Introducción2 TESIS.nov. 13.docx

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|Introducción El camino del trabajo que aquí se presenta, es subrayar aspectos claves en las indagaciones sobre el lugar que ocupa el arte tradicional –producido por las sociedades no occidentales, que es heredado y reconocido por una sociedad como forma de significación colectiva- en términos de desentrañar los elementos significativos que lo definen y lo expresan, mediante dos temas claves que lo sitúan: el rito en tanto espacio de la obra y experiencia sensible instalada en una atmosfera espacio-temporal y la metonimia como portadora del sentido lógico de la experiencia estética. La importancia de esto estriba en el aporte que se pueda dar en la identificación de las rutas posibles que puedan exponerse, a partir de las reflexiones surgidas en el desenvolvimiento de las cuestiones que animan el correlato del presente documento y es el lugar del arte tradicional en el contexto del rito como puesta en escena del universo cosmológico, y los atributos del universo cosmológico puestos en los objetos que circulan en el ceremonial. 1

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|Introduccin El camino del trabajo que aqu se presenta, es subrayar aspectos claves en las indagaciones sobre el lugar que ocupa el arte tradicional producido por las sociedades no occidentales, que es heredado y reconocido por una sociedad como forma de significacin colectiva- en trminos de desentraar los elementos significativos que lo definen y lo expresan, mediante dos temas claves que lo sitan: el rito en tanto espacio de la obra y experiencia sensible instalada en una atmosfera espacio-temporal y la metonimia como portadora del sentido lgico de la experiencia esttica. La importancia de esto estriba en el aporte que se pueda dar en la identificacin de las rutas posibles que puedan exponerse, a partir de las reflexiones surgidas en el desenvolvimiento de las cuestiones que animan el correlato del presente documento y es el lugar del arte tradicional en el contexto del rito como puesta en escena del universo cosmolgico, y los atributos del universo cosmolgico puestos en los objetos que circulan en el ceremonial. La ruta seguida: Supna sain (el camino del corazn)La ruta como camino, el ods griego, ha sido la decisin que en este trabajo puede permitir dejar ver el sentido del arte que aqu se llamar tradicional, en trminos de lo que se entrega pero ms que como legado, es el obsequio ofrendado en el ceremonial, el objeto entregado como universo, como conocimiento de todas las cosas vivientes y no vivientes, de los vivos y de los muertos, de su transformacin y transmutacin, develando lo develado sin intencin de verdad, sino yendo hacia el camino [met-ods], siguiendo el rastro de los vestigios [in-vestigare] de la huella en el camino que desde all dibujan y tien, cantan y proclaman la heredad de la existencia trasformada en espritu. Un primer supuesto que surge es, que el camino para encontrar el espritu es a partir de su huella: ese hlito trazado que se deja ver en los objetos como cosas que se perciben y se dejan con-sentir en su esttica; suenan y vibran en su forma y conmueven en su presencialidad, con la fuerza del poder concentrado de la heredad que eleva a los sentidos a las dimensiones ms all de los lmites de la existencia y como existencia sacudida por el vrtigo, abre la ventana de su propia verdad, esa verdad increada, slo percibida por el acto extsico[footnoteRef:1] y contemplativo, que siguiendo a Nietzsche, se subraya: [1: De xtasis. Fuerza visceral que desata los sentidos y los hace ondular en un sentimiento ocenico donde la palabra se separa de sus significantes inmediatos y explota en mltiples formas, con mltiples contenidos simultneos.]

El xtasis del estado dionisaco, con su aniquilacin de las barreras y lmites habituales de la existencia, contiene, en efecto, mientras dura, un elemento letrgico, en el que se sumergen todas las vivencias personales del pasado. Quedan de este modo separados entre s, por este abismo del olvido, el mundo de la realidad cotidiana y el mundo de la realidad dionisaca. Pero tan pronto como la primera vuelve a penetrar en la conciencia, es sentida en cuanto tal como nusea; un estado anmico asctico, negador de la voluntad, es el fruto de tales estados. (Nietzsche F. , 1997)

xtasis y memoria, dos rendijas al conocimiento inmediato de las formas dadas por la heredad, ese pasado que marca en los objetos el devenir sagrado del alma colectiva labrada en la palabra hecha carne, hacindose impronta en las bordes rituales tal como alegora que se vale del cuerpo para subjetivarlo y hacerlo pensamiento a travs de su vertimiento visceral como ofrenda, es la condicin del estar en como acto, como accin y presencialidad de la funcin ritualizadora en tanto cosa hecha y en tanto espritu que la posee; los objetos son posedos al ser invocadas las fuerzas que los guardan, fuerzas que sujetan su potencia que se tornan suceso al desatar su Saain, su espritu (para los Wayu), su Eggn,(para los Yoruba), mediante el movimiento de la palabra sagrada que deviene danza, deviene canto, deviene collar, porque transportan el poder del espritu que penetra con su esencia demirgica [footnoteRef:2] en los objetos y palabras, los sonidos y movimientos, los gestos y colores, convirtindolos en formas encarnadas del origen (arqh) como ley (nomi, norma) inexorable del modelo (pardigma) que debe ser armado como puzzle del espritu a partir de los particulares. As se forma memoria desde la unidad espacio-tiempo y desde ese territorio cronotpicoo[footnoteRef:3] es que la accin ritualizadora hace significar[footnoteRef:4] los objetos, apoderndose de la conciencia pretrita para volver todo presente y corpreo desde la subjetividad contemplativa y dinmica que obliga a los objetos a ir ms all de lo que aparentan, pues su significado no est en la superficie de su funcin ni en su forma, sino que est envuelto en la ocultacin intencional e ntima de su significado esotrico lo ms interior, lo ms recndito) que se debe aprehender a fuerza del sacrificio y del estado asctico mencionado por Nietzsche, al ser entregado el espritu del creador-demirgos-artista a la cosa construida, hecha. [2: Creadora de universos completos.] [3: El concepto de cronotopo surge de la biologa, que es tomado de la fsica a partir de su desarrollo y de la geometra por ejemplo de Poincar, se fundamenta la geometra multidimensional de los slidos definiendo de esta manera un tipo de universo epistmico contra-intuitivo y se aadira, contra-perceptual. Veamos su definicin: La geometra no sera ms que el estudio del movimiento de los slidos; pero no se trata en realidad de slidos naturales; ella tiene por objeto ciertos slidos ideales, absolutamente invariables, que son slo una imagen simplificada y muy lejana [a nuestra percepcin cotidiana. Agregado del autor del presente documento en su versin libre del Francs: La gomtrie ne serait que l'tude des mouvements des solides; mais elle ne soccupe pas en ralit des solides naturels, elle a pour objet certains solides idaux, absolument invariables, qui n'en sont qu'une image simplifie et bien lointaine]. (Poincar, 1895); el desarrollo que sufre este tipo de geometra, tiene su asiento en la teora de la relatividad que construye la nocin fuerte del tiempo en tanto aparejamiento con el espacio como dimensin nica y relacionada con las otras tres (alto-largo-fondo), y tuvo profundas implicaciones en la concepcin de la realidad entendida como el campo perceptual inmediato donde los objetos estn localizados pero no ya como objetos sino como sucesos, como algo que acontece a partir de la curvatura del espacio-tiempo (curvatura generada por el campo gravitacional que conforma una dimensin compleja del universo; esta nueva dimensin de realidad se complejiza an ms, con el desarrollo de la cuntica, que analiza universos de dimensiones ms pequeas que el tomo, y describe nuevas caractersticas de la realidad, mostrando por ejemplo, la naturaleza dual de la materia como onda y partcula, dualidad que tendra alcances muy importantes en toda la concepcin lgica y ontolgica de la realidad, lgica en trminos de que algo es y no es al mismo tiempo y su realidad se expresa como posibilidad de ser, que implica un ser en devenir como definicin ontolgica; otro hallazgo importante de la cuntica es la propiedad fsica de entrelazamiento o no separabilidad y esto es que losestados cunticosde dos o ms objetos se deben describir mediante un estado nico que involucra a todos los objetos del sistema, an cuando los objetos estn separados espacialmenteFuente especificada no vlida.; un principio tambin que surge de estas nuevas observaciones de la fsica es el de superposicinFuente especificada no vlida. que significa que un sistema (elementos que interactan.) puede estar en todos los estados posibles al mismo tiempo antes de ser perturbado por el observador, que convierte ese sistema en suceso, que es el objeto de la observacin. Este tipo de perspectiva ha influido en las ciencias sociales especialmente en la lingstica rusa con Yuri Lotman y su definicin de universo de significacin (semiosfera) surgido de analoga de definiciones biolgicas, y el desarrollado por Mijal Bajtn, quien muestra el origen de su concepto de cronotopo en los siguientes trminos. Vamos a llamar cronotopo (lo que en traduccin literal significa tiempo-espacio) a la conexin esencial de relaciones temporales y espaciales asimiladas artsticamente en la literatura. Este trmino se utiliza en las ciencias matemticas y ha sido introducido y fundamentado a travs de la teora de 1a relatividad (Einstein). A nosotros no nos interesa el sentido especial que tiene el trmino en la teora de la relatividad; lo vamos a trasladar aqu, a la teora de la literatura, casi como una metfora (casi, pero no del todo) En el cronotopo artstico literario tiene lugar la unin de los elementos espaciales y temporales en un todo inteligible y concreto. El tiempo se condensa aqu, se comprime, se convierte en visible desde el punto de vista artstico; y el espacio a su vez, se intensifica, penetra en d movimiento del tiempo, del argumento de la historia. Los elementos de tiempo se revelan en el espacio, y el espacio es entendido y medido a travs del tiempo. La interseccin de las series y uniones de esos elementos constituye la caracterstica del cronotopo artstico. (Batjn M. , 1989)] [4: Esta operacin del verbo hacer podra considerarse como perfrasis de infinitivo, que nos podra indicar la capacidad para conseguir lo que se desea; pero su funcin en este lugar no es gramatical, sino que es la esencia misma de la accin constructora de las artes, al desatar su esencia en su forma y en su universo como totalidad objetual. ]

Por ello, mirar es mirarse, pues todo confluye en el punto cero[footnoteRef:5] que hace de la dualidad y de la no separabilidad [footnoteRef:6], la posibilidad lgica en donde todo est inmerso y coincide en su diferencia. El punto cero, ms que sealar la superficie inicial de un vector, es el lugar de coincidencia del tiempo y del espacio E Parn [ [footnoteRef:7]: siempre presente[footnoteRef:8] ] que seala la geometra de la ritualidad; pero no es el presente continuo de la gramaticalidad del verbo, sino de la verbalidad transmutante y alqumica del gesto csmico para que el demirgos con la palabra hiertica (sagrada), construya realidades que deben ser vigiladas[footnoteRef:9] luego, al ser entregadas como evento csmico en el que todas las fuerzas confluyen y celebran, en el lugar donde todo tuvo inicio y su presencia, es el presente de la cosa hecha universo en su potencia desplegada. El despliegue es la accin ritualstica de lo plegado[footnoteRef:10] que encierra el orden universal, ese espritu formador de la totalidad, (para los griegos[footnoteRef:11], Gbogbo para los Yoruba, Apshua'a para los Wayu) que atraviesa las cosas (en su orden anterior , kasa, ohun) y hace de los particulares, entes, entidades completas, totales[footnoteRef:12], que contienen la vitalidad y la fuerza de esa fuente primordial del espritu que las posee y al poseerlas son animadas, son dotadas de la fuerza esencial que le da existencia como cosa y como fundamento de su verdad originaria: son la fuerza y el poder de lo sagrado contenida en la palabra, en las manos, en la maraca del Outshi Wayu, en los tambores de los oficiantes Yoruba, que convierten la parte en el todo, y vinculan el todo con la parte al desplegar su naturaleza hiertica en las particularidades de los objetos: el brazalete es la deidad, y la fuerza de la deidad est contenida en el objeto del culto. [5: La concepcin del tiempo en la teora de la relatividad es uno de los hitos claves que caracterizan su concepcin del tiempo y de la realidad. El transcurrir ya no es condicin del tiempo en relacin de la velocidad de un mvil en movimiento, sino la luz y su velocidad como constante adquiere un relieve importante. Heidegger hace una observacin al desarrollo de la fsica cuntica, en cuanto a la medicin matemtica y es en la teora de la relatividad en tanto teora fsica se trata del problema de la medicin del tiempo, no del tiempo en s mismo () Este carcter matemtico del concepto del tiempo fsico no puede ser expresado ms rigurosamente que por el hecho de que est considerado junto al espacio tridimensional como cuarta dimensin, (subrayado por el autor del presente documento) y en unin con ste es tratado en las geometras no euclidianas, es decir, las geometras que consideran ms de tres dimensiones.Fuente especificada no vlida.. Este llamado de atencin, sobre la medicin del tiempo para los relativistas y los fsicos contemporneos que afirman el carcter de la ciencia contempornea que se desprende (de separarse) de la metafsica al tener sustento en las ciencias duras (lase matemticas), al parecer desde all, los conceptos no necesitan tener sustentaciones ms all de las ecuaciones equilibradas. Dejaremos este tema, pues podra desviar el asunto de esta nota al pie y es el del punto cero o superficie del presente, en el cono de luz de la relatividad que es un modelo que ilustra el acontecer del suceso observado, y sita en las coordenadas del pasado y futuro el orden causal de los acontecimientos. Es as como Einstein citando el modelo de Minkowski, antecesor suyo, explica en un eje de coordenadas el eje del tiempo, que fluye como lnea vertical representa un punto fijo o un observador, las dimensiones espacio-temporales de este sern siempre las mismas. (Modelo tomado de: http://fisicamoderna2010b.blogspot.com/2010/11/geometria-de-la-relatividad-especial.html. Coordenadas aadidas por el autor del presente documento). Si al mismo tiempo, otro observador XS traza una trayectoria transversal a la primera de esta observacin los tiempos sern simultneos en lugares diferentes. Alguien traza una trayectoria oblicua si se mueven simultneamente, Fuente especificada no vlida. El cono de luz podra considerarse como modelo de realidad puesto que en el espacio marcado por el cono, todos los sucesos que acontecen son tomados como reales en tanto que suceden en un orden de espacio-tiempo, y son medibles y reales a partir de la difusin del haz de luz. Desde el punto presente se percibe el pasado (si miramos al firmamento nocturno, las estrellas que vemos ahora, son su pasado; la distancia de la tierra a alfa centauro, la estrella ms cercana es de 4,367 aos luz. Esto significa que cuando la vemos en una noche despejada, esa imagen presente es pasado de hace 4,367 aos, pero la percibimos en nuestra actualidad como fenmeno observable). Si bien, el modelo fsico demuestra la relatividad objetiva de la medicin del tiempo, la distancia, el espacio, longitud, que son caractersticas de las relaciones de los objetos, (Puede verse en https://www.youtube.com/watch?v=P8hE_bqBkd0), ms all de la demostracin fctica, podemos tomar este modelo geomtrico como modelo cosmognico, pues si consideramos que el mito no es una estructura narrativa sino lgica en trminos de armazn argumental de un sistema ontolgico que define en primer lugar las cosas, en segundo lugar su orden y en tercer lugar su diseo abstracto, podemos decir que el cono de luz como geometra de la relatividad es cosmognico en tanto origina las relaciones dentro de los sistemas cunticos y permite construir leyes y principios, y finalmente, una forma de ver el mundo y la realidad, es decir, una concepcin del mundo. Otros pueden construir formas plsticas similares que pueden descifrar formas de complejidad interesante, como los Desana y su Janea, objeto til que desde su forma estructural an no interrogada aqu desde modelos externos, puede ser un camino en otro cronotopo acadmico que podra descifrar su esteros. Por ahora, sealar su similitud. (Gutirrez, 2014) ] [6: Ver nota al pie n3.] [7: El maestro de griego antiguo de la Universidad nacional de Colombia, Juan Sebastin Pramo a propsito del concepto siempre presente explica: Homero (Il., XXIV) califica a los dioses de , es decir, los que siempre son, y tal cosa se dira en tico y en singular as: : "el que siempre es". Y de ah a siempre presente solo hace falta una preposicin: , en singular ('el siempre presente o el que siempre est presente) y, en plural, . (Pramo, 2014)] [8: Este concepto de siempre presente muestra la idea del cronotopo envolvente y que le permite a los objetos ser universo. Sealado tambin por Ernesto Grassi en Arte y Mito (Grassi, 2012), siempre presente muestra los elementos infinitos de la existencia a partir del mito que es su exploracin. Fritjof Capra en su libro El Tao de la Fsica manifiesta la cercana de los razonamientos y postulados de la fsica cuntica y su nocin de tiempo-espacio a las concepciones de tradiciones orientales como el Budismo Zen, y el concepto de siempre presente como elemento importante en la concepcin del tiempo-espacio: En un espacio-tiempo curvo, las distorsiones originadas por la curvatura afectan no slo a las relaciones espaciales descritas por la geometra, sino tambin a las longitudes de los intervalos de tiempoLos sabios orientales hablan tambin de una ampliacin de su experiencia del mundo en estados de conciencia ms elevados, y afirman que estos estados contienen una experiencia del tiempo y del espacio radicalmente diferente. No slo afirman que en la meditacin van ms all del espacio tridimensional ordinario, sino tambin e incluso con ms fuerza- que trascienden la consciencia ordinaria del tiempo. En lugar de una sucesin lineal de instantes, experimentan segn dicen- un presente infinito, eterno, y sin embargo, dinmico. (Capra, 2000). La seora Mara Manzano tambin menciona el concepto del presente desde la atemporalidad citando a Prior en su lgica temporal, de la siguiente manera: hay un presente, hasta cierto punto atemporal, en relacin al cual obtenemos el pasado y el futuro mediante nuestros operadores temporales. (Manzano, 2014). La estructura argumental que en el trabajo que se presenta en el documento actual, sigue un hilo comn en el aparejamiento argumental entre el pensamiento cientfico occidental y las tradiciones, como en el caso de Capra, pero el concepto de siempre presente aqu tiene una importancia capital en el pensamiento tradicional y su concrecin en la accin ritualstica, puesto que se le considera como centro y operadora de esa apertura cronotpica de los objetos que se espiritualizan mediante la corporeidad subjetiva, que los sita ms all de la percepcin y los convierte en universalidades nticas. La razn para que el concepto aparezca en Griego, Wayu y Yoruba, es esa, precisamente. En el universo Wayu, Wanepias ein siempre presente- est fundado como geometra representacional del espiral circularidad ascendente- que es sustentado en su ontologa del ritual inicitico de las nias o se produce como acto escnico, como performance, en el baile de la Yonna.] [9: El concepto de Egrgora, del griego, vigilante, ha sido apropiado por tradiciones hermticas occidentales como la orden masnica, que lo consideran como esa energa resultante de la accin colectiva del espacio ritual. Segn Rizardo da Camino, en el diccionario masnico el egrgor es Cuerpo mstico que se forma de sus propias peculiaridades, despus de la apertura del Libro Sagrado, cuando todos se unen con las mentes para el acto de crear (Jara, 2004). Para el presente documento, el egrgorein, es literal al acto de velar, cuidar y estar atentos, pues lo entregado en la ofrenda se convierte en poder csmico que solo personas consagradas pueden ostentar. En su forma verbal, velar, accin que se complementa con el sujeto, que vela y conduce la energa colectiva que es el cuidador, oficiante, quien orienta y distribuye el sentido y la fuerza creada. pues se est ante la presencia de lo sagrado, vigilantes para conducir la fuerza de lo sagrado presente para que penetre las cosas. Se vigila la palabra y por lo tanto se debe pronunciar intachablemente, con su rtmica correcta, con su prosodia y afinacin adecuadas, se vigila el tejido, se vigila al ejecutante, puesto que nada, en un acto ritual, puede estar al azar, pues se debe refrendar en cada acto, en cada sonido, el orden universal traspasado como ofrenda. Quin vigila? El Babalawo Yoruba, el Outs Wayuu, el Iatromantis Griego: , chamn, mdico adivino, videntes curanderos mgicos, y maestros religiosos, algunos de ellos relacionados en la tradicin griega con el norte, y todos ellos con notables rasgos chamansticos. (Dodds, 1980, p. 138) ] [10: Para David Bohn, estar relacionado intrnsecamente con la totalidad de la cual ha sido abstrado (Bohn, 2005) p.. 204existen dos tipos de rdenes. El orden desplegado, el de la explicacin, el del objeto visto y percibido que se puede analizar y definir en su singularidad desde su derivacin lgica. El otro orden, el orden implicado, el de la totalidad de la existencia que est plegada dentro de cada regin del espacio (y del tiempo). As, cualquiera de las partes, elementos o aspectos que podamos abstraer en el pensamiento, estar plegado en el todo y, por consiguiente, estar relacionado intrnsecamente con la totalidad de la cual ha sido abstrado (Bohn, 2005) p.. 204.] [11: La relacin entre la parte y el todo ha sido preocupacin de todas las filosofas pues desde all su cosmologa y su ontologa se definen. Los filsofos pre-socrticos, pensaron esa relacin dentro de la cual Empdocles manifest: en un tiempo ellas ( las races) llegaron a ser slo uno a partir de una pluralidad y, en otro, pasaron de nuevo a ser plurales a partir de ser uno; dplice es la gnesis de los seres mortales y doble su destruccin. A la una la engendra y la destruye su reunin y la otra crece y se disipa a medida que nacen nuevos seres por separacin. Jams cesan en su constante intercambio, confluyendo unas veces en la unidad por efecto del Amor y separndose otras por la accin del odio de la Discordia. As, en la medida en que lo uno ha aprendido a desarrollarse a partir de lo mltiple y la pluralidad surge de nuevo de la divisin de lo uno, de la misma manera nacen y no tienen una vida estable. Y en la medida en que jams cesa su continuo intercambio, as tambin existen inmviles siempre en su ciclo. (KIRK, 1983) p. 120] [12: David Bohn, supra.]

La cosa hecha. El acto de construccin de mundo.De aqu se desprende una primera pregunta que hay que resolver y es sobre la particularidad. Es necesario introducir una primera afirmacin: La cosa es particular por pertenecer y hacer parte de una subsuncin[footnoteRef:13]. [13: El diccionario de la Real Academia Espaola de la Lengua define Subsumir como: Desub-yellat.sumre, tomar). Incluir algo como componente en una sntesis o clasificacin ms abarcadora. Considerar algo como parte de un conjunto ms amplio o como caso particular sometido a un principio o norma general. (Espaola, 2014)]

Esto significa que ella, la parte, es despliegue de una totalidad: Est incluida en inclusiones simultaneas de ese despliegue en el que se desenvuelve la cosa, hacindola aparecer (la cosa aparece como objeto que significa, no como acto semitico sino como krats, ese poder que se le da al nombrarla mediante su investidura en la palabra originaria, y nombrarla es dotarla de existencia numinosa[footnoteRef:14] sagrada e inmanente) al disponerla en un proceso conectivo de subordinacin pero que subordina a su vez, y por lo tanto se cosmologiza, se ordena en su multiplicidad plegada. [14: Ver: (Otto, 2005)]

La cosa, la parte, est confundida en la totalidad y ocurre como particularidad cuando su condicin universal es requerida (convocada, invocada) a fin de que con su presencia, las cosan sucedan como devenir sagrado y se transformen en sagradas, porque se desdoblan en el trnsito de su traspaso al mundo de los ancestros y de las fuerzas cosmognicas que les dieron origen (ark) que hacen presencia grabando su significado en la forma, en la cosa construida, en la cosa hecha; esa cosa hecha, es la parte M, pn, A'ata, que se enreda[footnoteRef:15] en la totalidad; y si la determinacin (su lmite enunciativo) de la cosa es ser cosa percibida, es a condicin de ser totalidad: es el espritu de la cosa-pn que se mueve en la significacin de lo Yoruba ascendiendo a su naturaleza sagrada considerada en un Patak[footnoteRef:16] y por lo tanto, ese universo significativo hace que la cosa cobre vida mediante el movimiento del acto ritualizado en la accin ceremonial. Esta accin ceremonial introduce un ordenamiento multidimensional donde el tiempo es pasado-futuro y el presente es el percepto[footnoteRef:17] del cosmos ritualizado; es la dualidad del origen y la cosa es la dualidad del origen y de lo actual que le da vitalidad y fuerza trascendente al objeto, a la cosa hecha (Ay3 ewie, en lengua Akan, Akumajushi, en Wayunaiki) convertida en espritu presente de la subjetividad corprea[footnoteRef:18] mediante la accin ritual. [15: Enredar, podra tener dos sentidos que se convierten en uno: uno prosaico pero no por ello menos importante, y es el de enmaraar, embrollar; el otro, el sentido dado por la tradicin del pensamiento complejo ( donde la cosa es parte y todo a la vez, la totalidad est formada las partes pero no como unidades o elementos sino como totalidades que se vinculan en inconfundibles nodos de un entramado que sostiene la totalidad como universo, ( smpantos), donde cada parte obedece a su articulacin con otras y con todas, en un orden, Cosmos vinculatorio. Ese cosmos vinculatorio presenta el problema de la lgica compleja me muestra proposiciones del tipo: La afirmacin que sigue es falsa. La afirmacin que antecede es verdadera. (Hofstadter, 1982) Lgica autoreferencial que abre un camino del pensamiento duro que sustenta el camino dual del pensamiento complejo tradicional que no es slo mtico, o mejor, no slo puede verse en el sistema mitolgico, sino que este hace parte del universo material-espiritual del entorno simblico (Semiosfrico a la manera de Lotman), donde la autoreferencia o el bucle extrao resuelve su formalidad a partir de lo que se planetaba en la nota al pie No.7 en el concepto e parsa, siempre presente como parte del principio de la binaridad y complementariedad del pensamiento tradicional, que resuelve tambin el principio de incertidumbre , dualidad de la onda-partcula y entrelazamiento cuntico de las fsica relativista que ya hacen parte del acervo epistmico y especulativo de las ciencias contemporneas. Aqu Escher, resuelve el pricipio de la autoreferencia, de esos bucles de retroalimentacin de la incompletud lgica expresados plsticamente: (The World of M.C.Escher, , 1971)La matemtica de la complejidad desde Gdel por ejemplo, ha seguido el rastro de las incompletud apodctica, ms si se consideran categoras claves como el tiempo. As lo plantea el terico de la complejidad Carlos Maldonado cuando afirma: El problema fundamental de la complejidad consiste en comprender el orden. Un orden que, hemos llegado a saberlo, no es precisamente esttico o regular, sino, ms a entender la sincrona, la armona y el equilibrio el orden en trminos espaciales es relativamente fcil. Mucho ms difcil es entenderlo en trminos temporales (Strogatz 2003). Hace apenas muy poco tiempo que hemos comenzado a estudiar y a comprender esta clase de fenmenos temporales, evolutivos, irreversibles: en fin, de complejidad creciente exactamente, aperidico, marcado por inestabilidades, turbulencias, fluctuaciones y bifurcaciones (Maldonado, 2008). Y en la perspectiva de este trabajo, el pensamiento que surge del arte como espritu que rodea las cosas construidas, tiene como estructura de complejidad la concepcin del tiempo e parn, y el objeto como la condensacin de este. ] [16: Historias de tradicin Yoruba que ensean la sabidura.] [17: En esta nota extensa, se quiere sealar en primera instancia un elemento constitutivo del arte y es el percepto en Deleuze-Guattari, no como instancia de definicin, sino como elemento que permitir rastrear la accin plstica (en su definicin literal: ,,, plasts, formar, modelar), como accin creadora del demurgos que ms all de la forma, le da vida a los objetos porque son carne y sangre, son espritu (a la manera de Nietzsche) y por lo tanto no quieren ser ledos (recordados) sino vividos en su esencialidad como pasin (Pathos), ese estadio dionisaco que permite explorarse (, s mismo, mismidad) en estados contemplativos de espacios-tiempos extsicos. Podr verse una amorosa contradiccin entre lo que se ha expuesto hasta aqu y lo expresado por Deleuze-Guattari, en la obra como duracin y la obra como extraamiento de s, del autor. El objeto-obra posee el ara, el viento, la brisa, el soplo de vida dado por el autor y la penetra, la posee. Es piel y espritu; y ms que percepto es el universo que traspasa (atraviesa) el tiempo-espacio, y lo hace siempre presente, e parsa, desde la subjetividad corprea del creador. La obra no es extraa, no es smbolo, no representa, sino que es en su esencia global, todo y parte, autor y obra, cosa y espritu, es dualidad simultnea Es! Veamos lo que dicen los autores, es sus magistrales palabras:El arte no conserva del mismo que la industria, que aade su sustancia para conseguir que la cosa dure. La cosa se ha vuelto desde el principio independiente de su modelo, pero tambin lo es de los dems personajes eventuales, que son a su vez ellos mismos cosas-artistas, personajes de pintura que respiran esta atmsfera de pintura. Del mismo modo que tambin es independiente del espectador o del oyente actuales, que no hacen ms que sentirla a posteriori, si poseen la fuerza para ello La cosa es independiente del creador por la auto-posicin de lo creado que se conserva en s. Lo que se conserva o la obra de arte, es un bloque de sensaciones, es decir, un compuesto de perceptos y de afectos. Los perceptos ya no son percepciones, son independientes de un estado de quienes los experimentan; los afectos ya no son sentimientos o afecciones, desbordan la fuerza de aquellos que pasan por ellos. Las sensaciones, perceptos y afectos, son seres que valen por s mismos y exceden cualquier vivencia. Estn en la ausencia del hombre, cabe decir, porque el hombre, tal como ha sido cogido por la piedra, sobre el lienzo o a lo largo de las palabras, es l mismo un compuesto de perceptos y afectos. La obra de arte es un ser de sensacin, y nada ms existe en sLa finalidad del arte, con los medios del material, consiste en arrancar el percepto de las percepciones de objeto y de los estados de un sujeto percibiente, en arrancar el afecto de las afecciones como paso de un estado a otro. Extraer un bloque de sensaciones, un mero ser de sensacin. Para ello hace falta un mtodo, que vara con cada autor y que forma parte de la obra El percepto es el paisaje antes del hombre, en la ausencia del hombre (...) No se est en el mundo, se deviene con el mundo, se deviene contemplndolo. Todo es visin, es devenir. Se deviene universo. Devenires animal, vegetal, molecular, devenir cero (Cursivas del autor del presente documento). (Deleuze G. G., 1991) P. 164- 171] [18: Este es un concepto introducido por el autor del presente documento que tiene dos vertientes: Primero, las consideraciones aqu expuestas de los trminos siempre presente, que como se explic en anteriormente, est referido a la accin ritual, que es donde el ser histrico y originario (cosmognico) se presencializa al re-vivir el origen desde el lgos mitolgico (ver Chaparro, 2003) que podra considerarse como intellectus archetypus Ver: (Kant, 1989) ese cosmos se ritualiza a partir de la subjetividad; desde este documento, la subjetividad no es la irracionalidad ni lo meramente sensible; la subjetividad es esa capacidad de extraamiento de s, que le permite al sujeto explorarse desde sus imagos propias y de las producidas por el xtasis contemplativo de la ritualidad: es el espacio-tiempo de la creacin, propiciado por la mana de Platn desde la sensacin delirante, catrtica y exploratoria de la forma hecha vscera, organicidad, que podra considerarse el intellectus typus de Kant, pero el typus, para el presente documento, en tanto percepto radical, sealado anteriormente.]

La cosa hecha contiene al espritu. Como despliegue de su fuerza, es a partir de la exploracin sensible de sta, de la fuerza especulativa del ritmo, de la palabra, del canto, del movimiento, que la subjetividad escapa de la razn y ensuea, delira y juega con las formas (ritmo, palabra, canto, danza) hechas corporalidad puedo invocar el testimonio de los antiguos, que han creado el lenguaje no han mirado el delirio, , como indigno y deshonroso; porque no hubieran aplicado este nombre a la ms noble de todas las artes, la que nos da a conocer el porvenir, y no la hubieran llamado y si dieron ese nombre fue porque pensaron que el delirio es un don magnfico cuando nos viene de los diosestodo el que intente aproximarse al santuario de la poesa, sin estar agitado por este delirio que viene de las musas, o que crea que el arte slo basta para hacerle poeta, estar muy distante de la perfeccin; y la poesa de los sabios se ver siempre eclipsada por los cantos que respiran un xtasis divino. (Platn, 1979)Con estas palabras, Platn, ese maestro de la mayutica y gua del desciframiento escondido de los significados de los mundos posibles, escribe su gramtica clavando y marcando en la memoria, la emocin y el delirante encuentro con la verdad, mostrando que su fin es la bsqueda inacabada y permanente; es la bsqueda de s en los mltiples viajes internos a las thacas, buscando la virtud propia, el areth (virtud) que impulsa a la creacin mediante el espritu agonal que algunos mencionan como competicin, pero es la competicin consigo mismo, en busca de dar todo de s y dejar su rastro en la arena de la contienda con el material para dar forma al espritu, explorando en el fondo de la historia propia y de la de los otros el pathos que rodea el mundo humanizado, ese cosmos que ms que signos, muestra un mundo posible volcado y trazado en la cosa-hecha. Aqu surge una relacin necesaria en lo planteado, que es forzoso hacerla excurso, con el propsito de reforzar las categoras que hasta aqu se han planteado.Cuando se sealaba a la obra como acto demirgico, se afirmaba que esta era un universo completo; este hace referencia a la nocin de Mundo posible que puede aludir a la explicacin de la lgica modal[footnoteRef:19] y los trabajos de Kripke sobre la semntica (lgica) de los mundos posibles. Hay que anotar que un mundo es un principio de realidad en tanto que lo real no es slo lo percibido, sino lo conocido, o mejor, es lo percibido en tanto conocido. En este lugar, la condicin de la percepcin es el saber en tanto saber del mundo como acceso al sentido dado y develado a partir de la operacin-manualizacin de sus significados. Es en ese camino comprensivo que Lorite Mena, sita su reflexin en torno al saber a partir de las categoras de espacio y tiempo que precisan y concretan ese mundo como hecho humano posible: [19: La lgica modal es un desarrollo de la lgica deductiva a partir de la introduccin de trminos como es necesario que y es posible que, dndole de esta manera un nuevo fundamento a la argumentacin deductiva que define lo real no como los objetos que nos circundan y se perciben como tales, sino que son las expresiones de su condicin de real, es decir, el orden (semntico) que ocupan en relacin con lo designado, es decir, la relacin de sentido que se da referencia en cuando modo de la relacin antecedente y consecuente que define entonces una nocin-de-realidad. En ese sentido, Los "mundos posibles" son "maneras totales como podra haber sido el mundo", o estados o historias del mundo entero. (Kripke, 2005.p,23) Ese mundo entero para el autor no son los objetos sino las relaciones lgicas de referencia-sentido que son de carcter fundativo. Hablar de mundos posibles es entonces () hablar sobre cosas que existen en otra parte de la realidad distinta a la que nosotros habitamos. (S.N., 2014) En conclusin, La teora de los mundos posibles es un modelo formal desarrollado por la lgica con el propsito de definir la semntica de operadores modales, principalmente los de necesidad y posibilidad, aunque se han sugerido otros operadores. La teora tiene dos conceptos que proponer a la semitica de texto; la metfora de mundo para describir y clasificar las varias maneras de existir de los objetos, estados, y eventos que constituyen el dominio semntico. (Vquez Rocca, 2014) Esa manera de existir los objetos son las marcas semnticas de las referencias a los objetos y por lo tanto son funtivos lgicos, ms all de las funciones lingsticas que puedan cumplir. ]

Saber humanamente constituye un modo de estar en y con las cosas humanamente, un modo de instalarse en un mundo. Decir mundo es, inevitablemente, decir saber de ese mundo () el mundo es una interaccin interpretativa cuando el pensamiento se vuelve crticamente sobre s mismo, intentando comprender el orden de las cosas, la reflexin incide sobre las categoras del espacio y del tiempo ya sea como formas del conocimiento o como posibilidades tericas de las cosas que son mundo (Lorite Mena, 1982)

Ese hecho humano posible implica la enunciacin de la realidad. Enunciar ms que mencionar, es el acto como dice el autor, es el espectculo [], el performance de los significados, es el dejar ver de la historia, no como el interpretar congelado del pasado sino como la inflexin del tiempo presente en cuanto poner a la vista, poner a la luz[footnoteRef:20] , es la reflexin como viaje de la luz en ese cono de realidad (el ir y venir, el pendular del mundo de los objetos: el ir como afirmacin y el venir como responsorio del canto y de la sombra de la imagen afirmada, el devenir tambin de la sombra encarnada), tiempo presente como acto-performativo de la ritualidad y del espectculo del saber, es la puesta en escena de este, su actuacin: [20: Heidegger examina el concepto de teora, y su relacin indita de historia en su Parmnides, obra magistral de examen del pensamiento griego: ver la mirada que sale al encuentro, en griego es La palabra teora menciona, concebida simplemente, la relacin perceptiva del hombre con el ser, una relacin que el hombre no produce, sino ms bien una relacin en la cual el ser mismo pone primero al hombre. poner a la vista, poner a la luz. (Heidegger, 2005. p,144) ]

la realidad es en y por una nocin, una teora (un espectculo) para la inteligencia; la realidad es eidtica para el hombre () E tipo, forma. Semblante. Designa lo conocido a travs del parecer de la forma que da el semblante, la forma de estar, de la realidad (Ibd. P, 73-76)Esa forma de estar, es la manipulacin plstica del semblante que es producto del mundo modelado como cosa-hecha, y se sabe en cuanto forma que se produce, ya que es la cosa que deviene objeto plstico modelado que interviene y se presencializa, se deja ver como istora que devela su lugar ya que su presencia ilumina la relacin con todas las dems cosas que estn consigo y las nombra, dado su vnculo de origen (existen como cosas mencionadas en las narraciones que proceden de los lugares que bautizan el linaje cosmognico de las cosas-hechas y de las que estn-por-hacer). La forma da lugar al lugar y ordena los objetos formados (modelados) e instala el orden del lugar, en lgicas de la sintctica sagrada en la cual todo est incluido ya que es Siempre Presente:

es la palabra griega para lugar, aunque no como mera posicin en una multiplicidad de puntos, homognea por todas partes. La esencia del lugar radica en que ste mantiene reunido, como el dnde presente, el crculo de lo que est en su conexin de lo que pertenece a l, al lugar. (Ibd. p, 152).El lugar, como topos, es donde se realiza la realidad. Pero no es slo es el presente. Es el lugar del tiempo de Sankofa del pueblo Ashanti suyo smbolo es el pjaro que tiene orientacin lateral pero su mirada es contraria y sus grandes patas se posan firmemente sobre la tierra. Su significado denota mirar las races, la ancestra, yendo al futuro; o el camino del corazn (Supna sain) de los Wayu, dos espirales simtricas bilaterales; esta bilateralidad custodia la forma y construye el camino para llegar al centro, dndole forma al corazn final que incluye todo. La inclusin de todo y de la mirada a las races ancestrales es el sentido del lugar de la ritualidad como topos, como signo del presente que dilata su temporalidad hacia la accin vital del pasado, desde donde reaparece como saber que acta en los significados, que se transforman en entidades con alma.

Resumiendo lo dicho, el lugar del siempre presente es una forma de universo que hace posible el mundo de la ritualidad y estructura la realidad desde el lugar como devenir-cosa-alma y en esta relacin, es un mundo en devenir: mundo como posibilidad cuyas caractersticas ontolgicas es ser un mundo en mencin en su devenir significado del mundo para s, apropiado por el actante; no es un universo de cosas que nos rodean simplemente; es mundo posible como relacin significativa, de las menciones a las referencia semnticas de las cosas-entes en tanto existencias csmicas, y csicas en cuanto cosa reconocible mediante una funcin lgico-semitica; su realidad es demostrable a partir de proposiciones simblicas subyacentes que construyen lo real, pero sobre todo, y es la importancia del trabajo que aqu se presenta, es en la accin-performance-manualizacin del universo que este se ordena (cosmologiza) y se operacionaliza en una sintctica plstica: es el mundo modelado y ordenado en el cronotopo ritual.

Universo del acto esttico-ritual.El cosmos ritualizado[footnoteRef:21] se concentra en los particulares: La parte (el color) de la parte (el Orisha, el espritu), identificadora por ejemplo de Chang,- deidad Yoruba que es concebida como la fuerza y la energa del trueno, asociada al fuego, a la sangre y a la pasin- es el rojo, ordenador de una parte del cosmos Yoruba que transporta los adjetivos que son caractersticas de la personalidad[footnoteRef:22] de quienes devienen Chang. El devenir Chang es poseer su fuerza csica de cosa, expresada en los materiales- que es adjetival pero tambin csmica que se hace visceral al in-corporarse, al meterse en el cuerpo mediante iniciaciones ritualsticas particulares. Es as que la potencia del collar blanco-rojo es la esencia del m de Chang[footnoteRef:23] que transporta su naturaleza a los colores hierticos que como marcas sagradas sealan la impronta de proteccin a quienes en una lnea de consanguinidad csmica de esta deidad, protegen y orientan su destino acrisolado en improntas plsticas (color-sonido-movimiento danzario) que modelan la particularidad del poseedor y la hacen universal al aprehender los adjetivos de Chang y por esto, debe dietarse como acto catrtico, purificacin, de limpieza y tambin como ofrenda entregada a la deidad. [21: Es el punto cero, E parsa, donde la palabra transforma el mundo objetual, externo, en un mundo sacralizado donde los objetos son emanaciones semnticas de la palabra originaria articulados al arqu, al origen y por lo tanto, deben ser sometidos a procedimientos catrticos tambin. Tambin, porque en l se in-corporan fuerzas universales que le dan vida y como recipientes de lo sagrado deben ser purificados.] [22: Personificacin de las potencias universales que se asientan y se in-corporan en quienes son sus hijos; de ah el linaje de consanguinidad espiritual y cosmognica: la pertenencia est procurada mediante la predeterminacin, el destino, el Apar In, y este debe ser develado por el Babalawo -sacerdote- mediante un ejercicio oracular. Este sacerdote es el canalizador del pasado-futuro, del e parsa, es el Hirophante, revelador de las cosas sagradas.] [23: Orisha de la tradicin Yoruba, es el espritu particular con caractersticas propias. Son los intermediarios entre Olorun, el dios nico y los hombres. El m es la fuerza particular que lo caracteriza, su potencia y su personalidad.]

Las acciones catrticas son actos estticos en tanto que son exploraciones del xtasis sobre el cuerpo subjetivado que se desenfrena al ser posedo, cabalgado por la deidad que lo unge, pues esta es fuente y emanacin del poder de lo sagrado y recibe sus cualidades; se integra con el todo y es el delirio, la exploracin sobre s, esa exploracin creadora del devenir deidad, la que hace intervenir en el caudal del frenes, el lirismo y la prosodia del canto rtmico de los tambores que hablan desde el fondo de su armazn simblica, como lenguas de los dioses"[footnoteRef:24] que en su danza primordial embadurna con su luz los lugares que se interceptan y el tiempo en su realidad dimensional se contrae en un punto, el de la boca del tambor, que habla asumiendo su papel de lengua, entrelazando la realidad pasada y futura, donde el presente no es referente experiencial sino punto de encuentro de las propiedades de la percepcin, que se confunden con el logos no deductivo de la certidumbre vital que muestra la presencia de lo ausente revelndose en su verdad relacional, dentro del eco que a la distancia se refleja como si mismo en su distincin: se es s mismo en la propia desintegracin, contrayndose en las formas, concentrndose en ellas como totalidad, como parte y como todo. [24: En lengua Akan de Ghana: "Abosom tekyerema ne twenee" Las lenguas de los dioses son los tambores. ]

Ir tras la huella del espritu.La mencin-comprensin de la cosa.Un segundo supuesto es, que el objeto adems de ser cosa percibida, es cosa mencionada; es la cosa puesta en el orden de la forma especular que la proyecta en su reverso, la revela y la oculta para ser reconstruida en la existencia como reflejo cosmognico de esa verdad que est por salir. Como principio que va a recorrer la afirmacin anterior sobre la mencin, se parte de la unidad en la diversidad indistintiva que se encuentra en la totalidad de las particularidades. En esa diversidad indistintiva, el espritu como totalidad penetra en los particulares dejando su huella, y las formas lo soportan: Vr. Gr. la forma-aspecto (eid) del sonido en su expresin caracterstica como prosodia, arrastra el significado y lo desprende de su materialidad para dejarlo desnudo como sensacin simblica del hilo que se teje, en el vientre primordial de la mencin alegrica, desde la cerrazn de todas las iniciaciones de las pberes wayuu, que entregan su primer sangrado a la sabidura ancestral, y desde all hacen su tejido fundativo en el ale'e-si-miichi[footnoteRef:25], trada sinonimial de campos semnticos que desplazan el significado y lo amalgaman en su isotopa ritual, desde donde el nombre de la cosa resume las concordancias mltiples que navegan en el sentido; as, una cosa es la otra y la concordancia trata del deslizamiento del eids, de la apariencia como forma que aparece y hace presencia en la realidad del saber- Sutapaulu[footnoteRef:26] (Encierro), como forma especular (la pber se mira en lo wayuu chinchorro-rancho-vientre- y al mirarse, se mira en la universalidad del territorio, en el eids territorial que le da sentido concordante al Sutapaulu, en tanto vientre-tero, tero-chinchorro, tero-rancho, territorializndose ella, en el saber inictico) de la mismidad como espejo de la heredad: mirar es mirarse en el saber inictico. [25: Vientre, chinchorro, rancho en Wayunaiki] [26: El Sutapaulu es el rito de inicio de las nias Wayuu a partir de su primera menstruacin. A propsito ver: Simbolismo del ritual entre los Wayuu de la alta Guajira, Trabajo de la antroploga Maya Mazzoldi (Mazzoldi, 2004), quien hace una interpretacin de varias versiones de participantes en el Sutapaulu, y seala esta prctica desde el concepto clsico de tcnicas del cuerpo de la etnografa de Marcel Mauss (Mauss, 2006) , dentro de las prctica y saberes que constituyen los roles de lo femenino en la comunidad wayuu.]

Sentido y transformacin del nombre: la metonimia nominal.El sentido general que ejemplifica el Sutapaulu es el desprenderse para renacer de nuevo. La cerrazn como oscuridad no es el estado de las tinieblas apocalpticas del sentido occidental, sino la separacin necesaria para el aprendizaje propio. Construir un s-mismo implica despojarse de lo que se es y modelarse, construir un eids esculpido en el espritu que late en la cosa-hecha. Metonimia: la construccin de una lgica del objeto.Si el atributo del Sutapaulu es construir un s-mismo en la Jintulu[footnoteRef:27], la fmina que en su funcin larvaria pasa como sombra con sus pequeas huellas en la arena Guajira, es en esculpir la obra (tejer, aprender el significado profundo de las nociones ancestrales, las oblaciones necesarias en cada momento de la vida) en la memoria del cuerpo, y narrarla como sabidura de la heredad, cuyo sentido es elllegar a ser; este es el fundamento dado a la forma del chinchorro primordial que se teje como aposento-tero que admite en su seno a la por nacer; el sentido semntico estara sealado por el Met-onomaso[footnoteRef:28] (M-: llamar con nombre nuevo, recibir un nombre nuevo) de la Majayl[footnoteRef:29] , la metonimia de lo hecho-siendo, el propsito de la accin ritual. el rito es el medio incompletud, objeto-danza-canto es el devenir obra, obra devenir acto-danza-canto, en el crculo eterno del espiral, que como llegar a ser debe marcarse en el cuerpo, en la mejilla de la nia para que quede como impronta cosmolgica grabada en un cuerpo que se desdobla en la tela, en los diseos que se convierten en carne y sangre, la convalecencia nietzscheana, ElGenesendeesel que se recoge para el retorno al hogar, es decir, para entrar en aquello a lo que est destinado. El convalescente est en camino hacia s mismo, de tal modo que puede decir de s quin es. (Nietsche, F. Op. Cit. pag.2) que debe entregar, debe sufrir, para crear. El smbolo mochila, el smbolo manilla es la portadora del cudruple sentido: separacin, desplegarse para volver a ser ella. [27: Nia en Wayunaiki.] [28: La metonimia tradicionalmente se ha tomado como parte del estudio de la tropologa sin tener la fuerza del otro tropo como es la metfora, en este documento se asume la metonimia como funcin lgica de subsuncin o subsuntiva, puesto que es a partir del giro nominativo de la sinonimia, que la parte puede ser trocada en el todo, que es la lgica de la ritualidad que ya se seal y de ah su importancia en el documento que se presenta. Podramos sealar con fuerza el razonamiento abductivo (abductio: llevar lejos) de Pierce, que es un procedimiento inductivoLa metonimia es la utilizacin de una palabra para designar un objeto o una de sus propiedades que se encuentra en una relacin existencial con la referencia habitual de esa palabra. La relacin de sucesin o de contigidad, eje sintagmtico, concernido por esta figura segn Jakobson (1963), define la metonimia. La sincdoque, caso particular de la metonimia, utiliza una palabra en el sentido en el que habitualmente este no constituye ms que una de las partes del fenmeno nombrado () en el caso de la metonimia, sera ms productiva para el anlisis del texto potico la unin de los rasgos constitutivos de cualidad, cantidad, estado, comportamiento, asociada a esas taxonomizaciones extendidas y trascendidas de la escala, para crear un nuevo significado por un sincretismo de permutacin. (Pardo Prol, 2014)La abduccin es el proceso de formar una hiptesis explicativa. Es la nica operacin lgica que introduce alguna idea nueva; pues la induccin no hace ms que determinar un valor, y la deduccin desarrolla meramente las consecuencias necesarias de una pura hiptesis. La deduccin prueba que algo tiene que ser; la induccin muestra que algo es actualmente operativo; la abduccin sugiere meramente que algo puede ser. Su nica justificacin es la de que a partir de su sugerencia la deduccin puede extraer una prediccin que puede comprobarse mediante induccin, y que, si podemos llegar a aprender algo o a entender en absoluto los fenmenos, esto tiene que conseguirse mediante la abduccin. (Pierce, El hombre un signo., 1988. p, 137) Para Lacan la metonimia es esencial en trminos de que los significados estn yuxtapuestos, coordinados en la nominacin articulada se debe a la funcin posicional que los coloca en posicin de equivalencia. Este es el fenmeno esencial sus mecanismos de condensacin y desplazamiento, de figuracin, todos pertenecen al orden de la articulacin metonmica, y sobre esta base puede intervenir la metfora. La metonimia es la descripcin de lo real mediante el detalle, La articulacin formal del significante es dominante respecto a la transferencia del significado. es.slideshare.net/djalma-argollo/05-lacan-seminario-3La resentacin deI puede repartrse en dos momentos consecutivos ncIuso , susttUr d caballo porel caballero: "Un valiente muchacho se dirigia al galope al pato, VasiIij andaba hacia e1 zagt1an". AsI, el ..orgullosocaballo", que emerge en el verso precedente en un lugar metrico sntactco semejante al del "vaIiente muchacho",representa, propiamente hablando, una semejanza , a la vez, una posesiQn representativa de este muchacho: pars pro toto, en re1aci6n a1 caballero. La imagen de1 cabaI10 se encuentra en la lnea fronteriza entre la metonimia Ia sinecdoque. De estas sugestivas connotaciones del ''orgulloso caballo" se sigue una sinecdoque metaf6rica: en las caciones de boda otras variedades de1 repertorio er6tico ruso, e1 mascuIino reiv kon' se convierte en 'mbolo flico laten:~ incIuso patente. (Jakobson, 1975. p, 381)Ya en 1"La metonymie est un trope par lequel un mot etabli pour etre lesigne d'une idee est employe pour un autre mot expmant une idee voisine de lapremere en vertu du rapport de proximte qui existe entre el1es ; ce rapport est tel, que l'une des idees est reveillee dans l'est apropos de l'autre" p, 152. http://www.revue-texto.net/Parutions/Semiotiques/SEM_n14_9.pdf La metaphore et la metonymie. Brigitte Nerlich Mais iI faut dire qu'en fin de compte les definitions jakobsonniennes de la metaphore (comme mecanisme paradigrnatique fonde sur la similarite) et de la metonymie (comme mecanisme syntagrnatique fonde sur la contigute) p, 159la metonimia est basada en la contigidad entre el objeto representado y el detalle del mismo que representa al conjunto total, por lo que no requiere de la transposicin que presupone el salto imaginativo que la metfora requiere. Est diferencia puede llevar a la metonimia a ser interpretada como ms "natural" que la metfora, que acta segn similitud. Umberto Eco. Tratado de Semitica General. Editorial Lumen, Coleccin Palabra en el Tiempo. 1975. Quinta Edicin 2000, ] [29: Seorita, en Wayunaiki.]

El smbolo como construccin del tiempo y el espacio y es la forma en que todos los estados del espritu se vuelven presente. Se vuelven porque la metonimia los transforma hacindolos contigidad, los hace contiguos dentro de una sinonimia de la re4peticin como determinante del ritual como accin ejercida donde el cuerpo es presente en su organicidad que se convierte en la memoria como medio de reconocer el origen de la contigidad y las relaciones de la gramtica de la espiritualidad dada por la sintaxis fromal del rito en tanto experiencia presente[footnoteRef:30]. [30: Cassier, siguiendo a Goethe, seala el concepto de memoria simblica que permite reconstruir el momento en estado que lo trasciende como experiencia y lo convierte en legado, que es la fuerza de la ritualidad para nosotros en el presente documento: La memoria simblica es aquel proceso en el cual el hombre no slo repite su experiencia pasada sino que la reconstruye; la imaginacin se convierte en un elemento necesario del genuino recordar. (Cassirer, 1976. p, 85) ]

L lori awn irinajo ti awn m.En el camino del espritu, en lengua Yoruba, es estar situado dentro del conocimiento inicitico que descompone la palabra originaria y la recompone en el objeto, puesto que l se concentra el universo que cobra vida y el espritu se in-corpora, se vuelve cuerpo, y es atravesado por el tiempo y el espacio, es decir, se vuelve acontecimiento presente que presencia en sus vsceras, el alma de las cosas que ms que proclamar y significar como alegoras, constituyen la realidad de los que son en el universo del u-topos y del u-cronos, un no-lugar sin tiempo, pero real en el presente, que hace que los objetos sean entidades completas que en su tensin ritual (se halan como cuerdas energticas, se zarandean como maracas, se liban cono bebida, se revisten como pieles, es fin, se marcan en la memoria corporal, en hueso y el msculo para jams ser olvidado) desatan su propiedad constitutivo del saber originario ark- que descubre lo que es en el momento de su accin simblica.De igual manera, ir tras la huella del espritu, Schiirua suichiki aseyuwa[footnoteRef:31], es la bsqueda que se presenta en este trabajo; huella que deja su marca en las cosas que se construyen, esos segmentos completos del cosmos, del orden dado por la palabra y por la pago o don necesario como acceso al conocer, donde la ascesis es el soporte de la entrada al mundo real, es el ejercicio la accin de la catarsis de la purificacin necesario para el conocer partir del conocimiento de s (epimleia cuidado) deber y tcnica (Op.cit. 277) volver a s, convertirse ad se convertere se combinan la pedagoga con la psicagogia (Op.Cit. XXX), epistrophe volver viaje taxdia, formacin, pedagoga. conocimiento mediante la prctica que se fija en el cuerpo para que hagan parte de uno mismo: de ah la marca. Ejercicio de la muerte. [31: Del Wayunaiki. Versin de Rafael mercado, Lingista de la Universidad Nacional.]

Campo y lethe. Lo divino para los griegos: lo extraordinario en lo ordinario. El en yinicialesy . (Parmnides). En Ibid. P, 157

Sobria ebrietas embriaguez sobrio, moderadoEbrietas spiritusEntusiamo= "acto supremo de conocimiento que consiste en la unin mstica con lo divino". Es el efecto del mismo xtasis del voOs, que al ser atrado y absorbido por la sabidura divina se llena del platnico vSouaiaoiis, entusiasmo, deificacin en la contemplacin de lo divino (En=dentro; tous= dios)... Los divinos son los mensajeros de la deidad, los que dan seales de ella. Es del prevalecer oculto de esta deidad de donde aparece el dios en su esencia, que lo sustrae a toda comparacin con lo que es presente. Heidegger La cosa. www.bolivare.unam.mx/cursos/...1/HEIDEGGER-%20LA%20COSA.pdf

Obsequio- Pero el obsequio de la jarra se obsequia a veces tambin en vistas a la consagracin. Cuando lo derramado-y-vaciado es para la consagracin, entonces no calma ninguna sed. Calma la solemnidad de la fiesta elevndola a lo alto. En este caso. lo vertido no se escancia en una taberna, y este obsequio no es una bebida para los mortales. Lo vertido es la bebida dispensada a los dioses inmortales. El obsequio de lo vertido como bebida es el autntico obsequio. En el escanciar de la bebida consagrada esencia la jarra que vierte como el obsequio que escancia. La bebida consagrada es lo que la palabra vertido propiamente designa: ddiva y sacrificio () Vertido, verter se dice en griego , en indogermnico ghu. Significa ofrecer (sacrificar). Heidegger la cosa

el espritu de las cosas que se construyen (tplain t kasa akumajnaka) [footnoteRef:32] saain espritu, kasa- cosa. [32: Es la relacin sealada entre el rito y el arte, por Margarita Pimienta, maestra Wayuu de la Universidad de la Guajira PH. D. en Ciencias de la Educacin.]

Al moldear la realidad el arte encuentra la realidad, revela la verdad del objeto en obra, en objeto creado.Vida significa en la lengua de Nietzsche: voluntad de poder como rasgo fundamental de todo ente, no slo del ser humano. Lo que significa sufrimiento lo dice Nietzsche con las siguientes palabras: todo lo que sufre quiere vivir .. (W W VI, 469), es decir, todo lo que es en el modo de la voluntad de poder. Esto quiere decir: Las fuerzas configuradoras chocan entre s (XVI, 151). Crculo es el signo del anillo, cuya curvatura vuelve sobre s misma y de este modo alcanza siempre el retorno de lo igual.

Las tres palabras Hoy, Un da, Antao estn escritas con maysculas y entre comillas. Nombran los rasgos fundamentales del tiempo. El modo como Zaratustra las pronuncia explica aquello que a partir de ahora Zaratustra tiene que decirse a s mismo en el fondo de su esencia. Y qu es esto? Que Antao y Un da son futuro y pasado como el Hoy. Pero el hoy es como lo pasado y lo que viene. Las tres fases del tiempo se desplazan hacia lo Mismo, como lo Mismo, juntndose en un presente nico, en un constante Ahora. La Metafsica llama al continuo Ahora: la eternidad. Tambin Nietzsche piensa las tres fases del tiempo desde la eternidad como continuo presente. Pero lo permanente en l no descansa en un estar(stehen)sino en un retorno de lo Igual. Zaratustra, cuando le ensea a su alma aquel decir, es el maestro del eterno retorno de lo Mismo. Este retorno es la plenitud inagotable de la vida gozosa-dolorosa. Hacia all se dirige la gran nostalgia del maestro del eterno retorno de lo Mismo. (op.cit. pg. 8)

Esto nos lleva al reconocimiento de caminos ya recorridos en el desarrollo del campo reflexivo y disciplinar de las artes, que se han orientado bsicamente a la historiografa con algunos matices filosficos, pero la reflexin en torno a las artes tradicionales han sido del dominio especfico de la antropologa, que ha destinado su aplicacin temtica al desciframiento de los componentes de las culturas, pues como espacio disciplinar explica el hacer de las artes como hecho constructivo de la cultura material de las sociedades no occidentales, y en la mayora de los casos, las artes aparecen como apndice explicativo y en algunos casos como captulos necesarios para sealar la cimentacin argumentativa de la estructura cultural de una sociedad especfica o la sustentacin misma de una conceptualizacin como modelo para unas escuelas, a partir de la concepcin del fenmeno cultural como un sistema relacional visto en su dimensin sincrnica (anlisis del hecho en s mismo, mediante el examen de sus componentes conectivos) donde la dimensin diacrnica (temporal) aporta el anlisis horizontal del hecho cultural[footnoteRef:33]. [33: Los estudios ya clsicos de Lvi-Strauss lo sealan incluso en sus obra didcticas como Antropologa Estructural I y II, donde define la nocin de estructura en primer lugar como modelo (abstracto); en segundo lugar, como sistema relaciones entre elementos de un conjunto- son las consideraciones ms importantes. Vase: Antropologa Estructural I. Editorial Paids, Barcelona. 1995. Pg,139.]

Para el estructuralismo, definido en su amplitud en las lneas anteriores, la nocin de estructura adquiere una fisonoma de armazn lgico como mecanismo abstracto y formal pero debe dar cuenta de los hechos observados (Op. Cit. Pg. 139). Estos hechos arrojan distintas formas de emprender esta tarea sealada por Lvi-Strauss, especficamente, quien sita la descripcin en el primer nivel del anlisis, el de los hechos como plano de la observacin, digamos, en el de los datos empricos, en el de la apariencia, que desde la tradicin metafsica abre una gran discusin que lleva hasta la misma definicin de la fenomenologa, en tanto reflexin del fenmeno que es lo que se muestra , lo dable. Un segundo nivel estara dado en la Estructura como artificio tcnico como lo sealara Heidegger en la obra citada. Si bien las reflexiones hechas tienen un ncleo en la antropologa, han tenido el propsito de explicar No se ha encontrado una cruce de caminos, espero que este trabajo aporte a acercarlo entrea las ciencias sociales y la produccin sobre las artes. El pensamiento sobre las artes no produce la obra pero el hacer lleva implcito un pensamiento que hay que develar y decantar su esencia, su ser como diran los metafsicos. Lo primero que se puede afirmar es que un lugar se ocupa. En ese sentido, el lugar que ocupa el arte tradicional se puede ubicar en los estudios antropolgicos que han mostrado como terreno disciplinar la definicin de cultura como nocin general que enmarca otras definiciones de esta en trminos de su esfera expresiva como es la produccin de bienes, o de objetos de intercambio, las relaciones de parentesco y en captulos especficos se hacen referencias al arte exponiendo este campo de anlisis de las culturas tradicionales a partir de orientaciones disciplinares El principio de realidad constituido por el tiempo-espacio objeto, se articula y define por el acontecimiento o flujo de fuerza intencional de significacin. Es por esto que el arte como plastificador de la relacin objeto espacio-tiempo construye una modelacin de la realidad, es decir, la configura en su micro fsica y constituye tambin una nueva ontologa donde el sujo se convierte en la razn subjetiva de esa nueva realidad al permitir su exploracin sensible y la subjetividad obrando como componente lgico que permite la exploracin del tiempo y el espacio. La bsqueda entonces de un proceso que devele este camino parte entonces del campo que ha mostrado la indagacin por la reconfiguracin de los objetos que tienen la fuerza cosmolgica dentro del ceremonial tensin espacio-tiempo de donde surge el sentido no como proceso lgico-simblico sino como exploracin subjetiva a partir de lo percibido-comprendido-significado y la subjetividad como reflexin 8ir y venir del smbolo) en donde el significado cumple una funcin cosmolgica en la explicacin inmediata sobre el ser que se explora (autoreflexin) como la mirada en el espejo sobre los objetos que circulan como universos completos. Qu es un universo completo? La metonimia contenida en ellos.La maloca sera el campo cunto o de la relatividad pues el tiempo y el espacio son el objeto en su devenir. Su realidad es metonmica y supera la percepcin. Es Pasado presente futuro y en su presente se lee el pasado, lo originario, se revive al ser actuado el ceremonial al ser narrado el origen como palabra portadora de la fuerza csmica del objeto (la totalidad est contenida en el objeto) y es futuro como desdoblamiento de ese objeto. Flexin y tensin instrumental.Una bsqueda necesaria al parecer en el refinamiento de los instrumentales tericos y tcnicos desde las esferas de investigacin de las artes, es la indagacin por las formas tradicionales de produccin esttica donde se podra rastrear o mejor, podramos ubicar instrumentalmente elementos de anlisis en el camino de una comprensin es el camino de la articulacin y mirada global del fenmeno- que desde la perspectiva que se plantea en este documento, es la manera apropiada de acercarse a los hechos-en tanto prcticas -estticos, ms all de los objetos; pero ms ac tambin porque es en su circunscripcin esttica o plstica - como objeto producido secundariamente, ms all de su utilidad- que demanda del arte el develamiento de los caminos posibles para su conocimiento, y donde el objeto habla y proclama lo que es, su verdad, su lgica y su onto-lgica[footnoteRef:34]. Pero entender lo que dice el objeto es interpretar y traducir lo que dice; y lo que dice desde la perspectiva aqu puesta, significa desentraar su significacin, al interrogarlo en su tiempo y lugar como suceso o acto, como hecho o acontecimiento que lo define y lo vuelca hacia el objeto reencontrado en su universalidad. La significacin sera el proceso de interpretacin del acto donde el objeto plstico (no slo el de las artes visuales, sino por extensin, a todos los objetos sonoros, visuales transita en su devenir complejo, al desintegrarse como realidad verdad- y convertirse en espritu. El objeto se transforma transfiere su forma esencial- En esto consiste, desde la perspectiva del presente documento, el proceso de significacin. Proceso en trminos de Como operacin del significar puesto que la forma reemplaza al objeto, metamorfosea su verdad-objetual, al ser la correspondencia que es el significado oculto, desplazar para restituir, devolverlo a correspondencia y proyeccin correspondencia simblica se comparten los zapatos, cada uno guarda un pedazo del smbolon.(Op. Cit. Pg. 297) [34: Derrida en su libro La verdad en pintura, plantea dos formas de instalar la verdad de la pintura mediante sendas preguntas que sirven para el presente documento en tanto que instalan las preguntas fundamentales que iniciaran la argumentacin subyacente a la bsqueda que propuesta a partir del arte tradicional: qu reproduce y qu restituye (la obra de arte)?]

La comprensin se ubica ms all del objeto porque exige revelar su complejidad y su historia. La primera, desentraa el tejido donde se crea, se produce y se interpreta el objeto, su actualidad y su dimensin mltiple (un objeto tradicional puede ser un til pero al mismo tiempo encarna un universo completo al contener-implicar sus mltiples relaciones que lo vuelven objeto y determina as, la forma para ser y estar en el mundo). La comprensin de las artes tradicionales (entendidas estas como construcciones plsticas, es decir, modeladas a partir de un dominio tcnico transmitido mediante acciones ritualizadas, codificadas e inscritas en un orden cosmolgico que las incorporan en un universo de sentido, les da de inmediato una forma de ser smbolo- y una forma de estar accin ceremonial-) se orientan en perspectivas que pueden estar delimitadas en primer lugar por los estudios sociales y dentro de estos la antropologa que ha construido su objeto alrededor de lo que ha definido como cultura. La cultura como universo analtico ha dado lugar a lneas de indagacin disciplinar

Sobre la metodologa del trabajo aqu presentado, este no se basa exclusivamente en una antropologa simblica en tanto que la tradicin disciplinar ha derivado hacia la descripcin funcional de los hechos sociales (Geertz[footnoteRef:35] niega encontrarse en este universo disciplinar pero sus preguntas conducen al lugar del funcionalismo de Radcliffe-Brown[footnoteRef:36], o de B. Malonowski[footnoteRef:37] por ejemplo) y especficamente de la accin ritual ubicando el significado desde la funcin que cumple el rito visto desde su externalidad, es decir, desde la apariencia de lo aparente, y las conclusiones llegan casi siempre al mismo lugar: la funcin del rito es la cohesin social, la funcin del rito es la estructuracin del individuo, la funcin del rito es el inicio de la cosecha [35: La interpretacin de las culturas. Ed. Gedisa. Barcelona. 2000 ] [36: Estructura y funcin en la sociedad primitiva. Ed. Pennsula.Barcelona. 1972.] [37: Los argonautas del pacfico occidental. Ed. Pennsula. 1975.]

La metonimia como camino comprensivo.La metonimia tradicionalmente se ha tomado como parte del estudio de la tropologa sin tener la fuerza del otro tropo como es la metfora; en este documento se asume la metonimia como funcin lgica de subsuncin o subsuntiva, puesto que es a partir del giro nominativo de la sinonimia, que la parte puede ser trocada en el todo, que es la lgica de la ritualidad que ya se seal y de ah su importancia en el documento que se presenta. Esta designacin de la parte por el todo tiene la importancia de asignar a la significacin global del fenmeno, una de sus caractersticas sensibles dado su zcalo enunciativo bsico y es lo que permite a la sinonimia el trueque con un nuevo nombre. Esta operacin segn Jakobson, se da a nivel sintagmtico sincrnico- y puede contener caractersticas adjetivales pero que comprometen o tienen en comn, algunos valores de sustancia. Por esto, la blancura no es una sustancia pero puede arrastrar su contenido formal -la blanquidad- mediante asociaciones simultneas y constituirse en nuevo contenido o sustancia: la cosa blanca Es pura Pensamos que este tipo de despliegue de la forma al construir nuevos contenidos, es el carcter del transcurrir del significado metonmico, que ha tenido implicaciones tambin en los desarrollos de la sicologa profunda vr.gr. de Lacan que ms adelante se sealarn. Este nuevo significado del nombre obviamente transforma su funcin en el universal dadas las simultaneidades lgicas que se dan en la sinonimia de la contigidad. Desde la lgica del rito, las contigidades se encuentran en todas las cosas puesto que son cosas y espritu al mismo tiempo. Esta continuidad no es formal sino sustantiva en la medida en que sus referentes son paradigmticos y cosmognicos, y por lo tanto, su contigidad se da a partir de las conexiones dadas por el smbolo atvico sealado en el espacio ritual. Haciendo esta salvedad, se examinarn entonces algunas definiciones, como las ya clsicas o comunes en la tropologa, que son cercanas a la exploracin que aqu se presenta. Uno de los ejemplos se muestra a continuacin en el que se toma el consuetudinario concepto de contigidad, enunciacin hecha desde Jakobson:

La Presentacin del novio puede repartirse en dos momentos consecutivos incluso, en sustituir el caballo porel caballero: "Un valiente muchacho se diriga al galope al patio, / Vasilij andaba hacia e1 zagt1an". As, el ..orgulloso caballo", que emerge en el verso precedente en un lugar mtrico y sintctico semejante al del "valiente muchacho", representa, propiamente hablando, una semejanza y, a la vez, una posesin representativa de este muchacho: pars pro toto, en re1acin a1 caballero. La imagen de1 caballo se encuentra en la lnea fronteriza entre la metonimia y la sincdoque. De estas sugestivas connotaciones del ''orgulloso caballo" se sigue una sincdoque metafrica: en las canciones de boda yotras variedades de1 repertorio ertico ruso,e1 masculino retiv kon se convierte en un smbolo flico latente o incluso patente. (Jakobson, 1975. p, 381)

La contigidad subraya la vecindad del significado para crear la sinonimia a partir de una estructura isotpica que es la analoga de las formas simblicas entre elementos que tienen significados similares y por lo tanto, se relacionan en su cadena significativa dndole un sentido de equivalencia en el significado- que Pardo Prol retoma de lo afirmado por Jakobson del que dimos cuenta en el prrafo anterior.

La metonimia es la utilizacin de una palabra para designar un objeto o una de sus propiedades que se encuentra en una relacin existencial con la referencia habitual de esa palabra. La relacin de sucesin o de contigidad, eje sintagmtico, concernido por esta figura segn Jakobson (1963), define la metonimia. La sincdoque, caso particular de la metonimia, utiliza una palabra en el sentido en el que habitualmente este no constituye ms que una de las partes del fenmeno nombrado () en el caso de la metonimia, sera ms productiva para el anlisis del texto potico la unin de los rasgos constitutivos de cualidad, cantidad, estado, comportamiento, asociada a esas taxonomizaciones extendidas y trascendidas de la escala, para crear un nuevo significado por un sincretismo de permutacin. (Pardo Prol, 2014)

La seora Nerlich de la Universidad de Nottingham muestra en su artculo referenciado en la cita siguiente, el sentido dado a la metonimia y la metfora que permiten generar, mediante el cambio de sentido, una estructura de creatividad en el campo de la produccin potica. Es as que, citando al clsico del anlisis lingstico que marca la tradicin francfona, Joseph Balthazar Auguste Albin D'Abel barn deChevallet, refirindose a la definicin de la metonimia seala lo siguiente:

"La mtonymie est un trope par lequel un mot tabli pour tre le signe d'une ide est employ pour un autre mot exprimant une ide voisine de la premire en vertu du rapport de proximit qui existe entre elles; ce rapport est tel, que l'une des ides est rveille dans l'esprit a propos de l'autre" (Nerlich, 1998) [ La metonimia es un tropo en el que una palabra est dispuesta para ser el signo de una idea y se utiliza para que otra palabra exprese una idea vecina de la primera, en la relativa relacin de proximidad que existe entre ellas; esta relacin es tal que una de las ideas se despierta en el espritu de la otra. Versin nuestra para el presente documento]

Una idea que se despierta en el espritu de la otra, es el giro metafrico dado por el autor aludido en la referencia a la metonimia y hace resaltar ese aroma necesario en las definiciones que buscamos, pues es all, en el espritu, donde las definiciones simblicas se construyen y cobran relevancia, cifradas en la accin performtica de la subjetividad corprea. Pero esa subjetividad como ya se ha afirmado anteriormente, no es la mera fantasa irracional, sino diramos meta-racional que se eleva de la sensacin y le adjudica nuevas nominaciones [nombra-mientos] a la experiencia simblica el smbolo es una experiencia, es una prctica que crea universos mediante la palabra, y de esta hecha accin-. Nombrar en griego onoma, es un acto de creacin -poiesis- donde interviene el conocimiento del mundo a partir del logos que se encuentra en la sinonimia del decir-saber. Y decir-saber es el acto inicitico del poder-saber demirgico, como la accin tambin de erigir universos dndoles forma Plasts: modelar-. Utilizamos estas palabras compuestas no como lexemas sino como yuxtaposiciones del logos que combinan el sentido y le dan una nueva fuerza semntica. Pensamos entonces que esta es la funcin de la metonimia en el lugar de la exposicin planteada aqu: la creacin de una nueva fuerza semntica.Ese nuevo sentido semntico, tiene el carcter de contigidad pero tambin de giro de significado en la medida en que este giro permite yuxtaponer, intercambiar y transponer algn elemento de la forma para crear un nuevo contenido. Buscamos entonces en este orden argumental, la creacin de nuevos significados que permiten reconstruir el sentido inmediato de la accin simblica mediante la metonimia y esta, sostenida por el ritual. Es en este camino especulativo que para nosotros la yuxtaposicin es un seccin que aparece con fuerza en lo introducido por Lacan, que retoma conceptos del sicoanlisis freudiano y lo actualiza mediante la introduccin de algunos contenidos analticos como el de desplazamiento, tpico de la lgica del anlisis onrico freudiano, que significa la relacin de un significado que se traslada a travs de los significantes mediante cadenas asociativas (Freud, 1999. p, 63). Veamos lo que dice Lacan al respecto:

La forma retrica que se opone a la metfora tiene un nombre: se llama metonimia. Designa la sustitucin de algo que se trata de nombrar: estamos en efecto a nivel del nombre. Se nombra una cosa mediante otra que es su continente, o una parte de ella, o que est en conexin con ella lo que Freud llama condensacin en retrica se llama metfora; lo que llama desplazamiento, es la metonimia ( ) Ana Freud dormidalas cosas estn, lo ven, en estado purohabla en sueos: Grandes fresas, frambuesas, flanes, papillas. Esto es algo que parece significado en estado puro. Y es la forma ms esquematice, ms fundamental, de la metonimia. Sin ninguna duda desea esas fresas, esas frambuesas. Pero no es obvio que esos objetos estn ah todos juntos. Que estn ah, yuxtapuestos, coordinados en la nominacin articulada se debe a la funcin posicional que los coloca en posicin de equivalencia. Este es el fenmeno esencial, coordinados en la nominacin articulada se debe a la funcin posicional que los coloca en posicin de equivalencia. Este es el fenmeno esencial sus mecanismos de condensacin y desplazamiento, de figuracin, todos pertenecen al orden de la articulacin metonmica, y sobre esta base puede intervenir la metfora. (Lacan, 2014)Un componente primordial, que es el soporte que gua este excurso (necesario, pues a partir de este, se fundamenta la estrategia metodolgica de esta indagacin en la correspondencia de la ritualidad como elemento general y el rito como la especificidad de lo tratado), es el tratamiento de la metonimia como significado de la totalidad en lo particular, que ms all de esa forma lgica o de tropo en el caso de la retrica, pars pro toto es la transposicin del contenido formal que subsume inversamente a la totalidad, a manera de fractal cuya forma estructural se desdobla sobre s misma y se repite a distinta escala (ampliada o reducida). Si bien Umberto Eco que a continuacin se cita, no toma para su anlisis el concepto de fractal, lo extrapolamos como parte argumental de nuestra exposicin. Pues el aspecto sealado a continuacin, el objeto representado y el detalle del mismo, juega ese papel. Veamos.la metonimia est basada en la contigidad entre el objeto representado y el detalle del mismo que representa al conjunto total, por lo que no requiere de la transposicin que presupone el salto imaginativo que la metfora requiere. Est diferencia puede llevar a la metonimia a ser interpretada como ms "natural" que la metfora, que acta segn similitud. (Eco U. , Tratado de semitica general., 2000) Una pregunta obligada es sobre el procedimiento de trocar la parte por el todo, y en lo definido desde la retrica que es un camino ya recorrido que al parecer, revela su carcter de contigidad entre estructuras significativas isotpicas, sealadas por los lingistas en los anlisis lexicolgicos y gramaticales. Por qu hay contigidad o se puede afirmar esa contigidad?Por qu se puede afirmar o sealar la subsuncin sealada por nosotros? Veamos. En primer lugar habra que preguntarse por el contexto filolgico desde donde se originan los contenidos significativos de una lengua. Estos caminos especializados no son de competencia de este trabajo; sin embargo, de la mano de los mentores que han acompaado las especulaciones (el ir y venir de preguntas, intuiciones, certezas, plpitos y barruntadas) se han presentado vr.gr. los conceptos de siempre presente, cosa-hecha, ir tras la huella del espritu, el camino del corazn, la lengua de los dioses, y otros, algunas veces se presentan en las tres lenguas (Griego, Yoruba, Wayunaiki y a veces Akan) que surcan nuestro trabajo aqu presentado. Estos conceptos ms que frases son ideas originarias, fundativas, que delimitan y al mismo tiempo plantean el contexto donde se mueven los conceptos, en primer lugar, buscando el principio rector que los define y en segundo lugar, se busca ver descubrir-, hasta donde los preceptos lo permitan, el soplo que surca cada neuma (), espritu o ambiente que rodea el concepto presentado, cuya intencin final, es encontrar un cauce comprensivo que lo explique. Ese cauce particular, le da la atmsfera que rodea a esta construccin especulativa que los junta como contigidades estructurales en las formas simblicas de proceder [actuar-significar] en relacin con la palabra, desde la construccin que anima este trabajo, el rito y la metonimia, que no slo contextualiza y restringe (en el mundo de la complejidad contemplativa) el trnsito de las cuestiones que surgen [a veces escondidas en la forma de la pregunta, a veces en la forma de la construccin argumental], sino que permite explorar desde las tramas culturales, el sentido de las relaciones que alcanzan a tener, al ponerlas en un plano explicativo similar. Hasta aqu el plano metodolgico. Volvamos al asunto de la especulacin metonmica. Si bien son tres (4, uno escondido) los contextos de donde se toman los conceptos que han guiado este pasaje, contextos que pueden ser dismiles (griego y yoruba, lindantes?), la contigidad est marcada por una estructura comn dada por la ritualidad. Podramos hablar de relaciones biunvocas vr.gr. en el concepto de siempre presente, que podra tomarse como condicin ontolgica del ritual, en trminos de que en el espacio de la ritualidad el tiempo se contrae y se dilata a partir del fluir rtmico de la cosa-hecha, donde se manifiesta la accin fundativa de la palabra- de- poder (y volvemos a citar: Ash en Yoruba, Tumi Kasa en Akan). Este concepto se resbala en la biunivocidad de las culturas citadas, no porque haya habido acuerdo inter-tnico, sino que como ya hemos sealado, estos conceptos tienen el humor, ese hlito del espritu , Ois: substancia- que da vida a las cosas y se traslada a los objetos que son medios instrumentales mediante los cuales el poder [la fuerza numinosa -mysterium tremendum para Rudolf Otto. (Op. Cit.)- Para nosotros, la capacidad del espritu ancestral de trasmutacin y penetracin en las cosas] convierte la parte, el objeto, en lo total, en el espritu de la ancestralidad con su cualidades universales trasladadas al objeto particular. No lo representa, lo transforma: en el espritu del Ash The power to bring things into existence, to make things happen. (Thompson Drewal, 1992. p, 27) [El poder de traer las cosas a la existencia, hacer que las cosas pasen. Versin nuestra del ingls.]- se traen las cosas a la existencia, significando esto, que hay una capacidad para transportar la latencia del Universo y convertirla en la fuerza actuante en el presente como lo seala el infinitivo. Y hacer que las cosas pasen, es dirigir esa voluntad de generacin de los sucesos, de convertir el tiempo y el espacio en acontecimientos desde una accin pretrita originaria, o futura, no como accin que todava no se ha producido, sino como el cono luz inversa del pasado o del futuro que van al punto cero, presente, siempre presente. (Ver. Pg. 5 del presente documento). Su significado se dilata como realidad ntica tambin en todos los niveles de la existencia de las cosas; as una maraca encarna la deidad y tambin lo hace el brazalete. La contigidad-desplazamiento, implica entonces una naturaleza multirelacionada dada en la ritualidad donde las bifurcaciones (la materialidad de la manilla y la maraca) se juntan en el espacio como variable relacionar- del lugar y su eids su apariencia, se convierten en uno (en la deidad y su potencia). La ambigedad se torna unidad, donde el significado de los objetos ritualizados, surge de la accin que desata su potencia significativa que se encarna en los cuerpos y en los objetos que se activan al ser tocados por la palabra del oficiante. La fuerza metonmica transforma una cosa en otra. No slo las nombra. Contiene la esencia del eids, y permite que las cosas y sus significados (particulares) se liguen como esencia de la apariencia y la contigidad -unidad en la diversidad- que se lleva lejos, hace que su significado no se ancle, sino que se subsuma y se fractalice. La subsuncin es la transmisin del contenido al continente y hace que este contenido se transforme al trasladar su ncleo significativo al nivel del continente. La translacin no es una representacin formal solamente: la subordinacin puede provenir de una proposicin abierta que se subordina mediante una estructura cosmognica, que define la contigidad del significado y los subconjuntos donde se PUEDEN hacer las agrupaciones. Por esta razn, la maraca de Shang slo puede tener contigidad a partir del color rojo-blanco[footnoteRef:38] de su ornamento, que es el medio simblico del color que define a la deidad y de esta manera integra, trae al orden sintagmtico del ritual, el ritmo respectivo y a su danza para as construir una congruencia paradigmtica en la pauta de significacin. En este orden, transformar, producir, traer, es construir llevando: Transportar. Y transportar es trasladar, acarrear de un lugar a otro, es decir, llevar y en esa medida, como accin teleolgica, entregar, [apgo): sacar y conducir]. Este es el proceso de configuracin de la metonimia, que saca los elementos que podran considerarse como isotpicos de un sistema de significacin, y en este proceso, son conducidos y entregados para generar esa correspondencia necesaria entre la parte y el todo como sustitucin. [38: Fotografa sin ttulo. Sin fecha. Recuperado de http://www.santeriamilagrosa.com/Santeria.php]

Es en este camino que podemos mirar lo sealado por la seora Dibl, maestra de la Universidad de Cocody en Costa de Marfil, al exponer el sentido del smbolo como significacin segunda, que podra entenderse en primera instancia como el sentido semitico del smbolo en tanto significado abstracto del signo, pero debe entenderse ms en la ruta aqu trazada y es el sentido oculto de los objetos que su eids muestra, que debe ser sacado desatado- y trasladado:La signification symbolique, seconde, des objets tient une place important dans la societ traditionelleUne chose est toujours elle-mme et plus quelle-meme. (Dibl, 2010. p,22) [La significacin simblica, segunda, de los objetos mantiene un lugar importante en las sociedades tradicionales (Pues)Una cosa es siempre ella misma y ms que ella misma. Versin nuestra del francs] que para nosotros es el sentido de la accin ritual al descubrir desvelar- el esoters de los objetos, conduciendo la semntica del plano fctico al multidimensional de la experiencia existencial, abduciendo[footnoteRef:39] el contenido formal que permite construir conjeturas supuestos- de una lgica adyacente, que estructura la forma iterada de la autosimilitud de la cosa, en su diferencia. Llevar lejos, abducir, en la lgica geomtrica es iterar[footnoteRef:40], repetir un proceso para llevarlo ms all de su forma inicial[footnoteRef:41] y su contenido se desplaza incluso, desde la geometra fractal, hacia el infinito. [39: Abduccin:llevar lejos(dellatnabductioy esta palabra deab, desde lejos, yducere, llevar. Tomado de: http://es.wikipedia.org/wiki/Razonamiento_abductivo. Recuperado. 10/08/2014),] [40: La geometra fractal fundada por Benot Maldrebot desde la teora matemtica que analiza geomtricamente algunos fenmenos de la naturaleza, es retomada por el matemtico Ron Eglash , que muestra en su obra la relacin entre las matemtica fractal y los cdigos culturales que se expresan en la arquitectura, los objetos sagrados y cotidianos, encontrando patrones de complejidad que subyacen al diseo observable. Lo subyacente, el patrn, para nuestra ruta analtica, sera la pertinencia de la contigidad ] [41: Como se muestra en la figura africana, el diseo romboideo de la forma se repite en iteraciones que tienden al infinito, subsumiendo la parte en el todo figurativo. Imagen tomada de: Eglash, Op.Cit. p, 76]

Ese desplazamiento, ese llevar ms all, que es el substrato epistmico lgico y argumental- de la abduccin desarrollada por Charles Pierce, tiene la importancia de subrayar ese proceso intuitivo de la construccin hipottica, que no olvida el