La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

301

Transcript of La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

Page 1: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf
Page 2: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

Simón Bolívar

L A E S P E R A N Z AD E L

U N I V E R S OIntroducción,

selección, notas y cronología deJ . M . S A L C E D O B A S T A R D O

Prólogo deA R T U R O US L A R P I E T R I

U N E S C O

Page 3: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

Publicado en 1983por la Organización de las Naciones Unidaspara la Educación, la Ciencia y la Cultura7 Place de Fontenoy, 75700 ParisComposición: Coupé S.A., Sautron (Francia)Impresión: Imprimerie de la Manutention, Mayenne (Francia)ISBN 92-3-302103-3

Unesco 1983

Page 4: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

Entre las figuras señeras de la historia universal que pueden considerarsecomo precursoras del sistema de las Naciones Unidas, Simón Bolívarocupa un puesto de primera fila.

Desde los albores del siglo pasado, en efecto, Bolívar pensaba en elporvenir de toda la humanidad. No sólo fue el héroe de un país o de ungrupo de naciones a las que ayudó a liberarse del yugo colonial, ni elhéroe del solo continente americano, pues con la amplitud universal desu pensamiento quiso ser el intérprete de las esperanzas de todos lospueblos del mundo.

El homenaje excepcional que se rinde a Bolívar al celebrarse elbicentenario de su nacimiento incita a evaluar los esfuerzos que desde elsiglo XIX ha realizado la comunidad internacional al transitar elcamino que él le abrió con el fin de lograr más libertad, más justicia yuna mayor solidaridad.

Amadou Mahtar M’Bow19 de enero de 1983

Page 5: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

ÍN D I C E

Prólogo . . . . . . . . 11Introducción . . . . . . . . 19Explicación bibliográfica . . . . . . . . 61

Antología . . . . . . . . 63Cronología . . . . . . . . 293Glosario geográfico . . . . . . . . 301Glosario de personajes históricos . . . . . . . . 303

Indice de la antología . . . . . . . . 305

Page 6: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

P R Ó L O G Ode

Arturo Uslar Pietri*

A los doscientos años de su nacimiento, Bolívar, con inobjetablestítulos, forma parte del puñado exiguo y deslumbrante de las grandesfiguras tutelares de la humanidad. Desde su muerte, en 1830, se ha idodescubriendo de un modo continuo y conmovedor la gigantesca dimen-sión de su presencia. Para sus contemporáneos era el adalid incompara-ble de la lucha por la independencia política de la América Latina, aquelser fascinante que, casi sin medios, dirigió y sostuvo contra todos losobstáculos y adversidades la larga y difícil guerra de quince años quepuso fin al imperio español en América. Su tenacidad sin desmayos, suconvicción de que la independencia podía y debía alcanzarse en sutiempo, y su visión grandiosa del porvenir del nuevo mundo lodestacaron y señalaron entre tantos y tan excepcionales jefes comoprodujo la guerra de emancipación de la América Latina.

Para el mundo occidental se convirtió muy pronto en el símbolode la lucha contra el despotismo y las viejas monarquías. Su nombresonaba a libertad. Los revolucionarios de 1830 y de 1848, los “carbona-rios”, los liberales, la juventud romántica invocaban su nombre y suejemplo. Era el héroe que había enfrentado trescientos años de antiguorégimen en la América hispana y había logrado ponerle fin paraproclamar un nuevo orden de democracia y libertad. La admiraciónpasaba de los jóvenes inquietos, que enarbolaban como una bandera el“chapeau Bolívar” en el París de los Borbones, hasta los estudiosos dela política mundial, hasta Byron que le puso el nombre de Bolívar albarco en que soñaba la hazaña de libertar a Grecia.

Bolívar se había convertido para siempre en “el Libertador”, elhombre que había encarnado la voluntad de ser libre de un continente yque se había esforzado por crear un orden político de justicia y derechoshumanos.

*Renombrado escritor venezolano, ex embajador de su país en la Unesco, es autor denumerosos cuentos, ensayos y novelas. Destacan entre sus obras Las lanzas coloradas, EIcanino de Eldorado, Treinta hombres y sus sombras y Oficio de difuntos.

I I

Page 7: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Fue, ciertamente, un jefe militar que logró las más difíciles. ytrascendentales victorias; como un sembrador de destino, de sus bata-llas nacieron naciones y se afianzó la libertad de una vasta porción dehumanidad y de geografía. En 1825, cuando el triunfo de Ayacuchopone fin al imperio español y lo convierte en el árbitro del destino de laAmérica Latina, concibe e intenta realizar el grandioso propósito deintegrar su América, para hacer posible un nuevo tiempo de equilibrioy justicia para la humanidad. La raíz del desacuerdo con sus antiguosseguidores y de las dificultades crecientes con las que va a tropezarreside precisamente en su visión del futuro.

Para él, la independencia no era un fin sino una etapa necesaria paraalcanzar una realización más difícil y grandiosa. Lo que se habíapropuesto no era una mera substitución de hombres para poner en ellugar de los virreyes y gobernadores españoles a los caudillos criollos,para mantener sin alteración las estructuras políticas y sociales hereda-das del pasado colonial, sino algo diametralmente distinto, que era laverdadera creación de un nuevo mundo, poderoso, libre, ejemplar ensus instituciones, celoso de la justicia en todas sus formas y que sirvierade base a un nuevo orden mundial, a lo que él llamaba un “nuevoequilibrio del universo”.

Desde el primer momento de su acción se distinguió por laclaridad y la audacia de su pensamiento. Si no hubiera hecho otra cosaque escribir las ideas y apreciaciones que nos dejó sobre el mundoamericano figuraría, sin duda, entre los más originales pensadores desu tiempo. Tenía además un don excepcional de escritor. La prosa desus cartas y discursos está entre las mejores que se escribieron en suhora. Nadie tuvo como él el don de la expresión enérgica, penetrante ysignificativa. Su lenguaje refleja como un espejo fiel su temperamentoy sus angustias. Se expresa con síntesis y contrastes fulgurantes. Novalen menos sus palabras que sus grandes hechos.

Pocas veces en la historia se ha dado en un personaje semejantecombinación de dones y atributos de hombre de acción y de hombre depensamiento, de conductor de pueblos y de visionario del porvenir, depolítico hábil y de creador de un proyecto de superación de lascircunstancias de su tiempo. El drama de su vida consistió en laimposibilidad de lograr que su visión del futuro se convirtiera enrealidad. No podía resignarse con la obra extraordinaria que habíarealizado porque para él esa obra no era sino la parte previa y necesariapara lograr la nueva organización política de la América Latina y unnuevo equilibrio mundial. Sólo para un ser de su condición esa segundaparte podía ser más importante que la primera.

La figura de Bolívar es de una riqueza inagotable. Reducirlo a lasproporciones de jefe de una insurrección triunfante es mutilar supersonalidad e ignorar algunas de las facetas más ricas y admirables de

12

Page 8: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

su obra. No fue nunca un mero hombre de acción, dispuesto aproseguir una lucha muchas veces desesperada, ni tampoco un ideólogoque aplica mecánicamente doctrinas y ejemplos aprendidos de otrospaíses y de otras circunstancias históricas, ni un político limitado alpresente inmediato. A todo lo largo de su empresa nos sorprende por laabundancia deslumbrante de sus dones tan diversos. Ante sus ojos estánvivos el pasado y el presente de los pueblos americanos, siente conprofunda identificación la condición histórica y cultural de sus gentes,pero al mismo tiempo mira hacia el futuro deseable y anhela unatransformación profunda de la sociedad y de sus fines, no lo ciegan lasbrillantes teorías políticas de su tiempo. Ha reflexionado sobre Rous-seau y Montesquieu a la luz de la experiencia de la lucha y de laslecciones del pasado americano, y se persuade que el camino de esospueblos hacia el futuro no puede reducirse a una simple imitación oadaptación de ideas e instituciones de otras naciones surgidas de otrascircunstancias históricas y culturales, sino que hay que partir de lasdifíciles realidades para poder intentar con esfuerzo y tino esa arduatransformación para la cual el pasado colonial no los había preparado.

Lo que en el lenguaje internacional de hoy llamaríamos las limita-ciones culturales del desarrollo y la dificultad de adaptar modelosextraños es un tema fundamental de sus preocupaciones de creador denaciones. Alerta insistentemente a los legisladores, deslumbrados conlos precedentes de las instituciones surgidas de las revoluciones de losEstados Unidos y de Francia, sobre la necesidad de tomar en cuenta laspeculiaridades de usos, tradiciones y experiencia del pasado que caracte-Irizan a los pueblos hispanoamericanos. El deseó resueltamente lalibertad, la justicia y la democracia, pero sin perder de vista lasrealidades sociales y políticas que trescientos años de vida colonialhabían creado en su América.

Tampoco pierde nunca de vista el horizonte de la situación interna-cional. La independencia de la América Latina no puede ser concebida yrealizada como un hecho aislado y local, sino como un gran aconteci-miento que inicia nuevas situaciones y nuevas relaciones en escalamundial. La irrupción de una América libre y soberana no puedealcanzarse sin ocasionar una modificación significativa de las relacionespolíticas en escala mundial. Es dentro de esos parámetros y dimen-siones excepcionales que Bolívar actúa y piensa, y es esto, precisa-mente, lo que le da su significación y validez como guía y encarnacióndel espíritu de los pueblos americanos.

Ese carácter y esos rasgos aparecen a lo largo de su vida en todossus documentos. Su visión de la independencia es continental desde elprimer momento. En esto coincide plenamente con su ilustre antecesorMiranda. No se trataba para ellos de obtener la independencia paraalgunas porciones del imperio español, sino de lograr que todo él tome

13

Page 9: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

conciencia de su identidad y su destino y asuma una soberanía global.Esto implica, desde luego, una forma de organización política y demetas de futuro que abarque todo el nuevo mundo. Desde la primerahora habla en nombre de América y no de Venezuela, y esboza conatrevimiento las formas de la integración política. Como lo dijo más deuna vez “para nosotros la patria es la América”.

Cabría preguntarse ahora cuál América y en qué forma? Era lasuya una concepción que no excluía ninguna porción significativa de laAmérica sojuzgada por las potencias europeas. Partía de lo inmediatoque eran los pueblos que iban a integrar a Colombia: Venezuela, NuevaGranada y Ecuador, pero luego incluía, en muchas formas sucesivas decolaboración, todas las porciones del imperio. Cuando en 1825, tras lavictoria final y definitiva de Ayacucho, llega a aquel centro mágico depoder y riqueza que era Potosí y acompañado por los representantes deArgentina, del Perú y de Chile sube al cerro de Plata, que fue elsímbolo del poder colonial, y se asoma literalmente al panorama de lamasa continental, siente y expresa aquella voluntad de integración queera la única que podía asegurar el futuro para tan vasta porción dehumanidad y de tierra que por sus ojos vislumbraba el escenario de lahistoria universal. Es la hora en que convoca el Congreso que iba areunir en Panamá a los representantes de toda la América para estable-cer las formas prácticas de su política, su defensa y su acción comúnante el mundo.

Basta hojear los documentos principales en los que está recogido supensamiento para advertir la continuidad de su concepción de lacomunidad de destino de la América Latina. Desde 1812, en Cartagena,apenas salido de la ruina del primer ensayo de república independienteen Venezuela, lanza un audaz manifiesto que no tiene otro objeto quealertar contra la engañosa creencia de que alguna porción del territorioamericano pudiera lograr y conservar aisladamente su independencia.Mientras Venezuela no sea liberada, la independencia de la NuevaGranada estará amenazada, porque una fuerza organizada desde allípuede penetrar “desde las provincias de Barinas y Maracaibo hasta losúltimos confines de la América meridional”. Esa acción que él vislum-bra en tan vasta escala de parte de los enemigos de la libertad esprecisamente la que él habrá de realizar en los largos y duros años de suacción política y guerrera. Desde entonces para él el teatro es uno solo:la América Latina, el objetivo igualmente uno: la independencia, y elinstrumento privilegiado e insubstituible: la integración de esos pueblosen un cuerpo que garantice su unidad de presencia y acción ante elmundo.

En aquel deslumbrador documento que es la carta que escribe enJamaica, en 1815, “a un caballero de esta isla”, traza el cuadro máscompleto y audaz de su visión del destino americano. Su tema no es

Page 10: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Venezuela sino ‘ún país tan inmenso, variado y desconocido como elNuevo Mundo”. Lo mira como una realidad de la geografía y de lahistoria, y se pregunta con impaciencia: “¿No está el Nuevo Mundoentero, conmovido y armado para su defensa?” Más adelante precisa:“Este cuadro representa una escala militar de 2 000 leguas de longitudy 900 de latitud en su mayor extensión, en que 16 000 000 de america-nos defienden sus derechos o están oprimidos.”

Para él, es una necesidad histórica ineluctable que ha llegado y queestá llamada a tener las mayores consecuencias en el futuro del mundo.Allí expresa el fondo de su pensamiento: el proyecto de la independen-cia americana es necesario, “porque el equilibrio del mundo así loexige”.

Allí está dicha la concepción fundamental. Ha llegado la hora de unnuevo equilibrio universal. La estructura imperial de dominaciones nopuede continuar. Un nuevo orden, con las palabras mismas que usóVirgilio en su égloga profética, va a surgir. Es necesario que termine elimperio español para que surja un nuevo mundo real a dialogar entérminos de equidad y derecho con los otros poderes de la tierra.

Para Bolívar la denominación de “nuevo mundo” no tenía lasignificación restringida que le habían dado los viejos historiadores. Nolo concebía como la parte más recientemente incorporada a un viejomundo y a un viejo orden, sino como la ocasión providencial derealizar una nueva sociedad, que no repitiera los errores del viejomundo y que iniciara una nueva era en las relaciones entre todas lasnaciones.

Bolívar se convierte así no sólo en el profeta del nuevo mundo sinoen el de un nuevo orden mundial. Ha sentido y expresado desdeentonces que había llegado la hora no sólo de que surgieran nuevasnaciones independientes sino de que su existencia misma determinara lacreación de un nuevo sistema de relaciones. Con palabras que parecenbrotadas de la lucha actual de las nuevas naciones de América Latina,Asia y Africa por alcanzar un nuevo orden de relaciones, en esedramático diálogo entre el Norte y el Sur, en el gran proceso delsurgimiento del tercer mundo, llegó a decir: “Hay otro equilibrio, elque nos importa a nosotros, el equilibrio del universo. Esta lucha nopuede ser parcial de ningún modo, porque en ella se cruzan interesesinmensos esparcidos en todo el mundo. ”

Con qué tono de actualidad viviente resuena en nuestros oídos estavoz. Su tema es la gran cuestión central que se debate con angustia enlos grandes foros internacionales. A los dos siglos de su nacimiento,Simón Bolívar está en la primera fila del combate por la creación de unnuevo orden internacional. Así lo reconoció solemnemente la Unescocuando en 1978, al través de sus organismos supremos de dirección,aprobó la creación del Premio Internacional Simón Bolívar “destinado

Page 11: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

a recompensar, cada dos años, a partir del 24 de julio de 1983, fecha delbicentenario del nacimiento del Libertador Simón Bolívar, a la personao personas que se hayan destacado mediante su acción, su obra decreación o una actividad particularmente meritoria en beneficio de lalibertad, la independencia y la dignidad de los pueblos y el fortaleci-miento de la solidaridad entre las naciones, favoreciendo el desarrollo yfacilitando el advenimiento de un nuevo orden económico internacio-nal, social y cultural”.

Queda así plenamente justificada la publicación de estas páginasque recogen lo esencial del pensamiento del Libertador reconociendo,como lo expresó en la resolución correspondiente la ConferenciaGeneral de la Unesco, “en Simón Bolívar, por su obra, una gran figuramundial, precursora e inspiradora de los afanes de las nuevas nacionespara asumir la plenitud de sus derechos”.

Caracas, septiembre de 1982.

16

Page 12: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

“La libertaddel Nuevo Mundoes la esperanzadel universo”BOLíVAR 1824

Page 13: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

José Luis Salcedo-Bastardo, venezolano nacido en 1926. Doctor enciencias políticas de la Universidad Central de Venezuela; rector yprofesor de sociología; senador (1959-1964); embajador en Ecuador,Brasil y Francia; presidente del Instituto Nacional de Cultura y BellasArtes (1965-1966). Pertenece a las Academias de la Historia y de laLengua. Fue ministro de la Secretaría de la Presidencia de la República(1976-1977) ; ministro de Estado para la Ciencia, la Tecnología y laCultura (1976-1979). Autor, entre numerosos libros, de Visión yrevisión de Bolívar (13 ediciones); Historia fundamental de Venezuela (9ediciones); Bolívar, un continente y un destino (Premio Continental de laOEA, Premio Nacional de Literatura de Venezuela, 13 ediciones:francés, inglés, vasco, alemán y sueco); Un hombre diáfano-Vida deSimón Bolívar para los nuevos americanos; Andrés Bello americano; Crisoldel americanismo; Bolívar hombre-cumbre. Es presidente del Comité Ejecu-tivo del Bicentenario de Simón Bolívar. Viajero por más de sesentapaíses, ha dictado conferencias en treinta naciones de cuatro continentes.

Page 14: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

I N T R O D U C C I Ó N

José Luis Salcedo-Bastardo

LA CONVERGENCIA ORIGINAL

Comenzó desde el Asia, en épocas remotas, la migración matriz de losaborígenes del continente que será “América”. Cuando los primerosasiáticos atravesaron los hielos del estrecho de Behring, o franquearonel rosario de las Islas Aleutianas, regándose por las vacías soledades quea su paso se allanaban invitantes, estaban inaugurando el fascinanteproceso de la creación de un mundo en el cual todos los pueblos y todaslas culturas, a la postre, debían participar.

Empezaba el hilo de un destino: un hogar para la familia delhombre. Una comunidad mestiza integral para servir a la esperanza. Laposibilidad de un sueño de real y fraterna humanidad. La convivenciapara la justicia, el trabajo, el amor y la vida, en la igualdad y la libertad.En este escenario pudo hallarse, y podrá quizá encontrarse alguna vezen el futuro, la más grande nación del mundo, más por la calidadespiritual intrínseca que por sus atributos materiales, y en cuyos hijos seencarna la efectiva sustancia histórica que Simón Bolívar, en 1815,resume definiendo: “Nosotros somos un pequeño género humano”[13)*.

Pero, bien fuera por la radicación y adaptación de los vástagos delAsia en su nueva heredad, que los convierte en producto del hemisferiopor ellos ganado, y hasta admitiendo la hipótesis sobre el autoctonismodel hombre “americano”, las similitudes somáticas y culturales con losasiáticos dan base para pensar que un primer mestizaje -cuando paraEuropa es el fin de la Edad Media- reuniría en el poblador indígena lapresencia de dos continentes: Asia y América. Por lo demás, razoneshay -incluso certificadas con la experiencia reciente de la balsa Kon-Tiki- por las cuales se puede aceptar que también Oceanía estuvoinstalada en el ser americano. Si desde el Perú, aprovechando la

*Los números entre corchetes corresponden a las piezas de esta antología.

19

Page 15: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

corriente de Humboldt, se consiguió llegar a la Polinesia, bien pudohacerse el recorrido inverso. Habría, pues, en el indio “americano” lasíntesis posible de Asia, América y Oceanía.

Correspondió en 1492, a Cristóbal Colón, genio de la audacia, lagloria de completar e integrar el orbe. Acercó, a lo conocido, elhemisferio que permanecía en la penumbra de su aislamiento. Elinsigne navegante genovés, aunque no se equivocó sobre la redondez dela tierra, la creyó más pequeña. Emprendió la búsqueda de una ruta aOriente, hacia la India, China, Japón.. . y, al tropezar con esta porcióninesperada y desconocida del globo, dio pábulo al error de suponer“indios” a los habitantes del incógnito suelo.

Para la Europa del siglo xv agotada en el estéril enquistamientodel feudalismo, el encuentro -o “descubrimiento”- de Américasignificó una formidable posibilidad de realización. Su obra mejor seráel nuevo mundo, donde se siembra el antiguo gracias al esfuerzo y lapresencia múltiple de España. Es precisamente Iberia la expresiónmáxima del mestizaje -confluencia y combinación, de cuerpo yespíritu- de las diferentes variedades del complejo euro-afro-asiático,Así, España aporta en su ser: íberos, ligures, celtas, romanos, vascos,griegos, germanos, visigodos, suevos, alanos. En ella viene, además, elAsia Menor: fenicios, judíos, musulmanes de Arabia; y el Africa:cartaginenses, pueblos de Egipto, Libia, Túnez, Argelia, Marruecos,del Congo y el Níger, todos confundidos en el torrente mahometanoderramado sobre la península para la estancia de ocho siglos. Por suparte, también el África, propiamente, ha de asistir a la gran convergen-cia transatlántica representada por sus vástagos bantús, sudaneses yyurubas, arrancados de su país por la ignominia de la esclavitud.

Todas las razas, todos los continentes, todas las culturas confluye-ron a encontrarse, cruzarse y fundirse sobre la bella tierra que Colónsaca a luz.

La España emergente de la “reconquista” aceptó el súbito hallazgode un universo nuevo donde imponer sus valores cristianos, como unreto magnífico a la altura de su optimismo, su coraje y sus ilusiones.

Con la pujanza de su sangre múltiple y con el soberbio vigor y elempuje de un pueblo idealista en grado superlativo, España se consagróa hacer de la vasta heredad recién hallada otra Iberia, una NuevaEspaña, una Castilla del Oro, nuevas Granada, León, Andalucía,Valencia, Extremadura, Barcelona, vale decir, otros yo. El sueño,acoplado a urgentes y prosaicas apetencias de riqueza, hasta vislum-braba un reino mítico y mágico de felicidad suprema: “El Dorado”.España dio todo lo que pudo para recrearse aquí. Trajo cuanto debueno y positivo ella tenía, junto con lo de malo y negativo quetambién poseía: altos valores de una sociedad entonces de vanguardia,estrenando el potente instrumento político que era allá el absolutismo

Page 16: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

integrador sobre la obsoleta dispersión medieval, pero al lado de unapromisoria cultura especulativa -presente en la lozana literatura caste-llana- también acarreó prejuicios y cerrazones fanáticas.

TRES SIGLOSDE COLONIAJE

España trasladó a la América sus esquemas institucionales en lo polí-tico, jurídico, económico, social y cultural, e inició su enorme faena. El15 de noviembre de 1533, al clavar Francisco de Pizarro su pendón en elTemplo del Sol, en el Cuzco -la ciudad santa de los incas en los Andesperuanos-, cerraba España la fulminante y cruenta empresa que entres decenios completaba la conquista americana y abría la etapa de lacolonización.

Para “hacer” la América bastaron a la Madre Patria tres siglos.Alguna vez se “hizo” más con tan poco y en más corto plazo? Espreciso entender que ni el territorio ni la población aborigen eran por sisolos y propiamente América. No existía siquiera el “nombre”, nitampoco había -para la aurora del siglo XVI- el “hombre”. Elnombre es fruto de un azar europeo: Florencia, por virtud de un hijodistinguido, Amerigo Vespucio, brinda el apelativo. Y el hombreamericano surge de la fusión a la cual no es ajena ninguna de las partesdel planeta. Asia, América, Oceanía, Europa, África, todas convergena la síntesis que engendra al producto nuevo.

Mas, si en un principio el sistema de la potencia conquistadora fuenovedoso, el transcurrir de los tiempos sin la debida renovación lofosiliza, y al fin de la centuria decimoctava es franca e irremediable-mente anacrónico.

Trescientos años después del encuentro o “descubrimiento”, setorna inaceptable ese régimen que descansa sobre la negación de lalibertad, sostenido y mantenido con medios y doctrina de opresión,que no conoce ni reconoce derechos ni garantías, en cuyo substratocampea la esclavitud y rigen hondas desigualdades, que predica ypractica el aislamiento de las entidades coloniales componentes delimperio, y que esgrime temores y terrores para frenar la imaginación ycontener las audacias del espíritu.

No podía la América del siglo XVIII admitir pasivamente la pró-rroga de las viejas estructuras y del estilo superado, ya seco y reacciona-rio, que sin embargo -y es justo reconocerlo hoy- consiguió en elayer logros que por su magnitud asombran. No es imputable a lostitanes -fundadores y pioneros- del siglo XVI americano el que, conel decurso de los años, desgaste y anquilosis, semejante organismo alperder su savia se petrificara.

21

Page 17: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Como sistema americano, para los umbrales del siglo XIX, elcoloniaje estaba irremisiblemente agotado.

La verdad fue que, desde un principio y en forma generalizada, elrechazo a la conquista se hizo patente en el hemisferio colombino. Elaborigen opuso resistencia al hecho de fuerza que le cercenaba sualbedrío y lo despojaba brutalmente del señorío de sus propias cosas. Laincorporación de gente africana, traída contra su voluntad y dentro dela ignominia esclavista, añadió otro explosivo para el estallo, másadelante, de las bases del orden que los Borbones pretenderían perpetuoe inmutable.

A la postre, el presentido “nuevo mundo” del principio no fue talsino un mundo arcaico, insuficiente, retrógrado, opresivo e injusto.Los mestizos, y peor todavía los indios y negros, factores subalternosde la combinación, se hallaban preteridos, discriminados y marginados,en la tierra que los procreaba. Así, los individuos directamente genui-nos de América eran relegados por causa de una perspectiva inadmisiblea la categoría de “parias” en su país propio y natural.

La resistencia contra el despotismo absolutista se mantuvo, aunquelos sistemas vernáculos de dominación sirvieron suicidamente parafacilitar la instalación del dominio ibero. Contra tal fatalidad, todos lospueblos de América derramaron sangre generosa por la libertad. Esa esla historia. Sacrificios infinitos hubo, en todas partes, por la justicia y laigualdad.

VANGUARDIA DEL CAMBIO

Fue de precursores el siglo XVIII. El caraqueño Francisco de Miranda(1750-1816) es el primero. Fue el primer criollo universal; nunca antesun hombre nacido en este lado del Atlántico tuvo semejante y efectivacelebridad mundial: el Africa, donde se inició combatiendo contra elsultán de Marruecos, conoció su valor. Europa supo de sus hazañas: fuegeneral divisionario de la revolución francesa, protagoniza brillantesacciones militares, recorre hasta las estepas caucásicas, memorable supaso por el Mediterráneo, Asia Menor, Escandinavia, Gran Bretaña.En la independencia de los Estados Unidos participa con honor. Por elCaribe: Cuba, las Bahamas, se desplaza en servicio responsable ysembrando luces. Pero su mérito mayor es la concepción de la unidad yde la revolución latinoamericanas. Desde 1781 fue avanzando en sudefinición de una patria que debía llamarse Colombia -en homenaje aldescubridor-, cuyo límite septentrional sería el río Misisipí paraconcluir en el Cabo de Hornos. En el proyecto mirandino de la libertadpara esa patria inmensa que hoy se llama América Latina (vasta suma detres porciones: Hispano-América, más Brasil y el Caribe), él implicaba

22

Page 18: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

a Europa -con tal fin gestiona ayuda en Francia, Rusia e Inglaterra-,quiere la cooperación de los Estados Unidos, y en su programa alude alAsia y al Africa (cipayos de la India, bases en las islas Madeira,Mauricio y Reunión. . .) visualizando nuestro proceso dentro delcontorno global.

Juan Pablo Viscardo y Guzmán (1748-1798), del Perú, diseña unproyecto de amplitud, igualmente válido para toda América, en sucélebre “Carta a los españoles americanos” que escrita en 1792 empezóa ser conocida en 1801. Su requisitoria contra las sustantivas injusticiasdel coloniaje es de una exactitud conmovedora. Sus críticas a laesclavitud y al aislacionismo, a la explotación humillante que se sufre enfavor de una metrópoli desconsiderada son definitivamente convincen-tes.

José Joaquim da Silva Xavier (1748-1792), el valeroso Tiradentes,paga con su vida, en el Brasil, la osadía de concebir un sistema justopara nuestros pueblos. Una república soberana, sin esclavitud, conescuelas para todos, comercio libre, protección social, autarquía econó-mica, era el tema plural de su apostolado. Vive en el alma de su pueblo.

En tierras ecuatorianas, el adelantado es Francisco Eugenio deSanta Cruz y Espejo (1747-1795). Mestizo de tres sangres. Culto engrado de excepción, también actúa y muere para la causa americana. Sunoble bandera: la emancipación en paz, sin desgarramiento de los nexoshispánicos. En su horizonte ideológico hay un plan de convivenciaentre los dos mundos, en términos de equidad.

Antonio Nariño (1765-1823) es el heraldo de estas mismas aspira-ciones, en las comarcas de la actual Colombia, entonces Virreinato deSanta Fe o Nueva Granada. Dueño de vasta cultura, tradujo el textofrancés de los Derechos del Hombre. Castigado con severidad, alcanzósin embargo a ver triunfante el movimiento de la independencia quedecididamente él animara en su embrión.

Con todos ellos se cruzan en la historia, los nombres de adalidesvalientes a los cuales no arredraron las amenazas, ni la persecución, nilos peligros ni la muerte. Atahualpa, Cuauhtémoc, Guaicaipuro, Lau-taro, Hatuey, Andrea de Ledesma, Túpac Amaru, Chirinos, Picornell,España, Gual, Galán. . .

Para el liderazgo vencedor falta la personalidad-síntesis. Cuandodespunta el siglo XIX aún no ha surgido el hombre de acción y elintelectual, en una sola pieza. Para entonces América está madura, elreto vuelve a ser, esta vez más imperioso y necesario: edificar unmundo nuevo, efectiva y sinceramente, en el nuevo mundo.

23

Page 19: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

LOS BOLÍVAR EN VENEZUELA

La familia Bolívar se establece en Venezuela desde 1589; oriunda deVizcaya, llega a tierra firme desde la isla de Santo Domingo. Endoscientos años, estos vascos de Iberia se hacen americanos, llegando ala larga a coincidir, en la identificación, con el medio que componematerial y psicológicamente al indígena: la luz, la tierra, sus sales, elagua, los frutos, los alimentos.

Una dama de incomún belleza morena (doña María Josefa Marínde Narváez) trae la aportación del Africa a la esencia humana de SimónJosé Antonio de la Santísima Trinidad de Bolívar y Palacios (SimónBolívar), quien nace en Caracas el 24 de julio de 1783.

El es fiel expresión de la suma de pueblos que es el pueblo suyo.Aplicará su inteligencia en la indagación de nuestra identidad, y habráde anotar: “No somos indios ni europeos, sino una especie media entrelos legítimos propietarios del país y los usurpadores españoles: ensuma, siendo nosotros americanos por nacimiento y nuestros derechoslos de Europa, tenemos que disputar éstos a los del país y quemantenernos en él contra la oposición de los invasores; así nos hallamosen el caso más extraordinario y complicado” [13]. La perplejidad y eldesconcierto al respecto son explicables: “La mayor parte del indígenase ha aniquilado, y el europeo se ha mezclado con el americano y con elafricano, y éste se ha mezclado con el indio y con el europeo” [24]. Laobvia conclusión: “Es imposible asignar con propiedad a qué familiahumana pertenecemos” [24].

Con exactitud y con justicia, Bolívar valoriza la presencia delAfrica en el ser americano, donde ella se encuentra doblemente: “Nues-tro pueblo no es el europeo, ni el americano del norte, más bien es uncompuesto de Africa y de América que una emanación de la Europa,pues que hasta la España misma deja de ser europea por su sangreafricana, por sus instituciones y por su carácter” [24].

Adviértase que en todo caso, para el pensamiento bolivariano, loreal, positivo y promisorio es la mezcla abierta hacia una justa verdadmejor. “Yo considero a la América en crisálida; habrá una metamorfo-sis en la existencia fisica de sus habitantes; al fin habrá una nueva castade todas las castas, que producirá la homogeneidad del pueblo.”

El carácter de Bolívar se templó en la adversidad. La muerte y lasuerte lo golpearon con dureza. A los dos años y medio perdió a supadre; a los nueve murió la madre. En la orfandad, pasó a depender detutores y familiares que quisieron, no siempre con éxito, aliviar suinfortunio.

El primer testimonio escrito que existe de palabras de Bolívar data

24

Page 20: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

de los doce años. Es curioso que ellas versen sobre lo que habrán de ser,por siempre, sus temas favoritos: el desinterés y la libertad. Dijo elniño: “Que los tribunales bien podrían disponer de sus bienes, y hacerde ellos lo que quisiesen mas no de su persona; y que si los esclavostenían libertad para elegir amo a su satisfacción, por lo menos no debíanegársele a él la de vivir en la casa que fuese de su agrado.”

Sobre esto, el tutor -como hablando por el viejo régimen-adelantó un comentario que resulta de patética clarividencia. En lodicho por el pupilo ve “la gravedad y altanería de unas produccionesque hacen estremecer [. . .] ideas las más impolíticas y erróneas [. . .]máxima es ésta que, si tomase cuerpo y se hiciese persuasible, trastor-naría nuestra monarquía y causaría en ella los más funestos estragos”.

Don Simón Rodríguez fue, de sus maestros, el más trascendente yel más amado. Rodríguez prepara en Bolívar un alma independiente, leinculca los sentimientos de su excelencia heroica. Bolívar lo reconoceráde modo expreso: “Usted formó mi corazón para la libertad, para lajusticia, para lo grande, para lo hermoso. Yo he seguido el sendero queusted me señaló” [56].

Tenía dieciséis años el mozo Bolívar cuando hizo su primer viajefuera de Venezuela. Iba rumbo a España; el navío dio un largo rodeopor el Caribe. Fondeó en Veracruz; hubo tiempo holgado para que eladolescente caraqueño pudiera visitar la monumental ciudad de México.Ahí, por sus vinculaciones sociales, tuvo acceso a las tertulias de lacorte local. Cierto día, el virrey don Miguel José de Azanza inquiriónoticias sobre los sucesos de Venezuela, donde poco antes había sidodebelada una conspiración. Simón Bolívar ratificó al instante su convic-ción libertadora en agraz; sin inmutarse manifestó su simpatía hacia losheroicos complotados y censuró acremente al régimen absolutista quelos inmolaba. De esta ocurrencia, a Bolívar le complacería evocar añosmás tarde: “Yo he olvidado completamente las palabras, pero recuerdoque defendí sin desconcertarme los derechos de la independencia deAmérica. ”

LA FORJA DEL ESPÍRITU

La personalidad intelectual de Simón Bolívar se elaboró en Madrid. Allíresidió tres anos y medio. Estudió matemáticas en la Academia de SanFernando. Cursó, bajo la dirección del sabio marqués de Uztáriz,idiomas modernos (llegaría a hablar francés e italiano, y a comprenderbastante bien el inglés). Dentro de los círculos distinguidos de aquellacapital hizo vida social activa.

En su trienio europeo, Bolívar se convirtió en ávido lector. Lapasión por la lectura lo acompañaría la vida entera. En cuanto a su

25

Page 21: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

formación, él habría de subrayar que mucho había estudiado a “Locke,Condillac, Buffon, D’Alembert, Helvetius, Montesquieu, Mably, Filan-gieri, Lalande, Rousseau, Voltaire, Rollin, Berthot y todos los clásicosde la antigüedad, así filosofos, historiadores, oradores y poetas, y todoslos clásicos modernos de España, Francia, Italia, y gran parte de losingleses”.

Respecto a su carácter intelectual, él mismo da una síntesis: “Nosoy difuso. Soy precipitado, descuidado e impaciente. Multiplico lasideas en muy pocas palabras.”

Del Bolívar adulto se dice que tenía una excesiva movilidad delcuerpo. Por rareza se mantenía dos minutos en la misma posición. Alhablar miraba al suelo o inclinaba los ojos; cuando el asunto leinteresaba ponía fija la vista en su interlocutor. Su cuerpo era el de unhombre enjuto; medía un metro y sesentisiete centímetros de estatura.Su voz era aguda. Su complexión fuerte. Era muy ágil. Poseía una granresistencia a la fatiga.

Todavía sin cumplir diecinueve años, contrajo matrimonio enMadrid con una gentil prima suya, María Teresa Rodríguez del Toro,de veinte años. Los flamantes esposos emprendieron el regreso aVenezuela. En la hacienda de San Mateo la grácil madrileña enfermó depaludismo y murió luego en Caracas. Ocho meses duró la felicidadconyugal.

Para distraerse y olvidar el cataclismo que constituye esta muerte,Bolívar se embarca hacia Europa. Su fortuna de varios millones lepermite un dispendio en esta gira que es como el deambular de unperegrino aturdido.

No hay ninguna duda de que la viudez lo marca. Será éste el granacontecimiento de su vida personal, El hablará en 1828, a Luis Peru deLacroix, sobre la trascendencia de esta pena: “Si no hubiera enviudado,quizá mi vida hubiera sido otra; no sería el general Bolívar, ni elLibertador, aunque convengo que mi genio no era para ser alcalde deSan Mateo [. . .] Sin la muerte de mi mujer no hubiera hecho misegundo viaje a Europa [. . .] La muerte de mi mujer me puso muytemprano sobre el camino de la política; me hizo seguir después el carrode Marte en lugar de seguir el arado de Ceres; vean, pues, si ha influidoo no sobre mi suerte.”

En medio de su desastre sentimental, Bolívar se reencuentra enParís con su maestro don Simón Rodríguez. Al frustrado aristócrata deCaracas, su preceptor le devuelve la fe de vivir. Juntos emprenden unviaje sin programa estricto. Francia, Suiza, Italia. Principalmente a pie,recorren caminos y ciudades. Paseantes de la campiña francesa, cruzanlos Alpes, Piamonte, Lombardía, Toscana, Umbría, en una continua ynómada aula sabia. Nunca como en esta excursión se había compene-trado tan afirmativa y hondamente este binomio existencial: el maestro,

26

Page 22: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

que muy poco ignora, tiene sintonía perfecta con su joven contertuliotan despierto.

ELECCIÓ N DEL DESTINO

Veintiún años tenía Simón Bolívar. En París escogió el rumbo de suvida. Dos encuentros diferentes -más el que tiene con Rodríguez-,uno cordialmente próximo y otro a forzosa pero cálida distancia, dejanhuella imborrable en su resolución. Fue el primero con el barónAlejandro de Humboldt recién venido de América. Hablan de todas lascosas. Abordan el tema político. Humboldt, que no sólo ha visto yexaminado “la naturaleza” del nuevo continente sino la sociedad que lohabita, está convencido de que un cambio puede ocurrir pronto en ella.Bolívar inquiere la opinión del sabio germano sobre la independencia:éste la siente próxima, pero confiesa que no divisa al hombre capaz derealizarla. La conversación con Humboldt estimula al joven americano,y prende en él un germen que no tarda en definirse de manerainequívoca.

A cielo abierto y en el contagio multitudinario, es el otro encuen-tro: con Napoleón. El corso está en el ápice del poder y de la fama.Bolívar presencia la coronación, el hecho en sí le impresiona poco, alfondo de su alma lo impacta la aclamación jubilosa que recibe Bona-parte de la inmensa y delirante muchedumbre. “Aquel acto o funciónmagnífica me entusiasmó, pero menos su pompa que los sentimientosde amor que un inmenso pueblo manifestaba al héroe francés; aquellaefusión general de todos los corazones, aquel libre y espontáneomovimiento popular excitado por las glorias, las heroicas hazañas deNapoleón, vitoreado, en aquel momento, por más de un millón deindividuos, me pareció ser, para el que obtenía aquellos sentimientos, elúltimo grado de aspiración, el último deseo como la última ambicióndel hombre. La corona que se puso Napoleón en la cabeza la miré comouna cosa miserable y de estilo gótico: lo que me pareció grande fue laaclamación universal y el interés que inspiraba su persona. Esto, loconfieso, me hizo pensar en la esclavitud de mi país y en la gloria quecabría al que lo libertase.”

Bolívar sale de París ya motivado sobre su destino. Rodríguez leapuntala su convicción y lo alienta en la perseverancia sobre la resolu-ción tomada.

En Italia culmina, al año siguiente, el viaje de los Simones. EnRoma se da otro paso de enorme alcance para esta carrera prodigiosa.Una sofocante tarde de agosto salen en procura del aire fresco de lasvecindades; van el discípulo, su preceptor y el amigo Fernando Toro;

Page 23: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

suben a una suave colina. Es el Monte Aventino. La inspiración sedesata en Bolívar, todo bulle y se agita en su espíritu inquieto: losepisodios de Caracas y México, los alegatos ingenuos sobre la libertadque el niño suponía en los esclavos, la balbuciente solidaridad con losmártires de la intentona revolucionaria caraqueña, la constante palabrailuminada de Rodríguez, el espectáculo de París en una sola y múltipleovación en tomo a su líder, el acicate de Humboldt. El incitante juegode contrastes de la historia de Roma, desfila en su evocación. Todode repente cuaja en una promesa solemne: ‘Juro delante de usted; juropor el Dios de mis padres; juro por ellos; juro por mi honor, y juro pormi patria, que no daré descanso a mi brazo, ni reposo a mi alma, hastaque haya roto las cadenas que nos oprimen por voluntad del poderespañol” [l).

Durante su regreso a Venezuela, permanece Bolívar por variosmeses en los Estados Unidos. Cuál su impresión? El contesta: “Porprimera vez en mi vida vi la libertad racional.” Otro motivo y unargumento poderoso para afirmar la resolución tomada.

A medida que el personaje se define y madura, la escena caraqueñatambién cambia. Los señores de la capital venezolana adelantan maqui-naciones separatistas para tomar el poder político, único que les falta-pues ya tienen el económico, social y cultural- para el predominiocompleto. El desquiciamiento de la Corona de España que se originacon Napoleón va a convertirse en detonante de la explosión revolucio-naria. Un rey como Carlos IV no era precisamente el hombre paraenfrentar la honda crisis que se avecinaba. El cetro se desplaza haciaFernando VII, y los malabarismos políticos concluyen con José Bona-parte monarca de España.

La “Cuadra Bolívar” -casa de recreo de los hermanos JuanVicente y Simón- sirve para los conciliábulos conspirativos a favor deuna junta o congreso criollo que eventualmente substituya a las autori-dades coloniales. Lo que en otro tiempo hubiera bastado para unacondena ejemplarizante, y hasta para la pena máxima, ahora recibeapenas una leve sanción disciplinaria de confinamiento lejos de la ciudad.

EMPIEZA EL PROCESO

El jueves santo 19 de abril de 1810, por acatamiento a la medidapolicial, Bolívar no estaba en Caracas. Ese día revienta la revolución.Los venezolanos suben, por fin, al mando ejecutivo. El Cabildo deCaracas motoriza el acontecimiento: son depuestos el gobernador ycapitán general, el intendente de ejército y real hacienda, el auditor deguerra, asesor general de gobierno y teniente gobernador, el presidentey los miembros de la Audiencia. Para no alarmar a las masas que siguen

28

Page 24: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

fieles al rey -éste preferible para ellas en vez de los presuntuososcaballeros de la oligarquía local-el gobierno que se instala ese díaadopta una denominación complaciente y eufemística: “Junta SupremaConservadora de los Derechos de Fernando VII”.

El objetivo final es la independencia, pero la prudencia recomiendaevitar los escollos de otras veces cuando se actuó con ligera franqueza.En esta ocasión el ardid cauteloso da resultado. Los criollos ascienden alpoder con el apoyo de los sectores populares, éstos consecuentespromonarquistas.

Cuatro misiones diplomáticas envía la Junta Suprema al exterior:Juan Vicente Bolívar y Telésforo de Orea van a los Estados Unidos.Para Londres salen Simón Bolívar -flamante coronel- y Luis LópezMéndez, los acompaña Andrés Bello. A las Antillas los competentesVicente Salias y Mariano Montilla. A Nueva Granada marchará JoséCortés Madariaga.

En la capital británica tiene lugar el encuentro de los tres hijosprincipales de Caracas, los cuales habrán de ser también los trespersonajes cumbres de América: Miranda, Bolívar y Bello. De esteviaje queda, en Londres, la publicación por primera vez del pensa-miento integracionista de Bolívar: la idea de la unidad americanaaprendida en Miranda. Aparece en el Morning Chronicle el 5 de septiem-bre de 1810. Tres días después, el mismo Bolívar suscribe un francopronunciamiento revolucionario, incitando a la Junta Suprema deCaracas a romper con la Corona hispana: “Estamos comprometidos apresencia del universo, y sin desacreditarnos para siempre, no podemosdesviamos un punto del sendero glorioso que hemos abierto a laAmérica [. . .] Nos empeñamos en producir la emancipación general.Nuestras medidas llevadas adelante con tesón y firmeza, deben apresu-rarla infaliblemente” [2].

De entonces hay otro testimonio muy revelador sobre la nacientepersonalidad bolivariana; es el que brinda Joseph Lancaster -presti-gioso pedagogo inglés- quien en 1824 recordará que “en la casa delgeneral Miranda, en Grafton Street, Piccadilly, Londres, hacia el 26 o27 de septiembre de 1810”, mostró Bolívar “un interés tan vivo ypoderoso” por la educación. Igualmente, de ese paso por la GranBretaña, está documentado un contacto con los inventores de un nuevosistema de guerra y fortificación: los señores Holmes y Atkins.

De ese modo quedan datadas, con fechas ciertas, su política deunidad y política de cultura, su política de paz y política de guerra.Conducido expertamente por Miranda -precursor, maestro sexagena-rio- en la hora oportuna y el ambiente favorable, el joven Bolívar deveintisiete años nace a la historia en grande, a las macro-perspectivasdel mundo.

Bolívar vuelve a Caracas y, en seguida, lo hace también Miranda.

29

Page 25: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Este regresa a tiempo para ser elegido diputado al Primer Congreso deVenezuela, que el 5 de julio de 1811 declara con solemnidad laindependencia. A Bolívar no le interesó la tarea parlamentaria [3].Miranda, marginado en principio, asciende al primer plano cuando,frente a la crisis por la reacción armada contra el nuevo gobierno, se leotorgan desesperadamente poderes como “dictador”. La desorganiza-ción y el desconcierto cunden. Nada pudo hacer el afamado prócer, laRepública se derrumba.

Dificultosamente consiguió Bolívar escapar al extranjero. Tras unabreve escala en Curazao, emprende el doloroso curso de su primerexilio. En éste va a demostrar el temple de su personalidad. Es elderrotado invencible, indoblegable, recio y tenaz. Nunca pasa por sumente abandonar el combate, cualesquiera sean las circunstancias.

DE NUEVO A LA CARGA

Desde Cartagena, en “Manifiesto” [4] denso y razonado, él explica losinfaustos sucesos de Caracas. El denodado combatiente se muestraahora como agudo observador político, analista de situaciones comple-jas que pocos alcanzan a penetrar con la clarividencia suya.

Ratificando su convicción integracionista, siempre a favor de launión, invita a los neogranadinos a no ser indiferentes a la suerte de sushermanos de Venezuela.

Logra su propósito, y entrando a su patria por el occidente, detriunfo en triunfo -en la Campaña Admirable- llega el otrora fugi-tivo de Caracas a su ciudad que lo aclama. Trae consigo la fresca gloriade su título: Libertador. Así lo bautizó Mérida, y luego, por Venezuelaentera, lo confirma Caracas.

Gracias a los éxitos militares de esta serie victoriosa se instaura laSegunda República.

En su camino, al pasar por Trujillo, tuvo Bolívar la inspiración deuna tremenda decisión: proclamar la guerra a muerte [5]. Él buscabadefinir claramente los bandos, y que supieran los enemigos de lalibertad que su suerte entre los patriotas sería igual a la que ellos lesdaban [7]. En su furor, él promete el exterminio incluso a los indife-rentes españoles y canarios, y asegura la vida a los americanos así fueranculpables. En el deseo de los grupos dirigentes de la clase social superiordel país (“criollos”) no hay, en verdad, otra meta que la ruptura de lasumisión política a la metrópoli; sobre esto fue elocuente la experienciade 1810-1812. La revolución no entraba más allá de la superficialidadpolítica. Nada concreto a favor del pueblo, nada tangible contra laesclavitud ni respecto a la distribución de las tierras. Todo se reducía adeclaraciones sobre la libertad y la justicia. Así los criollos perfeccio-

30

Page 26: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

narían su prepotencia alcanzando el derecho a gobernarse y, más aún, agobernar, facultad para hacer la ley, acceso a las magistraturas supe-riores del naciente Estado.

Fue un error la guerra a muerte, en cuanto los resultados nocorrespondieron a la expectativa. Las filas del rey continuaron nutridaspor gente del país. Los sectores más pobres y humildes de la sociedad,especialmente los “llaneros”, acaudillados por José Tomás Boves,darían pronto otro golpe mortal a la revolución. Una vez más, el terrordemostró ser infecundo. El rey o su nombre -con el apoyo de laIglesia, a él sometida en virtud del derecho de patronato eclesiástico-gozaba de una excelente imagen muy contrastante con las antipatíasque suscitaban los oligarcas locales. El pueblo no era lerdo, escogíaa sabiendas, lo guiaban su instinto y la razón de su conveniencia:en el rey encontraba más comprensión y amparo, lo sentía másbenévolo.

Por huir de Boves, dueño de la situación, desde Caracas sale un díauna romería despavorida. Bolívar marcha con ellos. Es la “Emigracióna Oriente”. Van regando cadáveres en jornadas agotadoras y por rutaspenosas e intransitables. Es el fin, otra vez.

Bolívar llega al puerto de Carúpano, de donde irá para su segundoexilio. Todo parece aniquilarse, pero hay una fe que no muere. El signode este líder es, precisamente, el de ser persistente en la lucha. El secrece en la derrota. Justo en Carúpano forja uno de sus lemas: “Diosconcede la victoria a la constancia” [ll].

Cuando se salva en esta oportunidad, Bolívar hace una comproba-ción, ahora nítida en su pensamiento como nunca antes. La opiniónpública está ganada por los realistas: el pueblo -caudal y masasdecisivas- no siente suya la revolución, no la defiende ni le interesa. Lacombate. La lucha que se libra es “civil” en cuanto que la contienda esentre hermanos; la fuerza “extranjera” (española peninsular) es mínimaen Venezuela. Todavía no llega de Europa el “ejército” propiamentedigno de tal nombre que de España irá el año siguiente con el generalPablo Morillo.

En el Manifiesto de Carúpano resalta un compromiso -es la vozde la tenacidad convencida-: “Yo os juro, amados compatriotas, queeste augusto título que vuestra gratitud me tributó cuando os vine aarrancar las cadenas, no será vano. Yo os juro que libertador o muerto,mereceré siempre el honor que me habéis hecho; sin que haya potestadhumana sobre la tierra que detenga el curso que me he propuesto seguirhasta volver segundamente a libertaros” [ll].

La existencia del desterrado indomable transcurre desdichada porlas Antillas. Sólo por una casualidad no cayó, en Jamaica, a manos deun asesino pagado. Parecieran cerrarse todas las puertas. Pero en esainacción, aprovecha para meditar. Bolívar reflexiona sobre el porvenir

Page 27: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

y sobre América. Así surge otro de sus documentos fundamentales: laCarta de Jamaica [13].

Fue la respuesta a un caballero inglés, Henry Cullen, que pide alLibertador sus impresiones sobre la circunstancia contemporánea. Otravez el genio globaliza -basado en buena parte sobre informes, estudiose intuiciones, pues le falta aún la vivencia directa que pronto tendría-sobre el complejo y unitario mundo latinoamericano. Bolívar se atrevea juicios y a predicciones cuya exactitud la posteridad certifica conadmiración y asombro.

Firme y nítida resplandece en la Carta de Jamaica la concepcióncontinental. Señálame allí los motivos de la unión: la lengua en primerrango, la religión, las costumbres, la historia, los sufrimientos yesperanzas. Allí se apuntan los obstáculos: distancias enormes, carac-teres variados, intereses localistas.

En la evaluación de unos y otros, lo afirmativo vence, y elsentimiento americano gana en el balance.

Allí pensó Bolívar en la más grande nación -sobre treinta mi-llones de kilómetros cuadrados-, que alguna vez podría formar laAmérica Latina. Relámpago de Miranda. Recuérdese que los EstadosUnidos eran entonces una faja noratlántica de trece colonias que en sudesignio expansivo ya alcanzaban al río Misisipí indicado por el Precur-sor como frontera septentrional de “Colombia” -como éste llamaba ala otra y mayor América-. El Canadá era a la sazón un gélido vacío debosques y lagos. Sobre la demarcación de ese ámbito precisado porMiranda, discurre el pensamiento de Bolívar: “Yo deseo más que otroalguno ver formar en América la más grande nación del mundo, menospor su extensión y riquezas que por su libertad y gloria” [13]. Quedaallí la indicación textual que apunta a la historia -libertad y gloria-como base de la grandeza. No era la superficie lo que importaba. Era elnuevo pensamiento, la posibilidad concreta de igualdad y justicia, lasolidaridad que confiere fortaleza, la moral y la cultura que elevan a lassociedades, los valores supremos de la educación, las ciencias, las artesy las letras.. .

En su meditar de Jamaica -plasmado en más de un escrito esencial[14, 15]- consiguió Bolívar, al fin, una explicación real y constructiva,breve y exacta, sobre los vanos esfuerzos desplegados en pro deincorporar al pueblo a la causa nueva. Y su diagnóstico fue: “Losindependientes no habían ofrecido la libertad absoluta, como lo hicie-ron las guerrillas españolas.” De ahí, él se hizo una resolución: lapróxima vez será distinto!

32

Page 28: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

TERCERA Y DEFINITIVA ACOMETIDA

Haití se convierte a finales de 1815, cuando en las posesiones inglesas secierran las posibilidades de ayuda a la revolución, en la postreraesperanza. No se equivocó el Libertador.

En el magnánimo Alejandro Petion, presidente de la acogedoranación caribeña, consiguió Bolívar comprensión y afecto [16]. Con elapoyo total -personal y económico- del almirante Luis Brion y delespléndido hombre de negocios Robert Sutherland, reconstruye elhéroe de Caracas su maquinaria para la libertad.

El gobierno haitiano es pobre, pero la ayuda es generosa: ochogoletas, armamento bastante, recursos de la más diversa índole, y sobretodo aliento moral para la perseverancia en la causa del bien. Bolívarsale de Los Cayos de San Luis con su expedición redentora. Tan prontollega a Margarita -isla aguerrida del oriente venezolano- anuncia sunueva política de apertura hacia los horizontes que interesan al pueblo:terminará la esclavitud.

En Carúpano, de cuya rada saliera a la odisea de este segundoexilio que ahora concluye, Bolívar decreta la sustancial reforma: “lalibertad absoluta de los esclavos que han gemido bajo el yugo españolen los tres siglos pasados” [17]. “De aquí en adelante sólo habrá enVenezuela una clase de hombres, todos serán ciudadanos.”

Otro colapso sobreviene luego inesperadamente. Cuando él seaprestaba a anunciar los pasos complementarios del nuevo esquema dela revolución, ocurre en julio de 1816 el desastre de Ocumare. Será elexilio tercero. Se iba a dar un pistoletazo, resuelto a no dejarsecapturar, cuando el haitiano Juan Bautista Bideau lo rescata de la playa.A dónde ir? A cualquier parte -“hasta el polo”- donde puedaconseguir los medios para reemprender la lucha.

De nuevo en Haití, no se atreve Bolívar a pedir más a quien contanta largueza lo auxilió hace poco. Apenas se atrevería a implorar elmínimo auxilio para trasladarse a otros sitios con más holgados recur-sos, para gestionar en ellos lo que necesita.

Petion se sublima en la grandeza de su bondad hacia el infelizcombatiente, y así le dice: “Si la fortuna se ha reído de usted por dosveces, quizá le sonría en la tercera oportunidad. Yo, por lo menos,tengo ese presentimiento, y si algo puedo hacer para mitigar su pesar ysu dolor, cuente con todo lo que esté al alcance de mis posibilidades.Dése prisa y venga a esta ciudad. Deliberaremos juntos.” Gracias alacuerdo de Puerto Príncipe, zarpará de Jacmel la expedición definitiva.Bolívar enaltece a Petion ante los siglos: “Mi reconocimiento no tienelímites. En el fondo de mi corazón, digo que V.E. es el primero de los

33

Page 29: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

bienhechores de la tierra! Un día la América proclamará a V.E. sulibertador. ”

El igualitarismo es ratificado por Bolívar al arribar a Venezuela. Laesclavitud debe ser abolida. Ya el pueblo comienza a entender y quererla revolución. Ya no será sólo abstracciones ni fórmulas jurídicas queel común de las gentes no logra comprender: constitución, estado,poderes, leyes, república. Ahora, el tema palpitante es la igualdad:todos hermanos e iguales. Y a semejante proyección social no tarda ensumarse la revolución económica, que el propio pueblo ha determi-nado: tierras, y justicia en el disfrute de los bienes nacionales.

José Antonio Páez, un caudillo enérgico, ha conseguido en estosaños adversos, atraerse a las mismas masas llaneras que acompañaron aBoves, el azote de los patriotas. El cambio se opera porque Páez, que esuno de los llaneros y los conoce bien, les ofrece la entrega de las fincas yla garantía de libre pastoreo en las sabanas.

Fue así como el peso de los llanos se tomó a favor de la causarepublicana. El ofrecimiento de las tierras fue la única condición quePáez puso a Bolívar para acatar su autoridad. El Libertador aceptó, ydesde entonces incorpora la idea de la justicia agraria a las prioridadesde su revolucionarismo integral.

Ya están definidos los elementos del programa revolucionario. Elviejo orden que se formó en trescientos años era pleno y armónico,dentro de su carácter obsoleto: En lo político su base era el absolutismode la monarquía borbónica, el sistema colonial, dependiente y opresivo,sin libertad, sin derechos ni garantías. En lo social, la desigualdad era laregla: esclavitud y privilegios; clases, estamentos y castas, y diferenciasmúltiples. En lo económico: injusticia en la distribución de los bienes; unpequeño sector prepotente, y la mayoría desprovista de lo elemental.En lo jurídico: un panorama de muchas circunscripciones y separacionesen América, el aislamiento, la desconfianza y los recelos como normaen pro de individualismos egoístas. En lo cultural: atraso y más atraso;el espíritu encadenado.

REVOLUCIÓ N ORGÁNICA Y COHERENTE

Simón Bolívar no inventó stricto sensu uno por uno los elementos queensambló en su vasta estructura de cambios y progreso con el cual sesubstituiría el viejo orden. Produjo parte considerable de los mismos, ala vez que recogió una herencia rica y llena de sustancia histórica. Hastaél llegaba una robusta tradición, definida en centurias de sueños poster-gados.

Su acierto y su valor residen en dar organicidad a todo eso, dentrode un orden vivo, sincero y funcional. Don Simón Rodríguez puntuali-

34

Page 30: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

zaba, con tino, que Bolívar “dio a la América muchas ideas suyas; y delas ajenas propagó las más propias para hacer pueblos libres, con loselementos de la esclavitud”.

Para Venezuela -con destino a América y al mundo- ya en 1819está claro el orgánico y coherente programa de la revolución. Es unaempresa que opera en cinco campos por la felicidad sustancial denuestra América. En lo político procura la independencia, la emancipa-ción o autonomía; establecer una democracia, república constitucional,representativa, alternativa y popular. La libertad será el valor cumbre:“único objeto digno del sacrificio de la vida de los hombres” [12, 9, 49).En lo social se tiende al imperio de la igualdad absoluta -“ley de lasleyes”-, abolición de la esclavitud [17, 31, 39), derogatoria de losprivilegios, eliminación de toda suerte de barreras y divisiones entre losciudadanos. En lo económico, la meta es clara: justicia en el reparto deos bienes nacionales [20, 77), primordialmente tierras, además, nacio-nalización de la riqueza minera [96]. En lo jurídico -señaladamentedentro de la esfera del derecho internacional- todo se cifra en la unidadde América Latina; unión efectiva y auténtica de nuestras patrias en unhaz vigoroso, fuerte y triunfal [62]. Desde una patria así vertebrada semiraba al universo en términos de equilibrio y de justicia para todos loscontinentes. Es la idea central de la integración sirviendo a la paz delmundo. “La esperanza del universo.” En lo cultural, ese programaplural culmina en un empeño magno por la educación. Moral y luces, ajuicio de Bolívar, son “nuestras primeras necesidades” [24]. Piensa que“el primer deber del gobierno es dar educación al pueblo” [76].

En 1817, la toma de Guayana, al sur del Orinoco, proporcionó a larepública, que nacía por tercera vez, la plataforma práctica que serequería. La ciudad de Angostura fue la sede del gobierno. En estaocasión, con más éxito que en los años de 1810, 1813 e incluso 1816, seplantaría para siempre el árbol perenne de la libertad sudamericana-hoy, latinoamericana-. El hecho debía repercutir en gloria y ven-tura para la humanidad, porque si de la libertad de América estabapendiente el mundo, de la libertad de Venezuela dependía la suerte de larevolución en el hemisferio.

El alumbramiento de la patria definitiva tiene lugar a orillas delOrinoco; nace ya veterana en vicisitudes, consciente, experta y diáfanaen sus objetivos. El río sirve de valla protectora a la capital. Laprovincia guayanesa que, hasta entonces, permaneció a salvo de ladestrucción, contiene todos los recursos: gente, ganado, oro, abasteci-miento, frutos exportables, posibilidades de comercio.

El Poder Ejecutivo se radica en Angostura: la Presidencia de laRepública con las secretarías, entre ellas la muy importante de lasrelaciones exteriores. También se instala allí la Corte de Justicia, cabezadel Poder Judicial, y un Consejo de Estado que llenará interinamente la

35

Page 31: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

función legislativa. Por si fuera poco, para redondear el genuino estadode derecho y de cultura, Bolívar funda el periódico de la patriaredimida: el Correo del Orinoco.

Hacia el Río de la Plata sale, desde Angostura, la nota hermosa,fraterna y cordial: “Cuando el triunfo de la armas de Venezuelacomplete la obra de su independencia, o que circunstancias más favora-bles nos permitan comunicaciones más frecuentes, y relaciones másestrechas, nosotros nos apresuraremos, con el más vivo interés, aentablar, por nuestra parte, el pacto americano, que, formando detodas nuestras repúblicas un cuerpo político, presente la América almundo con un aspecto de majestad y grandeza sin ejemplo en lasnaciones antiguas. La América así unida, si el cielo nos concede estedeseado voto, podrá llamarse la reina de las naciones, y la madre de lasrepúblicas. Una sola debe ser la patria de todos los americanos” [22]. Lalínea está tendida entre los extremos sudamericanos: una misma causa,un mismo sentimiento, una sola actitud.

El anhelo bolivariano de la estabilidad y de la superación política secolma, en febrero de 1819, con la apertura del Congreso. Bolívarpronuncia ante ese cuerpo su discurso, la pieza más importante, y másextensa, de todas las producidas por su inteligencia [24]. Saluda a larepresentación nacional que confiere legitimidad a su mando y a todaslas instituciones. Entrega como guía un proyecto de Constitución;glosa el esquema jurídico-político que propone; exhibe su cultura,demuestra su madurez y sagacidad. Y finalmente, para articular elpasado con el presente y el futuro, ofrece una especie de memoria de loactuado, con especial insistencia sobre aquello que del pretérito recientedebe ser salvado para lo venidero.

Bolívar es enfático sobre el reparto de tierras, que suplica comopremio a sus servicios, y sobre la abolición de la esclavitud, que élímplora, como imploraría su vida y la vida de la república. Además,recuerda el compromiso de Venezuela con sus benefactores: la deudanacional; instituye la Orden de los Libertadores; reafirma la decisión depatria o muerte, como una irrevocable toma de conciencia. El discursode Angostura es el más trascendental, profundo, denso y bien escrito,de los documentos bolivarianos.

Prosiguiendo su deber, Bolívar cruza los Andes. Cuando no loesperaban, y por el sitio donde nadie hubiera imaginado que él lo haría,atraviesa con sus soldados del llano caliente las heladas cumbres. Elfruto de tamaña osadía es la libertad de la Nueva Granada por la batallade Boyacá.

36

Page 32: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

PROYECCI Ó N CONTINENTAL

El triunfo neogranadino robustece el propósito de Simón Bolívar deempezar la materialización de la unidad. Al Congreso de Angosturapide la ley constitutiva de Colombia [28], Venezuela se asocia a NuevaGranada bajo un nombre nuevo: un nombre de “justicia y gratitud”, node azar. Honra al descubridor, padre y creador del nuevo mundo:Colón.

El Libertador concebía a Colombia como núcleo de la unidad,motor para impulsar la integración [29]. Del prestigio de esta repúblicaes buen índice que pronto logre las incorporaciones de Quito, Panamáy Guayaquil. Y que a corto plazo se manifieste una disposición de igualafinidad, y de entusiasta solidaridad, en Santo Domingo y Costa Rica.Los dominicanos y costarricenses exteriorizaron el voto de sumarse a laempresa política bolivariana -la Gran Colombia- a través de doslíderes: José Núñez de Cáceres y Rafael Francisco Osejo, respectiva-mente, pedagogos y paradigmas ambos de una conciencia americanistade dilatadas miras.

Otros dos países de la comunidad hispanoamericana, Cuba yPuerto Rico, figurarían en la previsión del Libertador. “No son america-nos estos insulares? NO son vejados.? NO desean su bienestar?” [13]había preguntado él en la Carta de Jamaica. Planes concretos seríanhechos para la liberación de estas islas que a la postre completarían ladecena de pueblos que ya en vísperas del siglo XXI deben estimarseincuestionablemente bolivarianos: Bolivia, Colombia, Costa Rica,Cuba, Ecuador, Panamá, Perú, Puerto Rico, República Dominicana yVenezuela.

Quería el Libertador que su Colombia fuera -y en cierto modo lofue- la primera nación de su hora. La más avanzada. La primera en unorden categórico de calidad política. La primera en la posesión del másfornido y compacto conjunto de metas para la dignificación del hom-bre, para la efectivación de la justicia, la igualdad, la libertad y lademocracia. Ni en Europa ni en otros continentes existía una naciónque, en tales aspectos, aventajara a Colombia. Los Estados Unidosabocados a su soberbio desarrollo industrial, y disfrutando un altogrado de estabilidad y de libertad civil, padecían, sin embargo, elcáncer de la esclavitud y de los odios raciales. Sólo Colombia ofrecía enaquella época, conjuntamente, libertad, democracia, justicia, igualdad,unidad y cultura. Era al fin y en síntesis, el triunfo de la mente lógicaque, fundada en la formación matemática de su mocedad madrileña, sehizo esclarecida y jerarquizada en Simón Bolívar.

El Libertador sabía lo que decía al afirmar que la revolución de

37

Page 33: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

América era “la esperanza del universo” [59]. Para la humanidadllegaba, precisamente empezando en América, el tiempo cabal de lajusticia social.

Debía materializar Colombia las aspiraciones del ser americano,aspiraciones ancestrales del hombre universal que por doquier hasufrido de humillante opresión y cruel injusticia.

Mientras en Europa se afinca el individualismo liberal, Bolívarbusca implantar en América la justicia y la equidad efectivas, promuevela igualdad verdadera y atiende a la ‘auténtica reivindicación de losoprimidos. Cuando Gran Bretaña aplica la “libertad de contratos”(establecida desde 1813 y 1814), dejando sin protección a los económica-mente débiles y renunciando el Estado a intervenir en la comunidad,Bolívar lucha por dar al movimiento revolucionario latinoamericano sudimensión colectiva: habla de “suprema Libertad social”, de “seguridadsocial”, de “garantías sociales” y de “derechos sociales”. La supresiónde las corporaciones en Europa desde 1791, y el castigo a todo intentode restaurarlas, hacía que para principios del siglo XIX no se aplicara encuanto a condiciones de trabajo, ninguna regla, ni legal ni corporativa,ni convencional. Cuando allá la situación del incipiente proletariadoindustrial era, por ello, peor que la de los esclavos romanos y lossiervos del medioevo, situación inaguantable por los años en torno a1825, Bolívar estaba legislando en América para el trabajo de los indioscon normas claramente intervencionistas y protectoras, las cuales noeran simples ni aisladas expresiones de humanitarismo, sino partecalificada de una temática consecuente de dignificación cultural ypolítica. Cuando en Europa la meta era la ilusoria libertad individual, yse consideraba que la sociedad entera, o cualquiera forma de asociación,restringía el albedrío personal y negaba los Derechos del Hombre y delCiudadano, cuando allá se pensaba que el Estado debía esfumarse comoarcaica realidad despótica, con lo cual se retrocedía a una especie deetapa presocial, donde iba a reaparecer el horno homini lupus y el fuerte seimpondría, Bolívar -partiendo justamente de la base de que “nada estan peligroso con respecto al pueblo, como la debilidad del Ejecu-tivo”- trabajaba por un régimen republicano activo, centralista, demo-crático y civil, un “sistema vigoroso que pueda comunicar su aliento atoda la sociedad”.

A tanto llega el celo de Bolívar en sus decretos a favor de lostrabajadores indígenas, que en ellos incluye algunas veces una cláusulainusitada: “El presente decreto no sólo se publicará del modo acostum-brado, sino que los jueces políticos instruirán de su contenido a losnaturales, instándolos a que representen sus derechos aunque sea contralos mismos jueces y a que reclamen cualquiera infracción.”

38

Page 34: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

LAS TRES VERTIENTES DE SU MINUCIOSIDAD

Bolívar se impuso como el personaje clave para los tres momentos ofases de la construcción americana: el ser, el hacer y el persistir.Liberación, fortalecimiento y relación. El sentido de la acción boliva-riana es, primero, el de romper los hierros de la servidumbre, luego elde dar estructura, identidad y permanencia a la nacionalidad, y, final-mente, el ligar y comunicar ese producto al contexto del universo. Deallí que tres temas capitalizaran su atención de modo preferente: laguerra, la educación, la diplomacia. El debió atender a todo lo queconcernía al existir de América, pero su celo minucioso y su cuidadohubo de distribuirse, en forma simultánea y hasta sus mínimas deriva-ciones, en esos tres frentes de la política, la andragogía y la comunidadinternacional.

Bolívar es campeón de la paz. Llegó a la guerra como necesidad,continuación forzosa e inexcusable del propósito de paz evidenciadohasta la saciedad en la primera etapa de la revolución. A él le tocó, acontrapelo de sus genuinos sentimientos, ser hombre de guerra: vivir yprotagonizar la coyuntura trágica de una confrontación sangrienta muylarga (su Venezuela perdió el 30% de la población en los doce años de laguerra de liberación americana). Sobra repetir que su ideal de fraterni-dad y de creación exige el ambiente de la paz, como el propio y únicoadecuado para los esfuerzos constructivos de los pueblos.

En el oficio bélico adquirió maestría. Sus campañas de Venezuela yNueva Granada, y las subsiguientes del sur, con las batallas estelares:Carabobo, Boyacá, Bomboná, y Pichincha, Junín y Ayacucho, son elpedestal de su gloria militar. Hasta el Potosí, en las vecindades deArgentina -y tras una marcha de quince años- llega en 1825 con lasbanderas de América libre [75]. Pasto, Quito, Guayaquil, Perú y elAlto Perú conocieron de su desvelo y su aptitud para vencer yconvencer, para demoler la resistencia trisecular que oponía el coloniajeabsolutista e imperialista a la libertad y al derecho de los nuevos pueblos.

Hacer mucho con muy poco era la rutina cotidiana de Bolívar.Levantarse desde lo más hondo a lo más alto era un ejercicio habitualpara su personalidad férrea. Duro, aguerrido, impávido ante la adversi-dad; luchando contra todos los factores opuestos coaligados, la cima desu ejemplo es difícil de alcanzar. El se autodenominó “el hombre de lasdificultades”. Desde antes de 1819 hay testimonios seguros de susconocimientos tácticos. Al general Bermúdez escribió: “Regla general:si no hay obstáculos invencibles en el campo de batalla, o si nosotros noocupamos posiciones ventajosísimas, debemos observar al enemigoconstantemente, y desde muy lejos, para atacarlo en la misma forma-

39

Page 35: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

ción en que venga marchando; mas siempre prontos a seguir susmovimientos con la última celeridad, procurando muy cuidadosamenteoponerle un frente igual, o poco mayor, aunque nuestro fondo sea unpoco menos que el del enemigo, una ala sobresaliente tiene muchoadelantado para flanquear al enemigo. Hará usted que las primerascompañías sean de hombres selectos, para ponerlas siempre al frente,porque las tres primeras filas deciden regularmente de la suerte de lacolumna y aun de la victoria. El resto de la columna sigue el impulso desu cabeza. ” En su concepción general de la campaña continental deliberación, como en sus previsiones ante la posibilidad de un ataquemasivo revanchista por las fuerzas sumadas de la Santa Alianza, brilla eltalentoso estratega.

Su minuciosidad va también a los mil problemas de la logística:alimentación y cuido de las tropas, atención a los caballos, el arma-mento, los pertrechos, los buques, los voluntarios extranjeros, losclavos para las herraduras, el papel, los uniformes, el transporte, lascomunicaciones, la celeridad y seguridad del correo, la salud, la moraltalentoso estratega.

EDUCACIÓ N N, CIENCIAY CULTURA

La obra de civilización que se realiza en América guiada por el gran hijode Caracas no tiene precedentes ni similares. Para su desvelada activi-dad hay un orden lógico: la guerra fue imprescindible para que Américapudiera ser “posible”. La educación era absolutamente fundamentalpara la identidad del mundo nuevo.

Desde 1810, inquiere en Londres con avidez cuanto atañe alsistema de las escuelas mutuas creado por Joseph Lancaster (65, 63). En1814 se interesa por una biblioteca pública en la Caracas recién liberada,y encarga a sus agentes diplomáticos reclutar en la Gran Bretaña“artistas hábiles en los ramos de industria que necesita Venezuela, ydirigirnos las máquinas e instrumentos de que con notable prejuiciocarecemos”.

La historia de sus actos administrativos es por demás ilustrativasobre la diversidad de asuntos considerados, facetas mil y distintas de lamisma preocupación central.

En Santa Fe crea en 1819 un colegio para la educación de huérfa-nos, expósitos y pobres [26]. En mayo de 1820 legisla sobre laenseñanza de los párvulos indígenas, e incluye en el currículum “losderechos y deberes del hombre y del ciudadano en Colombia, con-forme a las leyes” [32].

En Guayaquil crea en 1823 una escuela náutica [50]; ya en Carta-gena había sido establecido otro plantel similar. Colombia, con dos

Page 36: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

océanos, tenía una vocación más que marinera, reiterada en su nombreproveniente del más famoso de los almirantes.

En Trujillo (Perú) erige la universidad en mayo de 1824 [58]. Paradiciembre convierte al Colegio de Santa Rosa de Ocopa en colegio deenseñanza pública. En el Perú, el 5 de mayo de 1825, ratifica laobligatoriedad de la instrucción primaria para los jóvenes. La educaciónfemenina fue objeto de varios de sus decretos [70].

Por la pluralidad de sus disposiciones, es importante el decreto del11 de diciembre de 1825 en Chuquisaca, fundado sobre el convenci-miento de que “el primer deber del gobierno es dar educación alpueblo” [76]. Allí dispone: obligaciones y facultades del director gene-ral de enseñanza pública, resoluciones para establecer una escuelaprimaria graduada en cada capital de departamento, una escuela militaren la capital de la República, un colegio de ciencias y artes en Chuqui-saca, y el compromiso de destinar a la educación todos los ahorros quepuedan hacerse en el arreglo de otros ramos de la administraciónpública.

El mismo día insiste en su antigua preocupación de la adopción dehuérfanos de guerra por el Estado. La educación militar -en susdiferentes niveles- mereció su atención, también reglamentó laenseñanza religiosa.

Bolívar fue un adelantado en sus concepciones educativas [35, 67).No compartía la idea triste y represiva de entonces sobre la enseñanza,cuando al colegio se lo miraba como un correccional, severo al extremoy de disciplina exageradamente rigurosa. El insistía en el carácter socialde la educación, que no puede ser la misma para todas las colectividadesni para todas las épocas. Tampoco puede ser idéntica para todos losniños, “debe ser siempre adecuada a su edad, inclinaciones, genio ytemperamento” [79]. Los institutos docentes no deben ser -a sujuicio- nada más que para aprender a leer y escribir; son muchos loscometidos que él asigna a la escuela. Junto a la formación intelectual,moral y cívica, él señala: “La primera máxima que ha de inculcarse a losniños es la del aseo. Si se examina bien la trascendencia que tiene en lasociedad la observancia de este principio, se convencerá de su importan-cia” [79]. También quiere el Libertador que los niños practiquen, desdela infancia, el ejercicio democrático. Sobre la enseñanza de idiomas,sobre el esparcimiento y el asueto, el modo de enseñar a leer, lametodología para el estudio de la historia, el aprendizaje de la geografiay la cosmografia, las matemáticas y el derecho romano, el cultivo de lamemoria y de la comprensión, etc., hay en sus textos observaciones deincuestionable significación.

Consciente de la integración cultural de la humanidad, Bolívaresperaba de la comunicación con los sabios y estudiosos del mundograndes resultados para América. Bien sabía que el desarrollo de

Page 37: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

nuestro acervo espiritual no podía confiarse al mero crecimiento vegeta-tivo. Jamás incurrió en el error de imaginar siquiera un estatus pedantede aislamiento ni de autosuficiencia.

El ámbito de Bolívar es el de la universalidad, donde todos lospueblos aportan lo mejor de sí al patrimonio espiritual común. Elasunto de las traducciones y la confianza en el valor difusor del libroocupan parte de su atención. La Cámara de Educación --en su proyectodel Poder Moral [25]- cuidaría de publicar en nuestro idioma librosextranjeros sobre educación, ello con las observaciones y ajustes perti-nentes; estimularía también a escritores y editores a producir y difundir“obras originales sobre lo mismo, conforme a nuestros usos, costum-bres y gobierno”. La propia Cámara compondrá y divulgará algúnvolumen que sirva a la vez de estímulo para que se ocupen otros de estetrabajo tan útil y para ilustración de todos.

En la primera prioridad bolivariana está la metodología pedagó-gica, la didáctica y lo que a ambas concierne. El insiste en que laCámara “no perdonará medio ni ahorrará gasto ni sacrificio que puedaproporcionarle estos conocimientos. Al efecto de adquirirlos comisio-nará hombres celosos, instruidos y despreocupados que viajen, inquie-ran por todo el mundo y atesoren toda especie de conocimientos sobrela materia” [25].

Respecto a las traducciones, en la reforma a la Universidad deCaracas [88] introduce Bolívar una halagadora compensación en añospara el escalafón: el catedrático que traduzca obras extranjeras gana dosaños, y ocho el autor de un libro de texto original. “Un mismocatedrático podrá obtener estos dos premios una sola vez. ”

Los científicos son -para el Libertador- los verdaderos descubri-dores de la realidad física nacional, el gobierno debe incentivarlos [41,53). En la ciencia mira una de las cuatro potencias del alma del mundocorporal, junto con el valor, la riqueza y las virtudes. A los europeoslos convida para que vengan a América trayendo sus ciencias para laconstrucción del nuevo mundo [23].

La gestión administrativa bolivariana coloca a la ciencia en sitio deurgencia primordial. Establecimientos universitarios, facultades y cáte-dras, colegios e institutos de ciencias reclaman su celo [67, 71, 89, 91).Y el sembrador de luces que él era, prodigaba a todo su cuidadoesmerado. Él araba con igual entusiasmo todos los campos. En unadeclaración de humanitarismo y de cultura, escribió desde Lima alrector de la Universidad de Caracas, que “después de aliviar a los queaún sufren por la guerra, nada puede interesarme más que la propaga-ción de las ciencias”.

Su emoción de intelectual sensible ante las jerarquías del estudio,crece al declarar al claustro de doctores de San Marcos en Lima-prestigiosa universidad americana, de las más antiguas junto a las de

Page 38: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Santo Domingo y México-: “Yo marcaré para siempre este día tanhonroso de mi vida. Yo no olvidaré jamás que pertenezco a la sabiaAcademia de San Marcos. Yo procuraré acercarme a sus dignos miem-bros, y cuantos momentos me pertenezcan después de llenar losdeberes a que estoy contraído por ahora, los emplearé en hacer esfuer-zos por llegar si no a la cumbre de las ciencias en que vosotros oshalláis, al menos en imitaros” [SS].

Sobre el saber científico, el convencimiento de Simón Bolívar,manifestado incluso en medio de las muy difíciles circunstancias de1815, es aleccionador, elocuente y terminante: “Las ciencias han inmor-talizado siempre a los países donde han florecido.”

EL QUEHACER DE LA DIPLOMACIA

Tampoco en los afanes diplomáticos hubo nada que resultara extraño aBolívar. Más todavía, estuvo a punto de suceder que la diplomaciafuera el alfa y omega de su servicio público: en 1810 se inició, enefecto, con su misión a Londres. Era un encargo difícil por lo ambiguode las posiciones; buscaba el apoyo para una independencia que nodebía descubrirse precipitadamente como tal, sino disimularse como unmovimiento “conservador” del estatus contra el cual se insurgía concauta firmeza. Para 1830, en el ocaso de su vida y de veinte años decarrera, la diplomacia vuelve a su encuentro por medio del gesto delgeneral Andrés Santa Cruz, presidente de Bolivia, quien lo nombraembajador de esa república ante la Santa Sede. La muerte llegó alLibertador antes que la noticia de este homenaje, con el que sutrayectoria existencial se cierra casi en el mismo menester de su aurora.

Temprano consigue la diplomacia venezolana, bajo su inspiración,un memorable .hito: son los tratados de Trujillo (de 1820) que, comootros desempeños de máxima relevancia, tienen a Antonio José deSucre de realizador insuperable, intérprete fiel de los designios y delideal bolivarianos. El Tratado de Regularización de la contienda cancelael ciclo de la guerra a muerte. Es de los primeros convenios en elmundo que intentan humanizar, hasta donde se puede, a la violenciaaniquiladora. Bolívar lo califica de “el más bello monumento de lapiedad aplicada a la guerra”. En la ocasión, se aproxima el Libertador asu encarnizado oponente -el jefe de las fuerzas españolas- generalPablo Morillo, y en los hechos obtiene para Colombia el primerreconocimiento de la ex-metrópoli. El 27 de noviembre de 1820, conMorillo, brinda Bolívar: “A la heroica firmeza de los combatientes deuno y otro ejército: a su constancia, sufrimiento y valor sin ejemplo. Alos hombres dignos, que al través de males horrorosos, sostienen ydefienden su libertad. A los que han muerto gloriosamente en defensa

43

Page 39: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

de su patria o de su gobierno. A los heridos de ambos ejércitos, que hanmanifestado su intrepidez, su dignidad y su carácter. Odio eterno a losque deseen sangre y la derramen injustamente.”

Desde Angostura, él había adelantado su palabra de verdaderoafecto hacia la nación rioplatense, testimonio que pronto ratificaría:“Puedo asegurar al Gobierno argentino mi cordial adhesión hacia esaRepública hermana que debe ser por siempre una de las partes másinteresantes del todo americano” [74].

En 1824 extiende la convocatoria al Congreso anfictiónico dePanamá. 1825, 1826 y 1827, son años de particular actividad en el áreade las relaciones internacionales.

Bolívar captaba las sutilezas del oficio. Su recomendación algeneral Heres encierra una lección: “En los asuntos diplomáticos daré austed una buena máxima: calma, calma, calma; retardo, retardo,retardo; cumplimientos; palabras vagas; consultas; exámenes; retor-siones de argumentos y de demandas; referencias al nuevo congreso;divagaciones sobre la naturaleza de la cuestión y de los documentos. . .y siempre mucha cachaza, y mucho laconismo para no dar prenda alcontrario. Excúsese usted con que es militar; que no conoce la natura-leza de los negocios de que lo han encargado (verbalmente); que ustedes interino y que los negocios del Perú son muy delicados, Sobre todo,téngase usted siempre firme en los buenos principios y en la justiciauniversal. . . Tengamos una conducta recta y dejemos al tiempo hacerprodigios.” Otra muestra de la misma perspicacia brilla en las instruc-ciones para Sucre y su no fácil misión al Ecuador: “El general Sucreañadirá a todas estas razones, todas las que su prudencia y talentos y lascircunstancias particulares del país a donde va y la opinión general de élle dicten, reforzándolas y sosteniéndolas con todo el interés que sepromete la República de su celo; pero con moderación, prudencia ycircunspección para que no produzca alarma o disgustos, que ennegocios de esta naturaleza es muy fácil sembrar por una sola expresióno gesto.”

Por virtud de Bolívar se convirtió Colombia en hogar para lademocracia. El sostén de la esperanza para los liberales del mundo.Desde Colombia fue Bolívar articulando con paciencia y conciencia unared de vinculaciones diplomáticas con vistas al gran día de la América.

Contando con la cooperación de ilustres mentalidades de sutiempo, reclutadas sin prejuicios donde fuera menester: Caracas,Popayán, México, Tucumán. . . , él estructuró ese aparato diplomáticoque oportunamente funcionaría para la integración. Con el Libertadory su canciller don Pedro Gual, y el eficiente José Rafael Revenga, sedesenvuelven las misiones de Joaquín Mosquera, Miguel Santa María yBernardo Monteagudo. En los tratados bilaterales que suscribe Colom-bia con Perú, Chile y México se estipula que: “Ambas partes se obligan

44

Page 40: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

a interponer sus buenos oficios con los Gobiernos de los demás Estadosde la América antes española, para entrar en este pacto de unión, liga yconfederación perpetua. ”

AMPL ITUD SUSTANTIVA

El Libertador tiene potencia y calidad de imán para atraer, de lavastedad latinoamericana, a figuras representativas de sectores yconexiones que en su torno componen la plenitud del ser continental.De Venezuela son Sucre, Páez, Urdaneta, Mariño, Arismendi, Bermú-dez, Anzoátegui. . . De Nueva Granada, los Nariño, Santander, Mos-queras, Arboledas, Restrepos.. . De México, el congresista. y pleni-potenciaro Santamaría. De Panamá es José Domingo Espinar. DelEcuador, el poeta y diplomático Olmedo. Del Perú, Unánue, SánchezCarrión, Vidaurre. . . De Bolivia, Santa Cruz. De Chile, el ínclitoO’Higgins, y de Argentina, los inmortales San Martín, Pueyrredón,Monteagudo, Alvear. . . De Cuba, el comandante Rafael de las Heras.Petion, de Haití. Brion, de Curazao. José Félix Bogado, del Paraguay.El culto José Ignacio de Abreu y Lima viene del Brasil.. No son pocoslos que del Canadá, Norteamérica, Europa (Escocia, España, Francia,Inglaterra, Irlanda, Italia, Polonia, Prusia. . .) son cautivos de su fama.Su voluntad era de una muchedumbre. Presencias innumerables concur-ren a la verdad de su nombre.

El diseño programático suyo para el Congreso de Panamá es elprimero en los anales del mundo, y hasta ahora el único, en contemplaruna dinámica y efectiva unión solidaria de naciones iguales, autónomasy democráticas, invitadas a deliberar sin presión hegemónica alguna, ya resolver libremente sobre las mutuas conveniencias generales. “Lafuerza de todos concurriría al auxilio del que sufriese por parte delenemigo externo o de las facciones anárquicas [. . .] Ninguno seríadébil con respecto a otro; ninguno sería más fuerte” [86].

Quería Bolívar que en Panamá se debatieran los grandes asuntosdel nuevo mundo, que se formularan las leyes supranacionales y seorientaran todos los esfuerzos en pos de metas acordadas con laparticipación de todos. Para el futuro, allí Latinoamérica advertiría suunidad esencial; allí debía cumplirse su voto de 1822: “El gran día de laAmérica no ha llegado. Hemos expulsado a nuestros opresores, roto lastablas de sus leyes tiránicas y fundado instituciones legítimas: mastodavía nos falta poner el fundamento del pacto social, que debe formarde este mundo una nación de Repúblicas. ”

Bolívar llega hasta concebir que América, tierra del hombrebueno, suelo de la libertad y del amor, pueda comunicar su aliento dejusticia revolucionaria al Africa y al Asia, para destruir el yugo esclavi-

45

Page 41: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

zante que a la sazón impone Europa al mundo: “Yo llamo a esto elequilibrio del universo, y debe entrar en los cálculos de la políticaamericana” [8]. El Libertador tiende a una liga ecuménica más positivay real que las efímeras y débiles asociaciones de Estado que hastaentonces han existido. Prevé hasta la federación mundial donde losprincipios que dan vida a nuestra América tengan total vigencia. “En lamarcha de los siglos, podría encontrarse, quizá, una sola nacióncubriendo el universo: la federal” [86].

De su humana amplitud dan prueba sus ideas de fomento a lainmigración, donde él no indica ninguna preferencia racial. Jamás sedeclararon abiertas las puertas de un país, tan absolutamente sinlimitaciones, como lo hizo él llamando a radicarse aquí “a los extranje-ros de cualquiera nación y profesión que sean”. Al inmigrante sóloexige probidad. Bolívar tenía conciencia de los beneficiosos efectos delmestizaje. El ser americano se levanta sobre aportaciones disímiles:todos los grupos humanos están presentes en su alumbramiento.Vamos hacia la “nueva casta de todas las castas, que producirá lahomogeneidad del pueblo”. En Angostura es entusiasta su consigna:“La sangre de nuestros ciudadanos es diferente, mezclémosla paraunirla” [24].

En este mismo orden de su amplitud universa1ista se inscriben losconceptos geopolíticos de Bolívar. Otra vez América al servicio de lahumanidad. Piensa en los estados del istmo centroamericano, cuya“magnífica posición entre los dos grandes mares podrá ser con eltiempo el emporio del universo, sus canales acortarán las distancias delmundo, estrecharán los lazos comerciales de Europa, América y Asia;traerán a tan feliz región los tributos de las cuatro partes del globo.Acaso sólo allí podrá fijarse algún día la capital de la tierra comopretendió Constantino que fuese Bizancio la del antiguo hemisferio”[13]. La alusión a los canales interoceánicos vuelve a su pluma, enreferencia a su Colombia donde el istmo de Panamá esta ubicado. A esagran república de su creación, la ve “en el corazón del universo,extendiéndose sobre sus dilatadas costas, entre esos océanos, que lanaturaleza había separado, y que nuestra Patria reúne con prolongadosy anchurosos canales” [24].

EL PERIÓ DICO, COMUNICADOR SOCIAL

Durante su breve pero fecunda estadía en Inglaterra, pudo Bolívarapreciar cuánto vale la prensa como vehículo de ideas. Las conexionesde Miranda con revistas y periódicos de Londres preparó un clima deopinión favorable a la misión que -con López Méndez y Bello- lecorrespondía desempeñar. El 5 de septiembre de 1810 publicó Bolívar

46

Page 42: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

su primer artículo de prensa. Hasta su muerte, y desde aquel veranobritánico, él se mantuvo seguro en reconocer el poderoso mediocomunicador que es la imprenta, a la cual considera “tan útil como lospertrechos” [19].

Asombra que a un hombre no profesional de las letras ni dedicadoa las exclusivas tareas intelectuales, su capacidad política lo hayaconducido a ser activo trabajador del periodismo, consciente de latrascendencia de la comunicación social y, sobre todo, lúcido en laposibilidad de abordar por ese medio la conquista de la opinión pública,fuerza que “vale aún más que los ejércitos”.

Con criterio justo se estima ahora a Bolívar como periodista,como uno de los mejores de su América. Su carácter diáfano yconcreto, certero y preciso, trasciende a sus producciones. Librócampañas de prensa y fue polemista desenvuelto. De un adversariosuyo, el obcecado José Domingo Díaz, queda el reconocimiento de quepara Bolívar la imprenta fue “la primera arma”.

No obstante la pasión vehemente que debía mostrar en ese com-bate sistemático y continuo que es la lucha política -así en la paz comoen la guerra-, Bolívar da lecciones de ecuanimidad [10]. La verdad,sostiene él, debe ser materia prima del periodismo. Ni siquiera en elcaso de injustas diatribas en su contra, a las cuales era particularmentesensible, se olvida de la justicia y la ponderación. Un día, en agosto de1825, se indigna por un ataque de prensa y manda a replicarlo.Advierte, sin embargo: “No se detenga Ud. en pelillos, dígales cosasmuy fuertes y siempre la verdad, que es la que amarga, y no falsasimposturas que son las armas con que me quieren herir. Si en algunacosa que digo no se encuentra la pura y limpia verdad no la diga Ud.,pues yo no quiero que se digan falsedades.” En otra oportunidad,estampó su aforismo incontestable: “Las cosas falsas son muy débiles.”

Petion, el glorioso patrocinador de las expediciones bolivarianascapitales, extremó su bondad para la América que nacía a la libertad,con el obsequio que hizo a Bolívar de una imprenta. Ésta se perdió enel desastre de Ocumare. Después, el Libertador colmó su sueño enAngostura fundando el Correo del Orinoco (1818-1821). A su amigo donFernando Peñalver le había dicho: “Por ahora sólo necesitamos de losobjetos que he pedido a Ud. antes, porque sin ellos estamos perdiendoel tiempo que es lo más precioso en estas circunstancias [. . .] Sobretodo, mándeme Ud, de un modo u otro la imprenta, que es tan útilcomo los pertrechos” [19].

Muchas observaciones hizo a la Gaceta de Bogotá. Por una parte, lepreocupaban cuestiones de forma: “Nuestra Gaceta no se puede presen-tar en ninguna parte por su tipografía”; recomendaba que se aprove-chara al máximo el papel escaso, utilizando los tipos “más pequeñosque haya”. Con espontaneidad de veterano periodista prestaba atención

47

Page 43: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

equilibrada a los contenidos y a su respectiva presentación: “Estas notaspueden mejorarse con más sal y con algunos cauterios; pero quesiempre vayan intercaladas en el texto porque así hacen mejor efecto[. _ .] A todas las cosas se le deben dar las formas que corresponden a supropia estructura, y estas formas deben ser las más agradables para quecapten la admiración y el encanto. Mucho importa que ese diario quetiene tan buenos redactores trate las materias de un modo regular yperiodístico. ”

Análogas observaciones hace, a principios de mayo de 1824, a sucompetente secretario José Gabriel Pérez. Las recomendaciones perio-dísticas al general Heres, en agosto de 1825, son de las más minuciosasque él produjo. Prácticamente Bolívar hace hasta de diagramador, tareaespecializada en el diarismo de hoy: indica el orden en que deben irdistribuidas las columnas: “Todo el papel debe estar dividido en susdiferentes departamentos, digámoslo así. Se trata de hacienda, hacienda,se trata de rentas, hacienda. Se trata de Fernando VII, tiranía ofanatismo, según sea el negocio. Se trata de un hecho raro o desconocidose pone: anécdota estupenda, curiosa o escandalosa, según sea.” Sus conclu-siones tienen el valor de una pauta concreta: “Los artículos deben sercortos, picantes, agradables y fuertes. Cuando se hable del gobierno,con respeto, y cuando se trate de legislación, con sabiduría y gravedad.Yo quiero que se proteja un periódico, pero no aparezca Ud. comoprincipal, más bien que sea el gobierno o Larrea, o un amigo; pero quese organice con elegancia, gusto y propiedad.” Sobre el tono adecuado,insiste: “Para la sátira más cruel se necesita nobleza y propiedad comopara el elogio más subido. ”

Congruente con el periodista que Bolívar llevaba en su conciencia,fue él como hombre de Estado y gobernante. Total y sagrado fue surespeto a la libertad de expresión. En el proyecto de Constitución de1819, él propone que “el derecho de expresar sus pensamientos yopiniones de palabra, por escrito, o de cualquier otro modo, es elprimero y más inestimable don de la naturaleza. Ni aun la ley mismapodrá jamás prohibirlo, y sólo podrá señalarle justos términos haciendoresponsable de sus escritos y palabras, y aplicando penas proporciona-das a los que lo ejercieren licenciosamente en perjuicio de la tranquili-dad pública, de la vida, honor, estimación y propiedad de cualquierciudadano”. En el proyecto constitucional para Bolivia, estatuía:“Todos pueden comunicar sus pensamientos de palabra, o por escrito ypublicarlos por medio de la imprenta sin censura previa, pero bajo laresponsabilidad que la ley determine.”

48

Page 44: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

EXPECTATIVAS Y CONFLICTO

En el sur aguardan a Bolívar muy arduos deberes. En febrero de 1824 elCongreso peruano le otorga los plenos poderes que configuran allí sumando “dictatorial”, y el cual ejercerá durante un año, dentro decuidadosos límites constitucionales. De ese gobierno, él rendirá estrictacuenta en febrero del año siguiente por órgano de su ministro, elperuano José Faustino Sánchez Carrión. Este ideólogo y conductorpolítico ha de ser no sólo colaborador eficaz sino propulsor, al lado deBolívar, de los grandes acontecimientos registrados en el pasar de esosmeses, desde Trujillo hasta Huamanga y desde Huamanga hasta Lima.La formación del Ejército Libertador en el norte, la instalación de laCorte Superior y de la Universidad de La Libertad en Trujillo, lacampaña libertadora que se hace éxito americano en Ayacucho, laorganización de la administración civil en el país y la convocatoria alCongreso Anfictiónico de Panamá desde la Casa de la Magdalena unenen la historia inicial de la República del Perú a Bolívar y a SánchezCarrión.

Los más gratos de los azarientos años de la carrera bolivarianapasan en el Ecuador, Perú y Bolivia. Fin de la guerra contra elabsolutismo; tiempo de paz sin el ingrediente del sobresalto ni de lacatástrofe, aunque -por otra parte- la estabilidad anhelada siga siendoun sueño. Los pueblos, especialmente las humilladas masas indígenas sevan a los caminos a aclamar a su redentor. Bolívar, vengador de losmarginados, recibe las oleadas de afecto y emoción pura de las multi-tudes como las de París en torno a Napoleón.

Por ley de compensación, allá en el altiplano, él cosecha en justassatisfacciones los sacrificios de Venezuela, Nueva Granada y el Caribe.

El Ecuador se enorgullecerá siempre de su firmeza en la lealtad alPadre de la Patria. En el tiempo de amarga ingratitud por venir, estepaís se gloriará de ofrecer al autor de su libertad el hogar tranquilo queotros perversos le niegan. Bolivia se identificará en análogos sentimien-tos filiales.

El Perú fue suelo propicio para el florecimiento de su espíritu, convigor y lozanía. Allá redacta sus mejores cartas: la de Pativilca almaestro amado Don Simón Rodríguez [56], las del Cuzco a su tío ypadrino don Esteban Palacios [72], y sus ejercicios de crítica literariapara el poeta Olmedo [68].

Al Perú confluye América. Bajo las órdenes de Antonio José deSucre, quien comanda a las tropas y pueblos de Bolívar, hay oficiales deArgentina, Bolivia, Colombia, Cuba, Chile, Ecuador, Panamá, Para-guay, Perú, Puerto Rico, Uruguay, Venezuela, además, de Alemania,

49

Page 45: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

España, Gran Bretaña, Irlanda, Países Bajos. Son los factores deAyacucho; el día: 9 de diciembre de 1824. Cuarenta y ocho horas antesde la acción militar, el Libertador firma la circular a los gobiernos quedebían echar en Panamá los fundamentos de la unidad latinoamericana.Terminaba la muerte, debía empezar la vida. Bolívar en la cima de losAndes luce como árbitro de América, en el apogeo de su prestigio.

Cupo a Sucre el honor de arriar en el Cuzco el pendón de Pizarroque allí estuvo tres siglos. Bolívar recibe el trofeo y lo destina a suCaracas natal.

Bastante expresivo de la circunstancia torcida y agónica que aBolívar le tocó siempre vivir es el hecho de que cuando justamente élestá consagrado al esfuerzo de la unidad continental, en el seno de lagran Colombia se desatan furiosos los agentes de la disolución. “Lo quehago con las manos, lo desbaratan los pies de los demás”, así describiósu trabajo que se parecía al de Sísifo, el condenado que llevaba un pesoenorme a la cima y, cuando estaba a punto de llegar, rodaba al abismopara recomenzar. Con la celeridad que permitían los medios de laépoca, Bolívar deja Lima en septiembre de 1826 hacia Colombia: “unlaberinto horrible”, “un edificio semejante al del Diablo que arde portodas partes”.

Su presencia logra conjurar temporalmente la división de la repú-blica. Los generales José Antonio Páez y Francisco de Paula Santanderson los cabecillas de este choque amenazante contra la estabilidadcolombiana. Bolívar se impone transitoriamente. Su salud flaquea. Decuarenta y seis años, por el desgaste físico y moral de la lucha que halibrado, en el espacio gigante de cinco millones de kilómetros cuadra-dos, durante dos decenios, Bolívar parece un anciano.

En Venezuela -por última vez- en 1827, da a la patria con cuyoselementos se formó su ser lo que resta de su aliento. Viene en el desvelounitario y fraternizador. Le aporta su madurez y su experiencia adminis-trativa. Ahora, más convencido de que “moral y luces son nuestrasprimeras necesidades”, se consagra sobre todo a la educación. Adoptamedidas eficaces en pro de la manumisión de los esclavos. Pone ordenen el ramo fiscal: reglamentación de rentas y aduanas. Las ocasionessobran para lecciones reiteradas de pulcritud y honradez.

Triste desilusión la de este viaje. Parece que mediara un siglo entreel optimismo de Angostura, en 1819, y el menguado presente de estarecolección desnuda de los testimonios de la quiebra, a los cuales ha dereunir pronto en el doloroso mensaje a la Convención de Ocaña [90].Luego sería el adiós, para regresar huesos y cenizas en una urna deplomo en 1842.

50

Page 46: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

POR LA UNIVERSIDAD

En la historia de Bolívar y de la cultura latinoamericana, la última visitadel gran caraqueño a su país natal se recordará por la huella sustantivaque deja en la universidad. Caracas, como Trujillo, Bogotá, Quito,Arequipa, Cali, Medellín, San Cristóbal de Ayacucho..., recibe en suuniversidad el impacto civilizador del estadista que tiene plena concien-cia de que “las Naciones marchan hacia el término de su grandeza conel mismo paso con que camina la educación. Ellas vuelan, si éstavuela” [79].

El 24 de junio de 1827, a seis años justos de la batalla de Caraboboque sella la libertad de Venezuela, dicta el Libertador -con lacolaboración de José María Vargas y José Rafael Revenga- los nuevosestatutos constitucionales para la Universidad Central de Caracas [88].En extensión es el segundo decreto de los bolivarianos: cerca detrescientos artículos. Se derogaron aquí normas arcaicas, se remozó ymodernizó debidamente la magna institución, se sentaron las bases deun nuevo trato que, sin exageración ni error, podría estimarse puntoinicial de una reforma universitaria importante para la época, y buenaparte de cuyos principios mantiene lozana vigencia.

Dentro de un concepto de auténtica difusión cultural, se propiciauna política de puertas abiertas en la universidad. Al estudiantado se lereconoce participación en el comando del instituto. A favor de losalumnos se consigna la exención del servicio militar y de cualquieratarea que los divorcie de la específica atención a su formación superior.Mediante un sistema de equivalencias y reválidas se tiende a la coordina-ción de nuestras universidades. Para la provisión de cátedras se estipu-lan libres concursos de oposición, y se recuerda expresamente a losjurados “obrar en justicia sin afición ni pasión”.

A los profesores los quiere Bolívar como maestros integrales, lesprescribe que no deben ser solamente transmisores de conocimientos,sino también “el modelo de los jóvenes confiados a su enseñanza: ladecencia, el decoro, la urbanidad, la cultura en el idioma, todo deberelucir en los maestros, a fin de que con estas lecciones prácticas formenbuenos discípulos” [88].

Colocaba Bolívar en la cúspide de su afecto a los educadores.Aseguraba que “el objeto más noble que puede ocupar al hombre esilustrar a sus semejantes”. El practicó personalmente con sus maestrosla relación del “amor y respeto”; tal es la clave que elabora cuandoevoca, a la distancia de muchos lustros, su conexión con Andrés Bello:“Yo conozco la superioridad de este caraqueño contemporáneo mío:

51

Page 47: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

fue mi maestro cuando teníamos la misma edad; y yo le amaba conrespeto. ”

Él visualizaba y ejemplificaba en sí mismo la función del maestrocomo de un jardinero cariñoso y paciente. A don Simón Rodríguez secomplace en decirle -desde el vértice del poder y de la gloria-:“Usted no habrá dejado de decirse: todo esto es mío, yo sembré estaplanta, yo la regué, yo la enderecé tierna, ahora robusta, fuerte yfructífera, he aquí sus frutos; ellos son míos, yo voy a saborearlos en eljardín que planté; voy a gozar de la sombra de sus brazos amigos,porque mi derecho es imprescriptible, privativo a todo” [56].

En sus nuevas normas para la Universidad de Caracas tambiénatiende Bolívar a la seguridad social de los docentes. Se funda unsistema de jubilaciones “con renta entera” a los veinte años de servicios.Demócrata celoso en la alternabilidad republicana, fija un período detres años para el ejercicio rectoral.

Nunca tuvo la idea de que la universidad fuera un plantel mayús-culo, ni una federación de escuelas profesionales. Por el contrario, lamiraba como un ente orgánico y superior, al cual asignaba tareas dealto rango que iban más allá de la simple instrucción. Dentro del planuniversitario, él incluía la creación de cuatro academias: literatura,ciencias naturales, ciencias políticas y morales, y ciencias eclesiásticas.Todas debían orientarse al estudio de la realidad ambiente con miras asoluciones concretas y de beneficio social. A la Facultad de Medicina sele encomiendan tareas de salubridad nacional. También se le encarga“formar y publicar los métodos curativos que mejor convengan,cuando haya enfermedades epidémicas o contagiosas. Publicar igualesmétódos para precaver a los pueblos las enfermedades más comunes opropias de estos países”. La creación de uno o varios museos también seatribuye a la Facultad de Medicina; promoverá igualmente la edición detextos didácticos; atenderá a la protección y mejor aprovechamientode la riqueza forestal de la república.

El interés de Bolívar por la institución universitaria se evidencia enla serie de trece decretos que promulga en el quinquenio entre 1824 y1829. El último de ellos, dictado en Popayán el 5 de diciembre de 1829,asigna a las universidades un papel notable en la gerencia y administra-ción del ramo educativo, vale decir, las funciones que correspondían alas subdirecciones de estudios en los sitios donde hubiera universidad.

El celo de Bolívar por la educación a máximos niveles de excelen-cia no implica, en ningún caso, por su parte, un prejuicio de élite.Criticó y combatió con el ejemplo la falsa idea aristocratizante del ocioy del rechazo al trabajo manual por impropio de señores. Sobre eldestino profesional de su sobrino Fernando, vale decir, del hijo que élno tuvo, fue enfático en declarar que si el joven se decidiera “a aprenderalgún arte u oficio yo lo celebraría, pues abundan entre nosotros

52

Page 48: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

médicos y abogados, pero nos faltan buenos mecánicos y agricultoresque son los que el país necesita para adelantar en prosperidad ybienestar” [42].

Al término real de su existencia corpórea, a una semana del quesería día de su muerte, tiene Simón Bolívar un recuerdo enaltecedorpara la Universidad de Caracas -esa misma a la que dotó de bienespropios y rentas suficientes para su autonomía-, y es que en sutestamento expresa: “Es mi voluntad, que las dos obras que me regalómi amigo el señor general Wilson, y que pertenecieron antes a labiblioteca de Napoleón, tituladas El contrato social de Rousseau y Elarte milítar de Montecuccoli, se entreguen a la Universidad de Caracas”[61]. De esos dos libros, “de un valor inestimable”, que resumen ysimbolizan las mitades complementarias de su personalidad: guerrero yestadista, pensador y soldado, Bolívar había dicho: “Me serán muyagradables por todo respecto. Sus autores son venerables por el bien ypor el mal que han hecho; el primer poseedor es el honor y ladesesperación del espíritu humano, y el segundo, que me ha honradocon ellos, vale para mí más que todos porque ha trazado con su espadalos preceptos de Montecuccoli y en su corazón se encuentra grabado elcontrato social, no con caracteres teóricos, sino con hechos que secomparten entre el heroísmo y la beneficencia” [61].

EL FINAL COLOMBIANO

De Venezuela salió Bolívar en julio de 1827 para el tramo último de sudestino, que sería también el derrumbe de su creación política. Sus añosde permanencia necesaria en el sur fueron el mayor sacrificio de su vida;él estaba consciente de la disyuntiva sin escapatoria: si se quedaba enColombia y abandonaba al Perú, se perdería todo: allí los enemigos seharían fuertes para el ataque revanchista contra Colombia. Si iba alPerú perdería, como efectivamente perdió, el poder en Colombia;apenas le quedaría la esperanza de que sus compatriotas no volvieranatrás en un camino que tanto había costado. Él aceptó el desafío. En sucruzada, avanzó hasta el Potosí; recibió el homenaje de ser consideradoprotector de la libertad americana, invitado por los argentinos, respe-tado por los pueblos como la garantía viviente de la revolución.

Esos años los aprovechan los caudillos, encarnados típicamente enPáez y Santander, y muchos otros coincidentes en la misma concepciónde “patriecita” y de horizontes mezquinos, para torcer los idealesrevolucionarios hacia la mera satisfacción de sus parciales intereses.

Bolívar quiere entonces que se haga un examen, para una rectifica-ción a fondo, de las bases de la república. Se atribuye ese trabajo a laConvención de Ocaña.

53

Page 49: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

El acuerdo esperado no se logra. La situación evoluciona rápida-mente hacia un acto de fuerza que es la “dictadura” de 1828-1830.Sobre esa dolorosa y trágica etapa de la carrera política del Libertadorha circulado una leyenda que procura homologar ese gobierno deemergencia de Simón Bolívar con las dictaduras y despotismos antipo-pulares padecidos sobradamente en América Latina.

La “dictadura” de Bolívar es de la clase y razones de las dictadurasen la república romana. Es un régimen de derecho; espontáneamente sedeclara provisional, se fija término y se obliga a reunir la representaciónnacional en fecha precisa: el 2 de enero de 1830. Además, no toma elLibertador la totalidad del poder; el Consejo de Estado impone muchasveces su criterio de cuerpo colegiado, incluso respecto a asuntosdelicados que en el orden personal atañían a Bolívar.

En lo sustancial, durante esa breve y convulsa coyuntura, elrevolucionarismo bolivariano no sufre mengua. Bolívar no se desdice,ni tranza ni negocia, ni echa atrás ninguna de sus líneas cardinales.Antes bien, queda incólume y ratificada expresamente -sobre todo-su muy clara posición antiesclavista. Su decisión franca en pro de losindígenas se hace más nítida, lo mismo su actitud colombianista ycontinental; igual su insistencia en la ética, metas todas a las cualesreafirma con sus decretos y actos de este tiempo crucial. Si se examinacon prolijidad y se juzga imparcialmente, la dictadura -nunca“tiranía”- antes que un desliz reaccionario es el postrer intento deBolívar por impulsar la revolución, sacarla del atolladero y hacerlatangible.

A principios de 1830, como estaba pautado legalmente, instalase elCongreso -llamado Admirable por la calidad sobresaliente de susmiembros. Bolívar entrega el mando y, prácticamente, cierra su vidapública. Sus planteamientos son patéticos [97]. Emprende su camino alexilio definitivo, no alcanzará la meta de viajar a Jamaica para situarseen Europa como San Martín. Las complicadas circunstancias del trans-porte lo detienen en la costa colombiana del Caribe. Allí sabe del vilasesinato de su más fiel compañero, el íntegro mariscal Antonio José deSucre [99]. Allí se entera de que Colombia ya no existe, pues se divideen las tres porciones tradicionales de Venezuela, Nueva Granada yEcuador. Su país nativo lo execra y lo destierra oficialmente.

La amargura es indecible. El 17 de diciembre de 1830, a la una de latarde, pasa a la eternidad. Al final, se crece en el perdón. Sus votosúltimos han sido por la felicidad de la patria [100].

Page 50: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

CONCIENCIA ÉTICA

No se equivocan los pueblos cuando miran a aquel venezolano, cara-queño, latinoamericano, que fue Simón Bolívar, como una referenciamoral válida y permanente. Él es el centro histórico, espiritual y ético,de esa nación que pudo ser la más grande del mundo: América Latina-la del río Misisipí hasta el estrecho de Magallanes-, la triple:Hispano-América, Luso-América o Brasil, y el mosaico Caribe que noobstante hablar inglés, francés, neerlandés, danés, papiamento, patois ocréole es suma viva de una misma y sustancial realidad.

La historia de Bolívar es una enseñanza múltiple. Es particular-mente severo e intachable en su conducta de hombre público. Ciertavez, a la proposición de Santander para apoyar ambos a la compañíaque intentaba abrir el canal de Panamá, responde: “Después de habermeditado mucho cuanto usted me dice, me ha parecido conveniente nosólo no tomar parte en el asunto, sino que me adelanto a aconsejarleque no intervenga usted en él [. . .] por mi parte, estoy bien resuelto ano mezclarme en este negocio ni en ninguno otro que tenga un caráctercomercial. ” En la administración de los dineros nacionales su pulcritudes extremada. El llama “agradable necesidad” al “deber sagrado para unrepublicano, de dar cuenta de su administración a los representantes delpueblo”.

Bolívar quiso que la Constitución puntualizara expresamente entrelos deberes ciudadanos, el de “vigilar sobre la legítima inversión de lasrentas públicas, en beneficio de la sociedad, y acusar ante los represen-tantes del pueblo a los defraudadores de ellas, bien sea el fraude de partede los contribuyentes, bien de parte de los administradores o delgobierno que las dirige”. Así mismo es terco en sostener que “no debeel ciudadano conformarse con no quebrantar las leyes. Es necesario quevele además sobre su observancia, y ponga todos los medios a sualcance para hacerlas cumplir, empleando el ejemplo, la persuasión y larepresentación a las autoridades, si todos los otros medios fuerenineficaces”.

El fue un gallardo abanderado en la lucha contra la corrupciónadministrativa [51, 87) A esta lacra vergonzosa la combatió siemprecon drástica intransigencia. Como en un film que no decae, se sucedensus acciones a favor de la moral en la administración pública. En 1813,imponiendo la ética del nuevo orden y defendiendo al único ramo queentonces podía proporcionar algunos recursos a la patria naciente,decreta: “Todo aquel que fuera convencido de haber defraudado loscaudales de la Renta Nacional de Tabaco, o vendiéndole clandestina-mente fuera del estanco, o dilapidándolos con robos y manejos ilícitos,

Page 51: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

será pasado por las armas, y embargados sus bienes para deducir losgastos y perjuicios que origine” [6]. Y agrega con rigor: “Sufrirán lasmismas penas todos aquellos jueces o personas a quienes por su partetoque aplicar o ejecutar esta ley, siempre que, conforme al modosumario y breve indicado, se les pruebe haberla mitigado en favorde los delincuentes por connivencia, parcialidad u otra cualquieracausa” [6].

Investido del poder supremo, en Lima, no vaciló en ordenar:“Todo funcionario público, a quien se le convenciere en juicio sumariohaber malversado o tomado para sí de los fondos públicos de diez pesospara arriba, queda sujeto a la pena capital” [55]. En esta ocasión,subrayando su rigidez reafirmada en Caracas, dispone a renglónseguido: “Los jueces a quienes, según la ley, competa este decreto,seran condenados a la misma pena” [55].

Bolívar inició rico su carrera política -en 1804 se estima sufortuna en cuatro millones de pesos-. Consume su patrimonio en lasvicisitudes de la guerra< De 1828 es su dicho lapidario: “Quisiera teneruna fortuna material para dar a cada colombiano; pero no tengo nada:no tengo más que corazón para amarlos y una espada para defender-los.” Después de tres lustros en los cuales tócale manejar, sin máscontrol que el de sus estrictos principios, los erarios de Venezuela,Colombia y Perú, muere en la pobreza. Así declara en su testamento:“No poseo otros bienes más que las tierras y minas de Aroa [adquiri-das por sus antepasados] situadas en la provincia de Carabobo, y unas,alhajas que constan en el inventario que debe hallarse entre mis papeles.”

VALOR DE LA UNIÓ N

Para la humanidad entre las más fecundas enseñanzas de Bolívar, en elbicentenario de su nacimiento, están su denodada y absoluta entrega ala libertad, para gloria de la cual él convoca a todos los pueblos, yconjuntamente su certeza categórica sobre el valor eminente de launión, solidaridad e integración.

Un punto alto de la historia americana, obligante y aleccionador ensu sencillez, resulta el acuerdo entre los dos grandes conductores de lalucha en Suramérica, los libertadores Simón Bolívar y José de SanMartín [36, 43) El 26 de julio de 1822 fue la entrevista de Guayaquil.Aunque distintos en rasgos secundarios, ellos se identificaron como“hermanos de armas, de empresas y de opinión”. Sus fuerzas combina-das y sus prestigios sumados depararon al continente americano untiempo de confluencia impar: Entendimiento solidario y fértil, compro-bable en sus resultados reales. Al regresar de la entrevista, San Martíndijo a los peruanos: “Tuve la satisfacción de abrazar al héroe del sur de

Page 52: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

América. Fue uno de los días más felices de mi vida. Tributemos todos,un reconocimiento eterno al inmortal Bolívar.” Este, por su lado,destacó los puntos resaltantes concertados con el héroe de las batallas deSan Lorenzo, Chacabuco y Maipú que dieron independencia a laArgentina y a Chile: eterna amistad entre sus naciones, arreglo limí-trofe, federación completa, mancomunidad diplomática frente aEspaña, y la coincidencia en el tema medular de América: primordial-mente San Martín quiere “que todo marche bajo el aspecto de la unión,porque conoce que no puede haber paz y tranquilidad sin ella”. Laentrevista produjo lo que ambos contertulios esperaban de ella. Niintransigencia, ni rencor, ni frustración. Ninguna obstrucción ni sabo-teo. Horizontes abiertos hacia la misma meta excelsa de la unidad enlibertad [44, 45)

La vigencia de Bolívar para todos los pueblos se patentiza -fuerzaes repetirlo- en su denodado y permanente empeño por la unidad. Fueun militante contra los egoísmos. Soldado de la unión. En cada uno desus documentos capitales este pensamiento es el eje articulador. En elManifiesto de Cartagena, expresa: “Nuestra división, y no las armasespañolas, nos tornó a la esclavitud” [4]. Dentro del Manifiesto deCarúpano, la alusión es precisa: “Parece que el cielo para nuestrahumillación y nuestra gloria ha permitido que nuestros vencedores seannuestros hermanos y que nuestros hermanos únicamente triunfen denosotros” [ll]. En la Carta de Jamaica, reitera: “Seguramente la uniónes la que nos falta para completar la obra de nuestra regeneración” [13].En el Mensaje de Angostura es repetitivo: “Unidad, Unidad, Unidad,debe ser nuestra divisa” [24]. Al Congreso de Bolivia le señala que susdos monstruosos enemigos son “la tiranía y la anarquía” [83]. En laConvención de Ocaña recordó: “Ninguna nación se hizo respetable sinla unión que la fortifica” [90]. Ante el Congreso Admirable, su adióses conmovedor: “Compatriotas: Escuchad mi última voz al terminarmi carrera política; a nombre de Colombia os pido, os ruego quepermanezcáis unidos, para que no seáis los asesinos de la patria yvuestros propios verdugos” [97]. En su última proclama, plantea laobligación común: “Todos debéis trabajar por el bien inestimable de launión” [100].

A Latinoamérica le corresponde -conforme a la previsión deSimón Bolívar y al concepto, metafórico pero veraz, de que “nosotrossomos un pequeño género humano”- una aproximación franca hacialas otras zonas de la tierra. Así se debía propender a lo que él avizorabacomo un nuevo cuadro equilibrado del mundo. Su argumentación de1814, bien cabe -con los ajustes de circunstanciales referencias- a estetiempo próximo al siglo xx1: “La ambición de las naciones de Europa[léase hoy: metrópolis imperialistas de cualquier signo y origen] llevanel yugo de la esclavitud a las demás partes del mundo; y todas estas

57

Page 53: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

partes del mundo debían tratar de establecer el equilibrio entre ellas y laEuropa, para destruir la preponderancia de la última. Yo llamo a éste elequilibrio del universo, y debe entrar en los cálculos de la políticaamericana” [8],

NUEVOS HORIZONTES

Especialmente para el tercer mundo, ése que surge equidistante, de laspolarizaciones excluyentes, Bolívar encarna un mandato vivo. El, a lavez que nos conmina para esa lucha a vida que es la de preservarnuestra esencia contra el asedio de los vasallajes, nos manda a ofrecernuestra experiencia crítica a esa parte tercera del universo, de la cualsomos solidarios en razón de un acontecer difícil, compartido y para-lelo, y también por causa de ideales y de insatisfechas aspiracionesafines.

Ciertamente, la descripción casi fotográfica que en la Carta deJamaica ofrece Bolívar acerca del monopolio ejercido por el absolu-tismo español en esta zona del mundo, se aplicaría nítida y visionaria-mente a cualquiera antigua colonia en Asia o en Africa: “La posición delos moradores ha sido puramente pasiva; su existencia política era nula.Estábamos en un grado más abajo de la servidumbre. El lugar era el desiervos propios para el trabajo, y cuando más, el de simples consumi-dores; y aun esta parte coartada con restricciones chocantes. QuiereUd. saber cuál era nuestro destino?: los campos para cultivar el añil, lagrana, el café, la caña, el cacao y el algodón, las llanuras solitarias paracriar ganados, los desiertos para cazar las bestias feroces, las entrañasde la tierra para excavar el oro que no puede saciar a esa naciónavarienta” [13].

En las presentes circunstancias de Latinoamérica, dentro de unsistema ecuménico cada vez más interdependiente, conflictivo y sacu-dido, dinámico y cambiante a supersónica velocidad, donde la ciencia yla técnica proporcionan al hombre inesperadas posibilidades de dominiosobre la naturaleza, se impone como deber un plan orgánico y vasto detodos nuestros países para la acción y el desarrollo.

El pensamiento y el ejemplo de Bolívar, para eso, para la buenacausa del ser americano, y del hombre sufrido de todas las latitudes,puede ayudar a estas patrias fraternas a encontrarse a sí mismas. Nadieaventaja, en efecto, a aquel visionario en la plenitud de su perspectiva,en lo global completo de su enfoque, en la cabalidad de su decisión trasmetas certeras y factibles.

Su pluma de alta expresividad literaria plasma, para los pueblos ylas épocas, el mensaje crudo de amargas vivencias: “Fuimos abandona-dos por el mundo entero, ninguna nación extranjera nos ha guiado con

Page 54: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

su sabiduría y experiencia, ni defendido con sus armas, ni protegidocon sus recursos. No sucedió lo mismo a la América del Norte durantesu lucha de emancipación. Aunque poseyendo sobre nosotros todasuerte de ventajas, las tres más poderosas naciones europeas, dueñas decolonias, la auxiliaron en su independencia; y sin embargo la GranBretaña no ha usado de represalias contra aquella misma España que lahabía hecho la guerra para privarla de sus colonias [. . .] Hasta losmismos triunfos del grande e inmortal Wellington han sido indirecta-mente fatales para nosotros, porque el arte de la guerra que losespañoles ignoraban, lo han aprendido de aquellos heroicos británicosmandados por el ilustre capitán destinado en un tiempo a libertar laAmérica del Sur. Éstos son los hechos singulares que la historiarecordará junto con otros igualmente singulares que sería largo referir.Los Estados Unidos del Norte que, por su comercio, pudieron habersuministrado elementos de guerra, nos privaron de ellos por causa de sucontienda con la Gran Bretaña. Sin esto Venezuela sola habría triun-fado, y la América del Sur no habría sido asolada por la crueldadespañola ni destrozada por la anarquía revolucionaria. Nosotros notenemos más armas para hacer frente al enemigo que nuestros brazos,nuestros pechos, nuestros caballos y nuestras lanzas. El débil necesitauna larga lucha para vencer; el fuerte, como en Waterloo, libra unabatalla y desaparece un imperio” [14].

Tantos desengaños tienen, para cuantos en verdad escuchan a lahistoria y de ella derivan enseñanzas válidas para su vivir, un valoreducativo insuperable: confianza en las propias fuerzas, y seguridadsólo en la unión de los afines y homogéneos.

Es machacona su cátedra sobre la libertad. Nuestros países, altruis-tas y generosos por índole, románticos e idealistas por razón de su ser,cifran en la libertad un patrimonio preeminente al cual nunca hanestado dispuestos a renunciar. Y es que a la libertad -“necesaria yhermosa respiración del alma”, en el poético decir de Borges- se ha decondicionar todo y cualquier empeño de justicia tangible.

Bolívar, Libertador, no conquistador ni opresor, se inmoló por lalibertad. Su revolución quiso ser en el orbe el primer intento magno deun movimiento de libertad integral y, conjuntamente, de contenidoeconómico y social. El insurgió contra el absolutismo, y especialmentecontra su peor modalidad: la colonialista, mas para instaurar un sistemapopular y positivo que respetara los fueros de la persona humanareconociendo el superior interés colectivo.

La lucha bolivariana, sacrificio fecundo a favor de la auténticaindependencia, para que ante las agresivas versiones de neocolonialismoque surgen hoy especulando y aprovechando la casual inferioridadtecnológica del tercer mundo, se alerte y concientice a los disímilespueblos de la gran familia universal marginada, sobre el deber de

59

Page 55: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

escoger libremente sus fórmulas y definir sus objetivos, sin copiar unmodelo de desarrollo ajeno, sólo apto y conveniente para los yadesarrollados.

Hoy más que nunca, estamos urgidos de verdadera independenciade criterio, soberanía de espíritu, trabajo esforzado, acción solidaria yclaridad de metas, para hacer buena “la esperanza del universo”.

Puerto de Hierro (Venezuela), 16 de agosto de 1982

60

Page 56: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

E X P L I C A C I Ó NB I B L I O G R A F I C A

La obra escrita de Simón Bolívar, de la cual procede la presente antología,constituye un acervo muy extenso y variado. Cartas, discursos, proclamas,leyes, decretos, papeles diversos, contienen su pensamiento. Esa obra ha sido yes objeto de repetidas y constantes ediciones. Los nombres de Daniel FlorencioO’Leary, Francisco Javier Yanes, Cristóbal Mendoza, José Félix Blanco, RamónAzpúrua y Vicente Lecuna, deben ser citados con honor y justicia entre los másimportantes compiladores y divulgadores de los textos bolivarianos.

Al respecto, las colecciones documentales de mayor significación son:Memorias del general O’Leary, editadas originalmente en 32 tomos, entre 1879 y

1888, en Caracas.Documentos para la historia de la vida pública del Libertador, reunidos por José Félix

Blanco y Ramón Azpúrua, publicados en 14 tomos entre 1875 y 1877, enCaracas.

Ambas colecciones fueron dispuestas por el presidente Antonio GuzmánBlanco. Hay reediciones de las Memorias del general O’Leary en 34 tomos(Barcelona, Grafesa, 1981) y de los Documentos pura la historia de la vida públicadel Libertador en 15 volúmenes (Caracas, Litetecnia, 1978 y 1979). Las reedi-ciones fueron decretadas el 27 de febrero de 1979 y el 19 de julio de 1977,respectivamente, por el presidente Carlos Andrés Pérez, con motivo delbicentenario del Libertador.

Del sabio historiador bolivariano don Vicente Lecuna hay una compilaciónde 11 tomos de Cartas del Libertador, un volumen de Proclamas y discursos delLibertador, uno de Papeles de Bolívar y dos de Documentos referentes a la creación deBolivia. Los 13 tomos de las tres primeras recopilaciones -con notas del doctorLecuna y la colaboración de Esther Barret de Nazaris- han sido parcialmentereunidos en dos volúmenes, en papel biblia, de Obras completas de Simón Bolívar,publicadas inicialmente en 1947 y con varias reediciones.

La Sociedad Bolivariana de Venezuela, por encargo del gobierno nacional,conforme a decreto del presidente Rómulo Betancourt, viene publicando unaedición exhaustiva de la obra bolivariana con el título de Escritos del Libertador.Hasta junio de 1981 han aparecido de esta colección magistral y definitiva14 tomos.

La misma Sociedad Bolivariana de Venezueia ha publicado 3 tomos deDecretos del Libertador, 1961.

61

Page 57: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

La Fundación John Boulton, con la asesoría del ilustre profesor ManuelPérez Vila, ha divulgado valiosa documentación bolivariana, descubierta eninvestigaciones recientes, en un volumen: Cartas del Libertador (tomo XII),1959. La Fundación Vicente Lecuna, por su parte, ha publicado un tambiénvalioso volumen inédito: Correspondencia del Libertador, 1974.

Categoría de documento primario para el conocimiento de Bolívar tiene elDiario de Bucaramanga escrito por Luis Peru de Lacroix, muy publicado.

En las varias decenas de tomos de documentos, antes citados, se encuen-tran las cien piezas de la presente antología.’

1. La edición de los textos que integran esta antología ha sido revisada y corregidateniendo en cuenta las reglas de ortografía y puntuación vigentes.

62

Page 58: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

A N T O L O G ÍA

Page 59: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

1

Del juramento en Romapor la libertad

En presencia de su maestro don Simón Rodríguez y de su amigoFernando Toro, jura Bolívar -el 15 de agosto de 1805- en el MonteAventino, consagrarse a la causa de la libertad. Se conoce este texto,reconstruido de memoria, años después, por el maestro Rodríguez.

Este pueblo ha dado para todo: severidad para los viejos tiempos;austeridad para la República; depravación para los Emperadores;catacumbas para los cristianos; valor para conquistar el mundo entero;ambición para convertir todos los Estados de la tierra en arrabalestributarios; mujeres para hacer pasar las ruedas sacrílegas de sucarruaje sobre el tronco destrozado de sus padres; oradores paraconmover, como Cicerón; poetas para seducir con su canto, comoVirgilio; satíricos, como Juvenal y Lucrecio; filósofos débiles, comoSéneca; y ciudadanos enteros, como Catón. Este pueblo ha dadopara todo, menos para la causa de la humanidad: Mesalinas corrom-pidas, Agripinas sin entrañas, grandes historiadores, naturalistas insig-nes, guerreros ilustres, procónsules rapaces, sibaritas desenfrenados,aquilatadas virtudes y crímenes groseros; pero para la emancipa-ción del espíritu, para la extirpación de las preocupaciones, para elenaltecimiento del hombre y para la perfectibilidad definitiva de surazón, bien poco, por no decir nada. La civilización que ha sopladodel Oriente, ha mostrado aquí todas sus fases, ha hecho ver todossus elementos; mas en cuanto a resolver el gran problema del hombreen libertad, parece que el asunto ha sido desconocido y que el despejode esa misteriosa incógnita no ha de verificarse sino en el NuevoMundo.

duro delante de usted; juro por el Dios de mis padres; juro porellos; juro por mi honor, y juro por mi patria, que no daré descanso a mi

Page 60: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

brazo, ni reposo a mi alma, hasta que haya roto las cadenas que nosoprimen por voluntad del poder español!

“Estamos comprometidos a presenciadel universo. Nos empeñamos en producir

la emancipación general”

De nota dirigida al gobierno de Caracas, el 8 de septiembre de 1810,desde Londres. Redactada por Andrés Bello, inspirada por Francisco deMiranda y suscrita por Bolívar y Luis López Méndez, reúne a los tresmáximos personajes de Caracas: el Precursor, el Humanista y elLibertador, en una declaración bastante franca hacia la independencia yavista en términos americanos. En su inicio el movimiento revolucionariose disimulaba como “conservador de los derechos” del rey español, aquí seabre a la sinceridad del cambio por la libertad y la unidad latinoame-ricanas.

Pocos días ha que se recibió oficialmente en esta Corte el inicuo yescandaloso decreto, en que el Consejo de Regencia nos ha declaradorebeldes y ha impuesto un riguroso bloqueo sobre nuestras costas ypuertos, previniendo a las demás provincias americanas que corten yembaracen toda especie de comunicación con nosotros.

Por los papeles públicos que incluimos verá V.S. cuál es el estadode las cosas en España y Portugal, y cuál el concepto que hasta ahorase ha hecho de las novedades que van ocurriendo en Venezuela y enotras partes de ese continente. Tiene nuestra causa en este paísinnumerables amigos, y es imposible que deje de haberlos donde larazón y la justicia tengan partidarios. Estamos comprometidos apresencia del universo, y sin desacreditarnos para siempre, no pode-mos desviarnos un punto del sendero glorioso que hemos abierto a laAmérica. Dejemos que la fría gratitud de los tiranos sea la recompensade aquellos pueblos que no hayan tenido valor para marchar sobre él.0 que en vez de imitar nuestra conducta, hayan incurrido en la bajezade denigrarla; mientras que nosotros continuando sin cesar los esfuer-zos, y propagando las buenas ideas, nos empeñamos en producir laemancipación general. Nuestras medidas llevadas adelante con tesón yfirmeza deben apresurarla infaliblemente; y mientras llega esta épocaafortunada, el tierno interés que la justicia y la filantropía toman pornosotros nos consolará de la ceguedad o ingratitud de nuestroshermanos.

Page 61: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

3

“Pongamos sin temor la piedrafundamental de la libertad suramericana”

Primer discurso de Bolívar. Fue en la Sociedad Patriótica de Caracas-un club político para impulsar la causa revolucionaria-, el 4 de juliode 1811. Alienta el proceso político de Venezuela y lo define en funcióndel interés general de Latinoamérica.

No es que hay dos congresos. Cómo fomentarán el cisma los que másconocen la necesidad de la unión? Lo que queremos es que esa unión seaefectiva y para animarnos a la gloriosa empresa de nuestra libertad;unirnos para reposar, y para dormir en los brazos de la apatía, ayer fueuna mengua, hoy es una traición. Se discute en el Congreso Nacional loque debiera estar decidido. Y qué dicen? que debemos comenzar poruna confederación, como si todos no estuviésemos confederados contrala tiranía extranjera. Que debemos atender a los resultados de la políticade España. Qué nos importa que España venda a Bonaparte susesclavos o que los conserve, si estamos resueltos a ser libres? Esas dudasson tristes efectos de las antiguas cadenas. Que los grandes proyectosdeben prepararse en calma! Trescientos años de calma ¿no bastan? LaJunta Patriótica respeta, como debe, al Congreso de la nación, pero elCongreso debe oír a la Junta Patriótica, centro de luces y de todos losintereses revolucionarios. Pongamos sin temor la piedra fundamentalde la libertad suramericana: vacilar es perdernos.

Propongo que una comisión del seno de este cuerpo lleve alSoberano Congreso estos sentimientos.

4

Análisis de un fracaso y útil señalamientopara el curso de la revolución

Primer documento fündamental de Bolívar, conocido como Manifiesto deCartagena. Examina y explica las causas de la caída de la PrimeraRepública de Venezuela (1810-1812). En Cartagena de Indias, el 15 dediciembre de 1812.

Libertar a la Nueva Granada de la suerte de Venezuela y redimir a éstade la que padece son los objetos que me he propuesto en esta memoria.Dignáos, oh mis conciudadanos, de aceptarla con indulgencia enobsequio de miras tan laudables.

67

Page 62: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Yo soy, granadinos, un hijo de la infeliz Caracas, escapadoprodigiosamente de en medio de sus ruinas físicas y políticas, quesiempre fiel al sistema liberal y justo que proclamó mi patria, he venidoa seguir aquí los estandartes de la independencia, que tan gloriosamentetremolan en estos estados.

Permitidme que animado de un celo patriótico me atreva adirigirme a vosotros, para indicaros ligeramente las causas que conduje-ron a Venezuela a su destrucción: lisonjeándome que las terribles yejemplares lecciones que ha dado aquella extinguida república persua-dan a la América a mejorar de conducta, corrigiendo los vicios deunidad, solidez y energía que se notan en sus gobiernos.

El más consecuente error que cometió Venezuela, al presentarse enel teatro político fue, sin contradicción, la fatal adopción que hizo delsistema tolerante: sistema improbado como débil e ineficaz, desdeentonces, por todo el mundo sensato, y tenazmente sostenido hasta losúltimos períodos, con una ceguedad sin ejemplo.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..“.............Los códigos que consultaban nuestros magistrados no eran los quepodían enseñarles la ciencia práctica del gobierno, sino los que hanformado ciertos buenos visionarios que, imaginándose repúblicasaéreas, han procurado alcanzar la perfección política, presuponiendo laperfectibilidad del linaje humano. Por manera que tuvimos filósofospor jefes; filantropía por legislación, dialéctica por táctica, y sofistas porsoldados. Con semejante subversión de principios y de cosas, el ordensocial se resintió extremadamente conmovido, y desde luego corrió elEstado a pasos agigantados a una disolución universal, que bien prontose vio realizada.

De aquí nació la impunidad de los delitos de Estado cometidosdescaradamente por los descontentos, y particularmente por nuestrosnatos e implacables enemigos, los españoles europeos, que mali-ciosamente se habían quedado en nuestro país, para tenerlo ince-santemente inquieto y promover cuantas conjuraciones les permi-tían formar nuestros jueces, perdonándolos siempre, aun cuandosus atentados eran tan enormes que se dirigían contra la saludpública.

La doctrina que apoyaba esta conducta tema su origen en lasmáximas filantrópicas de algunos escritores que defienden la noresidencia de facultad en nadie, para privar de la vida a un hombre, aunen el caso de haber delinquido éste en el delito de lesa patria. Al abrigode esta piadosa doctrina, a cada conspiración sucedía un perdón, y acada perdón sucedía otra conspiración que se volvía a perdonar; porquelos gobiernos liberales deben distinguirse por la clemencia. clemenciacriminal, que contribuyó más que nada a derribar la máquina quetodavía no habíamos enteramente concluido!

68

Page 63: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Falta de organización

De aquí vino la oposición decidida a levantar tropas veteranas,disciplinadas y capaces de presentarse en el campo de batalla, yainstruidas, a defender la libertad, con suceso y gloria. Por el contrario:se establecieron innumerables cuerpos de milicias indisciplinadas, queademás de agotar las cajas del erario nacional con los sueldos de la planamayor, destruyeron la agricultura, alejando a los paisanos de sushogares; e hicieron odioso el gobierno que obligaba a éstos a tomar lasarmas, y a abandonar sus familias.

“Las repúblicas, decían nuestros estadistas, no han menester dehombres pagados para mantener su libertad. Todos los ciudadanosserán soldados cuando nos ataque el enemigo. Grecia, Roma, Venecia,Génova, Suiza, Holanda, y recientemente el Norte de Américavencieron a sus contrarios sin auxilio de tropas mercenarias siempreprontas a sostener al despotismo y a subyugar a sus conciudadanos.”

Con estos antipolíticos e inexactos raciocinios, fascinaban a lossimples; pero no convencían a los prudentes que conocían bien lainmensa diferencia que hay entre los pueblos, los tiempos y lascostumbres de aquellas repúblicas, y las nuestras. Ellas, es verdad queno pagaban ejércitos permanentes; mas era porque en la antigüedad nolos había y sólo confiaban la salvación, y la gloria de los Estados, en susvirtudes políticas, costumbres severas y carácter militar, cualidades quenosotros estamos muy distantes de poseer. Y en cuanto a las modernasque han sacudido el yugo de sus tiranos es notorio que han mantenidoel competente número de veteranos que exige su seguridad: excep-tuando al Norte de América, que estando en paz con todo el mundo, yguarnecido por el mar, no ha tenido por conveniente sostener en estosúltimos años el completo de tropas veteranas que necesita para ladefensa de sus fronteras y plazas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .El resultado probó severamente a Venezuela el error de su cálculo; pueslos milicianos que salieron al encuentro del enemigo, ignorando hasta elmanejo del arma, y no estando habituados a la disciplina y obediencia,fueron arrollados al comenzar la última campaña, a pesar de losheroicos y extraordinarios esfuerzos que hicieron sus jefes, por Llevarlosa la victoria. Lo que causó un desaliento general en soldados, yoficiales; porque es una verdad militar que sólo ejércitos aguerridos soncapaces de sobreponerse a los primeros infaustos sucesos de unacampaña. El soldado bisoño lo cree todo perdido desde que esderrotado una vez; porque la experiencia no le ha probado que el valor,la habilidad y la constancia corrigen la mala fortuna.

La subdivisión de la provincia de Caracas proyectada, discutida ysancionada por el Congreso federal despertó y fomentó una enconada

69

Page 64: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

rivalidad en las ciudades, y lugares subalternos, contra la capital: “lacual decían los congresales ambiciosos de dominar en sus distritos, erala tiranía de las ciudades y la sanguijuela del Estado”.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .La disipación de las rentas públicas en objetos frívolos y perjudiciales, yparticularmente en sueldos de infinidad de oficinistas, secretarios,jueces, magistrados, legisladores provinciales y federales, dio un golpemortal a la república, porque la obligó a recurrir al peligrosoexpediente de establecer el papel moneda, sin otra garantía, que lafuerza y las rentas imaginarias de la confederación. Esta nueva monedapareció a los ojos de los más, una violación manifiesta del derecho depropiedad, porque se conceptuaban despojados de objetos de intrínsecovalor, en cambio de otros cuyo precio era incierto, y aun ideal. El papelmoneda remató el descontento de los estólidos pueblos internos, quellamaron al comandante de las tropas españolas, para que viniese alibrarlos de una moneda que veían con más horror que la servidumbre.

Pero lo que debilitó más al gobierno de Venezuela fue la formafederal que adoptó, siguiendo las máximas exageradas de los derechosdel hombre, que autorizándolo para que se rija por sí mismo, rompe lospactos sociales y constituye a las naciones en anarquía. Tal era elverdadero estado de la confederación. Cada provincia se gobernabaindependientemente; y a ejemplo de éstas, cada ciudad pretendía igualesfacultades alegando la práctica de aquéllas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .El sistema federal, bien que sea el más perfecto y más capaz deproporcionar la felicidad humana en sociedad, es, no obstante, el másopuesto a los intereses de nuestros nacientes estados. Generalmentehablando, todavía nuestros conciudadanos no se hallan en aptitud deejercer por sí mismos y ampliamente sus derechos; porque carecen delas virtudes políticas que caracterizan al verdadero republicano: vir-tudes que no se adquieren en los gobiernos absolutos, en donde sedesconocen los derechos y los deberes del ciudadano.

Por otra parte qué país del mundo por morigerado y republicanoque sea, podrá, en medio de las facciones intestinas y de una guerraexterior, regirse por un gobierno tan complicado y débil como elfederal?

Es preciso que el gobierno se identifique, por decirlo así, alcarácter de las circunstancias, de los tiempos y de los hombres quelo rodean. Si éstos son prósperos y serenos, él debe ser dulcey protector; pero si son calamitosos y turbulentos, él debe mos-trarse terrible y armarse de una firmeza igual a los peligros, sin atendera leyes ni constituciones, interín no se restablecen la felicidad y lapaz.

7o

Page 65: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Los debidos ajustes

Yo soy de sentir que mientras no centralicemos nuestros gobiernosamericanos, los enemigos obtendrán las más completas ventajas;seremos indefectiblemente envueltos en los horrores de las disensionesciviles, y conquistados vilipendiosamente por ese puñado de bandidosque infestan nuestras comarcas.

Las elecciones populares hechas por los rústicos del campo y porlos intrigantes moradores de las ciudades añaden un obstáculo más a lapráctica de la federación entre nosotros: porque los unos son tanignorantes que hacen sus votaciones maquinalmente, y los otros, tanambiciosos que todo lo convierten en facción; lo que ponía el gobiernoen manos de hombres ya desafectos a la causa, ya ineptos, yainmorales. El espíritu de partido decidía en todo, y por consiguientenos desorganizó más de lo que las circunstancias hicieron. Nuestradivisión, y no las armas españolas, nos tomó a la esclavitud.

El terremoto de 26 de marzo trastornó, ciertamente, tanto lo físicocomo lo moral; y puede llamarse propiamente la causa inmediata de laruina de Venezuela; mas este mismo suceso habría tenido lugar, sinproducir tan mortales efectos, si Caracas se hubiera gobernadoentonces por una sola autoridad, que obrando con rapidez y vigorhubiese puesto remedio a los daños sin trabas, ni competencias queretardando el efecto de las providencias dejaban tomar al mal unincremento tan grande que lo hizo incurable.

Si Caracas en lugar de una confederación, lánguida e insubsistentehubiese establecido un gobierno sencillo, cual lo requería su situaciónpolítica y militar, tú existieras oh Venezuela! y gozaras hoy de tulibertad.

La influencia eclesiástica tuvo, después del terremoto, una partemuy considerable en la sublevación de los lugares y ciudades subalter-nas y en la introducción de los enemigos en el país, abusandosacrílegamente de la santidad de su ministerio en favor de lospromotores de la guerra civil. Sin embargo debemos confesar ingenua-mente que estos traidores sacerdotes se animaban a cometer losexecrables crímenes de que justamente se les acusa porque la impunidadde los delitos era absoluta.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Resumen de estrategia

De lo referido se deduce que entre las causas que han producido lacaída de Venezuela debe colocarse en primer lugar la naturaleza de suconstitución; que, repito, era tan contraria a sus intereses, comofavorable a los de sus contrarios. En segundo, el espíritu de misantropía

71

Page 66: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

que se apoderó de nuestros gobernantes. Tercero: la oposición alestablecimiento de un cuerpo militar que salvase la república y repelieselos choques que le daban los españoles. Cuarto: el terremoto acom-pañado del fanatismo que logró sacar de este fenómeno los másimportantes resultados; y últimamente las facciones internas que enrealidad fueron el mortal veneno que hicieron descender la patria alsepulcro.

Estos ejemplos de errores e infortunios no serán enteramenteinútiles para los pueblos de la América meridional, que aspiran a lalibertad e independencia.

La Nueva Granada ha visto sucumbir a Venezuela, por consi-guiente debe evitar los escollos que han destrozado a aquélla. A esteefecto presento como una medida indispensable para la seguridad de laNueva Granada, la reconquista de Caracas. A primera vista pareceráeste proyecto inconducente, costoso, y quizás impracticable: peroexaminando atentamente con ojos previsivos y una meditación pro-funda, es imposible desconocer su necesidad, como dejar de ponerlo enejecución probada la utilidad.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Como en el orden de las vicisitudes humanas no es siempre la mayoríafísica la que decide, sino que es la superioridad de la fuerza moral la queinclina hacia sí la balanza política, no debió el gobierno de Venezuela,por esta razón, haber descuidado la extirpación de un enemigo que,aunque aparentemente débil, tenía por auxiliares a la provincia deMaracaibo; a todas las que obedecen a la Regencia; el oro y lacooperación de nuestros eternos contrarios, los europeos que viven connosotros; el partido clerical, siempre adicto a su apoyo y compañero, eldespotismo; y sobre todo, la opinión inveterada de cuantos ignorantesy supersticiosos contienen los límites de nuestros estados. Así fue queapenas hubo un oficial traidor que llamase al enemigo, cuando sedesconcertó la máquina política, sin que los inauditos y patrióticosesfuerzos que hicieron los defensores de Caracas lograsen impedir lacaída de un edificio ya desplomado por el golpe que recibió de un solohombre.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Así pues, no nos queda otro recurso para precavernos de estascalamidades que el de pacificar rápidamente nuestras provincias subleva-das, para llevar después nuestras armas contra las enemigas; y formar,de este modo, soldados y oficiales dignos de llamarse las columnas de lapatria.

Todo conspira a hacemos adoptar esta medida; sin hacer menciónde la necesidad urgente que tenemos de cerrarle las puertas al enemigo,hay otras razones tan poderosas para determinamos a la ofensiva, quesería una falta militar y política inexcusable dejar de hacerla. Nosotros

Page 67: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

nos hallamos invadidos, y por consiguiente forzados a rechazar elenemigo más allá de la frontera. Además, es un principio del arte quetoda guerra defensiva es perjudicial y ruinosa para el que la sostiene,pues lo debilita sin esperanza de indemnizarlo, y que las hostilidades enel territorio enemigo siempre son provechosas, por el bien que resultadel mal del contrario; así, no debemos, por ningún motivo, emplear ladefensiva.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Es una cosa positiva que en cuanto nos presentemos en Venezuela senos agregan millares de valerosos patriotas, que suspiran por vernosparecer, para sacudir el yugo de sus tiranos y unir sus esfuerzos a losnuestros, en defensa de la libertad.

5

Proclama de guerra a muerte

Un acto radical de esclarecimiento político que buscaba definir los bandosen pugna y acelerar una solución militar que, a breve plazo, consolidarala independencia. Dictado en Trujillo, el 15 de junio de 1813.

S IMÓ N BOLÍVAR,Brigadier de la Unión,

General en Jefe del Ejército del Norte,Libertador de Venezuela

A SUS CONCIUDADANOS:

Venezolanos:

Un ejército de hermanos, enviado por el soberano Congreso de laNueva Granada, ha venido a libertaros, y ya lo tenéis en medio devosotros, después de haber expulsado a los opresores de las provinciasde Mérida y Trujillo.

Nosotros somos enviados a destruir a los españoles, a proteger alos americanos y a restablecer los gobiernos republicanos que formabanla Confederación de Venezuela. Los estados que cubren nuestras armasestán regidos nuevamente por sus antiguas constituciones y magistra-dos, gozando plenamente de su libertad e independencia; porquenuestra misión sólo se dirige a romper las cadenas de la servidumbre,que agobian todavía a algunos de nuestros pueblos, sin pretender darleyes, ni ejercer actos de dominio, a que el derecho de la guerra podríaautorizamos.

73

Page 68: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Tocado de vuestros infortunios, no hemos podido ver con indife-rencia las aflicciones que os hacían experimentar los bárbaros españoles,que os han aniquilado con la rapiña y os han destruido con la muerte;que han violado los derechos sagrados de las gentes; que han infringidolas capitulaciones y los tratados más solemnes; y en fin han cometidotodos los crímenes, reduciendo la República de Venezuela a la másespantosa desolación. Así pues, la justicia exige la vindicta, y lanecesidad nos obliga a tomarla. Que desaparezcan para siempre delsuelo colombiano los monstruos que lo infestan y han cubierto desangre, que su escarmiento sea igual a la enormidad de su perfidia, paralavar de este modo la mancha de nuestra ignominia y mostrar a lasnaciones del universo que no se ofende impunemente a los hijos de laAmérica.

A pesar de nuestros justos resentimientos contra los inicuos españo-les, nuestro magnánimo corazón se digna aún abrirles por la última vezuna vía a la conciliación y a la amistad; todavía se les invita a vivirpacíficamente entre nosotros, si detestando sus crímenes, y convirtién-dose de buena fe, cooperan con nosotros a la destrucción del gobiernointruso de la España y al restablecimiento de la República de Venezuela.

Todo español que no conspire contra la tiranía en favor de la justacausa, por los medios más activos y eficaces, será tenido por enemigo ycastigado como traidor a la patria, y por consecuencia será irremisible-mente pasado por las armas. Por el contrario, se concede un indultogeneral y absoluto a los que pasen a nuestro ejército con sus armas o sinellas, a los que presten sus auxilios a los buenos ciudadanos que se estánesforzando por sacudir el yugo de la tiranía. Se conservarán en susempleos y destinos a los oficiales de guerra y magistrados civiles queproclamen el gobierno de Venezuela y se unan a nosotros; en unapalabra, los españoles que hagan señalados servicios al Estado seránreputados y tratados como americanos.

Y vosotros, americanos, que el error o la perfidia os ha extraviadode las sendas de la justicia, sabed que vuestros hermanos os perdonan ylamentan sinceramente vuestros descarríos, en la íntima persuasión deque vosotros no podéis ser culpables, y que sólo la ceguedad eignorancia en que os han tenido hasta el presente los autores devuestros crímenes, han podido induciros a ellos. No temáis la espadaque viene a vengaros y a cortar los lazos ignominiosos con que os ligana su suerte vuestros verdugos. Contad con una inmunidad absoluta envuestro honor, vida y propiedades: el solo título de americanos serávuestra garantía y salvaguardia. Nuestras armas han venido a protege-ros y no se emplearán jamás contra uno solo de nuestros hermanos.

Esta amnistía se extiende hasta a los mismos traidores que másrecientemente hayan cometido actos de felonía, y será tan religiosa-mente cumplida, que ninguna razón, causa o pretexto será suficiente

74

Page 69: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

para obligarnos a quebrantar nuestra oferta, por grandes y extraordina-rios que sean los motivos que nos déis para excitar nuestra animad-versión.

Españoles y canarios, contad con la muerte, aun siendo indife-rentes, si no obráis activamente en obsequio de la libertad de laAmérica. Americanos, contad con la vida, aun cuando seáis culpables.Cuartel general de Trujillo, 15 de junio de 1813.-3.°

Simón Bolívar

6

Máximo rigor contra el fraude

Empeñado en construir un sistema de absoluta corrección moral, Bolívarestablece la pena capital contra los defraudadores de la principal füente deingresos de la república que, en aquella época, era la renta del tabaco. Leysancionada en Puerto Cabello, el ll de septiembre de 1813.

SIMÓ N BOLÍVAR,Brigadier de la Unión,

General en Jefe del Ejército Libertadorde Venezuela, etc.

Considerando que los ingresos de la Renta del Tabaco se disminuyensobremanera cada día, o que los productos no equivalen a los ingresosque la renta debe recibir, a causa de los fraudes que se cometen, bien enventas clandestinas que algunos particulares hacen del tabaco, bien en lamalversación criminal de algunos de los mismos empleados del ramo; yconsiderando que este delito es otro tanto más grave cuanto que ladefensa común de la patria y la libertad exigen sacrificios de todaespecie de los buenos ciudadanos, y más el de sus bienes y propiedadespara cooperar al sostenimiento del ejército libertador, y que por elcontrario estos execrables defraudadores hostilizan tanto al Estadocomo pueden hacerlo los enemigos, privándole del auxilio más necesa-rio para su defensa, lo que casi los constituye en la esfera de traidores;por lo tanto he venido en decretar y decreto lo siguiente:

1.° Todo aquel que fuere convencido de haber defraudado loscaudales de la Renta Nacional de Tabaco, o vendiéndole clandestina-mente fuera del estanco o dilapidándolos con robos y manejos ilícitos,será pasado por las armas, y embargados sus bienes para deducir losgastos y perjuicios que origine.

2° El director general de las Rentas Nacionales, para el cumpli-

75

Page 70: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

miento riguroso de esta ley, podrá ordenar a los jueces correspon-dientes abrevien, o salven, si es necesario, los trámites ordinarios paraproceder, conocer y juzgar, limitándose a instruir sumariamente lascausas.

3° Sufrirán la misma pena que impone el artículo primero todosaquellos jueces o personas a quienes por su parte toque aplicar oejecutar esta ley, siempre que conforme al modo sumario y breveindicado en el artículo antecedente, se les pruebe haberla mitigado enfavor de los delincuentes, por connivencia, parcialidad u otra cualquiercausa.

Cúmplase y ejecútese: comuníquese a quien corresponda, imprí-mase y publíquese en la forma acostumbrada.

Dada en el cuartel general de Puerto Cabello, a 11 de septiembrede 1813 años; tercero de la independencia y primero de la guerra amuerte, firmada de mi mano, sellada con el sello de la República yrefrendada por el secretario de Estado y de Hacienda.

Antonio Muñoz TebarSimón Bolívar

Secretario de Estado y Hacienda

7

Memorial de crímenes del enemigoy razones de la guerra total

Respuesta motivada al Excmo. señor gobernador y capitán general de laisla de Curazao y sus dependencias -entonces bajo ocupación inglesa-,desde el cuartel general de Valencia, el 3 de octubre de 1813.

La atención que debo prestar a un jefe de la nación británica, y la gloriade la causa americana, me ponen en la obligación sagrada de manifestara V. E. las causas dolorosas de la conducta que a mi pesar observo conlos españoles que en este año pasado han envuelto a Venezuela enruinas, cometiendo crímenes que debieran condenarse a un eternoolvido, si la necesidad de justificar a los ojos del mundo la guerra amuerte que hemos adoptado, no nos obligara a sacarlos de los cadalsosy las horrendas mazmorras que los cubren, para presentarlos a V. E.

Un continente, separado de la España por mares inmensos, máspoblado y más rico que ella, sometido tres siglos a una dependenciadegradante y tiránica, al saber el año de 1810 la disolución de losgobiernos de España por la ocupación de los ejércitos franceses, se poneen movimiento para preservarse de igual suerte y escapar a la anarquía

76

Page 71: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

y confusión que lo amenaza. Venezuela, la primera, constituye unajunta conservadora de los derechos de Fernando VII, hasta ver elresultado decisivo de la guerra; ofrece a los españoles que pretendanemigrar un asilo fraternal; inviste de la magistratura a muchos de ellosy conserva en sus empleos a cuantos estaban colocados en los de másinflujo e importancia. Pruebas evidentes de las miras de unión.queanimaban a los venezolanos; miras dolosamente correspondidas por losespañoles, que todos por lo general abusaron con negra perfidia de laconfianza y generosidad de los pueblos.

En efecto, Venezuela adoptó aquella medida, impelida de la irresis-tible necesidad. En circunstancias menos críticas, provincias de España,no tan importantes como ella, habían erigido juntas gubernativas parasalvarse del desorden y de los tumultos. ¿Y Venezuela no deberíaponerse igualmente a cubierto de tantas calamidades y asegurar suexistencia contra las rápidas vicisitudes de la Europa? NO hacía un mala los españoles de la Península, quedando expuesta a los trastornos quedebía introducir la falta del gobierno reconocido, y no debían agradecernuestros sacrificios para proporcionarles un asilo imperturbable? Hu-biera esperado nadie que un bloqueo riguroso y hostilidades cruelesdebían ser la correspondencia de tanta generosidad?

Persuadida Venezuela de que la España había sido completamentesubyugada, como se creyó en las demás partes de América, dio aquelpaso, que mucho antes pudo igualmente haber dado, autorizada con elejemplo de las provincias de España, a quienes estaba declarada igual enderechos y representación política. Resultó luego la Regencia, quetumultuariamente se estableció en Cádiz, único punto donde no pene-traron las águilas francesas; y desde allí fulminó sus decretos destruc-tores contra unos pueblos libres, que sin obligación habían mantenidorelaciones e integridad nacional con un pueblo de que naturalmenteeran independientes.

Tal fue el generoso espíritu que animó la primera revolución deAmérica, revolución sin sangre, sin odio, sin venganza. NO pudieronen Venezuela, en Buenos Aires, en la Nueva Granada, desplegar losjustos resentimientos a tanto agravio y violencias y destruir aquellosvirreyes, gobernadores y regentes, todos aquellos mandatarios, verdu-gos de su propia especie, que complacidos con la destrucción de losamericanos, hacían perecer en horribles mazmorras a los más ilustres yvirtuosos, despojaban al hombre de probidad del fruto de sus sudores,y en general perseguían la industria, las artes bienhechoras y cuantopodía aliviar los horrores de nuestra esclavitud?

Tres siglos gimió la América bajo esta tiranía, la más dura que haafligido a la especie humana, tres siglos lloró las funestas riquezas quetanto atractivo teman para sus opresores; y cuando la Providencia justales presentó la ocasión inopinada de romper las cadenas, lejos de pensar

77

Page 72: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

en la venganza de estos ultrajes, convida a sus propios enemigos,ofreciendo partir con ellos sus dones y su asilo.

La destrucción general

Al ver ahora casi todas las regiones del Nuevo Mundo empeñadas enuna guerra cruel y ruinosa; al ver la discordia agitar con sus furores aunal habitante de las cabañas; la sedición encender el fuego devorador dela guerra, hasta en las apartadas y solitarias aldeas, y los camposamericanos teñidos de la sangre humana, se buscará la causa de untrastorno tan asombroso en este continente pacífico, cuyos hijos dócilesy benévolos habían sido siempre un ejemplo raro de dulzura y sumi-sión, que no ofrece la historia de ningún otro pueblo del mundo.

El español feroz, vomitando sobre las costas de Colombia, paraconvertir la porción más bella de la naturaleza en un vasto y odiosoimperio de crueldad y rapiña; vea ahí V. E. el autor protervo de estasescenas trágicas que lamentamos. Señaló su entrada en el NuevoMundo con la muerte y la desolación, hizo desaparecer de la tierra sucasta primitiva; y cuando su saña rabiosa no halló más seres quedestruir, se volvió contra los propios hijos que tenía en el suelo quehabía usurpado.

Véale V. E. incitado de su sed de sangre, despreciar lo más santo,y hollar sacrílegamente aquellos pactos que el mundo venera y que hanrecibido un sello inviolable de todas las edades y de todos los pueblos.Una capitulación entregó en el año pasado todo el territorio indepen-diente de Venezuela; una sumisión absoluta y tranquila por parte de loshabitantes les convenció de la pacificación de los pueblos y de larenuncia total que habían hecho a las pasadas pretensiones políticas.Mas al mismo tiempo que Monteverde juraba a los venezolanos elcumplimiento religioso de las promesas ofrecidas, se vio con escándaloy espanto la infracción más bárbara e impía: los pueblos saqueados; losedificios incendiados; el bello sexo atropellado; las ciudades más gran-des encerradas en masa, por decirlo así, en horribles cavernas, viendorealizado lo que hasta entonces parecía un imposible, la encarcelaciónde un pueblo entero. En efecto, sólo aquellos seres tan oscuros quelograron sustraerse a la vista del tirano consiguieron una libertadmiserable, reduciéndose en chozas aisladas, a vivir entre las selvas y lasbestias feroces.

iCuántos ancianos respetables, cuántos sacerdotes venerables sevieron uncidos a cepos y otras infames prisiones, confundidos conhombres groseros y criminales, y expuestos al escarnio de la soldadescabrutal y de los hombres más viles de todas las clases! Cuántosexpiraron agobiados bajo el peso de cadenas insoportables, privados dela respiración o extenuados del hambre y las miserias? Al tiempo que se

78

Page 73: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

publicaba la constitución española, como el escudo de la libertad civil,se arrastraban centenares de víctimas cargadas de grillos y de ligadurasa subterráneos inmundos y mortíferos, sin establecer las causas de aquelprocedimiento, sin saber aun el origen y opiniones políticas del desgra-ciado.

Vea ahí V. E. el cuadro no exagerado, pero inaudito de la tiraníaespañola en la América; cuadro que excita a un tiempo la indignacióncontra los verdugos y la más justa y viva sensibilidad para las víctimas.Sin embargo, no se vio entonces a las almas sensibles interceder por lahumanidad atormentada, ni reclamar el cumplimiento de un pacto queinteresaba al universo. V. E. interpone ahora su respetable mediaciónpor los monstruos feroces, autores de tantas maldades. V. E. debecreerme; cuando las tropas de la Nueva Granada salieron a mis órdenesa vengar la naturaleza y la sociedad altamente ofendidas, ni las instruc-ciones de aquel benéfico gobierno, ni mis designios eran ejercer elderecho de represalias sobre los españoles, que bajo el título deinsurgentes llevaban a todos los americanos dignos de este nombre, asuplicios infames, o a torturas mucho más infames y crueles aún. Masviendo a estos tigres burlar nuestra noble clemencia, y asegurados de laimpunidad continuar aun vencidos la misma sanguinaria fiereza; enton-ces, por llenar la santa misión confiada a mi responsabilidad, por salvarla vida amenazada de mis compatriotas, hice esfuerzos sobre mi naturalsensibilidad para inmolar los sentimientos de una perniciosa clemenciaa la salud de la patria.

Permítame V. E. recomendarle la lectura de la carta del ferozZerveriz, ídolo de los españoles en Venezuela, al general Monteverde,en la Gaceta de Caracas, número 3; y descubrirá en ella V. E. los planessanguinarios, cuya consumación combinaban los perversos. Instruidoanticipadamente de su sacrílego intento, que una cruel experienciaconfirmó luego al punto, resolví llevar a efecto la guerra a muerte, paraquitar a los tiranos la ventaja incomparable que les prestaba su sistemadestructor.

En efecto, al abrir la campaña el ejército libertador en la provinciade Barinas, fue desgraciadamente aprehendido el coronel AntonioNicolás Briceño y otros oficiales de honor, que el bárbaro y cobardeTízcar hizo pasar por las armas, hasta el número de dieciséis. Igualesespectáculos se repetían al mismo tiempo en Calabozo, Espino, Cu-maná y otras provincias, acompañados de tales circunstancias de inhu-manidad en su ejecución, que creo indigno de V. E. y de este papel,hacer la representación de escenas tan abominables.

79

Page 74: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Para no olvidar

Puede V. E. ver un débil bosquejo de los actos feroces en que más seregalaba la crueldad española, en la Gaceta número 4. El degüellogeneral ejecutado rigurosamente en la pacífica villa de Aragua por elmás brutal de los mortales, el detestable Suazola, es uno de aquellosdelirios o frenesíes sanguinarios que sólo una o dos veces han degra-dado a la humanidad.

Hombres y mujeres, ancianos y niños, desorejados, desolladosvivos, y luego arrojados a lagos venenosos, o asesinados por mediosdolorosos y lentos. La naturaleza atacada en su inocente origen, y elfeto aun no nacido, destruido en el vientre de las madres a bayonetazoso golpes.

En San Juan de los Morros, pueblo sencillo y agricultor, habíanofrecido espectáculos igualmente agradables a los españoles el bárbaroAntoñanzas y el sanguinario Boves. Aún se ven en aquellos camposinfelices los cadáveres suspensos en los árboles. El genio del crimenparece tener allí su imperio de muerte, y nadie puede acercarse a él sinsentir los furores de una implacable venganza.

No ha sido Venezuela sola el teatro funesto de estas carniceríashorrorosas. La opulenta Méjico, Buenos Aires, el Perú y la desventu-rada Quito, casi son comparables a unos vastos cementerios, donde elgobierno español amontona los huesos que ha dividido su hachahomicida.

Puede V. E. hallar la basa en que hace consistir un español elhonor de su nación, en la Gacela número 2. La carta de Fr. VicenteMarquetich afirma que la espada de Regules, en el campo y en lossuplicios, ha inmolado doce mil americanos en un solo año; y pone lagloria del marino Rosendo Porlier en su sistema universal de no darcuartel ni a los santos, si se le presentan en traje de insurgentes.

Omito martirizar la sensibilidad de V. E. con prolongar la pinturade las agonías dolorosas que la barbarie española ha hecho sufrir a lahumanidad para establecer un dominio injusto y vilipendioso sobre losdulces americanos. Ojalá un velo impenetrable ocultara para siempre ala noticia de los hombres, los excesos de sus semejantes! Ojalá unacruel necesidad no nos hiciera un deber inviolable el exterminar a tanalevosos asesinos!

Sírvase V. E. suponerse un momento colocado en nuestra situa-ción, y pronunciar sobre la conducta que debe usarse con nuestrosopresores. Decida V. E. si es siquiera posible afianzar la libertad de laAmérica, mientras respiran tan pertinaces enemigos. Desengaños funes-tos instan cada día por ejecutar generosamente las más duras medidas, y

Page 75: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

puedo decir a V. E. que la humanidad misma las dicta con su dulceimperio.

Puesto por mis más fuertes sentimientos en la necesidad de serclemente con muchos españoles, después de haberlos generosamentedejado entre nosotros en plena libertad, aun sin sacar todavía la cabezade bajo del cuchillo vengador, han conmovido los pueblos infelices, yquizás las atrocidades ejecutadas nuevamente por ellos igualan a las másespantosas de todas.

En los valles del Tuy y Tácata, y en los pueblos del Occidente,donde no parecía que la guerra civil llevara sus estragos desoladores,han elevado ya los malvados, monumentos lamentables de su rabiosacrueldad. Las delicadas mujeres, los niños tiernos, los trémulos ancia-nos se han encontrado desollados, sacados los ojos, arrancadas lasentrañas; y llegaríamos a pensar que los tiranos de la América no son dela especie de los hombres.

En vano se imploraría en favor de los que existen detenidos en lasprisiones un pasaporte para esa colonia, u otro punto igualmente fuerade Venezuela. Con harto perjuicio de la paz pública, hemos probado lasfatales consecuencias de esta medida; pues puede asegurarse que casitodos los que le han obtenido, sin respeto a los juramentos con que sehabían ligado, han vuelto a desembarcar en los puntos enemigos, paraalistarse en las partidas de asesinos que molestan las poblacionesindefensas. Desde las mismas prisiones traman proyectos subversivos,más funestos sin duda para ellos que para el gobierno, obligado aemplear sus esfuerzos, más en reprimir la furia de los celosos patriotascontra los sediciosos que amenazan su vida, que en desconcertar lasnegras maquinaciones de aquéllos.

V. E. pronunciará, pues: o los americanos deben dejarse extermi-nar pacientemente, o deben destruir una raza inicua, que mientrasrespira, trabaja sin cesar por nuestro aniquilamiento.

V. E. no se ha engañado en suponerme sentimientos compasivos;los mismos caracterizan a todos mis compatriotas. Podríamos serindulgentes con los cafres del África; pero los tiranos españoles, contralos más poderosos sentimientos del corazón, nos fuerzan a las represa-lias. La justicia americana sabrá siempre, sin embargo, distinguir alinocente del culpable; y V. E. puede contar que éstos serán tratadoscon la humanidad que es debida, aun a la nación española.

Tengo el honor de ser de V. E. con la más alta consideración yrespeto, atento y adicto servidor.

Simón Bolívar

81

Page 76: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

8

Firme en los principios de la libertady del desprendimiento, sometido

a la justicia y el derecho.Un nuevo orden mundial

Discursos en la Asamblea Popular correspondiente a la Segunda Repú-blica, en Caracas, iglesia de San Francisco, el 2 de enero de 1814.

Ciudadanos:

El odio a la tiranía me alejó de Venezuela cuando vi mi patria segundavez encadenada; y desde los confines lejanos del Magdalena, el amor ala libertad me ha conducido a ella, venciendo cuantos obstáculos seoponían a mi marcha que me encaminaba a redimir a mi país de loshorrores y vejaciones de los españoles. Mis huestes seguidas por eltriunfo, lo han ocupado todo, y han destruido el coloso enemigo.Vuestras cadenas han pasado a vuestros opresores; y la sangre españolaque tiñe el campo de batalla, ha vengado a vuestros compatriotassacrificados.

Yo no os he dado la libertad. Vosotros la debéis a mis compañerosde armas. Contemplad sus nobles heridas, que aún vierten sangre; yllamad a vuestra memoria los que han perecido en los combates. Yo hetenido la gloria de dirigir su virtud militar. No ha sido el orgullo ni laambición del poder el que me ha inspirado esta empresa. La libertadencendió en mi seno este fuego sagrado; y el cuadro de mis conciudada-nos expirando en la afrenta de los suplicios, o gimiendo en las cadenas,me hizo empuñar la espada contra los enemigos. La justicia de la causareunió bajo mis banderas los más valerosos soldados, y la Providenciajusta nos concedió la victoria.

Para salvaros de la anarquía y destruir los enemigos que intentaronsostener el partido de la opresión, fue que admití y conservé el podersoberano. Os he dado leyes; os he organizado una administración dejusticia y de rentas; en fin os he dado un gobierno.

Ciudadanos: yo no soy el soberano. Vuestros representantes debenhacer vuestras leyes; la hacienda nacional no es de quien os gobierna.Todos los depositarios de vuestros intereses deben demostraros el usoque han hecho de ellos. Juzgad con imparcialidad si he dirigido loselementos del poder a mi propia elevación, o si he hecho el sacrificio demi vida, de mis sentimientos, de todos mis instantes por constituiros ennación, por aumentar vuestros recursos, o más bien por crearlos.

82

Page 77: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Anhelo por el momento de trasmitir este poder a los represen-tantes que debéis nombrar; y espero, ciudadanos, que me eximiréis deun destino que algunos de vosotros podrá llenar dignamente, permitién-dome el honor a que únicamente aspiro, que es el de continuarcombatiendo a vuestros enemigos; pues no envainaré jamás la espadamientras la libertad de mi patria no esté completamente asegurada.

Vuestras glorias adquiridas en la expulsión de vuestros opresoresse veían eclipsadas; vuestro honor se hallaba comprometido; vosotroslo habéis perdido, habiendo sucumbido bajo el yugo de los tiranos.Erais la víctima de una venganza cruel. Los intereses del Estado estabanen manos de bandidos. Decidid si vuestro honor se ha repuesto; sivuestras cadenas han sido despedazadas; si he exterminado vuestrosenemigos; si os he administrado justicia; y si he organizado el erario dela república.

Os presento tres informes justificados de aquellos que han sido misórganos para ejercer el poder supremo. Los tres secretarios de estado osharán ver si volvéis a aparecer sobre la escena del mundo, y que lasnaciones todas que ya os consideraban anonadados vuelven a fijar suvista sobre vosotros y a contemplar con admiración los esfuerzos quehacéis por conservar vuestra existencia; si estas mismas naciones po-drán oponerse a proteger y reconocer vuestro pabellón nacional; sivuestros enemigos han sido destruidos tantas cuantas veces se hanpresentado contra los ejércitos de la república; si puesto a la cabeza deellos, he defendido vuestros derechos sagrados; si he empleado vuestroerario en vuestra defensa; si he expedido reglamentos para economi-zarlo y aumentarlo; y si aun en medio de los campos de batalla y elcalor de los combates he pensado en vosotros y en echar los cimientosdel edificio que os constituya una nación feliz y respetable. Pronunciaden fin si los planes adoptados podrán hacer se eleve la república a lagloria y a la felicidad.

A continuación el secretario de Estado, Antonio Muñoz Tébar,dio lectura a este texto redactado por Bolívar:

Se descubre siempre con respecto a la Nueva Granada, que la políticade V. E. no ha sido únicamente estrechar nuestra alianza con ella.Pretende más, hacer de ambas regiones una nación. Consideracionesde la mayor importancia prescriben esta medida indispensable. Elinterés de la Nueva Granada, el nuestro propio, las ideas de los otrosgabinetes sobre este particular, harto manifestadas, obligan a V. E. aacelerar este paso. Nuestra fuerza va a nacer de esta unión. Losenemigos de la causa americana temblarán ante un tan formidablecuerpo, que por todas partes les resistirá unido. El poder y prosperi-dad interior llegarán a su colmo, cuando dirigidos por un mismo

83

Page 78: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

impulso nuestros elementos de poder y prosperidad, se le haga concu-rrir de acuerdo, a formar un gran todo. Al paso que así fomentamos lagrandeza nacional, extinguimos entre nosotros todo germen de divi-sión e impedimos lo que ya una ocasión ha afligido a la Nueva Granada,cuando se empeñaron sus regiones en una guerra que las destruíamutuamente, y hacía reír al bárbaro español, que miraba debilitar suenemigo sin riesgos suyos.

Si en esos siglos de ignominia, en que un continente más pobladoy más rico que la España fue la víctima de las miras pérfidas delGabinete de Madrid, si éste pudo desde dos mil leguas de distancia, sinenormes fuerzas, mantener la América, desde el Nuevo México hastaMagallanes, bajo su duro despotismo, por qué entre la Nueva Gra-nada y Venezuela no podrá hacerse una sólida reunión? y aun, por quétoda la América meridional no se reuniría bajo un gobierno único ycentral?

Las lecciones de la experiencia no deben perderse para nosotros: elespectáculo que nos ofrece la Europa, inundada en sangre por restable-cer un equilibrio que siempre está perturbado, debe corregir nuestrapolítica, para salvarla de aquellos sangrientos escollos; si nuestro conti-nente se dividiera en naciones, como en la Europa; si guiaran algobierno americano los principios que generalmente dirigen los gabi-netes de aquélla, nosotros tendríamos también las oscilaciones delequilibrio continental y derramaríamos la sangre que ella inmola al piede este ídolo de su política.

Nosotros nos hallamos ahora en esas disposiciones felices, depoder dar sin obstáculo a nuestra política el giro más conveniente.V. E. a quien la América contempla victorioso, que es la admiración yla esperanza de sus conciudadanos, es el más propio para reunir losvotos de todas las regiones meridionales, y ocuparse desde ahora enhacer a un tiempo la gran Nación Americana y preservarla de los malesque ha traído a la Europa el sistema de sus naciones.

Después de ese equilibrio continental que busca la Europa dondemenos parece que debía hallarse, en el seno de la guerra y de lasagitaciones, hay otro equilibrio, Excmo. señor, el que importa anosotros, el equilibrio del universo. La ambición de las naciones deEuropa lleva el yugo de la esclavitud a las demás partes del mundo; ytodas estas partes del mundo debían tratar de establecer el equilibrioentre ellas y la Europa, para destruir la preponderancia de la última. Yollamo a éste, el equilibrio del universo, y debe entrar en los cálculos dela política americana.

Es menester que la fuerza de nuestra nación sea capaz de resistircon suceso las agresiones que pueda intentar la ambición europea; y estecoloso de poder, que debe oponerse a aquel otro coloso, no puedeformase, sino de la reunión de toda la América meridional, bajo un

84

Page 79: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

mismo cuerpo de nación, para que un solo gobierno central puedaaplicar sus grandes recursos a un solo fin, que es el de resistir con todosellos las tentativas exteriores, en tanto que interiormente multiplicán-dose la mutua cooperación de todos ellos, nos elevarán a la cumbre delpoder y la prosperidad.

Bolívar cerró el acto:

No he podido oír sin rubor, sin confusión llamarme héroe y tributarmetantas alabanzas. Exponer mi vida por la patria es un deber que hanllenado vuestros hermanos en el campo de batalla; sacrificar todo a lalibertad, lo habéis hecho vosotros mismos, compatriotas generosos.Los sentimientos que elevan mi alma, exaltan también la vuestra. LaProvidencia, y no mi heroísmo, han operado los prodigios que admi-ráis.

Luego que la demencia o la cobardía os entregaron a los tiranos,traté de alejarme de este país desgraciado. Yo vi al pérfido que os atraíaa sus lazos, para dejaros prendidos en las cadenas. Fui testigo de losprimeros sacrificios que dieron la alarma general. En mi indignaciónresolví perecer antes de despecho o de miseria en el último rincón delglobo, que presenciar las violencias del déspota. Huí de la tiranía, nopara ir a salvar mi vida, ni esconderla en la oscuridad, sino paraexponerla en el campo de batalla, en busca de la gloria y de la libertad.Cartagena al abrigo de las banderas republicanas fue elegida para miasilo. Este pueblo virtuoso defendía por las armas sus derechos contraun ejército opresor que había ya puesto el yugo a casi todo el estado.Algunos compatriotas nuestros y yo llegamos en el momento delconflicto, y cuando ya las tropas españolas se acercaban a la capital, y leintimaron la rendición, los esfuerzos de los caraqueños contribuyeronpoderosamente a arrojar a los enemigos de todos los puntos. La sed delos combates, el deseo de vindicar los ultrajes de mis compatriotas mehicieron entonces alistar en aquellos ejércitos, que consiguieron victo-rias señaladas. Nuevas expediciones se hicieron contra otras provincias.Ya en aquella época era yo en Cartagena coronel, inspector y consejero,y no obstante pedí servicio en calidad de simple voluntario bajo lasórdenes del coronel Labatut que marchaba contra Santa Marta. Yodesprecié los grados y distinciones. Aspiraba a un destino más honroso:derramar mi sangre por la libertad de mi patria.

85

Page 80: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

9

“Reflexiones sobre el estado actualde la Europa y de la América”

Éste es el título del artículo periodístico del Libertador publicado en laGaceta de Caracas el 28 de abril de 1824. Expone sus impresiones, enágil estilo, sobre los acontecimientos políticos de Europa y América.

Grandes acontecimientos se han sucedido en un pequeño período detiempo. Las potencias del norte que se hallaban dominadas o amenaza-das por el Mediodía de la Europa han sacudido el yugo, y hemos vistorenacer otra vez aquellos bellos monumentos de la política, que habíanentrado en la nulidad más completa porque un conquistador habíaquerido enseñorearse de la mitad del mundo. La Alemania; la Prusia, laSuiza, la Holanda, la España, las repúblicas de Venecia y Génova, losEstados Pontificios, todo o había desaparecido, o estaba bajo la influen-cia del conquistador. Un movimiento simultáneo de todas estas poten-cias, animado por la Gran Bretaña, y auxiliado poderosamente por elemperador de la Rusia que también se hallaba amenazado, ponen enacción grandes masas que resisten el choque del dominador, y por finen Leipzig se decide de la libertad e independencia de la Europa. Aaquel acontecimiento para siempre memorable, varía enteramente lapolítica de todos los gabinetes. Los mismos pueblos que renacían a lalibertad no creían poder disfrutarla; los políticos más profundos jamáspensaron que en un momento se destruyesen veinte años de conquistasgloriosas, y no obstante la Europa toda salió de aquel estado deentorpecimiento en que la habían sumergido las legiones del conquista-dor; los pueblos todos piensan en sus primeras instituciones políticas; yles vemos otra vez amar la gloria y aquella libertad e independencia quees el colmo de la felicidad humana. La España misma ha hechosacrificios gloriosos por esa libertad e independencia que defienden atanta costa los pueblos de la Europa, y que es también el objeto de losmás vivos deseos de todos los de la América española. La historiapresenta pocas veces el contraste singular que se advierte en la políticade la nación española: ella quiere ser libre; ella combate por suindependencia, y al mismo tiempo quiere imponer el yugo a unospueblos que defienden los mismos sagrados derechos. Sus impotentesesfuerzos se han estrellado en América, pues la justicia triunfa de uno alotro extremo del globo. No es éste el solo contraste que la Españapresenta a la faz de la Europa. Seis anos de combates sangrientos, desufrimientos extraordinarios, de devastaciones sin ejemplo, de alternati-

86

Page 81: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

vas de humillación y de gloria ha costado a esta nación un rey que ahorano quiere admitir en su territorio sino bajo de condiciones y pactosimposibles de verificarse. Ya no es aquel amado, aquel deseado Fer-nando, lleno de los más grandes encomios y que tanto preconizaba lanación española; ya es el cándido, ya es el imbécil Fernando, el quequiere someterla a la influencia francesa, ya los sarcasmos más degra-dantes se dirigen abiertamente contra el ídolo que adoraban. AquelFernando que ha resonado en la América en medio de los horrores delas acciones más sangrientas no es ya sino el amigo de Bonaparte y elinstrumento singular de dividir en facciones esa misma nación que hausado en la América de este talismán para hacer combatir unos puebloscontra otros.

Mas la época de las calamidades parece ha llegado a su término.Una perspectiva la más lisonjera se presenta a los ojos del observadorimparcial. Por más que resuenen los papeles públicos del continentede la Europa del restablecimiento de los Borbones en Francia, ni lapolítica, ni el bienestar de la Europa, ni la aptitud de Bonaparte, ni susrelaciones, pueden llevar a efecto este quimérico pensamiento. En uncongreso general se trata de los intereses del mundo. Los ministros delas naciones beligerantes activan sus trabajos; la paz es el objetosincero de los deseos de todas las potencias; los pueblos todos estáncansados de una guerra exterminadora, que ha esparcido la desolación,la miseria, el llanto, la orfandad en aquel continente desgraciado.Todos la piden, todos la desean, la Inglaterra misma se presta a lapacificación del mundo. Deben esperase resultados favorables. Mas enmedio de todas estas transacciones, cuál debe ser la suerte dela América? Este problema que en otro tiempo presentaba dificul-tades inmensas parece que no es ahora difícil de resolver. Echemos unaligera ojeada sobre la actual situación de la América española; presen-temos un ligero cuadro de sus generosos esfuerzos por conseguir suindependencia, y no será difícil hacer las deducciones más justas ylegítimas.

Si recorremos el vasto territorio americano desde la Nueva Españahasta las márgenes del Maule, las inaccesibles montañas del Arauco ytierras más meridionales de la América, encontraremos a los america-nos haciendo generosos esfuerzos y sacrificios sin número para obtenersu independencia. La sangre americana ha corrido en todas partesmezclada con la de sus opresores, y en millares de combates siempre lajusticia ha obtenido el triunfo sobre la tiranía. En Nueva España, en lasFloridas, en Venezuela, en las Provincias de la Plata, en el Perú, enChile, en Santa Fe, en la América toda, se ve triunfante el estandartetricolor, vencedores a los americanos, y en una aptitud guerrera, quedebe imponer a la España, y hacer conocer a las Naciones de la Europaque combaten por su libertad que el mismo fuego divino que las anima

Page 82: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

en su defensa se ha comunicado con el mismo entusiasmo hasta estosremotos países.

Las bellas y ricas producciones de este continente, sus minas, sustesoros, serían más tiempo la exclusiva posesión de una potenciamezquina, que con sus leyes bárbaras ha hecho la infelicidad durantetres centurias de tantos millones de habitantes? No es posible ni asíconviene a las miras de las potencias comerciales, que hallarán en los

pueblos de la América el cambio de sus manufacturas, la afección de sushabitantes y riquezas inmensas, que sin restricciones dictadas por lamás estúpida avaricia harán la felicidad de entrambos continentes.

Siglos enteros han estado preparando el feliz momento, la auroralisonjera que aparece ya para la América española. El término de unaguerra desastrosa parece que se acerca. ;Permitirán más tiempo laspotencias que tienen un interés en su conservación, la devastaciónhorrorosa de este continente? Tampoco es posible. La España misma alconocer su impotencia en la reducción de la América renunciará a suloca empresa; así ella economizará la sangre de tantas víctimas que hacetraspasar el Océano, para encontrar la muerte sobre el territorio deColombia. No, no existen ya las expediciones enviadas a. combatircontra la Nueva España, Buenos Aires y Venezuela. El mismo desas-troso resultado deben tener iguales tentativas. Qué debe pues dedu-cirse, en fin, de estos grandes acontecimientos, del prospecto actual dela Europa y de la aptitud guerrera de la América? Que es infalible la pazde la Europa, y la libertad e independencia del continente americano.

10

Consciente del valor de la comunicación socialUna lección de periodismo y ecuanimidad

De carta al médico y poeta Vicente Salias -redactor de la Gaceta deCaracas-, desde el cuartel general de San Mateo el 22 de febrero de1824.

Los números 39 y 40 de la gaceta que usted redacta contienen avisos,tanto oficiales como particulares, que han desagradado al Libertador;sobre todo, una nota y una carta de un extranjero, donde se ofendeinjustamente al Excmo. señor gobernador de la isla de Curazao,olvidando las consideraciones que se deben a un jefe de su carácter yperteneciente a la nación británica. Tal es la aserción que hace elextranjero en su carta de que ha auxiliado el gobernador a la plazasitiada de Puerto Cabello; y siendo usted tan severo para censurarle en

88

Page 83: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

sus notas, cuando hechos auténticos, aunque indebidamente, suminis-tran materias a las reflexiones de usted, parecía que la imparcialidad leobligaba del mismo modo a desmentir otras calumnias, cuya imposturase descubre a primera vista.

Acusar al gobernador de Curazao por haber saludado con salvas deartillería a Monteverde no sólo es impropio en los términos en que sehace, sino además es un absurdo chocante. Está mandado por todas lasordenanzas del mundo civilizado, y es el uso constante de las naciones,tributar a los jefes militares y ministros diplomáticos extranjeros, loshonores que les corresponden; y bajo este concepto no hizo más quellenar un deber de su autoridad el gobernador de Curazao, haciéndolosa un general español. Insinuar que en vez de estos honores debió serpuesto en un consejo de guerra por no haber defendido a Venezuela esuna represión que puede más bien dirigirse a la nación española, quedebe juzgar de la conducta de Monteverde, y no a un jefe de la naciónbritánica, que únicamente debe atender a las decoraciones de aquél.

Noticia usted igualmente al público que reunidos los mariscalesSoult y Suchet derrotaron a lord Wellington; aviso no menos destituidode fundamento que absurdo, por ser imposible esta reunión de losmariscales franceses, que a lo más podrían combinarse. Otros errores,otras impropiedades que se observan en los citados números iban adeterminar al Libertador a la supresión de un periódico, que conti-nuando así, más bien sirve a destruirnos por la opinión, que a hacerconocer el verdadero espíritu del gobierno. Sin embargo ha resuelto:1.° que no se inserte documento ninguno oficial en la gaceta, si no sedirige a usted por la secretaría de estado y con la orden especial que secomunique del Libertador para su publicación; 2.° que no se dennoticias relativas a la guerra en ambos continentes si no se extractan dedocumentos oficiales, y no sobre rumores o avisos particulares; 3.° quesobre los procedimientos de los demás gobiernos no se hagan reflexio-nes en la gaceta sin consultarlas antes con la misma secretaría de estado,para la previa aprobación del Libertador, no sea que se ataquen losmismos usos o principios que rigen a las naciones.

No es esto coartar la libertad de la prensa, ni disputar a usted elgobierno la propiedad de su gaceta. Le es permitido manifestar en ellalas opiniones que quiera, si no comprometen el crédito de la repúblicacon sátiras contra las autoridades de las naciones más respetables.

Estando además reducidos a este solo periódico, que nos haceconocer en el mundo, es menester que nos represente fielmente, no quenos desfigure con perjuicio de nuestra opinión.

89

Page 84: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

11

“Combatid y venceréis.Dios concede la victoria a la constancia”

Manifiesto de Carúpano, el 7 de septiembre de 1814, al salir deVenezuela para el segundo exilio en las Antillas. Es documento esencial,calificado por el propio Bolívar de “muy importante”. Contiene unaespecie de anticipo del Discurso de Angostura.

SIMÓ N BOLÍVAR,Libertador de Venezuela y General en Jefe de sus Ejércitos

A S U S C O N C I U D A D A N O S

Ciudadanos:

Infeliz del magistrado que autor de las calamidades o de los crímenes desu patria se ve forzado a defenderse ante el tribunal del pueblo de lasacusaciones que sus conciudadanos dirigen contra su conducta; pero esdichosísimo aquél que corriendo por entre los escollos de la guerra, dela política y de las desgracias públicas, preserva su honor intacto y sepresenta inocente a exigir de sus propios compañeros de infortunio unarecta decisión sobre su inculpabilidad.

Yo he sido elegido por la suerte de las armas para quebrantarvuestras cadenas, como también he sido, digámoslo así, el instrumentode que se ha valido la Providencia para colmar la medida de vuestrasaflicciones. Sí, yo os he traído la paz y la libertad, pero en pos de estosinestimables bienes han venido conmigo la guerra y la esclavitud. Lavictoria conducida por la justicia fue siempre nuestra guía hasta lasruinas de la ilustre capital de Caracas que arrancamos de manos de susopresores. Los guerreros granadinos no marchitaron jamás sus laurelesmientras combatieron contra los dominadores de Venezuela, y lossoldados caraqueños fueron coronados con igual fortuna contra losfieros españoles que intentaron de nuevo subyugarnos. Si el destinoinconstante hizo alternar la victoria entre los enemigos y nosotros, fuesólo en favor de pueblos americanos que una inconcebible demenciahizo tomar las armas para destruir a sus libertadores y restituir el cetroa sus tiranos. Así parece que el cielo para nuestra humillación y nuestragloria ha permitido que nuestros vencedores sean nuestros hermanos yque nuestros hermanos únicamente triunfen de nosotros. El ejércitolibertador exterminó las bandas enemigas, pero no ha podido ni debidoexterminar unos pueblos por cuya dicha ha lidiado en centenares de

90

Page 85: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

combates. No es justo destruir los hombres que no quieren ser libres,ni es libertad la que se goza bajo el imperio de las armas contra laopinión de seres fanáticos cuya depravación de espíritu les hace amar lascadenas como los vínculos sociales.

No os lamentéis, pues, sino de vuestros compatriotas que instiga-dos por los furores de la discordia os han sumergido en ese piélago decalamidades, cuyo aspecto sólo hace estremecer a la naturaleza, y quesería tan horroroso como imposible pintaros. Vuestros hermanos y nolos españoles han desgarrado vuestro seno, derramado vuestra sangre,incendiado vuestros hogares y os han condenado a la expatriación.Vuestros clamores deben dirigirse contra esos ciegos esclavos quepretenden ligaros a las cadenas que ellos mismos arrastran; y no osindignéis contra los mártires que fervorosos defensores de vuestralibertad han prodigado su sangre en todos los campos, han arrostradotodos los peligros y se han olvidado de sí mismos por salvaros de lamuerte o de la ignominia. Sed justos en vuestro dolor, como es justa lacausa que lo produce. Que vuestros tormentos no os enajenen, ciudada-nos, hasta el punto de considerar a vuestros protectores y amigos comoa cómplices de crímenes imaginarios, de intención o de omisión. Losdirectores de vuestros destinos no menos que sus cooperadores no hantenido otro designio que el de adquirir una perpetua felicidad paravosotros, que fuese para ellos una gloria inmortal. Mas, si los sucesosno han correspondido a sus miras, y si desastres sin ejemplo hanfrustrado empresa tan laudable, no ha sido por efecto de ineptitud ocobardía, ha sido, sí, la inevitable consecuencia de un proyecto agigan-tado superior a todas las fuerzas humanas. La destrucción de ungobierno, cuyo origen se pierde en la obscuridad de los tiempos, lasubversión de principios establecidos, la mutación de costumbres, eltrastorno de la opinión, y el establecimiento en fin de la libertad en unpaís de esclavos, es una obra tan imposible de ejecutar súbitamente queestá fuera del alcance de todo poder humano, por manera que nuestraexcusa de no haber obtenido lo que hemos deseado es inherente a lacausa que seguimos, porque así como la justicia justifica la audacia dehaberla emprendido, la imposibilidad de su adquisición califica lainsuficiencia de los medios. Es laudable, es noble y sublime vindicar lanaturaleza ultrajada por la tiranía; nada es comparable a la grandeza deeste acto y aun cuando la desolación y la muerte sean el premio de tanglorioso intento, no hay razón para condenarlo, porque no es loasequible lo que se debe hacer, sino aquello a que el derecho nosautoriza.

En vano, esfuerzos inauditos han logrado innumerables victorias,compradas al caro precio de la sangre de nuestros heroicos soldados.Un corto número de sucesos por parte de nuestros contrarios hadesplomado el edificio de nuestra gloria, estando la masa de los pueblos

Page 86: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

descarriada por el fanatismo religioso, y seducida por el incentivo de laanarquía devoradora. A la antorcha de la libertad, que nosotros hemospresentado a la América como la guía y el objeto de nuestros conatos,han opuesto nuestros enemigos la hacha incendiaria de la discordia, dela devastación y el grande estímulo de la usurpación de los honores y dela fortuna de los hombres envilecidos por el yugo de la servidumbre yembrutecidos por la doctrina de la superstición. Cómo podría prepon-derar la simple teoría de la filosofía política sin otros apoyos que laverdad y la naturaleza, contra el vicio armado con el desenfreno de lalicencia, sin más límites que su alcance y convertido de repente por unprestigio religioso en virtud política y en caridad cristiana? No, no sonlos hombres vulgares los que pueden calcular el eminente valor delremo de la libertad, para que lo prefieran a la ciega ambición y a la vilcodicia. De la decisión de esta importante cuestión ha dependidonuestra suerte: ella estaba en manos de nuestros compatriotas quepervertidos han fallado contra nosotros; de resto todo lo demás ha sidoconsiguiente a una determinación más deshonrosa que fatal, y que debeser más lamentable por su esencia que por sus resultados.

Es una estupidez maligna atribuir a los hombres públicos lasvicisitudes que el orden de las cosas produce en los estados, no estandoen la esfera de las facultades de un general o magistrado contener en unmomento de turbulencia, de choque y de divergencia de opiniones eltorrente de las pasiones humanas, que agitadas por el movimiento delas revoluciones se aumentan en razón de la fuerza que las resiste. Y auncuando graves errores o pasiones violentas en los jefes causen fre-cuentes perjuicios a la república, estos mismos perjuicios deben, sinembargo, apreciarse con equidad y buscar su origen en las causasprimitivas de todos los infortunios: la fragilidad de nuestra especie y elimperio de la suerte en todos los acontecimientos. El hombre es el débiljuguete de la fortuna, sobre la cual suele calcular con fundamentomuchas veces, sin poder contar con ella jamás, porque nuestra esfera noestá en contacto con la suya de un orden muy superior a la nuestra.Pretender que la política y la guerra marchen al grado de nuestrosproyectos, obrando a tientas con sólo la fuerza de nuestras intenciones,y auxiliados por los limitados medios que están a nuestro arbitrio, esquerer lograr los efectos de un poder divino por resortes humanos.

Yo, muy distante de tener la loca presunción de conceptuarmeinculpable de la catástrofe de mi patria, sufro, al contrario, el profundopesar de creerme el instrumento infausto de sus espantosas miserias;pero soy inocente porque mi conciencia no ha participado nunca delerror voluntario o de la malicia, aunque por otra parte haya obrado maly sin acierto. La convicción de mi inocencia me la persuade micorazón, y este testimonio es para mí el más auténtico, bien que parezcaun orgulloso delirio. He aquí la causa porque desdeñando responder a

Page 87: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

cada una de las acusaciones que de buena o mala fe se me puedan hacer,reservo este acto de justicia, que mi propia vindicta exige, paraejecutarlo ante un tribunal de sabios, que juzgarán con rectitud yciencia de mi conducta en mi misión a Venezuela. Del supremoCongreso de la Nueva Granada hablo, de este augusto cuerpo que meha enviado con sus tropas a auxiliaros como lo han hecho heroicamentehasta expirar todas en el campo del honor. Es justo y necesario que mivida pública se examine con esmero y se juzgue con imparcialidad. Esjusto y necesario que yo satisfaga a quienes haya ofendido, y que se meindemnice de los cargos erróneos a que no he sido acreedor. Este granjuicio debe ser pronunciado por el soberano a quien he servido: yo osaseguro que será tan solemne cuanto sea posible y que mis hechosserán comprobados por documentos irrefragables. Entonces sabréis sihe sido indigno de vuestra confianza, o si merezco el nombre deLibertador. Yo os juro, amados compatriotas, que este augusto títuloque vuestra gratitud me tributó cuando os vine a arrancar las cadenasno será vano. Yo os juro que, libertador o muerto, mereceré siempre elhonor que me habéis hecho; sin que haya potestad humana sobre latierra que detenga el curso que me he propuesto seguir hasta volversegundamente a libertaros,. por la senda del occidente, regada con tantasangre y adornada de tantos laureles. Esperad compatriotas al noble, alvirtuoso pueblo granadino que volará ansioso de recoger nuevostrofeos, a prestaros nuevos auxilios y a traeros de nuevo la libertad, siantes vuestro valor no la adquiriere. Sí, sí vuestras virtudes solas soncapaces de combatir con suceso contra esa multitud de frenéticos quedesconocen su propio interés y honor; pues jamás la libertad ha sidosubyugada por la tiranía. No comparéis vuestras fuerzas físicas con lasenemigas, porque no es comparable el espíritu con la materia. Vosotrossois hombres, ellos son bestias, vosotros sois libres, ellos esclavos.Combatid, pues, y venceréis. Dios concede la victoria a la constancia.

Carúpano, 7 de septiembre de 1814.

Bolívar

93

Page 88: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

12

“La libertad, único objeto digno del sacrificiode la vida de los hombres”

Vigorosa declaración de filosofia política en discurso pronunciado enBogotá, el 23 de enero de 1815, al instalarse el gobierno de las ProvinciasUnidas de la Nueva Granada.

Excmo. Señor Presidente de la Unión:

Por dos veces el desplomo de la República de Venezuela, mi patria, meha obligado a buscar un asilo en la Nueva Granada, que por dos veceshe contribuido a salvar. Cuando en la primera guerra civil, en mediodel tumulto de la anarquía y del espanto de una cruel invasión, que portodas partes amenazaba a estos estados, tuve la dicha de presentarmeentre mis hermanos, les pagué con mis servicios su hospitalidad.

Al presente, las nuevas catástrofes de Venezuela me conducenaquí, y encuentro el interior otra vez dañado con la divergencia. V. E.me hace el honor de destinarme a pacificar a Cundinamarca disidente, yla paz sucede a la división. Terrible! Terrible división! pero disculpa-ble.. . Permítame V. E. remontarme al origen lamentable de estacalamidad.

Creado el nuevo mundo bajo el fatal imperio de la servidumbre,no ha podido arrancarse las cadenas sin despedazar sus miembros;consecuencia inevitable de los vicios de la servilidad y de los errores deuna ignorancia tanto más tenaz, cuanto que es hija de la supersticiónmás fanática que ha cubierto de oprobio al linaje humano. La tiranía yla inquisición habían degradado a la clase de los brutos a los americanosy a los hijos de los conquistadores, que les trajeron estos funestospresentes. Así qué razón ilustrada, qué virtud política, qué moral purapodríamos hallar entre nosotros para romper el cetro de la opresión ysubstituir de repente el de las leyes, que debían establecer los derechos eimponer los deberes a los ciudadanos en la nueva república? El hábito ala obediencia, sin examen, había entorpecido de tal manera nuestroespíritu, que no era posible descubriésemos la verdad, ni encontráse-mos el bien. Ceder a la fuerza fue siempre nuestro solo deber; como elcrimen mayor buscar la justicia y conocer los derechos de la naturalezay de los hombres. Especular sobre las ciencias, calcular sobre lo útil ypracticar la virtud eran atentados de lesa tiranía, más fáciles de cometerque de obtener un perdón. La mancilla, la expatriación’ y la muerteseguían con frecuencia a los talentos, que los ilustres desgraciadossolían adquirir para su ruina, no obstante el cúmulo de obstáculos queoponían a las luces los dominadores de este hemisferio.

94

Page 89: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Jamás, señor, jamás nación del mundo, dotada inmensamente deextensión, riqueza y población ha experimentado el ignominioso pupi-laje de tres siglos, pasados en una absoluta abstracción; privada delcomercio del universo, de la contemplación de la política y sumergidaen un caos de tinieblas. Todos los pueblos de la tierra se han gobernadopor sí mismos con despotismo o con libertad; sistemas más o menosjustos han regido a las grandes sociedades; pero siempre por susciudadanos, refundiendo el bien o el mal en ellos mismos. La gloria o eldeshonor ha refluido sobre sus hijos; mas nosotros hemos dirigido losdestinos de nuestra patria? La esclavitud misma ha sido ejercida pornosotros? Ni aun el ser instrumentos de la opresión nos ha sidoconcedido. Todo era extranjero en este suelo. Religión, leyes, costum-bres, alimentos, vestidos eran de Europa, y nada debíamos ni aunimitar. Como seres pasivos, nuestro destino se limitaba a llevar dócil-mente el freno que con violencia y rigor manejaban nuestros dueños.Igualados a las bestias salvajes, la irresistible fuerza de la naturaleza nomás ha sido capaz de reponernos en la esfera de los hombres; y aunquetodavía débiles en razón, hemos ya dado principio a los ensayos de lacarrera a que somos predestinados.

Sí, Excmo. señor, hemos subido a representar en el teatro políticola grande escena que nos corresponde, como poseedores de la mitad delmundo. Un vasto campo se presenta delante de nosotros, que nosconvida a ocuparnos de nuestros intereses; y bien que nuestros prime-ros pasos hayan sido tan trémulos como los de un infante, la rigurosaescuela de los trágicos sucesos ha afirmado nuestra marcha habiendoaprendido con las caídas dónde están los abismos; y con los naufragios,dónde están los escollos. Nuestra empresa ha sido a tientas porqueéramos ciegos; los golpes nos han abierto los ojos; y con la experienciay con la vista que hemos adquirido por qué no hemos de salvar lospeligros de la guerra y de la política, y alcanzar la libertad y la gloriaque nos esperan por galardón de nuestros sacrificios? Estos no hanpodido ser evitables, porque para el logro del triunfo siempre ha sidoindispensable pasar por la senda de los sacrificios. La América enteraestá teñida con la sangre americana. Ella era necesaria para lavar unmancha tan envejecida! Es la primera que se vierte con honor en estedesgraciado continente, siempre teatro de desolaciones, pero nunca delibertad. Méjico, Venezuela, Nueva Granada, Quito, Chile, BuenosAires y el Perú presentan heroicos espectáculos de triunfos; por todaspartes corre en el nuevo mundo la sangre de sus hijos, y ahora sí por lalibertad, único objeto digno del sacrificio de la vida de los hombres.Por la libertad, digo, está erizada de armas la tierra, que poco ha sufríael reposo de los esclavos; y si desastres horrorosos han afligido las másbellas provincias y aun repúblicas enteras, ha sido por culpa nuestra, yno por el poder de nuestros enemigos.

95

Page 90: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Nuestra impericia, Excmo. señor, en todos los departamentos delgobierno ha agotado nuestros elementos y aumentado considerable-mente los recursos precarios de nuestros enemigos, que prevaliéndosede nuestras faltas han sembrado la semilla venenosa de nuestra discor-dia para anonadar estas regiones que han perdido la esperanza deposeer. Ellos han aniquilado la raza de los primeros habitadores parasubstituir la suya y dominarla. . . Ahora hacen perecer hasta lo inani-mado, porque en la impotencia de conquistar, ejercen su maleficenciainnata de destruir. Pretenden convertir la América en desierto ysoledad; se han propuesto nuestro exterminio, pero sin exponer susalud, porque sus armas son las viles pasiones, que nos han trasmitidopor herencia, la cruel ambición, la miserable codicia, las preocupa-ciones religiosas y los errores políticos. De este modo, sin aventurarellos su suerte, deciden de la nuestra.

A pesar de tan mortíferos enemigos, contemplamos la bella repú-blica de Buenos Aires, subyugando al reino del Perú; Méjico preponde-rante contra los tiranos; Chile triunfante; el oriente de Venezuela libre,y la Nueva Granada tranquila, unida y en actitud amenazadora.

Hoy V. E. pone el complemento a sus ímprobos trabajos, insta-lando en esta capital el gobierno paternal de la Nueva Granada yrecibiendo por recompensa de su constancia, rectitud y sabiduría lasbendiciones de los pueblos, que deben a V. E. la paz doméstica y laseguridad externa.

Por la justicia de los principios que V. E. ha adoptado y por lamoderación de una conducta sin mancha, V. E. no ha vencido, haganado a sus enemigos internos, que han experimentado más beneficiosde sus contrarios, que esperanzas tenían en sus amigos. Deseaban éstoscomponer una república aislada en medio de otras muchas, que veíancon horror una separación que dividiendo el corazón del resto delcuerpo le da muerte a todo. V. E. colma los votos de sus enemigos,haciéndolos entrar en la gran familia, que ligada con los vínculosfraternales es más fuerte que nuestros opresores.

V. E. ha dirigido sus fuerzas y miras en todos sentidos: el norte esreforzado por la división del general Urdaneta; Casanare espera lossocorros que lleva el comandante Lara; Popayán se verá auxiliarsuperabundantemente; Santa Marta y Maracaibo serán libertadas por elsoberbio ejército de venezolanos y granadinos que V. E. me ha hechoel honor de confiar. Este ejército pasará con una mano bienhechorarompiendo cuantos hierros opriman con su peso y oprobio a todos losamericanos que haya en el norte y sur de la América meridional. Yo lojuro por el honor que adorna a los libertadores de la Nueva Granada yVenezuela; y ofrezco a V. E. mi vida, como el último tributo de migratitud, o hacer tremolar las banderas granadinas hasta los másremotos confines de la tiranía. Mientras tanto V. E. se presenta a la faz

96

Page 91: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

del mundo, en la majestuosa actitud de una nación respetable por lasolidez de su constitución, que formando, de todas las partes antesdislocadas, un cuerpo político, pueda ser reconocido como tal por losestados extranjeros, que no debieron tratar con esta república, que eraun monstruo, por carecer de fuerza la autoridad legítima, como delegitimidad el poder efectivo de las provincias. Representadas éstas porsí mismas eran hermanas divididas, que no componían una familia.

Aunque mi celo importuno me ha extraviado en este discurso, quesólo debía ser inaugural, continuaré todavía mi falta atreviéndome aañadir: que el establecimiento de los tribunales supremos, que sininterpretar las leyes, y sometiéndose ciegamente a ellas en la distribu-ción de la justicia, aseguran el honor, la vida y la fortuna de losciudadanos, me lisonjeo, será uno de los más bellos monumentos queV. E. erigirá a su gloria. La justicia es la reina de las virtudesrepublicanas, y con ellas se sostienen la igualdad y la libertad que sonlas columnas de este edificio.

La organización del erario nacional que exige de los ciudadanosuna mínima parte de su fortuna privada, para aumentar la pública, quealimenta a la sociedad entera, ocupa en el ánimo de V. E. un lugar muypreeminente; porque sin rentas no hay ejércitos, y sin ejércitos perece elhonor, al cual hemos consagrado ya innumerables sacrificios, porconservarlo en el esplendor que le han adquirido la vida de tantosmártires y la privación de tantos bienes.

Pero la opinión pública, Excmo. señor, es el objeto más sagradoque llama la alta atención de V. E.; ella ha menester la protección de ungobierno ilustrado, que conoce que la opinión es la fuente de los másimportantes acontecimientos. Por la opinión ha preservado Atenas sulibertad de la Asia entera. Por la opinión, los compañeros de Rómuloconquistaron el universo; y por la opinión influye Inglaterra en todoslos gobiernos, dominando con el triunfo de Neptuno la inmensaextensión de los mares.

Persuadamos a los pueblos que el cielo nos ha dado la libertad parala conservación de la virtud y la obtención de la patria de los justos.Que esta mitad del globo pertenece a quien Dios hizo nacer en su suelo,y no a los tránsfugas trasatlánticos, que por escapar de los golpes de latiranía vienen a establecerla sobre nuestras ruinas. Hagamos que elamor ligue con un lazo universal a los hijos del hemisferio de Colón, yque el odio, la venganza y la guerra se alejen de nuestro seno y se llevena las fronteras a emplearlos contra quienes únicamente son justos, asaber, contra los tiranos.

Excmo. señor: la guerra civil ha terminado; sobre ella se haelevado la paz doméstica; los ciudadanos reposan tranquilos bajo losauspicios de un gobierno justo y legal y nuestros enemigos tiemblan.

97

Page 92: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

13

Visión global y profética sobre América Latina

Obra maestra de la producción bolivariana, la Carta de Jamaica fue escritaen contestación a la solicitud de Mr. Henry Cullen, en Kingston, el 6 deseptiembre de 1825. Publicada en The Jamaica Quarterly Journal andLiterary Gazette, vol. III, n.’ 1, julio de 1818, sin indicar desti-natario.

Me apresuro a contestar la carta de 29 del mes pasado que Vd. me hizoel honor de dirigirme, y que yo recibí con la mayor satisfacción.

Sensible, como debo, al interés que Vd. ha querido tomar por lasuerte de mi patria, afligiéndose con ella por los tormentos que padece,desde su descubrimiento hasta estos últimos períodos, por parte de susdestructores los españoles, no siento menos el comprometimiento enque me ponen las solícitas demandas que Vd. me hace sobre los objetosmás importantes de la política americana. Así, me encuentro en unconflicto, entre el deseo de corresponder a la confianza con que Vd. mefavorece, y el impedimento de satisfacerla, tanto por la falta dedocumentos y libros, cuanto por los limitados conocimientos queposeo de un país tan inmenso, variado y desconocido, como el NuevoMundo.

En mi opinión es imposible responder a las preguntas con que Vd.me ha honrado. El mismo barón de Humboldt, con su universalidad deconocimientos teóricos y prácticos, apenas lo haría con exactitud, porque aunque una parte de la estadística y revolución de América esconocida, me atrevo a asegurar que la mayor está cubierta de tinieblas,y, por consecuencia, sólo se pueden ofrecer conjeturas más o menosaproximadas, sobre todo en lo relativo a la suerte futura y a losverdaderos proyectos de los americanos; pues cuantas combinacionessuministra la historia de las naciones, de otras tantas es susceptible lanuestra por su posición física, por las vicisitudes de la guerra y por loscálculos de la política.

Como me conceptúo obligado a prestar atención a la apreciablecarta de Vd., no menos que a sus filantrópicas miras, me animo adirigirle estas líneas, en las cuales ciertamente no hallará Vd. las ideasluminosas que desea, mas sí las ingenuas expresiones de mis pensamien-tos.

“Tres siglos ha, dice Vd., que empezaron las barbaridades que losespañoles cometieron en el grande hemisferio de Colón. ” Barbaridadesque la presente edad ha rechazado como fabulosas, porque parecen

98

Page 93: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

superiores a la perversidad humana; y jamás serían creídas por loscríticos modernos, si, constantes y repetidos documentos, no testifica-sen estas infaustas verdades. El filantrópico obispo de Chiapas, elapóstol de la América, Las Casas, ha dejado a la posteridad una breverelación de ellas, extractadas de las sumarias que siguieron en Sevilla alos conquistadores, con el testimonio de cuantas personas respetableshabía entonces en el Nuevo Mundo, y con los procesos mismos que lostiranos se hicieron entre sí, como consta por los más sublimes historia-dores de aquel tiempo. Todos los imparciales han hecho justicia al celo,verdad y virtudes de aquel amigo de la humanidad, que con tantofervor y firmeza, denunció ante su gobierno y contemporáneos losactos más horrorosos de un frenesí sanguinario.

Con cuánta emoción de gratitud leo el pasaje de la carta de Vd. enque me dice: “que espera que los sucesos que siguieron entonces a lasarmas españolas, acompañen ahora a las de sus contrarios, los muyoprimidos americanos meridionales”! Yo tomo esta esperanza por unapredicción, si la justicia decide las contiendas de los hombres. El sucesocoronará nuestros esfuerzos porque el destino de la América se ha fijadoirrevocablemente; el lazo que la unía a la España está cortado: laopinión era toda su fuerza; por ella se estrechaban mutuamente laspartes de aquella inmensa monarquía; lo que antes las enlazaba, ya lasdivide; más grande es el odio que nos ha inspirado la Península, que elmar que nos separa de ella; menos dificil es unir los dos continentes,que reconciliar los espíritus de ambos países. El hábito a la obediencia;un comercio de intereses, de luces, de religión; una recíproca benevolen-cia; una tierna solicitud por la cuna y la gloria de nuestros padres; enfin, todo lo que formaba nuestra esperanza, nos venía de España. Deaquí nacía un principio de adhesión que parecía eterno, no obstante quela conducta de nuestros dominadores relajaba esta simpatía, o, pormejor decir, este apego forzado por el imperio de la dominación. Alpresente sucede lo contrario: la muerte, el deshonor, cuanto es nocivo,nos amenaza y tememos; todo lo sufrimos de esa desnaturalizadamadrastra. El velo se ha rasgado, ya hemos visto la luz, y se nos quierevolver a las tinieblas; se han roto las cadenas; ya hemos sido libres, ynuestros enemigos pretenden de nuevo esclavizarnos. Por lo tanto, laAmérica combate con despecho; y rara vez la desesperación no haarrastrado tras sí la victoria.

Porque los sucesos hayan sido parciales y alternados, no debemosdesconfiar de la fortuna. En unas partes triunfan los independientesmientras que los tiranos en lugares diferentes obtienen sus ventajas, ycuál es el resultado final? no está el Nuevo Mundo entero, conmo-vido y armado para su defensa? Echemos una ojeada y observaremosuna lucha simultánea en la inmensa extensión de este hemisferio.

El belicoso estado de las provincias del Río de la Plata ha purgado

99

Page 94: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

su territorio y conducido sus armas vencedoras al Alto Perú, conmo-viendo a Arequipa e inquietando a los realistas de Lima. Cerca de unmillón de habitantes disfruta allí de su libertad.

El reino de Chile, poblado de 800000 almas, está lidiando contrasus enemigos que pretenden dominarlo; pero en vano, porque los queantes pusieron un término a sus conquistas, los indómitos y libresaraucanos, son sus vecinos y compatriotas; y su ejemplo sublime essuficiente para probarles que el pueblo que ama su independencia porfin la logra.

El virreinato del Perú, cuya población asciende a millón y mediode habitantes, es sin duda el más sumiso y al que más sacrificios se lehan arrancado para la causa del Rey; y bien que sean vanas las relacionesconcernientes a aquella porción de América, es indudable que ni estátranquila, ni es capaz de oponerse al torrente que amenaza a las más desus provincias.

La Nueva Granada que es, por decirlo así, el corazón de laAmérica, obedece a un gobierno general, exceptuando el reino deQuito, que con la mayor dificultad contienen sus enemigos por serfuertemente adicto a la causa de su patria, y las provincias de Panamá ySanta Marta que sufren, no sin dolor, la tiranía de sus señores. Dosmillones y medio de habitantes están esparcidos en aquel territorio, queactualmente defienden contra el ejército español bajo el general Mori-llo, que es verosímil sucumba delante de la inexpugnable plaza deCartagena. Mas si la tomare será a costa de grandes pérdidas, y desdeluego carecerá de fuerzas bastantes para subyugar a los morigerados ybravos moradores del interior.

En cuanto a la heroica y desdichada Venezuela, sus acontecimien-tos han sido tan rápidos, y sus devastaciones tales, que casi la hanreducido a una absoluta indigencia y a una soledad espantosa; noobstante que era uno de los más bellos países de cuantos hacían elorgullo de la América. Sus tiranos gobiernan un desierto; y sólooprimen a tristes restos que, escapados de la muerte, alimentan unaprecaria existencia: algunas mujeres, niños y ancianos son los quequedan. Los más de los hombres han perecido por no ser esclavos, y losque viven, combaten con furor en los campos y en los pueblosinternos, hasta expirar o arrojar al mar a los que, insaciables de sangre yde crímenes, rivalizan con los primeros monstruos que hicieron desapa-recer de la América a su raza primitiva. Cerca de un millón dehabitantes se contaba en Venezuela; y, sin exageración, se puedeasegurar que una cuarta parte ha sido sacrificada por la tierra, la espada,el hambre, la peste, las peregrinaciones; excepto el terremoto, todoresultado de la guerra.

En Nueva España había en 1808, según nos refiere el barón deHumboldt, 7 800 000 almas con inclusión de Guatemala. Desde aquella

100

Page 95: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

época, la insurrección que ha agitado a casi todas sus provincias hahecho disminuir sensiblemente aquel cómputo, que parece exacto; puesmás de un millón de hombres ha perecido, como lo podrá Vd. ver en laexposición de Mr. Walton, que describe con fidelidad los sanguinarioscrímenes cometidos en aquel opulento imperio. Allí la lucha se man-tiene a fuerza de sacrificios humanos y de todas especies, pues nadaahorran los españoles con tal que logren someter a los que han tenido ladesgracia de nacer en este suelo, que parece destinado a empaparse conla sangre de sus hijos. A pesar de todo, los mejicanos serán libresporque han abrazado el partido de la patria, con la resolución de vengara sus antepasados o seguirlos al sepulcro. Ya ellos dicen con Raynal:llegó el tiempo, en fin, de pagar a los españoles suplicios con suplicios yde ahogar esa raza de exterminadores en su sangre o en el mar.

Las islas de Puerto Rico y Cuba que, entre ambas, pueden formaruna población de 700 a 800 000 almas, son las que más tranquilamenteposeen los españoles, porque están fuera del contacto de los indepen-dientes. Mas no son americanos estos insulares? no son vejados? nodesean su bienestar?

Este cuadro representa una escala militar de 2 000 leguas delongitud y 900 de latitud en su mayor extensión, en que 16 000 000 deamericanos defienden sus derechos o están oprimidos por la naciónespañola, que aunque fue, en algun tiempo, el más vasto imperio delmundo, sus restos son ahora impotentes para dominar el nuevo hemis-ferio y hasta para mantenerse en el antiguo. Y la Europa civilizada,comerciante y amante de la libertad, permite que una vieja serpiente,por solo satisfacer su saña envenenada, devore la más bella parte denuestro globo? Qué! Está la Europa sorda al clamor de su propiointerés? ¿No tiene ya ojos para ver la justicia? Tanto se ha endurecidopara. ser de este modo insensible? Estas cuestiones cuanto más lasmedito, más me confunden: llego a pensar que se aspira a que desapa-rezca la América; pero es imposible, porque toda la Europa no esEspaña. Qué demencia la de nuestra enemiga, pretender reconquistarla América sin marina, sin tesoro y casi sin soldados! pues los quetiene apenas son bastantes para retener a su propio pueblo en unaviolenta obediencia y defenderse de sus vecinos. Por otra parte, podráesta nación hacer el comercio exclusivo de la mitad del mundo, sinmanufacturas, sin producciones territoriales, sin artes, sin ciencias, sinpolítica? Lograda que fuese esta loca empresa; y suponiendo más aún,lograda la pacificación, los hijos de los actuales americanos, unidos conlos de los europeos reconquistadores, no volverían a formar dentro deveinte años los mismos patrióticos designios que ahora se estáncombatiendo?

101

Page 96: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

La conveniencia general de la libertad americana

La Europa haría un bien a la España en disuadirla de su obstinadatemeridad; porque a lo menos le ahorraría los gastos que expende, y lasangre que derrama; a fin de que, fijando su atención en sus propiosrecintos, fundase su prosperidad y poder sobre bases más sólidas quelas de inciertas conquistas, un comercio precario y exacciones violentasen pueblos remotos, enemigos y poderosos. La Europa misma pormiras de sana política debería haber preparado y ejecutado el proyectode la independencia americana; no sólo porque el equilibrio del mundoasí lo exige; sino porque éste es el medio legítimo y seguro deadquirirse establecimientos ultramarinos de comercio. La Europa queno se halla agitada por las violentas pasiones de la venganza, ambición ycodicia, como la España, parece que estaba autorizada por todas lasleyes de la equidad a ilustrarla sobre sus bien entendidos intereses.

Cuantos escritores han tratado la materia se acuerdan en esta parte.En consecuencia, nosotros esperábamos con razón que todas las nacio-nes cultas se apresurarían a auxiliarnos, para que adquiriésemos un biencuyas ventajas son recíprocas a entrambos hemisferios. Sin embargo,cuán frustradas esperanzas! No sólo los europeos, pero hasta nuestroshermanos del norte se han mantenido inmóviles espectadores de estacontienda, que por su esencia es la más justa, y por sus resultados lamás bella e importante de cuantas se han suscitado en los siglosantiguos y modernos, porque íhasta dónde se puede calcular la trascen-dencia de la libertad del hemisferio de Colón?

“La felonía con que Bonaparte, dice Vd., prendió a Carlos IV y aFernando VII, reyes de esta nación, que tres siglos ha aprisionó contraición a dos monarcas de la América meridional, es un acto muymanifiesto de la retribución divina, y al mismo tiempo una prueba deque Dios sostiene la justa causa de los americanos y les concederá suindependencia. ”

Parece que Vd. quiere aludir al monarca de Méjico Moctezuma,preso por Cortés y muerto, según Herrera, por él mismo, aunque Solísdice que por el pueblo; y a Atahualpa, Inca del Perú, destruido porFrancisco Pizarro y Diego de Almagro. Existe tal diferencia entre lasuerte de los reyes españoles y de los reyes americanos, que no admitecomparación; los primeros son tratados con dignidad, conservados, yal fin recobran su libertad y trono; mientras que los últimos sufrentormentos inauditos y los vilipendios más vergonzosos. Si a Guati-mozín, sucesor de Moctezuma, se le trata como emperador y le ponenla corona, fue por irrisión y no por respeto; para que experimentaseeste escarnio antes que las torturas. Iguales a la suerte de este monarca

102

Page 97: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

fueron las del rey de Michoacán, Catzontzín, el Zipa de Bogotá ycuantos toquis, imas, zipas, ulmenes, caciques y demás dignidadesindianas, sucumbieron al poder español. El suceso de Fernando VII esmás semejante al que tuvo lugar en Chile en 1535, con el ulmén deCopiapó, entonces reinante en aquella comarca. El español Almagropretextó, como Bonaparte, tomar partido por la causa del legítimosoberano y, en consecuencia, llama al usurpador, como Fernando lo eraen España; aparenta restituir al legítimo a sus estados, y termina porencadenar y echar a las llamas al infeliz ulmén, sin querer ni aun oír sudefensa. Éste es el ejemplo de Fernando VII con su usurpador. Losreyes europeos sólo padecen destierro; el ulmén de Chile termina suvida de un modo atroz.

“Después de algunos meses, añade Vd., he hecho muchas reflexio-nes sobre la situación de los americanos y sus esperanzas futuras; tomogrande interés en sus sucesos, pero me faltan muchos informes relati-vos a su estado actual, y a lo que ellos aspiran; deseo infinitamentesaber la política de cada provincia, como también su población, sidesean repúblicas o monarquías, si formarán una gran república o unagran monarquía? Toda noticia de esta especie que Vd. pueda darme, oindicarme las fuentes a que debo ocurrir, la estimaré como un favormuy particular. ”

Siempre las almas generosas se interesan en la suerte de un puebloque se esmera por recobrar los derechos con que el Creador y lanaturaleza lo han dotado; y es necesario estar bien fascinado por el erroro por las pasiones para no abrigar esta noble sensación: Vd. ha pensadoen mi país y se interesa por él; este acto de benevolencia me inspira elmás vivo reconocimiento.

He dicho la población que se calcula por datos más o menosexactos, que mil circunstancias hacen fallidos sin que sea fácil remediaresta inexactitud, porque los más de los moradores tienen habitacionescampestres y muchas veces errantes, siendo labradores, pastores, nóma-des, perdidos en medio de los espesos e inmensos bosques, llanurassolitarias y aisladas entre lagos y ríos caudalosos. Quién será capaz deformar una estadística completa de semejantes comarcas? Además lostributos que pagan los indígenas; las penalidades de los esclavos; lasprimicias, diezmos y derechos que pesan sobre los labradores, y otrosaccidentes alejan de sus hogares a los pobres americanos. Esto es sinhacer mención de la guerra de exterminio que ya ha segado cerca de unoctavo de la población, y ha ahuyentado una gran parte; pues entonceslas dificultades son insuperables y el empadronamiento vendrá a redu-cirse a la mitad del verdadero censo.

Todavía es más difícil presentir la suerte futura del Nuevo Mundo,establecer principios sobre su política, y casi profetizar la naturaleza delgobierno que llegará a adoptar. Toda idea relativa al porvenir de este

103

Page 98: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

país me parece aventurada. ¿Se pudo prever cuando el género humanose hallaba en su infancia, rodeado de tanta incertidumbre, ignorancia yerror, cuál sería el régimen que abrazaría para su conservación? Quiénse habría atrevido a decir, tal nación será república o monarquía, éstaserá pequeña, aquella grande? En mi concepto, ésta es la imagen denuestra situación. Nosotros somos un pequeño género humano; posee-mos un mundo aparte; cercado por dilatados mares, nuevo en casitodas las artes y ciencias aunque en cierto modo viejo en los usos de lasociedad civil. Yo considero el estado actual de la América comocuando desplomado el Imperio Romano cada desmembración formóun sistema político, conforme a sus intereses y situación o siguiendo laambición particular de algunos jefes, familias o corporaciones; con estanotable diferencia, que aquellos miembros dispersos volvían a restable-cer sus antiguas naciones con las alteraciones que exigían las cosas olos sucesos; mas nosotros, que apenas conservamos vestigios de lo queen otro tiempo fue, y que por otra parte no somos indios ni europeos,sino una especie media entre los legítimos propietarios del país y losusurpadores españoles: en suma, siendo nosotros americanos por naci-miento y nuestros derechos los de Europa, tenemos que disputar éstosa los del país y que mantenernos en él contra la oposición de losinvasores; así nos hallamos en el caso más extraordinario y complicado;no obstante que es una especie de adivinación indicar cuál será elresultado de la línea de política que la América siga, me atrevo aaventurar algunas conjeturas, que, desde luego, caracterizo de arbi-trarias, dictadas por un deseo racional, y no por un raciocinioprobable.

La posición de los moradores del hemisferio americano ha sido porsiglos puramente pasiva: su existencia política era nula. Nosotrosestábamos en un grado todavía más abajo de la servidumbre, y por lomismo con más dificultad para elevarnos al goce de la libertad.Permítame Vd. estas consideraciones para establecer la cuestión. Losestados son esclavos por la naturaleza de su constitución o por el abusode ella. Luego. un pueblo es esclavo cuando el gobierno, por su esenciao por sus vicios, huella y usurpa los derechos del ciudadano o súbdito.Aplicando estos principios, hallaremos que la América no sólo estabaprivada de su libertad sino también de la tiranía activa y dominante. Meexplicaré. En las administraciones absolutas no se reconocen límites enel ejercicio de las facultades gubernativas: la voluntad del gran sultán,kan, bey y demás soberanos despóticos, es la ley suprema y ésta es casiarbitrariamente ejecutada por los bajáes, kanes y sátrapas subalternosde la Turquía y Persia, que tienen organizada una opresión de queparticipan los súbditos en razón de la autoridad que se les confia. Aellos está encargada la administración civil, militar y política, de rentasy la religión. Pero, al fin son persas los jefes de Ispahán, son turcos los

104

Page 99: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

visires del gran señor, son tártaros los sultanes de la Tartaria. La Chinano envía a buscar mandatarios militares y letrados al país de GengisKan, que la conquistó, a pesar de que los actuales chinos son descen-dientes directos de los subyugados por los ascendientes de los presentestártaros.

Cuán diferente era entre nosotros! Se nos vejaba con una conductaque, además de privarnos de los derechos que nos correspondían, nosdejaba en una especie de infancia permanente con respecto a lastransacciones públicas. Si hubiésemos siquiera manejado nuestros asun-tos domésticos en nuestra administración interior, conoceríamos elcurso de los negocios públicos y su mecanismo, y gozaríamos tambiénde la consideración personal que impone a los ojos del pueblo ciertorespeto maquinal que es tan necesario conservar en las revoluciones. Heaquí por qué he dicho que estábamos privados hasta de la tiranía activa,pues que no nos era permitido ejercer sus funciones.

La real situación colonial

Los americanos, en el sistema español que está en vigor, y quizá conmayor fuerza que nunca, no ocupan otro lugar en la sociedad que el desiervos propios para el trabajo, y cuando más, el de simples consumi-dores; y aun esta parte coartada con restricciones chocantes: tales sonlas prohibiciones del cultivo de frutos de Europa, el estanco de lasproducciones que el rey monopoliza, el impedimento de las fábricasque la misma Península no posee, los privilegios exclusivos del comer-cio hasta de los objetos de primera necesidad, las trabas entre provin-cias y provincias americanas, para que no se traten, entiendan, ninegocien; en fin, quiere Vd. saber cuál era nuestro destino? los campospara cultivar el añil, la grana, el café, la caña, el cacao y el algodón, lasllanuras solitarias para criar ganados, los desiertos para cazar las bestiasferoces, las entrañas de la tierra para excavar el oro que no puede saciara esa nación avarienta.

Tan negativo era nuestro estado que no encuentro semejante enninguna otra asociación civilizada, por más que recorro la serie delas edades y la política de todas las naciones. Pretender que un país tanfelizmente constituido, extenso, rico y populoso, sea meramentepasivo, no es un ultraje y una violación de los derechos de lahumanidad?

Estábamos como acabo de exponer, abstraídos, y digámoslo así,ausentes del universo en cuanto es relativo a la ciencia del gobierno yadministración del estado. Jamás éramos virreyes, ni gobernadores,sino por causas muy extraordinarias; arzobispos y obispos pocas veces;diplomáticos nunca; militares, sólo en calidad de subalternos; nobles,

105

Page 100: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

sin privilegios reales; no éramos, en fin, ni magistrados ni financistas, ycasi ni aun comerciantes; todo en contravención directa de nuestrasinstituciones.

El emperador Carlos V formó un pacto con los descubridores,conquistadores y pobladores de América, que, como dice Guerra, esnuestro contrato social. Los reyes de España convinieron solemne-mente con ellos que lo ejecutasen por su cuenta y riesgo, prohibiéndo-seles hacerlo a costa de la real hacienda, y por esta razón se les concedíaque fuesen señores de la tierra, que organizasen la administración yejerciesen la judicatura en apelación, con otras muchas exenciones yprivilegios que sería prolijo detallar. El rey se comprometió a noenajenar jamás las provincias americanas, como que a él no tocaba otrajurisdicción que la del alto dominio, siendo una especie de propiedadfeudal la que allí tenían los conquistadores para sí y sus descendientes.Al mismo tiempo existen leyes expresas que favorecen casi exclusiva-mente a los naturales del país originarios de España en cuanto a losempleos civiles, eclesiásticos y de rentas. Por manera que, con unaviolación manifiesta de las leyes y de los pactos subsistentes, se hanvisto despojar aquellos naturales de la autoridad constitucional que lesdaba su código.

De cuanto he referido será fácil colegir que la América no estabapreparada para desprenderse de la metrópoli, como súbitamente suce-dió, por el efecto de las ilegítimas cesiones de Bayona, y por la inicuaguerra que la regencia nos declaró, sin derecho alguno para ello, nosólo por la falta de justicia, sino también de legitimidad. Sobre lanaturaleza de los gobiernos españoles, sus decretos conminatorios yhostiles, y el curso entero de su desesperada conducta hay escritos, delmayor mérito, en el periódico El Español cuyo autor es el señor Blanco;y estando allí esta parte de nuestra historia muy bien tratada, me limitoa indicarlo.

Los americanos han subido de repente y sin los conocimientosprevios; y, lo que es más sensible, sin la práctica de los negociospúblicos, a representar en la escena del mundo las eminentes dignidadesde legisladores, magistrados, administradores del erario, diplomáticos,generales, y cuantas autoridades supremas y subalternas forman lajerarquía de un estado organizado con regularidad.

Cuando las águilas francesas sólo respetaron los muros de laciudad de Cádiz, y con su vuelo arrollaron los frágiles gobiernos de laPenínsula, entonces quedamos en la orfandad. Ya antes habíamos sidoentregados a la merced de un usurpador extranjero; después, lisonjea-dos con la justicia que se nos debía y con esperanzas halagüeñas siempreburladas; por último, inciertos sobre nuestro destino futuro, y amenaza-dos por la anarquía, a causa de la falta de un gobierno legítimo, justo yliberal, nos precipitamos en el caos de la revolución. En el primer

106

Page 101: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

momento sólo se cuidó de proveer a la seguridad interior, contra losenemigos que encerraba nuestro seno. Luego se extendió a la seguridadexterior; se establecieron autoridades que sustituimos a las que acabába-mos de deponer, encargadas de dirigir el curso de nuestra revolución yde aprovechar la coyuntura feliz en que nos fuese posible fundar ungobierno constitucional, digno del presente siglo y adecuado a nuestrasituación.

Todos los nuevos gobiernos marcaron sus primeros pasos con elestablecimiento de juntas populares. Éstas formaron en seguida regla-mentos para la convocación de congresos que produjeron alteracionesimportantes. Venezuela erigió un gobierno democrático y federal,declarando previamente los derechos del hombre, manteniendo elequilibrio de los poderes, y estatuyendo leyes generales en favor de lalibertad civil, de imprenta y otras; finalmente se constituyó un gobier-no independiente. La Nueva Granada siguió con uniformidad losestablecimientos políticos y cuantas reformas hizo Venezuela, ponien-do por base fundamental de su constitución el sistema federal másexagerado que jamás existió; recientemente se ha mejorado con res-pecto al poder ejecutivo general, que ha obtenido cuantas atribucionesle corresponden. Según entiendo, Buenos Aires y Chile han seguidoesta misma línea de operaciones; pero como nos hallamos a tantadistancia, los documentos son tan raros y las noticias tan inexactas, nome animaré ni aun a bosquejar el cuadro de sus transacciones.

Los sucesos de Méjico han sido demasiado varios, complicados,rápidos y desgraciados, para que se puedan seguir en el curso de surevolución. Carecemos, además, de documentos bastante instructivos,que nos hagan capaces de juzgarlos. Los independientes de Méjico, porlo que sabemos, dieron principio a su insurrección en septiembre de1810, y un año después ya tenían centralizado su gobierno en Zitácuaroe instalada allí una junta nacional, bajo los auspicios de Fernando VII,en cuyo nombre se ejercían las funciones gubernativas. Por los aconteci-mientos de la guerra, esta junta se trasladó a diferentes lugares, y esverosímil que se haya conservado hasta estos últimos momentos, conlas modificaciones que los sucesos hayan exigido. Se dice que ha creadoun generalísimo o dictador, que lo es el ilustre general Morelos; otroshablan del célebre general Rayón; lo cierto es que, uno de estos grandeshombres, o ambos separadamente, ejercen la autoridad suprema enaquel país; y recientemente, ha aparecido una constitución para elrégimen del estado. En marzo de 1812 el gobierno residente enZultepec presentó un plan de paz y guerra al virrey de Méjico,concebido con la más profunda sabiduría. En él se reclamó el derechode gentes, estableciendo principios de una exactitud incontestable.Propuso la junta que la guerra se hiciese como entre hermanos yconciudadanos; pues que no debía ser más cruel que entre naciones

107

Page 102: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

extranjeras; que los derechos de gentes y de guerra, inviolables para losmismos infieles y bárbaros, debían serlo más para cristianos, sujetos aun soberano y a unas mismas leyes; que los prisioneros no fuesentratados como reos de lesa majestad ni se degollasen los que rendían lasarmas, sino que se mantuviesen en rehenes para canjearlos; que no seentrase a sangre y fuego en las poblaciones pacíficas, no las diezmasenni quintasen para sacrificarlas; y concluye que, en caso de no admitirseeste plan, se observarían rigurosamente las represalias. Esta negocia-ción se trató con el más alto desprecio; no se dio respuesta a la juntanacional; las comunicaciones originales se quemaron públicamente en laplaza de Méjico, por mano del verdugo, y la guerra de exterminiocontinuó por parte de los españoles con su furor acostumbrado,mientras que los mejicanos y las otras naciones americanas no la hacíanni aun a muerte con los prisioneros de guerra que fuesen españoles.Aquí se observa que por causas de conveniencia, se conservó laapariencia de sumisión al rey y aun a la constitución de la monarquía.Parece que la junta nacional es absoluta en el ejercicio de las funcioneslegislativas, ejecutivas y judiciales, y el número de sus miembros muylimitado.

Los acontecimientos de la tierra firme nos han probado que lasinstituciones perfectamente representativas, no son adecuadas a nuestrocarácter, costumbres y luces actuales. En Caracas el espíritu de partidotomó su origen en las sociedades, asambleas y elecciones populares; yestos partidos nos tornaron a la esclavitud. Y así como Venezuela hasido la república americana que más se ha adelantado en sus institu-ciones políticas, también ha sido el más claro ejemplo de la ineficacia dela forma democrática y federal para nuestros nacientes estados. EnNueva Granada las excesivas facultades de los gobiernos provinciales yla falta de centralización en el general han conducido aquel precioso paísal estado a que se ve reducido en el día. Por esta razón, sus débilesenemigos se han conservado, contra todas las probabilidades. En tantoque nuestros compatriotas no adquieran los talentos y las virtudespolíticas que distinguen a nuestros hermanos del norte, los sistemasenteramente populares, lejos de sernos favorables, temo mucho quevengan a ser nuestra ruina. Desgraciadamente estas cualidades parecenestar muy distantes de nosotros en el grado que se requiere; y por elcontrario, estamos dominados de los vicios que se contraen bajo ladirección de una nación como la española, que sólo ha sobresalido enfiereza, ambición, venganza y codicia.

“Es más dificil, dice Montesquieu, sacar un pueblo de la servidum-bre, que subyugar uno libre. ” Esta verdad está comprobada por losanales de todos los tiempos, que nos muestran las más de las nacioneslibres, sometidas al yugo, y muy pocas de las esclavas recobrar sulibertad. A pesar de este convencimiento, los meridionales de este

108

Page 103: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

continente han manifestado el conato de conseguir instituciones libe-rales y aun perfectas, sin duda, por efecto del instinto que tienen todoslos hombres de aspirar a su mejor felicidad posible; la que se alcanza,infaliblemente, en las sociedades civiles, cuando ellas están fundadassobre las bases de la justicia, de la libertad y de la igualdad. Peroseremos nosotros capaces de mantener en su verdadero equilibrio ladifícil carga de una república? Se puede concebir que un pueblorecientemente desencadenado se lance a la esfera de la libertad, sin que,como a ícaro, se le deshagan las alas y recaiga en el abismo? Talprodigio es inconcebible, nunca visto. Por consiguiente, no hay unraciocinio verosímil que nos halague con esta esperanza.

Visión profética

Yo deseo más que otro alguno ver formar en América la más grandenación del mundo, menos por su extensión y riquezas que por sulibertad y gloria. Aunque aspiro a la perfección del gobierno demi patria, no puedo persuadirme que el Nuevo Mundo sea por elmomento regido por una gran república; como es imposible, no meatrevo a desearlo, y menos deseo una monarquía universal de América,porque este proyecto, sin ser útil, es también imposible. Los abusosque actualmente existen no se reformarían y nuestra regeneración seríainfructuosa. Los estados americanos han menester de los cuidados degobiernos paternales que curen las llagas y las heridas del despotismo yla guerra. La metrópoli, por ejemplo, sería Méjico, que es la única quepuede serlo por su poder intrínseco, sin el cual no hay metrópoli.Supongamos que fuese el istmo de Panamá, punto céntrico para todoslos extremos de este vasto continente, ¿no continuarían éstos en lalanguidez y aun en el desorden actual? Para que un solo gobierno dévida, anime, ponga en acción todos los resortes de la prosperidadpública, corrija, ilustre y perfeccione al Nuevo Mundo, sería necesarioque tuviese las facultades de un Dios, y cuando menos las luces yvirtudes de todos los hombres.

El espíritu de partido que, al presente, agita a nuestros estados, seencendería entonces con mayor encono, hallándose ausente la fuentedel poder, que únicamente puede reprimirlo. Además los magnates delas capitales no sufrirían la preponderancia de los metropolitanos, aquienes considerarían como a otros tantos tiranos: sus celos llegaríanhasta el punto de comparar a éstos con los odiosos españoles. En fin,una monarquía semejante sería un coloso disforme, que su propio pesodesplomaría a la menor convulsión.

M. de Pradt ha dividido sabiamente a la América en quince a diezy siete estados independientes entre sí, gobernados por otros tantosmonarcas. Estoy de acuerdo en cuanto a lo primero, pues la América

109

Page 104: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

comporta la creación de diez y siete naciones; en cuanto a lo segundo,aunque es más fácil conseguirlo, es menos útil, y así no soy de laopinión de las monarquías americanas. He aquí mis razones: el interésbien entendido de una república se circunscribe en la esfera de suconservación, prosperidad y gloria. No ejerciendo la libertad imperio,porque es precisamente su opuesto, ningún estímulo excita a losrepublicanos a extender los términos de su nación, en detrimento de suspropios medios, con el único objeto de hacer participar a sus vecinos deuna constitución liberal. Ningún derecho adquieren, ninguna ventajasacan venciéndolos; a menos que los reduzcan a colonias, conquistas oaliados, siguiendo el ejemplo de Roma. Máximas y ejemplos tales estánen oposición directa con los principios de justicia de los sistemasrepublicanos; y aun diré más, en oposición manifiesta con los interesesde sus ciudadanos: porque un estado demasiado extenso en sí mismo opor sus dependencias, al cabo viene en decadencia y convierte su formalibre en otra tiránica; relaja los principios que deben conservarla yocurre por último al despotismo. El distintivo de las pequeñas repúbli-cas es la permanencia, el de las grandes es vario; pero siempre se inclinaal imperio. Casi todas las primeras han tenido una larga duración; de lassegundas sólo Roma se mantuvo algunos siglos, pero fue porque erarepública la capital y no lo era el resto de sus dominios, que segobernaban por leyes e instituciones diferentes.

Muy contraria es la política de un rey cuya inclinación constante sedirige al aumento de sus posesiones, riquezas y facultades: con razón,porque su autoridad crece con estas adquisiciones, tanto con respecto asus vecinos, como a sus propios vasallos que temen en él un poder tanformidable, cuanto es su imperio, que se conserva por medio de laguerra y de las conquistas. Por estas razones pienso que los americanosansiosos de paz, ciencias, artes, comercio y agricultura preferirían lasrepúblicas a los reinos; y me parece que estos deseos se conforman conlas miras de la Europa.

No convengo en el sistema federal entre los populares y representa-tivos, por ser demasiado perfecto y exigir virtudes y talentos políticosmuy superiores a los nuestros; por igual razón rehúso la monarquíamixta de aristocracia y democracia, que tanta fortuna y esplendor haprocurado a la Inglaterra. No siéndonos posible lograr entre las repúbli-cas y monarquías lo más perfecto y acabado, evitemos caer en anar-quías demagógicas o en tiranías monócratas. Busquemos un medioentre extremos opuestos, que nos conducirían a los mismos escollos, ala infelicidad y al deshonor. Voy a arriesgar el resultado de miscavilaciones sobre la suerte futura de la América: no la mejor sino laque sea más asequible.

Por la naturaleza de las localidades, riquezas, poblaciones y carác-ter de los mejicanos, imagino que intentarán al principio establecer una

110

Page 105: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

república representativa, en la cual tenga grandes atribuciones el poderejecutivo, concentrándolo en un individuo que si desempeña sus fun-ciones con acierto y justicia, casi naturalmente vendrá a conservar suautoridad vitalicia. Si su incapacidad o violenta administración excitauna conmoción popular que triunfe, este mismo poder ejecutivo quizásse difundirá en una asamblea. Si el partido preponderante es militar oaristocrático, exigirá probablemente una monarquía que al principioserá limitada y constitucional, y después inevitablemente declinará enabsoluta; pues debemos convenir en que nada hay más difícil en elorden político que la conservación de una monarquía mixta; y tambiénes preciso convenir en que sólo un pueblo tan patriota como el inglés,es capaz de contener la autoridad de un rey, y de sostener el espíritu delibertad bajo un cetro y una corona.

Los estados del istmo de Panamá hasta Guatemala formarán quizáuna asociación. Esta magnífica posición entre los dos grandes mares,podrá ser con el tiempo el emporio del universo, sus canales acortaránlas distancias del mundo, estrecharán los lazos comerciales de Europa,América y Asia; traerán a tan feliz región los tributos de las cuatropartes del globo. Acaso sólo allí podrá fijarse algún día la capital de latierra como pretendió Constantino que fuese Bizancio la del antiguohemisferio!

La Nueva Granada se unirá con Venezuela, si llegan a convenirseen formar una república central, cuya capital sea Maracaibo, o unanueva ciudad que, con el nombre de Las Casas, en honor de este héroede la filantropía, se funde entre los confines de ambos países, en elsoberbio puerto de Bahía Honda. Esta posición, aunque desconocida,es más ventajosa por todos respectos. Su acceso es fácil y su situacióntan fuerte que puede hacerse inexpugnable. Posee un clima puro ysaludable, un territorio tan propio para la agricultura como para la críade ganado, y una grande abundancia de maderas de construcción. Lossalvajes que la habitan serían civilizados y nuestras posesiones seaumentarían con la adquisición de la Guajira. Esta nación se llamaríaColombia como un tributo de justicia y gratitud al creador de nuestrohemisferio. Su gobierno podrá imitar al inglés; con la diferencia de queen lugar de un rey, habrá un poder ejecutivo electivo, cuando másvitalicio, y jamás hereditario, si se quiere república; una cámara osenado legislativo hereditario, que en las tempestades políticas seinterponga entre las olas populares y los rayos del gobierno, y uncuerpo legislativo, de libre elección, sin otras restricciones que las de lacámara baja de Inglaterra. Esta constitución participaría de todas lasformas, y yo deseo que no participe de todos los vicios. Como ésta esmi patria tengo un derecho incontestable para desearle lo que en miopinión es mejor. Es muy posible que la Nueva Granada no convengaen el reconocimiento de un gobierno central, porque es en extremo

I I I

Page 106: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

adicta a la federación; y entonces formará por sí sola un estado que, sisubsiste, podrá ser muy dichoso por sus grandes recursos de todogénero.

Poco sabemos de las opiniones que prevalecen en Buenos Aires,Chile y el Perú: juzgando por lo que se trasluce y por las apariencias,en Buenos Aires habrá un gobierno central, en que los militares selleven la primacía por consecuencia de sus divisiones intestinas yguerras externas. Esta constitución degenerará necesariamente en unaoligarquía, o una monocracia con más o menos restricciones, y cuyadenominación nadie puede adivinar. Sería doloroso que tal cosa suce-diese, porque aquellos habitantes son acreedores a la más espléndidagloria.

El reino de Chile está llamado por la naturaleza de su situación,por las costumbres inocentes y virtuosas de sus moradores, por elejemplo de sus vecinos, los fieros republicanos del Arauco, a gozar delas bendiciones que derraman las justas y dulces leyes de una república.Si alguna permanece largo tiempo en América, me inclino a pensar queserá la chilena. Jamás se ha extinguido allí el espíritu de libertad; losvicios de la Europa y del Asia llegarán tarde o nunca a corromper lascostumbres de aquel extremo del universo. Su territorio es limitado;estará siempre fuera del contacto inficionado del resto de los hombres;no alterará sus leyes, usos y prácticas; preservará su uniformidad enopiniones políticas y religiosas; en una palabra, Chile puede ser libre.

El Perú, por el contrario, encierra dos elementos enemigos de todorégimen justo y liberal: oro y esclavos. El primero lo corrompe todo; elsegundo está corrompido por sí mismo. El alma de un siervo rara vezalcanza a apreciar la sana libertad: se enfurece en los tumultos o sehumilla en las cadenas.

Aunque estas reglas serían aplicables a toda la América, creo quecon más justicia las merece Lima, por los conceptos que he expuesto ypor la cooperación que ha prestado a sus señores contra sus propioshermanos, los ilustres hijos de Quito, Chile y Buenos Aires. Esconstante que el que aspira a obtener la libertad, a lo menos lo intenta.Supongo que en Lima no tolerarán los ricos la democracia, ni losesclavos y pardos libertos la aristocracia: los primeros preferirán latiranía de uno solo, por no padecer las persecuciones tumultuarias y porestablecer un orden siquiera pacífico. Mucho hará si consigue recobrarsu independencia.

Seguridad del triunfo de la causa

De todo lo expuesto, podemos deducir estas consecuencias: las provin-cias americanas se hallan lidiando por emanciparse; al fin obtendrán elsuceso; algunas se constituirán de un modo regular en repúblicas

112

Page 107: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

federales y centrales; se fundarán monarquías casi inevitablemente enlas grandes secciones, y algunas serán tan infelices que devorarán suselementos ya en la actual, ya en las futuras revoluciones, que una granmonarquía no será fácil consolidar, una gran república imposible.

Es una idea grandiosa pretender formar de todo el Mundo Nuevouna sola nación con un solo vínculo que ligue sus partes entre sí y con eltodo. Ya que tiene un origen, una lengua, unas costumbres y unareligión, debería, por consiguiente, tener un solo gobierno que confede-rase los diferentes estados que hayan de formarse; mas no es posible,porque climas remotos, situaciones diversas, intereses opuestos, carac-teres desemejantes, dividen a la América. Qué bello sería que el istmode Panamá fuese para nosotros lo que el de Corinto para los griegos!Ojalá que algún día tengamos la fortuna de instalar allí un augustocongreso de los representantes de las repúblicas, reinos e imperios atratar y discutir sobre los altos intereses de la paz y de la guerra, con lasnaciones de las otras tres partes del mundo. Esta especie de corporaciónpodrá tener lugar en alguna época dichosa de nuestra regeneración; otraesperanza es infundada, semejante a la del abate St. Pierre, que conci-bió el laudable delirio de reunir un congreso europeo para decidir de lasuerte y de los intereses de aquellas naciones.

“Mutaciones importantes y felices, continúa Vd., pueden serfrecuentemente producidas por efectos individuales.” Los americanosmeridionales tienen una tradición que dice que cuando Quetzalcóatl, elHermes o Buda de la América del Sur, resignó su administración y losabandonó, les prometió que volvería después que los siglos designadoshubiesen pasado, y que él restablecería su gobierno y renovaría sufelicidad. Esta tradición no opera y excita una convicción de que muypronto debe volver? Concibe Vd. cuál será el efecto que producirá, siun individuo, apareciendo entre ellos, demostrase los caracteres deQuetzalcóatl, el Buda del bosque, o Mercurio, del cual han habladotanto las otras naciones? NO cree Vd. que esto inclinaría todas laspartes? NO es la unión todo lo que se necesita para ponerlos en estadode expulsar a los españoles, sus tropas y los partidarios de la corrom-pida España, para hacerlos capaces de establecer un imperio poderoso,con un gobierno libre y leyes benévolas?

Pienso como Vd. que causas individuales pueden producir resulta-dos generales; sobre todo en las revoluciones. Pero no es el héroe, granprofeta o Dios del Anáhuac, Quetzalcóatl, el que es capaz de operar losprodigiosos beneficios que Vd. propone. Este personaje es apenasconocido del pueblo mejicano y no ventajosamente, porque tal es lasuerte de los vencidos aunque sean dioses. Sólo los historiadores yliteratos se han ocupado cuidadosamente en investigar su origen,verdadera o falsa misión, sus profecías y el término de su carrera. Sedisputa si fue un apóstol de Cristo o bien pagano. Unos suponen que su

113

Page 108: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

nombre quiere decir Santo Tomás; otros que Culebra Emplumajada; yotros dicen que es el famoso profeta de Yucatán, Chilan-Cambal. Enuna palabra los más de los autores mejicanos, polémicos e historiadoresprofanos, han tratado con más o menos extensión la cuestión sobre elverdadero carácter de Quetzalcóatl. El hecho es, según dice Acosta,que él estableció una religión, cuyos ritos, dogmas y misterios teníanuna admirable afinidad con la de Jesús, y que quizás es la más semejantea ella. No obstante esto, muchos escritores católicos han procuradoalejar la idea de que este profeta fuese verdadero, sin querer reconoceren él a un Santo Tomás como lo afirman otros célebres autores. Laopinión general es que Quetzalcóatl es un legislador divino entre lospueblos paganos del Anáhuac del cual era lugarteniente el gran Mocte-zuma derivando de él su autoridad. De aquí se infiere que nuestrosmejicanos no seguirían al gentil Quetzalcóatl, aunque apareciese bajolas formas más idénticas y favorables, pues que profesan una religión lamás intolerante y exclusiva de las otras.

Felizmente los directores de la independencia de Méjico se hanaprovechado del fanatismo con el mejor acierto, proclamando a lafamosa virgen de Guadalupe por reina de los patriotas; invocándola entodos los casos arduos y llevándola en sus banderas. Con esto elentusiasmo político ha formado una mezcla con la religión, que haproducido un fervor vehemente por la sagrada causa de la libertad. Laveneración de esta imagen en Méjico es superior a la más exaltada quepudiera inspirar el más diestro profeta.

Seguramente la unión es la que nos falta para completar la obra denuestra regeneración. Sin embargo, nuestra división no es extraña,porque tal es el distintivo de las guerras civiles formadas generalmenteentre dos partidos: conservadores y reformadores. Los primeros son,por lo común, más numerosos, porque el imperio de la costumbreproduce el efecto de la obediencia a las potestades establecidas; losúltimos son siempre menos numerosos aunque más vehementes eilustrados. De este modo la masa física se equilibra con la fuerza moral,y la contienda se prolonga siendo sus resultados muy inciertos. Porfortuna, entre nosotros, la masa ha seguido a la inteligencia.

Yo diré a Vd. lo que puede ponernos en actitud de expulsar a losespañoles y de fundar un gobierno libre: es la unïón, ciertamente; masesta unión no nos vendrá por prodigios divinos sino por efectossensibles y esfuerzos bien dirigidos. La América está encontrada entresí, porque se halla abandonada de todas las naciones; aislada en mediodel universo, sin relaciones diplomáticas ni auxilios militares, y comba-tida por la España que posee más elementos para la guerra que cuantosnosotros furtivamente podemos adquirir.

Cuando los sucesos no están asegurados, cuando el estado es débil,y cuando las empresas son remotas, todos los hombres vacilan, las

Page 109: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

opiniones se dividen, las pasiones las agitan y los enemigos las animanpara triunfar por este fácil medio. Luego que seamos fuertes, bajo losauspicios de una nación liberal que nos preste su protección, se nos veráde acuerdo cultivar las virtudes y los talentos que conducen a la gloria;entonces seguiremos la marcha majestuosa hacia las grandes prosperi-dades a que está destinada la América meridional; entonces las cienciasy las artes que nacieron en el Oriente y han ilustrado la Europa volarána Colombia libre, que las convidará con un asilo.

Tales son, señor, las observaciones y pensamientos que tengo elhonor de someter a Vd. para que los rectifique o deseche, según sumérito, suplicándole se persuada que me he atrevido a exponerlos, máspor no ser descortés, que porque me crea capaz de ilustrar a Vd. en lamateria.

Soy de Vd. &. &. &.Bolívar

14

Sobre los problemas latinoamericanos y críticaa la indiferencia del mundo ante sus esfuerzos

De reflexiones dirigidas al editor de The Royal Gazette, durante elexilio en Jamaica donde estuvo a punto de perecer asesinado. Kingston,28 de septiembre de 1815.

He leído en The Courant del 27 de los corrientes un artículo sobre laNueva Granada muy interesante, tanto por lo que se refiere a lapoblación y recursos de aquel país, cuanto por las observaciones quehace acerca de las disensiones que hasta ahora han existido allí.

El autor del articulo parece imparcial y sus opiniones son correc-tas, pero yo hubiera deseado más pormenores y mayor claridad sobrelas verdaderas causas de la guerra civil que hayan inducido al generalMorillo a desembarcar en aquellas costas y atacar a Cartagena. Elresultado de esta operación decidirá probablemente la suerte de unagran parte del continente.

Someto a Vd. algunas observaciones que, en cierto modo, puedenjustificar la conducta de los habitantes de la Nueva Granada y que, talvez, arrojarán luz sobre el éxito posible de la contienda entre las fuerzasespañolas y granadinas. Como suramericano me siento, en ciertomodo, obligado a referir algunos hechos que versan sobre la naturalezade nuestras guerras intestinas.

Casi todas las repúblicas que más veneración han inspirado al

Page 110: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

género humano han llevado en su seno la semilla de mortal discordia,lo que ha hecho decir que la desunión es a menudo el termómetro de lalibertad, y que el goce de un gobierno liberalmente constituido se halla,por lo común, en proporción directa a la efervescencia de los partidos yal choque de las opiniones políticas. Es cierto que el peso de la libertades liviano, pero también es difícil mantenerlo en equilibrio aun en lasnaciones más cultas y civilizadas.

Cuál es la nación libre, antigua o moderna, que no haya padecidopor la desunión? Habrá historia más turbulenta que la de Atenas?Facciones más sanguinarias que las de Roma? Guerras civiles másviolentas que las de Inglaterra.? Disensiones más peligrosas que las delos Estados Unidos de la América del Norte? Sin embargo son estascuatro naciones las que más honran la raza humana por sus virtudes, sulibertad y su gloria. Y es citando los trágicos y sorprendentes ejemplosde igual clase, que aquellas naciones nos presentan, como yo queríacubrir con un velo la vergüenza de nuestras divisiones.

Nuestras discordias tienen su origen en las dos más copiosasfuentes de calamidad pública: la ignorancia y la debilidad. España hafomentado la una por la superstición, y perpetuado la otra por latiranía. En el estado anterior de las cosas nuestra situación estabareducida a una nulidad casi total. Vivíamos ajenos a todos los aconteci-mientos que se cumplían, extraños a la contemplación del mundopolítico y separados de todo lo que pudiera, de algún modo, ejercitarnuestra inteligencia o dar valor a nuestras riquezas y nuestro poder. Losamericanos del sur han pasado al través de los siglos, como los ciegospor entre los colores; se hallaban sobre el teatro de la acción pero susojos estaban vendados, nada han visto, nada han oído. Por qué?porque no podían ver la justicia y mucho menos oír la verdad.

Además de esto fuimos abandonados por el mundo entero, nin-guna nación extranjera nos ha guiado con su sabiduría y experiencia, nidefendido con sus armas, ni protegido con sus recursos. No sucedió lomismo a la América del Norte durante su lucha de emancipación.Aunque poseyendo sobre nosotros toda suerte de ventajas, las tres máspoderosas naciones europeas, dueñas de colonias, la auxiliaron en suindependencia; y sin embargo la Gran Bretaña no ha usado de represa-lias contra aquella misma España que la había hecho la guerra paraprivarla de sus colonias. Todos los recursos militares y políticos quenos han negado a nosotros se han dado con profusión a nuestrosenemigos y, sin citar otros ejemplos The Courant de Jamaica y LaGaceta de Santiago de la Vega, copiando de aquél, publican la lista de lasarmas, municiones y vestuario que han recibido. Hasta los mismostriunfos del grande e inmortal Wellington han sido indirectamentefatales para nosotros, porque el arte de la guerra que los españolesignoraban, lo han aprendido de aquellos heroicos británicos mandados

116

Page 111: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

por el ilustre capitán destinado en un tiempo a libertar la América delSur. Éstos son los hechos singulares que la historia recordará junto conotros igualmente singulares que sería largo referir.

Los Estados Unidos del Norte que, por su comercio, pudieronhaber suministrado elementos de guerra, nos privaron de ellos porcausa de su contienda con la Gran Bretaña. Sin esto Venezuela solahabría triunfado, y la América del Sur no habría sido asolada por lacrueldad española ni destrozada por la anarquía revolucionaria. Noso-tros no tenemos más armas para hacer frente al enemigo que nuestrosbrazos, nuestros pechos, nuestros caballos y nuestras lanzas. El débilnecesita una larga lucha para vencer; el fuerte, como en Waterloo, librauna batalla y desaparece un imperio.

Cuando los partidos carecen de autoridad, ora por falta de poder,ya por el triunfo de sus contrarios, nace el descontento y los debilita.Los jefes subdividen la causa en tantas partes cuantos son ellos; y estosucede, sobre todo, cuando sin acuerdo con una potencia extranjera quelos obligue a persistir en el sistema que ambos habían reconocido yobligádose a sostener. Como ninguna nación había entrado en tratosformales con nosotros ni en comunicaciones oficiales, no tenemos, enconsecuencia, relaciones políticas que nos liguen con nación alguna.

15

La armonía racial en el mestizaje del nuevo mundoy otras meditaciones de Jamaica

De un borrador preparado para el redactor o editor de The Roya1Gazette, en Kingston, probablemente también en septiembre de 1815.

Los más de los políticos europeos y americanos que han previsto laindependencia del Nuevo Mundo han presentido que la mayor dificul-tad para obtenerla consiste en la diferencia de las castas que componenla población de este inmenso país. Yo me aventuro a examinar estacuestión, aplicando reglas diferentes, deducidas de los conocimientospositivos y de la experiencia que nos ha suministrado el curso denuestra revolución.

De quince a veinte millones de habitantes que se hallan esparcidosen este gran continente de naciones indígenas, africanas, españolas yrazas cruzadas, la menor parte es, ciertamente, de blancos; pero tam-bién es cierto que ésta posee cualidades intelectuales que le dan unaigualdad relativa y una influencia que parecerá supuesta a cuantos nohayan podido juzgar, por sí mismos, del carácter moral y de lascircunstancias físicas, cuyo compuesto produce una opinión lo más

Page 112: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

favorable a la unión y armonía entre todos los habitantes, no obstantela desproporción numérica entre un color y otro.

Observemos que al presentarse los españoles en el Nuevo Mundo,los indios los consideraron como una especie de mortales superiores alos hombres; idea que no ha sido enteramente borrada, habiéndosemantenido por los prestigios de la superstición, por el temor de lafuerza, la preponderancia de la fortuna, el ejercicio de la autoridad, lacultura del espíritu, y cuantos accidentes pueden producir ventajas.Jamás éstos han podido ver a los blancos, sino al través de una grandeveneración como seres favorecidos del cielo.

“El español americano, dice M. de Pons, ha hecho a su esclavocompañero de su indolencia.” En cierto respecto esta verdad ha sidoorigen de resultados felices. El colono español no oprime a su domés-tico con trabajos excesivos: lo trata como a un compañero; lo educa enlos principios de moral y de humanidad que prescribe la religión deJesús. Como su dulzura es ilimitada, la ejerce en toda su extensión conaquella benevolencia que inspira una comunicación familiar. El no estáaguijoneado por los estímulos de la avaricia, ni por los de la necesidad,que producen la ferocidad de carácter y la rigidez de principios, tancontrarios a la humanidad. El americano del sur vive a sus anchas en supaís nativo; satisface sus necesidades y pasiones a poca costa; montes deoro y de plata le proporcionan riquezas fáciles con que obtiene losobjetos de la Europa. Campos fértiles, llanuras pobladas de animales,lagos y ríos caudalosos con ricas pesquerías lo alimentan superabundan-temente, el clima no le exige vestidos y apenas habitaciones; en fin,puede existir aislado, subsistir de sí mismo y mantenerse independientede los demás. Ninguna otra situación del mundo es semejante a ésta:toda la tierra está ya agotada por los hombres, la América sola apenasestá encentada.

De aquí me es permitido colegir que, habiendo una especie deindependencia individual en estos inmensos países, no es probable quelas facciones de razas diversas lleguen a constituirse de tal modo queuna de ellas logre anonadar a las otras. La misma extensión, la mismaabundancia, la misma variedad de colores da cierta neutralidad a laspretensiones, que vienen a hacerse casi nulas.

El indio es de un carácter tan apacible, que sólo desea el reposo y lasoledad: no aspira ni aun a acaudillar su tribu, mucho menos a dominarlas extrañas: felizmente esta especie de hombres es la que menosreclama la preponderancia; aunque su número exceda a la suma de losotros habitantes. Esta parte de la población americana es una especie debarrera para contener a los otros partidos: ella no pretende la autoridad,porque ni la ambiciona, ni se cree con aptitud para ejercerla, contentán-dose con su paz, su tierra y su familia. El indio es el amigo de todos,porque las leyes no lo habían desigualado, y porque, para obtener todas

118

Page 113: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

las mismas dignidades de fortuna y de honor que conceden los gobier-nos, no han menester de recurrir a otros medios que a los servicios y alsaber; aspiraciones que ellos odian más que lo que pueden desear lasgracias.

Así, pues, parece que debemos contar con la dulzura de muchomás de la mitad de la población, puesto que los indios y los blancoscomponen los tres quintos de la populación total, y si añadimos losmestizos que participan de la sangre de ambos, el aumento se hace mássensible y el temor de los colores se disminuye, por consecuencia.

El esclavo en la América española vegeta abandonado en lashaciendas, gozando, por decirlo así, de su inacción, de la hacienda de suseñor y de una gran parte de los bienes de la libertad; y como la religiónle ha persuadido que es un deber sagrado servir, ha nacido y existido enesta dependencia doméstica, se considera en su estado natural, como unmiembro de la familia de su amo, a quien ama y respeta.

La experiencia nos ha mostrado que ni aun excitado por losestímulos más seductores, el siervo español no ha combatido contra sudueño; y por el contrario, ha preferido muchas veces, la servidumbrepacífica a la rebelión. Los jefes españoles de Venezuela, Boves, Mora-les, Rosete, Calzada y otros, siguiendo el ejemplo de Santo Domingo,sin conocer las verdaderas causas de aquella revolución, se esforzaronen sublevar toda la gente de color, inclusive los esclavos, contra losblancos criollos, para establecer un sistema de desolación, bajo lasbanderas de Fernando VII. Todos fueron instados al pillaje, al asesi-nato de los blancos; les ofrecieron sus empleos y propiedades; losfascinaron con doctrinas supersticiosas en favor del partido español, y,a pesar de incentivos tan vehementes, aquellos incendiarios se vieronobligados a recurrir a la fuerza, estableciendo el principio que los que nosirven en las armas del rey son traidores o desertores; y, en consecuencia,cuantos no se hallaban alistados en sus bandas de asesinos, eransacrificados, ellos, sus mujeres, hijos y hasta las poblaciones enteras;porque a todos obligaban a seguir las banderas del rey. Después detanta crueldad, de una parte, y tanta esperanza de otra, pareceráinconcebible que los esclavos rehusasen salir de sus haciendas, y cuandoeran compelidos a ello, sin poderlo evitar, luego que les era posible,desertaban. La verdad de estos hechos se puede comprobar con otrosque parecerán más extraordinarios.

Después de haber experimentado los españoles, en Venezuela,reveses multiplicados y terribles, lograron, por fin, reconquistarla. Elejército del general Morillo viene a reforzarlos y completa la subyuga-ción de aquel país; parecía, pues, que el partido de los independientesera desesperado, como en efecto lo estaba; pero, por un suceso biensingular se ha visto que los mismos soldados libertos y esclavos quetanto contribuyeron, aunque por fuerza, al triunfo de los realistas, se

Page 114: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

han vuelto al partido de los independientes, que no habían ofrecido lalibertad absoluta, como lo hicieron las guerrillas españolas. Los actualesdefensores de la independencia son los mismos partidarios de Boves,unidos ya con los blancos criollos, que jamás han abandonado estanoble causa.

Estamos autorizados, pues, a creer que todos los hijos de laAmérica española, de cualquier color o condición que sean, se profesanun afecto fraternal recíproco, que ninguna maquinación es capaz dealterar. Nos dirán que las guerras civiles prueban lo contrario. No,señor, las contiendas domésticas de la América nunca se han originadode la diferencia de castas: ellas han nacido de la divergencia de lasopiniones políticas, y de la ambición particular de algunos hombres,como todas las que han afligido a las demás naciones. Todavía no se haoído un grito de proscripción contra ningún color, estado o condición;excepto contra los españoles europeos, que tan acreedores son a ladetestación universal. Hasta el presente se admira la más perfectaarmonía entre los que han nacido en este suelo, por lo que respecta anuestra cuestión; y no es de temerse que en lo futuro suceda locontrario, porque para entonces el orden estará establecido, los gobier-nos fortificados con las armas, la opinión, las relaciones extranjeras y laemigración europea y asiática, que necesariamente debe aumentar lapoblación.

Balanceada como está la populación americana, ya por el número,ya por las circunstancias, ya, en fin, por el irresistible imperio delespíritu, por qué razón no se han de establecer nuevos gobiernos enesta mitad del mundo? ¿En Atenas no eran los esclavos cuatro vecesmás que los ciudadanos ? ¿Los campos de Esparta no los cultivaban losilotas? ¿En todo el Oriente, en toda África, en parte de Europa elnúmero de los hombres libres no ha sido inferior al de los siervos?Obsérvese además la diferencia que existe entre los cautivos de laantigüedad y los miserables trabajadores de la América: aquéllos eranprisioneros de guerra, acostumbrados al manejo de las armas, merca-deres y navegantes ricos, filósofos profundamente instruidos, queconocían sus derechos y todos sufrían impacientes las cadenas. Losmodernos son de una raza salvaje, mantenidos en la rusticidad por laprofesión a que se les aplica y degradados a la esfera de los brutos.

Lo que es, en mi opinión, realmente temible es la indiferencia conque la Europa ha mirado hasta hoy la lucha de la justicia contra laopresión, por temor de aumentar la anarquía; ésta es una instigacióncontra el orden, la prosperidad y los brillantes destinos que esperan a laAmérica, El abandono en que se nos ha dejado es el motivo que puede,en algún tiempo, desesperar al partido independiente, hasta hacerloproclamar máximas demagógicas para atraerse la causa popular; estaindiferencia repito es una causa inmediata que puede producir la

120

Page 115: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

subversión y que sin duda forzará al partido débil en algunas partes dela América a adoptar medidas, las más perniciosas, pero las másnecesarias para la salvación de los americanos que actualmente se hallancomprometidos en la defensa de su patria, contra una persecucióndesconocida en todo otro país que la América española. La desespera-ción no escoge los medios que la sacan del peligro.

El Americano

16

Homenaje al magnánimo presidente Petiony la defensa de la patria común

Carta del Libertador para el presidente de Haití, Alejandro Petion,escrita en francés. Tomada de la obra Cartas del Libertador por VicenteLecuna, tomo I, 1799-1817, Caracas, 1829.

Aux Cayes, le 8 février 1816.

A SON EXCELLENCE MONSIEUR LE PRÉSIDENT D’HAiTI

Monsieur le Président:

Je suis accablé du poids de vos bienfaits. M. Villaret est retourné on nepeut pas mieux dépêché par Votre Excellence. En tout vous êtesmagnanime et indulgent.

Nos affaires sont presque arrangées; et sans doute dans unequinzaine de jours nous serons en état de partir. Je n’attends que vosdernières faveurs ; et s’il m’est possible j’irai moi-même vous exprimerl’étendue de ma reconnaissance.

Par M. Injinac, votre digne secrétaire, j’ose vous faire encore denouvelles prières.

Dans ma proclamation aux habitants du Vénézuéla et dans lesdécrets que je dois expédier pour la liberté des esclaves je ne sais pas s’ilme sera permis de témoigner les sentiments de mon coeur envers VotreExcellence, et de laisser à la postérité un monument irrécusable devotre philantropie.

Je ne sais, dis-je, si je devrais vous nommer comme l’auteur denotre liberté. Je prie Votre Excellence d’en exprimer sa volonté à cetégard.

121

Page 116: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Le lieutenant-colonel Valdés vous adresse une pétition que je mepermets de recommander à votre générosité.

Agréez, Monsieur le Président, les respectueux hommages de lahaute considération avec laquelle j’ai l’honneur d’être de Votre Excel-lence le tres humble et obéissant serviteur.

Bolívar

17

“La libertad absoluta de los esclavos”

Decreto dictado en Campano el 2 de junio de 1816, con el cual larevolución se proyecta a las bases sociales de Venezuela. Bolívar dirá:“Me parece una locura que en una revolución de libertad, se pretendamantener la esclavitud.” Era, también, un homenaje al presidente delacogedor pueblo haitiano.

SIMÓ N BOLÍVARJefe Supremo y Capitán General de los Ejércitos

de Venezuela y Nueva Granada, &., &.

A LOS HABITANTES DE RíO CARIBE,

CARÚPANO Y CARIACO

Salud.Considerando que la justicia, la política y la patria reclaman imperiosa-mente los derechos imprescindibles de la naturaleza, he venido endecretar, como decreto, la libertad absoluta de los esclavos que hangemido bajo el yugo español en los tres siglos pasados. Considerandoque la República necesita de los servicios de todos sus hijos, tenemosque imponer a los nuevos ciudadanos las condiciones siguientes:

Artículo primero. Todo hombre robusto, desde la edad de catorcehasta los sesenta años, se presentará en la parroquia de su distrito aalistarse en las banderas de Venezuela, veinte y cuatro horas después depublicado el presente decreto.

Artículo segundo. Los ancianos, las mujeres, los niños y losinválidos quedarán eximidos desde ahora para siempre del serviciomilitar; como igualmente del servicio doméstico y campestre en queestaban antes empleados a beneficio de sus señores.

Artículo tercero. El nuevo ciudadano que rehúse tomar las armaspara cumplir con el sagrado deber de defender su libertad quedará

122

Page 117: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

sujeto a la servidumbre, no sólo él, sino también sus hijos menores decatorce años, su mujer y sus padres ancianos.

Artículo cuarto. Los parientes de los militares empleados en elejército libertador gozarán de los derechos de ciudadanos y de lalibertad absoluta que les concede este decreto a nombre de la Repúblicade Venezuela.

El presente reglamento tendrá fuerza de ley y será fielmentecumplido por las autoridades republicanas de Río Caribe, Carúpano yCariaco.

Dado en el cuartel general de Carúpano, a 2 de junio de 1816.

Bolívar

18

Firme confianza en la accióncontra la tiranía

Mensaje del 1° de enero de 1817, suscrito en Barcelona, a Pedro BriceñoMéndez y "a los bravos de los bravos de Venezuela”, llamándolos aincorporarse a la lucha emancipadora.

Mis queridos compañeros

Con cuánto gusto he sabido la salvación de unas personas que me sontan caras! Qué sensaciones tan tiernas he experimentado al saber quemis bravos, mis fieles compañeros de armas están salvos! Nada podráigualar jamás, en ninguna época de mí vida, a los disgustos y al dolorque sufría cuando estaba incierto de su suerte. Sólo la idea de que mipaís sucumbiese para siempre podrá colocarse al lado de mis sufrimien-tos por Vds. Pero felizmente el valor, el heroísmo me ha conservadopersonas tan queridas.

Nada falta a mi felicidad sino el placer de abrazar a Vds. Ese díaserá para mí siempre memorable; sobre todo si, conservando tantoslaureles adquiridos, añaden los de vencedores y libertadores deGuayana. Esta empresa tan sublime como importante asegurará lasanclas de la república, si nuevas tempestades vuelven a combatirla.Vds. llenarán los votos de todos los ciudadanos si logran someter laregión guayanesa que tanto nos ha perjudicado y que tan útil puedesernos. Pero hecho esto no volarán Vds. a romper los grillos de losotros hermanos que sufren la tiranía enemiga? Sí, sí, Vds. volaránconmigo hasta el rico Perú. Nuestros destinos nos llaman a las extremi-dades del mundo americano. Para hombres tan valerosos, fieles y

123

Page 118: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

constantes nada es imposible. Que el universo nos contemple conadmiración, tanto por nuestros desastres como por nuestro heroísmo!La fortuna no debe luchar vencedora contra quienes la muerte nointimida; y la vida no tiene precio sino en tanto que es gloriosa.

Adiós, mis queridos compañeros. Acepten Vds. las expresionesagradecidas de quien se hace un honor de llamarse, no el jefe, sino elhermano de los bravos de los bravos de Venezuela.

Salud, gloria y constancia.Bolívar

19

“La imprenta es tan útil comolos pertrechos”

En carta a don Fernando Peñalver, desde Guayana, el 1.° de septiembrede 1817, el Libertador incluye a la imprenta entre el material imprescindi-ble para ganar la libertad e independencia de la patria, y fündar larepública soberana y constitucional.

Por ahora sólo necesitamos de los objetos que he pedido a usted antes,porque sin ellos estamos perdiendo el tiempo que es lo más precioso enestas circunstancias. Yo querría bien mandar mulas y ganado a Trini-dad, para que usted nos comprase todos los elementos de guerranecesarios, pero, amigo, son tantas las dificultades que hay para que elgobierno sea comerciante, que casi me parece mejor entrar en unlaberinto. Primero, nos faltan embarcaciones propias para este tráfico;segundo, se necesita de un gran cuidado para que no perezcan estosanimales; y, en manos ajenas, es lo mismo que tirarlos al agua; tercero,pueden tomarlos por cuenta de alguna deuda atrasada si se sabe quepertenecen al gobierno; y en fin, porque sería multiplicar mis aten-ciones, que un monarca en medio de su monarquía no las tendríamayores; pues tal es el imperio del desorden y de la desorganización enque nos hemos hallado hasta ahora. Todo debemos hacerlo y aún nohemos hecho nada, y si no vienen los hombres capaces de ayudar algobierno, tampoco se hará.

Es inútil repetir a usted que haga siempre sus esfuerzos para que nonos falten estos objetos, pues estoy seguro que usted no me olvidará, nimucho menos, siendo en servicio de la patria.

Sobre todo mándeme usted de un modo u otro la imprenta que estan útil como los pertrechos. En cuanto a lo demás que usted medice en sus cartas, quedo enterado y apruebo cuanto ellas contienen.Conozco ahora más que nunca lo que siempre he conocido, es decir,que usted es uno de los que más pueden servir la patria, tanto por su

124

Page 119: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

buen juicio, como por su celo y patriotismo, y así, amigo, véngaseusted inmediatamente después que haya practicado todos los pasos deque está encargado. Pero que no sea tan tarde que ya yo esté lejos deaquí, porque para entonces quizá ya se habrá perdido la ocasión deemplearlo como usted merece.

20

Reparto de los bienes nacionalesentre los militares del pueblo revolucionario

Ley de repartición de tierras, anticipo de justicia hacia una reformaagraria que materializa la revolución en el orden económico. Bolívar laincluye certeramente entre “los actos más notables” de su mando. Promul-gada en las vecindades de Angastura, el 10 de octubre de 1817.

SIMÓ N BOLÍVARJefe Supremo de la República de Venezuela, &c., &c., &c.

Considerando que el primer deber del gobierno es recompensar losservicios de los virtuosos defensores de la república, que sacrificandogenerosamente sus vidas y propiedades por la libertad y felicidad de lapatria, han sostenido y sostienen la desastrosa guerra de la independen-cia, sin que ni ellos ni sus familias tengan los medios de subsistencia; yconsiderando que existen en el territorio ocupado por las armas de larepública, y en el que vamos a libertar, poseído hoy por los enemigos,multitud de propiedades de españoles y americanos realistas, queconforme al decreto y reglamento publicado en 3 de septiembre delpresente año, deben secuestrarse y confiscarse, he venido en decretar ydecreto lo siguiente:

Artículo 1 ° Todos los bienes raíces e inmuebles, que con arreglo alcitado decreto y reglamento, se han secuestrado y confiscado, o debensecuestrarse y confiscarse, y no se hayan enajenado ni puedan enaje-narse a beneficio del erario nacional, serán repartidos y adjudicados alos generales, jefes, oficiales y soldados de la república, en los términosque abajo se expresarán.

Artículo 2.° Siendo los grados obtenidos en la campaña una pruebaincontestable de los diferentes servicios hechos por cada uno de losindividuos del ejército, la repartición de las propiedades, de que habla elarticulo antecedente, se hará con arreglo a ellos, a saber:

Page 120: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Al general en jefe . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $ 25.000Al general de división . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20.000Algeneraldebrigada...... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15.000Alcoronel . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10.000Al teniente coronel . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9.000Almayor . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8.000A l cap i tán . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . , . . . . . . 6.000Alteniente . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4.000Alsubteniente . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3.000Al sargento primero y segundo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1.000Al cabo primero y segundo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 700Yalsoldado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 500

Artículo 3.° Los oficiales, sargentos, cabos y soldados, que obtuvie-ren ascensos posteriores a la repartición, tendrán derecho para reclamarel déficit que haya entre la cantidad que recibieron cuando ejercían elempleo anterior, y la que le corresponde por el que últimamente se leshubiere conferido y ejerzan al tiempo de la última repartición.

Artículo 4° Si hecho el cómputo del valor de las propiedadespartibles, no alcanzare éste a cubrir todas las partes, el gobierno ofrecesuplir la falta con cualesquiera otros bienes nacionales y principalmentecon las concesiones de terrenos baldíos.

Artículo 5° Si antes o después de repartidas las propiedades, elgobierno tuviere a bien premiar el valor, servicio a acción muydistinguida de un militar, podrá hacerlo cediéndole cualquiera de dichaspropiedades, sin que en este caso esté obligado a consultar la gradua-ción del agraciado, ni la cantidad que se le concede.

Artículo 6° En caso de que un militar haya merecido y alcanzado lagracia de que habla el artículo precedente, no tendrá éste derecho areclamar la parte que le asigna el artículo 2.° si el valor de la propiedad,que se le haya cedido, es mayor del que se le señala a su grado.

Artículo 7° Cuando las propiedades partibles sean de un valor másconsiderable que las cantidades asignadas a los diferentes grados, elgobierno cuidará de que las particiones se hagan del modo másconforme a los intereses de todos, para lo cual podrán acomunarse oacompañarse muchos, y solicitar se les conceda tal finca.

Artículo 8.° La repartición se hará por una comisión especial, quese nombrará oportunamente, y que se sujetará para ello al reglamentoque al intento se publicará.

Artículo 9° El gobierno se reserva la inmediata dirección de estacomision.

Publíquese, comuníquese a quienes corresponda, y diríjase copia alestado mayor para que se inserte en la orden del día, que se harácircular por todas las divisiones y cuerpos de ejército de la repúblicapara su satisfacción.

126

Page 121: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Dada, firmada de mi mano, sellada con el sello provisional de laRepública, y refrendada por el infraescrito secretario del Gobiernosupremo en el cuartel general de Santo Tomás de la Nueva Guayana, a10 de octubre de 1817.-7.°

J. G. PérezSecretario

Bolívar

21

Bienvenida a los hermanos de laEspaña democrática

Carta amplia y entusiasta al Excmo. señor teniente general don MarianoRenovales, desde San Fernando de Apure, el 20 de mayo de 1818.

Excmo. señor:

Tengo la satisfacción de contestar a V. E. el papel oficial fechado en 13de diciembre del año último, que V. E. me ha hecho el honor dedirigirme por medio de nuestro diputado en Londres. Desgraciada-mente esta comunicación ha sido retardada hasta este momento, porcausas que ignoro y siento.

Es indecible el placer que tengo en manifestar a V. E. cuánlisonjero ha sido para el gobierno de Venezuela la oferta generosa queV. E. le hace de sus importantes servicios, para la continuación de unalucha que no puede menos de reanimarse por nuestra parte, con elapoyo de los talentos y virtudes militares de tan distinguido general. Elnombre de V. E. ha sido conocido con gloria en la justa guerra que laEspaña sostuvo contra sus invasores. En ella V. E. ha desplegado lascualidades eminentes que caracterizan al hombre grande: valor paraarrostrar el peligro, inteligencia para vencer, amor a la patria y odio a latiranía. V. E., desprendiéndose, con una virtud singular, de todo loque tiene atractivo para el corazón humano, ha sabido despreciar losbienes de la fortuna, para conseguir el honor, la gloria y la libertad, quesiempre huyen lejos de una mansión de esclavos, cual es en el día laEspaña. Yo no puedo recordar a V. E. sin un profundo sentimiento, lahorrible situación a que ha reducido ese ingrato rey Fernando a la patriade V. E., no menos que a la mía. Pero yo siento una inmensacomplacencia en mi corazón cuando contemplo que no todos losespañoles son nuestros enemigos, y que la España se honra de haber

127

Page 122: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

producido en su seno almas generosas y espíritus sublimes, que vienencomo ángeles tutelares a sostener la santa causa de la libertad en estepaís, antes asolado y ahora afligido por las armas de su nación. SiendoV. E. uno de estos seres benéficos, espero aceptará gustoso los tributosde gratitud que, por mi órgano, le paga mi patria.

V. E. nos hace un verdadero servicio ofreciéndonos su activacooperación al restablecimiento de la independencia de América; y ésteserá tanto mayor si V. E. logra atraer a nuestra causa al mayor númeroposible de militares españoles, que quieran adoptar una patria libre en elhemisferio americano. Nada es tan precioso para nosotros como laadquisición de militares expertos y experimentados, acostumbrados anuestros usos e iguales a nosotros en lengua y religión. V. E., y losbravos que tengan la generosidad de acompañarle, serán recibidos conel honor que merecen los bienhechores de la república. Serán admitidoscon los grados que les corresponden por sus méritos y servicios. V. E.debe contar sobre este particular con todas las seguridades que desee.

El señor Luis López Méndez podrá concluir con V. E. y demásjefes y oficiales las estipulaciones que juzgue V. E. convenientes, antesde emprender su viaje a Venezuela.

Dios guarde a V. E. muchos años.

22

“Una soladebe ser la patria de todos

los americanos”

Mensaje al Excmo. señor Juan Martín de Pueyrredón -supremo directorde las Provincias Unidas del Río de la Plata- desde Angostura, el 12 dejunio de 1818, con el cual se establecen las relaciones de afecto ysolidaridad entre los extremos del continente sudamericano. Fue publicadoen el Correo del Orinoco del 27 de junio de 1818.

Excelentísimo señor:

Tengo el honor de contestar el despacho que, con fecha 19 de noviem-bre de 1816, se ha servido V. E. dirigirme, y cuyo retardo, aunqueharto sensible, no ha podido disminuir el inexplicable júbilo de micorazón al ver iniciadas las relaciones que mucho tiempo ha deseába-mos establecer. V. E., salvando los inconvenientes que la distancia, laincomunicación y la falta de vías directas presentaban, ha adelantado un

128

Page 123: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

paso que da una nueva vida a ambos gobiernos haciéndonos conocerrecíprocamente.

V. E. hace a mi patria el honor de contemplarla como un monu-mento solitario, que recordará a la América el precio de la libertad yrenovará la memoria de un pueblo magnánimo e incorruptible. Sinduda, Venezuela consagrada toda a la santa libertad ha considerado sussacrificios como triunfos. Sus torrentes de sangre, el incendio de suspoblaciones, la ruina absoluta de todas las creaciones del hombre, y aunde la naturaleza, todo lo ha ofrecido en las aras de la patria.

Nada es comparable a la bondad con que V. E. me colma deelogios inmerecidos. Yo apenas he podido seguir con trémulo paso lainmensa carrera a que mi patria me guía. No he sido más que un débilinstrumento puesto en acción por el gran movimiento de mis conciuda-danos. Yo tributo a V. E. las gracias más expresivas por la honra quemi patria y yo hemos recibido de V. E. y del pueblo independientede la América del Sur; de ese pueblo que es la gloria del hemisferiode Colón, el sepulcro de los tiranos y conquistadores, y el baluartede la independencia americana. Acepte V. E. los votos de admiraciónque me apresuro a tributar a las virtudes cívicas, a los talentos polí-ticos y a los timbres militares del pueblo de Buenos Aires y su ilustredirector.

La proclama que V. E. se ha dignado dirigirnos es una brillanteprueba de los sentimientos fraternales y altamente generosos de nues-tros hermanos del sur. Con la mayor satisfacción retorno a V. E. larespuesta cordial que, por mi órgano, han querido transmitir misconciudadanos a los hijos del Río de la Plata. En ella sólo debenapreciarse los sentimientos de tierna solicitud que animan a todos losvenezolanos hacia sus dignos compatriotas meridionales.

V. E. debe asegurar a sus nobles conciudadanos, que no sola-mente serán tratados y recibidos aquí como miembros de una repúblicaamiga, sino como miembros de nuestra sociedad venezolana. Una soladebe ser la patria de todos los americanos, ya que en todo hemos tenidouna perfecta unidad.

Excelentísimo señor: cuando el triunfo de las armas de Venezuelacomplete la obra de su independencia, o que circunstancias más favora-bles nos permitan comunicaciones más frecuentes y relaciones másestrechas, nosotros nos apresuraremos, con el más vivo interés, aentablar, por nuestra parte, el pacto americano, que, formando detodas nuestras repúblicas un cuerpo político, presente la América almundo con un aspecto de majestad y grandeza sin ejemplo en lasnaciones antiguas. La América así unida, si el cielo nos concede estedeseado voto, podrá llamarse la reina de las naciones, y la madre de lasrepúblicas.

Yo espero que el Río de la Plata, con su poderoso influjo,

129

Page 124: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

cooperará eficazmente a la perfección del edificio político a que hemosdado principio desde el primer día de nuestra regeneración.

Dios guarde a V. E. muchos años.Excelentísimo señor.

Pedro B. MéndezSecretario

Bolívar

23

Gratitud a los que traen ciencias,artes, industrias, talentos y virtudes

Carta fechada en Angostura el 17 de septiembre de 1818, al Sr. generalJohn D’Evereux, para los inmigrantes que América Latina espera.

Señor:

Sensible a los grandes esfuerzos que hizo Vd. en servicio de mi patria,ya desde antes había tenido la satisfacción de saber, por su importantecarta del 4 de julio del año pasado, que Venezuela tenía el alto honor deser preferida por Vd. y de su intención de prestarle sus servicios.

En mi contestación del 30 de junio último, de la cual mando a Vd.duplicado, aunque supongo que Vd. recibió la carta, manifesté queaceptaba el generoso ofrecimiento de Vd.

Confiando absolutamente en la sinceridad de su consejo, conven-cido de la gran ventaja que significa para mi patria el poder contarlo aVd. entre sus hijos adoptivos, deseo testificarle, por todos los modosposibles, la gratitud de Venezuela, mi particular consideración haciaVd. y la alta estima con que mira la América aquellos virtuosos ymagnánimos extranjeros que prefieren la libertad a la esclavitud, y,abandonando su propio país, vienen a América trayendo ciencias, artes,industrias, talentos y virtudes. En consecuencia, general, puede Vd.confiar implícitamente en que tendrá el rango militar correspondienteal que en otras circunstancias podría obtener en su propio país; nopuedo decir más, ni prometerle más en forma concreta y positiva; perole aseguro que sus regimientos o legión gozarán, por lo menos, de losmismos privilegios y protección que gozan todos los otros en virtud delpacto que nos une. Bajo mi responsabilidad agrego que la importanciade sus servicios será mayor en proporción del número de tropas quecompongan su legión; mientras mayor sea el número, el gobiernoaprovechará todas las oportunidades de mostrarle a Vd. su gratitud.

130

Page 125: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Reitérole las sinceras seguridades de amistad, estima y alta conside-ración con que tengo el honor de ser, general, su más obligado yobediente servidor.

Bolívar

24

Solemne y efectiva creación de la república sobre la libertady el derecho. Las razones de la Constitución.

La cuenta esencial de sus actos

Discurso de Angostura, considerado de manera unánime por la críticahistórica como el escrito principal de Bolívar. Leído ante el Congreso deVenezuela en su instalación, en la ciudad de Angostura, el 15 de febrerode 1819.

Señor. Dichoso el ciudadano que bajo el escudo de las armas de sumando ha convocado la soberanía nacional para que ejerza su voluntadabsoluta! Yo, pues, me cuento entre los seres más favorecidos de laDivina Providencia, ya que he tenido el honor de reunir a los represen-tantes del pueblo de Venezuela en este augusto Congreso, fuente de laautoridad legítima, depósito de la voluntad soberana y árbitro deldestino de la nación.

Al trasmitir a los representantes del pueblo el poder supremo quese me había confiado, colmo los votos de mi corazón, los de misconciudadanos y los de nuestras futuras generaciones, que todo loesperan de vuestra sabiduría, rectitud y prudencia. Cuando cumplo coneste dulce deber, me liberto de la inmensa autoridad que me agobiaba,como de la responsabilidad ilimitada que pesaba sobre mis débilesfuerzas. Solamente una necesidad forzosa, unida a la voluntad impe-riosa del pueblo, me habría sometido al terrible y peligroso encargo de“dictador jefe supremo de la república”Pero ya respiro devolviéndoosesta autoridad, que con tanto riesgo, dificultad y pena he logradomantener en medio de las tribulaciones más horrorosas que puedenafligir a un cuerpo social!

No ha sido la época de la república, que he presidido, una meratempestad política, ni una guerra sangrienta, ni una anarquía popular,ha sido, sí, el desarrollo de todos los elementos desorganizadores: hasido la inundación de un torrente infernal que ha sumergido la tierra deVenezuela. Un hombre y un hombre como yo! qué diques podríaoponer al ímpetu de estas devastaciones? En medio de este piélago deangustias no he sido más que un vil juguete del huracán revolucionario

131

Page 126: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

que me arrebataba como una débil paja. Yo no he podido hacer ni bienni mal: fuerzas irresistibles han dirigido la marcha de nuestros sucesos;atribuírmelos no sería justo y sería darme una importancia que nomerezco. Queréis conocer los autores de los acontecimientos pasadosy del orden actual? Consultad los anales de España, de América, deVenezuela; examinad las leyes de Indias, el régimen de los antiguosmandatarios, la influencia de la religión y del dominio extranjero;observad los primeros actos del gobierno republicano, la ferocidad denuestros enemigos y el carácter nacional. No me preguntéis sobre losefectos de estos trastornos para siempre lamentables; apenas se mepuede suponer simple instrumento de los grandes móviles que hanobrado sobre Venezuela; sin embargo, mi vida, mi conducta, todas misacciones públicas y privadas están sujetas a la censura del pueblo.Representantes! vosotros debéis juzgarlas. Yo someto la historia de mimando a vuestra imparcial decisión; nada añadiré para excusarla; ya hedicho cuanto puede hacer mi apología. Si merezco vuestra aprobación,habré alcanzado el sublime título de buen ciudadano, preferible para míal de Libertador que me dio Venezuela, al de Pacificador que me dioCundinamarca, y a los que el mundo entero puede dar.

Legisladores! Yo deposito en vuestras manos el mando supremode Venezuela. Vuestro es ahora el augusto deber de consagraros a lafelicidad de la república: en vuestras manos está la balanza de nuestrosdestinos, la medida de nuestra gloria: ellas sellarán los decretos quefijen nuestra Libertad. En este momento el jefe supremo de la repúblicano es más que un simple ciudadano; y tal quiere quedar hasta la muerte.Serviré sin embargo en la carrera de las armas mientras haya enemigosen Venezuela. Multitud de beneméritos hijos tiene la patria capaces dedirigirla, talentos, virtudes, experiencia y cuanto se requiere paramandar a hombres libres son el patrimonio de muchos de los que aquírepresentan el pueblo; y fuera de este soberano Cuerpo se encuentranciudadanos que en todas épocas han mostrado valor para arrostrar lospeligros, prudencia para evitarlos y el arte en fin de gobernarse y degobernar a otros. Estos ilustres varones merecerán sin duda los sufra-gios del Congreso y a ellos se encargará del gobierno, que tan cordial ysinceramente acabo de renunciar para siempre.

La continuación de la autoridad en un mismo individuo frecuente-mente ha sido el término de los gobiernos democráticos. Las repetidaselecciones son esenciales en los sistemas populares, porque nada es tanpeligroso como dejar permanecer largo tiempo en un mismo ciudadanoel poder. El pueblo se acostumbra a obedecerle, y él se acostumbra amandarlo; de donde se origina la usurpación y la tiranía. Un justo celoes la garantía de la libertad republicana, y nuestros ciudadanos debentemer con sobrada justicia que el mismo magistrado que los hamandado mucho tiempo, los mande perpetuamente.

Page 127: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Ya, pues, que por este acto de mi adhesión a la libertad deVenezuela puedo aspirar a la gloria de ser contado entre sus más fielesamantes; permitidme, señor, que exponga con la franqueza de unverdadero republicano mi respetuoso dictamen en este proyecto deConstitución que me tomo la libertad de ofreceros en testimonio de lasinceridad y del candor de mis sentimientos. Como se trata de la saludde todos, me atrevo a creer que tengo derecho para ser oído por losrepresentantes del pueblo. Yo sé muy bien que vuestra sabiduría no hamenester de consejos, y sé también que mi proyecto acaso os pareceráerróneo, impracticable. Pero, señor, aceptad con benignidad este tra-bajo, que más bien es el tributo de mi sincera sumisión al Congreso queel efecto de una levedad presuntuosa. Por otra parte, siendo vuestrasfunciones la creación de un cuerpo político y aun se podría decir lacreación de una sociedad entera, rodeada de todos los inconvenientesque presenta una situación la más singular y difícil, quizás el grito de unciudadano puede advertir la presencia de un peligro encubierto odesconocido.

Echando una ojeada sobre lo pasado, veremos cuál es la base de laRepública de Venezuela.

Al desprenderse la América de la monarquía española, se haencontrado semejante al Imperio Romano, cuando aquella enormemasa cayó dispersa en medio del antiguo mundo. Cada desmembraciónformó entonces una nación independiente conforme a su situación o asus intereses; pero con la diferencia de que aquellos miembros volvían arestablecer sus primeras asociaciones. Nosotros ni aun conservamos losvestigios de lo que fue en otro tiempo: no somos europeos, no somosindios, sino una especie media entre los aborígenes y los españoles.Americanos por nacimiento y europeos por derechos, nos hallamos enel conflicto de disputar a los naturales los títulos de posesión y demantenemos en el país que nos vio nacer, contra la oposición de losinvasores; así nuestro caso es el más extraordinario y complicado.Todavía hay más; nuestra suerte ha sido siempre puramente pasiva,nuestra existencia política ha sido siempre nula y nos hallamos en tantamás dificultad para alcanzar la libertad, cuanto que estábamos coloca-dos en un grado inferior al de la servidumbre; porque no solamente senos había robado la libertad, sino también la tiranía activa y doméstica.Permítaseme explicar esta paradoja. En el régimen absoluto, el poderautorizado no admite límites. La voluntad del déspota es la ley supremaejecutada arbitrariamente por los subalternos que participan de laopresión organizada en razón de la autoridad de que gozan. Ellos estánencargados de las funciones civiles, políticas, militares y religiosas;pero al fin son persas los sátrapas de Persia, son turcos los bajáes delgran señor, son tártaros los sultanes de la Tartaria. La China no envíaa buscar mandarines a la cuna de Gengis Kan que la conquistó. Por

133

Page 128: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

el contrario la América, todo lo recibía de España que realmente lahabía privado del goce y ejercicio de la tiranía activa; no permitiéndo-nos sus funciones en nuestros asuntos domésticos y administracióninterior. Esta abnegación nos había puesto en la imposibilidad deconocer el curso de los negocios públicos: tampoco gozábamos de laconsideración personal que inspira el brillo del poder a los ojos de lamultitud, y que es de tanta importancia en las grandes revoluciones. Lodiré de una vez, estábamos abstraídos, ausentes del universo en cuantoera relativo a la ciencia del gobierno.

Uncido el pueblo americano al triple yugo de la ignorancia, de latiranía y del vicio, no hemos podido adquirir ni saber, ni poder, nivirtud. Discípulos de tan perniciosos maestros, las lecciones que hemosrecibido y los ejemplos que hemos estudiado son los más destructores.Por el engaño se nos ha dominado más que por la fuerza; y por el viciose nos ha degradado más bien que por la superstición. La esclavitud esla hija de las tinieblas; un pueblo ignorante es un instrumento ciego desu propia destrucción; la ambición, la intriga abusan de la credulidad yde la inexperiencia de hombres ajenos de todo conocimiento político,económico o civil; adoptan como realidades las que son puras ilusiones;toman la licencia por la libertad, la traición por el patriotismo, lavenganza por la justicia. Semejante a un robusto ciego que instigadopor el sentimiento de sus fuerzas, marcha con la seguridad del hombremás perspicaz, y dando en todos los escollos no puede rectificar suspasos. Un pueblo pervertido si alcanza su libertad, muy pronto vuelvea perderla; porque en vano se esforzarán en mostrarle que la felicidadconsiste en la práctica de la virtud; que el imperio de las leyes es máspoderoso que el de los tiranos, porque son más inflexibles, y todo debesometerse a su benéfico rigor; que las buenas costumbres, y no lafuerza, son las columnas de las leyes; que el ejercicio de la justicia es elejercicio de la libertad. Así, legisladores, vuestra empresa es tanto másímproba cuanto que tenéis que constituir a hombres pervertidos por lasilusiones del error y por incentivos nocivos. La libertad, dice Rous-seau, es un alimento suculento, pero de difícil digestión. Nuestrosdébiles conciudadanos tendrán que enrobustecer su espíritu muchoantes que logren digerir el saludable nutritivo de la libertad. Entumidossus miembros por las cadenas, debilitada su vista en las sombras de lasmazmorras y aniquilados por las pestilencias serviles, serán capaces demarchar con pasos firmes hacia el augusto templo de la libertad? Seráncapaces de admirar de cerca sus espléndidos rayos y respirar sinopresión el éter puro que allí reina?

Meditad bien vuestra elección legisladores. No olvidéis que váis aechar los fundamentos a un pueblo naciente que podrá elevarse a lagrandeza que la naturaleza le ha señalado, si vosotros proporcionáis SU

base al eminente rango que le espera. Si vuestra elección no está

134

Page 129: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

presidida por el genio tutelar de Venezuela que debe inspiraros elacierto al escoger la naturaleza y la forma de gobierno que váis aadoptar para la felicidad del pueblo; si no acertáis, repito, la esclavitudserá el término de nuestra transformación.

El movimiento de la libertad

Los anales de los tiempos pasados os presentarán millares de gobiernos.Traed a la imaginación las naciones que han brillado sobre la tierra,y contemplaréis afligidos que casi toda la tierra ha sido, y aún es,víctima de sus gobiernos. Observaréis muchos sistemas de manejarhombres, mas todos para oprimirlos; y si la costumbre de mirar algénero humano conducido por pastores de pueblos no disminuyese elhorror de tan chocante espectáculo, nos pasmaríamos al ver nuestradócil especie pacer sobre la superficie del globo como viles rebañosdestinados a alimentar a sus crueles conductores. La naturaleza a laverdad nos dota al nacer del incentivo de la libertad; mas sea pereza,sea propensión inherente a la humanidad, lo cierto es que ella reposatranquila aunque ligada con las trabas que le imponen. Al contemplarlaen este estado de prostitución, parece que tenemos razón para persuadir-nos que los más de los hombres tienen por verdadera aquella humi-llante máxima, que más cuesta mantener el equilibrio de la libertad quesoportar el peso de la tiranía. Ojalá que esta máxima contraria a lamoral de la naturaleza fuese falsa! Ojalá que esta máxima no estuviesesancionada por la indolencia de los hombres con respecto a sus dere-chos más sagrados!

Muchas naciones antiguas y modernas han sacudido la opresión;pero son rarísimas las que han sabido gozar de algunos preciososmomentos de libertad; muy luego han recaído en sus antiguos viciospolíticos: porque son los pueblos más bien que los gobiernos los quearrastran tras sí la tiranía. El hábito de la dominación los hace insensi-bles a los encantos del honor y de la prosperidad nacional; y miran conindolencia la gloria de vivir en el movimiento de la libertad, bajo latutela de leyes dictadas por su propia voluntad. Los fastos del universoproclaman esta espantosa verdad.

Sólo la democracia, en mi concepto, es susceptible de una absolutalibertad; pero, cuál es el gobierno democrático que ha reunido a untiempo, poder, prosperidad y permanencia? Y no se ha visto por elcontrario la aristocracia, la monarquía cimentar grandes y poderososimperios por siglos y siglos ? Qué gobierno más antiguo que el deChina? Qué república ha excedido en duración a la de Esparta, a la deVenecia? El Imperio Romano no conquistó la tierra? NO tiene laFrancia catorce siglos de monarquía? Quién es más grande que la

135

Page 130: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Inglaterra? Estas naciones, sin embargo, han sido o son aristocracias ymonarquías.

A pesar de tan crueles reflexiones, yo me siento arrebatado de gozopor los grandes pasos que ha dado nuestra república al entrar en sunoble carrera. Amando lo más útil, animada de lo más justo y aspi-rando a lo más perfecto al separarse Venezuela de la nación española, harecobrado su independencia, su libertad, su igualdad, su soberaníanacional. Constituyéndose en una república democrática, proscribió lamonarquía, las distinciones, la nobleza, los fueros, los privilegios;declaró los derechos del hombre, la libertad de obrar, de pensar, dehablar y de escribir. Estos actos eminentemente liberales jamás serándemasiado admirados por la pureza que los ha dictado. El primerCongreso de Venezuela ha estampado en los anales de nuestra legisla-ción con caracteres indelebles la majestad del pueblo dignamenteexpresada, al sellar el acto social más capaz de formar la dicha de unanación. Necesito de recoger todas mis fuerzas para sentir, con toda lavehemencia de que soy susceptible, el supremo bien que encierra en síeste código inmortal de nuestros derechos y de nuestras leyes. Perocómo osaré decirlo! ¿Me atreveré yo a profanar con mi censura lastablas sagradas de nuestras leyes. .? Hay sentimientos que no sepueden contener en el pecho de un amante de la patria; ellos rebosanagitados por su propia violencia, y a pesar del mismo que los abriga,una fuerza imperiosa los comunica. Estoy penetrado de la idea de que elgobierno de Venezuela debe reformarse; y que aunque muchos ilustresciudadanos piensan como yo, no todos tienen el arrojo necesario paraprofesar públicamente la adopción de nuevos principios. Esta considera-ción me insta a tomar la iniciativa en un asunto de la mayor gravedad, yen que hay sobrada audacia en dar avisos a los consejeros del pueblo.

Cuanto más admiro la excelencia de la Constitución Federal deVenezuela, tanto más me persuado de la imposibilidad de su aplicacióna nuestro estado. Y según mi modo de ver es un prodigio que sumodelo en el Norte de América subsista tan prósperamente y no setrastorne al aspecto del primer embarazo o peligro. A pesar de queaquel pueblo es un modelo singular de virtudes políticas y de ilustra-ción moral; no obstante que la libertad ha sido su cuna, se ha criado enla libertad y se alimenta de pura libertad: lo diré todo, aunque bajo demuchos respectos, este pueblo es único en la historia del génerohumano, es un prodigio, repito, que un sistema tan débil y complicadocomo el federal haya podido regirlo en circunstancias tan difíciles ydelicadas como las pasadas. Pero sea lo que fuere, de este gobierno conrespecto a la nación americana, debo decir, que ni remotamente haentrado en mi idea asimilar la situación y naturaleza de los estados tandistintos como el inglés americano y el americano español. ¿No seríamuy difícil aplicar a España el código de libertad política, civil y

136

Page 131: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

religiosa de Inglaterra? Pues aun es más difícil adaptar en Venezuela lasleyes del Norte de América. NO dice el Espíritu de las leyes que éstasdeben ser propias para el pueblo que se hacen? que es una grancasualidad que las de una nación puedan convenir a otra? que las leyesdeben ser relativas a lo físico del país, al clima, a la calidad del terreno, asu situación, a su extensión, al género de vida de los pueblos? referirseal grado de libertad que la Constitución puede sufrir, a la religión delos habitantes, a sus inclinaciones, a sus riquezas, a su número, a sucomercio, a sus costumbres, a sus modales? He aquí el código quedebíamos consultar, y no el de Washington!!!

La Constitución venezolana sin embargo de haber tomado susbases de la más perfecta, si se atiende a la corrección de los principios ya los efectos benéficos de su administración difirió esencialmente de laamericana en un punto cardinal, y sin duda el más importante. ElCongreso de Venezuela como el americano participa de algunas de lasatribuciones del poder ejecutivo. Nosotros, además, subdividimos estepoder habiéndolo sometido a un cuerpo colectivo sujeto por consi-guiente a los inconvenientes de hacer periódica la existencia delgobierno, de suspenderla y disolverla siempre que se separan susmiembros. Nuestro triunvirato carece, por decirlo así, de unidad, decontinuación y de responsabilidad individual; está privado de acciónmomentánea, de vida continua, de uniformidad real, de responsabili-dad inmediata, y un gobierno que no posee cuanto constituye sumoralidad debe llamarse nulo.

Aunque las facultades del presidente de los Estados Unidos estánlimitadas con restricciones excesivas, ejerce por sí solo todas lasfunciones gubernativas que la Constitución le atribuye, y es indubitableque su administración debe ser más uniforme, constante y verdadera-mente propia, que la de un poder diseminado entre varios individuoscuyo compuesto no puede ser menos que monstruoso.

El poder judiciario en Venezuela es semejante al americano, indefi-nido en duración, temporal y no vitalicio; goza de toda la independen-cia que le corresponde.

El primer Congreso en su Constitución federal más consultó elespíritu de las provincias que la idea sólida de formar una repúblicaindivisible y central. Aquí cedieron nuestros legisladores al empeñoinconsiderado de aquellos provinciales seducidos por el deslumbrantebrillo de la felicidad d del l pueblo americano, pensando que las bendi-ciones de que goza son debidas exclusivamente a la forma de gobiernoy no al carácter y costumbres de los ciudadanos. Y en efecto, elejemplo de los Estados Unidos por su peregrina prosperidad erademasiado lisonjero para que no fuese seguido. Quién puede resistir alatractivo victorioso del goce pleno y absoluto de la soberanía, de laindependencia, de la libertad? Quién puede resistir al amor que

137

Page 132: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

inspira un gobierno inteligente que liga, a un mismo tiempo, losderechos particulares, a los derechos generales, que forma de la volun-tad común la ley suprema de la voluntad individual? Quién puederesistir al imperio de un gobierno bienhechor que con una mano hábil,activa y poderosa dirige siempre, y en todas partes, todos sus resorteshacia la perfección social, que es el fin único de las institucioneshumanas?

Mas por halagüeño que parezca, y sea en efecto este magníficosistema federativo, no era dado a los venezolanos gozarlo repentina-mente al salir de las cadenas. No estábamos preparados para tanto bien;el bien, como el mal, da la muerte cuando es súbito y excesivo. Nuestraconstitución moral no tenía todavía la consistencia necesaria pararecibir el beneficio de un gobierno completamente representativo, y tansublime cuanto que podía ser adaptado a una república de santos.

Representantes del pueblo! Vosotros estáis llamados para consa-grar o suprimir cuanto os parezca digno de ser conservado, reformadoo desechado en nuestro pacto social. A vosotros pertenece el corregir laobra de nuestros primeros legisladores; yo querría decir que a voso-tros toca cubrir una parte de la belleza que contiene nuestro códigopolítico; porque no todos los corazones están formados para amar atodas las beldades; ni todos los ojos son capaces de soportar la luzcelestial de la perfección. El libro de los Apóstoles, la moral de Jesús, laobra divina que nos ha enviado la Providencia para mejorar a loshombres, tan sublime, tan santa, es un diluvio de fuego en Constanti-nopla, y el Asia entera ardería en vivas llamas si este libro de paz sele impusiese repentinamente por código de religión, de leyes y decostumbres.

Mestizaje e igualdad

Séame permitido llamar la atención del Congreso sobre una materiaque puede ser de una importancia vital. Tengamos presente quenuestro pueblo no es el europeo, ni el americano del norte, que másbien es un compuesto de África y de América, que una emanación de laEuropa; pues que hasta la España misma deja de ser europea por susangre africana, por su instituciones y por su carácter. Es imposibleasignar con propiedad a qué familia humana pertenecemos. La mayorparte del indígena se ha aniquilado, el europeo se ha mezclado con elamericano y con el africano, y éste se ha mezclado con el indio y con eleuropeo. Nacidos todos del seno de una misma madre, nuestros padresdiferentes en origen y en sangre, son extranjeros, y todos difierenvisiblemente en la epidermis; esta desemejanza trae un reato de lamayor trascendencia.

Los ciudadanos de Venezuela gozan todos por la Constitución,

138

Page 133: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

intérprete de la naturaleza, de una perfecta igualdad política. Cuandoesta igualdad no hubiese sido un dogma en Atenas, en Francia y enAmérica, deberíamos nosotros consagrarlo para corregir la diferenciaque aparentemente existe. Mi opinión es, legisladores, que el principiofundamental de nuestro sistema depende inmediata y exclusivamentede la igualdad establecida y practicada en Venezuela. Que los hombresnacen todos con derechos iguales a los bienes de la sociedad estásancionado por la pluralidad de los sabios; como también lo está, queno todos los hombres nacen igualmente aptos a la obtención de todoslos rangos; pues todos deben practicar la virtud y no todos la practican;todos deben ser valerosos, y todos no lo son, todos deben poseertalentos, y todos no los poseen. De aquí viene la distinción efectiva quese observa entre los individuos de la sociedad más liberalmente estable-cida. Si el principio de la igualdad política es generalmente reconocido,no lo es menos el de la desigualdad física y moral. La naturaleza hace alos hombres desiguales, en genio, temperamento, fuerzas y caracteres.Las leyes corrigen esta diferencia porque colocan al individuo en lasociedad para que la educación, la industria, las artes, los servicios, lasvirtudes le den una igualdad ficticia, propiamente llamada política ysocial. Es una inspiración eminentemente benéfica, la reunión de todaslas clases en un estado, en que la diversidad se multiplicaba en razón dela propagación de la especie. Por este solo paso se ha arrancado de raízla cruel discordia. Cuántos celos, rivalidades y odios se han evitado!

Habiendo ya cumplido con la justicia, con la humanidad, cumpla-mos ahora con la política, con la sociedad, allanando las dificultadesque opone un sistema tan sencillo y natural, más tan débil que el menortropiezo lo trastorna, lo arruina. La diversidad de origen requiere unpulso infinitamente fume, un tacto infinitamente delicado para manejaresta sociedad heterogénea cuyo complicado artificio se disloca, sedivide, se disuelve con la más ligera alteración.

El sistema de gobierno más perfecto es aquel que produce mayorsuma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayorsuma de estabilidad política. Por las leyes que dictó el primer Con-greso tenemos derecho de esperar que la dicha sea el dote de Venezuela;y por las vuestras, debemos lisonjearnos que la seguridad y la estabili-dad eternizarán esta dicha. A vosotros toca resolver el problema.Cómo, después de haber roto todas las trabas de nuestra antiguaopresión, podemos hacer la obra maravillosa de evitar que los restos denuestros duros hierros no se cambien en armas liberticidas? Las reli-quias de la dominación española permanecerán largo tiempo antes quelleguemos a anonadarlas: el contagio del despotismo ha impregnadonuestra atmósfera, y ni el fuego de la guerra, ni el específico de nuestrassaludables leyes han purificado el aire que respiramos. Nuestras manosya están libres, y todavía nuestros corazones padecen de las dolencias de

139

Page 134: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

la servidumbre. El hombre, al perder la libertad, decía Homero, pierdela mitad de su espíritu.

Un gobierno repúblicano ha sido, es y debe ser el de Venezuela;sus bases deben ser la soberanía del pueblo: la división de los poderes,la libertad civil, la proscripción de la esclavitud, la abolición de lamonarquía y de los privilegios. Necesitamos de la igualdad pararefundir, digámoslo así, en un todo, la especie de los hombres, lasopiniones políticas y las costumbres públicas. Luego extendiendo lavista sobre el vasto campo que nos falta por recorrer, fijemos laatención sobre los peligros que debemos evitar. Que la historia nossirva de guía en esta carrera. Atenas la primera nos da el ejemplo másbrillante de una democracia absoluta, y al instante, la misma Atenasnos ofrece el ejemplo más melancólico de la extrema debilidad de estaespecie de gobierno. El más sabio legislador de Grecia no vio conser-var su república diez años, y sufrió la humillación de reconocer lainsuficiencia de la democracia absoluta para regir ninguna especie desociedad, ni aun la más culta, morígera y limitada, porque sólo brillacon relámpagos de libertad. Reconozcamos, pues, que Solón ha desen-gañado al mundo; y le ha enseñado cuán difícil es dirigir por simplesleyes a los hombres.

La República de Esparta que parecía una invención quimérica,produjo más efectos reales que la obra ingeniosa de Solón. Gloria,virtud, moral, y por consiguiente la felicidad nacional, fue el resultadode la legislación de Licurgo. Aunque dos reyes en un Estado son dosmonstruos para devorarlo, Esparta poco tuvo que sentir de su dobletrono, en tanto que Atenas se prometía la suerte más espléndida, conuna soberanía absoluta, libre elección de magistrados, frecuentementerenovados, leyes suaves, sabias y políticas. Pisístrato, usurpador ytirano fue más saludable a Atenas que sus leyes; y Pericles, aunquetambién usurpador, fue el más útil ciudadano. La República de Tebasno tuvo más vida que la de Pelópidas y Epaminondas; porque a vecesson los hombres, no los principios, los que forman los gobiernos. Loscódigos, los sistemas, los estatutos por sabios que sean son obrasmuertas que poco influyen sobre las sociedades: íhombres virtuosos,hombres patriotas, hombres ilustrados constituyen las repúblicas!

La Constitución romana es la que mayor poder y fortuna haproducido a ningún pueblo del mundo; ahí no había una exactadistribución de los poderes. Los cónsules, el senado, el pueblo, yaeran legisladores, ya magistrados, ya jueces; todos participaban detodos los poderes. El ejecutivo, compuesto de dos cónsules, padecía elmismo inconveniente que el de Esparta. A pesar de su deformidad nosufrió la república la desastrosa discordancia que toda previsión habríasupuesto inseparable de una magistratura compuesta de dos indivi-duos, igualmente autorizados con las facultades de un monarca. Un

140

Page 135: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

gobierno cuya única inclinación era la conquista no parecía destinado acimentar la felicidad de su nación. Un gobierno monstruoso y pura-mente guerrero elevó a Roma al más alto esplendor de virtud y degloria; y formó de la tierra, un dominio romano para mostrar a loshombres de cuánto son capaces las virtudes políticas y cuán indiferentessuelen ser las instituciones,

Y pasando de los tiempos antiguos a los modernos encontraremosla Inglaterra y la Francia, llamando la atención de todas las naciones,y dándoles lecciones elocuentes de todas especies en materias degobierno. La revolución de estos dos grandes pueblos como unradiante meteoro ha inundado al mundo con tal profusión de lucespolíticas que ya todos los seres que piensan han aprendido cuáles sonlos derechos del hombre y cuáles sus deberes; en qué consiste laexcelencia de los gobiernos y en qué consisten sus vicios. Todos sabenapreciar el valor intrínseco de las teorías especulativas de los filósofos ylegisladores modernos. En fin, este astro, en su luminosa carrera, aunha encendido los pechos de los apáticos españoles, que también se hanlanzado en el torbellino político; han hecho sus efímeras pruebas delibertad, han reconocido su incapacidad para vivir bajo el dulce domi-nio de las leyes y han vuelto a sepultarse en sus prisiones y hoguerasinmemoriales.

Aquí es el lugar de repetiros, legisladores, lo que os dice elelocuente Volney en la dedicatoria de sus Ruinas de Palmira: “A lospueblos nacientes de las Indias castellanas, a los jefes generosos que losguían a la libertad: que los errores e infortunios del mundo antiguoenseñen la sabiduría y la felicidad al mundo nuevo.” Que no se pierdan,pues, las lecciones de la experiencia; y que las secuelas de Grecia, deRoma, de Francia, de Inglaterra y de América nos instruyan en la difícilciencia de crear y conservar las naciones con leyes propias, justas,legítimas, y sobre todo útiles. No olvidando jamás que la excelencia deun gobierno no consiste en su teórica, en su forma, ni en su meca-nismo, sino en ser apropiado a la naturaleza y al carácter de la naciónpara quien se instituye.

Roma y la Gran Bretaña son las naciones que más han sobresalidoentre las antiguas y modernas; ambas nacieron para mandar y ser libres;pero ambas se constituyeron no con brillantes formas de libertad, sinocon establecimientos sólidos. Así, pues, os recomiendo, representantes,el estudio de la Constitución británica que es la que parece destinada aoperar el mayor bien posible a los pueblos que la adoptan; pero porperfecta que sea, estoy muy lejos de proponeros su imitación servil.Cuando hablo del gobierno británico sólo me refiero a lo que tiene derepublicanismo, y a la verdad ¿puede llamarse pura monarquía unsistema en el cual se reconoce la soberanía popular, la división yel equilibrio de los poderes, la libertad civil, de conciencia, de

Page 136: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

imprenta, y cuanto es sublime en la política? Puede haber más libertaden ninguna especie de república ? ¿Y puede pretenderse a más en elorden social? Yo os recomiendo esta constitución popular, la división yel equilibrio de los poderes, la libertad civil, de como la más digna deservir de modelo a cuantos aspiran al goce de los derechos del hombrey a toda la felicidad política que es compatible con nuestra frágilnaturaleza.

En nada alteraríamos nuestras leyes fundamentales si adoptásemosun poder legislativo semejante al Parlamento británico. Hemos divi-dido como los americanos la representación nacional en dos cámaras: lade Representantes y .el Senado. La primera está compuesta muysabiamente, goza de todas las atribuciones que le corresponden, y no essusceptible de una reforma esencial, porque la Constitución le ha dadoel origen, la forma y las facultades que requiere la voluntad del pueblopara ser legítima y competentemente representada.

Poderes e instituciones

Si el Senado en lugar de ser electivo fuese hereditario, sería en miconcepto la base, el lazo, el alma de nuestra república. Este cuerpo enlas tempestades políticas pararía los rayos del gobierno y rechazaría lasolas populares. Adicto al gobierno por el justo interés de su propiaconservación, se opondría siempre a las invasiones que el pueblointenta contra la jurisdicción y la autoridad de sus magistrados. Debe-mos confesarlo: los más de los hombres desconocen sus verdaderosintereses, y constantemente procuran asaltarlos en las manos de susdepositarios; el individuo pugna contra la masa, y la masa contra laautoridad. Por tanto, es preciso que en todos los gobiernos exista uncuerpo neutro que se ponga siempre de parte del ofendido y desarme alofensor. Este cuerpo neutro para que pueda ser tal no ha de deber suorigen a la elección del gobierno, ni a la del pueblo; de modo que gocede una plenitud de independencia que ni tema, ni espere nada de estasdos fuentes de autoridad. El Senado hereditario como parte del pueblo,participa de sus intereses, de sus sentimientos y de su espíritu. Por estacausa no se debe presumir que un Senado hereditario se desprenda delos intereses populares, ni olvide sus deberes legislativos. Los senadoresen Roma y los lores en Londres han sido las columnas más fu-messobre que se ha fundado el edificio de la libertad política y civil.

Estos senadores serán elegidos la primera vez por el Congreso.Los sucesores al Senado llaman la primera atención del gobierno, quedebería educarlos en un colegio especialmente destinado para instruiraquellos tutores, legisladores futuros de la patria. Aprenderían lasartes, las ciencias y las letras que adornan el espíritu de un hombrepúblico: desde su infancia ellos sabrían a qué carrera la Providencia los

142

Page 137: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

destinaba, y desde muy tiernos elevarían su alma a la dignidad que losespera.

De ningún modo sería una violación de la igualdad política lacreación de un Senado hereditario; no es una nobleza la que pretendoestablecer porque, como ha dicho un célebre republicano, sería destruira la vez la igualdad y la libertad. Es un oficio para el cual se debenpreparar los candidatos, y es un oficio que exige mucho saber y losmedios proporcionados para adquirir su instrucción. Todo no se debedejar al acaso y a la ventura en las elecciones: el pueblo se engaña másfácilmente que la naturaleza perfeccionada por el arte; y aunque esverdad que estos senadores no saldrían del seno de las virtudes, tambiénes verdad que saldrían del seno de una educación ilustrada. Por otraparte los libertadores de Venezuela son acreedores a ocupar siempre unalto rango en la república que les debe su existencia. Creo que laposteridad vería con sentimiento, anonadados los nombres ilustres desus primeros bienhechores; digo más, es del interés público, es de lagratitud de Venezuela, es del honor nacional, conservar con gloria hastala última posteridad una raza de hombres virtuosos, prudentes yesforzados que superando todos los obstáculos han fundado la repúblicaa costa de los más heroicos sacrificios. Y si el pueblo de Venezuela noaplaude la elevación de sus bienhechores, es indigno de ser libre y no loserá jamás.

Un Senado hereditario, repito, será la base fundamental del poderlegislativo, y por consiguiente será la base de todo gobierno. Igual-mente servirá de contrapeso para el gobierno y para el pueblo, será unapotestad intermedia que embote los tiros que recíprocamente se lanzanestos eternos rivales. En todas las luchas la calma de un tercero viene aser el órgano de la reconciliación, así el Senado de Venezuela será latraba de este edificio delicado y harto susceptible de impresionesviolentas, será el iris que calmará las tempestades y mantendrá laarmonía entre los miembros y la cabeza de este cuerpo político.

Ningún estímulo podrá adulterar un cuerpo legislativo investidode los primeros honores, dependiente de sí mismo sin temer nada delpueblo, ni esperar nada del gobierno; que no tiene otro objeto que el dereprimir todo principio de mal y propagar todo principio de bien; y queestá altamente interesado en la existencia de una sociedad en la cualparticipa de sus efectos funestos o favorables. Se ha dicho con dema-siada razón que la Cámara alta de Inglaterra es preciosa para la naciónporque ofrece un baluarte a la libertad; y yo añado que el Senado deVenezuela no sólo sería un baluarte de la libertad, sino un apoyo paraeternizar la república.

El poder ejecutivo británico está revestido de toda la autoridadsoberana que le pertenece; pero también está circunvalado de una triplelínea de diques, barreras, y estacadas. Es jefe del gobierno, pero sus

143

Page 138: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

ministros y subalternos dependen más de las leyes que de su autoridad,porque son personalmente responsables, y ni aun las mismas órdenes dela autoridad real los eximen de esta responsabilidad. Es generalísimodel Ejército y de la Marina; hace la paz y declara la guerra; pero elParlamento es el que decreta anualmente las sumas con que debenpagarse estas fuerzas militares. Si los tribunales y jueces dependen de él,las leyes emanan del Parlamento que las ha consagrado. Con elobjeto de neutralizar su poder, es inviolable y sagrada la persona delrey, y al mismo tiempo que le dejan libre la cabeza le ligan las manoscon que debe obrar. El soberano de la Inglaterra tiene tres formidablesrivales, su gabinete que debe responder al pueblo y al Parlamento; elSenado que defiende los intereses del pueblo como representante de lanobleza de que se compone; y la Cámara de los Comunes que sirve deórgano y de tribuna al pueblo británico: Además como los jueces sonresponsables del cumplimiento de las leyes, no se separan de ellas, y losadministradores del erario, siendo perseguidos no solamente por suspropias infracciones, sino aun por las que hace el mismo gobierno, seguardan bien de malversar los fondos públicos. Por más que se examinela naturaleza del poder ejecutivo en Inglaterra, no se puede hallar nadaque no incline a juzgar que es el más perfecto modelo, sea para unreino, sea para una aristocracia, sea para una democracia. Aplíquese aVenezuela este poder ejecutivo en la persona de un Presidente, nom-brado por el pueblo o por sus representantes, y habremos dado un granpaso hacia la felicidad nacional.

Cualquiera que sea el ciudadano que llene estas funciones, seencontrará auxiliado por la Constitución; autorizado para hacer bien,no podrá hacer mal, porque siempre que se someta a las leyes, susministros cooperarán con él; si por el contrario pretende infringirlas,sus propios ministros lo dejarán aislado en medio de la república, y aunlo acusarán delante del Senado. Siendo los ministros los responsables delas transgresiones que se cometan, ellos son los que gobiernan, porqueellos son los que las pagan. No es la menor ventaja de este sistema laobligación en que pone a los funcionarios inmediatos al poder ejecutivode tomar la parte más interesada y activa en las deliberaciones delgobierno, y a mirar como propio este departamento. Puede sucederque no sea el presidente un hombre de grandes talentos, ni de grandesvirtudes, y no obstante la carencia de estas cualidades esenciales, elpresidente desempeñará sus deberes de un modo satisfactorio; pues entales casos el ministerio haciendo todo por sí mismo lleva la carga delEstado.

Por exhorbitante que parezca la autoridad del poder ejecutivo deInglaterra, quizás no es excesiva en la República de Venezuela. Aquí elCongreso ha ligado las manos y hasta la cabeza a los magistrados. Estecuerpo deliberante ha asumido una parte de las funciones ejecutivas

144

Page 139: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

contra la máxima de Montesquieu que dice que un cuerpo represen-tante no debe tomar ninguna resolución activa: debe hacer Leyes y ver sise ejecutan las que hace. Nada es tan contrario a la armonía entre lospoderes como su mezcla. Nada es tan peligroso con respecto al pueblocomo la debilidad del ejecutivo, y si en un reino se ha juzgado necesarioconcederle tantas facultades, en una república son éstas infinitamentemás indispensables.

Fijemos nuestra atención sobre esta diferencia y hallaremos que elequilibrio de los poderes debe distribuirse de dos modos. En lasrepúblicas el ejecutivo debe ser el más fuerte, porque todo conspiracontra él; en tanto que en las monarquías el más fuerte debe ser ellegislativo, porque todo conspira en favor del monarca. La veneraciónque profesan los pueblos a la magistratura real es un prestigio queinfluye poderosamente a aumentar el respeto supersticioso que setributa a esta autoridad. El esplendor del trono, de la corona, de lapúrpura; el apoyo formidable que le presta la nobleza; las inmensasriquezas que generaciones enteras acumulan en una misma dinastía; laprotección fraternal que recíprocamente reciben todos los reyes, sonventajas muy considerables que militan en favor de la autoridad real yla hacen casi ilimitada. Estas mismas ventajas son, por consiguiente, lasque deben confirmar la necesidad de atribuir a un magistrado republi-cano, una suma mayor de autoridad que la que posee un príncipeconstitucional.

Un magistrado republicano es un individuo aislado en medio deuna sociedad; encargado de contener el ímpetu del pueblo hacia lalicencia, la propensión de los jueces y administradores hacia el abuso delas leyes. Está sujeto inmediatamente al cuerpo legislativo, al Senado, alpueblo; es un hombre solo resistiendo el ataque combinado de lasopiniones, de los intereses y de las pasiones del Estado social, que comodice Carnot, no hace más que luchar continuamente entre el deseo dedominar y el deseo de substraerse a la dominación. Es en fin un atletalanzado contra otra multitud de atletas.

Sólo puede servir de correctivo a esta debilidad, el vigor biencimentado y más bien proporcionado a la resistencia que necesaria-mente le oponen al poder ejecutivo, el legislativo, el judiciario, y elpueblo de una república. Si no se ponen al alcance del ejecutivo todoslos medios que una justa atribución le señala, cae inevitablemente en lanulidad o en su propio abuso; quiero decir, en la muerte del gobierno,cuyos herederos son la anarquía, la usurpación y la tiranía. Se quierecontener la autoridad ejecutiva con restricciones y trabas; nada es másjusto; pero que se advierta que los lazos que se pretenden conservar sefortifican sí, mas no se estrechan.

Que se fortifique, pues, todo el sistema del gobierno, y que elequilibrio se establezca de modo que no se pierda, y de modo que no

Page 140: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

sea su propia delicadeza una causa de decadencia. Por lo mismo queninguna forma de gobierno es tan débil como la democrática, suestructura debe ser de la mayor solidez; y sus instituciones consultarsepara la estabilidad. Si no es así, contemos con que se establece unensayo de gobierno, y no un sistema permanente; contemos con unasociedad díscola, tumultuaria y anárquica, y no con un establecimientosocial donde tengan su imperio la felicidad, la paz y la justicia.

Moderación y realismo

No seamos presuntuosos, legisladores; seamos moderados en nuestraspretensiones. No es probable conseguir lo que no ha logrado el génerohumano, lo que no han alcanzado las más grandes y sabias naciones. Lalibertad indefinida, la democracia absoluta son los escollos adonde hanido a estrellarse todas las esperanzas republicanas. Echad una miradasobre las repúblicas antiguas, sobre las repúblicas modernas, sobre lasrepúblicas nacientes; casi todas han pretendido establecerse absoluta-mente democráticas y a casi todas se les han frustrado sus justasaspiraciones. Son laudables ciertamente hombres que anhelan porinstituciones legítimas y por una perfección social; pero quién ha dichoa los hombres que ya poseen toda la sabiduría, que ya practican toda lavirtud, que exigen imperiosamente la liga del poder con la justicia?Á ngeles, no hombres, pueden únicamente existir libres, tranquilos ydichosos, ejerciendo todos la potestad soberana!

Ya disfruta el pueblo de Venezuela de los derechos que legítima yfácilmente puede gozar; moderemos ahora el ímpetu de las pretensionesexcesivas que quizás le suscitaría la forma de un gobierno incompetentepara él. Abandonemos las formas federales que no nos convienen;abandonemos el triunvirato del poder ejecutivo; y concentrándolo enun presidente, confiémosle la autoridad suficiente para que logre mante-nerse luchando contra los inconvenientes anexos a nuestra recientesituación, al estado de guerra que sufrimos y a la especie de losenemigos externos y domésticos contra quienes tendremos largotiempo que combatir. Que el poder legislativo se desprenda de lasatribuciones que corresponden al ejecutivo; y adquiera no obstantenueva consistencia, nueva influencia en el equilibrio de las autoridades.Que los tribunales sean reforzados por la estabilidad y la independenciade los jueces, por el establecimiento de jurados, de códigos civiles ycriminales que no sean dictados por la antigüedad, ni por reyesconquistadores, sino por la voz de la naturaleza, por el grito de lajusticia y por el genio de la sabiduría.

Mi deseo es que todas las partes del gobierno y administraciónadquieran el grado de vigor que únicamente puede mantener el equili-brio, no sólo entre los miembros que componen el gobierno, sino

146

Page 141: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

entre las diferentes fracciones de que se compone nuestra sociedad.Nada importaría que los resortes de un sistema político se relajasen porsu debilidad, si esta relajación no arrastrase consigo la disolución delcuerpo social y la ruina de los asociados. Los gritos del género humanoen los campos de batalla o en los campos tumultuarios claman alcielo contra los inconsiderados y ciegos legisladores que han pensadoque se pueden hacer impunemente ensayos de quiméricas instituciones.Todos los pueblos del mundo han pretendido la libertad; los unos porlas armas, los otros por las leyes, pasando alternativamente de laanarquía al despotismo o del despotismo a la anarquía; muy pocos sonlos que se han contentado con pretensiones moderadas, constituyén-dose de un modo conforme a sus medios, a su espíritu y a suscircunstancias.

No aspiremos a lo imposible, no sea que por elevamos sobre laregión de la libertad, descendamos a la región de la tiranía. De lalibertad absoluta se desciende siempre al poder absoluto, y el medioentre estos dos términos es la suprema libertad social. Teorías abstrac-tas son las que producen la perniciosa idea de una libertad ilimitada.Hagamos que la fuerza pública se contenga en los límites que la razón yel interés prescriben; que la voluntad nacional se contenga en los límitesque un justo poder le señala; que una legislación civil y criminalanáloga a nuestra actual Constitución domine imperiosamente sobre elpoder judiciario, y entonces habrá un equilibrio, y no habrá el choqueque embaraza la marcha del Estado, y no habrá esa complicación quetraba en vez de ligar la sociedad.

Para formar un gobierno estable se requiere la base de un espíritunacional que tenga por objeto una inclinación uniforme hacia dospuntos capitales, moderar la voluntad general y limitar la autoridadpública; los términos que fijan teóricamente estos dos puntos son deuna difícil asignación; pero se puede concebir que la regla que debedirigirlos es la restricción y la concentración recíproca a fin de que hayala menos frotación posible entre la voluntad y el poder legítimo. Estaciencia se adquiere insensiblemente por la práctica y por el estudio. Elprogreso de las luces es el que ensancha el progreso de la práctica, y larectitud del espíritu es la que ensancha el progreso de las luces.

El amor a la patria, el amor a las leyes, el amor a los magistradosson las nobles pasiones que deben absorber exclusivamente el alma deun republicano. Los venezolanos aman la patria, pero no aman sus leyesporque éstas han sido nocivas y eran la fuente del mal; tampoco hanpodido amar a sus magistrados, porque eran inicuos, y los nuevosapenas son conocidos en la carrera en que han entrado. Si no hay unrespeto sagrado por la patria, por las leyes y por las autoridades, lasociedad es una confusión, un abismo, es un conflicto singular dehombre a hombre, de cuerpo a cuerpo.

147

Page 142: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Para sacar de este caos nuestra naciente república, todas nues-tras facultades morales no serán bastantes, si no fundimos la masa delpueblo en un todo, la composición del gobierno en un todo, lalegislación en un todo, y el espíritu nacional en un todo. Unidad,unidad, unidad debe ser nuestra divisa. La sangre de nuestros ciudada-nos es diferente, mezclémosla para unirla; nuestra Constitución hadividido los po eres,d enlacémoslos para unirlos; nuestras leyes sonfunestas reliquias de todos los despotismos antiguos y modernos, queeste edificio monstruoso se derribe, caiga y apartando hasta sus ruinas,elevemos un templo a la justicia; y bajo los auspicios de su santainspiración, dictemos un código de leyes venezolanas. Si queremosconsultar monumentos y modelos de legislación, la Gran Bretaña, laFrancia, la América septentrional los ofrecen admirables.

La educación popular debe ser el cuidado primogénito del amorpaternal del Congreso. Moral y luces son los polos de una república,moral y luces son nuestras primeras necesidades. Tomemos de Atenassu areópago y los guardianes de las costumbres y de las leyes; tomemosde Roma sus censores y sus tribunales domésticos; y haciendo una santaalianza de estas instituciones morales, renovemos en el mundo la ideade un pueblo que no se contenta con ser libre y fuerte, sino que quiereser virtuoso. Tomemos de Esparta sus austeros establecimientos, yformando de estos tres manantiales una fuente de virtud, demos anuestra república una cuarta potestad cuyo dominio sea la infancia y elcorazón de los hombres, el espíritu público, las buenas costumbres y lamoral republicana. Constituyamos este areópago para que vele sobre laeducación de los niños, sobre la instrucción nacional; para que purifquelo que se haya corrompido en la república; que acuse la ingratitud, elegoísmo, la frialdad del amor a la patria, el ocio, la negligencia de losciudadanos; que juzgue de los principios de corrupción, de los ejemplosperniciosos; debiendo corregir las costumbres con penas morales,como las leyes castigan los delitos con penas aflictivas, y no solamentelo que choca contra ellas, sino lo que las burla; no solamente lo que lasataca, sino lo que las debilita; no solamente lo que viola la Constitu-ción, sino lo que viola el respeto público. La jurisdicción de estetribunal verdaderamente santo deberá ser efectiva con respecto a laeducación y a la instrucción, y de opinión solamente en las penas ycastigos. Pero sus anales o registros, donde se consignen sus actas ydeliberaciones; los principios morales y las acciones de los ciudadanos,serán los libros de la virtud y del vicio. Libros que consultará el pueblopara sus elecciones, los magistrados para sus resoluciones y los juecespara sus juicios. Una institución semejante por más que parezca quimé:rica es infinitamente más realizable que otras que algunos legisladoresantiguos y modernos han establecido con menos utilidad del génerohumano.

Page 143: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

*Le isl1 g adores! Por el proyecto de Constitución que reverentementesometo a vuestra sabiduría, observaréis el espíritu que lo ha dictado. Alproponeros la división de los ciudadanos en activos y pasivos, hepretendido excitar la prosperidad nacional por las dos más grandespalancas de la industria: el trabajo y el saber. Estimulando estos dospoderosos resortes de la sociedad, se alcanza lo más difícil entre loshombres: hacerlos honrados y felices. Poniendo restricciones justas yprudentes en las asambleas primarias y electorales, ponemos el primerdique a la licencia popular, evitando la concurrencia tumultuaria y ciegaque en todos tiempos han imprimido el desacierto en las elecciones y haligado por consiguiente el desacierto a los magistrados y a la marcha delgobierno; pues este acto primordial es el acto generativo de la libertad ode la esclavitud de un pueblo.

Aumentando en la balanza de los poderes el peso del Congreso porel número de los legisladores y por la naturaleza del Senado, heprocurado darle una base fija a este primer cuerpo de la nación yrevestirlo de una consideración importantísima para el éxito de susfunciones soberanas.

Separando con límites bien señalados la jurisdicción ejecutiva, de lajurisdicción legislativa, no me he propuesto dividir sino enlazar con losvínculos de la armonía que nace de la independencia, estas potestadessupremas cuyo choque prolongado jamás ha dejado de aterrar a uno delos contendientes. Cuando deseo atribuir al ejecutivo una suma defacultades superior a la que antes gozaba, no he deseado autorizar undéspota para que’ tiranice la república, sino impedir que el despotismodeliberante no sea la causa inmediata de un círculo de vicisitudesdespóticas en que alternativamente la anarquía sea reemplazada por laoligarquía y por la monocracia. Al pedir la estabilidad de los jueces, lacreación de jurados y un nuevo código, he pedido al Congreso lagarantía de la libertad civil, la más preciosa, la más justa, la másnecesaria; en una palabra, la única libertad, pues que sin ella las demásson nulas. He pedido la corrección de los más lamentables abusos quesufre nuestra judicatura, por su origen vicioso de ese piélago delegislación española que semejante al tiempo recoge de todas las edadesy de todos los hombres, así las obras de la demencia como las deltalento, así las producciones sensatas, como las extravagantes, así losmonumentos del ingenio, como los del capricho. Esta enciclopediajudiciaria, monstruo de diez mil cabezas, que hasta ahora ha sido elazote de los pueblos españoles; es el suplicio más refinado que la cóleradel cielo ha permitido descargar sobre este desdichado imperio.

Meditando sobre el modo efectivo de regenerar el carácter y lascostumbres que la tiranía y la guerra nos han dado, me he sentido laaudacia de inventar un Poder Moral, sacado del fondo de la obscuraantigüedad y de aquellas olvidadas leyes que mantuvieron, algún

149

Page 144: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

tiempo, la virtud entre los griegos y romanos. Bien puede ser tenidopor un cándido delirio mas no es imposible, y yo me lisonjeo que nodesdeñaréis enteramente un pensamiento que mejorado por la experien-cia y las luces puede llegar a ser muy eficaz.

Horrorizado de la divergencia que ha reinado y debe reinar entrenosotros por el espiritu sutil que caracteriza al gobierno federativo, hesido arrastrado a rogaros para que adoptéis el centralismo y la reuniónde todos los estados de Venezuela en una república sola e indivisible.Esta medida, en mi opinión, urgente, vital, redentora, es de talnaturaleza que, sin ella, el fruto de nuestra regeneración será la muerte.

Mi deber es, legisladores, presentaros un cuadro prolijo y fiel demi administración política, civil y militar, mas sería cansar demasiadovuestra importante atención y privaros en este momento de un tiempotan precioso como urgente. En consecuencia, los secretarios de Estadodarán cuenta al Congreso de sus diferentes departamentos exhibiendoal mismo tiempo los documentos y archivos que servirán de ilustraciónpara tomar un exacto conocimiento del estado real y positivo de larepública.

Abolición de la esclavitud y reparto de tierras

Yo no os hablaría de los actos más notables de mi mando, si éstos noincumbiesen a la mayoría de los venezolanos. Se trata, señor, de lasresoluciones más importantes de este último período.

La atroz e impía esclavitud cubría con su negro manto la tierra deVenezuela, y nuestro cielo se hallaba recargado de tempestuosas nubesque amenazaban un diluvio de fuego. Yo imploré la protección delDios de la humanidad, y luego la Redención disipó las tempestades. Laesclavitud rompió sus grillos, y Venezuela se ha visto rodeada denuevos hijos, de hijos agradecidos que han convertido los instrumentosde su cautiverio en armas de libertad. Sí, los que antes eran esclavos, yason libres; los que antes eran enemigos de una madrastra ya sondefensores de una patria. Encareceros la justicia, la necesidad y labeneficiencia de esta medida es superfluo cuando vosotros sabéis lahistoria de los hilotas, de Espartaco y de Haití, cuando vosotros sabéisque no se puede ser libre y esclavo a la vez, sino violando a la vez lasleyes naturales, las leyes políticas y las leyes civiles. Yo abandono avuestra soberana decisión la reforma o la revocación de todos misestatutos y decretos; pero yo imploro la confirmación de la libertadabsoluta de los esclavos como imploraría mi vida y la vida de larepública.

Representaros la historia militar de Venezuela sería recordaros lahistoria del heroísmo republicano entre los antiguos; sería deciros queVenezuela ha entrado en el gran cuadro de los sacrificios hechos sobre

Page 145: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

el altar de la libertad. Nada ha podido llenar los nobles pechos denuestros generosos guerreros, sino los honores sublimes, que se tribu-tan a los bienhechores del género humano. No combatiendo por elpoder, ni por la fortuna, ni aun por la gloria, sino tan sólo por lalibertad, títulos de libertadores de la república son sus dignos galardo-nes. Yo, pues, fundando una sociedad sagrada con estos ínclitosvarones, he instituido el orden de los Libertadores de Venezuela.Ilegisladores! a vosotros pertenece las facultades de conceder honores ydecoraciones, vuestro es el deber de ejercer este acto augusto de lagratitud nacional.

Hombres que se han desprendido de todos los goces, de todos losbienes que antes poseían, como el producto de su virtud y talentos;hombres que han experimentado cuanto es cruel en una guerra horro-rosa, padeciendo las privaciones más dolorosas y los tormentos másacerbos; hombres tan beneméritos de la patria han debido llamar laatención del gobierno. En consecuencia he mandado recompensarloscon los bienes de la nación. Si he contraído para con el pueblo algunaespecie de mérito, pido a sus representantes oigan mi súplica como elpremio de mis débiles servicios. Que el Congreso ordene la distribu-ción de los bienes nacionales, conforme a la ley que a nombre de larepública he decretado a beneficio de los militares venezolanos.

Ya que por infinitos triunfos hemos logrado anonadar las huestesespañolas, desesperada la Corte de Madrid ha pretendido sorprendervanamente la conciencia de los magnánimos soberanos que acaban deextirpar la usurpación y la tiranía en Europa y deben ser los protectoresde la legitimidad y de la justicia de la causa americana. Incapaz dealcanzar con sus armas nuestra sumisión, recurre la España a su políticainsidiosa; no pudiendo vencernos, ha querido emplear sus artes suspica-ces. Fernando se ha humillado hasta confesar que ha menester de laprotección extranjera para retornarnos a su ignominioso yugo a unyugo que todo poder es nulo para imponerlo! Convencida Venezuelade poseer las fuerzas suficientes para repeler a sus opresores, hapronunciado por el órgano del gobierno su última voluntad de comba-tir hasta expirar por defender su vida política, no sólo contra la España,sino contra todos los hombres, si todos los hombres se hubiesendegradado tanto que abrazasen la defensa de un gobierno devorador,cuyos únicos móviles son una espada exterminadora y las llamas de lainquisición. Un gobierno que ya no quiere dominios, sino desiertos;ciudades, sino ruinas; vasallos sino tumbas. La declaración de la Repú-blica de Venezuela es la acta más gloriosa, más heroica, más digna deun pueblo libre; es la que con mayor satisfacción tengo el honor deofrecer al Congreso ya sancionada por la expresión unánime del pueblode Venezuela.

Desde la segunda época de la república nuestro ejército carecía

I5I

Page 146: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

de elementos militares, siempre ha estado desarmado, siempre le hanfaltado municiones, siempre ha estado mal equipado. Ahora los solda-dos defensores de la independencia no solamente están armados de lajusticia, sino también de la fuerza. Nuestras tropas pueden medirse conlas más selectas de Europa, ya que no hay desigualdad en los mediosdestructores. Tan grandes ventajas las debemos a la liberalidad sinlímites de algunos generosos extranjeros que han visto gemir la humani-dad y sucumbir la causa de la razón, y no la han visto tranquilosespectadores, sino que han volado con sus protectores auxilios y hanprestado a la república cuanto ella necesitaba para hacer triunfar susprincipios filantrópicos. Estos amigos de la humanidad son los genioscustodios de la América, y a ellos somos deudores de un eternoreconocimiento, como igualmente de un cumplimiento religioso a lassagradas obligaciones que con ellos hemos contraído. La deuda nacio-nal, legisladores, es el depósito de la fe, del honor y de la gratitud deVenezuela. Respetadla como la arca santa, que encierra no tanto losderechos de nuestros bienhechores, cuanto la gloria de nuestra fideli-dad. Perezcamos primero que quebrantar un empeño que ha salvado lapatria y la vida de sus hijos.

La reunión de la Nueva Granada y Venezuela en un grande estado,ha sido el voto uniforme de los pueblos y gobiernos de estas repúblicas.La suerte de la guerra ha verificado este enlace tan anhelado por todoslos colombianos; de hecho estamos incorporados. Estos pueblos herma-nos ya os han confiado sus intereses, sus derechos, sus destinos.Al contemplar la reunión de esta inmensa comarca, mi alma se remontaa la eminencia que exige la perspectiva colosal que ofrece un cuadro tanasombroso. Volando por entre las próximas edades, mi imaginación sefija en los siglos futuros, y observando desde allá, con admiración ypasmo, la prosperidad, el esplendor, la vida que ha recibido esta vastaregión, me siento arrebatado y me parece que ya la veo en el corazóndel universo, extendiéndose sobre sus dilatadas costas, entre esosocéanos, que la naturaleza había separado y que nuestra patria reúnecon prolongados y anchurosos canales. Ya la veo servir de lazo, decentro, de emporio a la familia humana; ya la veo enviando a todos losrecintos de la tierra los tesoros que abrigan sus montañas de plata y deoro; ya la veo distribuyendo por sus divinas plantas la salud y la vida alos hombres dolientes del antiguo universo; ya la veo comunicando suspreciosos secretos a los sabios que ignoran cuán superior es la suma delas luces, a la suma de las riquezas que le ha prodigado la naturaleza. Yala veo sentada sobre el trono de la libertad, empuñando el cetro de lajusticia, coronada por la gloria, mostrar al mundo antiguo la majestaddel mundo moderno.

Dignaos, legisladores, acoger con indulgencia la profesión de miconciencia política, los últimos votos de mi corazón y los ruegos

152

Page 147: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

fervorosos que a nombre del pueblo me atrevo a dirigiros. Dignaosconceder a Venezuela un gobierno eminentemente popular, eminente-mente justo, eminentemente moral, que encadene la opresión, laanarquía y la culpa. Un gobierno que haga reinar la inocencia, lahumanidad y la paz. Un gobierno que haga triunfar bajo el imperio deleyes inexorables, la igualdad y la libertad.

Señor, empezad vuestras funciones: yo he terminado las mías.

25

Proyecto deuna cuarta rama del Estado: un poder

para la moral y la educación

Proposición en el texto constitucional sometido a la consideración delCongreso de Angostura, y glosado en el discurso, el 15 de febrero de1819. No aprobado por el Congreso, acordó éste se publicara comoapéndice a la Constitución.

El Poder Moral estatuido en el proyecto de Constitución presentadopor el general Bolívar, como jefe supremo de la República, en lainstalación del Congreso, fue considerado por algunos diputados comola idea más feliz y la más propia a influir en la perfección de lasinstituciones sociales. Por otros como una inquisición moral, no menosfunesta ni menos horrible que la religión. Y por todos como de muydifícil establecimiento, y en los tiempos presentes absolutamenteimpracticable. Prevaleció después de largos debates el parecer de que enla infancia de nuestra política, y tratándose de objetos tan interesantes alEstado y aun a la humanidad, no debíamos fiarnos de nuestras teorías yraciocinios en pro ni en contra del proyecto; que convenía consultarla opinión de los sabios de todos los países por medio de la imprenta;hacer algunos ensayos parciales y reunir hechos que comprobasen lasventajas o los perjuicios de esta nueva institución, para en su vistaproceder a ponerla en ejecución o rechazarla. Decretóse, en consecuen-cia, que el título del Poder Moral se publicase por apéndice de laConstitución, invitando a todos los sabios, que por el mismo hecho deserlo deben considerarse como los ciudadanos del mundo, a quecomuniquen sus luces a esta porción hermosa de su inmensa patria.

153

Page 148: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

El Poder Moral

SECCIÓ N PRIMERA

De la composición, elección, duración, prerrogativas y fünciones de este poder

Artículo 1.’ El Poder Moral de la República reside en un cuerpocompuesto de un presidente y cuarenta miembros, que bajo la denomi-nación de Areópago, ejerce una autoridad plena e independiente sobrelas costumbres públicas y sobre la primera educación.

Artículo 2.” El Areópago se compone de dos Cámaras:Primera: De Moral.Segunda: De Educación.

Artículo 3.° El Congreso nombra a pluralidad de votos por estaprimera vez, los miembros que deben componer el Areópago, escogién-dolos entre los padres de familia que más se hayan distinguido en laeducación de sus hijos, y muy particularmente en el ejercicio de lasvirtudes públicas. Constituido una vez el Areópago, provee él mismolas plazas que vaquen.

Artículo 4.° El Presidente del Areópago será nombrado siemprepor el Senado, en dos listas, cada una de doce candidatos de los másvirtuosos ciudadanos de la República, una presentada por la Cámara deRepresentantes y otra por el Presidente de la República. Se necesita unamayoría de las dos terceras partes de los miembros presentes en elSenado para esta elección.

Artículo 5.° Para ser miembro del Areópago se necesita, además delas virtudes públicas, la edad de treinta y cinco años cumplidos.

Artículo 6.° El que ejerciere por veinte y cinco años las funcionesde areopagita, se publicará con el título de padre benemérito de lapatria, conservando hasta su muerte el derecho y no la obligación deasistir y votar.

Artículo 7.° Los miembros del Areópago se titularán padres de lapatria, sus personas son sagradas, y todas las autoridades de la Repú-blica, los tribunales y corporaciones les tributarán un respeto filial.

Artículo 8.° La instalación del Areópago se hará con una celebridadextraordinaria, con ceremonias y demostraciones propias para inspirarla más alta y religiosa idea de su institución, y con fiestas en toda laRepública.

Artículo 9.° El Congreso reglará por un acta especial los honoresque deben hacerse al Areópago, la precedencia que le corresponda enlas fiestas y actos públicos, su traje, sus insignias, y cuanto concierne alesplendor de que debe estar revestido este poder moral.

154

Page 149: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Artículo 10. La dignidad del presidente y miembros del Areópagono se pierde sino por muerte o por destitución.

Artículo ll. Ningún miembro del Areópago puede ser destituidosino por el mismo cuerpo.

Artículoo 12. Siendo el Areópago un tribunal esencialmente irrepren-sible y santo, todo buen ciudadano debe manifestarle los defectos que senotaren en sus miembros, y el Areópago deberá destruirlos por cual-quiera causa que les haga desmerecer la veneración pública.

Artículo 13. Cuando algún miembro del Areópago se hubierehecho reprensible, y el Cuerpo se descuidase en destituirlo, el Gobiernodeberá invitarlo hasta por segunda vez a que lo haga, y no verificán-dolo, informará al Senado. Si el Senado no reconoce en el acusado lasvirtudes necesarias a un padre de la patria, pronunciará que el Areópagodebe destituirlo.

Artículo 14. Cuando al Areópago destituyere a alguno de susmiembros, se vestirá de luto por tres días, y el asiento que ocupaba eldestituido permanecerá cincuenta años cubierto de un paño negro, consu nombre escrito en grandes caracteres blancos.

Artículo 15. Si en un período de doce años diese motivo elAreópago para que el Senado intervenga tres veces en la destitución desus miembros, procederá el Congreso, de oficio, a la renovación delcuerpo como en su primera instalación, y la República entera se vestiráde luto por un mes. Pero en este caso, el Congreso examinará las actasy reelegirá necesariamente a aquellos miembros que todas tres veces sehubieren opuesto a la depravación del Areópago.

Artículo 16. Las funciones que debe ejercer el Areópago, reunidassus dos Cámaras en una sola, son:Primera. Designar los veinte miembros que deben componer cada

Cámara, y nombrar de entre éstos el que deba presidirla, cuandono lo haga el presidente del Areópago, que tiene derecho deconcurrir y votar en cualquiera de ellas.

Segunda. Pronunciar la destitución de alguno de sus miembros, con-forme queda establecido, y nombrar los que deban suceder en lasplazas vacantes por muerte o destitución.

Tercera. Nombrar dentro de su seno el secretario o secretarios quejuzgue necesarios para sus trabajos y para los de cada Cámara.

Cuarta. Pedir al Congreso los fondos que anualmente sean necesariospara sus gastos y establecimientos, exigir-cuentas a sus agentes oempleados de la inversión de ellos, y darla al Congreso.

Quinta. Distribuir premios o coronas cívicas cada año a los ciudadanosque más se hayan distinguido por rasgos eminentes de virtud ypatriotismo, y despojar de estos mismos premios a los que despuésde haberlos obtenido se hayan hecho indignos de llevarlos. Estosse celebrarán en una junta pública con la mayor solemnidad.

155

Page 150: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Sexta. Declarar eminentemente virtuoso, héroe o grande hombre, a losque se hayan hecho dignos de tanta recompensa. Sin que hayaprecedido esta declaratoria, el Congreso no podrá decretar nierigir ninguna estatua ni otros monumentos públicos en memoriade nadie.

Séptima. Proclamar con aplauso en las juntas de que se ha habladoarriba, los nombres de los ciudadanos virtuosos, y las obrasmaestras de moral y educación. Pregonar con oprobio e ignominialos de los viciosos, y las obras de corrupción y de indecencia; ydesignar a la veneración pública los institutores e institutrices quehayan hecho mayores adelantamientos en sus colegios.

SECCIÓ N SEGUNDA

De las atribuciones especiales de la Cámara de Moral

Artículo 1.° La Cámara de Moral dirige la opinión moral de toda laRepública, castiga los vicios con el oprobio y la infamia, y premia lasvirtudes públicas con los honores y la gloria. La imprenta es el órganode sus decisiones.

Artículo 2.° Los actos singulares no son de su inspección, amenos que sean tan extraordinarios que puedan influir en bien o en malsobre la moral pública. Los actos repetidos, que constituyen hábito ocostumbre, son los que inmediatamente le competen.

Artículo 3.° Su autoridad es independiente y absoluta. No hayapelación de sus juicios sino a la opinión y a la posteridad: no admite ensus juicios otro acusador que el escándalo, ni otro abogado que el buencrédito.

Artículo 4.° Su jurisdicción se extiende no solamente a los indivi-duos sino a las familias, a los departamentos, a las provincias, a lascorporaciones, a los tribunales, a todas las autoridades, y aun a laRepública en cuerpo. Si llegan a desmoralizarse debe delatarlas almundo entero. El Gobierno mismo le está sujeto, y ella pondrá sobre éluna marca de infamia, y lo declarará indigno de la República, siquebranta los tratados, o los tergiversa, si viola alguna capitulación, ofalta a algún empeño o promesa.

Artículo 5.° Las obras morales y políticas, los papeles periódicos ycualesquiera otros escritos, están sujetos a su censura, que no será sinoposterior a su publicación. La política no le concierne sino en susrelaciones con la moral. Su juicio recaerá sobre el aprecio o desprecioque merecen las obras, y se extenderá a declarar si el autor es buenciudadano, benemérito de la moral, o enemigo de ella, y como tal,digno o indigno de pertenecer a una República virtuosa.

156

Page 151: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Artículo 6.° Su jurisdicción abraza no solamente lo que se escribesobre moral o concerniente a ella, sino también lo que se habla, sedeclama, o se canta en público, siempre para censurarlo y castigarlo conpenas morales, jamás para impedirlo.

Artículo 7.° En sus censuras y amonestaciones se dirige siempre alpúblico, y sólo se entiende con él. No habla ni contesta jamás a losindividuos ni corporaciones.

Artículo 8.° La gratitud pública, la deuda nacional, los tratados,las capitulaciones, la fe del comercio, no sólo en sus relaciones, sino encuanto a la calidad y legitimidad de las mercancías, son objetosespeciales sobre los que la Cámara debe ejercer la más activa yescrupulosa vigilancia. En estos ramos cualquiera falta y omisión debecastigarse con un rigor inexorable.

Artículo 9.° La ingratitud, el desacato a los padres, a los maridos,a los ancianos, a los institutores, a los magistrados, y a los ciudadanosreconocidos y declarados virtuosos, la falta de palabra en cualquieramateria, la insensibilidad en las desgracias públicas o de los amigos yparientes inmediatos, se recomiendan especialmente a la vigilancia de laCámara, que podrá castigarlos hasta por un solo acto.

Artículo 10. La Cámara organizará la policía moral, nombrando alefecto cuantos censores juzgue convenientes. Como una recompensa desu celo y trabajo, recibirá el honroso título de Catón, el censor que porsus servicios y virtudes se hiciese digno de él.

Artículo ll. Cada año publicará la Cámara tablas estadísticas de lasvirtudes y de los vicios, para lo cual todos los tribunales superiores einferiores le presentarán cuentas exactas y prolijas de todos los pleitos ycausas criminales. También publicará cada año listas comparativas delos hombres que se distinguen en el ejercicio de las virtudes públicas, oen la práctica de los vicios públicos.

Artículo 12. El pueblo, los colegios electorales, las municipali-dades, los gobiernos de provincia, el Presidente de la República y elCongreso, consultarán estas listas para hacer sus elecciones y nombra-mientos, y para decretar los honores y recompensas. El ciudadano cuyonombre se halle inscrito en la lista de los viciosos, no podrá serempleado en ningún ramo del servicio público, ni de ningún modo; yno podrá obtener ninguna recompensa nacional, ningún honor especial,y ni aun una decoración, aquel cuyo nombre no se halle inserto en laslistas de los virtuosos, aunque sí podrá ser empleado por el gobierno.

Artículo 13. Las mujeres, igualmente que los hombres, están suje-tas a la jurisdicción de la Cámara, y reciben de ella premios o castigos,según su mérito.

Page 152: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

SECCIÓ N TERCERA

Atribuciones de la Cámara de Educación

Artículo 1.° La Cámara de Educación está encargada de la educaciónfísica y moral de los niños, desde su nacimiento hasta la edad de doceaños cumplidos.

Artículo 2.° Siendo absolutamente indispensable la cooperación delas madres para la educación de los niños en sus primeros años, y siendoéstos los más preciosos para infundirles las primeras ideas, y los másexpuestos por la delicadeza de sus órganos, la Cámara cuidará muyparticularmente de publicar y hacer comunes y vulgares en toda laRepública algunas instrucciones breves y sencillas, acomodadas a lainteligencia de todas las madres de familia sobre uno y otro objeto. Loscuras y los agentes departamentales serán los instrumentos de que sevaldrá para esparcir estas instrucciones, de modo que no haya unamadre que las ignore, debiendo cada una presentar la que haya reci-bido, y manifestar que la sabe el día que se bautice su hijo o se inscribaen el registro de nacimiento.

Artículo 3.° Además de estas instrucciones, la Cámara cuidará depublicar en nuestro idioma las obras extranjeras más propias parailustrar la nación sobre este asunto, haciendo juicio de ellas, y lasobservaciones o correcciones que convengan.

Artículo 4.° Estimulará a los sabios y a todos a que escriban ypubliquen obras originales sobre lo mismo, conforme a nuestros usos,costumbres y gobierno.

Artículo 5.° Como la Cámara misma recogerá dentro de pocotiempo mejor que nadie todos los datos y conocimientos necesariospara semejantes obras, compondrá y publicará alguna que sirva a la vezde estímulo para que se ocupen otros de este trabajo, y de ilustraciónpara todos.

Artículo 6.° No perdonará medio ni ahorrará gasto ni sacrificioque pueda proporcionarle estos conocimientos. Al efecto de adquirirloscomisionará, pues, hombres celosos, instruidos y despreocupados queviajen, inquieran por todo el mundo y atesoren toda especie deconocimientos sobre la materia.

Artículo 7.° Pertenece exclusivamente a la Cámara establecer,organizar y dirigir las escuelas primarias, así de niños como de niñas,cuidando de que se les enseñe a pronunciar, leer y escribir correcta-mente, las reglas más usuales de la aritmética y los principios de lagramática, que se les inspiren ideas y sentimientos de honor y probi-

Page 153: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

dad, amor a la patria, a las leyes y al trabajo, respeto a los padres, a losancianos, a los magistrados, y adhesión al Gobierno.

Artículo 8.° Siendo nuestros colegios actuales incapaces de servirpara un gran plan de educación, será un cuidado muy especial de laCámara delinear y hacer construir los que se necesitan en toda laRepública, tanto para niños como para niñas, que deben estar separadospor lo menos desde que la razón empieza a obrar en ambos. La forma,proporción y situación de estos establecimientos, será la más conve-niente con su objeto, y se consultará en ellos no solamente la solidez yextensión, sino la elegancia, el aseo, la comodidad y el recreo de lajuventud.

Artículo 9.° La Cámara determina el número de colegios quedeben constituirse, señala la provincia y si es posible la posición queprecisamente debe ocupar cada uno, calculando para esto las ventajasdel lugar, por su facilidad para reunir allí todos los niños, por lasalubridad del terreno, por la abundancia y bondad de los alimentos, etc.

Artículo 10. Cada colegio estará bajo la dirección inmediata de uninstitutor que será nombrado por la Cámara, escogiéndolo entre loshombres más virtuosos y sabios, cualquiera que sea el lugar de sunacimiento. La mujer del institutor será la institutriz inmediata de lasniñas; aunque bajo la dirección de su marido. Este empleo será el másconsiderado, y los que lo ejerzan serán honrados, respetados y amadoscomo los primeros y más preciosos ciudadanos de la República.

Artículo ll. La Cámara formará el reglamento de organización ypolicía general de estos establecimientos, según sus clases, especifi-cando la educación que respectivamente conviene a los niños para queadquieran desde su niñez ideas útiles y exactas nociones fundamentales,las más adaptadas a su estado y fortuna, sentimientos nobles y morales,principios de sociabilidad y patriotismo. Este plan se presentará alCongreso, para que siendo examinado y aprobado se convierta en leyde la República.

Artículo 12. Todos los años publicará la Cámara tablas o estadosexactos y circunstancias de los niños nacidos y muertos, de su constitu-ción física, de su salud y enfermedades, de sus adelantamientos, inclina-ciones, cualidades y talentos particulares. Para hacer todas estas observa-ciones se servirá de los institutores, de los curas, de los médicos, de losagentes departamentales, de los ciudadanos ilustrados y de todas lasautoridades, que empezando por el mismo presidente, le obedecentodas en materia de educación.

Artículo 13. Además de estas atribuciones, la Cámara de Educa-ción dirigirá la opinión pública en las materias literarias, mientras seestablece el instituto filosófico. Ella examinará o hará examinar yanalizar las obras que se publicaren sobre cualquier asunto, formandojuicio de ellas en el Monitor del Areópago.

1.59

Page 154: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

26

Un colegio de educación para los huérfanos,expósitos y pobres en Santafé

Decreto dado el 17 de septiembre de 1819, en Bogotá, al mes siguiente dela batalla de Boyacá, ganada tras el “Paso de los Andes” -proezamilitar muy elogiada-. Este colegio füe de los primeros beneficiosprácticos para el pueblo de Nueva Granada.

SIMÓ N BOLÍVARPresidente de la República, etc., etc.

Considerando que la educación e instrucción pública son el principiomás seguro de la felicidad general y la más sólida base de la libertad delos pueblos, y considerando que en la Nueva Granada existe unamultitud de niños desgraciados, que por haber sido sus virtuosos padresinmolados en aras de la patria por la crueldad española, no tienen otroasilo ni esperanza para su subsistencia y educación que la república, hetenido a bien decretar y decreto lo siguiente:

Artículo 1.° El convento abandonado por los Padres Capuchinosen esta capital será en adelante un colegio de educación para loshuérfanos, expósitos o pobres a quienes la república deba sostener yeducar.

Artículo 2.° Por ahora no se recibirán en el colegio otros niños quelos huérfanos de padres que hayan sido sacrificados a la patria por losespañoles en los patibulos y cadalsos, y en los campos de batalla.

Artículo 3.° El colegio estará al cargo y cuidado de un director,encargado especialmente de su dirección, economía y policía interior.Él será el primer jefe del colegio, y a él corresponde dar a los niños laeducación más virtuosa y conforme a los principios liberales de larepública.

Artículo 4.° El director, así como todos los maestros de instruc-ción, serán elegidos y nombrados por el gobierno.

Artículo 5.° Mientras el gobierno no tenga fondos bastantes paradotar cátedras de todas las ciencias, se enseñarán a los niños las primerasletras, los principios gramaticales del idioma, los principios de nuestrareligión y moral, el dibujo, la lógica, las matemáticas, la física, lageografía y el arte de levantar planos.

Artículo 6.° Los fondos para el colegio serán los veinte y cuatromil doscientos pesos que testó a favor de la educación pública el doctorJuan Ignacio Gutiérrez, y todos los que pertenecían antes al convento y

160

Page 155: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

comunidad de Capuchinos. Las rentas del Estado cubrirán los gastos aque no alcancen los fondos expresados.

Artículo 7.° Por un reglamento especial, se detallará y arreglarátodo lo concerniente a la educación, administración, servicio y eco-nomía del colegio.

Publíquese, imprímase y comuníquese a quienes corresponda parasu cumplimiento.

Dado, firmado de mi mano, sellado con el sello provisional de laRepública, refrendado por el secretario de gobierno en el cuartelgeneral de Santafé, a 17 de septiembre de 1819-9”

Alejandro OsorioSecretario interino

Simón Bolívar

27

Preocupación por el adiestramiento de las tropasy la formación de oficiales

Revela aquí Bolívar su constante cuidado por el ejército revolucionario.En normas transmitidas al general Santander -desde el cuartel general deBarichara, el 10 de octubre de 1819, se adelanta el Libertador enimportantes previsiones militares, como el uso de ‘jefes de instrucción” ylos “depósitos de reclutas” para disciplina y adoctrinamiento, además de“academias” provinciales para el mismo fin.

Excmo. señor:

Mandará V. E. a cada una de las provincias de Tunja, Socorro yNeiva, dos o tres jefes de instrucción para que enseñen el manejo de lasarmas al gran depósito de reclutas que deseo se establezca en todas lasprovincias. Estos jefes marcharán constantemente por turnos a losdiferentes depósitos, de modo que con fusiles de palo, no habiendo,como no los hay ahora, de los otros, se instruyan los reclutas en elmanejo de armas y en las evoluciones. Repito mi orden de que en cadaprovincia libre de la Nueva Granada se alisten 1000 reclutas, distri-buyéndolos del modo más conveniente, para su mantención y disci-plina, para lo cual V. E. dará un reglamento el más detallado, adaptán-dolo a cada provincia en particular. No faltan en la Nueva Granadaoficiales antiguos veteranos, que aunque inútiles en el servicio, puedenser de la mayor importancia en la instrucción de reclutas. Que venganaquí Pardo y Ley, y mande V. E. otros de la misma especie a las demásprovincias, aun cuando no quieran.

161

Page 156: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Se formará en la capital de cada provincia, una academia de 24jóvenes aspirantes, que reunan las cualidades de leer, escribir, talento,persona, etc., con el objeto de que se instruyan en todas las obliga-ciones tocantes al servicio, libres de fatiga y con opción a ser oficiales,luego que tengan la ilustración necesaria. Sobre este particular entraráV. E. en todos los detalles precisos en las instrucciones que dé para lacreación de esta academia.

28

“La unánime determinación de morir libresy de no vivir esclavos”

Al regreso de las jornadas y sacrificios que en la batalla de Boyacásellaron la independencia de Nueva Granada, el Libertador da cuenta desus victorias al Congreso de Angostura, el 14 de diciembre de 1819, ypropone la creación de la República de Colombia que se formará conVenezuela, Nueva Granada, Panamá, Quito y Guayaquil.

Señores del Cuerpo Legislativo:

Al entrar en este augusto recinto, mi primer sentimiento es de gratitudpor el honor infinito que se ha dignado dispensarme el Congresopermitiéndome volver a ocupar esta silla, que no ha un año cedí alpresidente de los representantes del pueblo.

Cuando inmerecidamente y contra mis más fuertes sentimientos,fui encargado del poder ejecutivo, al principio de este año, representé alcuerpo soberano, que mi profesión, mi carácter y mis talentos eranincompatibles con las funciones de magistrado; así, desprendido deestos deberes, dejé su cumplimiento al vicepresidente, y únicamentetomé sobre mí el encargo de dirigir la guerra. Marché luego al ejércitode Occidente a cuyo frente se hallaba el general Morillo con fuerzassuperiores. Nada habría sido más aventurado que dar una batalla encircunstancias en que la capital de Caracas debía ser ocupada por lastropas expedicionarias últimamente venidas de Europa, y en momentosen que esperábamos nuevos auxilios. El general Morillo, al aproxi-marse el invierno, abandonó las llanuras del Apure, y juzgué que másventajas produciría a la república la libertad de la Nueva Granada, quecompletar la de Venezuela.

Sería demasiado prolijo detallar al Congreso los esfuerzos quetuvieron que hacer las tropas del ejército libertador para conseguir laempresa que nos propusimos. El invierno en llanuras anegadizas, lascimas heladas de los Andes, la súbita mutación de clima, un triple

162

Page 157: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

ejército aguerrido y en posesión de las localidades más militares de laAmérica meridional, y otros muchos obstáculos, tuvimos que superaren Paya, Gámeza, Vargas, Boyacá y Popayán para libertar en menos detres meses doce provincias de la Nueva Granada.

Yo recomiendo a la soberanía nacional el mérito de estos grandesservicios por parte de mis esforzados compañeros de armas, que conuna constancia sin ejemplo padecieron privaciones mortales, y con unvalor sin igual en los anales de Venezuela, vencieron y tomaron elejército del rey. Pero no es sólo el ejército libertador a quien debemoslas ventajas adquiridas. El pueblo de la Nueva Granada se ha mostradodigno de ser libre. Su eficaz cooperación reparó nuestras pérdidas yaumentó nuestras fuerzas. El delirio que produce una pasión desenfre-nada es menos ardiente que el que ha sentido la Nueva Granada alrecobrar su libertad.

Este pueblo generoso ha ofrecido todos sus bienes y todas sus vidasen las aras de la patria , ofrendas tanto más meritoras, cuanto que sonespontáneas! Sí, la unánime determinación de morir libres y de novivir esclavos ha dado a la Nueva Granada un derecho a nuestraadmiración y respeto. Su anhelo por la reunión de sus provincias a lasprovincias de Venezuela es también unánime. Los granadinos estáníntimamente penetrados de la inmensa ventaja que resulta a uno y otropueblo de la creación de una nueva república, compuesta de estas dosnaciones. La reunión de la Nueva Granada y Venezuela es el objetoúnico que me he propuesto desde mis primeras armas, es el voto de losciudadanos de ambos países y es la garantía de la libertad de la Américadel Sur.

legisladores! El tiempo de dar una base fija y eterna a nuestrarepública ha llegado. A vuestra sabiduría pertenece decretar este grandeacto social, y establecer los principios del pacto sobre los cuales va afundarse esta vasta república. Proclamadla a la faz del mundo, y misservicios quedarán recompensados.

Page 158: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

29

La creación de Colombia:“Poder, prosperidad, grandeza, estabilidad”

El 20 de diciembre de 1819, desde Angostura, se envía al Excmo. señorvicepresidente de Cundinamarca la “Ley fùndamental de la República deColombia” sancionada -tres días atrás- por el Congreso. Cuajaba asíel pensamiento de Miranda y se atendía al claro pensamiento de Bolívarhacia la solidaridad latinoamericana.

Excmo. señor:

Tengo la satisfacción de remitir a V. E. la ley fundamental de laRepública de Colombia, decretada por el soberano Congreso. La leymisma contiene los poderosos motivos que ha tenido el Congreso pararealizar al fin los votos de los ciudadanos de ambas naciones, uniéndolasen una sola república. La perspectiva que presenta este acto memorablees tan vasta como magnífica. Poder, prosperidad, grandeza, estabilidadserán el resultado de esta feliz unión.

El voto unánime de los diputados de Venezuela y la NuevaGranada ha puesto la base de un edificio sólido y permanente, determi-nando el nombre, rango y dignidad con que debe conocerse en elmundo nuestra naciente república y bajo el cual debe establecer susrelaciones políticas.

Aunque este acto provisorio no está investido de todas las formali-dades y aunque todas las provincias libres de Cundinamarca no hanconcurrido a él, las incalculables ventajas que produce y, sobre todo, laimperiosa necesidad de aprovechar la disposición de las potenciasextranjeras han obligado a los representantes de Venezuela y de laNueva Granada a dar un paso en que creen vinculada la estabilidad,permanencia y prosperidad de Colombia.

En diez años de lucha y de trabajos indecibles, en diez años desufrimientos que casi exceden a las fuerzas humanas, hemos experimen-tado la indiferencia con que toda la Europa y aun nuestros hermanosdel norte han permanecido tranquilos espectadores de nuestro extermi-nio. Entre otras causas, puede asignarse como la primera, la multiplici-dad de soberanías establecidas hasta hoy.

La falta de unidad y consolidación, la falta de acuerdo y armonía, ysobre todo la falta de medios que producía necesariamente la separaciónde las repúblicas, es, repito, la causa verdadera del ningún interés quehan tomado hasta ahora nuestros vecinos y los europeos en nuestra

164

Page 159: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

suerte. Secciones, fragmentos que, aunque de grande extensión, notienen ni la población ni los medios, no podían inspirar ni interés niseguridad a los que deseasen establecer relaciones con ellos.

La República de Colombia presenta cuantos medios y recursos sonnecesarios para sostener el rango y dignidad a que ha sido elevada, einspira a los extranjeros la confianza y la seguridad de que es capaz desostenerlos. De aquí nacen la facilidad de obtener aliados y de procu-rarse los auxilios que le faltan para consolidar su independencia.

Las riquezas de Cundinamarca, de Venezuela, la población deambas y la ventajosa posición de la última, llena de puertos en elAtlántico, darán una importancia a Colombia de que no gozarían niVenezuela ni la Nueva Granada permaneciendo separadas.

Los amantes de la verdadera felicidad y esplendor de Colombia sonlos que más poderosamente han contribuido a la unión. Ellos, persuadi-dos de las mutuas ventajas, han consagrado sus esfuerzos, sus luces y supersuasión para conseguirla. El vicepresidente, señor Francisco Anto-nio Zea, ha tenido la gloria de ser el principal agente de este pacto quepromete tantas y tan grandes utilidades.

El mismo señor Zea ha sido nombrado agente extraordinario deColombia cerca del gabinete de Washington y seguidamente pasará aFrancia, donde es tan conocido y donde goza de la mejor reputación.Su misión tiene por objeto procurarnos amigos allí, preparar aquelgobierno en nuestro favor y conseguirnos elementos de guerra y cuantocrea sea útil en Colombia. El gobierno concibe grandes esperanzas de laidoneidad del agente, y él se las promete en virtud de la confianza y dela seguridad que deben necesariamente inspirar los recursos y sucesosde la República de Colombia.

Nuestros. agentes en Londres, los señores Peñalver y Vergara,participan al gobierno que las disposiciones del pueblo británico nosson muy favorables, y aun las del gobierno. No desesperan de conse-guir el empréstito de los 3 000 000 de duros que motivó su misión, apesar de haber encontrado en la cárcel arrestado por una deuda de150 000 pesos al señor Real, agente de la Nueva Granada en aquellacorte, quien obtuvo su libertad bajo la fianza y garantía de dichosseñores. Ellos propenden, según la disposición de la Gran Bretaña, a launión de las dos repúblicas, y creen que nuestro crédito y reputación seaumentará considerablemente con este acto.

Ésta es también una de las poderosas razones que ha considerado elCongreso para la reunión de las dos naciones, los dobles medios y deconsiguiente el doble crédito que va a resultarnos. Casi no puededudarse de que conseguiremos el empréstito, a la vista de la importan-cia y de las seguridades que presta la República de Colombia.

La ley fundamental de la República de Colombia debe ser publi-cada solemnemente en los pueblos y en los ejércitos, inscrita en todas

165

Page 160: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

las municipalidades, y ejecutada en el departamento de Cundinamarca,como previene el Congreso.

A V. E. toca la gloria de ser el ejecutor del decreto que llama a supaís natal a una grandeza y dignidad que casi no puede percibir laimaginación más brillante, y hacer que los pueblos, ejércitos, corpora-ciones y municipalidades la cumplan y ejecuten.

Luego que el Congreso dé el reglamento para la convocatoria delos representantes de Colombia en la Villa de Cúcuta, lo ejecutaré. Allírecibirá este acto toda la solemnidad, legalidad y formalidades queexigen los gobiernos, expresándola por sus legítimos representantes.

Dios &.

Bolívar

30

El reconocimientoa la heroicidad de las mujeres

Alocución emocionada del Libertador a las valientes damas de El Socorro,el 14 de febrero de 1820, en esa histórica ciudad neogranadina.

A las ilustres matronas del Socorro:

Un pueblo que ha producido mujeres varoniles, ninguna potestadhumana es capaz de subyugarlo. Vosotras, hijas del Socorro, vais a serel escollo de vuestros opresores. Ellos, en su frenético furor, profana-ron lo más sagrado, lo más inocente, lo más hermoso de nuestraespecie; os hollaron. Vosotras habéis realzado vuestra dignidad endure-ciendo vuestro tierno corazón bajo los golpes de los crueles.

Heroicas socorreñas: las madres de Esparta no preguntaban por lavida de sus hijos, sino por la victoria de su patria; las de Romacontemplaron con placer las gloriosas heridas de sus deudos; losestimulaban a alcanzar el honor de expirar en los combates. Mássublimes vosotras en vuestro generoso patriotismo, habéis empuñadola lanza; os habéis colocado en las filas y pedís morir por la patria.Madres, esposas, hermanas, quién podrá seguir vuestras huellas en lacarrera del heroísmo? Habrá hombres dignos de vosotras? NO, no,no! Pero vosotras sois dignas de la admiración del universo y de laadoración de los libertadores de Colombia.

Cuartel general en El Socorro, a 24 de febrero de 1820.

Simón Bolívar

166

Page 161: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

31

Del razonamiento para la aboliciónde la esclavitud

En el Archivo del Libertador existen dos copias de esta nota fechada enSan Cristóbal el 20 de abril de 1820, con el argumento filosófico de lamedida rebatida por el general F. de P. Santander, a quien Bolívar sedirige.

Excmo. señor:

Tengo el honor de contestar a V. E. el oficio del 2 de abril relativo alarrendamiento de salinas y a las instrucciones del señor general Valdésen que habla, según dice V. E., de declarar la libertad de esclavos en laprovincia del Cauca.

El artículo dice así: “todos los esclavos útiles para el servicio de lasarmas serán destinados al ejército”. Si no me equivoco, esto no esdeclarar la libertad de esclavos, y sí es usar de la facultad que me da laley en que dice: “Artículo 3.° Sin embargo, los que fueren llamados alas armas por el presidente de la república, o hicieren algún serviciodistinguido, entran desde luego en posesión de su libertad”.

Con la ley quedo a cubierto, respondo a todas las observacionesque V. E. me hace. Pero, siguiendo mi costumbre, explicaré misórdenes.

He mandado que se tomen los esclavos útiles para las armas. Debesuponerse que se entiende solamente con los necesarios para las armaspues de otro modo serían más perjudiciales que útiles un númeroexcesivo de ellos.

Las razones militares y políticas que he tenido para ordenar la levade esclavos son muy obvias. Necesitamos de hombres robustos yfuertes acostumbrados a la inclemencia y a las fatigas, de hombres queabracen la causa y la carrera con entusiasmo, de hombres que veanidentificada su causa con la causa pública, y en quienes el valor de lamuerte sea poco menos que el de su vida.

Las razones políticas son aún más poderosas. Se ha declarado lalibertad de los esclavos de derecho y aun de hecho. El Congreso hatenido presente lo que dice Montesquieu: En los gobiernos moderados lalibertad política hace preciosa la libertad civil; y el que está privado de estaúltima está aun privado de la otra; ve una sociedad feliz, de la cual no es ni aunparte; encuentra la seguridad establecida para los otros y no para él. Nadaacerca tanto a la condición de bestias como ver siempre hombres libres y noserlo. Tales gentes son enemigos de la sociedad y su número sería peligroso. No

167

Page 162: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

se debe admirar que en los gobiernos moderados el estado haya sido turbado porla rebelión de los esclavos, y que esto haya sucedido tan rara vez en los estadosdespóticos.

Es, pues, demostrado por las máximas de la política, sacada de losejemplos de la historia, que todo gobierno libre que comete el absurdode mantener la esclavitud es castigado por la rebelión y algunas vecespor el exterminio, como en Haití.

En efecto, la ley del Congreso es sabia en todas sus partes. Quémedio más adecuado ni más legítimo para obtener la libertad que pelearpor ella? Será justo que mueran solamente los hombres libres poremancipar a los esclavos? No será útil que éstos adquieran sus derechosen el campo de batalla, y que se disminuya su peligroso número por unmedio poderoso y legítimo?

Hemos visto en Venezuela morir la populación libre y quedar lacautiva; no sé si esto es política, pero sé que si en Cundinamarca noempleamos los esclavos sucederá otro tanto.

Yo, pues, usando de las facultades que me concede la ley de lalibertad de los esclavos, reitero mis anteriores órdenes: que el ejércitodel sur tome los esclavos, útiles para las armas, que necesite; y quevengan 3 000 jóvenes solteros para el ejército del norte. Sobre estosúltimos insto fuertemente.

32

El servicio de la instrucción:maestros y escuelas para los indios

Del decreto en favor de los indígenas, su libertad y propiedad, dado en ElRosario de Cúcuta, el 20 de mayo de 1820.

Artículo 6.° Los productos de los terrenos que se arrienden conforme alartículo 4.°, se destinarán, parte para el pago de tributos y para el pagode los sueldos de maestros de las escuelas que se establecerán en cadapueblo. Cada maestro gozará anualmente de un sueldo de ciento veintepesos si alcanzaren o excedieren de esta cantidad los arrendamientos; sifueren menos, será todo para el maestro.

Artículo 7.° El juez político, de acuerdo con el cura de cadapueblo, nombrará estos maestros y participará sus nombramientos a losgobernadores de la provincia para que éstos lo hagan al gobernador deldepartamento.

Artículo 8.° Los gobernadores políticos de las provincias formaránel reglamento que deba observarse en las escuelas de sus respectivasprovincias, detallando el método de enseñanza y de educación.

168

Page 163: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Artículo 9.“ Todos los jóvenes mayores de cuatro años y menoresde catorce asistirán a las escuelas donde se les enseñarán las primerasletras, la aritmética, los principios de la religión y los derechos ydeberes del hombre y del ciudadano en Colombia conforme a las leyes.

Artículo 10. Deducido el sueldo de los maestros, se aplicarán lasrentas que sobren de los arrendamientos al ramo de tributos, rebajandoeste total que se aplique del total general con que contribuya el pueblo aquien se aliviará la contribución a prorrata.

33

“Para formar un legislador se necesita educarloen una escuela de moral, de justicia y de leyes”

Como alcance explicativo del Discurso de Angostura, escribe el Liberta-dor esta carta a su inteligente amigo don Guillermo White, desde SanCristóbal, el 26 de mayo de 1820.

Mi querido amigo:

Aprovecho la oportunidad para dirigir a Vd. mi discurso al Congreso,reimpreso en Bogotá, y que lo mire con más indulgencia que antes. Meparece que Vd. me criticó la creación de un senado hereditario y laeducación de los senadores futuros. Lo primero está de acuerdo con lapráctica de todas las repúblicas democráticas, y lo segundo con larazón. La educación forma al hombre moral, y para formar un legisla-dor se necesita ciertamente de educarlo en una escuela de moral, dejusticia y de leyes. Vd. me cita la Inglaterra como un ejemplo contrarioa mi establecimiento; pero, en Inglaterra, ¿no deja de hacerse muchobueno? En cuanto a mi senado diré, que no es una aristocracia ni unanobleza, constituidas, la primera sobre el derecho de mandar la repú-blica, y la segunda sobre privilegios ofensivos. El oficio de mi senado estemperar la democracia absoluta, es mezclar la forma de un gobiernoabsoluto con una institución moderada, porque ya es un principiorecibido en la política, que tan tirano es el gobierno democráticoabsoluto como un déspota; así, sólo un gobierno temperado puede serlibre. Cómo quiere Vd. que yo tempere una democracia sino con unainstitución aristocrática? Ya que no debemos mezclar la forma monár-quica con la popular que hemos adoptado, debemos, por lo menos,hacer que haya en la república un cuerpo inalterable que le asegure suestabilidad; pues, sin estabilidad, todo principio político se corrompe ytermina siempre por destruirse.

169

Page 164: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Tenga Vd. la bondad de leer con atención mi discurso, sin atendera sus partes, sino al todo de él. Su conjunto prueba que yo tengo muypoca confianza en la moral de nuestros conciudadanos, y sin moralrepublicana no puede haber gobierno libre:Para afirmar esta moral, heinventado un cuarto poder que críe los hombres en la virtud y losmantenga en ella. También este poder le parecerá a Vd. defectuoso;mas, amigo, si Vd. quiere república en Colombia, es preciso que quieratambién que haya virtud política. Los establecimientos de los antiguosnos prueban que los hombres pueden ser regidos por los preceptos másseveros. Todo el cuerpo de la historia manifiesta que los hombres sesometen a cuanto un hábil legislador pretende de ellos, v a cuanto unafuerte magistratura les aplique. Dracón dio leyes de sangre a Atenas, YAtenas las sufrió, y aun las observó hasta que Solón quiso reformarlas.Licurgo estatuyó en Esparta lo que Platón no se había atrevido a soñaren su república si no hubiese tenido por modelo al legislador deEsparta. A qué no se han sometido los hombres! A qué no sesometerán aún! Si hay alguna violencia justa, es aquélla que se empleaen hacer a los hombres buenos y, por consiguiente, felices; y no haylibertad legítima sino cuando ésta se dirige a honrar la humanidad y aperfeccionarle su suerte. Todo lo demás es de pura ilusión, y quizás deuna ilusión perniciosa.

Perdone Vd., amigo, esta larga digresión sobre mi discurso, puesVd. bien la merecía hace mucho tiempo, y yo se la había ahorrado, máspor desidia que por voluntad.

Siempre su amigo de corazón.

Bolívar

34

Las perspectivas de la paz

Un examen variado, espontáneo y optimista, de Za compleja situaciónpolítica, para su amigo el general Carlos Soublette, desde Rosario el 19de junio de 1820.

Mi querido general y amigo:

Ayer he recibido una comunicación muy interesante interceptada por elcoronel Carmona en Chiriguaná, fechada en Cartagena el 20 de mayo,por la cual hemos sabido noticias positivas de la España hasta el mes deabril. Fernando VII el 7 de marzo ha jurado la constitución y las cortes,por un decreto, forzado por la voluntad del pueblo y a instancias delgeneral Ballesteros. Parece que la revolución era general en la Península

170

Page 165: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

y que el rey estaba en la última extremidad cuando juró la constitu-ción. Su situación, pues, es violentísima y tendrá que complacer alpueblo y al ejército que desean la paz por salir de los sacrificios y de lamuerte. Aun los liberales mismos tendrán que halagar al ejército con lapaz, porque la cuestión no es otra que la no venida a América; y elmodo de calmar hasta la sospecha de este mal es concluir la guerra, enlo que parece pronunciada ya toda la Península. Por otra parte, nohabiendo podido subyugarnos la España con sus expediciones, ahora loalcanzarán menos sin ellas: no teniendo otro interés que el del comercioexclusivo en América, y teniendo nosotros innumerables corsarios quese multiplicarán en razón inversa de nuestras desventajas militares, omejor diré, que se aumentarán cuanto menos territorio tengamos, sucomercio, por consiguiente, se anula. Siendo el interés de los liberales lapropagación de los principios liberales contra los cuales encontrarán enEspaña y en toda Europa muchos contrarios, es indispensable que lascortes se decidan a nuestro favor, tanto porque ya no se trata de unasimple cuestión de economía política, sino de una preponderanciaintestina, como porque habiendo en América gobiernos libres, ellasencontrarán siempre entre nosotros puntos de apoyo y aun medios paracombatir a los serviles, porque la afinidad de principios producesiempre la atracción recíproca en materias políticas. Los serviles, porotra parte, y sobre todo Fernando, tienen, más que los otros, necesidadde hacer la paz para acallar al ejército, que no tiene otro clamor, ni lopuede lisonjear de otro modo; porque los hombres no se contentan conque les curen el mal de que padecen, sino que desean acabar con el malmismo por la aprehensión que imprime y la amenaza que deja de volvera afligir. Así las tropas españolas no estarán satisfechas mientras nohayan visto cesar las hostilidades con nosotros, sabiendo, por experien-cia, que todos los géneros de sistemas que han regido a la España lashan enviado a América. Si alguna cosa retarda nuestras negociacionescon España no será ciertamente ni su voluntad ni los embarazos que seopongan a esta consecución. Yo pienso que solamente los inminentespeligros que ambos partidos van a correr, y la ocupación urgente de susintereses inmediatos, no más, los harán descuidar momentáneamenteesta medida. Por lo mismo es de nuestro deber proporcionarle a losenemigos los medios y las ocasiones de tratar con nosotros. Estosmedios pueden ser iniciados por nuestros enviados en Londres y en losEstados Unidos directamente con los enviados españoles, e indirecta-mente con los otros enviados extranjeros que más interés muestren pornuestra causa. Estos mismos pasos admiten infinidad de modifica-ciones, más o menos eficaces, más o menos directas, por vías públicas,por vías privadas, por la imprenta, por la conversación, por los amigosy aun por los enemigos. Jamás será degradante ofrecer la paz bajo losprincipios consignados en la declaratoria de Za República de Venezuela, que

171

Page 166: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

debe ser la base de toda negociación, primero porque así está ordenadocomo ley de la república, y segundo, porque así lo prescribe lanaturaleza y la salvación de Colombia. Ofrecerles así la paz a losespañoles es pedirles la corona del triunfo, pues no siendo otro el objetode la contienda, obtenerlo es vencer. A los españoles, estando altamenteconvencidos de su impotencia con respecto a nosotros, y sufriendo enla guerra cuantas calamidades pueden afligirles, a los españoles, digo,concederles la paz es decretarles un triunfo, no menos importante y nomenos deseable. Ellos están en el caso del rico de Platón: ellos tienentodo que perder y nada que adquirir; y nosotros no teniendo nada queperder aspiramos a cuanto ellos poseen. La lucha no nos ha dejado másque la vida, y ésta es de ningún precio para hombres desesperados. Estacuestión, bien desenvuelta, es inmensa y presenta todas las considera-ciones que pueden halagar a nuestros contrarios y a nosotros mismos.Por tanto, nosotros no debemos ofrecer más que la paz en recompensade la independencia. Ésta para nosotros nos trae todas las bendicionesdel cielo, y aquélla para los españoles es una fuente de inmensasprosperidades futuras.

He aquí mis ideas, las que deseo que Vd., el vicepresidente deColombia y el secretario de estado mediten profundamente y lasempleen en la ocasión, sin esperarla, sino buscándola y proporcionán-dola de todos modos, porque los momentos presentes tienen un valorinfinito, y no sólo Séneca debe saber apreciar el mérito del tiempo.

Si por accidente se supiese o se recibiesen noticias de algunanegociación diplomática, que se ponga alas al correo, se ofrezcanpremios exorbitantes para que volando me lleguen oportunamente.Deseo que nada se haga sin mi conocimiento en esta materia. Nada esmás fácil que dilatar las cosas, ofrecerles mi llegada por instantes yesperarme. Hace mucho al caso el personal en todas materias, muyparticularmente en las diplomáticas. En los negocios pacíficos como enlos militares es muy importante ser veterano.

Page 167: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

35

El patronato,dirección y gobierno de los institutos

docentes pertenece al Estado

Decreto dado en El Rosario, el 21 de junio de 1820, por el cual declaraBolívar que el Estado asume la responsabilidad centralizada de orientar ydirigir la educación.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente

Considerando: 1.° , que la educación civil y literaria de la juventud esuno de los primeros y más paternales cuidados del gobierno; 2.°, queno pudiendo reformarse por ahora la educación literaria que se da en lospocos establecimientos hechos por el gobierno español, debe por lomenos velar sobre ellos y procurar su adelantamiento y perfección; 3.°,que la diferencia de método y régimen de enseñanza en los diversosestablecimientos es embarazosa y perjudicial; 4.°, que este mal esinevitable mientras los establecimientos no sean regidos por un mismojefe y, sobre todo, por el gobierno; 5.°, que la dirección o patronatoque ejercía la autoridad eclesiástica en los colegios seminarios eradelegada por el rey de España; 6.° y último, que en nada se alteran lasdisposiciones canónicas sobre los seminarios, siempre que la autoridadeclesiástica continúe ejerciendo su inspección y derechos sobre las becasseminarias sin mezclarse en la dirección general del establecimiento, hevenido en decretar y decreto lo siguiente:

Artículo 2.° El patronato, dirección y gobierno de los colegios deestudios y educación establecidos en la república pertenece al gobierno,cualquiera que haya sido la forma de establecimiento de aquéllos.

Artículo 2.° Se comprenden expresamente en el artículo antece-dente, los colegios seminarios que hay en toda la extensión de larepública, cuyos jefes, rectores, maestros y demás empleados depen-derán del gobierno y serán nombrados por él.

Artículo 3.° Se reserva a los muy reverendos arzobispos y obisposy a sus venerables cabildos y provisores en sede vacante los derechos yprivilegios que les corresponden para proveer y velar sobre las becasseminarias que haya, llenando y ejerciendo con respecto a ellas todassus atribuciones.

Artículo 4.° Los vicepresidentes de departamentos, como agentesinmediatos del gobierno en sus respectivos departamentos, serán lospatronos de los colegios y establecimientos de educación.

173

Page 168: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Artículo 5.° El ministro del Interior y Justicia se encargará de laejecución de este decreto.

Publíquese y comuníquese a quienes corresponda.Dado en El Rosario, a 21 de junio de 1820.-10°

Simón Bolívar

36

Concertación Norte-Sur para la independencia

Mensaje desde Bogotá, el 10 de enero de 1821, al Excmo. señor don Joséde San Martín, capitán general del Ejército Libertador del Perú, etc., etc.Certifica la sólida amistad que unió a los dos héroes y sumó finalmente susesfùerzos para completar la libertad continental.

Excmo. señor:

Tengo la honra de acusar a V. E. la recepción del despacho a 12 deoctubre, en Pisco, del año próximo pasado. Este momento lo habíadeseado toda mi vida; y sólo el de abrazar a V. E. y el de reunirnuestras banderas puede serme más satisfactorio. El vencedor de Chaca-buco y Maipú, el hijo primero de la Plata, ha olvidado su propia gloriaal dirigirme sus exagerados encomios; pero ellos le honran porque sonel testimonio más brillante de su bondad y propio desprendimiento. Alsaber que V. E. ha hollado las riberas del Perú, ya las he creído libres; ycon anticipación me apresuro a congratular a V. E. por esta tercerpatria que le debe su existencia.

Me hallo en marcha para ir a cumplir mis ofertas de reunir elimperio de los Incas al imperio de la libertad; sin duda, que más fácil esentrar en Quito que en Lima; pero V. E. podrá hacer más fácilmente lodifícil que yo lo fácil; bien pronto la divina Providencia, que haprotegido hasta ahora los estandartes de la ley y de la libertad, nosreunirá en algún ángulo del Perú, después de haber pasado por sobre lostrofeos de los tiranos del mundo americano.

V. E. verá por los adjuntos impresos las últimos ocurrencias poresta parte. Entre otras, hay un armisticio y un tratado de la regulariza-ción de la guerra muy digno de la atención de V. E.

Acepte V. E. con bondad los testimonios más francos de miprofunda consideración y respeto.

De V. E. atento, adicto servidor.

Bolívar

174

Page 169: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

37

En torno a lasdificultades de una nueva república

Carta al insigne y valeroso precursor colombiano, general AntonioNariño, fechada en Barinas, el 21 de abril de 1821.

Mi muy estimable amigo y señor:

Mucho celebraré que Vd. haya llegado a Cúcuta sin ninguna novedadparticular. Debe ser un poco triste para Vd. el pronto término de suspredecesores, y no quiera el cielo que Vd. los siga en su viaje a la patriade los muertos. Aquí se ha asegurado que nuestro común y dignoamigo Azuola debe haber expirado; muy sensible me será si tal desgra-cia le sucede a la república y a su familia.

Yo tengo mucha confianza en que Vd. allanará todas las dificul-tades que se opongan a la instalación del congreso, y es el objeto, en eldía, más ardiente para mi corazón. Deseo, sobre toda exageración, queel cuerpo legislativo se reúna para que eche los últimos cimientos aledificio de la república, que aún está por construir; pues que notenemos más que despejado el terreno de veinte y dos provincias, y unlibro que no habla con nadie, que llaman constitución.

Pero Vd. verá por sí mismo, que no hay otra cosa, porque latransición del gobierno, la comisión de unos individuos en paísesextranjeros, la muerte de dos vicepresidentes, la ausencia de los minis-tros, la dificultad de la reunión del congreso, la no existencia de unadirección general de rentas y la incoherencia de todos los ramos, miausencia de la capital y mi estada en el ejército, todo esto y otrasmuchas cosas tienen, por decirlo así, la república en orfandad. Colom-bia se gobierna por la espada de los que la defienden, y en lugar de serun cuerpo social, es un campo militar. Por consiguiente, los abusos, lasnegligencias y la carencia de todo elemento orgánico, es inevitable-mente el efecto de aquellos principios que no ha estado en mi podercorregir, por muchas razones: la primera, porque un hombre en muypoco tiempo, y escaso de conocimientos generales, no puede hacerlotodo, ni bien ni mal; segunda, porque me he dedicado exclusivamente aexpulsar a nuestros enemigos; tercera, porque hay muchas considera-ciones que guardar en este caos asombroso de patriotas, godos, egoístas,blancos, pardos, venezolanos, cundinamarqueses, federalistas, centralis-tas, republicanos, aristócratas, buenos y malos, y toda la caterva dejerarquías en que se subdividen tan diferentes bandos; de suerte que,amigo, yo he tenido muchas veces que ser injusto por política, y no hepodido ser justo impunemente.

Page 170: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Convencido íntimamente de que a la cabeza del gobierno se debeponer otro que no sea un soldado como yo, siempre en la frontera, y deque debe dividirse el mando del ejército y el de la república, mando midimisión, para que, tanto Vd. como los demás buenos ciudadanos, seempeñen en que se acepte. De no, cuente Vd. con la orfandad eternadel gobierno y aun con mi deserción el día mismo que bata losenemigos. Crea Vd., amigo mío, que yo he meditado mucho estamateria, en ocho años que he gobernado la república. Yo no sé, nipuedo, ni quiero gobernar: para hacer eficazmente una cosa es menestertener inclinación a ella y aun quererla con pasión vehemente.

Por mi parte, cada día me siento con más repugnancia por elmando, y si continúo y continuaré a la cabeza del ejército, es porquedesde el primer día de mi vida pública me encontré fuertementeanimado de la ansia de contribuir a la expulsión de nuestros antiguosopresores. De suerte, que este servicio lo hago por pasión, no pormérito. Yo espero que Vd. emplee todo su influjo en que no se mefuerce a cometer una acción más contraria a mí mismo que al crédito dela república, y en que ambos padeceríamos más de lo que se puedeprever; porque suponga Vd. que impresión haría a los extranjeros ladeserción del jefe del estado y qué anarquía la que se establecería ennuestro pueblo colombiano!

Si Vd. no quiere ser presidente, puede Vd. indicar otro que lo seatan dignamente como Vd. mismo. El general Santander es excelentesujeto; y si no, Urdaneta, Montilla, Restrepo, Peñalver, Zea y otrosmuchos que tienen más o menos mérito que los precedentes. Miopinión es en esta parte que el presidente debe ser militar y cundinamar-qués; y el vicepresidente paisano y venezolano, para evitar celos ydiscordias; si es que se pueden evitar en el tumulto de tan ciegaspasiones.

Adiós, mi querido amigo.

Bolívar

176

Page 171: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

38

La complejidad social de América

Siempre el tema de los problemas de una situación crítica, en carta algeneral F. de P. Santander, desde San Carlos, el 13 de junio de 1821,once días antes de la batalla de Carabobo, batalla definitiva para laindependencia de Venezuela.

Mi querido general:

En medio de mis ocupaciones militares me estoy siempre acordando deVd., aunque ya no es con el interés que antes; quiero decir, por la plataque Vd. nos enviaba, a la cual he renunciado para siempre desde que seha establecido la barrera en Cúcuta. Al presente, digo, sólo me acuerdode Vd. por amistad. Lo considero muy ocupado, tanto en levantar elejército de reserva, como en aplacar los clamores del congreso contralos militares: uno y otro es muy necesario para evitar los estragos de laguerra, o la guerra civil. Procure Vd. muchos fusiles y municiones paraimpedir que un tercer paseo militar ocupe a Bogotá. La verdad seadicha: el enemigo pierde por todas partes país, opinión y gente; y apesar de estas ventajas negativas nuestras fuerzas son iguales. Losenemigos están reducidos a Carabobo, pero si perdemos una accióngeneral, Colombia es grande y les dará mucha tierra.

Por aquí se sabe poco del congreso y de Cúcuta: se dice quemuchos en Cundinamarca quieren federación; pero me consuela conque ni Vd., ni Nariño, ni Zea, ni yo, ni Páez, ni otras muchasautoridades venerables que tiene el ejército libertador gustan de seme-jante delirio. Por fin, por fin, han de hacer tanto los letrados, que seproscriban de la República de Colombia, como hizo Platón con lospoetas en la suya. Esos señores piensan que la voluntad del pueblo es laopinión de ellos, sin saber que en Colombia el pueblo está en el ejército,porque realmente está y porque ha conquistado este pueblo de manode los tiranos; porque además es el pueblo que quiere, el pueblo queobra y el pueblo que puede; todo lo demás es gente que vegeta con máso menos malignidad, o con más o menos patriotismo, pero todos sinningún derecho a ser otra cosa que ciudadanos pasivos. Esta política,que ciertamente no es la de Rousseau, al fin será necesario desenvol-verla para que no nos vuelvan a perder esos señores. Ellos pretendencon nosotros representar el segundo acto de Buenos Aires, cuando lasegunda parte que van a dar es la del Guarico. Piensan esos caballerosque Colombia está cubierta de lanudos, arropados en las chimeneas deBogotá, Tunja y Pamplona. No han echado sus miradas sobre los

177

Page 172: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

caribes del Orinoco, sobre los pastores del Apure, sobre los marinerosde Maracaibo, sobre los bogas del Magdalena, sobre los bandidos dePatía, sobre los indómitos pastusos, sobre los guajibos de Casanare ysobre todas las hordas salvajes de Africa y de América que, comogamos, recorren las soledades de Colombia.

¿No le parece a Vd., mi querido Santander, que esos legisladoresmás ignorantes que malos, y más presuntuosos que ambiciosos, nosvan a conducir a la anarquía, y después a la tiranía, y siempre a la ruina?Yo lo creo así, y estoy cierto de ello. De suerte que si no son losllaneros los que completan nuestro exterminio, serán los suaves filóso-fos de la legitimada Colombia. Los que se creen Licurgos, Numas,Franklines, y Camilos Torres y Roscios, y Uztaris y Robiras, y otrosnúmeros que el cielo envió a la tierra para que acelerasen su marchahacia la eternidad, no para darles repúblicas como las griegas, romana yamericana, sino para amontonar escombros de fábricas monstruosas ypara edificar sobre una base gótica un edificio griego al borde de uncráter.

Adiós, mi querido Santander, páselo Vd. bien. Espere en lavictoria de Carabobo que vamos a dar; forme su ejército de reserva, seadócil con el congreso y tenga por mí el aprecio que yo le profeso.

Su amigo.

Bolívar

P. D.: La división de Urdaneta llega aquí dentro de dos o tres días. Elgeneral queda en Carora por sus achaques antiguos. El general Páezestá conmigo desde antes de ayer. Pronto entraremos en la lid.

39

Otra vez por la libertad de los esclavos

Mensaje desde Valencia, el 14 de julio de 1821, al presidente del segundocongreso colombiano reunido en Cucuta. Confirma su insistencia sobre laidea básica de la libertad absoluta de los esclavos.

La sabiduría del Congreso General de Colombia está perfectamente deacuerdo con las leyes existentes en favor de la manumisión de losesclavos; pero ella pudo haber extendido el imperio de su beneficenciasobre los futuros colombianos que, recibidos en una cuna cruel ysalvaje, llegan a la vida para someter su cerviz al yugo. Los hijos de losesclavos que en adelante hayan de nacer en Colombia deben ser libres,porque estos seres no pertenecen más que a Dios y a sus padres, y ni

178

Page 173: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Dios, ni sus padres los quieren infelices. El Congreso General, autori-zado por sus propias leyes, y aún más, por las de la naturaleza, puededecretar la libertad absoluta de todos los colombianos al acto de naceren el territorio de la república. De este modo se concilian los derechosposesivos, los derechos políticos y los derechos naturales.

Sírvase V. E. elevar esta solicitud de mi parte al Congreso Generalde Colombia para que se digne concedérmela en recompensa de labatalla de Carabobo, ganada por el ejército libertador, cuya sangre hacorrido sólo por la libertad.

40

“Prefiero el títulode ciudadano al de Libertador”

Discurso pronunciado ante el Congreso de la República, en la Villa delRosario de Cúcuta el 3 de octubre de 1821. Bolívar subraya nuevamente,como ya lo hizo ante el Congreso de Angostura, su ideal del “buenciudadano”.

Señor:

El juramento sagrado que acabo de prestar en calidad de presidente deColombia es para mí un pacto de conciencia que multiplica mis deberesde sumisión a la ley y a la patria. Sólo un profundo respeto por lavoluntad soberana me obligaría a someterme al formidable peso de lasuprema magistratura. La gratitud que debo a los representantes delpueblo me impone además la agradable obligación de continuar misservicios por defender con mis bienes, con mi sangre y aun con mihonor esta constitución que encierra los derechos de dos puebloshermanos, ligados por la libertad, por el bien y por la gloria. Laconstitución de Colombia será junto con la independencia la ara santaen la cual haré los sacrificios. Por ella marcharé a las extremidades deColombia a romper las cadenas de los hijos del Ecuador, a convidarloscon Colombia, después de hacerlos libres.

Señor, espero que me autoricéis para unir con los vínculos de labeneficencia a los pueblos que la naturaleza y el cielo nos han dado porhermanos. Completada esta obra de vuestra sabiduría y de mi celo,nada más que la paz nos puede faltar para dar a Colombia todo, dicha,reposo y gloria. Entonces, señor, yo ruego ardientemente, no osmostréis sordo al clamor de mi conciencia y de mi honor que me pidena grandes gritos que no sea más que ciudadano. Yo siento la necesidadde dejar el primer puesto de la república, al que el pueblo señale comoal jefe de su corazón. Yo soy el hijo de la guerra; el hombre que los

179SSS

Page 174: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

combates han elevado a la magistratura: la fortuna me ha sostenido eneste rango y la victoria lo ha confirmado. Pero no son éstos los títulosconsagrados por la justicia, por la dicha y por la voluntad nacional. Laespada que ha gobernado a Colombia no es la balanza de Astrea, es unazote del genio del mal que algunas veces el cielo deja caer a la tierrapara el castigo de los tiranos y escarmiento de los pueblos. Esta espadano puede servir de nada el día de paz, y éste debe ser el último de mipoder; porque así lo he jurado para mí, porque lo he prometido aColombia y porque no puede haber república donde el pueblo no estáseguro del ejercicio de sus propias facultades. Un hombre como yo esun ciudadano peligroso en un gobierno popular; es una amenazainmediata a la soberanía nacional. Yo quiero ser ciudadano, para serlibre y para que todos lo sean. Prefiero el título de ciudadano al deLibertador, porque éste emana de la guerra, aquél emana de las leyes.Cambiadme, señor, todos mis dictados por el de buen ciudadano.

41

Homenaje del recuerdo, afecto y consideracióna un científico inmortal

Carta al sabio naturalista Alejandro de Humboldt, desde Bogotá, el 10 de,noviembre de 1821. Este diría más adelante que amaba a Colombia comoa “una segunda patria “.

AL SEÑOR ALEJANDRO DE HUMBOLDT

Muy señor mío y respetable amigo:

Mr. Bollmann, que parte mañana para Europa, ha querido encargarsecon placer de estas letras que llevarán a Vd. la expresión de mirecuerdo, de mi afecto y de mi consideración. El barón de Humboldtestará siempre con los días de la América presentes en el corazón de losjustos apreciadores de un grande hombre, que con sus ojos la haarrancado de la ignorancia y con su pluma la ha pintado tan bella comosu propia naturaleza. Pero no son éstos los solos títulos que Vd. tiene alos sufragios de nosotros los americanos. Los rasgos de su caráctermoral, las eminentes cualidades de su carácter generoso tienen unaespecie de existencia entre nosotros; siempre los estamos mirando conencanto. Yo por lo menos al contemplar cada uno de los vestigios querecuerdan los pasos de Vd. en Colombia me siento arrebatado de lasmás poderosas impresiones. Así, estimable amigo, reciba Vd. los

180

Page 175: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

cordiales testimonios de quien ha tenido el honor de respetar su nombreantes de conocerlo, y de amarlo cuando le vio en París y Roma.

Soy de Vd. con la mayor consideración y respeto, su más obe-diente servidor q. b. s. m.

Bolívar

42

El cabal y modernoconocimiento de una pedagogía

Método y prospecto de indicaciones para la educación de su sobrinoFernando, enviados por Bolívar al director del colegio donde aquél seeducaba en Norteamérica.

La educación de los niños debe ser siempre adecuada a su edad,inclinaciones, genio y temperamento.

Teniendo mi sobrino más de doce años, deberá aplicársele aaprender los idiomas modernos, sin descuidar el suyo. Los idiomasmuertos deben estudiarse después de poseer los vivos.

La geografía y cosmografía debe ser de los primeros conocimien-tos que haya de adquirir un joven.

La historia, a semejanza de los idiomas, debe principiarse a apren-der por la contemporánea, para ir remontando por grados hasta llegar alos tiempos oscuros de la fábula.

Jamás es demasiado temprano para el conocimiento de las cienciasexactas, porque ellas nos enseñan el análisis en todo, pasando de loconocido a lo desconocido, y por ese medio aprendemos a pensar y araciocinar con lógica.

Mas debe tenerse presente la capacidad del alumno para el cálculo,pues no todos son igualmente aptos para las matemáticas.

Generalmente todos pueden aprender la geometría y compren-derla; pero no sucede lo mismo con el álgebra y el cálculo integral ydiferencial.

La memoria demasiado pronta siempre es una facultad brillante;pero redunda en detrimento de la comprensión; así es que al niño quedemuestra demasiada facilidad para retener sus lecciones de memoriadeberá enseñársele aquellas cosas que lo obliguen a meditar, comoresolver problemas y poner ecuaciones; viceversa, a los lentos deretentiva, deberá enseñárseles a aprender de memoria y a recitar lascomposiciones escogidas de los grandes poetas; tanto la memoria comoel cálculo están sujetos a fortalecerse por el ejercicio.

181

Page 176: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

La memoria debe ejercitarse cuanto sea posible; pero jamás fati-garla hasta debilitarla.

La estadística es un estudio necesario en los tiempos que atravesa-mos, y deseo que la aprenda mi sobrino.

Con preferencia se le instruirá en la mecánica y ciencia del inge-niero civil, pero no contra su voluntad, si no tiene inclinación a esosestudios.

La música no es preciso que la aprenda, sino en el caso que tengapasión por ese arte; pero sí debe poseer aunque sean rudimentos deldibujo lineal, de la astronomía, química y botánica, profundizando máso menos en esas ciencias según su inclinación o gusto por alguna deellas.

La enseñanza de las buenas costumbres o hábitos sociales es tanesencial como la instrucción; por eso debe tenerse especial cuidado enque aprenda en las cartas de lord Chesterfield a su hijo, los principios ymodales de un caballero.

La moral en máximas religiosas y en la práctica conservadora de lasalud y de la vida es una enseñanza que ningún maestro puede descuidar.

El derecho romano, como base de la legislación universal, debeestudiarlo.

Siendo muy difícil apreciar dónde termina el arte y principia laciencia, si su inclinación lo decide a aprender algún arte u oficio yo locelebraría, pues abundan entre nosotros médicos y abogados, pero nosfaltan buenos mecánicos y agricultores que son los que el país necesitapara adelantar en prosperidad y bienestar.

El baile, que es la poesía del movimiento y que da la gracia y lasoltura a la persona, a la vez que es un ejercicio higiénico en climastemplados, deberá practicarlo si es de su gusto.

Sobre todo, recomiendo a usted inspirarle el gusto por la sociedadculta donde el bello sexo ejerce su benéfico influjo, y ese respeto a loshombres de edad, saber y posición social, que hace a la juventudencantadora asociándola a las esperanzas del porvenir.

182

Page 177: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

43

Solidaridad conSan Martín por la independencia plena

En reafirmación de la sustantiva unidad, Bolívar escribe al Excmo. señorProtector del Perú, general don josé de San Martín, desde Quito, el 17 dejunio de 1822.

Quito, 17 de junio de 1822

AL EXCMO. SEÑOR PROTECTOR DEL PERÚ

Excmo. señor:

Al llegar a esta capital, después de los triunfos obtenidos por las armasdel Perú y Colombia en los campos de Bomboná y Pichincha, es mimás grande satisfacción dirigir a V. E. los testimonios más sinceros dela gratitud con que el pueblo y el gobierno de Colombia han recibido alos beneméritos libertadores del Perú, que han venido con sus armasvencedoras a prestar su poderoso auxilio en la campaña que ha libertadotres provincias del sur de Colombia, y esta interesantísima capital, tandigna de la protección de toda la América, porque fue una de lasprimeras en dar el ejemplo heroico de libertad. Pero no es nuestrotributo de gratitud un simple homenaje hecho al gobierno y ejército delPerú, sino el deseo más vivo de prestar los mismos y aún más fuertesauxilios al gobierno del Perú, si para cuando llegue a manos de V. E.este despacho, ya las armas libertadoras del Sur de América no hanterminado gloriosamente la campaña que iba a abrirse en la presenteestación.

Tengo la mayor satisfacción en anunciar a V. E. que la guerra deColombia está terminada, que su ejército está pronto para marchardonde quiera que sus hermanos lo llamen, y muy particularmente a lapatria de nuestros vecinos del sur, a quienes por tantos títulos debemospreferir como los primeros amigos y hermanos de armas.

Acepte V. E. los sentimientos de la más alta consideración conque soy de V. E. atento, obediente servidor.

Bolívar

183

Page 178: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

44

“Primer amigode mi corazón y de mi patria”

Carta al Excmo. señor general don José de San Martín, Protector delPerú, el 25 de julio de 1822, desde Guayaquil. Anticipa el entendimientoque seguidamente ocurre en la entrevista celebrada en ese puerto delPacífico el día 26.

Guayaquil, 25 de julio de 1822

AL EXCMO. SEÑOR GENERAL DON JOSÉ DE SAN MARTÍN,

PROTECTOR DEL PERÚ

Es con suma satisfacción, dignísimo amigo y señor, que doy a Vd. porprimera vez el título que mucho tiempo ha mi corazón le ha consa-grado. Amigo le llamo a Vd. y este nombre será el solo que debequedarnos por la vida, porque la amistad es el único vínculo quecorresponde a hermanos de armas, de empresas y de opinión; así, yome doy a enhorabuena, porque Vd. me ha honrado con la expresión desu afecto.

Tan sensible me será que Vd. no venga hasta esta ciudad como sifuéremos vencidos en muchas batallas; pero no, Vd. no dejará burladael ansia que tengo de estrechar en el suelo de Colombia al primer amigode mi corazón y de mi patria. Cómo es posible que Vd. venga de tanlejos, para dejarnos sin la posesión positiva en Guayaquil del hombresingular que todos anhelan conocer y, si es posible, tocar?

No es posible respetable amigo; yo espero a Vd., y también iré aencontrarle donde quiera que Vd. tenga la bondad de esperarme; perosin desistir de que Vd. nos honre en esta ciudad. Pocas horas, comoVd. dice, son bastantes para tratar entre militares, pero no seránbastantes esas mismas horas para satisfacer la pasión de la amistad queva a empezar a disfrutar de la dicha de conocer el objeto caro que seamaba sólo por opinión, sólo por la fama.

Reitero a Vd. mis sentimientos más francos con que soy de Vd. sumás apasionado, afectísimo servidor y amigo.

Bolívar

184

Page 179: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

45

Suma y combinaciónpara asegurar la obra común

Informe a Santander sobre la “Entrevista de Guayaquil”, a sólo tres díasdel magno suceso. Sobre el glorioso libertador del sur, anota Bolívar:“El desea que todo marche bajo el aspecto de la unión, porque conoce queno puede haber paz y tranquilidad sin ella.” Guayaquil, 29 de julio de1822.

Mi querido general:Antes de ayer por la noche partió de aquí el general San Martín despuésde una visita de treinta y seis o cuarenta horas: se puede llamar visitapropiamente, porque no hemos hecho más que abrazarnos, conversary despedirnos. Yo creo que él ha venido por asegurarse de nuestraamistad, para apoyarse con ella con respecto a sus enemigos internos yexternos. Lleva 1800 colombianos en su auxilio, fuera de haber reci-bido la baja de sus cuerpos por segunda vez, lo que nos ha costado másde 600 hombres: así recibirá el Perú 3 000 hombres de refuerzo, por lomenos.

El Protector me ha ofrecido su eterna amistad hacia Colombia;intervenir en favor del arreglo de límites; no mezclarse en los negociosde Guayaquil; una federación completa y absoluta aunque no sea másque con Colombia, debiendo ser la residencia del congreso Guayaquil;ha convenido en mandar un diputado por el Perú a tratar, de manco-mún con nosotros, los negocios de España con sus enviados; tambiénha recomendado a Mosquera a Chile y Buenos Aires, para que admitanla federación; desea que tengamos guarniciones cambiadas en uno yotro estado. En fin, él desea que todo marche bajo el aspecto de launión, porque conoce que no puede haber paz y tranquilidad sin ella.Dice que no quiere ser rey, pero que tampoco quiere la democracia y siel que venga un príncipe de Europa a reinar en el Perú. Esto último yocreo que es pro forma. Dice que se retirará a Mendoza, porque estácansado del mando y de sufrir a sus enemigos.

No me ha dicho que trajese proyecto alguno, ni ha exigido nada deColombia, pues las tropas que lleva estaban preparadas para el caso.Sólo me ha empeñado mucho en el negocio de canje de guarniciones y,por su parte, no hay género de amistad ni de oferta que no me hayahecho.

Su carácter me ha parecido muy militar y parece activo, pronto yno lerdo. Tiene ideas correctas de las que a Vd. le gustan, pero no meparece bastante delicado en los géneros de sublime que hay en las ideas

185

Page 180: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

y en las empresas. Últimamente, Vd. conocerá su carácter por la me-moria, que mando con el capitán Gómez, de nuestras conversacionesaunque le falta la sal de la crítica que yo debería poner a cada una de susfrases.

Hoy están tratando los de la junta electoral de esta provincia sobresu agregación a Colombia: creo que se hará, pero pretendiendo muchasgracias y privilegios. Yo, encargado del poder ejecutivo en esta parte,me encargaré de la provincia, dejando al soberano congreso, libre susoberana voluntad, para que salga del paso con su soberano poder.Aquí me servirá de algo la división de los poderes y las distincio-nes escolásticas concediendo la mayor, y negando la menor. Hemoslogrado en estos días uniformar la opinión, a lo que no ha dejado decontribuir también la venida de San Martín, que ha tratado a losindependientes con el mayor desdén. Esto es lo que se llama saber sacarpartido de todo. No es para mí este elogio, sino para el que sabelisonjear a tiempo, aunque sea al cuerdo. La “Prueba” y la “Venganza”no estarían hoy en el Perú, sin la política de San Martín: pero ya no haymás que esperar de estos bobos, y ahora le echa la culpa a ellos.

Gracias a Dios, mi querido general, que he logrado con muchafortuna y gloria cosas bien importantes: primera, la libertad del sur;segunda, la incorporación a Colombia de Guayaquil, Quito y las otrasprovincias; tercera, la amistad de San Martín y del Perú para Colombia;y cuarta, salir del ejército aliado, que va a darnos en el Perú gloria ygratitud, por aquella parte. Todos quedan agradecidos, porque a todoshe servido, y todos nos respetan, porque a nadie he cedido. Losespañoles mismos van llenos de respeto y de reconocimiento algobierno de Colombia. Ya no me falta más, mi querido amigo, si no esponer a salvo el tesoro de mi prosperidad, escondiéndolo en un retiroprofundo, para que nadie me lo pueda robar: quiero decir que ya no mefalta más que retirarme y morir. Por Dios, que no quiero más: es por laprimera vez que no tengo nada que desear y que estoy contento con lafortuna.

El coronel Lara va mandando estos cuerpos y después seguirá elgeneral Valdés; es cuanto en esta ocasión tengo que participar a Vd. yquedo siempre de Vd. de corazón.

186

Page 181: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

46

Aplauso y reconocimientoa O’Higgins por devolver sus derechos

al pueblo de Chile

Mensaje al señor general Bernardo O’Higgins, director de la Repúblicade Chile, desde Guayaquil, el 29 de agosto de 1822. Testimonio deamistad y convergencia sobre ideales compartidos.

Muy respetable señor mío:Tengo la mayor satisfacción al dirigirme particularmente a V. E. paramanifestarle cordial y francamente mis sentimientos de admiración yaprecio por su persona. Mucho tiempo ha que deseaba felicitar a V. E.por los sucesos prósperos y gloriosos con que la buena suerte, el valor yla prudencia han coronado las operaciones del gobierno que V. E.preside dignamente. Ninguna oportunidad había sido tan favorable,para cumplir con mi corazón, como ésta en que V. E., sellando lagloria de su carrera política, ha devuelto al pueblo el ejercicio completode sus facultades. La convocatoria que V. E. ha hecho a los ciudadanosde Chile es la más liberal y la más propia de un pueblo que aspira almáximo de la libertad. V. E. no coarta de modo alguno la representa-ción nacional; y desde su origen ella va a ejercer una independencia que,sin duda, debe ser muy aplaudida por los mismos enemigos de nuestracausa y de nuestros magistrados.

El pueblo chileno es bueno, patriota y valeroso, y por estos noblestítulos tiene derecho a las más justas aspiraciones del bienestar y glorianacional. Este pueblo va a entrar el último por la vía constitucional yesta fortuna en ser el último le ofrece la inmensa ventaja de ver conanticipación los escollos que debe evitar y los ejemplos que debe seguir.La historia de los infortunios y errores de la América es elocuente paralos que saben leerla: V. E. probablemente presentará al pueblo chilenoun resumen de nuestras vicisitudes a fin de que no venga a caer sobrelos mismos precipicios a donde han ido a estrellarse todos nuestrosensayos legislativos. Chile hará muy bien si constituye un gobiernofuerte por su estructura y liberal por sus principios. Permítame V. E.que no indique más mis ideas sobre este particular, cuando de un modosolemne las he manifestado al congreso de Venezuela y entiendo queson conocidas en esa capital.

En ninguna época era tan importante a ese estado la reunión de susrepresentantes como en la presente. V. E. verá por la adjunta gaceta lasindicación que hacen a V. E. los agentes del gobierno español, para

187

Page 182: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

alejar el reconocimiento de nuestra emancipación. Es verdad que lacalumnia está marcada en todos los cuadros con que representa lasituación de la América el ministro español; mas debe sernos muysatisfactorio poderlo desmentir con hechos resplandecientes como ésteque ahora es el objeto de mi congratulación a V. E.

Me será muy grato que nuestra correspondencia epistolar sea tanfrecuente cuanto posible, y que reine en ella la sinceridad y el candorque son tan propios para unir a los compañeros de armas y amigosnatos. Por mi parte, ofrezco a V. E. los sentimientos de una verdaderaamistad y el tributo de admiración que inspiran a todos las relevantescualidades que adornan a V. E.

Me lisonjeo que el señor Mosquera, nuestro enviado, habrá tenidola honra de presentar a V. E. nuestras miras de unidad americana, ytambién me lisonjeo que V. E., animado de los mismos sentimientosque el Protector del Perú y de Colombia, aceptará gustoso el pacto desalvación que ya hemos empezado a llenar entre el Perú y nosotros.

Acepte V. E. la expresión ingenua de consideración con que soyde V. E. su afmo.. obediente servidor.

Simón Bolívar

47

“Nosotros estamos en el centro del universoy en contacto con todas las naciones.

Quién puede decir otro tanto?”

Reflexiones del político que mira al porvenir, en carta al general F. deP. Santander, desde Ibarra, el 23 de diciembre de 1822.

El congreso estará para reunirse para cuando llegue esta carta a manosde Vd. El suceso de Pasto ha retardado la marcha de los diputados delsur, y dudo que vayan muchos por el Dagua que ofrece dificultadespeligrosas y espantosas para los habitantes de este país. Yo me heempeñado algo en que vayan por esa parte, pero no mucho para nohacer aborrecible al congreso por su peligrosa entrada. Vd. sabe lasdificultades que había para ir a Cúcuta; por consiguiente, debe Vd.imaginar las que tendrán estos señores para atravesar el mar o paísesenemigos calenturientos, lejanos y molestos. La representación generalde Colombia, aunque es menos la extensión de este país que la de losEstados Unidos, presenta dificultades bien grandes, porque aquí lospaisanos no tienen ningún amor nacional, son pobres, y más pobres de

188

Page 183: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

luces aún, por lo que se creen inútiles en el congreso y menos obliga-toria su presencia en aquella asamblea. Dividamos la legislatura ydividimos los pueblos y los intereses y las armas, y sólo reunimos losejércitos para pelear hermanos contra hermanos. Yo creo que lacuestión sobre las dificultades actuales debe presentarse en estos térmi-nos: Será más fácil remediar las dificultades que presenta un grandeestado para reunir su representación nacional, o será más fácil ocurrir atodas las necesidades de la guerra que necesariamente debe suscitarse eneste mismo estado? Anoche leí a Rousseau, hablando de la pequeñarepública de Ginebra, que la mole de un grande estado se conserva ymarcha por sí misma, y que la menor falta en uno pequeño lo arruina.Al instante eché la vista sobre la historia y encontré que los grandesimperios se han conservado indestructibles a pesar de las muchasguerras y sacudimientos, y que las pequeñas naciones, como Caracas,han sido sumidas en la nada por un conquistador, un mal ciudadano, oun terremoto. Yo creo que la primer cualidad de las cosas es laexistencia y que las demás son secundarias. Existamos, pues, aunquesea con nuestros defectos y dificultades, porque al fin siempre es mejorser que no ser. Cuando yo tiendo la vista sobre la América la encuentrorodeada de la fuerza marítima de la Europa, quiere decir, circuida defortalezas fluctuantes de extranjeros y por consecuencia de enemigos.Después hallo que está a la cabeza de su gran continente una poderosí-sima nación muy rica, muy belicosa y capaz de todo; enemiga de IaEuropa y en oposición con los fuertes ingleses que nos querrán dar laley, y que la darán irremisiblemente. Luego encuentro el vasto ypoderoso imperio mejicano que, con sus riquezas y la unidad de susangre, está en estado de echarse sobre Colombia con muchas ventajas.Echo la vista después sobre las dilatadas costas de Colombia inquietadaspor todos los marineros, por todos los europeos cuyas colonias noscircundan, por los africanos de Haití, cuyo poder es más fuerte que elfuego primitivo. Enfrente tenemos las ricas y bellas islas españolas quenunca serán más que enemigas. A nuestra espalda la ambiciosa Portugalcon la inmensa colonia del Brasil, y al sur el Perú con muchos millonesde pesos, con su rivalidad con Colombia y con sus relaciones con Chiley Buenos Aires. En la primer discordia la marina del Perú, que debe sersu primer fuerza, porque sus costas son dilatadísimas, tiene la ventajamayor para abrazar todas nuestras riberas al mar. Colombia nuncapodrá competir en marina con el Perú en el Pacífico porque susprimeras atenciones las tiene en el Atlántico, y el Perú no tiene más queuna. Este cuadro, pues, no es infiel, y sin embargo véase que medios dedefensa tenemos contra tantos contrarios. Somos inferiores a nuestroshermanos del sur, a los mejicanos, a los americanos, a los ingleses y,por fin, a todos los europeos, que son nuestros vecinos en sus Antillas.Nosotros estamos en el centro del universo y en contacto con todas las

189

Page 184: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

naciones; quién puede decir otro tanto? Tenemos dos millones ymedio de habitantes derramados en un dilatado desierto. Una parte essalvaje, otra esclava, los más son enemigos entre sí y todos viciados porla superstición y el despotismo. Hermoso contraste para oponerse atodas las naciones de la tierra! Ésta es nuestra situación; ésta esColombia, y después la quieren dividir.

Ay! amigo, mucho me hace pensar la miserable hija de nuestrosafanes, yo querría que algún buen hombre se tomara la pena depresentar este cuadro al público con todos sus colores.

48

“Mi política ha sido siempre por la estabilidad,por la fuerza y por la verdadera libertad”

Mensaje al Excmo. señor vicepresidente de la República, desde Tulcán(Ecuador), el 31 de diciembre de 1822.

Tengo el honor de dirigir a V. E. la nota de mi felicitación al congresogeneral que he creído de mi deber hacer en momentos en que ya losupongo reunido. La nación espera las más grandes ventajas del con-greso que debe necesariamente dictar aquellas mejoras que el pueblodesea para el complemento de su prosperidad, pero no me puedopersuadir que los legisladores se dejen llevar del espíritu de innovaciónque ha cundido en esa capital. V. E. sabe, y Colombia entera lo sabetambién, que yo he consagrado mi vida a la integridad de Colombia, asu libertad y a su dicha. Mi política ha sido siempre por la estabilidad,por la fuerza y por la verdadera libertad. El congreso de Guayana oyómi dictamen sobre gobierno, y siguió una parte de mis opiniones; el deCúcuta hizo otra tanto; y V. E. sabe que por docilidad y obedienciajuré la constitución y me constituí su garante. Esta constitución esinalterable por diez años, y pudiera serlo, según el “Contrato Social”del primer republicano del mundo, pudiera serlo, digo, inalterable poruna generación entera, porque una generación puede constituirse por suvida.

La soberanía del pueblo no es ilimitada, porque la justicia es subase y la utilidad perfecta le pone término. Esta doctrina es del apóstolconstitucional del día. De dónde pueden creerse autorizados losrepresentantes del pueblo a cambiar constantemente la organizaciónsocial? Cuál será entonces el fundamento de los derechos, de laspropiedades, del honor, de la vida de los ciudadanos? Valdría más vivirbajo el feroz despotismo, pues al fin el sagrado del hombre tendríaapoyo en el poder mismo que lo oprime.

190

Page 185: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Yo, Excmo. señor, me creo autorizado a instar al poder ejecutivopara que haga los esfuerzos más eficaces a efecto de procurar que laactual legislatura no altere en nada al código fundamental de Colombia.Yo declaro, por mi parte, que ligado por un juramento a este código,no debo obedecer a ninguna ley que lo vulnere y viole; que miresolución es separarme de Colombia antes de dar asenso a las leyes queaniquilen la obra maravillosa del ejército libertador.

Por estas consideraciones y muchas otras, suplico a V. E. presenteal congreso general, oportunamente y cuando las circunstancias impe-riosas lo exijan, mi protesta solemne de no reconocer durante mipresidencia acto ninguno del congreso que revoque, altere o modifiquelas leyes fundamentales de la República de Colombia.

Soy de V. E., con la más alta consideración, su atento servidor.

49

“El que no está con la libertad puede contarcon las cadenas del infortunio

y con la desaprobación universal”

Meditaciones dramáticas sobre su acción pública, en carta al general F. deP. Santander, el 29 de abril de 1823, desde Guayaquil.

Todos los días tenemos noticias del emperador Iturbide y de sus malossucesos en Veracruz. La Gaceta de Guayaquil dará a Vd. una idea de lasactas insurreccionales de los generales de Iturbide. Me parece que estasactas son decisivas de la suerte de aquel imperio. Éste es el caso dedecir: pecó contra los principios liberales y así ha sucumbido, comodecía Bonaparte de sí mismo. Qué lección, amigo, a los que mandanen el día! El que no está con la libertad puede contar con las cadenas delinfortunio y con la desaprobación universal. El abate De Pradt dicemuy bien que antes era muy cómodo mandar y que ahora no hay mejorempleo que el de ciudadano; que los oficios de reyes, ministros,sacerdotes etc. son unos oficios que no valen nada, porque ahora sesigue a la inflexible razón y no al belicoso despotismo.

Yo hago mi confesión general todos los días, o más bien examende conciencia, y a la verdad tiemblo de mis pecados hechos contra mivoluntad, hechos en favor de la causa y por culpa de los godos. Quiénsabe si algún día me castigarán con alguna penitencia grave por mi malentendido patriotismo? Amigo, la cosa está mala; ya no se puede

191

Page 186: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

mandar, sino por el amor del prójimo y con una profunda humildad.Los ciudadanos están muy cosquillosos, y no quieren nada de arquitec-tura gótica, ni razón de estado, ni circunstancias; lo que desean es laarquitectura constitucional, la geometría legal, la simetría más exacta yescrupulosa; nada que hiera la vista ni al oído ni a sentido alguno. Paraponernos a cubierto pídale Vd. a su santidad el congreso, un boletopara poder pecar contra las fórmulas liberales, con remisión de culpa ypena, porque si no, no habremos conseguido nada después de habersalvado la patria, como hicieron Iturbide, O’Higgins y San Martín,porque los justísimos ciudadanos no quieren asistir a los combates, nidar con que pagar a los matadores, por no faltar a las leyes del decálogo,y a las santas de la filantropía, pero luego que se haya ganado elcombate vienen a distribuirse los despojos, pero condenando en todaforma a los sacrificadores, porque es muy bueno y muy sano condenary coger.

50

La creación de unaescuela náutica en Guayaquil

Testimonio de una iniciativa del Libertador, en Babahoyo, el 12 de juniode 1823.

AL SENOR

INTENDENTE INTERINO DEL DEPARTAMENTO DE

G U A Y A Q U I L

S. E. el Libertador se sirvió crear en Guayaquil una escuela de náutica ynombrar preceptor de ella al ciudadano Domingo Gómez con ladotación de mil ochocientos pesos anuales que deben pagársele de lascajas de esa ciudad. Este ciudadano obtuvo el permiso de ir a Chile porsu familia y debe volver necesariamente en todo el mes de julio paraestablecer la escuela. S. E. se ha servido también mandar que proviso-riamente se abra la escuela en una de las piezas del Colegio deGuayaquil. Dispone ahora, que US., de acuerdo con el rector, elija yseñale la sala que deba servir, y que de los fondos del tesoro deGuayaquil tome la cantidad necesaria para hacer construir mesas ybancos o asientos para los niños, y preparar algunas plumas, papel ytinteros para los primeros rudimentos.

192

Page 187: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

51

“Un tribunal quecondene lo que las leyes no

pueden impedir”

Evidenciando su conocida actitud de atención a la opinión públicamanifestada por la prensa, Bolívar da -el 15 de junio de 1823-argumentos para la defensa del Poder Moral, propuesto al Congreso deAngostura. Pide a su amigo José Rafael Arboleda, desde Guayaquil,participar en la defensa de esta iniciativa de su autoría.

Mucho tiempo ha que tenía deseos de escribir a Vd., y no lo habíahecho hasta ahora con bastante sentimiento mío: pero he visto unartículo en El Fósforo sobre el Poder Moral, que me ha animado adirigir a Vd. estas cuatro letras, para dar a Vd. las gracias si es el autordel artículo, y de no, para suplicarle que se las dé de mi parte a dichoautor. Supongo que es Vd. el que ha defendido el Poder Moral contanto acierto y delicadeza.

Ha dicho muy bien El Fósforo, número 16, que no hay inquisiciónen aquel establecimiento porque es el escándalo el que acusa, y elescándalo es la voz pública horrorizada del crimen y, por lo mismo, nohay tal inquisición. Defienda Vd., mi querido amigo, mi poder moral;yo mismo que soy su autor no espero para ser bueno sino que haya untribunal que condene lo que las leyes no pueden impedir; quiero decir,que mis propias flaquezas no esperan para corregirse sino un tribunalque me avergüence. Este móvil de la vergüenza es el infierno de losdespreocupados y de los que se llaman filósofos y hombres de mundo.La religión ha perdido mucho de su imperio, y quizás no lo recobraráen mucho tiempo, porque las costumbres están en oposición con lasdoctrinas sagradas. De suerte que si un nuevo sistema de penas ycastigos, de culpas y delitos no se establece en la sociedad para mejorarnuestra moral, probablemente marcharemos al galope hacia la disolu-ción universal. Todo el mundo sabe que la religión y la filosofíacontienen a los hombres, la primera por la pena, la segunda por laesperanza y la persuasión. La religión tiene mil indulgencias con elmalvado, la filosofía ofrece muchos sistemas encontrados que favore-cen alternativamente los vicios: la una tiene leyes y tribunales estables;pero la otra no tiene más que profesores sin códigos y sin estableci-miento fijos y autorizados por ninguna institución política. De aquídeduzco yo que debemos buscar un medio entre estos dos extremoscreando un instituto autorizado por las leyes fundamentales y por lafuerza irresistible de la opinión.

193

Page 188: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

52

Votos por la libertadperuana

Palabras de agradecimiento y promesa dirigidas al Congreso del Perú, enLima, el 13 de septiembre de 1823.

El Congreso Constituyente del Perú ha colmado para conmigo lamedida de su bondad; jamás mi gratitud alcanzará a la inmensidad de suconfianza. Yo llenaré, sin embargo, este vacío con todos los sacrificiosde mi vida: haré por el Perú mucho más de lo que admite mi capacidad,porque cuento con los esfuerzos de mis generosos compañeros. Lasabiduría del Congreso será mi antorcha en medio del caos de dificul-tades y peligros en que me hallo sumergido. El presidente del estadopor sus servicios, patriotismo y virtud, habría él solo salvado su patria,si se le hubiese confiado este glorioso empeño; el poder ejecutivo serámi diestra y el instrumento de todas mis operaciones. Cuento tambiéncon los talentos y virtudes de todos los peruanos, prontos a elevar eledificio de su hermosa república; ellos han puesto en las aras de la patriatodas sus ofrendas; no les queda más que su corazón, pero este corazónes para mí el paladión de su libertad. Los soldados libertadores, que hanvenido desde la Plata, el Maule, el Magdalena y el Orinoco, novolverán a su patria sino cubiertos de laureles, pasando por arcostriunfales, llevando por trofeos los pendones de Castilla. Vencerán ydejarán libre el Perú, o todos morirán: Señor, yo lo prometo.

Señor: Yo ofrezco la victoria confiado en el valor del ejércitounido y en la buena fe del Congreso, poder ejecutivo y pueblo peruano;así el Perú quedará independiente y soberano por todos los siglos deexistencia que la Providencia Divina le señale.

194

Page 189: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

53

Elogio al saber científico de Humboldty Bonpland

El 22 de octubre de 1823, desde Lima, escribe el Libertador a GasparRodríguez de Francia, dictador del Paraguay, intercediendo por laliberación del sabio francés Amado Bonpland. Hay consecuencia deBolívar con la amistad y con la ciencia, siempre enaltecidas por él.

Excmo. señor:

Desde los primeros años de mi juventud tuve la honra de cultivar laamistad del señor Bonpland y del barón de Humboldt, cuyo saber hahecho más bien a la América que todos los conquistadores.

Yo me encuentro ahora con el sentimiento de saber que miadorado amigo, el señor Bonpland, está retenido en el Paraguay porcausas que ignoro. Sospecho que algunos falsos informes hayan podidocalumniar a este virtuoso sabio y que el gobierno que V. E. preside sehaya dejado sorprender con respecto a este caballero. Dos circunstan-cias me impelen a rogar a V. E. encarecidamente la libertad del señorBonpland. La primera es que yo soy la causa de su venida a América,porque yo fui quien le invité a que se trasladase a Colombia, y yadecidido a ejecutar su viaje, las circunstancias de la guerra lo dirigieronimperiosamente hacia Buenos Aires; la segunda es que este sabio puedeilustrar mi patria con sus luces, luego que V. E. tenga la bondad dedejarle venir a Colombia, cuyo gobierno presido por la voluntad delpueblo.

Sin duda V. E. no conocerá mi nombre ni mis servicios a la causaamericana, pero si me fuese permitido interponer todo lo que valgo porla libertad del señor Bonpland, me atrevería a dirigir a V. E. esteruego. Dígnese V. E. oír el clamor de cuatro millones de americanoslibertados por el ejército de mi mando, que todos conmigo imploran laclemencia de V. E. en obsequio de la humanidad, de la sabiduría y lajusticia, en obsequio del señor Bonpland!

El señor Bonpland puede jurar a V. E. antes de salir del territoriode su mando que abandonará las provincias del Río de la Plata, para quede ningún modo le sea posible causar perjuicio a la provincia delParaguay, que yo, mientras tanto, le espero con las ansias de un amigoy con el respeto de un discípulo, pues sería capaz de marchar hasta elParaguay sólo por libertar al mejor de los hombres y al más célebre delos viajeros.

Excmo. señor: yo espero que V. E. no dejará sin efecto miardiente ruego, y también espero que V. E. me cuente en el número de

195

Page 190: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

sus más fieles y agradecidos amigos siempre que el inocente que amono sea víctima de la injusticia.

Tengo el honor de ser de V. E. atento obediente servidor.

Bolívar

54" . . . y quise subir al atalaya del Universo”

Texto literario de Bolívar conocido como “Mi delirio sobre el Chimbo-razo”, alucinada fantasía sobre la eternidad, la infinitud y las edades. Seestima fue escrito en 1823.

Yo venía envuelto en el manto de Iris, desde donde paga su tributo elcaudaloso Orinoco al Dios de las aguas. Había visitado las encantadasfuentes amazónicas, y quise subir al atalaya del Universo. Busqué lashuellas de La Condamine y de Humboldt, seguílas audaz, nada medetuvo; llegué a la región glacial, el éter sufocaba mi aliento. Ningunaplanta humana había hollado la corona diamantina que pusieron lasmanos de la Eternidad sobre las sienes excelsas de dominador de losAndes. Yo me dije: este manto de Iris que me ha servido de estandarte,ha recorrido en mis manos sobre regiones infernales, ha surcado los ríosy los mares, ha subido sobre los hombros gigantescos de los Andes; latierra se ha allanado a los pies de Colombia, y el tiempo no ha podidodetener la marcha de la libertad. Belona ha sido humillada por elresplandor de Iris, y no podré yo trepar sobre los cabellos canosos delgigante de la tierra? Sí podré! Y arrebatado por la violencia de unespíritu desconocido para mí, que me parecía divino, dejé atrás lashuellas de Humboldt, empañando los cristales eternos que circuyen elChimborazo. Llego como impulsado por el genio que me animaba, ydesfallezco al tocar con mi cabeza la copa del firmamento: tenía a mispies los umbrales del abismo.

Un delirio febril embarga mi mente; me siento como encendidopor un fuego extraño y superior. Era el Dios de Colombia que meposeía.

De repente se me presenta el Tiempo bajo el semblante venerablede un viejo cargado con los despojos de las edades: ceñudo, inclinado,calvo, rizada la tez, una hoz en la mano. . .

“Yo soy el padre de los siglos, soy el arcano de la fama y delsecreto, mi madre fue la Eternidad; los límites de mi imperio los señalael Infinito; no hay sepulcro para mí, porque soy más poderoso que laMuerte; miro lo pasado, miro lo futuro, y por mis manos pasa lo

196

Page 191: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

presente. ¿Por qué te envaneces niño o viejo, hombre o héroe? Creesque es algo tu Universo? ¿Que levantaros sobre un átomo de lacreación, es elevaros? Pensáis que los instantes que llamáis siglospueden servir de medida a mis arcanos? Imagináis que habéis visto laSanta Verdad? Suponéis locamente que vuestras acciones tienen algúnprecio a mis ojos? Todo es menos que un punto a la presencia delInfinito que es mi hermano”.

Sobrecogido de un terror sagrado, “¿cómo, oh Tiempo! -res-pondí- no ha de desvanecerse el mísero mortal que ha subido tan alto?He pasado a todos los honores en fortuna, porque me he elevado sobrela cabeza de todos. Yo domino la tierra con mis plantas; llego al Eternocon mis manos; siento las prisiones infernales bullir bajo mis pasos;estoy mirando junto a mí rutilantes astros, los soles infinitos; mido sinasombro el espacio que encierra la materia, y en tu rostro leo la Historiade lo pasado y los pensamientos del Destino.”

“Observa -me dijo- aprende, conserva en tu mente lo que hasvisto, dibuja a los ojos de tus semejantes el cuadro del Universo fisico,del Universo moral; no escondas los secretos que el cielo te ha revelado:dí la verdad a los hombres.”

La fantasma desapareció.Absorto, yerto, por decirlo así, quedé exánime largo tiempo,

tendido sobre aquel inmenso diamante que me servía de lecho. En fin,la tremenda voz de Colombia me grita; resucito, me incorporo, abrocon mis propias manos los pesados párpados: vuelvo a ser hombre, yescribo mi delirio.

55

Dos decretos para la moralidad administrativa

En Lima, el 12 de enero y el 31 de mayo de 1824, dicta el Libertadorsendos decretos que reafiman su línea severa contra la corrupción de losfùncionarios y a favor de la moral pública. Al rigor extremo añade, enestos instrumentos jundicos de la dificil circunstancia peruana, una claratipificación de derecho penal y una precisa atribución de responsabilidades.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente &, &, &.

Teniendo presente:1.° Que una de las principales causas de los desastres en que se ha

visto envuelta la República ha sido la escandalosa dilapidación de susfondos por algunos funcionarios que han intervenido en ellos;

Page 192: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

2.° Que el único medio de extirpar radicalmente este desorden esdictar medidas fuertes y extraordinarias, he venido en decretar ydecreto:

Artículo 1.° Todo funcionario público, a quien se le convenciere enjuicio sumario de haber malversado o tomado para sí de los fondospúblicos de diez pesos arriba, queda sujeto a la pena capital.

Artículo 2.° Los jueces a quienes, según la ley, compete este juicio,que en su caso no procedieren conforme a este decreto, serán condena-dos a la misma pena.

Artículo 3.° Todo individuo puede acusar a los funcionarios públi-cos del delito que indica el artículo 1.°.

Artículo 4.° Se fijará este decreto en todas las oficinas de laRepública, y se tomará razón de él en todos los despachos que selibraren a los funcionarios que de cualquier modo intervengan en elmanejo de los fondos públicos.

Imprímase, publíquese y circúlese.Dado en el Palacio Dictatorial de Lima, a 12 de enero de 1821-4°

de la República.

Simón Bolívar

Por orden de S. E.José Sánchez Carrión

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente de Colombia, Encargado del Poder Dictatorial

de la República del Perú &c. &c. &c.

Considerando:1.° Que nada contribuye más a la recta administración de justicia

y al exacto desempeño de las obligaciones de los demás funcionariospúblicos, como el que se haga efectiva la responsabilidad a que estánsujetos cuando faltan a ellas:. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .He venido en decretar y decreto:

Artículo 1,° Prevarican de su oficio los jueces que, a sabiendas,juzgan contra derecho, por afecto o desafecto a alguno de los litigantesu otras personas.

Artículo 2.° Cualquier magistrado o juez que cometa este delitoserá privado de su empleo e inhabilitado para obtener cargo alguno; ypagará a la parte agraviada todas las costas y perjuicios. Si la prevarica-ción fuese en causa criminal, sufrirá además la misma pena queinjustamente impuso al procesado.

198

Page 193: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Artículo 3.° El magistrado o juez que juzgase contra derecho, asabiendas, por soborno o cohecho, esto es, por que a él o a su familia sele haya dado o prometido alguna cosa, bien dinero u otros efectos, oesperanzas de mejor fortuna, además de las penas prescritas en elartículo anterior, sufrirá la de ser declarado infame y pagar lo recibidocon el cuatro tanto, dos para los establecimentos públicos de instruc-ción, y dos para el denunciante.

Artículo 4.° El magistrado o juez que por sí, o por su familia, asabiendas, reciba o se convenga en recibir alguna dádiva de los liti-gantes, o en nombre o en consideración de éstos, aunque no llegue porello a juzgar contra justicia, pagará también lo recibido con el cuatrotanto para los mismos objetos, y será privado de su empleo e inhabili-tado para ejercer otra vez la judicatura. Quedan absolutamente prohibi-dos los regalos que solían dar algunas corporaciones, comunidades opersonas con el nombre de tabla u otro cualquiera titulo.

Artículo 5.° El magistrado o juez que seduzca a mujer que litiga oque es acusada ante él o citada como testigo, sufrirá por este hecho lamisma pena de privación de empleo e inhabilitación para volver aejercer la judicatura, sin perjuicio de cualquier otra que como particularmerezca por su delito. Pero si sedujese o solicitase a mujer que se hallepresa, quedará además incapaz de obtener oficio, ni cargo alguno.

Artículo 6.° El magistrado o juez que fuese convencido de irreligio-sidad, incontinencia pública, o de embriaguez repetida, o de inmorali-dad escandalosa por cualquiera otro concepto, o de conocida inaptitud,o desidia habitual en el desempeño de sus funciones, perderá el empleoy no podrá volver a administrar justicia, sin perjuicio de las demáspenas a que como particular le sujeten sus excesos.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Artículo 17. Cuando se forme causa a un magistrado de una cortesuperior o a un juez de primera instancia, el acusado no podrá estar enel pueblo en que se practique la sumaria, ni a seis leguas en contorno.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 22. Los funcionatios públicos de todas clases serán tam-

bién responsables de las faltas que cometan en el servicio sus respectivossubalternos, si por omisión o tolerancia diesen lugar a ellas o dejasen deponer inmediatamente para corregirlos el oportuno remedio.

Artículo 23. La lentitud o debilidad en cumplir y hacer cumplir lasleyes, los decretos y órdenes del gobierno será castigada como unadeclarada desobediencia a éste.

199

Page 194: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L I V A R

56

“Usted formó mi corazón para la libertad,para la justicia, para lo grande, para lo hermoso.Yo he seguido el sendero que usted me señaló”

Se cuenta entre las más famosas cartas de Bolívar, ésta a don SimónRodríguez, su maestro por antonomasia. Desde Pativilca, el 19 de enerode 1824.

Oh mi maestro! Oh mi amigo! Oh mi Robinson, Vd. en Colombia!Vd. en Bogotá, y nada me ha dicho, nada me ha escrito. Sin duda esVd. el hombre más extraordinario del mundo; podría Vd. merecerotros epítetos pero no quiero darlos por no ser descortés al saludar unhuésped que viene del Viejo Mundo a visitar el nuevo; sí, a visitar supatria que ya no conoce, que tema olvidada, no en su corazón sino en sumemoria. Nadie más que yo sabe lo que Vd. quiere a nuestra adoradaColombia. ¿Se acuerda Vd. cuando fuimos juntos al Monte Sacro enRoma a jurar sobre aquella tierra santa la libertad de la patria? Cierta-mente no habrá Vd. olvidado aquel día de eterna gloria para nosotros;día que anticipó, por decirlo así, un juramento profético a la mismaesperanza que no debíamos tener.

Vd., maestro mío, cuánto debe haberme contemplado de cercaaunque colocado a tan remota distancia. Con qué avidez habrá seguidoVd. mis pasos; estos pasos dirigidos muy anticipadamente por Vd.mismo. Vd. formó mi corazón para la libertad, para la justicia, para logrande, para lo hermoso. Yo he seguido el sendero que Vd. me señaló.Vd. fue mi piloto aunque sentado sobre una de las playas de Europa.No puede Vd. figurarse cuán hondamente se han grabado en micorazón las lecciones que Vd. me ha dado; no he podido jamás borrarsiquiera una coma de las grandes sentencias que Vd. me ha regalado.Siempre presentes a mis ojos intelectuales las he seguido como guíasinfalibles. En fin, Vd. ha visto mi conducta; Vd. ha visto mis pensa-mientos escritos, mi alma pintada en el papel, y Vd. no habrá dejado dedecirse: todo esto es mío, yo sembré esta planta, yo la regué, yo laenderecé tierna, ahora robusta, fuerte y fructífera, he aquí sus frutos;ellos son míos, yo voy a saborearlos en el jardín que planté; voy a gozarde la sombra de sus brazos amigos, porque mi derecho es imprescripti-ble, privativo a todo.

Sí, mi amigo querido, Vd. está con nosotros; mil veces dichoso eldía en que Vd. pisó las playas de Colombia. Un sabio, un justo máscorona la frente de la erguida cabeza de Colombia. Yo desespero por

200

Page 195: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

saber qué designios, qué destino tiene Vd.; sobre todo mi impacienciaes mortal no pudiendo estrecharle en mis brazos: ya que no puedo yovolar hacia Vd. hágalo Vd. hacia mí; no perderá Vd. nada; contemplaráVd. con encanto la inmensa patria que tiene, labrada en la roca deldespotismo por el buril victorioso de los libertadores, de los hermanosde Vd. No, no se saciará la vista de Vd. delante de los cuadros, de loscolosos, de los tesoros, de los secretos, de los prodigios que encierra yabarca esta soberbia Colombia. Venga Vd. al Chimborazo; profaneVd. con su planta atrevida la escala de los titanes, la corona de la tierra,la almena inexpugnable del universo nuevo. Desde tan alto tenderá Vd.la vista; y al observar el cielo y la tierra, admirando el pasmo de lacreación terrena, podrá decir: dos eternidades me contemplan: la pasaday la que viene; y este trono de la naturaleza, idéntico a su autor, será tanduradero, indestructible y eterno como el Padre del Universo.

Desde dónde, pues, podrá decir Vd. otro tanto tan erguidamente?Amigo de la naturaleza, venga Vd. a preguntarle su edad, su vida y suesencia primitivas; Vd. no ha visto en ese mundo caduco más que lasreliquias y los desechos de la próvida madre: allá está encorvada con elpeso de los años, de las enfermedades y del hálito pestífero de loshombres; aquí está doncella, inmaculada, hermosa, adornada por lamano misma del Creador. No, el tacto profano del hombre todavía noha marchitado sus divinos atractivos, sus gracias maravillosas, susvirtudes intactas.

Amigo, si tan irresistibles atractivos no impulsan a Vd. a un vuelerápido hacia mí, ocurriré a un apetito más fuerte: la amistad invoco.

Presente Vd. esta carta al Vicepresidente, pídale Vd. dinero de miparte, y venga Vd. a encontrarme.

Bolívar

57

A un soldado de la justicia y de la ley

Carta a su amigo inglés Sir Robert Wilson -padre de su edecán BelfordWilson-, el 28 de enero de 1824, desde Pativilca.

Mi distinguido general y señor:

He tenido la satisfacción de recibir la honrosa carta con que Vd. se haservido favorecerme al enviarme una parte de su corazón en su digno ytierno hijo. Yo aprecio con reconocimiento este rasgo del carácterelevado que siempre ha distinguido a Vd. Si la historia graba bien la

201

Page 196: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

grandeza de los hechos humanos, no dirá muchas bellezas que excedana ésta. Así cualquiera que sea el éxito que tenga el joven Wilson en estalucha, y bien sea un laurel o un ciprés que corone la frente de la España,el padre y el hijo ya tienen asegurado un triunfo en el campo de lalibertad. La imprenta, que dice y multiplica todo, ha publicado yacuanto puede honrar el nombre de un guerrero: ella nos ha traído lapintura de Vd. asaltando los muros de Dresde y arrancándole de supecho generoso las insignias de sus antiguas proezas. Mas partiendoVd. para España a regar con su sangre el árbol de la libertad, ymandando a la vez al hijo adorado contra la España opresora, general,esta proeza es superior a todas; porque un soldado de la justicia y de laley es más grande que el conquistador del universo. Reciba Vd. pues,general, mi congratulación anticipada.

He visto con verdadero gozo al tierno retoño de la familia deWilson: lo he adoptado en la mía y quisiera servirle de padre.

También me ha sido muy satisfactorio el feliz acierto del señor Zeaen cometer a Vd. el bello empeño de defender en Madrid cerca delgobierno español los derechos de nuestra emancipación. Me lisonjeo deque si aquel gobierno hubiese oído el grito de la libertad de la boca deun héroe no habría sido sordo a su fiero clamor; la sorpresa delprestigio de las impresiones victoriosas que inspiran los hombressuperiores habría dado a Vd. y a nosotros un día de eterno recuerdo:Vd. habría cerrado con su nombre las puertas de la muerte en estecontinente y habría abierto las de la salud y la vida a un mundo entero.

Hemos oído con justo sentimiento que la buena causa de España hasido vendida a la mala; por consiguiente será probable que Vd. hayavuelto a sentarse en los hogares patrios. Yo no me atreveré a recomen-dar a Vd. una visita a Colombia, porque ésta pocos encantos tiene queofrecer a un morador de la corte de Neptuno, mas la naturaleza y lalibertad puras tienen atractivos irresistibles para las almas viriles. Poresta consideración he osado hablar a Vd. de Colombia.

Aprovecho, mi querido general, la muy agradable oportunidad deofrecer a Vd. la distinguida consideración y respeto que siempre le heprofesado.

202

Page 197: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

58

Decreto fundando la Universidad de Trujillo

Documento sustancial de la serie bolivariana referente a la educación y lacultura. Dado en el cuartel general de Huamachuco (Perú), el 10 demayo de 1824.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente de Colombia, Encargado del Poder Dictatorial

de la República del Perú

Considerando:1.° Que según el artículo 184 de la Constitución Política de la

República debe haber universidades en las capitales de departamento,como uno de los medios más eficaces de promover la instrucciónpública, de la que dependen en mucha parte el sostenimiento y seguri-dad de los derechos sociales;

2.° Que sin embargo de la población del departamento de Trujillono hay por toda enseñanza más que la que puede adquirirse a costa demucho tiempo y desvelos en el seminario de su capital;

3.° Que merecen mucho de la patria las provincias del expresadodepartamento, por su fidelidad a la causa y por sus múltiples impor-tantes servicios al ejército libertador en las circunstancias más apuradasde la república, he venido en decretar, y

Decreto:Artículo 1° Declárase erigida la universidad, que conforme al artí-culo 184 de la Constitución, debe haber en la ciudad de Trujillo, comocapital de uno de los departamentos de la República.

Artículo 2.° El Colegio del Salvador con su iglesia queda aplicado aeste establecimiento, debiéndose designar las salas respectivas a susejercicios por el rector de dicha universidad, que lo será el arcedianodoctor Don Carlos Pedemonte.

Artículo 3.° El rector, asociado con los doctores don HipólitoUnanue, don Manuel Lorenzo Vidaurre y don Manuel de Villarán,formará los estatutos correspondientes y los presentará con la posiblebrevedad al gobierno; en la inteligencia de que se ha de contraer laenseñanza a ciencias eclesiásticas, exactas y naturales, derecho público ypatrio, filosofia y humanidades, adoptándose el plan más regular yconforme los sanos principios y los descubrimientos modernos.

Artículo 4.° Los fondos de esta universidad son todas las tempora-

203

Page 198: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

lidades de los jesuitas en el departamento de Trujillo, que no hayaaplicado el gobierno supremo a otro objeto; las capellanías legas quesean de cuenta del Estado en la diócesis, pagándose las misas designa-das; las buenas memorias que se hayan dejado dentro del cercado deTrujillo para casas de educación; los depósitos o contentas de losgraduados; y la parte con que, por esta vez, quieran contribuir el clerosecular y regular del obispado, las municipalidades y padres de familia,en razón de su patriotismo y amor a la ilustración del país, cuyosnombres y erogaciones se irán publicando en la Gaceta.

Artículo 5.° Sin perjuicio de lo que previene el artículo anterior,quedan autorizados el cabildo eclesiástico y la municipalidad parapresentar respectivamente un proyecto que aumente estos fondos, a finde que sean bien dotados los profesores y subvenidas las demásnecesidades de este cuerpo.

Artículo 6.° El rector procederá a la organización y apertura de launiversidad según en tales casos se acostumbra, quedando ampliamenteautorizado en este respecto, y con la obligación de dar cuenta dehallarse realizada una obra en que tiene particular empeño el gobierno.

Imprímase, publíquese y circúlese.Dado en el cuartel general de Huamachuco, a 10 de mayo de 1824.

3.° de la República.

Simón Bolívar

Por orden de S. E.,José Sánchez Carrión

59

“La esperanza del universo”

Proclama visionaria a los soldados del Ejército Libertador Unido, enPasco el 29 de julio de 1824, antes de las batallas definitivas y últimasJunín y Ayacucho que aseguraron la libertad de Perú y Bolivia, ysellaron la independencia de América.

Libertador Presidente de Colombia y Encargado del Poder Dictatorial del Perú, &, &.

soldados!

Vais a completar la obra más grande que el cielo ha encargado a loshombres, la de salvar un mundo entero de la esclavitud.

soldados! Los enemigos que debéis destruir se jactan de catorce

204

Page 199: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

años de triunfos; ellos, pues, serán dignos de medir sus armas con lasvuestras que han brillado en mil combates.

Soldados! El Perú y la América toda aguardan de vosotros la paz,hija de la victoria; y aun la Europa liberal os contempla con encanto;porque la libertad del Nuevo Mundo es la esperanza del universo. Laburlaréis? No. no! no! vosotros sois invencibles.

Cuartel general Libertador en Pasco a 29 de julio de 1824.-14.°

Bolívar

60

“La gloria está en ser grande y en ser útil”

Carta al señor general Antonio José de Sucre -pronto Gran Mariscal deAyacucho-, desde Huamanga, el 4 de septiembre de 1824. El aforismode Bolívar: “La gloria está en ser grande y en ser útil”, es de los máscitados como especialmente representativo de su pensamiento.

Mi querido general:

Contesto la carta que ha traído Escalona con una expresión de Rousseaucuando el amante de Julia se quejaba de ultrajes que le hacía por eldinero que ésta le mandaba: “ésta es la sola cosa que Vd. ha hecho en suvida sin talento”. Creo que a Vd. le ha faltado completamente el juiciocuando Vd. ha pensado que yo he podido ofenderle. Estoy lleno dedolor por el dolor de Vd., pero no tengo el menor sentimiento porhaberle ofendido. La comisión que he dado a Vd. la quería yo llenar;pensando que Vd. la haría mejor que yo, por su inmensa actividad, se laconferí a Vd. más bien como una prueba de preferencia que dehumillación. Vd. sabe que yo no sé mentir, y también sabe Vd. que laelevación de mi alma no se degrada jamás al fingimiento: así, debe Vd.creerme. Antes de ayer, sin saber nada, nada de tal sentimiento, dije algeneral Santa Cruz que nos quedaríamos aquí para dirigir esa mismaretaguardia, cuya conducción deshonra a Vd., y que Vd. iría adelantecon el ejército hasta las inmediaciones o del Cuzco,. o de Arequipa,según la dirección de los enemigos: y en todo esto, yo no veía ni veomás que el servicio, porque la gloria, el honor, el talento, la delicadeza,todo se reúne en el solo punto del triunfo de Colombia, de su ejército yla libertad de América.

Yo no tenía tan mala opinión de Vd. que pudiera persuadirme deque se ofendiese de recorrer la jurisdicción del ejército y de hacer lo queera útil.

205

Page 200: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Si Vd. quiere saber si la presencia de Vd. por retaguardia eranecesaria, eche Vd. la vista sobre nuestro tesoro, sobre nuestro parque,nuestras provisiones, nuestros hospitales y la columna del Zulia; tododesbaratado y perdido en un país enemigo, en incapacidad de existir ymoverse.

¿Y cuál es la vanguardia que yo he traído? El coronel Carreño la haconducido. El general Santa Cruz me ha precedido de seis días. Losenemigos no nos podían esperar ni nos esperarán en un mes. El ejércitonecesitaba y necesita de todo lo que Vd. ha ido a buscar, y de muchomás. Si salvar el ejército de Colombia es deshonroso, no entiendo yo nilas palabras ni las ideas. Concluyo, mi querido general, por decir a Vd.que el dolor de Vd. debe convertirse en arrepentimiento, por el mal queVd. mismo se ha hecho en haberse dado por ofendido de lo que nodebiera; y en haberme ofendido a mí con sus sentimientos.

Esas delicadezas, esas hablillas de las gentes comunes, son indignasde Vd.: la gloria está en ser grande y en ser útil. Yo jamás he reparadoen miserias, y he creído siempre que lo que no es indigno de mítampoco lo era de Vd.

Diré a Vd., por último, que estoy tan cierto de la elección que Vd.mismo hará, entre venirse a su destino, o irse a Colombia, que novacilo en dejar a Vd. la libertad de elegir. Si Vd. se va no correspondeVd. a la idea que yo tengo formada de su corazón.

Si Vd. quiere venir a ponerse a la cabeza del ejército, yo me iréatrás, y Vd. marchará adelante para que todo el mundo vea que eldestino que he dado a Vd. no lo desprecio para mí. Ésta es mi respuesta.

Soy de Vd. de corazón.

61

Dos libros de la biblioteca de Napoleón

Un expresivo episodio de cultura en sendos párrafos de dos documentos:carta al general Sir Robert Wilson -Chancay, 15 de noviembre de1824 y testamento del Libertador, otorgado en la Quinta de San PedroAlejandrino, Santa Marta (Colombia), el 10 de diciembre de 1830.

CARTA AL GENERAL SIR ROBERT WILSON

El vicepresidente de Colombia me ha escrito participándome que Vd.ha tenido la bondad de hacerme el precioso presente de dos libros dederecho y de guerra, de un valor inestimable: El contrato social yMontecúculi, ambos del uso del gran Napoleón. Estos libros me seránmuy agradables por todo respecto. Sus autores son venerables por el

206

Page 201: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

bien y por el mal que han hecho; el primer poseedor es el honor y ladesesperación del espíritu humano, y el segundo, que me ha honradocon ellos, vale para mí más que todos porque ha trazado con su espadalos preceptos de Montecúculi y en su corazón se encuentra grabado elcontrato social, no con caracteres teóricos, sino con hechos que secomparten entre el heroísmo y la beneficencia. Hablo del generalWilson, de este hombre maravilloso que, semejante a César y a Tito, harecorrido el mundo con la espada en la mano; ha defendido en elparlamento los derechos de los hombres con una elocuencia digna delvencedor de Farsalia y que no ha perdido un día sin hacer bien a laespecie humana, como aquél que se llamó delicias del género humano.

TESTAMENTO DEL LIBERTADOR

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .7.° Es mi voluntad, que las dos obras que me regaló mi amigo elseñor general Wilson, y que pertenecieron antes a la biblioteca deNapoleón, tituladas El contrato social de Rousseau y El arte militar deMontecuccoli, se entreguen a la Universidad de Caracas.

62

“El día que nuestros plenipotenciarios hagan el canjede sus poderes se fijará en la historia diplomática

de América-una época inmortal”

El 7 de diciembre de 1824, considerando Bolívar que “es tiempo ya de quelos intereses y las relaciones que unen entre sí a nuestras repúblicas”,consoliden su destino, convoca desde Lima al Congreso Anfictiónico dePanamá. Se dirige en nombre del Perú, a los gobiernos de Colombia,México, Río de la Plata, Chile y Guatemala.

Excmo. señor . . .

Grande y buen amigo:

Después de quince años de sacrificios consagrados a la libertad deAmérica, por obtener el sistema de garantías que, en paz y guera, sea elescudo de nuestro nuevo destino, es tiempo ya de que los intereses y lasrelaciones que unen entre sí a las repúblicas americanas, antes coloniasespañolas, tengan una base fundamental que eternice, si es posible, laduración de estos gobiernos.

207

Page 202: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Entablar aquel sistema y consolidar el poder de este gran cuerpopolítico pertenece al ejercicio de una autoridad sublime, que dirija lapolítica de nuestros gobiernos, cuyo influjo mantenga la uniformidadde sus principios y cuyo nombre solo calme nuestras tempestades. Tanrespetable autoridad no puede existir sino en una asamblea de plenipo-tenciarios nombrados por cada una de nuestras repúblicas, y reunidosbajo los auspicios de la victoria, obtenida por nuestras armas contra elpoder español.

Profundamente penetrado de estas ideas invité en ochocientosveintidós, como presidente de la república de Colombia, a los gobier-nos de México, Perú, Chile y Buenos Aires, para que formásemos unaconfederación, y reuniésemos en el istmo de Panamá u otro puntoelegible a pluraridad una asamblea de plenipotenciarios de cada estadoque nos sirviese de consejo en los grandes conflictos, de punto decontacto en los peligros comunes, de fiel intérprete en los tratadospúblicos cuando ocurran dificultades, y de conciliador, en fin, denuestras diferencias.

El gobierno del Perú celebró en seis de julio de aquel año untratado de alianza y confederación con el plenipotenciario de Colombia;y por él quedaron ambas partes comprometidas a interponer sus buenosoficios con los gobiernos de la América, antes española, para queentrando todos en el mismo pacto, se verificase la reunión de laasamblea general de los confederados: Igual tratado concluyó enMéxico, a tres de octubre de ochocientos veintitrés, el enviado extraor-dinario de Colombia a aquel estado; y hay fuertes razones para esperarque los otros gobiernos se someterán al consejo de sus más altosintereses.

Diferir más tiempo la asamblea general de los plenipotenciarios delas repúblicas que de hecho están ya confederadas, hasta que se verifi-que la accesión de los demás, sería privarnos de las ventajas queproduciría aquella asamblea desde su instalación. Estas ventajas seaumentan prodigiosamente, si se contempla el cuadro que nos ofrece elmundo político, y muy particularmente, el continente europeo.

La reunión de los plenipotenciarios de México, Colombia y elPerú se retardaría indefinidamente si no se promoviese por una de lasmismas partes contratantes; a menos que se aguardase el resultado deuna nueva y especial convención sobre el tiempo y lugar relativos a estegrande objeto. Al considerar las dificultades y retardos por la distanciaque nos separa, unidos a otros motivos solemnes que emanan delinterés general, me determino a dar este paso con la mira de promoverla reunión inmediata de nuestros plenipotenciarios, mientras los demásgobiernos celebran los preliminares que existen ya entre nosotros sobreel nombramiento e incorporación de sus representantes.

Con respecto al tiempo de la instalación de la Asamblea, me atrevo

208

Page 203: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

a pensar que ninguna dificultad puede oponerse a su realización en eltérmino de seis meses, aun contando el día de la fecha; y también meatrevo a lisonjear de que el ardiente deseo que anima a todos losamericanos de exaltar el poder del mundo de Colón, disminuirá lasdificultades y demoras que exijan los preparativos ministeriales y ladistancia que media entre las capitales de cada estado y el punto centralde reunión.

Parece que si el mundo hubiese de elegir su capital, el istmo dePanamá sería señalado para este augusto destino, colocado, como está,en el centro del globo, viendo por una parte el Asia, y por el otro elÁfrica y la Europa. El istmo de Panamá ha sido ofrecido por elgobierno de Colombia, para este fin, en los tratados existentes. Elistmo está a igual distancia de las extremidades: y por esta causa podríaser el lugar provisorio de la primera asamblea de los confederados.

Difiriendo, por mi parte, a estas consideraciones, me siento conuna grande propensión a mandar a Panamá los diputados de estarepública apenas tenga el honor de recibir la ansiada respuesta de estacircular. Nada ciertamente podrá llenar tanto los ardientes votos de micorazón como la conformidad que espero de los gobiernos confedera-dos a realizar este augusto acto de la América.

Si V. E. no se digna adherir a él, preveo retardos y perjuiciosinmensos a tiempo que el movimiento del mundo lo acelera todo,pudiendo también acelerarlo en nuestro daño.

Tenidas las primeras conferencias entre los plenipotenciarios, laresidencia de la Asamblea, como sus atribuciones, pueden determinarsede un modo solemne por la pluraridad; y entonces todo se habráalcanzado.

El día que nuestros plenipotenciarios hagan el canje de sus poderes,se fijará en la historia diplomática de América una época inmortal.Cuando, después de cien siglos, la posteridad busque el origen denuestro derecho publico, y recuerden los pactos que consolidaron sudestino, registrarán con respeto los protocolos del istmo. En él encon-trarán el plan de las primeras alianzas, que trazará la marcha de nuestrasrelaciones con el universo. Qué será entonces el istmo de Corintocomparado con el de Panamá?

Dios guarde a V. E.Vuestro grande y buen amigo.

BolívarEl Ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores

José Sánchez Carrion

Page 204: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

63

En cada capital una escuelanormal lancasteriana

Decreto consagrando e imponiendo oficialmente en el Perú el sistema delas escuelas mutuas, creado por Joseph Lancaster, y estimado entonces porBolívar “el único método de promover pronta y eficazmente la enseñanzapública”. Lima, 31 de enero de 1825.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente de la República de Colombia

y Encargado del Poder Dictatorial dela del Perú

Considerando:1.° Que el sistema lancasteriano es el único método de promoverpronta y eficazmente la enseñanza pública;

2.° Que extendiéndolo a cada uno de los departamentos se difun-dirá, sin demora, en todo el territorio de la República,

He venido en decretar y decreto:1.° Se establece en la capital de cada departamento una escuela

normal, según el sistema de Lancaster.2.° Los prefectos, poniéndose de acuerdo con las municipalidades

de su respectiva capital, determinarán con precisión sobre los fondosnecesarios a este establecimiento.

3.° Cada provincia mandará a la escuela de su departamento seisniños, cuando menos, para que éstos difundan después la enseñanza enla capital y demás pueblos de su provincia.

4.° Los intendentes, de acuerdo con las municipalidades, designa-rán los niños de más capacidad que deban mandarse a la EscuelaNormal. De los fondos destinados a la instrucción pública se proveerá ala subsistencia de los que fueren pobres.

5.° El Ministro de Estado en el Departamento de Gobierno yRelaciones Exteriores queda encargado de hacer ejecutar este decreto.

Imprímase, publíquese y circúlese.Dado en el Palacio Dictatorial, en Lima, a 31 de enero de 1825. 4.°

de la República.

Simón BolívarPor orden de S. E.,José Sánchez Carrión

210

Page 205: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

64

Perspectivas halagadoras desdela libertad peruana

Alocución modelo dirigida al Soberano Congreso Constituyente del Perú,fechada en Lima el 10 de febrero de 1825.

Señores:

Los representantes del pueblo peruano se reúnen hoy, bajo los auspiciosde la espléndida victoria de Ayacucho, que ha fijado para siempre losdestinos del Nuevo Mundo.

Hace un año que el Congreso decretó la autoridad dictatorial, conla mira de salvar la república, que fallecía oprimida con el peso de lasmás espantosas calamidades. Pero, la mano bienhechora del ejércitolibertador ha curado las heridas que llevaba en su corazón la patria, haroto las cadenas que había remachado Pizarro a los hijos de MancoCápac, fundador del imperio del Sol, y ha puesto a todo el Perú bajo elsagrado régimen de sus primitivos derechos.

Mi administración no puede llamarse propiamente sino una cam-paña; apenas hemos tenido el tiempo necesario para armarnos y comba-tir, no dejándonos el tropel de los desastres otro arbitrio que el dedefendernos. Como el ejército ha triunfado con tanta gloria de lasarmas peruanas, me creo obligado a suplicar al Congreso que recom-pense debidamente el valor y la virtud de los defensores de la patria.

Los tribunales se han establecido según la ley fundamental. Yo hemandado buscar el mérito oculto para conocerlo en el tribunal, hesolicitado con esmero a los que profesaban modestamente el culto de laconciencia: la religión de las leyes.

Las rentas nacionales no existían; el fraude corrompía todos suscanales; el desorden aumentaba la miseria del estado. Me he creídoforzado a dictar reformas esenciales y ordenanzas severas, para que larepública pudiese llevar adelante su existencia; ya que la vida social nose alimenta sin que el oro corra por sus venas.

La crisis de la república me convidaba a una preciosa reforma queel curso de los siglos, quizá, no volverá a ofrecer. El edificio políticohabía sido destruido por el crimen y la guerra; yo me encontraba sobreun campo de desolación; mas con la ventaja de poder constituir en él ungobierno benéfico. A pesar de mi ardiente celo por el bien del Perú, nopuedo asegurar al Congreso que esta obra haya llegado al grado demejora con que me lisonjeaba mi esperanza. La sabiduría del Congresotendrá que emplear toda su eficacia para dar a su patria la organizaciónque ella requiere y la dicha que la libertad promete. Séame lícito

211

Page 206: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

confesar que, no siendo yo peruano, me ha sido más difícil que a otro laconsecución de una empresa tan ardua.

Nuestras relaciones con la República de Colombia nos han propor-cionado poderosos auxilios. Nuestra aliada y confederada, no ha reser-vado nada para nosotros: ella ha empleado su tesoro, su marina, suejército en combatir al enemigo común, como en causa propia.

El Congreso observará, por estas demostraciones de Colombia, elprecio infinito que tiene en el orden americano la íntima y estrechafederación de los nuevos estados. Persuadido yo de la magnitud delbien que nos resultará de la reunión del Congreso de representantes, mehe adelantado a invitar a nombre del Perú a nuestros confederados, paraque, sin pérdida de tiempo, verifiquemos en el istmo de Panamá, esaaugusta asamblea, que debe sellar nuestra alianza perpetua.

La República de Chile ha puesto a las órdenes de nuestro gobiernouna parte de su marina, mandada por el bizarro vicealmirante Blanco,que actualmente bloquea la plaza del Callao con fuerzas chilenas ycolombianas.

Los estados de México, Guatemala y Buenos Aires nos han hechoofertas de servicios, aunque sin efecto alguno, a causa de la celeridad delos sucesos. Estas repúblicas se han constituido y mantienen su tranquili-dad interna.

El agente diplomático de la República de Colombia es el único queen estas circunstancias ha sido acreditado cerca de nuestro gobierno.

Los cónsules de Colombia, de los Estados Unidos de América y dela Gran Bretaña se han presentado en esta capital a ejercer sus funciones:el último ha tenido la desgracia de perecer de un modo lamentable, losotros dos han obtenido el exequatur correspondiente para entrar en losdeberes de su cargo.

Luego que los sucesos militares del Perú sean conocidos enEuropa, parece probable que aquellos gobiernos decidan definitiva-mente de la política que hayan de adoptar. Me lisonjeo que la GranBretaña será la primera que reconozca nuestra independencia. Si hemosde dar crédito a las declaraciones de la Francia, ella no está muy distantede unirse a Inglaterra en esta marcha liberal: y tal vez el resto de laEuropa seguirá esta misma conducta. La España misma, si oye losconsejos de su propio interés, no se opondrá más a la existencia de losnuevos estados que han venido a completar la sociabilidad del universo.

legisladores! al restituir al Congreso el poder supremo que depo-sitó en mis manos séame permitido felicitar al pueblo, porque se halibrado de cuanto hay de más terrible en el mundo, de la guerra, con lavictoria de Ayacucho, y del despotismo con mi resignación. Proscribidpara siempre, os ruego, tan tremenda autoridad esta autoridad que fueel sepulcro de Roma! Fue laudable sin duda que el Congreso parafranquear abismos horrorosos y arrostrar furiosas tempestades, clavase

212

Page 207: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

sus leyes en las bayonetas del ejército libertador; pero ya que la naciónha obtenido la paz doméstica y la libertad política, no debe permitir quemanden sino las leyes.

Señores: el Congreso queda instalado!Mi destino de soldado auxiliar me Llama a contribuir a la libertad

del Alto Perú; y a la rendición del Callao, último baluarte del imperioespañol en la América meridional. Después volaré a mi patria a darcuenta a los representantes del pueblo colombiano de mi misión en elPerú, de vuestra libertad y de la gloria del ejército libertador.

Bolívar

65

Irrestricto apoyo al educador Joseph Lancaster

Carta efùsiva, con “admiración, respeto y gratitud” al pedagogo inglés,autor del método de enseñanza que Bolívar califica de “obra maravillosa”y se empeña en generalizar en América. Desde Lima, el 16 de marzo de1825.

Muy señor mío:

He tenido la honra de recibir la muy lisonjera carta de Vd. deBaltimore, cuya respuesta fue dirigida a los Estados Unidos de Amé-rica con varios rodeos que debían dificultar mucho su arribo a manos deVd. Ahora tengo el mayor placer sabiendo, por la favorecida de Vd.de Caracas, la determinación que ha tomado de permanecer entrenosotros con el laudable objeto de propagar y perfeccionar la enseñanzamutua que tanto bien ha hecho y hará a la cultura del espíritu humano;obra maravillosa que debemos al ingenio singular del mismo que hatenido la bondad de consagrarse a la instrucción de mis tiernos conciuda-danos.

Vd. parece que ha menester de protección para realizar susdesignios benéficos, por tanto, me adelanto a ofrecer a Vd. veinte milduros para que sean empleados en favor de la instrucción de los hijos deCaracas. Estos veinte mil duros serán entregados en Londres por losagentes del Perú, contra los cuales puede Vd. girar esta suma dentro detres o cuatro meses. Dichos agentes tendrán la orden de entregar estacantidad a quien Vd. encargue la percepción.

Siempre que no convenga a las miras de Vd. emplear toda lacantidad en Londres, nada es más fácil como hacer llegar a Caracas laparte de que Vd. quiera disponer.

También añadiré a Vd. que me será muy agradable adelantar a

213

Page 208: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Vd. mayor suma de dinero con el mismo fin, siempre que Vd. juzgueútil el empleo de otra cantidad adicional. Para cumplir esta oferta,particípeme su determinación en los términos que a Vd. parezca mejor.

El gobierno del Perú ha sido muy generoso conmigo de milmodos, y poniendo además un millón de pesos a mis órdenes para elbeneficio de los colombianos. La educación pública llamará mi preferen-cia en el reparto de este fondo. Por lo mismo no tengo el menorinconveniente en promover la mejora de los establecimientos de educa-ción que Vd. dirige con su hermoso genio.

Reciba Vd. la expresión de mi admiración, de mi respeto y de migratitud por la preferencia que Vd. ha dado a mi país natal paraestablecerse en él.

Soy de Vd. afmo. y atento servidor.

Bolívar

66

Del corazón romántico

Desde Ica, el 20 de abril de 1825, escribe Bolívar a su fiel amanteManuela Sáenz, compañera leal y constante desde 1822. El epistolarioamoroso de Bolívar desapareció casi totalmente al ser quemados lospapeles de doña Manuela Sáenz (“Manuelita”) a su muerte en Paita1856, fúlminada por la difteria.

Mi bella y buena Manuela: Cada momento estoy pensando en ti y en eldestino que te ha tocado. Yo veo que nada en el mundo puede unirnosbajo los auspicios de la inocencia y del honor. Lo veo bien, y gimo detan horrible situación por ti; porque te debes reconciliar con quien noamabas; y yo porque debo separarme de quien idolatro!!!! Sí, te idolatrohoy más que nunca jamás. Al arrancarme de tu amor y de tu posesiónse me ha multiplicado el sentimiento de todos los encantos de tu alma yde tu corazón divino, de ese corazón sin modelo.

Cuando tú eras mía yo te amaba más por tu genio encantador quepor sus atractivos deliciosos. Pero ahora ya me parece que una eterni-dad nos separa porque mi propia determinación me ha puesto en eltormento de arrancarme de tu amor, y tu corazón justo nos separa denosotros mismos, puesto que nos arrancamos el alma que nos dabaexistencia, dándonos el placer de vivir. En lo futuro tú estarás solaaunque al lado de tu marido. Yo estaré solo en medio del mundo. Sólola gloria de habernos vencido será nuestro consuelo. El deber nos diceque ya no somos más culpables!! No, no lo seremos más.

Bolívar

214

Page 209: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

67

Selección de becarios para Europa a capacitarseen los negocios públicos

Procurando la mayor eficacia en la administración del Estado, y animadodel propósito de buscar la ciencia y la experiencia donde estén, Bolívar dainstrucciones al consejo de gobierno del Perú, en mayo de 1825.

18.° El consejo de gobierno enviará diez jóvenes con los comisionadosa Inglaterra, o por separado, para que aprendan allí las lenguas euro-peas, el derecho público, la economía política y cuantos conocimientosforman al hombre de estado. Estos jóvenes deben ser desde doce hastaveinte años. Serán escogidos entre los más distinguidos por su talentonatural, aplicación, buena conducta y aptitud intelectual. Debe tambiéntenerse presente la buena figura, como una de las calidades necesarias alas personas que han de emplearse en las relaciones exteriores: estosdiez individuos deben tomarse cuatro en el departamento de Lima, dosen el de Trujillo, dos en el de Cuzco y dos en el de Arequipa. El consejode gobierno dictará las medidas necesarias para su subsistencia yenseñanza en Inglaterra, y hará lo más que juzgue conveniente conrespecto a este negocio.

68

El ejercicio inteligente de la crítica literaria

Carta al poeta ecuatoriano José Joaquín Olmedo -autor del celebradoCanto a Junín-, desde el Cuzco, el 27 de junio de 1825.

Querido amigo:

Hace muy pocos días que recibí en el camino dos cartas de Vd. y unpoema: las cartas son de un político y un poeta, pero el poema es de unApolo. Todos los calores de la zona tórrida, todos los fuegos de Junín yAyacucho, todos los rayos del Padre de Manco Cápac no han produ-cido jamás una inflamación más intensa en la mente de un mortal. Vd.dispara. . . donde no se ha disparado un tiro; Vd. abrasa la tierra conlas ascuas del eje y de las ruedas de un carro de Aquiles que no rodójamás en Junín; Vd. se hace dueño de todos los personajes: de mí formaun Júpiter; de Sucre un Marte; de La Mar un Agamenón y un Menelao;de Córdoba un Aquiles; de Necochea un Patroclo y un Ayax; de Miller

Page 210: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

un Diomedes, y de Lara un Ulises. Todos tenemos nuestra sombradivina o heroica que nos cubre con sus alas de protección como ángelesguardianes. Vd. nos hace a su modo poético y fantástico; y paracontinuar en el país de la poesía la ficción y la fábula, Vd. nos eleva consu deidad mentirosa, como la águila de Júpiter levantó a los cielos a latortuga para dejarla caer sobre una roca que le rompiese sus miembrosrastreros: Vd., pues, nos ha sublimado tanto, que nos ha precipitado alabismo de la nada, cubriendo con una inmensidad de luces el pálidoresplandor de nuestras opacas virtudes. Así, amigo mío, Vd. nos hapulverizado con los rayos de su Júpiter, con la espada de su Marte, conel cetro de su Agamenón, con la lanza de su Aquiles, y con la sabiduríade su Ulises. Si yo no fuese tan bueno y Vd. no fuese tan poeta, meavanzaría a creer que Vd. había querido hacer una parodia de la Ilíadacon los héroes de nuestra pobre farsa. Mas no, no lo creo. Vd. es poetay sabe bien, tanto como Bonaparte, que de lo heroico a lo ridículo nohay más que un paso, y que Manolo y el Cid son hermanos, aunquehijos de distintos padres. Un americano leerá el poema de Vd. como uncanto de Homero; y un español lo leerá como un canto del Facistol deBoileau.

Por todo doy a Vd. las gracias penetrado de una gratitud sinlímites.

Yo no dudo que Vd. llenará dignamente su comisión a Inglaterra;tanto lo he creído, que habiendo echado la faz sobre todo el Imperio delSol, no encontré un diplomático que fuese capaz de representar ynegociar por el Perú más ventajosamente que Vd. Uní a Vd. un mate-mático, porque no fuese que llevado Vd. de la verdad poética, creyeseque dos y dos formaban cuatro mil; pero nuestro Euclides ha ido aabrirle los ojos a nuestro Homero, para que no vea con su imaginaciónsino con sus miembros, y para que no le permita que lo encanten conarmonías y metros, y abra los oídos solamente a la prosa tosca, dura ydespellejadora de los políticos y de los publicanos.

He llegado ayer al país clásico del sol, de los Incas, de la fábula y dela historia. Aquí el sol verdadero es el oro; los Incas son los virreyes oprefectos; la fábula es la historia de Garcilaso; la historia la relación de ladestrucción de los indios por Las Casas. Abstracción hecha de todapoesía, todo me recuerda altas ideas, pensamientos profundos; mi almaestá embelesada con la presencia de la primitiva naturaleza, desarrolladapor sí misma, dando creaciones de sus propios elementos por el modelode sus inspiraciones íntimas, sin mezcla alguna de las obras extrañas, delos consejos ajenos, de los caprichos del espíritu humano, ni el contagiode la historia de los crímenes y de los absurdos de nuestra especie.Manco Cápac, Adán de los indios, salió de su Paraíso titicaco y formóuna sociedad histórica, sin mezcla de fábula sagrada o profana.

216

Page 211: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Dios lo hizo hombre; él hizo su reino, y la historia ha dicho laverdad, porque los monumentos de piedra, las vías grandes y rectas, lascostumbres inocentes y la tradición genuina nos hacen testigos de unacreación social de que no tenemos ni idea, ni modelo ni copia. El Perúes original en los fastos de los hombres. Esto me parece, porque estoypresente, y me parece evidente todo lo que, con más o menos poesía,acabo de decir a Vd.

Tenga Vd. la bondad de presentar esta carta al señor Paredes yofrezco a Vd. las sinceras expresiones de mi amistad.

Bolívar

69

En defensa de la naturaleza

Dos decretos del 5 de julio de 1825, dictados en el Cuzco, a favor de ladomesticación e incremento de las útiles y necesarias vicuñas.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente

de la República de Colombia, Libertador de la del Perú yEncargado del supremo mando de ella, &, &.

Atendiendo:A la gran necesidad que hay de proporcionar por todos los mediosposibles el aumento de las vicuñas;

Al descuido con que hasta ahora ha sido tratada esta hermosa ypeculiar producción del Perú;

A que al fin vendría a aniquilarse si continuasen las matanzas queen todos los años se han hecho para sostener el comercio de sus lanas;he venido en decretar, y decreto:

1.° Se prohibe, de hoy en adelante, la matanza de vicuñas encualquier número que sea.

2.° A nadie le será permitida, ni aun con el pretexto de caza.3.° Los que quieran aprovechar de la lana para comerciarla u otros

cualesquiera usos o beneficios podrán verificarlo trasquilándolas en losmeses de abril, mayo, junio y julio, para que la benignidad de laestación supla este abrigo de que se las priva.

4.° Los infractores de este decreto sufrirán pena de cuatro pesospor cada una de las vicuñas que matasen, aplicables al delator de lainfracción.

5.° A los prefectos, intendentes y gobernadores les corresponde elmayor celo y vigilancia sobre esta materia.

217

Page 212: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

6.° El secretario general queda encargado de la ejecución y cumpli-miento de este decreto.

Imprímase, publíquese y circúlese.Dado en el Cuzco, a 5 de julio de 1825.-6.° y 4.°

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente

de la República de Colombia, Libertador de la del Perú yEncargado del supremo mando de ella, &, &.

Considerando:Las grandes ventajas que resultarían al Perú si se redujesen a rebaños lasvicuñas;

Que la experiencia muestra todos los días la facilidad con que sedomestican;

Que en los mismos campos en que se crían y en otros detemperamento más benigno se proporcionan inmensos terrenos quenaturalmente producen el pasto de que se alimentan, he venido endecretar, y decreto:

1.° El individuo que reúna rebaños de vicuñas mansas, recibirápor cada una de ellas un peso, que deberá descontarse de la contribu-ción que le corresponda; y si fuere tan pobre que no pagare ninguna,recibirá este premio en dinero efectivo del tesoro de su departamento.

2.° Esta gracia durará por espacio de diez años contados desde lafecha de este decreto.

3.° Los prefectos de los departamentos quedan encargados de laformación de un reglamento particular que organice e indique lasformalidades que deben guardarse para hacer constar el cumplimientodel artículo 1.°.

4.° Los prefectos, intendentes y gobernadores emplearán toda suautoridad y celo en animar y adelantar este nuevo ramo de industrianacional.

5.° El secretario general queda encargado de la ejecución y cumpli-miento de este decreto.

Imprímase, publíquese y circúlese.Dado en el Cuzco, a 5 de julio de 1825.-6.° y 4.°

Por orden de Su Excelencia,Felipe Santiago Estenós

Simón Bolívar

218

Page 213: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

70

A la vanguardia de la educaciónfemenina en América

Promoviendo la educación de la mujer, por entonces muy relegada,Bolívar dicta este decreto en el Cuzco, el 8 de julio de 1825. Fue muyfecunda la actividad administrativa del Libertador durante su permanenciade un mes en la que fue capital del imperio de los incas.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador, Presidente

de la República de Colombia, Libertador de la del Perú, yEncargado del supremo mando de ella

Considerando:1.° Que la educación de las niñas es la base de la moral de las familias,y que en esta ciudad se halla absolutamente abandonada;

2.° Que es forzoso dictar providencias para poner cuanto antes enplanta un establecimiento tan necesario;

Decreto:1.° Que en la casa del colegio denominado de S. Bernardo se fundeotro bajo el título de Educación del Cuzco, en el cual se admitirán lasniñas de cualquiera clase, tanto de la ciudad como del departamento,que estén en aptitud de recibir la educación.

2.° Que la subsistencia de este colegio se saque del sobrante de losfondos que, por decreto de este día, se han asignado al colegio deciencias y artes del Cuzco.

3.° Que las hijas de los ciudadanos pudientes del departamentosatisfagan una pensión, que se designará oportunamente para elaumento de los fondos de su colegio.

4.° Que el beneficio de la enseñanza sea extensivo a las jóvenes deotros departamentos conforme lo determine el reglamento del colegio.

5.° Que por un reglamento separado se señale el método que debaobservarse en la enseñanza y administración económica de este colegio.

6.° El prefecto del departamento cuidará con el mayor celo yvigilancia del puntual cumplimiento de este decreto.

7.° El secretario general interino queda encargado de su ejecucióny cumplimiento.

Imprímase, publíquese y circúlese.Dado en el Cuzco, a 8 de julio de 1825.4.° y 4.°

Por orden de S. E.Felipe Santiago Estenós

Simón Bolívar

219

Page 214: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

71

Otro centro superior para ladifusión de las luces

Decreto estableciendo en el Cuzco -donde Bolívar fue especialmenteaclamado por los humildes mestizos e indígenas- un colegio de estudiosde ciencias y artes. Es también del 8 de julio de 1825.

SIMÓ N BOLÍVAR

Considerando:Libertador de Colombia y del Perú, etc.

1° . Que la educación de la juventud se halla casi abandonada por lainsuficiencia de los establecimientos destinados a tan interesante objeto;

2.° Que la ilustración de este importante departamento dependede la reforma de su antigua enseñanza;

3.° Que a este fin es necesario crear un establecimiento público deinstrucción en que se reunan todos los ramos de enseñanza;Decreto:1.° Que se establezca en esta ciudad un colegio de estudios de cienciasy artes con el título de Colegio del CUZCO.

2.° Que la casa de los extinguidos jesuitas, incluso su iglesia, seemplee en este establecimiento.

3.° Que los colegios de S. Bernardo y del Sol se reúnan en dichacasa formando un solo cuerpo.

4.° Que las rentas, que han poseído hasta aquí los betlemitas deesta ciudad, las de los colegios de S. Bernardo y el Sol, la caja decensos y las temporalidades de este departamento, sean aplicadas a ladotación del nuevo Colegio del Cuzco.

5.° Que del producto de estos mismos fondos se saquen los gastosde la refacción de dicha casa, a fin de que con la brevedad posible seponga en planta el Colegio de estudios del Cuzco.

6.° Que entretanto se arregla por el soberano Congreso el plangeneral de estudios, se sujete este establecimiento a un reglamentoprovisional, que comprenda su administración económica y el métodoque deba observarse en la enseñanza.

7.° El prefecto del departamento cuidará con el mayor celo yvigilancia del puntual cumplimiento de este decreto.

8.° El secretario general interino queda encargado de su ejecucióny cumplimiento.

Imprímase, publíquese y circúlese.Dado en el Cuzco, a 8 de julio de 1825, 6.° y 4.°

Por orden de S. E.Felipe Santiago Estenós

Simón Bolívar

220

Page 215: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

72

“Yo los he representado a presenciade los hombres; y yo los representaré a

presencia de la posteridad”

Evocación de Caracas en otra carta memorable, conocida como “La elegíadel Cuzco”. A Don Esteban Palacios, 10 de julio de 1825.

Mi querido tío Esteban y buen padrino:

Con cuanto gozo ha resucitado Vd. ayer para mí!Ayer supe que vivía Vd. y que vivía en nuestra querida patria.

Cuántos recuerdos se han aglomerado en un instante sobre mi mente!Mi madre, mi buena madre tan parecida a Vd., resucitó de la tumba, seofreció a mi imagen. Mi más tierna niñez, la confirmación y mipadrino, se reunieron en un punto para decirme que Vd. era misegundo padre. Todos mis tíos, todos mis hermanos, mi abuelo, misjuegos infantiles, los regalos que Vd. me daba cuando era inocente. . .todo vino en tropel a excitar mis primeras emociones. . . la efusión deuna sensibilidad delicada.

Todo lo que tengo de humano se removió ayer en mí: llamohumano lo que está más en la naturaleza, lo que está más cerca de lasprimitivas impresiones. Vd., mi querido tío, me ha dado la más purasatisfacción, con haberse vuelto a sus hogares, a su familia, a su sobrinoy a su patria. Goce Vd., pues, como yo, de este placer verdadero; yviva entre los suyos el resto de los días que la Providencia le haseñalado, y para que una mano fraternal cierre sus párpados y lleve susreliquias a reunirlas con las de los padres y hermanos que reposan en elsuelo que nos vio nacer.

Mi querido tio, Vd. habrá sentido el sueño de Epiménides: Vd. havuelto de entre los muertos a ver los estragos del tiempo inexorable, dela guerra cruel, de los hombres feroces. Vd. se encontrará en Caracascomo un duende que viene de la otra vida y observará que nada es de loque fue.

Vd. dejó una dilatada y hermosa familia: ella ha sido segada poruna hoz sanguinaria: Vd. dejó una patria naciente que desenvolvía losprimeros gérmenes de la creación y los primeros elementos de lasociedad; y Vd. lo encuentra todo en escombros. . . todo en memorias.Los vivientes han desaparecido: las obras de los hombres, las casas deDios y hasta los campos han sentido el estrago formidable del estremeci-miento de la naturaleza. Vd. se preguntará a sí mismo dónde están mispadres, dónde mis hermanos, dónde mis sobrinos?. . . Los más felicesfueron sepultados dentro del asilo de sus mansiones domésticas: y los

221

Page 216: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

más desgraciados han cubierto los campos de Venezuela con sushuesos, después de haberlos regado con su sangre. . . por el solo delitode haber amado la justicia.

Los campos regados por el sudor de trescientos años han sidoagostados por una fatal combinación de los meteoros y de los crímenesDónde está Caracas? se preguntará Vd. Caracas no existe; pero suscenizas, sus monumentos, la tierra que la tuvo, han quedado resplande-cientes de libertad; y están cubiertos de la gloria del martirio. Esteconsuelo repara todas las pérdidas, a lo menos, éste es el mío; y deseoque sea el de Vd.

He recomendado al vicepresidente las virtudes y los talentos queyo he reconocido en Vd. Mi recomendación ha sido tan ardiente comola pasión que le profeso a mi tío. Dirija Vd. al poder ejecutivo susmiras, que ellas serán oídas. Al mismo poder ejecutivo he suplicadomande entregar a la orden de Vd. cinco mil pesos en Caracas, para quepueda Vd. vivir mientras nos veamos, lo que será el año que viene. Miorden ha sido al ministro de hacienda para que de Bogotá le manden aVd. la correspondiente libranza.

Adiós, querido tío. Consuélese Vd. en su patria con los restos desus parientes: ellos han sufrido mucho; mas les ha quedado la gloria dehaber sido siempre fieles a su deber. Nuestra familia se ha mostradodigna de pertenecernos, y su sangre se ha vengado por uno de susmiembros. Yo he tenido esta fortuna. Yo he recogido el fruto de todoslos servicios de mis compatriotas, parientes y amigos. Yo los herepresentado a presencia de los hombres; y yo los representaré apresencia de la posteridad. Ésta ha sido una dicha inaudita. La fortunaha castigado a todos. . . tan sólo yo he recibido sus favores. . losofrezco a Vd. con la efusión más sincera de mi corazón.

Bolívar

73

Por la conservación de monumentosde la cultura indígena

Comunicación al prefecto del Departamento del Cuzco, desde Uru-bamba, el 18 de julio de 1825. Revela el interés del Libertador por elcuido de los bienes culturales.

AL SENOR PREFECTO DEL DEPARTAMENTO DEL CUZCO

S. E. el Libertador dispone que US. emplee toda su autoridad a fin deque los antiguos monumentos, que a pesar de la injuria de los tiempos y

222

Page 217: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

del esmerado empeño con que los españoles trataron de destruirlosexisten en este departamento, se conserven en el estado en que sehallan. La gloria que en su misma destrucción disputan ellos para susautores no debe quedar oscurecida. Restablecidos por el sistema actuallos naturales derechos de los indígenas, les queda a sus ascendientes elde inmortalizarse por su obras.

Con tan interesante objeto, hará US. notorias por medio de laprensa cualesquiera providencias que se dicten a ese propósito.

De orden de S. E. le comunico a US. reiterándole la mayorconsideración con que soy etc.Urubamba, julio 18 de 1825.

Felipe S. Estenós

74

“El pueblo argentino debe contar siempre con que nuestrocorazón no se apartará jamás de su futura suerte”

Arenga a los enviados del Río de la Plata, general Carlos de Alvear ydoctor José Miguel Díaz Vélez, en Potosí, el 16 de octubre de 1825. Losdiplomáticos argentinos propusieron a Bolívar declararse "‘Protector" de lalibertad de América ".

Señores plenipotenciarios:

El gobierno de las Provincias Unidas del Río de la Plata ha tenido labondad de querernos honrar con una misión la más lisonjera, tanto porsu objeto verdaderamente glorioso como por los ilustres personajes quela componen. Así el pueblo argentino debe contar siempre con quenuestro corazón no se apartará jamás de su futura suerte; que nuestromás vivo interés y nuestro más cordial afecto serán por aquel pueblo,que empezó simultáneamente con nosotros la hermosa carrera delibertad que hemos terminado.

No querríamos mencionar nuestros sensibles dolores; pero cuandoel escándalo los publica, por qué callarlos? A la verdad tenemos underecho demasiado incontestable para sorprendernos de que un prín-cipe americano recién independiente de la Europa, que se halla envueltoen nuestra noble insurrección, y que ha levantado su trono, no sobredébiles tablas, sino sobre las indestructibles bases de la soberanía delpueblo, y de la soberanía de las leyes, este príncipe que parecíadestinado a ser el amigo de sus vecinas repúblicas, es el que ocupatodavía una provincia y una plaza fuerte que no le pertenecen y que

Page 218: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

dominan a una de nuestras naciones más beneméritas. Por otra partesus tropas acaban de invadir nuestra provincia de Chiquitos paraasolarla y ultrajarnos con amenazas bárbaras; y cuando el espanto denuestras armas las ha puesto en fuga, entonces se llevan nuestraspropiedades y a nuestros ciudadanos. Y sin embargo estos insignesvioladores del derecho de gentes, han quedado impunes: nuestrospueblos humillados, y nuestra gloria ofendida. Mas debemos gracias alos sucesos que han añadido nuevos nudos a los vínculos que nosestrechan: para que a la vez reclamemos nuestros derechos, como, a lavez, los adquirimos.

Bolívar

75

“En quince años de una lucha degigantes, hemos derrocado el edificio de la tiranía

formado en tres siglos”

Palabras en Potosí, ante las banderas de Colombia, Perú, Chile y BuenosAires, al dirigirse a sus compañeros de armas y a la misión argentina delgeneral Alvear, el 26 de octubre de 1825.

Venimos venciendo desde las costas del Atlántico y, en quince años deuna lucha de gigantes, hemos derrocado el edificio de la tiraníaformado tranquilamente en tres siglos de usurpación y de violencia. Lasmíseras reliquias de los señores de este mundo estaban destinadas a lamás degradante esclavitud. Cuánto no debe ser nuestro gozo al vertantos millones de hombres restituidos a sus derechos por nuestraperseverancia y nuestro esfuerzo! En cuanto a mí, de pie sobre estamole de plata que se llama Potosí y cuyas venas riquísimas fuerontrescientos años el erario de España, yo estimo en nada esta opulenciacuando la comparo con la gloria de haber traído victorioso el estandartede la libertad, desde las playas ardientes del Orinoco, para fijarlo aquí,en el pico de esta montaña, cuyo seno es el asombro y la envidia deluniverso.

224

Page 219: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

76

El impulso plural:obligaciones y facultades del director general

de enseñanza pública

Decreto dado en Chuquisaca (Bolivia), el 11 de diciembre de 1825. Yaen la frontera con .Argentina repite Bolívar su característico interés por laeducación, con este decreto de múltiples y esenciales previsiones.

S IMÓ N BOLÍVARLibertador de Colombia y del Perú, etc.

Considerando:1. o Que el primer deber del gobierno es dar educación al pueblo.

2.° Que esta educación debe ser uniforme y general.3.° Que los establecimientos de este género deben ponerse de

acuerdo con las leyes del Estado.4.° Que la salud de una república depende de la moral que por la

educación adquieren los ciudadanos en su infancia. Oída la diputaciónpermanente.

Decreto:1.° Que el director general de enseñanza pública, instruido de lo queexiste relativo a este ramo en toda la extensión de la república, décuenta al gobierno del estado de las escuelas y colegios y de los fondosque los sostienen.

2.° Que para cumplir con este encargo, tenga el director facultadpara pedir a quien corresponda todas las instrucciones y documentosque necesite.

3.° Que el director proponga al gobierno un plan para el esta-blecimiento de una institución de enseñanza que abrace todos losramos de instrucción, haciéndola general a todos los pueblos de larepública.

4.° Que entre tanto y sin pérdida de tiempo proceda a estableceren cada ciudad capital de departamento una escuela primaria con lasdivisiones correspondientes para recibir todos los niños de ambos sexosque estén en estado de instruirse.

5.° Que se establezca una escuela militar en la capital de larepública.

6.° Que para colegio de ciencias y artes se haga reparar y

225

Page 220: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

disponer como convenga a su nuevo destino el colegio nombrado deSan Juan de esta ciudad.

7.° Que mientras se construyen los edificios que han de ocupar lasescuelas primaria y militar, se pongan éstas en el colegio de San Juan.

8.° Que en la visita que el director debe hacer a todas las capitalesde los departamentos destine con consulta de los presidentes losmejores edificios al uso de los colegios de ciencias y artes, y de laescuela primaria que se han de establecer conforme a los de Chuquisaca.

9.° Que para fondos de estos establecimientos se destinen en cadadepartamento: 1. o Todos los bienes raíces, derechos, rentas y accionesde capellanías aplicados a los establecimientos públicos por decreto deeste día. 2.° El derecho que se cobra por cada fanega de harina al entraren las ciudades, mientras no se suprima este derecho.

10.° Quedarán afectos a estos establecimientos no sólo las fincasque reconocen los censos, sino los réditos: 1.° de la caja de censos.2.° de la obra pía de Paria fundada por don Lorenzo Aldana. 3.° de losmonasterios que se supriman.

11° Que todos estos fondos se reúnan bajo una sola administra-ción en cada departamento sujeta a una dirección general.

12.° Que para estas administraciones se nombren por el gobiernopersonas de responsabilidad, y con fianzas abonadas a cuyo cargo esténel arrendamiento de las fincas y la recaudación de las rentas queproduzcan señalándoles por su trabajo el cinco por ciento sobre el totalde las rentas que recauden.

13.° Que la dirección general tenga una competente dotación.14.° Que los administradores depositen por ahora en las cajas

públicas las rentas de su cargo, así como las recauden, partida porpartida según se cumplan los plazos.

15.° Que este depósito esté absolutamente separado de todo otro,y que en ningún caso se haga de él otro uso que aquél para que estádestinado.

16.° El gobierno se compromete a señalar en favor de la educa-ción, todos los ahorros que en lo sucesivo puedan hacerse en el arreglode otros ramos de administración pública.

17.° El secretario general interino queda encargado de la ejecuciónde este decreto. Imprímase, publíquese y circúlese. Dado en el Palaciode Gobierno en Chuquisaca a ll de diciembre de 1825.

Simón Bolívar

Por orden de S. E.,Felipe Santiago Estenós

226

Page 221: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

77

Justicia en el reparto de tierrasa los campesinos

Pura el afianzamiento de la justicia económica y social, decreto dictado enChuquisaca el 14 de diciembre de 1825. Reitera y confirma sus resolu-ciones de septiembre de 1817, mayo de 1820, abril de 1824 y julio de1825.

S IMÓ N BOLÍVARLibertador de Colombia y del Perú, &., &., &

Considerando:1.° Que la agricultura en el departamento de Santa Cruz sufre atrasosprogresivos por el desprecio con que hasta ahora ha sido mirada por elgobierno español.

2.° Que la feracidad de sus terrenos convida al hombre trabajadorcon las riquezas seguras que promete.

3.° Que los naturales de aquel departamento por falta de providen-cias que aseguren la propiedad y protejan la conservación de ella hanabandonado en el todo este tan precioso ramo de industria; oída ladiputación permanente,

Decreto:1.° Los derechos de propiedad adquirida en el departamento de SantaCruz por justos títulos y conforme a las leyes serán protegidos por elgobierno.

2.° Las tierras pertenecientes al Estado se repartirán entre losnaturales del país bajo de mensura y amojonamiento adjudicándoselesen propiedad.

3.° Cada individuo, de cualquier sexo o edad que sea, recibirá unafanegada de tierra en los lugares pingües y regados; y en los lugaresprivados de riego y estériles recibirá dos.

4.° Serán preferidos en este repartimiento los indígenas y los quehayan acreditado mayor decisión por la causa de la independencia, oque hayan sido perjudicados por este principio.

5.° Si al cabo del año después de hecha la adjudicación y amojona-miento de las tierras, los beneficiados con ellas no hubiesen empren-dido el trabajo, que demande la estación del tiempo, y no den muestrasde dedicación al trabajo, se les separará de la posesión y propiedad dedichas tierras y se adjudicarán a otros que las cultiven cual corresponde.

6.° Los terrenos destinados a pacer los ganados serán comunes a

Page 222: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

todos los individuos de las provincias, o partidos a que correspondanlos dichos terrenos, mientras que no sean repartidos como los demás.

7.° La propiedad declarada a que se contrae el artículo segundo seentenderá con la restricción de no poderse enajenar las tierras adjudica-das hasta el año 50 y jamás a favor de manos muertas so pena denulidad.

8° La mensura y repartición de tierras se ejecutará por personasde probidad e inteligencia, que se propongan en terna al presidente deldepartamento por las municipalidades respectivas, que también debe-rán formar el arancel de las dietas y derechos que se han de pagar a loscomisonados por sus trabajos.

9° La mensura y repartición de tierras se hará con anuencia deldirector general de agricultura a su llegada al departamento en la visitaque debe hacer a él.

10° El presidente del departamento de Santa Cruz cuidará deremitir al conocimiento del supremo gobierno una razón exacta de lastierras sobrantes y que se declaren de la propiedad del gobierno, y todaslas observaciones y noticias que pueda adquirir relativas al mejordesempeño y ejecución de los objetos comprendidos en este decreto.

ll, o El secretario general interino queda encargado de su cumpli-miento.

Imprímase, publíquese y circúlese. Dado en el Palacio deGobierno de Chuquisaca a 14 de diciembre de 1825.

Por orden de S. E.,Felipe Santiago Estenós

Simón Bolívar

78

Pionero de la preocupación ecológica:medidas de conservación y buen uso de las aguas

Decreto dictado en Chuquisaca, el 19 de diciembre de 1825. Es comple-mentario de sus normas sobre cuido de los bosques y extracción de maderasy cría de animales.

S I M Ó N B O L ÍV A RLibertador de Colombia y del Perú, &., &., &

Considerando:1. o Que una gran parte del territorio de la república carece de aguas ypor consiguiente de vegetales útiles para el uso común de la vida.

228

Page 223: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

2° Que la esterilidad del suelo se opone al aumento de la pobla-ción y priva entre tanto a la generación presente de muchas comodida-des.

3.° Que por falta de combustible no pueden hacerse o se haceninexactamente o con imperfección la extracción de metales y la confec-ción de muchos productos minerales que por ahora hacen casi la solariqueza del suelo; oída la diputación permanente;

Decreto:1° Que se visiten las vertientes de los ríos, se observe el curso deellos, y se determinen los lugares por donde puedan conducirse aguas alos terrenos que estén privados de ellas.

2° Que en todos los puntos en que el terreno prometa hacerprosperar una especie de planta mayor cualquiera, se emprenda unaplantación reglada a costa del Estado, hasta el número de un millón deárboles, prefiriendo los lugares donde haya más necesidad de ellos.

3° Que el director general de agricultura proponga al gobiernolas ordenanzas que juzgue convenientes a la creación, prosperidad ydestino de los bosques en el territorio de la república.

4° El secretario general interino queda encargado de la ejecuciónde este decreto. Imprímase, publíquese y circúlese. Dado en el Palaciode Gobierno en Chuquisaca a 19 de diciembre de 1825.

Simón Bolívar

79

“Las naciones marchan hacia el término de su grandeza,con el mismo paso con que camina la educación”

Las hondas reflexiones del hombre de Estado sobre “el primer deber delgobierno”: la instrucción pública, en este artículo de prensa escrito en1825.

El gobierno forma la moral de los pueblos, los encamina a la grandeza,a la prosperidad y al poder. ¿Por qué? porque teniendo a su cargo loselementos de la sociedad, establece la educación pública y la dirige. Lanación será sabia, virtuosa, guerrera si los principios de su educaciónson sabios virtuosos y militares; ella será imbécil, supersticiosa, afemi-nada y fanática si se la cría en la escuela de estos errores. Por esto es quelas sociedades ilustradas han puesto siempre la educación entre lasbases de sus instituciones políticas. Véase la República de Platón. Mas,para qué hemos de examinar teorías? Véase a Atenas la madre de las

Page 224: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

ciencias y de las artes; a Roma, la señora del mundo; a la virtuosa einvencible Esparta; a la República de los Estados Unidos, el trono de lalibertad y el asilo de las virtudes. De dónde sacaron lo que han sido ylo que son? En efecto: las naciones marchan hacia el término de sugrandeza, con el mismo paso con que camina la educación. Ellasvuelan, si ésta vuela, retrogradan, si retrograda, se precipitan y hundenen la oscuridad, si se corrompe, o absolutamente se abandona. Estosprincipios dictados por la experiencia, e inculcados por los filósofos ypolíticos antiguos y modernos, hacen hoy un dogma tan conocido queno se hallará tal vez individuo alguno que no se sienta penetrado de suverdad.

Felizmente vivimos bajo la influencia de un gobierno tan ilustradocomo paternal, que en medio del estrago y de la penuria a que nosredujo el rey, del trastorno y agitación que nos causa una guerra deexterminio, desde el centro de sus fatigas, vuelve hacia los pueblos susmiradas benéficas, observa sus miserias, se contrista a su vista, yarrostrando la escasez de recursos, procura remediarlas por cuantosmedios le sugiere la filantropía. Ha fijado con preferencia su atenciónsobre el punto más interesante, sobre el fundamento verdadero de lafelicidad: la educación.

No es mi intención hablar del plan de estudios, creación deescuelas, fomento de las artes y ciencias, estímulo y aprecio de losliteratos, y reglamentos útiles. El público ha visto con sus propios ojosque se practica ya este sistema de regeneración moral, y no hay quienno sienta los efectos saludables de sus desvelos.

Me contraigo solamente a la escuela abierta aquí el 1° de octubrede este año, q ué diferencia! Bandas de muchachos consagrados porsistema al ocio, la plaga de las calles, el estorbo de las concurrencias, yla aflicción de sus padres, verlos hoy formar la sociedad reglada ydecente, oírlos discurrir dogmáticamente sobre la historia de la reli-gión, sobre los elementos de la aritmética, del dibujo y de la geografía;verlos ejecutar elegantes caracteres por el estilo de Carver, incesante-mente afanados por saber, inflamados por la vista del premio, renunciaral atractivo del descanso. He aquí lo que hace hoy el objeto de la dicha yde la bendición del pueblo; si hay quien a vista de esta variación noexperimente iguales sensaciones, será porque es insensible al bien. Masyo que actualmente las siento, voy a manifestar mi interés por tan útilestablecimiento aventurando algunas observaciones que podrán tener eluso que merezcan.

El director de una escuela, es decir el hombre generoso y amantede la patria, que sacrificando su reposo y su libertad se consagra alpenoso ejercicio de crearle ciudadanos al Estado que le defienda, leilustren, le santifiquen, le embellezcan y le engendren otros tandignos como él, es sin duda benemérito de la patria; merece la

Page 225: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

veneración del pueblo y el aprecio del gobierno. El debe alentarle yconcederle distinciones honrosas.

Claro está que no hablo de los que llaman maestros de escuela, esdecir de aquellos hombres comunes, que armados del azote, de un ceñotétrico y de una declamación perpetua, ofrecen más bien la imagen dePlutón, que la de un filósofo benigno.

Aquí se enseñan más preocupaciones que verdades: es la escuela delos espíritus serviles, donde se aprende con otros vicios el disimulo y lahipocresía, y donde el miedo no permite al corazón el goce de otrasensación. Fuera semejantes tiranos: que vayan a Salamanca que allítendrán un lugar.

El gobierno debe proceder como hasta aquí: elegir entre la multi-tud, no un sabio, pero sí un hombre distinguido por su educación, por1a pureza de sus costumbres, por la naturalidad de sus modales, jovial,accesible, dócil, franco, en fin en quien se encuentre mucho que imitary poco que corregir.

Como los términos, por buenas que sean las ideas que representanen su origen, degeneran después con el abuso causando imágenesdistintas, tal me parece que sucede con los nombres maestro y escuela.Bajo el pie bárbaro en que estos establecimientos se han visto en elgobierno español, estas palabras producen sensaciones muy desagrada-bles. Decirle a un niño vamos a la escuela, o a ver al maestro, era lomismo que decirle vamos al presidio, o al enemigo; llevarle, y hacerlevil esclavo del miedo y del tedio, era todo uno. Creo pues que estasdenominaciones deben sustituirse por otras a quienes no se tenganaversiones. Habrá quien diga que los nombres no influyen; pero laexperiencia prueba que obran directamente sobre nuestros juicios.Cuántas querellas, disputas y guerras sólo por un término! dentro deun siglo, con qué pavor oirán nuestros descendientes pronunciar elnombre español! Que el maestro, pues, se llame de otro modo v.g.director, y la escuela, sociedad.

Formar el espíritu y el corazón de la juventud, he aquí la cienciadel director: éste es su fin. Cuando su prudencia y habilidad llegaron agrabar en el alma de los niños los principios cardinales de la virtud y delhonor; cuando consiguió de tal modo disponer su corazón por mediode ejemplos y demostraciones sencillas que se inflamen más a la vista deuna divisa que los honra, que con la oferta de una onza de oro; cuandolos inquieta más la consideración de no acertar a merecer el premio, ocon el sufrimiento de un sonrojo, que la privación de los juguetes ydiversiones a que son aficionados; entonces es que ha puesto el funda-mento sólido de la sociedad, ha clavado el aguijón que inspirando unanoble audacia a los niños, se sienten con fuerza para arrostrar el halagode la ociosidad, para consagrarse al trabajo. La juventud va a hacerprogresos inauditos en las artes y ciencias.

231

Page 226: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Afortunadamente nuestra sociedad se halla hoy en este caso: losniños se desvelan estudiando, no hablan sino de lo que han aprendido,es día de desconsuelo el día que la escuela está cerrada.

Los premios y castigos morales deben ser el estímulo de racionalestiernos; el rigor y el azote, el de las bestias. Este sistema produce laelevación del espíritu, nobleza y dignidad en los sentimientos, decenciaen las acciones. Contribuye en grande manera a formar la moral delhombre, creando en su interior este tesoro inestimable, por el cual esjusto, generoso, humano, dócil, moderado, en una palabra hombre debien.

Así como el director, el discípulo debe tener ciertas cualidades altiempo de entrar en la sociedad: tales son disposición física y moral paraser enseñado, dos vestidos por lo menos, un corbatín, sombrero y libro.

La enseñanza no es más, digámoslo así, que la disciplina de uncuerpo de tropas, con la diferencia que a los soldados se les disciplinafísicament e, y a los niños física y moralmente. Mas así como a losprimeros se les instruye desde que se levantan hasta que se acuestandándole a todos sus movimientos y trabajos regularidad, tiempo, ordeny duración, para que resulte un todo bello; así al niño debe instruírselesiguiéndole en todas las horas del día.

La primera máxima que ha de inculcarse a los niños es la del aseo.Si se examina bien la trascendencia que tiene en la sociedad la observan-cia de este principio, se convencerá de su importancia. No hay vistamás agradable que la de una persona que lleva la dentadura, las manos,el rostro y el vestido limpios: si a esta cualidad se juntan unos modalesfinos y naturales, he aquí los precursores que marchando delante denosotros nos preparan una acogida favorable en el ánimo de lasgentes. Será pues la primera diligencia del director hacer todos los díasuna revista para examinar todo lo que haya que advertir y corregirsobre este particular. Un premio o distintivo establecido para condeco-rar esta virtud será un estímulo suficiente para practicarla con emula-ción.

Al mismo tiempo se acompañará la instrucción práctica de laetiqueta o de las ceremonias y cumplimientos debidos a las gentessegún su clase. No es esta materia frívola: su interés es tal que de suinobservancia se originan disgustos, enemistades y duelos. Hay perso-nas tan finas y delicadas en este particular, especialmente los extranje-ros, que no disimulan la más ligera falta: yo he visto reconvenir a unapersona porque se para en la mesa, porque fuma entre la concurrencia oestá con el sombrero puesto. No es extraño; la opinión de los hombresde educación es que se les ultraja cuando en su presencia se incurre enalguna irregularidad. ¿Qué diremos a vista de nuestras tertulias, denuestros banquetes? Qué rusticidad, qué desvergüenza! Más bien sonzahúrdas que reuniones de racionales.

232

Page 227: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Aquí es preciso evitar el extremo opuesto, o la nimia escrupulosi-dad en la práctica de las reglas, de donde resulta una afectación tanchocante, ridícula, que más parecen unos hombres grabados en unospreceptos, que unos preceptos grabados en hombres.

Siendo la palabra el vehículo de la instrucción, es de los primeroscuidados del director que la dicción sea pura, clara y correcta, es decir,que no se admita barbarismo, ni solecismo; que se dé el valor a losacentos, y se llamen las cosas con sus propios nombres sin alterarlos.

Congregada la sociedad, se ha calculado prudentemente dividirlaen clases, v.g. l.a, 2.a, 3.a, compuestas de principiantes, algo más queprincipiantes, y adelantados, colocando al frente de cada clase un niñocon el nombre de celador capaz de dirigirla. Los celadores se nombranpor elección, y se condecoran con una insignia particular que puedaexcitar la ambición de todos. Se acostumbará a los niños a proceder enlas elecciones con tal orden e imparcialidad que se familiaricen con ladecencia y la justicia, buscando sólo el mérito.

El tratamiento de los niños entre sí será el de tú, y el de señordelante del director.

Quintiliano prefiere las escuelas públicas, a la enseñanza privada,porque además de las ventajas que proporciona el roce y trato congentes de distintos genios, aquí dice, es donde se contraen las verdade-ras amistades, aquéllas que duran toda la vida. Siguiendo esta idea, yoharía que cada niño eligiera otro de la sociedad a su gusto, estrechán-dose con él, más que con ningún otro. El objeto de este enlace podía serel de defenderse recíprocamente delante del director, y en cualesquieraotra ocasión, auxiliarse, partir las comodidades, corregirse y estarunidos.

El director puede enseñar todo lo que le permita el tiempo, su.capacidad y la de los discípulos. Pero los objetos de preferencia sonleer, escribir, los principios de la religión, los de la aritmética, ygeografía. El método que me parece más fácil para enseñar a leer esprimero poner muy diestros a los niños en el conocimiento de las letras,después en la pronunciación del silabario, pero sin deletrear, y de aquípasar a leer en cualesquiera libro. En esta operación se comprende lainstrucción en los rudimentos de la gramática castellana.

Para aprender a escribir creo preferible a todos el sistema deCarver por su sencillez, facilidad y belleza. En este ejercicio se com-prende la enseñanza de la ortografía castellana, y se aprende a leer lomanuscrito.

Para aprender los principios de la historia sagrada y de lareligión, el Catecismo de Fleurí y el Padre Astete pueden usarse consuceso.

Para aritmética, el cuaderno por donde se está enseñando.Para la geografía universal y para la particular del país un

Page 228: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

extracto completo que al efecto se formará. Las lecciones que sobrecada una de estas materias se den tendrán hora determinada, muchaclaridad, tanta extensión cuanto lo permita la capacidad media de los

‘discípulos, examen particular y general a ciertos períodos de tiempo, yfinalmente premios.

Un hombre de genio, que conozca el corazón humano y que ledirija con arte, un sistema sencillo y un método claro y natural son losmedios eficaces por donde la sociedad puede hacer en pocos díasextraordinarios y brillantes progresos. Sin estos requisitos en vano seamontonarán preceptos y trabajos; todo será embarazo y confusión.

Los juegos y recreaciones son tan necesarios a los niños como elalimento; su estado físico y moral así lo requiere. Pero estos desahogosse han de encaminar a algún fin útil y honesto; la discreción del directorlos determinará y presidirá si es posible. Como útiles y honestos sonconocidos la pelota, la raqueta, el bolo, la cometa, el globo aerostático,las damas y el ajedrez.

La adquisición de los premios, los actos extraordinarios de aplica-ción, de honor y de cualquiera otro sentimiento noble no los borrará elolvido antes bien se recomendarán a la memoria con aprecio. A este finse llevará un registro donde se consignen los hechos más notables, elnombre de su autor y el día en que se ejecutó. Estará a cargo de unsecretario electo por votación, quien escribirá y autorizará el hecho, seadornará el libro y se mantendrá con veneración en un lugar visible. Eldía de las grandes solemnidades de la patria, se congregará la sociedad yalgunas personas visibles del pueblo; una de ellas la más condecoradaleerá en voz alta las glorias y triunfos de la juventud. Se consignará estaceremonia, se tributarán vivas y elogios a aquellos cuyo nombre sehalle escrito en este libro precioso. Este día será el de la sociedad, día defiesta y de regocijo.

80

El severo e inflexible republicanismo

Otro categórico rechazo a las ideas monárquicas y la reafirmación en suantigua divisa: “Libertador o muerto”. Carta al general F. de P Santan-der, desde La Magdalena (Lima), el 21 de febrero de 1826.

Mi querido general y amigo:

Ya dije a Vd. que había venido aquí con la intención de devolver elmando al congreso peruano, mas me hallo resuelto a no hacer otra cosaque ayudar con mi influencia al bienestar de los pueblos. El mecanismo

234

Page 229: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

del gobierno me fastidia extraordinariamente, y además mis enemigosno se convencen de que yo aborrezco la autoridad: en prueba le diré aVd. después una cosa bien rara.

Lima me ha recibido divinamente; estos señores se disputan conlos colombianos el amor que nos tienen y me quieren forzar a que losmande. El general La Mar se halla enfermo y no quiere servir en elgobierno; así mi posición es extrema. El congreso se reunirá en estasemana para decidir éste y otros puntos, que no dejará de dar muchaperplejidad a la sabiduría. En fin, yo les diré que no puedo absoluta-mente ser su jefe constitucional y que además Colombia me espera. Yono tengo otro mando que el militar y será el que conserve hasta que mevaya del país. Muchos señores del congreso piensan proclamar estaRepública Boliviana como la del Alto Perú, precediendo un tratado conaquel país. Su mira es retenerme por esta lisonja, tomar a Sucre por jefey llevar la constitución que yo he formado en lugar de la mala quetienen en el día. Si esta operación se logra, necesitan ambos pueblos denosotros para arreglar sus asuntos. También hay otros que quisieranque yo fuese jefe absoluto del Sur, contando con que Chile y BuenosAires van a necesitar de mi protección este año, pues la guerra y laanarquía los está devorando.

Por supuesto, yo rechazo este partido a todo trance porque noentra en mis miras.

En cuanto a las propuestas de ese gobierno con respecto a lafederación, diré a Vd. que yo, por delicadeza, me he abstenido deintervenir en las resoluciones de este gobierno sobre esta materia.Preveo que aquí no se quieren meter de bruces en una federación muyestrecha por miras diversas: las que a mí presentan son honrosas paramí mismo, pero siempre habrá una segunda intención. También tienenmiedo a los gastos, porque están muy pobres y muy adeudados: aquí sedebe mucho y a todo el mundo. No quieren ir a La Habana, porquetienen que ir a Chiloé que les pertenece y pueden pagar a Chile conaquella isla. Les sobra marina militar, sin tener que hacer de ella y, porlo mismo, no querrán comprar más buques. Le temen a los inglesespara ligarse con ellos, y no le temen a la revolución de colores, porqueel pueblo es muy sumiso. Todo esto lo advierto para que tenga Vd.entendidas las ideas capitales que se pueden oponer a las de Colombia.

Reservadísimo.En estos días he recibido cartas de diferentes amigos de Venezuelaproponiéndome ideas napoleónicas. El general Páez está a la cabeza deestas ideas sugeridas por sus amigos los demagogos. Un secretarioprivado y redactor de El Argos ha venido a traerme el proyecto. Vd.lo verá disfrazado en la carta que incluyo original que Vd. deberáguardar con infinito cuidado para que no la vea nadie. El redactor de

235

Page 230: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

esta carta es Carabaño. El general Briceño me ha escrito diciéndomeque él ha tenido que contener a los que querían dar el golpe enVenezuela y que les aconsejó que me consultasen. El general Mariñoescribe también y otros menos importantes, pero más furiosos dema-gogos. Por supuesto, Vd. debe adivinar cuál será mi respuesta. Mihermana me dice que en Caracas hay tres partidos, monárquicos,democráticos y pardócratas, que sea yo Libertador o muerto es suconsejo. Éste será el que yo seguiré, aun cuando supiera que, porseguirlo, pereciera todo el género humano. Yo enviaré al general Páezmi proyecto de constitución para Bolivia por toda respuesta, a fin deque considere mis ideas sobre la estabilidad unida a la libertad yconservación de los principios que hemos adoptado. También leañadiré que no debe desesperar a sus amigos, a fin de que no caigan enotro extremo más cruel que éste, pues ya no les queda otro que el de lapura anarquía; porque debe Vd. tener presente que esos caballeros hansido federalistas primero, después constitucionales y ahora napoleóni-cos, luego no les queda más grado que recibir que el de anarquistas,pardócratas o degolladores. En el día, dicen que están moderados yarrepentidos de sus antiguas opiniones, pero Briceño añade que todoesto es precario hasta que yo resuelva. Ellos quieren vencer o morir atodo trance en la última batalla, después de haber perdido las primeras.

Yo diré al general Páez que haga dirigir la opinión hacia miconstitución boliviana, que reúne los extremos y todos los bienes, pueshasta los federalistas hallan en ella sus deseos en gran parte; y que en elaño de 31 puede hacerse una reforma favorable a la estabilidad yconservación de la república; que debe temer lo que Iturbide padeciópor su demasiada confianza en sus partidarios, o bien debe temer unareacción horrible de parte del pueblo por la justa sospecha de una nuevaaristocracia destructora de la igualdad. Esto y mucho más diré paraborrarles del pensamiento un plan fatal, tan absurdo y tan pocoglorioso; plan que me deshonraría delante del mundo y de la historia;que nos atraería el odio de los liberales y el desprecio de los tiranos;plan que me horroriza por principios, por prudencia o por orgullo.Este plan me ofende más que todas las injurias de mis enemigos, pues élme supone de una ambición vulgar y de un alma infame capaz deigualarse a la de Iturbide y esos otros miserables usurpadores. Segúnesos señores, nadie puede ser grande, sino a la manera de Alejandro,César y Napoleón. Yo quiero superarlos a todos en desprendimiento,ya que no puedo igualarlos en hazañas. Mi ejemplo puede servir de algoa mi patria misma pues la moderación del primer jefe cundirá entre losúltimos, y mi vida será su regla. El pueblo me adorará y yo seré la arcade su alianza.

Soy de Vd. de todo corazón.Bolívar

236

Page 231: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

81

“El título de Libertador es superiora todos los que ha recibido el orgullo humano”

Reiterado planteamiento contra el absolutismo. “Ni Colombia es Fran-cia, ni yo Napoleón . . . Yo no soy Napoleón ni quiero serlo. ” Carta algeneral en jefe José Antonio Páez, el 6 de marzo de 1826, desde LaMagdalena.

Mi querido general y amigo:

He recibido la muy importante carta de Vd. del 1° de octubre del añopasado, que me mandó Vd. por medio del señor Guzmán, a quien hevisto y oído no sin sorpresa, pues su misión es extraordinaria. Vd. medice que la situación de Colombia es muy semejante a la de Franciacuando Napoleón se encontraba en Egipto y que yo debo decir con él“los intrigantes van a perder la patria, vamos a salvarla”. A la verdadcasi toda la carta de Vd. está escrita por el buril de la verdad, mas nobasta la verdad sola para que un plan logre su efecto. Vd. no ha juz-gado, me parece, bastante imparcialmente el estado de las cosas y de loshombres. Ni Colombia es Francia, ni yo Napoleón. En Francia sepiensa mucho y se sabe todavía más, la populación es homogénea yademás la guerra la ponía al borde del precipicio. No había otrarepública grande que la francesa y la Francia había sido siempre unreino. El gobierno republicano se había desacreditado y abatido hastaentrar en un abismo de execración. Los monstruos que dirigían laFrancia eran igualmente crueles e ineptos. Napoleón era grande y únicoy además sumamente ambicioso. Aquí no hay nada de esto. Yo no soyNapoleón ni quiero serlo; tampoco quiero imitar a César; aun menos aIturbide. Tales ejemplos me parecen indignos de mi gloria. El título deLibertador es superior a todos los que ha recibido el orgullo humano.Por tanto, es imposible degradarlo. Por otra parte, nuestra populaciónno es de franceses en nada, nada, nada. La república ha levantado el paísa la gloria y a la prosperidad, dado leyes y libertad. Los magistrados deColombia no son ni Robespierre ni Marat. El peligro ha cesado cuandolas esperanzas empiezan: por lo mismo, nada urge para tal medida. Sonrepúblicas las que rodean a Colombia, y Colombia jamás ha sido unreino. Un trono espantaría tanto por su altura como por su brillo. Laigualdad sería rota y los colores verían perdidos todos sus derechos poruna nueva aristocracia. En fin, amigo, yo no puedo persuadirme de queel proyecto que me ha comunicado Guzmán sea sensato, y creo

237

Page 232: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

también que los que lo han sugerido son hombres de aquéllos queelevaron a Napoleón y a Iturbide para gozar de su prosperidad yabandonarlos en el peligro, o si la buena fe los ha guiado, crea Vd. queson unos aturdidos o partidarios de opiniones exageradas bajo cualquierforma o principios que sean.

Diré a Vd. con toda franqueza que este proyecto no conviene ni aVd. ni a mí ni al país. Sin embargo, creo que, en el próximo períodoseñalado para la reforma de la constitución, se pueden hacer a ellanotables mutaciones en favor de los buenos principios conservadores ysin violar una sola de las reglas más republicanas. Yo enviaré a Vd. unproyecto de constitución que he formado para la república de Bolivia;en él se encuentran reunidas todas las garantías de permanencia y delibertad, de igualdad y de orden. Si Vd. y sus amigos quisieran aprobareste proyecto, sería muy conveniente que se escribiese sobre él y serecomendase a la opinión del pueblo. Éste es el servicio que podemoshacer a la patria; servicio que será admirado por todos los partidos queno sean exagerados, o, por mejor decir, que quieran la verdaderalibertad con la verdadera estabilidad. Por lo demás, yo no aconsejo aVd. que haga para sí lo que no quiero para mí, mas si el pueblo loquiere, y Vd. acepta el voto nacional, mi espada y mi autoridad seemplearán con infinito gozo en sostener y defender los decretos de lasoberanía popular. Esta protesta es tan sincera como el corazón de suinvariable amigo.

82

Admiración a Washington

Desde Lima escribe el Libertador, el 25 de mayo de 1826, a JorgeWashington Parke Custis, agradeciéndole el obsequio del medallón delilustre prócer fundador de los Estados Unidos y padre de su libertad. Esteenvío fúe anunciado a Bolívar por el general Lafayette.

Señor: Aunque los papeles públicos me habían informado del gloriosodon con que el hijo del gran Washington había querido honrarme, hastaeste día no había recibido ni la santa reliquia del hombre de la libertad,ni la lisonjera carta de su digno descendiente. Hoy he tocado con mismanos este inestimable presente. La imagen del primer bienhechordel continente de Colón, presentado por el héroe ciudadano generalLafayette y ofrecido por el noble vástago de esa familia inmortal, eracuanto podría recompensar el más esclarecido mérito del primer hom-bre del universo . Seré yo digno de tanta gloria? No; mas la acepto conun gozo y una gratitud que llegarán, junto con los restos venerables del

238

Page 233: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

padre de la América, a las más remotas generaciones de mi patria; ellasdeberán ser las últimas que queden del mundo nuevo.

Acepte Vd., señor, los testimonios más sinceros y más respetuososde mi perfecta consideración.

Bolívar

83

Un cuerpo de opiniones sobre el modo demanejar hombres libres conforme a los principios

adoptados entre los pueblos cultos

Discurso al Congreso Constituyente de Bolivia, estimado en el selectonúmero de sus piezas fundamentales. Fue acompanado de un proyecto deConstitución elaborado por el Libertador. Fechado en Lima el 25 demayo de 1826.

legisladores! Al ofreceros el proyecto de constitución para Bolivia, mesiento sobrecogido de confusión y timidez, porque estoy persuadido demi incapacidad para hacer leyes. Cuando yo considero que la sabiduríade todos los siglos no es suficiente para componer una ley fundamentalque sea perfecta, y que el más esclarecido legislador es la causainmediata de la infelicidad humana, y la burla, por decirlo así, de suministerio divino, qué deberé deciros del soldado que, nacido entreesclavos y sepultado en los desiertos de su patria, no ha visto más quecautivos con cadenas y compañeros con armas para romperlas? Yolegislador. . .! Vuestro engaño y mi compromiso se disputan la prefe-rencia: no sé quién padezca más en este horrible conflicto; si vosotrospor los males que debéis temer de las leyes que me habéis pedido, o yodel oprobio a que me condenáis por vuestra confianza.

He recogido todas mis fuerzas para exponeros mis opiniones sobreel modo de manejar hombres libres, por los principios adoptados entrelos pueblos cultos; aunque las lecciones de la experiencia sólo muestranlargos períodos de desastres, interrumpidos por relámpagos de ven-tura. Qué guías podremos seguir a la sombra de tan tenebrososejemplos?

legisladores! Vuestro deber os llama a resistir el choque de dosmonstruosos enemigos que recíprocamente se combaten, y ambos osatacarán a la vez: la tiranía y la anarquía forman un inmenso océano deopresión, que rodea a una pequeña isla de libertad, embatida perpetua-mente por la violencia de las olas y de los huracanes, que la arrastran sin

239

Page 234: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

cesar a sumergirla. Mirad el mar que vais a surcar con una frágil barca,cuyo piloto es tan inexperto.

El proyecto de constitución para Bolivia está dividido en cuatropoderes políticos, habiendo añadido uno más, sin complicar por esto ladivisión clásica de cada uno de los otros. El electoral ha recibidofacultades que no le estaban señaladas en otros gobiernos que seestiman entre los más liberales. Estas atribuciones se acercan en granmanera a las del sistema federal. Me ha parecido no sólo conveniente yútil, sino también fácil, conceder a los representantes inmediatos delpueblo los privilegios que más pueden desear los ciudadanos de cadadepartamento, provincia o cantón. Ningún objeto es más importantea un ciudadano que la elección de sus legisladores, magistrados, juecesy pastores. Los colegios electorales de cada provincia representan lasnecesidades y los intereses de ellas y sirven para quejarse de lasinfracciones de las leyes y de los abusos de los magistrados. Meatrevería a decir con alguna exactitud que esta representación participade los derechos de que gozan los gobiernos particulares de los estadosfederados. De este modo se ha puesto nuevo peso a la balanza contra elejecutivo; y el gobierno ha adquirido más garantías, más popularidad ynuevos títulos, para que sobresalga entre los más democráticos.

Cada diez ciudadanos nombran un elector; y así se encuentra lanación representada por el décimo de sus ciudadanos. No se exigensino capacidades, ni se necesita de poseer bienes, para representar laaugusta función del soberano; mas debe saber escribir sus votaciones,firmar su nombre y leer las leyes. Ha de profesar una ciencia o un arteque le asegure un alimento honesto. No se le ponen otras exclusionesque las del crimen, de la ociosidad y de la ignorancia absoluta. Saber yhonradez, no dinero, es lo que requiere el ejercicio del poder público.

El cuerpo legislativo tiene una composición que lo hace necesaria-mente armonioso entre sus partes: no se hallará siempre dividido porfalta de un juez árbitro, como sucede donde no hay más que doscámaras. Habiendo aquí tres, la discordia entre dos queda resuelta porla tercera; y la cuestión examinada por dos partes contendientes, y unimparcial que la juzga; de este modo ninguna ley útil queda sin efecto,o por lo menos, habrá sido vista una, dos y tres veces, antes de sufrir lanegativa. En todos los negocios entre dos contrarios se nombra untercero para decidir, y no sería absurdo que en los intereses más arduosde la sociedad se desdeñara esta providencia dictada por una necesidadimperiosa? Así las cámaras guardarán entre sí aquellas consideracionesque son indispensables para conservar la unión del todo, que debedeliberar en el silencio de las pasiones y con la calma de la sabiduría.Los congresos modernos, me dirán, se han compuesto de solas dossecciones. Es porque en Inglaterra, que ha servido de modelo, lanobleza y el pueblo debían representarse en dos cámaras; y si en Norte-

240

Page 235: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

américa se hizo lo mismo sin haber nobleza, puede suponerse que lacostumbre de estar bajo el gobierno inglés le inspiró esta imitación. Elhecho es que dos cuerpos deliberantes deben combatir perpetuamente,y por esto Sieyes no quería más que uno. Clásico absurdo.

La primera cámara es de tribunos, y goza de la atribución de iniciarlas leyes relativas a hacienda, paz y guerra. Ella tiene la inspeccióninmediata de los ramos que el ejecutivo administra con menos interven-ción del legislativo.

Los senadores forman los códigos y reglamentos eclesiásticos, yvelan sobre los tribunales y el culto. Toca al senado escoger losprefectos, los jueces del distrito, ‘gobernadores, corregidores, y todoslos subalternos del departamento de justicia. Propone a la cámara decensores los miembros del tribunal supremo, los arzobispos, obispos,dignidades y canónigos. Es del resorte del senado cuanto pertenece a lareligión y a las leyes.

Los censores ejercen una potestad política y moral que tiene algunasemejanza con la del areópago de Atenas y de los censores de Roma.Serán ellos los fiscales contra el gobierno para celar si la constitución ylos tratados públicos se observan con religión. He puesto bajo su égidael juicio nacional, que debe decidir de la buena o mala administracióndel ejecutivo.

Son los censores los que protegen la moral, las ciencias, las artes, lainstrucción y la imprenta. La más terrible como la más augusta funciónpertenece a los censores. Condenan a oprobio eterno a los usurpadoresde la autoridad soberana y a los insignes criminales. Conceden honorespúblicos a los servicios y a las virtudes de los ciudadanos ilustres. El fielde la gloria se ha confiado a sus manos: por lo mismo, los censoresdeben gozar de una inocencia intacta y de una vida sin mancha. Sidelinquen, serán acusados hasta por faltas leves. A estos sacerdotes delas leyes he confiado la conservación de nuestras sagradas tablas,porque son ellos los que deben clamar contra sus profanadores.

El presidente de la república viene a ser en nuestra constitución,como el sol que, fume en su centro, da vida al universo. Esta supremaautoridad debe ser perpetua; porque en los sistemas sin jerarquías senecesita más que en otros un punto fijo alrededor del cual giren losmagistrados y los ciudadanos, los hombres y las cosas. Dadme unpunto fijo, decía un antiguo, y moveré el mundo. Para Bolivia, estepunto es el presidente vitalicio. En él estriba todo nuestro orden, sintener por esto acción. Se le ha cortado la cabeza para que nadie tema susintenciones, y se le han ligado las manos para que a nadie dañe.

241

Page 236: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

La presidencia vitalicia

El presidente de Bolivia participa de las facultades del ejecutivo ameri-cano, pero con restricciones favorables al pueblo. Su duración es la delos presidentes de Haití. Yo he tomado para Bolivia el ejecutivo de larepública más democrática del mundo.

La isla de Haití (permítaseme esta digresión) se hallaba en insurrec-ción permanente: después de haber experimentado el imperio, el reino,la república, todos los gobiernos conocidos y algunos más, se vioforzada a ocurrir al ilustre Petión para que la salvase. Confiaron en él, ylos destinos de Haití no vacilaron más. Nombrado Petión presidentevitalicio con facultades para elegir el sucesor, ni la muerte de estegrande hombre, ni la sucesión del nuevo presidente, han causado elmenor peligro en el Estado: todo ha marchado bajo el digno Boyer, enla calma de un reino legítimo. Prueba triunfante de que un presidentevitalicio, con derecho para elegir el sucesor, es la inspiración mássublime en el orden republicano.

El presidente de Bolivia será menos peligroso que el de Haití,siendo el modo de sucesión más seguro para el bien del Estado.Además el presidente de Bolivia está privado de todas las influencias:no nombra los magistrados, los jueces, ni las dignidades eclesiásticas,por pequeñas que sean. Esta disminución de poder no la ha sufridotodavía ningún gobierno bien constituido: ella añade trabas sobre trabasa la autoridad de un jefe que hallará siempre a todo el pueblo dominadopor los que ejercen las funciones más importantes de la sociedad. Lossacerdotes mandan en las conciencias, los jueces en la propiedad, elhonor y la vida, y los magistrados en todos los actos públicos. Nodebiendo éstos sino al pueblo sus dignidades, su gloria y su fortuna, nopuede el presidente esperar complicarlos en sus miras ambiciosas. Si aesta consideración se agregan las que naturalmente nacen de las oposi-ciones generales que encuentra un gobierno democrático en todos losmomentos de su administración, parece que hay derecho para estarcierto de que la usurpación del poder público dista más de este gobiernoque de otro ninguno.

legisladores! La libertad, de hoy más, será indestructible enAmérica. Véase la naturaleza salvaje de este continente, que expele porsí sola el orden monárquico: los desiertos convidan a la independencia.Aquí no hay grandes nobles, grandes eclesiásticos. Nuestras riquezaseran casi nulas, y en el día lo son todavía más. Aunque la Iglesia gozade influencia, está lejos de aspirar al dominio, satisfecha con su conser-vación. Sin estos apoyos, los tiranos no son permanentes; y si algunosambiciosos se empeñan en levantar imperios, Dessalines, Cristóbal,Iturbide les dicen lo que deben esperar. No hay poder más dificil de

242

Page 237: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

mantener que el de un príncipe nuevo. Bonaparte, vencedor de todoslos ejércitos, no logró triunfar de esta regla, más fuerte que losimperios. Y si el gran Napoleón no consiguió mantenerse contra la ligade los republicanos y de los aristócratas quién alcanzará, en América,fundar monarquías, en un suelo incendiado con las brillantes llamas dela libertad, y que devora las tablas que se le ponen para elevar esoscadalsos regios? No, legisladores, no temáis a los pretendientes acoronas; ellas serán para sus cabezas la espada pendiente sobre Dionisio.Los príncipes flamantes que se obcequen hasta construir tronos encimade los escombros de la libertad, erigirán túmulos a sus cenizas quedigan a los siglos futuros cómo prefirieron su fatua ambición a lalibertad y a la gloria.

Los límites constitucionales del presidente de Bolivia son los másestrechos que se conocen: apenas nombrar los empleados de hacienda,paz y guerra, manda el ejército. He aquí sus funciones.

La administración pertenece toda al ministerio, responsable a loscensores, y sujeta a la vigilancia celosa de todos los legisladores,magistrados, jueces y ciudadanos. Los aduanistas y los soldados, únicosagentes de este ministerio, no son a la verdad los más adecuados paracaptarle la aura popular; así su influencia será nula.

El vice-presidente es el magistrado más encadenado que ha servidoel mando: obedece juntamente al legislativo y al ejecutivo de ungobierno republicano. Del primero recibe las leyes; del segundo lasórdenes: y entre estas dos barreras ha de marchar por un caminoangustiado y flanqueado de precipicios. A pesar de tantos inconve-nientes, es preferible gobernar de este modo, más bien que con imperioabsoluto. Las barreras constitucionales ensanchan una conciencia polí-tica y le dan firme esperanza de encontrar el fanal que la guíe entre losescollos que la rodean; ellas sirven de apoyo contra los empujes denuestras pasiones, concertadas con los intereses ajenos.

En el gobierno de los Estados Unidos se ha observado última-mente la práctica de nombrar al primer ministro para suceder alpresidente. Nada es tan conveniente, en una república, como estemétodo: reúne la ventaja de poner a la cabeza de la administración unsujeto experimentado en el manejo del Estado. Cuando entra a ejercersus funciones, va formado y lleva consigo la aureola de la popularidad yuna práctica consumada. Me he apoderado de esta idea y la heestablecido como ley.

El presidente de la república nombra al vice-presidente, para queadministre el estado y le suceda en el mando. Por esta providencia seevitan las elecciones, que producen el grande azote de las repúblicas, laanarquía, que es el lujo de la tiranía y el peligro más inmediato y másterrible de los gobiernos populares. Ved de qué modo sucede como enlos reinos legítimos, la tremenda crisis de las repúblicas.

243

Page 238: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

El vice-presidente debe ser el hombre más puro; la razón es que siel primer magistrado no elige un ciudadano muy recto, debe temerlecomo a enemigo encarnizado y sospechar hasta de sus secretas ambicio-nes. Este vice-presidente ha de esforzarse a merecer por sus buenosservicios el crédito que necesita para desempeñar las más altas fun-ciones, y esperar la gran recompensa nacional: el mando supremo. Elcuerpo legislativo y el pueblo exigirán capacidades y talentos de partede este magistrado, y le pedirán una ciega obediencia a las leyes de lalibertad.

Siendo la herencia la que perpetúa el régimen monárquico y lohace casi general en el mundo, cuánto más útil no es el método queacabo de proponer para la sucesión del vice-presidente? ¿Qué fueran lospríncipes hereditarios elegidos por el mérito, y no por la suerte; y queen lugar de quedarse en la inacción y en la ignorancia, se pusiesen a lacabeza de la administración? Serían sin duda monarcas más esclarecidosy harían la dicha de los pueblos. Sí, legisladores, la monarquía quegobierna la tierra ha obtenido sus títulos de aprobación de la herenciaque la hace estable, y de la unidad que la hace fuerte. Por esto, aunqueun príncipe soberano es un niño mimado, enclaustrado en su palacio,educado por la adulación y conducido por todas las pasiones, estepríncipe, que me atrevería a llamar la ironía del hombre, manda algénero humano, porque conserva el orden de las cosas y la subordina-ción entre los ciudadanos, con un poder firme y una acción constante.Considerad, legisladores, que estas grandes ventajas se reúnen en elpresidente vitalicio y vice-presidente hereditario.

La justicia verdadera

El poder judicial que propongo goza de una independencia absoluta: enninguna parte tiene tanta. El pueblo presenta los candidatos, y ellegislativo escoge los individuos que han de componer los tribunales. Siel poder judicial no emana de este origen, es imposible que conserve entoda su pureza la salvaguardia de los derechos individuales. Estosderechos, legisladores, son los que constituyen la libertad, la igualdad,la seguridad, todas las garantías del orden social. La verdadera constitu-ción liberal está en los códigos civiles y criminales; y la más terribletiranía la ejercen los tribunales por el tremendo instrumento de lasleyes. De ordinario el ejecutivo no es más que el depositario de la cosapública; pero los tribunales son los árbitros de las cosas propias -de lascosas de los individuos. El poder judicial contiene la medida del bien odel mal de los ciudadanos; y si hay libertad, si hay justicia en larepública, son distribuidas por este poder. Poco importa a veces laorganización política, con tal que la civil sea perfecta; que las leyes secumplan religiosamente y se tengan por inexorables como el destino.

244

Page 239: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Era de esperarse, conforme a las ideas del día, que prohibiésemosel uso del tormento, de las confesiones, y que cortásemos la prolonga-ción de los pleitos en el intrincado laberinto de las apelaciones.

El territorio de la república se gobierna por prefectos, goberna-dores, corregidores, jueces de paz y alcaldes. No he podido entrar en elrégimen interior y facultades de estas jurisdicciones; es mi deber, sinembargo, recomendar al Congreso los reglamentos concernientes alservicio de los departamentos y provincias. Tened presente, legisla-dores, que las naciones se componen de ciudades y de aldeas; y que delbienestar de éstas se forma la felicidad del estado. Nunca prestaréisdemasiado vuestra atención al buen régimen de los departamentos.Este punto es de predilección en la ciencia legislativa y no obstante esharto desdeñado.

He dividido la fuerza armada en cuatro partes: ejército de línea,escuadra, milicia nacional y resguardo militar. El destino del ejército esguarnecer la frontera. Dios nos preserve de que vuelva sus armascontra los ciudadanos! Basta la milicia nacional para conservar el ordeninterno. Bolivia no posee grandes costas, y por lo mismo es inútil lamarina; debemos, a pesar de esto, obtener algún día uno y otro. Elresguardo militar es preferible por todos respectos al de guardas; unservicio semejante es más inmoral que superfluo, por lo tanto interesaa la república guarnecer sus fronteras con tropas de línea y tropas deresguardo contra la guerra del fraude.

He pensado que la constitución de Bolivia debiera reformarse porperíodos, según lo exige el movimiento del mundo moral. Los trámitesde la reforma se han señalado en los términos que he juzgado máspropios del caso.

La responsabilidad de los empleados se señala en la constituciónboliviana del modo más efectivo. Sin responsabilidad, sin represión, elestado es un caos. Me atrevo a instar con encarecimiento a loslegisladores, para que dicten leyes fuertes y terminantes sobre estaimportante materia. Todos hablan de responsabilidad, pero ella sequeda en los labios. No hay responsabilidad, legisladores: los magistra-dos, jueces y empleados abusan de sus facultades, porque no secontiene con rigor a los agentes de la administración; siendo entre tantolos ciudadanos víctimas de este abuso. Recomendara yo una ley queprescribiera un método de responsabilidad anual para cada empleado.

Se han establecido ías garantías más perfectas: la libertad civil es laverdadera libertad; las demás son nominales o de poca influencia conrespecto a los ciudadanos. Se ha garantizado la seguridad personal, quees el fin de la sociedad, y de la cual emanan las demás. En cuanto a lapropiedad, ella depende del código civil que vuestra sabiduría debieracomponer luego, para la dicha de vuestros conciudadanos. He conser-vado intacta la ley de las leyes: la igualdad, sin ella perecen todas las

Page 240: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

garantías, todos los derechos. A ella debemos hacer los sacrificios. Asus pies he puesto, cubierta de humillación, a la infame esclavitud.

Legisladores, la infracción de todas las leyes es la esclavitud. La leyque la conservara sería la más sacrílega. Qué derecho se alegaría parasu conservación? Mírese este delito por todos aspectos, y no mepersuado que haya un solo boliviano tan depravado que pretendalegitimar la más insigne violación de la dignidad humana. Un hombreposeído por otro ! Un hombre propiedad! Una imagen de Dios puestaal yugo como el bruto! Dígasenos dónde están los títulos de losusurpadores del hombre? La Guinea nos los ha mandado, pues el África,devastada por el fratricidio, no ofrece más que crímenes. Trasplantadasaquí estas reliquias de aquellas tribus africanas, qué ley o potestad serácapaz de sancionar el dominio sobre estas víctimas? Transmitir, prorro-gar, eternizar este crimen mezclado de suplicios, es el ultraje máschocante. Fundar un principio de posesión sobre la más feroz delincuen-cía no podría concebirse sin el trastorno de los elementos del derecho ysin la perversión más absoluta de las nociones del deber. Nadie puederomper el santo dogma de la igualdad. Y habrá esclavitud donde reinala igualdad? Tales contradicciones formarían más bien el vituperio denuestra razón que el de nuestra justicia: seríamos reputados por másdementes que usurpadores.

Sí no hubiera un Dios protector de la inocencia y de la libertad,prefiriera la suerte de un león generoso, dominando en los desiertos yen los bosques, a la de un cautivo al servicio de un infame tirano que,cómplice de sus crímenes, provocara la cólera del Cielo. Pero no: Diosha destinado el hombre a la libertad, él lo protege para que ejerza laceleste función del albedrío.

Siempre la moral

legisladores! Haré mención de un artículo que, según mí conciencia,he debido omitir. En una constitución política no debe prescribirse unaprofesión religiosa; porque según las mejores doctrinas sobre las leyesfundamentales, éstas son las garantías de los derechos políticos yciviles; y como la religión no toca a ninguno de estos derechos, ella esde naturaleza indefinible en el orden social y pertenece a la moralintelectual. La religión gobierna al hombre en la casa, en el gabinete,dentro de sí mismo: sólo ella tiene derecho de examinar su concienciaíntima. Las leyes, por el contrario, miran la superficie de las cosas: nogobiernan sino fuera de la casa del ciudadano. Aplicando estas consíde-raciones podrá un Estado regir la conciencia de los súbditos, velarsobre el cumplimiento de las leyes religiosas y dar el premio o elcastigo, cuando los tribunales están en el Cielo, y cuando Dios es el

246

Page 241: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

juez? La inquisición solamente sería capaz de reemplazarlos en estemundo. Volverá la inquisición con sus teas incendiarias?

La religión es la ley de la conciencia. Toda ley sobre ella la anulaporque imponiendo la necesidad al deber, quita el mérito a la fe, que esla base de la religión. Los preceptos y los dogmas sagrados son útiles,luminosos y de evidencia metafísica; todos debemos profesarlos, maseste deber es moral, no político.

Por otra parte, cuáles son en este mundo los derechos del hombrehacia la religión? Ellos están en el Cíelo; allá el tribunal recompensa elmérito y hace justicia según el código que ha dictado el Legislador.Siendo todo esto de jurisdicción divina, me parece a primera vistasacrílego y profano mezclar nuestras ordenanzas con los mandamientosdel Señor. Prescribir, pues, la religión, no toca al legislador; porqueéste debe señalar penas a las infracciones de las leyes, para que no seanmeros consejos. No habiendo castigos temporales, ni jueces que losapliquen, la ley deja de ser ley.

El desarrollo moral del hombre es la primera intención del legisla-dor; luego que este desarrollo llega a lograrse el hombre apoya su moralen las verdades reveladas y profesa de hecho la religión, que es tantomás eficaz cuanto que la ha adquirido por investigaciones propias.Además, los padres de familia no pueden descuidar el deber religiosohacía sus hijos. Los pastores espirituales están obligados a enseñar laciencia del Cíelo: el ejemplo de los verdaderos discípulos de Jesús es elmaestro más elocuente de su divina moral; pero la moral no se manda,ni el que manda es maestro, ni la fuerza debe emplearse en dar consejos.Dios y sus ministros son las autoridades de la religión que obra pormedíos y órganos exclusivamente espirituales; pero de ningún modo elcuerpo nacional, que dirige el poder público a objetos puramentetemporales.

Legisladores, al ver ya proclamada la nueva nación boliviana,cuán generosas y sublimes consideraciones no deberán elevar vuestrasalmas! La entrada de un nuevo estado en la sociedad de los demás es unmotivo de júbilo para el género humano, porque se aumenta la granfamilia de los pueblos. Cuál, pues, debe ser el de sus fundadores! y elmío!!! viéndome igualado con el más célebre de los antiguos- el padrede la ciudad eterna! Esta gloría pertenece de derecho a los creadores delas naciones que, siendo sus primeros bienhechores, han debido recibirrecompensas inmortales; mas la mía, además de inmortal tiene elmérito de ser gratuita por no merecida. Dónde está la república, dóndela ciudad que yo he fundado? Vuestra munificencia, dedicándome unanación, se ha adelantado a todos mis servicios; y es infinitamentesuperior a cuantos bienes pueden hacernos los hombres.

Mi desesperación se aumenta al contemplar la inmensidad devuestro premio, porque después de haber agotado los talentos, las

247

Page 242: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

virtudes, el genio mismo del más grande de los héroes, todavía sería yoindigno de merecer el nombre que habéis querido daros, el mío!!!Hablaré yo de gratitud, cuando ella no alcanzará jamás a expresar nidébilmente lo que experimento por vuestra bondad que, como la deDios, pasa todos los límites! Sí, sólo Dios tenía potestad para llamar aesa tierra Bolivia. . . Qué quiere decir Bolivia? Un amor desenfrenadode libertad, que al recibirla vuestro arrobo, no vio nada que fuera iguala su valor. No hallando vuestra embriaguez una demostración ade-cuada a la vehemencia de sus sentimientos, arrancó vuestro nombre, ydio el mío a todas vuestras generaciones. Esto, que es inaudito en lahistoria de los siglos, lo es aún más en la de los desprendimientossublimes. Tal rasgo mostrará a los tiempos que están en el pensamientodel Eterno, lo que anhelabais la posesión de vuestros derechos, que es laposesión de ejercer las virtudes políticas, de adquirir los talentosluminosos y el goce de ser hombres. Este rasgo, repito, probará quevosotros erais acreedores a obtener la gran bendición del Cíelo -lasoberanía del pueble única autoridad legítima de las naciones.

Legisladores, f e lices vosotros que presidís los destinos de unarepública que ha nacido coronada con los laureles de Ayacucho, y quedebe perpetuar su existencia dichosa bajo las leyes que dicte vuestrasabiduría, en la calma que ha dejado la tempestad de la guerra.

Lima, a 25 de mayo de 1826.

Bolívar

84

De la cámara de censores

Ante el Congreso Constituyente de Bolivia, en su proyecto de constitu-ción el Libertador insiste sobre su pensamiento del Poder Moral quepresentó, en 1819, al Congreso de Angostura. Esta vez no propone uncuarto poder sino una tercera cámara del Poder Legislativo.

CAPITULO IV

De la cámara de censores

Artículo 49. Para ser censor se necesita:1° Las cualidades requeridas para senador.2° Tener cuarenta años cumplidos.3° No haber sido jamás condenado ni por faltas leves.

248

Page 243: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Artículo 50. Las atribuciones de la cámara de censores son:1° Velar si el gobierno cumple y hace cumplir la constitución, las

leyes y los tratados públicos.2° Acusar ante el senado las infracciones que el ejecutivo haga de la

constitución, de las leyes y de los tratados públicos.3° Pedir al senado la suspensión del vicepresidente y secretarios de

estado, sí la salud de la república lo demandare con urgencia.Artículo 51. A la cámara de censores pertenece exclusivamente acusar alvicepresidente y secretarios de estado ante el senado, en los casos detraición, concusíón o violación manifiesta de las leyes fundamentalesdel estado.

Artículo 52. Si el senado estimare fundada la acusación hecha por lacámara de censores, tendrá lugar el juicio nacional; y sí por el contrario,el senado estuviere por la negativa, pasará la acusación a la cámara detribunos.

Artículo 53. Estando de acuerdo dos cámaras, debe abrirse el juicionacional.

Artículo 54. Entonces se reunirán las tres cámaras y en vista de los

documentos que presente la cámara de censores, se decidirá a pluralidadabsoluta de votos, si ha o no lugar a la formación de causa alvicepresidente o a los secretarios de estado.

Artículo 55. Luego que en juicio nacional se decrete que ha lugar ala formación de causa al vicepresidente o a los secretarios de estado,quedarán éstos en el acto suspensos de sus funciones, y las cámaraspasarán todos los antecedentes al tribunal supremo de justicia, el cualconocerá exclusivamente de la causa; y el fallo que pronunciare seejecutará sin apelación.

Artículo 56. Luego que las cámaras declaren que ha lugar a laformación de causa al vicepresidente y secretarios de estado, el presi-dente de la república presentará a las cámaras reunidas un candidatopara la vicepresidencia interina, y nombrará interinamente secretariosde estado. Sí el primer candidato fuere rechazado a pluralidad absolutadel cuerpo legislativo, el presidente presentará segundo candidato; y sifuere rechazado, presentará tercer candidato; y sí éste fuere igualmenterechazado, entonces las cámaras elegirán por pluralidad absoluta, en eltérmino de veinticuatro horas, precisamente, uno de los tres candidatospropuestos por el presidente.

Artículo 57. El vicepresidente interino ejercerá desde aquel acto susfunciones hasta el resultado del juicio contra el propietario.

Artículo 58. Por una ley que tendrá origen en la cámara decensores, se determinarán los casos en que el vicepresidente y-secreta-rios de estado son responsables en común o en particular.

Artículo 59. Corresponde, además, a la cámara de censores:1° Escoger, de la tema que remita el senado, los individuos que

249

Page 244: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

deben formar el tribunal supremo de justicia, y los que se han depresentar para los arzobispados, obispados, canongías y prebendasvacantes.

2° Todas las leyes de imprenta, economía, plan de estudios y métodode enseñanza pública.

3° Proteger la libertad de imprenta y nombrar los jueces que debenver en última apelación los juicios de ella.

4° Proponer reglamentos para el fomento de las artes y de las ciencias.5.° Conceder premios y recompensas nacionales a los que las merezcan

por sus servicios a la república.6° Decretar honores públicos a la memoria de los grandes hombres, y

a las virtudes y servicios de los ciudadanos.7° Condenar a oprobio eterno a los usurpadores de la autoridad

pública, a los grandes traidores y a los criminales insignes.Artículo 60. Los censores serán vitalicios.

85

Honrado por la ciencia

Ante el claustro pleno de doctores de la antigua y célebre Universidad deSan Marcos, en Lima, el 2 de junio de 1826.

Señores:

Al pisar los umbrales de este santuario de las ciencias yo me sentísobrecogido de respeto y de temor y al verme ya en el seno mismo delos sabios varones de la célebre Universidad de San Marcos yo me veocomo humillado entre hombres envejecidos en las tareas de profundasy útiles meditaciones, y elevados con tanta justicia al alto rango queocupan en el orbe científico. Desnudo de conocimientos y sin méritoalguno vuestra bondad me condecora gratuitamente con una distinciónque es el término y la recompensa de años enteros de estudio continuo.

Señores: Yo marcaré para siempre este día tan honroso de mi vida.Yo no olvidaré jamás que pertenezco a la sabia Academia de SanMarcos, Yo procuraré acercarme a sus dignos miembros, y cuantosmomentos me pertenezcan después de llenar los deberes a que estoycontraído por ahora, los emplearé en hacer esfuerzos por llegar sí no ala cumbre de las ciencias en que vosotros os halláis, al menos enimitaros.

2.50

Page 245: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

86

“En la marcha de los siglos, podría encontrarse,quizá, una sola nación cubriendo al universo: la federal”

Memorándum para el gran suceso de la unidad americana, el Congreso dePanamá. Desde la compactación latinoamericana, Bolívar mira al mundo.

El Congreso de Panamá reunirá todos los representantes de la Américay un agente diplomático del gobierno de S. M. B. Este Congresoparece destinado a formar la liga más vasta o más extraordinaria o másfuerte que ha aparecido hasta el día sobre la tierra. La Santa Alianza seráinferior en poder a esta confederación, siempre que la Gran Bretañaquiera tomar parte en ella, como miembro constituyente. El génerohumano daría mil bendiciones a esta liga de salud y la América como laGran Bretaña cogerían cosechas de beneficios. Las relaciones de lassociedades políticas recibirían un código de derecho público por reglade conducta universal.

1° El nuevo mundo se constituiría en naciones independientes,ligadas todas por una ley común que fijase sus relaciones externas y lesofreciese el poder conservador en un congreso general y permanente.

2° La existencia de estos nuevos estados obtendría nuevas garan-tías.

3° La España haría la paz por respeto a la Inglaterra y la SantaAlianza prestaría su reconocimiento a estas naciones nacientes.

4° El orden interno se conservaría intacto entre los diferentesestados, y dentro de cada uno de ellos.

5.° Ninguno sería débil con respecto a otro; ninguno sería másfuerte.

6° Un equilibrio perfecto se establecería en este verdaderonuevo orden de cosas.

7.° La fuerza de todos concurriría al auxilío del que sufriese porparte del enemigo externo o de las facciones anárquicas.

8° La diferencia de origen y de colores perdería su influencia ypoder.

9.° La América no temería más a ese tremendo monstruo que hadevorado a la isla de Santo Domingo; ni tampoco temería la preponde-rancia numérica de los primitivos habitadores.

10° La reforma social, en fin, se habría alcanzado bajo los santosauspicios de la libertad y de la paz, pero la Inglaterra debería tomarnecesariamente en sus manos el fiel de esta balanza.

Page 246: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

La Gran Bretaña alcanzaría, sin duda, ventajas considerables poreste arreglo.

1° Su influencia en Europa se aumentaría progresivamente y susdecisiones vendrían a ser las del destino.

2.° La América le serviría como de un opulento dominio decomercio.

3° Sería para ella la América el centro de sus relaciones entre elAsia y la Europa.

4° Los ingleses se considerarían iguales a los ciudadanos deAmérica.

5° Las relaciones mutuas entre los dos países lograrían con eltiempo ser unas mismas.

6° El carácter británico y sus costumbres las tomarían los ameri-canos por los objetos normales de su existencia futura.

7° En la marcha de los siglos, podría encontrarse, quizá, una solanación cubriendo al universo: la federal.

Tales ideas ocupan el ánimo de algunos americanos constituidos enel rango más elevado, ellos esperan con impaciencia la iniciativa de esteproyecto en el Congreso de Panamá, que puede ser la ocasión deconsolidar la unión de los nuevos estados con el Imperio Británico.

87

Quien usurpare derechos y caudales del Estado,“por pequeño que sea su montamiento”,

incurrirá en la pena de muerte y confiscación

En Za oportunidad de su última visita a su tierra natal, Bolívar se ocupóde la administración pública en Venezuela y dictó un importante códigopara la hacienda pública. En lo referente a las sanciones contra losfúncionarios corruptos, ratífica su habitual severidad ejemplar, con estasnormas sancionadas en Caracas el 8 de marzo de 1827.

C A P I T U L O S E G U N D O

De las penas a que están sujetos los empleados de hacienda y defraudadores delas rentas del Estado

Artículo 194. Todo individuo que usurpare los derechos y caudales delEstado, extrayéndolos de sus arcas o del poder de los empleados enrentas por fuerza o clandestinamente, por pequeño que sea su monta-miento, incurrirá en la pena de muerte y confiscación de todos losbienes, si no tuviere hijos, y la del tercio y quinto, si los tuviere,

252

Page 247: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

indemnizando además el montamiento de las costas procesales y lacantidad sustraída.

Artículo 195. El tesorero, administrador principal o subalterno uotro cualquier empleado de hacienda que le fuere averiguado habersustraído de las Cajas o de los intereses de su manejo cualquier sumapor pequeña que sea su cuenta, y con sólo el dicho de tres testigosveraces y presunciones o indicios que lo corroboren, incurrirá en lamisma pena de muerte.

Artículo 196. El empleado en rentas que por tolerancia o culpabledisimulo permitiere se usurpen los intereses del Estado, si se probarehaber tenido parte en la usurpación en la forma que queda prevenida enel artículo anterior, incurrirá en la pena de muerte.

Artículo 197. Si el empleado no hubiere participado de la usurpa-ción, sino que toda haya cedido en favor del que la cometió, incurriráen la pena de diez años de presidio, destitución del empleo y privaciónperpetua de ejercer otro alguno en rentas, publicándose así en losperiódicos, sin perjuicio de indemnizar al tesoro público de la sumadistraída; si el usurpador no tuviere bienes suficientes con que hacerlo,serán responsables también los bienes del fiador en cuanto alcance lacantidad de su fianza.

Artículo 198. El tesorero administrador o empleado en rentas quepor su omisión, negligencia o ineptitud, ocasionare la usurpación delos derechos del Estado, de cualquier cuantía que fueren, sin perjuiciode la pena que se impondrá al usurpador, sufrirá el empleado la dedestitución de su destino, incapacidad de poder obtener otro perpetua-mente y presidio conforme al decreto de 23 de noviembre de 1826sobre responsabilidad de los empleados, publicándose todo en losperiódicos, e indemnizando al Estado con los bienes propios o los de sufiador en cuanto alcance la fianza del daño o perjuicio que hubieresentido.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 201. El tesorero o administrador que no rindiere sus cuentas enlos tres primeros meses del año inmediato al tribunal de la contaduríade cuentas, o contaduría principal de tabacos, incurrirá en la pena dedestitución de empleo sin más trámites ni formalidades que la simplecomprobacion de no haberlo ejecutado.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 207. El jefe de oficina que requerido dos veces por el inten-dente sobre falta de asistencia a ella desde las ocho de la mañana hastalas dos de la tarde, no se corrigiere, incurrirá en la multa de la mitaddel sueldo que le correspondan en un mes, y se reagravará por sureincidencia hasta formarle causa y aplicarle la pena de negligente.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 212. Todo empleado en rentas, o civil o militar, está obligado

253

Page 248: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

a prestar toda ayuda y cooperación posible para la averiguación yaprehensión de cualquier fraude que se intente en perjuicio del erario.La omisión o negligencia queda sujeta a las penas que se establecen eneste decreto y a las que quedaron sancionadas en el otro de 23 denoviembre de 1826 sobre responsabilidad de los empleados.

Artículo 213. Todos los ciudadanos habitantes en los cuatro depar-tamentos que comprende este decreto, así empleados en cualquier ramocomo los que no lo estén, deben denunciar, acusar o prevenir el fraude,usurpación o defecto que adviertan en el manejo y recaudacion de lasrentas del Estado, bien dirigiéndose a los intendentes y bien a cuales-quiera otro de los empleados a quienes por este decreto se concedeautoridad y jurisdicción en los negocios de hacienda sin que puedan serrechazados.

Artículo 214. Del mismo modo podrán hacerlo entender pormedio de la imprenta, detallando en cuanto les sea posible el fraude omalversación de que tuvieren conocimiento para proceder a su averigua-ción.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..<..............Artículo 235. Cuando quiera que el tiempo que en cada oficina debadurar el trabajo continuo no baste para que los negocios estén siemprecon el día, se prolongará cuanto sea necesario. Porque no ha de creerseque ningún empleado cumple con su deber si no se halla siempre con eldía su negociado; y si él además no se esmera en propender de cuantosmodos estén a su alcance a que las rentas se perfeccionen y se hagancada día más productivas sin aumentar las cargas de los contribuyentes.

88

Una vasta e integral concepción universitaria

De los nuevos estatutos para la Universidad de Caracas, preparados conla colaboración del rector José María Vargas, con asesoría del secretariogeneral del gobierno José Rafael Revenga. Decreto del 24 de junio de1827. Es el segundo texto jurídico -en longitud- de los promulgadospor Bolívar.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente de Colombia etc. etc. etc.

Importando a la más cumplida ejecución de la ley de 18 de marzo de1826, sobre la organización y arreglo de la instrucción pública, adaptarmejor aquella disposición al clima, usos y costumbres de estos departa-mentos: dar a esta Universidad Central y a los estudios en ellas la planta

254

Page 249: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

que más conviene al presente, y dotarlos más adecuadamente desti-nando a su sostén varias fincas y rentas que o tienen por objeto otrasobras piadosas de menor urgencia o se arruinarían totalmente conti-nuando sobre el pie en que se hallan; en uso de las facultades extraordi-narias que ejerzo, y oída la junta general y claustro pleno de la mismauniversidad, y el sentir de varios hombres prudentes y amantes de laeducación, decreto:

CAPITULO 1

De las juntas generales o claustro pleno

Artículo 1° Se tendrán en la universidad juntas generales que secompondrán del rector que las preside, del vicerrector, doctores ymaestros. Harán periódicamente las elecciones que exprese esta consti-tución en los artículos correspondientes. Deben reunirse cada mes paratratar de los negocios generales del establecimiento no atribuidos a lasjuntas particulares y deliberar sobre los acuerdos de éstas; y además enlos días que citare el rector. La junta general elegirá el día 20 dediciembre los seis catedráticos que formen la junta de inspección ogobierno; y en los años siguientes los renovará por mitad. La suertedecidirá los que deban quedar en la primera vez. En caso de vacante lajunta general la llenará en la sesión más inmediata que celebre.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 12. Las juntas se celebraran con el orden y decoro propios deun cuerpo que debe formar los hábitos morales, políticos y literariosde la juventud confiada a su dirección. El rector hará observar en todocaso el orden con el toque de una campanilla.

Artículo 13. La junta general no podrá revocar, alterar, ni dispen-sar ley alguna ni resolución del gobierno: sólo tiene derecho parapromover y celar su cumplimiento, y para consultar y suplicar pormedio de la dirección departamental lo que estime conveniente para lamejora o reforma de la universidad.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 18. Tampoco podrá la junta general acordar que se hagan delos fondos de la universidad gastos extraordinarios o diferentes de losque se prescriben por esta constitución.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

CAPITULO IV

Del rector

Artículo 34. La elección de rector se hará el 20 de diciembre cada tresaños en junta general entre los doctores de la universidad sean o no

Page 250: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

catedráticos, y estén éstos en ejercicio o ya jubilados. Para la elección derector entre los catedráticos bastará la pluralidad absoluta; para que seaelegido entre los doctores serán necesarios los dos tercios de los votos.Ninguno podrá excusarse a menos que sea catedrático jubilado. Estaelección será participada al electo en el mismo día por dos miembrosdel cuerpo.

Artículo 35. Reunida toda la universidad con sus insignias, ypresente el cuerpo escolar, irán cuatro miembros, dos doctores y dosmaestros, los menos antiguos, a buscarle a su casa y le acompañaránhasta la capilla, en donde le recibirán también a la entrada los doscatedráticos menos antiguos con el secretario, y le conducirán todoshasta la mesa rectoral, ocupando en seguida sus asientos respectivos; elelecto arrodillado prestará juramento sobre los Santos Evangelios en laforma siguiente: “Yo N. juro y prometo observar y cumplir fielmentela Constitución de la República y los reglamentos y leyes académicos, ydesempeñar con toda la exactitud posible los deberes del empleo derector para que he sido nombrado”. Concluido este acto y colocado ensu silla por el rector que acaba, dará posesión al Vicerrector.

Artículo 36. Seguidamente prestarán el juramento de obediencia alrector y vicerrector, los doctores, maestros y todos los cursantes. Enesta función se omitirá todo gasto y por un oficio el rector saliente loparticipará a la dirección departamental, al intendente y al poderejecutivo de la república.

Artículo 37. El rector de la universidad permanecerá tres años ensu destino y cuidará de la observancia de las leyes académicas, haciéndo-las cumplir y ejecutar puntualmente. El vicerrector, los catedráticos,oficiales y cursantes están subordinados al rector. Su celo no debe dejaralguna excusa al descuido y negligencia de los que se hallan bajo suautoridad. Tendrá para con los catedráticos los sentimientos de conside-ración que exigen sus empleos. Si no correspondieren a este trata-miento honroso, acordará con la junta de inspección y gobierno losmedios de reducirlos a su deber mas si esto no bastare, la junta generalresolverá lo que crea justo, dando cuenta a la dirección departamentalpara la providencia conveniente, hasta la separación y privación deempleo con arreglo a la ley de estudios.

Artículo 38. Además de las visitas que el rector hará a las clasescuando se lo sugiera su celo, elegirá en cada bimestre dos estudiantes decada clase, para que informen sobre la conducta del catedrático,tomándoles o no juramento, según lo juzgue conveniente.

256

Page 251: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

Del vicerrector

CAPITULO V

Artículo 42. Habrá un vicerrector que supla cualquiera falta del rector;tendrá las mismas calidades y será elegido por la junta general cada tresaños, el mismo día que el rector, quien dándole posesión con lasmismas formalidades que se usaron con él, lo colocará en el lugar que ledesigna el artículo 221 de las precedencias.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

CAPITULO VI

De las matrículas

Artículo 50. Atendiendo a que en los meses de noviembre y diciembrereina en esta capital la estación más hermosa y fresca de todo el año, yque sería sensible pasarla en vacaciones, cuando por otra parte estambién la más a propósito para las lecciones de anatomía y cirugía;comenzará desde ahora en adelante el año académico en 1 ° de setiem-bre, y se abrirá la matrícula el 5 de agosto anterior, cada año, por unedicto del rector fijado a las puertas de la universidad. Los que quieranmatricularse en cualquiera clase deben hacerlo desde aquel día hasta elúltimo del mismo agosto ante el secretario de la universidad, quienespecificará en el libro que lleve llamado de Matrículas, el nombre delcursante, su edad, patria, padres, tutores o personas a quienes estéinmediatamente encomendado en esta ciudad, la fecha en que sematricule y la clase en que va a cursar; al efecto, cada estudianteconcurrirá a matricularse acompañado de su padre o encargado de sueducación, para tomar razón de la casa de éste y establecer las relacionesnecesarias entre los maestros y padres de los alumnos. El secretariopasará una noticia de todo al vicerrector para que lo anote en su librosecreto, y la extenderá también en la certificación de matrícula que debedar a cada uno para manifestarla al catedrático, y que éste haga laanotación correspondiente en su libro.

De los cursantes

CAPITULO VII

Artículo 54. Cursantes son los que habiéndose matriculado en la univer-sidad se sujeten a ganar cursos literarios bajo la enseñanza de un

257

Page 252: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

catedrático cualquiera que concurra a la clase; sin estos requisitos, sereputará por mero asistente bajo cuyo concepto no se impedirá aninguno oír las lecciones de un catedrático.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 58. Los discípulos deben ser muy exactos en el cumplimientode sus obligaciones.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 60. Los cursantes de la universidad no podrán ser alistados encuerpos de tropas de ninguna especie, ni aun de la que se titulannacionales o cívicas, ni ocupados en cosa alguna que los distraiga de lacarrera literaria a que se consagran.

CAPITULO VIII

De las cátedras de la universidad y tiempo de su lectura

Artículo 61. Se leerán en esta universidad dos cátedras de gramáticalatina, una de literatura, una de ideología y metafísica, gramáticageneral, lógica, física general y particular; otra de matemática, geo-grafía y cronología; una de ética y derecho natural; cuatro de medicina,cuatro de jurisprudencia civil y cuatro de ciencias exactas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 85. Anatomía general y particular: un profesor enseñará la ana-tomía general y descriptiva en el orden más conveniente. Las leccionesde anatomía deberán ser siempre ilustradas por la vista de los órganos ode las partes del cuerpo humano de que se haga la descripción; ellasserán preparadas al principio por un demostrador anatómico quedeberá haber para que auxilie al catedrático, asignándosele algunagratificación; podrán ser también de utilidad las piezas de cera que hayen algunos gabinetes de las escuelas de medicina, y aun las preservadasen espíritu. Pero los verdaderos anatómicos se formarán haciendodisecciones del cuerpo humano y de animales para perfeccionarse en laanatomía comparada. Los jóvenes cursantes se ocuparán pues, en lasdisecciones, pasados los primeros cinco meses de su curso de anatomía,dedicando todos los días el tiempo necesario para ellas en el teatroanatómico, bajo la inspección del catedrático; el demostrador lesenseñará a dar los cortes para descubrir los órganos; conservará en lasala el orden y la decencia, cuidando de que los cadáveres no sedesperdicien y que se entierren cuando ya no sirvan.

Artículo 86. Fisiología e higiene: el catedrático de fisiología enseñaráa los cursantes las funciones de los órganos del cuerpo humano en elestado de salud. Luego que sus alumnos hayan adquirido en las demáscátedras de la escuela de medicina los conocimientos preliminares, sededicará a dar lecciones de higiene. El mismo catedrático estará encar-

258

Page 253: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

gado de enseñar higiene pública, manifestando a los cursantes cuálesson las reglas que debe seguir la administración civil de los pueblos paraprecaverse de las enfermedades epidémicas y contagiosas en las ciu-dades, campamentos y navegaciones; como también para impedir lapropagación del mal cuando una vez se ha declarado o para disminuir alo menos su actividad.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 95. Además de la asistencia de los matriculados en las clases demedicina a los cursos prevenidos en los artículos anteriores, concurri-rán el primer año a la cátedra de francés y a la academia de bellas letrascuando se establezcan. En el segundo, a la cátedra de inglés y a laacademia de ciencias físicas y médicas que frecuentarán en los cuatroaños siguientes, cuando igualmente se hallen establecidas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 100. En el primer año del segundo bienio se explicará laconstitución de la república y el derecho político y ciencia administra-tiva; en el segundo el derecho internacional o de gentes. Concluidosestos cursos en jurisprudencia canónica y civil, y comprobados delmodo que prescribe esta constitución, podrán recibir los estudiantes elgrado de bachiller en cualquiera de las dos facultades o en ambas.Continuarán un tercer bienio y en él se leerá por la mañana en el primeraño, por un catedrático, principios de legislación universal y de legisla-ción civil y penal, y en el segundo economía política. En el mismotiempo se leerá por otro catedrático por la tarde, la práctica civil ycriminal de juicios en el primer año, y en el segundo ganarán el cursode medicina legal, en las épocas que deben proporcionarse en laenseñanza de esta cátedra.

Artículo 101. En el tercer bienio los que aspiren a ser abogados,deberán instruirse en la elocuencia del foro y concurrir a las clases deidiomas que se hallen establecidas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 108. Es permitido a cualquiera persona concurrir a las clases deteología y proponer las dificultades y objeciones que le ocurran, enidioma latino o vulgar; y es una obligación del catedrático resolverlas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Artículo 117. Cada catedrático propondrá para defender las mate-rias que haya enseñado hasta el día en que le toque su certamen,eligiendo para sostenerlo a mañana y tarde, dos estudiantes, ninguno delos cuales podrá excusarse.

Artículo 118. Se escogerán para los certámenes las materias máspropias para dar a conocer los progresos que hacen los jóvenes y elestado que tienen los estudios en la universidad.

Artículo 119. En ningún certamen público se defenderá proposi-ción alguna que sea contraria a las leyes fundamentales, libertades de la

259

Page 254: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

república, a la fe católica y a la moral y decencia pública. Las proposi-ciones se escribirán en castellano y en latín, para que pueda argüirse encualquiera de los dos idiomas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ....Artículo 229. De cada clase se escogerán los tres estudiantes mássobresalientes a juicio del rector y examinadores, y hecha la gradua-ción de su mérito por los conocimientos que hayan manifestado, sereservarán estas actas en un pliego cerrado y sellado por el rector, parapublicarlas con la mayor solemnidad y del modo más imponente el día8 de diciembre, en que se celebra la festividad de la InmaculadaConcepción, conservándose así la costumbre de esta ilustre universi-dad y la grata memoria’ del señor don Juan Agustín de la Torre,fundador de los premios en este cuerpo. Con este objeto podrá tomar elrector anualmente de las cajas, la cantidad que la junta gubernativajuzgue conveniente para invertirla en obras elementales, o medallas conemblemas o inscripciones alusivas, que distribuirá a los que hayanmerecido premio por su aplicación, con calidad de que puedan usar lasmedallas en los actos académicos. El universitario que sea nombradopor el rector pronunciará la oración acostumbrada en elogio de lasciencias.

Artículo 130. Esta distribución que resultará de los exámenesgenerales no impedirá que algunos amantes de la instrucción públicaofrezcan otros premios para el mismo día 8 de diciembre, bien seasobre las materias que se hayan enseñado hasta entonces en las clases, obien por otras extraordinarias, que no sea posible leer por ahora, y quealgunos estudiantes aplicados puedan estudiar sin perjuicio de loscursos que hayan de ganar en su facultad. Tampoco habrá inconve-niente en que se ofrezcan otros premios y se hagan exámenes públicosen otros períodos, como las festividades de los patronos de la universi-dad.

Artículo 131. Se conservará como útil a la moral y conducente a losprogresos de la instrucción de los escolares, el establecimiento que tuvoprincipio en 7 de marzo de 1825 y fue aprobado posteriormente por elclaustro pleno, de las medallas de costumbres y aplicación destinadas acada clase de latinidad.

Artículo 132. Las vacaciones generales de cada año serán desde eldía en que se concluyan los exámenes de cada facultad en el mes de juliohasta el 1° de setiembre próximo; y la de los gramáticos desde el 12 deagosto hasta esta última fecha; y fuera de ellas no tendrán otras loscursantes que las de los días de fiesta entera, los feriados de pascua, todala semana santa, y el jueves en aquellas semanas en que no haya día deambos preceptos.

260

Page 255: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

CAPITULO XI

De los grados

Artículo 133. La universidad, por medio del rector, confiere dife-rentes grados académicos o condecoraciones a los que, habiendoganado los cursos necesarios, dan una prueba pública y cierta de lainstrucción y aptitud que pide cada grado. Ellos habilitan para dife-rentes efectos civiles y eclesiásticos y continuarán confiriéndose losgrados de bachiller, licenciado y doctor en jurisprudencia canónica ycivil, en medicina y teología, y los de bachiller, licenciado y maestro enfilosofía.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

CAPITULO XVI

De los catedráticos

Artículo 289. Desde el día de la posesión dada al provisto para unacátedra, principian sus obligaciones y sus derechos. Los catedráticosdeben concurrir a sus clases con mucha exactitud en todos los días yhoras prescritas para la enseñanza. Cuidarán del aprovechamiento,asistencia y buena conducta de sus discípulos, dándoles ejemplo con subuen porte y con su puntual concurrencia a todos los actos, juntas yejercicios de la universidad a que deban asistir.. . . . . . . .....................................................Artículo 192. Los catedráticos deben ser el modelo de los jóvenesconfiados a su enseñanza: la decencia, el decoro, la urbanidad, la culturaen el idioma, todo debe relucir en los maestros, a fin de que con estaslecciones prácticas, formen buenos discípulos.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 196. A los 20 años de enseñanza en una misma cátedra sininterrupción que cause vacante, serán jubilados los catedráticos conrenta entera, debiéndose comenzar a contar dicho término desde el díaen que cada uno haya tomado posesión de la cátedra, bien sea enpropiedad o por sustitución, con tal que haya sido dada por oposición.Todas las cátedras de latinidad se reputarán como una misma.

Artículo 197. El que haya servido cátedras diferentes por 20 años,bien sea en propiedad o por sustitución, podrá retirarse con la mitad dela renta y el título de catedrático benemérito. Si las hubiere servido 25,se retirará con las dos terceras partes; y si 30 con toda la renta,expidiéndole el título de jubilado en la cátedra que haya regentado más

261

Page 256: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

tiempo; mas si ésta fuere igual en dos cátedras, el mismo catedráticoelegirá la que sea de su agrado.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..........................Artículo 299. El que componga una obra elemental aprobada por launiversidad y por la dirección departamental ganará para el efecto de sujubilación el tiempo que la junta gradúe según el mérito de la obra, conadvertencia de que no podrá exceder de 8 años; y el que en los mismostérminos haga una traducción e impresión de una obra clásica para usode la universidad, siendo igualmente aprobada, ganará sólo 2 años. Unmismo catedrático podrá obtener estos dos premios por una sola vez.El catedrático que después de 10 años de enseñar perdiere su salud yquedare inhábil será retirado con un tercio de su renta.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

CAPITULO XXII

De las fiestas

Artículo 244. Se continuarán celebrando las fiestas de la Patrona SantaRosa de Lima, de la Concepción de Nuestra Señora y del angélicodoctor Santo Tomás, que ha celebrado esta universidad desde suerección, pagándolas de sus fondos y de los del seminario como hastaahora; y si alguna otra quisiere hacer la junta general, será a expensas desus miembros. En todas estas fiestas deberán oficiar y predicar losdoctores y maestros de la universidad nombrados por el rector.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..........................Artículo 249. El día 10 de noviembre de cada año se celebraránexequias por los universitarios difuntos conforme a la fundación de unparticular, que ha aceptado el claustro pleno. Serán preferidos paracantar la misa y para hacer la oración fúnebre, los catedráticos, y por sudefecto nombrará el rector.

CAPITULO XXIV

De las rentas y gastos de la universidad y de su deuda activa y pasiva

Artículo 250. Son rentas de la universidad:1° La cantidad de 200 pesos anuales que ha contribuido la tesorería de

esta ciudad desde el año de 1592 a las dos cátedras de elocuencia ymenores a razón de 100 pesos cada una y que continúan conformeal número 1° artículo 72 de la ley de estudios de 10 de marzo de1826.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .7° Los capitales dejados por bienhechores a beneficio de alguna

cátedra y que todavía no estén debidamente reconocidos y poseí-dos por la universidad.

262

Page 257: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

8° Las rentas de la obra pía de Chuao después de cumplir con susgravámenes de limosnas a pobres, a cera u otros objetos del culto.

9° Las obras pías de Cata con sus agregados de la hacienda deMiranda y demás que posteriormente a su fundación la acrecieron,deduciendo sus gravámenes, como son, principales reconocidos enella, extipendio del cura de Cata y las contribuciones anuales afiestas, altares y limosnas de pobres, y la deuda del mayordomo yadministradores que haya tenido y esté legítimamente probadaantes de su arrendamiento.

10. La de la hacienda de caña dulce con trapiche nombrada de laConcepción en la jurisdicción de Tácata que fue del canario JoséAntonio Sánchez Castro adjudicada a la universidad por decreto de16 de mayo de 1827. El cobro y distribución de estas rentas y de lasde los dos números anteriores, así como el cuidado de las fincas yla intervención en su administración o arrendamiento tocan aladministrador de la universidad bajo las determinaciones de suclaustro pleno.

ll. Las rentas anuales sobrantes de los resguardos de los indígenas,deducida la dotación de las escuelas de primeras letras que deberánestablecerse en las mismas poblaciones.

Artículo 252. Los egresos de la universidad son:1.° Los ordinarios para abonar los sueldos de 15 catedráticos que a

razón de 400 pesos anuales importan 6 800 pesos. Los catedráticoscuyas rentas por consistir en capellanías tengan algún gravamenrecibirán la indemnización de éste, de modo que perciban com-pleto su sueldo de 400 pesos, 100 para gastos anuales de secretaría,25 gratificación del maestro de ceremonias, 10 pesos mensualesgratificación del preceptor de anatomía en los meses en que ayudea las demostraciones de esta ciencia, 600 pesos para los dos bedelesa razón de 300 anuales cada uno, 51 pesos cuatro reales y mediopara las fiestas de los patronos, 75 pesos cuatro reales para elaniversario de los universitarios difuntos; en fin, los gastos deadministración según el artículo 266.

2° La cantidad de 2 000 pesos que contribuye la universidad cuandohaya entrado en el goce de sus rentas al colegio de niñas educandaspara su auxilio.

3° Los gastos extraordinarios grandes que acuerde el claustro plenocon aprobación de la subdirección y los pequeños que ordene elrector con acuerdo de la junta gubernativa.

4° Los eventuales de aniversarios de los doctores y maestros quefallezcan y los de cantidades destinadas a premios anuales.

263

Page 258: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

CAPITULO XXVII

De las academias

Artículo 276. La universidad irá planteando sucesivamente las demáscátedras y establecimientos que le permitan sus fondos. Procuraráformar a la mayor brevedad posible la academia de emulación, divididaen las cuatro secciones de literatura y bellas letras, ciencias naturales,ciencias políticas y morales y ciencias eclesiásticas. Cada una de ellas enlos dos meses primeros, después de haberse instalado, hará un regla-mento para su organización interior y para el mejor fomento de susestudios, y con informe del rector lo aprobará o reformará; masrespecto a que el bien general exige la más pronta organización de lamedicina.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 280. Serán funciones de la facultad de medicina, de cirugía y defarmacia en lo relativo a la instrucción pública:1° Promover el estudio teórico y práctico de las ciencias médicas por

cuantos medios estén a su alcance y le sugiera su celo.2° Llevar a la perfección el establecimiento de la academia de emula-

ción en la parte relativa a las ciencias médicas, y hacer que losjóvenes cursantes reciban en las sesiones académicas particularestoda la instrucción necesaria, especialmente para la práctica.

3° Cuidar que se forme e imprima a la mayor brevedad un cursocompleto de los ramos de las ciencias médicas que deben enseñarseen esta escuela de medicina acomodado al clima, constitución yenfermedades de los habitantes de estos países, el que a más decontener las mejores doctrinas de los autores más selectos y losúltimos descubrimientos, tenga la brevedad necesaria para lasescuelas.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 287. Estará a cargo de la facultad de medicina:1 ° Promover en este distrito por medio de representaciones dirigidas

a las justicias y demás autoridades, el cumplimiento de las leyesque tratan sobre médicos, cirujanos, farmacéuticos, boticas y ventade drogas:

2° Proponer a las juntas de sanidad las medidas o reglamentos sanita-rios más convenientes según el clima y circunstancias del país paraconservar la salud pública o para restablecerla siempre que sehubiere alterado.

3° Formar y publicar los métodos curativos que mejor convengancuando haya enfermedades epidémicas o contagiosas.

4° Publicar iguales métodos para precaver a los pueblos de las

264

Page 259: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

enfermedades más comunes o propias de estos países, comoalgunas cutáneas, los cotos, la elefancia y demás que haya en losdiferentes climas, y para curar a los que adolezcan de ellas.

Artículo 288. La facultad médica procurará formar una colección detodos los artículos de la materia médica pertenecientes a los tres reinos,animal, vegetal y mineral,

Artículo 289. El secretario de estado y general de mi despachoqueda encargado de comunicar este decreto a quienes corresponda.

Cuartel general libertador en Caracas, a 24 de junio de 1827, 17°

Por el Libertador presidente,el secretario de Estado y general de S. E.

J. R. Revenga

Simón Bolívar

89

Organizando también la UniversidadCentral de Quito

El espíritu reformista de Bolívar llega igualmente a la Universidad delEcuador. Entre otras novedades dispone que, junto a los idiomas impor-tantes de Europa, se estudie la lengua quechua, lengua de los indígenasandinos. Decreto dictado el 6 de noviembre de 1827 en Bogotá.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente, etc., etc., etc.

Debiendo organizarse la Universidad Central de Quito decretando lascátedras que ha de haber en ella, y las asignaciones que deben gozar losempleados en la universidad, oído el informe de la subdirección deestudios de Quito y de la dirección general, he venido en decretar loque sigue:

Artículo 2° El rector de la Universidad de Quito disfrutará el sueldoanual de 500 pesos, el vicerrector de 400, el secretario 300, 200 pesos elprimer bedel de la universidad y 150 el segundo.

Artículo 2° De las rentas de la Universidad de Quito se pagarántambién 250 pesos que se asignan al secretario de la subdirección deestudios, con calidad de sacar de dicha suma los gastos de escritorio dela subdirección.

Artículo 3° En la clase de literatura y bellas letras, habrá lassiguientes cátedras: una de lengua francesa e inglesa; dos de gramáticalatina combinada con la castellana; una de lengua quechua, y una de

265

Page 260: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

literatura, bellas letras y bibliografía, de la que se encargará el biblioteca-rio de la universidad, quien deberá pagar un asistente. Las tres primerascátedras tendrán de dotación 300 pesos cada una; la de la lenguaquechua estará a cargo de uno de los religiosos dominicos de laprovincia de Quito, con arreglo a la ley; y el bibliotecario en clase de taly como catedrático gozará la dotación de 500 pesos anuales.

Artículo 4° En la clase de filosofía y ciencias naturales habrá lassiguientes cátedras: una de matemáticas, a la que estará anexa laenseñanza de los principios de geografía y cronología; una de físicageneral, particular y experimental; ‘una de ideología o metafísica,gramática general y lógica, moral y derecho natural; una de historianatural en sus tres reinos, y de química. Cada una de estas cátedrastendrá la dotación anual de 300 pesos.

Artículo 5° En la clase de medicina habrá las cátedras que siguen:una de anatomía general, particular y patológica, la que tendrá undemostrador anatómico; una de fisiología e higiene, nosología y pato-logía; una de terapéutica y farmacia; una en fin, de clínica médica yquirúrgica y de medicina legal. Cada uno de estos catedráticos disfru-tará 300 pesos anuales y 200 el demostrador.

Artículo 6.° En la clase de jurisprudencia habrá una cátedra deprincipios de legislación universal, de legislación civil y penal; una dederecho público político, derecho internacional, constitución y cienciaadministrativa; otra de historia e instituciones de derecho civil romanoy derecho patrio; otra de economía política; otra, en fin, de derechopúblico eclesiástico e instituciones canónicas, disciplina, historia ecle-siástica y suma de concilios. Cada una de estas cátedras tendrá laasignación de 300 pesos anuales.

Artículo 7° En la clase de teología habrá una cátedra de fundamen-tos de la religión, lugares teológicos y estudios apologéticos de lareligión; una de sagrada escritura y otra de instituciones de teologíadogmática y moral. Las dos primeras cátedras tendrán la dotación de300 pesos anuales, y la tercera estará a cargo del maestre-escuela de lacatedral de Quito con arreglo a la ley de la enseñanza pública.

Artículo 8° Las anteriores asignaciones se satisfarán de las rentasque ha disfrutado hasta ahora la Universidad de Quito, de las que le haasignado la ley de 1826 y de las demás que conforme a ella se hagan porel gobierno. Dichas asignaciones se aumentarán luego que crezcan lasrentas de la universidad y la subdirección de estudios informaráoportunamente cuándo podrá verificarse el aumento y en qué propor-ción.

Artículo 9° Debiendo abrir sus cursos los catedráticos el 2 deenero próximo, se autoriza al intendente del Ecuador para que apropuesta de la subdirección, la que oirá los informes de la junta degobierno de la universidad, nombre interinamente los catedráticos de

266

Page 261: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

las diferentes clases de la universidad, los que regentarán las cátedraspor el tiempo que se juzgue necesario ajuicio de la junta de gobierno yde la subdirección. Luego que se considere que habrá opositores a lascátedras y que los estudios no sufrirán perjuicio, se fijaran edictos y seproveerán por oposición conforme a la ley y reglamento de estudios.

Artículo 20. Se autoriza al intendente del Ecuador para que, apropuesta de la subdirección de estudios, dicte conforme a la ley yreglamentos orgánicos de estudios, cuantas providencias estime conve-nientes para el completo establecimiento de la universidad, las quellevará a efecto sin previa consulta del poder ejecutivo, a quien despuésdará cuenta de las que hubiere dictado.

El secretario de estado del despacho del interior queda encargadode la ejecución de este decreto.

Dado en el Palacio de Gobierno, en Bogotá, a 6 de noviembre de1827, 17°

Simón BolívarEl secretario de Estado del Despacho del Interior,José Manuel Restrepo

90

El cuadro de las aflicciones de Colombia

Un resumen desgarrador de la honda crisis colombiana. Triste balance deuna obra magna no cumplida. Importante mensaje a la Convención deOcaña, desde Bogotá, el 29 de febrero de 1828.

A LOS REPRESENTANTES DEL PUEBLO

E N L A C O N V E N C I Ó N N A C I O N A L

Conciudadanos:

Os congratulo por la honra que habéis merecido de la nación, confián-doos sus altos destinos. Al representar la legitimidad de Colombia oshalláis revestidos de los poderes más sublimes. También participo yode la mayor ventura devolviéndoos la autoridad que se había deposi-tado en mis cansadas manos: tocan a los queridos del pueblo lasatribuciones soberanas, los derechos supremos, como delegados delomnipotente augusto de quien soy súbdito y soldado. En qué potestadmás eminente depondría yo el bastón de presidente y la espada degeneral? Disponed libremente de estos símbolos de mando y de gloriaen beneficio de la causa popular, sin atender a consideraciones perso-nales, que os impidieran una reforma perfecta.

267

Page 262: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Constituido por mis deberes a manifestaros la situación de larepública, tendré el dolor de ofreceros el cuadro de sus aflicciones. Nojuzguéis, que los colores que empleo los ha encendido la exageración,ni que han salido de la tenebrosa mansión de los misterios: yo los hecopiado a la luz del escándalo; su conjunto puede pareceros ideal, perosi lo fuera, Colombia os llamara?

Los quebrantos de la patria han empezado desde luego a reme-diarse, ya que congregados los escogidos se disponen a examinarlos.Vuestra empresa, en verdad, es tan difícil como gloriosa; y aunque algose han disminuido los obstáculos con la fortuna de poderos presentar aColombia unida y dócil a vuestra voz; de deciros, que no debemos estainapreciable ventaja sino a las esperanzas libradas en la convención,esperanzas que os muestran la confianza nacional y el peso que osabruma.

Os bastará recorrer nuestra historia para descubrir las causas denuestra decadencia. Colombia, que supo darse vida, se halla exánime.Identificada antes con la causa pública, no estima ahora su deber comola única regla de salud. Los mismos que durante la lucha se contentaroncon su pobreza, y que no adeudaban al extranjero tres millones, paramantener la paz han tenido que cargarse de deudas vergonzosas por susconsecuencias. Colombia, que al frente de las huestes opresoras, respi-raba sólo pundonor y virtud, padece como insensible el descréditonacional. Colombia, que no pensaba sino en sacrificios dolorosos, enservicios eminentes, se ocupa de sus derechos, y no de sus deberes.Habría perecido la nación si un resto de espíritu público no la hubieseimpelido a clamar el remedio y detenido al borde del sepulcro. Sola-mente un peligro horroroso nos haría intentar la alteración de las leyesfundamentales; sólo este peligro se habría hecho superior a la pasiónque profesábamos a instituciones propias y legítimas, cuyas bases noshabían procurado la deseada emancipación.

Nada añadiría a este funesto bosquejo, si el puesto que ocupo nome forzara a dar cuenta a la nación de los inconvenientes prácticos desus leyes. Sé que no puedo hacerlo sin exponerme a siniestras interpreta-ciones, y que al través de mis palabras se leerán pensamientos ambicio-sos: mas, yo que no he rehusado a Colombia consagrarle mi vida y mireputación, me conceptúo obligado a este último sacrificio.

Debo decirlo: nuestro gobierno está esencialmente mal consti-tuido. Sin considerar que acabamos de lanzar la coyunda, nos dejamosdeslumbrar por aspiraciones superiores a las que la historia de todas lasedades manifiesta incompatibles con la humana naturaleza. Otras veceshemos equivocado los medios y atribuido el mal suceso a no habernosacercado bastante a la engañosa guía que nos extraviaba, desoyendo alos que pretendían seguir el orden de las cosas, y comparar entre sí lasdiversas partes de nuestra constitución, y toda ella con nuestra educa-

268

Page 263: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

ción, costumbres e inexperiencia para que no nos precipitáramos en unmar proceloso.

Nuestros diversos poderes no están distribuidos cual lo requiere laforma social y el bien de los ciudadanos. Hemos hecho del legislativosólo el cuerpo soberano, en lugar de que no debía ser más que unmiembro de este soberano; le hemos sometido el ejecutivo y dadomucha más parte en la administración general que la que el interéslegítimo permite. Por colmo de desacierto se ha puesto toda la fuerzaen la voluntad, y toda la flaqueza en el movimiento y la acción delcuerpo social.

El derecho de presentar proyectos de ley se ha dejado exclusiva-mente al legislativo, que por su naturaleza está lejos de conocer larealidad del gobierno y es puramente teórico.

El arbitrio de objetar las leyes concedido al ejecutivo es tanto másineficaz cuanto que se ofende la delicadeza del congreso con lacontradicción. Éste puede insistir victoriosamente, hasta con el voto dela quinta o con menos de la quinta parte de sus miembros; lo que nodeja medio de eludir el mal.

Prohibida la libre entrada a los secretarios del despacho en nuestrascámaras, para explicar o dar cuenta de los motivos del gobierno, noqueda ni este recurso que adoptar para esclarecer al legislativo en loscasos de objetarse algún acuerdo. Mucho habría podido evitarse,requiriendo determinado lapso de tiempo, o un número proporcionalde votos, considerablemente mayor que el que ahora se exige parainsistir en las leyes objetadas por el ejecutivo.

Críticas a la legislación y al sistema

Obsérvese que nuestro ya tan abultado código en vez de conducir a lafelicidad ofrece obstáculos a sus progresos. Parecen nuestras leyeshechas al acaso: carecen de conjunto, de método, de clasificación y deidioma legal. Son opuestas entre sí, confusas, a veces innecesarias, yaun contrarias a sus fines. No falta ejemplo de haberse hecho indispen-sable contener con disposiciones rigorosas vicios destructores y que segeneralizaban; la ley, pues, hecha al intento ha resultado mucho menosadecuada que las antiguas, amparando indirectamente los vicios que seprocuraban evitar.

Por aproximamos a lo perfecto, adoptamos por base de representa-ción una escala que nuestra capacidad no admite todavía. Prodigándoseesta augusta función, se ha degradado y ha llegado a parecer, enalgunas provincias, indiferente y hasta poco honroso representar alpueblo. De esto ha emanado en parte el descrédito en que han caído lasleyes; y leyes despreciadas qué felicidad producirán?

El ejecutivo de Colombia no es el igual del legislativo; ni el jefe del

269

Page 264: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

judicial: viene a ser un brazo débil del poder supremo, de que noparticipa en la totalidad que le corresponde, porque el congreso seingiere en sus funciones naturales sobre lo administrativo, judicial,eclesiástico y militar. El gobierno, que debería ser la fuente y el motorde la fuerza pública, tiene que buscarla fuera de sus propios recursos yque apoyarse en otros que le debieran estar sometidos. Toca esencial-mente al gobierno ser el centro y la mansión de la fuerza, sin que elorigen del movimiento le corresponda. Habiéndosele privado de supropia naturaleza, sucumbe en un letargo, que se hace funesto para losciudadanos, y que arrastra consigo la ruina de las instituciones.

No están reducidos a éstos los vicios de la constitución conrespecto al ejecutivo. Rivaliza en entidad con los mencionados la faltade responsabilidad de los secretarios del despacho. Haciéndola pesarexclusivamente sobre el jefe de la administración, se anula su efecto, sinconsultar cuanto es posible la armonía y el sistema entre las partes; y sedisminuyen igualmente los garantes de la observancia de la ley. Habrámás celo en su ejecución cuando con la responsabilidad moral obre enlos ministros la que se les imponga. Habrá entonces más poderososestímulos para propender al bien. El castigo que por desgracia se llegaraa merecer no sería el germen de mayores males, la causa de trastornosconsiderables y el origen de las revoluciones. La responsabilidad en elescogido del pueblo será siempre ilusoria, a no ser que voluntariamentese someta a ella, o que contra toda probabilidad carezca de medios parasobreponerse a la ley. Nunca, por otro lado, puede hacerse efectiva estaresponsabilidad, no hallándose determinados los casos en que se incurre,ni definida la expiación.

Todos observan con asombro el contraste que presenta el ejecu-tivo, llevando en sí una superabundancia de fuerza al lado de unaextrema flaqueza: no ha podido repeler la invasión exterior o contenerlos conatos sediciosos, sino revestido de la dictadura. La constituciónmisma, convencida de su propia falta, se ha excedido en suplir conprofusión las atribuciones que le había economizado con avaricia. Desuerte que el gobierno de Colombia es una fuente mezquina de salud oun torrente devastador.

No se ha visto en nación alguna entronizada a tanta altura lafacultad de juzgar como en Colombia. Considerándose el modo conque están constituidos entre nosotros los poderes, no puede decirse quelas funciones del cuerpo político de una nación se reducen a querer y aejecutar su voluntad. Se aumentó un tercer agente supremo, como si lafacultad de decidir las leyes que convengan a los casos no fuese laprincipal incumbencia de la ejecución. Para que no influyese indebida-mente en los encargados de decidirlo, los dejaron del todo inconexoscon el ejecutivo, de que son por su naturaleza parte integrante; y a pesarde que se encargó a éste velar de continuo en la pronta y cumplida

270

Page 265: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

administración de justicia, se le cometió el encargo sin proveerle demedios para descubrir cuando fuese oportuna su intervención, nideclararle hasta qué punto pudiese extenderse. Aun la facultad de elegirentre personas aptas se le ha coartado.

No satisfechos con esta exaltación hemos dado por leyes poste-riores a los tribunales civiles una absoluta supremacía en los juiciosmilitares, contra toda la práctica uniforme de los siglos, derogatoria dela autoridad que la constitución atribuye al presidente y destructora dela disciplina que es el fundamento de una milicia de línea. Las leyesposteriores en la parte judicial han extendido, hasta donde nunca debióser, el derecho de juzgar. A consecuencia de la ley de procedimiento sehan complicado las litis. Por todas partes se han establecido nuevosjuzgados y tribunales de cantón, por cuya reforma claman los misera-bles pueblos, que enredan y sacrifican en provecho de los jueces.Repetidas ocasiones han decidido de la buena o mala aplicación de la leycortes superiores, compuestas casi exclusivamente de legos. El ejecu-tivo ha oído lastimosos reclamos contra el artificio o prevaricación delos jueces, y no ha tenido medios para castigarlos; ha visto la haciendapública víctima de la ignorancia y de la malicia de los tribunales, y noha podido aplicar el remedio.

La acumulación de todos los ramos administrativos en los agentesnaturales que el ejecutivo tiene en los departamentos aumenta suimpotencia, porque el intendente, jefe del orden civil y de la seguridadinterior, se halla recargado de la administración de las rentas nacionales,cuyo cuidado exige muchos individuos, sólo para impedir su deterioro.No obstante que esta acumulación parece conveniente, no lo es, sinocon respecto a la autoridad militar, que debería estar reunida en losdepartamentos marítimos a la civil, y la civil separada de la de rentas,para que cada uno de estos ramos se sirva de un modo satisfactorio alpueblo y al gobierno.

Las municipalidades, que serían útiles como consejo de los gober-nadores de provincias, apenas han llenado sus verdaderas funciones;algunas de ellas han osado atribuirse la soberanía que pertenece a lanación, otras han fomentado la sedición; y casi todas las nuevas máshan exasperado que promovido el abasto, el ornato, y la salubridad desus respectivos municipios. Tales corporaciones no son provechosas alservicio a que se les ha destinado; han llegado a hacerse odiosas por lasgavelas que cobran, por la molestia que causan a los electos que lascomponen y porque en muchos lugares no hay siquiera con quienreemplazarlas. Lo que las hace principalmente perjudiciales es la obliga-ción en que pone a los ciudadanos de desempeñar una judicatura anual,en que emplean su tiempo y sus bienes, comprometiendo muy frecuen-temente su responsabilidad y hasta su honor. No es raro el destierroespontáneo de algunos individuos de sus propios hogares porque no

271

Page 266: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

los nombren para estos enojosos cargos. Y si he de decir lo que todospiensan, no habría decreto más popular que el que eliminase lasmunicipalidades.

Inseguridad, miseria y relajo

No habiendo ley sobre la policía general, no existe ni su sombra.Resulta de aquí que el estado es una confusión, diría mejor un misteriopara los subalternos del ejecutivo, que se hallan en relación con uno auno de los individuos, los que no son manejables sin una policíadiligente y eficaz que coloque a cada ciudadano en conexión inmediatacon los agentes del gobierno. De aquí provienen diversos inconve-nientes para que los intendentes hagan cumplir las leyes y reglamentosen todos los ramos de su dependencia.

Destruida la seguridad y el reposo, únicos anhelos del pueblo, hasido imposible a la agricultura conservarse siquiera en el deplorableestado en que se hallaba. Su ruina ha cooperado a la de otras especies deindustria, desmoralizado el albergue rural y disminuido los medios deadquirir; todo se ha sumido en la miseria desoladora; y en algunoscantones los ciudadanos han recobrado su independencia primitiva,porque perdidos sus goces nada los liga a la sociedad, y aun seconvierten en sus enemigos. El comercio exterior ha seguido la mismaescala que la industria del país; aun diría que apenas basta paraproveernos de lo indispensable; tanto más que los fraudes favorecidospor las leyes y por los jueces, seguidos de numerosas quiebras, hanalejado la confianza de una profesión que únicamente estriba en elcrédito y buena fe. Y qué comercio habrá sin cambios y sin provechos?

Nuestro ejército era el modelo de la América y la gloria de lalibertad: su obediencia a la ley, al magistrado y al general parecíanpertenecer a los tiempos heroicos de la virtud republicana. Se cubríacon sus armas, porque no tenía uniformes; pereciendo de miseria sealimentaba de los despojos del enemigo, y sin ambición no respirabamás que el amor a la patria. Tan generosas virtudes se han eclipsado, encierto modo, delante de las nuevas leyes dictadas para regirlo y paraprotegerlo. Partícipe el militar de los sacudimientos que han agitadotoda la sociedad, no conserva más que su devoción a la causa que hasalvado y un respeto saludable a sus propias cicatrices. He mencionadoel funesto influjo que ha debido tener en la subordinación, el haberlesujetado a tribunales civiles, cuyas doctrinas y disposiciones son fatalesa la disciplina severa, a la sumisión pasiva y a la ciega obediencia queforma la base del poder militar, apoyo de la sociedad entera. La ley quepermite al militar casarse sin licencia del gobierno ha perjudicadoconsiderablemente al ejército en su movilidad, fuerza y espíritu. Conrazón se ha prohibido tomar reemplazos de entre los padres de familia:

272

Page 267: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

contraviniendo a esta regla, hemos hecho padres de familia a lossoldados. Mucho ha contribuido a relajar la disciplina el vilipendio quehan recibido los jefes de parte de los súbditos por escritos públicos. Elhaberse declarado detención arbitraria una pena correccional es estable-cer por ordenanzas los derechos del hombre, y difundir la anarquíaentre los soldados, que son los más crueles como los más tremendoscuando se hacen demagogos. Se han promovido peligrosas rivalidadesentre civiles y militares con los escritos y con las discusiones delcongreso, no considerándolos ya como los libertadores de la patria,sino como los verdugos de la libertad. Era ésta la recompensa debida atan dolorosos y sublimes sacrificios? Era ésta la recompensa reservadapara los héroes? Aun ha llegado el escándalo al punto de excitarse odioy encono entre los militares de diferentes provincias para que ni launidad ni la fuerza existieran.

No quisiera mencionar la clemencia que ha recaído sobre loscrímenes militares en esta época ominosa. Cada uno de los legisladoresestá penetrado de toda la gravedad de esta vituperable indulgencia.Qué ejército será digno, en adelante, de defender nuestros sagradosderechos, si el castigo del crimen ha de ser recompensarlo? Y si lagloria no pertenece ya a la fidelidad, el valor a la obediencia!

Desde ochocientos veintiuno, en que empezamos a reformar nues-tro sistema de hacienda, todos han sido ensayos; y de ellos el últimonos ha dejado más desengañados que los anteriores. La falta de vigor enla administración, en todos y cada uno de sus ramos, el general conatopor eludir el pago de las contribuciones, la notable infidelidad ydescuido por parte de los recaudadores, la creación de empleadosinnecesarios, el escaso sueldo de éstos y las leyes mismas han conspi-rado a destruir el erario. Se ha confiado vencer algunas veces esteconjunto de resistencia, invocando la acción de los tribunales; perolos tribunales, con la apariencia de protectores de la inocencia, hanabsuelto al contribuyente quejoso y al recaudador procesado, cuando lalentitud y la secuela de los juicios no ha dado tiempo al congreso paradictar nuevas leyes que enervasen aun la acción del gobierno. Todavíael congreso no ha arreglado las comisarías que manejan las máscuantiosas rentas. Todavía el congreso no ha examinado, por la pri-mera vez, la inversión de los fondos de que el gobierno es simpleadministrador.

La demora en Europa de la persona a quien por órdenes expedidasen 1823 toca responder de los millones que se deben por el empréstitocontratado y por el ratificado en Londres; la expulsión del encargado denegocios que temamos en el Perú y que gestionaba el cobro de lossuplementos que hicimos a aquella república; por último la distribucióny consunción de los bienes nacionales, nos han forzado a suplir connumerosas inscripciones en el libro de la deuda nacional valores que

273

Page 268: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

ellos pudieron dejar satisfechos. El erario de Colombia ha tocado, pues,a la crisis de no poder cubrir nuestro honor nacional, con el extranjerogeneroso que nos ha prestado sus fondos confiando en nuestra fideli-dad. El ejército no recibe la mitad de sus sueldos, y excepto losempleados de hacienda, los demás sufren la más triste miseria. El ruborme detiene, y no me atrevo a deciros que las rentas nacionales hanquebrado y que la república se halla perseguida por un formidableconcurso de acreedores.

Al describir el caos que nos envuelve casi me ha parecido super-fluo hablaros de nuestras relaciones con los demás pueblos de la tierra.Ellas prosperaron a medida que se exaltaba nuestra gloria militar y laprudencia de nuestros conciudadanos, inspirando así confianza de quenuestra organización civil y dicha social alcanzarían el alto rango que laProvidencia nos había señalado. El progreso de las relaciones exterioresha dependido siempre de la sabiduría del gobierno y de la concordia delpueblo. Ninguna nación se hizo nunca estimar sino por la práctica deestas ventajas; ninguna se hizo respetable sin la unión que la fortifica. Ydiscorde Colombia, menospreciando sus leyes, arruinando su crédito,qué alicientes podrá ella ofrecer a sus amigas? Qué garantes paraconservar siquiera a las que tiene? Retrogradando, en vez de avanzar,en la carrera civil, no inspira sino esquivez. Ya se ha visto provocada,insultada por un aliado, que no existiera sin nuestra magnanimidad.Vuestras deliberaciones’ van a decidir si arrepentidas las naciones ami-gas de habernos reconocido hayan de borrarnos de entre los pueblosque componen la especie humana.

El clamor de la patria

legisladores! Ardua y grande es la obra que la voluntad nacional os hacometido. Salvaos del compromiso en que os han colocado nuestrosconciudadanos salvando a Colombia. Arrojad vuestras miradas pene-trantes en el recóndito corazón de vuestros constituyentes: allí leeréis laprolongada angustia que los agoniza; ellos suspiran por seguridad yreposo. Un gobierno firme, poderoso y justo es el grito de la patria.Miradla de pie sobre las ruinas del desierto que ha dejado el despo-tismo, pálida de espanto, llorando quinientos mil héroes muertos porella, cuya sangre sembrada en los campos hacía nacer sus derechos. Sí,legisladores, muertos y vivos, sepulcros y ruinas, os piden garantías.Y yo que sentado ahora sobre el hogar de un simple ciudadano, ymezclado entre la multitud, recobro mi voz y mi derecho, yo que soy elúltimo que reclamo el fin de la sociedad, yo que he consagrado un cultoreligioso a la patria y a la libertad, no debo callarme en momento tansolemne. Dadnos un gobierno en que la ley sea obedecida, el magis-

274

Page 269: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

trado respetado y el pueblo libre, un gobierno que impida la transgre-sión de la voluntad general y los mandamientos del pueblo.

Considerad, legisladores, que la energía en la fuerza pública es lasalvaguardia de la flaqueza individual, la amenaza que aterra al injusto yla esperanza de la sociedad. Considerad que la corrupción de lospueblos nace de la indulgencia de los tribunales y de la impunidad delos delitos. Mirad que sin fuerza no hay virtud, y sin virtud perece larepública. Mirad, en fin, que la anarquía destruye la libertad y que launidad conserva el orden.

Legisladores! iA nombre de Colombia os ruego con plegariasinfinitas que nos déis, a imagen de la Providencia que representáis,como árbitros de nuestros destinos, para el pueblo, para el ejército,para el juez y para el magistrado leyes inexorables!!!

Bogotá, 29 de febrero de 1828.

Simón Bolívar

91

Educación para un soldado de la patria

Referencias de Luis Peru de Lacroix en su “Diario de Bucaramanga”.Anotaciones correspondientes a los días 8 y 15 de mayo de 1828, sobre lohecho y dicho por el Libertador. Resalta la faceta de Bolívar educador.

Día 8. Por la mañana llegó de Pampa el teniente Freire oficial de miEstado Mayor, que por orden del Libertador había yo mandado venir,para ayudar en el despacho de la secretaría general. S. E. le hizo variaspreguntas sobre el general Fortoul, y Freire le dio a entender que nohabía llegado muy contento a Pamplona. Salido este oficial, el Liberta-dor me dijo que vendría a comer todos los días a su mesa y de decírseloyo. Después de almorzar S. E. se puso a trabajar con su secretarioparticular.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Día 15. Acabado el almuerzo todos acompañamos a misa al Liberta-dor, y después fuimos con él a pasar un rato donde el cura. SentadoS. E. en la puerta de la calle vio pasar al oficial Freire, (el mismo dequien hablé en la relación del día 8 de este mes), y me preguntó por quéno iba a comer a su mesa; le contesté que Freire por timidez y por faltade uso se hallaría en ella muy embarazado y poco en su lugar y que poresto no le había dicho de concurrir a ella; entonces me preguntó cual erala conducta de dicho oficial, y le dije que era buena: “pues, continuóS. E., Vd. le dirá de mi parte que venga a comer conmigo hoy”.

275

Page 270: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Cumplí con la orden aunque con alguna pena porque sabía que Freire,ascendido desde poco tiempo de la clase de sargento al empleo desubteniente, tenía todavía aquellos modales soldadescos y, puede de-cirse, aquella educación de cuerpo de guardia que lo haría ridículo en lamesa del presidente de la República. A la hora indicada llegó Freire y elmismo Libertador le indicó el asiento que debía ocupar, y a su actitudS. E. vio que efectivamente aquel oficial no tenía trato ninguno.Sucedió durante la comida que el general Soublette dijo: alférez Freirepásame tal cosa; entonces el Libertador observó al general que debíadecirle señor oficial. Hubo otro incidente: Freire para comer de unplato que estaba bastante distante de él se levantó de su asiento yestirando el cuerpo y los brazos, se echó de dicho plato en el suyo; elLibertador le dijo entonces: “Señor oficial, no se moleste Ud, así enservirse cuando un plato no está a Su alcance; pida (de él), al que lo tieneal frente, porque es menos trabajo”. Después de la comida el Liberta-dor me dijo: “es bien rústico su oficial de Estado Mayor; sin embargo,que venga todos los días a almorzar y comer; lo desbastaremos yharemos su educación”.

92

Ofrecimiento a la cultura

Palabras al rector de la universidad, en el acto político celebrado el 24 dejunio de 1828, a la entrada del Libertador en Bogotá, procedente deBucaramanga, después de la disolución de la Convención de Ocaña, ycuando asume el mando reclamado por los pueblos.

AL RECTOR DE LA UNIVERSIDAD

Señor:

Plugiera al cielo que me hubiera sido dado propagar la luz de la verdady de las ciencias en todos los espíritus, para que no nos descarriásemosdel camino de la virtud y no cayésemos en la sombra del error y de laignorancia. Pero desgraciadamente el estado de las cosas no me lo hapermitido. Pero yo ofrezco que ningún objeto será de tanta preferenciapara mí en lo sucesivo como la dirección de esos retoños de la vida, deesos ciudadanos que van a ser los sucesores de nuestros derechos, denuestra libertad y de nuestra independencia, para que conserven estospreciosos bienes por sus virtudes y por su ciencia e ilustración. Yodirigiré desde ahora mis pasos a la instrucción de los pueblos y a la desus hijos.

Page 271: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

93

Para la protección y aprovechamiento científicosde la riqueza forestal de la nación

En la preocupación conservacionista y cuidando los recursos naturales dela nación, se asignan responsabilidades a las facultades de medicina deCaracas, Bogotá y Quito. Decreto del 31 de julio de 1829, en Guayaquil.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador de Colombia y del Perú, &., &, ,&.

Teniendo en consideración:1° Que los bosques de Colombia, así los que son propiedad

pública, como los que son de propiedad privada, encierran grandesriquezas, tanto en madera propia para toda especie de construccióncomo en tintes, quinas y otras sustancias útiles para la medicina y paralas artes.

2° Que por todas partes hay un gran exceso en la extracción demaderas, tintes, quinas y demás sustancias, especialmente en los bos-ques pertenecientes al Estado, causándole graves perjuicios.

3° Que para evitarlos es necesario dictar reglas que protejaneficazmente las propiedades públicas y las privadas, contra cualesquieraviolaciones; vistos los informes dirigidos al gobierno sobre la materia yoído el dictamen del Consejo de Estado;

Decreto:Artículo 1° Los gobernadores de las provincias harán designar encada cantón, por medio de los jueces políticos o personas de suconfianza, las tierras baldías pertenecientes a la república, expresandopor escrito su demarcación, sus producciones peculiares, como demaderas preciosas, plantas medicinales y otras sustancias útiles, man-dando archivar un tanto de estas noticias y remitiendo otro a laprefectura.

Artículo 2° Inmediatamente harán publicar en cada cantón queninguno pueda sacar de los bosques baldíos o del Estado maderaspreciosas y de construcción de buques para el comercio, sin quepreceda licencia por escrito del gobernador de la provincia respectiva.

Artículo 3° Estas licencias nunca se darán gratuitamente, sino quese exigirá por ellas un derecho, que graduarán los gobernadores ajuiciode peritos, formando al efecto un reglamento que someterán a laaprobación del prefecto.

277

Page 272: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Artículo 4° Cualquiera que extraiga de los bosques del Estado,quinas, maderas preciosas y de construcción sin la debida licencia, oque traspase los límites que se le hayan fijado, incurrirá en la multa deveinticinco hasta cien pesos, aplicados a los fondos públicos; ademáspagará, a justa tasación de peritos, los objetos que haya extraído odeteriorado.

Artículo 5° Los prefectos de los departamentos marítimos cuida-rán muy particularmente de que se conserven las maderas de los bos-ques del Estado, principalmente todas aquellas que puedan servir parala marina nacional, y que no se extraigan sino las precisas o las que sevendan con ventaja de las rentas públicas.

Artículo 6° Los gobernadores de las provincias prescribiránreglas sencillas y acomodadas a las circunstancias locales, para que laextracción de maderas, quinas o palos de tintes se haga con orden, a finde que se mejore su calidad y puedan sacarse mayores ventajas en elcomercio.

Artículo 7.° Donde quiera que haya quinas y otras sustancias útilespara la medicina, se establecerá una junta inspectora, a la que seasignará por el prefecto respectivo el territorio que tenga a bien; dichajunta se compondrá lo menos de tres personas, y se cuidará que una deellas sea médico, donde fuere posible. Los miembros de la junta seránnombrados por el prefecto, a propuesta del respectivo gobernador, ypermanecerán en sus destinos durante su buena conducta.

Artículo 8° Cualquiera que pretenda sacar quinas y otras sustan-cias útiles para la medicina de bosques pertenecientes al Estado o aparticulares será inspeccionado en sus operaciones por uno o doscomisionados que nombrará la junta inspectora, cuyas dietas o jornalessatisfará el empresario, o empresarios. La junta y los comisionadoscuidarán:1° Que no se traspasen los límites que se hayan fijado en la licencia

para hacer los cortes de quinas y para extraer otras sustancias útilespara la medicina.

2° Que la extracción y demás preparaciones se hagan conforme a lasreglas que indicarán las facultades de medicina de Caracas, Bogotáy Quito, en una instrucción sencilla que deben formar, la quetendrá por objeto impedir la destrucción de las plantas que produ-cen dichas sustancias, como también que a ellas se les dé todo ‘elbeneficio necesario en sus preparaciones, envases, etc., para quetengan en el comercio mayor precio y estimación.

Artículo 9° En los puertos donde no se haya establecido la juntainspectora, se hará el reconocimiento de que trata el artículo anteriorpor personas inteligentes, nombradas al efecto por el gobernador,debiendo expresarse en la diligencia la calidad de la quina o efecto quese haya reconocido. Sin que haya la debida constancia de este requisito,

278

Page 273: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

las aduanas no admitirán pólizas para registrar dichos artículos, y encaso de advertirse que están mezclados de otras cortezas, o sustancias, oque carecen del beneficio necesario, se anotará así, dando parte algobernador o administrador de la aduana, para que se impida elembarque.

Artículo 10° Las facultades de medicina de Caracas, Bogotá yQuito, lo mismo que los prefectos de los departamentos dirigirán algobierno los informes correspondientes, proponiendo los medios demejorar la extracción, preparación y el comercio de las quinas y de lasdemás sustancias útiles para la medicina o para las artes, que contenganlos bosques de Colombia, haciendo todas las indicaciones necesarias,para el aumento de este ramo importante de la riqueza pública.

El ministro, secretario de estado en el despacho del interior, quedaencargado de la ejecución de este decreto.

Dado en Guayaquil a 31 de julio de 1829.Simón Bolívar

Por S. E. el Libertador Presidente de la República,el secretario general,José D. Espinar

94

Con México seguirá sosteniendola causa de la unidad

En el crítico periodo de la “dictadura”, manifiesta Bolívar -por últimavez- su pensamiento integracionista. Expresa su confianza en queMéxico acompañará a Colombia en esta empresa trascendental de launidad latinoamericana. Mensaje al general Guadalupe Victoria, presi-dente de México, el 14 de agosto de 1828, desde Bogotá.

República de Colombia

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente, etc., etc., etc.

A nuestro grande y buen amigo, fiel aliado y confederado, el presidente delos Estados Unidos Mejicanos (Guadalupe Victoria).

Grande buen amigo y fiel aliado:

La grande Asamblea Americana, para que por nuestra parte nombra-mos de plenipotenciarios a los señores Pedro Gua1 y Miguel Santa-maría, no es posible que se reúna antes de ratificarse los tratados

279

Page 274: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

celebrados en el Istmo, que debían servir de bases de sus operaciones: ycomo esta ratificación no se dará por ahora en el Perú, según lasnoticias que tenemos, ni será fácil que la expida la República de CentroAmérica en el estado de agitación en que se halla, hemos resueltosuspender de nuestra parte la reunión de aquella asamblea y llamar anuestros plenipotenciarios.

Colombia no desistirá nunca de la confederación americana quedebe ser tan ventajosa a todas las naciones de este continente paraasegurar su independencia y uniformar su política estrechando susrelaciones; y contando con los esfuerzos de su aliada, hermana yconfederada, la República de los Estados Unidos Mejicanos, no dejaráde promover en mejores días y en más felices circunstancias la reuniónde plenipotenciarios que debe tratar de nuestros comunes intereses.Felizmente, ella no es necesaria para mantener las relaciones queexisten, y que jamás serán interrumpidas, entre nuestros respectivospaíses; porque ellas se fundan en los tratados existentes y en nuestrosdeseos inalterables de que nuestra amistad y alianza sean firmes,perpetuas y eternas si es posible.

El señor Gua1 hará conocer a V. E. nuestros sentimientos en favorde esos Estados y nuestra constante voluntad de sostener su independen-cia y procurar su dicha y felicidad.

Dadas en Bogotá, a catorce de agosto de mil ochocientos veinte yocho.

Simón BolívarEl secretario de Relaciones Exteriores,Estanislao Vergara

95

Reafirmación republicana y categórica precisiónrespecto a los Estados Unidos

En medio de la grave crisis política de Colombia, el 5 de agosto de 1829escribe el Libertador, desde Guayaquil, al coronel Patricio Campbell,encargado de negocios de la Gran Bretaña en Bogotá. Allí está su frase:“Los Estados Unidos que parecen destinados por la Providencia paraplagar la América de miserias a nombre de la libertad°

Mi estimado coronel y amigo:

Tengo la honra de acusar a Vd. el recibo de la apreciable carta de Vd.de 31 de mayo fecha en Bogotá.

280

Page 275: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

No puedo dejar de empezar por dar a Vd. las gracias por lamultitud de bondades que Vd. derrama en toda su carta hacia Colom-bia y hacia mí. Cuántos títulos no tiene Vd. a nuestra gratitud? Yo meconfundo al considerar lo que Vd. ha pensado, lo que Vd. ha hechodesde que está entre nosotros por sostener el país y la gloria de su jefe.

El ministro inglés residente en los Estados Unidos me honrademasiado cuando dice que espera en Colombia sola, porque aquí hayun Bolívar. Pero no sabe que su existencia física y política se halla muydebilitada y pronta a caducar.

Lo que Vd. se sirve decirme con respecto al nuevo proyecto denombrar un sucesor de mi autoridad que sea príncipe europeo, no mecoge de nuevo, porque algo se me había comunicado con no pocomisterio y algo de timidez, pues conocen mi modo de pensar.

No se qué decir a Vd. sobre esta idea, que encierra en sí milinconvenientes. Vd. debe conocer que, por mi parte, no habría nin-guno, determinado como estoy a dejar el mando en este próximocongreso, mas quién podrá mitigar la ambición de nuestros jefes y eltemor de la desigualdad en el bajo pueblo? ¿No cree Vd. que laInglaterra sentiría celos por la elección que se hiciera en un Borbón?Cuánto no se opondrían todos los nuevos estados americanos, y losEstados Unidos que parecen destinados por la Providencia para plagarla América de miserias a nombre de la libertad? Me parece que ya veouna conjuración general contra esta pobre Colombia, ya demasiadoenvidiada de cuantas repúblicas tiene América. Todas las prensas sepondrían en movimiento llamando a una nueva cruzada contra loscómplices de la traición a la libertad, de adictos a los Borbones y devioladores del sistema americano. Por el sur encenderían los peruanosla llama de la discordia; por el istmo los de Guatemala y Méjico, y porlas Antillas los americanos y los liberales de todas partes. No sequedaría Santo Domingo en inacción y llamaría a sus hermanos parahacer causa común contra un príncipe de Francia. Todos se conver-tirían en enemigos sin que la Europa hiciera nada por sostenernos,porque no merece el Nuevo Mundo los gastos de una Santa Alianza; alo menos, tenemos motivo para juzgar así, por la indiferencia con quese nos ha visto emprender y luchar por la emancipación de la mitad delmundo, que bien pronto será la fuente más productiva de las prosperi-dades europeas.

En fin, estoy muy lejos de oponerme a la reorganización deColombia conforme a las instituciones experimentadas de la sabiaEuropa. Por el contrario, me alegraría infinito y reanimaría mis fuerzaspara ayudar en una obra que se podrá llamar de salvación y que seconseguiría no sin dificultad sostenidos nosotros de la Inglaterra y de laFrancia. Con estos poderosos auxilios seríamos capaces de todo, sinellos, no. Por lo mismo yo me reservo para dar mi dictamen definitivo

281

Page 276: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

cuando sepamos que piensan los gobiernos de Inglaterra y de Franciasobre el mencionado cambio de sistema y elección de dinastía.

Aseguro a Vd., mi digno amigo y con la mayor sinceridad, que hedicho a Vd. todo mi pensamiento y que nada he dejado en mi reserva.Puede Vd. usar de él como convenga a su deber y al bienestar deColombia. Ésta es mi condición, y en tanto reciba Vd. el corazónafectuoso de su atento obediente servidor.

Bolívar

96

Política, derecho y ciencia de minas

Del decreto firmado en Quito el 24 de octubre de 1829, base de la actuallegislación minera y de hidrocarburos de Venezuela, donde se hannacionalizado el petróleo, el hierro y el gas, y el subsuelo pertenece a lanación.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador Presidente de la República de Colombia, etc., etc., etc.

Considerando:1° Que la minería ha estado abandonada en Colombia, sin embargode que es una de 1as principales fuentes de la riqueza pública;

2° Que para fomentarla es preciso derogar algunas antiguasdisposiciones, que han sido origen fecundo de pleitos y disensionesentre los mineros;

3° Que debe asegurarse la propiedad de las minas contra cual-quier ataque y contra la facilidad de turbarla o perderla;

4° En fin, que conviene promover los conocimientos científicosde la minería y de la mecánica, como también difundir el espíritu deasociación y de empresa, para que la minería llegue al alto grado deperfección que se necesita para la prosperidad del Estado;

Decreto:

C A P í T U L O 1 . °

De los descubrimientos, títulos y deserción de minas

Artículo 1.° Conforme a las leyes, las minas de cualquiera clase corres-ponden a la república, cuyo gobierno las concede en propiedad y

282

Page 277: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

posesión a los ciudadanos que las pidan, bajo las condiciones expresadasen las leyes y ordenanzas de minas, y con las demás que contiene estedecreto.

Artículo 2° Por el título de propiedad de cada mina de metales ypiedras preciosas se satisfarán los derechos de arancel y además seconsignarán previamente en la respectiva tesorería de la provinciatreinta pesos. Éstos servirán para formar un fondo con que pagar elestablecimiento de una cátedra de minería y mecánica, que se hará encada provincia minera en que sea posible; ningún ministro tesorerogastará este fondo, pena de reponerlo a su costa.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 13° (. . .)Parágrafo hico. Los gobernadores de las provincias remitirán cada seismeses al Ministerio del Interior las muestras de los nuevos descubri-mientos de minas, con sus respectivos letreros, que indiquen la mina aque corresponda cada muestra, las que se colocarán en el MüseoNacional. Excitarán también a los dueños de antiguas minas de veta,oro corrido, otros metales y piedras preciosas, a que les remitanmuestras de sus minas, para ponerlas igualmente en el Museo Nacio-nal, procurando cada gobernador recoger dentro de un año las mues-tras de todas las minas de su provincia.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Artículo 38° Mientras se forma una ordenanza propia para las minas ymineros de Colombia, se observará provisionalmente la ordenanza deminas de Nueva España, dada en 22 de mayo de 1803, exceptuandotodo lo que trata del tribunal de minería y jueces diputados de minas, ylo que sea contrario a las leyes y decretos vigentes. Tampoco seobservará en todo lo que se halle reformada por el presente decreto.

El ministro secretario en el despacho del interior queda encargadode la ejecución de este decreto.Dado en Quito, a 24 de octubre de 1829.

Simón BolívarPor Su Excelencia, el secretario general,José Domingo Espinar

283

Page 278: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

97

“La independencia es elúnico bien que hemos adquirido

a costa de los demás”

Patético mensaje de Bolívar, al fin de su carrera pública, ante el CongresoConstituyente de Colombia -llamado “el Congreso Admirable’- enBogotá, el 20 de enero de 1830.

Conciudadanos!

Séame permitido felicitaros por la reunión del congreso, que a nombrede la nación va a desempeñar los sublimes deberes de legislador.

Ardua y grande es la obra de constituir un pueblo que sale de laopresión por medio de la anarquía y de la guerra civil, sin estarpreparado previamente para recibir la saludable reforma a que aspiraba.Pero las lecciones de la historia, los ejemplos del viejo y nuevo mundo,la experiencia de veinte años de revolución han de serviros como otrostantos fanales colocados en medio de las tinieblas de lo futuro; y yo melisonjeo de que vuestra sabiduría se elevará hasta el punto de poderdominar con fortaleza las pasiones de algunos y la ignorancia de lamultitud; consultando, cuanto es debido,’ a la razón ilustrada de loshombres sensatos, cuyos votos respetables son precioso auxilio pararesolver las cuestiones de alta política. Por lo demás hallaréis tambiénconsejos importantes que seguir en la naturaleza misma de nuestro país,que comprende las regiones elevadas de los Andes y las abrasadasriberas del Orinoco: examinadle en toda su extensión, y aprenderéis enél de la infalible maestra de los hombres lo que ha de dictar el congresopara la felicidad de los colombianos. Mucho os dirá nuestra historia ymucho nuestras necesidades: pero todavía serán más persuasivos losgritos de nuestros dolores por falta de reposo y libertad segura.

Dichoso el congreso si proporciona a Colombia el goce de estosbienes supremos por los cuales merecerá las más puras bendiciones!

Convocado el congreso para componer el código fundamental querija a la república, y para nombrar los altos funcionarios que laadministren, es de la obligación del gobierno instruiros de los conoci-mientos que poseen los respectivos ministerios de la situación presentedel estado, para que podáis estatuir de un modo análogo a la naturalezade las cosas. Toca al presidente de los consejos de estado y ministerialmanifestaros sus trabajos durante los últimos diez y ocho meses: si ellosno han correspondido a las esperanzas que debimos prometernos, hansuperado al menos los obstáculos que oponían a la marcha de la

284

Page 279: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

administración las circunstancias turbulentas de guerra exterior y con-vulsiones intestinas, males que, gracias a la Divina Providencia, hancalmado a beneficio de la clemencia y de la paz.

Prestad vuestra soberana atención al origen y progreso de estostrastornos.

Las turbaciones que desgraciadamente ocurrieron en 1826 meobligaron a venir del Perú, no obstante que estaba resuelto a no admitirla primera magistratura constitucional, para que había sido reelegidodurante mi ausencia. Llamado con instancia para restablecer la concor-dia y evitar la guerra civil, yo no pude rehusar mis servicios a la patria,de quien recibía aquella nueva honra y pruebas nada equívocas deconfianza.

La “dictadura”

La representación nacional entró a considerar las causas de discordiasque agitaban los ánimos, y convencida de que subsistían y de quedebían adoptarse medidas radicales, se sometió a la necesidad deanticipar la reunión de la gran convención. Se instaló este cuerpo enmedio de la exaltación de los partidos; y por lo mismo se disolvió, sinque los miembros que le componían hubiesen podido acordarse en lasreformas que meditaban. Viéndose amenazada la república de unadisociación completa, fui obligado de nuevo a sostenerla en semejantecrisis; y a no ser que el sentimiento nacional hubiera ocurrido pronta-mente a deliberar sobre su propia conservación, la república habría sidodespedazada por las manos de sus propios ciudadanos. Ella quisohonrarme con su confianza, confianza que debí respetar como la mássagrada ley. Cuando la patria iba a perecer podría yo vacilar?

Las leyes, que habían sido violadas con el estrépito de las armas ycon las disensiones de los pueblos, carecían de fuerza. Ya el cuerpolegislativo había decretado, conociendo la necesidad, que se reuniese laasamblea que podía reformar la constitución, y ya, en fin, la conven-ción había declarado unánimemente que la reforma era urgentísima.Tan solemne declaratoria unida a los antecedentes dio un fallo formalcontra el pacto político de Colombia. En la opinión, y de hecho, laconstitución del año 11° dejó de existir.

Horrible era la situación de la patria, y más horrible la mía,porque me puso a discreción de los juicios y de las sospechas. No medetuvo sin embargo el menoscabo de una reputación adquirida en unalarga serie de servicios, en que han sido necesarios, y frecuentes,sacrificios semejantes.

El decreto orgánico que expedí en 27 de agosto de 28 debióconvencer a todos de que mi más ardiente deseo era el de descargarmedel peso insoportable de una autoridad sin límites, y de que la república

285

Page 280: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

volviese a constitiurse por medio de sus representantes. Pero apenashabía empezado a ejercer las funciones de jefe supremo, cuando loselementos contrarios se desarrollaron con la violencia de las pasiones yla ferocidad de los crímenes. Se atentó contra mi vida; se encendió laguerra civil; se animó con este ejemplo, y por otros medios, algobierno del Perú para que invadiese nuestros departamentos del sur,con miras de conquista y usurpación. No me fundo, conciudadanos, ensimples conjeturas: los hechos y los documentos que lo acreditan sonauténticos. La guerra se hizo inevitable. El ejército del general La Mares derrotado en Tarqui del modo más espléndido y glorioso paranuestras armas; y sus reliquias se salvan por la generosidad de losvencedores. No obstante la magnanimidad de los colombianos, elgeneral La Mar rompe de nuevo la guerra hollando los tratados, y abrepor su parte las hostilidades; mientras tanto yo respondo convidándoleotra vez con la paz; pero él nos calumnia, nos ultraja con denuestos. Eldepartamento de Guayaquil es la víctima de sus extravagantes pretensio-nes.

Privados nosotros de marina militar, atajados por las inundacionesdel invierno y por otros obstáculos, tuvimos que esperar la estaciónfavorable para recuperar la plaza. En este intermedio un juicio nacional,según la expresión del jefe supremo del Perú, vindicó nuestra conducta,y Libró a nuestros enemigos del general La Mar.

Mudado así el aspecto político de aquella república, se nos facilitóla vía de las negociaciones, y por un armisticio recuperamos a Guaya-quil. Por fin el 22 de setiembre se celebró el tratado de paz, que pusotérmino a una guerra en que Colombia defendió sus derechos y sudignidad.

Me congratulo con el congreso y con la nación por el resultadosatisfactorio de los negocios del sur: tanto por la conclusión de laguerra, como por las muestras nada equívocas de benevolencia quehemos recibido del gobierno peruano, confesando noblemente quefuimos provocados a la guerra con miras depravadas. Ningún gobiernoha satisfecho a otro como el del Perú al nuestro, por cuya magnanimi-dad es acreedor a la estimación más perfecta de nuestra parte.

Las luchas internas y Za justicia

Conciudadanos! Si la paz se ha concluido con aquella moderación queera de esperarse entre pueblos hermanos, que no debieron disparar susarmas consagradas a la libertad y a la mutua conservación, hemosusado también de lenidad con los desgraciados pueblos del sur que sedejaron arrastrar a la guerra civil o fueron seducidos por los enemigos.Me es grato deciros que para terminar las disensiones domésticas ni unasola gota de sangre ha empañado la vindicta de las leyes, y aunque un

286

Page 281: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

valiente general y sus secuaces han caído en el campo de la muerte, sucastigo les vino de la mano del Altísimo, cuando de la nuestra habríanalcanzado la clemencia con que hemos tratado a los que han sobrevi-vido. Todos gozan de libertad a pesar de sus extravíos.

Demasiado ha sufrido la patria con estos sacudimientos, quesiempre recordaremos con dolor; y si algo puede mitigar nuestraaflicción, es el consuelo que tenemos de que ninguna parte se nos puedeatribuir en su origen y el haber sido tan generosos con nuestrosadversarios cuando dependían de nuestras facultades. Nos duele cierta-mente el sacrificio de algunos delincuentes en el altar de la justicia; yaunque el parricidio no merece indulgencia, muchos de ellos la recibie-ron, sin embargo, de mis manos, y quizás los más crueles.

Sírvanos de ejemplo este cuadro de horror que por desgracia míahe debido mostraros; sírvanos para el porvenir como aquellos formida-bles golpes que la Providencia suele darnos en el curso de la vida paranuestra corrección. Corresponde al congreso coger dulces frutos deeste árbol de amargura, o a lo menos alejarse de su sombra venenosa.

Si no me hubiera cabido la honrosa ventura de llamaros a represen-tar los derechos del pueblo, para que, conforme a los deseos devuestros comitentes, creaseis o mejoraseis nuestras instituciones, seríaéste el lugar de manifestaros el producto de veinte años consagrados alservicio de la patria. Mas yo no debo ni siquiera indicaros lo que todoslos ciudadanos tienen derecho de pediros. Todos pueden, y estánobligados, a someter sus opiniones, sus temores y deseos a los quehemos constituido para curar la sociedad enferma de turbación yflaqueza. Sólo yo estoy privado de ejercer esta función cívica, porquehabiéndoos convocado y señalado vuestras atribuciones, no me espermitido influir de modo alguno en vuestros consejos. Además de quesería importuno repetir a los escogidos del pueblo lo que Colombiapublica con caracteres de sangre. Mi único deber se reduce a some-terme sin restricción al código y magistrados que nos déis; y es miúnica aspiración, el que la voluntad de los pueblos sea proclamada,respetada y cumplida por sus delegados.

Con este objeto dispuse lo conveniente para que pudiesen todos lospueblos manifestar sus opiniones con plena libertad y seguridad, sinotros límites que los que debían prescribir el orden y la moderación.Así se ha verificado, y vosotros encontraréis en las peticiones que sesometerán a vuestra consideración la expresión ingenua de los deseospopulares. Todas las provincias aguardan vuestras resoluciones: entodas partes las reuniones que se han tenido con esta mira han sidopresididas por la regularidad y el respeto a la autoridad del gobierno ydel congreso constituyente. Sólo tenemos que lamentar el exceso de lajunta de Caracas de que igualmente debe juzgar vuestra prudencia ysabiduría.

287

Page 282: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

Renuncia final

Temo con algún fundamento que se dude de mi sinceridad al hablarosdel magistrado que haya de presidir la república. Pero el congreso debepersuadirse que su honor se opone a que piense en mí para estenombramiento, y el mío a que yo lo acepte. Haríais por ventura refluiresta preciosa facultad sobre el mismo que os la ha señalado? Osaréissin mengua de vuestra reputación concederme vuestros sufragios? Nosería esto nombrarme yo mismo? Lejos de vosotros y de mí un acto taninnoble.

Obligados, como estáis, a constituir el gobierno de la república,dentro y fuera de vuestro seno hallaréis ilustres ciudadanos quedesempeñen la presidencia del Estado con gloria y ventajas. Todos,todos mis conciudadanos gozan de la fortuna inestimable de parecerinocentes a los ojos de la sospecha, sólo yo estoy tildado de aspirar a latiranía.

Libradme, os ruego, del baldón que me espera si continúo ocu-pando un destino que nunca podrá alejar de sí el vituperio de laambición. Creedme: un nuevo magistrado es ya indispensable para larepública. El pueblo quiere saber si dejaré alguna vez de mandarlo. Losestados americanos me consideran con cierta inquietud, que puedeatraer algún día a Colombia males semejantes a los de la guerra delPerú. En Europa mismo no faltan quienes teman que yo desacreditecon mi conducta la hermosa causa de la libertad. Ah! cuántas conspira-ciones y guerras no hemos sufrido por atentar a mi autoridad y a mipersona! Estos golpes han hecho padecer a los pueblos, cuyos sacrifi-cios se habrían ahorrado si desde el principio los legisladores deColombia no me hubiesen forzado a sobrellevar una carga que me haabrumado más que la guerra y todos sus azotes.

Mostraos, conciudadanos, dignos de representar un pueblo libre,alejando toda idea que me suponga necesario para la república. Si unhombre fuese necesario para sostener el Estado, este Estado no deberíaexistir, y al fin no existiría.

El magistrado que escojáis será sin duda un iris de concordiadoméstica, un lazo de fraternidad, un consuelo para los partidosabatidos. Todos los colombianos se acercarán alrededor de este mortalafortunado: él los estrechará en los brazos de la amistad, formará deellos una familia de ciudadanos. Yo obedeceré con el respeto máscordial a este magistrado legítimo: lo seguiré cual ángel de paz; losostendré con mi espada y con todas mis fuerzas. Todo añadirá energía,respeto y sumisión a vuestro escogido. Yo lo juro, legisladores; yo loprometo a nombre del pueblo y del ejército colombiano. La repúblicaserá feliz si al admitir mi renuncia nombráis de presidente a un

288

Page 283: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

ciudadano querido de la nación; ella sucumbiría si os obstinaseis en queyo la mandara. Oíd mis súplicas: salvad la república, salvad mi gloriaque es de Colombia.

Disponed de la presidencia que respetuosamente abdico en vues-tras manos. Desde hoy no soy más que un ciudadano armado paradefender la patria y obedecer al gobierno; cesaron mis funcionespúblicas para siempre. Os hago formal y solemne entrega de laautoridad suprema que los sufragios nacionales me habían conferido.

Pertenecéis a todas las provincias, sois sus más selectos ciudada-nos, habéis servido en todos los destinos públicos, conocéis los inte-reses locales y generales; de nada carecéis para regenerar esta repúblicadesfalleciente en todos los ramos de su administración.

Permitiréis que mi último acto sea recomendaros que protejáis lareligión santa que profesamos, fuente profusa de las bendiciones delcielo. La hacienda nacional llama vuestra atención, especialmente en elsistema de percepción. La deuda pública, que es el cangro de Colom-bia, reclama de vosotros sus más sagrados derechos. El ejército, queinfinitos títulos tiene a la gratitud nacional, ha menester una organiza-ción radical. La justicia pide códigos capaces de defender los derechos yla inocencia de hombres libres. Todo es necesario crearlo, y vosotrosdebéis poner el fundamento de prosperidad al establecer las basesgenerales de nuestra organización política.

conciudadanos! Me ruborizo al decirlo: la independencia es elúnico bien que hemos adquirido a costa de los demás. Pero ella nosabre la puerta para reconquistarlos bajo vuestros soberanos auspicios,con todo el esplendor de la gloria y de la libertad.

Bogotá, enero 20 de 1830.

Simón Bolívar

98

Brasil es “garantía poderosa” para la independenciade las repúblicas de América

Contestación al señor Louis Souza Díaz, enviado extraordinario yministro plenipotenciario de S. M. el emperador del Brasil. Bogotá, 30de marzo de 1830.

Señor ministro:

La misión de que venís encargado de parte de S. M. el emperador delBrasil, cerca del gobierno de Colombia, me llena de satisfacción,

289

Page 284: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

porque ella será un vínculo de amistad entre ambas naciones. Elimperio del Brasil, recientemente creado por su ilustre monarca, es unade las garantías más poderosas que han recibido las repúblicas deAmérica, en la carrera de su independencia. Dando vuestro soberano elhermoso ejemplo de sujetarse espontáneamente a la constitución másliberal, se ha hecho acreedor al aplauso y a la admiración del mundo.

La estimación que me habéis manifestado de parte de S. M. elemperador del Brasil, es demasiado lisonjera para mí, y yo faltaría a mideber si no lo reconociese como un rasgo de su benevolencia, y osruego, señor ministro, que os sirváis trasmitir a S. M. los sentimientoscon que el gobierno de Colombia desea cultivar y estrechar las másamigables relaciones con el Brasil.

Al elegir S. M. un personaje tan distinguido para el encargo deministro plenipotenciario cerca de nuestra república, nos ha dado laprueba más señalada de la consideración que le merecemos. Por tanto,vuestra residencia aquí será un nuevo gaje que asegurará para siempre lamás perfecta amistad entre nuestras naciones, vecinas y hermanas.

99

La más penosa despedida

En su camino de Bogotá a la costa del mar Caribe, buscando irse alexilio, el Libertador escribe desde Turbaco, el 26 de mayo de 1830, suúltima carta al Gran Mariscal de Ayacucho, su leal y solidario lugarte-niente Antonio José de Sucre. Apenas nueve días después, el 4 de junio,Sucre caía vilmente asesinado. Este crimen de la pasión política fue ungolpe mortal para Bolívar.

Turbaco, a 26 de mayo de 1830

A S. E. EL GENERAL SUCRE

Mi querido general y buen amigo: La apreciable carta de Vd. sin fecha,en que Vd. se despide de mí, me ha llenado de ternura, y si a Vd. lecostaba pena escribírmela, qué diré yo?, yo que no tan sólo me separode mi amigo sino de mi patria! Dice Vd. bien, las palabras explican mallos sentimientos del corazón en circunstancias como éstas: perdoneVd., pues, las faltas de ellas y admita Vd. mis más sinceros votos porsu prosperidad y por su dicha. Yo me olvidaré de Vd. cuando losamantes de la gloria se olviden de Pichincha y de Ayacucho.

Vd. se complacerá al saber que desde Bogotá hasta aquí herecibido mil testimonios de parte de los pueblos. Este departamento se

290

Page 285: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

ha distinguido muy particularmente. El general Montilla se ha portadocomo un caballero completo.

Saludo cariñosamente a la señora de Vd. y protesto a Vd. que nadaes más sincero que el afecto con que me repito de Vd., mi queridoamigo, su

Bolívar

100

“Todos debéis trabajar por el bieninestimable de la unión . . . Mis últimos votos son

por la felicidad de la patria”

Declaración suprema de perdón y patriotismo. Última proclama delLibertador, siete días antes de su fallecimiento el 17 de diciembre de 1830.

SIMÓ N BOLÍVARLibertador de Colombia, &. , &

A LOS PUEBLOS DE COLOMBIA

Colombianos:

Habéis presenciado mis esfuerzos para plantear la libertad donde rei-naba antes la tiranía. He trabajado con desinterés, abandonando mifortuna y aun mi tranquilidad. Me separé del mando cuando mepersuadí que desconfiabais de mi desprendimiento. Mis enemigosabusaron de vuestra credulidad y hollaron lo que me es más sagrado,mi reputación y mi amor a la libertad. He sido víctima de misperseguidores, que me han conducido a las puertas del sepulcro. Yo losperdono.

Al desaparecer de en medio de vosotros, mi cariño me dice quedebo hacer la manifestación de mis últimos deseos. No aspiro a otragloria que a la consolidación de Colombia. Todos debéis trabajar porel bien inestimable de la unión: los pueblos obedeciendo al actualgobierno para libertarse de la anarquía; los ministros del santuariodirigiendo sus oraciones al cielo; y los militares empleando su espada endefender las garantías sociales.

Colombianos! Mis últimos votos son por la felicidad de la patria.Si mi muerte contribuye para que cesen los partidos y se consolide launión, yo bajaré tranquilo al sepulcro.Hacienda de San Pedro, en Santa Marta, a 10 de diciembre de 1830.20°

Simón Bolívar

291

Page 286: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

C R O N O L O G ÍA

1773Diciembre, 1.° matrimonio, en Caracas, del coronel Don Juan Vicente deBolívar y Ponte con Doña Concepción Palacios y Blanco.

1777Noviembre, 10: nace María Antonia de Bolívar y Palacios.

1779Mayo, 21: nace Juana María de Bolívar y Palacios.

1781Mayo, 30: nace Juan Vicente de Bolívar y Palacios.

1783Julio, 24: en la noche del 24 al 25, nace en Caracas Simón José Antonio de laSantísima Trinidad de Bolívar y Palacios (Simón Bolívar).

1786Enero, 19: fallece el padre.

Julio, 6: muere la madre.

1795Julio, 23: fuga de casa del tutor Don Carlos Palacios para la de su hermanaMaría Antonia.

1798Julio 4: recibe del rey el grado de subteniente.

1799Enero, 19: viaja a España. Febrero, 2: Veracruz. Febrero-marzo: visita Ciudadde México. Marzo, 20: sale de Veracruz; pasa por La Habana. Mayo, 31:desembarca en el puerto español de Santoña. Junio, 10: Madrid.

293

Page 287: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

1800Septiembre, 30: decide casarse con María Teresa Rodríguez del Toro:

1801Marzo, 20: recibe pasaportes y se dirige a Bilbao donde está su novia.

1802Enero: sale hacia Bayona, camino de París. Va a las fiestas de la paz en Amiens.Marzo-abril: regresa a España. Mayo, 26: contrae matrimonio en Madrid.Junio: regresa con su esposa a Venezuela.

1803Enero, 22: muere María Teresa. Octubre 23: otorga poder a su hermano JuanVicente; viaja seguidamente a España. Diciembre: en Cádiz.

1804A comienzo de año llega a Madrid. Abril-mayo: viaja a París. Mayo, 18:coronación de Bonaparte en Saint-Cloud. Septiembre: trata en París al sabioAlejandro de Humboldt y al fisico Amadeo Bonpland. Diciembre, 2: presenciala coronación de Napoleón por el Papa.

1805Abril, 6: sale hacia Italia, con Simón Rodríguez y Fernando Toro. Mayo, 26:asiste a la coronación de Napoleón en Milán y a la gran revista militar en lallanura de Monte Chiaro, cerca de Castiglione. De Milán pasa a Venecia,Ferrara, Bolonia, Florencia, Peruggia y Roma. Agosto, 15: jura en el MonteAventino libertar a su patria. Septiembre, 3: asciende al Vesubio con Humboldty el físico francés Gay-Lussac. Diciembre: regresa a París.

1806Septiembre: viaja a Hamburgo. Octubre: rumbo a Venezuela, vía EstadosUnidos.

1807Enero, 1.°: desembarca en Charleston. Visita Washington, Filadelfia, NuevaYork y Boston. Abril-mayo: regresa a La Guaira. Junio: Caracas. Septiembre,2: se establece en su hacienda de San Mateo.

1808Reuniones conspirativas en la “Cuadra Bolívar”, en las afueras de Caracas.

1809Julio, 28: se le nombra justicia mayor de Yare.

1810Abril, 19: estalla la revolución de Venezuela contra el orden colonial; seconstituye en Caracas una Junta Suprema. Bolívar, confinado a sus propiedades

294

Page 288: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

de Aragua, no participa en el movimiento. Mayo: la Junta Suprema lo asciendea coronel. Jumo, 10: sale hacia Londres en misión diplomática, con Luis LópezMéndez y Andrés Bello. Julio, 10: llega a Portsmouth. En Londres entra encontacto con Miranda. Julio-agosto: conferencias con lord Wellesley, cancillerbritánico. Septiembre, 21: se embarca hacia La Guaira, vía Trinidad. Diciem-bre, 7: ya en Caracas, rinde informe de su misión.

1811Enero-junio: participa asiduamente en las reuniones de la Sociedad Patriótica.Julio, 4: se pronuncia en favor de la independencia absoluta. Julio, 5: elCongreso declara la independencia de Venezuela. Julio, 20: Miranda marcha asometer la insurrección de Valencia. Bolívar encabeza el batallón Aragua.Agosto, 13: sangrienta batalla de Valencia. Agosto, 15: llega a Caracas con elparte del triunfo de los patriotas.

1812Marzo, 26: terremoto de Caracas; histórica arenga. Mayo, 4: asume el mandode Puerto Cabello. Junio, 30: se subleva el Fuerte de San Felipe contra lospatriotas. Julio, 6: abandona la plaza en el bergantín Celoso. Julio, 24: capitulaMiranda ante Monteverde. Julio, 30: un grupo de oficiales, entre ellos Bolívar,detiene a Miranda en La Guaira; tropas de Monteverde arrestan a los principalespatriotas; Bolívar se oculta. Agosto, 1.° se traslada a Caracas. Agosto, 26:obtiene pasaporte para abandonar el país.. Agosto, 27: sale de La Guaira paraCurazao, a donde llega el 1° de septiembre. Octubre: se dirige a Cartagena,desde allí el 27 de noviembre escribe al Congreso de Nueva Granada implo-rando protección para sus compatriotas. Diciembre, 15: redacta y suscribe elManifiesto de Cartagena. Diciembre 21: nombrado comandante comienza lacampaña del Magdalena.

1813Febrero: triunfos en Cúcuta. Mayo, 14: inicia la Campaña Admirable. Mayo,23: aclamado Libertador en Mérida. Junio, 15: proclama en Trujillo la guerra amuerte. Agosto, 7: entra en Caracas. La Municipalidad lo nombra capitángeneral de los ejércitos de Venezuela y le da el título de Libertador. Agosto, 8:anuncia al Congreso de Nueva Granada el restablecimiento de la República deVenezuela. Diciembre, 5: batalla de Araure. Diciembre, 29: retorna a Caracas.

1814Enero, 2: da cuenta de sus actos a la Asamblea Popular reunida en Caracas.Febrero-marzo: combates en San Mateo. Junio, 15: derrotado en La Puerta.Julio, 7: dirige y custodia la emigración en masa de la población de Caracashacia el oriente del país. Septiembre, 7: difunde su Manifiesto de Carúpano.Septiembre, 8: sale de Carúpano rumbo a Cartagena, donde llega el 19.Noviembre, 24: comparece ante el Congreso de Nueva Granada, en Tunja.Noviembre, 27: el gobierno de Nueva Granada lo asciende a general dedivisión; por encargo de éste somete a Cundinamarca a la unión granadina.

295

Page 289: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

1815Enero, 23: capitán general de la Confederación de la Nueva Granada. Mayo 9:se embarca para Jamaica, llega el 14 a Kingston. Septiembre, 6: escribe la Cartade Jamaica. Diciembre, 10: se salva de ser asesinado. Diciembre, 18: se embarcapara Cartagena. Enterado de la capitulación de esa plaza, cambia de rumbo y sedirige a Haití. Diciembre, 25: desembarca en Los Cayos de San Luis.

1816Enero, 2: conferencia con Petion; prepara la expedición de Los Cayos. Febrero,7: los patriotas exiliados lo aclaman como jefe supremo. Marzo, 31: parte consus hombres rumbo a Margarita. Mayo, 2: combate frente a la isla de LosFrailes; abordaje del bergantín Intrépido. Mayo, 3: desembarca en la isla deMargarita. Mayo 7: una asamblea de patriotas lo ratifica como jefe supremo.Jumo 2: decreta en Carúpano la libertad de los esclavos. Junio-julio: desastre deOcumare. Agosto 22: estalla sedición en su contra. Se salva de un atentado.Agosto, 23: se embarca con destino a Haití. Diciembre, 21: expedición deJacmel. Diciembre, 31: desembarca en Barcelona.

1817Abril, 3: Llega al río Orinoco. Julio, 4: se salva de caer prisionero arrojándose ala laguna de Casacoima. Julio, 17: entra la escuadra republicana al Orinoco.Bolívar ocupa Angostura. Octubre, 10: dicta Ley de Reparto de Tierras a lossoldados. Octubre, 16: fusilamiento de Piar. Octubre, 30: funda el Consejo deEstado.

1818Enero, 22: concentra todas las fuerzas de Guayana en la isla de La Urbana en elAlto Orinoco. Enero, 31: se reúne con Páez en el Hato de Cañafístola. Febrero-marzo: combate en los llanos. Abril, 17: sorpresa del Rincón de los Toros;escapa de ser asesinado. Jumo, 5: Llega a Angostura. Agosto, 15: a losneogranadinos anúnciales su pronta libertad. Octubre, 1.“: expone al Consejode Estado la situación política y militar del país y su proyecto de reunir elCongreso. Octubre, 22: convoca a elecciones para diputados.

1819Febrero, 15: instala el Congreso en Angostura con histórico discurso. Marzo-abril: combate en los llanos de Apure. Mayo, 23: consejo de guerra en la aldeadel Setenta; expone su plan de tramontar los Andes y sorprender a los realistaspor la retaguardia. Mayo, 27: emprende la campaña libertadora de NuevaGranada. Julio, 5: cruza con su ejército al páramo de Pisba. Julio, 25: batalla delPantano de Vargas. Agosto, 7: batalla de Boyacá; se sella la independencia deNueva Granada. Agosto, 10: entra victorioso en Santa Fe de Bogotá. Septiem-bre, 20: regresa a Venezuela. Diciembre, ll: llega a Angostura. Diciembre, 17:el Congreso declara fundada la República de Colombia y lo elige presidente.Diciembre, 24: parte hacia Nueva Granada.

296

Page 290: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

1820Marzo, 5: llega a Bogotá. Marzo, 22: se encamina hacia Cúcuta a preparar lacampaña de Venezuela. Julio, 6: Morillo le propone un armisticio; se acuerdauna tregua. Septiembre, 21: escribe a Morillo desde San Cristóbal; se reinicianlas operaciones. Octubre, 1.“: toma Mérida. Octubre, 7: entra en Trujillo.Noviembre, 21: nuevas conversaciones de paz. Noviembre, 27: entrevista conMorillo en Santa Ana; firman Tratado de Armisticio y Regularización de laGuerra.

1821Enero, 10: vuelve a Bogotá. Marzo, 1.“: reemprende la lucha con Venezuela.Abril, 17: anuncia ruptura del armisticio. Jumo, 24: batalla de Carabobo; quedaasegurada la independencia de Venezuela. Junio, 29: entrada triunfal a Caracas.Agosto 23: desde Trujillo, participa al general San Martín la victoria deCarabobo y le ofrece colaboración para la libertad del Perú. Septiembre, 7: elCongreso en la Villa del Rosario de Cúcuta lo elige presidente de la República,allí llega el 29 procedente de Maracaibo. Octubre, 2: asume la primeramagistratura. Octubre, 4: dispuesto a liberar los departamentos del sur de lanación, pide al Congreso le señale las funciones que le corresponden comopresidente en campana. Octubre, 9: recibe del Congreso facultades extraordina-rias. Octubre, ll: parte hacia Bogotá; emprende los preparativos de la campañadel sur.

1822Enero, 2: llega a Cali. Abril, 7: derrota a los realistas en Bomboná. Mayo, 24:Sucre gana la batalla de Pichincha; se sella la independencia del Ecuador. Jumo,16: entra a Quito; se le dispensa entusiasta recepción; conoce a Manuela Sáenz.Julio, 13: llega a Guayaquil. Julio, 27: entrevista con San Martín.

1823Febrero: invita a Chile y Buenos Aires a una “cooperación simultánea paradestruir al ejército real en América del Sur”. Marzo, l.° Riva Agüero,presidente del Perú, le pide cuatro mil soldados. Marzo, 15: participa a Limaque enviará dos divisiones de tres mil hombres cada una. Mayo, 14: lo llama elCongreso del Perú. Agosto, 2: recibe el permiso del Congreso de Colombiapara trasladarse al Perú. Agosto, 7: se embarca en Guayaquil rumbo a ElCallao. Llega el 1° de septiembre. Septiembre, 10: el Congreso del Perú leconfiere la suprema autoridad militar.

1824Enero, 1.“: muy enfermo en Pativilca. Enero, 15: responde a Mosquera con unrotundo “triunfar” cuanto éste le pregunta qué hará ante las inmensas dificul-tades que lo rodean. Febrero, 1.°: el Congreso del Perú lo hace dictador.Marzo, 8: establece su cuartel en Trujillo; decreta la movilización general “queuna paja no quede inútil en toda la extensión del territorio libre”. Marzo, 26:instala la Corte Superior de Justicia. Abril, 8: ordena el reparto de tierras entrelos indígenas. Mayo, 1.° funda la Universidad de Trujillo. Julio, 15: concentra

297

Page 291: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

sus fuerzas en Pasto. Julio, 28: el Congreso de Colombia deja sin efecto lospoderes extraordinarios que le había otorgado y lo aparta del mando delejército. Agosto, 2: pasa revista a sus tropas: seis mil colombianos y tres milperuanos, para Sucre el mejor ejército que se hubiese organizado en América;histórica proclama. Agosto, 6: libra la batalla de Junín. Octubre, 24: recibe lanotificación de que sus poderes son revocados. Delega en Sucre todas susatribuciones como general en jefe de las fuerzas colombianas en el Perú y asumela dirección suprema de la guerra como dictador del Perú. Diciembre, 7: ocupaLima. El mismo día convoca el Congreso Anfictiónico de Panamá. Diciembre,9: batalla de Ayacucho: independencia del Perú y de. América. Diciembre, 22:renuncia a la presidencia de Colombia.

1825Febrero, 10: ante el Congreso del Perú rinde cuenta de su gestión; renuncia a ladictadura. El Congreso le ratifica su confianza y lo encarga del supremo mandopolítico y militar del país con el título de Libertador. Abril, 1.“: establece elConsejo de Gobierno. Abril, ll: visita administrativa a los departamentos delsur. Mayo, 16: convoca a los diputados del Alto Perú. Jumo, 15: llega al Cuzco.Julio, 4: decreta el reparto de tierras entre los indígenas, suprime el título yautoridad de los caciques y libera a los aborígenes del servicio personalobligatorio. Julio, 8: crea en el Cuzco los colegios de educandas y de estudiosde ciencias y artes. Agosto, 5: llega a Puno. Agosto, 6: se fuma el acta deindependencia y creación de la República de Bolivia. Agosto, 18: entradatriunfal en La Paz; se le otorga el poder supremo. Septiembre, 20: parte aPotosí. Octubre, 10: recibe a los comisionados argentinos Alvear y Díaz Vélez.Octubre, 26: iza las banderas de Colombia, Argentina y el Perú en la cima delPotosí. Noviembre, 1.“: va a Chuquisaca, capital del nuevo estado, donde llegael 3. Noviembre, 26: convoca a elecciones para la Asamblea Constituyente.Diciembre, 8: dispone la gratuidad de la administración de justicia; ordena laconstrucción de caminos. Diciembre, ll: decreta la creación de colegiosprimarios, escuelas para huérfanos, colegio de ciencias y artes, academia militaren Chuquisaca; asume en beneficio del Estado, para gastos de educación, losbienes raíces, derechos, rentas y acciones de las capellanías. Diciembre, 14:ordena repartir tierras entre los indígenas. Diciembre, 15: crea el Tribunal deJusticia de La Paz. Diciembre, 22: exime a los indígenas de todo tributo.Diciembre, 24: crea una sociedad económica para el estudio, exploración yexplotación de los recursos naturales del país. Diciembre, 29: delega en Sucre elmando supremo.

1826Enero, 10: sale de Chuquisaca hacia Lima. Febrero, 7: desembarca en Chorri-llos. Marzo, 6: rechaza los planes monárquicos de Páez. Mayo, 25: envía a Sucresu “Proyecto de Constitución para Bolivia” y su discurso de presentación.Jumo, 22: se reúne en Panamá el Congreso Anfictiónico. Agosto, 3: dirigecircular a los departamentos del norte sobre reformas a la Constitución deCúcuta. Agosto, 16: el Perú adopta la Constitución Boliviana. Septiembre, 1.°:llamado por sus compatriotas, delega en Santa Cruz y ministros del despacho elmando supremo del Perú, y regresa a Colombia. Septiembre, 3: se embarca en

298

Page 292: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

El Callao rumbo a Guayaquil, llega el 12 cálidamente recibido. Septiembre, 28:arriba a Quito. Octubre, 5: continúa viaje hacia Bogotá adonde llega el 14 denoviembre y asume la presidencia el 23. Noviembre, 25: delega de nuevo susfacultades de gobierno en el vicepresidente Santander -excepto en los departa-mentos venezolanos en los cuales se reserva el ejercicio exclusivo del PoderEjecutive y parte a sofocar la rebelión secesionista de Páez. Noviembre, 30:El Consejo de Gobierno, en Lima, lo proclama presidente vitalicio del Perú.Diciembre 17: desde Maracaibo invita a los conjurados a deponer las armas.Diciembre, 23: escribe conciliadora carta a Páez desde Coro. Diciembre, 31:llega a Puerto Cabello.

1827Enero, 1.°: concede amnistía general y nombra a Páez autoridad civil y militarde Venezuela. Enero, 4: va a Valencia al encuentro de Páez; pública manifesta-ción de obediencia y subordinación de éste al Libertador. Enero, 12: Caracas lorecibe jubilosamente. Marzo, 6: rompe con Santander. Abril, 6: pide a Sucreacepte la presidencia vitalicia de Bolivia. Junio, 6: el Congreso rechaza surenuncia enviada en febrero y lo invita a reasumir el gobierno. Junio, 19: enCaracas, anuncia su marcha hacia el sur de la República a restablecer el orden,subvertido en Guayaquil por un movimiento separatista estimulado por elPerú. Junio, 24: decreta los nuevos estatutos de la Universidad de Caracas.Julio, 5: se embarca en La Guaira para Bogotá, vía Cartagena. Septiembre 10:llega a Bogotá y asume el mando.

1828Marzo, 14: se encamina a Bucaramanga, el 31 establece allí su centro deoperaciones. Mayo: desde Bucaramanga, sigue debates de la Convención.Jumo, 9: viaja hacia Bogotá. Jumo, ll: se disuelve la Convención de Ocaña.Junio, 13: asamblea popular anula en Bogotá el mandato de los diputados yconcentra el poder en Bolívar. Junio, 24: llega a Bogotá y asume el mandocomo dictador-presidente. Agosto, 27: expide el decreto orgánico de sugobierno. Septiembre, 20: crea el Consejo de Estado. Septiembre, 25: sale. ilesode memorable atentado. Se resiente su salud, ya delicada. Diciembre, 24:convoca Congreso Constituyente para enero de 1830. Diciembre, 28: delega elmando en el Consejo de Ministros y se dirige al sur.

1829Enero, 23: Llega a Popayán camino a Quito. Febrero, 26: Sucre derrota a losperuanos en el Portete de Tarqui. Febrero, 28: se firma el Tratado de Girón.Marzo, 17: Bolívar llega a Quito. Julio, 21: Colombia recupera Guayaquil; elLibertador es aclamado. Agosto, 10: enferma. Septiembre 22: tratado de pazcon el Perú. Octubre 20: regresa a Quito y sigue a Bogotá el 29. Noviembre 22:desde Popayán desaprueba los planes monárquicos del gabinete y reafirma suvocación republicana.

1830Enero, 15: entra en Bogotá. Enero, 20: instala el Congreso Constituyente;renuncia a la presidencia. La asamblea se declara sin facultades para conside-

299

Page 293: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

rarla. Marzo, 1° designa a Domingo Caicedo presidente interino de laRepública, le entrega el mando y se retira a Fucha, fuera de la capital. Abril, 27:reitera su renuncia a la presidencia. Mayo, 8: enfermo, parte de Bogotá caminodel exilio; busca embarcarse en Cartagena rumbo a Europa. Junio, 24: llega aCartagena. Julio, 1.° recibe la noticia del asesinato de Sucre. Del 2 a 5 deseptiembre: Bogotá, Cartagena y otras ciudades le piden regresar a la presiden-cia. Septiembre, 25: manifiesta su decisión de no reasumir el mando supremo.Octubre, 2: deja Cartagena y se encamina a Santa Marta. Octubre, 15: sedetiene en Soledad, se agudizan sus quebrantos de salud. Noviembre, 8: llega aBarranquilla. Diciembre, 1.° arriba a Santa. Marta. Diciembre, 6: don Joaquínde Mier, hidalgo español, lo acoge en su quinta de San Pedro Alejandrino.Diciembre, 10: recibe los santos sacramentos y dicta su última proclama.Diciembre, ll: firma su testamento, elaborado la víspera, Diciembre, 14:empeora su estado. Diciembre, 16: empieza a delirar; entra en lenta y penosaagonía. Diciembre, 17: expira, a la una y siete minutos de la tarde.

Page 294: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

G L O S A R I OG E O G R Á F I C O

Angostura: Ciudad de Venezuela, al sur del Orinoco, en la parte más angostadel río. Actual Ciudad Bolívar.

Apure, Sun Fernando de: Ciudad de Venezuela, sobre la margen derecha del ríoApure, en los llanos del sur.

Babahoyo: Población, cantón y río del Ecuador.Barcelona: Ciudad del oriente de Venezuela, cerca del mar Caribe y a orillas del

río Neverí.Barichara: Ciudad colombiana del departamento de Galán, en el este del país.Barinas: Población y provincia de los llanos occidentales de Venezuela.Bogotá: Capital de la República de Colombia, llamada en la época colonial y

durante la independencia: Santa Fe de Bogotá, y también Santafé o SantaFe.

Boyará: Aldea de Colombia donde el Libertador ganó la famosa batalla delmismo nombre que aseguró la independencia de la Nueva Granada.

Bucuramanga: Ciudad de Colombia donde el libertador residió, en 1828, mien-tras se reunía la Convención de Ocaña.

Caracas: Capital de Venezuela, a veinte kilómetros de la costa del mar Caribe,y con 922 metros de altitud, región norte central.

Cartagena de Indias: Puerto de Colombia sobre el mar Caribe, célebre por susfortalezas para protección contra los piratas de la época colonial.

Carúpano: Ciudad y puerto de la costa oriental de Venezuela.Cúcuta: Ciudad colombiana, próxima a la frontera con Venezuela. Se llamaba

también El Rosario, Villa del Rosario y El Rosario de Cúcuta.Cundinamarca: Provincia de Colombia y antiguo nombre de la Nueva Granada.Curazao: Isla holandesa del mar Caribe, frente a la costa de Venezuela.Cuzco: Histórica ciudad del Perú sobre la cordillera de los Andes, antigua y

famosa capital del imperio inca.Chancay: Provincia y ciudad del Perú.Chimborazo: Máxima elevación del Ecuador: 6 272 metros.Chuquisaca: Importante ciudad de Bolivia, actualmente se llama: Sucre.Guayana: Provincia y región sur de Venezuela, sobre la margen derecha del río

Orinoco y hasta el río Esequibo.Guayaquil: Puerto sobre el río Guayas, en la costa del Océano Pacífico. La más

populosa ciudad del Ecuador.

301

Page 295: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

Huamachuco: Municipio y ciudad del Perú.Huamanga: Provincia del Perú, su capital es Ayacucho.Ibarra: Ciudad del Ecuador, al noreste de Quito, 2 628 metros sobre el nivel

del mar.ica: Ciudad del Perú, al sudeste de Lima.Kingston: Capital de Jamaica, en el mar Caribe.Lima: Importante metrópoli, capital del Virreinato del Perú y de la República

del Perú. Cerca de la costa del Pacífico.Magdalena, la: Suburbio de la ciudad de Lima y nombre de la residencia que allí

ocupó el Libertador.Nueva Granada: Virreinato al norte de Suramérica, con costas sobre el Pacífico

y el Caribe. Capital: Bogotá. Actual Colombia.Ocaña: Ciudad de Colombia, en el interior andino.Panamá: Ciudad en el istmo del mismo nombre, la parte más angosta de

América, entre el Océano Pacífico y el Atlántico.Pasco: Departamento del Perú.Pativilca: Ciudad, río y distrito de la provincia de Chancay en la costa marítima

del Perú.Potosí: Ciudad de Bolivia, capital del Departamento homónimo. Altitud: 4 040

metros.Puerto Cabello: Importante puerto y fortaleza de la región centrooccidental de

Venezuela:Quito: Capital de la república del Ecuador, a 2 800 metros sobre el mar.Rosario de Cúcuta, El: Véase Cúcuta.Río de la Plata: Virreinato creado por España en los territorios de la actual

Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay.San Carlos: Ciudad de los llanos occidentales de Venezuela.San Mateo: Localidad de los Valles de Aragua, en el centro de Venezuela.Santa Marta: Ciudad y puerto de Colombia sobre el mar Caribe.Socorro, El: Población y municipio del suroeste de Colombia.Trujillo (Perú): Ciudad en la costa peruana, al noroeste de Lima.Trujillo (Venezuela): Ciudad de la región andina.Tukán: Ciudad ecuatoriana al noreste de Quito, 2 745 metros de altitud.Urubamba: Río, provincia y ciudad del departamento de Cuzco, en el Perú.Valencia: Importante ciudad de Venezuela en las inmediaciones de la sabana de

Carabobo y de Puerto Cabello.

302

Page 296: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

G L O S A R I ODE PERSONAJES

H I S T Ó R I C O S

Alvear, Carlos M. de (1788-1852). General y político argentino. Amigo ycolaborador del libertador José de San Martín.

Arboleda, José Rafael (1795-1831). Escritor y político colombiano. Notable porsu inteligencia, cultura y virtudes.

Bello, Andrés (1781-1865). Nacido en Caracas. Principal humanista de América.Bolívar, Fernando (1810-1898). Venezolano. Sobrino de Simón Bolívar quien

atendió a su educación en los Estados Unidos.Bonpland, Aimé (1773-1858). Naturalista, y explorador francés. Amigo de

Bolívar desde 1804. Colaboró con Humboldt.Briceño Méndez, Pedro (1794-1835). Militar y político venezolano. Cercano

lugarteniente y hombre de confianza del Libertador, a cuya familia ingresó.Campbell, Patrick. Coronel inglés, fue encargado de negocios de la Gran

Bretaña ante el gobierno de la República de Colombia.Cullen, Henry. Súbdito británico residente en Falmouth (Jamaica), amigo y

corresponsal de Bolívar.Díaz Vélez, josé Miguel. Diplomático argentino, campanero de Alvear en la

misión ante Bolívar en 1825.D’Évereux, John. General irlandés, distinguido voluntario entre los legionarios

británicos.Fruncía, Gaspar Rodriguez de (1766-1840). Político del Paraguay, gobernó

tiránicamente esa nación durante veintiséis años.Humboldt, Alejandro de (1769-1859). Sabio naturalista alemán. Admirable por

su ciencia y por la calidad y magnitud de sus estudios sobre América.Lacroix, Luis Peru de (1780-1837). Talentoso francés, coronel de Colombia.

Admitido en la intimidad de Bolívar, es autor del Diario de Bucaramanga.Lancaster, Joseph (1778-1838). Pedagogo inglés, inventor del sistema de las

escuelas mutuas, por el cual un maestro podía -ayudado por los alumnossobresalientes- atender hasta mil alumnos.

López Méndez, Luis (1758-1841). Político y diplomático venezolano, com-pañero de Bolívar en la misión a Londres de 1810. Residió en Inglaterrapor muchos arios y fue decisivo en la gestión para captar voluntariosbritánicos para la independencia.

Narino, Antonio (1765-1823). Insigne pensador, militar y político colombiano.Precursor de la independencia.

303

Page 297: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L í V A R

O’Híggins, Bernardo (1776-1842). Ilustre patriota y militar chileno. Figuracumbre de la historia de su patria.

Páez, José Antonio (1790-1873). Notable guerrero y político venezolano demuy larga actuación. Famoso por sus luchas en los Llanos.

Palacios, Esteban (1767-1830). Tío y padrino de Simón Bolívar, posiblemente elmás querido por éste de sus parientes inmediatos.

Penalver, Fernando (1765-1837). Político, diputado y Probo administradorvenezolano. Amigo entrañable y de confianza del Libertador.

Petion, Alexandre (1770-1818). Uno de los principales jefes de la revoluciónhaitiana de 1804 y primer presidente de Haití.

Pueyrredón, Juan Martín de (1776-1850). Notable político argentino, gobernópor varios años a su país. Amigo de San Martín y de Bolívar.

Retiovales, Mariano (1774-1819). Militar español que una vez proyectó servir ala independencia americana.

Rodríguez, Simón (1771-1854). Filósofo, pedagogo e intelectual de Venezuela.El más trascendente de los maestros de Simón Bolívar.

Sáenz, Manuela (1797-1856). Valerosa quiteña. Fiel compañera y amante deBolívar desde 1822.

Salias, Vicente (1782-1816). Médico, poeta y periodista de Venezuela. Heroicoen sus ideales revolucionarios.

San Martín, José de (17781850). Ilustre libertador de la Argentina, Chile y elPerú. Notable militar y político.

Santander, Francisco de Paula (1792-1840). Importante militar y político deColombia. Fue vicepresidente de la República y tuvo larga figuración en elgobierno.

Soublette, Carlos (1789-1870). Distinguido militar y político de Venezuela.Souza Diaz, Luís. Enviado extraordinario y ministro plenipotenciario de S. M.

el emperador del Brasil ante el gobierno de Colombia en 1830.Sucre, Antonio José de (1795-1830). Insigne militar y político de Venezuela. El

más cercano y amado lugarteniente de Bolívar. Figura entre los máximosvalores de la historia de América.

Victoria, Guadalupe (1786-1843). Patriota y político mexicano. Fue presidentede México entre 1824 y 1829.

Washington Parke Custís, George. Hijo adoptivo del gran prócer norteamericanoGeorge Washington.

Whíte, Guillermo (1834). Venezolano de origen inglés. Amigo muy apreciadopor Simón Bolívar.

Wilson, Robert (1777-1849). Distinguido militar y parlamentario inglés. Amigode Bolívar y de la revolución de independencia, padre de su edecánBelford Wilson.

304

Page 298: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

1.2.

3.

4.

5.6.7.8.

9.10.

ll.12.

13.14.

15.

16.

17.18.19.20.

21.22.23.

ÍN D I C E

D E L A A N T O L O G ÍA

Del juramento en Roma por la libertad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“Estamos comprometidos a presencia del universo.

Nos empeñamos en producir la emancipación general” . . . . . . . .“Pongamos sin temor la piedra fundamental de la libertad surameri-

canaw . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Análisis de un fracaso y útil señalamiento para el curso de la

revolución . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Proclama de guerra a muerte . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Máximo rigor contra el fraude . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Memorial de crímenes del enemigo y razones de la guerra total . . . . .Firme en los principios de la libertad y del desprendimiento,

sometido a lajusticia y el derecho. Un nuevo orden mundial ...“Reflexiones sobre el estado actual de la Europa y de la América” ....Consciente del valor de la comunicación social. Una lección de

periodismo y ecuanimidad . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“Combatid y venceréis. Dios concede la victoria a la constancia” ....“La libertad, único objeto digno del sacrificio de la vida de los

hombres” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Visión global y profética sobre América Latina . . . . . . . . . . . . . . . . . .Sobre los problemas latinoamericanos y crítica a la indiferencia del

mundo ante sus esfuerzos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .La armonía racial en el mestizaje del nuevo mundo y otras medita-

ciones de Jamaica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Homenaje al magnánimo presidente Petion y la defensa de la patria

común . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“La libertad absoluta de los esclavos” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Firme confianza en la acción contra la tiranía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“La imprenta es tan útil como los pertrechos” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Reparto de los bienes nacionales entre los militares del pueblo

revolucionario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Bienvenida a los hermanos de la España democrática . . . . . . . . . . . . . .“Una sola debe ser la patria de todos los americanos” . . . . . . . . . . . . . .Gratitud a los que traen ciencias, artes, industrias, talentos y

virtudes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

65

66

67

67737576

8286

8890

9498

115

117

121122123124

125127128

130

305

Page 299: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

24.

25.

26.

27.

28.29.

30.31.32.33.

34.35.

36.37.38.39.40.41.

42.43.44.45.46.

47.

48.

49.

50.51.52.53.54.55.56.

Solemne y efectiva creación de la república sobre la libertad y elderecho. Las razones de la Constitución. La cuenta esencialdesusactos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Proyecto de una cuarta rama del Estado: un poder para la moral y laeducación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Un colegio de educación para los huérfanos, expósitos y pobres enSantafé . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Preocupación por el adiestramiento de las tropas y la formación deoficiales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

“La unánime determinación de morir libres y de no vivir esclavos” .La creación de Colombia: “Poder, prosperidad, grandeza, estabili-

dad” . . . . . . . . . . . . . . . . . .._ . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .El reconocimiento ala heroicidad de las mujeres . . . . . . . . . . . . . . . . .Del razonamiento para la abolición de la esclavitud . . . . . . . . . . . . . . .El servicio de la instrucción: maestros y escuelas para los indios .....“Para formar un legislador se necesita educarlo en una escuela de

moral, dejusticia y de leyes” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Las perspectivas de la paz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .El patronato, dirección y gobierno de los institutos docentes perte-

nece al Estado.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Concertación Norte-Sur para la independencia . . . . . . . . . . . . . . I ...En tomo a las dificultades de una nueva república . . . . . . . . . . . . . . . .La complejidad social de América . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Otra vez por la libertad de los esclavos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“Prefiero el título de ciudadano al de Libertador” . . . . . . . . . . . . . . . . .Homenaje del recuerdo, afecto y consideración a un científico

inmortal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .El cabal y moderno conocimiento de una pedagogía . . . . . . . . . . . . . .Solidaridad con San Martín por la independencia plena . . . . . . . . . . . .“Primer amigo de mi corazón y de mi patria” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Suma y combinación para asegurar la obra común . . . . . . . . . . . . . . . .Aplauso y reconocimiento a O’Higgins por devolver sus derechos

al pueblo de Chile . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“Nosotros estamos en el centro del universo y en contacto con

todas las naciones. Quién puede decir otro tanto?” . . . . . . . . . .“Mi política ha sido siempre por la estabilidad, por la fuerza y por la

verdadera libertad” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“El que no está con la libertad puede contar con las cadenas del

infortunio y con la desaprobación universal” . . . . . . . . . . . . . . .La creación de una escuela náutica en Guayaquil . . . . . . . . . . . . . . . . . .“Un tribunal que condene lo que las leyes no pueden impedir” . . . . . .Votos por la libertad peruana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Elogio al saber científico de Humboldt y Bonpland . . . . . . . . . . . . . . .“. . . y quise subir al atalaya del Universo” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Dos decretos para la moralidad administrativa . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“Usted formó mi corazón para la libertad, para la justicia, para lo

grande, para lo hermoso. Yo he seguido el sendero que ustedmeseñaló” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

131

153

160

161162

164166167168

169170

173174175177178179

180181183184185

187

188

190

191192193194195196197

200

Page 300: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

L A E S P E R A N Z A D E L U N I V E R S O

57.58.59.60.61.62.

63.64.65.66.67.

68.69.70.71.72.

73.74.

75.

76.

77.78.

79.

80.81.

82.83.

84.85.86.

87.

88.89.90.

A un soldado de la justicia y de la ley . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Decreto fundando la Universidad de Trujillo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“La esperanza del universo” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“La gloria está en ser grandey en ser útil” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Dos libros de la biblioteca de Napoleón . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“El día que nuestros plenipotenciarios hagan el canje de sus poderes

se fijará en la historia diplomática de América una épocainmortal” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

En cada capital una escuela normal lancasteriana . . . . . . . . . . . . . . . . .Perspectivas halagadoras desde la libertad peruana . . . . . . . . . . . . . . .Irrestricto apoyo al educador Joseph Lancaster . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Del corazón romántico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Selección de becarios para Europa a capacitarse en los negocios

públicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .El ejercicio inteligente de la crítica literaria . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .En defensa dela naturaleza . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Ala vanguardia de la educación femenina en América . . . . . . . . . . . . .Otro centro superior para la difusión de las luces . . . . . . . . . . . . . . . . .“Yo los he representado a presencia de los hombres; y yo los

representaré a presencia de la posteridad” . . . . . . . . . . . . . . . . . .Por la conservación de monumentos de la cultura indígena . . . . . . . . .“El pueblo argentino debe contar siempre con que nuestro corazón

no se apartará jamás de su futura suerte” . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“En quince años de una lucha de gigantes, hemos derrocado el

edificio de la tiranía formado en tres siglos” . . . . . . . . . . . . . . . . .El impulso plural: obligaciones y facultades del director general de

enseñanza pública . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Justicia en el reparto de tierras a los campesinos . . . . . . . . . . . . . . . . . .Pionero de la preocupación ecológica: medidas de conservación y

buen uso de las aguas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“Las naciones marchan hacia el término de su grandeza, con el

mismo paso con que camina la educación . . . . . . . . . . . . . . . . . .El severo e inflexible republicanismo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“El título de Libertador es superior a todos los que ha recibido el

orgullo humano” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Admiración a Washington . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Un cuerpo de opiniones sobre el modo de manejar hombres libres

conforme a los principios adoptados entre los pueblos cultos .De la cámara de censores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Honrado por la ciencia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“En la marcha de los siglos, podría encontrarse, quizá, una sola

nación cubriendo al universo: la federal” . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Quien usurpare derechos y caudales del Estado, “por pequeño que

sea su montamiento”, incurrirá en la pena de muerte yconfiscación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Una vasta e integral concepción universitaria . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Organizando también la Universidad Central de Quito . . . . . . . . . . .El cuadro de las aflicciones de Colombia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

201203204205206

207210211213214

215215217219220

221222

223

224

225227

228

229234

237238

239248250

251

252254265267

307

Page 301: La Esperanza del Universo - Simón Bolíva.pdf

S I M Ó N B O L ÍV A R

91.92.93.

94.95.

96.97.

98.

99.loo.

Educación para un soldado de la patria . . . . . . . . . . . . . . .Ofrecimiento a la cultura . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Para la protección y aprovechamiento científicos de la riqueza

forestal de la nación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Con México seguirá sosteniendo la causa de la unidad . . . . . . . . . .Reafirmación republicana y categórica precisión respecto a los

Estados Unidos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ....Política, derecho y ciencia de minas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“La independencia es el único bien que hemos adquirido a costa de

losdemás” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Brasil es “garantía poderosa” para la independencia de las repúblicas

de América . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .La más penosa despedida . . . . . . , . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .“Todos debéis trabajar por el bien inestimable de la unión. . . Mis

últimos votos son por la felicidad de la patria” . . . . . . . . . . . ,

275276

277279

280282

284

289290

291

308