CESEDEN

LA INTEGRAC ION DE EUROPA

(Orgen: Alto Estado Mayor)

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BOLETIN DE INFORMACION N2 4-VI

L- LANUEVAViS IONDEEUROPA.

La euforia quehace un par de años producta el simple hecho de mencionar una Europa unida, no ha conseguido materializar, y la mezcla de excepticismo y renovados entusiasmos que produce la oposicin del General DE GAULLE demuestren que, a pesar de todo la concepcin del ‘3Mercado Corn&’ no esun concepto romnflco, sirto una pieza admirable de maquinaria econmica internacional que mediante la ayuda a cada uno de sus miembros para poner en ordensus asuntos ha hecho posible que todos puedan mantener sus ¡dertidades nacionales separadas. Por eso aflrman sus entuskistas que el resultado ie cImente significativo de unirse al Mercado CornGn es menos la p&dida de soberanfa nacionalen beneficio de una comisin suptanacional que el beneficio de la prosperidadnacional a travs del planeamiento econmico conjunto.

El origen del movimiento europeista se encuentra en la profunda desilusin de los estados nacionales que sigui a las destrucciones y desolacin dela segunda guerra mundial, Un gran movimiento se puso en marcha y, aunque —

solamente en ci campo econmico, ya a estas alturas ha real izado progresos considerables; pero estos progresos que, segGn sus partidarios, no habrtan podido —

producirse nunca de no haber sido por ua especie de suspensin temporal de losnacionalismos, ha tenido como consecuencia el restaurar, en Cierta medida, lafe popular en los estados nacionales,

Franceses, italianos, alemanes, etc., se sienten orgullosos de sus —

realizaciones. Hay muchos, los ms enterados, que reconocen el dbito de coda uno hacia el planeamiento cooperativo que tiene lugar en Bruselas y que, portanto, estn decididos a defender el Mercado Coman.. Pero para la mcyorta, loque viene ocurriendo es el resultado de un milagro francas, italiano o alemn,m& bien que europeo, Signo resultante de kas energtas nacionales.,

En otros trminos: el sueío de una Europa reunida puede que hayasido el motor del esfuerzo de ios primeros años de posguerra, pero la prosperidadque ha sido su resultado, esta produciendo el efecto paradgico de reforzar losnacionalismos.

La constitucin de Europa en ura entidad poiflica responde a un objetivo comGn de todos sus miembros, objetivo que tiene dos manifestaciones: laprimera es el deseo de ser independiente de los EE.UU.; la segunda es el deseode ser independiente de Rusia, No es, pues, te&icamente diftcil imaginar elantiamericanismo como el cemento que unir a los pueblos europeos. El Gene—

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ral DE GAULLE ha mostrado ya, cmo se puede explotar este profundo miedoy envidia al gigante del otro lado de Atl&itico y de hecho estos sentimientospueden ser una fuerza potencial capaz de unificar el confinente.

Pero, desde luego, esta fuerza esta en conf Ucto directo con la —

otra gran fuerza unificadora que es el temor a k Uni& Sovftica, puesto queuna Europa reunida en respuesta al vehemente deseo de ser ¡ndependiente delos EEOUU , se convertirta por definicin c. crecientemente vulnerable ala presin del Este0

Las relaciones franco—alemanas ilustran claramente este dilemaFrancia es mucho m& consciente de las amenazas planteadas por Amrka quea las procedentes de Rusia. Alemania Occidental, por el contrario, y debidoa su estado de truncamknto, se muestra mucho ms consciente del peligro rusoque del americano0 Por lo tanto, los dos pafses consideran sus relaciones b—scas con el resto del mundo desde punto de vista diferentes.0 Lo que los franceses conskran un gran obetivo, apasionadamente buscado, como serra la —

creciente irdepondenciade los EEÓUU., se presenta para Alemania como el —

mayor desastre posible al que hay que oponerse a toda costa6

Es posible que a medido que pase el tiempo puede emerger unaactitud m& concertada y la eventual desaparfcn de DE GAULLE de la escenapoirtica, podr facilitar grandemente este desarrollo. Pero si esto ocurriera,la causa de la unidad poiflica de Europa resultarfa perudicada ms que beneficiada, puesto que la actitud ms equilibrada de Europa hacia Amrica y Rusia harfa perder vigor al impulso hacia la unidad.

En el aspecto fundamental de la unidad polflica, Europa ha llegado Gitimamente a un punto muerto. Las dificultades actuales del Mercado Comn puede que no sean tan graves como estiman sus partidarios.

IL—ANTECEDENTESHISTORICOSDELAUNIDADEUROPEA.

La primera forma de unidad europea fu impuesta por las Legionesromanas: en el año 44 (a. de Cristo) Julio C&ar echa los cimiefltos del Imperio Romano de Occidente que en los 150 años siguientes, hasta Trajano, fuextendindose por la mayorra de Europa.

La idea romana persistf corstituyendo una especie de patrimoniohereditario que continua mucho tiempo despus del colapso del Imperio. Estaidea imperkl recibi nuevos impulsos a partir del siglo IV cuando el Cristia —

nismo se convfrti en la religin oficial del Imperio. La coronacin de Carlo

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Magno por e! Papa, en el ao 800, fu la restauracin de una idea familiar, porque durante siglos habta habido Imperio romano de Oriente y do Occidente0 ElImperio Carolingio, aunque de corta duraci&, llena un hueco y facflit el camino para el Sacro Imperio Germnico, cuyo primer titular fu coronado en Romael ao 962,

Pero lo que hicieron estos hombres no puede decirse que fuera proyectar la unidad de Europa, sino el establecimiento de un orden militar y social para defender el territorio de las amenazas de! Estee En realidad el Sacro Empera—dor Romano fu un Imperator o Jefe Militar encargado de las defensas orientalesdo la Europa cdstiana; la poskin de los Papas y de los Emperadores, como cabezas gemelas, espiritual y temporal, de la sociedad cristiana, indica que ambas —

eran instituciones de la Cristiandad0

Pero a medida que los Estados europeos empezaron a sentir el impulso del nacionalismo, a partir del siglo XIV, se vf cmo la visi& de una socio —

dad cristiana comGn habtan entrado en decadencia y que el futuro estaba a favorde las dincsttas y estados nacionales,

Durante los siglos XV y XVI los Papas continuaron haciendo apela —

ciones a los prtncipes cristianos para acabar con sus rivalidades y consagrarse ala lucha cornn contra el turco; pero nunca obtuvieron una colaboracin satis —

factoria y asf se permitir la catda del Imperio Romano de Oriente, que muy bienpodrra haberse salvado.

Modernamente se atribuye a Enrique de Navarra, Rey de Francia, elprimer “Gran Designio” para la unidad de Europa, lo que resulta curioso en unapoca de apogeo del nacionalismo din&tico y de las entonces nuevas doctrinas —

de la soberania nacional, Pero la union de Europa patrocinada por Enrique IV,que aspiraba a unir quince patses,tenra por finalidad oponerse al creciente po —

der de los Hansburgos, entonces en el apogeo del Imperio. La muerte de la ReLna Isabel 1 de Inglaterra parece que di al traste con los proyectos del primer —

Borbn0

Pero el inter& de la Reina Isabel en el proyecto se considera cornoparte de la poUica de “equilibrio de potencias’t que durante dos siglos y mediose barfa sentir en el Continente.

La tentaoi6n francesa de identificar Francia con Europa facilita enla poca de la revolucin la expansin de toda Europa del nuevo evangelio de—mocr&ico, lo que determina la creac!& de un partido pro—Francia en todos lospaies y facilita considerablemente el camino para el grandioso intento napole

• • , . • 1 • tnico de constituir un Imperio europeo con captai en Paris. Pero ia revolucion

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francesa tambin di nacimiento a poderosos movimientos unificadores, que cukminaron con la unidad nacional deAlemcnia y la de Italia, constituyendo el sigb XIX una era de exaltados nacknclismos, que conducen a lc primera guerramundiaL

La creacin de la Organizaci& Mundial de la Paz, en 1919, fuuna parte esencial de la estructura creada para mantener el tratado de Verso —

lles, Diez aFos despus del tratado se pudo ver que el poder de Inglaterra y deFrancia no eran garantía suficiente para el tratado y por eso el estadista fran —

ces ristides Briend, previendo el resurgimieijto de Alemania, desarrollo en losaPios 1929—30 sus ideas para unos Estados Unidos de Europa.

Es curioso observar que Briend rechcz la idea de comenzar con launidad economica, aduanera, etc.. Furidaridose de que ello expondría los pequeños países a la dominacin deles grandes. So idea era lcuri&, política —

de los Gobiernos en una Federacion de paises que nunca podrian hacerse la —

guerra eitre sí. Briend lanz su idea en u momento en que Europa vivía todavia e un conf fado nacionalismo y cuando se iniciaba la grar depresion economico que iba a obligar a los Gobiernos a una política econmica proteccionista,

Por ltimo, Hitler, al crear el III Reich en 194 , tuvo su visinhegem&-ica de Europa, que result deshecha por la segunda guerra mundialLos efectos de este conflicto fueron renacer las ideas de Briend, pero de forma ms potente y articulada.

III.- ELSUEÑODELAGRANEUROPA.

La Europa Unida significa para los partidarios de esta idea, la e—ventual asociacin de unos cuatrocientos millones de habitantes de 29 países,a uno y otro lado de la actual ‘1cortina de acero”, que funcionaría en todoslos aspectos econmicos, de polflica exterior y de defensa, así como de pla —

neamiento social, como si fuera una nacfn nica,

Esta es la finalidad a largo plazo, Ni siquiera los hbeuropeistasZm& optimistas creen que este objetivo pueda bograrse en un futuro previsible.Por eso el objetivo pr&tico inmediato es el de la “Europa Occidental Unida”Para conseguirlo, hay necesidad primeramente de cicatrizar la hendidura comercial existente representada por el “Morcado Comri”, de un lado, y la —

“asociacin comercial libre europea”, del otro. Una vez coflseguido esto, —

e • e • , eel nuevo gigante ecoriomico resultante podria unirse con ios paises de EuropaOriental en forma tal que incluso Rusia ppdiera beneficiarse de la unin. Es—

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fo es, desde luego, la visin defendida por los partidarios de la gran Europa0

Conseguida la unin, en una superficie de dos millones de millascuadradas, se encontrarfan reunidos los modios de producci&i de un tercio oms de la produccin mundial de alimentos, comercio exterior, rentas nacionales, carbn y acero0

La opini&1 de los curopeistas, casi todos los parses de Europa pertenecen por naturaleza al mismo molde econrnico, todos se beneficiarfan de pertenecer a una gran fabrica mundial. Todos tienen una cultura coman y en muchos, las nacionalidades y las razas estn mezcladas, especialmente desde la—ltima guerra,que una mayor intensidad en la interpenetraci& resultarfa fen—meno naturaL

Los fundadores de la idea sostienen que la unidad europea debe emt 1 e epezar, como se na hecho, en un numero reiativamente reducido de paises, y —

que la uni&i deber al principio afectar a u pequeño número de factores vitales de esos pafses0 Serra un “proceso contir)uo” (expresin favorita en Bruse —

las) concediendo tiempo suficiente para que las masas y sus lfderes comprue —

ben los progresos.

Sobre todo, dicen los fundadores, ninguna de las 29 naciones de —

ben perder sus caracterfsticas especiales. En real ¡dad, las que ya estn integrodas en el Mercado Coman, han conseguido en los ltimos años pulimentar y a—finar las mejores facetas de sus nacionalismos.

La mayorfa de los patses europeos actualmente fuera del Mercado —

Coman sor favorabks a una comunidad mayor que ste. El calor que mano dela prosperidad de Europa Occidental ha comenzado a fundir el hielo que los separa de los pafses de Europa Oriental, pero los vientos frfos procedentes de Rusia retrasan mucho la aproxmaci&

Algunos pa7es no pertenecientes a! Mercado ComGn desean integrcr• 1 •

se en el como miembros de pleno derecno y coronar ta organizacion con una u—nin polflica suficientemente flexible0 Otros patses prefieren la mero asocki—cian o incluso acuerdos bilaterales que a lo largo de varios años pueden constituir una especie de asoc!oci&i9 Todos se dan cuenta que ms tarde o ms temprano tendrn que llegar a trminos con “los SEIS” • La causa principal del —

eretraso en llegar a un mas amplio Mercado Comun es ei deseo de ias grandes —

poteflcias de obtener t&minos ms favorables para sus intereses acioales.

Admitiendo que, a la vista de los excelentes resultados obtenidoshasta ahora por sus instituciones, el Mercado continGa, con o Si Francia, su

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expansin, la constitucf&i de Europa se desarrollare en tres fases:

Faseprimera .— Inglaterra y dos de sus socios en La EFTA (Noruega

y Dinamarca) mas Irlanda, pueden unirse al Mercado en calidad de

miembros de pleno derecho. Todos los cuatro paies han hecho su

petic& de ingreso y, si no hay oposicin por parte de DE GAULLE,

podta llegarse a un rpido acuerdo, que ya existe en el papel, so —

bre las condiciones de ingreso.

La Europa de los SEIS, que actualmente cuenta una pobIacin de —

1 80. 000.000, se convertirfa con este refuerzo en un conglomerado

de 10 potencias en 260.000.000 de habitantes y, por lo tanto, el —

grupo comercial m& poderoso del mundo y fambn, potencialmente,

la rns poderosa agrupacin polca del mundo.

Rekcionadós con estos DIEZ hcbrra al menos 20 paies, ya rel aciona

dos con los SEIS. Estos son Grecia y Turqura, que presionan por te

ner la coiidicin de miembros plenos, y 18 antiguos territorios fran —

ceses. La mayorfc de los patses africanos de la Commenwealth Brt

nica quedarfan tambin automticamente asociados desde el momen—

te en que ingresara Inglaterra.

Fasesegunda.— Los restantes paises de Europa Occidental se conver

tirtan en asociados del Mercado. Chipre y Malta desean la aSocio—

ci& y aspiran a ser miembros de pleno derecho. España y Portugal

desean tambin ser miembros plenos.. Finlandia, que esta asociada

con la EFTÁ, continuarta lazos semeantes con los SEIS. Islandia po

dna ser un miembro pleno.

. o 1 Suecia y Suiza, segun los SEIS, deoeran abandonar algo de su neu

tralismo poltticc, que esta en conflicto con el tratado de Roma, a

contentarse con una simple relaci&i comercial cori el Mercado. Aus

tria, considerada corno neutral en contra de su voluntad, ha hecho

progresos para un acuerdo sobre participacin como asociada.

Fasetercera.— La fase ms difícil es la asociaci ¿e los pafses d

del Este Los planeadores de Bruselas aseguran que Polonia, Che —

coslovaqula y Alemania Oriental podrn ser en un futuro prximc —

suficientemente fuertes en e1 plan industri al para poderse incorpo

rar al Mercado Comn en calidad de miembros plenos, mientras que

Hungrfa, Rumanía, Yogoeslava y Albania se crea ser& capaces, —

al igual que Grecia y Turquta, de unitse al Mercado en calidad de

miembros asoc icdos

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De conformidad con los planos de Bruselas, gradualrnete, todos lospaises del arco de potencias industriales que se exilenderi desde Silesio a travs del Ruhr, Francia, Italia, Blgca, Holanda, y los Paises negros , traba1aran de acuerdocon una politica comun. Un mercodo europeo m&s amplio ayudar a resolver el problema de las re —

giones sub—desarrolladas, que sern utilizadas para descentralizarindustrias bsicas de la Comunidad0

Tal es el gran designio, cuya fase pri mero estar terminada en 1970.La fase segunda se considera corno consecuenck automtica de la primera y po—dr6 estar completada poco despus, mientras que solamente se har realizado hasta ahora conversaciones preliminares pero la Fase tres, mediante conversacionesentre los SEIS y Polonia, Yugoslavia y Checoslovaquia, a pesar rJ0 que estos parses ro reconocen todcvia el Mercado Comr0

Los fundadcres del Mercado Coman creen que el primer paso haciaun etedimiento con Rusia para un arreglo militar y polttico de Europa Central,¡nclüyendo una cierta reunificacin de Alemania, deber ser la entrada de Gran

.Bretana en el Mercado omun, a continuacion de lo cual sus miembros deberanponerse de acuerdo sobre una pomica comercial coman hacia Rusia y Europa —

Oriental, primer paso adelante para una poiflica exterior comn, requisito previo para la uflin polttica de Europa. Despus de haber calificado ci MercadoComen de ‘cornplot capitalista”, Rusia le ha mostrado respeto, especialmente aaquellos de sus sectores responsables de la ekvacion y consorvacio de alto nivel de vida para los trabaladores. Rusia ha contributdo a crear un clima de in—teIigoicia al permitir a sus satlites una cierta libertad para el establecimientode acuerdos bilaterales con el Occidente0 Estos lazos podrtan desarrollarse enforma de acuerdos multilaterales con el mercado sin necesidad de requerir laruptura con el comunismo de los patses al otro lado de la cortifla de acero.

A pesar de ciertos signos estirnulantgs, no puedeij espercrse cambiosdrcmticos. El Este de Europa esta firme bato la garra comunista y una complete

• —un ion del Oriente y Occidente de Europa puede muy bien tardar 2v e 30 anos.

Lo que si’ parece una convicci& general es que solamente a travsde instituciones como las del Mercado Com, o anlogas, podre llegarse clgndra a un sistema Pan—Europeo.

IV.- LASFUERZASQUEES TANDANDOFORMk ALANUEVAEUROPA.

Nada menos que en 1.883, el libro del Profesor SEELY “La expon —

Sin de IgJaterrc”, predecra el fIn de los Estados nacionales y que las naciones

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dominantes del futuro serfan aquellas que comprendtan contfrietes enteros, talescomo EE.UU. y Rusia, exis tiendo solamente probabilidades de conservaci6n parael Imperio Britnko.

Entre tanto ha habido dos guerras mundiales. Los EE.UU. despu&dela primera, se refugIaron en un extricto aislacionismo hasta que el ataque de —

Pearl Herbour los obIig a asumir responsabilidades rnundiales Por su parte, losrusos, fueron forzados por Stalin a crear “un pats socialista”, en lugar de hacer—la “revoluci6n murlial” difundida por Trotsky y solamente vuelvefl al mundo exterior obligados por Hitler.

Asr, despus deja primera guerra mundial, los dos superestados optaron por renunciar a responsabilidades intertiacionales y los clskos Estados soberanos de Europa jugaron la ltma óportuidad para cambiar el curso de la bistoria, caracterizado por enormes avances tecnolgicos, Este último esfuerzo —

constituye un fracaso y la “guerra fria” entre EE.UU. y la URSS.., hecho primordial de las relaciones internacionales de la posguerra reflejafl la realidad bipolar del poder mundial, con la cual ha tenido que conciliarse Europa.

Los tipos de organizaciones europeas surgidas a partir de 1945 hanreflelado estos problemas. La defeflsa contra la expansin sovfticc ha constituido ua carga que Europa ha compartido con los EE.UU. y Caad y su principal organfzacin ha sido, por taflto, At1&tica. Si esta orgaizaci& esta dominada por los EE.UU. y actuabi ente existe gran clomor para su reforma, ellodemuestra, un manifiesto acierto de la poiflica americana, encaminada a crearen Europa una conciencia de federalismo, principio en el que tiene una f partku lar por los buenos resul fados producidos en Amrka.

La necesidad de auto 1 preservaciSn en u mundo de suoer-Estados;Ja defensa contra la amenaza del Este y la rehabilftacin del pueblo alemn enla familia de las potencias europeas, no ha encontrado an una f6rmula insti—tucknal de expresfn Gnica y actualmente contarnos con una confusa variedad

II #zIde organizaciones. Incluso el Mercado Cornun , la mas eficaz y positiva delas creadas hasta ahora, esta dividida en tres comunidades: el Mercado Comanpropiamente dicho, la Comunidad Europea del Carbn y del Acero (CECA) yla Comunidad para la Energta Attmica0 La variedad de estos organismos ref leía los diversos grados a que los pcies rkmbros estn dispuestos a “comprometer”sus identidades nacionales en aras a una empresa coman.

El desarrollo de las organizaciones que han dado forma o la Europade posguerra, esta caracterizado por tres fases:

— La primera fase estuvodominada por la amenaza del Este y, debido., ,—a su mayor contrioucion, .domuada por los EE.UU.,

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— La segunda tuvo como problema principal la incorporacin de Alemania en ci sistema occidental0

— La tercera,an incompleta, esta caracterizada por la ¡mplantacinde la idea de la supranaconalidad.

Primerofase:PlanMarshafl,N.AOT000yConsejodeEuropa0

Mirando retrospectivamente los acontecimientos do la posguerra, —

es curioso hacer notar que hasta fines de 1946 los EEOUU. estuvieron tratando de preztone a Rusia mil millones de dlares, pues costa bastante tiempo convencerse de queno habta nada que hacer con la Rusia de Stalin. El discurso de Churchill en Fulton —

cay un tanto en el vacfo; pero afortunadamente el General Marshall, en su periodode Secretario de Estado de los EE.UU. lanza e impulse su plan para la reconstruccfndel Occidente de Europa.

Los americanos insistieron para que los recipiendarios de su ayudasuprimieran los obstculos al comercio y a los pagos entre unos y otros0 Para coordinar la distribucin de ayuda y fomentar la lfbera!izacin, establecieron la “Organi—

.4’ .4’ 4’ tu zacion Europea de Cooperacuon Economica (OECE), ba’o cuya egida las cuotas 111

dustriales habtan desaparecido virtualmente en 1950, los pagos dejaron de ser bi lateroles y se concluyeron numerosos arreglos multilaterales a travs de la “Unfn Euro —

pca de Pagos” y luego “Acuerdo Monetario Europeo”, que estableci la plena converti bilidad do las divkas del Occidente de Europa.

La OECE constituye un xito tan completo que ms tarde amplisu.. 4’ • ¡u .4’campo y modifico su nombre siendo rebautizada Organizac ion Europea para Coope—

racin y Desarrollo’1 (OECD), a la que se incorporaron como miembros de pleno. derecho los EE.UU., Canadc y Jap& y que se concentre en coordinar la polrflca de —

ayuda del Occidente hacia los parses subdesarrollados.

Al final del decenio 1 .940 Europa necesitaba tanto la ayuda dfrecta militar como la econmica y e! golpe de Checoslovaquia y bloqueo de Berlrn de1.948 subrayaron la urgencia del problema, que determin6 el nacimiento de la NATOen 1 .949. Sus organismos principales, el Consejo que representa a tos Estados miembros y el de los representantes permanentes, adoptan decisiones por el sistema de uncnimidad. Ello es causa de debilidad de ambas instituciones, que nacieron de esta —

forma por la oposicn britnicc al desarrollo de instituciones federales potentes.

E! Consejo de Europa ha perdido actualrrete la importancia quetuvo en un principio, cuando constituye una etapa importante en el camino hacia laComunidad Europea, actualmente en vigor. Durante sus primeros años fu el centro

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de reunin de los ms distinguidos estadistas de Europa y cuando pronto de deser un buen vehículo para las esperanzas de todos, continua siendo el lugar decitas de los conspiradores para la unidad de Europa0 Sus acciones pcrlarnentanos no producen ya la excitacin ni reflejan nombres eminentes, como en susprimeros tiempos. Sin embargo, contina skndo un elemento valioso, aunqueno decisivo, en los campos legal, socia’ y cultural0

Segundafase;lntegracndeAlemaniaenelsistemaOccidental

Hacia finales de la segunda guerra el odic hacia Alemania domLnaba toda otra consideracin y la f&mula m& ampliamente aceptada para des—pus de la victoria era ci “plan Morgenthau’1, bajo el cual Alemaria perderfatoda su industria y se haría físicamente incapaz de nuevas guerras.

— ,Pero ,pronto quedo manifiesto que la recuperacofl de ta economia

fi fidel Occidente de Europa requena la participacion Alemana y el Plan Marshali¡ncluy Alemania OccidentaL Y así inmediatemente despus de la reforma monetaria del Doctor Herhard, en 1.948, el “milagro alemn” se puso en marcha.

Esta situacin plantea el problema del futuro del Ruhr, enrpidorenacimiento, por ser el centro del ms importante complejo de industria pesadade Europa y tradicional fuente de la potencia militar alemana, en donde Hitlerencontr fuertes y decisivos apoyos. La respuesta fu supranacioflaliZar el Ruhr;pero para evitar herir los sentimientos nacionales de los alemanes se decidi supranacionalizar tambin el resto de la industria del carbtSn y el acero del Occidente de Europa. Esto fu el verdadero significado del “plan Shuman”., origende la “Comunidad Europea del Carb& y del Acero” (CECA).

Los países del Benelux, Francia e ItaRa, convinieron unir SU carbn y su acero con los de Alemania Occidertal, bajo el control de una costitucian semejante a la americana, mejprada por el &gano administrativo llamado“Alta Autoridad”. Tambin dispcna de un Cortselo de Ministros, una AsambleaParlamentaria y un Tribunal0 Gran Bretaña ro quiso tomar parte, pero firrn unacuerao de asoclaclon que continua siendo su principal enlace con la Comunidad Europea.

La “Comunidad” constituy un gran xito en todos los aspectos; —

pero lo m& significativo paro el futuro fu el ejemplo que di de transferenciasde soberanías nacionales. Constituy una verdadera panacea y no fu extrañoque ms tarde se invocara la misma f&’mula para el nuevo pero paralelo problema de la ¡ntegracifl de Alemania en el sietema de defensa europeo.

La guerra de Corea apremi a los americanos que ejercieron pre—

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siones para que los alemanes contribuyeran a la defensa del frente europeo con12 Divisiones. Sin embargo, los franceses se opusieron tanto a un renc:cirento de la Wehrmacht como a aceptar a esto pats como miembro de la NATO en —

un plano de igualdad,

La solucin que se arbitr fu la de constituir tina Comunidad Eu—II II • • II •

ropea de Defensa, el iiamado E0ercito ouropeo ¡ de tipo supranacional y ano—logo a la CECA, pero con un Parlamento de importantes atribuciones.

Inglaterra se neg a participar y finalmente hicieron lo mismo losfranceses, a pesar de haber sido ellos los que la concibieron. ¡Vr Anthony Edenemprondic entonces activas gestiones por toda Europa logrndose la creacin dela “Uni& Europea Occidental”, que asociaba a Inglaterra y “los SEIS” en el —

control del rearme alemn ast como en otros objetivos, tales como norma!iza —

cn de los armamentos, que tuvieron poquiimas reaUzadones prcticas. La ¡rnportancia actual de la UEO es la de ser la nica instituciin europea que man —

tiene la asociacin de Gran Bretaña y “los SEIS” unidos por un tratado de 50años.

Tercerafase;:EmergenciadelasupranacioaUdad

Los apasionados y negativos debates sobre el “Ejrcito Europeo” —

paralizaron los progresos hacia la unidad en otras direcciones, a pesar de registrarse pasos firmes hacia la unidad ecoriSmica, que conducen poco a poco hacia el Morcado Coman y el Tratado de Roma, rpdamente redactados por ex —

pertos en !Vtessina el año 1.956 para aprovechar la circunstancia de que todoslos primeros Ministros de “los SEIS” eran por aquel entonces ardientes europoistas.

Firmado el marzo de 1 .957, el Tratado de Rorna estableci un prçgramo para lograr la unin aduanera y econmica de sus asociados a lo largo de u perrodo de 12 años. Los estados miembros se compromefieron a abolir —

las barreras que ¡mpiden la libro crcukcicn de bienes, mano de obra, capitaly servicio; a unificar econmicamente y armonizar la poiflica socia! y a perseguir ua polflica comGn, tanto comercial como de desarrollo, hacia los terri —

torios de Ultramar de los mernbrs asociados, la mayorfa de ellos africanos.

El Mercado Coman comparte con la CECA ciertas ¡nstitucionesde esta Itima: el Consejo de Ministros, e1 Tribunal y un Parlamento incrementado; pero se dote de su propia orgcnizaci&i administrativa presidida por unaComasion de nueve mernoros.

En sus siete primeros años do funcionamiento las tarifas aduane—

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ras han sido reducidas en un 70 por ciento; est casi compkta una polica co—mn agrfcola y se hacen grandes progresos para el establecimiento dela librecirculacion de mano de obra y capitales, asi como para lc.cmcnizacion de lasleyes mercantiks y la polttica sociaL El Merccdç Coman es, pues, una aut&.tica maifestacin de supranacionalidad er asuntos econmicos y sociales. Yla causa principal d. disputa con el Presidente DE GAULLE deriva de esta circunstancia, pues, de conformidad con el Tratado de Roma, a partir de ,966,la mayorta de las decisiones de Mercado Comen daber& ser tomadas por votomayoritario y no por unanimidod, como hasta ahora.

El Presidente DE GAULLE desea la cooperaci& intergubernamental, mientras que los Arquitectos del Mercado Coman, tales como M. MON —

NET, aspiran a una federacin dominada por un Parlamento supranacional. Porello nadie espera que se puedan conciliar f&ilmente estas dos posiciones tancontrapuestas.

La crisis del 30 de lunio de h965, en Bruselas, cuyo resultadofu la pcrlisis del Mercado Comen, no fu sino la consecuencia de estas dosconcepciones de Europa:

La Comisin que administra el Mercado Coman es una ¡nstituciin¡ndependiente, cuyos miembros, aunque designados por los Gobiernos, no re-

si u ••presentan a estos y asumen ante el Mercado una responsabilidad comun y unmandato comn. Los Estados asociados han aceptado pues, por el tratado, unacesi&) de soberanfa, si bien esta cesi& esf limitada a mismo tiempo en cuanto se refiere al objeto como a la aplicaci&).

El Consejo de Ministros nacionales esta obligado a colaborar estrechamente con la Comisin y no puede adoptar decisiones importantes a noser que le sean propuestas por asta, al mismo tiempo que las propuestas de la

. .0 o • t o .# .• oComision no pueaen ser modificadas por ei Conselo, sino por votacton unanime.

Como el Consejo no es permanente, existe un comit de representantes de los seis Gobiernos, que con la categorra de Embajador y asistido de-expertos aseguran la continuidad necesaria y la colaboraci&i de los dos orga —

nismos citados.

El sistema, pues, ha sido concebido de manera que la labor dela Comundad se realice sin afectar a los derechos soberanos que cada nacinestima oportuno defender contra toda usurpacin. La Comisin, pues, ¡mpui—sa las grandes visiones de conjunto en nombre del inters general, mientrasque el Consejo de Ministros viofla para que tales visiones tengan en cuenta —

los intereses nacionales ppendQ para ello las necesarias adaptado —

nes.— — — — —

La Comunidad Europea sobre Er)ergta Atmica, o EURATON, se penen un principio que despertarfa mayor entusiasmo que ci Mercado ComGn, pues

ambas comunidades fueron creadas ci mismo tiempo y había la esperanza de que ei¡nters que despertarta el EURATON facilitarta el progreso de ambos proyectos. Ylo rczn de ello fue que en 1956 todos los expertos se mostraban hofldamente preocupados ante las persrectivcs de un dfic7f energtko que solametc podrta ser 0Timinado mediante el desarrollo dc la energTa atmica. A esta preocupccin respon—dft el ¡mportante programa atmko britnico para usos civiles0

El EURATON esta organizado como el Mercado Com. Su funcinprincipal es la coordincci& de los programas nacionales de invesHgacin, prestando ayudas con sus propias trabajos para corregir deficiencias nacionales. Juntamente con la otra Comunidad especializada (Mercado Comen), se convertirn en unaComunidad nica durante el presente año de 1966.

Gran Bretaña podía haber er)trado en un principio e el Mercado Cc..mn, pero sus representantes desistieron en el curso de la conferencia de Mesina.Cuando el Mercado se convirti en una realidad Inglaterra propuso absorberlo enuna Zona de Comercio Libre ms extensa de la que formarta parte tanto ella comolas otras naciones europeas. Pero el proyecto fracasa aunque m& tarde fu reactivado en forma m& etenuada dando lugar a la Asociacin Europe de Comercio Libre(EFTA), coflstituida por Gran Bretaña, Dinamarca, Suecia, Noruega, Suiza, Aus;T’tria y Portugal, a la que se asocie ms tarde Finlandia. El programa de la EFTA —

propugna la abolicin de las tarifas industriales siguiendo uros plazos anlogos alos estcblecidcs para el Mercado Coman. No existen tarifas exteriores unificadasyunos receptes y fracasados intentos para hacer de ella una uni& econmica hanpuesto bici) de manifiesto que la EFTA es fundamentalmente un orgaflismo ¡nterinocon la finalidad de inducir a los patses porifricos de Europa a que presenten un —

frente unido en la esperanza, hasta ahora ¡justificada, de que juntamente puedanpersuadir a los pafses del Mercado Coman o que les ofrezcan mejores condicionesjuntos que negockndo por separado.

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EUROPAYLASSUPER—POTENC1AS

Mil Iones deA, Produccfntotal, d6lares

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B, Poblaci&) Millones

— Europa Occidental , . • . • . . • . . • • • . • u • 316,5— Estados Unidos • . . . . . •. . . • . •. . . • 190,5— Rusia , , • • • , , • • • • , • • • , . . • . 226,3

C. FuerzasArmados Millones

—Europa Occidental • . • • • • • • . • • • . . . . 3,1— Estados Unidos • . • • • . • • • • , • • • • , • • 2,7—Rusia. • • a • • e e • • e • • • • • • 3,1

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• LASTRESZONASDECOMERCICDEEUROPA

A. Comunidad Econmica Europea (Mercado Coman)

- Mibros plenos: FRANCIA, ALEMÁN LA OCCIDENTAL, ITALIA, HOLANDA, BELGICA y LUXEMi3URGO.

— Miembros asociados: GRECIA y TURQUIA.

3. Ásoc1acLnEuropeadeComercioLibre (EFTA)

- Mier’bros plenos: INGLATERRA, SUECIA, DINAMARCA, NORUEGA,SUIZA, AUSTRIA y PORTUGAL.

— Miembros asociados: FINLANDIA.

C. CCMECON

- Miembros: POLONIA, CHECOSLOVAQUIA, ALEMANIA ORIENTAL,HUNGRIA, BULGARIA y RUMANIA.

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