I)[1].6 - LOS HUESOS.

18/04/23 Ricardo Cofré Retamal. 1

LOS HUESOS

Desde los primeros, tiempos, aun antes

de que nuestra disciplina fuera denominada por

Hanns Gross, “Criminalística”, los huesos han tenido

gran importancia en la determinación del

delito y, por ende, del hechor y de la

víctima.


LOS HUESOSESQUEMA GENERAL DE LA

MATERIA1. Generalidades.

1.1 Protección, fijación y rastreo.1.2 Hallazgos de osamentas.

2. Identificación de restos óseos.2.1 Determinación de la especie.

2.1.1 Examen anatómico macroscópico.2.1.2 Examen anatómico microscópico.2.1.3 Métodos serológicos.

2.2 Determinación de la edad. 2.2.1 Vida intrauterina. 2.2.2. Niño después del nacimiento.2.2.3 Púber y adulto.

2.3 Determinación de la talla. 2.4 Determinación del sexo.2.5 Determinación de la raza

3. Huesos calcinados.


LOS HUESOS Generalidades.

1.1. Protección, fijación y rastreo.

Rastreo.

El rastreo es de sumo interés y, para ello,se deben seguir las normas ya tantas veces repetidas en lo relativo a la

protección y fijación del sitio del suceso.

Protección.

Para la protección, deberán tomarse iguales precauciones que las

tantas veces indicadas.



1.1. Protección, fijación y rastreo.

Levantamiento, embalaje, rotulado y transporte.

Para remitirlos, habrá que embalarlos cuidadosamente por separado, según la posición o sitio del hallazgo, sin limpiarlos por ningún motivo de las sustancias cosas a ellos adheridos.

Si el estado de putrefacción es avanzado, conviene tratarlos previamente en formalina al 10%, como para los trozos de

epidermis.



Fijación.

Una buena fijación por medio de todos los elementos auxiliares ya

conocidos: dibujo, planimetría, fotografía y modelado, hará fácil recordar

al investigador, los restos óseos motivo de una indagación judicial.

Indicios o huellas agregados.

Los indicios agregados , tales como pelos, fibras, sangre, semen, armas, pisadas, deben y tienen que tomarse en cuenta para el

estudio propiamente identificativo de los huesos, que veremos a continuación.

Las reglas a seguir son las mismas ya vistas anteriormente, así que no

vale la pena redundar.

1.1. Protección, fijación y rastreo (Continuación)



1.2. Hallazgos de osamentas.

Los hallazgos de osamentas causan un especial revuelo en la opinión pública, particularmente por los acontecimientos

ocurridos en nuestra historia reciente.

Sin embargo, al margen de los bárbaros delitos en que se encuentra involucrada la violación de derechos humanos, en que las osamentas encontradas corresponden a personas con una data de muerte entre veinte y treinta años de antigüedad, frecuentemente, en delitos de tipo común, suelen encontrarse

osamentas en forma espontánea o por búsqueda.



1.2. Hallazgos de osamentas (Continuación)1.2.1 Hallazgos espontáneos.

Casi siempre son detectadas por el olor de la putrefacción, el que determinará su hallazgo, ya sea por seres humanos o por

animales (particularmente perros).

Muchas veces, el encuentro se produce por la remoción de escombros efectuado en un incendio u otra catástrofe.

1.2.2 Hallazgos por búsqueda.

Es frecuente que atendida la naturaleza del delito, sea necesario practicar

la búsqueda sistemática de osamentas, la que por lo general es apoyada por la confesión de un delincuente o cómplice o la

declaración de testigos.

Otras veces, la interpretación del sitio del suceso permite iniciar estas búsquedas en los lugares a los que que dicha

interpretación apunta.


LOS HUESOS 2. Identificación de restos óseos.

En la identificación criminalística, los huesos tienen una importancia

considerable, superior si se quiere al estudio de los pelos y, como en el de ellos, la labor del perito se facilita, mientras

mayor sea su cantidad y mejor su conservación.

La exigencia para los peritos, ante estos indicios, es la solución de una serie de problemas, a saber:

2.1 Especie

2.2 Edad

2.3 Talla

2.4 Sexo

2.5 Raza


LOS HUESOS 2.1. Determinación de la especie.

Por el aspecto y tamaño, o sea, por el estudio morfológico externo, el especialista tiene la primera orientación sobre la

especie animal a que pertenecen los huesos dubitados.

En caso de huesos humanos pequeños (fetos), que es común tener que estudiar en delitos de feticidio e infanticidio, la

anatomía comparada permite descartar una posible confusión con huesos de animales pequeños.

El estudio microscópico e histológico es aquí de una importancia enorme, como veremos más adelante.

La Bioquímica aporta en estos casos un contingente muy importante, utilizando iguales métodos que los descritos para la

sangre, o sea, los métodos serológicos.



2.1.1 Examen anatómico macroscópico.

El primer problema por resolver, cuando se encuentran

huesos humanos en cierta cantidad, es saber si todos

pertenecen a un solo esqueleto, lo que es relativamente fácil

de determinar si tenemos, entre los huesos encontrados, el

fémur y el húmero.



Dividiendo el largo del húmero por el largo del fémur, el índice conseguido debe ser de 0,72.

Si hay una separación notable de esta cifra, es posible que los huesos encontrados pertenezcan a más de un individuo.



2.1.1 Examen anatómico macroscópico (Continuación)

El segundo problema es saber si estos huesos son o no humanos, para lo cual recurriremos a la medición del llamado

índice medular.

Este índice es la relación entre el diámetro mínimo del canal medular y el diámetro mínimo de la diáfisis, medidos a nivel

de la sección transversal.

En el adulto, este índice oscila alrededor de 0,45.

Las cifras en la mujer son inferiores.



2.1.1 Examen anatómico macroscópico (Continuación)

En el niño de un y dos años, el índice medular se eleva a 0,50.

En el feto de seis meses, es de0,17.

En el feto de siete meses, de 0,25,

En el feto de siete y medio meses a ocho 0,35. En el feto de término es de 0,37.

En los animales pequeños, cuyos huesos pueden ser confundidos con los huesos humanos fetales, el índice es superior a estas, cifras, sin que tengan un valor absoluto.



2.1.2 Examen anatómico microscópico.

El método histológico.

Este es, después del ADN, el método específico más eficiente, es decir, el que puede permitir al patólogo, afirmar el origen

humano de los restos o huesos estudiados.

El método anatómico microscópico está basado en la medición de los canales de Havers, que en el animal son siempre

inferiores a 20 micrones.

Si estos canales son superiores a 25 micrones, se puede afirmar categóricamente el origen humano de los huesos dubitados,

salvo que trabajemos en países en que haya monos antropoides o alguna especie de macacos.

2.1.3 Métodos serológicos.

Como ya dijimos, se emplean los mismos métodos que vimos al tratar del elemento sangre, como indicios.


LOS HUESOS 2.2. Determinación de la edad.

La edad del individuo a quien pertenecían los huesos dubitados, sólo se puede fijar aproximadamente

mediante el estudio de los puntos de osificación y la soldadura de las epífisis, porque intervienen una

serie de factores perturbadores: endocrinos, vitamínicos, alimenticios, etc. que influyen en su

producción.

Asimismo, se ha determinado, los puntos de aparición y puntos de osificación de los seres humanos, desde su vida intrauterina, hasta llegar a la edad adulta, lo que constituye una referencia para la determinación

de su edad.


LOS HUESOS 2.3. Determinación de la Talla.

La determinación de la talla, como lo saben quienes han

hecho bertillonaje, es sólo segura en el adulto ya que los

factores de crecimiento, con sus múltiples variables, hacen

muy difícil igual estudio en niños y adolescentes.

Existen tablas en todos los buenos tratados de

Medicina Legal, de manera que las obviaremos para los

efectos de esta materia.


LOS HUESOS 2.4. Determinación del Sexo.

El sexo se puede

determinar con

seguridad, sólo cuando

se tiene la pelvis del

esqueleto estudiado.

Todos los otros datos

enumerados por los

tratadistas pueden

llevarnos a errores

formidables.


LOS HUESOS 2.5. Determinación de la Raza.

Es posible, aunque no siempre, determinar la raza mediante los estudios del índice cefálico, siempre que

tengamos, como es lógico, entre los restos encontrados, el cráneo.

Para ello se utilizan los índices: Cefálico, Orbitario, Nasal y Mandibular.


LOS HUESOS 2.5. Determinación de la Raza.

Sin embargo, estos estudios tienen poca importancia criminalística en hispano América, dado que la situación global de mestizaje que vive esta parte del mundo, hace

muy improbable que la determinación de la raza de la persona cuyos huesos se

encontraron, dé indicios respecto a su eventual identificación.

En EE.UU., el problema de la raza es mucho más interesante desde el punto de vista Criminalístico, porque

su determinación contribuye a orientar la investigación criminal a determinados sectores e informantes.


LOS HUESOS 3. Huesos Calcinados

Con el fin de hacer desaparecer las huellas de su delito, como lo vimos a propósito de los dientes, el delincuente puede

tratar de destruir por calcinación, los huesos de su víctima, previa fragmentación.

También puede ocurrir que los huesos humanos se calcinen por accidente (incendios accidentales,catástrofes aéreas) o que ocurra en incendios intencionales, sin querer matar a alguien, por ocultar otro delito, incendios intencionales y

asesinato.

La acción del fuego origina profundas alteraciones sobre los huesos, que es indispensable recordar, pues dificultan la

identificación.

La alta temperatura produce burbujas, fisuras, secciones y encorvamiento, pero afortunadamente muchas causas

fortuitas pueden hacer que algunas porciones y aún huesos completos, escapen casi indemnes de la acción del fuego.


LOS HUESOS 3. Huesos Calcinados

Algunos huesos profundamente situados, huesecillos del oído medio,

núcleos vertebrales, por esa misma situación en el esqueleto y, particularmente, las falangetas, que se salvan por la crispación

instintiva de éstas sobre las palmas de las manos en los muertos por el fuego.

Lo más importante es recordar que, los huesos, bajo la acción

de la combustión, sufren un acortamiento que llega en los huesos largos a un décimo (1/10) de la longitud.

Este acortamiento, como es lógico, afecta también al diámetro, pero no altera el índice medular, pues todos los

elementos sufren un acortamiento proporcional de un décimo (1/10).

Todas estas modificaciones deben tomarse en cuenta para los cálculos ya mencionados de talla y edad.

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