La metamorfosis

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La metAMORfosis. 1

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Novela romántica

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La metAMORfosis.

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Mara Velasco

La metAMORfosis.A veces el verdadero amor, no tiene un final feliz.

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Índice

Capítulo 1.- La Noticia……………………………… 6

Capítulo 2.- La Despedida…………………………. 12

Capítulo 3.- El primer día…………………………... 18

Capítulo 4.- El quinto es de mala suerte…………. 27

Capítulo 5.- La disputa……………………………... 34

Capítulo 6.- ¿Tengo novio?.................................... 43

Capítulo 7.- Celos…………………………………… 54

Capítulo 8.- ¿Qué somos?...................................... 67

Capítulo 9.- Ya quiero olvidarlo…………………….. 78

Capítulo 10.- Negra como la noche………………… 85

Capítulo 11.- La Ventana……………………………. 102

Capítulo 12.- No estoy de acuerdo…………………. 109

Capítulo 13.- Odio las despedidas…………………. 119

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Capítulo 14.- La Llamada…………………………… 126

Capítulo 15.- malas noticias………………………… 133

Capítulo 16.- Capitulo final: Vive Por Mí…………... 137

A mi familia, que siempre me apoyo mientras escribía este libro, especialmente a mi madre;

A mis amigos, que estuvieron pendientes de la culminación del libro;

A la memoria de mi princesa Brisa.

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Prologo.

Yo, yo soy Violeta y tengo 16 años, tengo dos grandes problemas que solo tienen una cura: el tiempo.Mi primer problema es que… soy adolescente, es un problema que trae muchos problemas, cosas que sencillamente a veces no te puedes responder o cosas desagradables que brotan de partes que prefiero no mencionar (la cara por ejemplo), pero ese no es mi problema más grande, el más grande ni te lo imaginas, mi problemas más grande es que… estoy enamorada.Ni pensar que hace solo algunos años los niños me parecían desagradablemente asquerosos. Recuerdo que en mi clase los niños se hurgaban la nariz y luego se metían el dedo a la boca, asqueroso ¿no?Yo nací en Pontiac en un hermoso y contaminado lugar, pero hace poco mi padre tuvo que dejar su trabajo y se les ocurrió que podríamos mudarnos a un hermoso y apartado rincón de Tennesse y pues… aquí me ves ahora.Cambie el volante de un flamante Ferrari por el volante de una vieja Chevrolet, me dedique a hacer toda clase de cosas que nunca imagine que podría hacer, como hablar con un caballo o caminar sin rumbo por el valle.

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Pero lo más importante, conocí gente nueva y maravillosa y claro, gente no muy agradable, pero también gente cautivadora, pero de eso, ya les hablare después.

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Capítulo 1. La Noticia

6:03 AMLas seis de la mañana y yo sé que pronto me tendré que levantar de la cama para asistir al instituto, otro día de invisibilidad, otro día en el que nadie va a saber quién soy ni que hago ahí, pero en fin, así son las cosas en Pontiac.De pronto un sordo y molesto sonido interrumpe mis pensamientos, es el teléfono, me asustó, pero lucho con mis parpados y gano la batalla, logro abrir los ojos y me levanto a para espiar a hurtadillas la conversación del teléfono, abro la puerta de mi habitación a oscuras, escucho en la habitación de mis padres que alguien coge el teléfono y se escucha la voz de papá.-¿hola?-dice mi padre medio atontado por lo temprano de la hora y continuo de un silencio -jefe, son las seis de la mañana, ¿podríamos hablarlo en la oficina por favor?- se escucha de nuevo el inquietante silencio -si, si entiendo, bien, voy para allá, nos vemos chao -y se escuchan los pasos de papá que se dirigen a la puerta.-Violeta, ¿Qué haces aquí?- me dice en cuanto me ve queriendo escapar sin lograrlo.-papá, Umm... iba… a… al ¡baño! Es que hoy me caí de la cama haha ya sabes… pero, puedes pasar tu si quieres.-le digo, sin saber que decir.-si… supongo, gracias hija -me dice papá algo extrañado.-de nada papá, ya sabes, para eso están las… hijas haha- le dio aun con un poco de nerviosismo y me giro sobre mis talones, solo con el seseo de escapar de ese horrible encuentro matutino.

8:10 AMJugueteando y brincando, bajo las escaleras hacia la cocina, para encontrarme con mi mamá que me Tiene listo el desayuno-hola mamá -la saludo

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-hola hija -me mira con sus ojos preguntones que tanto odio -me dijo tu papá que tuviste un encuentro con el muy en la mañana, ¿estás bien hija? ¿Tienes algo que contarme?Diablos, odio cuando de inmediato adivina que se algo que no debería. Entrecierra los ojos y soba su barbilla, su lenguaje corporal es tan predecible.-no mamá, ¿Por qué lo haría?- le respondo mientras le doy un mordisco a mi tostada recién hecha- ¿te dijo algo papá?-no no, yo solo pregunto -me responde mientras se reincorpora, y sigue haciendo los panqueques que comienzan a quemarse de la orilla, los voltea y me sirve un vaso con zumo de naranja, pongo los ojos en blanco, pero de igual forma lo bebo todo, y me termino mi tostada.

9:30 AMLlego al instituto y veo los pasillos, siempre oliendo a pino, y los jóvenes revisando sus casilleros, sacando libros, y el constante murmullo de no se cuantos cientos de voces, siempre ocupados, siempre preocupados, siempre en sus propios mundos, intentando no salir de ellos hacia la realidad, es un poco molesto, pero a la vez es bueno saber que no soy la única, aunque a veces me sienta así. Veo que a lo lejos viene Tara, la única del instituto que me ve, la única del instituto que sabe que existo, la única amiga con la que puedo contar.-Ey Violeta ¿Qué hay de nuevo?- me dice mientras me saluda con su forma habitual de un beso en la mejilla-nada nuevo, hoy escuche a mi padre hablando con su jefe muy en la mañana, ¿tu padre sabe algo Tara? – le digo yo, con mis ojos saltones llenos de duda, ya que su padre y el mío trabajan juntos en la misma empresa.-Umm no, bueno, no que yo sepa, ¿crees que sea algo malo? -me pregunta ahora aparentemente preocupada

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-no lo sé pero, presiento que va a haber malas noticias en mi casa -le respondo yo con un tono de duda en mi voz que no puedo ocultar.2:30 PMPor fin se acaba la escuela y ahora a descansar todo el fin de semana. Mi parte favorita de la semana, pues no tengo que lidiar con profesores regañones, ni alumnos con el ego bastante alto.Abro la puerta de mi casa y encuentro a mis padres sentados en el sillón de la sala, eso es malo-o-k-a-y, díganme ya ¿Qué pasa?- les digo mientras dejo mi bolso en el suelo y me siento en el sillón frente a ellos, cruzo las piernas y me pongo a la defensiva, con un escudo imaginario para lo que sea que me tengan que decir.-Violeta, lo que te vamos a decir puede ser difícil-comienza papá con su voz tranquilizadora, pero con cierto tono de precaución, como si temiera dar la orden de fuego -pero te rogamos que lo pienses bien y lo tomes con calma ¿si hija?-¡basta ya, están asustándome! ¡Solo díganme que pasa!-digo casi desesperada, pero al mismo tiempo tratando de sonar calmada.-hija por favor tranquilízate para que te podamos decir ¿vale?-me calla papá y su rostro se torna oscuro, yo pongo los ojos en blanco y me reprende con la mirada.-OK, OK, ya, ahora díganme -mis padres se miran el uno al otro por cinco segundos, que me parecen una eternidad, a la espera de lo peor, y al final mi padre es el que cede y comienza a hablar.-mira hija, hoy hable con mi jefe y…pues… hubo un recorte de personal, perdí mi trabajo y pues…, no se cómo decirte esto - mi mama le da un toquecito en la pierna haciéndole la señal de que ella va a hablar.-tu padre y yo hemos estado hablando y decidimos que – hace una pausa aparentemente para respirar, mira hacia sus pies, traga saliva, y prosigue lentamente, arrastrando las palabras.- decidimos que lo mejor es que nos mudemos a Tennesse a vivir un tiempo con tus abuelos, ¿Qué dices?

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¡¡¡Ho Dios!!! ¡¡¡Ho Por Dios no!!! ¡Eso es terrible! ¡Es lo peor que pudo haber pasado! ¿Irnos a Tennesse? ¿Cuándo veré a mi novio y a Tara? ¡NO!-¡¿Qué que me parece?! ¡¿Qué que digo?! Padre ¿acaso es una broma? Uno… no puede decirle esto a su hija adolescente de esta forma, ¡¡¡papá no!!! ¡¡¡No puede ser!!!-¡hija!-me grita mamá- ¡no le hables de esa forma a tu padre! ¡¿No te das cuenta que no es su culpa?!-¡¡¡pero mamá!!!-me quejo, con el corazón en la boca, y sintiendo que es el fin del mundo.-¡pero nada Violeta! Te vas a adaptar al cambio y es todo lo que te voy a decir-me advierte mamá, poniéndose de pronto de pie, y cerrando los puños.-¡pero es que no es justo! ¡¿Acaso no se dan cuenta?! ¡No quiero vivir en Tennesse! ¡Quiero vivir en Pontiac, Pontiac es mi hogar! ¡Aquí tengo a mis amigas, mi novio, mi vida! – Le reclamo- ¿Dónde voy a estudiar?-naturalmente en el instituto de Tennesse donde yo estudie – dice papa muy orgulloso- ¿dónde más?-¿y mis clases extracurriculares?-lo reto- ¿qué hay de piano y guitarra?-los tomaras en Tennessee-me responde de inmediato papá.-¡arg!, ¡no es justo! -gruño mientras me doy media vuelta hacia las escaleras y me voy de la habitación con la dignidad que aún me queda, a lo lejos escucho a mi madre gritarme.-¡Violeta, vuelve aquí!¡-¡¡NO!!-grito yo enojada-¡déjenme sola!-¡Violeta, si escucho esa puerta azotar, te pondré a clavarla a ti misma!- me advierte mamá-¡ARG!- gruño yoCierro la puerta de mi habitación con mucho cuidado para que mamá no se enoje, me tiro a la cama y comienzo a sollozar. No puede ser, son terribles noticias, no me quiero ir de Pontiac. Sé que puedo sonar muy inmadura, digamos que no es la gran cosa, hay muchas cosas peores que una simple mudanza, es solo que, Tennessee está al otro lado

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del país. Reacciono, me incorporo y tomo el teléfono, marco el número de la casa de Tara que se me de memoria, mientras pienso que ya no la veré más, que se acabaron las pijama das, las tardeadas, los consejos, las risa, la diversión, se acabó Tara y Violeta, estoy segura que encontrara otra mejor amiga, mucho más divertida que yo, me cambiara, y dejara de hablarme, después dirá que no me conoce, y olvidara todo.Al otro lado del teléfono, alguien contesta y reconozco la voz de la mamá de Tara-¿hola? -contesta la mamá de Tara-hola señora, ¿esta Tara? -pregunto aun sollozando-si nena- responde su mamá con tono preocupado-¿estás bien?-si señora, no se preocupe por mí, estoy bien- le digo tratando de ocultar mi vos temblorosa, y ahogando los sollozos.-OK, te la comunico, saludos a tu mamá- me responde resignada, pero sin ocultan el tono de preocupación. -sí, gracias señora -se escucha el inquietante silencio seguido del sonido que significa que alguien ha cogido el teléfono.- ¿hola? -reconozco la dulce voz de Tara.-¡¡Tara!! -rompo a llorar- ¡terribles noticias, terribles!-¿qué pasa Violeta?- me responde asustada- ¿Qué tienes? ¿Quieres que vaya a tu casa?-Umm – pienso su propuesta entre sollozos- no lo se-voy para halla – cuelga la bocina y me quedo con el teléfono en la oreja escuchando el Pi. Pi. Pi. Pi.

3:20 PMEscucho el timbre y cinco segundos después alguien abre la puerta -hola señora -la voz de Tara inconfundible- ¿esta Violeta? -habitación -dice mi mamá con un tono automático en su voz, señalando hacia arriba y escucho la risita nerviosa de Tara.-Gracias.

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20 segundos después, alguien toca a la puerta de mi habitación.-¿Violeta, puedo pasar? -dice Tara mientras se asoma por la puerta medio abierta-¿estás bien?-ven Tara, siéntate, tengo malísimas noticias -trago saliva -¿recuerdas que te dije que le hablaron a papá hoy del trabajo?Si -me responde Tara con una nota de impaciencia en su voz -si lo recuerdo-bueno, pues resulta que en su empresa hubo un recorte de personal y él fue uno de los afectados.-¡ah! -exclama Tara asustada -¡hay Violeta lo siento!-¡no, espera Tara! -la callo, impaciente, ya quiero soltar toda la sopa, ya no soporto cargar esto yo sola. -eso no es lo peor, prepárate… mis padres planean que nos mudemos a Tennessee.-¡¡¡¿¿¿QUE???!

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Capítulo 2.- La despedida

12:33 AMNo lo puedo creer, no puedo creer que hoy nos mudemos a Tennesse, que hoy dejo mi vida y todo lo que soy aquí.Ya solo queda una caja en mi habitación, “libros” es lo que dice, la tomo y salgo de la habitación.Wow, mi habitación luce muy rara… limpia, vacía, le falta mi toque, las paredes blancas, y las ventanas desnudas, hasta pareciera una habitación más grande de lo que estaba acostumbrada a verla. Miro por la ventana continua, afuera están mis padres arreglando las cajas en el camión de mudanza, Tara ayudándolos y… Gael, acaba de llegar en su Honda negro, lo miro y no puedo evitar sonreír, viene con Tadeo, su mejor amigo.Bajo las escaleras con la caja en mis brazos y veo a Gael que va subiendo para encontrarse conmigo.-¡amor! Cuidado, déjame ayudarte -exclama Gael cuando me ve bajar con la caja, me la quita de los brazos y la acomoda en los suyos, haciendo que parezca más liviana.-¡Ho! Gracias -le respondo mientras recojo un mechón de mi cabello que cae en la frente y lo acomodo detrás de mí oreja, meto las manos en los bolsillos de mis Jeans, y bajo las escaleras detrás de él.-¿lista? -me pregunta Gael mientras voltea a verme con curiosidad.-… no…-ajajá- me responde con la risa fingida -no te preocupes amor, seguiremos comunicándonos, no será lo mismo, pero algo es algo.-pues sí, no hay de otra -digo desanimada y casi sin prestarle atención.-ya quita esa carita de preocupación- me dice mientras me toca el labio inferior con su dedo índice- todo estará bien.-sí claro, tú lo dices porque tú no eres el que se va- le digo quejándome.

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-sí, eso tiene mucha lógica -me dice conteniendo una risa.Bajamos las escaleras y salimos al porche, Gael baja las escaleras de este para ir a acomodar la caja al camión mientras yo me quedo a ver el horizonte lleno de contaminación y edificios. Mis botas sienten el piso debajo de ellas suave, por última vez. Un leve susurro sale de mis labios.-adiós…

6:55 PMSe ve bien, aunque me cueste admitirlo, creo que es hermoso, diferente, verde, no contaminación, no edificios, no autos ruidosos haciendo sonar sus bocinas, totalmente lo opuesto a mi querida ciudad, a mi querida Tennesse. Miro por la ventanilla del auto y veo a un señor con cabellera canosa y larga, pero su rostro luce joven y radiante, como si el tiempo se hubiera detenido solo en su rostro, montando un caballo negro, pura sangre, corriendo a la par del auto, me voltea a ver y veo un brillo en sus ojos, algo que no puedo explicar, es como… la felicidad en verde.-veras que te va a encantar el pueblo- dice papa con tono de entusiasmo, moviendo las manos por todos lados, para subirme el ánimo.- todo es verde y natural, hay muchos animales y chicos de tu edad, te aseguro que harás amigos más pronto de lo que crees. Lo miro con ojos de furia, ya de por si hinchados de tanto llanto, si en Pontiac, nunca fui capaz de hacer amigos, que me espero de Tennesse, donde todos son lo contrario a mí.-papá, que cruel eres- le digo mientras me acomodo.-no es crueldad hija, enserio te vas a divertir ya lo veras- exclama papá con entusiasmo, mientras toma un sorbo de su soda favorita.-aha- le respondo con incredulidad y me pongo los auriculares en los oídos, pongo la canción “rondo” de on/off y cierro mis ojos, en poco tiempo, pierdo el conocimiento y me quedo dormida.

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No pasa mucho tiempo y siento el auto detenerse, me retiro los auriculares y escucho la puerta del auto abrirse.-¡bienvenida a tu nuevo hogar! – me dice papá entusiasmado.-bienvenida…tal vez, nuevo hogar… ¡no lo creo!- le digo molesta, mientras abro la puerta trasera y bajo un pie.-Ho vamos cariño- insiste papá- no seas así y disfruta el cambio, veras que no es tan malo como parece.Frente a mí, una casa blanca de dos pisos y un ático, con los bordes color café y una cerca blanca, dos ventanas en el frente y un porche muy parecido al de mi antigua casa, solo que en este, de lado izquierdo esta un sillón-columpio pintado de blanco y hay un tapete que dice “bienvenido”. Enseguida se abre la puerta y salen dos ancianos de la casa con sus brazos estirados y una sonrisa en el rostro. Los reconozco, inconfundibles, son mi familia.-¡Julieta!, cuanto tiempo -saluda mi abuela a mi mamá, con mucho entusiasmo, la abraza y la besa en ambas mejillas, dejando marcas de lápiz de labios rojo.-¡hijo!, los extrañamos- le dice con el mismo entusiasmo a mi padre.-y ¿Qué tenemos por aquí? ¡Lluvia! ¡Qué grande estas!Si, Lluvia es mi hermana pequeña, tiene 6 años y medio y es una princesita, todo el mundo dice que es idéntica a mi cuando tenía su edad, pero estoy muy segura que es mentira, pues mi hermana tiene reflejos rubios en su cabello, y su piel es más blanca que la mía. Tiene ojos enormes y aceitunados, y labios en forma de corazón, rojos como las cerezas. Está en esta edad en la que les gusta elegir sus ropas, así que viste muy alocadamente, casi pareciera que su estilo es hippie, con muchas prendas, y collares de cuentas de colores, una coleta a cada lado de su cabeza y flequillo que cae en su frente.

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-¡hola abuelita! -contesta a su vez Lluvia, con la voz más dulce que haya escuchado.- ¿Cómo estás?-bien princesa- dice mi abuela mientras enarca una ceja para decir lo que está a punto de decir- adivina quién quiere verte-¿Quién?- contesta Lluvia sin poder ocultar la emoción en sus enormes ojos.-Umm- mi abuela silva y se escuchan unas garras rasguñando el piso-¡¡¡Kafka!!!- grita mi hermana al ver a una perra pastor alemán salir por la puerta.-y tú, ¿no piensas saludarme?- me dice mi abuela-claro abuela, ¿Cómo estás?- le respondo mientras la abrazo. Es bueno sentir a mi abuela cerca, no la veía desde navidad.-bien nena, feliz ahora que ustedes ya están aquí -dice mi abuela -¿tienes hambre? Fue un largo viaje y te apuesto a que ha sido el viaje más largo de tu vida.-no mucha abuela, creo que aguanto hasta la cena- le respondo sin muchas ganas.-¿quieres que te ayude a desempacar? -me ofrece mi abuela.-no gracias abuela, prefiero hacerlo yo sola- le respondo mientras subo el porche. Sé que no debo ser grosera con ella, pues no está haciendo un favor, pero simplemente no puedo evitarlo.8:05 PM¡Genial! La recepción del Internet está por los suelos, suerte que mi computadora funciona, muy mal, pero funciona, la enciendo lentamente, con movimientos automáticos, reviso mi correo electrónico pero no tengo nada, ningún mensaje de nadie, pero claro, los únicos que podrían mandarme mails son Tara y Gael, pero aún es muy pronto. Suena mi teléfono, veo que es Tara y contesto, lo más rápido que puedo, pues mis dedos de repente se sienten torpes, como dormidos.-¿qué pasa Tara?- saludo, con el tono más alegre que puedo usar.

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-¡Violeta! Que tal, ¿Cómo vas?- me pregunta, pero noto en su voz, que finge entusiasmo.-Ash, ni lo menciones- le respondo mientras apago la computadora y me levanto de enfrente para tomar un libro y ojearlo- ¿novedades?-mira sé que es demasiado pronto, pero si, hoy vi a Gael hablar un buen rato con Nuria en la tarde.¡Nuria!, solo me faltaba que esa… envidiosa quisiera quedarse con mi novio ahora que yo ya no estoy, ¡Ash! La odio, ni pensar que hace tiempo fue mi amiga. -¿Nuria? -le pregunto a Tara fingiendo desinterés -¿y qué más?-pues solo eso, estuvieron hablando como una hora, luego Gael se fue y ella se quedó en el club otro rato, pero nada sospechoso- me cuenta Tara, mientras el entusiasmo se desvanece de su voz poco a poco.A lo lejos escucho la voz de mi abuela que me llama para bajar a cenar, pero… estoy cansada y lo último que quiero es cenar, así que ignoro el llamado, minutos después escucho unas pisaditas seguidas de garras rasguñando el piso de las escaleras y la puerta de mi habitación se abre, sin que alguien llame y solo una persona de mi familia hace eso.-Violeta, dice la abuela que bajes a cenar- me avisa Lluvia.-hola lluvia, hola Kafka -saludo mientras le acaricio la cara a Kafka -no princesa, dile a la abuela que no quiero cenar. Estoy cansada.-bueno, está bien- me responde resignada, mientras balancea sus manos frente a ella.- vamos Kafka.Se da media vuelta y Kafka la sigue, escucho como baja las escaleras en un intento de hacerlo rápido y yo vuelvo a mi mundo.Enciendo de nuevo la computadora y abro mi página social, se tarda mucho por la baja recepción del Internet, en cuanto abre le echó un vistazo a la bandeja de entrada, nada, ni un mensaje, que tristeza, pero bueno, debe ser normal, es el primer día, pero… por si las dudas, le escribo un mail a Gael.

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Hola Gael, ¿cómo estás?, solo un día y Ya te echo de menos, ya me instale en mi nueva

casa, deberías ver el pueblo, estodo muy verde y natural aunque esmuy diferente a Pontiac, pero bueno

cuídate mi amor, te quiero muchísimoy 100pre pienso en ti, no me olvides nunca

te extrañoVioleta.

Dudo al presionar la tecla “enter” pero al final mi dedo se manda solo y la presiona. Apago la computadora y me levanto de la silla, me pongo frente a mi cama y meto lentamente las manos a los bolsillos traseros de mis Jeans negros mientras contemplo mi nueva habitación… necesita pintura, busco en mi bolsa de mano mi IPod, lo saco y me pongo los audífonos, busco en los artistas a “the Gazette” y selecciono la canción “the invisible wall” y me tumbo en la cama, abro los ojos y veo el techo. Como me gustaría estar en Pontiac.

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Capítulo 3.- El primer día

8:13 AMMe despierto y lo primero que veo son cajas, algunas abiertas otras cerradas, busco en la maleta de ropa, unos Jeans negros desgastados y una playera negra que dice “little monster”, me calzo mis converse de siempre, mi peinado habitual, y me delineo los ojos con lápiz negro, lista para bajar, primer día en una nueva escuela, ¡genial! .Bajo las escaleras y voy hacia la cocina donde encuentro a mi mamá y mi abuela en una cómoda platica, a sus pies esta Kafka acostada que levanta la cabeza al percibir mi presencia.-buenos días hija, ¿dormiste bien?- me saluda mi abuela, mientras toma un sorbo de su café.-hola abuela, hola mamá- las saludo a ambas, casi sin ganas, pero tratando de que no se note.- pues… si, no me puedo quejar.-¿lista para tu primer día de clases? -me pregunta mamá.-Umm, a decir verdad… no -le respondo con cierto tono de broma en mi voz.-me da gusto Violeta, ¿quieres desayunar o ya nos vamos?-me pregunta mamá.-Umm no mejor ya vámonos- le respondo yo con un poco de inseguridad, después de todo, ¿quién está ansioso por comenzar en una nueva escuela?-OK, en un momento vuelvo Susan -le dice mi mamá a la abuela, mientras se pone de pie y trata de terminarse el café, para no dejarlo.-adiós abuela, nos vemos más tarde -me despido, dándole un beso en la mejilla.-sí, con cuidado- nos responde la abuela a ambas.Me subo al auto de mi mamá y lo pone en marcha.-¿nerviosa? -me pregunta mamá, como si la respuesta no fuera ya bastante obvia.-Umm, pues, algo- miento fingiendo desinterés.

Después de cinco minutos en marcha comienzo a ver a muchos chicos, vestidos de diferente forma, a

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diferencia de lo que tenía en mente al principio. Me parece que esta escuela no es muy diferente a la mía, y no es por etiquetar, pero parece que cada quien tiene su propio grupo. Excelente, ahora solo tengo que encontrar a los inadaptados sociales, para poder encajar. Poco después veo un letrero en el que claramente se puede leer “instituto de Tennesse”.-bueno… aquí es, suerte en tu primer día, más tarde vengo por ti- me dice mamá.-claro, adiós mamá- le respondo casi de inmediato, sin siquiera escuchar lo que dijo.Bajo del auto y me pongo los audífonos en los oídos, pongo música a todo volumen, bajo la cabeza y comienzo a caminar hacia delante, tratando de pasar desapercibida, pues nunca antes había sido la nueva, pero según había escuchado antes, es horrible. De pronto siento Un fuerte golpe en mi brazo derecho que me hace tambalear, desconcertada levanto la cabeza y veo una chica rubia, bonita y notablemente maquillada a mi lado, aunque el cabello un poco alborotado, mirándome con ojos llenos de odio y desconcierto, moviendo los labios, pero su voz no logra llegar a mi pues la música en mis oídos amortigua el sonido.-¡Ho! Lo siento, no sé qué me paso, lo siento mucho- me disculpo con la notablemente molesta chica que acabo de conocer, me retiro los audífonos de las orejas y los guardo en mi bolso.-¿nunca ves por dónde vas? -me responde casi gritando y con notable enojo en su voz, mientras agita los brazos como loca.- espera… ¿cómo dices que te llamas?-no lo he dicho, me llamo Violeta- le respondo a la vez que estiro mi mano para saludarla. Ella la mira con repulsión, como si se tratara de algo muy asqueroso.-Umm, eres nueva en el insti ¿verdad?- me responde mientras recoge su mochila ignorando mi mano estirada- bueno Azul, Deja de estorbarme o te las veras conmigo.

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¿Te las veras conmigo? ¿Que pretende hacerme? ¿Rociarme perfume, o fijador de cabello? ¿Pintarme con lápiz para labios?, aun así le respondo, aunque en el fondo, no quiero hacerlo, no puedo ser grosera.- me llamo Violeta…- digo casi inaudiblemente para mi.Ella me mira, y se va, haciendo volar su cabello rubio, de tal forma que me golpea en la cara, cierro mi mano extendida, y bajo el brazo, me dispongo a caminar para seguir desapercibida, pero algo me detiene.-Qué mala suerte que te hayas topado con Cruella de Vil- me dice alguien que está detrás de mí. Volteo para ver de donde proviene esa voz. Es una chica de cabello chino, rojo y alborotado, ojos grandes y verdes, con un estilo un poco hippie, y que me tiende la mano.-soy Valentina por cierto.-Violeta- le digo mientras le tomo la mano-lindo nombre, y… la amable chica con la que te acabas de topar es Isabella, o como yo la llamo, Cruella de Vil- me explica con sarcasmo- no te preocupes, no es así solo contigo, es así con todos, digamos que su papá es gobernador del estado y eso la pone en la casilla de niña popular y hueca, pero bueno, no me gusta hablar de ella, mejor dime, ¿ya tienes tu horario?-sí, lo saque de la página Web del instituto- le respondo sacando la hoja arrugada de mi bolsa, al ver la de ella, solo doblada a la mitad, pero completamente lisa, y en buen estado, me da vergüenza la mía, y trato de volver a guardarla, ella me ve, como preguntando, donde está, así que la vuelvo a sacar.- aquí esta.-OK, a la primera hora me toca artes, ¿y a ti?-Umm igual- le digo mientras me cercioro mirando mi hoja.-genial, nos toca juntas- me dice mientras comienza a caminar y yo detrás de ella, tiene unas largas piernas, que le permiten moverse rápido, en cambio, yo tengo piernas cortas, y se me dificulta seguirla.

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Llegamos al aula correspondiente, y ella se detiene en la entrada.-yo me siento ahí- me dice y señala una butaca- y justamente hay una butaca vacía junto a mí, ven, te sentaras ahí. Me jala de la mano y se sienta en su butaca, yo lo dudo pero al final me siento en la que me dijo, abro mi bolso y saco la libreta para la clase, levanto la mirada y veo entrar al aula a un chico delgado y alto con el cabello al cuello, lacio y una playera que dice “Iron Maiden”, Jeans negros y varias muñequeras negras, me recuerda a mi mejor amigo Pablo, quien vive en Pontiac, veo que el chico camina hacia mí con cierta duda en su rostro, mi reacción es bajar la cabeza, deseándole a todos los dioses, que no me vea.-Ey chica nueva, estas sentada en mi lugar- me dice notablemente molesto, pero con un tono de duda y curiosidad danzando en su voz.-Ho lo siento, de verdad lo siento- me disculpo levantándome de la butaca, lo más rápido que puedo, pero sin ser demasiado torpe, como de costumbre, tomando mi cuaderno, y cediéndole el asiento.-Darío, no seas grosero, te aparte lugar aquí, tras de mí, deja en paz a Violeta- le dice Valentina casi regañándolo, mientras lo agarra del brazo y bruscamente lo sienta detrás de ella, entre risas, Darío se quita el cabello de la cara, y golpea el brazo izquierdo de Valentina, amistosamente, ella le regresa el golpe, y así comienza una lucha amistosa, que dura unos treinta segundos.- lo siento Violeta, quédate en ese lugar, soy Darío por cierto- me dice mientras extiende su mano y yo lo saludo. Su mano esta tibia, y sus dedos son delgados y largos, pero firmes, las uñas bien recortadas, como si acabara de arreglárselas esta mañana.-Violeta, él es mi mejor amigo -me dice Valentina, interrumpiendo mis pensamientos, y yo suelto la mano de Darío y me miro los dedos.- y también esclavo de Cruella de Vil.

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-Ey, yo no soy su esclavo, soy su novio, y no es Cruella de Vil, es Isabella y no es tan mala- se queja Darío, y la ve a los ojos. Un intercambio de ternura y amistad ocurre en sus miradas, suspendidos por un instante.-aha- le dice Valentina con sarcasmo cuando suelta la mirada de Darío y voltea hacia enfrente.- es muy buena y bondadosa.Se escucha un gran “Hooo” en el pasillo seguido del sonido de pasos con zapatillas.-y hablando de la reina de roma…- dice Valentina con su mismo tono de voz sarcástico y Darío la fulmina con la mirada.-hola amor,- saluda Isabella a Darío, con un beso demasiado apasionado, dejándolo a él, sin aire y luego me ve a mí- iu, ¿tú que haces aquí?-le toca clase con nosotros, ¿tienes algún problema con ella Isabella?-.me defiende Darío. ¿Podría esto ser un poco más raro por favor?-no, claro que no- dice Isabella mientras me voltea a ver con sus conocidos ojos llenos de odio. Casi parece que esta chica podría arrancarme la cabeza en tres segundos, y sin dañar sus perfectas uñas largas y ovaladas.Veo que muchos alumnos entran al aula, atropelladamente, todos tratando de no quedarse a ultimo, seguidos de un hombre alto de cabello chino parecido al de Valentina, barba de candado y con el aspecto un poco descuidado, una funda que parece de violín y varios pinceles en la mano, anteojos de media luna con gran armazón y una mirada penetrante, suelto una risita al verlo y me voltea a ver, yo me lleno de pánico y solo lo demuestro al hacer abrir mis ojos tanto como mis parpados me lo permiten.-tú debes ser la alumna nueva- me dice el profesor entrecortadamente, recuperando el aliento.-si… sí señor, me llamo Violeta- le digo con la voz temblorosa, deseando que la tierra me trague.

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-yo soy el señor Valdez, bienvenida a mi clase- me responde y luego se dirige a toda la clase- escuchen todos, ella es Valeria-Violeta- lo rectifico sin pensar. Bien, bien hecho Violeta, lo último que queremos es llamar la atención de todos.-Ho si, perdón, Violeta, escuchen todos ella es Violeta y es nueva en la escuela y en la cuidad, así que quiero que la traten bien ¿OK?- le dice a todos-si – se escucha en coro desinteresado.-bien clase, hoy veremos la teoría del color, ¿alguien puede decirme los colores primarios?-pregunta el profesor a la clase e Isabella levanta la mano- sí, ¿Isa?- pregunta dirigiéndose a Isabela con esa abreviatura que me hace pensar en una niña pequeña y encantadora.-Violeta es uno ¿no?- dice en tono de burla mientras escucho que todos se ríen a mi espalda. ¿Es enserio? ¿Utilizo esa broma con mi nombre? Eso es muy de la vieja escuela.-No Bella, no es uno de ellos y no es motivo de burla- le dice a la clase, que se ríe sonoramente, mientras yo me encojo cuanto puedo para que nadie me vea. El profesor se da la vuelta y escribe desinteresadamente en la pizarra, después dibuja tres círculos unidos por uno en el centro y escribe letras en cada uno de ellos, se voltea hacia la clase y señala a Isabella.-Isa, tendrás una tarea extra por tu bromita.

Hago exactamente lo mismo en las cuatro clases siguientes, esconderme y tratar de no llamar mucho la atención. Mi especialidad es ser invisible, así que me sale bastante bien sin mucho esfuerzo. A la mayoría de los alumnos no les interesa una chica nueva, así que eso me facilita aún más las cosas.-bien, ¿te sentaras con nosotros en la cafetería?- me pregunta Valentina cuando la quinta clase termina. Historia universal, nunca me ha gustado la materia, por lo tanto estoy un poco animada de que acabase.

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-Emm si… si, supongo que si- le digo no muy segura, mirando a todos lados y evaluando mis posibilidades.-bien pues… vamos- me apresura.En el camino a la cafetería se nos une Darío y nos saluda.-¿dónde dejaste a Cruella?- le pregunta Valentina con su habitual broma, y una sonrisa de oreja a oreja en el rostro.-no es Cruella, y esta con el escuadrón de animadoras ¿lo olvidas?- responde Darío casi de inmediato y fingiendo que la broma de Valentina no le molesta.-acaso… ¿Isabella no come con ustedes?- le pregunto yo a Darío, tratando de sonar natural y conteniendo los temblores en mi voz.--si, bueno… solo tres días a la semana, los otros dos practica con las animadoras- me responde mientras me ve a los ojos, tiene que bajar la cabeza pues la diferencia de estatura es evidente.En la cafetería hay hamburguesas, pizza, sándwiches, ensalada, pastel de carne, burritos, carne misteriosa, pasta y, ¡Ho! ¡SUSHI!-¡¡¡Genial!!!- digo en voz alta sin querer y Valentina y Darío se sobresaltan y me miran sorprendidos.-¿Qué pasa Violeta?- me pregunta Valentina, un tanto asustada, pero divertida.-¡Ho! Lo siento,-me disculpo- solo que vi sushi y me encanta, puedo comerlo a todas horas y en…-¿te disculpas por todo?- se queja Darío, interrumpiéndome sonoramente.-OH, lo siento- me doy cuenta de lo que digo y me callo de golpe, tapándome la boca con ambas manos.-¿ves?- me reclama Darío, y me ve a los ojos con una sonrisa juguetona en sus labios.-apenas la conoces y ya quieres comenzar a discutir- le reprende Valentina a Darío, muy divertida, golpeándolo amistosamente en el brazo.-¿qué quieres?, es mi naturaleza- le responde Darío entre risas, sobándose el brazo.

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02:45 PM¡Qué día!, bueno, lo peor ya paso, o al menos eso creo yo, el primer día siempre es el más difícil, según muchas chicas nuevas, espero que tengan razón, porque no soportaría otro día peor.En la entrada están Lluvia y Kafka jugando, al verme, Lluvia corre hacia mí para darme un abrazo y Kafka corre detrás de ella.-¡Violetaaaaa!- exclama Lluvia mientras corre y Kafka ladra.-¡hola princesa!-le respondo mientras sus bracitos rodean mi cintura y se para de puntillas- ¿no fuiste hoy al instituto?-sí, pero ya Salí –me dice mirándome con sus ojos saltones y enseñándome los dientes en una gran sonrisa.-¿Ho si?-sí, y adivina con quien está hablando mamá por teléfono- me pregunta Lluvia mientras me libera y acaricia suavemente la cabeza de Kafka.-Umm, con… el abuelo- le respondo, jugando y rascándome la barbilla.-¡NO!- me responde gritando entre risas.-¿entonces?-mamá está hablando con Luna y Lucas- me dice-¡Ho! ¿Enserio?, tengo que ir- le respondo mientras le doy un besito en la frente y entro a la casa.Mamá está sentada en la sala de la casa, y tiene el teléfono en la oreja, escuchando atentamente. -Si… si, está bien hijo,…. Bien…. En navidad, espero…. Yo también los amo hijo…. Ella está bien, adaptándose,… claro que si hijo- Mi madre voltea a verme y me guiña un ojo, me hace una seña con la mano para que me acerque a ella.- bien, habla con ella, te amamos hijo.- espera la respuesta y me pasa el teléfono.-¿Hola?- digo tímidamente, como si mi hermano pudiera ver el sonrojo de mis mejillas.-¡Hermana!- grita Lucas del otro lado del teléfono, y yo tengo que separarlo de mi oreja un momento.- ¿Cómo te ha ido Violeta? Luna y yo te extrañamos

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muchísimo, ¿Cómo te estas adaptando? Cuéntame, queremos saber todos los detalles.- Todo ha ido de maravilla conmigo, no hay reportes nuevos ni nada fuera de lo común, ¿Pero qué me dices tú?, ¿Dónde están?- respondo tratando de que la conversación fluya y de que no se estanque solo conmigo y mi aburrida vida. -Estamos bien Violeta, ahora estamos en Sudamérica, no tenemos mucho tiempo para hablar, pero Luna te manda muchos besos, y abrazos, muy pronto nos volveremos a ver, por lo pronto cuídate y envíanos mails cada que puedas, ¿bien?-Bien hermano, envíenme fotos- casi le grito a la bocina del teléfono.-Trato, salúdame a mamá y a papá, y a Lluvia, tenemos que irnos, besos hermosa- Se despide y después cuelga. Regreso el teléfono y subo a mi habitación con una sonrisa tonta en mi rostro.Dios, hacia tanto que no hablaba con mis hermanos mayores.

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Capítulo 4.- El quinto es de mala suerte.

08:30 AMHoy es el quinto día en el nuevo instituto al menos sé que lo peor ya paso. Nunca me ha gustado tener enemigos, así que mamá me ayuda a preparar un Pay de fresas para Isabella, que espero me ayude a hacer las paces con ella. La veo pasar de la mano con Darío, ella dando traqueteos con sus tacones y moviéndose provocativamente, enrollando un mechón de su cabello en su dedo índice.-¡Darío!- le grito a él, mientras corro torpemente para alcanzarlos.-¡Ey Violeta! ¿Qué pasa?- saluda Darío en cuanto me ve- ¿eso es para mí?-jaja, no, de hecho- bajo la cabeza para hablar, tragando saliva y tratando de medir mis palabras- es para ti, Isabella.-¿para mí?- me pregunta Isabella extrañada- hoy no es mi cumpleaños ¿o sí? -no, solo… lo prepare para ti, para… hacer la pases y eso… ya sabes- le respondo nerviosamente y atenta a su reacción.

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-Umm- lo duda, pero después toma el Pay y le da un mordisco, comienza a masticar y en su rostro se ve una expresión de asombro y gusto, que rápidamente es remplazada por horror y desesperación. De pronto veo como comienzan a brotarle pequeños granitos en los brazos descubiertos y la cara se le pone roja como un tomate, Darío la mira extrañado.-Umm, Violeta, ¿de qué es el Pay?- me pregunta Darío con una incomprensible calma, y se lo quita de las manos a Isabella para olfatearlo, le da un pequeño mordisco y lo saborea.-de fresas ¿por?- le pregunto extrañada.-¡¿acaso estás loca?!- exclama Isabella furiosa, rascándose los brazos y abriendo exageradamente los ojos.-¡¿ahora que hice?!- pregunto yo asustada, sintiéndome inútil de pronto, y a la vez culpable.-Umm, Violeta, Isabella es alérgica a las fresas- me responde Darío con la misma calma preocupante.-¡Ho! ¡De verdad lo siento!- me disculpo- ¿Qué hago?-nada, solo… se le pasa solo, no te preocupes Violeta- me responde Darío muy tranquilo. Dios, como puede estar así de tranquilo en esta situación.-¿seguro?, se ve muy mal- le respondo a Darío, preocupadamente, tratando de entender por qué el no hace nada, en eso llega Valentina.-¡Wow!, ¿Qué paso?- pregunta entre risas Valentina.-Umm Violeta le dio un Pay de fresas- responde Darío, calmado, pero con una sonrisa bailando en sus labios.- ajajá- Valentina rompe en risas- Violeta que ingeniosa, nunca se me había ocurrido a mí.-no Valentina, no fue mi intención, yo solo quería hacer las paces con ella.- respondo preocupada.Diablos, ¿Qué hice ahora?-¡¡¡Aléjate de mí!!!- me grita Isabella, agitando los brazos por todos lados, y viéndome con sus ojos cada vez más hinchados y rojos.-no le hables así -le dice Valentina- hasta deberías agradecerle, parece que te hizo un favor, la verdad luces mucho mejor así.

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-¡Valentina!, déjala en paz- le dice Darío mientras se la lleva del lugar.-de verdad yo no quise hacerle nada malo -le digo a Valentina.-Violeta, no te preocupes, no le pasara nada malo, anda, vamos a clase.

Entramos a la clase de artes y un minuto después entra el profesor.-bien clase, vamos a comenzar, por favor todos en silencio- se da la vuelta hacia nosotros y se queda parado viendo al espacio, distraído por cinco segundos, después ve el asiento de Isabella y Darío vacíos y frunce el ceño, como si no estuviera seguro de preguntar qué pasa. Una lucha interna se lleva a cabo dentro de él y después habrá la boca para hablar.- muy bien, ¿alguien sabe dónde está Isa?-está en la enfermería profesor- le digo yo con inseguridad en mi voz, no deseando hacerlo, para evitarme toda la serie de preguntas que podría hacerme.- y ¿sabes por qué esta ahí Violeta?- me pregunta directamente a mí el señor Valdez.-Umm, sí señor, le di un Pay de fresas y yo no sabía que era alérgica- le respondo con la cabeza baja, deseando con todo mi corazón que la tierra me tragase viva. De pronto todos comienzan a reír y yo siento que me señalan, aunque por temor no volteo para rectificarlo.-bien, silencio, empecemos clase.

En la cafetería, vemos venir a Darío, mientras nosotras estamos comiendo, el solo, llega y se sienta. -¿Dónde está Isabella?- le pregunto preocupada a Darío.En realidad no quiero saber la respuesta, pero no me puedo quedar sin preguntar.-no te preocupes por ella Violeta, sé que no fue tu culpa lo que paso -me tranquiliza Darío, mientras toca suavemente el dorso de mi mano.

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-de verdad lo siento, sabes que no fue mi intención hacer que… pasara lo que paso -le digo, y mi voz suena de pronto muy suave y minúscula.-ya Violeta, no te preocupes -me dice Darío a la vez que me toca la barbilla con sus dedos índice y pulgar casi como una caricia, se acerca a mí y me da un tierno beso en la frente, de pronto vemos venir a Isabella más enojada que nunca.-Darío, ¿Qué haces?- le pregunta Isabella furiosa.-Umm, comiendo…- le responde Darío muy tranquilo.-necesito aire, ¿vienes? -le pregunta Isabella con el fin de llevárselo con ella. ¿Pero qué…?-claro -le responde resignado Darío, se levanta de la silla y comienza a caminar hacia afuera, tomando a Isabella de la muñeca y atrayéndola hacia él, ella se libera y se acerca a mí.-aléjate de mí, y de mi novio ¿entiendes?- me amenaza. Estoy Harta, Harta de que las chicas populares me traten como quieren y se aprovechen de mí. Quizá al llegar aquí, tenía en mente que eso no iba a cambiar, pero jamás me habían gritado así, y no me gusta que lo hagan. Una cólera muy grande comienza a crecer dentro de mí, y siento como va subiendo a través de mi cuerpo, y sale por mi boca. Mi cara se torna del color de los tomates y mi vello se eriza.-¿o qué?- la reto.-¿perdón? ¿Dijiste algo?- me responde furiosa Isabella. Se puede sentir su enojo en su mirada penetrante.-lo que oíste, Isabella, ¿o qué?- la sigo retando. Y me pongo de pie, a la defensiva. -calma Isabella, vámonos -le dice Darío a la vez que la jala de la cintura hacia él. Yo me desplomo en mi silla y escondo la cabeza entre mis brazos haciendo a un lado mi almuerzo. Ho Dios mío, no quiero llorar.-¿Qué pasa Violeta? -me pregunta Valentina que acaba de llegar con su almuerzo en una de las conocidas charolas azules.-pasa, que acabo de cometer suicidio social- le respondo con sarcasmo, y un poco molesta, pues en

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momentos como este, lo último que quiero es a alguien con curiosidad.-¿qué hiciste?- me pregunta con total extrañeza, sentándose junto a mí.-que no hice, le grite a Isabella, la rete, seguro pasara algo malo- le digo mientras vuelvo a esconder mi cabeza entre mis brazos.-¿enserio? ¿Te atreviste? Wow quien iba a decir que la dulce Violeta se iba a atrever a retar a la gran Isabella-me contesta Valentina entre risas y con sarcasmo, abriendo un jugo y colocándole el soplete.-no te burles de mi Valentina, solo que, no pude contenerme y yo solo… explote -le digo con cierta alarma en mi voz.- Jamás me había pasado algo similar.-¡baaa! No pasa nada Violeta, eso es para que aprenda que no puede pasarse contigo -me tranquiliza Valentina. Y veo entrar por la puerta a Darío con su charola, y se sienta junto a mí.-¿Qué paso con Isabella?- le pregunto preocupada apenas se sienta.-Umm, pues, digamos que… se puso un poco celosa- me dice Darío mientras juega con su comida.-Umm… ¡dime que no de mí!- le digo alarmada, pero tratando se sonar tranquila. Lo único que me faltaba.-Umm, pues… si, de ti, piensa que tú me gustas o algo así, a veces se le afloja un tornillo, es todo, después se le pasara- me dice Darío tranquilizándome y viendo alrededor.-patética- se burla Valentina y Darío le dedica una mirada fulminante.-¡¡¿¿Qué??!!- dice Valentina al notar la mirada de Darío, y ambos rompen en risas.

02:40 PMLlego a mi casa y mis padres y abuelos están sentados todos en el porche mientras Lluvia juega con Kafka en el patio, Su cabello vuela con total libertad, y creo que es más rápida de lo que

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recordaba. Sus delgadas piernas corren por todo el patio, dando saltos con cada pisada.-hola familia- saludo a todos sin ganas, bajo la mochila de mi hombro y la arrastro.-¿qué pasa hija?, ¿por qué esa alegría desbordante?- me pregunta mamá con sarcasmo.-solo hoy no fue mi día, es todo- respondo yo a la vez que abro la puerta para entrar.-¡espera! No entres -me dice papa antes de que yo pueda siquiera soltar el picaporte.-¿Por qué?, estoy cansada papá- le respondo yo.- hay alguien que quiero que conozcas -me dice papá a la vez que se levanta de su asiento, toma mi muñeca y me jala hacia él, me rodea con un brazo y me lleva hacia la salida.-papá, ¿tiene que ser ahora?, estoy cansada y de mal humor- le respondo esperando que me diga que me puedo ir.-sí, tiene que ser ahora -me responde.-está bien, vamos -le digo resignada.Lluvia nos ve, y nos sigue y Kafka va tras de ella.-no Kafka, tu quédate aquí, no puedes venir- Lluvia regaña a Kafka y le da pequeñas palmaditas en la cabeza.Llegamos a la entrada de la casa de junto a la nuestra y papá toca el timbre con una sonrisa en su rostro, y muy inquieto, alternando sus miradas, a la puerta y a mí. Casi de inmediato la puerta se abre y sale una chica de mi edad, muy guapa, con el cabello lacio y suelto que cae como cascada por sus hombros, ojos grandes, verdes y delineados estilo “Pin-up” y boca pequeña con forma de corazón, roja como una cereza, esbelta y con un vestido muy primaveral sin mangas y con estampado floral, casi me recuerda a Isabella y bajo la cabeza, apenada.-¡Ho! Hola señor Vanderbilt, ¿Qué se le ofrece?- dice la chica al ver a mi padre en su puerta. Su voz suena muy melodiosa, con acento británico, y levanta gentilmente las cejas al pronuncia “ofrece”.-¡hola Luz! Vengo a presentarte a mi hija tal y como lo prometí- le responde mi papá con una sonrisa de

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oreja a oreja en el rostro y me empuja hacia delante, de modo que estoy frente a Luz.-así que tú eres Valeria -me dice, levantando las cejas y sonriendo.-Violeta- la corrijo casi de mal modo.-¡Ho! Lo siento, Violeta, y… ¿qué edad tienes?-dieciséis- le digo sin ganas y cruzándome de brazos.-¡genial! Igual que yo- me dice tratando de conversar, toma un mechón de cabello y comienza a enroscarlo en su dedo índice. Esa manía me recuerda a Isabella y me pongo de malas de repente.-sí, mira, es un gusto conocerte pero, tengo tarea por hacer, después podemos hablar si quieres- le digo algo molesta, tratando de zafarme del abrazo de mi papá.-claro, será un gusto- me dice Luz algo consternada, tratando de mantener la sonrisa en sus labios, pero solo logrando que se vea demasiado fingida.-bien -respondo y me voy de ahí. Bajo el porche lo más rápido que mis piernas me lo permiten, y regreso a mi casa hecha una furia, sin preocuparme de la primera impresión que le di a Luz, o de lo mal que hice quedar a mi papá.-discúlpala, tuvo un mal día hoy en el instituto- alcanzo a escuchar que dice mi papá.-claro señor, no se preocupe- responde ella, y cierra la puerta de su casa suavemente.

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Capítulo 5.- la disputa.

09:30 AMHoy es sábado por la mañana, lo bueno de los sábados es que no hay escuela, ni alumnos ni nada que tenga que ver con socializar, mis padres están en el supermercado y yo me quedo sola en casa con Kafka. De pronto escucho el timbre y me pregunto quién será, Kafka comienza a ladrar, bajo las escaleras para ir a abrir la puerta y la persona insiste en el timbre. -¡ya voy, ya voy!- digo antes de abrir para que dejen de insistir en el timbre, tropiezo en el último escalón y caigo en el suelo, Kafka suelta un aullido, que a mí me suena a burla, me pongo sobre mis pies de nuevo, aviento una maldición al aire y abro la puerta.- ¡Valentina! ¿Qué haces en mi casa?-Violeta, necesito tu ayuda- me dice Valentina a la vez que entra sin invitación, cierra la puerta detrás de

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ella, y ve a todos lados con miedo mezclado de diversión en su rostro.-¿Por qué?, ¿Qué pasa?- le pregunto y tocan de nuevo el timbre.-¡no abras!- me ordena Valentina y señala la puerta.-¿por qué? ¿Quién es?- le respondo extrañada.-¡abre la puerta Violeta!- escucho la voz de Darío tras la puerta, y golpea con su puño de manera insistente.-¡¡¡no Violeta!!! ¡Quiere asesinarme! -me dice Valentina. Pero yo igual le abro la puerta a mi amigo, pero antes de que pase a mi casa lo interrogo.-¿Qué sucede aquí Darío?, creí que Valentina era tu mejor amiga -le digo a Darío tranquilizándolo, pongo ambas manos en su pecho y siento su alta temperatura en las palmas de mis manos.-yo también lo creí- dice Valentina a mis espaldas.-lo es, pero no puedo ser amigo de una traidora-responde Darío a la vez que me toma de la cintura con sus dos manos y me levanta para apartarme de el sin que yo pueda hacer algo para evitarlo, pero tan solo me suelta y yo vuelvo a ponerme entre él y Valentina.-¿Qué pasa? ¿Por qué dices eso?- le pregunto a Darío. El me ve a los ojos y me sonríe.-Violeta, ¿me puedo sentar? -me pregunta Darío viéndome tiernamente.-si claro -le digo apartando la mirada de el para no sonrojarme -pero dime, ¿porque dices eso de Valentina?-bueno, pues estábamos Valentina, Isabella y yo y pues, Valentina hizo enojar a Isabella, le dijo que ella era un tanto hueca, y que no era lo que yo necesitaba o lo que yo buscaba en una chica, citando ella dijo “necesitas a alguien con cerebro”, después de eso Isabella me hizo elegir entre ella y Valentina- me dice mientras me ve a los ojos y alcanza mi mano para tomarla entre las suyas.-y… ¿a quién elegiste?- le pregunto con cierto temor. Todos sabemos a quién eligió, genio.-¿a quién crees?- me dice mirándome tiernamente- a Valentina.

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-sí, pero yo no te dije que me eligieras a mí- le reclama ella a la vez que se avienta en un sillón y comienza a jugar con un mechón de cabello.-no, no lo hiciste, pero eres mi mejor amiga, ¿por qué no lo haría? -le responde casi de inmediato Darío mientras la voltea a ver con el semblante más tranquilo.-bueno pero… ¿eso quiere decir que tu e Isabella ya no son novios? -le pregunto yo a Darío. Demasiado obvio.-pues… creo que no, ya no somos más novios -me responde Darío bajando la cabeza y soltándome las manos.-lo cual me alegra porque esa chica de verdad te estaba cambiando -le dice Valentina a Darío en tono de broma y se acomoda en el sillón.-oye ¿y… tus padres?- me pregunta Darío mientras ve para todos lados.-Umm fueron a hacer las compras y me dejaron acá sola con Kafka -solo término de decir eso y se escucha el timbre -Ho, supongo que son ellos.-hola Violeta, ¿qué tal, como estas?- me dice Luz apenas abro la puerta. Luce bastante bien, con su cabello lacio perfecto, y sus dientes blancos y perfectamente alineados desnudos en una sonrisa.-hola Luz, estoy bien Umm… ¿quieres… pasar? -le digo haciendo la señal con mi mano de que pase al interior de mi casa, entra y saluda con la mano a mis dos amigos que están sentados en la sala. Todos nos vemos entre todos. Ante la presencia de Luz, de repente nos sentimos demasiado desaliñados.-Ho, ¿él es… tu novio?- me pregunta Luz, volteándome a ver, y frunce el ceño, como si algo le doliera.-¡¡¡NO!!!- respondemos en coro Darío y yo.-no, no, solo… amigos- dice Darío.-Ho sí, claro, bueno soy Luz -se presenta a mis dos amigos y le da la mano a Darío, le sonríe y podría jurar, que pestañea varias veces seguidas.

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-si… ¡si claro!, tu y yo nos conocimos en el jardín de infantes ¿lo olvidas?- le dice Valentina a Luz en tanto la reconoce.-¡claro!, Umm… Valentina... ¿Verdad? -le dice Luz, entrecerrando los ojos para recordar.-sí, esa soy, ajajá- le dice Valentina al ver que Luz la reconoció, pone una mano en su cintura, y con la otra jala a Darío hacia ella, liberándolo del agarre de Luz.-y ¿de dónde conoces a Violeta? -le pregunta Luz a Valentina.-`pues… del instituto- le dice Valentina dudándolo.-Ho, genial, bueno, Violeta, yo solo venía a invitarte a una fiesta de jardín que mis padres harán esta noche, no sé si quieras venir con tus padres- me dice Luz con cierto brillo en los ojos, alternando su mirada entre mí y Darío.-Umm, bueno, se los diré a mis padres, yo creo que sí, pero aun así tengo que decirles -le digo a Luz como excusa, y cruzo mis brazos sobre mi pecho, sintiéndome de repente un poco incomoda.-y ustedes también están invitados si quieren venir -les dice a Darío y a Valentina. Entrelaza sus dedos enfrente de ella, y desnuda sus dientes en una sonrisa perfecta y segura. ¿Es normal que las chicas de este pueblo sean tan bonitas y perfectas?-claro, está perfecto -dice casi de inmediato Valentina.-y tu… ¿vienes? -le dice a Darío al tiempo que se acomoda el cabello detrás de la oreja y pestañea tímidamente.-Umm, no lo sé, ya veremos -responde Darío algo inseguro y pasa un brazo por los hombros de Valentina, atrayéndola hacia sí, cariñosamente.-bueno, espero que si puedan venir todos, nos vemos-dice Luz al no poder hacer nada más, abre la puerta y sale. Hasta ese momento, noto la magnitud de sus tacones. Valla, esta chica podría correr con ellos sin tropezar, camina con mucha gracia y perfección. Demonios.-esa chica me da muy mala espina- dice Darío mientras se avienta otra vez en el sillón. De pronto mi

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computadora emite un sonidito parecido a un “pip” que me indica que un nuevo mensaje me ha llegado. Abro la computadora y veo en la bandeja de entrada un mensaje junto con otros de la línea telefónica y mi cuenta de correo que dice “Gael”.-genial, por fin me respondió -digo en voz alta solo para mí.-¿Quién? -me pregunta Darío mientras se asoma a mi computadora para ver de quien se trata.-Umm, nadie… solo es, mi novio, Gael- le digo a Darío mientras abro el mensaje, insegura, quizá debería esperar a estar sola para leerlo.-¿tu novio?, no sabía que tuvieras uno- me dice Darío a la vez que se asoma aún más a la computadora. Falta poco para que se pueda meter a ella, ¿Es esto normal?-y ¿está lindo?- me dice Valentina mientras checa su celular, y distraídamente.-pues… - le respondo yo, pues creo que la respuesta que yo le daré es demasiado obvia.Es mi novio, más me vale pensar que está lindo, ¿no?Olvido la presencia de Darío en la habitación y abro el mail, para ver que dice, en cuanto comienzo a leer, mi rostro adopta una expresión decepcionada y triste.

Violeta:Lamento no haberte escrito antes

Pero he estado muy ocupado en elequipo de futbol y todo eso, te pido

que me entiendas y que no te enojesconmigo, nos veremos pronto nena,

Te quiereGael

-y… ¿ese es tu novio? -me pregunta Darío en tono de burla, no me había dado cuenta que él también

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estaba leyendo el mail. - casi dos semanas que te mudaste y ¿solo te dice eso?-pues… como él dijo, ha estado muy ocupado -le digo yo tratando de excusarme y cerrando la ventana.-Violeta, eso no es excusa -me dice Darío a la vez que me toma las dos manos entre las suyas.-Umm, Darío, será mejor que nos vallamos -le dice Valentina en cuanto percibe la cercanía entre nosotros.-sí, tienes razón, nos vemos en un rato Violeta -me dice Darío mientras me da un beso en la mejilla y sale de la casa.-entonces… ¿si van a venir?- les pregunto yo en cuanto reacciono. Darío abre la puerta de la entrada y ambos salen, yo me quedo en el porche esperando la respuesta.-si… claro, aquí vamos a estar- me responde Darío y sonríe, aunque no estoy segura si sonríe para mí, o para sí.Apenas salen de mi casa y yo saco mi celular y marco el número telefónico de Tara, escucho el Pi. Pi. Pi. , y después, ella responde.-¿hola?- escucho la voz de Tara al otro lado de la línea. Ho Tara, te extraño amiga.-¡Tara!, ¿cómo has estado? -le digo yo apenas escucho su voz.-¡Violeta!, ¿cómo estás?, hacía tiempo que no me hablabas, parece que te has olvidado de mi- me responde Tara cuando escucha que soy yo la que le habla. En su voz aparece un tono de felicidad, mezclado con emoción, y miedo.-bueno, pues… lo siento, es que ya sabes, me he estado instalando es todo, pero cuéntame… ¿qué tal van las cosas? -le pregunto tratando de excusarme, comienzo a enrollar un mechón de cabello en mi dedo índice, y en cuanto me doy cuenta de la manía que acabo de tomar, desenredo el mechón y comienzo a morder el cabello.-pues… bien, ya sabes, el señor Rodríguez sigue siendo igual de gruñón, ayer me saco de la clase solo

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porque le pedí a una compañera la tarea- me cuenta entusiasmada Tara.- y… ¿Qué me dices de…Gael? -le respondo yo, tratando de no ser tan obvia.-Ho, ya entiendo el motivo de tu llamada, pues Gael, ha… estado bien… creo- me responde insegura de su respuesta y su respiración se torna pesada.-¿estas segura Tara?- le respondo yo sospechando de ella y no queriendo saber la verdad.-bueno… la verdad es que últimamente lo he visto muy acompañadito de Nuria- me dice Tara, soltándome toda la sopa.Demonios, no.-Ho, ¿enserio?, ¿Nuria?- le pregunto muriéndome de celos, pero evitando que se noten en mi voz, oprimo mi pecho, y reprimo un grito.-oye Violeta, me tengo que ir, mi mamá me llama, hablamos luego -me dice Tara y cuelga sin que yo le pueda responder. Marco el número de Gael y me pongo el teléfono en la oreja, pero mi llamada no entra debido a que él tiene su celular apagado, rayos, guardo mi celular en la misma bolsa de mis Jeans y me tiro al sillón, enciendo la televisión y busco algún canal, ninguno en específico, solo tratando de mantener la mente ocupada, para no pensar lo peor. Divago entre mis pensamientos, y llego a mis recuerdos más olvidados, a cuando Gael era apenas un sueño, a cuando Tara me ayudo a conquistarlo. Comienzo a morder mis uñas sin percatarme de ello, hasta que muerdo sin querer mi dedo. Escucho que Kafka comienza a ladrar y la puerta se abre, entra Lluvia corriendo seguida de papá.-¿violeta podrías ayudarme con las compras?- me pregunta papá mientras carga tres bolsas en sus brazos, casi sin poder, saca la llave de la cerradura.-¿te ayudo con estas o voy por mas al auto? -le pregunto mientras me balanceo en las puntas de mis pies.- no, ve al auto por mas -me responde papá mientras camina hacia la cocina a toda velocidad, en el camino una de las bolsas se cae, y todo el contenido

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se dispersa por la cocina, mi papá maldice al aire, y yo suelto una risita casi inaudible.Camino hacia fuera de la casa y veo el auto con el portaequipajes abierto mi madre agachada y mis abuelos caminando hacia mí.-hola nena- me saluda mi abuela en cuanto me ve- ¿Qué hiciste en el tiempo en que nos fuimos?-Umm pues… nada, nada en específico -le respondo yo.-a…bueno -me dice, me da unas palmaditas en la espalda, y se mete a la casa.-mamá, Umm vino…la chica de la casa de lado -le digo a mi mamá mientras cojo tres bolsas del portaequipaje- ¿Cómo se llama?-Umm, Luz -me responde mi mamá desinteresada.-sí, ella, Umm vino y dijo que nos invitaba a una fiesta de jardín esta noche en su casa y yo le dije que lo iba a consultar contigo -le digo mientras caminamos juntas hacia la casa para llevar las compras.-bueno, pues, si, vamos a ir, después de todo, su padre es el mejor amigo del tuyo. -me dice mi mamá evadiendo el tema. Toma un mechón de su cabello, y con la mano que tiene libre, lo acomoda detrás de su oreja, y se rasca la nariz.-OK, está bien mamá -dejo las compras tomo mi computadora y subo a mi habitación.-¡Violeta!, baja a comer cariño -me grita mi abuela desde la cocina.-Umm, no tengo hambre abuela, pero gracias -le grito yo desde arriba.-¡Violeta, no me hagas subir por ti! -me amenaza mi abuela desde el pie de las escaleras.-¡abuela! Estoy ocupada…está bien, ya bajo.En cuanto entro a la cocina, todos están hablando, mi abuelo con papa, mi abuela con mamá, Lluvia con Kafka, el ruido me hace querer salir de ahí, pero me siento, pues mi plato está servido.-abuela… -interrumpo-¿Qué pasa Violeta? -me pregunta mi abuela mientras voltea a verme.

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-Umm me serviste demasiado, nunca podré acabarme todo esto -me quejo, mientras tomo un poco con la cuchara y lo vierto nuevamente en el plato.-pues se lo das a Kafka -me dice y voltea a ver a mamá para continuar su plática.-si tú lo dices…- tomo una cucharada de esa especie de mezcla que ni yo sé que es y la meto en mi boca, al percibir el sabor de la comida, lo escupo, miro hacia mi familia y al notar que nadie se dio cuenta de lo que hice, tomo mi plato y vacío todo el contenido en el plato de Kafka, está a los pies de mi silla, ella se acerca, olfatea el contenido de su plato y comienza a comerlo, me levanto de la mesa, coloco el plato en el fregadero y salgo de la cocina, camino hacia arriba, en eso escucho que alguien llama a la puerta y voy a ver quién es.-hola Violeta -dice Luz en cuanto abro la puerta. Luce igual de perfecta que siempre, salvo que, esta vez, su cabello está recogido, y tiene un peinado perfecto, woah. Esto no es normal.-¡Ho! Hola Luz, ¿Qué se te ofrece? -le pregunto sin ganas de hablar con ella.-pues solo…vine para ver si me podían confirmar que van a venir esta noche -me dice Luz asomándose al interior de mi casa.-pues… si, le comente a mamá lo que dijiste y dijo que si, así que no te preocupes, ahí estaremos.-le digo con cierta desesperación en mi voz.-oye, ¿y tu amigo va a venir? -me pregunta Luz con emoción en la voz, abriendo coquetamente los ojos.-¿Quién? ¿Darío? -le pregunto yo con desinterés -no sé, yo creo que sí, pero no lo sé, oye Luz no es por ser grosera ni nada, pero tengo cosillas que hacer arriba, te importaría si…-no, para nada, entiendo, ya me voy, bueno nos vemos esta noche -me dice resignada, me da un beso en la mejilla que no me espero, se da media vuelta y comienza a caminar. Cierro la puerta sin responderle y comienzo a caminar de nuevo hacia

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arriba, de pronto escucho la voz de mi abuela que me llama.-¿qué pasa abuela? -le pregunto yo con desesperación de subir a mi habitación.-¿Quién llamo a la puerta? -me pregunta mi abuela, saliendo de la cocina y limpiándose la boca con una servilleta.-Umm, fue Luz abuela, quería que le confirmáramos que vamos a ir a su fiesta de jardín esta noche.-¿fiesta de jardín? ¿Los Wilson van a hacer una fiesta de jardín?- me pregunta extrañada y luego se dirige a mamá- Ho, los Wilson hacen las mejores fiestas de jardín…-abuela, ¿me puedo ir?- le pregunto.-si, ve hija, gracias por la información -me dice mi abuela y yo me doy media vuelta, rectifico vuelvo a voltear y le digo a mamá.-mamá, casi lo olvido, Umm, Valentina y Darío van a venir- le aviso a mamá.-¿Darío? ¿Qué Darío?- pregunta papa en cuanto escucha el nombre masculino.-¡¡¡huuuu!!!- dice Lluvia con el conocido tono de cuando alguien se enamora.-papa, Darío es solo un amigo, descuida -le digo a papá tranquilizándolo.-más te vale jovencita -me advierte papa y yo no le hago mucho caso.

Capítulo 6.- ¿Tengo novio?

02:30 PM

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Mi computadora emite el conocido sonido “pi.” Pero esta vez me dice que alguien acaba de conectarse, reviso y es Gael, decido saludarlo.-hola Gael -comienzo a escribir-hola violeta, ¿Cómo te va? ¿Has hecho amigos?- me escribe después de tres minutos.-pues sí, he hecho varios, y tú, ¿Cómo te ha ido? ¿Con quién has hablado?- lo cuestiono-pues… yo, he estado hablando últimamente con Nuria, sabes…es una buena chica, me agrada mucho -me escribe pausadamente.-Ho, que bien, y ¿Qué te dice ella? - le escribo yo algo nerviosa de la respuesta que pueda obtener.-pues nada, es solo una chica Violeta, no te pongas celosa por favor, no me arruines la noche -me escribe.-¿perdón? ¡Disculpa pero no es mi culpa dudar de una chica que siempre me ha tenido envidia y que ahora se puede acercar libremente a mi novio porque yo no estoy ahí para impedirlo! -le escribo de un jalón. De pronto aparecen unas letras que dicen “Gael se ha desconectado”, y casi de inmediato suena mi celular.-diga- respondo yo un poco alterada.-¿Qué pasa Violeta? ¿Por qué te pones así? -escucho la voz de Gael nerviosa al otro lado del teléfono.-lo siento Gael, pero no puedo soportar la idea de…, lo siento, estos días he estado un poco… confundida- le digo y después en mi cabeza me arrepiento de haberle dicho eso. Ho no.-¿confundida? Violeta ¿en qué sentido?- me dice Gael con un tono de alarma en su voz.-pues… no sé, estoy…comenzando a dudar lo que en verdad siento -le digo yo mientras me recojo el cabello que me cae en la frente, me tiro en la cama, mientras espero su respuesta. Inhala aire y después de lo que me parece una eternidad, lo exhala.-bien, que bueno que me lo dices- me responde Gael con cierta molestia en su voz, se escucha rasposa y tosca, - porque ¿sabes qué?, creo que comienzo a

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sentir algo más que una amistad por Nuria, y bueno, digo… si tu estas comenzando a dudar sobre lo que sientes por mí, creo que ya todo está dicho, ¿no crees?-no Gael, no estoy diciendo que… - comienzo a decir pero me interrumpe.-¿sabes que Violeta?, creo que no hay más que hablar, será mejor que aquí dejemos las cosas y sigamos cada quien su camino- me dice molesto y cortante.-Gael, ¿estas… terminando conmigo?- le pregunto molesta.-¿no te parece demasiado obvio?- me interroga Gael igual de molesto.-¡¡¡bien!!! Entonces terminamos- le digo molesta y termino la llamada, apago el celular y cierro mi mano alrededor de el.Bien, ¿Qué pasa con Gael? Yo lo amo, pero, no me gusta su actitud, me hace pensar que le da igual estar conmigo o sin mí. Me pierdo en mis pensamientos, cierro mis ojos y me quedo profundamente dormida.

Escucho entre sueños que alguien llama la puerta principal, abro la puerta de mi habitación y me asomo por el barandal, veo que Lluvia abre la puerta y veo la cara de Darío que le sonríe a mi hermanita.-hola, tú debes ser Darío- le dice mi hermanita.-Wow, que bien informada estas -le responde Darío sonriendo- pero ¿Quién eres tú? -yo soy Lluvia, la hermana pequeña de…-la interrumpo antes de que meta la pata.-es mi hermana pequeña- le digo a Darío mientras bajo las escaleras- pasa Darío, siéntate, ¿quieres algo de tomar?-Umm, no gracias estoy bien- dice el mientras pasa y me saluda con un beso en la mejilla. En eso entran en la escena mis padres y mis abuelos- ¡hola!, tú debes ser Valentina- bromea mi papá con Darío.

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- no señor, yo soy Darío – dice Darío en cuanto ve entrar a mi papá.-bien, ¿nos vamos? - me pregunta papá.-Umm, no papá, aún no estoy arreglada y tenemos que esperar a Valentina, les importaría si llegamos después- le respondo a papá.-claro que no -interfiere mamá mientras toma a Lluvia de la mano y comienza a caminar hacia fuera- solo, no tarden mucho ¿de acuerdo?-bien- le digo a mamá mientras veo a todos salir de la casa, el último es papá que se le acerca a Darío desconfiado.-cuidadito con esas manos- le dice papá a Darío al oído.-claro señor, descuide- dice Darío nervioso.En cuanto salen todos de la casa y cierran la puerta suelto una bocanada de aire que sostenía sin darme cuente.-bien, nos dejaron solos, bueno, con el perro- comienza a decir Darío.-no, al perro se lo llevaron también- le bromeo yo- vamos a mi habitación, tengo que arreglarme.Subimos las escaleras y yo entro a la habitación, Darío se detiene en el umbral de la puerta, desconfiando.-pasa, siéntate, con confianza- le insto, el se sienta en la cama, y yo busco mi ropa, el solo me observa.-¿Qué te pasa? Te noto… preocupada- me pregunta Darío mientras me ve a los ojos.-nada, es solo que… nada- le digo yo intentando esconder lo evidente.-dime… algo te pasa, lo veo en tus ojos- me dice Darío.-bueno, pues hoy… discutí con Gael y bueno, se podría decir que terminamos la relación -le digo soltando un suspiro al terminar la oración.- lo siento por ti, pero ve el lado bueno, ese perdedor no te convenía- me dice Darío mientras yo siento que se acerca a mi cada vez más. De pronto escuchamos que alguien llama a la puerta.

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-¿hola? ¿Hay alguien en casa? - reconocemos la voz de Valentina, salgo de la habitación con un ojo maquillado y el otro no, pero Darío me detiene y baja las escaleras.-Lisa Valentina Milán Valdivia te voy a asesinar- dice Darío mientras abre la puerta.-¿Qué?- escucho el grito ahogado de Valentina y Darío la toma de la cintura, pone su cabeza debajo de su brazo y la somete, termino de maquillar mi ojo restante y bajo las escaleras para presenciar ese brutal ataque de juego, escucho las risas de Darío y de Valentina, ella le golpea la pierna y el suelta un quejido casi inaudible, en su defensa toma su puño y comienza a frotarlo contra la cabeza de Valentina, él se ríe y ella forcejea, logra soltarse y el la abraza y le da un pequeño beso en la cabeza, cuando logra estabilizarse de nuevo me saluda.-Ey Violeta, ¿esta lista?- me dice Valentina.-claro, vamos, nos están esperando -digo yo insegura.-Umm Violeta, si no quieres, no vamos, nos quedamos acá, vemos unas películas y…- interrumpo a Darío.-no, estoy bien, descuida, vamos.- les digo mientras salgo de la casa, pero Darío me toma de la muñeca y me jala hacia él.-escucha Violeta, la conversación aún no ha terminado, más tarde hablaremos de aquello ¿de acuerdo? -me dice Darío en voz baja para que Valentina no escuche.-bien- le digo yo mientras trato de zafarme.

Al llegar pareciera que todos notan nuestra presencia, en especial Luz.-¡hola!, creí que no iban a venir -dice Luz entusiasmada, ella esta vestida con un vestido escotado por arriba y que le llega un poco más arriba de las rodillas, es un femenino vestido verde con flores rojas, unas sandalias de tacón rojas y un peinado perfecto de dos chongos a los dos lados de la cabeza, con su conocido flequillo tapándole la

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mitad de la frente. Los ojos delineados estilo “Pin-up” y los labios de rojo carmesí. Al momento de verla me siento demasiado desaliñada pues yo solo llevo mis Jeans negros y una camisa negra con mis tenis converse.-Wow, Luz, luces tan… femenina…- le digo a Luz al ver su aspecto.-¡Ho! Gracias, tu luces tan… tan… alternativa - me dice Luz mientras me ve de arriba abajo y luego se dirige a Darío - hola Darío, luces muy bien.-gracias Luz -le dice Darío con desconfianza, después me toma de la cintura y me empuja hacia enfrente con el fin de alejarnos de ella.-hola, buena fiesta- le dice Valentina a Luz mientras camina para alcanzarnos.-gracias -le alcanza a responder Luz. Vemos a mi familia y nos dirigimos hacia donde están sentados, pero antes de llegar se nos pone enfrente una señora que no conozco, la señora es rubia y delgada, con una sonrisa en la cara, notablemente fingida, ella esta vestida tan primaveral como Luz, un vestido rosa que le llega debajo de las rodillas y una mascada blanca alrededor del cuello. Su cabello perfectamente recogido en un sofisticado peinado pegado al cráneo, pestañas muy largas, y labios muy rojos y carnosos.-¡hola!, tú debes ser Violeta ¿verdad?, la hija de Julieta- me dice la señora.-sí, soy yo, mucho gusto – le respondo yo mientras siento que Darío me suelta la cintura.-bueno, yo soy Rose, la mamá de Luz, y bueno, por allá esta la mesa de jóvenes, seguro mueres por conocer a todos los del vecindario ¿verdad? - me dice mientras me toma de los hombros y me da la vuelta empujándome hacia delante. Siento en mis hombros sus manos frías, y sus dedos delgados.- bueno ya que estas aquí, los dejo, tengo muchos invitados por recibir, ¡diviértanse!Me siento en una silla cercana y Darío se sienta junto a mí, Valentina se sienta junto a mí del otro lado de modo que yo quedo en medio de los dos, recargo mi

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mano en la mesa y Darío la toma y entrelaza sus dedos con los míos, yo trato de soltarme pero su mano no me lo permite.- haber, haber, ¿Qué pasa aquí? ¿Me estoy perdiendo de algo?- nos pregunta Valentina con sus verdes ojos saltones.-no, de nada ¿Por qué lo preguntas?- le digo yo mientras me suelto de la mano de Darío casi bruscamente.-pues…- comienza a decir pero Luz la interrumpe, pues llega donde nosotros y se sienta junto a Darío, recarga su mentón en su mano y lo ve con sus ojos brillantes.-hola chicos, ¿la están pasando bien?- nos pregunta Luz con fingido interés.-sí, esto es genial- responde Darío con sarcasmo y luego se voltea dándole la espalda.-bueno… dime Darío, ¿tienes novia?- Luz le pregunta a Darío mientras le toca el brazo que tiene recargado en la mesa.-Umm, si, si tengo, ¿por qué?- dice Darío mientras voltea a verla. Frunce el cejo y hace una mueca.-¿la tienes?- le pregunto al oído para que Luz no escuche.-sí, si tengo- dice Darío volteándome a ver a mí y después volteando a ver a Luz.-¡Ho!, qué suerte, y… ¿cómo se llama ella?- le pregunta Luz fingiendo desinterés.Isabella, y me odia.-pues… es… Violeta, Violeta es mi novia- miente Darío. Valentina y yo habíamos tomado un sorbo de soda, pero al escuchar tremenda mentira, las dos escupimos nuestra soda y todos voltean a vernos.-Darío, ¿me puedes… repetir el nombre de tu… novia?- le dice Luz con inseguridad.-ya te lo dije, mi novia es Violeta- le repite la mentira, pero al parecer Luz no se da cuenta de que lo es.-pero justo esta mañana ustedes dijeron que eran solo amigos ¿lo olvidas? – le responde Luz tratando de excusarse, se aplasta el cabello con las manos,

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como si quisiera acomodarlo, pero está más que perfecto, así que no cambia mucho el aspecto.-bueno si… esta mañana, pero ahora ya somos novios.- le sigue mintiendo Darío. Lo tomo de la muñeca, me levanto de la mesa y lo obligo a levantarse y a que me siga, lo llevo fuera de la fiesta.-¡¡¿¿estás loco??!! ¿Cómo se te ocurre decirle tal barbaridad a Luz?- le comienzo a reclamar, tomo mi cabeza entre mis manos, y siento como la sangre inunda mi cara.-tranquila, es que, no me gusto que todo el tiempo me esté buscando esa niña, te iba a pedir el favor de que fingieras ser mi novia, solo por hoy, pero en eso llego Valentina y bueno… - me explica Darío y yo cada vez me voy tranquilizando, es increíble lo rápido que me tranquilizo cuando Darío está conmigo. De pronto escuchamos los pasos de alguien aproximarse.-¿¿Qué fue eso??- nos pregunta Valentina tan pronto nos ve.-este… -comienzo a titubear.-pasa que Violeta y yo somos novios solo por hoy, le pedí el favor, para que Luz deje de molestarme, solo es eso- le explica Darío a Valentina.-y ¿Por qué nunca me lo comentaste? -le dice Valentina a Darío mientras caminan hacia la fiesta.-lo olvide, lo siento.- dice Darío caminando, de pronto se detiene y me voltea a ver- será mejor que tú y yo entremos tomados de la mano, ¿no crees?-¡¿estás loco?! Mi padre está ahí, y si nos ve juntos seguro te dará una paliza- le digo yo con el fin de que no me meta en su drama.-¿crees?- me pregunta Darío considerando lo que le acabo de decir.-sí, pero… está bien, solo por hoy- le digo y tomo su mano, entrelazo sus dedos con los míos y comienzo a caminar. Siento la calidez de su mano contra la mía y mi corazón se acelera. Al dar algunos pasos nos encontramos con Luz.-así que… si es cierto, si son novios- nos dice luz a la vez que mira nuestras manos.

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-sí, si lo somos -le digo yo dudando- ¿Por qué?-no no no, por nada- nos dice fingiendo desinterés y se va.-de verdad que la traes loca- le digo yo a Darío con sarcasmo mientras comienzo a caminar hacia la mesa donde estábamos sentados.-¿Qué quieres?, soy irresistible- dice Darío con el mismo tono de sarcasmo.-¡claro!, mira, hasta a mí me tienes loca- dice Valentina burlándose.

Nos sentamos y nos llevan una hamburguesa a cada uno, yo tomo la mía, la miro con desconfianza y después volteo a ver a Valentina y a Darío que ya comenzaron a devorar las suyas.- ¿Cómo puedo confiar que no tienen nada?- le pregunto a Darío.-Umm, no, no puedes confiar, te la tienes que comer con ese riesgo, si mañana amaneces muerta, ya sabremos que algo tenia- me dice Darío con sarcasmo.-sí, y si amaneces muerta, tendrás un novio que llore en tu entierro- dice con burla Valentina y voltea a ver a Darío.-Wow, que suerte tengo- digo con sarcasmo. En eso veo a mi madre aproximarse hacia mí.-Violeta, ¿qué ocurrió aquí?- me pregunta mamá agachándose para hablarme lo más quedo posible y que nadie escuche.-¿Qué paso de que mamá?- le pregunto fingiendo que no se nada.-bueno, Luz estaba un poco enojada, y por la forma en que te mira, supongo que es tu culpa- me dice mi mamá mientras voltea a ver a Luz. La veo y tiene los brazos cruzados en su pecho, y sus ojos están ardiendo en furia.-Umm si bueno, es una historia que después te contare mamá, solo… tiene que ver con Darío- le digo y señalo a Darío.

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-no no no, no me quieras echar a mí la culpa, yo soy inocente- dice Darío fingiendo que no sabe nada, aunque se le escapa la risita delatora.-bien, pero me cuentan después ¿vale?- dice mamá mientras se reincorpora para volver a su mesa.-vale- decimos en coro Darío y yo.

Frente a mi esta un chico moreno y un poco musculoso, con el cabello a la altura del pecho, rizado, ojos grandes y oscuros, y labios carnosos, sexis. Me ve con cierta… intriga, yo siento el peso de su mirada y al final no aguanto y aprovecho que Darío se levanta de la mesa para hablarle y preguntarle el porqué de su mirada hacia mí.-¡oye!, ¿tengo algo en el cabello?- le digo un poco consternada.-¿me hablas a mí?- me pregunta mientras apunta su dedo índice hacia su pecho. Su voz es melodiosa, suave, pero firme, dulce, pero varonil, es una voz, perfecta, algo difícil de describir.-sí, te hablo a ti, ¿Por qué me miras tanto?- le pregunto un poco molesta.-¡Ho!, lo siento si te moleste, es que luces tan… tan… diferente- me dice el mientras voltea la vista hacia abajo. Al hacerlo, mechones de su cabello caen hacia enfrente.- ¿Cómo te llamas?- le pregunto ahora con curiosidad.-me llamo Dante, ¿tú eres?-Violeta, mucho gusto- le respondo yo cortante.-el gusto es mío Violeta, Lindo nombre por cierto, y uno de mis colores favoritos, significa modestia, y es más que obvio que le haces honor a tu nombre, y dime ¿eres nueva en la cuidad?- me responde el con una amabilidad irresistible.-sí, bueno… se podría decir que si- le respondo yo mientras me inclino sobre la mesa para verlo mejor, me parece muy cautivador, incluso un poco atractivo. Su cabello rizado, le enmarca la cara perfectamente, y le da un aire sofisticado y misterioso.

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-bueno, ahora soy yo el que te pregunta a ti si tengo algo en el cabello- me dice ocultando una hermosa sonrisa.-Umm, no, no tienes nada en el cabello, pero si una hermosa sonrisa- me sorprendo de lo que acabo de decir y me callo de golpe, me reincorporo en mi asiento de nuevo pues veo que Darío viene hacia mí.-ya está, bueno Violeta, mi padre acaba de llamarme y será mejor que me valla, es algo tarde y mañana tengo que trabajar- me dice Darío mientras recoge su chaqueta que había puesto en el respaldo de su silla.-bien, y Valentina, ¿Dónde está?- le digo mientras miro a todos lados.-Umm fue al tocador, pero vendrá conmigo, ¿te molesta?- me pregunta mientras yo me levanto de la silla.-en lo absoluto.-bien, y gracias por el favor que me hiciste- me dice y voltea hacia donde esta Luz que nos dedica una mirada fulminante- será mejor que me despida de ti con un beso ¿no crees?-ni se te ocurra- le digo mientras veo por el rabillo de mi ojo a Dante que está sentado mirándome, pero fingiendo que no lo hace. Vemos venir a Valentina, que se detiene donde mis padres están sentados y se despide de ellos.-bien, ¿nos vamos?- le dice a Darío.-sí, vámonos, adiós Violeta, gracias de nuevo- me dice Darío, me toma de las manos y me da un beso junto a la orilla de mi labio, me suelta las manos, toma mi cintura y me ve a los ojos, después se aleja y agacha la cabeza.-bien, nos vemos Violeta- me dice Valentina, me da un abrazo y aprovecha para decirme algo al oído- lo traes loco.Veo como se alejan caminando y luego Valentina empuja a Darío jugando y Darío la atrae hacia él y la abraza. Yo me siento donde estaba antes y pongo mi cabeza entre mis brazos, de pronto una voz interrumpe mis pensamientos.-¿tu novio?- me pregunta Dante. Esa voz.

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-Umm, no puedo responder eso ahora, porque… no estoy segura de cuál es la respuesta correcta a esa pregunta- le pregunto a Dante viéndolo a los ojos.-lastima… -me dice Dante y después levanta su vaso y le da un sorbo al líquido que contiene. Lo veo a los ojos y dudo para preguntarle lo que pasa por mi mente.-¿lastima? ¿Por qué?- le pregunto.- bueno, pues… si no estás segura de la respuesta es porque no estas segura de lo que realmente sientes por él, y eso daña tu corazón, pero no solo a tu corazón, sino también a el- me dice mientras se quita el cabello rizado de la cara y me dedica una sonrisa.-¿Quién eres?- le pregunto sin darme cuenta.-Dante, mucho gusto vivo en la casa de enfrente, tengo 17 años, y me gusta el visual-kei, el metal pesado y el rock, amo la pizza y el sushi, me encanta viajar en moto y todo lo que tenga que ver con violines- me dice con sarcasmo.-¡¿de verdad?! Yo amo el visual-kei y los violines, me encantan- le digo algo sorprendida.-sí, desde hace un rato me di cuenta de que tú eras de mi bando- me dice Dante bromeando.-genial, alguien que no cree que soy un fenómeno- le digo con sarcasmo.

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Capítulo 7.- Celos.

9:30 AM.Hoy es domingo, amo los domingos desde que vivía en Pontiac, me levanto de la cama y voy a la cocina a tomar un vaso de leche, aun todos están dormidos, la noche anterior todos se fueron a la cama muy noche, así que, soy la única despierta, claro y Kafka que corre libre en el interior de mi casa sin ninguna preocupación. Alguien llama a la puerta, que raro, a tan temprana hora de la mañana y en domingo, no tengo idea de quien podría ser, me acerco y abro, en la puerta veo a un chico de la altura de Darío, pero moreno fornido y con el cabello largo y rizado, ojos encantadores, y unos labios tremendamente sexis formando una irresistible sonrisa.-hola Violeta, le pregunte a Luz donde vivías y me dio tu dirección- me saluda Dante.-¡Ho!, hola Dante, Umm ¿quieres pasar?- le digo mientras le hago la seña.-Umm, bueno, de hecho yo solo venía a invitarte, mis amigos y yo haremos un picnic y no sé si quieras venir, todos son igual de fenómenos que tú y yo así que creí…- no termina de decirlo y me dedica una sonrisa, no me puedo resistir.-por favor no hagas eso- le digo.

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-¿hacer que?- me pregunta y su sonrisa se desvanece.-sonreírme así, con esa sonrisa no te puedo decir que no- le digo y el suelta una carcajada.-entonces tendré que sonreírte más si quiero que aceptes venir conmigo- me dice y sonríe. ¡Demonios!-¿contigo?- le pregunto consternada.-bueno… no conmigo conmigo, solo, conmigo pero no conmigo… es difícil de explicar, pero… ¿vienes?- me sonríe de nuevo.-Umm, claro, ¿Por qué no?- le digo.-sí, bueno, más tarde vengo por ti, cuando estés lista- mira mi ropa y entonces yo me doy cuenta de que estoy en pijama.-hou, si claro, yo te espero a las dos, ¿está bien a las dos?- le pregunto mientras me pongo detrás de la puerta.-claro fenómeno, a las dos, paso por ti- me dice Dante en broma mientras me regala otra de esas hermosas sonrisas. Veo como se da la vuelta y se aleja de mi casa, yo me sorprendo suspirando. Cierro la puerta y comienzo a caminar hacia las escaleras, cuando vuelven a tocar la puerta, me dirijo hacia ella y la abro.-Umm, tu perro se salió y comenzó a seguirme - me dice Dante con Kafka agarrada del collar.-es… ella- le digo sin poder dejar de ver sus ojos.-Ho, lo siento, bueno… pues, paso por ti más tarde- me dice y me entrega a Kafka.-claro, te espero- le digo sin dejar de ver esos ojos tan… cautivadores. Él me sonríe y se da la vuelta, esta vez se tapa la cabeza con el gorro de su sudadera y mete las manos en los bolsillos, cierro la puerta y vuelvo a suspirar.-lo hiciste a propósito ¿verdad?- le digo a Kafka y ella me mira y comienza a darme besitos. Subo las escaleras mientras comienzo a imaginarme que atuendo puede ser el perfecto para vestir esta tarde. Suena mi celular y lo contesto.-¿si? ¿Diga?- digo yo aun sin saber quién está al otro lado.

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-Violeta, perdóname, no me gusta que discutamos pero… entiéndeme, estamos lejos y así he perdido la seguridad- me ruega Gael.-mira Gael, lo dicho, dicho esta -comienzo a decirle muy calmadamente- la verdad es que yo te amo, y mucho, pero… así, sería imposible continuar, porque bueno… hablo de que, ya los dos perdimos la confianza y yo no me sentiría muy cómoda hablando contigo, si sé que te atrae Nuria, así que se feliz, es lo único que te deseo.-no Violeta, por favor, no me hagas esto -me ruega Gael.-lo siento Gael, pero así es como me siento, y no pienso esconder más mis sentimientos, lo siento- le digo y después termino la llamada. Es muy doloroso tan solo pensar en no estar con Gael, pero, desde antes sabía que este viaje me atraería cambios, tanto buenos como malos… pero cambios.-hija, ¿quién toco la puerta?- me pregunta mi mamá que acaba de entrar a mi habitación muy adormilada.-Ho, era Dante mamá, me invito a un picnic hoy con unos amigos, puedo ir ¿verdad?- le pregunto poniendo mis ojos tiernos para que me diga que sí.-¿Dónde?- me pregunta mamá tallándose los ojos. Entonces recuerdo que no me dijo donde era, así que le miento.-Umm, en el lago mamá, bueno, es un picnic así que el lago es perfecto y lo van a hacer ahí ¿puedo?- le digo y parece que me cree.-Umm, y ¿a qué hora va a venir por ti?- dice a mis espaldas.-a las dos mamá - le digo mientras hago el gesto de mirar mi reloj.-bien, entonces ve, pero te advierto, tienes para llegar hasta las diez de la noche Violeta no mas ¿OK?- dice mientras sale de mi habitación.-OK madre, gracias- le digo y cierro la puerta de mi habitación, aunque Kafka logra entrar un segundo antes de que cierre, la miro con ternura, acaricio su cabeza un momento y me levanto. – muy bien Kafka,

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si quieres estar aquí tienes que ayudarme a elegir que ponerme.

01:50 PMListo. Estoy lista y en cualquier momento puede llegar Dante, escucho que tocan la puerta y me asomo, mi papá abre.-hola señor, muy buenas tardes, Umm, vengo a buscar a Violeta, ¿se encuentra?- dice Dante muy educadamente.-Umm, bueno, llegas diez minutos antes, bien vestido, ¿no traes de casualidad flores escondidas?- usa sarcasmo, Ash, ojala la tierra me tragase.-no señor, pero si quiere…- comienza a decir Dante pero mi papá lo interrumpe.-no no, está muy bien así, ¿Qué edad tienes?- abre sus ojos en signo de interrogación y de papá celoso, ¿esto podría ser más vergonzoso?- diecisiete años señor- le dice Dante igual de respetuoso que en un principio.-¡diecisiete he!- repite mi papá tocándose la barbilla en signo de aprobación y después me grita- ¡Violeta! Te buscan en la puerta.-gracias señor- dice Dante haciendo una especie de reverencia mal hecha.-cuídala muy bien ¿OK?- le amenaza mi progenitor y es en ese vergonzoso momento cuando yo decido bajar las escaleras para encontrarme con Dante.-¡hola! Llegas temprano- lo saludo con un beso en la mejilla y él me sonríe. Maldita encantadora sonrisa.-sí, es que… bueno, ¿estas lista?- me pregunta.-Umm si, vámonos- le digo y cierro a mis espaldas la puerta, me trato de poner la mochila a los hombros, pero Dante me la quita y se la cuelga el.-bueno fenomenito…-¡Ho!, ¿ese será mi nuevo apodo?- le digo entre risas.-sí, pero… tu “novio” ¿no se enoja si ve que sales conmigo?- me dice y yo siento un hueco enorme en el pecho que me recuerda a Darío, pero trato de no

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mostrarlo. Así que acudo al único que puede ayudarme en ese momento; el sarcasmo.-¿mi novio? Y tú, ¿no tienes novia?- le pregunto tratando de contener la risita.-¿yo?, pues espero tener una pronto- dice y luego me voltea a ver a los ojos y sonríe- pero ¿Qué pasa con tu novio? ¿Por qué dices que no estas segura de lo que sientes por él?-bueno… es una larga historia- le digo y volteo al suelo- pero, no quiero hablar de ese tema por ahora.Llegamos a una especie de camino, donde esta estacionada una pick up, con chicos arriba, platicando tranquilamente, un chico moreno y de cabello largo levanta la mano y grita el nombre de Dante, él le responde solo con un movimiento de la mano, y me voltea a ver.-ellos son mis amigos… los otros fenómenos- me dice con sarcasmo- te caerán muy bien ya lo veras. Nos acercamos a donde ellos están, y entonces el mismo chico que saludo a Dante a lo lejos, que parece ser el líder del grupo nos saluda de nuevo.- hola Lot, ella es Violeta- me presenta Dante y por el rabillo de mi ojo veo que le guiña un ojo, y lo confirmo por la reacción de Lot de subir sus cejas y decir ¡Ho!-¡Ho!, hola Violeta, yo soy Lot y ellos son nuestros amigos, Ian, Luc, Anne, Avril, Samantha, Susan y Ryan- dice mientras señala a uno por uno respecto sus nombres.-hola chicos, mucho gusto- les digo a todos haciendo el gesto de saludo con la mano derecha.- el gusto es nuestro- me dice el chico al que Lot señalo cuando dijo Ian.-así que… ¿piensan subir o quedarse ahí parados?- nos apresura Lot. Dante me da la mano en señal de que quiere ayudarme a subir a la pick up, y yo acepto su ayuda, subo y Samantha me ofrece un banco para sentarme, después sube Dante y se sienta, pero hace gestos de incomodidad así que me pregunta;-oye Violeta, ¿te molesta si me siento ahí?- señala un espacio vacío delante de mí.

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-claro que no, siéntate- le digo y él se arrima a mis pies y se sienta de espaldas a mí, yo me siento incomoda por lo que abro un poco las piernas y él se recarga en el banco de modo que recarga cada uno de sus brazos, en cada una de mis piernas.-y bien, ¿Cómo se conocieron?- nos pregunta Susan, y yo trato de responderle pero en eso arrancan la pick up y el estremecedor sonido no me permite decir palabra, cuando me doy cuenta Dante está diciendo toda la historia.-bueno, ¿recuerdan que les dije que anoche tenía una aburrida fiesta de jardín a la que mis padres me obligarían a ir? -todos asienten y Avril suelta una risita- bueno… pues, ahí nos conocimos, resulta que la casa de Violeta está casi enfrente de mi casa, así que somos vecinos.-entonces no fue tan aburrida- dice Avril, pero yo noto una nota de sarcasmo en su voz pues todos giran sus ojos, y Dante agacha la cabeza, después la levanta de tal modo que me ve a los ojos y me sonríe.-¿pero cómo se hablaron?- insiste Anne.-bueno pues… yo notaba que él me miraba mucho y le pregunte la razón por la que hacia eso, y así fue como entablamos una plática- le explicó a Anne y Avril suelta la misma risa sarcástica.- siempre hace eso- dice Avril, más para ella, usando el mismo sarcasmo, pero todos la ignoran.-¿Qué tiene en mi contra?- le pregunto a Dante en el oído para que nadie más escuche.-¿Quién? ¿Avril?- me pregunta al oído- nada, así es con los nuevos.-Ho, OK- le digo pero no muy convencida, es entonces cuando la pick up se detiene y todos comienzan a levantarse, Dante que está sentado a mis pies estira las piernas en forma de juego para que a todos se les haga más difícil bajar, todos lo golpean jugando y el encoge de nuevo las piernas, se levanta y me da la mano para que yo me levante, él se baja de la pick up y cuando esta abajo y yo me

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dispongo a hacer lo mismo que él, pero me toma de la cintura y simplemente me baja.-no… vuelvas a hacer eso- le digo jugando aun tambaleando- ¿Dónde estamos?-¿Qué pasa fenomenito? ¿Tienes miedo de que te secuestre?- me dice jugando.-sí, mis órganos son sagrados- le digo con sarcasmo mientras me froto el estómago y el vientre. Comenzamos a caminar. Bajamos un camino muy resbaloso, pero tan solo ese tramo y veo un rio muy bonito y un sauce llorón, toda la tierra es plana, solo se escucha el murmullo del rio y a los pájaros cantar. El viento sopla suavemente y hace que nuestro cabello vuele. Me hipnotiza el movimiento de su cabello, tanto que de pronto no puedo apartar la vista de él. Lot, Ian, Luc y Ryan llaman a Dante para que les ayude a poner la mesa de picnic y todo lo demás, las chicas me llaman a mí para que les ayude a bajar la comida de la pick up.-¿vienes Avril?- le pregunta Anne.-no, yo les ayudo a los chicos, vallan ustedes- responde Avril.-bueno, vamos Violeta- responde Anne y veo por el rabillo del ojo que Avril se estremece al escuchar mi nombre.-Umm, ¿qué tiene en mi contra Avril?- le pregunto a Samantha, y todas sueltan pequeñas risitas.- bueno, es que, ella y Dante acaban de terminar hace como… dos semanas, y cuando Dante nos comentó que una chica le había gustado y que la traería al picnic, le dio un ataque de celos- me explica Samantha, conteniendo risitas, y comunicándose con un lenguaje no verbal.-te tiene celos porque eres la nueva enamorada de Dante, es todo- me dice Susan, entrecerrando los ojos con el fin de tranquilizarme. Buen trabajo.-sí, ella aun quiere a Dante, pero el… la tiene más que olvidada- argumenta Anne, mientras jala una canasta con mucho trabajo.-y… ¿por qué terminaron ellos dos?- pregunto yo, sin saber quién me quiera responder.

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-bueno… pues, a ella le comenzó a gustar Ian y ella arriesgo ese sentimiento, pero Ian no la quería, así que…- no termina de decir la frase pues es demasiado obvia.-Ho, pues que lastima- susurro yo.-pero a ti te gusta Dante ¿no?- me pregunta Anne.-pues… tiene una sonrisa hermosa pero…- digo yo y Susan me interrumpe.-Ho Ho, ¿pero qué?-pero… no estoy segura de lo que siento, por el momento -digo yo mientras tomo una canasta de mimbre que parece tener sándwiches- creo… que me comienza a cautivar.-pues… a Dante le gustas así que, tú eres la difícil- dice Samantha y todas comienzan a reír. A lo lejos escuchamos que Avril se acerca y todas comienzan a hablar de cosas diferentes.-espero que los populares no vengan hoy- le dice Susan a Anne.-¿los populares?- pregunto yo sin entender la etiqueta. Dios, todo mundo habla en clave. -Isabella y sus súbditos- dice Anne. Claro, Isabella es la chica más popular del instituto. Ahora me siento la más estúpida del pueblo. Comienzo a morder el interior de mi mejilla y miro hacia el piso. Levanto la mirada, y formulo una pregunta en mi cabeza.-entonces… ¿ustedes la conocen?- pregunto.-claro, vamos al mismo instituto- responde de inmediato Samantha.-Ho, nunca las había visto -les respondo entrecerrando los ojos para recordar.-nosotras sí, pero nunca nos atrevimos a acercarnos, tú te identificaste con Valentina y Darío ¿verdad?- dice Susan mientras caminamos de regreso al rio.-Umm si, ¿son amigos?-bueno… lo éramos, hasta que Darío se volvió popular por salir con Isabella y bueno, Valentina no dejo de hablarle así que ella también se volvió un poco popular, nosotras creíamos que tu harías lo

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mismo, por eso nunca nos acercamos a ti- me explica Susan.-Ho, no, bueno… nunca he sido popular y no quiero serlo- le digo y escuchamos un auto pararse junto a la pick up, las otras voltean pero yo no, seguimos caminando.-bien, hablando de la reina de roma- dice Samantha con sarcasmo, las otras sueltan sus risitas y corren para colocar las cosas que llevan en los brazos en la mesa, Dante al verme con la canasta de mimbre corre a ayudarme y veo que Avril gira los ojos.-yo puedo sola- me quejo.-¿para que arriesgar?, digo, no a ti, a los sándwiches- me dice bromeando, toma la canasta con una mano y con la otra toma mi mano y comenzamos a caminar, me siento rara, pero… a gusto. Sus dedos se entrelazan con los míos, y encajan perfectamente. Su tacto me causa pequeñas descargas eléctricas en el pecho y el vientre. Se siente bien.-Ey Lot, los populares acaba de llegar- le dice Samantha a Lot.-bien, no nos molestaran Sam, tranquila- le responde y la jala hacia el por la cintura y le besa la frente y la punta de la nariz.-¿ellos son…?- le pregunto a Dante y me interrumpe.-sí, son pareja- me dice y rodea mi cintura con su brazo solo por un momento y después me suelta, escuchamos pasos a nuestra espalda y alguien dice mi nombre.-¿Violeta? ¿Qué estás haciendo aquí?- exclama Darío sorprendido.¿Quién eres? ¿Mi papá?-Umm eso mismo me pregunto yo- le digo a la vez que volteo y veo que toma de la mano a Isabella, enarco una ceja- yo creí que…-pues ya no, ya se solucionó- me responde Darío molesto al adivinar qué era lo que le iba a preguntar.-bien, pues entonces, disfruta tu tarde- le digo molesta por el modo en que me responde.

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-uy, nos calló el novio- dice Dante en broma, y yo lo empujo pero no logro que tambalee siquiera, al contrario él pone un brazo en mis hombros y me da un besito en la cabeza. Darío ve ese pequeño intercambio de cariño y veo que se pone rojo, y levemente, se le eriza el vello de los brazos. Dante se da cuenta de ello también por lo que me suelta y me susurra entre risas.-celos.-¡cállate!- protesto. El mete su mano un segundo en el bolsillo de mi sudadera y la saca, yo meto la mano y siento un pedazo de tela que no tenía antes, lo saco y descubro que es una muñequera de mi grupo de música favorito.-¡¡¿¿Cómo supiste??!!- exclamo sorprendida.-solo lo supe- me responde y estira sus brazos en señal de que quiere que lo abrase, yo sin dudarlo me arrojo en sus brazos y me quedo ahí cinco segundos, disfrutando esa seguridad que me brinda estar cerca de Dante, sintiendo la calidez de su cuerpo pegado al mío, y escuchando los latidos de su corazón, rápidos, firmes, seguros.-¿te gusta?- me pregunta en cuanto lo suelto.-¡claro!, ¡me encanta!- exclamo aun sin poder creerlo.-me alegra- dice y me da un besito en la frente, me ve a los ojos y me sonríe, después se aleja pues Lot lo llama para que ayude a prender una fogata, volteo a donde esta Darío y noto que me ve con una mirada llena de ira.-¿Cuál es tu problema?- le digo molesta, pues no despega sus molestos ojos de mí.-¿Cuál es el tuyo Violeta? Apenas conoces a esos chicos- me reclama y se acerca a mí, soltando la mano de Isabella. Me aparto de él y cruzo mis brazos sobre mi pecho.-Disfruta tu tarde Darío, nos vemos mañana.Doy media vuelta y camino hacia donde están todos los chicos, busco con la mirada a Dante, que está ayudando a recolectar leña. Su cabello se mueve provocadoramente con el viento, y me hace sentirme bien de estar con él, en ese hermoso lugar. Me siento

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en una silla plegable, y Sam me lleva un sándwich y un vaso con soda, le doy las gracias pero conservo mi sándwich en mi regazo hasta que veo que Dante viene para sentarse junto a mí para comerse el suyo. -¿estas disfrutando el picnic?- me pregunta Dante después de darle una mordida a su sándwich. Su boca se mueve a un ritmo hipnotízante y me pierdo en sus labios.-sí, estoy feliz, gracias- le respondo y le sonrío, el me devuelve la sonrisa.-puaj, me empalaga tanta miel- se queja Avril y se retira del círculo.-no le hagas caso- me dice Dante.-tratare…

La tarde se pasa volando entre juegos, risas y bromas, y cuando menos veo, oscurece y el frío cae.-Dante, voy a la camioneta por mi chaqueta, ya vuelvo- le aviso.-sí, ve nena- sonríe.Me levanto de la silla y comienzo a caminar hacia la camioneta, levanto la mano en el cajón, de la camioneta y tomo mi mochila la abro y saco mi chaqueta negra, cierro el cierre de la mochila y la coloco donde estaba antes, me pongo la chaqueta y camino hacia donde están los demás, pero unas fuertes manos me jalan.-¿Qué estás haciendo Violeta?- me dice Darío.- lo mismo que tu- le digo y forcejeo, me logro zafar de su mano, pero él me vuelve a tomar del brazo.-¡Darío suéltame!- me quejo-dime, ¿Qué es lo que ese quiere?- me pregunta usando el despectivo pronombre.-¡ese tiene nombre, y me agrada mucho, así que, por favor, suéltame!- me quejo de nuevo.-Violeta vamos, no tienes que estar con ellos, ven con nosotros- me dice y me jala del brazo.-¡no!, no voy a ir contigo para que tu novia me trate como algo inferior- me quejo y trato de soltarme pero al sentir más fuerza en mi brazo me quejo más- ¡Darío suéltame!

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-¡suéltala! -grita Dante que comienza a caminar hacia donde estoy yo, pero Darío se pone entre Dante y yo.-¿o qué?- lo reta-¡o no querrás saber!- le responde Dante a la defensiva. Todos los demás chicos están viendo la escena y escucho que Avril dice;- esa chica solo causa problemas.- ¡déjala en paz Avril, no te ha hecho nada!- se queja Anne. Siento la mano de Darío en mi brazo más suave y me suelto, corro a los brazos de Dante y el me abraza.-te desconozco Darío, ¡ya no sé quién eres!- le reclamo. El abre la boca para decir algo pero me doy media vuelta y comienzo a caminar, Dante aun me abraza, pero en cierto momento siento su abrazo más fuerte y me da un besito en la frente.-será mejor que ya me valla, mi mamá me dijo que hasta las diez y son las 9:30- le digo a Dante mientras suavemente me retiro de sus brazos.-bien te llevo- me dice Dante.-no, no hace falta si quieres…-Violeta, estamos a kilómetro y medio de tu casa, no piensas caminar ¿o sí?- me dice y yo bajo la cabeza, después el camina hacia donde esta Lot y le habla- ¿Lot, me prestarías la pick up solo para dejar a Violeta a su casa y en un momento regreso?-claro Dante, llévala- le dice y luego me dice a mí- adiós Violeta, fue un gusto conocerte.-gracias Lot, igualmente, adiós chicos, gracias por todo.-adiós Violeta- dicen todos en coro. Dante y yo caminamos hacia la pick up que esta estacionada junto a cuatro lujosos autos último modelo, el me abre la puerta de la pequeña cabina y yo entro y me pongo el cinturón, dos segundos más tarde el hace lo mismo, arranca el motor y pone la pick up en marcha.-siento mucho lo que paso Dante, en verdad estoy muy apenada, no sé qué le paso a Darío, él no es así- me comienzo a disculpar.

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-no te disculpes nena, yo te invite y por eso era mi responsabilidad cuidar de ti- me dice calmándome-si, tal vez, pero aun así, estuvo mal lo que él hizo y…- me interrumpe.-Ey Violeta, no pasó nada, tranquila, además, si vuelve a querer molestarte, ya me tienes a mí.-¿de verdad?- me sorprende que piense así, después de lo que paso.-sí, pero… algo que no me queda muy claro es… ¿no se suponía que tú y el eran novios? ¿Por qué llego al río de la mano de Isabella?- me pregunta y aparta su vista un segundo del retrovisor para verme a mí, pero la devuelve al camino.-bueno… él y yo nunca fuimos novios, resulta que el termino con Isabella y bueno… Luz, estaba obsesionada con él, así que, como a él eso le molestaba, me pidió que fingiera ser su novia una noche- mientras hablo él me toma una mano y entrelaza sus dedos con los míos y yo continuo hablando- pero al parecer él se lo creyó más, porque por cómo se puso hoy…Dante para la camioneta frente a mi casa, apaga el motor y me voltea a ver, con su hermosa sonrisa.-Dante, no me sonrías así- le suplico -¿Por qué?-me pregunta aunque en sus ojos se ve que sabe la respuesta.-por qué… me resulta…-¿cautivador?- enarca una ceja y se acerca a mí.-bueno, gracias por traerme pero me esperan adentro- le digo tratando de apartarme pero mi cuerpo me lo impide, algo de mi quiere estar cerca de él. Siento Como él se inclina cada vez más a mí y yo no puedo apartarme, lo intento pero por alguna rara razón no puedo, su cercanía envía descargas, esta vez por todo mi cuerpo, y siento su respiración en mi rostro, mi cuerpo no obedece lo que le mando, su brazo rodea mi cintura, lo que hace que mi cuerpo se acerque cada vez más al suyo, a tal distancia siento su respiración, justo sobre mi boca, percibo el olor de su hermoso cabello, casi puedo leer sus pensamientos, sus dedos rozan mi cara al apartarme

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un mechón de cabello que estaba libre frente a mis ojos, sus ojos verdes se apoderan de mi conciencia, me pierdo en ellos, y siento su cara acercándose a la mía, como si fueran dos imanes, de pronto cierro los ojos y siento una cálida y húmeda presión sobre mis labios, un repentino beso, una exquisita muestra de cariño, sus labios posados sobre los míos, son… cálidos, suaves, mejor de lo que me imagine, trato de decir algo pero tal presión me lo impide, y no quiero arruinar ese perfecto momento, digo algo y sus labios se mueven con los míos.-tengo que entrar- el aparta sus labios al escuchar lo que acabo de decir.-claro, ve ya o te van a reprender- me dice mientras suelta suavemente mi cintura.-bien, gracias por todo de verdad- no termino de decirlo cuando él se baja de la pick up y corre hacia donde estoy yo.-Dante, no es neces…- me interrumpe.-no, si lo es nena - Me da su mano y me ayuda a bajar del auto.Me acompaña hasta la puerta de mi casa y entonces nos ponemos frente a frente, en la oscuridad puedo apreciar perfectamente lo bello de su rostro, esa sonrisa que me enloquece, toma mi cintura, me sonríe y vuelve a posar sus labios en los míos, un exquisito momento, corto, pero exquisito, esta vez es el quien se aparta primero.-será mejor que entres.-sí, yo creo, bien, nos vemos pronto- le digo, aunque no quiero entrar.Me doy vuelta para entrar a la casa, doy un paso hacia adentro pero él toma mi mano y me jala hacia si, antes de que me dé cuenta sus labios están posados contra los míos de nuevo, rodea mi cintura con sus dos brazos, y yo enrosco mis dedos entre su cabello rizado ya de por sí, un hermoso momento, en el que fundimos nuestros pensamientos y nada importa más que ese pequeño éxtasis de felicidad, me suelta y me mira.

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-te veré mañana- me dice y me regala otro pequeñito beso.-bien, entonces, hasta mañana- le respondo y entro a la casa.

Capítulo 8.- ¿Qué somos?

08: 35 AM.Entro a la escuela y me imagino que todos me vieron la noche pasada con Dante en la entrada de mi casa, aunque es imposible, nadie vio nada, camino por los pasillos y me siento extraña, como si no encajara ahí, aunque ya me había acoplado perfectamente al nuevo instituto, siento eso y no sé por qué. A lo lejos alguien grita mi nombre, una voz conocida;-¡Violeta!

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-¿Qué pasa Darío? ¿Se te ofrece algo?- le digo molesta por el incidente de la noche pasada.-bueno, de hecho, quería pedirte una disculpa por lo que paso, pero… no sé qué fue lo que me paso, me dio un ataque de celos, pero no sé por qué- explica mientras se toca el cabello.-bueno, de eso si me di cuenta, y no es normal que no sepas el porqué de las cosas.-bueno la verdad me dio coraje verte con ese tipo- suelta toda la sopa.-ese tipo tiene nombre, es Dante y él es muy agradable.-pues, puede ser, por ahora, pero después va a dejar de serlo Violeta, yo lo único que quiero es protegerte- se excusa. Comienzo a caminar para ignorarlo pero me alcanza y me toma el brazo- Violeta, escúchame por favor, es por tu bien.A lo lejos escuchamos pisadas de zapatillas.-tu hora llego- me burlo.-Violeta, por favor, escúchame- me ruega.-OK, en el almuerzo hablamos ¿sí?- le ofrezco.-no no, en el almuerzo significa que Valentina estará ahí y no quiero que escuche.-bien entonces a la salida me buscas y hablamos.-bien- me dice pues no le queda de otra, Isabella casi llega a él.-bien, nos vemos más tarde, hola Isabella, ¡qué bien luces hoy! -digo a Isabella con sarcasmo pero al parecer ella no lo nota.-gracias Violeta- me dice pero yo casi no la escucho.Mientras camino para ir al aula que me corresponde me topo con Samantha.-Ey Violeta, ¿cómo estás?- me saluda Samantha.-hola Sam, yo bien, ¿y tú?-Violeta, dime la verdad ¿paso algo ayer entre Dante y tú?- me pregunta muy ansiosa, mordiéndose las uñas.-¿Por qué la pregunta?, ¿acaso tú también me vas a decir que es peligroso?- le pregunto usando a mi mejor amigo; sarcasmo.

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-¿peligroso? ¿De dónde sacas eso?- me dice Sam mientras suelta una carcajada- no no no, te pregunto por qué ayer que Dante regreso de dejarte, no paraba de suspirar, tenía una mirada de borrego a medio morir y Avril se puso más celosa que nunca.-¿porque estas murmurando?-niña, en este instituto, las paredes oyen- me dice aún más quedo y comenzamos a caminar- ¿Qué te toca?-Umm, Ciencias, ¿a ti?-matemáticas- me dice alargando las palabras.-puaj.-Ho, casi lo olvido, hoy vendrán buscarnos los chicos, ¿quieres venir con nosotros?, vendrá Dante- me dice como si creyera que con saber que Dante está incluido yo mágicamente aceptare.-Umm, si, ¿por qué no?, ¿Dónde se van a ver?- pregunto como si la respuesta no fuera demasiado obvia.-en el estacionamiento, entonces te esperamos.-sí, me tengo que ir porque si no, no me van a dejar entrar- me despido de ella de un rápido beso en la mejilla y corro por el pasillo aun con la esperanza de que el profesor me deje entrar a clase. Y lo logro, entro al aula pero aun el profesor no ha entrado.-Violeta- me llama Valentina que tiene un asiento vacío junto a ella, aparentemente para mí.-hola Valentina, ¿Qué tal tu fin de semana?-aburrido, estuve todo el domingo viendo películas viejas, pero ¿tu?, Darío me comento algo del río, pero no le entendí muy bien- enarca una ceja.-¿Qué te dijo exactamente?-bueno… me dijo que, lamentablemente, regreso con Isabella y que fueron al río con los demás populares y que te vio ahí, muy bien acompañada.Suelto la carcajada sin pensar.-bueno si, fui al río porque me invito Dan…El profesor entra al salón y no puedo terminar de decirlo.-bien chicos, ¿Quién quiere ir al laboratorio de pruebas?- anuncia el profesor muy entusiasmado, y

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todos gritan yo- bien chicos vamos, recuerden, tomen sus batas y no se las quiten, ¿de acuerdo?-entonces… ¿Quién te invito?- me insiste Valentina de camino al laboratorio de pruebas.-Ho, me invito…Dante.-Dante… Dante- repite Valentina en señal de que trata de recordarlo, y chasquea los dedos.- ¿De dónde dices que lo conoces?-de la fiesta de jardín, ahí nos conocimos pero… en realidad somos vecinos- le digo y enarco las dos cejas.-te gusta ¿verdad?- me dice Valentina entusiasmada al recibir mis señales.-puede que… un poco.-¡Violeta!- grita Valentina sin querer.-señorita Milán, le voy a pedir que por favor guarde silencio o tendré que sacarla de mi clase- la reprende el profesor.-no no profesor, le prometo que no será necesario- promete Valentina.-eso espero señorita- dice el profesor y vuelve a su explicación, nosotras dos soltamos risitas casi inaudibles, cuando el profesor nos deja a nosotros experimentar Valentina retoma el tema.-pero… ¿Por qué no me dijiste nada?- me regaña.-lo siento Valentina, pero le hable después de que ustedes dos se fueron- me excuso.-bien, y ¿Qué paso ayer?- me insiste-pues… fuimos al río, conocí a sus amigos y amigas y pues ya sabes, comimos, asamos malvaviscos, contamos historias alrededor de la fogata…- si si si, pero dime, ¿paso algo más? Ya sabes…- me pregunta.-Valentina, ¿acaso quieres que me saquen de la clase?-sí, eso sería divertido- usa sarcasmo.-Ey, no tienes derecho a usar mi sarcasmo- le respondo igual con sarcasmo.

02: 10 PM.

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-bien chicos, la clase ha terminado, pueden salir- dice el profesor de Artes.Bien, por fin. Salgo del aula y comienzo a caminar hacia el estacionamiento.-¡Violeta!- me grita Anne.-hola Anne, ¿a dónde vas?-al estacionamiento, me iré con los chicos ¿tu?- me pregunta a la vez que me saluda con un beso en la mejilla.-igual, Samantha me invito en la mañana- le explico y comenzamos a caminar.-oye, ¿Qué le diste a Dante anoche? Lo vi muy feliz- me dice haciéndome burla.-nada- digo en mi defensa- pero Ey, ¿qué pasa entre Sam y Lot?-Umm, son pareja desde hace como… seis meses.-Ho, y ¿tu, no tienes pareja?- le pregunto mientras le golpeo suavemente su brazo contra el mío.-¡claro! Tú lo conoces, es Ryan.-¿tú y Ryan? ¿De verdad?- me sorprendo.-sí, también salen Susan y Luc.-¿de verdad? Y ¿Qué pasa con Ian?, ¿el no sale con nadie?- le pregunto yo.-Umm, no, Ian no sale con nadie, lo intento hace algunos meses, pero dice que se siente mejor solo.Tan solo termina de decir eso y veo la sonrisa de Dante detrás de la puerta, él está arriba de la pick up con una soda en la mano, pero esta vez a diferencia de las dos veces anteriores, tiene su cabello recogido en una coleta de caballo, tiene unos Jeans negros y una playera negra.-ahí esta Romeo- me dice Anne burlándose.-¿el tuyo o el mío?-los dos- me responde entre risas- hola chicos, estamos aquí.Dante voltea ante el anuncio de Anne y al verme me lanza una de esas mortales sonrisas.-hola fenomenito- me saluda.-hola Dante ¿Cómo dormiste ayer?- le digo y me acerco al cajón de la pick up para saludarlo.

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-como un niño pequeño- me responde mientras se inclina hacia donde estoy yo y me da un beso en los labios que me deja sin conocimiento, o eso siento yo.-¿entonces de que no perdimos?- comienza a bromear Ryan que tiene sujetada a Anne por la cintura.-es lo mismo que yo me pregunto- dice una voz muy familiar, volteo y veo a Darío parado en la puerta del estacionamiento viéndome a mí con coraje, pero viendo a Dante con furia.Ay no, aquí viene, bien hecho Violeta.-Darío, por favor, no hagas ninguna locura- le ruego, pero antes de que me dé cuenta, Dante está a mi lado, a la defensiva.-bueno, no hare ninguna locura, después de todo, no me incumbe- comienza a decir Darío y da unos pasos hacia donde estamos nosotros.-eso espero- le responde Dante con seriedad.-solo… una pregunta, ¿Qué son?- Darío enarca una ceja para preguntar.Yo volteo ver a Dante al darme cuenta de que no lo sé, y no puedo responderle a Darío.-Darío, ¿puedo hablar contigo por favor?- le pido y el solo asiente con la cabeza.Camino hacia él, lo tomo del antebrazo y comienzo a caminar.-escucha Darío, necesito que me digas que es lo que tienes en contra de Dante, quiero decir ¿Qué fue lo que te hizo para que seas así con él?-bueno Violeta, hace unos dos años, yo salí con una chica maravillosa, ¿sabes? Se parecía demasiado a ti- comienza a explicarme, pero siento su lejanía- bueno, pues de pronto ella ya no era la misma conmigo y la sentía lejana, así quise averiguar el por qué y me entere que ella estaba enamorada de Dante, desde entonces lo detesto.-por Dios Darío, no seas inmaduro- exclamo-¿inmaduro yo?, mira quien habla- me reclama y me da la espalda.

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-Darío, no puedes ser así con Dante, ¡el no tuvo la culpa!, la culpa nadie la tuvo, no puedes odiar a alguien por algo que no hizo.-¿acaso no te das cuenta de que me está haciendo lo mismo?- me dice casi desesperado.-no te entiendo.-claro, sabía que no me entenderías, ¿sabes qué?, olvidémoslo, no quiero perder tu amistad también ¿de acuerdo?- me dice casi rogando.-no, yo quiero que me expliques- le reclamo-pues… es que las cosas están muy claras, no sé por qué aun no lo entiendes.-pues explícame- insisto-bueno, pues, tu eres mi amiga, pero, siento que Dante te está apartando de mi lado, siento que lo prefieres a el antes que a mí, y no lo sé, siento que me está pasando lo mismo contigo y no quiero que eso pase – me explica y luego me da un abrazo.-quieres decir que… ¿tu sientes que yo te estoy cambiando por el?- lo cuestiono mientras me suelto de su abrazo-sí, y me gustaría que te alejaras de el- dice mientras toma mis manos entre las suyas.-no lo sé Darío, te desconozco.-por favor Violeta, quiero ser tu amigo, solo eso- me dice y me tiende su mano en señal de paz.-bien, solo porque eres una persona muy valiosa y no quiero perder tu amistad- le digo, tomo su mano, y después le doy un abrazo.-bien, gracias por perdonarme Violeta -me dice, me da un beso en la mejilla y me toma de la mano, caminamos hacia el estacionamiento y veo la cara de Dante que mira nuestras manos tomadas.-¿Todo en orden?- pregunta Dante muy serio.-si… todo está bien- responde Darío con la misma seriedad, suelta mi mano y se da media vuelta.-Darío – lo llamo, el voltea y me mira, muevo los labios pero no emito ningún sonido- gracias. El solo sonríe y se va, volteo a donde están mis amigos y veo a todos muy serios, algunos mirando el

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lugar vacío donde hace dos segundos estuvo Darío, otros viendo a Dante, y otros, viéndome a mí.-bueno, entonces… yo les pregunto lo mismo que Darío, ¿Qué son?- dice Anne con una sonrisa en los labios.-bueno pues… - comienza a decir Dante, después me mira y me sonríe- no lo sé.-y tu Violeta ¿Qué nos dices? ¿Qué son?- insiste Anne.-¿sabes de casualidad en que se parecen un cuervo y un escritorio?- le pregunto y todos comienzan a reír.-¿Alicia en el país de las Maravillas?- pregunta Ryan- buena esa Violeta, pero no podrás cambiar de tema tan fácil.-bueno, pues creo que tendrán que esperar a saber chicos- les indica Dante a la vez que me mira y me pregunta; - ¿quieres una soda?-claro, gracias- le correspondo.Me entrega una soda color naranjado y hago una mueca.-¿Qué pasa?, ¿no te gusta ese sabor?- me pregunta sonriendo-pues… -está bien, está bien- me dice y saca otra soda color café claro, la etiqueta dice manzana- ¿esta sí?-sí, gracias.-¿chicos, les parece si vamos al campo?- propone Sam.-sí, ¿Por qué no?, ¡vamos!- exclama Luc.-¿quieres venir Violeta?- me propone Anne.-pues… no lo sé- digo yo-vamos Violeta, ¡anda!- me ruega Dante.-bueno, pues… primero tengo que pedir permiso- digo mientras saco mi teléfono celular de mi bolsillo y marco el número de mi mamá, espero a que alguien conteste.-¿diga?- responde la voz de mamá, que alivio que sea ella.-hola mamá, Umm, bueno, Dante y los demás chicos me han invitado al campo, ¿puedo ir?-¿Cuáles chicos?- me cuestiona mi madre.

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-Umm, ya sabes mamá, los chicos de ayer, con los que fui al picnic- insisto.-Ho si, bueno, claro ve, pero… ¿sabes a qué hora vas a llegar a casa?- me pregunta.-no mamá, no lo sé, pero, ¿quieres que llegue a alguna hora especifica?-no hija, solo, no llegues después de las diez ¿bien?-bien mamá, gracias- termino la llamada y volteo a ver a Dante que me mira con ojos de duda- me ha dicho que sí.-bien, pues vamos ¿no?- le dice Dante a Lot.-aún no ha llegado Avril, tenemos que esperarla.Al escuchar ese nombre se me hace un nudo en el estómago y mi rostro lo demuestra, Dante me toca el hombro y me mira con ojos de “no pasa nada, no te preocupes”, cinco minutos después llega Avril que al verme gira sus ojos y suelta un soplido, que sin duda es porque no le agrado.-bien, vámonos- dice Dante mientras me tiende su mano para que yo suba a la camioneta.-¿y a dónde vamos?- pregunta Avril consternada.-al campo- le responde Ian.-y ¿de quién fue la idea de ir?- pregunta fingiendo desinterés mientras sube a la camioneta con los demás.-bueno, fue de Sam- le responde Anne casi de inmediato.-bueno, ¿todos están arriba ya? -pregunta Lot que ya está al volante.-¡sí!- grita Luc.-¡vámonos!- exclama Ian mientras golpea un costado de la camioneta con su mano.Recorremos 300 metros de camino de concreto y después el camino es de piedras y tierra, después de cinco minutos todo se torna verde y azul, a lo lejos veo una cabañita y muchas ovejas haciendo el peculiar sonido de las ovejas, los pájaros cantan y la brisa es dulce y huele a… a… hogar, es extraño, pero me siento libre, como si de pronto quisiera echar a correr y no detenerme nunca, el viento sopla fuerte, y hace que mi cabello me lastime al rozar mi cara,

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pero se siente bien… acogedor, por más extraño que parezca. Nos detenemos junto a unas vías de tren aparentemente abandonadas, sin uso alguno, todos se bajan de la pick-up, menos yo, me gusta saborear la brisa, y oler la tierra, mirar el horizonte, verde, hermoso y a la vez espeluznante.-¿no piensas bajar del auto?- me pregunta Dante mientras sostiene su mano en lo alto para que yo la tome.-si claro.-es hermoso ¿verdad?-…-¿Qué piensas?-…-¿te dejo sin palabras?-es solo que… no puedo imaginar cómo puede existir tal… majestuosidad, quiero decir, nunca había visto algo tan… hermoso, en muchos sentidos- le digo mientras comenzamos a caminar y él me toma de la mano.-ahora estas en Tennesse cariño, aquí es así.-me doy cuenta, pero ¿Qué tal corres?-¿me estas retando?- me dice entusiasmado.-puede ser…, en sus marcas, listos, ¡fuera!- comenzamos a correr hacia donde los demás van caminando y los rebasamos, ellos se quejan y comienzan a correr tras nosotros, Dante me empuja, pero al hacerlo falla y tropieza, yo por verlo tropiezo también y caemos al suelo, rodamos y nos detenemos gracias a unas piedras que nos detienen el paso, ambos reímos a carcajadas, sin poder parar, los demás nos alcanzan a los pocos segundos y también comienzan a reír, algunos otros comienzan a toser por la falta de aire.-¡bien, bienvenida a Tennesse Violeta!- exclama Lot mientras extiende los brazos.-y bienvenida al club de los fenómenos- dice Ian con sarcasmo, a causa de ello Luc le da un fuerte golpe en el vientre e Ian comienza a toser, le da un golpe en la cabeza a Luc y ambos comienzan a golpearse en juego.

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-bien, ¿Qué hacemos ahora?- pregunta Sam.-solo… observemos- propone Anne.-Ey, ¿quién trae un IPod con buena música?-¡yo!- exclama Luc.-Luc, dije buena música- se queja Lot.-¿Qué hay de ti Violeta?, ¿Qué música traes?- me pregunta Susan.-Umm, pues traigo mucho Visual-kei y también tengo rock y música clásica, no se…-bien, ¿me lo prestas?- Lot me extiende su mano.-Umm… sí, claro- le digo desconfiando.-Violeta, no le pasara nada, confía en mí.-de acuerdo jefe- le digo con sarcasmo.-¡esa es mi chica!- exclama Dante y todos ríen, todos, menos Avril.Lot pone un clásico de Beethoven y luego lo cambia por Paganini.-Ho, amo esa canción- exclama Susan.-¿y quién no?- dice Avril con sarcasmo.

Capítulo 9.- Ya quiero olvidarlo.

12:35 PM

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Hace exactamente doce días, Dante y yo comenzamos a salir como algo más que solo amigos, y sus amigos se hicieron mis mejores amigos, con Darío todo ha ido muy bien, de hecho creo que se ha vuelto mi mejor amigo, todos nos hemos llevado más que bien, y Dante y yo decimos ahora que somos novios, sin embargo, hay una cosilla por ahí que aún no he solucionado y necesito hacerlo.

Hoy sábado, Dante vendrá a casa a ayudarme a hacer algo de jardinería, así que, qué mejor que ponerme mis botas de trabajo y unos Jeans negros, el básico, escucho a alguien tocar la puerta y Lluvia abre la puerta.-hola Lluvia, ¿Cómo estás? ¿Lista para trabajar?- saluda Dante.-¿yo? ¿Trabajar? Venga va.-pero yo creí que… bueno, ya no importa, me marchare entonces- bromea Dante.-no, está bien, yo te ayudo en la jardinería, pero me tendrás que comprar una paleta ¿trato?-Umm… trato- dice Dante y le da la mano.Bajo las escaleras para recibir a mi “novio” e indicarle en que me va a ayudar.-hola fenomenito- saluda Dante al verme.-Dante- le respondo yo y el me da un pequeño beso en los labios.-qué asco- expresa mi hermana pequeña.-Lluvia, anda por Kafka, para que también nos ayude ¿vale?-vale- se resigna mi hermana y se va gritando el nombre de Kafka.-disculpa eso- me disculpo-¿Por qué?, no fue nada Violeta, bueno, ¿estas lista para trabajar?- me dice mirando mis botas y luego las de el- pensamos igual.-ya lo note- le respondo mientras tomo su mano y lo dirijo hacia el patio de atrás.-oye, ¿sabes quién se va a ir del vecindario?- me pregunta mientras toma una manguera y comienza a regar algunas plantas.

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-¿Quién?- le pregunto con cierta intriga.-Luz- susurra.-¿Cómo lo sabes?-bueno pues, cuando la familia de Luz se valla, mis padres y yo tomaremos esa casa y viviremos ahí. Algo sobre leyes de inmobiliaria o no sé qué.-quieres decir que… ¿serás mi vecino totalmente?-¡sí!, ¿no es genial?- pregunta entusiasmado.-claro amor, me alegro por ti- le digo mientras lo mojo con la manguera que yo tengo y él se defiende haciendo lo mismo, luego suelta la manguera me toma de la cintura con sus dos manos y posa sus labios fuertemente con los míos haciéndome perder las fuerzas.-oye… no quiero mentirte, a ti no pero…- comienzo a decirle, y al escuchar las primeras palabras me suelta y vuelve a recoger la manguera.-¿pero qué?- insiste al ver que yo no digo nada.-pero… ¿recuerdas que te hable de… Gael?-sí, ¿Qué pasa con él?- insiste-oye, te quiero muchísimo pero… siento que aún no lo he podido olvidar.-¿y por qué me lo dices?- de pronto se pone serio.-bueno…creí que sería muy mala si no te lo digo a ti, quiero decir, tu eres mi novio…-pero aun piensas en el ex-sí, lo sé, pero… por eso te lo digo a ti, porque quiero ser totalmente libre para amarte a ti- le digo y el suelta una sonrisa.-OK, por hoy seré tu psicólogo- me vuelve a sonreír- ¿Qué es lo que te hace pensar en él?-bueno… a decir verdad… tu.-¡¿Yo?!- exclama sorprendido.-si… tu-¿Por qué yo?-bueno, no lo sé, tu forma de… ser conmigo, tu forma de mirarme, cuando dices mi nombre, tu voz, tu aroma, tus labios, la cosa que haces con la nariz, tus brazos, tus manos, todo…- digo mientras me pierdo pensando en lo que estoy diciendo

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-creo que… has perdido la cordura, se te ha zafado un tornillo-Ey, dijiste que me ibas a ayudar ¿lo olvidas?- me quejo-lo siento Violeta, pero tú ya estas grave- me dice bromeando.- sí, lo sé.-no lo creas nena, mira, solo tienes que… dejar ir el pasado y apreciar lo que tienes ahora, tienes que… quitarte la venda de los ojos y descubrir que muchas cosas han cambiado, hiciste un cambio drástico, por eso es que te entiendo pero… tienes que dejarlo ir- me dice mientras me abraza con sus fuertes brazos descubiertos- tienes que olvidarlo.-yo en verdad quiero hacerlo pero… no lo sé, no puedo.-entonces… habla con él.-¿Qué?- exclamo- ¿estás loco?-¿Por qué?-si hablo con él, seguramente lo voy a extrañar más, y voy a querer regresar con él.-no necesariamente- me dice totalmente calmado- tal vez la forma en la que ustedes dos terminaron no fue la correcta y por eso te pasa eso, tienes que hablar con él.-¿crees?- absolutamente-pero… ¿a ti no te molesta?-¿molestarme? ¿Por qué?-bueno, pues… porque hablamos de que yo tenga contacto de nuevo con mi ex - le respondo-bueno, ¿a ti te molesta que yo hable con Avril?-no, ¿Por qué habría de molestarme?-es lo mismo, si a ti no te molesta que yo hable con Avril a mí tampoco me ha de molestar que hables con Gael para aclarar las cosas- me explica y me toca la punta de la nariz.-bueno, si es eso lo que piensas… -“si es eso lo que piensas”- dice imitando mi voz.-Ey, no imites mi voz- protesto-impídemelo- me reta Dante.

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-bien- le respondo y lo mojo con el agua que sale de la manguera, él se defiende y toma la manguera y me moja a mí también.-¡oigan! ¡Yo no juego!- protesta mi hermanita a la que mojamos accidentalmente.-¡si Lluvia ven! ¡Ayúdame a mojar a tu hermana!- la llama Dante.-¡no Lluvia!, mejor ven a ayudarme a mojar a Dante- la llamo yo.-¿saben qué?- comienza a decir mi hermana y toma otra manguera que está en el suelo y abre la llave- ¡yo los mojo a los dos! ¡Vamos Kafka!-¡guerra de agua!- exclamo-¡sí!- grita mi hermana mientras corre por todo el patio.-¡Violeta!- me llama mi mamá.-¡alto, alto, me hablan!- grito-¡no Violeta!, eso es trampa- se queja Dante.-¡si, es trampa!, todos a mojar a Violeta- exclama mi hermana-no, ya, esperen tengo que ir a ver que quieren- me quejo-bueno ve, pero dame un beso- me pide Dante y señala sus labios-bien- respondo, camino hacia donde está el y le doy un pequeño beso en los labios.-¡puaj!- exclama mi hermanita.-¿puaj que? – le dice Dante y la vuelve a mojar.-¡no! ¡Ayuda!- grita mi hermana¿Querías guerra?- exclama Dante-¡si, pero también me puedo defender! – exclama mi hermana y vuelve a mojar a Dante.

-¿Qué pasa mamá?- le pregunto a mi madre una vez que yo ya estoy adentro de la casa.-te buscan en la puerta Violeta- me dice mi mamá sin verme pues está preparando la comida.-¿Ho si?, ¿Quién?- pregunto mientras camino hacia la puerta.-¡Darío!- grita mi mamá desde la cocina.

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Abro la puerta y encuentro a mi amigo, parado, esperando a que yo saliera, tan solo me ve y me sonríe, pero su sonrisa no produce el mismo efecto en mí que la sonrisa de Dante.-hola Darío, ¿Qué tal?- lo saludo de un beso en la mejilla-Violeta, estas… mojada- me mira con extrañeza-Ho si, bueno, estamos arreglando el jardín de atrás y… ocurrió una guerra de agua- le explico-¿estamos?-sí, Lluvia, yo…- ¡Ho!, bueno- responde aliviado-y Dante.-Ho, bien- responde como si alguien le halla soltado un costal de 30 kilos encima.-y ¿Qué te trae por aquí, en esta hermosa mañana de sábado?, creí que ibas a salir con Isabella.-sí, bueno, tubo practica y, pues me quede sin nada que hacer, por eso es que vine a verte.-Ho, ¿quieres decir que, solo me vienes a ver por qué no tienes otra cosa que hacer?-pues… algo así- me dice bromeando.Entramos al patio trasero, donde están aún jugando Lluvia y Dante, al ver entrar a Darío, Lluvia corre hacia el para abrazarlo.-hola Darío, ¿Por qué ya no has venido?- le pregunta Lluvia mientras lo abraza.-pues… -olvídalo y, ayúdame a mojar a Dante- le propone mientras le ofrece una manguera. -no Lluvia, mejor tu mójalo, yo tengo que hablar con tu hermana- le responde y me voltea a ver a mi- ¿vienes?-claro- le respondo yo y comenzamos a caminar hacia dentro de la casa.-¿recuerdas el día de la fiesta de jardín? ¿Cuándo me dijiste que habías terminado con… Gael?-…-bueno… pues, quiero hablar contigo sobre eso.

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-mira Darío, sé que te preocupas sobre lo que yo pueda sentir, pero ese tema lo tengo más que superado.-¿de verdad?-si… claro- le miento.-Violeta, por favor, no me mientas, yo lo único que quiero es ayudarte- me dice casi preocupado y trata de alcanzar mis manos, a lo que yo me opongo.-¿ayudarme a qué?-pues… a que lo puedas olvidar.-¿no crees que eso le corresponde a Dante?-mira Violeta… sé que Dante es ahora tu novio pero… ¡yo soy tu amigo! No me saques totalmente de tu vida- me dice casi desesperado.-Darío, no te estoy sacando de mi vida, pero creo que el tema… no sé.-¡si, si lo estás haciendo!, me estas reemplazando.-Darío ¿cómo puedes decir eso?, es que es algo totalmente diferente, quiero decir que Dante es mi novio y tú eres mi amigo.-por eso, yo soy tu amigo y te quiero ayudar como tal, pero… ¿sabes qué?, olvídalo.-no Darío, no me hagas esto por favor, no me pongas entre la espada y la pared, entiéndeme- me pongo la cara entre las manos.-Violeta, ¿te ha pasado que quieres decir algo, pero crees que ya es tarde para hacerlo?- me pregunta de repente.-sí, pero… ¿Por qué lo dices?-bueno, porque, eso me pasa contigo, pero no sé, siento que ya es muy tarde para decirte lo que siento- me dice y se da media vuelta de modo que me da la espalda.-¿a qué te refieres?-a que… ¿sabes qué?, olvídalo, deja todo así, será mejor que me valla, cuídate Violeta - Me dice y camina hacia la puerta.-no no no, ahora me explicas que es lo que te pasa- lo tomo del brazo y lo jalo.-es que… no sé, no tiene caso que te lo diga ahora, porque, bueno… solo te confundiría más y…

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-¡solo dilo!-¡la verdad estoy enamorado de ti!-…-¿ves? Te lo dije, ¡esto va a cambiarlo todo!-…-será mejor que me valla.-¿Por qué habría de cambiarlo todo?, seguiremos igual, tu eres mi amigo y eso no va a cambiar.-si Violeta, pero a me gustaría ser algo más que tu amigo- me reclama.-Darío, yo ya tengo novio, y eso seguirá así hasta que el me lo permita, por favor, no puedo verte como algo más, te quiero mucho, pero solo como mi amigo… no más, entiéndeme por favor.-bien, ¿sabes qué?, tengo que ir a casa a… pensar las cosas, de verdad discúlpame Violeta.-no, está bien Darío, todo está bien, ve con cuidado- me despido.-bien, nos vemos luego- me dice y se despide de mi con un rápido beso en la mejilla, abre la puerta y sale de la casa, yo voy de nuevo al patio trasero donde Dante está removiendo tierra de una de las plantas. Al verme, me sonríe y yo siento que se me van las fuerzas.-Ey Violeta, dijiste que te iba a ayudar no que yo haría todo el trabajo sucio.-sí, perdón Dante, ya te ayudo.-¿estás bien?- me dice al notar mis ojos tristes-Umm, si, si estoy bien, ¿Por qué lo preguntas?-bueno… tus ojos están llorosos- me dice, señala mis ojos y luego limpia las lágrimas con su dedo índice.-estoy bien, es solo que, Darío… bueno…-¿Qué? ¿Darío que?- me pregunta poniéndose de pie en forma defensiva.-no no no, solo Darío me dijo que… no le agradas y no me gusta que mi novio y mi mejor amigo no se lleven bien- le miento.-¿segura que solo es eso?-sí, estoy bien no te preocupes- le respondo le doy un besito en los labios para que olvide el tema.-¿solo uno?- me pregunta refiriéndose al beso.

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-bueno bueno va- le respondo y le doy otro beso.

Capítulo 10. Negra como la noche.

Lunes 08:35 AMFaltan cinco días para mi cumpleaños, aun no sé qué quiero, es que bueno, diecisiete años solo se cumplen una vez, Ahora, tengo todo lo que siempre he querido, un novio magnifico, amigas fenomenales, la familia completa y un mejor amigo con el que hasta ahora, las cosas han ido bien.-Ey Violeta ven- me llaman Sam y las otras chicas cuando me ven entrar al salón.-hola chicas, ¿Qué tal su fin de semana?- les pregunto mientras saludo a cada una con un beso en la mejilla.-el mío fue bastante bien, mis padres me llevaron a comer pizza a un restaurante- comienza a decir Anne.-yo fui a la biblioteca a sacar otro libro, y comencé a leerlo, después no pude parar- cuenta Susan y todas comenzamos a reír.-¿y tú Sam?- pregunto yo-nada interesante… solo, me quede en casa a ver televisión, ya saben, la rutina ¿y tú Violeta? ¿Qué hiciste?- me pregunta a mí y todas voltean a verme a los ojos, es en esta parte cuando yo me sonrojo y bajo la vista, pero extrañamente, esta vez no me pasa eso. Tomo un mechón que cae en mi frente, lo acomodo detrás de mí oreja y comienzo a hablar.-bueno, yo he estado escribiendo… un buen rato…-¿y que escribes?- me pregunta Susan.-¿historias de amor?- pregunta Anne y todas sueltan risitas nerviosas, me muerdo el labio.-no exactamente… de hecho… escribo poemas- comienzo a decir y les muestro mi libreta.

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-“negra como la noche”- comienza a recitar Sam- ¿de verdad?, suena… bien, pero un poco… melancólico ¿no crees?-Wow, eres buena… dice Anne mientras lee mis escritos- ¿te refieres a un ser vivo?-no, más bien me refiero a… un gato- le explico-¿un gato?- pregunta consternada Susan-sí, un gato, bueno, ese poema lo escribí después de un sueño que tuve, y el sueño era sobre un gato… un gato negro como la noche, fue algo muy extraño, pero algo muy especial, como una señal o algo así.- le continúo explicando.-valla profundidad lo que acabas de decir- dice Avril que acaba de llegar, usando sarcasmo y luego saluda a todas- hola chicas.-hola Avril- le responden las demás en coro.-¿de que hablaban?- pregunta Avril con el fin de ponerse al día.-de los poemas de Violeta… no creo que te interese mucho- le responde Sam.-no venga, muéstrenme esos… poemas- dice Avril y lee lo que dice en la libreta- negro como la noche, es bueno… demasiado bueno, diría yo.Entra Isabella de la mano de Darío, él me sonríe a lo lejos, y ella me ve con su conocida mirada de odio hacia mí, se sienta y me da la espalda, Darío hace lo mismo y entre ellos dos comienzan a hablar, entonces Darío se levanta y comienza a caminar hacia mí, me saluda de beso y se sienta en la paleta de mi pupitre, me rodea el cuello con un brazo y comienza a platicar tranquilamente con nosotras, Isabella lo ve y se pone roja, pero después le hace una extraña seña a Darío él se levanta y regresa con ella.-no sé por qué Isabella me sigue odiando, digo, la razón por la que lo hacía en un principio era porque creía que yo tenía algo con Darío, pero, ya no, y no entiendo por qué lo hace - les pregunto a mis amigas.-no necesita sentir celos para odiarte- responde Avril sin mirarme.-¿a qué te refieres?- me defiendo.

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-a que… es muy sencillo odiarte, digo, muchas personas te odian y no por que salgas con sus parejas- me expresa -no te entiendo.-no le hagas caso Violeta, solo te lo dice para molestarte- me tranquiliza Sam.-si… claro- susurra Avril.-Ey Violeta, según mi agenda, en cinco días es tu cumpleaños ¿estoy en lo correcto?- me pegunta Anne mientras ve una libreta pequeña de color naranja.-bueno… si,… espera, ¿tienes agentado el día de mi cumpleaños? ¿Qué más? ¿Mi cita con el dentista no la tendrás apuntada por ahí?- respondo sarcásticamente, tratando de contener la risa. Ellas comienzan a reír sonoramente y algunas sueltan carcajadas.-¿y qué vas a hacer?- pregunta entusiasmada Sam, conteniendo las risas aun.-¿Qué hacer de qué?- pregunto yo tratando de evadir el tema.-pues no sé, una fiesta, una reunión o algo…- dice Sam.-Ho, bueno… aun no lo he pensado…-¡Violeta, es en cinco días!- exclama Susan.-sí, lo sé pero, bueno… es solo que, no me gusta hacer ese tipo de eventos, y menos si se celebra un día menos de vida – me excuso.-no te excuses Violeta, si quieres te podemos ayudar a organizar algo- me ofrece Sam.-Umm, no lo sé, tengo que consultarlo con mis padres, aun no sé si ellos ya planearon algo.-sí, tienes razón- responde Anne.El profesor entra a la clase seguido de todos los alumnos que lo aguardaban afuera, saluda a todos, se acomoda la corbata y aguarda a que todos guarden silencio, se sienta en su silla y se cruza de brazos, al ver que nadie se calla, saca un papel de su portafolios y comienza a hablar;

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-bien, ya que nadie quiere guardar silencio ¡examen sorpresa!- dice las últimas dos palabras casi gritando mientras agita la hoja blanca arriba y todos protestan.

02:10 PMEl día estuvo muy… aburrido hoy, en especial la última clase, odio y siempre odiare algebra. Ahora, recorro el familiar pasillo que conduce hacia el estacionamiento, donde encontrare a un apuesto chico aguardando por mí, así que trato de caminar con la cabeza baja para no mirar a nadie, y no tener que hablar con nadie. Por fin llego al estacionamiento y veo la camioneta, arriba están Lot, Ian, Luc, Anne y Susan, pero… no veo a Dante, así que comienzo a caminar rápido hacia la camioneta, pero alguien con grandes manos me tapa los ojos, alguien que me seguía por detrás;-¿Quién soy?- dice la persona cambiando la voz. -Umm, ¿el fantasma de la opera?-cerca pero no.-¿un zombi come cerebros?-no…-no, no tengo idea- digo con sarcasmo-soy… bah, a quien engaño- dice Dante mientras me suelta y me da un beso en los labios- ¿Qué tal tu día?-hasta ahora… aburrido.-¿Qué es esto?- me pregunta mientras saca mi cuaderno de poemas y lo comienza a hojear.-solo son… poemas- respondo mientras trato de arrebatárselo de las manos, pero él se hace a un lado y evade mi débil intento, forcejeamos un momento, y después me rindo, lo dejo leer tranquilo.¿Podría esto, ser más vergonzoso? -“negro como la noche”, suena bien fenomenito, eres buena en esto, ¿pero te refieres a… un perro?- bromea.-¡a un gato!, desde cuando los perros “Maúllan a la noche negra, como su pelaje”- me quejo, citando un verso.-Ho si, a un gato, claro, ya lo sabía…

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-…-¿es sobre… un animal que tuviste o uno que quieres tener?-bueno, es un gato de un sueño, nunca lo he tenido, me gustaría tenerlo pero… no lo escribí con ese fin, yo solo escribí lo que soñé, escribí lo que sentí, y escribí lo que significó para mí.-sí que eres un fenomenito- se burla.-Ey, grosero- me quejo y froto su cabello que se le enreda fácilmente por estar largo. Dante se acomoda el cabello y luego choca la mano con la de Lot.-chicos, mañana Lot y yo cumplimos un año de novios- anuncia Sam.-¿de verdad? Wow, ¡felicidades!- le respondo yo y le doy un abrazo.-y bueno… queremos ir al río y no sé, hacer algo, ¿qué dicen?-digo que… es una buenísima idea- responde Anne.-y en cinco días es el cumpleaños de Violeta- anuncia Dante.-shhh- lo callo.-¿vas a hacer algo para tu cumpleaños Violeta?- pregunta Lot.-pues… aún no se- repito- tengo que consultarlo con mis padres.-pues… no dejes de avisarnos Violeta- dice Luc.-claro.

Todos comienzan a reír y a hablar cada quien de sus propios asuntos, Dante me toma de la cintura y me sonríe, con una mano toma la mía y entrelaza sus dedos con los míos, me mira a los ojos y posa suavemente sus labios contra los míos, yo levanto mi mano libre, y entrelazo mis dedos en sus largos rizos, mientras siento esa calidez en mi cintura mi mano y mis labios, esa calidez difícil de describir, esa calidez… que me hace sentir segura, protegida, amada, pero a la vez me hace sentir pequeña y vulnerable si él no está, es difícil de describir, una lagrima se escapa de mis ojos y yo no la puedo controlar, ella sola nace y cae por mi mejilla, Dante al

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sentirla se aparta de mí, me mira a los ojos con extrañeza y con preocupación;-¿Qué pasa Violeta? ¿Por qué lloras?- inquiere, mientras toma la lagrima con su dedo índice.-no… por nada, no te preocupes- le respondo y le doy un beso para que no me siga preguntando, pero él se aparta y me vuelve a mirar.-¿Qué pasa?- insiste-nada… solo, me sentí demasiado feliz de tenerte así, aquí, a mi lado, seguro de que me quieres y… me siento tan dichosa.-¿segura que es eso y no otra cosa? -sí, no te preocupes estoy…- me interrumpe con un beso y después de tres segundos se aparta.-¿no lloras por Gael?- inquiere de pronto.-mis lágrimas por él ya se secaron, ya no hay dolor por eso, ya lo supere.-te creeré.Me envuelve en sus fuertes brazos, me da un beso en la frente y me sonríe viéndome a los ojos, me suelta y se recarga en la camioneta, toma un mechón de mi cabello y comienza a trenzarlo lenta pero firmemente;-¿Qué haces?- le pregunto.-disfrutándote.-¿disfrutándome? ¿Cómo?-disfrutando que estas aquí y que me quieres y me aceptas y no te vas a ir.-ten eso por seguro, no me voy a ir, a menos que tú me lo pidas- le digo mientras me doy la vuelta para verlo a los ojos. Me besa de nuevo lenta y serenamente, sin ninguna prisa, sin ninguna razón.-puaj, díganme cuando las hormigas comiencen a llegar por la miel- dice Avril al llegar a donde estamos.-Avril, tu eres la hormiga, ¿si te diste cuenta no?- le hace burla Anne.-cállate- le ordena Avril y todos, incluyendo Dante y yo, comenzamos a reír.Noto la mirada de Avril sobre mí, volteo a verla a los ojos y extrañamente me sonríe, yo le contesto

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también con una sonrisa, aunque no estoy segura por qué.-así que… ¿harán algo esta tarde?- pregunta Avril y Dante me voltea a ver.-pues, no lo sé, hoy esta nublado- dice Sam y voltea instintivamente a ver al cielo.-¿entonces cada quien va a ir a su casa?, que aguafiestas- se queja Avril.-bueno, ¿entonces mañana que vamos a hacer?- insiste Sam.-¿y si vamos a nadar?- propone Anne.-yo digo que ese día deberían de pasarlo ustedes juntos y… solos, porque bueno, ese día debe ser especial para ustedes dos ¿no?- opina Susan-¿Que me perdí?- pregunta Avril.-mañana cumplen un año de novios Sam y Lot, y quieren hacer algo para celebrar- le explica Anne.-Ash, solo cómprense una botella de champagne y ya- dice Avril con sarcasmo.-Ey chicos, acabo de tener una buenísima idea- exclama Anne- que les parece si ahorita vamos a la sala de juegos.-sí, ¿por qué no? Vamos- se apunta Sam.-¿ahorita? No se… -duda Lot.-vamos Lot, será divertido- lo exhorta Avril.-bien, vamos- responde Lot y voltea a ver a Sam.-¿quieres ir?- me pregunta Dante.-Umm, no lo sé Dante, tengo tarea que hacer y…-vamos Violeta, no seas aguafiestas, no será lo mismo sin ti- dice Avril con sarcasmo y Dante le dedica una mirada fulminante.-Violeta, si no quieres… nadie te obligara- me tranquiliza Dante.-¿tú quieres que yo valla?- le pregunto mirándolo a los ojos.No podrías ser más estúpida Violeta.-¿es enserio tu pregunta? ¡Claro que me encantaría!- exclama Dante.-pues… voy, solo permíteme que le avise a mi mamá.-bien, tomate tu tiempo.

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Le doy la espalda al grupo y saco el pequeño aparato de mi bolsillo, marco el número de mi mamá, que ya sé de memoria y espero a que me conteste, suena el insistente pitido una y otra y otra y otra vez, y nadie atiende el teléfono, me contesta la contestadora y decido dejar un mensaje de voz, tal vez, nadie escuchó el teléfono.-hola mamá, Umm, bueno, solo te marcaba para avisarte que voy a ir a la sala de juegos con Dante y los demás chicos, llegare más tarde a casa, no te preocupes por mí, te amo.Presiono el botón para terminar la llamada y dudo si volver a insistir, pero, mis instintos me hacen guardar el celular en el bolsillo de mis Jeans, me doy media vuelta y me arrojo a los brazos de Dante.Ryan acaba de llegar y nos saluda a todos.-Ryan puedo hablarte un segundo- le pide Dante.-si claro, pero ¿Qué pasa?- le pregunta algo consternado.-en un momento te explico.Dante me suelta la mano y al sentir que esta cae a mi costado, floja, se regresa y me da un cálido, dulce y suave beso en los labios, me sonríe y me ve de tal forma como si quisiera decirme “todo va a estar bien, porque yo te protejo”.Observo por el rabillo de mi ojo, los movimientos que hace Dante con sus manos cuando habla en privado con Ryan, y veo que en uno de esos movimientos me señala a mí y luego hace el ademán de estar escribiendo algo en una hoja de papel que no existe, Ryan solo asiente y chocan sus manos, después se dan un abrazo y regresan al grupo bromeando y entre risas, Dante casi de inmediato me vuelve a abrazar y me regala otro de esos dulces y tibios besos.-bueno, ya estamos todos ¿nos vamos o qué?- propone Lot.-si- exclama Ian.-¡vamonooos!- casi grita Ryan mientras nuevamente golpea un costado de la camioneta con la palma de su mano, la camioneta emite un sonido casi similar a

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un rugido y casi no escucho que alguien grita mi nombre;-¡Violetaaa!- grita Darío para que lo escuche.-Ho, Ey Lot, ¿puedes detenerte solo un segundo?- le pido a Lot, el asiente y yo veo que Dante hace una mueca de desagrado cuando ve que me voy a poner de pie para ir a ver a mi amigo y me suelta la mano suavemente, toma mi bolsa y me ayuda a ponerme de pie y a bajar de la camioneta.-hola Violeta, siento eso- me saluda Darío en cuanto estoy junto a él.-Hola Darío, no, está bien, pero será mejor que me digas lo que me quieres decir de prisa, Lot no tiene mucha paciencia.-¿es Lot o Dante el que no tiene mucha paciencia?- enarca una ceja- bueno ya, lo que te quería decir o más bien preguntar es, bueno, en cinco días es tu cumpleaños, y me gustaría obsequiarte algo pero ¿te gustaría que te regalara algo en especial?-bueno Darío, agradezco de verdad tu intención pero no es necesario que me regales algo.-tal vez no es necesario, pero yo quiero hacerlo.-bueno, entonces, si quieres obsequiarme algo, dejare que me sorprendas, ¿te parece bien?- le digo y le doy un pequeño golpe fingido en el brazo.-si es lo que quieres, te sorprenderé, bien, nos vemos Violeta- se despide de un beso en la mejilla, se da media vuelta y comienza a caminar, yo, también me doy media vuelta y comienzo a caminar hacia la camioneta, subo y Dante me da la mano para ayudarme a hacerlo, yo la tomo y me siento a sus pies, el me rodea con sus dos brazos como si quisiera protegerme de algo o alguien, yo no lo rechazo, al contrario, hago que me abrace todavía con más fuerza y el me da un pequeño beso en el cuello.-¿quieres?- Avril me ofrece agua y yo no entiendo por qué de pronto está siendo amable conmigo.-no… gracias, yo tengo la mía- le digo dudando.-Ho, bueno.Eso fue extraño.

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Lot conduce por una calle angosta y de piedra, que hace que todos nos movamos de un lado a otro, el cabello de Dante cae en mi cara y yo no lo aparto, me gusta el roce de su cabello en mis labios, pero él se da cuenta y lo aparta.-Ho, perdón Violeta-no, déjalo, me gusta.-¿de verdad?- pregunta extrañado.-sí, déjalo-amo tu autenticidad.Tan solo dice eso y Avril gira los ojos, luego se da cuenta del gesto que acaba de hacer y me mira con una sonrisa de oreja a oreja en los labios. -¿sabes de casualidad que le pasa a Avril ahora?- le pregunto en el oído a Dante para que nadie escuche.-ni idea- me responde de la misma manera.-bien señores, están servidos- dice Lot cuando detiene la camioneta dentro de un estacionamiento grande y con propagandas de videojuegos pegadas en las paredes, todos se bajan de la camioneta excepto Dante y yo.-¿Qué piensas?- me pregunta mientras me da un beso en el cuello.-pienso que… ¿Darío y tu algún día podrán llevarse bien?- le suelto todo.-pues… no lo sé, ese chico me ve como si yo fuera un criminal o algo así- me explica sin soltar su abrazo.-no, no te ve así, pero no sé, yo creo que ambos deberían intentar ser amigos, por favor-no lo sé Violeta, no me gusta ser amigo de alguien que me ve como si yo le hubiera hecho algo, y ni siquiera se la razón por la que el me ve de esa forma, que yo sepa, jamás le he hecho nada, así que no estoy muy seguro de lo que pides.-¿lo intentarías? ¿Por mí?- le pregunto mientras levanto mi cabeza hasta verle los ojos y le doy un pequeño beso en los labios.-bien, solo por ti- me responde resignado, me da un beso y se levanta haciendo que yo también me

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ponga de pie, ambos bajamos de la camioneta y comenzamos a caminar tomados de la mano.

Al entrar al lugar, está a la derecha un restaurante de comida rápida, donde venden hamburguesas. Pizza, hot dogs y otra comida chatarra, de lado izquierdo hay un pequeño puesto de helados y junto a él, otro puesto igual de pequeño en el que venden recuerdos, no me imagino de que. Al final del pasillo hay una entrada grande y adentro se pueden ver muchas luces de colores y algunas neones, mucho ruido y sobre todo risas. Al entrar, todos están haciendo algo, algunos están jugando en una especie de maquina con un volante, que hace la ilusión de estar conduciendo un automóvil de verdad, otros están jugando en una mesa de hockey, otros juegan con una guitarra a escala y una pantalla enfrente que los hace creer que en verdad están tocando una guitarra, otros más, bailan sobre un tapete que les ordena que pasos dar, etc.-¿quieres jugar a algo?- me pregunta Dante.-Umm, no, mejor veamos que hacen Sam y Avril.Ellas están sobre el tapete para bailar, según entiendo es una competencia, para saber quién baila mejor, se ve un poco complicado, se divide en tres fases, quien venza dos fases es el ganador, ahora, van empatadas, pues la primera fase la gano Sam y la segunda la gano Avril. El baile se termina y el marcador está por salir. Al parecer la ganadora es Avril y ahora ella tiene que elegir otra persona con quien competir.Recorre con la vista a todas las personas a su alrededor, mientras se limpia el sudor de la frente y toma un poco de agua, posa sus ojos sobre mí por un momento, y después sonríe maliciosamente. Ho no.-Violeta- me señala para que suba.-no no no, yo no bailo- me opongo rotundamente.-vamos, solo es una amigable competencia- insiste Avril.

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-Estoy bien aquí- digo, y en mi voz se nota desesperación y un poco de molestia.-Vamos Violeta, no pierdes nada, o ¿Tienes miedo de quedar como una tonta frente a todos?- dice, y suelta una sonora carcajada maliciosa.-bien, aquí vamos.Brinco sobre el tapete, que tiene 5 pisadas, derecha arriba, derecha abajo, izquierda arriba, izquierda abajo y central. Piso el cuadro central para seleccionar la canción, mientras que Avril selecciona el nivel de dificultad, ya que ambas seleccionamos lo que nos tocaba, la música comienza.-¿lista?- me reta Avril.-¿y tú?-nací lista.Los pasos comienzan a aparecer en la pantalla de enfrente, Avril había seleccionado el nivel medio, y los pasos eran muy seguidos, yo trato de pisarlos como los marca, pero algunos no los alcanzo, el tiempo se acaba antes de que yo me pueda dar cuenta, el marcador decreta, que la ganadora es Avril y me ve con orgullo;-solo fue un round- le digo retándola.Selecciono otra canción, aún más rápida y ella vuelve a seleccionar el nivel medio, las pisadas comienzan a salir. Lo que ella no sabe, es que, esta canción la aprendí a bailar mientras estaba en Pontiac, pues Tara me obligaba, así que me la se de memoria, sé que es hacer trampa pero, se siente bien ganar. Termina la canción y el marcador decreta que ahora la ganadora soy yo, escucho a mis amigos gritar y aullar porque acabo de ganar.-empate, aun no ganas princesita- me dice Avril y selecciona el nivel.-¿princesita? ¿A qué te refieres?- le pregunto extrañada mientras selecciono la canción.No me contesta pues los pasos comienzan a salir de nuevo, esta canción comienza mucho más calmada, así que acierto en todos, después se torna más rápida, pero sigo acertando todo, cada vez va más rápida y yo me concentro totalmente en querer ganar

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y mis pies se mandan solos, siento la música vibrar por mis músculos y recorrer todo mi cuerpo. No fallo ninguna, al final solo fallo dos, espero que Avril haya fallado más de dos. El marcador esta por revelarnos quien gana y los puntos totales indican que la ganadora soy yo, todos gritan y me felicitan, Avril me da la mano en señal de buena competencia, yo la tomo y me bajo del tapete para ir de nuevo con Dante.-Wow, no sabía que bailabas- me felicita Dante.-ni yo, solo, fue una descarga de adrenalina supongo.-¿adrenalina? Eso no fue adrenalina mi niña, eso fue emoción.-bueno, pues se sintió muy bien-si tú lo dices…

Cinco días después12:30 PM Hoy es sábado, y es mi cumpleaños, después de hablar con mi mamá y mis amigas, que me ayudaron a organizar algo, llegamos al acuerdo de que sería una pequeña fiesta en el campo, donde encontré tanta paz interior. Mis amigas ya adornaron halla, no me dejaron ver, solo me dijeron que pondrían una carpa y varios adornos más.Así que yo, me estoy vistiendo para el “gran” evento, pero, solo tomo unos Jeans negros y una camisa morada con el logo de mi banda favorita.-Violeta, ¿de verdad te piensas vestir así en tu cumpleaños?- me dice mamá cuando entra a mi habitación.-sí, ¿qué tiene de malo?- le digo y me veo de arriba abajo en el espejo-pues no se… es muy… simple.-pero es cómodo ¿no crees?- le digo con el fin de que ya no me diga nada, ella solo revisa la ropa de mi armario y saca una falda negra de lunares blancos y una blusa blanca;-¿Qué te parece esto?- me ofrece mi mamá-mamá de verdad no te ofendas pero… no quiero parecer un payaso.

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-bueno, yo solo decía- sale de la habitación y desde afuera me grita- ¡Violeta tienes cinco minutos, en cinco nos vamos!-¡si mamá!- le respondo yo desde mi habitación.Bajo las escaleras y mis padres ya están esperando, junto con mis abuelos, Lluvia está afuera jugando con Kafka.-buenos días madame- me saluda mi papá en cuanto me ve bajar de las escaleras, me abraza y me susurra al oído- diecisiete años, ya eres toda una señorita.-gracias papá, te amo.-y yo a ti.

Todos salimos de la casa y mi papá decide llevarnos la camioneta pick up, pues Lluvia insiste en llevar con nosotros a Kafka, así que yo ayudo a mi padre a amarrarla atrás, pues de lo contrario podrían caerse, mi padre me pide que yo sea su copiloto para que lo guíe hasta el campo, así que eso hago, lo guío hasta donde está la pequeña fiesta.

Al llegar al primero que veo es a Ian, hablando cómodamente con Avril, después veo a Sam, Anne, Susan, Lot, Luc, Darío, Valentina, Isabella, Luz y otros chicos más de mi clase que invitaron pero no veo rastros de Dante ni de Ryan.Me bajo de la camioneta y camino hacia ellos para saludar a todos y agradecerles por todo. El lugar quedo precioso, como una fiesta de jardín, pero en el campo, una carpa blanca y enorme cubre unas siete mesas, y hay muchos carteles colgados con mi nombre y la frase “feliz cumpleaños”, en una mesa hay muchos vasos y platos y justo en medio, una torta de cumpleaños, la cubierta es de chocolate y en medio dice “feliz cumpleaños Violeta”.-Wow, gracias de verdad- agradezco a Sam.-no fue nada- me responde y me da un abrazo- feliz cumpleaños.-¿no crees que fue demasiado?- pregunta Anne y después me abraza- feliz día Violeta.

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-no, claro que no, es perfecto, gracias de verdad chicos.-feliz cumpleaños Violeta- me abraza Avril- ¿te puedo hablar en privado un poco?-si… claro- le respondo y comenzamos a caminar, entonces ella comienza a hablar.-oye Violeta lo siento si alguna vez te hice sentir mal o incomoda, te tenia odio porque, bueno, yo en verdad quería volver a tener una relación con Dante, pero luego, lo vi muy feliz contigo, y vi que tú eras una muy buena chica, y creo que de verdad puedes hacerlo feliz, perdóname y por favor, se mi amiga- me dice y me da la mano.-claro, descuida, desde ahora somos amigas- le tomo la mano y nos damos un abrazo.-bien, será mejor que volvamos.-sí pero… ¿sabes por qué no está aquí Dante?-… no, no lo se-bien gracias.Caminamos hacia donde están todos y de pronto alguien me abraza por detrás, yo suelto un suspiro al pensar que por fin, Dante está ahí.-feliz cumpleaños mi Violeta- me dice Darío y me abraza muy fuerte.-Ho, gracias Darío, de verdad era muy importante que tu estuvieras aquí hoy, conmigo.-pues aquí estoy.- me entrega una pequeña caja, forrada con papel morado y un moño blanco.-feliz cumpleaños Violeta- me abraza Valentina- no sabes que bien se siente saber que yo fui la primera amia que tuviste aquí.-gracias Valentina, no sabes lo bien que se siente saber que soy importante para ti.-siempre. Esperemos que estés aquí cuando cumplas dieciocho.-yo también lo espero.

Y así todos y cada uno de los que estaban ahí me dan un abrazo, todos, incluyendo a Isabella;-feliz cumpleaños Azul- me dice en tono de broma.-gracias Isa.

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Miro a todos lados y lo único que veo es gente hablando cómodamente, niños jugando y Kafka corriendo por ahí, pero me falta algo, algo importantísimo, alguien que no está ahí, y yo noto descaradamente esa ausencia, tal vez suene muy tonto e incluso imposible pero, siento que esa ausencia provoca un agujero negro en mi pecho, siento que sin esa persona que me falta no puedo respirar tranquilamente. Me hace falta, necesito sentir sus brazos.A lo lejos veo una silueta caminando hacia nosotros, y junto a esa silueta aparece otra de menor tamaño, ambas parecen masculinas, uno de ellos trae una caja grande en las manos, el viento hace volar el cabello rizado y largo de una de las siluetas, entonces las reconozco. El agujero en mi pecho desaparece y de pronto siento una calma que esperaba sentir desde un principio, la primera silueta que vi, de pronto me sonríe a lo lejos-hola Violeta, feliz cumpleaños- me saluda Ryan que viene Acompañando a Dante.-hola Ryan, gracias- le respondo y lo abrazo.-ya estas vieja nena, te queremos- me responde y me frota la cabeza.-hola fenomenito, feliz cumpleaños- me dice Dante y me extiende los brazos para que lo abrace.-¿dónde estabas?- respondo arrojándome a sus brazos descaradamente, sintiendo el calor de su pecho en mi cara, y la fuerza de sus brazos a mi alrededor.-tenia cosas que hacer, lo siento, pero ya estoy aquí- me responde, y me da un beso en los labios, pero no un beso dulce, más bien, un beso desesperado, como si lleváramos medio año sin vernos. Me ve a los ojos y sonríe.-te extrañe- le musito-y yo a ti, pero, te tengo una sorpresa, ven- me dice me toma de la mano y comenzamos a caminar hacia donde están mis otros amigos.-¿Qué pasa? ¿Cuál es esa sorpresa?

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-bien, ¿recuerdas tu poema “negro como la noche”?- comienza a decir mientras frota sus dos manos.-sí, ¿Por qué?- respondo desesperada por saber qué es lo que trama.-pues bien, Ryan tráela- le ordena a Ryan y él acerca a mí la caja grande que traían cuando los vi, después Dante me mira y me dice;- ábrelo, es tu obsequio.-¿mío? Wow, se ve muy grande- lo abro cuidadosamente. El papel que envuelve la caja cuadrada, es brillante y de color morado con flores negras, arriba tiene un moño negro y una tarjeta que dice “negra como la noche”, logro abrir un tramo de la caja con mis uñas cuando de pronto siento que algo se mueve dentro, ante tal movimiento me apresuro aún más por abrir la caja, logro quitar la cinta y la abro, dentro veo unos ojos que me miran fijamente y un objeto muy peludo, brillante, puro, negro azabache, como la noche.-¡no!- exclamo al saber de qué se trata.-sí, ya tienes a tu negra como la noche, feliz cumpleaños Violeta- me dice Dante y me abraza.Una lágrima se me escapa de los ojos y resbala lentamente por mi mejilla roja, siento en mi brazo desnudo el calor de los brazos de Dante, el calor que me hace sentir segura, protegida y amada, el calor que me hace sentir, dichosa y suertuda.-un gato negro, ¿Cómo fue que se te ocurrió?- le pregunto acariciándole la barbilla.-pues solo… se me ocurrió-gracias de verdad.Le doy un beso en los labios.-oye…-¿Qué?- le pregunto pues no me dice nada más.-no, olvídalo-no, dime ¿Qué pasa?-…-¡dime!- insisto-… te amo-…-te amo- repite y me da un beso en los labios, un beso cálido y dulce. Un beso, que sabe a perfección.

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-y yo te amo a ti.Me sonríe y vuelve a besarme.

Capítulo 11.- La Ventana.

12:35 AMHace una semana fue mi cumpleaños, y el día de hoy ayudare a Dante a mudarse a la antigua casa de Luz, en la que ella y su familia ya no están, pues sus padres creyeron prudente mudarse cuanto antes.

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Toco la puerta de la casa de Dante, y la que atiende es su mamá.-hola Violeta, pasa, Dante está arriba-gracias- respondo y subo las escaleras. Al verme, Dante camina hacia mí con una sonrisa en el rostro, me toma entre sus brazos y posa sus labios contra los míos, haciéndome sentir casi como si flotáramos, juntos, y solos.-hola, Qué bueno que viniste a ayudarme- dice Dante cuando me suelta.-claro, quien mejor en ayudarte a organizar bien tus cosas que yo.-pero no sé por qué tanta organización, digo, solo me mudo a la casa de enfrente.-a callar y a trabajar- le digo y comienzo a guardar libros en una caja.-y… ¿Cómo se va a llamar tu gata?- comienza a decir después de unos segundos de silencio.-pues… estaba pensando en nombrarla noche, pero… creo que le queda mejor Sara, ¿no crees?-¿Sara? ¿Por qué Sara?- pregunta como si ese nombre le recordase algo, como si le lastimara pronunciar ese nombre.-bueno, creo que es un nombre delicado, hermoso y… un tanto mágico-mágico…- repite mis palabras.-¿no te gusta?-no es que no me guste es solo que… es, ordinario.-¿ordinario? ¿Esperabas que la nombrara kuzichuiua o algo así?- le digo bromeando.-pensándolo bien, Sara suena fantástico.-sí, lo sé, pero, ¿Por qué no te gusta ese nombre? Sé que no es por ser ordinario, dime la verdad- le insisto mientras lo abrazo por detrás, pero mis brazos no alcanzan a cubrirlo todo, así que él se da la vuelta y me abraza.-bueno… es solo que, me recuerda a alguien, pero nada importante-¿seguro?-si…-bien…

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-olvidemos el tema, mejor ayúdame a llevar estas cajas a la casa de enfrente, ya he elegido mi habitación, ya verás por qué…

Al entrar a la antigua casa de Luz, esta luce vacía, sin vida, triste, incluso un poco sombría, subimos por las escaleras y recorremos el pasillo que lleva a una habitación, hasta el fondo. Yo hubiera designado esa habitación para los huéspedes, pero al parecer, Dante fue el que la eligió.-mira, ven- me apresura.-¿Qué pasa?-ahora te mostrare por que elegí esta habitación para mí.Me dirige hacia la ventana, al asomarme por ahí, puedo ver un patio, y mirando hacia enfrente, un ventanal que me parece muy familiar. Ese ventanal lo cubre por dentro una cortina roja aterciopelada.-¿de verdad?, ¡por aquí puedes ver mi ventana!-sí, es lo mejor de esta habitación.-si no es que lo único bueno- le digo bromeando-no, claro que no, también tiene… tiene…-no tiene nada, no te esfuerces- le digo bromeando y comienzo a caminar hacia fuera de la habitación.-Violeta- me llama de pronto.-¿si?-… ¿me amas?-sin duda, ¿Por qué lo preguntas?-me gusta oírlo de tus labios.-te amo, te amo, te amo- le repito seguidamente-gracias.-démonos prisa o se va a hacer noche aquí.-no, no hay prisa, la casa no se va a ir.-no, pero, el trabajo se junta- lo apresuro.-oye Violeta…-¿Qué? ¿Qué pasa?- musito.-tu… ¿te casarías conmigo?- me pregunta de pronto muy serio.-¿Que? ¿Estás loco?, solo tengo diecisiete años, a esta edad en lo último en lo que pienso es en casarme- exclamo.

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-sí, si lo sé, yo también, pero, si te pidiera que te casaras conmigo, ¿lo harías?-bueno… es una difícil pregunta…-no es tan difícil, solo hay dos posibles opciones de respuesta, sí o no.¿Casarme?, boda, responsabilidades, quehaceres, no suena muy atractivo ni convincente. Al pensar en Dante casado con otra mujer, un dolor me invade, una tristeza terrible me llena. Claro que me casaría con él, sin importar las inmensas responsabilidades que eso conlleve. Lo amo, y haría lo que fuera por nunca separarme de él.-pues… yo supongo que… si, si me casaría contigo-bien…-pero, ¿Por qué la pregunta?-no, por nada, simplemente quise oírlo- me dice muy seguro.-de acuerdo.-dime una vez más que me amas- me pide mientras se acerca a mí, tanto que siento en mi rostro su tibio aliento.-te amo.-pero… ¿Lo dices de verdad? ¿De verdad me amas?-y ¿Por qué no lo haría?- le respondo.Poso mis labios contra los suyos, de pronto siento una gran presión en mi labio inferior, se siente bien, pero a la vez duele, abro mis ojos y descubro que se trata de una mordida, siento sus labios carnosos y húmedos aprisionando uno de mis dos labios, debería molestarme, pero contrario a eso, le respondo con otra mordida.Escuchamos a la mamá de Dante que lo llama desde abajo.-Dante, Lot y tus amigos te buscan en la puerta.-ya voy mamá, gracias- contesta Dante, hace una mueca, como si le molestara el hecho de que sus amigos lo buscaran y luego me ve a mí- ¿vamos?-vamos.Comenzamos a caminar hacia abajo, tomados de la mano. Lot viene subiendo las escaleras y al vernos sonríe.

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-Ey Dante, venimos a ayudarte- comienza a decirle a Dante, luego me mira a mí y me da un beso en la mejilla.-¿venimos?- pregunta Dante un poco consternado.-sí, bueno, Luc, Susan, Sam, Avril, Ian y Ryan están abajo, Anne no pudo venir pues tenía que salir con sus padres.-Ho, pues, vamos a la casa de enfrente para que me ayuden a guardar las cosas que aún faltan- dice Dante, comienza a caminar y me jala con él.-oye chico, te noto un poco… extraño ¿te encuentras bien?- le pregunta de pronto Lot.-sí, me encuentro de maravilla.¿Eso es sarcasmo?, ¿Qué hice ahora?-bien- asiente Lot aun inseguro.Salimos de la casa que antes era de Luz, y vemos afuera a los seis chicos conversando cómodamente, al vernos salir de la casa, nos sonríen.-bien, aquí estamos, ¿para qué somos buenos? -síganme, me van a ayudar a guardar las cosas faltantes- repite Dante, de pronto muy seco, y su voz suena molesta y dura, sin un rastro de la amabilidad con la que me trata a mí.Lo aparto de los demás, lo pongo contra una pared y lo veo a los ojos, esos ojos que desde que vi por primera vez, me han enloquecido, después veo sus labios, y no me puedo contener. Apenas los toco con los míos, pero una parte de mi me ayuda a no caer en la tentación.-¿Qué te pasa ahora?- le pregunto refiriéndome a su repentino comportamiento.-¿a qué te refieres?- me pregunta desconcertado.-¿Por qué de pronto los tratas así?-no, por nada, estoy bien, es solo que… estoy un poco cansado, es todo.-no me mientas Dante, ¿Qué te pasa?-…-puedes decírmelo…-…-solo… ¿no me dirás nada?-no, es solo que…

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-¿que que?- insisto-que… bueno, desde que tú y yo comenzamos a salir como novios… he querido estar contigo, y solo contigo, disfrutarte, sentirte para mi…-sabes que así lo es…- pone su dedo índice en mis labios en señal de que me calle.-lo sé, es solo que, llevamos más de cinco meses saliendo juntos, pero… ningún día hemos estado solos tu y yo, más de una hora, siempre que te veo, tienen que estar ellos, yo quiero verte a ti, solo tú y yo…-¿Por qué no lo habías mencionado antes?-…-¿Por qué no me dijiste nada?- insisto-bueno… yo creí que siempre salíamos con ellos porque tú no querías salir conmigo a solas…-yo siempre aceptaba salir con todos, porque no quería alejarte de tus amigos, no quería que dejaras de tener trato con ellos por preferirme a mí, no quería hacerte elegir entre ellos o yo.-¿tu pensaste eso?- me pregunta y yo asiento con la cabeza- bueno, pues creo que ya todo se solucionó, ¿no crees?-sí, ¿estas mejor ahora?-mucho mejor- responde y me roda con sus brazos, para después besarme profundamente, y por largo tiempo.

Diez días después10:15 PMHace cinco días, la familia de Dante se mudó a la antigua casa de Luz.Estoy recostada sobre mi cama, leyendo las aventuras de Don Quijote de la mancha, cuando de pronto escucho un sonido sordo, como algo que golpea un cristal, el sonido se repite, una, dos, tres veces, me acerco a donde este proviene, y me lleva a la ventana, levanto la cortina roja y veo en la casa de a lado, una figura asomada en la ventana, entrecierro los ojos para ver de qué o de quien se

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trata, y logro ver un mechón de cabello volar con el viento;-hola Violeta- me saluda Dante-¡hola!, ¿Qué haces?, tengo escuela mañana, tengo que despertarme muy temprano.-¿Por qué te quejas Violeta?, ni siquiera estabas dormida hace un minuto.-bueno… hace un minuto no, pero en este instante puede que si- me excuso y suelto una risa tonta.-bueno… si no quieres verme…lo entenderé- dice fingiendo desilusión-no Dante, claro que te quiero ver, pero…-no Violeta, este es uno de los pocos momentos en los que podemos estar solos-pero ni siquiera puedo tocarte- le susurro-pero puedes… conocerme, anda pregúntame algo.-¿de verdad quieres que repregunte cosas a las diez y media de la noche, y a quince metros de distancia, al fresco de la noche?-es lo mejor de conocer a la gente- aun con la oscuridad noto un brillo especial en sus ojos.-bien… Umm, ¿cuál es…tu comida favorita?- comienzo a preguntar.-fácil, sushi- responde sin pensar- otra más difícil.-¿Qué prefieres, ser compositor, pintor o escritor?- lo reto. No dice nada por cinco segundos y después responde.-Umm, compositor, ¿es todo lo que tienes?-menciona cinco personas por las que darías la vida.-…-vamos, querías una pregunta difícil ¿no?-… OK, Umm, yo creo que… mi mamá, mi papá…-vamos, te faltan tres personas.-no me apresures, Umm, mi hermana, Lot…-te falta uno- lo apresuro entre risas.-…tu…-¿de verdad darías la vida por mí?- pregunto consternada.-sí, lo haría… ¿y tú? Seis personas por las que darías la vida

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-¿Qué?, no es justo, yo solo pregunte cinco- me quejo, conteniendo una risa.-seis, ahora- insiste y sonríe. Dios, esa sonrisa.-bien, bien… Umm, mi mamá, mi papa, Lluvia, Luna, Lucas… tu…-¿yo?... ¿me amas?- pregunta y se le escapa una sonrisa.-sí, te amo…- estiro los brazos hacia el frente, como si quisiera abrazarlo.-yo te amo más a ti…A lo lejos escuchamos un siseo y una señora grita desde la ventana de su casa;-¡ya cállense!-¿ves lo que provocas?- me burlo de Dante.-creo que será mejor que ambos nos vallamos a dormir ya, te amo mi niña, nos vemos mañana.-yo te amo a ti también- me despido y cierro la ventana de mi habitación, me dirijo a mi cama, donde Sara esta acurrucada, ronroneando. Me acomodo debajo de las cobijas, acaricio por última vez a Sara, le doy un besito en la cabeza, entre las orejas;-buenas noches Sara, descansa…

Capítulo 12.- No estoy de acuerdo

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07:55 AMMi alarma suena y entre sueños estiro mi mano para apagarla, me doy cuenta de lo que acabo de hacer, levanto la cabeza para ver los números que digita mi despertador, al ver lo tarde que es me levanto de un salto de la cama y Sara se queja. Tomo lo primero que veo en el closet y me visto rápidamente, me paso el cepillo por la cabeza sin importarme mucho como queda mi cabello y bajo a la cocina, las llaves del auto están en la mesa arriba de una hoja blanca, de cuaderno. El silencio reina en la casa, lo cual me hace pensar que estoy sola. La nota dice;

Violeta:Fuimos al doctor y de ahí vamos a ir al supermercado

a hacer las compras, así que supongo que en la tarde que tu llegues del instituto aun no estaremos nosotros en casa, te dejo las llaves de mi auto para

que vallas al instituto si no quieres caminar, nos vemos más tardeTe quiere mamá.

Genial, me dejaron sola, tomo las llaves del auto y salgo de la casa, abro la puerta del auto y lo pongo en marcha, aun no me siento lo bastante segura conduciendo, pero si no quiero llegar tarde al instituto, será mejor que deje los nervios a un lado y comience a manejar. Un chico cruza la calle, aun con el semáforo en verde y yo me pongo aún más nerviosa, empiezo a ver compañeros y me tranquilizo un poco más. Entro al estacionamiento y me detengo junto al lugar donde habitualmente estacionan la pick up de mis amigos, apago el motor, y me bajo del auto con mi mochila en el hombro. Comienzo a caminar sin ver a los lados y llego al aula de ciencias donde ya está sentada Valentina platicando cómodamente.-Violeta ven- me llama-hola Valentina, ¿Qué hay de nuevo?- la saludo en cuanto llego a donde esta ella.-¿has hablado con Darío?- me pregunta enarcando una ceja.

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-no, ¿Por qué?-Umm, no por nada- me dice insegura, como si supiera algo y muriera por contármelo.-no dime, ¿Qué pasa?- insisto-no, mejor dejare que él te lo diga.-¿decirme que?-ya te lo dije, no puedo hacerlo- dice luchando por no soltar la sopa.-no me digas que el e Isabella…-no, no han terminado… peor.-¿peor? ¿Me vas a decir o solo me vas a intrigar más?- digo desesperada-dejare que el mismo te lo diga- dice Valentina y ve hacia la puerta del aula, estira su mano para saludar a alguien que acaba de entrar, volteo y descubro que el que entro es Darío, Valentina me voltea a ver a mi- ¿quieres saber qué pasa? Ahí está Darío, pregúntale tu misma.-hola Violeta- me saluda Darío de un beso en la mejilla-Darío, ¿Qué pasa? ¿Tienes algo que decirme?Darío voltea a ver a Valentina e intercambian una serie de miradas, de pronto él le lanza una mirada llena de enojo al adivinar que ella me dijo algo que no debía, se sienta en la silla junto a la mía, me toma las manos entre las suyas, me mira a los ojos y sonríe, abre la boca para decir algo pero una voz atrás de él se lo impide.-¡Darío!- lo llama Isabella- ¿puedes venir por favor?-Umm, bueno, después te lo digo Violeta, tengo que ir- me dice Darío.¿Es enserio? -pero… ¿me van a dejar con la intriga?- me quejo.-en el almuerzo te digo- me avisa Darío mientras se levanta y camina hacia donde esta Isabella.-pero…-la vida no es siempre justa Violeta, ahora tendrás que aguantar la intriga- se burla Valentina.-no… digas nada- le respondo fingiendo molestia.-vamos, eres capaz de aguantar un poco de intriga.-Valentina, una palabra más y te asesino- le bromeo.

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12:10 PMSalgo del aula de clases y camino rumbo a la cafetería, hacia donde muchos van notablemente con el fin de encontrar algo que caiga en sus estómagos vacíos, pero a donde yo voy con el fin de terminar con una notablemente molesta intriga.Tomo una charola y coloco en ella un paquete de sushi, un jugo de naranja, un sorbete, una servilleta y una mitad de sándwich de queso. Camino hacia donde están sentadas Anne y Sam, pero unas tres mesas a la derecha veo a Darío sentado con Valentina y desvío mi camino.-Ey Violeta, ¿no te sentaras con nosotras?- pregunta Anne desconcertada al ver que me desvío.-no Anne, hoy no, solo por hoy me sentare con Valentina y Darío, tengo un asunto pendiente.-bueno… ¿pero si vendrás con nosotras al estacionamiento al salir verdad?- me pregunta Sam.-sí, las veo afuera- me despido.Camino hacia donde esta Darío, este al verme venir, sonríe y luego se da cuenta de la razón por la cual me sentare con ellos, le susurra algo a Valentina y agacha la cabeza.-muy bien Darío, de esta no te me escapas, dime que es lo que me tienes que decir o te mato- lo amenazo con mi tenedor.-bien bien, te lo diré, pero por favor, sin violencia- me dice mientras levanta ambas manos en señal de paz.-bien, dime…-OK, Violeta, sé que tú más que nadie me entenderá y entenderá como me siento, pero por favor toma esto con calma- comienza a decirme.-Ho Ho, eso no me gusta, la última vez que me dijeron eso, me alejaron de mis amigos y de mi vida.-bueno, pues lo que te voy a decir no te va a gustar mucho, a mí tampoco me gusto cuando me lo dijeron pero… no puedo hacer nada.-bien, dímelo- insisto, preocupándome, y haciéndolo notar en el tono de mi voz.

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-muy bien, Violeta, sé que últimamente te he considerado como mi mejor amiga y te quiero demasiado pero… mis padres y yo nos mudaremos.-¿mudarse? ¿A dónde?- pregunto yo con intriga, tristeza y emoción.-a… Washington.-¿Que? ¿A Washington?-sabía que reaccionarias así, Valentina también lo hizo, pero tú más que nadie sabe cómo me siento.-sí, si te entiendo- le digo más tranquila- pero ¿Cuándo te iras?-en un mes… tal vez menos.-yo no estoy de acuerdo- protesta Valentina y golpea la mesa con su mano derecha.-ni yo, pero, no podemos hacer nada ¿verdad Darío?- le pregunto yo a Darío.-no, mis padres tomaron la decisión y no puedo hacer nada.-pues yo no estoy de acuerdo, deberíamos poder hacer algo- interviene Isabella que acaba de llegar, se sienta en una silla junto a Darío y toma su mano.-no podemos hacer nada princesa, ya te lo dije- le responde Darío a Isabella con cierta ternura y comprensión en su voz.-pero… no puede ser que solo te vayas así, sin hacer nada- se queja ella.-sí, sí se puede, los padres solo te avisan y tú te tienes que atener a lo que ellos crean mejor para ti- le respondo yo.-solo tenemos que acostumbrarnos a que Darío ya no va a estar- opina Valentina con un bocado de comida en la boca.-Valentina, ¿se supone que quieres ayudarnos a sentirnos mejor?- se queja Isabella.-se supone- le responde Valentina metiéndose otro bocado a la boca.-pues no estas ayudando mucho- le responde Darío.-bueno y… ¿Quién quiere ayudarnos a empacar?- pregunta Valentina.-cuenta conmigo- le digo a Darío, respondiendo la última pregunta- para lo que sea.

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-y conmigo- me segunda Isabella, tragando el bocado que tenía en la boca.-bien chicas, gracias, no saben cuánto me están ayudando en estos momentos- comienza a decir Darío, le tomo la mano que tiene libre.-sí, si se… será difícil, pero estoy segura que todos te vamos a apoyar- le digo.-gracias nena…-bueno, pues yo me tengo que ir, porque no termine mi tarea, nos vemos después- me despido y me levanto de la mesa, desecho los alimentos que no comí y comienzo a caminar hacia el salón de ciencias, cuando siento que alguien camina detrás de mí;-Violeta, espera- me llama Isabella-Ho, hola Isabella, ¿Qué pasa?- pregunto un poco desconcertada-bueno… tenia algunas preguntas para ti- comienza a decir un poco insegura.-bueno… pregunta.-bien, Umm, cuando tu llegaste a Tennesse, ¿tenías novio verdad?-sí, lo tenía, ¿Por qué preguntas?-le respondo sin saber que decir-bueno, ¿Qué paso con él?- insiste.-Umm, bueno… a decir verdad no estoy segura, solo, un día decidimos que, la relación a distancia no iba a funcionar y… bueno, solo, terminamos la relación.-pero… ¿fue por la distancia o él tenía otra novia?-oye, ¿Por qué me haces tantas preguntas sobre Gael? -bueno es solo que… tengo miedo de que entre Darío y yo pase lo mismo que paso entre Gael y tu- confiesa y comienza a sollozar, se limpia las lágrimas con los dedos, delicadamente.-no, no Isabella, no tiene por qué ser así-¿y tú como lo sabes? No puedes decir que no pasara, si entre tú y tú exnovio pasó-bueno si, pero, no tiene que pasar con todos, es decir, si el amor es lo suficientemente fuerte, la

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distancia no será obstáculo para ustedes dos- le respondo-pero… ¿si no me siento tan segura con la relación?-¿A qué te refieres?- pregunto al no entender su declaración.-bueno… soy muy insegura- se da cuenta de lo que acaba de decir y suelta una sonrisa- sí, sí sé que debería ser la chica menos insegura del insti, pero debajo de toda esa vanidad, se esconde una niña demasiado tímida, siento que no soy suficiente para Darío, y que por eso él me va a dejar en cuanto se valla.-Isabella, yo creo… que deberías hablar sobre esto con Darío, él lo entenderá y su relación se fortalecerá- le respondo yo con calma.-pero ¿y si no?-bueno, y si no, es porque no valía la pena desde un principio, escucha, Darío es un chico muy especial, y sobre todo, comprensivo, estoy segura que todo saldrá bien.-sí, tienes razón, iré a hablar con el- me dice y me da un abrazo, sus caireles rubios caen en mi cara, huelen a fresas, y su perfume es de flores. Su abrazo se siente artificial, pero sincero. Le devuelvo el abrazo y después nos soltamos al mismo tiempo.Se da la vuelta y comienza a caminar, yo siento algo vibrar en el bolsillo de mis pantalones, saco el teléfono y en la pantalla dice “Dante”, contesto la llamada…-¿hola?-hola Violeta, ¿cómo va el instituto?- me saluda.-bien ¿y el trabajo?-hasta ahora, un poco aburrido, oye, Umm, quería saber si cuando salgas del instituto te gustaría ir a casa conmigo y mis padres a comer.-¿hoy?-sí, ¿te parece bien?- pregunta emocionado.-Umm, si… claro, me encantaría- respondo fingiendo interés.-bien, entonces nos vemos en el estacionamiento.

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El termina la llamada y es entonces cuando yo recuerdo que el auto de mi mamá está en el estacionamiento, aun así, decido no llamarlo de nuevo.Siento una mano en mi hombro, y rápidamente volteo para ver de quien se trata. -hola Violeta.-Ho, hola Darío, ¿Qué pasa?- respondo aliviada.-bueno, acabo de hablar con mi mamá y dijo que hoy después del instituto me pueden ayudar a empacar.En cuanto termina de decir eso, baja la cabeza y yo siento que me dejan caer un piano encima, una lagrima sale de mis ojos y resbala lentamente por mis mejillas, se desvía hacia mis labios, sabe salada. Él lo nota y la limpia con su dedo índice.-¿estas llorando?-no, me estoy deshaciendo- le respondo con sarcasmo y a él se le escapa una sonrisa.-no llores por mí, nena, supongo que ya estas acostumbrada a que la gente que quieres se aleje de ti ¿no?- pregunta a la vez que me jala hacia él y me envuelve en un abrazo.Sus brazos no se sienten tan seguros ni tan grandes como los de Dante, pero, se siente bien, como si fuera mi hermano mayor y me consuela después de caerme de la bicicleta. -pues… a decir verdad no, en mi vida solo me he mudado una vez, pero…, creo que después de esta estaré más que acostumbrada- le respondo secándome las lágrimas con mi blusa.-me haces sentir mal- carraspea-¿Por qué?-por hacerte llorar…Lo volteo a ver a los ojos y me dedica una cálida sonrisa.-no es la gran cosa, no importa- le respondo, tratando de que suene como sí no me importa y me suelto de su abrazo.-¿segura?- pregunta levantando mi mentón.-sí, Umm, respecto a ir a ayudarte hoy, tengo una cita con Dante…

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Noto la molestia en su rostro en cuanto pronuncio el nombre de Dante, gira los ojos y chasquea la lengua.-¿no puedes hacer una pequeña excepción?- pregunta haciendo el gesto de pequeño con sus dedos.-es solo que… quede de comer con él y con su familia y no quiero quedar mal- de pronto recuerdo que Tara siempre me apoyo cuando yo se lo pedía, y que siempre estuvo ahí para ayudarme a empacar, y sobre todo para limpiar mis lágrimas.- pero… ¿sabes qué? Cuenta conmigo.-¿estás diciendo que prefieres ayudarme que salir con tu novio?-no, estoy diciendo que prefiero quedarle mal a mi novio que a ti- mi voz se torna sarcástica.-tomare eso como un halago…-más te vale…

02:30 PMComienzo a caminar hacia el estacionamiento, con el fin de ver las mismas caras que me saludan con una sonrisa, pero, a decir verdad, voy con el fin de ver solo un rostro, un rostro encantador y mágico, un rostro que tan solo con pensar en él, mi pecho suelta un suspiro y mis piernas pierden su fuerza, un rostro que al tocar, me transporta a otro mundo, lleno de… aves cantoras, hadas que vuelan y duendes que corren libres con el viento.-te amo…- susurro para mí.A lo lejos veo el auto de mamá y junto a él, una pick up que reconozco tan solo viéndola de reojo, camino hacia ella, y cuando soy visible para los chicos que están en ella, una sonrisa se marca en mi rostro sin que yo me dé cuenta.-Violeta, te estábamos esperando- me saluda Sam.-OK, Umm, y… ¿Dónde está Dante?- pregunto viendo a todos.-fue a la tienda- me responde Lot que tiene a Sam abrazada del cuello.-Ho.

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Volteo a ver hacia la tienda, y veo salir de ahí a Dante con tres bolsas de frituras en una mano, en la otra tres sodas, y en la boca otra bolsa de frituras, camina hacia donde todos estamos y al verme me regala una sonrisa, deja las bolsas con los chicos y me toma de la cintura en cuanto está libre, me levanta del suelo con aparente facilidad y me gira en el aire, como si solo pesara cuatro kilos, me baja y me da un pequeño beso en los labios.-Violeta, te extrañe toda la mañana- comienza a decir emocionado.-no más de lo que yo te extrañe a ti- le respondo y le beso la nariz.Me toma de la mano, caminamos hacia dentro del instituto y nos sentamos en una banca libre. Él se sienta y me sienta a mí en su regazo, con mi brazo le rodeo el cuello y él me toma la cintura con su mano.-¿Cómo estuvo tu día mi nena?- me pregunta viéndome a los ojos y jugueteando con mi cabello.-pues… bien, bueno, paso algo malo pero…-¿Malo? ¿Qué paso? ¿Te hicieron algo?- comienza a preguntar sin parar, yo le pongo mi mano en el pecho en señal de que se tranquilice.-no no, no me hicieron nada a mí, más bien es sobre… Darío.- tan solo pronuncio ese nombre y el gira sus ojos y noto su cuerpo en mis piernas más tenso- Ey, dijiste que intentarías llevarte bien con el ¿lo olvidas?-pero es que…Le pongo mi dedo índice en los labios para que no diga nada más y al quitar mi dedo, pongo mis labios y enredo mis dedos en sus rizos. Al quitar mis labios me mira a los ojos y sonríe.-bueno… y ¿Qué pasa con Darío?- pregunta viendo hacia otro lado.-bueno, resulta que… ya no te molestara más.-¿A qué te refieres?- pregunta desconcertado.-bueno el… se va a ir a Washington- al decirlo no puedo evitar bajar la cabeza.-¿cuánto tiempo?- pregunta Dante aun sin comprender.

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-bueno… en realidad, se va a mudar a Washington, no va a volver…-ay nena, lo siento de verdad- me abraza, muy fuerte, casi me asfixia, pero se siente bien, acogedor, como si no me hubiera abrazado en muchos años.-no, está bien, es solo que… lo voy a extrañar.Me besa la frente, después los parpados de los ojos, la punta de mi nariz y finalmente llega a los labios.-sé que no me agrada pero… también sé que tú lo quieres demasiado…-bueno, Umm, hoy le vamos a ayudar a empacar…El abre los ojos tanto que parece que se le van a salir de las cuencas.-pero…-lo siento, esto es en verdad importante para mí- lo interrumpo al adivinar que me va a decir- perdóname, pero… otro día podemos comer con tus papás de verdad lo siento, pero hablamos de mi mejor amigo.-Violeta, no estoy de acuerdo, pero… ve.-¿De verdad?- pregunto desconcertada.-no estoy de acuerdo Violeta, pero… se lo importante que es el para ti, y no pienso evitarlo.-¿te dije ya que te amo?-no lo recuerdo.-te amo- lo beso en los labios-yo te amo más.-entonces, ¿está bien si vamos con tus padres mañana?- le pregunto mientras me levanto de su regazo pero él me sienta de nuevo.-mañana, sin excusas…-bien mañana- le respondo y me vuelvo a levantar, esta vez tomo su mano y lo levanto conmigo.

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Capítulo 13.- Odio las despedidas.

07:45 AMEs muy temprano aun. Siento el frío en mi nuca, y los parpados pesados e hinchados sobre mis ojos.Aun puedo ver en el horizonte verde, una neblina gris y densa, que trae consigo un frío y un silencio sepulcral, que cubre todo como una manta gris sobre la tierra verde.El portaequipajes del auto rojo de los padres de Darío está abierto y se asoman tres maletas negras y grandes, el papá de Darío sale de la casa diciendo algo;-bien, porque el camión de la mudanza se fue hace dos horas- dice el papá de Darío. -siempre es lo mismo, tenemos que irnos ya, ¡Darío, date prisa!- grita la mamá de Darío saliendo de la casa.Una figura esbelta y alta sale de la casa y camina hacia done estamos Valentina, Isabella y yo de pie.-bueno chicas, creo que… esta es la despedida- comienza a decirnos Darío- de verdad fueron los mejores momentos de mi vida los que pase con ustedes.-nosotras también te vamos a extrañar- le responde Isabella y se cuelga de su cuello en un abrazo.-no nos olvides ¿vale?- dice Valentina dándole un suave y cariñoso golpe en el brazo.-las voy a extrañar- responde Darío con lágrimas en los ojos.

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-no te metas en líos- añado.-no les prometo nada- responde Darío entre risasDe pronto siento tres cuerpos apretujándose y aplastándose unos a otros en un cariñoso, largo y triste abrazo.-Darío, date prisa- escuchamos la voz de la mamá de Darío.-Bueno chicas, creo que ya es hora- dice Darío mientras se libera de nuestro abrazo grupal.Nos quedamos perplejas al ver cuando Darío se sube a su auto y este comienza a avanzar.Con su mano hace la seña de despedida y nosotras le respondemos con el mismo gesto.Ahí, de pie, nosotras tres vemos como el auto rojo se aleja, nos quedamos viendo como poco a poco dejamos de verlo claramente hasta que no vemos ya nada. El viento helado de pronto nos hace reaccionar, mi nariz se siente fría, entumida y seca, mis manos no reaccionan, pues casi están congeladas, debí haberme puesto guantes. -bueno… pues creo que eso es todo- dice Valentina en cuanto Darío se va.-sí, eso creo- le responde Isabella.Todas agachamos las cabezas, pues una tristeza nos invade de inmediato.-bueno, tengo que irme ya, mi novio debe de estar esperándome- les aviso.-claro, tu que aun tienes novio- dice Isabella y después sonríe- lo siento, es la costumbre.-pues, vámonos ya, la nueva familia que vivirá aquí no debe tardar en llegar- nos apresura Valentina.

02:35 PMSiento la mano caliente de Dante cubriendo la mía mientras caminamos lentamente, en silencio, siento sus nervios y su tensión.-¿Cómo te sientes?- le pregunto de pronto.-Umm, ¿Por qué lo preguntas?-pues… te noto un poco… tenso.

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-no, estoy bien, un poco nervioso, pero bien- responde sonriendo.-¿nervioso? ¿Por qué? ¿Debería saber algo acerca de tus padres que me tenga que poner nerviosa a mí también?- comienzo a dispararle preguntas.-bueno pues… no, no nada, no te pongas nerviosa- me responde y me da un pequeño beso en la frente.Llegamos a mi casa y Dante se detiene, esperando que yo le diga algo.-pues… ¿quieres entrar a tu casa antes de ir a la mía?- pregunta.-Umm, no, mejor vámonos ya- respondo insegura.-bien, ¿lista para comer con tus próximos suegros?- dice bromeando y conteniendo las risitas.-no bromees-con que no quieres que sean tus próximos suegros.-no, no es eso pero, soy muy joven para pensar en eso aún, ¿no crees?- le digo bromeando mientras comenzamos a caminar.-Umm, un poco- me responde sonriendo y me toma de la mano.Nos paramos frente a la puerta de su casa y me siento nerviosa, como si las hormigas de pronto treparan por mis pies y llenaran mis piernas, hasta el cuello y el rostro.-¿te sientes bien?- pregunta de pronto Dante.-si ¿por?-bueno te… pusiste roja- me mira y me acaricia las mejillas que de pronto siento muy calientes y entumidas.-Ho bueno, debe ser porque estoy un poco nerviosa- me excuso.-pues… no lo estés- dice Dante mientras abre la puerta.Al pisar la entrada de su casa siento como si se le fueran las fuerzas a mis piernas y un calor de pronto me envolviera.Camino hacia la sala de la casa de Dante, donde su mamá está sentada, pintando sobre tela. El pasillo de la casa de Dante tiene muchas fotografías en las

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paredes, y reconozco esos hermosos ojos y esa hermosa sonrisa, en varias de ellas.-¡Violeta!, ya te esperábamos, creímos que no ibas a venir- me saluda ella parándose de la silla y dándome un abrazo y un beso en la mejilla.-si bueno, surgieron algunos problemas que me impidieron venir pero, aquí estoy- le respondo tratando de sonreír lo más que puedo.-bueno y… ¿tienes hambre?- pregunta mientras camina hacia la cocina para lavarse las manos que tiene llenas de pintura.-Umm, pues…-no seas tímida.Dante jala una silla y me indica con la mano que me siente en ella, yo lo hago, él se sienta en una continua a la mía y me toma una mano entre las suyas.-y bien, prepare un omelete para ti, Dante me comento que te quieres convertir vegetariana- comenta la mamá de Dante mientras sirve la comida en cuatro platos.-bueno… esa es la idea, aun no tengo tanta voluntad para hacerlo, pero lo quiero lograr algún día- digo sonrojada.-pues… me gusta tu voluntad- me anima y después voltea a ver a Dante- mi amor, ¿puedes llamar a tu padre? Está en la cochera.-claro mamá- le responde y luego me habla a mí- ahora vuelvo.En cuanto él se va de la cocina, la madre de Dante coloca los platos con comida en la mesa, pone uno frente a mí. Se sienta donde hacía tres segundo estaba sentado Dante y me mira a los ojos.No puedo evitar sentir cierto cariño hacia esa señora, pues al ver esos ojos grises, grandes y rodeados por unas largas y espesas pestañas, me vienen a la mente unos ojos casi iguales, que me hacen suspirar, hacen que mi vida de pronto cobre otro alternativo sentido, hacen que de pronto… nada importe más.-así que… vienes de Michigan- la madre de Dante de pronto interrumpe mis pensamientos.

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-Umm, si, de Pontiac.-que bien y ¿es lindo por allá?- pregunta enarcando una ceja y mordiéndose las uñas.-pues…- me interrumpe.-si eligieras vivir allá o aquí, ¿Qué eliges?-yo supongo que… si me hubiera preguntado eso hace dos meses le hubiera respondido que allá, pero hora… creo que prefiero vivir aquí- finalizo haciendo énfasis en la última palabra.-y… ¿se puede saber el porqué de que prefieras vivir aquí?- pregunta aunque notablemente conociendo la respuesta.-pues… en parte… gran parte… su hijo es la razón- digo insegura de mi respuesta.-ya, bueno pues, siéntete como en tu casa Violeta, y… lo que necesites, aquí nos tienes- dice mientras envuelve mi mano con las suyas.-De verdad se lo agradezco mucho- le respondo sincerándome totalmente.Escucho pasos, de dos personas y una risa, de inmediato reconozco que proviene de Dante. La otra risa es muy parecida pero más áspera.-Violeta, él es mi papá, aun no lo conocías- me lo presenta Dante en cuanto entran a la habitación.-hola señor, mucho gusto- lo saludo y extiendo mi mano, el la toma gustoso y me regala una sonrisa, tan mística como la de su hijo.-eres una linda chica, creo que tienes lo suficiente para estar con mi hijo- me evalúa y yo solo agacho la cabeza mientras siento como la sangre llega a mi rostro haciendo ruborizar mis mejillas.-papá, por favor, no me hagas esto- le pide Dante casi suplicando.-hijo, ¿sientes que te estoy haciendo pasar una vergüenza?- pregunta el padre de Dante entre risas.-a decir verdad si papá, deja de hacerme esto- responde Dante bromeando.-bien bien, mejor comamos.Me siento en la silla donde estaba antes, y Dante se sienta a mi lado. Ellos se toman de las manos, y la madre de Dante toma mi mano derecha y Dante la

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izquierda. Su padre da las gracias, y me sueltan. Todos me ven al mismo tiempo y me sonríen. Ay por Dios, no te sonrojes Violeta.Ellos comienzan a comer rápidamente, pero yo tengo que masticar varias veces, pues el nerviosismo me obliga a hacerlo. Nos invade un silencio sepulcral, casi incómodo. El padre de Dante toma un sorbo de vino blanco, lo prueba y después nos sirve a todos.-¿Te gusta el vino, Violeta?- me pregunta de pronto, y yo casi me atraganto, al sentir las miradas de los tres sobre mí.-Sí señor, me agrada- respondo tímidamente y mi voz se escucha pequeña.-Bien, ¿Cuál es tu favorito?- me pregunta de pronto intrigado.Casi le respondo, cuando abren la puerta y una voz me interrumpe.-Mamá, papá, estoy en casa.- dice una voz femenina, que nunca había escuchado antes.Dante se pone tenso de pronto, volteo a verlo y veo un brillo en sus ojos, una sonrisa se marca en sus labios, y voltea a verme, con la respuesta a mi pregunta mental, aun escondida en sus ojos.Una chica asoma la cabeza por la puerta, y los tres se ponen de pie, yo hago lo mismo por educación, porque no tengo idea de quien sea esa chica.-Naomi, ¿Cómo estas querida? Te esperábamos hasta mañana.- dice la madre de Dante, y abraza a la chica, largamente, y con profunda sinceridad y amor.-Mi niña, ¿Cómo te va?- dice el padre de Dante con la misma ternura, le da un beso en cada mejilla y luego la abraza. Dante la abraza, por un tiempo más corto, y después le da un beso en cada mejilla. Siento que una descarga eléctrica recorre mi cuerpo, y mis vellos se erizan. Celos.-Wow, los extrañe familia. – dice ella, ignorándome por completo. Dante se da cuenta de ello, me toma de la mano, y me pone frente a ella, yo no tengo más remedio que sonreír, no tan cálidamente.

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-Naomi, ella es Violeta, mi novia.- me presenta Dante y yo extiendo mi mano, ella la ignora y me abraza inesperadamente.-Mucho gusto Violeta, Dante ya me había hablado mucho de ti. Soy Naomi, su hermana.Violeta, sentiste celos de su hermana, patético.Una sensación de tranquilidad y calma reemplaza a la hostilidad. De pronto, la veo con otros ojos.-Hola Naomi, creí que estabas en California.- le digo lo primero que se me ocurre.-Sí, pero ya volví, aunque no por mucho, solo unas pequeñas vacaciones.- me responde mientras juega con un mechón de mi cabello.-Naomi, siéntate, estamos comenzando a comer.- dice la madre de Dante- ya te sirvo un plato cariño.-Gracias mamá.- responde Naomi y se sienta en una silla frente a la mía. Dante, su padre y yo, nos sentamos también y seguimos comiendo.-Estabas a punto de decirme tu vino favorito Violeta.- comienza a decirme el padre de Dante.-Umm, sí, mi favorito es el Vino tinto merlot chileno.- respondo tratando de sonar madura.-Mi favorito es el blanco espumoso dulce, en mi opinión no hay vino mejor- responde Naomi dulcemente.-Brillante elección hermana, pero me temo que no estoy del todo de acuerdo. En mi opinión, el mejor vino es el vino tinto lambrusco.- responde Dante haciendo ademanes con las manos.-No puedo disuadir hermano.- dice Naomi, y suelta una sonrisa. Al hacerlo sus ojos se entrecierran y hacen que su rostro se vea totalmente confiable y dulce.Su madre llega con un plato y una copa en la mano, y pone ambas frente a Naomi.- y, ¿Qué edad tienes Violeta?- continua.-Tengo diecisiete. -Maravillosa edad, disfrútala.- dice y toma un bocado.

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Capítulo 14.- La Llamada.

05:15 AMSiento que mis parpados no pueden abrirse, lucho mucho por ver la brillante luz de mi teléfono celular en medio de la oscuridad que inunda mi habitación.Estiro la mano hasta la mesita de noche junto a mi cama y tomo el pequeño aparato, como puedo veo la pantalla; “Dante”, es el nombre que aparece y sin dudar contesto la llamada.-¿hola?- digo y mi voz suena áspera, casi ronca.-¿princesa, te desperté?- escucho la voz de Dante al otro lado, pero no se escucha como la mía; la voz de Dante se escucha potente, llena de vida y despierta.-Umm, eso creo ¿pasa algo?-no, solo quería decirte que… bueno, primero, perdón por despertarte, sé que es muy temprano y…-espera, ¿Qué hora es?- lo interrumpo entrecerrando los ojos para que la luz no me lastime los ojos.-son las… cinco y un cuarto, lo siento sé que es muy temprano.

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-no, descuida, ¿Qué pasa, necesitas algo?- lo interrumpo tratando de que deje de disculparse.-bueno, llame a esta hora, porque estoy a punto de irme al trabajo y pues… quería preguntarte si quieres salir conmigo hoy en la tarde- pregunta con notable entusiasmo en la voz.-¿hoy?, Umm, si, supongo que sí, espera, estoy desorientada ¿Qué día es hoy?- pregunto un poco confundida.-sábado.-asómate a la ventana- le pido mientras me levanto de la cama lentamente y tambaleando.-bien- me responde y cuelga el teléfono.Camino hacia mi ventana, tapada con una cortina de terciopelo rojo; la hago a un lado y abro la ventana, no pasan dos segundos y escucho el sonido de otra ventana abriéndose.-¿Qué pasa? ¿Por qué querías que me asomara?- pregunta Dante confundido.-por qué… quería ver tu rostro y empezar el día con esa imagen.-OK, claro, soy irresistible- dice Dante bromeando.-Ho claro, súper irresistible- le respondo con sarcasmo.-bueno bueno, dejemos de hablar de lo increíblemente apuesto que soy y responde lo que te propuse- dice entre risas.-bien, hoy… de acuerdo, pero ¿A dónde me vas a llevar?-ya lo veras, no preguntes- dice con una sonrisa que me hace perderme en ella.-no es justo.-no, no lo es pero, no importa, a mí no.-bien, ¿a qué hora pasas por mí?- pregunto cambiando de tema.-Umm, ¿te parece a las… tres de la tarde?-si, a esa hora te espero.-bien, te mando un beso princesa- me dice y hace el ademán de mandar un beso.-yo igual te mando un beso amor- le respondo mientras tomo la manija de la ventana para cerrarla.

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-¡oye!- me llama de pronto.-¿Qué pasa?- respondo abriendo un poco más la ventana.-Umm, te amo.-yo te amo a ti también- le respondo con una sonrisa.-gracias por estar aquí para mí siempre.-no te preocupes, aquí estaré hasta el fin de tus días o de los míos.-eso espero, te amo- dice y cierra su ventana.Me recuesto de nuevo en mi cama, disponiéndome a dormir, cuando escucho un ruido sordo golpeando mi ventana, me levanto a duras penas, y voy a ver qué pasa. El rostro de Dante justo frente a mí, sus labios tocan y besan los míos desesperadamente.-Dante, ¿Estás loco?, ¿Cómo subiste hasta aquí?- le pregunto una vez que mi boca se libera de la suya.-Umm, hay una enredadera bajo tu ventana- dice sonriendo mientras entra a mi habitación.- ven, tengo frio.Dice y se recuesta en mi cama, tapándose con mi colcha.-¿Y el trabajo?- pregunto consternada.-Mi jefe acaba de llamar, hoy no abrirá el local, ahora si me disculpas, te necesito, mis pies están helados.- dice y me jala del brazo.-bien.Me recuesto en mi cama y lo abrazo, quedamos muy juntos pues mi cama es pequeña, comienza a acariciarme el cabello, y yo hago lo mismo. Suelto la liga que ata su cabello y comienzo a enredarlo en mis dedos. Sus labios encuentran los míos en la oscuridad, y me besa como si no hubiera un mañana, enreda sus piernas con las mías, me abraza de la cintura y me atrae hacia él.-Te amo.- suelta de pronto, me ve y me sonríe. Noto un brillo en sus ojos, y de pronto siento la necesidad de permanecer así, por el resto de nuestras vidas, juntos.-Sabes que, justo en estos momentos, eres lo que más amo, y eres lo único que quiero para mí, por el resto de mi vida.- respondo acariciando su cabello.

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-Nunca te separes de mí- susurra a mi oído.-Tenlo por seguro.Me besa suavemente, y después su beso se torna en desesperación. Me muerde el labio superior y lo siento sangrar.-Ouch- me quejo, y me limpio la sangre con el dedo.-Perdón Violeta, no me di cuenta- dice el alarmado y separándose de mí.-No me pidas perdón, solo repara lo que hiciste- le digo y el me mira sin entender lo que digo- bésame.Nuestros labios se vuelven a unir desesperadamente. Siento sus manos bajo mi blusa acariciando mi cuerpo, me estremezco bajo su tacto. Sus manos están frías, pero suaves y dulces. Recorre mi cuerpo, mientras su boca se apropia de la mía, y nos fundimos en una sola persona.

04:30 PM-mamá, ¿Dante no ha llamado?- pregunto preocupada a mi mamá.-hija, por décima cuarta vez, no, Dante no ha llamado- responde mamá con desesperación en su voz.-lo siento mamá pero… Dante nunca se había retrasado por tanto tiempo.-¿cuento tiempo de retraso tiene?- pregunta Lluvia de pronto.-Umm… una hora y media- le respondo mirando el reloj.-Wow, creo que está en problemas- responde mi hermanita.-créelo que si- le respondo mientras marco el número de su celular en el mío.Me responde la contestadora, lo cual me indica que el celular está apagado.-hija tranquilízate, ya tendrá razón para tardarse tanto- me tranquiliza mamá.

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-no lo sé mamá, él siempre me avisa, y su celular está apagado.-bueno, no te preocupes, ya vendrá- me dice sin prestarme mucha atención.Marco un número en mi celular deseando en mi mente que me contesten.-¿hola?- responde Valentina.-hola Vale, ¿Cómo estás?- respondo un poco aliviada.-bien ¿Qué pasa?-Umm, bueno, solo quería preguntarte si viste a Dante hoy- pregunto esperando que me de buenas noticias.-Umm, si, si lo vi, estaba con Ian, pero eso fue hace como dos horas- me responde.-¿y no sabes si salió con alguien o algo así?-no, no lo sé ¿Qué pasa? ¿Pasa algo malo?- pregunta de pronto un poco preocupada.-no nada, bueno, es que, me dijo que vendría por mí a las tres para salir…-¿y no ha llegado?- me interrumpe.-no, bueno lo estoy esperando pero, tiene apagado el celular.-entiendo… pues, no creo que sea nada malo nena, solo, tal vez se distrajo hablando con alguien…-¿Qué alguien?- la interrumpo un poco celosa.-tranquila Violeta, no lo sé, alguien, solo espéralo.-bien, gracias por tranquilizarme Valentina, te quiero.-bien, nos vemos después, adiós.-adiós- me despido y termino la llamada.

06:15 PMCon los nervios de punta, tarareo una canción en mi cabeza, jugueteando con mi celular.Miro el reloj y niego para mí con la cabeza, marco el número de Lot y espero a que atienda la llamada.-¿Violeta? ¿Qué pasa?- responde un poco agitado.-¿Qué pasa de qué?- digo sospechando algo- ¿sabes dónde está Dante?-¿no te ha llamado su mamá?- responde preocupado.

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-no, ¿Qué pasa? ¿Dónde estás?- pregunto con repentino temor en mi voz.-Violeta, estamos en el hospital…-¿Por qué? Respóndeme Lot ¿Qué pasa?- lo interrumpo.Ay no, Dante…-bueno… Ian y Dante iban en una motocicleta y…-¿y qué?- lo interrumpo de nuevo desesperada.-bueno pues… la motocicleta se volcó y…-en cinco minutos estoy ahí- lo interrumpo y cuelgo.-¿Qué pasa Violeta, a dónde vas?- me pregunta mi mamá.-Dante mamá, tuvo un accidente, están en el hospital.-deja te llevo- me dice mi mamá y toma las llaves del auto.-quiero ir- interviene mi hermanita.-no Lluvia, quédate aquí con papá, dile a donde fuimos- le responde mamá.-bien, me quedare- responde mi hermana resignada.

En el camino al hospital sigo tarareando la canción y tamborileando mis piernas con mis dedos.-Violeta tranquilízate, estoy segura que no es nada grave- me pide mamá.-lo siento, no lo puedo evitar, pensar que algo malo le pase a Dante…-no lo pienses, no le pasara nada- me interrumpe.-eso espero…

Al entrar al hospital, veo todo blanco, tan higiénico, tan estéril. Todo tiene un peculiar olor a… medicina y alcohol, veo a muchas personas de blanco, y a algunos con guantes y cubre bocas azules, me causan temor.Busco rostros conocidos entre la multitud de gente, pero no consigo éxito, hasta que encuentro unos ojos grises y grandes, pero extrañamente tristes. En cuanto esos ojos me reconocen a mí, se abren como platos.

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-¡Violeta! ¿Quién te dijo?- pregunta la mamá de Dante.-bueno… se suponía que él iba a ir por mí a mi casa, así que, me preocupe y…-bueno, pues, perdón por no avisarte, pero no quería que te preocuparas.-no, está bien, ¿Qué paso?- pregunto desesperada por saber.-bueno… Ian y Dante iban en la motocicleta y pues… Ian llevaba casco pero Dante no, perdieron el control de la moto y pues…-y… ¿Cómo está?- pregunto al ver que la señora deja de hablar.-delicado.-¿Qué tanto?- pregunto repentinamente asustada.-bueno pues… los doctores no saben que le pueda pasar, por ahora… esta en…-¿En qué?, dígame por favor- ruego.-el… está en coma- dice y rompe en llanto.Siento que mi mundo entero se viene abajo, siento millones de cristales clavándose en mi pecho y el filo destrozándome, hiriéndome… matándome.

12:20 AM-Violeta, deberías de irte a casa a descansar- me pide la madre de Dante.-no, quiero estar aquí, si quiere usted valla- le respondo sin levantar la vista.-no Violeta, insisto, ve a casa, mañana vuelves- insiste, con la voz tranquilizadora.-…-Violeta, descuida, no creo que despierte, de todos modos, yo te aviso cualquier novedad.-…-por favor, hazme caso- ruega.-… bien, pero mañana muy temprano regreso- acepto.-sí, está bien, ve con cuidado- me dice y me da un beso en la frente.

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Camino por la acera y observo lentamente la luna llena, brillante.El frío entra debajo de mi ropa y me hace estremecerme, no lo puedo evitar, me abrazo a mí misma cada vez con más fuerza para luchar contra el frío, pero no puedo, este me invade completamente y comienzo a tiritar.Recuerdo el tacto de Dante bajo mi ropa, y una lagrima rueda por mi mejilla.

Capítulo 15.- Malas Noticias.

08:25 AMLas filosas y pequeñas garras de Sara sobre mi rostro es lo que me despierta. Siento el ardor de las heridas que me deja en el rostro, y por el rabillo de mi ojo, veo mis manos, igual de rojas con la fina y larga línea que hacen las garras de Sara.Escucho un sonido perturbador que raramente, proviene de la garganta de Sara, como un gruñido o

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un quejido. Hace que me estremezca y le doy un pequeño golpe en la cabeza para que se calle.-Sara, no estoy de humor para escuchar tus… lo que sea que estés haciendo con tu garganta.Al parecer no entiende, pues sus garras rasgan mis colchas y el pelo se le eriza, sus gruñidos esta vez son más potentes y más largos. Comienzo a preocuparme.-Sara ¿Qué pasa, te sientes mal?- le pregunto mientras tomo su pequeño y frágil cuerpo negro entre mis manos y comienzo a examinarla- Sara creo que… no sé, no tienes nada.Comienzo a tocarla por todos lados, buscando alguna anomalía alarmante, pero… nada. Comienza a rasguñarme y a gruñirme, mi instinto me dice que la suelte pero, en vez de hacer eso la apretujo más contra mí.Ella comienza a rasguñarme agresivamente y a la vez a ronronear, como si fuera un robot defectuoso.Lo primero y único que se me ocurre es llamar a mamá para que me diga que hacer.-mamá, ¿puedes venir un segundo?- la llamo desde las escaleras.-¿para qué?- me grita desde la cocina.-¡solo… ven!- le respondo casi desesperada.Escucho los pasos de mamá en las escaleras y se aproximan hacia mi habitación, lenta y cansadamente.-¿Qué pasa ahora Violeta?- pregunta mamá un poco molesta.-mamá, no sé qué le pasa a Sara, mira como esta- le digo señalando a Sara que sigue rasguñando todo.-debe ser solo tu imaginación Violeta.-¡mamá no es mi imaginación, esto es real, y no sé qué le pasa a mi gata!- le respondo molesta.-…-mamá, necesito que me lleves al veterinario.-…-¡mamá!- insisto nerviosa.-no creo que sea necesario Violeta.-… bien… se lo pediré a papá- le respondo molesta.

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Al caminar hacia las escaleras para ir con papá el teléfono suena y la que contesta es mi hermana.-¿hola?-dice mi hermana.La empujo enérgicamente quitándole el teléfono y poniéndolo en mi oreja, ella cae bruscamente en el suelo, y me ve con sus ojos llenos de duda y desconcierto, yo solo me disculpo moviendo los labios pero sin omitir sonido.-¿hola, diga?- respondo nerviosa al teléfono.-Violeta- me responde la madre de Dante.-¿si? ¿Qué pasa?- respondo nerviosa casi gritando.-parece que Ian ya despertó y está estable.-¿y Dante? ¿Qué hay de el?- le pregunto cada vez más rápido.-bueno el…- dice y rompe en llanto.-¿el qué?- pregunto gritando.-creo que será mejor que vengas- me dice muy difícilmente, tratando de contener las lágrimas.-bien, llego enseguida.

Al encontrarme con mi mamá, se me salen las lágrimas sin querer y ella solo me ve desconcertada.-hija ¿qué pasa?- me pregunta tocándome el brazo tratando de consolarme.-mamá, ¿puedes llevarme al hospital?- le pregunto alterada.-hija, no puedo ir ahora, estoy un poco ocupada pero… toma el auto y ve tú.-bien, gracias- le respondo.

Tomo las llaves del auto, salgo de la casa y espero que Kafka valla a donde yo, pero no, ella se oculta de mí y emite un sonido parecido al llanto.Me subo al auto y lo pongo en marcha.Al llegar al hospital siento que las paredes se cierran sobre mí, cada vez todo es más pequeño y más asfixiante.Logro ver a lo lejos, rostros tristes, conocidos, pero tristes, son nueve, nueve rostros que siempre había visto sonrientes, ahora estaban abatidos y algunos incluso lloran amargamente.

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-Violeta- dice Avril destrozada al verme.-¿Qué pasa? ¿Paso algo malo?- pregunto desconcertada al ver a todos muy tristes- creí que Ian había despertado ya.-sí, ya despertó y está bien, perdió el conocimiento, pero ya nos reconoce a casi todos- me informa Anne quitándose las manos de la boca.-el problema no es el- añade llorando Sam.-shhh- la calla Lot- creo que la persona más apropiada para decir esto es… la madre de Dante.-¿Qué pasa? ¿Por qué no me dicen que es lo que pasa de una buena vez?- pregunto irritada casi gritando.-Umm, Violeta, por favor tranquilízate- me dice Luc acercándose a mi lentamente.

El calor sube por mi cabeza, y siento que ardo, que me quemo sin poder pararlo, comienzo a revolver mi cabello con mis manos tratando de detener el ardor que siento corriendo por todo mi cuerpo, quemando todo a su paso, haciendo cenizas mi sangre.-Violeta, Umm, lamentablemente Dante no… no pudo sobrevivir, su corazón dejo de latir y pues…- la madre de Dante rompe a llorar.-¿Qué? No, es una broma ¿verdad?, no, no puede ser- comienzo a decir incrédula.

Un dolor agujera lenta y dolorosamente mi pecho, dejando un vacío y un ardor impresionantes.De pronto mis piernas no me pueden sostener más, mi mente no piensa en nada, me voy de mí, no sé nada de mí. De pronto ya nada importa, ya nada tiene valor, ya nada vale la pena, ya nada sirve, ya no encuentro sentido a la vida, ya nada existe para mi…Me desvanezco, me pierdo, me hundo en una neblina de tristeza, en el umbral de dolor y sufrimiento.Me siento desolada, abandonada… vacía, hueca, sin vida, sin un propósito, sin nada.-Violeta, ¿estás bien?- pregunta de pronto una voz que no logro reconocer.

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-¿Qué si estoy bien? ¿Qué si estoy bien? ¿A quién se le ocurre preguntar eso?- comienzo a decir bastante alterada.-Violeta tranquila por favor- me calma Luc conteniendo el llanto.-¿Qué me calme? Me acaban de decir que no volveré a ver a mi Dante ¿y me piden que me calme? ¿Acaso no tienen sentimientos?- respondo gritando.-Violeta, todos entendemos por lo que estás pasando, pero no es necesario que hables de esa forma- comienza a decir Avril.-¡es que no entienden, no han pasado por algo como esto, no saben que es lo que yo pueda estar sintiendo!- exclamo.-creo que lo mejor es que la dejemos sola- propone la madre de Darío entre llanto.-sí, tiene razón, vámonos chicos- dice Lot y se lleva a todos dejándome a mi sola, como siempre, solo yo y mis fantasmas.

El ansia quema y carcome mi cuerpo desde adentro hacia fuera, el dolor me impide respirar y el agujero en mi pecho se hace más grande al pensar y recordar los momentos vividos, las sonrisas arrancadas, los besos dulces y pasionales, los ojos… ojos grises, grandes y hermosos.No puedo explicar bien todos los sentimientos encontrados en el momento en el que me dijeron que el gran amor que tuve se había marchado y no iba a volver, que la esperanza que tenia se había marchitado y no iba a renacer, que los sueños que tenía al lado de un maravilloso ser, se habían secado y no podían rejuvenecer.Sueños. Ojos. Vida. Locura. Dolor. Demencia. Alma…

Capítulo 16.- Capitulo final; Vive por mí.

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11:33 AM-Violeta, ya levántate- me grita desde abajo mi madre.

Desde la muerte de Dante, mi vida había tenido un giro radical, no comía, ni dormía, no vivía…Mis sueños, anhelos, ilusiones, planes y razones para vivir, se habían marchado con él, y no regresarían. Ya no encontraba una sola razón para ser feliz.Para que servía ser feliz con alguien si la vida simplemente arrebata los sueños de esa manera, solo… nos muestra que puede, pero después, nos abofetea de la manera más cruel y nos suelta la mano, nos deja caer, a nuestra propia suerte, sin importarle que nos pueda pasar, o cómo podemos caer.Cruel.Abajo, en la cocina escucho una conversación, con la voz de mamá y otra voz, muy familiar, pero lejana…-y ¿Cómo esta ella? ¿Qué tal lo está tomando todo?- pregunta la voz que no logro reconocer.-Pues… no muy bien, ella esta desolada, y temo por eso- responde mi mamá.-¿puedo?- pregunta la voz desconocida y enseguida escucho pasos en las escaleras aproximándose a mi habitación. Sara comienza a lamber suave pero firmemente mi mano derecha y enseguida comienza a ronronear y a acomodarse junto a mí. Su pelo se eriza de pronto y yo la acaricio.Me duele, me duele solo verla, ver esos ojos grandes, y ver su espeso y hermoso pelaje “negro como la noche”. Cada mirada, cada gesto de cariño proveniente de ese gato, es un zarpazo de recuerdos, cada maullido, cada ronroneo, es un rasguño de memorias, de imágenes que me vienen a la mente, y todas esas imágenes, son de una sonrisa, una sonrisa que me provocaba sentimientos que nada más podía provocarme, esa encantadora y enigmática sonrisa.

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-Violeta ¿Puedo pasar?- pregunta la voz desconocida, pero esta vez la escucho cerca de mi puerta.-no tengo ánimos de hablar con nadie, por favor márchate- digo sin mirar nada, solo el vacío a mi lado, y una gata a mis pies.-¿Ni siquiera tienes ánimos de verme a mí?- dice la voz, y un rostro se asoma por el borde de la puerta, al ver esos ojos que hacia tanto que no veía, me altero.-¿Tu? ¿Qué haces aquí?- me levanto de la cama y corro a abrazar a Tara.-bueno, creí que necesitarías a una amiga en estos momentos…- me responde Tara dándome un beso en la frente.-gracias de verdad por estar aquí Tara.-está bien pero dime, ¿Cómo has estado?-…-Violeta ¿Cómo te has sentido después de lo que paso?-…-¿No quieres hablar ahora?- pregunta Tara sentándose en la cama y yo solo niego con la cabeza- bien, no hablemos de eso, ¿Qué tal tus amigos?-¿Cuánto tiempo te quedaras?-el que sea necesario. -…-…-…-y… ¿cómo se llama tu gato?- pregunta tratando de encontrar un buen tema de conversación.-es ella.-bueno, ¿cómo se llama ella?-Sara.-¿Sara?, que… peculiar.-¿no te gusta?-no si, está lindo…-a Darío no le agradaba, decía que le recordaba cosas que prefería olvidar- la interrumpo sin pensar en las palabras que pronuncio.

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-Umm…-lo siento, me gusta hablar de el- me disculpo.-está bien, eso es lo mejor, no debes olvidarlo- me dice tocándome un brazo.-nunca podré hacerlo.-y… ¿Cómo te has sentido después de lo que paso?- pregunta Tara de pronto.-…-bien, no respondas.-…-solo… me preocupo por ti…-¿por mí? ¿Por qué?- pregunto de repente, molesta sin razón.-bueno porque…-¿Cómo puedes saber lo que siento?, ¡nadie lo sabe, ni siquiera tú!-Violeta, yo solo trato de hacer que te sientas mejor.-¿mejor? ¿Pretendes que me sienta mejor después de lo que paso?- comienzo casi a gritar.-bueno Violeta yo solo…-¡¿qué clase de… monstruo eres para venir y decirme que me sienta mejor?!-¡oye, no permitiré que me hables así!, comprendo que te sientes muy mal, pero no es razón para que me hables de esa forma Violeta, ¡yo no tengo la culpa de lo que paso, nadie la tiene!- me responde demasiado alterada.-bien, entonces no sé qué haces aquí- respondo apartando la mirada.-¡bien!- responde y sale de la habitación azotando la puerta.

Un silencio sepulcral invade mi habitación, seguido de un ronroneo.Tara abre de nuevo la puerta de mi habitación y entra, se sienta en el borde de la cama y se queda en silencio.-lo siento Violeta- dice de pronto- sé que debo entenderte y no dejarte sola en estos momento, por favor perdóname.-…

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-bien, no me digas nada, solo… hazme saber que me perdonas.-por supuesto que te perdono Tara, sería una tonta si no lo hiciera, eres mi mejor amiga- le respondo y la abrazo, tan fuerte como mis fuerzas me lo permiten.-pero, ¿Qué pasa Violeta?, ¿Cómo te sientes?- me pregunta una vez que las dos nos tranquilizamos.-me siento… sola.-¿Por qué?, sabes que no lo estas.-¿no entiendes que sin él no soy nada?, ya no pienso en otra cosa más que en su mirada y… me lastima cada vez que recuerdo que, nada vale la pena si el no está aquí.-…-en cualquier movimiento él está en mi mente, en cualquier cosa que pienso, el aparece aquí y… me está volviendo loca.-Violeta… no se ni que decirte, lo siento pero, me dejaste sin palabras.-…-si…tu, le pudieras decir algo… ¿Qué seria?- pregunta de pronto.-le pediría que… me devuelva mi vida…-Violeta, tu vida la tienes tú y tienes que aprovecharla, sé que va a ser muy duro, pero tienes que salir adelante.-…-…-¿Te ha pasado que llega un momento en el que todo te da igual…?- pregunto yo de pronto.-no.-pues, estoy pasando en ese momento, en el momento en el que buscas un solo motivo por el que valga la pena vivir.-…-pero… ¿Qué haces si ese motivo está lejos de tu alcance?-Violeta… tienes muchos motivos por los cuales vivir, pero nada es fácil, tienes que esforzarte por encontrarlos- dice Tara tocándome el brazo.-¿cómo cuáles?

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-bueno, vive por el…-…-el no pudo hacerlo, pero tú sí, ayúdalo a cumplir los sueños que el no pudo alcanzar.-…-ayúdalo a vivir, has que viva dentro de ti.-no sé qué decirte, porque creo que tienes razón, pero es difícil… Creo que siempre habrá un vacío dentro de mi sin él.-es difícil, lo sé, pero, lo tienes que intentar, no dejes que muera en ti también- me dice Tara y me abraza.-gracias Tara.

04:30 PMBajo lentamente las escaleras, no muy segura de lo que voy a hacer.Con el corazón aun lastimado, tomo una decisión.-Violeta ¿vas a salir?- pregunta mi madre al verme bajar las escaleras.-si madre, no tardare.-pero no puedes salir tu sola…-por favor mamá, se lo que hago- le respondo y comienzo a caminar hacia la puerta.

Al acercarme observo por el rabillo de mi ojo que Lluvia, mi hermana menor me mira con una mezcla de sentimientos en su mirada, temor, confusión, alegría, miedo… me acerco y le doy un suave beso en la frente, ella solo sonríe.Al salir, el sol quema lenta y dolorosamente mi piel descubierta. Bajo la manga de la chaqueta negra y sigo caminando.Al llegar a la acera a donde me dirigía, una lágrima sale de mis ojos, y siento ese húmedo y suave roce en mi mejilla.Toco la puerta y casi de inmediato abren la puerta.-Violeta, ¿Cómo estás?- me saluda Sam, quien abre la puerta- hacía tiempo que no te veíamos.-hola Sam, no sabía que vinieran aquí- le respondo mientras la saludo y me hace pasar.

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-si bueno, creímos que sería bueno que todos viniéramos aquí de vez en cuando a pasar el rato… y bueno, terminamos viniendo diario.Al pasar por el pasillo de la casa de los padres de Dante, observe casi veinte fotos de él y su familia o de él y sus amigos o de el solo, y casi al final de todas esas fotos, veo una que llama mi atención.

Una fotografía hermosa, donde está el, y un rostro muy familiar, el con una chica entre sus brazos, y ambos con una sonrisa en el rostro, ambos parecen tan felices, como si nada malo pudiera pasar.-esa foto siempre ha sido mi favorita- dice la madre de Dante interrumpiendo mis pensamientos.-sí, es muy hermosa- respondo yo sin pensar.-¿extrañas esos días?-todo el tiempo- respondo yo observando de nuevo la foto. -saliste bien en la fotografía- dice la madre de Dante tratando de hablar algo.-gracias, bueno, yo solo vine a decirle que… Dante siempre vivirá en mí, y lo que usted necesite, puede contar conmigo.-gracias Violeta, siempre me pareciste una buena chica, espero que esto no te halla dañado mucho.-señora, créame, esto me destruyo, pero… siempre es bueno levantarse después de caerse, y, yo nunca olvidare a Dante, el siempre vivirá en mí, y espero que también viva en usted.-puedes estar segura que sí.-bien pues… creo que este es un adiós.-¿Por qué adiós? Después de todo somos vecinas- dice la madre de Dante desconcertada.-si bueno… he decidido, regresar a Pontiac un tiempo, en lo que las aguas se calman.-Ho, pues, Viaje bueno…-Alicia en el País de las Maravillas…-¿cómo lo supiste?-bueno, es la escena donde la oruga se lo dice a Alicia antes de entrar hacer la metamorfosis… era la escena favorita de Dante.

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-cierto…-pues… Viaje bueno a todos.Y entonces me preparo y comienzo mi viaje, y una nueva etapa en mi vida, con Dante en mi corazón y en mi alma… con su sonrisa siempre en mente, comienzo mi metamorfosis.

Fin

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Agradecimientos especiales:

Quiero agradecer especialmente a mi madre, quien siempre estuvo y está aquí para mí, lo que yo necesite, sé que voy a poder contar con ella.A mi padre Leo por apoyarme siempre y por siempre estar ahí, por ayudarme en lo que yo necesitara, sin poner un solo pero.A mis abuelos, quienes siempre me apoyaron tanto moral, como financieramente y nunca dejaron de preguntar si necesitaba algo, siempre serán un pilar para mí.A mi mejor amigo José, quien nunca estuvo aquí, pero yo siempre supe que me apoyaba desde lejos y podía contar con el siempre.A mi Rodrigo en quien está inspirado uno de los personajes que no voy a nombrar, ¡gracias por dejarme!, y desde el fondo de mi corazón, gracias por estar aquí para mí y por ayudarme y hacerme todos los favores que te pedí, aun espero el helado.A mi amiga Elizza, por esperar el libro con ansias, y también por inspirar uno de los personajes, por comer conmigo comida china a sabiendas de que la odia, y por estar siempre conmigo.A Mariana, amiga del alma y corazón, por ser una de las personas más especiales e importantes en mi vida, por apoyarme siempre, y por darme ánimos.Y especialmente un agradecimiento a la pequeña persona a la que está dedicado el libro, gracias a mi pequeñita princesita Brisa, por inspirarme, y ayudarme desde donde está, gracias por ser mi ángel y mi pilar, gracias, porque sé que de alguna manera siempre me has escuchado y eres mi pequeña confidente.Un agradecimiento especial a todos los que leyeron este libro, pues, más que para mí, está escrito para ustedes, así que, muchas gracias.

Viaje bueno todos…

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