Intertrigo o Enfermedad de Los Pliegues

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INTERTRIGO O ENFERMEDAD DE LOS PLIEGUES Diana Villalba; Dairo García; Carolina Benítez Resumen: El desarrollo de una dermatitis de los pliegues cutáneos labiales, faciales, vulvar, corporales y de cola, es conocido igualmente como intertrigo, que aparece como resultado de la inflamación de una zona de la piel en íntimo contacto con otra, causada por la fricción de los pliegues, con predisponencia en caninos de razas braquicéfalas, tales como Pequinés, Bull Dog Inglés y el Pug. Esta infección se desarrolla con mayor frecuencia en zonas cálidas y húmedas, donde la proliferación de bacterias y hongos como agentes oportunistas, es más elevada. Palabras Clave: Dermatitis; Fricción; Pliegue; Predisposición. Introducción: El desarrollo de la enfermedad se da a causa de que persisten condiciones óptimas de cultivo para agentes oportunistas encontrados a menudo en el entorno de nuestros animales, teniendo predisposición tanto genética como ambiental y de bienestar animal. Texto de opinión: La factibilidad patológica con un desarrollo predisponente en regiones del trópico húmedo encontrados principalmente sobre la línea Ecuatorial, permiten un desarrollo oportunista del agente etiológico. La piel sobrante forma una hendidura que retiene partículas de comida y saliva, proporcionando así un entorno ideal para el crecimiento bacteriano. La infección superficial resultante se caracteriza por un olor pútrido, con un aspecto eritematoso, a veces con úlceras, y en ocasiones está cubierta por pequeñas cantidades de exudado (Harvey y Mckeever, 2001, p.36), dando inminentes condiciones para infecciones bacterianas secundarias. En zonas donde el animal tenga absceso al área afectada, presentan un lamido intenso y frecuente, siendo este la principal preocupación del propietario por el contacto directo con el exudado. Para tener certeza del diagnóstico, un buen indicativo es la presencia de los síntomas clínicos, haciéndose necesario la toma de muestras del área afectada como frotis y raspados para descartar la presencia de agentes primarios y secundarios como bacterias, hongos y parásitos. Para hacer control del cuadro evolutivo del paciente, se hace necesario descubrir de pelaje toda la zona afectada, eliminando cualquier pelo sucio que haya, prosiguiendo con baños en champú que contengan clorhexidina o lactato de etilo, o bien un gel que contenga peróxido de benzoilo. En persistencia del exudado, se aplica una solución

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INTERTRIGO O ENFERMEDAD DE LOS PLIEGUES

Diana Villalba; Dairo García; Carolina Benítez

Resumen:El desarrollo de una dermatitis de los pliegues cutáneos labiales, faciales, vulvar, corporales y de cola, es conocido igualmente como intertrigo, que aparece como resultado de la inflamación de una zona de la piel en íntimo contacto con otra, causada por la fricción de los pliegues, con predisponencia en caninos de razas braquicéfalas, tales como Pequinés, Bull Dog Inglés y el Pug. Esta infección se desarrolla con mayor frecuencia en zonas cálidas y húmedas, donde la proliferación de bacterias y hongos como agentes oportunistas, es más elevada.

Palabras Clave:Dermatitis; Fricción; Pliegue; Predisposición.

Introducción:El desarrollo de la enfermedad se da a causa de que persisten condiciones óptimas de cultivo para agentes oportunistas encontrados a menudo en el entorno de nuestros animales, teniendo predisposición tanto genética como ambiental y de bienestar animal.

Texto de opinión:La factibilidad patológica con un desarrollo predisponente en regiones del trópico húmedo encontrados principalmente sobre la línea Ecuatorial, permiten un desarrollo oportunista del agente etiológico.La piel sobrante forma una hendidura que retiene partículas de comida y saliva, proporcionando así un entorno ideal para el crecimiento bacteriano. La infección superficial resultante se caracteriza por un olor pútrido, con un aspecto eritematoso, a veces con úlceras, y en ocasiones está cubierta por pequeñas cantidades de exudado (Harvey y Mckeever, 2001, p.36), dando inminentes condiciones para infecciones bacterianas secundarias. En zonas donde el animal tenga absceso al área afectada, presentan un lamido intenso y frecuente, siendo este la principal preocupación del propietario por el contacto directo con el exudado.

Para tener certeza del diagnóstico, un buen indicativo es la presencia de los síntomas clínicos, haciéndose necesario la toma de muestras del área afectada como frotis y raspados para descartar la presencia de agentes primarios y secundarios como bacterias, hongos y parásitos.Para hacer control del cuadro evolutivo del paciente, se hace necesario descubrir de pelaje toda la zona afectada, eliminando cualquier pelo sucio que haya, prosiguiendo con baños en champú que contengan clorhexidina o lactato de etilo, o bien un gel que contenga peróxido de benzoilo. En persistencia del exudado, se aplica una solución de Burrow (acetato de aluminio) de dos a tres veces al día durante cinco minutos. Por último, aplicar pomadas o cremas que contengan antibióticos, antimicóticos (según corresponda) y corticoides. En este punto se habla y aconseja al propietario, la intervención quirúrgica siendo consecuente con el tipo de servicio del animal por los intereses del propietario, siendo este el tratamiento definitivo.

Conclusión: Teniendo en cuenta la alta tasa de casos dermatológicos en la región, dado por las condiciones óptimas del entorno para el desarrollo de estas, se hace indispensable dentro del labor profesional ejercido, reconocer los medios para un diagnóstico clínico acertado, dando seguridad en los tratamientos y tranquilidad en el doliente del animal.

Bibliografía:

Harvey Richard G., Mckeever Patrick J., “Manual Ilustrado de enfermedades de la piel en perro y gato”, España: GRASS Edicions, Pp 36 – 37.

Sierra, Xavier (2010) Guía iconográfica de dermatología. Patología Cotidiana. http://ww2.castellon.san.gva.es/urgencias/phocadownload/gua

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%20iconogrfica%20dermatologa.pdf Recuperado 01/04/2013