III PREGÓN DEL CARGADOR

25
III PREGÓN DEL CARGADOR a la Semana Santa de San Fernando Organizado por la Asociación "Jóvenes Cargadores Cofrades" J.C.C. bajo el lema "cuando el Cargador se hace pregonero o el Pregonero cargador" a cargo de D. ˘ngel Luis Castro Haro pronunciado en el Salón de Actos del Colegio de las Hermanas Carmelitas de la Caridad SAN FERNANDO 30 de marzo de 1.985 Sábado de Pasión

description

bajo el lema "cuando el Cargador se hace pregonero o el Pregonero cargador" pronunciado en el Salón de Actos del Colegio de las Hermanas Carmelitas de la Caridad SAN FERNANDO 30 de marzo de 1.985 Sábado de Pasión D. ˘ngel Luis Castro Haro a cargo de

Transcript of III PREGÓN DEL CARGADOR

Page 1: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

a la Semana Santa de San Fernando

Organizado por la Asociación "Jóvenes Cargadores Cofrades"

J.C.C.

bajo el lema "cuando el Cargador se hace pregonero o el Pregonero

cargador"

a cargo de

D. ˘ngel Luis Castro Haro

pronunciado en el Salón de Actos del

Colegio de las Hermanas Carmelitas de la Caridad

SAN FERNANDO

30 de marzo de 1.985 Sábado de Pasión

Page 2: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 2 ~

PRESENTACIÓN DEL PREGONERO a cargo de

D. José González García

Señoras y señores, amigos todos, buenas tardes: Cuando el sábado de Pasión de 1983 se instauraba la figura del Pregonero

Cargador en la Isla, se instauraba a su vez la bonita costumbre de que dicho Pregonero elegiría a su presentador. Bonita costumbre que dejó de parecerme tan bonita cuando, hace unos meses, el Pregonero Cargador del 85 me eligió a mí como presentador. Y no es que no me parezca bonito el gesto; lo que ocurre es que pienso que no hay peor presentador de alguien que aquel que le estima en sumo grado. Y este es mi caso, ya que todo lo que pueda decir de Chiqui, puede parecer apasionado y subjetivo. Por eso voy a hablar de él lo menos posible. (Así, de paso, les evito a ustedes el tener que escucharme mucho tiempo).

Ángel Luis Castro Haro, o Chiqui, o Chico, como queramos, es un cofrade

apasionado, como muchos de los que hay en la Isla, que en realidad no son tantos como se piensa. Su actividad en la Cofradía del Huerto ha sido muy fructífera, desde que ingresó en la junta, allá por 1974, hasta llegar a secretario de la misma, en el 78. No obstante sus estudios le obligaron a abandonar la junta, lo cual no le impidió seguir colaborando con su Cofradía hasta la actualidad.

Lo mismo le ocurre con su gestión en la JCC, en cuya junta rectora ha

permanecido desde su fundación hasta 1983. Aún así sigue colaborando con ella activamente.

Es hermano además de la Cofradía de los Afligidos, diríamos que de toda la vida.

Y además también es de la Divina Pastora, de la cual formó parte de su junta, allá por el 80.

Pero, es que además de cofrade, Chico es cofradiero, que según su propia

diferenciación del término, es aquel apasionado de la Semana Santa, no necesariamente cofrade. Sólo hay que oírle hablar para comprobarlo. Su entusiasmo por la cordonería de un palio, por el balanceo del cíngulo de un Cristo, por el encanto de una marcha, por unos candelabros de cola, por la exaltación de un pregonero, por un buen mecío o una equilibrada levantá, no pueden describirse sino como un entusiasmo cofradiero.

Pero aún hay más. Chiqui es también artista. Su arte se respira en una mera conversación. No obstante, ya lo ha demostrado con creces en sus numerosas artículos para boletines cofradieros y, sobre todo, en sus dos anteriores pregones: El Pregón de la Juventud Cofrade, con el que inició su vertiginosa carrera como pregonero, en Junio del año 84, y el maravilloso canto que sólo él podía hacer de la Virgen de Gracia y Esperanza, el pasado 16 de Diciembre.

Page 3: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 3 ~

Y como tal artista que es, es posible que esté un poco loco. Es posible que donde los demás ven un cielo oscuro él vea un palio de estrellas o donde los demás ven un Paso andando por la calle él vea un candray con sus proas navegando por una marejada de gente, y muchas cosas más.

Aún así siendo lo que es, en él concurre otra actividad más, que es la de cargador, cargador de nuestros Pasos. Y es en esta actividad, precisamente, dónde el encuentra la válvula de escape para tanto contenido. Porque, siendo cargador, es, a la vez, cofrade, cofradiero y artista.

Podríamos decir que, cargando, Chiqui es él mismo, es todo él. Y, cuando uno es todo uno, es cuando el sentimiento aflora salvajemente, sin

trabas ni fronteras. Por ello, creo que el pregón que a continuación vamos a oír, va a ser el “pregón del sentimiento”, complementando así la labor de sus antecesores.

Y me explico:

El primer pregón del cargador a la Semana Santa de la Isla nos mostró ese

ambiente que rodea al cargador, esa Semana Santa de la Isla que se filtra a través de los respiraderos, envolviendo el alma de los de abajo. Esa sensación que todos creíamos indescriptible y que, sin embargo, Salvador Caldelas, magistralmente, supo infundirnos a los que tuvimos la suerte de escucharlo.

El segundo pregón nos describió detalladamente todos los elementos que

conforman la carga de los Pasos, desde el necesario aguador hasta el mágico poder de la saeta, obsequiándonos además con un, hasta ahora único, documento histórico del cargador de la Isla, todo ello bajo una bella semblanza de la “carrera procesional” de Cristo hasta el Gólgota. Pregón que fue, sin duda, el resultado de la fructífera experiencia de ese infatigable cargador que es Alberto Salas.

Pues bien conociendo a Chiqui Castro, estoy seguro que este tercer pregón será una consecuencia de esas experiencias, que narraba Alberto, vividas en aquel ambiente, que narraba Salvador, con lo que el resultado será “el sentir de un cargador”.

Y, si hemos dicho que Chico siendo cargador es todo él, o lo que es lo mismo, que para él cargar es sentir, prácticamente vivir, ¿quién mejor para participarnos el sentimiento del cargador, que aquel que, siendo cargador, está viviendo?

Sólo se me ocurre un nombre: Ángel Luis Castro Haro

Por eso él va a ser quien lleve la “voz” en este Paso. Este Paso que en la

penumbra tibia de esta presentación, ha hecho su primera levantá “a pulso”, para encaminarse hacia un público expectante, que ya espera ver asomar ese pregón por entre estas puertas de terciopelo.

Page 4: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 4 ~

Y, mientras recorremos ese corto espacio, por la nave central, hasta la salida, el pregonero-cargador, que se mantiene aún callado pegado a su almohada de folios, piensa en el camino que ha de emprender y en que deberá mandar bien para que el pregón se recoja con toda la dignidad con que se recogen los Pasos en la Isla. Piensa en lo difícil de esta salida y en que no podrá dejarse llevar por la música hasta que el Paso esté completamente fuera.

Pero, sus pensamientos se van a ver pronto segados, ya que ha llegado el

momento crucial: Y, como en toda salida comprometida, “la voz” permanecerá en silencio hasta que le avisen de atrás; y entretanto, con sumo cuidado, “arrastrando los pies”, este tercer pregón del Cargador a la Semana Santa está saliendo a la Isla. Y ahora sí. Ya está fuera. Es el momento del mecío y del arte. Ese arte-locura del que hablábamos antes. Y ese sentimiento.

Ahora es cuando, de la cola, saldrá una voz que diga:

¡Cuando quieras pregonero!

Page 5: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 5 ~

III PREGÓN DEL CARGADOR a cargo de

D. Ángel Luis Castro Haro

Una sola palabra al comenzar este Pregón: ¡ESTAMOS!

Sí, amigos cargadores, cofrades, hermanos de la Isla, señoras y señores.

“Estamos”, esa voz que nos llega desde la cola de nuestros Pasos previa al

florecimiento raudo, explosión de ímpetu, de la levantá, se hace heraldo de este pregón del cargador a su Semana Santa y pide la venia para entrar en la carrera oficial de vuestros corazones.

“Estamos” es mágica palabra que establece la unión y la oración de la Isla cargadora. Unión de treinta cuerpos y treinta almas “¡tós por iguá!” convertidos en un solo corazón bajo los palos.

Oración a Jesús y María que, en la levantá, proclama que estamos, ¡estamos contigo Jesús!, que seguiremos estando contigo María, en pos de Ti al Cielo con la levantá porque en la Gloria misma está imán que nos eleva hacia tu Inmaculada Concepción.

Y estamos con la Isla Cofradiera.

Isla Cofradiera que dentro de unas horas asistirá a la apoteosis solemne de su Semana Mayor. Ella será el Pregón, bandera al viento, proclamando nuestra FE y nuestra VERDAD. Proclamando que la Isla sigue siendo Nazarena, Cofradiera y Mariana.

Estas tres últimas palabras se repetirán muchas veces a lo largo de este pregón. Pregón al que llego con el apoyo de mis amigos y hermanos Jóvenes Cargadores Cofrades y desde el que, ahora mismo, os pido que me ayudéis a liarme en la cintura la faja de flecos de mis devociones cofradieras, que me dejéis amarrar la almohada de mi ilusión con la cuerda de pita de vuestra benevolencia fija al palo de la comprensión que tengáis hacia este cargador con alma de cofrade, que dedica estas palabras que llamamos pregón a todos sus hermanos cargadores.

Digo hermanos cargadores porque todos somos iguales bajo los palos; los de antes y de ahora, todos han sido o somos hermanos con el privilegio inmenso de ser pedestal de Jesús o peana para María. Hermanos de la Cofradía en la calle con la túnica penitente de las caídas del Paso, con el escudo alzado sobre la canastilla, Cruz y sudario en la Caridad, con el cirio de mil llamas de amor en la candelería de la Señora o en la cera roja sacramental de Misericordia, Afligidos o Medinaceli, nuestra Cruz penitencial es la propia Cruz de Jesús que llevamos sobre los hombros.

Page 6: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 6 ~

Desde este atril quiero pediros, cofrades de la Isla, que siempre sintáis al cargador como vuestro hermano, en la estación de penitencia y durante todo el año, integrado en el maravilloso programa de vida católica y cofrade que nos ofrecen las Hermandades y Cofradías.

Como ya mi compañero cargador, hermano en tantas cosas y amigo del alma, Pepe, ha puesto en carrera el Paso de este Pregón, salgo sin más, a buscar la luz de las calles de la Isla, esas calles cañaíllas que son clamor y algarabía con el júbilo de cientos de niños que, entre palmas y ramas de olivo, gozosos, proclaman:

¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanna en las alturas! ¡Gloria al Señor!

Anuncian la entrada triunfal de Jesús, Cristo y Rey, Padre Nuestro y Señor en la

Isla de San Fernando, convertida en la tarde del Domingo de Ramos en aquella apoteósica Jerusalén.

“De la boca de los niños brota la alabanza”. Los pequeños hijos de la Isla no callarán, pero, aún callando, gritarían por ellos las piedras, igual la roca ostionera que los recios muros de la Casa Lasaliana, las fachadas, las azoteas, las almenas y pretiles.

Jesucristo, sobre un burrillo de salina que jamás portara a nadie sino la sal de nuestra tierra, recorrerá en itinerario de alabanzas las calles isleñas. A su paso, una salinera morena, resulta en luna, le postrará su manto. Mientras, desde abajo, como mandan los cánones cofradieros de la Isla, “pasos cortos y a las bandas” de cargadores lasalianos darán vida al misterio.

Desde 1982 María Santísima de la Estrella va tras el cuerpo de incipientes nazarenos que acompañan al Señor. Aún permanece viva en la memoria de todos los que vimos su primera salida, aquella subida por Tomás del Valle de la Virgen de la Estrella que desde la calle Real (más Real que nunca porque por ella pasaba Cristo-Rey) parecía una salinera que subía de los caños y esteros que al fondo servían de dosel para su Paso de Palio.

Saliste a la calle por vez primera y por vez primera conoció Tomás del Valle lo que era una Virgen pasando por su calle. Ibas mecida por cargadores lasalianos en Paso de Palio azul de cielo, con las justas medidas que un mayordomo cañaílla le diera; los varales, que terminaban en estrellas, querían rascar la cal de las fachadas, las bambalinas acompasadas abanicaban y se mecían, locos de vaivenes y de repicar en la plata estaban los caireles de cordones y flequería,

Page 7: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 7 ~

y la música no paraba, el mecío no cesaba mientras la Virgen sonreía; es que al fin en la Isla estabas, al fin tu rostro el levante besaba y avivaba las llamas de tu candelería. De la Salle habías salido para que San Fernando viera lo bonita que eres Tú lo morena que es tu cara que eres Salinera en el Cielo y, en la Isla, Lasaliana. Y tienes en tu letanía el ser Reina de la Salle Virgen de la Estrella ¡Dios Te Salve María!

La por antonomasia joven Cofradía de la Isla emprenderá su carrera procesional

por las calles isleñas; en el discurrir del día, el aire triunfal de la tarde irá tornándose con el crepúsculo en rigor pasional y penitencial.

Y siente dolor hasta el viento al asistir al misterio de Pasión que recoge el dolor y sufrimiento de los azotes por nuestra redención.

Azotes de los sayones sobre la espalda de Jesús en un Paso donde perfectamente

se conjugan la majestad y austeridad. Austeridad de la caoba y majestad en el Señor de la Columna. Detrás la finura, la gracia, el encaje, la flor, el amor y unas perlas cristalinas hechas lágrimas para la Madre. La Cofradía de la Columna en la calle está soñada para el mecío, para los pasos cortos y a las bandas. Llenará nuestro gozo cofradiero el verla pasar entre naranjos de la calle Vidal o de la calle Ancha, o subiendo por San Nicolás, donde Lágrimas, mas que subir parece asuncionar desde las salinas al Cielo. Lágrimas viene en un Paso contrapunto del de Jesús; su Palio es todo filigrana que intenta aliviar la pena de la Señora, es armonía de la flor, de la ardiente candelería, del repujado barroco del orfebre y el bordador.

Pero yo soñé que un Domingo de Ramos no le pusieron flores ni hizo falta orfebrería. A la Virgen de las Lágrimas la he visto que salía En un Trono de oleajes; de sal las varas del Palio los entrevarales de estero y saltarines pejerreyes repujando candeleros.

Page 8: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 8 ~

Las gaviotas por Palio y dentro de un relicario una estela de levante en un trocito de cielo. De camarones, cañaíllas y bocas llevabas Lágrimas un traje y de sapinas y espumas lleno tu manto de encajes. Eras una Reina Salinera ejerciendo Soberana en esta Isla Marinera en esta Isla Mariana.

Isla Mariana que se hace esclava por Amor a Jesús. La Esclavitud, antiguos

penitentes, túnica negra, fajín y capirotes rojos, como una legión fervorosa, devota y penitente, procesiona delante del Cristo andante, del solitario Cristo cañaílla.

QUO VADIS DOMINE, ¿DÓNDE VAIS SEÑOR?

Regios andares y mirada que va derramando sobre tus hijos.

Cargadores, cofrades, hermanos de la Isla: ¿Queréis saber como anduvo Jesús

sobre los mares? Yo os lo diré: ¡Cargadores del Medinaceli! ¡Pasos cortos y a las bandas!

Hoy tras los pasos cortos y a las bandas del Cautivo, va su Madre la Virgen de la Trinidad.

Trinidad de nácar, jazmín y nardo. Trinidad de azúcar, marfil y llanto. Trinidad tres veces blanca, tres veces bonita Trinidad. Trinidad en el aire espuma salada. Trinidad al alba, al día y madrugada. Trinidad tres veces blanca, tres veces bonita Trinidad. Trinidad tiene tres susurros, tres caricias, tres palabras, tres lágrimas que le llegan hasta el alma, pues Trinidad está llorando en su Palio de azul y plata. Y si Trinidad está callada son tres las campanadas,

Page 9: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 9 ~

aleluyas del llamador las que le dicen en la Isla a la Madre del Cautivo, Divino Redentor, a la Virgen de cofrades, hermanos, esclavos por su amor, que es Trinidad tres veces blanca, tres veces bonita Trinidad. al alba, al día y madrugada Tú eres Trinidad, la Virgen, Madre, y la más bendita cristiana.

No tiene más remedio la Virgen de la Trinidad que ser la más bendita Cristiana

teniendo como tiene por Hijo al Señor de la Humanidad inmensa el Cristo de Medinaceli. Trinidad, Medinaceli y los hermanos de la Esclavitud realizarán Estación de Penitencia en las Capuchinas, luego bajando la calle Cervantes las cornisas del Palio de Trinidad besarán las otras cornisas, las de la calle, las que antes halla bendecido con su mirada redentora el Señor de Medinaceli. Después de la angostura irán al encuentro de la recogía cuando ya el día esté tocando a su fin.

Ya en Lunes Santo, Amargura y Afligidos, Estudiantes, cuerpo de nazarenos rojiblancos en ordenado discurrir por las calles del Cristo.

Pero no todo es del color rojo y blanco en la Procesión de afligidos en la calle. El manto azul de Amargura cae sobre la canastilla del dorado Paso. Y éste, su

hermano, que cambió el cirio por la almohada para amarrarla bajo su manto, siente todos los Lunes Santo a su Madre de la Amargura más cerca suya que nunca, siente el dulce peso de la Amargura de María repitiéndose una y otra vez durante la noche, Amargura en el camino, Amargura en la marcha procesional, Amargura azul de su manto entre los respiraderos y Amargura en las azules caídas del Paso de Afligidos que son rojas por fuera pero por dentro van azuleando el corazón de los cargadores y acrecentando más y más la devoción amargurista.

Ésa fue mi gran suerte, no la de cargar Afligidos sino la de aprender a quererte Amargura.

Y una gran calle de la Amargura se hace la Isla entera pluma y pergamino, rojiblancos estudiantes hacen carrera, penitente y nazarena, ante María y Jesús de los Afligidos. Guiños de luz, susurros de fuego, salen de brazos que alzan al cielo corazón de cargador, cofrades isleños que a Ellos les quieren rezar meciéndoles a paso lento.

Page 10: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 10 ~

¡Qué larga vía! ¡Qué empinada cuesta! Cirio rojo, música, incienso, cofradía,... Es la Hermandad de Estudiantes que va de recogía...

Como va de recogía Ecce-Homo por la Pastora, al son de trompetas imperiales que

presentan a Jesús al pueblo. 5

Las calles pastoreñas son un Pretorio romano de patiovecinos encalados, macetas de yierbabuena, blancas almenas de cal en un Barrio que huele a mar. Ecce-Homo, de esquina a esquina, de trepá en trepá, va entregando su vida En torrentera de Humildad. María Santísima de la Salud es la Virgen Capitana en la travesía nazarena y mariana de Ecce-Homo Jesús. Al timón lleva a San Juan en el Lunes pasional del que Salud es soberana. Es la rosa temprana que perfuma la Pastora, de la calle Ancha hasta la Albina todo el Barrio le implora, ante Salud se arrodilla, y en un requiebro por seguirilla le dicen a la Señora:

Danos tu nombre Salud, Celestial Enfermera, que hasta sanas a Jesús escondiendo toas tus penas.

La Virgen de la Salud esconde las penas porque contiene sus lágrimas de bonita

que es.

Y también por bonita, quiero gritarle bajo su Paso a la Virgen del Huerto el piropo que repite todos los años, antes en la Pastora ahora en cualquier ventana del Cielo, el hermano cargador que ya no está a nuestro lado:

Page 11: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 11 ~

¡Qué bonita va!

Así bajando calle Ancha Gracia y Esperanza como ya le canté el 16 de Diciembre

hoy tan solo pondré mi alma, mi corazón en la voz para repetir su oración:

¡Dios Te salve, Virgen del Huerto, llena eres de Gracia y Esperanza!

Pero contigo si Jesús, contigo quiero bajar por ese enclave cofradiero, carrera de

naranjos repujada de azahares por la primavera. Antes he pediros silencio. Silencio en la noche, pueblo cañailla, que entre los olivos del Huerto un hombre, Hijo de Dios y Hermano nuestro, Sangre y sudor en la frente, la mirada en el Cielo, le reza y habla al Padre diciendo:

“¡Ay que solo en el Huerto me encuentro Aleja de mi este Cáliz que me tortura Mas no sea mi voluntad sino la tuya”

Al lado de Jesús se ha posado un Ángel que ha venido a confortar al Señor. La Isla también le quiere confortar, aliviarle del dolor y sufrimiento con que su Pasión comienza a hacerse Cruz en el Huerto. Y, como en un candray, en un Paso le llevan, mecido a los vientos de cornetas, surcando entre naranjos de las aceras la verde marejada del Huerto en la calle hará de la procesión marinera singladura: Espumas de las olas serán los azahares, el olivo, alto mástil, sus ramas lleva por vela, los respiraderos de madera hacen de recia quilla con caracolas encendidas brillando en las esquinas. En la proa un comandante ha bajado del Cielo: Es el Ángel de la Amargura que señala firme el rumbo que hacia lo más alto apunta. Y, abajo, un marinero cargador, con un grito que su orden cumpla dirá con fuerte voz:

Page 12: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 12 ~

“¡Al Cielo con la Oración! ¡Qué Jesús, Nuestro Señor, está rezando aquí en la Isla!

La oración de Jesús encontrará la Gracia y Esperanza de María en la recogía del

Huerto que sigue fiel a lo que siempre ha sido una recogía en la Isla. A éste, su hermano, cargador de la Virgen, que siente bajo el palo el contacto del

Señor cuando frente a frente la mira en la ferviente bahía que es la Plaza de la Pastora, le gustaría decirle:

Señor de verde luna tiene el color de aceituna tu santa cara morena. En el huerto de las penas queda Esperanza una ¡Mira Señor a Tu Madre! Tú eres de buena cuna y María es la azucena que está perfumando tus venas ¡Mira Señor a María! de Gracia y Esperanza llena es la rosa escogida que a tu sangre dio la vida con su Gracia Nazarena. ¡Mira Señor a María! ¡y mira Señor a tus hijos! Que, del Palio al olivo, de fervor están cautivos, están locos de amor, de las esquinas a la Plaza, desde el Dolor a la Cruz, la Pastora es alabanza por el Huerto de Jesús y Su Gracia y Esperanza. Y hay otro Huerto aceitunero a la verde luna marimorena que funde plata en el olivo. Presentimiento del Cautivo, ayes de ojivas del tormento, las calles del Parque son olés pa el Prendimiento, quieren ser una sonaja para alegrarle su Huerto, un pedacito de Gloria

Page 13: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 13 ~

es el Parque pa el Prendimiento. Lenticos de filigrana, las aceitunas son caireles, alamares de hojas verdes, el Amor de rama en rama. Justo Señor del Parque, Prendimiento, Pare mío, dime, Jesús ¿Por qué te llevan a Tí prendío? Dime Jesús ¡Por qué! Siendo Tú el más bueno, siendo el mejor nacío De entre tos los nazarenos. Dime, sentrañas morena, ¿por qué la Isla te ha prendío? Quisiera tener una escalera para subir a Tu Paso y quitarle la siga al romano con que te lleva prendío, pa que no salgas de San José Artesano, no vengas a la Isla preso, ya la soga del romano entre tos la habremos partío Libraremos tus atadas Prendimiento, Jesús mío, que siente pena el aire, hasta el Parque y hasta el viento, cuando te llevan prendío.

Dentro de sus penas, tiene alegría el Barrio por que siente con él el Buen Fín de

María, la más bella rosa de abril en el jardín del Parque.

Alegría y pena del Martes pasional.

Cuando ya ni la luna luce en el cielo de San Fernando, que de luto se viste en la noche de Martes Santo, la Virgen de la Caridad, llena de blancas sedas, y de negro luto llena sobre su argéntico Paso,

Page 14: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 14 ~

es Gaviota de San Francisco, Golondrina por Comedias, que, en vuelo corto y las bandas, pasito a pasito nos llega. Una mano sobre el hombro de Jesús, la otra al Cielo levanta buscando confortación por el Hijo que duerme a sus plantas. ¡Ay Señor de la Clemencia! Tú no lloras con Ella La Virgen de la Caridad llora con la Isla entera. Dios Padre, en el firmamento, llenó el Cielo de estrellas para que sea Palio de Amor de Nuestra Caridad Isleña. Y a la Caridad de la Isla, es su Barrio de San Francisco, todo un clamor por Comedias, el que le pone corona de saetas, cantadas a pulmón, al temblor de la cera, traspasan la oscuridad y hasta le besan las saetas a la Virgen de la Caridad, Gaviota de San Francisco, Golondrina por Comedias, que, en vuelo corto y las bandas, pasito a pasito nos llega.

Como pasito a pasito viene a la Isla el Señor del Gran Poder.

No podían imaginar los cofrades isleños que la Barriada Bazán, con sus bloques de

pisos, se convertiría en un autentico Barrio Cofradiero el Miércoles Santo para su hermandad.

Habrá que ver a Jesús del Gran Poder por su Barriada. Cuando asoma a la Salina de San Juan, hasta el puente Suazo parece que se arrodilla, los eucaliptos llorones con su sombra le cobijan y las compuertas del estero quieren abrir el surtidor salado de su canilla salinera pues hasta la espuma quiere hacerse nazarena para Jesús.

Como Nazarena quiere ser Nuestra Señora del Amor que le espera en su capilla hasta que el año que viene sus cofrades la lleven tras su Hijo, en el Paso de Palio.

Page 15: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 15 ~

Quedará en el aire para Jesús del Gran Poder la oración hecha poesía del primer cargador que se hizo pregonero en la Isla:

Almenas del horizonte vigias de la Humildad por los camino de nadie Tú me enseñastes a amar. No te amé en el incienso, ni entre música y flores, que yo te amé bajo el palo, Jesús del Gran Poder, Amor de los trabajadores.

Por esos caminos de nadie que anda Gran Poder se escucha un tañer de

campanas que nos empuja hacia el Cristo. Caja Musical del Cielo, campanas de Vera-Cruz Repicad al Miércoles Santo que va a salir Jesús. Repicad campanas de Vera-Cruz, Que fuerte nos late el corazón y espera San Fernando que a su Isla salgas Tú, Cristo de la Vera-Cruz. Las campanas al aire están volteando y el niño y la chiquilla, impacientes, aguardan en la Plaza de tu Capilla que sea ya la salida. Todo el pueblo con fervor verá salir la procesión. Al frente una cruz con corona de espinas y clavado corazón de la Virgen del Mayor Dolor. Luego vendrá la devoción, las hileras penitentes que acompañan al Señor. Hasta que llegue la gran emoción: Las campanas se habrán callado, un nudo en las gargantas; nuestro cuerpo se habrá erizado y en el silencio un clamor: Todo el Calvario en un Paso, en la Cruz, nuestro Padre Jesús; junto a El, su Madre, llorando

Page 16: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 16 ~

¡Cómo lloras por El, Virgen María! ¡Cómo lloráis por El, santas mujeres! El Amor de los amores a su Pasión se ha entregado; sufriendo mil dolores, en su cuerpo magullado, nos está redimiendo de nuestras culpas y pecados. Y la Isla también le llora, y la Isla también le reza, y este cargador cofrade le implora: ¡Ay Señor de la Vera Cruz quisiera ser tu cargador y al llevarte a Ti, Jesús, portar, además de la Cruz, a la Virgen del Mayor Dolor!”

Mayor Dolor en siete Dolores de María, Mater de los Servitas, Madre Amable y

Admirable ante la Buena Muerte de Jesús. Como siempre, Cristo delante, pero, como nunca, ahora serán hombros penitentes algunos femeninos, los que porten a Jesús en la inmejorable parihuela de su propia Cruz. La Virgen, Reina de los callejones de su Barrio, reina de todos los lutos, irá detrás. Habrá que ir por San Gaspar donde las Hermanas Capuchinas, desde su balcón de celosía celestial, le están tejiendo un palio de malla de cielo que contenga su Amargura.

El silencio, acrecentado por las cargadoras alpargatas meciendo a las bandas a la

Virgen de los Dolores, está revolucionando a la Gloria toda: Los ángeles han formado una banda de música y le están tocando a la Reina de los Cielos desde el Cielo mismo.

Cuando la Mater va por San Gaspar, Estrella Sublime. Por San Esteban, Rocío. Por el Callejón de Ánimas, entre el humo del incienso y el del pan tierno del

horno, irán las notas triunfales de Virgen de las Aguas. Y, hasta cuando venga asuncionando por Dolores, serán Campanilleros los

que quieran secar sus lágrimas en esa celeste letanía musical para la Mater Dolorosa, Reina de los Cielos y Reina del Silencio en la Isla.

Silencio redoblado de tambores para el Cristo del Perdón

Iglesia de la Inmaculada, Plaza de San Juan, Barrio de la Casería. Pueblo de la Isla pescador y hortelano. Deja que me una a ti para alzarlo con nuestras manos, deja que sea su cargador

Page 17: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 17 ~

pa mis pecados ir penando ¡Pueblo de la Casería! ¡Déjalo! Que es Jueves Santo y ha de salir el que en la Cruz se muere perdonando. Saldrá Nuestro Padre Jesús: Altares para Él serán las araucarias y huertas. Las pitas y los sembrados, y las casas casereñas se postrarán a su lado. En su caminar, lo verá un Hospital donde los enfermos le rezan. Y luego los cuarteles y el Panteón. la Estación y la Glorieta, querrán ser sus nazarenos, portar también la cruz, como las filas penitentes que acompañan a Jesús. Pero sólo lo verán pasar se tendrán que conformar Con que sus árboles le hagan un arco triunfal y sea un dosel de primavera la verde fronda de los jardines por los que el Perdón Se adentra en San Fernando. Arribará en La Isla con su embajada de penitencia. Irá mecido por calles y esquinas. Los cierros y las almenas, y, en los balcones, azucenas quieren ser sus acompañantes. Los cierros para verle, las almenas para alabarle, y azucenas para perfumarle y aliviarle de la muerte. Los redobles de tambores, el cansancio y los sudores de sus cofrades cargadores, van llevando al Perdón para que los isleños lo vean, para que sepa La Isla que, aunque sufra el Señor, Él, con la mirada en el Cielo, para nosotros sólo tiene... Perdón.

Page 18: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 18 ~

Irá haciéndose de noche y, ya cuando el Jueves Santo termina, en la noche oscura, el Cristo camina iluminado por cuatro hachones, el paso lento y cansado, cruzará el Puente donde empieza su Barrio. ¡Puente de la Casería! Deténlo en tu calzada para que la Luna que lo mira le iluminase la cara y los Ángeles la vieran con el espejo de plata. Que aquí en la Tierra, aquí en La Isla, la plegaria se hará oración, la oración se hará canto para rezarle al Perdón la primera saeta de Viernes Santo. Ya es de recogida; por el Camino de la Cruz su sombra va dejando. El Castillito y el Arco de la Aurora, oscuros y callados, un año más lo verán pasar: Su cuerpo de sangre cubierto, clavado de pies y manos, sus dos brazos abiertos derraman amor a sus hermanos. Y un anciano, moreno de sol y de levante, su piel oscura y arrugada, de pescar y navegar trasegando con la mar, dos lágrimas de sus mejillas dejará escapar y, mirándole a Jesús, en un murmullo dirá:

¡Qué gran suerte haberte visto que hoy contento moriría Santo Cristo del Perdón Señor de la Casería!

Si ahora, hermanos de la Isla, venís conmigo al Barrio de la Pastora, la mujer Verónica nos extiende un paño con el que recogió la sangre y el sudor de la Santa Faz del Señor. Las blancas casas pastoreñas alargan los brazos de sus cornisas dejando caer, desde ellos, los lienzos de cierros y balcones que quieren contener no ya la milagrosa Faz del paño de Verónica, sino la sombra de Jesús el Nazareno, Señor de la Misericordia que asciende por la cuesta de Marconi (calle de la Amargura isleña) bendiciendo a su artesano, trabajador, marinero y mariscador Barrio de la Pastora.

Page 19: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 19 ~

Un hombre cogido a lazo de entre los del pueblo, ayuda a soportar el peso de la

cruz, más pesada aún en los últimos repechos de la cuesta, esa cuesta que pone al Cristo mirando al Cielo (como dijo un hermano de la Misericordia). Detrás las valientes mujeres de la Isla, penitentes en la penitencia de la Misericordia. Todavía tendrá fuerzas Nuestro Padre Jesús para, cuando de la vuelta por Santo Domingo, cruce su mirada con las de aquellas buenas mujeres de la Isla que, como aquellas otras santas Marías, han ido a su encuentro.Repetirá en ese momento las evangélicas palabras:

“Hijas de la Isla, no lloréis por mi”

Y es que pena la Isla en el crepúsculo de la tarde ¡Ay pena de Jueves Santo! ¡Ay pena de la Pastora! Celeste pena nazarena, pena negra de los hermanos, pena de penitencia, blanca pena de Verónica, sudor y pena cirinea y cargadora.

Y siente pena el aire, y la afilada pena de la saeta reza y llora por sus tercios:

Bendice a tu pueblo Señor, deja que llevemos Tu Cruz, que aliviemos tu dolor, que nos da la fuerza y el amor Tu Misericordia, Jesús

En el trono azul y plata del Paso de Palio viene la realeza de María, Madre de la

Piedad, Reina de la Iglesia en esta su Cofradía que, por Sacramental, tiene especial significación eucarística. Lo que no acierto a comprender es

¿Cómo pudo la Isla estar la tarde de Jueves Santo sin la Virgen de la Piedad? ¿Cómo pudo estar la Pastora sin llenarse su Plaza y Marconi con la Piedad de la Señora? ¿Cómo pudimos nosotros esperar tanto para hacer realidad la ilusión cofradiera de a la Isla ver salir en Jueves Santo de la Pastora en primavera, a la Virgen de la Piedad, que es isleña y nazarena, que es la Madre de Dios, que es de siempre la más buena, la más dulce y bella flor, la más bendita Salinera que recoge la sal de nuestro amor

Page 20: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 20 ~

en ésta, Su Isla Nazarena?

Es que la Isla, en la noche de Jueves a Viernes Santo, se hace Nazarena para Jesús; nuestra buena gente, nuestro pueblo cañaílla, le dice a esta noche la noche de Jesús: Pues, en la Isla de León, en nuestra Isla de San Fernando, decir Jesús es decir Jesús Nazareno.

Y ante Jesús el Nazareno, Señor Soberano, Patriarca de la Isla, tenemos todos los isleños una cita en esta noche. Una devota y fervorosa legión será la penitencia de la Cofradía. Los cargadores del Nazareno interpretarán amorosamente el pasito holandés, llamado así pues fue un cargador, que venía todos los años desde Holanda (donde trabajaba) para amarrar bajo su Paso, el que lo inventara. Llevando por las calles a Jesús, serán Padrenuestros las levantás, Yo pecador las trepás y cada fondo servirá de reflexión para promesas penitentes y saeteras.

Saetas que atraviesan la madrugá, saeta anónima salida del corazón agradecido al milagroso Nazareno o salida del compás hecho rezo, del duende flamenco hecho oración injertada en cante que los buenos flamencos de la Isla le cantan a su Nazareno.

Camino vas de la muerte, Jesús de la Isla el mayor Gobierno salinero, ¡No hay quién sufra como Tú! ¡Ay Pare mío Nazareno! Lirio tronchao por la Cruz.

En el palio de la madrugá, siete dolores traspasan el corazón de María.

Puñales como saetas llevas clavados, septenario de Dolor en tu pecho, Dolores. No hay bálsamo mejor, no hay mejor oración en el alma del poeta, Que decirte, Madre de Dios, que decirte, Madre Nuestra, que no hay Dolor en tu Corazón pues tu Gracia plena La que lo llena de Amor, Amor que no Dolor, Madre Bendita de Dios, Madre Nuestra Nazarena.

Nazarena Virgen de los Dolores, recibida por una alborada de luz cuando pisan la

tarima los cargadores del primer palo de su Paso. Nunca la luz viste tan de gala, nunca la luz es tan blanca, como cuando en la oscura madrugada quiere ser luz que ilumine la luz de María, María de los Dolores.

Page 21: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 21 ~

Si, para la Virgen Hermana de los Servitas, el pregonero cargador imaginó una banda de ángeles soñando marchas en el cielo, a la Virgen de los Dolores Nazarena serán los músicos de la Isla los que en sus notas musicales le irán diciendo:

Rocío del Cielo, Estrella Sublime de la mañana, ante Tí pasan Campanilleros Queriendo acunar tu Amargura con triunfal Virgen de las Aguas Y el amoroso trío de la marcha de tu Hijo: “Nazareno”

Oración musical hecha letanía que también se escucha por la Alameda. El Silencio

va de recogía.

Los árboles de la Alameda son cuentas de un Rosario que la Isla le reza a su Esperanza. Entre árboles, Avemarías serán mecíos a las bandas, pespuntes amorosos de un Palio, mágica sinfonía de la Esperanza de San Francisco que, entre luces, flores, cirios y oros, salió de la Castrense Parroquia que entre sus muros hubiese querido retenerla; pero, esa pleamar mariana que es su Paso de Palio, brillará en la noche oscura de Viernes Santo rompiendo el negro Silencio de Expiración con la verde Esperanza de la Madre.

Que no le pongan claveles al Cristo de la Expiración, porque de sangre los lleva dentro de su corazón.

Rezará, cantándole, una saeta, mientras que a María, de piropos en oración, le dirá el saetero:

Esperanza de la Isla, al ser tu cara divina tan bonita con tu llanto, eres Estrella que iluminas al Silencio en San Fernando.

Silencio de Expiración y sinfonía de Esperanza van pasando por la Alameda. Este pregonero cargador no puede evitar la emoción viendo a Esperanza por la Alameda. No puedo evitar el recordar a mi Virgen del Huerto acunándose entre naranjos de la calle Ancha, al ir tras Esperanza, siguiendo su verde manto, bebiéndome su incienso, derritiéndome como se derrite la cera en los candelabros de cola; no puedo evitar el recordar a Gracia y Esperanza, a la que en vísperas de la festividad de la Expectación de María le pude cantar lo que ahora me gustaría ofrecerle a la Esperanza Hermana, viéndola como la estoy sintiendo ahora, meciéndose al aire de la saeta rezada desde un cierro de la Alameda.

Page 22: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 22 ~

Aquella saeta se acunó entre sus varales, se hizo requiebro en las borlas y caireles de la flequería de su Palio, y hasta a los ángeles de plata que la veneran en la trasera de su Paso les hizo exclamar:

Arca de Nueva Alianza, Fuerte Torre de David, oración, quejío y alabanza ¡Ay Virgen de la Esperanza! la saeta es para Tí.

Después de la saeta, pasaron los campanilleros, pero de eso ya no os puedo

hablar, pues creí que estaba en el cielo.

Cielo de la Isla que presiente en la madrugada el Desamparo bajo Palio de María.

Cielo de la Isla que, igual que en la Anunciación, en la tarde del Viernes Santo, con el levante o la brisa, le irá susurrando a la Virgen de la Soledad:

Alégrate, Llena de Gracia, el Señor está contigo. Alégrate Soledad, aunque en tu negro manto se posaran mil estrellas, y en tu rostro santo brillasen como perlas las lágrimas de tu llanto, ¡No llores más mi Señora! que se alivie tu dolor; confórtate de la pena de que tu Hijo, Nuestro Señor, con su muerte nos dejara ¡Alégrate Soledad! que un Ángel anunciará, en día glorioso y triunfal, que Cristo resucitará. Por eso no llores más ¡Alégrate Soledad! que el Hijo de tus carnes en Cielo y tierra siempre estará, y, si hoy al Sepulcro le llevan, pronto glorioso triunfará. Por eso no llores más ¡Alégrate Soledad!

Como queriendo aliviar la pena de Soledad, los hermanos de su Cofradía llaman a su Hijo con la preciosísima advocación de Cristo de la Redención.

Page 23: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 23 ~

Y en un magno Paso, enmarcado por cuatro hachones, con los buenos varones que le trasladan, cofrades de Soledad le sacan a la calle para que le ilumine la salada claridad del día, para que el levante salinero le envolviese su talle y quieran ser las paredes de cal de las fachadas blancos sudarios que porten al señor, en el suave columpio de mecíos con que llevan en procesión al mejor de los nacíos, al Cristo de la Redención.

Redención que ha de pasar por la muerte de Jesús. Jesús desde el Carmen sale a

la Isla dormido en su Santo Entierro. Quién sabe si algún Viernes Santo no muy lejano realice la Estación Penitencial a hombros de sus cargadores; por hombros que le falten no será, como tampoco le faltan a su Madre, entronizada en el último Paso de Palio de la Semana Mayor.

Si la veis por el Barrio del Carmen, de recogía. Mirad si puede haber Mayor Dolor en su Soledad. Mirad si puede ser que haya mayor candor y bondad, mayor dulzura y piedad, en un rostro de mujer. Miradla entrevarales pasar ¡Decid si no es verdad que fue gubia celestial la que la pudo tallar! Miradla ¡Qué bonita va! El Carmen es saeta, es clavel, se hace cuna al adormecer ese cielo de madrugá. Es caricia angelical, es llanto de mujer. Levante en calma es. La Virgen, blanca azucena, de espuma, sal y de cal tiene el alba de su piel. Y, al cielo la levantá, deja la Isla a sus piés. Y, al mecerla, al andar,

Page 24: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 24 ~

¡Ten cuidao, buen capataz! ¡Mira que no puede habé Mayor Dolor en su Soledad!

El repique de campanas por la Resurrección, redoblando aleluyas, tocando

arrebato de Gloria, tendrá que ser lo que nos haga bajar de la nube de emociones y nervios en la que estamos inmersos durante la Semana Santa.

Cristo Resucitado, en su jubilosa jornada, nos llama a la unión y a la comprensión entre todos, cofrades y cargadores, porque todos somos hermanos.

Llegado a la recogía de este Pregón. Quisiera ofrecer una oración final a Jesús y María, y nada mejor para ello que intentar traeros aquí, con mis palabras, la peculiar manera de rezar que tiene el cargador de la Isla llevando por nuestras calles al Cristo o a la Virgen de sus amores.

Así a María la llevará suave y acompasadamente como el trío de una marcha procesional:

El Mayordomo con el martillo ya dió los primeros toques de campana, Los Cargadores se apretujan bajo los palos los de las patas por derecho, los demás a medio gancho y la Voz pregunta: !Cola! ¿Estamos? ¡Estamos cuando quiera!, dirá la cola. Y la Voz al Mayordomo: !Toca! Y tras el tercer toque de campana y un !Al Cielo con Ella! será alzado el Paso de Palio sin que apenas se note. Ninguno de sus doce varales se habrán inmutado, apenas se rozaron las flores en sus jarras de alpaca, el pañuelo que lleva María, ningún pliegue ha desbaratado pero, en su mano, las cuentas del rosario se han balanceado; sonando a cristal tintinearon, las tulipas en los candelabros de cola; aterciopelando el aire las bambalinas rompieron como olas y, temblando, las llamas de la candelería recibieron una brisa mas alta, mientras que de las caídas surgieron cargadoras alpargatas y, de ellas, silentes y trabajadoras, del amor de los que las portan, se hará posible la armonización de un primer mecío, de un crujir de los varales en sus tinteros, de un alegre repiqueteo de los caireles en la plata, que con el !Quieto ahí! Y el !Vámonos! compondrán las notas clásicas con que empieza la trepá. luego los sones de una marcha procesional, el suave ritmo acompasado del Palio, pareciendo que flota con los cordones como batutas al son que ponga el personal de abajo, ejecutando la tradición: !Cargador pasos cortos y a las bandas! Así es cómo la Isla lleva a María.

Page 25: III PREGÓN DEL CARGADOR

III PREGÓN DEL CARGADOR

A la Semana Santa de San Fernando Ángel Luis Castro Haro

~ 25 ~

Y es que al ver sus lágrimas quisieran consolarle del profundo dolor de Madre que siente como nadie lo que su hijo ha sufrío, pues, siendo Virgen, es Madre del mejor de los nacíos, y por eso, a Ella, Bendita entre todas las mujeres, irán dedicados todos los mecíos de esta Isla que así le quiere y le reza:

Nunca nos falte Tu Gracia, causa de nuestra alegría, Reina de salinas y esteros; bendice a este pueblo marinero, bendice a la Isla María.

A Jesús: La Isla le pone martillo, la Isla le pone compás, la Isla le pone cornetas, tambores y majestad. A los Pasos de Nazarenos, Crucificaos y a los Señores. Y debajo la Isla pone, Llevando de cargadores Su corazón, su almohada, Y el alma para cargar.

Real Isla de León, 30 de marzo de 1.985, Sábado de Pasión

Ángel Luis Castro Haro (Joven Cargador Cofrade)