Hemos defendido que todos los ciudadanos deben tener acceso a una salud de calidad con las mejores prestaciones.

Una seguridad social que atienda a las necesidades de cada uno. Eso significa apostar por la equidad: todos los ciudadanos deben tener acceso a los servicios que requieran, independientemente del lugar de residencia y de los recursos económicos.

Debemos buscar Consenso y el diálogo social para mejorar las prestaciones médicas de la seguridad social, porque en los últimos años, se ha jugado con la propaganda negativa en forma desmedida y esto tendrá sus consecuencias en el mediano y largo plazo sino revertimos la imagen de la seguridad social. No podemos dejar esto en manos solo de relaciones públicas, tenemos que invertir en publicidad y mercadeo un área poco explorada en nuestra institución.

Entendemos perfectamente que un buen sistema de salud comienza por una buena política de prevención. La mejora de la salud de la población comienza por la prevención de enfermedades y la promoción desde la escuela de hábitos de vida saludables. Para ello se requiere de presupuesto de mucho dinero inicialmente para cubrir la brecha histórica en este sentido, primero los financistas deben entender que este tema de promoción requiere de apoyo presupuestario. Esto confronta con lo que la población desea, medicamentos, citas médicas injustificadas, estudios radiológicos y de laboratorio. Hay una cultura aprendida que no cambia de un día para otro, lleva tiempo pero tenemos que empezar de lo contrario no habrá recursos para tratar a tanta gente enferma.