LA GESTIÓN DEL COLOR

15
EL PROCESO DE GESTIÓN DEL COLOR,PASO A PASO.

description

ENSAYO SOBRE LA GESTIÓN DEL COLOR PARA FOTOGRAFÍA

Transcript of LA GESTIÓN DEL COLOR

Page 1: LA GESTIÓN DEL COLOR

EL PROCESO DE GESTIÓN DEL COLOR,PASO A PASO.

Page 2: LA GESTIÓN DEL COLOR

El tema de la gestión de color en fotografía digital, es un tema que resulta de vital importancia si queremos tener el control sobre el color en todo el proceso que hay desde que se toma la fotografía hasta que obtenemos nuestra copia impresa. Claro está que no sólo cuando queremos una copia impresa debemos tener en cuenta este tema, incluso en un proceso tan sencillo como obtener una fotografía y colgarla en la red, no podemos obviar este asunto, a riesgo de encontrarnos con sorpresas desagradable. El mundo digital nos ofrece la posibilidad de controlar absolutamente todo el proceso de principio a fin, empezando con nuestra cámara digital, pasando por los procesos intermedios y acabando con nuestro laboratorio habitual. La primera duda que se plantea, es cuando accedemos al menú de nuestra cámara digital y nos encontramos con la opción de elegir entre diversos perfiles de color.

Page 3: LA GESTIÓN DEL COLOR

PERFILES Y ESPACIOS DE COLOR. Un perfil de color es un archivo con extensión “icc” o “icm” que contiene una descripción numérica de la respuesta de color del dispositivo que estamos usando, basada en un mapa estándar que describe con exactitud los colores. Cada dispositivo tiene un perfil de color propio que solamente sirve para ese dispositivo. Cuando configuramos nuestra cámara nos encontramos con la opción de elegir entre varios perfiles de color. Entre ellos AdobeRGB y sRGB, que son espacios de color "de trabajo”. En primer lugar hay que tener claro (o por lo menos intentarlo), el destino que le vamos a dar a esas fotos. No es lo mismo hacer unas fotos para subir a la web, que hacer unas fotos para llevar a positivar a un laboratorio, o para realizar una ampliación de 2m x 3m. Si nuestro caso es el primero y vamos a disparar en JPG, pues la elección será sRGB; un espacio de color que va a ser el que la mayoría de los dispositivos que manejan fotografías van a adoptar por defecto, y con el que vamos a ver nuestras imágenes en la red de la misma forma en todos los sitios.

Si nuestro objetivo es llevar a imprimir las copias al laboratorio y disparamos en JPG pues es aconsejable usar el espacio de color AdobeRGB; un espacio de color más amplio y que describe una mayor gama de colores.

Page 4: LA GESTIÓN DEL COLOR

Pero si disparamos en RAW (lo más aconsejable), pues entonces nos olvidaremos de elegir un perfil en la cámara. El formato RAW, es un formato de negativo digital que todavía no se ha convertido en un fichero gráfico y por lo tanto, no hay que emplazarlo (todavía) en un espacio de color determinado. Después tendremos que obtener nuestro fichero gráfico, que puede ser JPG o TIFF, etc ,dependiendo del uso que le queramos dar.Como nuestro objetivo es obtener la mayor calidad posible, lo más normal es usar TIFF. Cuando abrimos nuestro programa de revelado de RAW, visualizamos nuestra foto y podemos hacer algunos ajustes para obtener el fichero final en TIFF. Pero lo primero que hay que hacer es asignarle UN ESPACIO DE COLOR. Un espacio de color que describa perfectamente la respuesta de color de nuestro dispositivo (en este caso nuestro modelo exacto de cámara), y asignarlo a esa fotografía para que los colores resultantes sean los que había en la realidad. Pero hay reveladores de RAW que no dan la posibilidad de asignar ningún espacio de dispositivo, de asignar el espacio de trabajo de nuestra cámara en particular. Lo que hacen es recurrir a un apartado que denominan algo así como “Calibrate Camera”,o “Calibración de color”, que no es ni más ni menos que una serie de controles de color con los que intentamos hacer que la fotografía se parezca lo más posible a la realidad. O sea, intentamos conseguir lo que se consigue asignando el perfil específico de nuestra cámara a la fotografía que hemos tomado con ella. En estos momentos y por extraño que parezca, tanto Adobe Camera Raw, como LightRoom no ofrecen la posibilidad de asignar un perfil personalizado (en el fondo, ambos utilizan el mismo motor), mientras que el también conocido Capture One, sí que permite esta opción. Incluso nos da la posibilidad de no efectuar gestión alguna, opción esta que si bien no es de utilidad en el proceso normal de fotografía, es muy útil cuando pretendemos crear perfiles personalizados para dispositivos de captura.

Page 5: LA GESTIÓN DEL COLOR

Los perfiles más importantes y los que se usan en la mayoría de los casos son: - sRGB: indicado para trabajo en WEB. Es el espacio menos amplio pero no el menos indicado para ello. - AdobeRGB: perfil de color más amplio indicado para proceso en laboratorio y otros trabajos que requieran un resultado final impreso. - Prophoto: Es el espacio de color más amplio de los que citamos aquí. Es recomendable en trabajos de impresión de alta calidad. Con el uso de pigmentos de alta calidad cuya gama cromática, junto con la del papel, son mayores que lo que AdobeRGB es capaz de representar. - CMYK: Trabajos de imprenta, maquetación, etc

Si nosotros vamos a llevar nuestra copia al laboratorio, vamos a elegir un perfil de salida AdobeRGB, y lo que hace nuestro programa de revelado es convertir nuestra fotografía (a la que habíamos asignado el perfil de nuestra cámara) a ese perfil de trabajo. Y nos genera el archivo TIFF, con un perfil incrustado de trabajo AdobeRGB. Los valores numéricos que describen los colores sí que cambian para intentar, dentro de lo posible, preservar el aspecto cromático de la fotografía, y por lo tanto, el histograma de nuestra foto sí que cambiará.

Ya tenemos nuestra copia lista para trabajar con ella en, por ejemplo, Photoshop, que también lo podemos configurar para un comportamiento determinado en lo que a gestión de color se refiere. En el menú Edición->Ajustes de color se nos abre la siguiente ventana:

Page 6: LA GESTIÓN DEL COLOR

Indicaremos cual va a ser nuestro espacio de color preferido. En cuanto a los menús 2, 3 y 4 lo adecuado es dejarlos como están, ya que la única forma de saber el color real de una fotografía es dejándola en el espacio de color que ha traído con ella. Por lo tanto, variar el espacio de color que trae la foto (asumiendo, claro está, que sea el correcto), supone casi con total seguridad distorsionar la realidad de sus colores. Los menús 5, 6 y 7 conviene tenerlos activados para: que en los supuestos que describen, Photoshop nos pregunte y nos dé la voz de alarma en el caso de que el perfil de esa fotografía no sea el que hemos indicado como favorito en el menú número 1. De esta forma se evitan olvidos que solo descubrimos cuando nos dan la copia impresa y vemos que los colores se han desnaturalizado. El motor de conversión lo dejamos en perceptual. Posteriormente, debemos pedirle el perfil de color de un determinado tipo de papel, que es el que vamos a solicitar para nuestras copias.

Page 7: LA GESTIÓN DEL COLOR

Si el laboratorio ofrece distintos tipos de papel, nos ofrecerán un perfil por cada papel. También nos pueden decir que se las llevemos en un determinado espacio de color de trabajo y que ellos las convierten. No es una mala opción, aunque perdemos un poquito de control sobre lo que hacemos. Este perfil suele ser AdobeRGB. Una vez tenemos el perfil de nuestro laboratorio, lo instalamos en nuestra base de datos del ordenador, y desde Photoshop podremos comprobar cómo se va a ver esa foto cuando la tengamos impresa en papel… (salvando las distancias, ya que una cosa es papel y otra monitor) Photoshop es capaz de hacer una emulación del resultado que se va a obtener usando otros perfiles de salida. Incluso también te puede decir si los colores que estás usando en ese momento en tu fotografía, van a poder ser representados finalmente. Hay que tener en cuenta que, por ejemplo, si usamos un espacio de color muy amplio y después el conjunto de papel/tinta/sistema de impresión, no son capaces de representar esa gama cromática, aparecerán posterizaciones y saltos de color en la copia impresa. Podemos prever esa situación: En el menú Vista, aparecen una serie de opciones, pero nos vamos a centrar en las tres primeras.

Page 8: LA GESTIÓN DEL COLOR

La primera, como se ve en la imagen, se refiere a los ajustes para ese modo de prueba. Si entramos en ella, podremos elegir el perfil de color para el que queremos la prueba. En este caso, sería el perfil que nos ha facilitado el laboratorio. Una vez seleccionado volvemos al menú Vista. La siguiente opción es la de “Colores de prueba”. Si la seleccionamos, podremos observar como la imagen cambia sensiblemente. Ese es, más o menos el aspecto que tendrá cuando la tengamos en papel siempre que la llevemos al laboratorio que nos facilitó el perfil y escojamos ese tipo de papel para el que está hecho el perfil. Normalmente la veremos un poco más baja de contraste y con una menor saturación. No olvidemos que es una emulación; no es ciencia exacta. Pero con esto, nos podemos hacer una idea de por dónde van a ir los tiros en el resultado final. Podemos observar si los verdes se nos apagan demasiado…. O si es el canal azul donde más se pierde. Así obramos en consecuencia; saturando un poco o un mucho. Sólo restan dos opciones. Salvarla en disco con el perfil de trabajo; en este caso AdobeRGB, o bien convertirla al perfil del laboratorio y salvarla. Eso es cuestión de hablar con el laboratorio y preguntarle si la prefieren en un espacio de trabajo determinado y hacen ellos la conversión, o les viene más cómodo que tú mismo la conviertas y les ahorres el trabajo.

Page 9: LA GESTIÓN DEL COLOR

LA CALIBRACIÓN DEL MONITOR.CALIBRADORES. Cada monitor representa los colores de una manera determinada y en un principio, ningún monitor se ve exactamente igual debido a variados factores…. Para calibrar un monitor correctamente necesitaremos un calibrador, que es un dispositivo que se pone en la pantalla y se limita a medir una serie de colores. Nuestro software de calibración irá enviando unos colores conocidos a la pantalla y el calibrador irá leyendo el color resultante. Cada vez que haya una variación entre el color que el software envía y el que el calibrador recibe en la pantalla, en un fichero se hará una anotación con el desvío que se produce. Así, se irá formando un fichero con anotaciones de la desviación y/o error que se produce en la reproducción del color por parte de nuestro monitor hasta completar toda la gama cromática. Este fichero no es ni más ni menos que el PERFIL DE COLOR DE NUESTRO MONITOR, lo instalamos en el sistema y cada vez que algún software intente representar algo en pantalla, todos esos colores que este software envía a pantalla, pasarán antes por la corrección que el perfil de color contenga en sus anotaciones.

Page 10: LA GESTIÓN DEL COLOR

MONITORES FOTOGRÁFICOS

A la hora de elegir un monitor los parámetro más importantes,

serán como el tamaño, resolución, tipo de panel, brillo,

contraste, ángulo de visión, tiempo de respuesta, profundidad de

color, consumo, conexiones, peso y precio, y es recomendable

pasar de las 24” para trabajar con una pantalla a la que vamos a

estar situados a menos de un metro, la vista lo agradecerá.

La resolución es un aspecto muy a tener en cuenta, ya que

cuanta más resolución tenga el monitor, más definición tendrá

nuestro espacio de trabajo. La alta definición 1080p es la

resolución más extendida en el mercado a día de hoy,

independientemente de la diagonal de la pantalla. Tenemos que

tener en cuenta que si no tenemos una tarjeta gráfica potente,

nuestro ordenador se va a arrastrar mostrando grandes

resoluciones. Por otro lado, siempre debemos usar la resolución

nativa del monitor, pues de otra manera perderemos muchísima

calidad y definición a la hora de representar las imágenes. Hay

que mirar también conceptos como la resolución, el ratio de

contraste o la velocidad de respuesta. En general los más

recomendable es un ratio de tamaño de 16:9 o 16:10. Salvo

algunos modelos de menor tamaño, la mayor parte de monitores

ya presumen de resolución 1920 × 1080 píxeles. A esta

característica se le denomina Alta definición 1080p o Full HD. Es

equivalente a la resolución de un Blu-Ray y es también la máxima

actual en vídeo doméstico, por eso marca un estándar. Existen

pantallas con mayor resolución, pero son tan caras como poco

comunes.

Page 11: LA GESTIÓN DEL COLOR

Otro elemento a tener en cuenta es la resolución nativa. Cada monitor está diseñado para mostrar, preferentemente, una resolución concreta. Para mostrar otras resoluciónes, el monitor debe realizar una operación llamada reescalado. Hay monitores que reescalan mejor que otros pero, en general, la calidad de la resolución reescalada es bastante peor, especialmente en textos. El ideal aquí es hacernos con un monitor cuya resolución nativa sea la máxima posible y compatible con lo que nuestra tarjeta gráfica sea capaz de ofrecer.

Otros factores importantes son el consumo de energía o la ergonomía, sobre todo si vamos a utilizar el equipo durante muchas horas. Las pantallas con acabado mate son así porque llevan una capa de tratamiento antirreflejos.

Page 12: LA GESTIÓN DEL COLOR

INTERPOLACIÓN Y REMUESTREO.

El término remuestrear hace referencia a cambiar las dimensiones en píxeles (y, por tanto, el tamaño de visualización) de una imagen. Al disminuir la resolución (reducir el número de píxeles), se borra información de la imagen. Si aumenta la resolución (aumenta el número de píxeles), se añaden nuevos píxeles. Se especifica un método de interpolación para determinar cuántos píxeles se añaden o eliminan. Interpolación , en el campo de la fotografía y el mundo de la imagen digital, en la técnica que se aplica para conseguir un tamaño mayor de la imagen inicial, rellenando la información que falta con datos «inventados» a partir de un algoritmo específico. Existen varios métodos de interpolación de imágenes en Photoshop:

Por aproximación Un método rápido aunque menos preciso que reproduce los píxeles de una imagen. Este método se utiliza para ilustraciones con bordes que no están suavizados y sirve para conservar bordes marcados y producir un archivo más pequeño. Sin embargo, este método puede producir efectos irregulares, que se hacen aparentes al distorsionar o redimensionar una imagen o al realizar varias manipulaciones en una selección.

Bilineal Un método que añade píxeles mediante el cálculo de la media de los valores de color de los píxeles adyacentes. Produce resultados de calidad media.

Bicúbica Un método más preciso aunque más lento basado en un examen de los valores de los píxeles adyacentes. Mediante unos cálculos más complejos, la opción Bicúbica produce graduaciones tonales más suaves que las opciones Por aproximación y Bilineal.

Bicúbica más suavizada Un buen método para ampliar imágenes basado en la interpolación bicúbica pero diseñado para producir resultados más suaves.

Page 13: LA GESTIÓN DEL COLOR

Bicúbica más enfocada. Un buen método para reducir el tamaño de una imagen basado en la interpolación bicúbica con un enfoque mejorado. Este método mantiene el detalle de una imagen remuestreada. Si la opción "Bicúbica más enfocada" enfoca algunas áreas de una imagen en exceso, pruebe la opción Bicúbica.

Tenemos que ser cuidadosos de no interpolar una imagen más de lo necesario, ya que como se anoto arriba, esta operación algorítmica inventa píxeles, además es una operación que no es reversible.

SISTEMAS DE IMPRESIÓN. Disponemos de los siguientes sistemas de impresión: - Sistema de Impresión Offset: son máquinas de pliegos o rotativas con uno o más colores y que utilizan planchas preparadas. - Sistema de Impresión por Huecográfica, en rotativas utilizando cilindros grabados. - Sistema de Impresión Flexográfica en rotativas o en máquinas de pliegos para el cartón por medio de clichés de fotopolímero en diversos soportes: papel, cartón, plástico, ... - Impresión por serigrafía: este sistema se realiza a a través de unas pantallas de tela sobre diversos soportes. - Impresión digital con una forma impresora variable sobre papel. En estos procesos, de impresión se realizan con equipos que utilizan varias técnicas y soportes. Es muy importante tener en cuenta el control de parámetros tales como, viscosidad, tiro, y color de la tinta, espesor, porosidad, encolado y otros del papel, registro, densidad, trapping, ganancia de impresión, ...

Page 14: LA GESTIÓN DEL COLOR

Los sistemas más comúnmente utilizados son la impresión por inyección, o chorro de tinta, y la impresión láser. - Inyección de tinta: La imagen almacenada en el ordenador se traspasa a la superficie a imprimir mediante toda una serie de finísimos chorros de tinta, de diferentes colores, controlados con gran precisión por la propia impresora. No hay contacto entre el cabezal de impresión y la superficie a imprimir. Ofrece una velocidad aceptable, y una buena calidad.

- Láser: En una impresora láser se utiliza una tinta especial en

polvo, el tóner, que mediante el uso de una carga electrostática

forma la imagen a imprimir. Un haz láser será el encargado de

transferirla, y a continuación, fijarla. Puede ofrecer una alta

velocidad, gran calidad, y como algo destacable, es una

operación sumamente silenciosa.

Ventajas:

Se pueden imprimir materiales delicados o frágiles.El desgaste de

las placas que pegan contra los cilindros de impresión y el papel

se elimina.

Las operaciones de pre-prensa son totalmente automáticas.

Tirajes cortos rápidos y económicos. Impresos frente y vuelta en

selección de color. Entrega casi inmediata. Magnífica calidad de

impresión. Personalización en texto e imágenes.

Para los periódicos el poder tener las páginas ya impresas y

formateadas digitalmente y mandarlas a centros de impresión

donde se impriman el número de ejemplares necesarios, ya muy

cerca de los lugares de distribución final es una gran ventaja que

esta tecnología utiliza. Las grandes empresas, sin embargo, se

inclinan hacia la utilización de prensas offset para la impresión

comercial, ya que estos tienden a ser más costo-eficiente en

grandes cantidades. El proceso involucra la transferencia de una

imagen entintada de una placa a una estera de goma y luego

sobre el papel, de ahí el nombre de impresión offset.

Page 15: LA GESTIÓN DEL COLOR

FIN