La rebelión de Espartaco

21
La rebelión de Espartaco. M. Deneb Aguirre Montealegre En el verano del año 73 a.C., en la ciudad italiana de Capua un pequeño grupo de 70 gladiadores al mando un tracio llamado Espartaco, escaparon de el luddus 1 donde se les mantenía recluidos; desde ahí en adelante se gestaría una de las rebeliones serviles más peligrosas que la República romana jamás hubiera visto. Los romanos que ya habían superado situaciones similares confiaban en que una revuelta de esclavos más, no bastaba para poner en peligro su poderío. Confiados, los senadores romanos procederían de forma rutinaria, enviarían a un pretor a detener a los esclavos, de pronto la situación se torno vergonzosa cuando llegaron las noticias de la derrota de su comandado a los pies del Vesubio. Ante tal panorama enviarían a un segundo pretor a recobrar el honor ultrajado pero tras varios reveces este segundo comandante también sería derrotado. La situación se tornaba negra, era ahora el turno de enviar a los orgullosos cónsules romanos, en un principio éstos lograrían derrotar algunas huestes enemigas aisladas, pero para sorpresa de todos la derrota también les aguardaba. Ahora el ya ejército rebelde se dirigía al norte donde el gobernador de la provincia Cisalpina pretendería detenerles, el intento del 1 Escuela de Gladiadores.

Transcript of La rebelión de Espartaco

Page 1: La rebelión de Espartaco

La rebelión de Espartaco.

M. Deneb Aguirre Montealegre

En el verano del año 73 a.C., en la ciudad italiana de Capua un pequeño grupo de

70 gladiadores al mando un tracio llamado Espartaco, escaparon de el luddus1

donde se les mantenía recluidos; desde ahí en adelante se gestaría una de las

rebeliones serviles más peligrosas que la República romana jamás hubiera visto.

Los romanos que ya habían superado situaciones similares confiaban en que una

revuelta de esclavos más, no bastaba para poner en peligro su poderío.

Confiados, los senadores romanos procederían de forma rutinaria, enviarían a un

pretor a detener a los esclavos, de pronto la situación se torno vergonzosa cuando

llegaron las noticias de la derrota de su comandado a los pies del Vesubio. Ante

tal panorama enviarían a un segundo pretor a recobrar el honor ultrajado pero tras

varios reveces este segundo comandante también sería derrotado. La situación se

tornaba negra, era ahora el turno de enviar a los orgullosos cónsules romanos, en

un principio éstos lograrían derrotar algunas huestes enemigas aisladas, pero para

sorpresa de todos la derrota también les aguardaba. Ahora el ya ejército rebelde

se dirigía al norte donde el gobernador de la provincia Cisalpina pretendería

detenerles, el intento del funcionario se uniría a la lista de los fracasos romanos en

esta guerra. Así, las derrotas se acumularon y la situación de vergonzosa se tornó

peligrosa, los rebeldes, se supo, regresaban del norte y sus intenciones eran

desconocidas. El miedo se posó sobre hombros romanos.

Al final la situación se solucionaría, con algunas pequeñas complicaciones el

nuevo comisionado del Senado, Marco Licinio Craso, un adinerado ciudadano

romano, pondría fin a los sueños de los sediciosos esclavos. En la primavera del

año 71a.C. la rebelión iniciada por un pequeño grupo de gladiadores sería, tras

dos años de supervivencia, finalmente aplastada.

1 Escuela de Gladiadores.

Page 2: La rebelión de Espartaco

Aunque aquí arriba he dado un breve e insuficiente relato de los hechos desde

una perspectiva romana, en este trabajo no intentaré ahondar en las acciones

militares, ni en los errores del bando romano que hubieron de favorecer la

rebelión; lo que pretenderé hacer, es entender que sucedió entre los simpatizantes

esclavos, cual fue la chispa que los motivo a rebelarse, que intenciones llevaban y

como se desenvolvieron en la lucha. En pocas palabras ¿Qué desató la revuelta

en los corazones de estos esclavos?

Para comenzar habrá que responder una cuestión inicial, fundamental si se quiere

entender la causa de los hechos aquí tratados: los antecedentes de la rebelión.

Responder satisfactoriamente este asunto deberá buscar razones en muchos y

variados factores, aquí trataré de mostrar algunos, que he logrado resaltar:

En primer lugar tenemos que situar la revuelta en una época en que las

consecuencias socioeconómicas de la esclavitud se hacían sentir sobre la Roma

antigua: Tal parece que tras la derrota de Cartago, y el inicio de la hegemonía

romana sobre el comercio Mediterráneo, se abrió ante los poseedores romanos de

esclavos una posibilidad casi ilimitada de enriquecimiento a través de las nuevas

rutas de comercio disponibles. Esto desató entre los adinerados romanos una

codicia tal, que les llevo a buscar obtener el máximo beneficio de sus medios de

producción, sin importar que fuera a costa de una sobrexplotación cada vez más

inhumana de su mano de obra esclava.2 Convenientemente, las mismas guerras

de expansión romana habrían traído consigo el aumento de la disponibilidad de

este tipo de mano de obra, por medio de la esclavización de los pueblos

conquistados, de modo que el tráfico de esclavos y la participación de estos en el

proceso productivo de Roma aumentaran.3 Aunado a esto el enriquecimiento y

2 Schtajerman, E. M. Sharevskaia, B. “El régimen esclavista” en Petit, Vittinghof, Schtajerman et al. El Modo de Producción Esclavista. Prologo de AM. Prieto Arciniega, Madrid: Akal Editor, 1978 (Manifiesto) pág. 137. Véase también Ettore Ciccotti La esclavitud en Grecia, Roma y el mundo cristiano. Apogeo y ocaso de un sistema atroz, traducción de Máximo Gorritti, Barcelona: Reditar Libros, 2006. Págs. 172 – 173 y 193.3 Según Barry Strauss, profesor de historia y doctor en filosofía por la universidad de Yale, en los días de

Espartaco, en la península italiana habían entre uno y un y medio millón de esclavos, lo que representa cerca

del 20% de la población total de la época. Barry Strauss, The Spartacus War, New York: Simon & Schuster

Page 3: La rebelión de Espartaco

avaricia cada vez mayor de las altas esferas de la sociedad romana, llevo a

despojar de tierras a numerosos campesinos pobres con la pretensión de

aumentar las tierras laborables y empleo de la gran masa de esclavos que

arribaban día a día con gran afluencia a tierras romanas.4

A esta sobrexplotación, se sumaba el maltrato provocado por una

desconsideración cada vez mayor hacia los esclavos que aparecían como

extranjeros ante los ojos de los ciudadanos romanos.5 Esto pese a que los

esclavos eran una parte esencial de prácticamente todos los procesos productivos

de la antigua Roma.6

La situación del esclavo en este periodo, que no he tenido el espacio de explicar

exhaustivamente, se tornaba cada día más precaria. Esto explica en parte por que

gran cantidad de esclavos se unirían al la insurrección de Espartaco, pues los

numerosos esclavos descontentos parecían preferir una corta, peligrosa pero libre

existencia por sobre una aún más dura condición de servidumbre.7

Las reacciones de los esclavos ante estas nuevas y terribles perspectivas de vida,

llevaron al desarrollo de diferentes formas de resistencia, no debe sorprendernos

que este periodo en que el esclavismo entraba en un periodo de auge, también las

acciones de subversivas subieran a sus máximos niveles. Pues si bien es a partir

del siglo II a. C. que los romanos tomaron la hegemonía del mundo antiguo,

2009 pág. 19

4 Schtajerman, E. M. Sharevskaia, B. Op. cit. pág. 1535 Según José Guillén, hasta antes de la expansión romana, el trato hacia los esclavos rosaba la bondad e

incluso el maltratar a un esclavo era mal visto, pero a la llegada de las hordas de esclavos traídos de las

guerras de conquista, a estos trabajadores se les empezó a considerar como animales y su condición de vida

comenzó a decaer. José Guillén, VRBS ROMA Vida y costumbres de los romanos vol. 4 Constitución y

desarrollo de la sociedad, Salamanca: Ediciones Sígueme, 2000 págs. 279-280

6 Schtajerman, E. M. Sharevskaia, B. Op. cit. pág. 1447 Keith R. Bradley, Slavery and Rebellion in the Roman World 140B.C – 70 B.C, Bloomington and

Indianapolis: Indiana University Press,1989. Pág.99

Page 4: La rebelión de Espartaco

también es a partir de este mismo siglo que se agudiza la lucha servil contra

Roma. En este periodo que termina fatalmente con la rebelión de Espartaco se

puede hallar un amplio mosaico de rebeliones y acciones de resistencia de las

más variadas características.8

Entre las formas más comunes hallamos en primer lugar las más simples y

pasivas, es decir, acciones tales como la desobediencia, el trabajo de mala

calidad, el fingimiento de una enfermedad, el estropeo de los instrumentos de

trabajo, el robar, el descuidar la labranza y el ganado e incluso en ocasiones, si

era posible, la huida. Estas pequeñas acciones representaban aunque no lo

parezca pérdidas importantes para el amo.9Entre estas acciones pasivas la más

extrema fue el suicidio, ejercido principalmente por los esclavos desesperados o

gladiadores que preferían quitarse la vida a perecer en el circo romano.10

Otra forma muy común un poco más radical de resistencia era el bandidaje o la

piratería,11 grupos de esclavos que habían logrado escapar comúnmente se

dedicaban a asaltar e incluso asesinar en los caminos de las villas romanas,

convirtiéndose en un molesto problema de magnitudes considerables12

Otra acción aun más radical consistía en el asesinato del amo, una práctica al

parecer bastante común, que era llevada acabo especialmente contra amos

excesivamente crueles.13

Pero las acciones más radicales consistían en la abierta rebelión; se sabe que

hubo varias conspiraciones e intentos de insurrección que fueron frustradas, y

8 A. M. Malevanyi, E.A. Chiglintsev y A.S. Showman La lucha de clases en el mundo antiguo traducción de Manuel Aragü Estragués, España Universidad de Zaragoza 1989 p.107-1159 Ettore Ciccotti Op. cit. págs. 196-19710 Schtajerman, E. M. Sharevskaia, B. Op. cit. pág. 14811 Charles Parain “Los caracteres específicos de la lucha de clases en la antigüedad clásica” en Petit, Vittinghof, Schtajerman et al. El Modo de Producción Esclavista. Prologo de AM. Prieto Arciniega, Madrid: Akal Editor, 1978 (Manifiesto) pág. 27312 Keith R. Bradley op. cit. pág. 9113 Schtajerman, E. M. Sharevskaia, B. Op. cit pág. 164. Véase también José Guillen op. cit. págs. 282-283

Page 5: La rebelión de Espartaco

pese a ello hubo muchas otras se llevaron a cabo y fueron duramente

reprimidas.14

Probablemente las acciones más relevantes y que sirven de antecedentes para los

hechos que aquí trato, son las no muy lejanas rebeliones en Sicilia, y Asia menor.

Además treinta años antes Capua (lugar donde se origina la rebelión de

Espartaco) ya había sido testigo de otras dos rebeliones, en el año 104a.c. una de

200 esclavos de la que no se tiene mucha información y otra, llevada acabo el

mismo año, de cerca de 3500 rebeldes al mando de un ciudadano romano llamado

Minucius Vettius.15

Siguiendo adelante, hallamos los factores de la política exterior romana, y es que

en los días en que se llevaba acabo la rebelión de Espartaco, los piratas de las

costas de Creta mantenían ocupada a la flota romana, y por otra parte la tercera

guerra Mitridática (73a.C. – 65a.C.), desarrollada en las áreas de Turquía, Tracia y

Grecia, y la rebelión de Quinto Sertorio (83a.C. – 72a.C.) en Hispania, mantenían

al grueso del ejército romano fuera de sus fronteras. Las acciones anti-romanas se

sentía en el aire y muy probablemente Espartaco lo sabía, el tiempo era maduro

para una insurrección.16

Ahora que hemos tratado los antecedentes de la rebelión habrá que ver como

influyeron estos factores arriba mencionados en los actores principales de este

trabajo: los rebeldes.

Los rebeldes al ser principalmente esclavos tenían una gran multiplicidad étnica,

debida por supuesto a las guerras de conquista romana que habían sometido una

gran cantidad de pueblos, por aquellos días, en Capua, como en casi toda la

península italiana, se había concentrado gran cantidad de mano de obra esclava.

Tracios, galos y germanos formaban probablemente el cuerpo fundamental de los

14 A. M. Malevanyi, E.A. Chiglintsev y A.S. Showman op. cit. pág. 107-11015 Barry Strauss op. cit. pág. 2616 Ibíd. pág. 3 y 26

Page 6: La rebelión de Espartaco

esclavos rebeldes de Espartaco. Tal vez algunos de ellos provenían además de

anatolia y el mar negro, pero incluso pudieron estar involucrados italianos pobres.

Y debió también haber algunos esclavos nacidos en la propia Italia. 17

Fuera de la clasificación étnica, esclavos que se unirían a Espartaco provenían

principalmente de zonas agrícolas ---donde la mayor cantidad de esclavos

importados se había concentrado--- y eran parte de la “familia rural”: pastores,

agricultores, trabajadores de talleres caseros y villanos. El hecho de que este

grupo respondiera bien al llamado a la rebelión se explica sobre todo por que

precisamente este sector de los esclavos era el que más resentía el desarrollo de

la forma de producción esclavista y la avaricia romana. Además el trabajo había

forjado en ellos una natural disposición a la organización y al liderazgo, aptitudes

necesarias para mantener un cuerpo rebelde estable.18

Otro sector que probablemente se habría unido a la lucha, aunque en cantidades

casi insignificantes, pudieron haber sido hombres libres que habían alcanzado los

límites de la miseria, en parte debido también al esclavismo que había desplazado

a gran cantidad de trabajadores independientes de sus áreas de trabajo.19

La única fracción esclava que brilla por su ausencia es el de la “familia urbana” un

grupo más elitizado que los esclavos rurales y que gozaba de mejores condiciones

de vida.20 No hay que elucubrar demasiado para entender por que este grupo no

se uniría a la rebelión. Unirse a Espartaco implicaba para este tipo de esclavos

más pérdidas que ganancias.

Ahora bien, la cuestión de la diversidad étnica en el movimiento de Espartaco ha

sido un tema bastante debatido, ya que algunos autores como Mommsen definen

a este factor como el principal causante de las divisiones en la insurgencia

17 Barry Strauss op. cit. págs.. 20-2218 Strauss op cit. págs. 43-44. Ciccotti op. cit. pág 177, Schtajerman op. cit. págs. 140-141 Bradley op. cit. pág. 94.19 Schtajerman op. cit. págs. 149 y 151. Strauss op. cit. pág. 45 20 Barry Strauss op. cit. pág. 7

Page 7: La rebelión de Espartaco

esclava, pero algunos otros como Kovaliov defiende que aunque si pudo haber

tenido algún peso no debió ser determinante.

En primer plano debemos considerar el hecho de que los esclavos al compartir un

mismo y triste destino podían fácilmente hacer a un lado esta clase de diferencias,

en favor de poner fin a un mal común,21 sino ¿cómo habría sido posible el estallido

de las revueltas?

Recordemos que para los romanos ”El esclavo es un extranjero, un incensus22, no

participa por ende en la ciudadanía. Por tanto es una cosa. […] En cuanto a lo que

se refiere el derecho civil los siervos son tenidos por nada”23 ¿Cómo sería

soportable una existencia así de no ser por la convivencia con sus iguales? Es

fácil imaginar que los esclavos que compartían una misma suerte desarrollarían

fuertes lazos de compañerismo.

En parte la disciplina que el ejército rebelde llego a desarrollar,24 no habría sido

posible a lo largo de dos años si éstos no hubieran puesto de lado sus diferencias.

Además al menos como Barry Strauss maneja la información las divergencias

surgidas en el ejército rebelde debieron haber sido de carácter primordialmente

táctico25 y probablemente un poco temperamental, donde el factor étnico jugaría

un papel no tan esencial. Como sea, las diferencias en el movimiento serán

abordadas más adelante.

Para comprender más a fondo la rebelión servil del 73a.C., debemos considerar a

su actor principal, Espartaco:

Espartaco sería una figura que lograría rodearse de un halo divino; Plutarco, narra

la historia de un suceso extraordinario en el que una serpiente se enredo en la

21 Charles Parain op. cit. pág. 27222 No tomado en cuenta como ciudadano.23 José Guillen op. cit. pág. 30624 Keith R. Bradley Pág. 9425 Barry Strauss op. cit. págs. 67-68 y 155-156

Page 8: La rebelión de Espartaco

cabeza del tracio mientras dormía, lo cual sería interpretado por la esposa o

compañera de Espartaco, una sacerdotisa de Dionisos de origen tracio, como

señal de que un gran poder divino envolvía a este personaje.26 Aunque el hecho

en si resulta inverosímil el hecho de ser notado por Plutarco, nos dice que

Espartaco despertaba frente a sus seguidores ciertos tintes de religiosidad.

La sacerdotisa tracia del dios Dionisos responsable de esta leyenda, según Barry

Strauss debía estar influida por una teología que apoyaba la rebelión Mitridática,

transmitía a Espartaco una misión divina encomendada por el mismísimo

Dionisio.27 No se debe olvidar que la serpiente era un símbolo del dios Dionisos.

Resulta interesante saber que Dionisos era considerado el dios de los

desposeídos, y su sola adoración aparecía como un fuerte germen de sedición, el

dios en cuestión era muy apreciado en Tracia y en el sur de Italia.28 El movimiento

de Espartaco se desarrollaría en gran parte en esta última región y el elegido de

Dionisos seguro atraería cuantiosas simpatías. “By her prophecy, the Spartacus’s

lady gave her man a holy duty. As a servant of Dionysus...” 29

Los tracios que formaran parte del movimiento seguro hallarían en este halo

religioso, aún mayores motivaciones para luchar; los celtas por su parte no eran

movidos por esta clase de divinidad y no les resultaba muy atractiva y ante la falta

de tal motivación su fidelidad hacia Espartaco era mucho más endeble y se

permitirían la elección de sus propios líderes Crixus y Oenomaus.30 Sin embargo,

pese a esta actitud habría algunos otros atributos en el líder tracio que los celtas

sabrían apreciar, lográndose así mantener unidos a los esclavos.

Todas las fuentes antiguas coinciden en definir a Espartaco como un hombre de

grandes cualidades morales que imponía respeto entre sus seguidores. “His vivid

gestures moved them. His austerity hardened them; his generosity helped them.

26 Plutarco, Vidas Paralelas, Libro IV Marco Craso apartado VIII 27 Barry Strauss pág. 6 y 3228 Ibíd. Págs. 34-36 29 Ibíd. Pág. 3930 Ibíd. Págs. 37-38

Page 9: La rebelión de Espartaco

His care for innocent civilians might have left them cold, but it underscored the

quality that sums up Spartacus: righteous.” “Spartacus’s authority was neither

formal nor forced: it was moral” 31 En parte también el hecho de que nunca se

autoproclamara con el titulo de rey habla muy bien de él.32 Pero fuera de estas

admirables cualidades, el rol más importante de Espartaco era que bajo su

liderazgo fue posible mantener cohesionados a hombres propensos a la

desunión.33.

No obstante lo observado aquí, Espartaco, por si solo no explica el éxito de la

rebelión, hará falta observar el trasfondo ideológico que respaldaba su movimiento

y atraía hombres a su causa.

La leyenda del favorecido de Dionisos, habría sido una buena maniobra por parte

de la sacerdotisa tracia, pues así “Spartacus would be a liberator. He would be no

mere theorist of freedom; he would have “great and fearful power.”34 Muchos

hombres antiguos eran fácilmente seducidos por leyendas parecidas a la de

Espartaco. Los romanos conocedores del problema que significaban los magos,

profetas, brujos, predicadores religiosos y todo tipo de predicadores místicos,

procuraban mantener a estas gentes lo más alejado posible de sus esclavos,

pues temían que estos potenciales líderes espirituales pudiesen enseñar a los

esclavos a perjudicar a sus amos o introducirles pensamientos dañinos.35 Como se

vería, los romanos estaban muy lejos de estar equivocados. Uno fácilmente puede

imaginarse a un esclavo entusiasmado al escuchar la historia de un caudillo con

poderes divinos y que se enfrentaba al dominio de los amos que tanto odiaba.

31 Ibíd. Pág. 9432 Ibíd. Pág. 8733 Ibíd. Págs. 7-834 Ibíd. Pág. 3735 Schtajerman op. cit. Pág. 41.

Page 10: La rebelión de Espartaco

La igualdad parece haber sido un factor prevaleciente entre los rebeldes, el hecho

de que los rebeldes repartieran el botín en partes iguales, ya sea por prudencia o

por sentido de justicia, era un imán de seguidores.36

Por otro lado, una rebelión siempre traía consigo la perpetuación de excesos,

llevados a cabo con el ímpetu de la coyuntura, se entregaban a las pasiones

durante tanto tiempo reprimidas, es decir, la rebelión representaba una especia de

catarsis personal, cada insurrecto no perdía la oportunidad de dejarse llevar por

sus deseos reprimidos durante su condición de esclavo. Prueba de esto sería el

saqueo de la ciudad Forum Anni, donde Espartaco perdería el control de sus

huestes y se cometerían excesos que el mismo tracio reprobaba.37 De esta

situación el bandidaje aparecía también como un fuerte impulsor de la rebelión;

este factor, como se ve, resultaría problemático para el futuro de la insurgencia,

Keith R. Bradley apunta que fue el deseo de bandidaje el que en parte llevo a los

rebeldes ha volver hacía el sur de Italia cuando tenían la salida a los Alpes justo

en sus narices.38

Entre este instinto de bandidaje también se hallaba seguramente un profundo

deseo de venganza. Sentimiento que podemos hallar incluso en el virtuoso líder

de los rebeldes, sino es así ¿por qué al escapar de Capua Espartaco elegiría el

camino de la rebelión y no el de esclavo fugitivo?39

Otro problema fundamental que se plantea al preguntarnos sobre la ideología de

Espartaco es sí este movimiento pretendía destruir el sistema esclavista, tanto

Keith R. Bradley como Barry Strauss concuerdan en una respuesta negativa.40 Y

seguramente quienes no estén de acuerdo tiene pocas posibilidades de demostrar

lo contrario. Probablemente la prueba más grande de que Espartaco no pretendía

acabar con el esclavismo sería que pese a su encomiable moral, en

36 Ibíd. Pág. 4637 Ibíd. Pág. 75-7638 Keith R. Bradley op. cit. Pág. 9639 Barry Strauss op. cit. Pág. 3940 Bradley op. cit. Pág. 104 Strauss op. cit. pág.185-186

Page 11: La rebelión de Espartaco

conmemoración de la muerte de su compañero Crixus, realizo unos juegos de

gladiadores donde hizo matarse a 300 o 400 romanos.41

Sin embargo como Keith Bradley concluye, el deseo de libertad era el único

objetivo común y que aparecía por encima de cualquier trasfondo ideológico o de

cualquier otro tipo.42

Todo lo dicho anteriormente, explica en gran parte por que la insurrección liderada

por Espartaco tuvo tanto éxito; y si a esto le sumamos las varias victorias militares

es entendible por que los esclavos romanos acudían a las filas subversivas.43

Ya analizamos varios de los factores por que la rebelión estalló y obtuvo su fuerza

y obtuvo numerosos éxitos pero aún falta por revisar una última y contrastante

cuestión, por que fue derrotada la rebelión.

Durante la guerra de Espartaco, hubo un enorme punto de inflexión que condenó

cualquier posibilidad de supervivencia de la insurrección, éste fue la decisión de

los rebeldes de regresar al interior de la península itálica cuando se hallaban tan

cerca de los Alpes y la posibilidad de escapar de territorio romano. Y es que

escapar de Italia era la mejor opción que tenían los esclavos si pretendían

sobrevivir. Espartaco que demostró ser un buen estratega y líder debió haberse

percatado de esta difícil verdad y habrá intentado convencer a sus hombres pero

falló. “After proving to his army that the gods had turned against Rome and its

legions, he could not persuade them that disaster lay around the corner unless

they fleed Italy.”44 Espartaco como muchos otros revolucionarios, vencieron por las

mismas causas por las que perdieron, el vigor que hace a los insurgentes

exitosos, también los puede condenar a la derrota.

41 Barry Strauss. op. cit. pág. 10442 Bradley op. cit. pág. 10143 Las fuentes varían en cuanto a la cantidad de esclavos que se unieron Espartaco, algunos aseguran que llegaron a la cantidad de 120,000 mientras algunos más modestos los sitúan en 40,000, cifra que Barry Strauss considera la más segura y pese a ser la más pequeña es lo suficientemente grande para los estándares de la época. Barry Strauss op. cit. pág. 8044Barry Strauss op. cit. pág 186

Page 12: La rebelión de Espartaco

“Whether Spartacus’s leadership failed is a difficult question. He did not fail on the

battlefield, where he excelled as a commander, as long as he maintained limited

goal. Nor did he fail in training or inspiring the troops. Spartacus did not attempt to

abolish slavery altogether nor did he make a serious effort to conquer the city of

Rome, but he offered grand ideals nonetheless. He gave his followers realistic but

noble goals: freedom, equality, honor, prowess, vengeance, loot, and even the

favor of the good.” 45 Pero las ideas no fueron suficientes, la irracionalidad de su

movimiento se haría presente en momentos decisivos y costaría a los rebeldes la

posibilidad de salir bien librados de esta rebelión.

El movimiento de Espartaco si se mantenía en Italia, no tenía posibilidades de

mantener la subsistencia por mucho tiempo y las únicas tácticas posibles para

estos era el mantenimiento de tácticas de supervivencia. Por las mismas

características de la rebelión esta no podía obtener las condiciones para mantener

una lucha ideológica, lo único a lo que los esclavos podían aspirar era a obtener

su libertad, más no a destruir el sistema esclavista.46

Es muy mencionado que la división entre los grupos étnicos esclavos fue el gran

causante de las derrotas del movimiento47, pero las dos escisiones que sufrió la

sublevación, guiada una por Crixus y otra por Gannicus. Se dieron en situaciones

donde no podrían haber cambiado mucho el curso de la guerra. La primera se da

antes de una de las mejores victorias de los insurgentes, y la segunda sucede

cuando las esperanzas de supervivencia eran ya muy limitadas. Por ello abogo por

la idea de que la multiplicidad étnica no fue un factor determinante para la derrota

de la insurrección de Espartaco.

Lo que he tratado de mostrar en este trabajo es que el movimiento de Espartaco

no debe parecernos extraño, era una respuesta común del agravamiento en las

45 Ibíd. Pág. 185-18646 Ibíd. Pág. 10147 Ibíd. Pág. 186 y Charles Parain op. cit. pág. 272

Page 13: La rebelión de Espartaco

condiciones de vida de los esclavos y aunque la lucha armada era una salida difícil

ofrecía mejores esperanzas para aquellos desposeídos que sufrían todo el peso

del sistema esclavista.

Las condiciones para la rebelión estaba dadas, solo faltaba el líder adecuado,

Espartaco fue ese líder excepcional que una rebelión necesitaba para subsistir.48

Sin embargo la situación histórica no ofrecía muchas salidas a los Movimientos

como el de Espartaco. Un triunfo aun si fuera posible no prometía mejoras a los

insurrectos, no se había desarrollado algún objetivo específico fuera del anhelo de

libertad.

Bibliografía:

Bradley, Keith R. Slavery and Rebellion in the Roman World 140B.C – 70 B.C,

Bloomington and Indianapolis: Indiana University Press,1989. 186pp.48 Keith Bradley op. cit. pág. 113

Page 14: La rebelión de Espartaco

Ciccotti, Ettore La esclavitud en Grecia, Roma y el mundo cristiano. Apogeo y

ocaso de un sistema atroz, traducción de Máximo Gorritti, Barcelona: Reditar

Libros, 2006. 320pp.

Garrido, Fernando Historia de las Clases Trabajadoras Vol. I El Esclavo 2ed

Prólogo de Emilio Castelar Madrid: Biblioteca Promoción de Pueblo, 1972.

Guillén, José VRBS ROMA Vida y costumbres de los romanos vol. 4 Constitución

y desarrollo de la sociedad, Salamanca: Ediciones Sígueme, 2000 447pp.

Kovaliov, S. I. Historia de Roma 3ed, traducción de Marcelo Ravoni, Madrid: Akal

Editor,1979. 874pp.

Malevanyi A. M. , E. A. Chiglintsev y A. S. Showman La lucha de clases en el

mundo antiguo traducción de Manuel Aragües Estragués, España: Universidad de

Zaragoza,1989. 153pp.

Petit, Vittinghof, Schtajerman et al. El Modo de Producción Esclavista. Prologo de

AM. Prieto Arciniega, Madrid: Akal Editor, 1978 (Manifiesto)

Strauss, Barry The Spartacus War, New York: Simon & Schuster 2009 264pp.

Web:

Plutarco Vidas paralelas Craso:

http://www.imperivm.org/cont/textos/txt/plutarco_vidas-paralelas-tiv-craso.html