LA APLICACIÓN DE LA DISCIPLINA PARA CONQUISTADORES Y AVENTUREROS · 2011-11-25 · AVENTUREROS...

Club de Guías Mayores Chalatenango

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LA APLICACIÓN DE LA DISCIPLINA PARA CONQUISTADORES Y AVENTUREROS

Comprendiendo la Disciplina

Existen nueve principios que deben ser recordados al reprender un niño. Sólo el discipulado es la

meta de la disciplina, ¿cuáles son algunas constantes que nosotros como adultos podemos

incorporar?

No ser extravagante o caprichoso.

Existen dos áreas principales contra las cuales se debe guardar. La primera, son las reglas que

usted hace. Hay muchas cosas que son equivocadas o peligrosas, y que usted necesita negar a un

niño.

Es difícil actuar positivamente. Siempre que un niño pida algo, trate en su respuesta inicial decir

que sí. Solamente, diga NO si tiene que decir NO.

La otra área tiene que ver con la argumentación. La capacidad de tener buenos argumentos es

importante y difícil al mismo tiempo, especialmente, si usted tiene un niño persistente. Diga lo que

piensa, y piense en lo que dice.

Mantener las reglas en un mínimo.

Muchos adultos poseen tres reglas fáciles de ser comprendidas por los niños, o sea, tres reglas

que, si son quebrantadas, las lleva a la disciplina. Ellas son:


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1. Mentir

2. Desobedecer

3. Faltar al respeto

Cuantas más reglas tenga, es difícil tanto para ustedes como para los niños trabajar con ellas. En lo

posible, que su relación con el niño sea basado en lo positivo. Las reglas, generalmente, lidan con lo

que no puede ser hecho.

Permitir que los niños tengan la libertad de ser honestos.

Algunos niños tienen la suerte de tener padres prontos a escuchar el lado de ellos de la historia.

Cuando estos niños piensan que sus padres están equivocados o son injustos, pueden siempre

tener la libertad de hablar con ellos sobre esto. Mientras los niños actúan con respeto, los padres

están listos para escuchar.

El autor de Proverbios 18:13 dice: “Al que responde sin haber escuchado, la palabra le es fatuidad y

vergüenza”

Es mejor escuchar un niño antes de aplicar la disciplina, de que después. Actuar así evitará

bastante pesar.

Estar llano a admitir que usted está equivocado.

Todos nosotros cometemos errores. Cuando usted cometa alguno, admítalo. Usted no puede

engañar un niño; él sabe cuando usted está equivocado. Esto puede ser duro para su orgullo, pero

vaya donde él y dígale: Lo Siento mucho, ¿me perdonas? Usted no perderá el respeto frente al niño

al hacer esto, y sí, se lo va a ganar. Su disposición en admitir cuando está equivocado le dará

credibilidad en el proceso disciplinario.


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Tratar de resolver el problema Básico.

Este es el lado contrario a vivir diciendo no. Creo que Pablo tenía en mente al decir: “Y vosotros,

padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos” (Efesios 6:4)

Por ejemplo, aquellos niños que llegan atrasados habitualmente a las reuniones. En vez de que la

reprehendan cada vez que esto pase, pida al Señor que le revele el problema básico. Usted verá que

se desenvuelve un padrón. Él entra en la conversación de los otros. Se desvía de las personas al

hablar con ellas.

El problema principal es la insensibilidad a las personas. Llegar tarde a las reuniones es un síntoma.

En vez de atacar síntomas, pida a Dios que le dé la sabiduría de ayudarlo con la raíz del problema.

Permita que el niño ayude a evaluar su desobediencia.

Converse con él sobre todo el problema. Déjelo que él mismo se haga un auto examen y presente la

solución.

Recuerde, su objetivo es ayudarlo a auto disciplinarse. Si él es capaz de ser enseñado, mientras

más envuelto en el proceso mayor serán las oportunidades para la solución.

Nunca acusar a un niño, preguntar siempre.

Es difícil de practicar eso cuando usted siente que está por arriba. Hablando del Mesías, Isaías dice:

“No juzgará según la vista de sus ojos ni resolverá por lo que oigan sus oídos” (Isaías 11:32).

Generalmente, los ojos y los oídos engañan. Si Jesús se rehusaba a juzgar por estos sentidos,

deberíamos seguir su ejemplo. Por eso, es mejor preguntar.


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Si el niño miente, ore para que el Señor lo ayude a enfrentar su mentira. Es mejor que el niño sepa

que usted confía en él, mismo cuando esta confianza puede ser traicionada, de lo que falsamente lo

acusa y así demostrar falta de confianza en él. Usted debe enseñarle que al final él debe responder

a Dios que conoce y comprende el corazón.

Certificarse de que usted y su staff tiene el mismo punto de vista.

El niño puede tirar un líder contra otro, pero en el mismo grado que él logra su objetivo, se torna

más inseguro. Junto con los otros miembros de la directiva, ustedes son el ejemplo de autoridad.

Cuando no coinciden en propósito, el niño se siente inseguro. Si usted siente que no hay unidad

entre usted y el staff, juzgue hasta que no quede sólo y así poder hablar sobre el tema. Como Jesús

dijo: “Y ninguna ciudad o casa dividida contra sí misma permanecerá” (Mateo 12:25)

Nunca ridiculizar o traicionar un niño.

La mayoría de las personas tienen un censo de autoestima frágil. Al conducir a los niños y juveniles,

necesitamos construir y no destruir ese sentimiento. Cuando traicionamos comunicamos rechazo,

no la corrección. La corrección tiene el propósito de restaurar, pero el ridículo anula este

propósito.

El amor perdona

“El Amor Cancela Muchos Pecados”

Si es adecuadamente aplicada, la disciplina puede desempeñar un papel positivo en el acto de

disciplinar. Cuando no se aplica correctamente, puede destruir todos u otros esfuerzos en aquella

dirección. Por esta razón es esencia que usted sea creativo al corregir. Ore para que el Santo

Espíritu lo libre de la trampa de ser negativo, punitivo o reaccionario.


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Todos cometen errores cuando niños y, generalmente, esos errores exigen una disculpa.

Felizmente, los niños de algún modo notan que los adultos también son falibles. Los padres pueden

encontrar aliento y consuelo en la promesa de Pedro: “el amor cubrirá multitud de pecados” (I

Pedro 4:2)

El objetivo de la disciplina es entrenar / enseñar al niño para su autocontrol. Educación, 287

¿Disciplina Efectiva?

¿Qué es disciplina?

Una de las lecciones más importantes que los niños necesitan aprender es la auto confianza y el

autodominio. Los métodos de disciplina utilizados en el programa de conquistadores irá determinar

cuan, efectivamente, esta lección puede ser enseñada a los niños. Un profesor disciplina a un niño

para ayudar a que mejore su comportamiento o actitud para que sea una mejor persona y más feliz.

Disciplinar es enseñar. Y disciplinar, el mayor objetivo es que el niño aprenda a cómo controlar su

propio comportamiento de modo que no necesite depender de la disciplina del profesor.

Existe una diferencia enorme entre disciplina y punición. Un buen profesor estará, constantemente,

disciplinando (enseñando) a los niños que están bajo su responsabilidad, pero no usará la punición

en el programa de conquistadores. La punición es herir a una persona, tanto física como

emocionalmente, o vengarse de alguien. Los profesores punen a los niños, ya que, tratan de evitar

la repetición de acciones no deseadas o de hacerlas cumplir las reglas que han sido establecidas.

Pero la punición sólo asusta a niños o los fuerza a cumplir algo, y nada tiene que ver con

enseñarles, efectivamente, a cómo gobernar sus propios actos cuando la amenaza de punición es

removida. Usualmente, funciona por poco tiempo, y es desagradable tanto para el profesor como

para el alumno.


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Generalmente, un profesor pune para satisfacer su propia rabia. Es muy importante notar que

jamás puede tener una disciplina efectiva basada en la ira. La ira lleva a que el profesor hable cosas

que destruyen la auto confianza del niño.

Un ejemplo es: ¿No puedes hacer nada bien? O el profesor hace cosas que destruye la autoestima,

así como, entristecerlo o aislarlo y decirles a los otros niños que él fue un niño desobediente.

Actitudes como éstas no enseñan al niño al autocontrol y dominio propio. Ellas le enseñan:

Que él no es una persona buena.

Que si usted es mayor, tiene el derecho de decir o hacer cosas que lo hieren.

A cultivar sentimientos de odio contra el profesor.

A planear maneras de venganza.

La punición injusta despierta en el niño sentimientos de ira, odio, humillación, irrespeto, frustración.

¿Es así cómo queremos que el niño se sienta? ¿Queremos desarrollar estos sentimientos en el

carácter del niño?

La disciplina efectiva, por otro lado, le enseña al niño a cómo mantener sus actos bajo control.

Disciplina Efectiva

Disciplina: es un proceso educacional por el cual un individuo aprende cual es el comportamiento

que no es aceptado y por qué no lo es.

La punición es una consecuencia infligida que la persona recibe por un mal comportamiento.

El mal comportamiento es aquel que:


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Entorpece la relación del individuo con Dios.

Impide o entorpece que alguien realice su mejor potencial y logre sus metas.

Invade el derecho de los otros.

El mal comportamiento es causado por:

Necesidades no satisfechas.

Falta de comprensión.

Pensar que el mal comportamiento es más deseado que uno aceptable.

Rebeldía.

Un acuerdo debe ser simple e incluir cuatro cosas:

Lo que el niño prometa a hacer por sus padres.

Lo que los padres prometen hacer por sus hijos.

Lo que le ocurrirá al niño si no cumple la promesa.

Lo que les sucederá a los padres si no cumplen la promesa.

Hay seis reglas para establecer un acuerdo o contrato:

El acuerdo debe ser formulado tanto por los padres como por el niño.

Debería incluir exigencias e ítems realistas y razonables.


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Todos deben estar satisfechos con lo que van a recibir del acuerdo.

El acuerdo no debe ser revisado hasta que no sea probado que es bueno.

Los padres deben evitar recompensas prematuras; y/o complementarias. Se han hecho

estudios que muestran que las recompensas, solamente, son efectivas cuando se logra el

comportamiento deseado.

El acuerdo debe ser mantenido en un local, fácilmente, accesible tanto para los padres

como para los hijos.

Un buen autor disciplinario.

Tiene una relación positiva y buena con el niño.

Es capaz de perdonar y olvidar.

Es altruista.

Tiene motivo razonablemente puros.

Principios de una Buena Disciplina

En un Club de Conquistadores, la buena disciplina da un ambiente propicio a actitudes alegres y

comportamiento cooperativo. Enfatiza el liderazgo en vez de restringirla, siendo constructiva en vez

de destructiva. No debilita, pero capacita. Estimula el dominio propio y actividades significativas,

desalentando actitudes punitivas.


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El mejor tipo de disciplina es aquella que enseña al conquistador a hacer lo que es correcto en el

momento oportuno, de la mejor manera. La buena disciplina evita problemas. A seguir algunas

técnicas positivas de disciplina:

Establezca armonía, Amor, comprensión, calor humano y aceptación conducen a la armonía. El

primer ingrediente para una disciplina efectiva es la conexión que el profesor establece con cada

niño, individualmente.

Este clima de concordancia es desarrollado mostrando al niño que es aceptado, comprendido y

amado, y que al profesor le gusta estar junto a él. Cuando un niño siente ese calor, naturalmente va

a querer agradar al profesor haciendo lo que él le pida.

El niño que se siente inseguro sobre su relación con el profesor, y cerca del sentimiento que el

profesor nutre por él, es un niño que, generalmente, prueba cuáles son los límites para ver como el

profesor va a reaccionar hacia él.

Establezca como una autoridad.

La mayoría de nosotros pensamos que una autoridad es alguien que mantiene las riendas cortas y

que impone estrictamente las reglas. Pero otra definición de autoridad es un especialista. Por

ejemplo, un explorador que sea conocido como autoridad, hace de un cierto campo de estudio, su

especialidad. Los sentimientos que este tipo de autoridad provoca en los demás son el respeto y la

confianza. Es de este tipo de autoridad que necesitamos para que nos hagamos profesores y

padres.

Necesitamos ser especialistas en comprender a los niños, para que podamos tratarlos de forma

que respondan respetuosamente.

Si el profesor está encontrando dificultad de demostrarse como autoridad frente a un determinado

niño, debería intentar lo siguiente:


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Primero, pídale al niño que haga solamente aquellas cosas que pueden ser impuestas.

Pida solamente una vez antes de obligarlo.

No le ponga muchas exigencias al niño.

Después que el niño aprenda a responder a las órdenes que pueden ser obligatorias, el adulto

puede empezar a pedirle que haga cosas que no son muy fáciles de ser impuestas.

Como en todas las otras relaciones niño - profesor, lo más importante es que la disciplina deba ser

aplicada en una atmósfera de amor y calor humano.

Sea consistente.

Para que el niño se sienta seguro en el Programa de los Conquistadores y con el profesor, debe

tener la seguridad de que tiene algún orden en su mundo; debe saber como va a reaccionar el

profesor en determinadas situaciones. La consistencia es la palabra clave, y hay muchos aspectos

de consistencia que deben ser considerados, que son importantes.

Ser consistente en acompañar todo el cumplimiento a la orden dada al niño.

Ser consistente en los métodos de disciplina utilizados para un determinado comportamiento.

Todo el staff debe trabajar en unidad para mantener límites y para lidiar de forma consistente con

los problemas de comportamiento.

Tanto como sea posible, debería existir consistencia entre el hogar del niño y el club en términos de

las expectativas que los padres y profesores nutren en el niño.

Evite conflictos. Cuando un profesor se envuelve en conflicto con un niño, el niño es generalmente el

vencedor. El único medio posible para que el adulto gane en una situación de conflicto es confiar en


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Su autoridad y poder, por ejemplo, para llevar al niño donde el director, para levantar la voz cuando

hablarle al niño, o hasta el último caso golpear al niño. Cuando esto ocurre, mismo que el niño

venga, finalmente, a estar de acuerdo porque no hay realmente otra opción, el profesor es un

vencedor apenas por la fuerza, y el niño no aprende nada sobre el dominio propio.

La solución es tratar de estar al lado del niño de todas maneras posibles mientras al mismo tiempo

se le obliga la tarea, o el requisito.

Para evitar el máximo posible de conflicto, el profesor debe recordar lo siguiente:

No perder el autocontrol.

Intervenir, solamente, cuando es realmente necesario.

Ser flexible en los métodos disciplinarios aplicados.

Ganar la confianza del niño.

Tratar un poco de humor para aliviar la situación tensa.

Hacer lo opuesto a lo que el niño espera.

Planee el programa cuidadosamente.

Un programa bien planeado y el ambiente irán a ayudar al niño a controlar su propio

comportamiento, mientras que un programa irregular, desorganizado, sólo conducirá a muchos

problemas disciplinarios. Es importante que la sala sea organizada de forma tal que una actividad

no interfiera en otra.


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Defina límites.

Los límites deberían ser claramente definidos y mantenidos. El niño que sabe que su

comportamiento es inaceptable se sentirá más seguro y será capaz de controlarse más. Muchos

profesores son inconstantes en mantener los límites, porque le hicieron tantas limitaciones al niño,

que ni ellos ni los niños, pueden recordarlas todas. Cuanto menor es el número de límites / reglas,

mejor.

Trate estas tres reglas:

No te puedes herir.

No puedes herir a los otros.

No puedes hacerle daño a las cosas.

Anticipe las dificultades.

Si el profesor anticipa las dificultades y previene al niño, esto ayudará a mantener control propio

antes de perderlo.

Un poco de control: Muchos problemas disciplinares ocurren porque el profesor no está lo,

suficientemente, atento para notar que las tensiones están aumentando, o que posibles conflictos

están aumentando. Antes que las cosas exploten, algunas veces un abrazo, o un simple tocadita en

el hombro pueden servir para recordarle al niño que usted está cerca y lo ayudará cuando necesite

de ayuda. El control es efectivo, solamente, si los profesores están consientes de la tempestad que

se está formando. Pero se debe evitar, definitivamente, una manera ruda de control que lleva a

extremos, como por ejemplo, abuso del niño.


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Afección hipodérmica: Una inyección de afecto puede dar al niño un rápido impulso sobre una

situación difícil. Esto se puede hacer verbalmente, diciendo: “Yo te amo”, ó “Estás muy bien”.

También puede ser solamente con una sonrisa, una cerradita de ojo, un abrazo espontáneo. Los

niños necesitan la reafirmación de los adultos de que son amados y aceptados. Este apoyo adulto

las ayuda a que formen su propio autocontrol.

Desvíe la atención del problema: Cuando un niño se frustra y no puede manejar una cierta

situación, mismo con la ayuda de un adulto, desviarla a las actividades donde ella puede tener éxito

y encontrar interés, puede ayudarla a pensar nuevamente en ello.

Muestre la realidad: Los profesores, generalmente, se sorprenden de cuán rápido es posible

entrar en discusión con un niño. Muchos niños se frustran porque quieren hacer alguna cosa, pero

no hay tiempo o el espacio no es suficiente o no cuentan con los implementos necesarios. Se tornan

agresivos y enojados porque no comprenden esos límites. Los profesores deberían tomar un

tiempo extra para explicar la realidad de la situación, y mostrar lo que se puede hacer dentro de

las limitaciones.

Permita que los niños sientan las consecuencias naturales: Permitir que los niños sientan las

consecuencias naturales de su comportamiento, es una de las maneras más efectivas, por las

cuales, ellos pueden aprender la manera más adecuada de comportarse. En algunas situaciones, el

profesor busca no entrar luego en una situación de conflicto, para tratar de resolver el problema al

niño.

Como en algunos casos, la consecuencia natural es muy seria. Es bueno que el profesor indique las

consecuencias del comportamiento, para darle al niño un motivo para que deje de actuar de esa

manera.

El aislamiento es, generalmente, utilizado como una consecuencia natural del mal comportamiento

infantil. Si el niño no puede cooperar con un grupo o ser bondadosa para con los demás, entonces

pierde el derecho de estar con los otros.


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No es necesario que el profesor transforme el aislamiento de un niño en una experiencia

desagradable para que la lección sea aprendida. Normalmente, apenas el hecho de privar al niño de

la oportunidad de jugar con sus amigos, ya es suficiente.

Cuando se aísla al niño, es bueno que le se dé algo para que haga solo. Quitar el privilegio de un

niño, es considerado una consecuencia natural del mal comportamiento de un niño. En algunas

situaciones, es una actitud justificable.

Por ejemplo, si un niño no come su almuerzo, no tiene derecho al postre. Pero en otras situaciones

es inaceptable. Por ejemplo, no es bueno cuando los profesores amenazan con sacarles los

privilegios a los niños, si ellos no actúan conforme las reglas, cuando el privilegio no tiene una

relación natural con el comportamiento. Por ejemplo, el profesor no le debería decir al niño: “Dejen

ya de pelear, o no dejaré que le den postre”, En esta situación sería mejor decir: “Dejen ya de

pelear, o no dejaré que te juntes con tu amigo, hasta que puedan estar juntos sin provocarse”

Elogie lo positivo; ignore lo negativo.

Este método de enseñar a los niños de manera apropiada de comportarse es efectivo, visto que

todos los niños desean atención y elogios, irán a moldear su comportamiento del modo que les

traiga el máximo de elogios y atención posibles. El secreto es que el profesor sea buen observador

y, que tenga tiempo suficiente, para pasarlo con los niños que son felices y que se comportan de la

manera correcta. El niño que, generalmente, llama la atención del profesor es el que no se porta

bien, e, infelizmente, la mayoría de los profesores terminan gastando más tiempo con estos niños

sólo cuando se portan mal, lo que sólo lleva a hacerlos a que tengan un comportamiento negativo.

Los profesores necesitan notar que ni todas las infracciones necesitan ser resueltas

inmediatamente.

Antes de ignorar el comportamiento negativo de un niño, es importante que el profesor considere

los siguientes puntos:

¿Es destructivo para este niño ignorarlo?


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¿Es destructivo a la propiedad?

¿Es destructivo para el grupo?

Puede ser destructivo para el niño, si él piensa que el asunto va a quedar así; y cuando su

comportamiento queda sin corrección, se puede fortalecer esta tendencia de actuar

incorrectamente. Es claro también que sería destructivo para el niño, si fuera el caso de herirse. Y

destructivo para la propiedad si el niño está golpeando la mesa o tirando los juguetes. Puede ser

destructivo para el grupo, si ellos ven que el niño no está siendo corregido, lo que hará disminuir el

respeto por el profesor como una autoridad.

Este método de disciplina, elogiar lo positivo, es basado en el principio que un niño problema actúa

de determinada forma, no porque nació de aquella manera, pero porque aprendió (usted podría

decir que él fue enseñado) a comportarse así a través del sistema de castigo o recompensa que le

fue aplicado.

Existen dos tipos de refuerzos: lo social (una sonrisa, una palabra bondadosa, un abrazo) y lo no

social (puntos, notas, estrellas, etc.). Para la mayoría de los niños, un refuerzo social es más

importante que lo no social. Son niños que tienen un relación positivo con los adultos, les gusta

agradarlos y recibir la atención de ellos. Para una minoría de los niños, puede ser necesario darles

algo más tangible y que deseen bastante.

Omita la moralización.

Los profesores necesitan siempre recordarse de criticar la actuación, pero nunca la persona.

Sermones por el mal comportamiento, o largos períodos hablando sobre ello, raramente, son útiles

para el niño. Éste necesita escuchar, clara y simplemente, que no hizo lo correcto (lo permitido),

pero al mismo tiempo el profesor necesita mostrar que le gusta al niño. Él nunca debería sentir que

está siendo criticado, pero sí que su comportamiento. Una buena política es no ridiculizar al niño

por sus errores, o criticarlo al frente de los demás.


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Considere los motivos.

La mayoría de los niños, con menos de seis o siete años, sienten que si están haciendo algo malo, o

quebrando o distribuyendo algo, merecen un poco de punición parecida a la cantidad de

destrucción, independiente del cual pueda haber sido el motivo para actuar de aquella forma.

Los profesores y padres son, en parte, responsables por este sentimiento infantil, porque, muy

frecuentemente, la cantidad de disciplina administrada depende del tamaño del acto. La disciplina

debe ser aplicada conforme los motivos del acto, en vez de que sea por las consecuencias.

Sea positivo.

Dé órdenes positivas a los niños. En vez de decir: “no suban a las mesas” diga: “Quédate en el

suelo”. Eso lleva a qué comportamiento es aceptable, “No te subas en la mesa” no le enfatiza una

alternativa aceptable y le da una directriz a seguir.

Salve las apariencias.

No se ponga usted, ni tampoco al niño, en una situación imposible. Deje una salida para usted y para

él. No amenace al niño con algo que él no puede hacer.

Por ejemplo: “Si lo haces de nuevo, te voy a mandar para la casa” Para luego descubrir que no hay

nadie en el hogar de aquel niño.

No pida promesas al niño que, posiblemente, no va a recordar. Por ejemplo: “Prométeme que no le

vas a pegar a tu amiguito nuevamente”. No espere que el niño haga algo que, probablemente, no lo

hará si no es tirándoles la nariz.

No permita que el niño elija, cuando usted, en realidad, no espera que él lo haga. Evite decir: ¿Con

qué te gustaría jugar? Eso le dará la oportunidad de elegir alguna cosa que usted no le podrá dar.

En vez de eso, diga: ¿Quieres jugar con los bloques, con los rompecabezas o con los dibujos?


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Política de no me toques

Sea un ejemplo.

Elena de White hace el siguiente comentario: Si los padres desean enseñar a los hijos el dominio

propio, deben primero formar sus primeros hábitos. La actitud paterna de reprehender y llamar la

atención para los errores, estimula el carácter apasionado e impaciente de sus hijos.

Ese consejo también es real en lo que dice respecto a los profesores. Ellos son un ejemplo al niño

en todo lo que hacen. Y su ejemplo tiene mucho que ver con la formación del carácter infantil. No es

suficiente, que el profesor viva apenas una vida semejante a Cristo; debe, también, mostrarle al

niño los principios para vivir feliz en comunidad. Lo destacable de este principio es enseñar, y

enseñar es disciplina.

Recuerde lo siguiente:

“Enséñelos por principio y ejemplo que usted no puede tolerar sus malos deseos”

Ore, hay poder en la oración cuando todo falla. Es importante que profesores oren por orientación

para aplicar el mejor tipo de disciplina y la manera por la cual debe ser administrada, para que el

niño tenga una mejor aprendizaje. El trabajo con los niños es tan complejo que, solamente, a través

de íntima relación con Cristo, un profesor puede recibir la sabiduría necesaria para lidiar con

muchas situaciones diarias que, como un todo, prepararán o no al niño para el cielo. Si el profesor

dedica tiempo para orar antes de disciplinar a un niño, generalmente, irá tener una visión más

nítida del problema y también conquistará su dominio propio y serenidad.


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Disciplina Cristiana

Fue dicho que el trabajar con jóvenes y niños es el mayor trabajo ya entregado a la humanidad. Sin

embargo, las recompensas y frustraciones de esta experiencia desafiadora pueden también crear

sentimientos que fluctúan ampliamente entre sentimientos negativos ¿Por qué estoy haciendo

esto? y sentimientos positivos (¡Qué grupo maravilloso!).

Esos sentimientos pueden, generalmente, determinar la longevidad de la experiencia de liderazgo de

un director.

Hay razón para eso. La disciplina y administración de un Club de Conquistadores bien sucedido

envuelve varios riesgos personales. Los riesgos del director se tornan muy grandes si la tarea

corre riesgo de fallar.

La mayoría de las personas ni siempre son confiables en su capacidad de administrar y disciplinar

sus propios hijos, cuanto más los directores de conquistadores asumiendo la responsabilidad de

mantener la disciplina para todo el club de jóvenes adventistas. Felizmente, mucha de las técnicas

de disciplina y administración pueden ser aprendidas con cuidados de implementación, pueden ser

bien sucedidas. Lo que es abordado aquí es apenas un plan para un programa administrativo de

éxito. Las técnicas sugeridas de disciplina, funcionan si fueran implementados adecuadamente. La

mayoría de los profesores de sala de clase y líderes de conquistadores, observan que las técnicas

disciplinarias son oprimidas en la práctica. Usted irá descubrir que las técnicas delineadas en este

plan, presentan firme fundamento en principios que Jesús enunció hace mucho tiempo atrás,

reafirmados más recientemente por Elena de White.

Ni la Biblia, ni en los escritos de Elena de White, se puede encontrar un plan de administración y

disciplina esquematizado. Por lo tanto, lo que es presentado, en este manual, es apenas un plan de

técnicas de disciplina y administración de comportamiento basado en los principios bíblicos.


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El título del plan: “Ayudando al Conquistador a Tener Buenas Elecciones”, muestra el punto

central del sistema. Y el objetivo y meta del club parece ser exactamente ese: ayudar a la juventud

a tener buenas preferencias ahora, y prepararla para la elección suprema, de ser un seguidor de

Jesucristo.

El propósito de este programa de administración es:

Ayudar a los conquistadores a tener buenas elecciones.

Desarrollar un plan específico, compartiéndolo con los conquistadores y sus padres.

Estimular las consecuencias, no la punición.

Enseñar la autoestima.

Un programa de administración es mucho más que conseguir que los conquistadores se queden

quietos. Un buen programa administrativo es enseñar la propia herramienta, pues enseña que las

buenas elecciones en la vida son esenciales, que es necesaria la autodisciplina, que los derechos de

los otros son importantes, y la sociedad, particularmente, la sociedad cristiana, se debe basar en el

respeto individual mutuo.

¿Quién prepara el Plan de Administración de Comportamiento?

Primero, el Director de los Conquistadores debe desarrollar un esquema básico para un programa

de administración de comportamiento. Debe haber educadores profesionales en el área que

ayudarán a desarrollar e implementar ese plan.

Después que el programa fue definido, el director debería presentar el plan a la directiva de

conquistadores, solicitando sus recomendaciones y cualquier sugerencia de cambio.


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La edición final del Plan de Administración de Comportamiento, es entonces sometida a la junta de

iglesia. Los miembros de la junta necesitan conocer, totalmente, el plan propuesto.

Luego de la aprobación de la comisión de iglesia, el director hace una reunión con todos los

conquistadores y sus padres. Durante la reunión organizacional, el director describe el programa y

provee una copia, por escrito, a todos los padres.

Responsabilidades de Los Guías Mayores de Conquistadores

1. Establecer reglas

Pocas reglas y bien formuladas. Por ejemplo: auto respeto, respeto a los otros, respeto a la

propiedad.

Tener las reglas por escrito y darles una copia a los padres.

Discutir las reglas, detalladamente, en el primer encuentro al organizar los conquistadores, y de ahí

en adelante revisarlas periódicamente.

Las reglas y procedimientos son importantes. Reglas claras y concisas, dan una orientación de

forma que los líderes queden en posición de actuar cuando necesario, y no reaccionen con ira.

2. Establecer Procedimientos Disciplinarios

Idealmente, un buen programa administrativo eliminará la necesidad de disciplina. Entretanto, la

realidad muestra que los Conquistadores y los demás miembros de la directiva comprenden y

utilizan una variedad de técnicas disciplinarias.

El castigo o punición, es definido como trato rudo ó maltrato, venganza; La disciplina, por otro lado,

es definida como: tratamiento que producirá el comportamiento esperado.


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Programa de Administración de comportamiento disciplinario

El siguiente Programa de Administración del Comportamiento, incorpora una variedad de técnicas

disciplinarias, tales como técnicas de interacción verbal, compromisos escritos y aislamiento. El

programa total consiste de un proceso de 5 pasos para lidiar con un problema de comportamiento.

El objetivo de cada paso del proceso, es ayudar al conquistador a elegir un comportamiento

apropiado. Las consecuencias para el mal comportamiento, se tornan más severas a cada paso

sucesivo del programa.

1. Interacción verbal

La mayoría de los conquistadores responden a la interacción verbal.

Observaciones despreciativas pueden cambiar el comportamiento no apropiado, pero no cultivarán

una atmósfera cristiana.

Por lo tanto, el método siguiente de cuestionamiento, permite que el líder esté siempre en el control

de la reunión, además de crear un ambiente positivo. Hay dos técnicas de interacción verbal.

Diálogo

De la realidad es un método de hacer una serie de cuatro preguntas, que ayudan al conquistador a

concientizarse de sus propios hechos. El resultado de esa técnica, será mejor si las preguntas que

se hagan, sean hechas en la siguiente secuencia, tanto tiempo adecuado para que el conquistador

responda.

Líder:

¿Qué estás haciendo?


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¿Es esto contrario a las reglas?

¿Qué deberías estar haciendo?

¿Cuál es tu plan?

¿Qué es lo que pasa si el conquistador no tiene un plan o no responde a las preguntas? Entonces el

líder, de modo bien amigable, le dice al conquistador que se siente en un lugar calmo hasta que él/

ella presente un plan. El conquistador irá permanecer sentado hasta que decida sobre el plan.

Ejemplo de diálogo de la realidad:

Pablo, un conquistador, fue solicitado para que ayudara a limpiar el campamento, pero está

jugando un juego de mesa.

Líder: - Pablo, ¿qué estás haciendo?

Pablo: - Nada.

Líder: - Pablo, ¿qué estás haciendo?

Pablo: - Muy bien voy a ayudar a limpiar-

Observe que el líder simplemente repite la misma pregunta, hasta que el conquistador dé la

respuesta correcta. Cuando el líder, consistentemente, reformula las preguntas, el conquistador irá

usualmente aprender que el líder no puede ser manipulado con un argumento, ni aceptará

disculpas. Mientras tanto, el líder puede querer rápidamente describir lo que el conquistador

debería estar haciendo, como: Pablo, su función es ayudar a limpiar el campamento. ¿Cuál es su

plan?


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Note que el líder camina por una serie de cuestiones básicas y espera respuestas para ellas. Esto

no es hecho de manera hostil, pero sin duda autoritaria.

El diálogo del disco quebrado

Es un método de hacer siempre la misma pregunta. El líder no se envuelve en discusión sin fin. Él /

ella simplemente repite la pregunta original. A seguir vea un típico diálogo de disco quebrado.

Líder: -Ponga por favor la carpa en el suelo.

Conquistador: - Pero estoy yendo a nadar.

Líder: -Ponga por favor la carpa en el suelo.

Conquistador: -Por favor déjame ir a nadar-

Líder:- Ponga por favor la carpa en el suelo.

Conquistador: -Pero mi mamá dijo que yo podría ir a nadar-

Líder: Ponga por favor la carpa en el suelo.

Conquistador: Bien.... OK.....

Si el conquistador sigue eligiendo el comportamiento inapropiado y, no responde de manera positiva

a interacciones verbales, entonces el líder pasaría para el segundo paso del programa – una

tarjeta de advertencia.


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2. Tarjeta de Advertencia

Una tarjeta por escrito es el segundo paso del proceso. Es dado de manera de que no se interrumpa

la reunión. Si un conquistador persiste en perturbar la reunión, entonces será necesario sacarlo de

la reunión o aislarlo de forma que la reunión pueda continuar. Pocos conquistadores pasarán más

allá de la etapa de la tarjeta.

A seguir, vea un ejemplo del cartón de advertencia. Si el conquistador está presentando un

comportamiento no apropiado, el líder no necesita hacer ningún comentario verbal.

Mientras tanto, un golpecito en el hombro y una sonrisa pueden ayudar al conquistador a notar que

él está siendo aceptado por el líder, no importando que su comportamiento no sea apropiado.

Ejemplo de Tarjeta de Advertencia:

-Tú ya recibiste una advertencia verbal concerniente a las reglas del club. Esta es una advertencia

por escrito para recordarte que debes adoptar un buen comportamiento. Disfruta del resto de la

reunión del Club de Conquistadores.

La tarjeta se bota a la basura al final de cada reunión o evento, de manera que el conquistador

empiece de manera limpia cada actividad. Pero si el conquistador sigue con el comportamiento

indebido después de haber recibido la tarjeta de advertencia, entonces el líder debe pasar al tercer

paso del programa de administración de comportamiento.

3. Aislamiento y Compromiso Escrito

El propósito del aislamiento y de un compromiso por escrito, es separar al conquistador del grupo

de forma que las actividades del grupo puedan continuar. Ello también permite que el conquistador

tenga otra oportunidad de describir, específicamente, su actuar y elegir un comportamiento que

usted va a elegir para el resto de esta reunión.

LA APLICACIÓN DE LA DISCIPLINA PARA CONQUISTADORES Y AVENTUREROS · 2011-11-25 · AVENTUREROS...

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