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EL KLAN DE LA LUNAEnsEñanzas sagradas para la nuEva MujEr

Teoría y PrácTica

CHAMALÚ

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Si este libro le ha interesado y quiere conocer otros li-bros del autor sobre Chamanismo, Superación Personal, Enseñanzas para Jóvenes, narrativa y poesía, así como cds de Conferencias, puede solicitarnos y con mucho gusto, le enviaremos catálogos o el material solicitado. E-mail: [email protected] [email protected]

Editorial Munamauta© CHAMALU

CorreccionCarmen Aldaba

Diseño y DiagramaciónMarcela Salazar

Dedicado a Inka Lecumberri:una mujer de Sabiduría

Chamalú

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Índice

CARTAURGENTEALAMUJER•Página7INTRODUCCIÓNGENERAL•Página11PRIMERAPARTE•Página17SEGUNDAPARTE•Página61LAACTITUDCEREMONIALENLAVIDADIARIA•Página69TERCERAPARTE•Página87EXPLICACIONESCOMPLEMENTARIAS•Página95RITUALES•Página99CONEXIÓNCONLAPACHAMAMA•Página99CONEXIÓNCONMAMAKILLA•Página100CONEXIÓNCONMAMAKHOCHA•Página101CONEXIÓNCONMAMAOCLLO•Página101SINCRONIZANDO LA PAREJA A PARTIR DE LA ENERGIASEXUAL•Página103ABORDAJERITUALDELAMENSTRUACIÓN•Página105MANEJOENERGÉTICODELACOMIDA•Página107PREPARACIONPARAELVIAJE•Página108MANEJODELPERDÓN•Página109LAPROSPERIDADCHAMÁNICAMENTEMANEJADA•Página111MANEJOENERGÉTICOSANADOR•Página113INTENTODESUICIDIO.ENFOQUERITUAL•Página116DIVORCIO.ENFOQUEENERGÉTICO•Página118ABOLICIÓNDEADICCIONES•Página120RITUAL DE ARMONIZACIÓN SANADORA PARAPAREJAS•Página122MANEJOENERGÉTICODETEMORES•Página123POBLANDOLASOLEDAD•Página124RITUALDEPURIFICACIÓN•Página126

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RITUALPERSONAL(CUMPLEAÑOS)•Página127CONCLUSIÓN•Página131GLOSARIO•Página133

ANEXOS DATOSDELAUTOR•Página135MENSAJESDECHAMALUENINTERNET•Página137CHAMALUVISITATUCIUDAD•Página138LIBROS,CDSYDVDSDECHAMALU•Página139

CARTA URGENTE A LA MUJER

Es probable que a esta altura de tu vida, hayas escu-chado mucha cosas a favor y en contra de la Mujer. Es posible que en algunos momentos llegaste al ex-

tremo de pensar que hubiera sido preferible nacer hombre o presenciado tus cambios anímicos sin saber cómo gober-narlos. Con seguridad conoces a otras mujeres que lo es-tán pasando mal en sus vidas, que son infelices en su re-lación, que no pudieron ser lo que amaban, que su cuerpo está bloqueado al placer y van por la vida llenas de heridas invisibles a los ojos pero igualmente dolorosas. La historia nos conto que en la Edad Media, se perseguía y quemaba a las Brujas….Pero quienes eran realmente ellas? Mas allá de los rumores difamatorios o las mentiras propa-gadas por los inquisidores, las investigaciones serias nos ha-blan que se trataban de mujeres con capacidad de sanación, mujeres que se negaban a la sumisión, mujeres fuertes, va-lientes, no aptas para la manipulación; Mujeres poderosas capaces de liberar su potencial interior y ser ellas mismas, aunque ello implique un alto precio; Mujeres libres que prefe-rían morir en la hoguera antes que vivir de rodillas. Es decir que las llamadas Brujas, eran lo mejor de las mujeres de la época. Su lucidez les hizo revelarse frente al absurdo y al sinsentido, frente a la injusticia y a una falsa espiritualidad que consideraba pecado todo lo diferente. Su sensibilidad les hizo reunirse en las noches de luna llena para cantar y

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danzar, para agradecer y celebrar la vida y recibir más ener-gía lunar, que multiplicaba su magia a tiempo de establecer alianzas energéticas con otras mujeres, con las cuales se sincronizaban unificando sus lunas; su trabajo interior posibi-litó que cada una se conozca y al conocerse pueda transfor-marse y crecer y auto gobernarse y tornarse poderosa. Esas mujeres eran temidas y por ello condenadas. Hoy quiero, en este siglo XXI recordarte tu naturaleza, tu fuer-za, tu magia. Sé que ya no hay inquisidores ni verdugos pero sé también que cada mujer fue entrenada para ser su pro-pio verdugo a partir de una programación desde la infancia para la auto represión. Esta carta y el contenido de este libro es básicamente para recordarte que en este tiempo esas mujeres poderosas están regresando, empero las Brujas no regresas con vistosos sombreros ni extrañas vestimentas, las Brujas del siglo XXI tienen toda edad y apariencia. Como mujeres portadoras de una mayor sensibilidad sientes y pre-sienten lo que tiene que hacer y lo hacen sin pedir permiso a nadie ni esperar aplausos ni comprensiones. No les tiembla el brazo para cerrar la puerta y concluir la relación que no funciona, ni se tambalea su paso, cuando tienen que avan-zar, porque tienen claro su norte y porque nunca olvidan que la Vida, con todo lo extensa que es, en el fondo es solo una breve visita a este planeta y que nunca más abra otra opor-tunidad con las mismas características.

No temen el rechazo porque no buscan la aprobación; re-nunciaron a vivir para satisfacer expectativas ajenas y se declaran felices sin motivo, darse cuenta que están vivas, es motivo pleno y suficiente. Las Nuevas Brujas no compi-ten entre sí, se saben aliadas, saben que su poder se mul-tiplica si suman intuiciones y conocimientos; ellas tienen distintas profesiones y son de diversa edad, algunas son abuelas y comparten su experiencia desde el Amor, otras son jóvenes incluso muy jóvenes y viven la vida con pasión y sin apego; unas pasan desapercibidas porque les gusta camuflarse, otras expresan con libertad su sensualidad

como recordando a las demás mujeres la importancia de amarse, de valorarse y disfrutarse. A las nuevas mujeres de conocimiento les gusta cantar y danzar, darse tiempo para estar en contacto con la Madre Tierra, su fuente de purificación y energía. Saben también que en este tiempo, a menudo les tocara contribuir al des-pertar de su compañero o pasar tiempo solas. A veces las mariposas no encuentran hombres con alas para compartir vuelos multidimensionales y prefieren ello a la rutina intras-cendente de la oruga que sobrevive atrapada en el mundo externo y sus trampas. Si te sientes identificada con esta nueva mujer que está surgiendo, si tienes ganas de vivir mejor, de renunciar a lo que te impide crecer, si quieres que la felicidad sea tu condición natural cotidiana y Amar tu forma de vivir, si an-helas ser libre y ser tu misma y conocerte y gobernarte y contagiar ese fervor de vida a otras personas entonces las enseñanzas de este libro son para tí. Una advertencia preli-minar: después de conocer este mensaje ya no podrás ser la misma persona es decir si tu idea no va en esta línea de transformación y felicidad, quizá lo mejor sea compartir este material con otra mujer que esté dispuesta a inaugu-rar nuevos vuelos y saborear la vida en cada uno de sus instantes. Bienvenidas las Valientes.

ChamalúBogotá, Abril 2012

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INTRODUCCIÓN GENERAL

Mucho tiempo hemos estado ensayando, la función debe comenzar ya, identificado el papel de extra que nos ha-

bían reservado, comencemos a ser protagonistas en la película de nuestra vida, pues ella es un motivo para disfrutar, y crecer. La situación en que se encuentra la mujer, actualmente precisa una radical transformación; no es casual tantos problemas, tanto quiste ovárico, tanto cáncer de seno y epidemias depresivas, cuando la mujer ha sido entrenada para no sentir, para no darse cuenta que está viva y que ello supone plenitud. Debidamente aislada de su fuente matriz energética, la mujer contemporánea deambula con más miedos que ganas, con más temor que sabiduría; las madres siguen mintiendo a sus hijas, porque el autoengaño es el contexto, para el cual fueron preparadas. Desde luego, no basta quejarse ni inventariar nuestras desgra-cias, ardua y estéril tarea en momentos en que el consumismo intenta llenar sin éxito el vacío existencial. Duele ver la impuni-dad con que se mutilan órganos femeninos en los nuevos patí-bulos, científicamente denominados quirófanos; duele contem-plar el abSurdo y el sinsentido, el nihilismo hecho religión, las mentiras potables que tratan de esconder la sed de éxtasis, de cada vez más mujeres, que comienzan a sospechar que vivir, no era sólo estudiar para profesionalizarse, encontrar una pa-reja, constituir una familia en la cual reproducirse y comenzar

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a vivir para los hijos; cuando descartamos nuestra autorealiza-ción nos condenamos a la infelicidad invisible que es la peor de todas. Menos mal que la mujer está despertando masivamente, ca-pacitándose para ver con ojos propios y volar con alas recién estrenadas; abolido el aislamiento, la energía se sincroniza, aparecen las aliadas, se multiplican los círculos femeninos, la luna estalla en fiesta, emerge el poder interior naturalmente, el accionar se torna poético, la transformación permanente un estilo de vida en la cual, la vida vuelve a ser lo más importante. El momento discurre como camino con curvas y túneles, aveces desfiladeros, el miedo y la ansiedad se disputan la supremacía, los riesgos se multiplican; empero, vale la pena, estando la vida en juego, que es lo único que tenemos, ningún costo será muy alto, cualquier día, cada día, pasa a ser nuestra trinchera de crecimiento, la caverna mágica de la nueva bruja, de la mujer nueva del tercer milenio que siente y presiente, que la vida no puede ser otra cosa, que una obra de arte que activa nuestras energías y las direcciona en la perspectiva del crecimiento, que incluye el éxtasis, por que si te atreves a ser tú misma, ya te encuentras en las puertas del paraíso. De eso se trata, de ser uno mismo, una misma. Hablaremos mejor en términos femeninos, en homenaje al destinatario fun-damental. En verdad es la parte femenina de mi energía la que escribió estas enseñanzas, después de habernos pasado dé-cada y media formando predominantemente mujeres, en el sa-grado arte de vivir plenamente. Al principio no comprendíamos por qué acudían más mujeres a nuestra escuela comunitaria, con el tiempo identificamos la circunstancia energética que fa-vorecía ese despertar y nos apuntamos al proceso, disfrutando al contemplar procesos de liberación integral en las más diver-sas edades y donde el conocimiento académico no es requisi-to, pues la primera fase supone un intenso desaprendizaje de lo convencional, camino imprescindible a la libertad, que será el contexto necesario para que germine la nueva mujer.

Liberado el cuerpo, reconectada la mujer a su fuente matriz, el alma comienza a expresarse, al comienzo las lágrimas resultan inevitables y simultáneamente placenteras, al constituirse en una autoterapia que comienza a curar antiguas heridas sutiles, por donde se producen hemorragias energéticas que drenan el potencial de la mujer. El cuerpo liberado comienza a mover-se, los viajes interiores sin más alucinógeno que la música que desata cuerpos a la libertad del movimiento, se torna frecuen-te y reconfortante, desbloqueándose los flujos energéticos que nos devuelven la capacidad de amar; cuando amamos de ver-dad, comienza nuestra última curación, aquella que solo noso-tras podemos regalarnos.

Ya se puede percibir el perfil de la nueva mujer, es hermosa y fuerte, más su belleza emana desde dentro, es flexible y tier-na, sensual y con sabiduría, acepta hacerse cargo de su vida e intuye que necesita manejarse con creatividad; es sensible, identifica las tendencias y características de este tiempo, para-dójico y cambiante y se prepara para caminar por un presen-te asfaltado de incertidumbre. Está preparada para todo, en especial para convertir a toda circunstancia y adversidad, en recurso para fortalecerse y crecer, por ello es capaz de dar la bienvenida a todo. En esa perspectiva se encaminan estas enseñanzas; su proce-dencia es la práctica al igual que su destino, son semillas que buscan fértiles Surcos en corazones disponibles, para germi-nar indetenibles y dar frutos inolvidables. ¿Te atreves? Esta es una propuesta no apta para mujeres miedosas, resignadas a la infelicidad. No te preocupes si no te comprenden, es señal que vas por buen camino. Que no te incomoden los comentarios en contra (si somos mejores, es inevitable que nos tiren alguna piedra), fortalécete con ello. Todos los conocimientos aquí compartidos por primera vez de manera tan abierta, dinamizarán tu proce-so y de alguna manera estarás condenada a ser feliz y ello, hay gente que no te perdonará; acéptalo, el mundo está como

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está, empero tú eres parte de otra humanidad, que se está gestando y ella tiene el apoyo de todo el Universo. La vida es misteriosa, no intentes comprenderlo todo, el tiem-po es irreversible, saboréalo con intensidad y pasión, mas no permitas que la ansiedad drene tu energía; la vida es un río donde todo fluye, por ello debemos amar sin aferrarnos, fluir sin temor, aceptar la responsabilidad de hacernos cargo de nuestra vida. El éxito comienza con la felicidad, recuérdalo. No hipoteques tu vida en nombre de nada ni nadie, mañana cuando te toque partir, estarás sola y te convencerás que el sufrimiento fue estéril, quizá útil en términos didácticos y tran-sitorios, empero insuficiente para garantizarnos méritos para el más allá, por ello sufrir en esta circunstancia, resulta una pérdida de tiempo. La riqueza va por dentro, igual que la belleza, la capacidad de sorprenderse es fundamental, el amor nos hace inocentes, la libertad se alcanza reduciendo necesidades y aboliendo temo-res; es más inteligente vivir el presente, pues el instante es una partícula de eternidad que nos habla de la unicidad, a quienes sabemos sintonizar el silencio. Que nada te preocupe, con ocuparte de lo necesario es su-ficiente, la vida es supremo regalo, ser infeliz es pecado, hay gente que sólo tiene dinero y apesta. Encuentra tu forma de vivir, la tuya, no aceptes libretos ni postergues sueños, poster-gar es una mala palabra, recuérdalo, necesitas sentirte viva y ello ocurre aveces, después que te atreviste a romper algunas reglas que encarcelaban tu comportamiento.

Como te darás cuenta, con este conocimiento no podrás seguir siendo parte del rebaño; menos mal, los felinos no forman re-baños ni siguen a nadie, hacen su propio camino y están aten-tos en todo lugar, confían en si mismos y miran de frente y con serenidad, están completos, hacen lo que es necesario en el momento oportuno y de la manera precisa; eso en el plano humano se llama sabiduría, de eso trata este libro, no sería

extraño que en algún lugar fuera prohibido o destruido, pues la mujer que aclimata este conocimiento a su vida se torna pode-rosa, sin dejar de ser mujer. Quizá sea bueno que te reúnas con más mujeres para compar-tir estas enseñanzas, que gradualmente se vayan constituyen-do Mujeres Anónimas despertando a la vida, que cada luna lle-na confluyan en círculos femeninos y dancen hasta el éxtasis. Quizá este sea el pasaporte a una nueva vida llena de libertad y ternura, una etapa donde podamos reconstruir la belleza que es el lenguaje de Dios, un momento existencial donde nuestro corazón pase a ser parte del paraíso, en un contexto de liber-tad, que es amor a la vida, fluyendo placenteramente por ella y celebrando 365 fiestas de crecimiento por año.

En memoria de mi abuela indígena y la bisabuela quechua que en ceremonia me salvó la vida, a manera de testamento ancestral, dejo estas enseñanzas en tus manos, para vivirlas y compartirlas.Te confieso que mis células vibraron al reunir estas semillas de esperanza, ávidas de germinación. Me en-canta contar mi tiempo en versos y que rebalse vida de cada una de mis palabras; mi verbo favorito es el silencio, soy un terrón de tierra optimista, ¿sabes? Mi alma continua danzan-do, tras la niebla de lo establecido. Quiero compartir contigo esa celebración pendiente y arropar tu alma y adornarte con collares de sueños y construir trinche-ras de ternura y desmitificando la plenitud, tallar la realidad que nos tocó vivir, hasta convertirla en una obra de arte. Deja que tu alma también, se fugue de la cárcel de lo convencional y embriagándonos con amaneceres, exportemos felicidad e ilu-minemos nuestro destino. Reivindico el derecho a la plenitud. Un abrazo de luz. CHAMALU Janajpacha. Cochabamba-Bolivia

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Nota.- El presente libro fue reescrito sobre la base de las char-las efectuadas por CHAMALU a un grupo de mujeres, reunidas bajo el nombre de EL KLAN DE LA LUNA, en la Comunidad JANAJPACHA en Bolivia, a finales del año 1994 y parte del 95.

PRIMERA PARTE

CAPÍTULO PRIMERO

¿Quién dijo que la Madretierra no está viva y que la mujer no siente esa presencia con más fuerza que nunca en

este tiempo? ¿Quién dijo que a final de siglo se acaba todo, cuando en verdad lo que precisa concluir, lo que está con-cluyendo, es aquello que al carecer de raíz, se cae a peda-zos, empujado por su propia podredumbre? ¿Quién dijo que este es un tiempo de caos, cuando en verdad, ello depende de la consciencia que lo transita y bien esta época puede ser una maravillosa oportunidad transformadora, disfruta-da intensamente, posibilitando que cada adversidad nos fortalezca y todo imprevisto nos torne más atentas? Vivimos tiempos de cambios, la humanidad que conocíamos ya no existe, una nueva civilización se gesta, en cada cons-ciencia se despierta, en cada adolescente que se niega a la domesticación, en cada mujer que se atreve, en supremo acto de rebeldía a ser ella misma. Ya no puede la mujer pa-sarse la vida esperando que le den permiso para vivir, estos son tiempos donde quienes no están atentos, corren el ries-go de pasarse la vida durmiendo. Debemos recordar que no todos los muertos están en los cementerios, también los hay caminando por las calles, poblando oficinas, tomando vaca-ciones, empero sin nunca, atreverse a renunciar al rebaño.

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La mujer de la Nueva Humanidad carece de rebaño, incluso si le toca estar sola, eleva su soledad a un nivel de ofrenda al Universo y ello dinamiza su crecimiento. Todo cambio de siglo genera crecientes niveles de paranoia, psicosis colectiva, especuladores sensacionalistas que nos atosigan con catástrofes, para luego vendernos “soluciones”; sin duda, momentos como éstos, son buen mercado para los traficantes de baSura que nunca faltan. Sin embargo, mo-mentos críticos como éstos, también son maravillosas opor-tunidades para acelerar procesos de expansión consciencial y posibilitar que nuestra evolución de un salto cualitativo. Qui-zá sólo falta estar más atentas, más lucidas, más amorosas, más valientes, para que esta coyuntura planetaria sea, una maravillosa transición, no apta para miedosas y conformistas. El cambio es inevitable, disfrutarlo es una suprema obli-gación. Quizá todas tenemos el deber de repoblar el pla-neta Tierra otra vez de seres humanos, que las calles del presente se conviertan otra vez en ríos de vida; quizá las mujeres tenemos mayor responsabilidad, no tanto ya de lo que pasó, sino de aquello que está por ocurrir y a esa cita, tenemos que acudir dignamente y con el alma de pie. ¿Te animas a inventar una Nueva Humanidad?

CAPÍTULO SEGUNDO

Momentos como éstos son especialmente importantes por el gran efecto movilizador, descartando cualquier

vestigio de sensacionalismo, será bueno caracterizar la épo-ca, como un tiempo de grandes y profundas transformacio-nes, vanguardizadas por la mujer, en gran parte originado en el recambio del rector energético planetario, asentado en la época que concluye en los Himalayas, generador energético de polaridad masculina, situación que privilegiaba el desper-

tar del hombre que, entre otras cosas pobló monasterios y centros iniciáticos, dirigió sociedades y organizó itinerarios planetarios al punto de conducirnos a la situación en que hoy nos encontramos. Obviamente no todo fue negativo, debe-mos reconocer grandes logros y considerables avances, en especial a nivel científico, empero hace falta ponerle corazón a las empresas y espíritu a la ciencia. Esa es la labor que la Nueva Mujer tiene que cumplir, amparada en el recambio del rector energético planetario, ahora terminando de asentarse en los Andes, cuya polaridad femenina, posibilita el desper-tar de la mujer con características más intensas y masivas. Vivimos tiempos paradójicos, como si una nefasta inteligen-cia organizara todo al servicio de implícitos intereses, siem-pre girando en torno al dinero y poder, altamente adictivos cuando no es grande la consciencia en que se encuentra la persona y al interior de un riguroso trabajo interior. De alguna manera para los que detentan el poder, sólo somos números anónimos, mercados o botines de guerra, masas consumistas, alienadas y manipulables, a las cuales hay que abordarlas con majadera insistencia para crearles nue-vas necesidades, garantizando de esta manera beneficios constantes y crecientes, amparados en la filosofía del TEN-GO LUEGO EXISTO. Probablemente el destino no sea más que una insinuación de Dios, una especie de sugerencia que no atenta contra el libre albedrío, que no hace falta seguirlo al pie de la letra, pues para ello somos creativas, empero, es imprescindible saber lo que queremos, estar seguras del rumbo que esta-mos otorgando a nuestros pasos cada día. No es suficiente abandonar el rebaño, hay que saber adonde nos dirigimos, no es suficientes ser buenas, además precisamos liberar toda nuestra inteligencia, históricamente subordinada y relegada a papeles secundarios que obviamente, resul-tan más cómodos, el problemas es que apestan, porque el agua de nuestra consciencia allí se estanca, al no estar prevista nuestra autorealización.

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Vivimos tiempos convulsionados, empero dentro de cada una de nosotras debe activarse un manantial de paz, es decir el compromiso urgente es potenciar nuestro mundo interior, para evitar que el convulsionado mundo exterior nos aplaste. Ello es posible e imprescindible, es requisito de supervivencia estar bien, porque el amor está reservado para quienes arribaron al puerto de la felicidad, que supo-ne un viaje por nuestro océano interior. Sólo cuando esta-mos bien, podemos amar, sólo el amor nos protege, porque quien ama, cumple todas las leyes. Habitar este tiempo, supone un compromiso de honestidad con una misma, para no mentirnos, para no autoengañar-nos; afuera hay problemas, mas si somos buenas aprendi-ces, tendremos la capacidad de convertir todo lo que nos ocurra en enseñanza y ello traducirlo en conocimiento, que con nuestro trabajo interior podrá ser elevado a nivel de sabiduría, que es el arte de no complicarse la vida, pase lo que pase. Como te darás cuenta, este es un mensaje para corazones valientes, para mentes abiertas y mujeres dispuestas a encarnarse en ellas, a la super mujer que late embrionariamente en todas. No me preocupa que este no sea un mensaje para todas, cada una tiene su momento y su ritmo, nuestros Seminarios de ENERGÍA FEMENINA al-rededor de todo el mundo así lo testifican, menos mal que cada vez precisamos menos cosas y amamos más la liber-tad que es otra condición de existencia digna, no lo olvides. Quizá este sea un buen momento para retomar las rien-das de la vida en nuestras manos, después de estar tanto tiempo nuestra vida en manos de otros, de los padres, de los hijos, del esposo y cuando todo ello faltaba, de algún hermano voluntarioso, dispuesto a realizar lo que no era necesario. Tanto tiempo como menores de edad y tantos tropezones en ese intento de las últimas décadas por li-berarnos, momentos de confusión, intentos de imitación al hombre, en la oportunidad que tiene de hacer aberracio-

nes con impunidad, que equivalen a dar un paso adelante cuando estamos al borde del abismo; menos mal que el tiempo y los errores ajenos son tan didácticos, que termi-namos dándonos cuenta que no estamos solas, que todo el Universo ampara a quienes de verdad acumulan sed de crecimiento y están dispuestas a constituirse en devotas de la vida plena. Quizá no es casual que este mensaje esté en tus manos. ¿Te atreverás a compartirlo? De todas mane-ras si no coincides, regaláselo y recomiéndalo a las mujeres que no te caen bien. Sin duda, este es un buen momento para reivindicar el dere-cho de parir en la postura que nos sea cómoda a nosotras y al niño y no tanto al ginecólogo, o de recibir a nuestro niño en casa, en un ambiente hogareño, energéticamente prepara-do para ese importante momento, evitando de esta manera traumas y el ignorado estrés infantil que comienza desde el momento que llegan a este plano; reivindicar el derecho que se tome en cuenta nuestros procesos cíclicos, en momentos de nuestra luna personal y la necesidad que tenemos de tener tiempo adicional para estar con nosotras; el derecho de ser diferentes, de no sacrificar nuestra sensualidad ni satanizar al erotismo y poder asumirlos con naturalidad y consciencia elevada, reivindicando el derecho de ser nosotras mismas.

CAPÍTULO TERCERO

Mis células vibran cuando hablo de la libertad. Estar viva es una buena noticia y cada día se renueva la novedad en for-

ma de regalo que, vestido de amanecer, desplaza a la noche; me siento caminando al futuro sin dejar de vivir el presente, que al final es lo único que está presente.

Estoy viva, ¡gracias Universo por tamaña gentileza!; es bueno estar viva, poder caminar, tropezones incluidos, levantarse des-pués de la caída y con el tiempo, ver crecer alas sedientas de

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vuelos multidimensionales. Es bueno estar viva, tener los ojos de la vida abiertos, como invitando a la plenitud a ser mi inquili-na permanente. Siento que la mejor manera de vivir es amar sin condiciones, que mi libertad se amplía cuando se reducen mis necesidades; en verdad, ahora comprendo que no necesito tan-tas cosas, por ejemplo, no necesito que todo el mundo me com-prenda, ni preciso buscar apoyos en otra parte fuera de mi, no necesito trabajar mucho para obtener cada vez más dinero, ni comprar tantas cosas innecesarias; no necesito el visto bueno de nadie ni aplausos de amistad, no necesito de otros para ser feliz, sé que es agradable compartir la felicidad que me invade y brota desde dentro, que me apetece contagiar mi amor empero sin esperar nada a cambio, absolutamente nada. Estoy empecida en vivir plenamente, con indiferencia de lo que ocurra en mi entorno, por ejemplo, en mi caso dispongo de una encantadora parentela que en su mayoría no me en-tiende, hay quienes incluso no soportan mi felicidad, parece una ofensa ser feliz en medio de rebaños infelices. Siento que de vez en cuando vale la pena llorar, pero de felicidad. El silencio me ha persuadido desde que aprendí a meditar, sé que disponemos de guardianes invisibles, que caminan a nuestro lado siempre y cuando nuestra vibración no los espante, por ello estar mal, es una polución autodestruc-tiva. Acaricio mis sueños cada mañana, ¡cuánto agradez-co a quien me enseñó soñar!, considero millonarias a las mujeres que gestan y transportan abundantes sueños, es nuestra manera de protegernos y si de vez en cuando nos atrevemos a encarnarlos, estalla una fiesta en el Universo, que siempre está pendiente de nosotras. Cada día me despierto con más agradecimiento. Agradezco el regalo de un nuevo día, tomo consciencia del hecho de estar viva, elijo la vibración que caracterizara mi día y salto de la cama dispuesta a no desperdiciar ni un instante, pues cada momento es una partícula de eternidad. Salgo a la calle, camino en paz, acreciento mi fortaleza dejando intac-

ta mi sensualidad -la verdadera guerrera es tan fuerte que puede preveer el conflicto y evitarlo-; desde la azotea de mi optimismo mi silencio grita: ¡SOY YO MISMA!, sin prepoten-cia ni baja autoestima, sin soberbia ni debilidad, soy yo mis-ma; cada día intento ser lo mejor de mí, cuando estoy con otra persona, trato, desde la más profunda autenticidad, porque no soporto máscaras, que ella reciba lo mejor que tengo en ese momento, entonces mi vida fluye festivamen-te, el crecimiento convierte a cada instante en un festival. Sin duda, vale la pena vivir. Desayuno amor, almuerzo caricias, ceno abrazos, sueño paraísos, el éxtasis me delata, la gente no me entiende, mas no apagaré el volcán de mis sueños, no lo hice, desde que mi alma se fugó de la prisión de lo convencional; es que para ellos no está previsto la plenitud, ni la sabiduría, hasta la honestidad está mal vista y la libertad tiene mala fama. Al principio, tuve que recolectar mi cuerpo, mis cuerpos, a pedazos, estaban desparramados y mi alma chamuscada por tanto error inducido; no, ellos no tienen la culpa, la so-ciedad sólo quiere que todos nos parezcamos al modelo que necesitan para continuar reproduciendo un estilo de vida para el cual, la vida, no tiene importancia.

La felicidad siempre es oportuna, ello me recuerdo a mi mis-ma con frecuencia, para no dejar de disfrutar en ninguna cir-cunstancia, porque nunca sabemos de antemano lo útil que puede resultarnos, a la larga, una situación que en principio nos desagrada. Desde que me enamoré de la vida, mi optimis-mo siempre sale intacto; es que es tan breve la vida, que quien se complica o sufre, la reduce más todavía; además me hice amiga del silencio y él me enseñó que en este tiempo, todo su-frimiento es estéril, que sufrir ya no genera mérito ni nos reser-va una parcela de cielo en el más allá; el silencio también me dijo que cuando una se muere, inmediatamente le preguntan si fue feliz en la tierra, porque el paraíso está reservado para quienes fueron felices en la vida, para el resto, está reservado el infierno y allá por lo visto, nunca llueve.

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….¿Domesticar mi alma? ….no gracias, es que tengo prohi-bido ser infeliz. Gracias.

CAPÍTULO CUARTO

La abuela indígena me enseñó que cada día es una mon-taña para subir, sin prisa ni pausa, atenta a todo lo que

ocurre, mas conservando la paz y la serenidad, que garan-tizan mi lucidez, entonces sabré lo que preciso hacer en cada momento y la manera adecuada. Si corro, me canso demasiado por que estoy violentando mi ritmo, en él, soy in-cansable, por que el descanso está incluido en la actividad, cuando somos capaces de ir a nuestro verdadero ritmo. Subir a la montaña diaria, es un acto placentero; al tratarse de algo consciente y elegido voluntariamente, una descubre que la meta no radica en alcanzar la cima y a la mayor velocidad posible, sino encontrar nuestro ritmo y fluir con él, diluyendo la meta en todo el itinerario, entonces, todo el camino se llena de enseñanzas, de maestros invisibles que nos enseñan lo que precisamos; de esta manera siempre alcanzamos la cima, por que ella es, allí donde estamos conscientemente. La prueba del logro mencionado, es que al regresar, quién vuelve, es la montaña en forma de mujer. Aprendí también de ella, a tomar energía de la Madretie-rra: siempre me decía: “Ella está viva, ella nos comprende y apoya, sólo tenemos que aprender a hablar con ella”. Tenia razón la abuela, la tierra es un organismo vivo, sólo que hace falta otro nivel de consciencia para comprender aque-llo; el silencio es un buen territorio, para acercarse a ella.Cuando la mujer se siente sola o incomprendida, cuando le falta el valor o es asediada por los miedos, temores induci-dos por un modo de vida que no contempla el crecimiento de la mujer, es útil recordar hermosos paisajes naturales; es la Madretierra, vestida con traje festivo, para recordar-

nos que la vida continúa siendo bella, aunque momentá-neamente nos quedemos dormidas, pues en verdad si nos afectan desde fuera, no es que la vida sea muy dura, es que hemos permitido que nos debiliten. El reencuentro con la Madretierra será altamente tonificante, entonces, ya no será necesario que salgas a la calle a buscar consuelo, ni tu alma te pedirá argumentos para seguir viviendo, tampoco tu destino continuará deshilachado, porque comenzarás a descubrir, que toda tu fuerza está adentro y que el destino mira con respeto a quienes se atreven a vivir dignamente. Optar por la queja o la resignación, equivale a morirse en cómodas cuotas diarias, el síntoma que delata esta actitud, es la infelicidad, que a su vez revela el sinsentido existen-cial, lo que equivale a sufrimiento del alma. Hay mujeres que se depilan con hacha de piedra y luego se quejan. La mujer tiene permiso para ser feliz, se lo ha concedido el Universo hace mucho tiempo, de manera que si está vivien-do mal, es por iniciativa propia. Hay demasiada mujer en el mundo sufriendo en vano, incluso hay mujeres que sufren por si acaso, mientras otras lo hacen como una manera de tener un tema para hablar con la vecina. No es casual ver tantos horizontes tiritando, tanta vida que se arruga por ausencia de placer, tanta estupidez abrumadora, tantos días ausentes de felicidad……¡Si la vida es un regalo para crecer disfrutando!. Y desde el día que me atreví a ser yo misma, sentí una voz que me decía: “EL UNIVERSO TE AMA, SÉ FELIZ, QUE TODOS TE ESTAMOS MIRANDO”. Desde entonces me da vergüenza ser infeliz, con tanto testigo cósmico. Por favor, ¡date por aludida!

CAPÍTULO QUINTO

Hazte amiga del silencio, vale la pena, saborea cada partícula de eternidad llamada instante, vívela inten-

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samente, profundamente, conviértete en lo que amas, sal-drás fuera del tiempo, sintonizarás la eternidad, navegarás la unicidad de la que todos somos parte. No vale la pena vivir con el libreto oficial, según el cual, sólo somos carne de cañón o souvenir decorativo y acrítico detalle estético, es decir, estupidez bien limpita, lavada y planchada como corresponde a los criterios modernos y al buen gusto de la inquisición invisible, que continúa cazando brujas, sólo que ahora, por razones higiénicas, en vez de quemarnos, nos vacían por dentro, así pasa desapercibido el mujercidio. Tirita el alma cuando no nos atrevemos a ser nosotras mis-mas; es que no podemos seguir fingiendo que vivimos cuan-do el olor a podrido, por no estar creciendo en plenitud, nos delata a distancia. Recuerdo una receta aprendida un día de una Mujer de Sabiduría que decía: “Cortar en finas reba-nadas el temor y tirar la cadena…….”, obviamente del baño. La infelicidad es antihigiénica. No podemos seguir reptando miserablemente, no sirve de consuelo el afirmar que este año, reptamos mejor que el año pasado. La oruga no sólo tiene el derecho, sino el supremo deber de convertirse en mariposa e iniciar el vuelo multidimensional, porque en ese trayecto alcanzará la comprensión de su misión en la tie-rra. ¿Acaso no sabes que todas somos extraterrestres en escala técnica en el Planeta Tierra, donde mientras tanto, tenemos cada una nuestra misión personal que cumplir? ¿Acaso no te dijeron que marcharse de la tierra sin cumplir nuestra misión es un grave delito cósmico, una especie de pecado auténticamente mortal por las consecuencias evo-lucionarias que ello implica? Por favor, ¡deja de molestar a Dios y comienza a disfrutar la vida de una vez por todas! Algunas mujeres nos preguntan en los Seminarios del KLAN DE LA LUNA, por qué insistimos tanto en el logro de la felici-dad, pues hay quienes vienen tranquilas y al terminar de es-cuchar se van intranquilas, aveces incluso confundidas. In-variablemente nosotras decimos en estos casos, “¡Vas por buen camino!, por lo menos logramos que dudaras, que las

anquilosadas estructuras del estilo de vida irrespirable que te impusieron, comiencen a tambalearse. ¡Sigue adelante!, duda, confúndete, llora, descubre que estabas viviendo una mentira, atrévete a danzar en medio de la tormenta y arribarás al oasis de la paz, donde comienza la vida”. ¿Sabes?, es importante estar bien, por que la felicidad es nuestra condición natural y ella fluye desde dentro; cuando se la busca a fuera, sólo se cosechan oleadas de infelicidad en forma de apegos, dependencias y adicciones y ello nada tiene en común con el amor, que es una delicada planta de flores hermosas y frutos exquisitos, empero sólo crece, en el fértil terreno de la felicidad. Cuando tú estés bien, no precisarás es-forzarte para nada, pues estás en tu ritmo, en tu vibración, en tu centro, alineado tu eje energético al corazón del cielo. Todo se va dando, con la música del alma y el placer de saborear la vida en todas sus facetas. Cuando tú estás bien, todo está bien, los problemas devienen en meras enseñanzas, las ad-versidades nos fortalecen, los obstáculos desabrochan nues-tra creatividad, la incomprensión nos hace más autónomas incluso la gente insoportable nos resulta agradable, porque nos enseña el camino que no tenemos que transitar. ¿Te das cuenta? Ser feliz es la mejor inversión. Permítete ser feliz y el amor vendrá por añadidura.

Cuando una persona está bien, nada es complicado, nada difícil, nada imposible; la felicidad te devuelve los colores a la vida, las luciérnagas a las noches, entonces hasta la os-curidad adquiere belleza, la música despierta tu alma, que empieza a descubrir que la vida continua siendo bella, pase lo que pase. No es necesario en todo los casos, al abrir una nueva etapa, prescindir del marido, es recomendable intentar contribuir en su despertar, obviamente dentro de una estrategia de crecimiento personal, al interior de un cronograma que nos permita manejar nuestro tiempo inte-ligentemente sin jamás llegar a hipotecar nuestra vida, por-que es lo único que tenemos y el mejor regalo del Universo.

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Cuando estamos bien, conservamos nuestro centro y allí es-tamos protegidas y somos poderosas, por ello se enfatizaba más en la Edad Media la “caza de brujas”; a los brujos podía perdonárseles, mas a las mujeres resultaba muy peligroso por el poder que emanaba de su centro, de sus círculos lu-nares, del fuego que encendían y los cantos que entonaban, sonidos sagrados e incomprensibles en los que cabalgaban a otras realidades, donde conectaban más poder todavía. Una mujer en su centro es también sanadora por excelen-cia; al ser la sucursal del Universo en lo que se refiere a la energía creadora (no sólo reproductora expresada en tér-minos de maternidad), se convierte fácilmente en canal de la energía cósmica y telúrica, que en su cuerpo se traduce en energía sanadora y armonizadora. Siempre hemos dicho que la mujer está condenada a ser artista, a ejercer esa cuantiosa energía creadora; no es suficiente reducirla a la instancia decorativa hogareña, hay que asumirla en todo su potencial y ello supone el compromiso de hacer de nuestra vida, la primera obra de arte, donde sea que estemos. Nada justificará el tiempo perdido, ¡recuérdalo!

CAPÍTULO SEXTO

¿Cómo estás? ¿Qué siente tu mujer interior? ….en realidad este mensaje no es para la cabeza, sino para tu Diosa

Interior, para esa chamana invisible capaz de, al despertar, liberar un inmenso potencial que estaba dormido, en esta sociedad somnífera donde la estupidez está recomendada, la frivolidad bien vista, la hipocresía con status de buena educación y la vida vacía elevada a un nivel de normalidad. Este es un mensaje-semilla para que germine en el jardín de tu corazón y crezca y florezca y puedan los frutos de ese árbol sagrado transportarte a la gestación de nuevas eta-

pas, con prioridades reformuladas y metodologías redise-ñadas. Es tu vida, la única que tienes por ahora, no puedes, no debes sacrificarla a cambio de nada, ni del visto bueno o del aplauso ajeno, que resulta tan fugaz y engañoso. Hay mujeres que transitan por la vida mendigando compren-sión, y en verdad, no es necesario ser comprendidas, es más, resulta imposible. Nuestra condición lunar garantiza inestabilidad y cambio, sólo tenemos que aprender a cana-lizar bien nuestras cambiantes energías y encauzarlas en el río del autoconocimiento, entonces todo está bien. Existen tres estados de consciencia, que con ayuda de una metáfora vamos intentar aclimatarla a nuestra vida. Re-sulta que la sociedad está organizada de tal manera que hay lugar para todos, siempre y cuando estén debidamente cuadriculados, es decir con el alma domesticada, además lo suficientemente frívolas como para garantizar el no dar-nos cuenta de nada profundo. El agua en su primer estado constituye un bloque de hie-lo; sus características: frialdad, rigidez, en lo humano se traduce en consciencia crepuscular, incipiente, que se per-cibe como normal. La gente que se identifica con el nivel bloque de hielo tiende a complicarse mucho, se queja con frecuencia, empero sólo se queja, no hay la acción creadora y transformadora, al contrario afirman con frecuencia: “yo soy así”, les cuesta cambiar, rechazan lo nuevo, su sober-bia les hace pensar que ellos saben más que los demás y son tremendamente críticos y destructivos del prójimo. La envidia es otro síntoma típico de este nivel, caracterizado además por ser poco sensible, bastante superficial y total-mente infeliz, aunque cuando le preguntan “¿Cómo estás?”, invariablemente responden: “¡Bien!, gracias”. El conocimiento elevado a nivel de sabiduría es fuego, que al acercarse el bloque de hielo, comienza a derretirlo, ope-rándose una transformación cualitativa a nivel conscien-cial. Claves de sabiduría podrás encontrarlos en buenos

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libros, personas sabias o incluso situaciones que te permi-tan enfrentarte contigo misma (enfermedad, accidentes, etc.), siendo los últimos no muy recomendables, empero es bueno saber que incluso las adversidades, pueden dinami-zar nuestro crecimiento, si tenemos la actitud adecuada.

En contacto con el conocimiento, el rígido bloque de hielo comienza a derretirse, se opera una TRANSFORMACIÓN. El agua en estado líquido tiene capacidad de fluir, de no compli-carse, de tener la forma de la circunstancia que la contiene, reencontrando de esta manera la capacidad de disfrutar la vida y convertir toda situación en un factor de crecimiento. La mujer que se encuentra en este punto, es un regalo para los demás, la paz que irradia, su ternura incondicional, su creati-vidad liberándose a cada momento, posibilitan una presencia reconfortante y agradable; muchas enfermedades en ella, son resueltas, por la propia fuerza autocurativa del cuerpo, la vida deviene por tanto en fiesta de crecimiento permanente. Si el contacto con el conocimiento continúa y el trabajo inte-rior no se interrumpe, el fuego continúa calentando el agua. Es un proceso placentero y gradual, a menudo caracterizado por incomprensiones necesarias para fortalecer a la recién nacida. El agua termina dando un salto cualitativo, ocurre una nueva transformación y el agua comienza a evaporarse, ya no está sujeta a la ley de gravedad, puede subir hasta las nubes, puede trascender lo cotidiano y sobrevolar desde una consciencia superior, es un nuevo amanecer, la mujer comienza a vibrar de otra manera, su realización personal ya no es una utopía, su presencia plena emana de la condición de guerrerra de la paz, imperturbable y llena de luz. Quizá estés pensando que ello está reservado para mujeres especiales; sin duda, toda mujer que se atreve a despertar se torna especial. Éste también, es un mensaje para tí.

CAPÍTULO SÉPTIMO

Y un día comprendí que ser mujer no es un acto meramen-te anatómico o fisiológico, que tener vagina y senos re-

sulta insuficiente para considerarse mujer, que ello es una cualidad energética y consciencial, manifestada de manera concreta, pues aunque cada mujer sea distinta, hay una energía común que las fusiona y conecta, estableciendo pactos invisibles y alianzas multidimensionales, inexplica-bles para ellas mismas mientras no arriban a un nivel de conocimiento sagrado y de adecuado manejo energético. Basta dejar a dos mujeres viviendo juntas para que comien-cen a menstruar al mismo tiempo, por ello, la Alianza de Mu-jeres de Sabiduría, es más profunda y significativa, al estar sus cimientos fundados en una sincronización energética que ninguna teoría científica puede explica. Y cuando comprendí que ser mujer va más allá que tener un cuerpo con determinadas características, comencé a indagar sobre el significado. Fui descubriendo, por ejem-plo (quiero compartirlo contigo, recuerda que es confiden-cial, sólo apto para mujeres valientes), que a las mujeres nos preparan para cumplir una función secundaria, algo así como ser extras en la película de nuestra propia vida, es decir, nos inducen a cabalgar sin tener las riendas de nuestra vida en nuestras manos, con lo cual se garantiza la caída y la reputación de ser adecuadas para roles fun-damentalmente secundarios. El plan funciona muy bien, muchas mujeres “viven” sin darse cuenta que en realidad están muertas, que hasta sus sueños son prestados, que haciendo lo que hacen, no sólo está descartada su auto-realización, sino que también está previsto que no se den cuenta que en verdad, se les está robando la vida. Para ello es necesario mantenerlas ocupadas, pues una mujer con tiempo podría ponerse a meditar, a explorar su espacio interior y descubrir el inmenso potencial que lleva dentro

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y atreverse a liberarlo y empezar a tener sabiduría, con lo cual sería más difícil perpetuar la domesticación del alma y la pulverización de las consciencias, requisito indispen-sable para continuar manipulándonos. Quizá alguien está muy interesado en que no nos despertemos, por que ello podría afectar a sus intereses. Entonces continué indagando sobre el significado de ser mu-jer, mientras en coro, la gente que más me quería (que te confieso que es la gente con la que hay que tener más cui-dado), comenzaba a decirme y darme consejos, respecto a lo que más me convenía, a las múltiples profesiones rápidas que una mujer puede lograr o a las alternativas matrimonia-les con, especialmente personas que garanticen solvencia económica, subordinando amor y sueños a la estabilidad económica, tan importante según ellos en este tiempo. Fue necesario romper algunas cadenas, taladrar muros, soportar cortinas de silencio e indiferencia, por que ser dis-tinta está mal visto y ser feliz, resulta altamente peligroso, más aún cuando el rebaño adoptó la infelicidad como nor-mal. A aprendí a NO SUFRIR CUANDO ME DIFAMABAN; el sufrimiento es infección del alma, que termina contaminan-do el espíritu. Fue necesario hacerme fuerte, menos mal que no faltaron adversidades y pedradas, todo ello es parte del itinerario liberador, pues para ser mujer de verdad, hace falta ser valiente, tornarse imperturbable, dotarse de sorde-ra selectiva y a veces, disponer de amnesia autoinducida y recordar sólo lo que enseña y fundamentalmente lo her-moso. La soledad es hermosa, cuando forma parte de un camino de autoconocimiento. Fue necesario también, madurar sin perder la capacidad de disfrutar, preservando las ganas de jugar en este mundo que apesta de seriedad y excesiva solemnidad. Y aprendí a dis-frutar de todo lo que me pasara, en especial de lo imprevisto. ¡Qué hermosa es la mujer preparada para todo, capaz de ha-cer lo que en cada momento fuera necesario, de la manera

precisa, con pasión y sin apego, con fervor y efectividad, con eficiencia y reverencia, con responsabilidad y placer! Porque quién no disfrutar de lo que hace, es una masoquista. No lo olvides (y no pienses que estoy hablando de la vecina). Después de todo, resulta que ser mujer en este tiempo, supo-ne un supremo compromiso para, en principio cumplir nues-tra misión, preservando nuestra identidad y el derecho de ser nosotras mismas, fluyendo a nuestro ritmo y disfrutando del itinerario, evitando caer en la trampa de pensar que la meta está al final del camino, cuando en verdad se encuentra dilui-da en todo el itinerario. Entonces comprendí que todo comienza con el acto de sen-tirse viva. Captado el ritmo de la vida, todo adquiere un nue-vo significado, la Madretierra pasa a ser algo vivo, tangible, poderoso, ineludible, una empieza a sentirse parte de algo maravilloso e infinitamente grande, que ningún aislamiento o difamación altera la paz que brota a borbotones desde dentro; ya no dependemos del otro ni las circunstancias externas nos aplastan, es probable que muchas cosas no cambien afue-ra, mas si adentro ocurrió la transformación, ya habitamos un mundo nuevo como semillas de la Nueva Humanidad. A esa fiesta quiero invitarte y a través tuyo a todas las mu-jeres que puedas reunir para compartir estas enseñanzas. No hace falta formar un grupo, más bien lo que precisamos es constituir constelaciones de consciencias femeninas confluyendo al unísono algunos días, a determinadas ho-ras, para redescubrir nuestro poder y volver a sincronizar-nos con la Luna y reconectarnos con la Madretierra y volver a encender el fuego ritual e incinerando nuestros temores, volver a danzar dejando en libertad nuestros cuerpos, se-dientos de otras realidades que también están aquí. Como te darás cuenta, ésto más que un libro, es una invi-tación a reconstruir el paraíso a partir de nuestra propia reconstrucción, como mujeres que germinan esperanzas,

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como brujas de la Nueva Era que producen con sus invoca-ciones lluvias de diamantes, cometas de arco iris, vientos multicolores que arrastran y se llevan lo que ya no necesita-mos, mujeres encendiendo más luciérnagas para repoblar la noche, que aún nos separa del gran amanecer. Y entonces ese día, al partir podré decir con el alma de pie y mirando el cielo: “Misión cumplida…….”; a continuación, fiesta en el Universo.

CAPÍTULO OCTAVO

Hay una antigua tradición indígena que nos cuenta del origen de mundo y cuando se refiere a la aparición de

la Humanidad sobre la tierra, relata que venimos del es-pacio, que la mujer descendió suavemente mientras que el hombre cayó estrepitosamente, golpeándose en ello la cabeza, condenándose de esa manera a pensar indeteni-blemente, por ello, la mujer habría recibido el encargo de volver a encender el fuego sagrado, cuando los tiempos se tornaran oscuros y frívolos. Ese tiempo ha llegado. No es casual que la mujer está des-pertando con más fuerza, que los hombres aún, bajo la falaz idea de dominar el mundo, continúan atrapados en el más rudimentario materialismo que los ancla a la super-ficialidad; purgada de trascendencia, las decisiones más importantes carecen de corazón y espíritu, conduciendo al mundo al punto en que se encuentra actualmente. Sin duda, ese golpe de que nos habla la mitología indígena, fue lo suficientemente fuerte, que el hombre aún no atina a re-accionar y descubrir el éxtasis que nos conduce a palpar la eternidad de la que somos ciudadanos. Mujer, si encendiste el fuego del conocimiento, no permitas que el prójimo lo apague, mas no es posible estar todo el

tiempo a la defensiva o con vocación de mártir, la mejor manera de evitar apaguen nuestro fuego, es convertirlo en una hoguera, de manera que el viento de las adversidades, lo avive más todavía. Para ello precisarás reconectarte con la Madretierra, ella es la mejor fuente de energía, al ser el planeta más cercano, su irradiación es tan poderosa, que no podemos prescindir de ella. Conectarse con la Pachamama es el primer deber de toda mujer, mas aún si ejerce una función terapéutica o educa-dora, pues la Madretierra efectúa una función recicladora de la energía, purificándonos y energizándonos, de manera que nuestras células nunca se confundan y nuestra energía esté claramente enfocada en la perspectiva del crecimien-to elegido. Con la Madretierra podemos reciclar la energía adversa que nos envían, los temores que nos incomodan, las dudas cuando no dejan de sobrevolarnos. En su forma de montaña podemos potenciar el valor y la fortaleza, des-cubriendo que no estamos solas. También la tierra nos da la capacidad de concreción, la fuerza de la objetividad, el realismo necesario para habitar este tiempo, con esa prac-ticidad necesaria para sobrevivir dignamente y la habilidad para tener una buena capacidad operativa y de creación. La segunda gran conexión a establecerse es con MAMAKI-LLA, la sagrada luna que para los indígenas adquiere signi-ficativa importancia por ser la guardiana de la noche, de lo interior, porque nos enseña a vestirnos de luz cuando llega la noche del alma. La luna es también responsable de otor-garnos la magia, la fuerza de lo interior, de lo invisible, de lo esotérico, es grande la conexión de ella con la bruja, con la Mujer de Sabiduría, empero no debemos olvidar que ella tam-bién es responsable de esa inestabilidad propia de la mujer, que responde al ritmo de nuestra luna personal, además de estar influida por MAMAKILLA, cambios permanentes que al ser conocidos y adecuadamente manejados son totalmente naturales y pueden resultar incluso encantadores.

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La conexión con la luna es vital para toda mujer que anhela activar su fuerza interior. Puede establecerse este contacto directamente o mediante un trabajo chamánico con el mundo vegetal sobre el cual Mamakilla ejerce una especial influencia. MAMAKHOCHA es la tercera relación arquetípica que debe reconstruir toda mujer en proceso de liberación. Para el in-dígena de los Andes bolivianos Mamakhocha está repre-sentado por el lago Titikaka, cualquier lago lo simboliza y en especial el mar, que para nosotros igual que para los marineros es femenina. La conexión con ella será mediante la danza meditativa, pues la principal enseñanza que ob-tenemos de Mamakhocha, es la fluidez, la necesidad de ir fluyendo por la vida, dotándonos de la fuerza del agua, capaz de tener la forma de la circunstancia que la abriga sin dejar de ser ella misma; esa fuerza que en la guerrera se traducirá en haber encarnado el arte de no complicarse, de ser tan fuerte y tan suave, como para perforar la roca. Finalmente para completar el tawa -cuatro en idioma Que-chua-, número sagrado, habrá que restablecer la conexión con MAMAOCLLO, nombre que simboliza la diosa interior, esa chamana invisible que mora en nuestro interior, capaz de liberar una poderosa energía y un inexplicable nivel de guía y orientación, en especial en momentos difíciles. Restablecidas estas relaciones energéticas, gradual e ine-vitablemente los canales de energía se van desbloquean-do, posibilitando un adecuado flujo energético que nos va alineando y sincronizando al corazón del cielo. Empieza la mujer a sentir la fuerza del Universo latiendo en su interior. No debemos olvidar que somos la sucursal de la energía creadora, que cuando volvemos a ocupar el lugar que nos corresponde, se libera un potencial que inaugura una nue-va etapa, es decir, la fiesta de una vida llena de crecimiento y creación. Intuyo que no podemos faltar a esa cita.

CAPÍTULO NOVENO

El cambio de milenio es tiempo propicio para grandes transformaciones. Mientras los traficantes de rumores

especulan a diestra y siniestra, intentando abrir mercado alimentando el temor, nosotras debemos concentrarnos en sacar ventaja de todo lo que ocurra, pues nada es demasia-do duro cuando estamos bien preparadas y estar bien, no es algo reservado para gente privilegiada, tampoco fundamen-temos nuestra desgracia en posibles karmas, no hay peor karma que la estupidez no asumida y por tanto, crónica. Cada fin de siglo se especula con el fin del mundo y en verdad, el fin de este mundo es cuando nos toca partir. Es cierto que estamos de paso, mas el tomar consciencia de esa fugacidad nos debe inducir a aprovechar más el tiempo y disfrutar más la vida, de lo contrario estaremos muertas antes de habitar el cementerio y ello no es recomendable. Hazte cargo de tu vida sin temor, que la muerte camina a tu lado, empero no para asustarte, sino para recordarte que toca vivir, que aún estás viva y que estar viva significa crecer y crear, disfrutar y amar, es decir que quién no cumple estos requisitos, está muerta.

Este es un tiempo donde todo está tan dinamizado que per-der tiempo es mucho más grave. Vivimos una coyuntura pla-netaria donde ya no hay sitio para la gente neutra, tenemos que estar definidas; las opciones son: “La vieja inhumani-dad”, injusta, frívola, irreverente o “La nueva humanidad”, naciente, cualitativamente superior, poblada por mujeres y hombres valientes, capaces de amar sin condiciones, de ser libres sin dejar de ser responsables, gente nueva, crea-tiva, soñadora, austera y al mismo tiempo amante de la ca-lidad, por que sólo lo mejor es recomendable, empero ello incluye también consciencia ecológica y capacidad para hacer de nuestra vida una obra de arte. De eso se trata, de lograr mujeres artistas capaces de hacer con su vida, la mejor obra de arte que puedan concebir y encarnar.

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Somos de alguna manera responsables de lo que le está pasando al mundo y totalmente de lo que nos está pasando a nosotras. No hay culpables fuera. En este sentido será importante revisar la manera cómo encaramos las cosas, las actitudes que tenemos a diario, la manera como ma-nejamos las diversas circunstancias, el tipo de relaciones que establecemos, la calidad de nuestros pensamientos y el tipo de emociones, por que todo ello en conjunto va creando lo que llamamos futuro o destino. No hay excusas, cosecharemos mañana lo que hoy sembramos, no debe-mos olvidar que la siembra es voluntaria, mas la cosecha resulta inevitable y obligatoria. De ello podemos extraer una enseñanza fundamental e in-dispensable: vivir plenamente el presente, porque cuando nos limitamos a vivir el presente, con toda la energía que podamos enfocar en ese momento, podemos convertirnos en lo que hacemos y tornarnos incansables, purificarnos y disfrutar de lo que nos ocurra. Quien vive el momento plenamente, está capacitada para transitar la eternidad. Ello supone a su vez, la necesidad de confiar en nosotras, para ello a su vez es indispensable aceptarnos, valorarnos, amarnos con independencia de los errores que hayamos podido cometer en el pasado, porque si todo eso lo incor-poramos en un sendero de crecimiento, hasta los errores serán peldaños hacia tu autorealización. Vivimos tiempos de purificación; en contacto con la natu-raleza, las reconexiones energéticas así como el liberarnos de toda forma de resentimiento y remordimiento, nos per-mitirán volver a llenarnos de paz y ternura, suprema vibra-ción que curará las heridas del alma, permitiéndonos re-conectar con nuestra fuerza interior, que en ese contexto de bienestar, desencadenará una arrolladora energía au-tocurativa, capaz en la mayoría de los casos, de liberarnos de enfermedades, innecesarias, una vez que adquirimos la consciencia que nos permita comprender su significado.

La vida sigue siendo hermosa, pase lo que pase, no lo olvi-des, además es simple y profunda, para quienes desarrollan la habilidad de simplificar las cosas en vez de complicarlas, la vida es un permanente sembrar y cosechar, no hay op-ción a la queja, pues nadie nos obliga a sembrar lo que no queremos, es más, tenemos todo el apoyo del Universo para convertir a nuestra vida en una sagrada ceremonia. Probablemente tú como yo, hemos recibido cantidad de programas inadecuados, destinados a garantizar el au-toengaño y perpetuar la frivolidad, empero no es suficiente quejarse, hace falta transformar, porque todo puede cam-biar. Comencemos con nosotras mismas y luego revolucio-nemos el hogar, allá somos soberanas, podemos inventar nuevas reglas, que en el futuro garanticen la lucidez y nos acerquen a la plenitud, podemos además disfrutar de la dinámica transformacional en la que nos encontramos; sa-boreando lo nuevo y explorando nuestras potencialidades con inteligencia y valor. Aceptemos que en los demás, aparezca una resistencia a veces intensa a lo nuevo, hay gente que prefiere podrir-se en vez de cambiar, respetemos las otras opiniones. No podemos, no debemos renunciar a nuestro vuelo, porque alguien a nuestro lado se niega a despertar, no puedes hi-potecar tu vida por nada ni nadie, pues cada uno es un espíritu intentando evolucionar, mas cada uno tiene su mo-mento y no es bueno intentar forzar procesos; ya sabemos que no por levantarse más temprano, amanece antes. Diseña con creatividad tu nuevo estilo de vida, construye tu nueva etapa como siempre soñaste hacerlo, muchas co-sas al principio no las comprenderás, no es necesario com-prenderlo todo, empero algo resulta imprescindible y es saber hacia dónde se encaminan nuestros pasos, es decir la perspectiva de tu vida, el rumbo de tu existencia, la cual no es, ni podrá ser, negociable bajo ninguna circunstancia.

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Con el tiempo descubrirás que en verdad no hay problemas, que ellos son sólo espejismos alimentados por mentes ordi-narias, que es posible redefinirlos y ver a la vida con nuevos ojos. Si en este proceso descubres que quién vive contigo no se interesa por tu proceso trasnformacional, no te disgustes por ello, tampoco hace falta plantearse una separación, el ejemplo de un estilo de vida distinto y superior, será un buen argumento, la presencia plena y amorosa será irrefutable; si a pesar de ello continúa una conducta de interferencia, entonces puedes dar un paso más adelante, como quien le dice: “Mi amor, si continúas molestándome te voy a amar más todavía, así que ten cuidado conmigo”, y ese paso se-ría adoptar al cónyuge insoportable, como maestro, es decir, cambiar nuestro enfoque y empezar a verlo como a quién nos está enseñando lo que no debemos hacer, sacrificio incluido y karma también, por que es su siembra, empero en vez de sufrir, sacamos provecho a la circunstancia, dinamizando nuestro crecimiento al potenciar nuestra paciencia, nuestra capacidad de amar, nuestra coherencia, nuestro sentido del humor y nuestra voluntad práctica de crecimiento. El resto, disfrutar la vida, recuerda que en la puerta del paraíso hay un letrero que dice: reservado exclusivamente para quienes fueron felices en la tierra. No lo olvides.

CAPÍTULO DÉCIMO

Hoy al despertar me dije: “He decidido habitar cada mo-mento de mi vida, reunir todos mis instantes, saborear-

los con fervor, hacer de cada uno de mis días un oasis, en-tonces ya no me afectará el desierto de la sociedad que me rodea y cultivaré esperanzas y reforestaré de ternura los jardines de mi corazón y escucharé el consejo del silencio y lavaré mi alma en los manantiales de la pureza y la simplici-dad y viviré sin intervalos, la memoria de mi retina guardará intactos, todos los amaneceres”.

“Y exportaré sueños y coleccionaré éxtasis, la plenitud será mi manera habitual de ir por el mundo, una vez renunciado al infierno, acumularé toda mi ternura, para amar la vida, más todavía. Y caminaré al borde del abismo, vestida de alas no temeré más a nada, y estaré en permanente con-tacto con la Madretierra, mis raíces no caben en mis zapa-tos; en la mirada frondosa que poseo, habitan horizontes y cielos estrellados, ráfagas de sueños y dejaré que el amor ocupe su sitio, es decir todas partes, todo el tiempo”. “Estoy prohibida de ser infeliz, todo malestar es parpadeo necrofílico, estoy harta de contemplar vidas chamuscadas, sombras con zapatos deambulando por las calles de una presente asfaltado de frivolidad, es que la estupidez cubre el cielo pintándolo de negro. No, no me resigno a disponer de una mediocridad limpita y bien planchada. ¿Es que acaso no sabes que tu vida se arruga cuando no la disfrutas?”

“Y entonces comenzaré a cuidarme, cuidaré mis sueños para seguir soñando; siento que tengo permiso para lo imposible”. Hay una receta que quiero compartir contigo, por favor, no dudes en compartila: Un litro de amor, un kilómetro de li-bertad, un valle de coherencia y un océano de placer, todo ello, debidamente articulado en una vida autónoma y crea-tiva. ¿Comprendes? Hermana, amiga, compañera, mujer, es hora de bucear en nuestro interior y encontrar nuevos argumentos para seguir viviendo. ¡Ven!, vamos a repoblar el sueño y saborear la utopía, ¡Ven!, tengo ganas de escribir grafitis liberadores en tus pupilas y danzar bajo la lluvia, se acabó el pasado, el futuro se hizo presente, ya no hay nada que esperar, la felicidad no tiene pausas, ¡recuérdalo!

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CAPÍTULO UNDÉCIMO

Sin duda llegarán tiempos en que el ser humano funcio-nará básicamente con la energía del amor, ese supre-

mo combustible capaz de reconstruir vidas incineradas, ese fuego transmutador que en manos de seres con pureza, se convertirá en oasis alquímico, canal multidimensional de energías superiores, repoblando de luz la tierra. Es posible que muchas cosas no sepamos, empero el amor sabe lo que es necesario, para ello, sólo precisamos purifi-carnos, posibilitando el libre flujo de nuestras energías; para que ocurra ello, hace falta eliminar toda forma de tensión. Estar sana no significa carecer de dolores o síntomas moles-tos, sino y fundamentalmente encarnar la armonía a niveles físico, mental, emocional, incluso social y ecológico, además de espiritual, constituyendo en conjunto un mandala vivien-te, donde el eje energético sea nuestra esencia creadora, ferviente de crecimiento. Eliminada la tensión y los temores, nuestra vida vuelve a ser ese apacible y transparente lago, poblado de elegantes cis-nes, fluyendo sin prisa ni pausa, por que el tiempo no es-pera; mas nada hay tan peligroso como correr demasiado, pues con seguridad se llega más rápido, al lugar inadecuado. Cuando estamos bien, somos sanadoras por excelencia, por ello el primer objetivo a alcanzar, es el de estar bien.

En cuanto la mujer restablece sus conexiones energéticas, su alineamiento vibratorio le permite acceder a esa innata sabiduría sanadora, indisolublemente ligada a su trabajo in-terior, es más, convertida en una forma de vida cualitativa-mente superior. No hace falta dejar el trabajo ni renunciar a las amistades, tampoco hace falta aislarse del mundo ni afirmar la imposibilidad de vivir en una ciudad, la auténtica sanadora es una guerrera y ella tiene gran sentido de adap-tación, pues en todo momento sabe a donde se dirigen sus

pasos, por tanto, no renuncia al mundo, pero tampoco se deja atrapar por él. Ella trabaja y canta, viaja y comparte, explora, se atreve con lo nuevo, se da tiempo para viajar a su espacio interior, tiene tiem-po para danzar y meditar que también es una forma de orar, sana sus heridas, mejora su energía cada día, disfruta de todo lo que le pasa, pues todo lo convierte en factor de aprendizaje, incluso el dolor y la enfermedad, son vías que le conducen a nuevos y más profundos conocimientos, está en permanente autoobservación, por tanto vigila de cerca la energía, que fluye en todo momento por sus cuerpos, de esta manera está perma-nentemente preparada para ayudar a los demás. Sabe que el amor incondicional es la base de todo método terapéutico, que sanar al otro incluye la autosanación, por ello, la sanadora cuida rigurosamente su cuerpo, lo que intro-duce en él vía alimenticia, los tiempos de descanso energiza-dor mediante el silencio o la naturaleza; sabe la importancia de la danza como autoterapia armonizadora indispensable en este tiempo, establece relaciones interpersonales caren-tes de apego y dependencia, por que ello interfiere el flujo natural de la energía, que requiere un contexto de libertad, se entrena para estar en toda circunstancia serena, trans-portando reservas considerables de paz interior. Acepta y reconoce que la felicidad es condición natural de existencia, que no hace falta nada de fuera para estar bien, que la felicidad o brota desde dentro o es una mentira, que estar sana es sinónimo de estar feliz, que a su vez equivale a estar llena de amor, que la vida misma, en un estado de alerta permanente, es la mejor escuela de la que emanan sanadoras ésto es, Mujeres de Sabiduría, preparadas para toda circunstancia. El primer deber de la nueva mujer es permanecer sana, para garantizar la lucidez que posibilite el discernimiento y la ac-tuación con sabiduría. Una mujer con estas características

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está en permanente renovación, es incansable viviendo y creciendo, compartiendo y amando, tiene un compromiso profundo con la vida, para ser en todo momento creativa, es decir, garantizar la creación de un mundo nuevo a partir de ella misma. El compromiso además de vivir apasiona-damente, de enamorarse de todo lo que toque hacer en cada momento concreto, de sembrar alegría y humor por el mundo, enfermo de excesiva seriedad. Después de muchos viajes interiores y exteriores, he llegado a la conclusión que no hace falta saber muchas cosas, em-pero algo resulta imprescindible: “saber lo que estamos ha-ciendo”, es decir, cómo estamos manejando nuestra energía cotidianamente. No es cuestión de celebrar mecánicamente nuestro aniversario cada año, recibir felicitaciones y regalos por el simple e involuntario acto de tener un año más de vida y desde un día cualquiera, más canas, más arrugas, al punto que algunas mujeres requieren cada día más valor para en-frentarse al espejo, ese vecino que tiene la mala costumbre de expresarnos la verdad sin rodeos. Hace falta evaluarnos anualmente, mensualmente, cada luna persona tendrá que ser motivo de rigurosa autocrítica, para no engañarnos. Cre-cer es un artesanato cotidiano que requiere mucha atención y abundante honestidad, no lo olvides. Si aceptamos que la felicidad es nuestra condición natu-ral, deberemos reconocer que en ella está incluida la salud, ella también es nuestra condición natural. La enfermedad no aparece casualmente ni es algo azaroso e inexplicable, muchas veces tiene que ver con errores de estilo de vida, con flagrantes equivocaciones que no queremos dejar de cometerlas. La salud es armonía a todo nivel y está al al-cance de todos a sola condición de respetar las leyes que rigen el Universo. Es posible conservar nuestra salud y re-cuperarla si la perdimos, para ello sólo tenemos que quitar lo innecesario, quitar lo que obstruye y posibilitar nueva-mente ese flujo energético libre y responsable, comanda-dos por nuestra capacidad autocurativa, que en lo concreto

estará expresado en nuestro sistema inmunológico, capaz de empeorar o mejorar, según estados de ánimo e incluso calidad de pensamientos. Quizá sea buena idea volver a proponer los círculos feme-ninos para conectarse con la luna, en especial en la fase creciente, es decir en todo ese interesante período de as-censo energético instalado entre la luna nueva y la luna lle-na, círculos de apoyo energético que podrán, con el tiempo, convertirse en círculos sanadores capaces de, incluso, en-viar a distancias extensas, energía curativa para humanos, animales, plantas o la Madretierra. Si estás llena de amor, dispones de energía sanadora, ella mis-ma será tu medicina y tu camino de autoconocimiento, enton-ces la terapia se convertirá en un viaje interior capaz de liberar potenciales adicionales de energía, que a su vez te posibilitarán ayudar a más personas todavía, es decir, pasarás a ser un ins-trumento del Universo, mediante el cual, continúa gestándose una nueva humanidad, por tanto tiempo anhelada.

CAPÍTULO DUODÉCIMO

La historia de la humanidad comienza a recoger la pre-sencia de Mujeres de Sabiduría que poblaron la tierra si-

lenciosamente. Gruesas cortinas de silencio en algún tiem-po se tendieron sobre esas mujeres que tuvieron la osadía de desafiar lo establecido, y renunciando al libreto oficial, abrir nuevos caminos en la perspectiva de una liberación integral. Es probable que la mujer tenga que comenzar libe-rándose de una mentalidad machista que perpetúa en los hijos. Quizá la mujer tiene que replantearse seriamente la educación de las mujeres jóvenes para, desde el principio, posibilitar su sed de crecimiento y la consciencia del inmen-so potencial que llevan dentro. Quizá es tiempo de dejar de llenar las cabezas jóvenes de las nuevas generaciones, y

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comenzar a educarlas en el sentido etimológico del térmi-no: hacer Surgir las potencialidades latentes. Esta labor re-quiere inevitablemente mujeres de sabiduría, mujeres gran-des de espíritu, capaces de comprender las necesidades de este tiempo, mujeres dispuestas a volar alto, dotadas de una gran visión que les permita anticiparse a los aconteci-mientos y guiar a las jóvenes por los nuevos senderos de la nueva humanidad, desde la fase más embrionaria. Quizá el compromiso más grande no sea otro que el de ad-quirir esa grandeza, renunciando a la idea que sean otras las elegidas, porque si todas pensamos así, habremos de-tenido la historia en su capítulo más interesante. A esa cita quiero invitarte. Ésto más que un libro, es una invitación a tu alma a vestirse de alas e iniciar el vuelo, tantas veces postergado. Que la sociedad de consumo continúe consu-miéndose si así lo desea, no tenemos que irnos a otra par-te, es suficiente con impedir que la telaraña convencional nos atrape, entonces no podrán colonizar nuestro espíritu y cada una podrá ser una república independiente, cogober-nada por el amor y la paz. Es necesario que la mujer esté preparada para transitar dignamente por este mundo, por ello considero fundamen-tal la preparación y el mantenerse actualizada. El trabajo interior no tiene que anular la capacitación para manejar-nos en este tiempo; conociendo todas las destrezas ne-cesarias, no hace falta coleccionar diplomas ni aprender cosas por que está de moda, tampoco es recomendable caer en el tráfico de apariencias o el culto a la imagen. Sim-plemente precisamos ir dignamente, como guerreras de la paz, como constructoras de una nueva civilización de paz y amor, encarnando la solidaridad en toda circunstancia, proponiendo desde la práctica, formas no violentas de ma-nejar los conflictos, para dejar de alimentar un sistema que se nutre y funciona a tracción de sangre. Si desatrinchera-mos el corazón, tenemos más presencia y fuerza, para dis-crepar con la violencia legalizada, para manifestar nuestra

indignación desde la ternura, para oponer a la mentalidad convencional otra forma de ver las cosas, otra manera de resolver los conflictos. El problema es que hay demasiada tendencia a la agresi-vidad en este mundo; se agrede a la Madretierra con una cantidad creciente de químicos, privilegiando la industria y la generación de puestos de trabajo, olvidando que a mediano plazo cosecharemos la devastación de la Naturaleza y epi-demias de cáncer, demostrando una vez más, que en este modo de vida, la vida no es importante, es más, que resulta rentable la administración del caos y el sufrimiento ajeno. El hombre moderno trata a la naturaleza igual como se tra-ta a sí mismo, de la misma manera trata a los demás. Ya no es suficiente decirle que trate al resto como a sí mismo, ha-brá que comenzar recordándole y enseñándole a amarse a sí mismo, porque no se puede dar aquello que no se tiene. El cuerpo humano del hombre moderno está padeciendo una lamentable agonía; las causas de muerte son demasia-do evidentes y evitables, empero hace falta tener el valor de transformar el estilo de vida y ello comienza modifican-do radicalmente nuestra forma de pensar, atreviéndonos a tener nuevos conceptos, es decir, cuestionando la norma-lidad vigente por ser totalmente anormal. Revisemos algu-nos de ellos: - ¿Quién decide qué es lo normal y sobre la base de qué criterios? Si se acepta como normal lo que hace y piensa la mayoría, llegaremos a la conclusión que estar sanas es una patología y ser felices una anormalidad. - Hay una tendencia a enmascarar la realidad y evitar el diálogo de temas fundamentales como por ejemplo la sexualidad, como si no fuera el origen de todos un acto sexual. Tampoco se alude al análisis, en los temas cotidia-nos, del placer, del orgasmo y el crecimiento como pareja;

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es más fácil referirse en los escasos momentos de diálogo, a temas frívolos u ocuparse de la vida de los demás. - El amor en la pareja ha quedado reducido a una mecánica relación en base a deberes y roles fijados de antemano, eli-minándose la magia y la sorpresa, la creatividad y la imagina-ción; toda pareja oficial recibe un libreto que debe acatarlo. - En este mismo contexto, no se asocia amor con libertad, vida en común con crecimiento conjunto, sexualidad con misticismo, hogar con sagrado, femineidad con erotismo, de manera que al tener todo fragmentado y disperso, cada una viva como con la energía dispersa y sin profundidad. - Las relaciones interpersonales garantizan el aislamiento y la frivolidad, permaneciendo cada uno debidamente en-quistado en su espacio íntimo, al cual, sólo se puede acce-der vía psicoterapia. - Las relaciones antes mencionadas excluyen cualquier forma de contacto físico, hasta un simple abrazo puede ser sospe-choso, una caricia se constituye, en estas circunstancias, en un potencial delito con impredecibles consecuencias. El ser humano moderno ha olvidado que, al igual que los niños pe-queños lloran solicitando caricias, los adultos necesitamos esta elemental forma de alimentarnos el alma, que si bien ya no podemos llorar pidiendo una caricia, porque adolecemos de buena educación, lo que hacemos a la larga es peor que ello, terminamos desequilibrándonos; menos mal que se inventó el masaje terapéutico antiestrés, de esa manera por lo menos podemos recibir caricias científicamente fundamentadas. - La mujer reducida como objeto sexual en esta socie-dad, es sutilmente utilizada como carnada para venderle al hombre cualquier cosa, para ello se establece un hábil juego paradójico de estimular y reprimir simultáneamente el acceso a la sexualidad que con ella se simboliza, de esta manera el deseo siempre está latente, es decir el anhelo

de consumo, no disminuye ni se funda obviamente en una necesidad real. - Los temas son abundantes, quizá formularnos sólo algunas preguntas más. ¿Por qué no podemos tener nuestros niños en casa? ¿Por qué no podemos elegir la postura del parto? ¿Por qué es obligatoria la escuela si no garantizan maestros lo suficientemente armónicos y felices como para dar buen ejemplo a nuestros niños? ¿Por qué en los diarios no se habla de autorealización y éxtasis? ¿Por qué no hay, como antes, espacios donde mujeres realizadas enseñen a otras mujeres a no fracasar en la vida? ¿Por qué no se nos enseña el sa-grado arte de ser mujer? ¿Por qué las revistas para mujeres nos atiborran con frivolidades, descartando los temas que de verdad necesitamos para acceder al autoconocimiento? ¿ Por qué estamos solas, aisladas, confundidas, con bajo nivel de autoestima y con poca información sobre nuestros procesos? La historia no perdonará a quienes por evitar equivocacio-nes, terminan pudriéndose en el rincón de su casa sin ha-cer nada, ni siquiera un error. Empero no todo está perdido, es más, estamos presenciando un generalizado despertar de la mujer a nivel planetario, sólo tienes que garantizar tu despertar, estar atenta para no volver a dormirte, conec-tarte con todas aquellas iniciativas válidas por un mundo mejor y atreverte a ocupar el lugar que te corresponde; el resto, vendrá por añadidura. Ahí nos vemos, mi nueva trin-chera de lucha es un jardín, en mi corazón.

CAPÍTULO DECIMOTERCERO

Y las mujeres vamos pasando por la vida como quién tran-sita por una calle de un solo sentido, sin opción a retorno

posible, caminamos siempre al filo de los instantes, trans-portando nuestro cuerpo que en realidad es una puerta, po-cas veces descubierta; aveces al acostarnos, nos encontra-

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mos en la cama con la nostalgia de cuerpo entero, como si la soledad fuera nuestro destino, entonces nos rebelamos y reeditamos esperanzas, florecen los recuerdos de siempre, amanece otra vez nuestro optimismo, es que hay más águi-las volando, sólo que aún no hemos alcanzado nuestra altu-ra crucero de vuelo; lo mejor de la vida, nos tiene reservado el Universo, cuando purificamos nuestra energía y fluimos libres por la vida, saboreando instantes infinitos, ascendien-do hasta la cima de la felicidad y decidiendo permanecer en ella, porque aunque sea para contemplar una sola vez el amanecer, el arco iris, la noche estrellada, la mariposa en vuelo o la sensación oceánica del orgasmo, valió la pena ha-ber venido a la tierra, en forma de mujer. La vida es hermosa, a pesar de tanta gente trabajando al revés, la vida continúa siendo hermosa, por que además del paraíso recibido, la belleza la incrementan las mujeres y hombres que transportan en su mirada paz y de sus manos emana amor. Es probable que vivir en el mundo moderno sea un gran desafío, empero vale la pena aceptarlo, ello supone, prepararnos para vivir dignamente, mirando al pasado sólo para extraer la en-señanza necesaria, moldeando el futuro con una vida plena, centrada en un presente pletórico de trascendencia, inteligen-cia y amor, que es la mejor manera de estar protegidas.

Este es un buen momento para recordar que las mujeres no nacemos completas (los hombres tampoco), que el na-cimiento es una oportunidad para completarnos y desa-rrollarnos, mediante un placentero trabajo interior que nos dé la altura de MUJERES en todo el sentido del término. , ésto significa aspirar sin temor al ridículo ni al fracaso, a la grandeza que supone la Mujer de Sabiduría, al concebir la vida como una finalidad en si misma, que incluye nuestra evolución. Es bueno saber que no necesitas volverte seria o solemne, al contrario, habrá de jugar más, disfrutar más, porque todo este proceso implica un profundo despertar; cuando ello ocurre, dejamos de sufrir, pues el sufrimiento está reservado para quienes aún no se han despertado;

nuestro ego se va reformulando, ya no es de nuestra predi-lección juzgar a los demás, tampoco es necesario compli-carse, es más, los problemas dejan de ser tales, los pájaros siguen cantando y las estrellas llenando de luz la oscuridad; todo empieza a estar bien, porque nosotras estamos mejor. La vida comienza a convertirse en un arte, lo cotidiano se llena de magia, el presente es disfrutable en todas sus fa-cetas, pues si estamos despiertas todo es diferente, hasta las lágrimas adquieren belleza y profundidad. ¿Qué ha cam-biado?, nosotras; ahora nos limitamos a vivir el presente sin distracciones que distorsionan nuestra energía, pode-mos estar en cualquier parte, el monasterio va por dentro, toda la humanidad pasa a ser nuestra tribu planetaria, las fronteras son meros recuerdos de una sociedad caducada, ahora tenemos un hobby y es la libertad, un trabajo cotidia-no: amar incondicionalmente y con inteligencia, un desafío: continuar creciendo con todo lo que nos pase, un estado habitual de existencia: la felicidad, esa poderosa energía que brota desde dentro, posibilitándonos sentir que todo el Universo nos pertenece, es decir que somos millonarias y que estamos en la tierra para crecer disfrutando.

Entonces la ternura será nuestra religión y la danza ora-ción, entonces podremos fluir por el río sagrado de la vida, sin prisa ni pausa, accionando los remos de la esperanza, segando eventuales temores que se presenten, poniéndo-me de pié, en cada curva de la existencia para gritar: ¡Estoy viva! y sentir que el tiempo escribe contento sobre mi ros-tro, las huellas de una vida dignamente vivida. Espero con-tar contigo en la retransmisión de este urgente mensaje.

CAPÍTULO DECIMOCUARTO

El mundo de este tiempo está como está, no podemos que-jarnos, empero algo es posible hacer, contribuir a la gesta-

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ción de una nuevo mundo a partir de nuestra propia transfor-mación. Para ello no hace falta aislarse, al contrario, tenemos que estar en todas partes, mas hace falta saber estar, de tal forma que podamos continuar siendo nosotras mismas, ínte-gras, lúcidas, fuertes y tiernas. Triunfar en la vida, en este nuevo contexto supone autorealiza-ción. Ya no es suficiente el éxito medido cuantitativamente o en términos monetarios, precisamos el autoconocimiento que nos permita alcanzar la cima de la expansión consciencial; no debe-mos olvidar que el éxito es lo que más fracasa. Recordemos algunas nociones al respecto, siempre en la perspectiva de nuestra liberación. Ten cuidado con los conceptos caducados, la nueva Humani-dad parte de un nuevo paradigma por tanto, es preciso hacer un replanteamiento a todo nivel. Es importante tener absolu-tamente claro que lo fundamental no es tener sino “ser”, que de nada sirve tener mucho si carecemos de la capacidad de disfrutarlo y colocar ese placer al interior de un sendero de creci-miento. Aprecia tu pasado mas no te aferres a él, sólo es útil con fines didácticos. Elige lo qué quieres ser y visualízalo de esa ma-nera constantemente, la imaginación es otra forma de realidad; lo que tú eliges pensar, comienza a cobrar vida, constituyendo otra realidad, de otra manera. Esclarece tus objetivos, adecúa-los al momento que estás viviendo y a lo que realmente necesi-tas ahora, no debes olvidar que tú también estás en un proceso de cambio permanente y que resulta imprescindible identificar la coyuntura existencial en que te encuentras ahora. Acepta que todo es un proceso, que puedes simplificarlo o complicarlo se-gún las metodologías elegidas, empero reconocer que de todas maneras, todo es gradual y tiene su ritmo, que la paciencia es una virtud cuidando de evitar la pasividad que es su opuesto. Paciencia activa y placer, disfrutar constante. ¡Recuérdalo! Es bueno también saber que, si bien todo crecimiento in-terior es absolutamente individual e intransferible, nuestro

accionar en el mundo supone interrelación constante e inter-dependencia, ello nos obliga a capacitarnos para saber, para dominar el arte de tratar a los demás sin avasallarlos ni dejar que nos aplasten. Es bueno confiar en nosotras, pero que esa confianza no se base sólo en optimismos y visualizacio-nes creativas, sino en conocimiento y capacitación real. Es fundamental saber tratar a la gente, encontrar lo bueno que cada uno posee, saber motivarles y poder trabajar en equi-po con eficiencia y alegría. Es muy bueno saber reconocer cuando nos equivocamos y no depender de los resultados, no todo saldrá como soñamos, a pesar del amor, la alegría y la voluntad, los procesos algunas veces arriban a resultados distintos, mas ello está lejos de constituir un fracaso. Para lograr ello habrá que estar en permanente autoobse-vación. Conocernos en la dinámica de la vida es muy impor-tante, de esta manera podrás manejar errores y fracasos oficiales con la misma actitud festiva reservada al éxito ¿por qué no?. Cuida de culpar a los demás cuando las cosas no salen bien, tampoco es necesario culpabilizarse y terminar arrastrando remordimientos. Cuando los resultados difieren de lo esperado, será bueno revisar si realmente estamos usando la manera adecuada, incluso es bueno ver si los ob-jetivos son adecuados, al aclararnos ello, decidiremos insistir o modificar, preservando al ambiente festivo, seguras de que cada día inventamos nuestro futuro.

Acepta el desafío de vivir este tiempo, asume el supremo de-safío de conocerte y ser tú misma, lo mejor de ti; ello significa crear en vez de quejarse, organizarse en vez de lamentarse, ha-cerse responsable de lo que te pasa en vez de culpar a otros, evaluarte en vez de juzgar, transformarte en vez de esperar que el mundo cambie, descubrir tu potencial y comenzar a liberarlo, haciendo de tu vida, la mejor obra de arte que puedas realizar. Ello significa también atreverte a seguir soñando, a encar-nar algunos sueños, a participar de la maravillosa aventu-ra de conocerte, celebrando tus virtudes, identificando tus

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puntos débiles y comprometiéndote a trabajarlos hasta que también ellos sean aspectos destacables, incrementando el inventario de las cosas lindas que te posibilitarán tener la belleza que no caduca: la belleza interior, joyas en forma de actitudes poblando de luz tu camino. Vale la pena correr riesgo cuando esa actitud es parte de un camino de crecimiento interior, vale la pena eventuales y efímeros dolores cuando somos capaces de elevarlos a nivel de ofrenda al Universo; no tiene sentido postergar, el tiempo de vivir a llegado, el futuro está presente, reaprópia-te de tu vida y comienza a convertir en realidad tus mejores sueños, establece de nuevo tus prioridades y organiza tu tiempo para disfrutar de tu vida creciendo, tu puedes llegar a ser lo que quieres, sólo es cuestión de quererlo con la su-ficiente intensidad, comenzar a organizarse en ese sentido y aprovechar tus capacidades al tiempo de identificar las oportunidades que te da la vida. Todas precisamos estar dotadas de un inteligente plan de vida que nos permita alcanzar nuestra realización en todo sentido, no hace falta renunciar a la maternidad, tampoco es preciso elegir la soledad, todo puede ayudar tu creci-miento y realización, si es parte de una estrategia de auto-realización, desde ahí se decide lo más conveniente, desde ese plan tu podrás tomar las decisiones más inteligentes y de la manera más adecuada, evitando caer en las típicas trampas que la sociedad tiene reservadas para quienes quieren aprender a volar alto. Ten cuidado, en especial de la trampa del éxito, que a tantas mujeres lúcidas ha termi-nado por sepultarlas y devolverlas al mundo.

Vale la pena jugarse la vida por la vida, más aún ahora, que sabemos que nada tenemos por perder y una vida plena por ganar. Buen viaje interior.

CAPÍTULO DECIMOQUINTO

Y se llegaste hasta esta circunstancia convertida en pá-gina, debo decirte ¡Bienvenida!, no todas llegan hasta

aquí, es decir, hace falta mucho valor para seguir adelante, dándose por aludida, ésto es, implementando sobre la mar-cha, los cambios necesarios, porque en verdad todo ésto, es un pretexto para cambiar. A continuación vamos a referirnos a la Luna personal de la mu-jer, distinto del ciclo Lunar de MAMAKILLA, la cual ejerce una influencia distinta en la mujer según el grado de sensibilidad que ella tenga. Hay mujeres extremadamente sensibles a este tipo de influencias, hay otras sobre las que esta energía ejerce un suave, casi imperceptible influjo y otras a las que realmente no afecta por lo menos de manera visible. Cada una debe-rá establecer a cuál de las categorías corresponde, para de acuerdo a ello, tomar las precauciones que corresponda. Cuando hablamos de la luna personal, nos referimos a ese proceso de energía ovárica que cumple un itinerario similar al de la Luna, mas no necesariamente coincidente con ella, lo cual no tiene por qué ser un problema, simplemente que en estos casos estaremos sujetas a una doble influencia, situación que adecuadamente maneja puede convertirse incluso en una ventaja.

El ciclo lunar y su habitual itinerario será un buen modelo para comprender el movimiento de la energía ovárica, para ello vamos a tener como puntos de referencia la luna nue-va, que en el caso de la luna personal será equivalente a la menstruación, llamada también por ello luna negra o luna roja, principio y fin del ciclo; Mamakilla en esta fase no es visible, acaba de morir y simultáneamente está a punto de nacer. El momento de la ovulación será el otro punto de referencia que en el ciclo de Mamakilla corresponde a la luna llena. Lo que queda fuera de estos dos grandes vér-

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tices energéticos, son las fases creciente y menguante, es decir que en la mujer la energía siempre está subiendo o bajando, en ascenso o descenso, generando en cada caso, situaciones anímicas diferentes, según el grado de sensibi-lidad que tenga la mujer a estas energías. La situación antes mencionada es muy importante conside-rarla; es primero, antes que el hombre, la mujer quien tiene que comprender los procesos energéticos que atravesamos, los laberintos, a menudo interminables y que nos han, históri-camente, generado la fama de inestables o poco confiables, cuando en verdad es totalmente natural que atravesemos di-ferentes momentos a lo largo de nuestro ciclo lunar personal. Es normal y comprensible que no seamos las mismas, cuando la energía está en ascenso, momento en el cual tenemos más tendencia social y extrovertida, estamos más para los demás, para ayudar y crear; su opuesto complementario es el equiva-lente a la fase menguante, cuando la energía está disminu-yendo, en preparación para nuestra muerte ritual que ocurre cuando llega la menstruación. En la fase menguante seremos más introvertidas, soportaremos menos a los demás, porque nuestra energía está preparándose para un proceso interior, una auténtica muerte, no es casual que en algunos casos (mu-jeres sensibles) la energía va pidiendo a gritos un tiempo para la interiorización, que al no efectuarse, comienza a traducirse en irritabilidad y mal humor. La mujer debe organizar su propio calendario -paralelo al mensual-solar, más adecuado para el hombre-, sincronizar-se con la luna y fundamentalmente con su itinerario lunar personal, aunque éste marche paralelo a Mamakilla, saber en qué momento energético se encuentra, conocer el grado de sensibilidad que posees y poder canalizarlo inteligente-mente, de acuerdo con las circunstancias que toca vivir.Toda la fase creciente de tu luna personal, vuélcate hacia los demás, pues en esta etapa, tu energía reclama actos solida-rios y abundante actividad. En la fase menguante, reserva más tiempo para ti, comienza tu energía a prepararse para un

recambio que se constituye en una auténtica muerte ritual, de manera que puedas abordarlo y transitarlo ceremonialmente, de lo contrario, el momento menstrual puede constituirse en una fase de gran pérdida energética, que interferirá en los pro-cesos de crecimiento y expansión consciencial. En el próximo capítulo abordaremos el manejo ceremonial de este momento, evitando la mencionada hemorragia energética, comenzando a disfrutar más de cada uno de tus procesos, transitando con creatividad y consciencia, cada una de las curvas de la vida.

CAPÍTULO DECIMOSEXTO

Manejar la energía femenina, es el amanecer de una nueva etapa para la mujer, es permitir que florezca

la libertad y germine la esperanza de un mundo nuevo, es penetrar en un nuevo horizonte e incinerando todos los te-mores, volver a besar a la vida en la boca, como debe ser; ya basta de continuar conjugando el verbo esperar, de tan-to masticar esta palabra, comienza a ser una obscenidad. Antiguamente, cuando la mujer tenía su luna (menstruación) era apartada de sus actividades habituales a un espacio o casa especial donde se encontraba con otras mujeres en simi-lar situación. No podía participar de ceremonias, estaba prohi-bida de cocinar, incluso era desaconsejable que estuviera con otra gente, pues su energía estaba muriendo y ella tenía que vivir conscientemente ese momento tan significativo.

La sociedad moderna no contempla un tiempo para la mu-jer cuando ella se encuentra en recambio energético, no le interesa, no es rentable, la vida está subordina a la pro-ducción, la materia prima humana es descartable y encima biodegradable; empero la mujer de este tiempo, no puede continuar haciéndole juego al sinsentido existencial, más

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aún ahora que tiene todo a su favor; no debemos olvidar que la mujer de este tiempo está jugando de local, quizá tu despertar, sea inevitable, sólo falta ponerle fecha. A continuación vamos a concentrarnos en el momento de la menstruación, desenlace culminante de la fase menguante. En la cultura Incaica (el nombre original del Incario, mal lla-mado Imperio, era TAWANTINSUYU, que en idioma Quechua significa el pueblo de las cuatro direcciones), el cuatro es el número sagrado. Trabajaremos con él, independientemente de cuántos días dure el periodo menstrual. El primer día del trabajo ceremonial de la menstruación es cuando comienza el flujo sanguíneo, aunque sea por la noche; inicia un mo-mento meditativo de introspección y autocrítica. Observa cómo manejaste tu energía en todo tu último ciclo lunar, evalúate rigurosamente, no se trata de buscar culpables, tampoco es necesario justificarse, evalúate, con la hones-tidad que debe caracterizar a toda mujer liberada; conocer cómo se manejó la energía, sirve para revisar nuestras prio-ridades y estar atentas a las maneras y metodologías, las cuales deben ser susceptibles de cambiarse cuantas veces sea necesario. No hace falta decir que resulta imprescindible darse tiem-po. Estos días son especiales, tienen que volver a ser es-peciales, no necesitas dejar el trabajo, empero marca en tu agenda para esos días, una cita contigo misma. Recuérda-lo, tu alma estará esperándote. El segundo día es el momento adecuado para preparar una ofrenda con todo aquello que para ti tenga algún significado especial, pueden ser incluso sólo símbolos, también semillas y todo lo que tu quieras, empero algo debe estar presente permanentemente y es tu sangre menstrual. La ofrenda toda deberá ser entregada a la Madretierra y si es posible enterra-da en su seno; es la reconciliación con la muerte, es tu pro-pia muerte ritual, está concluyendo una encarnación y a pun-

to de empezar otra, es muy importante que este acto, tenga la trascendencia que requiere tan significativa circunstancia. El tercer día es muy importante porque está naciendo el nuevo ciclo; desde la noche anterior prepara un baño ritual, deja flores purificadoras en remojo, expuestas si es posible a la luz de las estrellas. Al comenzar el tercer día regálate un baño purificador con el agua que preparaste; recuerda que estás trabajando no sólo en este plano, por tanto estas purificando tu cuerpo físico y los cuerpos sutiles, trabajan-do no sólo con agua sino con lo que vive en el agua. El cuarto día comenzó tu nuevo ciclo, una auténtica nueva etapa en tu vida, dedícalo a la celebración, es un día dedi-cado a la festividad, canta y danza, elige las características energéticas que anhelas predominen en esta fase. Está co-menzando la fiesta de tu vida, por favor no dejes de disfru-tarla, desde este día, subiendo a la azotea de tu existencia, dile al cielo, al Universo entero: “Disfruto luego existo”.

En verdad lo que importa es volver a vivir de manera cons-ciente este momento de cambio energético, para enfocarla adecuadamente a lo que tú elegiste, entonces tu vida ad-quirirá nueva fuerza. ¿Sabes? La plenitud no tolera la in-felicidad; cuando estamos bien, la eternidad está incluida en cada instante y el verbo fundamental es el silencio, sólo delatado por la mirada luminosa de la mujer que alcanzó la esencia y cruzó la esquina de la otra realidad y comenzó a cultivar primaveras en su alma…. es que la vida no tiene sentido si no usamos collares de sueños o si no alcanza-mos a comprender que la ternura es, nuestro destino.

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SEGUNDA PARTE

A tiempo de iniciar esta segunda parte, debemos manifestar que estos conocimientos directa o indirectamente proce-

den del conocimiento chamánico, entendido a éste, como la primera filosofía que se plantea el ser humano, a su paso por la tierra. El chamanismo Surge desde el primer momento en que alguien, hombre o mujer, se plantea: ¿Y quién soy yo? ¿Qué hago aquí? ¿Por qué otros se mueren y ello también un día me tocará a mí? ¿Qué sentido tiene la vida? Éstas y otras interro-gantes acompañan al humano desde el principio, es decir, el chamanismo es tan antiguo como la humanidad, es el precur-sor de la filosofía y la religión, en momentos en que estos aún no estaban institucionalizados ni eran por carecer de dogmas formulados oficialmente, susceptibles de fanatización. Enten-demos por tanto como chamanismo, aquella primera forma de conocimiento emanado de una sincronización interhemis-férica, pues la razón y la intuición en esos tiempos, resultaban imprescindibles para vivir, en un medio donde básicamente todo era factor de sorpresa, todo constituía una novedad, por ello, todo era una invitación a la exploración y reflexión. Cuando el ser humano pierde la capacidad de sorprenderse, la magia de la vida desaparece, todo deviene en obvio, la razón y el intelecto comienzan a monopolizar las vías de co-nocimiento, la intuición se repliega o se reduce en una capa-cidad meramente femenina, al mismo tiempo que la mujer, deja de ocupar el lugar que le corresponde.

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Al retomar este conocimiento, nos sumergimos en las fuen-tes ancestrales de sabiduría, bebemos en los manantiales vivientes, en culturas que sobreviven al paso del tiempo y de la civilización devota de lo rápido y sintético; nos pasa-mos el trabajo de aclimatarlo a este tiempo y compartirlo con quienes están en el momento y sensibilidad adecuada como para entender que se trata de algo para adaptarlo a cada una de nuestras vidas, desde el mismo momento en que tenemos acceso al mismo. No es una panacea, sin embargo son poderosas herramientas capaces de producir significativos movimientos energéticos dentro y entorno de una, mas requiere como requisito, un contexto de coheren-cia y pureza, sin ello, el poder no podrá enfocarse adecua-damente ni podremos contar con el apoyo de las energías superiores, tan importantes cuando manejamos energía. El chamán en su momento, era la síntesis del guerrero, el polí-tico, el sacerdote, el psicólogo, el médico y el artista, es decir, un hombre o Mujer de Sabiduría, un auténtico ser humano. Ac-tualmente buscamos encarnar nuevamente la actitud chamá-nica, en la perspectiva de acercarnos a ese excelente punto de referencia. Menos mal que la historia está llena de mujeres y hombres grandes, con inmensa sabiduría y presencia plena, gente capaz de manejar la energía artísticamente y desde una consciencia superior. Quizá ello no está reservado para gente especial, quizá tu y yo podemos acceder a transitar por esos territorios, donde también hay un lugar para nosotras. Uno de los elementos más significativos y es re-creación del contexto ceremonial, el manejo del ritual, como el lenguaje sagrado que comprenden nuestros cuerpos sutiles y anhe-la el espíritu; como una poderosa psicoterapia que alude y directamente al interior profundo de las personas, descar-tando laberínticos e interminables procedimientos conven-cionales, como un reconfortante espacio de exploración energética multidimensional y de autodescubrimiento. Que-remos viajar contigo a ese territorio; es fundamental carecer de miedo, es importante recordar que en última instancia

sólo somos energía, que todo es energía, que navegamos en un océano donde la dialéctica fluye y refluye entre la unicidad y la eternidad, de la que somos parte. En lo concreto: somos energívoros, nuestro combustible es la energía y dependerá de cómo la seleccionamos, de la manera cómo la direcciona-mos y manejamos, para comprender cómo estamos en esta vida y qué pasará con nosotros en las próximas.

Reconstruiremos el contexto mágico, la caverna sagrada, la montaña viva, el fuego transmutador y caminaremos hasta convertir a nuestra vida en supremo ritual y daremos otra forma al tiempo y redescubriremos el círculo de la vida. És-tas son viejas novedades, la destrucción ya está ocurrien-do, precisamos comenzar la construcción de lo nuevo, en esa transformación nos crearemos, en esa unión con lo sa-grado nos equilibraremos, utilizando el contexto del cambio de milenio, del magnetismo de los Andes y de la dinamiza-ción de los procesos planetarios y de esa ayuda adicional que estamos recibiendo. ¡Bienvenida al punto de equilibrio! No.-1 Desde que abres los ojos, ha comenzado la ceremo-nia de tu vida. Toma consciencia del hecho de estar viva, agradece la oportunidad, acércate a la ventana, contem-pla el cielo, enciende un sahumerio (antes de prender el incienso, prepáralo usando tu mano más fuerte, frotándo-lo con los dedos índice y pulgar en un solo sentido, mejor, de la base a la punta, al encender el fuego, convoca a los abuelos invisibles, para que puedan respaldar tu petición), consagra tu día a lo superior. No.-2 Al ingresar a la ducha, despójate de la ropa como quién renuncia a lo que ya no sirve, lo innecesario e inferior, para permanecer un instante desnuda, tal como viniste al mundo, disponiéndote a ser purificada por los guardianes que viven en el agua. Pide permiso para ello. Al ingresar, moja primero los pies, luego los brazos, a continuación el tronco y finalmente la cabeza. Cuando estés totalmente dentro el agua, visualiza una cascada de luz que te lava y purifica totalmente. La efica-

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cia de esta práctica no está en relación con la duración sino con la intensidad y el enfoque energético de la misma. No.-3 Cada práctica ceremonial aquí recomendada, no de-manda tiempo adicional sino y fundamentalmente otra ac-titud frente a la vida. Se trata de verla como algo sagrado y por tanto, iniciar una relación de reverencia festiva; tam-poco hace falta realizarlo todas las veces hasta terminar obsesionadas por ello o degenerar en actitudes supersti-ciosas, pensando que cuando no lo hacemos por falta de tiempo u olvido, nos irá mal. Nada de ello tiene que ocurrir, estas practicas ceremoniales son un recurso liberador sin excepción. Cuando vas a vestirte, pasa sobre tu ropa la energía de tus manos, otorgado el significado que precisas en función de las características del día; por ejemplo, si tendrás una reunión con gente muy difícil, puedes colocar en la ropa la energía de protección. Visualiza que salen de tus manos rayos luminosos, irrádialos con ellos cada una de las ropas que utilizarás hoy y vístete, a continuación, con la misma actitud que quién se prepara para una fiesta. N°.-4 Desayunar es el comienzo de un banquete energético vía digestiva, es muy importante que elijas alimentos que te agraden y simultáneamente alimenten. El placer al alimen-tarse es fundamental, la procedencia es importante, mejor si son orgánicos, recomendable si son naturales, creativa-mente combinados por colores y procedencia variada, vale decir raíces, tallos, hojas frutos, semillas, flores, etc.

Energiza los alimentos antes de consumirlos, para ello sólo tienes que pasar tus manos sobre los mismo de manera casi desapercibida, irradiándolo con tu luz. Abstente de realizar esta práctica cuando no estás bien. Recuerda que al alimentarte, estás conectando con lo que vive en cada uno de los alimentos y colores. Es muy im-

portante que toda la relación con ellos esté planteada en términos de armonía y respeto. N°.-5 El salir de casa, el atravesar la puerta adquiere un significado especial, porque ella separa tu hogar del mun-do exterior, es una especie de piel adicional, dentro de ella es tu reino, tu caverna mágica, esa zona liberada donde la energía predominante depende de ti. Antes de abrir la puerta de salida a la calle, será bueno preguntarte si estás preparada para bajar al mundo exterior, no debes olvidar que el mundo, afuera, está como está, no hace falta juzgar-lo, tampoco es una circunstancia para quejarse o transpor-tar lamentos, más sí debemos estar atentas, preparadas, conscientes que ese no es nuestro mundo y sin embargo, tenemos que saber transitar en él, con la impecabilidad de la guerrera y la paz de la ceremoniante. Antes de abrir la puerta de calle y salir, detente un instante, respira profundamente, envuélvete en luz, como si un útero luminoso comenzara a cubrirte protectoramente y cuando esté totalmente cerrada tu esfera protectora y tú sientas la fuerza de la invulnerabilidad en ti, entonces abre la puerta con resolución. El mundo es tuyo cuando estás en tu cen-tro, porque estarás sintonizada con todo el Universo. N°.-6 Cuando te sientas atacada o agredida verbalmente, retoma tu respiración consciente y diafragmática, visualiza nuevamente la envoltura luminosa que usaste para salir de casa y si es inevitable, continúa escuchando tranquilamen-te las acusaciones, lo importante es que tu estés en tu cen-tro, que tengas paz interior y que no olvides que el bienestar fluye desde dentro, que lo que ocurra alrededor es apenas circunstancial y pasajero, que la energía que poblará tu día la elegiste en la mañana y serás coherente con ella. N°.-7 Tus manos son poderosas herramientas multidimen-sionales, con ellas puedes tomar o dar energía, de acuer-do con la intencionalidad de cada momento. Para quienes

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vivimos en una ciudad, de alguna manera es inevitable la adherencia de infinidad de otras energías, las cuales van formando una especie de abrigo invisible, ello te lo puedes quitar trabajando con el agua de la ducha, tal como expli-camos antes, mas si te encuentras en la calle, puedes usar tus manos para extraer esa energía añadida y tirarla a la tierra, como quien se quita insectos de la ropa y los tira al suelo, el único requisito para realizar esta práctica consiste en estar concentrados en lo que estamos haciendo. N°.-8 Al acostarte, antes de dormir, enciende una vela previamente purificada por un incienso que a su vez fue preparado para actuar de manera purificadora. El fuego que necesitamos en esta oportunidad es el transmutador, precisamos incinerar todos los residuos del día, reclinar las energías inferiores y transmutar todo aquello que no fue cerrado o que estuvo mal manejado. Identifica todas las energías que quieres transformar y entrégalas al Abuelo Fuego, entonces podrás disfrutar de un descanso profundo y reparador, porque no habrá quedado nada pendiente. N°.-9 En verdad lo que precisamos es la actitud ceremonial en toda circunstancia, veamos algunos ejemplos:

a) Situación: INCOMPRENSIÓN. Toda persona que in-tenta salir adelante, separarse del rebaño o plantearse su autorealización, corre el riesgo de ser incomprendida, po-dríamos afirmar incluso que lo más probable es que no la entiendan, de manera que ésto debe contemplarse dentro nuestro plan personal de vida. Cuando se dé esta circuns-tancia, visualiza un día primaveral, un lago transparente y un cisne nadando plácidamente, identifícate con él, co-néctate con esa energía de serenidad, respira consciente-mente y en cada aspiración absorbe paz, visualiza como tus órganos, tus tejidos y células se van llenando con el color de la paz, inúndate de paz, que de tu mirada rebalse paz, te encuentras disfrutando de la primavera de tu vida, de ella emana la fuerza y la tranquilidad, entonces ningu-

na situación externa podrá contigo; el agua cristalina es tu consciencia y está conectada a través de la luz del amor, la situación de incomprensión es una buena oportunidad para ejercer el amor. Ama ese momento, ama las palabras de incomprensión, ama a quienes los emiten y comenzarás a actuar con energía transmutadora. b) Situación: CELOS. Esta situación energética es bas-tante delicada ya que revela tras de sí miedos y ellos son terrenos fértiles para que germine la agresividad. Es fun-damental en esta circunstancia estudiar bien la situación, identificar las causas profundas (a veces hace falta solicitar ayuda de personas con sabiduría o profesionales), conocer bien el escenario en que aparece en el cónyuge esta reac-ción, establecer en momentos de serenidad una especie de reglamento que nos oriente y dé pautas, de manera que se-pamos a qué atenernos en situaciones críticas; este regla-mento escrito y firmado voluntariamente por ambos, estará expuesto en lugar visible y en algunos casos incluso será de conocimiento de un tercero de mutua confianza, quién podrá intervenir a solicitud vuestra, cuando sea necesario. Cuando observes que Surja en tu compañero esta ener-gía tan desagradable, comienza a respirar conscientemen-te, instálate en el centro energético del corazón y desde allá responde con gran ternura e imperturbabilidad. Desde tu mirada envía ternura, emite señales de confianza, cuida para no bajar tu nivel vibratorio, desde él podrás reciclar la energía que te envían y convertirla en algo superior. Si a pesar de trabajar por un tiempo con todo esto, no ves seña-les de cambio en la otra persona y siendo injustificada esa reacción, tendrás que iniciar un espacio de reflexión para replantear la conveniencia de continuar con esa relación y si ello contribuye a tu crecimiento. c) Situación: ENVIDIA, RIVALIDAD: Esta energía también abriga en su seno gérmenes de violencia; puede ser de lar-ga duración, si no sabemos manejarla adecuadamente. Es-

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tamos hablando de esa energía densa que nos envían en muchas circunstancias, en especial cuando estamos bien. De alguna manera esta vibración nos irá llegando con ma-yor o menor intensidad. Sólo la gente que está muy mal, está libre de la envidia, por tanto debes estar preparada para responder con actitud ceremonial; ello supone, no es-tar dispuesta a ingresar en conflicto, situación que requiere inevitablemente dos partes opuestas, dispuestas a, recí-procamente, agredirse. La inexistencia de predisposición al conflicto, supone una vibración cualitativamente superior, capaz de reciclar a la otra energía, desde la fuerza arrolla-dora del amor incondicional. Al percibir la inferior energía de la envidia, viniendo des-de cualquier procedencia, envuélvete en una esfera de paz blanca-luminosa, de manera que dentro de ella sólo perma-nezca la luz de la energía elegida por ti, para ese día. Visua-liza pensamientos y sentimientos ajenos, como moscas re-voloteando a tu alrededor, mas sin poder acercarse hasta ti y menos influirte, observa como se van debilitando progre-sivamente hasta caer desintegradas por la debilidad de no haber podido alimentarse con tu energía, que ocurre sólo en situaciones en las cuales tú te des por aludida y reacciones bajando tu nivel y generando conflicto, ira o resentimiento, vibraciones que perforan tu propia envoltura defensiva, tor-nándote vulnerable a todo el mundo. Aprender a coexistir con todo tipo de energías en un mun-do convulsionado como el presente, es deber de toda mujer dispuesta a ser libre; en vez de pedir que nos alfombren todo el mundo, es más práctico fortalecer nuestros pies, hacer-nos tan fuertes que cada ataque externo seamos capaces de convertirlo en factor de fortalecimiento y dinamizador de nuestro crecimiento. Habitar este tiempo supone tener la capacidad de estar en todas partes, siendo nosotras mismas, teniendo las co-sas tan nítidamente claras, que toda decisión emane de

una consciencia clara y una mente lúcida, que si aparece algún temor sobre la marcha, no nos incomode, que po-damos seguir siempre siendo nosotras mismas, dentro de una dinámica transformacional permanente. Tú en esencia, no tienes por qué cambiar, más tú en formas y maneras y planes y prioridades puedes y debes cambiar permanente-mente, acorde a las circunstancias externas e internas que estás viviendo, es más, tienes que sorprender a los que te rodean, sorprenderles permanentemente con tus nuevos y maravillosos cambios, porque la VIDA ES MOVIMIENTO. Por su puesto, no dejes de disfrutar de cada una de tus transformaciones y estar atenta para no dejar pasar opor-tunidades de aprendizaje. Un día, más temprano que tarde, descubrirás que valió la pena el esfuerzo, pues descubriste que vivir es otra cosa y que la vida, aunque sea para tener un día de plenitud, valióla pena vivirse.

LA ACTITUD CEREMONIAL EN LA VIDA DIARIA

Probablemente resulte todavía novedoso el tener una actitud ceremonial en la vida diaria; ocurre con todo lo

nuevo, incluso en algunos casos se manifiestan auténti-cas resistencias. En verdad, se trata de viejas novedades; si recordamos que el chamanismo es la primera forma en que se manifiesta el intento de comprender el sentido de la vida, llegaremos a la conclusión, que el ser humano, en al-gún momento de la historia, se desvío del curso natural de la evolución, distorsionando su energía por senderos que a la larga, sólo significaron pérdida de tiempo y energía. Quizá no fue necesario verificar los horrores y la inhumanidad, quizá no era necesario deshumanizarse hasta niveles increíbles como los actuales, para darse cuenta hasta dónde puede degradarse el ser humano; probablemente aún estemos a tiempo de reformular el itinerario degradado y reescribir la historia con otras características, entonces, el acercarse a lo

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chamánico, puede ser una verdadera transfusión energética, doblemente importante en tiempos como éstos. Entendemos por actitud ceremonial un nivel de conciencia que posibilita el darnos cuenta, en un primer momento, de estar vivas, es decir queda abolido ese funcionamiento ru-tinario, autómata y automático, queda suprimido ese acto mecánico de seguir un libreto, incluso de tener en base a él, buena imagen, cuando todo ello no hace mas que su-bordinarnos a esquemas de vida que en el fondo atentan contra la calidad de nuestra vida. Cuando hablamos de actitud ceremonial, nos referimos a esos seres capaces de comprender que la vida es algo más que trabajar para comer, descansar sobre la marcha y continuar trabajando, darse cuenta que la vida no puede, no debe reducirse a lo que hace la gente cada día, por que ese camino no con-duce a ninguna parte, salvo a nuestra propia destrucción como seres potencialmente luminosos y con capacidad de realización. La actitud ceremonial supone vivir en todo mo-mento desde un nivel de consciencia, de manera que la lu-cidez nos permita sentir lo que tenemos que hacer en cada momento, la manera precisa de hacerlo e incluso, preveer situaciones que aún no se han manifestado, empero que son identificables en su forma embrionaria por las mentes lúcidas y sensibles de quienes optaron por vivir despiertos.

No es fácil conseguirlo, tampoco es difícil, simplemente hay que hacerlo. Tampoco importa saber cuánto tiempo demora-remos en el intento, tenemos que hacerlo; cuando nuestra vida está en juego, nada es demasiado caro o difícil, porque la vida es lo único que tenemos y ésta es una oportunidad irrepetible. Quiero reiterar que estos conocimientos están al alcance de todos, no hace falta tener condiciones especiales o disponer de abundante formación, empero resulta impres-cindible la reverencia que nos permite acceder a lo sagrado, reconstruirlo y prepararnos para mover energía con caracte-rísticas multidimensionales, como debe ser.

La actitud ceremonial que nosotros proponemos es, en lo fundamental, un estilo de vida. Todos nuestros conoci-mientos, al provenir de un origen chamánico o ser fruto de nuestros itinerarios interiores, están respaldados por una prolongada vivencia, tanto nuestra como de los miles de alumnos que a lo largo del mundo, han bebido de estas enseñanzas. La actitud ceremonial requiere, simultáneamente, un consi-derable nivel de atención que posibilita que tú estés en cada momento presente en el presente, ahí donde los detalles ad-quieren gran importancia porque todo es la suma de ellos, estar atentas con nuestra energía adecuadamente enfocada a lo que estemos haciendo, al punto de convertirnos en lo que hacemos, anulando la dicotomía sujeto-objeto que co-rresponde a una fase previa, totalmente elemental que tene-mos el deber de trascenderla. La actitud ceremonial supone también la capacidad de per-manecer relajado, para evitar alterar el flujo energético, pues todo fluye mejor en un cuerpo relajado. De igual manera hace falta estar en paz, conservar rigurosa serenidad, situación que proviene de la abolición de los miedos. Estar en paz alude también a una rigurosa purificación que incluye pensamien-tos, emociones y actitudes, de manera que nuestra vibración, en especial en momentos en que precisamos estar con toda la energía enfocada en lo que hacemos, tenga el nivel adecua-do, la calidad que garantice la presencia de nuestros guardia-nes, presencia protectora que abunda cuando estamos con la energía adecuada, es decir, de pureza y ternura.

Tú puedes ser una mujer grande y luminosa o un objeto vacío y dependiente, todo depende de la energía que manejas, es tu vibración la que te da la estatura real que posees y en cada circunstancia ella va cambiando según cómo vas admi-nistrándola, es decir que la grandeza es opcional; quizá por ello tantas mujeres reptan miserablemente por el mundo, ig-norando que abrigan un potencial interior tan grande.

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Además de lo antes mencionado, resulta altamente útil, a manera de preparación, el contacto con la Naturaleza en todos sus elementos, en especial con los cuatro arquetipos a que nos referimos en la primera parte (Mamapacha, Ma-makilla, Mamakhocha, Mamaocllo), ya que ello comenzará a fluidificar nuestras energías, limpiando nuestros canales y contribuyendo a nuestro propio equilibrio. Resulta muy im-portante también comprender que en el mundo chamánico, la imaginación es una realidad diferente, empero con cate-goría de realidad, ésto significa que cuando estamos traba-jando con la energía enfocada, también cuenta lo que antes, durante y después del momento ceremonial hemos imagina-do, ya que ello va moviendo la energía a favor o en contra de lo que estamos realizando. En la preparación energética, en especial aquella que supo-ne un reencuentro con la Naturaleza, hace falta ir rescatando nuestros sentidos, que por efecto de estar viviendo en condicio-nes fundamentalmente urbanas, han ido quedando atrofiados. Mencionamos cada uno de ellos: LA VISTA. a) Al caminar por un bosque, playa o montaña, hágalo con la actitud de quién se encuentra en ese sitio por primera vez, incorpore el asombro y no se prive del placer de des-cubrir cosas nuevas en sus más variadas características y detalles más pequeños, descubra el mundo, como si fuera su primer día de vida; con el tiempo podrá ir aplicando este ejercicio a las calles que frecuenta, al trabajo y lugares en que se encuentra; descubrirá la alegría de habitar un mun-do completamente nuevo, permanentemente renovado y en transformación, actitud que le devolverá la belleza a su vida y los colores a su existencia. b) Otra práctica muy interesante, diferente a la anterior, consiste en vendarse los ojos y comenzar a caminar pres-cindiendo de la vista. Al principio notarás mucha inseguri-dad ocasionada por la novedad de no tener el apoyo visual,

gradualmente si persistes en la práctica, descubrirás que te vas adaptando, en chamanismo llamamos, ir llenando el cuerpo de ojos, las manos de ojos, al punto de poder ver extraocularmente con el tiempo, mas el objetivo no es ese, sino en principio, activar los otros sentidos y facilitar momentos de interiorización, imprescindibles en la prepa-ración de la actitud ceremonial. Más adelante podrás reali-zar pequeñas prácticas en casa, por ejemplo cenar con los ojos vendados. Toma todas las precauciones, por ejemplo para realizar este ejercicio, aleja de tu entorno inmediato todo objeto cortante o peligroso, de manera que puedas manejarte con comodidad. El alimentarse prescindiendo de la vista, activa significativamente el sentido del olfato, uno de los más atrofiados en el hombre moderno, activando también el sentido del gusto, permitiéndonos identificar los sabores de todos y cada uno de los alimentos que estamos consumiendo.

OÍDO a) En la naturaleza o en casa, permanece unos minutos sentado, con los ojos cerrados, escuchando todo sonido que pueda captar tu oído. Concéntrate de manera especial en los sonidos más lejanos.

b) En la misma postura y circunstancia, siempre con los ojos cerrados, limítate a escuchar los silencios, exclusiva-mente los fragmentos de silencio que puedas captar.

c) Escucha tu respiración y todo sonido que se origine en tu cuerpo.

De manera similar puedes ir trabajando con los otros sen-tidos, identificando aromas con los ojos cerrados, usando el tacto de manera consciente, prescindiendo de la vista, paseándote con las manos por las más diversas texturas de manera que puedas ir sensibilizando nuevamente tus manos, que en el futuro serán poderosas herramientas de manejo energético, aplicado en aquello que tú decidas.

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La actitud ceremonial , a diferencia del trabajo ritual, no requie-re ninguna preparación especial, aparte de la mencionada, es más, esta preparación y otras que añadiremos posteriormen-te, abren el camino al trabajo ritual. Volvamos por un momento a la actitud ceremonial. Existen numerosos procedimientos de preparación y purificación, siendo el fundamental la medita-ción sobre la tierra, mirando al naciente, usando ropa de fibra natural, en un primer momento colocando las palmas de las manos sobre la tierra, de manera que nos purifiquemos en primera instancia, para luego de unos minutos, entrelazar las manos, dejándolas reposar cómodamente delante del bajo vientre, cuidando que la columna vertebral permanezca dere-cha y los hombros relajados. La actitud ceremonial es una manera de ir por la vida, con las riendas de nuestra vida en las manos, es vivir el presente intensa y conscientemente, es enfocar nuestra energía a lo que es necesario en cada circunstancia, es limitarnos a vivir el momento, haciendo lo que sea preciso, con la misma en-trega y plenitud del ceremoniante en acción. La actitud cere-monial no debe degenerar en superstición que alimente cual-quier forma de dependencia a la práctica recomendada, ya que se tratan de recursos para liberarnos y de ninguna ma-nera para hacer de ellos, nuevas modalidades de opresión o dependencia, por ello esta propuesta no tiene nada que ver con comportamientos obsesivos de ninguna naturaleza. A medida que la mujer va tomando consciencia de lo que su-pone habitar este tiempo en un cuerpo femenino, su actitud frente a los diversos desafíos del mundo, tendrá que ir cam-biando, para estar a la altura de la dignidad, único contexto en el cual la mujer puede actuar de manera no degradada. De esta forma comenzamos a encarnar a la Mujer de Sabiduría, a la bruja en el nuevo sentido del término, a la guerrera impertur-bable, porque si nos vamos a atrever a ser nosotras mismas, más vale estar fuertes y atentas, porque la sociedad siempre se ha defendido quemando brujas o en su versión aséptica, incinerándolas con la crítica despiadada, con la difamación o

la indiferencia premeditada; todo ello, no podrá mellar nuestra consistencia si estamos fuertes, más si la debilidad aún nos hace vulnerables, si todavía somos influenciables y no pode-mos controlar aquello que llega hasta nosotros ni reciclar las energías que recibimos, habrá que redoblar el trabajo interior y ceremonial para convertirnos, a la brevedad posible, en bási-camente imperturbables. Que el fuego pequeño se convierta en una gran hoguera, para que el viento de la tempestad ex-terna, avive nuestro fuego interior. Tu trabajo podrá ser el mismo, mas tú eres otra persona; tu pareja podrá ser la misma persona insoportable de siem-pre, más tu energía es distinta; las adversidades podrán permanecer, incluso incrementarse, empero al disponer de una vibración cualitativamente superior, ellas se convier-ten en factores de dinamización de tu crecimiento, de esta manera, no hay queja posible, ni enfado, tampoco resenti-miento por aquello que nos hacen, por que ya nadie puede hacernos nada, quién actúa mal, se hace daño a si mismo, pues ello equivale a nefasta siembra que inevitablemen-te tendrá que cosechar mañana. Es más, al estar bien tú y fuerte, puedes manejar las cosas de tal manera que la otra persona deje de hacerte daño, pues no sólo que ya no eres débil, sino que tienes la energía suficiente como para reciclar aquello y transformarlo en otra cualidad energética. Por ejemplo, cuando te informan que alguien está hablando mal de ti a tus espaldas, reúnete con esa persona, mas no para llamarle la atención como habrías hecho en otro mo-mento, tampoco para justifícate, pasar de víctima o termi-nar amenazándola, todas esas son herramientas ordinarias que pertenecen a una etapa ya superada, es más, son pro-cedimientos totalmente inservibles, pues conducen a situa-ciones conflictivas a las que una guerrera jamás arriba, su fuerza y su inteligencia le permiten evitar tales situaciones. Encuentra a la persona que está hablando mal de ti, descono-ces las razones que ella tiene para semejante actitud, revisa en tu comportamiento la posible existencia de alguna actitud

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que, directa o indirectamente, esté induciendo al enfado; des-cartado todo motivo o transformándolo, si existiera, reúnete con la persona en cuestión, entabla una relación de amistad, alíate con ella, creando la circunstancia en la cual ésto sea po-sible. El objetivo: buscar que ella te conozca de verdad, porque lo más probable es que su comportamiento agresivo se funda en una imagen distorsionada que tiene de ti y lo que tú tienes que hacer, es modificar esa imagen. Si a pesar de todo ello, aún persiste con actitudes provocativas, sin duda esa persona tiene problemas y los está direccionando hacia ti; permite que ello ocurra, cuidando de evitar daños reales, acepta que en realidad no está actuando en contra tuya sino y simplemente, enviando señales desde el nivel de consciencia en que se encuentra y ello es natural y comprensible. Cuando vivimos en el subsuelo de la consciencia, no podemos emitir otras cosas que no sea negatividades. Cuando ascendemos hasta el primer piso, en el edificio de nuestra consciencia, los miedos nos impiden amar y trascender, entonces somos mediocres en todo, aunque sea-mos buenas personas. Cuando, consecuencia de un trabajo in-terior, ascendemos al piso superior, todo fluye espontáneamen-te, pues cada una de nosotras se convierte en un manantial de amor y sanación; en este punto no hace falta esforzarse, pues el amor no es cuestión de voluntad. Aceptar que el mundo está como está, es deber de toda guerrera. Si puedes cambiar las cosas, no dudes en hacer-lo; si puedes contribuir a que ellas cambien, por favor, haz todo de tu parte; si está fuera de tu alcance, aunque haya una pequeña posibilidad, inténtalo, vale la pena; si es algo que no depende en absoluto de ti, que un tiempo las cosas serán así, con independencia del comportamiento que tú tengas, entonces acéptalo y comienza a disfrutarlo, porque la medida de las cosas está otorgada por la energía que tú pones en ellas y si estás bien y disfrutas del trayecto, la vida, tu vida será una fiesta interminable, crecer y disfrutar serán sinónimos, el trabajo y el hobbie se habrán fusiona-do, la fugacidad de la vida, delatará a la eternidad que nos hablará de la unicidad de la que somos parte.

Se trata de convertir nuestra vida, en ceremonia suprema, de comprender que la ceremonia es una obra artística de carácter multidimensional, es decir, se trata de convertir-nos en artistas en ésta y las otras realidades, para que nuestra misión sea cumplida y todo nuestro potencial libe-rado y podamos decir un día: esta mujer vivió de verdad, es decir plenamente, pues lo demás, es pecado. Hay cosas que no pueden ser enseñadas a una mujer, empero pueden ser comprendidas intuitivamente, por que su cuerpo es un oráculo y un péndulo que se activa cuando se lo purifi-ca y conduce, en silencio meditativo, a los lugares sagrados, donde beben con fervor los cuerpos sutiles y se reencuentra el cuerpo de la tierra con el cuerpo de la mujer, en abrazo ener-gético multidimensional, tanto tiempo postergado.

Celebrado el reencuentro, restablecida la fusión, ambos cuerpos permanecen unidos hasta que la negligencia los separe (ojalá no), posibilitando que el cuerpo de la mujer, vuelva a ser la caverna mágica, donde germina la vida. Resulta imprescindible que la mujer recupere lo que se le quitó, que se alinie energéticamente para volver a oír el lla-mado de la diosa, que ocupe su lugar y desde él, que se atreva a encarnar la nueva libertad femenina y desencade-nar todo su potencial energético y direccionar sus energías, a partir de su centro energético básico; por ello es tan im-portante ser asidua visitante de los centros energéticos de la Madretierra, para alimentar nuestros cuerpos y sueños, entregar a su seno cuando nuestra luna así, lo determine, nuestra energía sanguínea y reivindicar la sabiduría, ances-tralmente tatuada en nuestro cuerpo, pues también somos una biblioteca esperando ser decodificada.

Y poco a poco la mujer va haciéndose cargo de su vida, despertándose, sensibilizándose al punto de ser capaz de escuchar las sensaciones corporales y comprender las en-señanzas de la Pachamama, intuitivamente. Comienza a to-

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mar más tiempo para sí misma, a observar los ciclos de la Naturaleza, donde están abundantes claves para compren-der la vida y sus procesos. Es en este contexto que nosotras tenemos que empezar a estudiar profundamente la manera cómo Mamakilla afecta a cada una de nosotras, en cada una de sus fases y sobre la base de ello organizar un diario lunar, donde, a manera de un diario cualquiera, podamos ir anotan-do cotidianamente lo que nos pasa, empero, descartando frivolidades y situaciones meramente anecdóticas; puedes registrar en él, percepciones y sensaciones, estados de áni-mo y curvas en tu camino, es decir, efectuar un seguimiento minucioso de tu itinerario energético, identificando cómo in-viertes tu energía, como la manejas, qué cosas priorizaste en este ciclo lunar, para establecer si hubo ahorro o despilfarro energético; en caso de detectar ello, habrá que ser muy ri-gurosa e implementar, a la brevedad posible, las medidas correctivas para resolver la situación.

Cuando comiences a comprender cómo se mueve tu ener-gía y seas capaz de direccionarla consciente y voluntaria-mente, empezarás a disfrutar del maravilloso, mágico y po-deroso hecho de ser mujer, más aún en este tiempo en que si te despiertas, puedes apropiarte de todo tu poder, sin más convulsión que la de tu entorno inmediato. No olvides que fuimos preparadas para no sentir y que comenzar a hacerlo, suena a flagrante disidencia. El cuerpo de la mujer está diseñado para atravesar expe-riencias chamánicas con más ventaja que el hombre y ello radica en que el chamanismo, originalmente, era femenino y fue activando en la mujer, capacidades ancestrales, sen-sibilizándola intensamente al punto de hacerle comprender, desde la intuición, la necesidad de dirigirse periódicamente a los centros energéticos de la Madretierra y otorgarse un baño energizante multidimensional, que nos alinee y reco-necte con el Chejpacha, el supremo orden cósmico al cual precisamos retornar.

Reapropiarse del poder interior, supone redefinir muchos conceptos, quebrar tabúes, naturalizar procesos, revalorizar momentos como el de la menstruación, asumiéndolo como un tiempo sagrado y altamente visionario, donde la sangre menstrual, convertida en suprema ofrenda, es la señal pal-pable de que la mujer está preparada para ejercer la energía creadora, donde el parto se vea, no solamente en su conno-tación corporal sino como una auténtica iniciación, a tiempo de rescatar el sentido espiritual del flujo menstrual y su im-portancia energética, para la mujer como campo de energía abierto momentáneamente y para el Universo todo. Quizá sea bueno recordar también, que antiguamente se pedía a las parejas jóvenes y felices, que en momentos de arar la tie-rra, preparándola para la siembra, hicieran el amor en esos campos, como una manera de fertilizar la tierra y energizarla, garantizando de esa forma una buena cosecha. Los lugares sagrados de la Madretierra son nuestros mejo-res aliados invisibles, quizá por ello en algunos regímenes estaba prohibido acudir a ellos; quizá por ello también mu-chas tierras indígenas, valiosas por esa presencia energéti-ca, fueron usurpados e invadidos; desconectado el indíge-na de sus generadores energéticos, vaga confundido por un mundo que no ha previsto ningún sitio para él. Las mujeres en este tiempo, tenemos muchos aspectos a nuestro favor, empero resulta imprescindible despertarse, rescatar el manejo intuitivo de las situaciones, contar con una disciplina interior que nos permita garantizar un creci-miento permanente, donde sea que nos encontremos; or-ganizar de nuevo nuestros calendarios tomando en cuenta nuestra luna personal y los ciclos de la naturaleza, situación posible incluso, a pesar de vivir en grandes ciudades. Pre-cisamos un enfoque femenino, no feminista de la situación, por que no podemos seguir perdiendo tiempo y energía, te-ner la habilidad de rescatar todo lo válido de las propues-tas feministas, empero ir mucho más allá y construir una visión femenina de la vida, a partir de un trabajo interior y

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de una adecuada comprensión de los procesos energéticos que caracterizan el hecho de ser mujer; para ello no hace falta volver a inventar la pólvora, nuestras abuelas ya la descubrieron, sólo precisamos aclimatar a este tiempo, el conocimiento ancestral y chamánico. Los lugares sagrados nos ayudan a volver a nuestro centro, entonces nos sensibilizamos, comenzamos a darnos cuen-ta que necesitamos un tiempo para nosotras, nos reencon-tramos con el silencio, buceamos en nuestro espacio inte-rior; tornándonos asiduas viajeras del mismo, volvemos a tener tiempo para saborear amaneceres y contemplar las estrellas y descubrir que en el Universo, todo es una danza cósmica y que danzar es la mejor manera de conectarse, sincronizarse, fusionarse, disfrutar la unicidad hasta el éx-tasis y estallar en millones de partículas luminosas, dan-zantes y eternamente embriagadas por la luz. El hombre sabio descubre que la vida es un juego sagrado, la mujer despierta comprende que la vida es una danza sagrada, por ello los hombres ignorantes son rígidos y lle-nos de soberbia y las mujeres dormidas acumulan miedos, pero dicen estar bien y tiene especial rechazo por todo lo nuevo. Por ello, desde ahora, te pido que no te asustes, si consecuencia de estas prácticas viene más energía a tu cuerpo; ello puede ocurrir y es totalmente natural. Cuanto más armonizada estés con la Pachamama, mayor energía dispondrás, entonces será fácil comprender y no sólo des-de la razón, que tu cuerpo, es tu mejor arma y herramienta, que por ello debemos ser inmensamente críticas respecto a la cirugía mutiladora de órganos femeninos, reservándola sólo para casos absolutamente necesarios y previa orienta-ción si es posible, de seres con sabiduría y no sólo técnicos que nos ven por partes, desconectadas. Organízate en círculos femeninos, comparte este conoci-miento, difunde entre otras mujeres que cada menstrua-ción es en realidad una renuncia al pasado, una muerte

ritual que te prepara para una nueva vida, que el mal humor que precede a la menstruación, en muchos casos, es la combinación de la sensación de muerte y la sed de vida, es como si tu cuerpo quisiera vivir intensa y plenamente antes de morir y que ello, bien canalizado y manejado ceremonial-mente, puede ser un momento hermoso y de mucho poder, que es posible manejarlo voluntariamente, revalidando téc-nicas como la visualización, que es un sembrar en el cuer-po imágenes-semillas, que luego germinarán y darán sus frutos en un futuro cercano, poblado de flores y arco iris. A esa cita estás convocada y a través tuyo, las mujeres que conozcas, por que éstas son buenas noticias para que lo nuevo no sólo sea el año o el siglo, sino la vida misma y tú como protagonista de ella. ¡BIENVENIDA! ¿Quién eres? En el fondo, este libro sólo intenta responder a esa fundamental interrogante. La respuesta será nece-sario construirla a partir del encuentro con las claves aquí recibidas. Si aún estaba pendiente el asunto, lo que no pue-de ser, es que al concluir este encuentro permanezcas con la misma interrogante flotando por la penumbra de tu alma. En este tiempo no hay lugar para quienes no se atreven a despertar, excepto el cementerio de la intranscendencia de la covencionalidad, que garantiza mayor somnolencia aún. La vida es un viaje desconocido, un camino con curvas y túneles, hace falta estar preparadas para todo, disponer de un elevado sentido de humor, por que si te tomas todo el serio, corres el riesgo de morir indignada o decepcionada. El mundo está como está, no lo juzgues, no intentes arre-glarlo desde modalidades convencionales, atraviésalo, ví-velo, disfrútalo, aprende de él, es tu escuela y el campo de batalla que te tocó en esta encarnación. Hay muchas cosas que no sabemos, lo que ignoramos será siempre mayor que lo conocido, empero eso no tiene porqué ser un problema, por lo menos mientras tengamos la capacidad de sorpren-dernos como niños y descubrir que cada día, todo empieza de nuevo.

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Somos campos de energía elevados a nivel de consciencia, espacios abiertos donde pueden germinar muchas cosas, cada una es responsable del nivel vibratorio que posee, afuera, no están los culpables, somos enteramente res-ponsables de lo que nos pasa. Si la vida es un campo de batalla, hay que abordarlo con la atención y rigurosidad que ello supone, es decir, la mediocridad es declaración de im-potencia y aceptación de la derrota, situación totalmente indigna para toda mujer que se respete a sí misma. Precisamos caminar por nuestra cuenta, para ello necesita-mos adquirir el conocimiento preciso que nos permita identi-ficar nuestros puntos fuertes y apoyadas en ello, atrevernos a encontrar aspectos más débiles y comenzar a transformar-los. Recuerda que la mujer, al igual que el hombre, no nace completa sino como proyecto, ello significa que podemos elevarnos tan alto como decidamos, a condición de saber cómo hacerlo y tener la voluntad práctica necesaria. Nuestro único apoyo, está en nosotras mismas. El poder in-terno que podemos liberar es inmenso, sólo falta comenzar a trabajar en ello, para que seamos lo que podemos ser, sin que importe lo que opinen los demás de nuestro proceso. Es nues-tra vida y no vale la pena hipotecarla ni siquiera en nombre del amor o los hijos, es más, si de verdad ellos nos quieren, cele-brarán con nosotras nuestros logros e intentos de vuelo, para luego volar con sus propias alas a nuestro lado. No hay mayor placer que ese, compartir el vuelo con los seres que amamos. Empero tenemos que estar conectadas con el Universo, alineadas energéticamente al corazón del cielo, instaladas en nuestro centro, en fluida y mágica relación con los ele-mentos de la naturaleza, es decir con lo que vive en ella, guardianes y guías, como parte natural de nuestra cotidia-neidad y como no podía ser de otra manera, en relación y alianza con otras mujeres, no importa cuán distintas sean, hay un pacto implícito de mujer a mujer y ello debe respe-tarse en toda circunstancia.

Cuando estamos adecuadamente alineadas, nuestra per-cepción de la vida se modifica radicalmente y en vez de las víctimas habituales, pasamos a ser las gerentes de nuestra vida, el caballo se convierte en jinete y al mismo tiempo en su propio entrenador, nuestro abordaje de la realidad mejora cualitativamente, ya no es el miedo quién impulsa nuestros actos, tampoco el afán de quedar bien con los demás; aun-que ello entristezca nuestra consciencia, la belleza comien-za a provenir no sólo de esfuerzos cosmetológicos, sino que emana del interior y adquiere otras características; nuestro estilo de vida transita por senderos de transformación, nues-tro comportamiento ya no funciona por cauces rutinarios rígidamente propuestos, sino que fluye libremente, sorpren-diéndose y disfrutando, haciendo las mismas cosas, en la perspectiva elegida, más siempre de manera diferente, por que la vida es movimiento. Comenzamos también a otorgar-nos más tiempo a nosotras mismas; antes siempre la priori-dad eran los otros, los demás y hasta parecía malo dedicar-se tiempo a una, aquello se parecía demasiado al egoísmo y por tanto era repudiable; en esta nueva etapa, constatamos que en verdad somos egoístas, más sabemos también que hay otro nivel de egoísmo positivo, supremo, sagrado, que nos hace recordar que también existimos, que precisamos abrazos y tiempo, que es hermoso saber que existimos y por tanto necesario, porque la vida es bella, regalarnos momen-tos hermosos, tiempos placenteros, oportunidades festivas por que cada día es el último y el más importante. Cuando salgas a la calle, recuerda, si estás en tu centro, eres poderosa, si estás llena de amor, estás protegida, si posees alto sentido de humor, esa flexibilidad te hace im-perturbable. Camina serena, de esa manera tu energía, la totalidad de ella, estará contigo, tus dos zonas energéticas estarán sincronizadas, igual que tus hemisferios, el pasado no te afectará, porque es sólo la despensa donde acudimos excepcionalmente para extraer alguna enseñanza, entonces podrás disfrutar de un presente lleno de oportunidades. Es-tarás consciente de tu cuerpo, le posibilitarás la alimentación

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energética adecuada (alimentos, emociones, pensamientos, amistades, etc.) además de la actividad física imprescindible para anquilosamientos innecesarios; tienes que estar fuerte en todo sentido, tu cuerpo precisarás mantenerlo ágil y salu-dable, nada más hermoso que contemplar a una mujer sana y fuerte, ahí nace su belleza, en especial cuando su corazón rebosa de amor y su mirada así lo delata. Permanece consciente de la vida, por que vivir un sólo día sin consciencia de estar viva, es alta traición a una misma. El sen-tirte vida te permitirá organizar mejor tus prioridades y fusio-narte más intensamente con todo lo que te toca hacer. Toma consciencia también de tu fugacidad, ayuda mucho a valorar el tiempo y las oportunidades, el saber que estamos de paso, que la muerte de alguna manera siempre nos acompaña es-perando el momento menos adecuado para convocarnos, in-crementa la calidad de nuestra vida y nos prepara para poder danzar con la muerte, alejadas de todo temor, reservado para quienes no se atrevieron a vivir la vida plenamente. Fluye por la vida con la plenitud que otorga la impecabilidad que no es la ausencia de error, sino y fundamentalmente, la carencia de temor y la existencia de coherencia y pureza, capaz de reciclando errores, convertirlos en resortes que nos impulsan para avanzar más todavía. Ama las sorpre-sas, hazte amiga de lo desconocido, en la vida y más aún en este tiempo. Lo único seguro es lo incierto, entonces prepara tus estrategias para sobrevivir disfrutando en si-tuaciones de incertidumbre generalizada y sacando prove-cho de las crisis, abundantes en este cambio de milenio.

Recuerda que tu cuerpo, es un campo energético de donde puede emanar cuantioso poder, que bien enfocado, serán las alas que te permitirán sobrevolar cualquier circunstan-cia, empero tienes que ser rigurosa ahorrando tu energía evitando malos hábitos, relaciones conflictivas, pensamien-tos negativos y pérdidas de tiempo en frivolidades, es más, acostúmbrate a tomar energía de la Madretierra, del Sol y de

la naturaleza en su conjunto. Cuanta más energía dispongas, mejor estarás en todo sentido y más libertad tendrás. Finalmente recordarte que la vida es un maravilloso, un en-cantador campo de batalla, un espacio-tiempo donde preci-sas estar atenta interna y externamente, todo lo que pasa dentro tuyo deberá ser observado, todo lo que ocurre en tu entorno también estará bajo tu serena observación, para ir descartando de inmediato lo innecesario, de ti y de lo que llega hasta ti; recuerda que en todo momento te estás ju-gando la vida, que cada instante resume toda la eternidad, que en toda circunstancia igualmente precisas ser tu misma, que ningún rebaño podrá nuevamente seducirte para volver a lo convencional, que tú estás en el mundo, más pertene-ces a una nueva humanidad, por ello debes estar atenta, disponer de una disciplina interior regida por tu consciencia, contar con una voluntad pétrea y la paciencia necesaria para comprender la gradualidad de todo proceso sin que la im-paciencia te rebase, ser amorosa y simultáneamente fuerte, saber reírte, ser buena y fundamentalmente ser inteligente, hábil para manejar situaciones conflictiva, rápida para tomar decisiones cuando las circunstancias lo requieren, lenta y meditativa cuando el tiempo lo permite (porque para gran-des decisiones, no hay mejor consejero que el tiempo), ser atrevida, estar en paz, no huir de la gente insoportable, al contrario agradecer esa presencia y usarla como recurso para fortalecerse; en definitiva vivir dignamente. ¿Quién eres? …… ahora el panorama está claro, sólo hay dos alternativas: la imbécil que recomienda el sistema, o la guerrera de luz que está gestando una nueva humanidad. Nosotras hemos apostado nuestra vida a favor de la último; la primero abunda y simultáneamente apesta.

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TERCERA PARTEIntroducción

A diferencia de la actitud ceremonial diseñada para di-luirse en la vida diaria, entendemos como ritual una

práctica determinada en un lugar y tiempo determinado, realizado por una o más personas de forma consciente y voluntaria, con un propósito definido. Entendemos el ritual como un conjunto de procedimientos externos e interiores, visibles e invisibles, que ocurren en relación a una intencionalidad, produciendo un movimiento energético claramente enfocado, fluyendo por cauces prede-terminados, algunos de los cuales dan margen al libre flu-jo personal, dentro la perspectiva marcada y la coherencia energética requerida. El ritual es un lenguaje tan antiguo como el hombre, diseñado para comunicarse con uno mis-mo y desde nuestra profundidad con las otras realidades, donde otras formas de vida existen; es el idioma que habla el alma y que tiene al silencio como uno de sus componentes fundamentales, por tanto se trata de algo totalmente natural y respetable, al constituir una danza de energías, que bien manejadas puede ser de gran ayuda.

Con fines didácticos dividiremos este trabajo en tres cate-gorías: a) La actitud ceremonial, apta para todas, porque termina

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convirtiéndose en una forma de vida, aclimatable a toda edad y condición de vida. b) El ritual menor: procedimiento energético profundo, apta para toda persona que se encuentra en un camino de autoconocimiento serio y responsable. No existen contrain-dicaciones a condición de realizarse correctamente y con la energía adecuada, el mal uso de la misma, neutraliza en sí misma el efecto, de manera que no sirve para usos indebi-dos o de carácter negativo, por lo cual, puede ser enseñado sin problema a otras personas que también se encuentren en el mencionado camino de crecimiento, con independen-cia del nombre que tengan ellos. c) Ritual Mayor: danza energética multidimensional realizada por un ceremoniante hombre o mujer, adecuadamente prepa-rado para ello por un Maestro. Este trabajo energético está, en su ejecución, reservado a personas capacitadas para ello, en la participación como asistente, para todas las personas que pre-cisen de este apoyo, requiere además un lugar especialmente preparado y una fecha adecuada para el acto. Trabajos de esta naturaleza requieren pureza energética y riguroso contexto de reverencia, bien manejados son un banquete multidimensional absolutamente inolvidable y de gran poder armonizador. El presente libro recoge enseñanzas que impartimos en direc-to y que hasta la fecha han demostrado en la práctica excelen-tes resultados y están referidas a la actitud ceremonial y los rituales menores, los cuales pueden ser practicados con toda tranquilidad y confianza, pues provienen de la práctica nues-tra o ancestral y en un camino de autoconocimiento, son un excelente complemento que dinamizará nuestro crecimiento. Varios rituales provienen de la variada tradición chamánica a la cual estamos agradecidamente conectados; otros ema-nan de nuestros viajes interiores, cuando en otros estados de consciencia accedemos a un conocimiento, que en forma de estratos de energía permanecen almacenados en otras rea-

lidades. Todo ello, durante la década y media de ir formando personas para la autorealización, hemos ido aclimatándolo a este tiempo y personas contemporáneas, de manera que puedan todos beneficiarse con este conocimiento, histórica-mente olvidado o premeditadamente desprestigiado. En tiempo remotos, en épocas en las cuales la humanidad co-menzaba a estructurarse tribalmente, la función fundamental para la época de chamán, recaía preferentemente en la mujer, por esa predisposición energética y esa natural capacidad intui-tiva que la colocaba en ventaja respecto a su colega masculino; ese poder, posteriormente uSurpado es menester recuperarlo y apropiarse otra vez de esa capacidad de navegar en el océano de la unicidad, que constituye nuestro gran hogar cósmico.

En ese contexto el ritual se constituye, así como el cuerpo de la mujer, en arma y herramienta privilegiada, capaz de accionar poderosos procesos energéticos que dotan a la mujer de más poder aún, posibilitándole oír con fluidez la voz de la chamana interior y poniendo en sus manos, una nueva libertad capaz de posibilitarle vuelos aún más altos. Por todo ello resulta de fundamental importancia el estar debidamente purificada, además de habituándose a tratar al cuerpo como algo sagrado, como un espacio con mucha sabiduría esperando ser decodificado adecuadamente. La preparación para el ritual supone tomar en cuenta las siguientes consideraciones: a) Uno de los elementos más importantes en la valora-ción del ritual es la intencionalidad que otorga la dirección energética al mismo. b) La duración del ritual, en este sentido es de secun-daria importancia, prevaleciendo la intensidad del mismo y el enfoque energético que emana de la intención antes mencionada. c) El lugar en el que se realiza puede incrementar la fuerza del mismo o menguarlo, siendo el lugar ideal por excelen-cia directamente sobre la Madretierra y preferentemente

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mirando al naciente. En caso de realizarse en el departa-mento de un edificio, es posible hacerlo siempre y cuando el lugar elegido, esté previamente preparado para ese fin; ésto significa adecuadamente limpiado; para ello se puede utilizar un incienso preparado en meditación para cumplir fines purificadores (la práctica purificadora básica consiste en barrer literalmente el sitio elegido, usando para ese fin el incienso y moviéndolo en una sola dirección). Es necesario saber que la forma mueve la energía de manera que cualquier forma en la que nos encontremos, está influyen-do en mayor o menor medida. La forma piramidal es altamen-te concentradora de energía, recomendable por ello a rituales mayores; la forma con la que puedes trabajar tranquilamen-te es el círculo, visualizado o dibujado sobre el suelo, dentro puedes organizar un pequeño y práctico altar, compuesto por objetos sagrados; el círculo tendrá un sentido de rotación (en el hemisferio Norte es similar a las manecillas del reloj, y abajo del Ecuador en sentido inverso al anterior) que será observado sin excepción, una puerta de entrada que siempre será la mis-ma para entrar y salir, también es posible tener otra puerta de salida, empero tratándose de círculos pequeños, será suficien-te una puerta para entrar y salir. El círculo además debe tener claramente marcado el centro que constituye el eje energético a partir del cual todo se organiza, de esta manera el espacio del trabajo ceremonial está constituido por todo el interior del círculo, que si está sobre la tierra en nuestro jardín podrá que-dar de manera permanente, más si se encuentra en la playa o un parque cualquiera, es necesario recogerlo y guardarlo al terminar, destruyendo todo indicio del trabajo allí realizado. Los elementos de que está constituido un altar pueden ser variados, de acuerdo a los objetos que por su simbología o co-nexión vibratoria te resultan más afines, todos ellos serán en lo fundamental de uso personal, en caso de ser manipulados por otra persona, serán limpiados con el incienso preparado para ese fin. Es recomendable tener en nuestro altar ceremo-nial, por lo menos algún representante del reino mineral, vege-

tal y animal, todos ellos debidamente preparados; también es útil, para las experiencias chamánicas, contar con un tambor, aunque sea pequeño y con una o dos maracas. La preparación para realizar un ritual será simple y directa, en algunas circunstancias podrás incorporar como práctica purificadora previa el ayuno de un día, en el cuál beberás exclusivamente agua o infusiones de plantas medicinales de efecto purificador; esta práctica no es imprescindible en todos los casos, empero resulta altamente útil cuando se trata de momentos o situaciones especiales, no debemos olvidar que el trabajo ritual es un arte multidimensional en el que se mueve cuantiosa energía, se accede a conoci-mientos desconocidos, se dinamizan procesos de sanación y curación de heridas sutiles, por donde perdemos energía permanentemente, además de contar con la presencia y el apoyo de asistentes ceremoniales de otros planos. Todo ello requiere de nosotras una participación con mente abierta, con energía purificada, con una vibración luminosa y un gran equilibrio interior, además de un cuerpo relajado por donde fluyan sin interferencia nuestras energías, en la perspectiva de alcanzar los objetivos elegidos para ese tiempo sagrado. Finalmente decirte que tu lugar sagrado y ceremonial, es como el aeropuerto para los aviones, por ello debes man-tenerlo libre de cualquier contaminación energética y pre-sencias ajenas, aunque puede ser posible compartirlas con alguien a quién queremos ayudar, en ese caso, con el permiso correspondiente podremos ingresarle a nuestro círculo. Reiterar también que se trata de un espacio –si está adecuadamente preparado- donde se unen las otras realidades, de manera que puedes considerarlo un refugio energético, un útero invisible, donde todo está dinamizado, un lugar donde tu imaginación adquiere rango de realidad instantáneamente, un espacio con microclima energético intensificado, un lugar para encontrarte con tus guardianes y guías, un oasis transparente donde tener cita con Dios, sin importar el nombre con el que decidas convocarlo a él.

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Por todo ello es fundamental que vivas en paz, que tu vida dis-curra entre el placer y la alegría, que no descartes al éxtasis nuevamente, como condición natural de existencia y que co-miences a recuperar ya, todo aquel potencial perdido, para re-construir a la mujer completa, autónoma, libre y capaz de oír nuevamente el llamado de la diosa y desde esa convocatoria, aprender otra vez a nutrirse en los centros energéticos de la Madretierra y activando capacidades ancestrales, permitir que la oruga se convierta en mariposa, desde ahora y para siempre.

Paseo por la calle del presente,Contemplo la vidaYo soy la vida, retomo las riendas en mis manosMis brazos reclaman abrazosMi sangre menstrual extraña la ceremoniaY el encuentro ritual con la MadretierraAmanece mi optimismoAnochece mi nostalgia,Como siempreMe siento solaPercibo el cuerpo entero de la nostalgiaQue reemplaza mi sombraAcaricio el instante infinitoTiembla mi destinoCuando decido hacerme cargo de mi vidaPreparo mi vestuario ceremonialLleno mi cesta de sueñosFértiles recuerdos de otras vidasHacen florecer mi esperanzaEstoy vivaSeguiré vivaY si en élNo existen indicios de vidaAbandonaré destinos deshilachadosY galoparé solaEs decir con todo el UniversoPues el amor limpiará mi almaY sacando la luna del río en plena noche

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La volveré a guardarEn el transparente lago de mi corazónSobreviví como mujerAhora comienza la vidaY empuñando mi ternuraEstoy dispuesta a decapitarTodos mis temores y convertida en luminosa flechaBuscar el arcoQue me permita volar hasta el cieloComo ave migratoria sin retorno probable.

EXPLICACIONES COMPLEMENTARIAS

1. - Todo es energía, nosotros y lo que nos rodea, lo que varía son los niveles vibratorios que a su vez están co-

nectados a niveles de consciencia matrices o perspectivas ascendentes. 2. - Todo es uno. De una u otra manera, todos estamos interconectados y compartimos un océano energético unifi-cado y multidimensional; cada cosa que pasa en el Univer-so, de alguna manera, nos afecta e involucra; no es posible el aislamiento; recomendable el fortalecimiento en base a un riguroso trabajo interior. 3. - Todo está vivo, aunque no parezca en un primer momen-to, lo que pasa es que hay niveles de vida que no existen en esta realidad y que sin embargo son totalmente reales en las otras realidades. 4. - De esta manera podemos empezar a comprender que hay más de una realidad por tanto que hay leyes que rigen este plano y otras leyes que gradualmente iremos conocien-do que rigen otras realidades; algunas de ellas en su momen-to pueden ser más poderosas y subordinar a las físicas.

5.- La existencia de otras leyes supone la vida de otros mundos que también están aquí. Ello es totalmente natural y parte del Universo. Acceder fugazmente a esos mundos

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es posible si procedemos adecuadamente y con la pureza energética requerida. 6. - Existen vibraciones energéticas inferiores, intermedias y superiores. La energía no es buena ni mala, empero su uso le otorga características diversas, tornándola densa, negativa o inferior, o todo lo contrario; en este último caso, estará vinculada con el amor incondicional y la coherencia. 7.- La Madretierra es un gigantesco laboratorio energético, constituida por corrientes o flujos energéticos que la Sur-can de Este a Oeste, de Norte a Sur, además de Noreste a SudOeste, y de NorOeste a Sudeste. Posee también puntos telúricos donde el metabolismo energético está intensifi-cado; antiguamente estos lugares, eran considerados por nuestros Abuelos como sitios sagrados de exclusivo uso ceremonial. 8.- El mundo visible, externo y tangible como el cotidiano, de alguna manera está subordinado a energías sutiles y campos de fuerza que sin ser perceptibles a los sentidos, coexisten con el nuestro. A manera de ejemplo mencione-mos que una enfermedad en el ser humano comienza a manifestarse a niveles energéticos, mucho antes que exis-ta síntoma alguno a nivel físico, situación que significa y muestra la posibilidad de revertir procesos patológicos oportunamente, a condición de abordar la terapia con ca-racterísticas integrales. 9. - El punto antes señalado significa que, tanto personas como animales y plantas, estamos sujetos a una jerarquía energética espiritual con la cual tenemos que aprender a convivir armónicamente, situación que dependerá de nivel vibratorio elegido para vivir en lo cotidiano. 10. - Los trabajos de carácter ceremonial nos permiten ac-ceder a los mapas, que nos darán pistas para transitar por estos mundos, tomar energía y conocimiento, mejorando la

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calidad de nuestra vida e incrementando la capacidad de ayudar a los demás de manera más profunda. 11. - Toda experiencia chamánico-ritual requiere el cono-cimiento básico y la reverencia necesaria. Es preciso ade-más estar en relaciones armónicas con los mundos mine-ral, vegetal y animal, para que sus respectivos guardianes, actúen como aliados o protectores. 12. - La imaginación, la visualización y la intencionalidad resultan altamente significativos y tienen todos estatus de realidad; ello nos induce a ser rigurosas vigilantes del enfo-que energético, que tiene como requisito una gran capaci-dad de concentración. 13. - La práctica de los procedimientos aquí enseñados, se traduce inevitablemente en el incremento del poder per-sonal, el cual deberá ser usado sin excepción para fines positivos y superiores, caso contrario se revierte o afecta en primera instancia a sus protagonistas. 14. - En resumen, todo lo antes mencionado deberá ser parte de nuestro camino de autoconocimiento y evolución consciencial; sólo de esa manera podremos caminar sobre un terreno firme y crecientemente luminoso, es más, todo lo aquí enseñado, es absolutamente natural y durante mile-nios fue parte de la forma de vida cotidiana; consideramos que ya es tiempo de que retorne a la vivencia diaria y co-mience a liberarse nuestro poder natural, directa o encu-biertamente reprimido.

RITUALES CONEXIÓN CON LA PACHAMAMA

Elige el lugar y el momento adecuado, viste ropa recién lavada y de fibra natural, prescinde de zapatos, saluda

a los guardianes del lugar y a los de cada dirección, dibuja un círculo sobre la tierra, coloca los objetos sagrados que tengas dentro del mismo, marca las cuatro direcciones y el centro del círculo, señala la puerta de entrada y el sen-tido de rotación; cuando esté todo preparado, abandona el círculo y desde afuera, pide a la Pachamama para en-contrarte con ella en el lugar sagrado que acabas de abrir; pide permiso para ingresar, entrega la ofrenda a la parte central o al altar, mejor si éste se encuentra situado al Este o naciente, siéntate en postura meditativa sobre la tierra, coloca las palmas de las manos suavemente sobre la tierra, conserva la columna vertebral derecha y los hombros rela-jados, visualiza que tus manos se convierten en puertas que se abren, para conectarte con ella. Permanece en esa postura de 15 a 30 minutos, respirando conscientemente, no esperes ningún resultado, sólo se tra-ta de estar plenamente en ese momento y lugar. Al concluir, recoge todo, cierra el círculo y si no estás en casa, bórralo totalmente; agradece a los guardianes, despídete de ellos y retírate.

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La ofrenda podrá ser retirada o enterrada según las circuns-tancias; si la recoges puedes luego devolverla a la tierra en un lugar donde ello sea posible.

CONEXIÓN CON MAMAKILLA Elige cualquier noche de la fase creciente, preferentemente cuan-do se acerca la Luna Llena; de no ser posible ello, escoge un día lunes y en un horario entre la puesta del Sol y la media noche.Viste ropa limpia, blanca y de fibra natural. Quítate los za-patos para comenzar, saluda a los guardianes del lugar y a los de las cuatro direcciones, enciende un incienso que los días previos lo preparaste meditativamente para ese fin, comienza a limpiar el lugar elegido, en la Naturaleza (puede ser tu jardín si posees uno), bárrelo de adentro para afuera y al terminar deja el incienso encendido cerca; dibuja con la mano un círculo imaginario, pide permiso para ingresar a él, convoca a tus guardianes para que te aistan en este im-portante momento, ingresa al círculo y permanece en él, al centro del mismo, de pie, con las piernas ligeramente abier-tas, lleva tus manos sobre el corazón y partiendo desde ahí, comienza a extender tus brazos juntos, con las palmas uni-das hacia delante; al llegar al límite máximo, separa las pal-mas de tus manos, dejando que permanezcan en contacto los dedos pulgar e índice, dibujando literalmente con los mismos, una pirámide dentro de la cual colocarás a Mama-killa, visualizando que desde el centro de tus manos, salen hilos de luz hasta el corazón de la Luna, constituyendo una especie de puente luminoso, instante después recoge los brazos hasta el corazón y guarda la energía percibida, repi-tiendo la misma operación varias veces hasta sentir que va llegando al final. Al terminar agradece a Mamakilla, a los guardianes; camina en sentido inverso cerrando el círculo, como si lo borraras a pesar de su invisibilidad y recogiendo aquel objeto sagrado que llevaste. Retírate.

Todo lo que sientas en ese momento, asúmelo como parte natural de un itinerario que estás comenzando a descubrir. CONEXIÓN CON MAMAKHOCHA El amanecer y la puesta del Sol, constituyen momentos es-pecialmente recomendables para realizar este trabajo. Si el clima y las circunstancias lo permiten. Trata de estar con la menor cantidad posible de ropa, en caso de poder prescindir de ella, no dudes en hacerlo. Dirígete a la playa, muy cerca de donde llegan las olas comienza a caminar en círculo, sin prisa, sin objetivo, limítate a caminar. para ayudarte a mante-ner la forma, puedes marcar con una piedra o un puñado de arena, el centro del círculo, en torno al cual caminarás medi-tativamente, siempre en círculo, es muy importante la forma; para evitar pensamientos intrusos te concentrarás en el soni-do del mar, dejarás que ese sonido comience a transportarte, comenzarás a salir del tiempo, es probable que de manera espontánea tu caminata se detenga y comiences a danzar.

La danza libre con la música del mar, es una excelente mane-ra de conectarnos con Mamakhocha; no es necesario que te reitere la necesidad, en todos los casos, de efectuar los per-misos correspondientes para iniciar y despedirse, vale la pena relizarlos escrupulosamente. Es probable que las primeras veces, si no tienes práctica, te sientas un poco rígida o torpe, mas ello no debe ser motivo para desanimarse, recuerda que no estamos buscando realizar fenómenos ni producir nada ex-traño, son sólo conexiones y ello opera a niveles tan sutiles que muchas veces pasan desapercibidos hasta que estamos lo suficientemente sensibles como para identificarlos. CONEXIÓN CON MAMAOCLLO Esta práctica puedes realizarla en casa incluso en tu propio departamento, simplemente elige una habitación en la que no existan aparatos eléctricos conectados, asegurándote tam-bién de no ser interrumpida hasta la conclusión del mismo.

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Limpia el lugar elegido, pide los permisos correspondientes, viste tu ropa ceremonial( es bueno tener alguna ropa que tenga ese uso exclusivo), oriéntate al naciente, acompáña-te con un pequeño tambor que tocarás ininterrumpidamen-te hasta el momento en que decidas terminar, mentalízate que al cesar el sonido del tambor, regresarás con facilidad al lugar y circunstancia cotidiana en que te encuentras.

El tambor emitirá en todo momento el mismo sonido, imi-tando el latido del corazón, tu estarás de pie, o sentada mi-rando al naciente, con los ojos cerrados, sintiendo tu cuer-po, luego visualizando un lugar muy hermoso, puede ser un paisaje natural que te resulte especialmente agradable, siempre que elijas un lugar para visualizar, será el mismo, en ese sitio mágico, te encontrarás con tu mujer interior, expresada en Mamaocllo. Puedes visualizarla como una mujer anciana de aspecto agradable o incluso verte con tu mismo aspecto, de manera que sea un encuentro contigo misma; habla con ella, pregúntale si quieres saber algo, ella es la parte de ti que sabe muchas más cosas, es como una puerta a otras realidades donde el conocimiento abunda. Al sentir que ha terminado la consulta, despídete de ella con agradecimiento, deja de tocar el tambor, aparecerás rápidamente en tu casa o donde iniciaste la práctica, co-mienza a moverte sin prisa, puedes recordar las sensacio-nes experimentadas y gradualmente concluir la experiencia con el agradecimiento de rigor. Lo más probable es que desde la primera vez, tengas experien-cias interesantes, empero si ello no fuera así también es na-tural, todas tenemos ritmos distintos y no es bueno forzarlos. Si cuentas con una persona de confianza, puedes asignarle la tarea de tocar el tambor, empero debe ser alguien reverente y con mucha pureza energética, en este caso será bueno marcar el tiempo de finalización que podrá ser en unos diez o quince minutos, ninguna práctica por ser más prolongada es mejor.

SINCRONIZANDO LA PAREJA A PARTIR DE LA ENERGIA SEXUAL La energía sexual es como cualquier otra, sagrada y digna del mayor respeto. La pareja que quiere participar del pre-sente trabajo ritual, deberá saber que es requisito previo un fervor de crecimiento conjunto y amor recíproco. No importa si en el pasado existieron desencuentros, empero en el pre-sente deben, ambos, estar caminando en la misma perspec-tiva. Se denomina hacer el amor, a la creación conjunta de un microclima energético poderoso que requiere gran pureza y genuino amor, entonces es el amor quién nos hace y pasa-mos, cada uno, a ser una puerta abierta al infinito y la eterna danza cósmica, a menudo ignorada. La habitación elegida estará limpia física y energéticamente. Dibujaremos un círculo invisible sobre la cama o el lugar elegi-do para el encuentro, para ello utilizaremos la mano más fuer-te visualizando que sale luz blanca de ella; nos limpiaremos recíprocamente primero la mujer al hombre y luego viceversa, con incienso, todo el cuerpo, como peinándolo sólo hacia aba-jo, nunca en ambos sentidos; al concluir nos tomaremos de las manos frente a frente; para entonces, ya habremos prescindi-do de la ropa y objetos metálicos en el cuerpo; comenzaremos, sentados en postura meditativa, primero uniendo nuestras es-paldas, como si compartiéramos la misma columna vertebral, las manos de cada uno permanecerán entrelazadas entre sí, sentiremos cómo la energía comienza a subir, minutos des-pués nos sentaremos frente a frente, nos tomamos de las ma-nos unos minutos, luego permanecemos tomados de la mano menos fuerte, mientras la otra apoyamos suavemente sobre el corazón del cónyuge, simultáneamente nuestras miradas se encuentran y se envían energía amorosa. Minutos después nos tomamos otra vez de las manos, y poniéndonos de pie comenzamos a danzar mientras continuamos enviándonos amor desde los ojos, las caricias se incrementan en medio de la danza, nos envolvemos en luz, primero por separado luego en una misma esfera, hasta ingresar en el círculo preparado,

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sin interrupciones, dejar que la energía continúe fluyendo; la postura para este momento puede ser ya horizontal y libre todo movimiento, no hay prisa, la energía sabe cómo mover-se, más aún en un contexto de ternura, libertad y reverencia. La unión será equivalente al acceso a un altar, donde la danza energética posibilitará un vuelo multidimensional a través de la puerta corporal del compañero. Es muy importante que el orgasmo no sea el objetivo, que nos limitemos a navegar en libertad, explorando esos maravillosos mundos que podemos descubrir a partir del buen uso de esta energía. La mujer se tomará su tiempo, mientras el hombre tendrá la precaución, de nunca, acercarse demasiado a la circunstancia eyaculato-ria, que abortaría de golpe la experiencia; para ello hará falta una permanente comunicación entre ambos, de manera que la mujer sepa, oportunamente, lo que está viviendo su compa-ñero y cuándo reducir la intensidad del estímulo. La conclusión de este encuentro energético, se dará de ma-nera natural y espontanea. Ocurrido ello, es recomendable permanecer unos momentos más en un profundo y silen-cioso abrazo, que nos posibilite prepararnos para continuar la jornada con la naturalidad que requiere tan importante circunstancia. El presente trabajo de conexión, no puede realizarse si hay límite de tiempo, si las personas no se co-nocen o si las perspectivas son diversas y existe una incom-patibilidad energética que crearía un caos vibratorio. También es bueno asegurarse de no ser interrumpidos, ni traer a ese momento sagrado temas conflictivos o ajenos a la circunstancia. Si las primeras veces no notamos nada especial, es totalmente normal, con el tiempo iremos des-cubriendo mayor energía a todo nivel, excelente estado de ánimo e incremento en la unión de la pareja, operada des-de niveles energéticos superiores. En caso de disponer de un jardín adecuado y posibilitarlo el clima, realizarlo en plena Naturaleza es altamente gratifi-cante, además de benéfico para el jardín y la misma tierra.

ABORDAJE RITUAL DE LA MENSTRUACIÓN El presente trabajo energético consta de cuatro días. El primer día, es cuando comienza el flujo sanguíneo, inde-pendientemente de la hora en que éste comienza. Puedes hacerlo en casa. Reúne tus objetos sagrados. Será bueno contar con un recipiente lleno de tierra extraída del seno de la misma (hace falta cavar un poco para garantizar su pure-za) -ésto no será necesario si trabajamos directamente so-bre la tierra-. Es un día de silencio -equivale en chamanismo a la preparación de la muerte-, el ciclo energético lunar está concluyendo, es como el final de una encarnación. Adopta la postura meditativa, sentada mirando al Oeste, comienza a recordar, casi cronológicamente todo tu último ciclo lunar; verifica cómo usaste tu energía, las prioridades que carac-terizaron este mes, el ahorro o despilfarro energético que se dio; observa rigurosamente todo tu último ciclo lunar que está comprendido desde el final de la anterior menstrua-ción; evalúa, de la mano de la más implacable honestidad, el uso que diste a tu energía en el período mencionado. Al concluir esta evaluación, tiéndete sobre el suelo, siempre con la cabeza al Oeste e ingresa en un silencio profundo, lleva todo lo evaluado a profunda meditación, para cerrar el círculo lunar adecuadamente y sin autoengaños. El segundo día vistete, si es posible con tu ropa ceremonial y encuéntrate con la Madretierra, es el día de ofrenda. Des-de el día anterior habrás preparado un conjunto de objetos o símbolos que representen para ti algo especial, prepa-rarás con ellos una ofrenda a la Pachamama. Cuando te encuentres en el lugar elegido, dibuja un círculo con hojas de árboles, sobre la tierra; el mundo vegetal está íntima-mente ligado a la luna y es una forma de mantener ese contacto en un momento tan importante como éste; coloca tu ofrenda al centro del círculo, ingresa a él, camina en el sentido correcto según el hemisferio, mentaliza o canta las palabras Mamapacha-Mamakilla sucesivamente, y cuando sientas el momento adecuado, abre con tus manos o con

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la ayuda de algún objeto no metálico, un pequeño pozo en el seno de la Madretierra, deposita tu flujo sanguíneo en la ofrenda y entrega a Mamapacha, enterrándola y luego sen-tándote en postura meditativa, por un momento mirando al Oeste; es el cierre definitivo del último ciclo lunar tuyo y en un segundo momento, mirando al naciente, manifestando tu intención de abrir un nuevo círculo, en cuanto la energía así lo disponga. Al concluir agradece a los guardianes y guías que te asistieron. El tercer día representa el momento previo al nacimiento del nuevo ciclo. Desde la noche anterior requieres preparar una cantidad de agua, que será usada para un baño purifi-cador; será bueno colocar desde entonces pétalos de flores que tengan un efecto de purificación, dejarlos en el agua du-rante toda la noche convocando a sus guardianes, para que puedan potenciar el agua con el efecto buscado. Antes de realizar el mencionado baño, pasar el mismo con incienso preparado para ese fin; mentalizar o cantar la palabra MA-MAKHOCHA, pidiendo permiso; iniciar el baño visualizando que no es sólo agua, sino y fundamentalmente luz que re-corre nuestro cuerpo limpiándolo energéticamente, armoni-zándolo, preparándolo para el nacimiento de su nuevo ciclo, curando heridas que pudieran haber quedado de otros tiem-pos. El baño podrá ser de inmersión, si contamos con la ba-ñera correspondiente, o echarnos el agua desde la cabeza; la temperatura será adecuada al clima y tolerancia; las flores podrán haberse retirado antes del baño con agradecimiento; al terminar vestir ropa limpia y regalarse unos momentos me-ditativos sobre el significado de ese momento. Cuarto día: El nacimiento de un nuevo ciclo energético ha ocurrido, nos acaban de regalar una nueva oportunidad para continuar creciendo y disfrutando. En cuanto abras los ojos agradece el regalo de la vida, contempla todo con nue-vos ojos, levántate como quién se apunta a una fiesta, vís-tete con colores que alegren tu vista, elige la música festiva

de mayor agrado tuyo y comienza a danzar, por que la vida es eso, una danza sagrada esperando tus pasos plenos. El cuarto y último día es celebración total, es la festividad de la vida, al tomar consciencia de ella, es el momento tam-bién en que elegimos, con la fuerza del ritual, la energía que caracterizará nuestro nuevo ciclo, de manera que nada ni nadie nos baje el nivel vibratorio. Repetir el trabajo cada vez que retorne nuestra luna y lle-gue el fin y el principio de un nuevo ciclo.

MANEJO ENERGÉTICO DE LA COMIDA Debemos comenzar convirtiendo la cocina en un taller de alquimia, una cueva mágica donde las energías se transfor-man y purifican; para ello, habrá que comenzar rediseñando la misma, hasta convertirla en un altar. Nuestra relación con el mundo vegetal tendrá que estar fluyendo de la mejor ma-nera posible, para evitar interferencias innecesarias, nuestra propia energía tendrá que estar lo suficientemente armónica como para no contaminar los alimentos que luego, serán in-corporados al campo energético de quienes los ingieran. La cocina altar necesita los colores y objetos adecuados, abundancia de plantas vivas y otras disecadas, listas para usarse en diversos preparados; hasta la propia decoración de la cocina deberá ser abundante en hierbas silvestres-medicinales, de manera que se pueda constituir ella, en un campo energético ceremonial, al cual sólo podremos in-gresar con la energía armónica, evitando de esta manera distorsiones energéticas de lamentables consecuencias. Antes de ingresar a la cocina, observa las energías que po-sees; si es necesario tómate unos minutos para armoni-zarte o purificarte con un incienso o un baño de agua fría, altamente recomendable y sumamente breve. Al ingresar, desde la mirada silenciosa, saluda a todo lo que te parezca importante, habla con las plantas y con lo que vive en los

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alimentos, pídeles que contribuyan de la mejor manera po-sible para que aquello sea un trabajo de equipo y podamos entre todas, visibles e invisibles, posibilitar un banquete energético a nosotras y quienes compartirán los alimentos. Al comenzar a manipularlos, ten consciencia y reverencia, enfoca toda tu energía en lo que estás haciendo; convoca al fuego también como una entidad viva, que preparará al-gunos alimentos para facilitar su transferencia energética. Busca un equilibrio en el menú en colores variados y diver-sas partes de la planta -raíz, tallo, hojas, flores, frutos y se-millas-; asegúrate de tener siempre una porción de alimen-tos crudos y otra cocinados o hervidos, cántales mientras los preparas y poco antes de terminar la preparación, envía desde tus manos, energía amorosa, que incrementará el valor nutritivo de los alimentos. Al servirlos hazlo con amor incondicional y no esperes el agradecimiento, pues al no existir en algunos casos, podría bajar tu nivel vibratorio; lo importante fue haberlo hecho, disfrutado de todo el itinera-rio y regocijada con el banquete energético preparado por una mujer que sabía lo que estaba haciendo. El momento de alimentarse, recomendamos sea un espacio meditativo y placentero. Si a ello contribuye la presencia de al-guna persona en especial, siempre que sea posible invitémosla a comer con nosotras, su presencia será parte del banquete. PREPARACION PARA EL VIAJE Viajar constituye una de las actividades más placenteras que podamos realizar, empero ella no está exenta de riesgo y mu-chas personas lo evitan por no correr el mencionado riesgo. El presente trabajo no modifica las condiciones externas, las cuales en forma de tendencias energéticas, están presentes y no dependen directamente de nosotras, aunque sí es posi-ble, modificando nuestra actitud, influir sobre ellas.

Poco antes de partir toma un tiempo para ti, ingresa en un espacio meditativo, cierra círculos pendientes, visualízate

bajo una cascada de luz que te purifique y armonice; pide a tus guardianes que te acompañen y protejan en el itinerario que estás a punto de realizar, construye desde la intención y visualización una esfera luminosa protectora, dentro de la cual viajarás, cuidando que en todo momento y circuns-tancia permanezca intacta. Si viajaras en auto, envuelve el vehículo también en otra esfera luminosa, de igual manera podrás hacer con el tren o avión que te transportará, refor-zando además la imagen cuando está comenzando el viaje en el vehículo en cuestión. Si así lo deseas, puedes comple-mentar ese trabajo con la imagen de un viaje tranquilo y los objetivos del mismo alcanzados, visualizando un feliz arribo al destino y un agradable retorno si has de volver. Cada vez que trabajes con una imagen, envuélvela en una esfera de luz. Durante todo este trabajo deberás estar en una actitud meditativa, con la energía concentrada y el cuer-po relajado, no hace falta que sea un tiempo extenso, que se dedique a ello y durante el viaje, será una práctica que podrás hacerlo de manera desapercibida e instantánea. El presente trabajo no resulta asistido si los fines del viaje no son positivos. MANEJO DEL PERDÓN Cuando sufrimos una agresión o injusticia, lo fundamen-tal es no adoptar la actitud de víctima; permanece digna, fuerte, atenta, serena, observando lo que ocurre afuera y adentro. Elige el momento adecuado, recoge un puñado de tierra, tómalo con tus dos manos, siéntate en actitud medi-tativa mirando al Oeste, si estás en casa y el tiempo lo per-mite, quítate toda la ropa, y comienza a enviar toda energía de enfado o dolor, por muy pequeña que sea, hasta el puña-do de tierra, que lo tendrás sujeto con ambas manos muy cerca del corazón; puedes acompañar la experiencia visua-lizando que algo de un color definido, por ejemplo marrón oscuro, observa cómo se desplaza hasta tus manos y pasa

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en su totalidad a la tierra, la cual luego será entregada a la tierra, esparcida sobre ella o enterrada. Concluida esta parte, siéntate mirando al naciente, coloca una de tus ma-nos sobre el corazón y la otra extiéndala hacia delante, con la palma abierta y direccionada al horizonte y con los ojos cerrados, visualízala a la persona que efectuó el acto erróneo, envuélvelo en luz, pide a sus guardianes que cui-den de ella y para terminar visualízala en un primer plano, llena de luz, recoge la mano extendida, colócala sobre el corazón mientras visualizas un profundo abrazo a ella, sin condiciones, sin expectativas, una abrazo de luz, que las convierta a los dos, en una bola de luz, alimentada por el corazón del cielo. Con esta imagen concluye tu trabajo y no recuerdes nunca más lo sucedido, ni siquiera es necesario recordar que un día la perdonaste, pues este trabajo ha restituido la armo-nía y todo está bien de nuevo, especialmente en ti. Si en el futuro se repite la actitud provocativa, tú estarás protegida, pues la energía que moviste te resguardará también en el futuro, sólo tienes que cuidar que tu nivel energético no descienda y que todos tus cuerpos sutiles estén llenos de amor.

LA PROSPERIDAD CHAMÁNICAMENTE MANEJADA Elige el día adecuado en fase de Luna creciente; necesitas para este trabajo estar en la Naturaleza y encontrar lo que será tu lugar energético; en este caso precisaremos una roca, no cualquier piedra, ni aquella que la tengas más a mano, sino la roca con la cual establecerás una especial conexión meditativa. Para ese día vestirás elegante, con tu mejor ropa y una acti-tud de optimismo triunfante; llevarás una ofrenda a la Pacha-mama, para ratificar el pacto de reciprocidad del cual eres parte; la entregarás al comenzar el acto, construirás con la

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roca dentro o sobre ella, según el tamaño de la misma, un cír-culo con piedras del lugar, puedes colocar al centro del mismo un cristal de cuarzo, el cual tendrá la función de amplificar tus intenciones. Antes de ingresar al círculo te conectarás con la Madretierra acostándote sobre ella boca arriba, con las pier-nas y brazos abiertos, formando con tu cuerpo una estrella, las palmas de las manos direccionadas hacia arriba. Minutos después la misma forma corporal sobre la tierra, boca abajo, las palmas también direccionadas hacia la tierra. A continua-ción adoptarás la postura de sentada, meditativa, mirando al Sur, respirando conscientemente, tomarás consciencia que estás viva, que todo el Universo está vivo, que todo es tuyo mientras lo disfrutas, que somos millonarios por que habita-mos un hotel de millones de estrellas de categoría. A continuación y poniéndote de pie, partiendo desde el co-razón, abrirás los brazos y al recogerlos, te convertirás en un abrazo al Universo, a la vida, a la abundancia que inclu-ye sabiduría, solidaridad y amor incondicional. Cada vez que abres los brazos, exhalas el aire, mientras tu intensión es de apertura, de disponibilidad a la vida, de flexibilidad y re-verente y activa aceptación de las cosas, simultáneamente de disposición al cambio, a la transformación motorizada por tu voluntad y conciencia creciente. Estás de pie, al Norte de tu círculo, de manera que delante tienes al cristal de cuarzo, estás mirando al Sur, de pie, descalza, abriendo y cerrando los brazos, con reverencia y decisión; previamente convocas-te a los guardianes de esta sagrada dirección para que te asistan, a tus guardianes para que te acompañen y guíen. Momentos después adoptarás una postura de cuclillas, con las plantas de los pies totalmente sobre la roca, dibujarás con tus manos, cuyas palmas estarán dirigidas hacia la tierra, una pirámide uniendo ambos índices y pulgares y concentrando tu mirada en el centro de la pirámide, simultáneamente tu intención estará direccionada hacia la prosperidad interna y externa y tu visualización enfocará nítidamente a tu persona, en una circunstancia de abundancia y sabiduría.

Al terminar llevarás ambas manos un instante al corazón, te despedirás de los guardianes de las cuatro direcciones, en especial del Sur, de tus propios guardianes, de los guardia-nes del lugar, recogerás todo lo llevado, devolviendo cada elemento a su sitio. Permanece un momento en silencio, interiorizando toda sensación vivida y cerrando el círculo del trabajo experimentado. Repítelo cuantas veces sea ne-cesario, pues una vez no es suficiente, empero no debes olvidar que lo fundamental es la intensidad de la concentra-ción energética. También es importante no disociar lo exter-no de lo interno, pues aspirar a lo económico prescindiendo de lo espiritual, podría constituirse en arma de doble filo, no recomendable en un camino de autoconocimiento, donde todo adquiere una significación distinta y cualitativamente superior. MANEJO ENERGÉTICO SANADOR

a) Cuando la salud está presente:Despierte con optimismo, baje al jardín, respire consciente-mente, camine descalzo sobre el césped y su rocío o sobre la tierra, camine en círculo, no se trata de ir a parte alguna, caminar es un objetivo en sí mismo, hasta convertirlo en una actitud meditativa activa. Vista para el efecto ropa de fibra natural y preferentemente holgada para posibilitar una adecuada ventilación cutánea, si puede prescindir de la ropa mejor, entonces posibilitará un baño de luz, sus cuer-pos sutiles le agradecerán. Minutos después realice movimientos espontáneos, adecua-dos a su edad, trata de tomar consciencia de cada uno de los músculos, intente moverlos uno por uno, siéntalos, comu-níquese con ellos de manera individualizada, hábleles como si fueran otras personas, ellos pueden oírle y comprender lo que está diciéndoles, es más, son profundamente afectados por sus palabras, pensamientos y emociones, de manera que habrá que tratarlos con mucho respeto y cariño.

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Al terminar la actividad física acuéstate sobre la tierra con la cabeza al naciente, relaja tu cuerpo parte por parte em-pezando por los pies hasta la cabeza y viceversa, cuando te encuentres profundamente relajada comienza a visualizar los órganos que quieres de manera especial potenciarlos, visualízalos como quién los proyecta en una pantalla gigan-te, envíales oxígeno mediante el torrente sanguíneo, abun-dante oxígeno para que puedan trabajar mejor, envíales también los nutrientes necesarios, observa cómo reciben lo que precisan, visualiza una excelente irrigación sanguí-nea llegando hasta ellos, finalmente envíales luz, envuélve-los en luz hasta verlos radiantes y saludables. Es de secundaria importancia el tener un conocimiento pro-fundo de anatomía y fisiología, resultando empero impres-cindible el estar profundamente concentrados y con carácter previo el cuerpo relajado. Un horario especialmente reco-mendado para esta práctica energizadora es el amanecer. b) Cuando existe alguna enfermedad no grave:Al igual que en la anterior práctica, el amanecer continuará sien-do una hora privilegiada; si el clima no lo permite, se puede usar cualquier hora de la mañana, cuanto más temprano mejor. El rocío de la mañana almacenado sobre el césped, será un primer objetivo energizante al inicio de esta práctica. Descal-za, dibuja visible o imaginariamente con la mano, un círculo sobre la tierra, ingresa luego de pedir los permisos corres-pondientes, usa dos piedras comunes para tocar, golpeán-dolas entre sí -un ritmo que imite el sonido del corazón, es una ancestral modo chamánico de pedir protección y ayuda-. Ingresa en un estado meditativo, sentada, balanceándote li-geramente de manera espontánea sincronizándote con el la-tido pétreo, convoca a tus guardianes solicitando ayuda para comprender el significado de aquella enfermedad, acéptala como un espacio de reflexión interiorizadora que te permi-ta identificar actitudes erróneas, respira conscientemente, siente la vida ingresando en tu cuerpo, poco a poco concluye

el sonido y movimiento e ingresa en un silencio profundo, mientras tu cuerpo se tiende sobre el suelo, dentro del cír-culo abierto, y comienza a relajarse profundamente, desde tu respiración consciente conecta con tu chamana interior, visualiza el mismo paisaje hermoso que usaste en algún otro trabajo, entrevístate con ella, pregúntale cómo manejar la si-tuación presente y el camino para volver a la salud (más que recetas medicinales, solicítale orientación respecto al traba-jo interior que te permita volver a armonizarte). Al concluir la consulta, agradece la enseñanza, retorna con rapidez, toma consciencia de tu postura corporal, siente cada parte de tu cuerpo, recobra la vista y el movimiento. Lentamente colóca-te de pie frente al naciente, el Sol ha comenzado a salir, si es posible prescinde de la ropa, de pie sobre la tierra, deja caer tus brazos relajados junto a tu cuerpo, con las palmas de las manos dirigidas hacia el sol, desde ellas conecta con esa energía luminosa, absórbela por todo el cuerpo y direccióna-la al fortalecimiento de tu instancia inmunológica, puedes vi-sualizarla a ella como una red de conductos o como centros energéticos desde donde se envía energía sanadora a donde haga falta, llénalos de luz, obsérvalos regresando a la salud, primero a ellos y desde ahí a todo el cuerpo, en especial a los órganos involucrados con la enfermedad. Al concluir extiende ambos brazos como partiendo del co-razón y entregando al Sol una ofrenda invisible y al volver trae la energía sanadora en forma circular, para bañarte aún más intensamente en luz. Repite esta última operación varias veces, concluyendo con tus manos sobre el corazón, agradeciendo a los guardianes, cerrando el círculo abierto y visualizándote en el estado de salud al que quieres arribar. b) Si la enfermedad reviste gravedad:Se puede hacer lo antes señalado junto con el tratamiento específico correspondiente. Evitar caer en el error de pensar en una solución meramente física, cuando los problemas tie-nen un carácter integral y la mayor parte de las enfermeda-des comienzan a manifestarse a niveles energéticos.

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d) Toda mujer debe cuidar de manera especial sus cen-tros energéticos: Fundamentalmente el básico localizado a nivel del bajo vientre, correspondiente en la parte física a los ovarios. Ahí se encuentra asentado el biogenerador que toda mujer debe cuidar y energizar. Donde sea que te encuentres, realiza la siguiente meditación ritual: Visualiza una esfera en torno tuyo, luz blanca envolviéndote a ma-nera de útero gigante y transparente, siéntete protegida y abrazada por todo el Universo, adopta una postura de me-ditación sentada mirando al naciente y coloca tus manos sobre el bajo vientre, a la altura de los ovarios, formando con tus dedos índice y pulgar, una pirámide que apunta la Madretierra, cierra los ojos un instante y visualiza que un cordón umbilical luminoso que viene desde el corazón del cielo, se conecta con el centro de tu pirámide, realizando una transfusión energética que armoniza y equilibra tu cen-tro energético creador, afectando positivamente a nivel físi-co. Concluye esta práctica, minutos después, visualizando tus ovarios llenos de luz y salud. Toda mujer que se respeta, tendría que aprender a comuni-carse con sus ovarios, ello es posible en un contexto medita-tivo y de profundo relajamiento corporal.

INTENTO DE SUICIDIO. ENFOQUE RITUAL. A continuación nos referiremos a las personas normales que, en un estado de crisis o de sensación de estar en un callejón sin salida, se plantean el suicidio como una alter-nativa para acabar con los problemas -descartando casos patológicos que requieren una terapia específica-. Cualquier persona, en un momento de ofuscación, puede intentar recurrir a este extremo, en apariencia solución defi-nitiva a nuestros problemas; sin embargo la situación debe enfocarse desde dos criterios. En primer lugar todo es mo-mentáneo y no hay problema o adversidad que dure siem-pre. Todos, personas exitosas y mediocres, hemos tenido

momentos duros en la vida, saber enfrentarlos con valor y creatividad es lo diferencia a los que triunfaron, de quienes fracasaron en la vida. En segundo lugar es bueno recordar que somos entidades energético-espirituales y que como tales, no estamos suje-tas a las leyes que rigen el plano físico, es decir podremos matar el cuerpo, empero seguimos viviendo de otra manera y con mayores problemas aún, por que toda agresión a la vida, deja lamentables consecuencias, por ello, el suicidio, no sólo es una “solución” engañosa, sino que en el fondo nos genera más problemas y de peor manera. Comprendido ello, debemos observarnos sin culpabilizarnos cuando alguna vez nos asalten este tipo de ideas. Comenzar a respirar abdominalmente y de manera consciente, aceptar que el camino de la vida tiene curvas y túneles, que aveces son oscuros, aceptar que hay gente incomprensiva incluso cruel y que el mundo está como está y que sin embargo la vida continúa siendo hermosa, porque mientras estemos vi-vos siempre hay esperanza. Al respirar siéntete viva, toca tu cuerpo, es todo el Universo encapsulado dentro tu piel, rega-lándote la oportunidad de usar este momento, para activar tu evolución, la expansión de tu consciencia, por que en verdad, el cuerpo sólo es el estuche, somos espíritu y él es eterno. Si te encuentras sola, posterga toda decisión y limítate a respirar abdominalmente hasta tranquilizarte, vigila cada uno de tus pensamientos, obsérvalos, es un momento de exclusiva observación, comienza a relajar tu cuerpo, si es-tás en casa, llama a una persona que sea de tu confianza y agrado, para hablar con ella, mientras tanto relaja tu cuer-po, escucha la música que más te guste, evita cualquier pensamiento pesimista, posteriormente siéntate en postu-ra meditativa mirando al Oeste, allá la energía se recicla y transforma y en verdad lo que tu estás buscando es con-cluir una etapa de tu vida y nacer a otra, aprovecha esta circunstancia para ello, no precisas evaluar nada, tampoco

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es necesario recordar, es mejor concentrarse en la nueva fase que anhelas, comenzar a visualizarte exitosa y feliz. Levántate por un momento, dibuja un círculo con la mano, toma un o dos hojas de una planta, pidiéndole permiso, ingresa a tu círculo, ahí empiezas a estar protegida, siéntate nuevamente en postura meditativa mirando al Oeste, toma en tus manos las hojas y visualiza que todo aquello que te preocupa sale de tu cuerpo pasando a ellas totalmente. Posteriormente enterrarás las hojas en la tierra de tu jardín o un parque próximo y saldrás a dar un paseo por un parque próximo o cualquier lugar que sea de tu agrado. Todo lo que veas a partir de ahora, será nuevo, por que acabas de iniciar una nueva etapa. Al enterrar las hojas simboliza también el final de esa etapa de tu vida que ya no soportabas más y después del trabajo energético realizado con apoyo de los guardianes del Oeste, aquello terminó definitiva-mente y acabas de nacer a otra fase de tu vida. Es probable que los problemas continúen, empero la actitud frente a ellos será totalmente distinta, porque cada etapa tiene tu propia energía. Camina disfrutando de descubrir tantas cosas nuevas, sentirás que la paz interior vuelve a instalarse en ti, limítate a disfrutar de tu recién estrenado día, ya mañana tendrás tiempo para buscar soluciones; comparte con la gente que amas, la nueva fase ini-ciada y celébralo, hay quienes después de tan importante mo-mento se atreven a caminar danzando por la calle, a abrazar a los árboles y cantarle a las estrellas; es tu vida y estás empezan-do de nuevo, entonces todo el Universo respalda esa decisión. Al terminar este momento energético, siéntate por un ins-tante sobre la tierra mirando al naciente, con lo que queda ratificada la apertura de lo que podría ser, si tu así lo deci-des, la época más hermosa de tu vida.

DIVORCIO. ENFOQUE ENERGÉTICO Antes de llegar a esta decisión tendremos que estar seguras que eso es lo que realmente anhela nuestra alma. Para ello es recomendable darse un poco de tiempo y elaborar nuestro plan

de vida con y sin el compañero, ver a corto y largo plazo la viabi-lidad de cada uno de los proyectos y aquel que nos resulte más reconfortante. Si dispones de alguien de confianza y sabiduría, consúltale. Si a pesar de todo ello la decisión por la separación está tomada, lo primero que tienes que hacer, es disponer de un plan personal de crecimiento integral aplicable de manera in-mediata, que en lo central contemple el enfoque de tu energía, hacia una nueva etapa de momento en gestación. La circunstancia del divorcio requiere encontrarnos fuertes y serenas, lúcidas y creativas, no importa cuales fueron los mo-tivos, menos importante aún es la identificación de culpables que en el fondo no existen. Lo que importa es que tu estás iniciando una nueva etapa en tu vida; concéntrate más que en la destrucción de lo que acabó, en la construcción de lo nuevo. Elige un día a la puesta del Sol, inicia la actividad poco antes del poniente, lleva una hoja seca o una ramita de arbusto bien seca, una vela blanca, elige un lugar al aire libre o jardín, mejor que sea un sitio donde no te interrumpan, no necesi-tas mucho tiempo, pero si tener el propósito firme de lo que realizarás. Dibuja sobre el suelo un medio círculo uniendo el Sur, Este y Norte, quedando abierto el Oeste; ingresa des-de la entrada marcada al Este, mirando al Oeste, marca el centro; siéntate sobre el suelo dejando detrás de ti el punto central; enciende un sahumerio, límpiate con él, peinándote hacia abajo en una sola dirección, si es necesario para esta práctica vuelve a ponerte de pie. Previamente habrás prepa-rado meditativamente el incienso para que cumpla una fun-ción purificadora, sacando de ti, todo aquello que tú elegiste no forme más parte de tu vida. Vuelve a adoptar la postura meditativa, siempre mirando al Oeste; el sol está a punto de ponerse, concéntrate en él, convoca a los guardianes de la luz para asistirte en este trabajo, a continuación establece y refuerza tu conexión con la luz y simultáneamente, visuali-zando a tu excompañero, con ternura y pureza, identifica el vínculo que existió entre ustedes, visualízalo como un cor-dón transparente que en ese momento por decisión tuya y

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con apoyo del Universo será cortado, dejando que cada alma continúe libre su camino, sin que nada pendiente a nivel vi-sible o intangible, permanezca entre ustedes. Observa como se rompe el cordón transparente de manera pacífica y como cada uno retoma su camino personal, con su círculo ener-gético cerrado y su vibración alimentada por la luz. Respira conscientemente y con agradecimiento; toma en tus manos, en ambas manos la hoja seca que llevaste y que ahora pasa a simbolizar a tu excompañero, convoca al abuelo fuego para que efectúe una acción transmutadora, que incinere todo vín-culo y recuerdo, para que a partir de ahora podamos vernos como amigos y todo fluya armónicamente. Después de unos momentos de silencio enciende el fuego y quema totalmente la hoja elegida, agradece al abuelo fuego, despídete de él y apágalo con los dedos, evitando soplarlo, recoge las cenizas y lánzalas al aire, en símbolo de entregar al Universo el pa-sado y comenzar a vivir el presente con pasión y optimismo. Al concluir el acto, recoge todo lo que llevaste, borra cual-quier huella en el suelo, despídete de los guardianes del Oeste y los guías asistentes y retorna a tus actividades feliz de estrenar una nueva etapa. Si consideras necesario pue-de repetir de nuevo este ritual para fortalecer la desvincu-lación. El efecto del mismo será grande, si fuiste capaz de trabajar con armonía y energía superior. ABOLICIÓN DE ADICCIONES Toda relación que suponga dependencia deberá ser observa-da cuidadosamente, intentado descubrir que causas profun-das lo alimentan. Será bueno también considerar la posibili-dad de un vacío existencial, como contexto donde se alimenta este tipo de actitudes, pues si tu vida no tiene sentido, ya tene-mos el campo propicio para este tipo de problemas. Precisamos identificar las cosas profundas que están ac-tuando, ello podremos realizarlo con un trabajo meditativo constante o/y el apoyo de gente con sabiduría. Identificados

los factores internos, elaborar una estrategia para modificar-los, en ese momento será muy útil el apoyo energético- ritual que potencie esta decisión. Puede trabajar en casa, en su lugar sagrado o abrir un círcu-lo especial para ello, donde podamos caber acostadas, con la cabeza al Oeste. Previamente prepara cuatro inciensos en meditación breve, para que a través de ellos actúen los guardianes de las cuatro direcciones, a los cuales convoca-rás pidiendo ayuda para liberarte de lo que elegiste dejar. Una vez preparados los inciensos, enciéndelos comenzando por el naciente y siguiendo el itinerario determinado por el hemisferio en que te encuentras, hasta completar las cuatro direcciones. Concluido ello, ingresa al círculo, camina en el sentido previsto con una mano al corazón y otra moviéndola en sentido circular, trayendo la emanación de los inciensos hacia ti, dándote un baño de esa energía liberadora; curando las heridas que muchas adicciones producen en los cuerpos sutiles, camina sin prisa, durante unos minutos y a continua-ción acuéstate dentro el círculo con la cabeza al Oeste y los brazos junto al cuerpo, con las palmas direccionadas hacia arriba, comienza a visualizar un rayo de luz blanca que des-ciende desde lo alto y te baña completamente, reforzando la curación antes iniciada y volviendo a convocar a los guar-dianes para que respalden tu propósito liberador. Visualízate rompiendo cadenas y accediendo a una nueva libertad que la tienes bien merecida; siempre que identifiques una adic-ción, obsérvala como una cadena, visualízala nítidamente y siente que tienes la fuerza para romperla, cuando veas que tus fuerzas flaquean, vuelve a convocar a los guardianes pi-diendo fuerzas para terminar de romper lo que empezaste, si vibras desde la reverencia y el amor a la vida, sin duda este procedimiento poco a poco, aveces de manera radical y fulminante, comenzará a ayudarte, cuida de tener bien en-focada tu energía en el anhelo liberador y encausa todo este proceso, en un camino de autoconocimiento y crecimiento consciencial. Repite la práctica cuantas veces sea necesa-rio; también podrás realizarla al aire libre, por ejemplo en un

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bosque, solicitando en estos casos, a los guardianes del mis-mo, su asistencia y apoyo. RITUAL DE ARMONIZACIÓN SANADORA PARA PAREJAS Elegir el día y la hora adecuados, desconectar los teléfonos y evitar cualquier interrupción, limpiar la habitación con incien-so, encender el fuego ceremonial expresado en una vela rosa colocada en dirección Sur; con los mismos inciensos usados en la purificación, límpiale el cuerpo de tu compañero y luego él realizando la misma operación contigo; a continuación toma nuevamente los inciensos y encierra la cama en un círculo, mediten unos instantes juntos, tomados de la mano mirando al Sur simultáneamente, para luego invitarle a tu compañero a ingresar al interior del círculo y acostarse primero boca abajo; ingresa también tú en el círculo-cama y siéntate a su lado, mi-rando al naciente y el con la cabeza en esa misma dirección, irás tocando el cuerpo desde los pies hasta la cabeza, cada parte que palpes, el irá relajando, luego se da la vuelta y haces lo mismo, para a continuación volver a colocarle boca abajo; ya totalmente relajado, retoma la postura meditativa concén-trate en tus manos, llénalas de luz, a partir de este momento ellas serán canales de luz y energía sanadora, para entonces ambos habrán prescindido de la ropa, si se siente alguna inhi-bición por el cuerpo desnudo, trabajar en penumbras. Comienza a tocar el cuerpo relajado de él, no se trata de un masaje sino de un contacto energético sanador; acaricia de manera ascendiente y descendiente su cuerpo, el contacto será tenue e incluirá todo el cuerpo sin excepción; si en al-gún momento existe excitación en cualquiera de Uds. acep-tarlo como algo natural y trascenderlo, pues no se trata de un encuentro sexual. Hacer lo mismo en la postura boca arriba, integrando todo el cuerpo. A continuación elige el órgano que necesita más energía, siéntate en postura meditativa, trabaja a partir de ahora sólo con la mano más fuerte, la otra, dé-jala abierta sobre la pierna tuya, recibiendo energía cósmica

de manera permanente, energía que va saliendo por tu otra mano luego de atravesar por todo tu cuerpo; visualiza como esa luz que sale de tu mano ingresa al cuerpo y en especial al órgano elegido que comienza a llenarse de luz. Esta aplicación puedes realizarla manteniendo la mano a unos centímetros por encima del cuerpo o también en forma de caricia directa, lo importante es que toda tu consciencia esté centrada en lo que estás haciendo. Minutos después y con mucha delicadeza, acuéstate encima tu compañero (si el peso de uno u otro no lo imposibilita; de no ser posible se puede trabajar acostados uno al lado del otro), como si le cubrieras con todo tu cuerpo, visualizando una esfera de luz que los purifica, sana y une; obsérvate ní-tidamente junto a él, dentro de la envoltura luminosa expre-sada en forma de un abrazo profundo y prolongado. Minutos después al concluir la misma, se invierten los papeles pa-sando él a la parte activa y tú acostándote en su lugar para recibir el procedimiento idéntico. Al terminar se guardo todo, apaga el fuego y agradece.

MANEJO ENERGÉTICO DE TEMORES Puedes trabajar en casa, sin olvidar que todo trabajo en ple-na naturaleza, más aún en centros energéticos y auténticos templos, adquiere una considerable dinamización. Abre tu círculo e ingresa a él, sitúate en dirección Norte, lleva tus manos al corazón y comienza a extender tus brazos hacia de-lante, como si empujaras límites y simultáneamente sacaras de ti, energías innecesarias; al regresar toma energía de la montaña, del mar o el bosque, mediante las manos y alma-cénalas en el corazón, repite la operación por lo menos cua-tro veces y retoma la práctica siempre que sea necesario. Cada vez que extiendas tus brazos, concéntrate en extirpar de ti temores y todo aquello que quieres eliminar, visualí-zalos como fragmentos de nubes oscuras que son arran-

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cadas de ti con facilidad y echadas fuera; al retornar con-céntrate siempre en la absorción energética que te permita simultáneamente energizarte y tonificarte intensamente, incrementando la confianza en ti, el valor para afrontar lo necesario y la fortaleza que te permita estar cada vez me-jor. De tu bienestar depende tu fuerza. Después de unos momentos con esta actividad, siéntate en postura meditativa mirando al naciente, respira consciente-mente, visualiza un hilo de luz azulada desciende desde lo alto y te baña completamente, proveyéndote energía comple-mentaria; obsérvate llena de luz, totalmente, sin que ningún espacio tuyo quede pendiente, sin lugar alguno para ningún temor, aspira profundamente cuatro veces antes de terminar y agradeciendo a los guardianes correspondientes, abandona el círculo, ciérralo y guarda cualquier objeto que hayas utilizado. Si en el futuro vuelve a afectarte algún temor, repite el trabajo ritual; si te encuentras fuera de casa y sientes necesario este apoyo, con sólo visualizar el color azulado cubriéndote todo el cuerpo como si estuvieras bajo una cascada, notarás tran-quilidad y asistencia energética. Los temores en realidad se presentan con frecuencia en todos, empero es nuestra men-te cuando se asusta, que los alimenta y hace crecer, por ello cuando se presenten, acéptalos, mas no les otorgues muchas importancia y fundamentalmente sigue delante, gradualmen-te ellos se irán debilitando hasta desaparecer. El trabajo aquí explicado, dinamizará la energía en esta perspectiva; recuerda que la vida comienza, cuando terminan los temores. Vamos, adelante, no hay nada que perder y toda la vida esperándo-nos, comienza a disfrutar ya, que el paraíso está reservado para quienes, fueron felices en la tierra. ¿Lo recuerdas?

POBLANDO LA SOLEDAD Vivir sola en el fondo es un privilegio cuando nuestra so-ledad es parte de un plan de vida y de una estrategia de crecimiento permanente. Si por razones de fuerza mayor te-

nemos que estar solas, es supremamente importante darle un contenido a esta etapa de nuestra vida, la soledad tam-bién puede ser un privilegio, una maravillosa oportunidad de estar contigo misma, de conocerte en profundidad y en las distintas facetas que supone la vida. Quizá sea bueno definir si la soledad en nuestro caso es transitoria y un es-tado en el cual queremos vivir indefinidamente, sin que ello excluya la posibilidad de eventuales variaciones.

Si te sientes sola y ello no te resulta placentero, lo primero que debes hacer es comenzar a llenar de vida tu casa. No nos referimos exactamente a poblarlo e animales y plan-tas, aunque ello también es, muchas veces recomendable, sino y fundamentalmente a darle vida a todo lo que existe, mesas, ventanas, cortinas, cuadros, espejo, cama, grifo, ropa, manteniendo con todos ellos, excelentes relaciones de amistad que pueden en muchos casos incluir la palabra y el contacto. Antiguamente se hablaba con la tierra y las piedras, con las estrellas y los árboles, es recomendable retomar esas amistades y sentir que todo está vivo, enton-ces, aunque no haya otra persona en casa podrás sentirte acompañada y llena de vida por todas partes.

Cuando te sientas sola, estando en casa, vístete con tu ropa especial, abre un círculo imaginario con la mano, un círculo amplio, elige la música de tu mayor agrado, algo con ritmo y comienza a dejarte llevar por la música. Antes de ello será recomendable una ducha breve y fría.

No se trata de escuchar la música sino de sentirla, de sa-borearla, de dejarte llevar por ella, como si fuera un caballo blanco que comienza a galopar contigo a cuestas y tu empie-zas a sentir el placer de la libertad, en forma de movimientos libres que pueden incluir caricias, gemidos, palabras, canto y todo el movimiento que tu cuerpo sea capaz de exteriorizar en esa circunstancia, no hay reglas, no hay tiempo, todo es posible, el único límite lo pones tú misma; es que la libertad es tan infinitamente placentera, que cuando comenzamos a

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que nuestra energía baja o después de haber tenido proble-mas fuertes, medita unos minutos mirando al Oeste, mue-ve tus manos como quitándote energías adicionales adheri-das a ti, luego ingresa a la ducha tal como indicamos antes, al salir cámbiate totalmente de ropa y siéntate en postura meditativa mirando al naciente, mientras un incienso, pre-parado para ese fin, complementa la purificación. Otra variante para realizar con el parque o jardín, con-siste en salir al contacto con la Naturaleza, caminar un momento meditativamente en medio de ella, encontrar un lugar especial para la limpieza energética, puede ser un árbol o una roca, pedir permiso a sus guardianes, ex-plicarles mentalmente como si fueran terapeutas a los que recurrimos, colocar las manos sobre la superficie de ellos, formando con los dedos la pirámide antes expli-cada y transferir toda la energía superflua hacia fuera, para ser reciclada. Es útil acompañar con visualización. Al terminar abraza brevemente al ser vivo con el que tra-bajaste y despídete de él. Siempre que te encuentres en una situación conflictiva, vi-sualiza una esfera de luz blanca que te envuelve y protege, es tu útero mágico, simultáneamente garantiza tu nivel vi-bratorio, manteniéndote en paz y amor, desde esa energía, será muy fácil, la resolución de cualquier problema.

RITUAL PERSONAL (CUMPLEAÑOS) El momento en que ingresamos a este plano, independizán-donos de la madre, es muy importante, la influencia telúrica y cósmica que ocurre en este significativo instante, imprime caracteres que influirán durante toda la vida, sin que ello signifique que no podamos trabajar y trascenderlos los que consideremos susceptibles de ello. El cumpleaños, en este sentido, se constituye en una puer-ta dimensional de especial significado. Cuando llegue ese

descubrirla en nuestros primeros vuelos, nos hacemos asi-duos visitantes de ella; vuela sin pausa, vuela y sobre vuela toda situación preocupante y alcanza la cima de éxtasis, no necesitas tomar nada, es la música y tu movimiento en liber-tad las que tienen un efecto alucinógeno, es tu valor y las ganas de convertir ese momento en espacio de libertad y placer, eleva la intensidad de la música, danza más fervien-temente, todo el Universo danza contigo, millones de estre-llas van poblando tu vida, que vuelve a tornarse multicolor. Al terminar permanece un momento en silencio meditativo acostada dentro el círculo, con la cabeza al naciente y con-cluye agradeciendo el regalo de la vida.

RITUAL DE PURIFICACIÓN La razón de tener animales y plantas en casa, responde a la función purificadora y protectora que cumplen, empe-ro resulta fundamental que ellos se encuentren en buenas condiciones de salud y bienestar. Esta práctica esta especialmente recomendada para las mu-jeres que viven en las ciudades grandes o para quienes tra-bajan con muchas personas conflictivas. Hora recomendada para la práctica, en torno a la puesta del Sol. Comienza toman-do una ducha fría muy breve (máximo un minuto, comenzando siempre por los pies) convocando a lo que vive en el agua, visualizando luz emanando de la misma, con efectos purifica-dores. A continuación dirígete al jardín o parque, quítate los zapatos y permanece de pie mirando el Oeste, visualizando como te descargas de toda energía externa, anexa, visualiza que esa energía sale por los pies pasando a la tierra totalmen-te. Al concluir agradece a la Madre tierra y a los guardianes del Oeste. La duración aproximada será de cinco a diez minutos.Este último trabajo está especialmente adaptado para ser realizado por cualquier persona y cualquier lugar. Otra va-riación del mismo puede ser la de realizar el trabajo sola-mente con la ducha, cuando se carece de tiempo para ir a buscar un parque y no tenemos jardín, cuando sentimos

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momento, prepáralo con cuatro días de antelación, e ingre-sa desde el cuarto día previo a una rigurosa evaluación que abarque hasta el cumpleaños anterior. Identifica en este tiempo cómo manejaste tu energía, prioridades que te guia-ron, valores y principios que rigieron tu accionar, cómo estu-vo tu voluntad, si fuiste capaz de identificar oportunidades y aprovecharlas inteligentemente, si actuaste con lucidez, si creciste y hoy eres mejor que hace un año. El día previo al cumpleaños, realiza todo el acopio de la eva-luación efectuada y a la puesta del sol; dirígete al jardín o parque, abre un círculo, con carácter previo escribe en un pe-queño papel los errores o puntos que quieres cambiar, me-dita mirando al Oeste, concéntrate en lo que quieres trans-formar, convoca a los guardianes del poniente y entierra en dentro del círculo lo anotado para cambiar. Cambia y medita hacia el naciente, concéntrate en lo que quieres potenciar este nuevo ciclo anual que se abre, entierra lo anotado posi-tivo que posees y lo que quisieras tener en el nuevo círculo que se abre, despídete de los guardianes y cierra el círculo. Esa noche realiza un baño purificador y al acostarte no dejes nada pendiente. Llegado el día, desde el momento que abres los ojos, siéntelo como una nueva vida, dedícalo a celebrarlo y desde ese día, aplica rigurosamente la vibración que elegis-te para tu nueva etapa, recuerda una nueva etapa significa una nueva persona. Solo manejado con este criterio, puede el cumpleaños fes-tejarse, de lo contrario sería una alegría sintética y descon-textualizada. FELIZ NUEVA VIDA.

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CONCLUSIÓN

Todo trabajo energético de características rituales, reali-nea los flujos energéticos y nos sincroniza posibilitándo-

nos equilibrios cualitativamente superiores. Para que ello sea posible debemos tomar en cuenta todas las enseñan-zas aquí impartidas, garantizando en lo fundamental la pu-reza energética, el contenido amoroso y el enfoque adecua-damente direccionado para poder alcanzar más temprano que tarde los objetivos planteados, sin olvidar que estos, deberán ser invariablemente positivos. Si todo este trabajo no es aislado y está inmerso en un sen-dero de autorealización, podemos caminar tranquilas por la vida, pues nuestra existetncia no será en vano ni habremos desperdiciado esta encarnación, es decir Fiesta en el Uni-verso dándote la Bienvenida. ¡BUENA SUERTE!

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GLOSARIO PACHAMAMA: En sentido estricto MADRE TIERRA, empe-ro para el indígena de los Andes, es algo vivo, invisible y totalmente real en la otra realidad, que coexiste con esta. Fuente básica de energía.MAMAKILLA: Sonido indígena quechua con que se deno-mina a la Luna; categoría energética viviente en otro plano, profundamente vinculada a la mujer.

MAMAKHOCHA: Originalmente se denominaba con esta palabra al lago Titikaka, donde se originó el Incario. En sen-tido amplio y profundo se refiere al mar, arquetipo femenino fundamental para el trabajo energético de la mujer.

MAMAOCLLO: Dice la tradición que fue la primera mujer del Incario, la mujer que enseñó a las mujeres el manejo de la energía femenina y todo lo que debe saber una mujer. Actualmente se la conoce como la chamana interior, repre-sentación interna de la diosa.

CHEJPACHA: Palabra quechua que significa orden cósmico.

BRUJA: En nuestra concepción y en el sentido de las pre-sentes enseñanzas, equivale a Mujer de Sabiduría, capaz de realizar un manejo energético, siempre con fines positivos.

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QUECHUA: Nombre con el que se denomina al idioma y la cultura indígena, aún viviente en Sudamérica (Bolivia, Perú, parte de Ecuador y Argentina).

CHAMALÚ: Autor de las presentes enseñanzas. Nieto de indígenas quechuas, poeta y educador espiritual. Autor de 24 libros y miles de Conferencias y Seminarios en todo el mundo. Creador y Director de la Escuela Comunitaria JANA-JPACHA, situada en Cochabamba- Bolivia.

JANAJPACHA: Palabra sagrada que significa realidad supe-rior, equivalente a paraíso.

CHAMÁN-CHAMANA: Hombre o Mujer de Sabiduría. Guar-dián del conocimiento ancestral. Educador, artista y guía.

TAWANTINSUYU: Nombre original con que se conocía la ci-vilización Incaica. El nombre significa el pueblo de las cua-tro direcciones o regiones.

CHAMANISMO: Conocimiento ancestral. Primera filosofía del hombre en la antigüedad, cuando comienza a pregun-tarse por el sentido de la vida.

INTIRAYMI: La más importante fiesta Incaica, celebrada en el solsticio de Invierno (Junio) celebrando el retorno de la luz.

LUNA PERSONAL: Con esta frase nos referimos al ciclo menstrual de la mujer. Es importante no confundirla con el ciclo de la Luna (Mamakilla), con el cual no siempre discurre de forma paralela.

DATOS DEL AUTORChamalú

De niño fue desahuciado por lo médicos de su país: Bolivia, pero su Abuela indígena quechua, con un ritual terapéutico le devolvió la vida. Creció en un

bosque que actualmente ya no existe. En su adolescencia veía y escuchaba cosas que nadie le podía explicar, sus pa-dres asustados le llevaron al psiquiatra, le dieron algunos fármacos, al poco tiempo dejó todo y comenzó a refugiarse en la naturaleza.

A veces escuchaba que una piedra o un árbol le hablaban. Sintió especial atracción por la montaña, un día la escuchó respirar, comprendió que estaba viva.

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Creció escuchando los cuentos de su Abuela quechua. Cuando ella partió, buscó Abuelos para pedirles enseñan-za. Sentarse a sus pies, esa fue su primera universidad. De esa manera rcopilando conocimientos ancestrales, viajó por Bolivia, por Sudamérica y luego por todo el continente.

Un día, viajando por Europa en busca de mas conocimiento, le pidieron que comenzara a enseñar, entonces recordó lo que el primer anciano indígena le había pedido y comenzó a compartir conocimiento. Sus conferencias comenzaron a llenarse de público, su primer libro editado en Barcelona España, se agotó en dos semanas.

A mitad del año 2012 publicó su libro número cincuenta, varios de ellos fueron traducidos a otros idiomas.

Actualmente ha dictado mas de nueve mil conferencias y seminarios en más de mil ciudades de los cinco continen-tes. Fundó la Komunidad Janajpacha en 1990 con sus pro-pios recursos y posteriormente, construida y equipada, en acto de coherencia y desapego, la donó a la Komunidad misma. Al presente vive impartiendo enseñanza en todo el mundo, sin embargo, Chamalú no a formado ningún grupo espiritual ni tiene seguidores. Invita a la gente a vivir en feli-cidad, amor y libertad y es un riguroso crítico del actual es-tilo de vida consumista, postura que le ha generado varias acusaciones y difamaciones, pero él continúa impartiendo su mensaje poético y llevándolo, allí donde es invitado.

Es creador del metodo IVESHAMA metodologia de creci-miento personal de inspiración Chamánica que se imparte en diferentes paises.

Para conocer mas sobre Chamalú Visita: www.chamalu.com

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