar el protocolo universitario es importante por lo que
supone como manifestación de la autonomía universitaria y por ser una parte
significativa de la herencia cultural académica y uno de los rasgos distintivos de las
mismas. Gran parte de los símbolos que integran el ceremonial se han ido
manteniendo a lo largo de la historia, gracias a que la normativa que regulaba el
funcionamiento de las universidades recogía también este aspecto de su actividad
adaptándolo a los cambios. El traje académico es posiblemente uno de los símbolos
más consolidados del protocolo universitario desde hace siglos, al que se unió, como
elemento representativo académico y profesional, el uniforme civil de los integrantes
de los Cuerpos Técnicos del Reino, primero para los que eran funcionarios públicos y
luego extensivo a todos los que hubiesen obtenido esa titulación, primero técnica y
desde la integración de estos estudios en la Academia y por ello ya universitarios.
Sin embargo, desde finales del siglo XX, la normativa sobre el funcionamiento y la
organización de las universidades ha olvidado toda mención sobre el protocolo y sobre
sus símbolos. Estos cambios han llevado a las universidades a tomar decisiones sobre
sus símbolos, para intentar adaptarlos a los cambios, sin tener una directriz común o
una guía que permita mantener el significado de los mismos, dado que ha sido una
preocupación creciente entre los responsables de protocolo de las Universidades el
dar respuesta a las nuevas situaciones y el salvaguardar los símbolos y el ceremonial
como signos de su propia identidad institucional.
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Es por ello que la intención del presente Real Decreto, es la de salvar esa falta de
actualización, que no de carencia de norma, que también resuelva los cambios que
nos vienen dados por la entrada en vigor del Espacio Europeo de Educación Superior.
En su virtud, y conforme a lo dispuesto en la Constitución, artículo 149, apartado 30 y
a propuesta de los Ministros competentes en materia de Educación, de Fomento y de
Industria, previa deliberación del Consejo de Ministros,
DISPONGO:
Artículo 1º De los distintivos académicos.
a). Las universidades conforme a la presente ordenación podrán usar emblemas que
podrán ser los comprendidos en el ámbito de la heráldica, la vexilología, sigilografía, la
cromática y la braquigrafía; pueden así disponer de escudos, banderas, sellos, colores
simbólicos, siglas, monogramas, anagramas, logotipos e himnos.
b). Los colores son el símbolo máximo de los estudios y se lucen especialmente con
motivo de la celebración de las solemnidades académicas. El color figurara en las
becas que se imponen a los que consigan el título de Grado, en el traje académico de
los que consigan el título de Máster, en el traje académico y placa doctoral de los que
consigan el título de Doctor, en el traje académico de los Doctores Honoris causa para
su investidura y en los pasadores académicos de los uniformes civiles de los Cuerpos
Técnicos del Reino, Aparejadores, Arquitectos e Ingenieros.
Artículo 2º de los colores académicos.
Los colores académicos de las disciplinas son los siguientes:
- Ciencias de las Artes y las Humanidades (Antropología Cultural, Antropología
Social, Biblioteconomía, Documentación, Filosofía, Filología, Geografía,
Interpretación, Historia, Lengua, Letras, Literatura, Música, Traducción): azul
claro.
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- Ciencias Exactas (Biología, Bioquímica, Física, Matemáticas, Química,
Marinas): azul oscuro.
- Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (Fisioterapia, Terapia ocupacional):
verde claro.
- Ciencias de la Construcción (Aparejadores, Arquitectos, Ingenieros): marrón.
- Ciencias de la Educación (Educación Social, Maestro, Pedagogía, Teología):
blanco.
- Ciencias Económicas, Políticas, Sociológicas y de la Empresa (Administración
de Empresa y Pública, Educación Social, Estadística, Gestión de Empresa y
Pública, Mercados, Relaciones Laborales, Trabajo, Turismo): naranja.
- Ciencias de la Información (Comunicación, Periodismo, Publicidad, Relaciones
Públicas): gris oscuro.
- Ciencias Farmacéuticas (Farmacia, Tecnología de los Alimentos): morado
oscuro.
- Ciencias Jurídicas (Derecho, Criminología): rojo.
- Ciencias Médicas (Medicina, Cirugía): amarillo.
- Ciencias Psicológicas (Psicología, Psicopedagogía): morado claro.
- Ciencias de la Salud (Dietética, Enfermería, Enología, Logopedia, Nutrición,
Odontología, Óptica, Optometría, Podología): gris claro.
- Ciencias Veterinarias (Ambientales y Veterinaria): verde oscuro.
- Para cualquier otro tipo de Ciencia cuyas áreas de conocimiento no estén
recogidas en los apartados anteriores: rosa.
.
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Artículo 3º. De los colores de los centros universitarios.
Las universidades que se atribuyan un color o lo hagan para con sus centros lo harán
siguiendo los siguientes criterios:
a). En el caso de las universidades se corresponderá con el de la Facultad, Escuela o
Centro de Estudios de mayor antigüedad en la misma y si fueran varios el que se
designe por el órganos de gobierno universitario que correspondan o ninguno.
b). Los centros en los que se impartan titulaciones de una única rama de conocimiento
tendrán el color que corresponde a esa rama o disciplina.
c). En los centros en los que se impartan titulaciones de dos o más ramas de
conocimiento, tendrá el color correspondiente a la rama de conocimiento principal,
fijada la misma atendiendo al mayor número de créditos que se imparten en cada una.
Artículo 4º Del distintivo académico del Grado
El distintivo académico de aquellos que consigan la titulación oficial universitaria de
Grado es la Beca, que se llevará siempre sobre una chaqueta oscura y lisa con
corbata negra sobre camisa blanca. La Beca será del color de la rama de
conocimiento que figure en la inscripción del título. Cuando se trate de dobles
titulaciones, si tienen el mismo color, se distinguirá la beca con la denominación de
ambas titulaciones. Si el color que les corresponde fuera diferente, la beca será de los
dos colores por mitades. En la beca se grabará el escudo del centro y el de la
Universidad, este rodeado por la leyenda del nombre de la titulación.
Artículo 5º Del traje académico de Máster.
El traje académico que distinguirá a los que alcancen la titulación Oficial universitaria
de Máster es la siguiente:
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a). La toga, que es de paño de color negro con vueltas de raso. Su longitud debe
prolongarse hasta los 30 centímetros por encima del suelo.
b). La muceta del color distintivo de la titulación, que es una esclavina de raso, forrada
de seda negra, abotonada por delante y que debe cubrir el codo. En la parte posterior
lleva una gran cogulla.
c). El birrete: Tiene forma octogonal, antes hexagonal; forrado de raso negro sin
flecos. La borla es de seda floja y cubrirá enteramente la parte superior, es del color
distintivo de la titulación y si se tienen varias, el de la más antigua.
d).Los guantes negros, de hilo o de cabritilla
e).Si se estuviera en posesión de dos o más títulos de Grado o Máster, se alternarán
sobre en los colores de los botones de la muceta los de cada titulación, primero los de
Máster por su orden de antigüedad y luego los de Grado con el mismo criterio. La
muceta será siempre la del Máster más antiguo.
f). La medalla, que será igual a la de los doctores, pero de metal plateado, figurando
en el reverso la leyenda "Máster Universitario". El color del cordón será el propio de su
titulación.
Artículo 6º Del traje académico de los Doctores.
El traje que revestirán los doctores será el siguiente:
a). La toga que es de paño de color negro con vueltas de raso. Su longitud debe
prolongarse hasta los 30 centímetros por encima del suelo.
b). La muceta, que es una esclavina de raso, forrada de seda negra, abotonada por
delante; debe cubrir el codo. En la parte posterior lleva una gran cogulla.
c). Los vuelillos: Son los puños de encaje blanco que se llevan en la bocamanga de la
toga, sobre un vivo de raso del color que corresponda. Su uso es privativo de los
doctores.
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d). El birrete doctoral: Siempre octogonal, forrado de raso negro con flecos del color
distintivo. La borla, de seda floja, cubrirá enteramente la parte superior y será del
mismo color que los flecos.
e). Los guantes blancos de hilo o cabritilla.
f). La medalla doctoral que será dorada y conforme a lo dispuesto en la Real Orden de
13 de junio de 1893, en metal dorado.
g). El color del birrete, la muceta, los vuelillos y el cordón de la medalla doctoral será el
de la rama de conocimiento en la que se enmarque el Programa Oficial de Doctorado
que ha cursado.
h). Si en el Programa de Doctorado intervienen varias ramas de conocimiento, el color
será el de la rama principal, atendiendo al número de créditos. Si hubiera paridad entre
ramas, tendrá preeminencia la rama de conocimiento en la que el Doctor sea Máster.
Si se está en posesión de dos o más títulos de Doctor pertenecen a distintas Ciencias
y ramas de conocimiento se alternarán sus colores en los flecos del birrete por partes
iguales. Si los dos o más doctorados pertenecen a la misma Ciencia y rama de
conocimiento, se alternarán sus colores en los flecos del birrete por partes iguales con
el negro. Si el Doctor estuviera en posesión de dos o más títulos de Grado o Máster,
se alternarán los colores de los botones de la muceta, primero el de doctor, luego el de
Máster y finalmente el de Grado y así sucesivamente.
i). Placa, que está compuesta por el Escudo del Reino, sobre el color de la titulación y
el todo sobre una estrella octogonal apuntada y rayada de color dorado conforme a lo
dispuesto en Real Orden de 13 de junio de 1893. La placa sólo tiene uso sobre
uniforme o frac, pudiendo llevarse en botón de solapa, en el ojal correspondiente en
chaqueta o como miniatura con cinta de su color académico en el chaqué.
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Artículo 7. Del uso de las insignias de Doctor y de Máster sobre el uniforme
Se autoriza el uso sobre el uniforme del distintivo del grado de Doctor en su modalidad
de placa y del distintivo del Grado de Doctor o el de Grado de Máster Oficial
Universitario, en su modalidad de medalla al personal civil, de seguridad pública o de
protección civil, diplomático o militar y de cualquier otro de los cuerpos uniformados de
las administraciones públicas del Reino que se halle en posesión de dichos títulos. En
el caso de la placa conforme a lo dispuesto reglamentariamente para la disposición de
las condecoraciones civiles y militares sobre el mismo. En el caso de la medalla, podrá
usarse sobre el uniforme el distintivo correspondiente en esta modalidad sujeta al
cuello, sobre el nudo de la corbata o sobre el cierre superior de la chaqueta cerrada,
por el cordón de seda del color académico que le corresponda. 6
Artículo 8. Del uniforme civil.
El uniforme civil de los Cuerpos Técnicos del Reino está compuesto por chaqueta,
pantalón y gorra de plato azul marino o turquí. La modalidad es única y su desarrollo
es el siguiente:
a). Modalidad única: chaqueta, pantalón y gorra de plato azul oscuro, tejido de lana en
la chaqueta y de algodón en el pantalón.
b). Chaqueta con tirilla a nivel de alzacuellos y puños blancos, cerrada hasta el cuello
que será alto y llevará en ambas márgenes del mismo el emblema identificativo de la
titulación técnica en dorado. Charreteras de hilo dorado en dos vueltas entrecruzadas
y abotonadas en su parte superior botones dorados pequeños. Abierta en el centro y
atrás con dos botones dorados grandes donde acaba la espalda. Cierre único y
centrado compuesto por siete botones dorados grandes. Botones pequeños dorados
en el vértice de la bocamanga. Todos los botones timbrados con el escudo del Reino
de España o con el emblema de la ingeniería, redondos, con volumen semiesférico y
lisos en su fondo.
6 Orden Circular del Ministerio del Ejército de 20 de octubre de 1976.
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c). Pantalón recto y liso sin vuelta, con galón dorado de dos centímetros y medio de
ancho en ambos exteriores laterales y costura, desde la cintura hasta el zapato. El
galón es de dibujo único, con dos líneas laterales. Bolsillos marcados pero cerrados,
excepto el posterior, siempre abotonado, botón de pasta y color azul marino. Sin pasos
de cinturón, con tirantes.
d). Gorra de plato con aro rígido, lleva un cinturón con galón tejido en oro en la parte
superior de aro. La visera es lisa y sin adorno alguno. Todas las costuras son de oro y
es elevada y no plana en su parte central delantera, en el frontis, se coloca en ángulo
interior de 60 grados con la visera un óvalo o galleta con el escudo identificativo de la
titulación técnica, soportado en una pieza forrada del mismo paño, practicable e
intercambiable. La visera va forrada del mismo tejido que el resto sin más adornos. El
barbejo, de cordón y de color dorado, se sujeta con dos botones pequeños como los
de la chaqueta y se lleva siempre por encima de la visera.
e). Zapatos negros de cordones, brillantes pero no de charol, calcetines negros y
guantes blancos de hilo o cabritilla, pero sólo los que sean doctores, usando e resto
guantes negros del mismo material.
.
f). Distintivos del rango académico: Primero, cordón de oro en la bocamanga en
ángulo de noventa grados exterior y superior. A continuación una serreta también
dorada de siete milímetros que discurre paralela y pegada al cordón, aunque sin
confundirse con el mismo. A continuación un grupo corrido de tres por dos ramas de
laurel compuestas por manojos de una, dos y tres hojas, conforme a un diseño sencillo
y simplificado de las antiguas categorías técnicas que será general e idéntico para
todas las titulaciones. A modo de galón llevará una barra estrecha de oro bajo las
ramas para el Grado Oficial Universitario, igual con dos barras estrechas para el
Máster Oficial Universitario y con tres barras para quien sea Doctor, incorporándose
estas distinciones al uniforme civil aun cuando sean grados no relacionados con la
ingeniería de referencia. Las barras se incorporan del exterior al interior.
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g). La Faja, sólo para actos de gran gala y no compatible con bandas bajo la
charretera derecha que se desarrollan hasta la cadera contraria, que será siempre de
color morado, siempre con bellotas y borlas del mismo color que cuelgan sobre la
cadera izquierda. Se entienden como actos de Gran Gala, los que así se convoquen y
en defecto de convocatoria al menos los que presida Su Majestad el Rey, el
Excelentísimo y Magnifico Rector, el Director de una Escuela Técnica Universitaria, el
Presidente de un Tribunal de Tesis Doctoral, el Presidente del Colegio Profesional que
corresponda y la ceremonia de los actos sacramentales – en referencia a las creencias
personales – familiares, o civiles en los que pueda participar como actor o co-actor
principal, el uniformado.
h). Pasadores Académicos, de tres centímetros de largo por uno y medio de ancho,
colocados centrados y justificados sobre el corazón. La primera fila, cuando se tenga,
con cuatro cajas, la primera de derecha a izquierda con la Corona, con el color que
corresponda al Doctorado. En la segunda fila, que será primera cuando no se tenga el
Doctorado, con tres cajas, la primera de derecha a izquierda con la Corona, con el
color que corresponda al Máster Oficial Universitario. En la tercera fila, que será
primera cuando no se tenga el Máster o segunda cuando se cuente con este sin el
Doctorado, dos cajas, la primera de derecha a izquierda con la Corona, con el color
que corresponda al Grado Oficial Universitario. Siempre en la última fila, una caja
como máximo, sin corona y del color de la universidad que lo expide cuando se
disponga de títulos universitarios no oficiales. El primer pasador se coloca en paralelo
al segundo ojal, centrado la parte izquierda del pecho, sobre el corazón y debajo los
siguientes. En el caso de ser Grado, Máster o Doctor en la misma Ciencia o rama del
conocimiento se disponen los mismos, cuatro, tres y dos placas de pasadores, pero
todos del mismo color académico, o las placas de los pasadores de Grado y Máster
del mismo color y las de Doctor de otro que pueda corresponderle. Los antiguos
Licenciados, Arquitectos e Ingenieros podrán colocar las placas de pasadores de
Grado, dos, y el de Máster, tres, siempre del mismo color. Todas en el orden
establecido.
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Artículo 9. Del uso del traje académico y del uniforme civil.
a). El uso del traje académico y en su caso del uniforme civil de los técnicos será el
que disponga el protocolo y reglamento de la Universidad y al menos en los actos de
apertura de curso, fiestas generales de la Universidad y particulares de cada uno de
sus centros y en la composición de tribunales para la evaluación de los trabajos de fin
de Grado, de fin de Máster y la lectura y defensa de tesis doctorales, debiendo
comparecer el Graduado con la Beca que le corresponda sobre una chaqueta oscura y
lisa con corbata negra sobre camisa blanca para la presentación de su trabajo de fin
de Máster y el doctorando con el traje académico de Máster que también le
corresponda. La falta de protocolo a este respecto por alguna de las partes obligadas
al mismo, provocará la automática suspensión del acto por quien lo presida.
b). El uso del uniforme civil en el ámbito académico general queda supeditado al
protocolo y disposiciones reglamentarias de la Universidad al respecto o a la
autorización expresa del Excelentísimo y Magnífico Rector Profesor Doctor. Los actos
académicos particulares vinculados a las Escuelas Técnicas Universitarias permitirán
el uso del uniforme civil como alternativa al traje académico en aquellos actos en los
que previamente esté regulado. El uso del uniforme civil podrá ser permitido por el
Presidente del Tribunal, indistintamente con el traje académico, en la composición de
los mismos para la evaluación de los trabajos de fin de Grado y de fin de Máster.
c). El uso del uniforme civil fuera del ámbito académico queda restringido a aquellos
actos de representación técnica en los que no se produzca menoscabo o deterioro del
prestigio y valor profesional de la ingeniería civil a la que representa. Su utilización
está vinculada a actos sociales, institucionales o familiares relevantes, siendo
obligatorio para los actos y solemnidades oficiales en que expresamente se imponga
en su convocatoria.
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Artículo 10º De los Decanos y Directores.
a). Los Excelentísimos Decanos de Facultad o Directores de Escuela Profesores
Doctores, llevarán el traje académico de doctor con el color correspondiente a su
Doctorado o el uniforme civil que les fuese propio. Usarán un bastón de mando. El
cordón de la medalla doctoral de su Doctorado, cruzado con un hilo de color dorado.
Además llevarán la medalla que identifique la dirección del centro, que siempre tendrá
el cordón negro y en el anverso el escudo del mismo y en el reverso el de la
Universidad.
b). Los Vicedecanos o Subdirectores están a lo mismo, pero el cordón estará cruzado
con hilo de plata. Los Vicerrectores y los Secretarios Generales llevarán el traje o
uniforme que corresponda a su Doctorado.
Artículo 11º. Del Excelentísimo y Magnífico Rector.
El Excelentísimo y Magnífico Rector Profesor Doctor, siempre usa birrete doctoral con
borla y flecos negros. Usará un bastón de mando y es el único que porta un anillo
personalizado, denominado anillo rectoral. Además llevarán la medalla que le
identifique como tal, que siempre tendrá el cordón negro y en el anverso el escudo de
la Universidad y en el reverso la leyenda: “Excelentísimo y Magnífico Rector”
Artículo 12º. De los tratamientos.
Los tratamientos debidos a los titulados y rangos universitarios son los siguientes:
a). Para quien consiga el título de Grado Oficial Universitario, el de Graduado Señor
Don, seguido de su nombre y apellidos.
b). Para quien consiga el título de Máster Oficial Universitario, el de Licenciado,
Arquitecto o Ingeniero Señor Don, seguido de su nombre y apellidos.
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c). Para quien consiga el título de Doctor, el de Ilustrísimo Profesor Doctor Señor Don,
seguido de su nombre y apellidos.
d). Para quien sea Decano de Facultad o Director de Escuela, el de Excelentísimo
Decano o Director, Profesor Doctor Señor Don, seguido de su nombre y apellidos.
e). Para quien sea Rector de Universidad, el de Excelentísimo y Magnífico Rector
Profesor Doctor Señor Don, seguido de su nombre y apellidos.
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f). Cada Universidad definirá su heráldica, armas, bandera, imagen corporativa y
demás elementos singulares conforme a su criterio, su historia y su tradición. De igual
forma se hará con la heráldica y armas de sus centros, Facultades y Escuelas que
respetarán, no obstante la independencia y autonomía universitaria, la unidad de
imagen y representación de las titulaciones que dan origen a una misma actividad
profesional, coordinado esta acción la Conferencia de Rectores con los Consejos de
los Colegios Profesionales.
Artículo 13º Del uso de las dignidades.
El uso de dignidades, honores y condecoraciones es el siguiente:
a). Sobre el traje académico no se permite prender insignias o condecoración alguna,
placa o banda, salvo los collares y medallas que podrán ir sobre los hombros por
encima de la muceta, o colgados del cuello.
(López Nieto, 2006, 958)
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b). Sobre el uniforme civil se permite la Placa y la Medalla Doctoral siempre en primer
lugar y la Medalla sobre el cuello sin cordón. Tras estas Collares, Medallas,
Condecoraciones y Bandas, que se llevarán en tamaño normal y con arreglo a lo
dispuesto en las normas de protocolo del Reino y en sus respectivos Reglamentos. Se
coloca la primera condecoración en paralelo y sobre su eje con el cuarto ojal de la
chaqueta sobre la costura central de la chaqueta en su parte izquierda si es solo una,
y si son dos a dos centímetros de la misma, a izquierda y derecha, Una tercera y una
cuarta debajo y encima de ambas anteriores centradas sobre las mismas, a dos
centímetros. Con las siguientes se repite el proceso, pares e impares, siempre más
arriba y a la derecha la de mayor importancia. Sobre el uniforme civil, la banda nunca
es compatible con el fajín morado.
c). Sobre una chaqueta oscura y lisa se permite el uso, prendido en el ojal de la solapa
de la miniatura de la placa doctoral o del escudo de la titulación que corresponda en
acabado dorado.
d). Sobre el smoking en hombre o traje de fiesta en mujer, se permite el uso prendido
sobre el ojal de la solapa de una sola miniatura con cinta de hasta tres centímetros y
medio de largo y de su color académico, bien de la placa doctoral o del escudo de la
titulación que corresponda que no podrá tener más de dos centímetros y medio de
largo.
e). Sobre el chaqué en hombre o traje corto en mujer, se permite el uso prendido sobre
el ojal de la solapa de varias miniaturas, de la placa doctoral, del o de los escudos de
la titulaciones y de condecoraciones, cada una sobre una cinta de su color académico
o el que le corresponda a la condecoración, en las medidas reseñadas en el apartado
anterior; y el todo en un pasador único hasta un máximo de 10 miniaturas. En el
pecho, en la parte izquierda del corazón y bajo el bolsillo, los pasadores académicos
centrados y justificados bajo el mismo, que podrán usar todos los titulados
universitarios, prendidos o bordados en su tamaño real o con reducción a la mitad de
sus dimensiones. Se permiten las medallas y collares colgados del cuello, pero no
bandas o condecoraciones.
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(López Nieto, 2006, 956)
f). Sobre el frac en hombre o traje largo de mujer, se permite la Placa Doctoral,
Collares, Medallas colgadas del cuello, Condecoraciones y Bandas, que se llevarán en
tamaño normal y con arreglo a lo dispuesto en las normas de protocolo del Reino y en
sus respectivos Reglamentos. En presencia de Su Majestad el Rey las Bandas por
encima del chaleco y en su ausencia siempre por debajo.
(López Nieto, 2006, 957)
Artículo 14º Del Ceremonial.
Queda fijado en el ámbito de las condiciones de obtención expedición y homologación
de los títulos académicos y profesionales en siguiente ceremonial con el objeto de
dotar de presencia y prestigio social el comienzo de los estudios en la Universidad y la
conclusión de cada uno de sus ciclos, así como el de las personas que los inician y
concluyen. En función de todo ello se establece:
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a). Para el caso de los Bachilleres y en el momento de su incorporación a la
Universidad se celebraría un acto académico solemne en cada Facultad o Escuela,
presidido por su Decano o Director y en presencia de toda la comunidad del centro
debidamente revestida de sus atributos, trajes, vestimentas y uniformes en el que
quien preside, tras concluir la comitiva académica conforme al protocolo de la
Universidad, dará la bienvenida a los Bachilleres y les dirá, tras impartirse una lección
magistral: “Por cuanto habéis acreditado vuestro saber, haciendo uso de la autoridad
que me está confiada y en nombre del Excelentísimo y Magnífico Rector os reconozco
como Bachiller con la calificación que se os ha otorgado por haber considerado quien
ha juzgado vuestro conocimiento que sois dignos de este honor”.
b). Para cuando se obtenga el título de Grado el ceremonial será idéntico al anterior si
bien en este caso tras la lección magistral y en llamamiento personal cada nuevo
titulado será requerido para formalizar el siguiente compromiso académico: “Por
cuanto habéis acreditado vuestro saber académico, haciendo uso de la autoridad que
me está confiada y en nombre de Su Majestad el Rey os reconozco como Grado con
la calificación que se os ha otorgado por haber considerado quien ha juzgado vuestro
conocimiento que sois dignos de este honor y en consecuencia: ¿Juráis por Dios o
prometéis solemnemente por vuestro nombre y honor, cumplir con las obligaciones
que impone el título de Grado que se os va a conferir?” El nuevo Grado responderá:
“Así lo Juro” o “Así lo Prometo” o “Así Aseguro” o “Así Quiero”. Tras la respuesta
afirmativa el presidente intervendrá diciendo: “Si así lo hiciereis, que se os premie, y si
no se os demande; y además seréis responsable en el ejercicio de vuestro título con
arreglo a las leyes”.
c). Para cuando se obtenga el título de Máster el ceremonial será idéntico a los
anteriores, si bien en este caso cada titulado tendrá que ser acompañado por un
padrino, miembro de la comunidad académica y que tendrá el grado de Doctor. Tras la
lección magistral y en llamamiento personal cada nuevo titulado será requerido para
dos cosas; primero leer desde la tribuna un discurso que previamente habrá sido
entregado por su padrino al Decano o Director para su revisión formal y temporal,
pudiendo ser - si los candidatos son numerosos - un solo discurso, leído por uno de
ellos a quien eligen entre sí de antemano; en segundo lugar y leído este para
formalizar el siguiente compromiso académico:
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“Por cuanto habéis acreditado vuestro saber académico y habéis investigado en
vuestra Ciencia, haciendo uso de la autoridad que me está confiada y en nombre de
Su Majestad el Rey os reconozco como Máster con la calificación que se os ha
otorgado por haber considerado quien ha juzgado vuestro conocimiento que sois
dignos de este honor y en consecuencia: ¿Juráis por Dios o prometéis por vuestro
nombre y honor, cumplir con las obligaciones que impone el título de Máster que se
os va a conferir?” El nuevo Grado responderá: “Así lo Juro” o “Así lo Prometo” o “Así
Aseguro” o “Así Quiero”. Tras la respuesta afirmativa el presidente intervendrá
diciendo: “Si así lo hiciereis, que se os premie, y si no se os demande; y además
seréis responsable en el ejercicio de vuestro título con arreglo a las leyes”
d). Para cuando se obtenga el título de Doctor y en la apertura del curso académico o
cuando lo indique el Rectorado de la Universidad y en presencia de la comunidad
universitaria plena revestida de sus atributos y honores serán llamados los nuevos
doctores individualmente, precedidos del Doctor Maestro de la Ceremonia escoltado
de dos bedeles en uniforme de gala y tras cada uno de ellos el padrino que les
corresponda. Llegados a presencia del Excelentísimo y Magnífico Rector de la
Universidad, que tendrá a su derecha al Decano o Director del centro al que pueda
corresponder el Programa Oficial de Doctorado, estos se pondrán en pie y recibirán el
birrete, medalla y guantes de manos del doctorando.
A continuación el Excelentísimo y Magnífico Rector, que sólo podrá ser sustituido en
esta atribución por Su Majestad el Rey si está presente y preside el acto, pronunciará
las siguientes palabras: “Por cuanto habéis empleado años de juventud o madurez en
largos e incesantes estudios e investigaciones, habiendo creado y acreditado doctrina
y conocimiento. Por cuanto vos habéis dado prueba de constancia, laboriosidad y
aplicación en muchos cursos académicos; por cuanto en los títulos de Bachiller, Grado
y Máster, que anteriormente os han conferido, habéis acreditado vuestro saber y
doctrina; por cuanto después de los exámenes, ejercicios y tribunales prescritos por
los reglamentos y leyes vigentes, vuestros Profesores Doctores, jueces y censores de
vuestro conocimiento, os han considerado, constituidos en tribunal, digno y merecedor
de obtener el último y superior grado académico de Doctor por esta Universidad.
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Así hago en uso de la autoridad que me está conferida y en nombre de Su Majestad el
Rey - salvo que excepcionalmente sea el Monarca quien confiere por presidir el acto –
os declaro solemnemente investido como Doctor de esta Universidad e integrados en
su Claustro, en testimonio de lo cual vais a recibir y se os confiere la facultad de
enseñar, comprender, interpretar e investigar, recibiendo el abrazo de fraternidad de
los que se honran y congratulan de ser vuestros hermanos y compañeros”.
Y afirmado todo lo anterior seguirá con lo siguiente: “Acercaos, habéis sido investido
Doctor en testimonio de vuestros méritos académicos, por ello y en virtud de la
autoridad que ostentamos atestiguamos, en todas partes y para siempre vuestra
dignidad doctoral y como símbolo de tan alto honor, os imponemos este birrete tantas
veces laureado, honrado sin cesar por tan grandes, tan ilustres y tan excelsos
maestros en los Reinos de Las España, sobre vuestra cabeza, cual Corona de
vuestros estudios y méritos. Ostentadlo siempre y llevadlo a todas partes”.
Y sigue: “Vuestro padrino o vuestra madrina os va a entregar los atributos de este
nombramiento, cual símbolos de la Ciencia y la Sabiduría, que es preciso cultivéis y
difundáis sin descanso para que tengáis presente que por grande que sean vuestros
talentos, siempre deberéis manifestar reverencia, respeto y toda consideración a
vuestros maestros que han sido vuestros predecesores.
Recibid así del mismo la medalla que supone los privilegios que en pasados tiempos
se entregaban y por conferidos se tenían de firmar y sellar todos los dictámenes,
arbitrajes y consultas de vuestra ciencia, y recibid también la fortaleza del color blanco
en vuestros guantes, pues vuestras manos han de conservar, como signo de vuestra
altísima dignidad”.
Y añadirá: Prestad ahora con la más plena conciencia el juramento o promesa que os
voy a tomar: ¿Juráis por Dios o solemnemente prometéis por vuestro nombre,
conciencia y honor, cumplir con las obligaciones que impone el título de Doctor y
defender y respetar todos los derechos, privilegios y honores de esta Universidad en
cualquier parte del mundo que os hallaréis, así como favorecerla y ayudarla cuantas
veces se os demande?”
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El nuevo Doctor responderá: “Así lo Juro” o “Así lo Prometo” o “Así Aseguro” o “Así
Quiero”. Tras la respuesta afirmativa quien preside intervendrá diciendo: “Si así lo
hiciereis, que la memoria de todos los Claustrales os lo pague; y si no que os
demande; y además seréis responsable en el ejercicio de vuestro título con arreglo a
las leyes”
Y por último: “Ilustrísimo Señor, os admito e incorporo al Claustro de esta Universidad
con todos los derechos, exenciones y privilegios inherentes a los demás doctores; y en
señal de la paz, benevolencia y amistad con que siempre habéis de ejercer vuestro
ministerio, os abrazo con la mayor cordialidad en el nombre de todos los doctores de
este Claustro aquí presentes”.
Finalizado el abrazo, concluirá con: “Que el nuevo Doctor que ha sido proclamado
ocupe el asiento a él asignado”.
e). El ceremonial previsto podrá ser enriquecido por el protocolo particular de cada
Universidad que recoge un legado cultural de siglos de existencia y es establecido
conforme a su autonomía, pudiendo hacerse reclamaciones, juramentos, promesas y
manifestaciones en cualquiera de las Lenguas Oficiales del Reino o en Latín
Disposición Adicional Primera: A todos los efectos previstos en el presente Real
Decreto y conforme a las disposiciones legales vigentes, se consideran homologados
y correspondientes al título de Grado Oficial Universitario los de Diplomado
Universitario, Ingeniero Técnico, Aparejador y Arquitecto Técnico.
Disposición Adicional Segunda: A todos los efectos previstos en el presente Real
Decreto y conforme a las disposiciones legales vigentes, se consideran homologados
y correspondientes al título de Máster Oficial Universitario los de Licenciado, Ingeniero
y Arquitecto.
Disposición Adicional Tercera: A todos los efectos previstos en el presente Real
Decreto se consideran homologadas y correspondientes al Grado Ingeniero, la
Ingeniería Técnica en Topografía, la Diplomatura Universitaria de Maquinaria Naval y
la Diplomatura Universitaria de Radio electromecánica Naval, con las siguientes
denominaciones: Grado Ingeniero en Topografía, Grado Ingeniero en Maquinaria
Naval y Grado Ingeniero en Radio electromecánica Naval.
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Disposición Adicional Cuarta: A todos los efectos previstos en el presente Real
Decreto se consideran homologadas y correspondientes al Máster Ingeniero, la
Licenciatura Universitaria de Maquinaría Naval y la Licenciatura Universitaria de Radio
electromecánica Naval. Así mismo se consideran homologadas y correspondientes las
Licenciaturas Universitarias de Geografía, de Geología, de Geológicas, la Licenciatura
Universitaria en Geodesia y Cartografía y la Ingeniería en Geomática y Topografía, al
Máster Ingeniero. Sus denominaciones serán las siguientes: Máster Ingeniero de
Maquinaria Naval, Máster Ingeniero de Radio electromecánica Naval, Máster Ingeniero
Geógrafo, Máster Ingeniero Geólogo (para las licenciaturas de Geología y de
Geológicas), Máster Ingeniero en Geodesia y Cartografía, y Máster Ingeniero en
Geomática y Topografía
Disposición Adicional Quinta: Las Universidades adaptarán sus símbolos, tratamientos
y colores de las titulaciones a lo dispuesto en el presente Real Decreto y en todo caso,
los que no se adapten quedarán a extinguir. Las titulaciones que en la actualidad
utilicen un color diferente al que les corresponde, deberán adoptarlo una vez entre en
vigor la presente disposición.
Disposición Adicional Sexta: Podrán hacer uso de los uniformes civiles antiguos, de
diario, de etiqueta o de gran etiqueta, quienes los tengan y ya sean titulados técnicos,
mercantiles o en Derecho a la entrada en vigor de la presente norma, siempre
configurados conforme a la normativa que establece su regulación desde el 30 de abril
de 1835 hasta la entrada en vigor de la presente Norma. En el caso de los titulados
técnicos y sólo sobre uniformes civiles antiguos, podrán utilizar indistintamente la faja
morada o la del antiguo color de su ingeniería que lo fue legal o reglamentariamente
entre el 30 de abril de 1835 y el 30 de noviembre de 1967. Las especialidades y los
colores del fajín son los siguientes: Aeronáutico, azul celeste. Agrónomo y Agrícola,
verde claro. Aparejador, blanco y azul celeste. Arquitecto, blanco y azul celeste.
Caminos, Canales, Puertos y Obras Públicas, morado. Geógrafo, Geodésico,
Geológico, Topógrafo y Cartógrafo, morado. Industrial, en todas sus especialidades
técnicas, gris. Minas, rojo. Montes y Plantíos, Bosques y Forestal, verde oscuro. Naval,
azul marino. Telecomunicaciones, naranja. Los Abogados del Estado podrán seguir
llevando la bocamanga de color rojo conforme a lo dispuesto en la Real Orden de 14
de marzo de 1929, si bien utilizarán los distintivos del rango académico previstos en el
presente Real Decreto.
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Disposición Adicional Séptima: Conforme a lo dispuesto en la presente Norma podrán
hacer uso del uniforme civil descrito todos los titulados académicos universitarios en
los rangos de Grado, Máster y Doctor, que se expresarán en las bocamangas y en los
pasadores académicos. La identificación de la especialidad vendrá dada, además de
por los ya citados pasadores académicos, los emblemas de la gorra y cuello que serán
de sus titulaciones y el color del fajín, que será del que académicamente les
corresponda.
Disposición Derogatoria Primera: Quedan derogadas las siguientes disposiciones:
Real Decreto de 30 de abril de 1835 que define el uniforme del Cuerpo de
Ingenieros Civiles.
Real Orden de 7 de enero de 1842 que define el uniforme de los Ingenieros de
Caminos, Canales y Puertos.
El Real Decreto de 6 de marzo de 1850 que recoge y define los elementos del
traje académico.
El Real Decreto de 2 de octubre de 1850 que cambia el anterior e introduce
nuevos elementos en el traje académico.
Real Orden de 10 de diciembre de 1857 que define el uniforme de los
Ingenieros de Montes y Plantíos.
Real Orden por la que se promulga el Reglamento de las Universidades de 22
de mayo de 1859.
Real Orden de 2 de abril de 1878 que define el uniforme de los Ingenieros
Agrónomos.
Real Orden de 5 de octubre de 1886 que define el uniforme de los Ingenieros
de Minas.
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Real Orden de 9 de diciembre de 1887 regulatoria del distintivo que deben usar
en los actos académicos los Directores de todas las Escuelas, profesores de la
Escuela General preparatoria para Ingenieros y Arquitectos, profesores de las
Escuelas de Comercio, Normales de maestros y maestras, del Colegio de
Sordomudos, Central de Gimnástica y para las de Artes y Oficios.
Real Orden de 7 de marzo de 1891 que define el uniforme de los Ingenieros de
Montes y Plantíos.
Real Orden de 14 de marzo de 1894 disponiendo que los maestros y maestras
de primera enseñanza, normales e inspectores usen en las solemnidades y
actos oficiales una medalla.
Real Orden de 23 de julio de 1914 sobre distintivo de los Doctores de Claustros
Universitarios.
Real Decreto de 2 de octubre de 1914 sobre complementos de las insignias
académicas
Real Orden de 26 de junio de 1924 que define el uniforme de los Ingenieros
Industriales.
Real Orden de 14 de marzo de 1929 que define el uniforme de los Abogados
del Estado
Real Decreto de 10 de enero de 1931 sobre protocolo, ceremonial y estilo en la
Universidad.
Orden de 24 de abril de 1942 que define el uniforme de los Ingenieros de
Telecomunicaciones.
Decreto de 21 de septiembre de 1942 de fundación de los Colegios Mayores.
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Decreto de 12 de diciembre de 1942 regulado el uniforme de los Letrados,
Profesores y Peritos Mercantiles; y Cuerpos del Ministerio de Hacienda.
Ley de 29 de julio de 1943 sobre ordenación de la Universidad española
Decretos del uno al siete, todos de 7 de julio de 1944 por los que se regula la
heráldica, patronos y colores de las Facultades existentes en la fecha en la
Universidad.
Decreto de 2 de abril de 1948 que define el uniforme de los Arquitectos.
Orden Ministerial de 28 de febrero de 1950 que define el uniforme de los
Ingenieros Aeronáuticos.
Orden de Presidencia del Gobierno de 14 de diciembre de 1954 que define el
uniforme de los Ingenieros Geógrafos y Geodésicos.
Orden del Ministerio de la Vivienda de 17 de marzo de 1958 que define el
uniforme de los Aparejadores.
Instrucción del Ministerio de Educación de 7 de abril de 1961 que define el
uniforme de los Ingenieros Electromecánicos.
Orden Ministerial de 2 de diciembre de 1964 que define el uniforme de los
Ingenieros del Instituto Católico de Artes e Industrias.
Orden del Ministerio de Educación de 30 de noviembre de 1967 por la que se
regula el traje académico y los distintivos de los Ingenieros y los Arquitectos, el
color marrón como identificativo de todos ellos, la investidura de Doctores
Arquitectos y Doctores Ingenieros, y el ceremonial del Doctorado honoris
causa.
Decreto del Ministerio de Industria de 16 de noviembre de 1973 sobre el uso
del uniforme civil de Ingeniero Industrial
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Orden Circular del Ministerio del Ejército de 20 de octubre de 1976 sobre el uso
del distintivo de Doctor sobre el uniforme militar.
Disposición Derogatoria Segunda: Queda derogada cualquier otra norma del mismo
rango que contradiga parcial o totalmente lo dispuesto en el presente Real Decreto.
Disposición Final: El presente Real Decreto entrará en vigor el día siguiente al de su
publicación en el Boletín Oficial del Estado.
Dado en Madrid. El Presidente del Gobierno. Su Majestad el Rey
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Anexo. Equivalencias de Vestuario
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