1. Introducción a la Historia

Al momento de hacer alusión a la palabra historia es necesario delimitar cuál es su

significado, puesto que en una manera superficial puede comprendérsele como una

ciencia, sin embargo en este documento se presentan algunas características de la

misma, por la cual se ha de entender desde su sentido auténtico y cuáles son los

elementos que son útiles para la elaboración de una filosofía de la historia apropiada,

puesto que a esta reciente rama de la filosofía le es de material imprescindible.

1.1 La historia, los hombres y el tiempo

A lo largo del tiempo se ha dicho que la historia es la ciencia del pasado, sin

embargo, Mac Bloch considera esta afirmación impropia, puesto que según él, la

ciencia se encarga del estudio de los fenómenos actuales, y que son y no así el no

ser, por tanto los sucesos que son materia de la historia, no son en presente, sino

fueron, y en los relatos proporcionados por ella se les reconoce como parte del

pasado.

Otro aspecto a considerar es que la historia o debe imponerse ante otras disciplinas

como un conocimiento científico si su contenido no aporten datos contribuyentes a la

actividad racional y al progrese de la misma.

El objeto de la historia son los acontecimientos pasados de los hombres, por

ende es compleja y requiere de cautela en el momento de adentrarse su estudio.

Además es un intento de conocer una cosa en movimiento (la vida y actividad de la

humanidad).

Sin embargo no puede hacérsele a un lado, pues ayuda a comprender el

presente. Leibniz hizo esta afirmación “una realidad no se comprende nunca mejor

que por sus causas". La incomprensión del presente resulta frecuentemente por la

ignorancia del pasado.

Puede afirmarse que la historia es un punto de unificación entre el pasado y el

presente.

1.2 La observación histórica

Es cierto que el pasado es un dato inmodificable, pero su conocimiento está

en constante progrese y perfeccionamiento. Además suele ser un tirano, pues

esconde datos que él mismo no quiere mostrar, incluso desde una dimensión

científica.

Uno de los elementos primordiales en el estudio de la historia son los

testimonios, pues no puede adentrarse a su conocimiento si no se tienen pistas que

ayuden en el progreso y enriquecimiento de la misma. Así por ejemplo las

autobiografías son de mucha ayuda, porque integra el pasado desde la dimensión

individual de quien escribe y al mismo tiempo los factores externos, en este caso

sociales, políticos, culturales, económicos, entre otros, en los cuales se ve inmerso.

Sin embargo no todo testimonio ha de aceptarse como verdadero de modo

inmediato, pues hay que saber enfrentarse a ellos y saber interrogarlos, para ello es

necesario al historiador tener conocimiento de las principales técnicas requeridas por

su oficio. Algo que suele ser útil es el conocimiento de archivos bibliotecarios,

revistas, periódicos, los cuales ayudan a tener una visión más global del contexto al

cual se estudia.

1.3 La crítica

En este apartado se resalta la importancia de la duda como método de

conocimiento de los testimonios, los cuales no han de ser vistos de una manera

dogmática ni escéptica a primera vista.

MichelLevassor afirmaba que “la rectitud del espíritu consiste en no creer a la

ligera yen saber dudar varias veces de lo mismo."De esto se deriva la observación

crítica de los documentos aplicados al estudio histórico, pues no se ha de tomar en

cuenta una sola fuente, sino tratar de abarcar las posturas posibles que hacen

alusión a un mismo acontecimiento. Por tanto un historiador en la medida de lo

posible ha de indicar la procedencia de sus datos a fin de que sus aportes sean más

aceptables y creíbles.

El método crítico se presta a llevar a cabo la investigación en terrenos más

amplios sin modificar o prescindir de sus principios. Por ello al momento de

interrogar a los testigos (personas o documentos) no se pretende encontrar

respuestas que respondan a las expectativas subjetivas, sino que lleven al mejor

conocimiento de los acontecimientos.

Una mentira puede ser herramienta que sirva al conocimiento de una verdad

opacada por la misma, porque esta se presenta en modo de testimonio. Para ello es

preciso llevar la información a la comprobación.

1.4 El análisis histórico

Esto no consiste en juzgar el pasado, sino de comprenderlo y este proceso se

lleva a cabo por medio de la abstracción. Dentro de este análisis deben integrarse

los factores, judiciales, económicos, sociales, entre otros, a fin de que esta actividad

se lleve a cabo de una manera más objetiva.

El estudio histórico se hace complejo debido a que se intenta abarcar un área

de vida humana, el cual va transformándose en cada momento. Para hacer elaborar

una filolosofía de la historia se deberán entonces tener certeza de los datos

históricos que se reflexionarán, porque no vasta únicamente echar mano de dichos

datos sino, es preciso cerciorarse que éstos tengan correspondencia con la realidad

y la verdad.

2.Aporte de otros autores que hacen referencia a la historia

Aristóteles concibe el tiempo como la esencia de las cosas y elabora una división del

mismo en anterior y posterior, en contraposición a platón que veía el tiempo en modo

inverso, con su teoría de las ideas pone de relieve la preexistencia de las cosas,

incluso del alma humana cuya meta es volver al mundo ideal al cual pertenece y el

cual contempla por medio del alma.

Anterior a estos se posicionaba Heráclito quien con su frase “todo fluye”

percibía en la temporalidad la esencia de las cosas. Por tanto el ser es, no en el

tiempo, sino el mismo tiempo.

Tras el desarrollo de la historia también se han opinado acerca de la misma,

tal es el caso de Orosio, quien tenía una concepción providencialista de la historia

cuyo fin se sitúa en el juicio de Dios.

Isidoro por su parte fue el primero quien utilizó la encarnación de Jesucristo

como punto de origen para la datación. Es con este pensador que se inicia la

concepción de un antes y un después en la historia en la cual Cristo constituye el

centro de la misma. Por esta línea desarrolla su perspectiva filosófica cristiana Otto

de Freising y afirmaba “los hombres han de conocer la historia para conocer el

camino que les lleva a Dios”

Joachim de Fiore divide la historia en tres fases—según él—fundamentales

para su comprensión: Padre (el desarrollo de la historia anterior a la encarnación)

Hijo (cuyo aspectos importantes son el evangelio y la vida de los clérigos) Espíritu

Santo (tiempo de contemplación y alabanza).

Ahora bien la filosofía cristiana sitúa la historia bajo cuatro aspectos: visión

teológica, un punto de partida (antes y después cuyo fin es la llegada), un proceso

dialéctico y por último un final ineluctable.

Karl Lowith en su libro el hombre en el centro de la historia considera que el

concepto de historia universal es erróneo, pues solo un mundo que existe por

naturaleza es universal, y omnicomprensivo, y nuestro mundo (vida y actividad

humana) es algo pasajero, puesto que no se explica sino desde el ser humano. Por

tanto la historia universal depende única y exclusivamente del hombre.

Karl Marx desde su materialismo histórico identifica—según él—la verdadera

naturaleza del ser humano es el de la naturaleza de la historia, puesto que él lo ha

creado con su trabajo. Por tanto la historia humana no comienza como la llamada

historia del espíritu humano sino con la producción de los medios primitivos para

satisfacer las necesidades elementales. El curso de la historia humana es un

proceso antagónico entre la lucha de clases.

Por otra parte en el occidente burgués capitalista se percibe una negación de

la existencia de un orden universal, ni un Reino de Dios, tan solo se cree en el

espíritu del tiempo, el de la época. Esto conlleva a un vitalismo puro, porque el

pasado no tiene sentido y el futuro es incierto.

Jaques Maritain tiene una visión un tanto más integral de los elementos a

considerar para la mejor elaboración de una filosofía de la historia puesto que toma

en cuenta los aportes dados por las sociedades pasados como los dados por la

Iglesia. De esta manera según él, se debe abordar la historia, tomando en cuenta

también los datos que la revelación aporta.

3.Comentario crítico

De acuerdo con lo que MarchBloch propone en su libro “introducción a la

historia”considero que toca elementos imprescindibles para abordar los datos

históricos. Así por ejemplo no aceptar de un solo golpe las definiciones que se han

dado de ella, pues no todos los datos que una persona aporte suelen ser del todo

verídicas.

En cuanto a la observación histórica se hace necesaria las diversas

perspectivas que de ella hablan y no limitarse a tomar en cuenta una sola opinión.

Porque ante un suceso o fenómeno, siempre hay diversas perspectivas, las cuales

son necesarias considerarlas a fin de que los relatos sean verdaderos aportes para el

conocimiento de la vida pasada.

Estoy de acuerdo con la afirmación “la comprensión del presente depende

también del conocimiento del pasado”. Pues el presente no está desligado del

pasado, pues aunque no sea resultado de este, tampoco puede separarse de él.

Otros elementos que Bloch no toma en cuenta es la fuerte influencia de

pensadores cristianos que dieron su aporte en este aspecto, por lo que considero

también necesaria la visión cristiana de la historia, a fin de ir integrando a esta

investigación todos los elementos posibles a fin de que sea más integral, global y no

reducida a una simple opinión secular.

El aporte de Bloch ayuda a acercarse a los libros de historia desde un punto

de vista crítico a fin de nuestra reflexión de la historia tenga fundamentos sólidos.

4.Aplicación a la realidad

En el contexto guatemalteco, puede aplicarse estas líneas a seguir para adentrarse

al conocimiento de su historia, porque no está aislada a toda posibilidad de reflexión

filosófica. Por tanto no debe aceptarse de modo ciego todos los datos elaborados en

el pasado para conservación de la historia guatemalteca, puesto que en un momento

determinado pueden ser datos falseados por conveniencia de grupos interesados a

no develar la verdad de país.

En el caso del conflicto armado acontecido en Guatemala hacia los años 70 en

adelante se pueden aplicar los cinco elementos. En una primera instancia el

conocimiento de la historia en cuanto producto del hombre en el tiempo. No puede

hablarse de historia de Guatemala si no se toma como elemento fundamental a los

ciudadanos y en caso específico quienes sufrieron las consecuencias de todos los

conflictos suscitados dentro del territorio nacional. El tiempo en el que se llevaron a

cabo todos estos enfrentamientos armados tuvieron como elemento primordial la

actividad de los militares, guerrilleros y el martirio de los hombres, mujeres y niños

quienes sufrieron por estas eventualidades.

Bloch afirmaba que la historia no puede cambiarse, pero al conocerla se

pueden entender los fenómenos actuales; en este caso que afectan al país

guatemalteco. En este apartado cabe mencionar el rol de los testigos y testimonios.

Por ello hago alusión al Mártir, Monseñor Juan Gerardi, quien funge como testigo de

todos los hechos de genocidio que se llevaron a cabo por parte de los militares. Este

testimonio se encuentra escritos en el REMING, donde están contenidos de modo

detallado los eventos de mayor relevancia tanto de los actores del conflicto como los

afectados por el mismo.

En esta línea también ubico al Padre Ricardo falla que ha elaborado libros

completos de los testimonios “Masacres de la selva”, “Quiché rebelde” en una

primera instancia personales, puesto que también sufrió en cierta manera por estos

conflictos, pero también una lista de testimonios verídicos. Aquí el Padre Ricardo

falla ha elaborado estos libros basándose no solo de una opinión sino de varias, con

las cuales se evidencia la veracidad de esos testimonios. En este aspecto específico

de la historia guatemalteca puede percibirse que estos testigos no se han basado

únicamente en una opinión o en su sola percepción sino han considerado otras a fin

de no aceptar a primera lo que su observación personal les ha dado.

El análisis de la historia de este país se hace necesario para comprender por

el pasado lo que en la actualidad se da. Porque el presente de cierta manera está

condicionada por los hechos ocurridos. Haciendo referencia a la violencia, puede

tomarse en cuenta los hechos genocidas pasados, puesto que tienen algo que ver en

este fenómeno que afecta fuertemente a la población.

En conclusión los elementos que Bloch propone son de mucha ayuda para la

comprensión de la historia, pero, sobre todo para su reflexión desde una filosofía de

la historia. La memoria histórica es fundamental en el curso histórico de un país,

pues de ella depende la no repetición de los mismos errores en el presente o en el

futuro. En base al conocimiento de la historia se puede percibir el avance

cognoscitivo y los diversos modos de pensar que se han suscitado dentro de ella con

el cual el hombre se va transformando.

Universidad Rafael Landívar

Campus en Quetzaltenango

P.E.M en filosofía

Filosofía de la historia

Padre Ángel Vicente

Introducción a la Historia

Eder Obil Pérez Ixcoy

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