¿CUÁLES SON LOS USOS QUE XAVIER ZUBIRI APALATEGI DA A LA PALABRA REDUPLICACIÓN?

Introducción: este trabajo busca continuar la investigación iniciada en la Maestría en Filosofía Latinoamericana, acerca de cómo es posible la superación de la metafísica de la subjetividad. En ese caso, la búsqueda se hizo con base en el pensamiento de Danilo Cruz Vélez y Martin Heidegger, mientras que en esta ocasión se hará con base en el de Xavier Zubiri Apalategi. Pero los tres filósofos van en la misma línea: ¿cómo dejar de operar con conceptos subjetivistas?, ¿cómo tematizarlos para dejar a un lado dicho supuesto, en pro de la búsqueda de las cosas mismas?

La pregunta que funciona como eje central de la indagación se puede entender de manera más concreta, así: ¿en qué se diferencian las expresiones que implican binas o duplas, hechas por Xavier Zubiri Apalategi, de las hechas por Edmund Husserl? es decir, ¿las expresiones zubirianas que aparentemente son dualistas, tales como «reduplicación», están enmarcadas en la metafísica de la subjetividad como las de Edmund Husserl («yo natural» vs. «Yo Trascendental», por ejemplo) o responden a otro marco referencial?

La justificación de la pregunta está dada por el notorio parecido que hay en la forma de las expresiones husserlianas y zubirianas (recordemos que este último empezó su camino filosófico siendo fenomenólogo), señaladas pertinentemente por el Doctorando Miguel Antonio Fonseca, en su conceptualmente robusta y lúdica ponencia intitulada: Capítulo 2. El problema de Dios en cuanto problema. ¡Despertad, nos llama la voz! Por dicho motivo, para saber si hay diferencia o no entre ellas, se revisarán los usos que Xavier Zubiri Apalategi hace de la palabra «reduplicación». Esta última tarea será, a su vez, la delimitación del problema, lo cual significa dejar por fuera muchas otras expresiones que también implican binas y que, por tanto, dan la sensación de que Xavier Zubiri, como Edmund Husserl, quedó inmerso en la metafísica de la subjetividad. Pero, ¿no hay nada más allá de esa simple sensación?, ¿no hay una diferencia, en este caso no sustancial (hypokeímenon), sino sustantiva (hyperkeímenon)?, ¿uno de los grandes denunciadores de la metafísica de la subjetividad se quedó preso en esa jaula de conceptos? con estas últimas preguntas, que apuntan en respectividad al sentido pleno de la obra zubiriana y no sólo a unos momentos aislados de su obra, se avizora la posible respuesta.

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La reduplicación apunta a la unidad de materia y forma. En el caso de las cosas, la materia se refiere a lo físico, a las cosas reales en tanto que reales. Lo formal o metafísico está relacionado con lo real como «de suyo». Pero este «de suyo» no se opone a lo material, como sucedía en la metafísica tradicional. Más bien, es una formalidad real. Esto implica que lo real no se reduce a lo material. Incluso en el empirismo, hay realidades “trascendentes” que se perciben “por medio” de los sentidos y hay realidades inmanentes como nuestra mente, así no la “percibamos”, ya que ella es la que “percibe”; y en la teología, hay realidades metafísicas, obviamente, no “perceptibles”, como Dios. Lo que físicamente es principio de unidad [materia] es lo que metafísicamente se convierte en objeto de la filosofía [forma].

En el caso del hombre, la reduplicación se refiere a la unidad de materia (“de suyo”, personeidad) y forma (“suyo”, personalidad). Con base en esto, y para explicar mejor el asunto, me sirve inventar lo siguiente: “de su yo” (este brazo es de su yo, vino con él cuando nació, así como su capacidad de inteligir), que es diferente a “su yo” (la personalidad con la cual no nació, pero que elaboró). Como dice:

GRACIA, Diego. La antropología de Zubiri, en Juan A. Nicolás y Óscar Barroso (editores), Balance y perspectivas de la filosofía de X. Zubiri. Comares. Granada. 2004, pp.87-116.

En la aprehensión yo no sólo aprehendo el de suyo de la cosa, sino que también me aprehendo como de suyo, y además como un de suyo muy peculiar, que él llama formal y reduplicativo. En efecto, yo me aprehendo, en primer lugar, como un de suyo material, es decir, como algo que tiene realidad o de suyo (por supuesto, realidad intraaprehensiva). Pero además, y en segundo lugar, me aprehendo como un de suyo formal, es decir, como un de suyo capaz de apropiarse o hacer suyo su propio de suyo. Eso es lo que Zubiri llama “suidad formal”, que para él es la definición de persona humana

p.96.

Reduplicación es sinónimo de Remisión, cuyo antónimo es retención, condena, es decir, lo propio del animal que está condenado o retenido, por ser esencia cerrada, a ser lo que es, el mismo. Sin embargo, remisión también es sinónimo de “tránsito” (envío, transporte)