EDUCAR EN

VALORES

LA IMPORTANCIA DE EDUCAR EN VALORES.

a familia es la primera escuela de la vida, y es en la misma que los padres intentan transmitir a sus hijos, a través de un ambiente de amor, los valores que creen forman a una

persona buena, íntegra, coherente y capaz de estar en sociedad.

¿La familia es la primera escuela de valores?

Sí, y la consigna es vivir los valores que se promulgan. Es importante que el hijo vea que los adultos hacen lo que dicen. Si en casa llaman al padre por teléfono y él le dice a su hijo que conteste que no está, eso marca una conducta ambivalente. Si el padre dice la verdad, trata con respeto a todo el mundo, desde el barrendero al presidente, no tira papeles en la calle, es respetuoso de las leyes, es más sencillo que el hijo entienda el mensaje.

¿Cómo pueden hacer los padres para educar en valores?

Es muy importante el trabajo de los adultos (padres, maestros, etc.) que interactúan en la cotidianidad de la vida del joven.

Para que el joven desarrolle valores debemos lograr que conozca el bien, ame el bien y haga el bien. O sea que entienda los valores, que adhiera afectiva y emocionalmente a los mismos y que fundamentalmente los manifieste en acciones. El secreto es que los adultos fomenten hábitos operativos buenos en los jóvenes, lo cual ayudará a que adhieran afectivamente al valor.

¿Cuál es la importancia de la escuela en el fomento de los valores en los jóvenes?

Aunque la familia sea la primera base para el fomento de los valores, la escuela no deja de ser un espacio donde los jóvenes pasan gran parte de su tiempo, por lo cual en ella se deben

practicar los valores cotidianamente.

Las escuelas pueden también enseñar a los jóvenes valores al mismo tiempo que enseñan matemáticas, lengua y las otras materias. A medida que se incrementan los problemas sociales y disminuye la capacidad educativa de la familia y otras instancias socializadoras, más se acude y demanda a la escuela que contribuya a intentar solucionar los problemas que afectan a los niños y jóvenes.

¿El respeto es un valor fundamental en nuestras vidas?

Sí, el respeto identifica a la persona como valor: Se respeta a la otra persona porque se le reconoce que como ser humano merece el trato propio de su condición. Se establece que la convivencia es una relación entre seres con capacidad de derechos

que siguen a su condición de persona y, por tanto, del respeto igualitario y universal, que se deriva del fundamento mismo del derecho natural. El respeto supone dotar a toda relación personal de una norma objetiva que implica el querer no dañar la sensibilidad de con quien se está tratando. En cuanto que ese querer es un acto voluntario y la percepción de la sensibilidad ajena un acto intelectual, se precisa de la formación del juicio para potenciar la voluntariedad el acto en la dirección adecuada y para experimentarse en la apreciación de la sensibilidad ajena. “Conocer el valor propio y honrar el valor de los demás es la

verdadera manera de ganar respeto.”

¿Por qué se dice que hoy en día existe una crisis de valores en los jóvenes?

Apatía, desinterés, conformismo, poca solidaridad y escaso compromiso con la sociedad, ésa es la radiografía de los

jóvenes y ésa es una realidad a la cual las instituciones de educación también han abonado por no contar con instancias adecuadas para impulsar los valores entre la juventud.

En la actualidad, el entorno social, la desintegración familiar, los retos de la globalización y las nuevas tecnologías implican ofrecer a los jóvenes valores adicionales a su formación académica, ya que si no se hace así, iremos en picada con respecto a estos aspectos primordiales para el desarrollo de las nuevas sociedades.

“No es que no existan los valores, sino que hay una distorsión en la exteriorización de los

mismos”.

¿Cuáles son los errores por revertir en la educación de hoy?

Nunca debemos etiquetar a las personas, la conducta es mejorable, la persona no. El verbo ser tiene mucho peso ¿por qué no cambiamos el "qué egoísta que eres" por "¿podrías ser más generosa?", tratando de rescatar el valor. Si toda la persona es mala, ¿qué espacio se le da para reparar? Esto sucede mucho en la escuela, cuando se etiqueta a los niños o jóvenes con mala conducta. El mensaje debería ser: "Tú vales igual, puedes cambiar esta acción".

Algunas actitudes positivas para educar en valores son las siguientes:

• Ponerse en el lugar del otro.

• Ser padre Contenedor, Modelo y Mentor

• Focalizar sobre los juicios positivos.

• No descalificar lo que le pasa al otro.

• Generar el encuentro verdadero, una mirada, el abrazo, un cuento, complicidad.

• Comprender al joven sin emitir juicios de valor.

• Ayudar al joven a que externe sus emociones.

• Dar atención y disciplina positiva: brindar apoyo en forma que resulte reconocido por el joven.

RECUERDA:

RECUERDA:

¡VALORÍZATE!