Colóny la

Joven América

Estatua de lescultor Vicente Vela .

donada, a la República d eColombia por la Emperatriz de lo s

franceses Eugenia de Guzmán, que en l aactualidad adorna el paseo del

Centenario de la ciudad d eColón, en la Repúblic a

de Panamá .

•

•,2 1eOCTUBRE DE 1944 -

BENEFICENCIAJUAN ANTONIO SUSTO

A Ud. le interesa saber:

Que con la gran demanda de billetes es con -®

veniente que no espere el sábado para la.compra de sus billetes, porque corre elpeligro de no encontrar su número.

Que es conveniente, siempre que Ud. compre

2®

billetes, tomar nota del número de los fo-

lios correspondientes, pues si se le extra -vía, Ud. no puede presentar denuncios ,etc., sin este importante detalle .

Que es conveniente, coleccionar esta revista ,pues se seguirán publicando vistas histó-ricas del Panamá de hace 50 años y de lPanamá de nuestros días .3

0

~ QG30G]ORGANO DE LA LOTERIA NACIONAL DE BENEFICENCI A

DIRECTOR . JOSE GUILLERMO BATALLA REDACTOR ' JEFE : JUAN ANTONIO SUST O

SUMARIO

Portada : Colón y la Joven América, estatua de Vicente Vela, que adorna el paseo de l

Centenario de la ciudad de Colón .

Páginas

Gerencia y junta Directiva de la Lotería Nacional 2

Nota Editorial :

El

12 de

Octubre de

1492 3

Números favorecidos por la suerte de Enero a Septiembre de 1944 4

Presidentes

de

Panamá

(Don Pedro

Antonio

Díaz) 5

Gabinetes de la República, por E. J . Castillero y j . A . Susto 7

Concepción, vida y pasión de la estatua de Colón, por Juan Antonio Susto 8

Dr. Justo Arosemena, por Eduardo Chiari 1 1

Leyenda chiricana : FULVIA '

por 'María Luisa Eysserich ." 1 4

AYER y HOY 16-1 71 8Promesa Cristiana, por Alejandro Dutary (Romeo)

La Lotería Jugará los tres golpes todos los domingos a partir del 3 de Dic . de 1944 1 9

El Maíz, por Rosa Raquel Rías 1 9

Página Poética :Romance de Octubre, por Gema Endara Peñaherrera 2 1

Huérfano, por Adolfo García 2 1

El Curandero, por julio Arjona Q 22

Bibliografía Panameña de 1944 (De Enero a Agosto) 2 4

Avisos :Caja de Seguro Social 29

Banco Nacional de Panamá 3 0

Compañía Panameña de Fuerza y Luz 3 1

Lotería Nacional de

Beneficencia 32

A usted le interesa saber (21 página de la portada )Editora La Estrella de Panamá (3 s página de la portada )

Plan del sorteo ordinario de la Lotería (última página de la portada)

Septiembre

NQ 4 1

1944

GERENTE :

Pedro Vidal Cedeño .

SUB-GERENTERolando de la Guardia

TESORERO :

Carlos M. Arango

SECRETARIO :

José A. SierraLA JUNTA DIRECTIVA DE

LA LOTERIA NACIONALDE BENEFICENCIA

Presidente :

Juan A. GalindoMINISTRO DE SALUBRIDAD Y OBRAS PUBLICA S

Vice Presidente :

Carmen E. de de la GuardiaPRESIDENTA DE LA CRUZ ROJA NACIONA L

Secretario :

José Antonio Sierra

DIRECTORES

Juan Antonio Guizad oCOMANDANTE DEL CUERPO DE BOMBEROS

Padre: Domingo Soldatt iDIRECTOR DEL HOSPICIO D E HUERFANOS

Roberto ChiariPRESIDENTE DE LA CAMARA DE COMERCI O

Eduardo de Alb aGERENTE DEL BANCO NACIONAL

Ing. Manuel F . ZárateSUPERINTENDENTE DEL HOSPITAL SANTO TOMAS

CIUDAD DE PANAMA ,

REPUBLICA BE PANAM A

N O 41 - OCTUBRE DE 194 4

Nota Editorial

EL 12 DE OCTUBRE DE 1492

Día de fiesta para los pueblos americanos debe ser este del 12 d eOctubre, que agrega en el calendario del tiempo un año mas a la fecha me-

morable en que un visionario ilustre a quien llegaron a calificar de loco,descubrió estos inmensos territorios que cuatro y medio siglos má

s tarde habrían de ser vasto campo de conquistas valiosas para los zapado -res de la civilización y un justificado motivo de orgullo para las nacione sdel orbe .

Ningún acontecimiento en América debería celebrarse con mayor al-borozo y más brillantez que el del 12 de Octubre de 1492, que marcó épocaen la historia del mundo y que, a la vez que abría para los nobles y lu-chadores hijos de nuestra Madre Patria y de otros países de la Vieja

Europa,un periodo de grandes hazañas y de fabuloso auge económico, serví ade levadura para la formación de una de las colectividades más brio-sas, más interesantes y más prometedoras de cuantas constituyen hoy díala inmensa familia humana .

Y ninguna ocasión más propicia que la que nos brinda esta magn afecha, para renovarle los sentimientos de nuestra gratitud y de nuestra ad-miración a la gallarda nación española, que vino a darnos, en una ofren-da inapreciable de ricos dones, su sangre y su idioma, su religión y s ucultura, mediante el proceso civilizador de mayor resonancia y de más po-sitivos beneficios que registra la historia universal .

"Lotería" anota con la mas honda complacencia este suceso portentoso

cuyo aniversario conmemoramos hoy y que con inusitado júbilo celebra la

América entera, y hace votos sinceros por que vuelvan los días de triunfopara esa amada Madre España que, bien en las horas aciagas del infortu-nio, ora en los momentos de bonanza y poderío, fue, es y seguira siend oalmácigo de nobleza, fragua del heroísmo, venero fecundo de glorias

auténticas, cuna de la hidalguía y ejemplo constante y extraordinari o

de generosidad.G. B.

LA LOTERIA PAGINA 3 9

Números Favorecidos por la Suerte

de Enero a Septiembre de 1944

Fecha Sorteo Primero Segundo Tercero

ENERO 2 1293 7921 2011 723 8" 9 1294 5700 1459 883 6" 16 1295 3696 0725 256 7" 23 1296 8318 6141 6462" 30 1297 8287 7446 533 7

FEBRERO 6 1298 4457 6780 9643" 13 1299 0099 6592 . 5268" 20 1300 0927 4392 8428" 27 1301 1922 0995 7150

MARZO 5 1302 4337 7834 1743" 12 1303 7195 9500 4452" 19 1304 5531 5803 5541

26 1305 5623 3815 140 1

ABRIL 2 1306 8990 6335 309 1" 9 1307 0400 7999 2099" 16

(Ext.) 1308 7416 1474 1347" 23 1309 7420 0083 6925

30 1310 5535 9867 4892

MAYO 7 1311 0395 0586 3105" 14 1312 1282 2605 9875

21 1313 0414 9456 629 1" 28 1314 3041 6795 047 7

JUNIO 4 1315 2290 8956 711 6" 11 1316 3044 7427 745 4" 18 1317 9431 1654 543 6rr 25 1318 1829 3576 896 0

JULIO 2 1319 4055 8108 0542" 9

(Ext .) 1320 2060 9119 827 4" 16 1321 0007 0634 186 7" 23 1322 1003 3217 7474" 30 1323 . 7174 1021 164 5

AGOSTO 6 13244 2934 5586 7854" 13 1325 4884 9468 2485

20 1326 0923 2573 435 5" 27 1327 9750 6469 047 4

SEPT. 3 1328 4920 9574 7702» 10 1 1329 1983 2023 2287" 17 1330 0757 3947 5906" 24 3131 0302 9280 0456

PRESIDENTES DE PANAMA

Don PEDRO ANTONIO DIAZSegundo Designado :

I Q Octubre 1918 — 11 Octubre 1918 .

El 1ª de Octubre de 1918 el General Igna-cio Quinzada, Presidente de la Asamblea Na-

cional dio posesión al señor don Pedro An-tonio Díaz del Poder Ejecutivo, en su carác-ter de Segundo Designado, por ausencia de l

país del Primer Designado Dr . Belisario Po-rras. El Gral . Quinzada dijo con tal motivo unbello discurso, del cual tomamos los párrafos

siguientes : "Os confieso, señor, que jamás ,en mi modesta vida de ciudadano, llegué a

concebir el engrandecimiento de mi humilde

persona al dirigiros la palabra en estos mo-mentos tan excepcionalmente gratos para mí .

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .No necesito, porque me parece obvio, des¡-

ros lo que todos esperamos de vuestras ener-gías, de vuestra integridad y de vuestra ex-

periencia . Vuestra vida, tan apacible y prác-tica por su misma sencillez, consagrada des -de vuestros tempranos años al servicio denuestro país y a la causa de vuestra escuelapolítica, es un espejo purísimo que reprodu-ce a través de su tersa e inmutable superfi-cie lo inmaculado de vuestra conciencia y lahonradez jamás puesta en duda de vuestro sactos públicos y privados. Tan preciadas eje-cutorias son, señor, la más amplia garantí aque vuestros gobernados tienen recibida co nanterioridad a las promesas que os fuera da-ble ratificarnos en esta solemne ocasión .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

No creo aventurada la opinión de exponercon ingenua franqueza ante el ilustrado au-ditorio que benévolamente me escucha cuan-

LA LOTERIA

PAGINA 5 4

do afirmo que vuestro advenimiento al silló nde vuestros predecesores —cualquiera que se a

la duración de vuestro período administrati-vo— tras de las tempestades que ensombre-

cieron el cielo patrio y afectaron hondamentenuestra tranquilidad nacional, surge como labenigna aparición de una aurora de paz yde reconciliación social; porque vuestro nom-bre es un símbolo y porque vos, apóstol dela Democracia y ministro de la Justicia, sa-bréis defenderlas con la fe de los convenci-dos como lo hizo brillantemente vuestro ilus-tre antecesor, el Excelentísimo Doctor Don Ci-ro L. Urriola "

Con motivo de la muerte de don Pedro An-tonio Díaz, ocurrida en esta ciudad el 8 deMayo de 1919, el decano del periodismo pa-nameño, "La Estrella de Panamá", publicó a lsiguiente día estos datos biográficos :

"Era don Pedro A . Díaz persona que por susmuchos merecimientos se había granjeado e laprecio de todos sus conciudadanos. En laépoca de nuestro movimiento separatista n otemió poner sus bienes y seguridad persona lde él y de su familia al servicio de la cau-sa; en su casa fue donde tuvieron lugar lasreuniones de los Jefes principales del movi-miento de emancipación .

La campaña eleccionaria de 1912 sacó aeste meritorio ciudadano de sus quehacerescomerciales para enrolarlo en la complicadared de la política. Un grupo de sus amigo sle escogió como candidato a la Presidenci ade la República, estableciéndose entonces lalucha entre el grupo que lo sostenía a él yel que seguía al actual mandatario doctor Porras. Cual otro Cincinato, regresó don Pedr ode nuevo a sus quehaceres, retirada la lu-cha electoral, manteniéndose separado de lapolítica hasta que el Gobierno del malogra-do doctor Valdés, lo llamó a ocupar e

l puesto de Gobernador de la Provincia de Panamá .En este delicado cargo demostró, sus excelen-tes cualidades de gobernante, siendo una d esus principales atenciones el evitar la propa-gación del vicio y la corrupción .

Ultimamente la Asamblea le eligió SegundoDesignado para ejercer el Poder Ejecuti-

vo y con tal carácter estuvo al frente de l aPresidencia de la República, los primero

s once días del mes de Octubre del año pasadohasta tanto se posesionó de dicho cargo e ldoctor Porras .

Posteriormente fue nombrado Secretario d eEstado en el Despacho de Fomento y Obras

Públicas, cargo que desempeñaba al morir.Casado con Querima Gutiérrez de Díaz, supoformar un hogar donde siempre resplandecie-

ron la honradez y la virtud, al calor de lascuales levantó numerosa familia, modelo en-tre la alta sociedad capitalina .

Fallece don Pedro a la edad de sesenta yseis años después de haber llevado una vi-da pletórica de las condiciones del patriotamodelo de costumbres austeras y de tradicio-nal honradez política y personal " .

+ rt

La oración fúnebre le correspondió pronun-

ciarla en el cementerio Herrera al doctor Ri-cardo 1. Alfaro, Secretario de Gobierno y Jus-ticia, quien a nombre del Gobierno Nacional ,dijo entre otras cosas lo siguiente :

"Cuando al posarse, ayer sobre la tierra la ssombras de la noche el espíritu inmortal dePedro Antonio Díaz se despojó de sus vesti-duras terrenales para remontarse al Etéreo ,uno como hálito de desolación se difundió po rlos ámbitos de la ciudad augustiada; y cua

ndo el hilo del telégrafo diseminó por todo e lpaís la luctuosa nueva, la República se es-tremeció de canto a canto, al realizar, con do-lor indefinible, que había perdido a un hij opreciado entre los más preciados .

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

"Fuerte como la roca fue su carácter ; pu-ra como el agua su hombría de bien . PedroAntonio Díaz tuvo una personalidad moral d ediamante : rectitud, inflexibilidad y transparen -cia fueron sus rasgos característicos. No tran-sitó jamás por veredas sinuosas, porque cuan -do se trataba de una acción buena, él se en -caminaba hacia ella por el camino más cor-to, que es el de la línea recta, y una vez co-locado en ese camino no había temores ni se-ducciones que le hicieran flaquear . No tuvojamás veleidades de esas en que naufraganla reputación y la fe pública de los hombre sy supo siempre mantenerse inflexible en la lu-cha perenne que en este mundo pone a l avirtud frente al desinterés, al egoísmo frenteal altruismo"

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

"Porque Pedro Antonio Díaz era para mí n osólo el colega de Gabinete que tanto respet oinfundía en los consejos de gobierno, sin otambién un amigo afectísimo con quien m eunían vínculos de hondo cariño al calor d ela admiración que siempre tuve por sus mag-níficas dotes de ciudadano . Un pensador h adicho que ninguna tumba debe cerrarse si nque alguien deje caer sobre ella una palabr a

9 PAGINA 6

LA LOTERIA

que la cierre junto con la fosa funeraria . Yohe venido a decir esa palabra que para lajuventud debe significar imitación, para la Pa-

tria dolor, para la familia resignación, paramis conciudadanos pena profundísima y pa-

ra el amigo querido, para el repúblico aus-

tero, para el espíritu nobilísimo que la Muer-te nos ha arrebatado y que ya está contem-plando de hito en hito los misterios de l

a eternidad!!! odios! " .

Por, E. J . CASTILLERO Y JUAN ANTONIO SUST O

XXII I

ING . FLORENCIO H . AROSEMEN A

Electo séptimo Presidente Constitucional ,

asumió el Poder el l e de Octubre de 192 8

y se sostuvo en él hasta el 2 de enero d e

1931 en que la revolución dirigida po r

la Sociedad "Acción Comunal" lo depuso .

Su primer Gabinete estuvo organizad o así:Dr . Adriano Robles, Gobierno y Justicia ; Dr .

J . Demóstenes Arosemena, Relaciones Exterio-res; Don Tomás G. Duque, Hacienda y Teso-ro ; Lic . Jeptha B. Duncan, Instrucción Pública ,e Ing. Luis F. Clément, Agricultura y Obra sPúblicas .

El 27 de julio de 1929, tanto el Subsecreta-rio de Hacienda y Tesoro, señor Don Julio Qui-jano, como el de Relaciones Exteriores, Dr .Ricardo A. Morales, se encargaron transito-riamente de las respectivas Secretarías .

,

El 5 de Agosto de 1929 renunció el .Sr . Duque,para ausentarse del país, la Secretaría

de Hacienda y Tesoro y fué nombrado en lamisma fecha en su lugar el señor Don Ma-nuel de J . Quijano, pero al regresar el SeñorDuque, el Presidente le nombró de nuevo e l12 del mismo mes. Ocupó su antigua posi-ción de Secretario de Hacienda y Tesoro des -de el dia 16 .

El 17 de marzo de 1930. volvió el Subsecre-tario de Hacienda y Tesoro, señor Don JulioQuijano, a encargarse interinamente del Des-pacho .

El 9 de septiembre de 1930, por desacuer-dos surgidos entre la Asamblea Nacional y e lGobierno, se produjo una crisis total del Ga-binete y el Presidente nombró parcialmentenuevo personal para las Secretarias de Esta-do. Los nombrados fueron :

Dr. Daniel Ballén, Gobierno y Justicia; DonNicolás Victoria J ., Hacienda y Tesoro, y Dr .Carlos Icaza A., Agricultura y Obras Públicas .

Las carteras de Relaciones Exteriores eInstrucción Pública quedaron temporalmenteservidas por los Subsecretarios Dr . Ricardo A.Morales y señor Don Manuel E . Melo, respec-tivamente. El primero estuvo al frente del Des-pacho por todo el resto de la Administració ny el segundo hasta el 27 de septiembre cuan -

do se encargó el Dr. O . Méndez P ., nombra-do en propiedad el 25 del mismo mes .

Por algún tiempo, a partir del 27 de octu-bre, le fue adscrita la Cartera de Gobierno yJusticia al Dr . Carlos Icaza A., Secretario deAgricultura y Obras Públicas, pero el 17 dediciembre fue encargado del mismo despachoel Subsecretario del Ramo, señor Don Ramó nMorales .

El 2 de enero de 1931, cuando se comprobó el triunfo definitivo de la revolució

n promovida por la Sociedad"Acción Comunal", e lPresidente Arosemena, después de aceptad ala renuncia del Secretario de Gobierno

y Justicia, Dr. Daniel Ballén, nombró para el carg oal Dr. Harmodio Arias, Jefe de los revolucio-narios .

XXIV

DR . HARMODIO ARIAS

Nombrado Secretario de Gobierno y

Justicia y vacante el puesto de Presiden-

te de la República por la renuncia de l

titular, la ausencia del Primer Designad o

y la abstención de los otros dos Desig-

nados, el Gabinete en virtud del articul o

81 de la Constitución Nacional, encarg ó

del Poder Ejecutivo al Dr . Arias : (1 )

quien estuvo en el puesto hasta el 1 5

del mismo enero .

El Dr. Arias aceptó la renuncia que de su selevados cargos le presentaron sus colegas ynombró el mismo día 2 los siguientes Secre-tarlos :

Don Francisco Arias Paredes, Relaciones Ex-teriores; Don Enrique A. Jiménez, Hacienda yTesoro; Lic. José M. Quirós y Q., InstrucciónPública, y Dr. Ramón E. Mora, Agricultura yObras Públicas .

El Dr. J. J . Vallarino fue nombrado Subse-cretario de Gobierno y Justicia y encargad odel Despacho .

(l) Dice el articulo 81 de la Constitución Nacional : "Cuan-do por cualquier motivo las faltas del Presidente no pu -dieren ser llenadas por los Designados, ejercerá la Presi-dencia el secretario de Estado que por mayoría de votosdesigne el Consejo de Gabinete .

LA LOTERIA

PAGINA 7 •

XX V

DR. RICARDO J . ALFARO

So encargó del poder el 16 de enerode 1931 como Primer Designado y ter.minó el período presidencial que cons.titucionalmente le correspondía al inge.niero Florencio H. Arosemena, esto es,hasta el 30 de septiembre de 1932 .

No fue hasta cuatro días después de habe rtomado posesión, o sea el 20 de enero de1931, cuando el Dr. Alfaro designó sus Secre-tarios, los cuales fueron :

Don Francisco Arias P ., Gobierno y Justicia ;Dr. J . J . Vallarino, Relaciones Exteriores ; DonEnrique A. Jiménez, Hacienda y Tesoro ; Lic .José M. Quirós y Q., Instrucción Pública, y Dr .Ramón E. Mora, Agricultura y Obras Públicas .

El 5 de octubre del mismo año hubo crisisen el gobierno provocada por la fuerte opo-sición que halló en algunos miembros del Ga-binete partidarios de una candidatura genui-namente extractada de la Sociedad "AcciónComunal la aspiración del Secretario de Go-bierno y Justicia, señor Don Francisco AriasParedes, a ser lanzado candidato a la Presi-dencia de la República .

El Presidente, Dr . Alfaro, simpatizador de lseñor Arias Paredes aceptó el día 7 las re-

nuncias y cambió totalmente a sus secreta-rios, dándoles los cargos a los siguientes ca-balleros :

Lic . Jeptha B . Duncan, Instrucción Públic a(posesionado el 9 de octubre) .

Dr . Dámaso A. Cervera, Agricultura y ObrasPúblicas (posesionado el 10) .

Dr. Darío Vallarino, Hacienda y Tesoro (po-sesionado el 10) .

Don Guillermo Andreve, Gobierno y Justi-cia (posesionado el 23) .

Don Enrique Geenzier, Relaciones Exteriores(posesionado el 26) .

El 30 de noviembre del mismo año renun-ció el Sr. Andreve su alto cargo con objetode estar hábil para una posible postulaciónpresidencial, como tercero en discordia . ElPresidente aceptó la renuncia y el mismo díaadscribió las funciones de la Secretaría deGobierno y justicia al Dr . Cervera, Secretariode Agricultura y Obras Públicas . Pero la se-paración del Sr. Andreve fue sólo de cincodías porque el 5 de diciembre fue vuelto anombrar y se encargó inmediatamente de lDespacho .

El 28 de septiembre de 1932, por nueva re-nuncia del Sr. Andreve se encargó de la mis-ma Secretaría, por los días que faltaban parael cambio de administración, el Subsecretario ,Señor Don Roberto R. Royo .

Concepción Vida y Pasió n

de la ]Estatua de ColonPor JUAN ANTONIO SUSTO

Nació en la mente de la españolísima Em-peratriz Eugenia, esposa de Napoleón III, laidea de una estatua que perpetuase la me-moria del Almirante Cristóbal Colón .

Eugenia de Guzmán, esa mujer toda pres-tancia, que coronada o no, hubiese sido siem-pre Reina y Emperatriz, conservaba su eter-na gratitud para con Italia, país del cual h abía recibido valiosos donativos enviados po rlas damas de Milán, a raíz de las expedicio-nes francesas .

Y fue el escultor Vicente Vela, que por en-tonces (1864) se encontraba dedicado a l aenseñanza de su arte en la Academia Alber-tina, de Turín, quien modeló en yeso una es-tatua del Descubridor con la joven América ,la cual enviada a París, agradó en sumo gra-do a la Emperatriz y le impartió su aproba-ción al proyecto . El artista comenzó su traba-jo y pocos meses después envió el soberbio

grupo, que figuró con las más grandes de su sobras maestras, en la Exposición Universal d eParís (1867) .

La idea primordial de la Emperatriz Euge-nia fue la de enviar la estatua de Colón, unavez que le fuese entregada por Vela, a la ciu-dad de Veracruz, en México; intento que sevio frustrado debido al fracaso de la arries-gada empresa de Francia para sostener al in-fortunado Emperador Maximiliano .

El General Tomás Cipriano de Mosquera,Enviado Extraordinario y Ministro Plenipoten-ciario de la República de Colombia ante lo sgobiernos de Inglaterra, Holanda e Italia, asu paso por París, consiguió que la Empera-triz de los franceses --su parienta, según pro -pia confesión del General— obsequiara a laRepública de Colombia, la estatua del Almi-rante .

9 PAGINA 8

LA LOTERIA

El escultor VICENTE VELA, quien

Doña MARIA EUGENIA DE GUZMAN .hizo la estatua de Colón y la joven

Emperatriz de Francia . (1826-1920 )América, que adorna la portada de Cuadro de Winterhaller, en la galeria

esta revista.-

del Sr. Moreno, en Madrid .

El Congreso de Colombia por la Ley 12 d e1855 había decretado que la República consa-graría un monumento al Almirante, que en for -ma de estatua de bronce, sería colocada e nla ciudad de Colón, en el Istmo de Panamá ,y por la Ley 63 de 1866 se dispuso que el do -

nativo de la Emperatriz fuese emplazado e n

la ciudad ya citada. ,

El 1 9 de Mayo del año de 1870, el Capitá n

de Fragata, Monsieur E. Serres, Edecán Na-val de la Emperatriz Eugenia, hizo entrega a l

Presidente del Estado Soberano de Panamá ,General Buenaventura Correoso, en el mue-lle de Colón, de la estatua, habiéndose cru-

zado entre ambos los discursos de rigor .

Y ahora comienza la pasión de la estatua .

Por varios meses permaneció en la Ofic i

na de Fletes del muelle N" 5 de la Compañí a

del Ferrocarril sin ser reclamada . En el mes

de Octubre de 1870 llegó a la ciudad de Co-

lón Sir Charles Bright con el fin de desem-barcar el cabo del primer cable submarin oque debía de ponernos en comunicación co n

el mundo. El entonces Superintendente del

Ferrocarril, Mr . E . C . du Bois, obtuvo permi-

so del Gobierno del Estado de Panamá —que

dicho sea de paso nunca se ocupó del mo-numento— para desempacar la estatua y co-locarla en un pedestal, como parte del pro -grama de las fiestas en honor del huésped

inglés .

Diez años después -1880— el Conde de

Lesseps hizo el traslado de la estatua del pa-

tio del ferrocarril a la entrada de la nueva

población, denominada más tarde Cristóba l

Colón. El 21 de Febrero de 1886, se celebr óla reincuguración de la citada estatua, porel mismo Conde de Lesseps . Fue entoncestrasladada a la punta del terraplén, a la en-

trada del Canal . Pronunciaron bellos y sen-tidos discursos el propio Conde y el Obispode Costa Rica, Illmo Dr. Thiel, quien por en-tonces comía el pan del ostracismo . Con tal

motivo el Duque de Sutherland de paso porel Istmo— dió una magnífica recepción en su

yacht "Sans Peur" .

Allí permaneció, delante de la mansión que

sirvió de residencia a Mr . Lesseps, hasta e l

año de 1916, fecha en la cual fue encerra-da entre dos paredes con el fin de preser-varla de los daños que le pudiera causar l a

construcción de los nuevos muelles . En ese

LA LOTERIA PAGINA 9 0

Estatua do Colón frente a la resi-dencia de Mr . Lesseps, sitio donde es-tuve de 1886 a 1916 .

mismo año —1916--- fue removida a los te-rrenos del Hotel Washington .

Al firmarse el 15 de Junio de 1904 el Con -venía Arias-Davis, la estatua del Almirant equedó en faja de terreno bajo jurisdicciónnorteamericana . Desde el año de 1912 al de1930, Panamá sostuvo una intensa lucha endefensa de sus derechos sobre el monumen-to. La diplomacia del Norte, a fin de no se-guir en una interminable controversia sugiri óa nuestro gobierno, que se colocase la esta-tua en la línea divisoria de la Zona del Ca-nal con la República de Panamá y fue as ícomo vino a quedar frente al Hotel Wash-ington .

Nuestro Ministro en los Estados Unidos, doc-tor Ricardo 1. Alfaro, continuó las gestionespara obtener el definitivo emplazamiento ennuestro territorio y obtuvo en 1926 la devo-lución de la estatua, mediante determinadascondiciones que no se cumplieron por partenuestra ,

Cuatro años más tarde -1930— el Ministro americano en Panamá,Mr . Rey Tasc o

Davis, hizo entrega del bien en discordia a lSecretario de Relaciones Exteriores, doctorJuan Demóstenes Arosemena, quien 18 año santes había iniciado, como Gobernador de laProvincia de Colón, la gestión recuperadora

El monumento del Descubridor de lNuevo Mundo en el Paseo del Cen-tenario de la ciudad de Colón, dond ese encuentra desde el año de 1930.

La . estatua del Almirante delant edel Hotel Washington, donde perma-neció de 1916 a 1930.

El día 21 de Diciembre de 1930, se efectuóla tercera inauguración de la obra de Vicen-te Vela, en el Paseo del Centenario, en tierr abajo la soberanía panameña . Hablaron anteel monumento, el doctor Ricardo A . Morales ,Secretario de Relaciones Exteriores, el señor

Ascanio Carles, Presidente del Consejo Mu-nicipal de Colón, y el Maestro Guillermo Va-

lencia, en una bella improvisación cerró co nbroche de oro los festejos .

Y así termina la pasión de la estatua quela Emperatriz de los franceses obsequiara a lgobierno de Colombia y que el viajero pue-de admirar en la ciudad de Colón, en la Re -pública de Panamá, "puente del mundo y co -razón del universo ' .

9 PAGINA- 10

LA LOTERÍA

Dr. JUSTO AROSEMENAPor EDUARDO CHIAR I

Nació en Panamá el 9 de Agosto de 1817 .Murió en Colón el 23 de Febrero de 1893 .

La vida pública de este hombre, ilustre,aunque relativamente corta y sosegada, fu ede lo mas brillante y honrosa .

En todo tiempo tuvo él como norma de con-ducta el bien y la moral ; de aquí que en suvida no haya una sola inconsecuencia ni a

cto alguno desdoroso. Su espíritu, como diríaTaine, marchó siempre por los caminos rec-tilíneos del honor y el deber.

La participación de él en la política activ adel país lleva el sello de un desprendimien-to absoluto . Nunca fue a ese campo con fi-nes bastardos ni miras egoístas, sino con e ldeseo muy sincero de propender al engran-

decimiento de su Patria y su Partido .El doctor Arosemena era liberal convenci-

do, pero liberal doctrinario y amigo de la li-bertad bien entendida y del orden .

Hombre netamente civil, su mérito se apo-yaba sobre la base firme y duradera de l avirtud, la ilustración y el más puro patriotis-mo. Sólo en una ocasión se consideró obli-

gado a salir a campaña : en la guerra a quedió lugar la usurpación de Melo, en la cua lcombatió a favor de la legitimidad como

Secretario del General Herrán, jefe Supremo de lmovimiento restaurador .

Un año después ocupó la Presidencia de l

Estado Soberano de Panamá, en virtud d eelección que hizo en él la Asamblea Consti-tuyente. Se encargó del puesto en julio de1855 y lo renunció el 28 de septiembre de lmismo año, mucho antes de que se vencierasu período, debido a que no estaba d

e acuerdo con los miembros del Poder Legislativo e nasuntos de administración. Estimó que no l oera posible, dada esa circunstancia, hace r unbuen gobierno y abandonó el poder con lamayor naturalidad, de la manera mas espon-tánea, dando así alto ejemplo de honorabili-

dad y desinterés . "Cómo podría yo ---diceen su renuncia--- aceptar la responsabilida danexa a mis funciones de Administrador, oejecutor de las leyes, si los principios en que

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éstas se fundan difieren sustancialmente delos míos? Podré garantizar ni aun prometer-me buenos resultados, cuando yo mismo hecreído de tiempo atrás que no se producencon aquellos elementos?"

Creía el doctor Arosemena que las revolu-ciones no eran medio adecuado de solucio-nar los problemas políticos, 'y debemos deci ren honor suyo que no fue partidario de l a

que promovió el General Mosquera en 186 0contra el Gobierno legítimo del doctor Ospi-

na. Como liberal, una vez que el partidoadoptó esa senda, no pudo hacer menos qu eseguirlo y trabajar, porque el nuevo orden decosas se constituyera en la mejor forma po-sible .

Con tal fin tomó asiento in la célebre Con-vención de Rionegro, en la cual figuraban lo shombres mas distinguidos del liberalismo co-lombiano, tales como Julián Trujillo, José Ma-

ría Rojas Garrido, Santos Gutiérrez, Santo s

Acosta, J . Eusebio Otálora, Tomás C. de Mos-

quera, Francisco J. Zaldúa, Manuel Ancízar,

Salvador Camacho Roldán, Foción Soto, Eze-quiel Hurtado, Aquileo Parra, Felipe Zapata ,José Hilario López y Eustorgio Salgar .

La elección de Presidente de la Convenció nrecayó en el doctor Arosemena, quien ya er aventajosamente conocida en las luchas parla-mentarias, y en tal carácter le tocó firmar l aConstitución de 1863, que él no aprobó sinoen términos generales . Combatió muchos delos principios consignados en ella y tuvo que

hacerle frente a Mosquera, que-gozaba de to-do el prestigio que le dió reciente victoria mi-

litar, y oponérsele en muchas de sus preten-siones. En esa ocasión sobresalieron el doc-

tor Arosemena y Manuel Ancízar como hom-bres de valor civil y carácter independiente ,pues para ellos Mosquera era no sólo el par-tidario notable y afortunado que acababa detriunfar en los campos de batalla, sino tam-bién el candidato indiscutible del Partido pa-ra la Presidencia de la República . El. docto rArosemena, domo miembro de una comisión

de nueve diputados designada al efecto, ha-bía redactado un proyecto de Constitución qu e

no fue del agrado de la Asamblea, entre otrascausas, porque disponía que el Poder Ejecu-tivo de la República sería ejercido por un Di-rectorio, sistema que él consideraba, "no só -lo el mas científico y republicano, sino el me-jor garantizador de la paz . Conocida, estacircunstancia, ya podrán apreciarse los otro smotivos de diferencia que hubo entre él y su s

colegas . Por lo demás, bien sabido es qu e

el doctor Arosemena estimó siempre que la

Constitución de 1863, que era una noveda dpolítica, no se hallaba de acuerdo con el es-tado social del país, sus necesidades y exi-

gencias.

Terminadas las labores del Congreso de ese

año, el doctor Arosemena comenzó a figura ren la carrera diplomática, en la cual le pres-tó al país valiosos servicios, arreglando demodo satisfactorio todas las cuestiones quefueron encomendadas a su pericia y habili-dad. Sobre esto dice don Abraham Moreno ,

uno de sus biógrafos, lo siguiente :

"Con haber brillado tánto en la Magistra-tura y en la Legislatura, son mayores, en e l

concepto de los hombres más notables de lpaís, los méritos que contrajo como diplomá-tico y como escritor concienzudo e ilustrado .El exquisito tacto y maneras cultas, no meno sque el conocimiento de los hombres y la ver-sación profunda en las ciencias políticas, co-

locaron al doctor Arosemena en el número de

los poquísimos hombres distinguidos en la ver-dadera diplomacia . Así frie como pudo pres-tar importantes servicios al país, ya en el con-greso americano, como representante de Co-

lombia, ya en el arreglo de la Deuda exte-

rior, ya en las cuestiones de límites de la Re -

pública con sus vecinas, ya en la termina-ción de conflictos internacionales, como aque l

a que dió su nombre el melón disputado enun mercado de Panamá en 1855 ".

La relación de los cargos desempeñadospor el doctor Arosemena en este ramo es co-mo sigue :

Enviado Extraordinario y Ministro Plenipo-

tenciario en el Perú, de 1863 a 1866 .

Ministro Residente en Francia e Inglaterra,de 1871 a 1872 .

Enviado Extraordinario y Ministro Plenipo-tenciario en Francia e Inglaterra de 1873 a1874 .

Ministro Residente en los Estados Unidos de

1879 a 1880 .

Ministro Residente en los Estados Unidos deVenezuela en 1881, y Enviado Extraordinari oy Ministro Plenipotenciario en dicho país des-de Septiembre del mismo año hasta junio de1882 .

El doctor Arosemena como Royerd-Collarden tiempos de la Restauración, tuvo la virtu drarísima de no echar en olvido, cuando sehallaba en el poder, las ideas que había pre-

dicado y sostenido estando abajo .

De la imparcialidad con que procedió siem-pre dan testimonio los siguientes concepto s

que pertenecen a una carta que le dirigió al

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LA LOTERIA

doctor Julián Trujillo en septiembre de 1876 ,desde Londres .

"Quejémonos amargamente —decía— de laintolerancia conservadora; más qué otro nom-bre merece nuestra profesión de fe? Nos eri-jimos en jueces de un proceso en que somosparte, ni mas ni menos como ellos lo hacen .Si queremos que se nos repute esencialmen-te distintos de nuestros contrarios, démosles elejemplo de la tolerancia y de la imparciali-dad. Pero "podrán subir al poder y destruirnuestra magna obra . " Si no tienen mayoría ,el temor es vano; si la tienen, dejémoslos su-bir; es la ley de nuestra decantada democra-cia. Quién ha decidido que nuestras ideas so nmejores que las suyas? Nosotros . Y precisa-mente porque no hay juez competente en es-tas cuestiones, si no es la parte flotante ymovediza de la población que compone la smayorías ocasionales, es forzoso atenerse alvoto de esa mayoría, plenamente manifesta-do, honradamente recogido, sinceramente pro -clamado. "

Y en 1883, en artículo que escribió desdeCaracas, decía lo siguiente :

"Apresurémonos, por tanto, en obsequio deesa patria común que todos afectan amar yque tantos ofenden, a volver al carril del or -den legal y de la paz tranquila, fundada enel respeto a todos los derechos . Empecemo sesta verdadera regeneración por la reformaconstitucional, arriando así una bandera quenunca tendrá la simpatía de todos, y acomo-dando nuestras instituciones a nuestras ver-daderas necesidades y a nuestra condiciónsocial . Organicemos las elecciones de mane-ra que expresen la voluntad nacional, qu esean vigiladas por la opinión, y que de s upureza responda el Gobierno de la Repúbli-ca. Usemos, en fin, de la razón, del patrio-tismo, por sobre el orgullo individual o departido . . . Y aún pueden lucir hermososdías para nuestra patria de cuya reputación ,

hoy comprometida, debemos hacernos má scelosos . "

La verdad es que de este lenguaje no pue-den valerse todos los hombres . Para habla rasí es preciso rendirle culto sincero a la hon-radez política y experimentar, a la vez qu esentimos altruístas, el deseo vehemente de

afianzar las libertades públicas. Para con-vencerse de la sinceridad de las palabras de ldoctor Arosemena basta tener en cuenta quese dirigía a sus amigos , políticos, que esta-ban en el poder, y que él luchó toda la vidaen el sentido indicado. Por desgracia, no hu-

bo quien lo secundara en esa labor meritoriay patriótica .

En el doctor Arosemena la modestia no eraotra virtud dominante . En el año de 1884 fu enombrado Ministro de Instrucción Pública yse excusó de aceptar el cargo "porque no ha-bía tenido ocasión de hacer estudios espe-ciales sobre la materia, tan necesarios par atodo destino que se quiera servir concienzu-damente . "

Dos veces le brindaron sus amigos la can-didatura para la Presidencia de la República ,con grandes probabilidades de triunfo, ysiempre rehusó el honor, "porque el no con-cebía' cómo podía gobernar a Colombia u nhombre honrado con una Constitució

n anárquica y un partido corrompido, en el cual n opredominaban sino los peores elementos . "

Pero es un hombre de nuestros días el qu eha procedido así? Nació aquí ese hombre yfué aquí donde figuró?

Sin temor de lastimar la verdad histórica ,puede asegurarse que de los hombres nota-bles que ha tenido el Istmo de Panamá, des -de los tiempos de la conquista hasta la fe -cha actual, ninguno ha igualado a Justo Aro-semena en condiciones morales y honrade zpolítica .

Su vida pública, que es un libro fecundoen enseñanzas, debe ser estudiada con inte-rés y detenimiento; en ella hay lecciones pro-

vechosas para los políticos de edad maduray los jóvenes que aspiran a tomar parte e nla gestión de los negocios del Estado .

Nosotros, al escribir estas pobres líneas, só -lo hemos querido tributarle a su memoria unhomenaje de respeto y admiración, y no po-demos dejar de lamentar que todavía no sele haya dado debido cumplimiento a una leyque en honor suyo expidió la Asamblea Na-cional de 1906, cosa que ha sucedido tambiéncan la que dictó la Convención para perpe-

tuar la heroica figura del benemérito Gene-ral Herrera .

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LA LOTERIA

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LEYENDA CHIRICANA :

FULVIAPor MARIA LUISA EYSSERIC H

Hacia un lado de la llanura de Alanje tie-ne el pueblo de este nombre su modesto ce-menterio, que rodeado por una tapia de tos -ca piedra parece más bien las ruinas de unaantigua construcción española .

En las noches, el campesino que atraviesala llanura ve una pálida llama que lame elviejo muro del panteón, y luego como si l apresencia del hombre despertara en ella al-gún recuerdo, se aleja de su sitio, crece rá-pidamente y persigue con febril constancia elmedroso campesino .

La ciencia enseña que aquella no es másque el fósforo contenido en nuestros hueso stransformado por las misteriosas leyes querigen la descomposición y síntesis de la ma-teria; nada más que lo comunmente llamadoun fuego fatuo que pretende ser el pensa-

miento de los muertos ya sin expresión .

Mas, para el sencillo campesino que sóloconoce la fuente . que murmura, el pájaro qu ecanta, el sol, él llano, su cabaña, las floresy la iglesia, nada de eso es aquella pálidallama que lame el viejo muro del panteón.He aquí la explicación que para ellos tien eaquel fenómeno .

En ese mismo sitio en que hoy Alanje se-pulta sus despojos, se levantaba en otro tiem-po la morada de un cacique de la tribu quehabitó la llanura, jefe poderoso que tenía sufamilia en un palacio encantado bajo la saguas del río David, que ya tranquilo, ya agi-tado; corre a gran distancia de Alanje y dasu nombre a la pintoresca población situadaa sus orillas.

Un día cuando aún el trueno se alejab amurmurando, los indios avisaron a su jefe qu eun hombre desconocido se hallaba entre latribu. El extraño no era un indio: su tez erablanca y fina, la nariz bien modelada, ne-gros los ojos y la mirada expresiva . Su no-ble conjunto y su desconocido traje dejaba ntraslucir al hombre civilizado y ,le hacían apa-recer como un semidiós entre aquellos hijosde la selva

El jefe lo miró con extrañeza y preguntóle :"Quién eres? "

" Soy español", dijo el desconocido, "me heextraviado; dadme hospitalidad " .

La tarde se acercaba . El sol, cansado ensu gigante carrera, enviaba desdeñoso ya su srayos; el ave regresaba al árbol en que col-

gaba su nido; el indio buscaba fatigado sucabaña ; y allá, a la puerta de una choza depiedra, el español contaba al cacique su des -gracia

. . .

Apenas el sol ocultó su rojo disco tras elconfín de la llanura, los dos amigos se diri-gieron con lento paso hasta las riberas de lhermoso David. El mago se sumergió en lasazuladas aguas hizo lo mismo el español, yal cabo de algún tiempo llegaron á tierradonde a lo lejos divisaron un edificio de pie-dra : era el palacio encantado . ' Bajemos ala cárcel", dijo el jefe desapareciendo otra vezentre las aguas y tras él su protegido . El ibe-ro, que creía estar soñando desde que . aban-donó las riberas del río, sintió que tocaba nen tierra por segunda vez; pero allí todo eranegro y no vió más que un sinnúmero dechispas rojas que oscilaban en la obscuridad .El cacique dijo : "Aquí yacen las almas delos que me han traicionado . Miradlas cómoparecen luciérnagas de la llanura en una ño-che tenebrosa!!!

Volvieron hasta el palacio, que era de ma-jestuoso aspecto : cuatro enormes dragones depiedra se alzaban silenciosos a su entrada ;en el interior el adorno era original y capri-choso : láminas de oro representaban serpien-tes, pájaros, monstruos y otras figuras de lasque hoy se encuentran en las guacas o se-pulturas de indios. Colgaba del techo Infini-dad de campanillas doradas que acompaña -ban el canto de los ruiseñores ; y las rosas ,las malvas, las azucenas y otras flores de ljardín asomaban sus perfumadas corolas porlas ventanas de piedra . Todo desde el exten-so jardín que con su altura dominaba el pa -lacio parecía soñado en aquella encantadoraficción de la Naturaleza: todo, hasta la her-mosa Fulvia hija del cacique que era supe-rior a las flores del rosal .

El español vivió algún tiempo en aquella

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LA LOTERIA

apacible felicidad; pero un día en que todoestaba mas risueño que de costumbre el jo -ven tenía que regresar a la llanura : Amabaa Fulvia y había sabido también atraer s uinocente corazón; pero el cacique había pro-metido la mano de su única compañera a l

jefe de la tribu que habitaba las orillas de lCochea, y el español debía partir . Sintiósela tierna india entristecida hasta el punto deresolverse a marchar con el dueño de su co-razón . Después de muchos esfuerzos logrósalir del encantado palacio y llegar tras élhasta la llanura .

La tierra estaba melancólica : densos nuba-rrones eclipsaban el sol ; el día había llorado ;lloraba también la verde alfombra de la lla-nura; el ave no cantaba y al pie de la cho-za de piedra el español decía a su amada :"Vámonos a España; mi patria es muy her-mosa, más hermosa que la tuya, donde peli-gra nuestro amor"

Fulvia vaciló : pero ante la idea de ser es -posa de un indio a quien no amaba, se re-solvió a partir.

El mago, que lo había adivinado todo, s epresentó ante ellos .

"Fué mi deseo, dijo a su hija, enfurecido ,verte tranquila, contemplar el rusco de lasaguas a orillas del Cochea donde las rojascampanillas y los montenegros silvestres seenlazan al soplo de la brisa; pero has contra-

riado mi voluntad : amas a un extranjero yquieres abandonar la tierra de tus padres . No

me implores! que a arder irá tu alma en la stinieblas de mi cárcel, y tu cuerpo no ser ádesde hoy sino un triste árbol de la llanura!

La hermosa india, según predicción del ma -

go, se transformó en un árbol, y su alma vo-ló a las negras prisiones de su padre .

El español juzgaba un sueño todo lo que

hasta aquí le había pasado . Buscó a su al-

rededor la realidad y sólo halló mudos tes-tigos de su suerte : la verde llanura que a l o

lejos limitaba el ancho círculo azul del hori-zonte; un cielo obscuro que lloraba, y el ár -

bol cuyas ramas parecían sufrir aún el pes o

de la ira del cacique . Quiso preguntarse así mismo lo que le pasaba, pero no le fu éposible darse cuenta de nada, y tampoc o

abandonar el árbol . Había perdido la razón !

Más tarde, cuando los iberos que sentaro n

su dominio sobre los despojos mortales de lo s

indios, visitaron la provincia, el cacique huyóa sus encantadas regiones, la choza de la lla-nura fue incendiada, y los indios antes de so -meterse a los blancos, mataron al desventu-rado loco en quien saciaron su venganza .

Desde entonces, cuando el cielo viste su es-trellado manto o la luna asoma su plateado

disco tras el verde ramaje el alma del fiel es-pañol que permanece siempre en el mism ositio en que un día se hallara el árbol, seme-jando una pálida linterna, se aleja de su si-

tio y persigue al que atraviesa la llanura co-mo para suplicarle que la lleve a la cárce l

oscura donde se encuentra el alma de su a-mada .

Esto es, pues, lo que para el sencillo cam-pesino que solo conoce la fuente que murmu-ra, el pájaro que canta, el sol, el llano, la ca -

baña de las flores, y la iglesia, es aquella pá-lida llama que lame el viejo muro del pan-teón .

Recomendaciones a las Billeteras ,• A las billeteras les está estrictamente prohibido aumen-tar el precio de venta de los billetes de lotería, del sorte opopular o de los 3 golpes .

• También les está estrictamente prohibido aprovecharque un cliente solicite un número determinado, para ven-dérselo a condición de que les compre otro .

• Las billeteras deben ser amables con el público que e squien sostiene esta Institución que tantos beneficios le pres-ta al país .

• Las billeteras deben informarse en las Oficinas de laLotería de cualquier asunto que les interese respecto a l amarcha de la Institución y no guiarse por rumores calle-jeros sin ningún fundamento .

LA LOTERIA

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Este trozo de calle que en los románticos tiempos coloniale sfie llamó el "antiguo callejón de la Catedral " , vino en 1876 arecibir el nombre de "Calle de Miranda ' en honor del precur.sor de la independencia americana y desde el año de 1906 setitula "Calle de Pedro J . Sosa ' en recuerdo de nuestro máximoingeniero, fue hace 50 años uno de los lugares de más mo-vimiento comercial de la urbe . Ayer, . por sus calles empe-dradas desfilaban, en un continuo ir . y venir, nuestros' único svehículos de transporte, el coche y la carreta, los cuales lle-vaban y traían a los negociantes y particulares y también la smercaderías del Bazar Francós, de la popular casa de do nJuan B . Nicolau, del concurrido almacén Ta Mascota ' de lo shermanos Muller . . .

Hoy, ya su movimiento mercantil ha muerto . Sus negra spiedras han sido reemplazadas por el rojo ladrillo; sus peque-ñas palmeras son señoras de gran prestancia, con su mediosiglo de existencia ; sus edificaciones se han dado un pañ ode civilización y este costado del "antiguo callejón de la .tedral" ha variado su ritmo y su belleza para convertirse e nun cómodo y honesto "parqueadero" de orgullosos automóviles . .