Guerra del Pacífico

4
GUERRADEL PACÍFICO Soldado boliviano de prisionero de guerra a ciudadano “chileno” Tras el hallazgo casual de un nicho en el Cementerio General de Copiapó, al norte de Chile, donde fueron enterrados los restos de Fernando Yañez en 1929, se descubre la historia de un hombre que superó las culpas de la guerra … y en libertad hizo patria en ambas naciones 130 a ñ os del co nfl i c to marítimo Lunes 23 de marzo, 2009 Cochabamba, Bolivia Paula Muñoz Encinas …dos palabra s, un consejo, una espera n- za…sufra con pacien- cia...procure estrechar relaciones con todas las familias de esa ciu- dad, de donde usted y no otro será su futuro...”, le escribió el Ge n e ral Hi l a rión Daza a un ofi- cial boliviano prisionero en la ciudad de Rancagua, durante la Guerra del Pacífico. Y aunque es- ta misiva no estaba destinada a José Fernando Yañez, cabo del Batallón Aroma del Ejército Boli- viano, éste resistió estoicamente su cautive rio y estableció poten- tes lazos de confianza con sus captores y vigilantes en Copia- pó. Tras su liberación, permane- ció allí hasta el día de su muerte. Pa ra Bolivia, reservó un último gesto de patriotismo. Su historia comienza, el 25 de f e b re ro de 1879, cuando junto con el resto del pueblo boliviano se enteró de la nefasta noticia de que Chile y Bolivia estaban en guerra. En todas las ciudades los cuar- teles se llenaron de voluntarios sin experiencia que fueron orga- nizados en la “Guardia Nacio- nal”. La indignación y el espíritu de lucha se extendieron a lo lar- go del país con sorprendente ra- pidez. Fernando, nacido en 1866, te- nía 17 años cuando se enroló en el Batallón Aroma 4to de Infan- tería de la ciudad de Cochabam- ba, compuesto en su mayoría por jóvenes de la provincia de Tapacarí. Fue reclutado cabo se- gundo en una tropa de 8 hom- bres. Bolivia tenía solo tres Batallo- nes de línea con soldados profe- sionales, las divisiones Daza, Su- cre e Illimani y el Aroma era par- te de la 4ta División de civiles, junto al Viedma con 413 cliceños y punateños; Padilla con 351 co- chabambinos; Oropeza con 400 cochabambinos; Co raceros Ju- nín con 147 aiquileños, mizque- ños y tarateños; y Coraceros Li- bertad con 80 cochabambinos. Tras congregarse todas las fuerzas en La Paz, el famoso te- legrama “Vuele ejército a Tacna” se hizo efectivo, y Fe rnando par- tió sin saber que su destino era un viaje sin retorno. El camino a Tacna Y volaron. En dos semanas. Fernando y su batallón cami- naron 150 kilómetros por día, desprovistos de armamento pe- ro con la ilusión de que en Arica la marina de los Aliados los lle- varía a la costa, y que junto al Ejército peruano recuperarían el Litoral boliviano. Pero eso no su- cedió. \ A fines de abril en Tacna, que- d a ron de guarnición desarma- dos hasta el 8 de nov i e m b re, cuando el Ge n e ral Daza desem- barcó de la cañonera Pilcomayo, 1500 fusiles con los que se arma- ron algunas unidades, entre ellas el Aroma. Su próximo desti- no era el puerto de Mejillones. Tarde para Pisagua El 2 de noviembre, el Aro m a no consigue recorrer los 30 km (un día de marcha) que lo sepa- ran de Pisagua. Se suman al re- pliegue al final de la batalla para enterrar a algunos de los 464 bo- livianos caídos. Historiadores chilenos relatan que el Aroma participa con valor en la Batalla de Dolores, donde forma la segunda línea de reser- va junto al Victoria, Vengadores y Colchechalca. Según el Ge n e ral boliviano Fe rnando Sánchez, ex Director de la Academia de His- Batalla del Alto de la Alianza Batallón 5to. “Viedma”. Oleo de la Academia Boliviana de Historia Militar. La guerra del Pacífico fue una guerra ter- restre, a pesar de la importancia de las acciones navales porque la supremacía marítima se alcanzó rápidamente.

description

Guerra del Pacífico

Transcript of Guerra del Pacífico

GUERRADELPACÍFICO

Soldado bolivianode prisionero de guerra a ciudadano “c h i l e n o”

Tras el hallazgocasual de un nichoen el Cementerio

General de Copiapó,al norte de Chile,

donde fueronenterrados los restosde Fernando Yañez

en 1929, se descubrela historia de un

hombre que superólas culpas de laguerra … y en

libertad hizo patriaen ambas naciones

130 a ñ o s d e l c o n f l i c t o m a r í t i m o

Lunes 23 de marzo, 2009 Cochabamba, Bolivia

Paula Mu ñ oz En c i n a s

…dos palabra s, unc o n s e j o, una espera n-z a … s u f ra con pacien-c i a . . . p ro c u re estre c h a rrelaciones con todaslas familias de esa ciu-

dad, de donde usted y no otroserá su futuro. . .”, le escribió elGe n e ral Hi l a rión Daza a un ofi-cial boliviano pri s i o n e ro en laciudad de Rancagua, durante laGu e r ra del Pa c í f i c o. Y aunque es-ta misiva no estaba destinada aJosé Fe rnando Ya ñ ez, cabo delBatallón Aroma del Ej é rcito Bo l i-v i a n o, éste resistió estoicamentesu cautive rio y estableció poten-tes lazos de confianza con susc a p t o res y vigilantes en Co p i a-pó. Tras su liberación, perm a n e-ció allí hasta el día de su muert e.Pa ra Bolivia, re s e rvó un últimogesto de patri o t i s m o.

Su historia comienza, el 25 def e b re ro de 1879, cuando juntocon el resto del pueblo bolivianose enteró de la nefasta noticia deque Chile y Bolivia estaban eng u e r ra.

En todas las ciudades los cuar-teles se llenaron de vo l u n t a ri o ssin experiencia que fueron org a-nizados en la “Gu a rdia Na c i o-n a l”. La indignación y el espíri t ude lucha se extendieron a lo lar-go del país con sorprendente ra-p i d ez.

Fe rn a n d o, nacido en 1866, te-nía 17 años cuando se enroló enel Batallón Aroma 4to de In f a n-

tería de la ciudad de Co c h a b a m-ba, compuesto en su mayo r í apor jóvenes de la provincia deTapacarí. Fue reclutado cabo se-gundo en una tropa de 8 hom-b re s.

Bolivia tenía solo tres Ba t a l l o-nes de línea con soldados pro f e-s i o n a l e s, las divisiones Daza, Su-c re e Illimani y el Aroma era par-te de la 4ta División de civiles,junto al Viedma con 413 cliceñosy punateños; Padilla con 351 co-chabambinos; Oro p eza con 400cochabambinos; Co ra c e ros Ju-nín con 147 aiquileños, mizque-ños y tarateños; y Co ra c e ros Li-b e rtad con 80 cochabambinos.

Tras congregarse todas lasf u e rzas en La Paz, el famoso te-l e g rama “Vuele ejército a Ta c n a”se hizo efectivo, y Fe rnando par-tió sin saber que su destino eraun viaje sin re t o rn o.

El camino a TacnaY vo l a ron. En dos semanas.Fe rnando y su batallón cami-

n a ron 150 kilómetros por día,d e s p rovistos de armamento pe-ro con la ilusión de que en Ari c ala marina de los Aliados los lle-varía a la costa, y que junto alEj é rcito peruano re c u p e rarían elL i t o ral boliviano. Pe ro eso no su-cedió. \

A fines de abril en Tacna, que-d a ron de guarnición desarm a-dos hasta el 8 de nov i e m b re,cuando el Ge n e ral Daza desem-b a rcó de la cañonera Pilcomayo,1500 fusiles con los que se arm a-ron algunas unidades, entreellas el Aroma. Su próximo desti-no era el puerto de Me j i l l o n e s.

Tarde para PisaguaEl 2 de nov i e m b re, el Aro m a

no consigue re c o r rer los 30 km(un día de marcha) que lo sepa-ran de Pisagua. Se suman al re-pliegue al final de la batalla parae n t e r rar a algunos de los 464 bo-livianos caídos.

Hi s t o ri a d o res chilenos re l a t a nque el Aroma participa con va l o ren la Batalla de Dolore s, dondef o rma la segunda línea de re s e r-va junto al Vi c t o ria, Ve n g a d o res yColchechalca. Según el Ge n e ra lboliviano Fe rnando Sánchez, exDi rector de la Academia de Hi s-

Batalla del Alto de la AlianzaBatallón 5to. “Viedma”. Oleo de laAcademia Boliviana de Historia Militar.La guerra del Pacífico fue una guerra ter-restre, a pesar de la importancia de lasacciones navales porque la supremacíamarítima se alcanzó rápidamente.

t o ria Militar de La Paz, “en un dis-p o s i t i vo militar, siempre hay 2/3 dela fuerza que pelean y 1/3 que sequeda para participar en la acciónmás importante del encuentro béli-c o, la “re s e rva”.

Fe rnando peleó de re s e rva a ladode los Co l o ra d o s, y se confundíacon ellos porque usaba el mismocolor rojo de casaca. Sus pantalo-nes grises marcaban la diferencia.

Después de demostrar su va l o r,quedó reclutado junto a su batallónp a ra la Campaña de Ta rapacá. Éstasería la única victoria de los aliadosen la guerra. Imposible saber lo quesintió cuando chocaban las armas yd i s p a raban las bayo n e t a s. Un tri u n-fo para Bolivia … una dosis de es-p e ranza para la tro p a .

Alto de la AlianzaLos Co l o rados atacaban escu-

chando de fondo “La marcha de laCa n t e r í a” junto al Aroma, Mu rillo yZa p a d o res en la Batalla del Alto dela Alianza, una encarnizada lucha.Se enfrentan en diagonal con elAtacama y Co q u i m b o, según la Hi s-t o ria de Chile del destacado Pa s-cual Ahumada.

El Ge n e ral Tomás Peña y Lillo, ri-g u roso investigador y estudioso bo-l i v i a n o, relata que en el fragor de labatalla, los Co l o rados y el Aroma ala cabeza se lanzaron en persecu-ción de los chilenos consiguiendo

momentáneamente su re t i rada. Es-f u e rzos va n o s. El resultado fuero ncientos de muert o s, heridos y pri-s i o n e ros para Chile.

Prisionero al otro lado de la cordillera

Pa ra Chile, cualquier integra n t edel escalafón regular de las fuerz a saliadas podía ser considerado pri-s i o n e ro de guerra, incluyendo civi-l e s. Se los dividía en categorías, losa p rehendidos individualmente oen pequeños grupos y los gra n d e sg rupos apresados después de lasb a t a l l a s.

Los propios soldados re s g u a rd a-ban pri s i o n e ros en forma tra n s i t o-ria porque no se org a n i z a ron uni-dades para la custodia.

Aunque algunos periodistas des-t a c a ron el buen tra t o, también sedio muerte sin compasión a boli-vianos heridos con el mentado “re-p a s e”, a punta de puñal o bayo n e t a .

El Estado chileno se hacía carg ode los pri s i o n e ros a través del ame-d rentamiento y la amenaza. Po re l l o, una gran cantidad fueron deja-dos en libertad bajo palabra de ho-nor de no vo l ver a empuñar un ar-ma contra Chile. Si no cumplían ye ran apresados nueva m e n t e, los fu-s i l a b a n .

Ningún historiador entrega unac i f ra total de pri s i o n e ro s, pero loc i e rto es que cientos fueron ubica-dos en distintas localidades de At a-cama en el norte chileno, San Be r-n a rd o, Rancagua y la zona centra l ,con una política de ubicación selec-t i va. De esta manera, no solo logra-ron descongestionar las cárceles yc u a rteles de policía, sino que ade-m á s, con su experticia los bolivianoss i rv i e ron de peones en las minas.

En informes aleatorios se cuenta:“...34 bolivianos podran circular li-b remente (...)habitación, comida yropa gra t i s, además de 50 centavo sd i a rios los oficiales, y veinte centa-vos los soldados de sueldo”.

Fernando en CopiapóEl crecimiento de la ciudad esta-

ba ligado al desarrollo de la activi-dad minera, la venta de oro, plata yc o b re; pero en tiempos de guerra ,

el auge de la plata de Chañarc i l l oestaba en pleno declive.

Los pri s i o n e ros estaban a carg ode la Intendencia de Atacama, laMunicipalidad, el Cuerpo de Bo m-b e ros Armados y el propio Ba t a l l ó nAtacama. Eran alojados en casasque en su mayoría eran de adobe yq u i n c h o, con altos techos y ampliosp a t i o s, donde existían plantaciones

de damascos, dura z n o s, higos, oli-vos y viñas. Los elevados gastos pa-ra su manutención eran asumidospor el gobierno local.

Del cautiverio a la libertadCumpliendo las form a l i d a d e s, en

1884 Fe rnando en libertad se que-dó en una ciudad donde las faenas

mmrad

c idadrahqds eCt epdpupn

ppc uvdg

c uet rbF4at s

pneal ovet i”.an

e namc os ee ddkpv if a

¿CÓMO ES COPIAPÓ?� Copiapó, capital de la III Re g i ó n

de Atacama, con 272.402 habi-

tantes al año 2006, está ubicada

a 807 kilómetros de Santiago. Es

el centro de servicios más dinámi-

co de la zona con una import a n t e

infraestructura y equipamiento

t u r í s t i c o.

� Presenta una planta urbana

alargada porque se encuentra

enclavada en el primer valle

transversal de Chile, el valle de

C o p i a p ó .

� El clima en la ciudad es desiert o

marginal a clima estepario cálido

y hacia el norte es árido.

� Es parte fundamental de la histo-

ria minera de Chile y constituye

uno de sus principales sectores

económicos con yacimientos de

cobre (El Salvador), hierro, oro y

platas existentes, explotados a

gran escala, mediana y pequeña.

Ta m b i é n, destaca la agricultura

de aceitunas y la exportación de

u v a .

� Uno de sus atractivos turísticos

es el “desierto florido”, que flo-

rece entre agosto y octubre en el

d e s i e rto de Atacama, con cientos

de kilómetros de flores y plantas

en variados colores.

� Al noroeste de la ciudad, se

encuentran campos dunares de

gran belleza, que permiten el

desarrollo de actividades deport i-

vas como Sandboard y carreras

en vehículos de doble tracción.

� La distancia hacia la playa son

60 kms, al interior del valle

Copiapó 80 kms y al Salar de

Maricunga 200 kms.

� La Universidad de Atacama que

se fundó en 1981 de la antigua

escuela de Minas de 1857, es

cimiento de exitosos profesionales

que suelen especializarse en país-

es europeos.

LA GUERRA EN EL RELATO DE LA PRENSA

...todo el estremo del alaizquierda del enemigo es-taba verdaderamentesembrado de Colorados iAromas que se batieroncomo leones”

Diario El Atacameño | Copiapó, Chile

En la Batalla del Alto de la Alianza, la másdolorosa para Bolivia, murieron 1500bolivianos, quedaron 1000 heridos y másde 160 fueron hechos prisioneros.

…Pero yo soi boliviano. El mismo soldado que lehabía amenazado repu-so; Ah, es boliviano?,entonces pase al cen-tro”

Diario El Atacama | Copiapó, Chile

En la Batalla de Pisagua, las tropas boli-vianas combatieron ferozmente sin des-bande. Murieron 464 y el resto retornó ala patria a falta de órdenes.

”…Rogaría a US. Que meautorizara para comprara esta gente siquiera unacamisa, i pantalones, hanllegado desnudos idescalzos.”

Diario El Atacama | Copiapó, Chile

El Intendente de Atacama y ComandanteGeneral de Armas de la Provincia,Guillermo Matta envía un telegrama alMinistro de Guerra, el 7 de junio de 1880.

”...el ejercito vencedorprodigaba con marcadosrasgos de considera-ciones i hasta de gen-erosidad a los prisionerosbolivianos...”

Diario El Comercio | La Paz, Bolivia

Pese al valor innegable de los bolivianos enla Batalla del Alto de la Alianza, elejército chileno se hizo de una gran can-tidad de prisioneros.

Diario El Ferrocarr

Algunos prisiontos de Caldenados segúnfaena miner

130 años de enclaustramiento marítimo

Lunes 23 de marzo, 20092

OPINIONES

“Hoy día el mundo militardebe tener un acerc a m i e n t ocon el mundo civil, es otra his-t o ria la que tenemos que cons-t ruir y las regiones del norte deChile no deben perder el sentirque las humanizó durante laGu e r ra del Pacífico y que hizoposible que un boliviano se sin-t i e ra en casa. El problema deBolivia hay que solucionarlo,somos países herm a n o s”. K

“Integración“

MAGLIO CICARDINI NEYRA

ALCALDE DE COPIAPÓ

“La guerra del Pacífico tieneg ran importancia, nosotro svivimos las tradiciones mil-i t a res y esta guerra es parte den u e s t ra historia militar. Lac o m p a rtimos con histori a d o re slocales y estamos perm a n e n t e-mente intercambiando parat ransmitirla a nuestros ciu-dadanos con ve ra c i d a d”. K

“Tradición militar“

CNEL. JUAN M. BARRERA VALDÉS

RE G. IN FA N T E R Í A N°23 CO P I A P Ó

Lápida del soldado boliviano Enterrado en el Cementerio General de la ciudad de Copiapó, en la región de Atacama, al norte

de Chile. Hallazgo casual en el marco de otra investigación.

Pintura peruana que ilustra “El repaso”Consistía en rematar a los soldados caídos para evitar que dispararan por la espalda.

s, higos, oli-os gastos pa-an asumidos

a libertadm a l i d a d e s, en

rtad se que-de las faenas

m i n e ras empez a ron a trabajar amedia máquina y solo la agri c u l t u-ra del valle estaba en condicionesde pro d u c i r.

Ed u a rdo Na veas Echiburú, falle-cido profesor del Liceo de Ho m b re sde Copiapó, cuenta en un sentidoa rtículo: Fe rnando se hizo tra b a j a-dor de las minas de Chimbero, du-rante el auge de ese mineral. Erah o m b re servicial, muy económico,que fue juntando moneda a mone-da para salir de la situación de mi-s e ria en la que se hallaba al llegar aCopiapó. Después entró como por-t e ro a la Intendencia, y tiempo des-pués llegó al Liceo de Ho m b re s,donde el Rector le dio una plaza dep o rt e ro(...)ante las perspectivas deun mejor sueldo, dejó su empleo ypasó a ejercer estas mismas funcio-nes en el Banco Anglo.

A rtesano de oficio durante gra np a rte de su vida, Fe rnando form óp a rte de la Sociedad de Artesanos ycultivó una gran amistad con otrove t e rano de la segunda Co m p a ñ í adel Batallón Atacama, el Cabo Se-g u n d o, Juan Domingo Ma l d o n a d o.

Copiapó … cementerio de re-c u e rdos … se convirtió hacia 1920en un poblado polvo riento dondet ransitaban carru a j e s, algunos ca-ballos y uno que otro automóvilFo rd T. La población era de apenas48.413 habitantes. Había sobre v i v i óa una guerra, dos terremotos y unt s u n a m i .

Nu e ve años después, sin familiap o rque no hay mayor re g i s t ro, Fe r-nando muere. Na veas relata que elentonces Regimiento O´Hi g g i n s,acompañó sus restos ri n d i é n d o l elos honores militares propios de unve t e rano chileno. Se había conve r-tido en un ciudadano re s p e t a d o :”...la diaria convivencia de tantosa ñ o s, borro su condición de pri s i o-n e ro de guerra” .

“L o g ro acumular un capital queen momento de su muerte ascendíaa la cantidad de cien mil pesos, su-ma considerable para la época, si sec o n s i d e ra que con cinco mil pesos,se podía adquirir una pro p i e d a de d i f i c a d a”, destacó el pro f e s o r. He re-dó una propiedad en la Calle Ma c-kenna de Copiapó (hoy una de lasp rincipales art e rias de la ciudad) a laviuda de su amigo Juan, que habíafallecido tres años antes, según su

hoja de servicio facilitada por el Es-tado Ma yor de las FF.AA. de Chile.

De Bolivia no se olvidó, “e n c a rg óa su albacea Amadeo Beluzan, quere m i t i e ra por intermedio de la Em-bajada de Bolivia en Sa n t i a g o, al go-b i e rno de su patria, la cantidad decincuenta mil pesos, para el pri n c i-pal hospital de La Pa z .

Probablemente se trataba delHospital Ge n e ral y aunque no sec o n f i rma el legado por no existir do-cumentos oficiales en la actualidad,la Alcaldía de La Paz aseve ra que hu-bo donaciones importantes en elpasado que facilitaron sus funcio-n e s.

No se encontró en Co c h a b a m b ani en La Paz mayo res antecedentesde la vida de Fe rnando en Bolivia.

“Muchos documentos históri c o sse perd i e ron producto de asaltos ainstalaciones militares en el pasado”,sostiene el Ge n e ral Edwin de laFu e n t e, Di rector de Planificación yE s t rategia de las FF.AA. de Bo l i v i a .No queda re g i s t ro de los ve t e ra n o sdel Batallón Aroma en el Ej é rc i t o, niexiste un listado completo de los mi-les de soldados que dieron su vidapor el Litoral.

Fernando ha vueltoEn la lápida Nº 238 del Ce m e n t e-

rio Ge n e ral de Copiapó, se lee: AQU ÍYACEN LOS RESTOS MORTA L E SDEL EX CABO DEL BATA L L Ó NA ROMA DEL ÉJÉRC I TO BOLIVIA-N O. CAMPAÑA DE TACNA. AÑO1879. 29 de nov i e m b re de 1925.

El Atacameño del 25 de nov i e m-b re de 1925 , publica: “La So c i e d a dde Artesanos de Copiapó invita a to-da la comunidad copiapina al Ce-m e n t e rio Ge n e ral para enterrar losrestos de Fe rnando Y á ñ ez”.

El informe en los re g i s t ros del Ce-m e n t e rio señala que Fe rnando falle-ce a los 63 años de un problema car-d í a c o. El error en la lápida, debe serun alcance.

Los restos de Fe rnando yacen enC h i l e. Mu rió hace 130 años, comba-tió por su patria Bolivia y fue sepulta-do como ve t e rano de guerra en Co-piapó, donde le ri n d i e ron sus re s p e-tos no sólo al soldado, sino al hom-b re. Lección de honor y patri o t i s m o.

Fe rnando ha vuelto. Re c o rd é-moslo hoy. K

o rtación de

s turísticos

”, que flo-

ctubre en el

con cientos

s y plantas

dad, se

unares de

miten el

des deport i-

y carreras

tracción.

playa son

el valle

Salar de

acama que

la antigua

1857, es

p r o f e s i o n a l e s

arse en país-

“… casi un centenar de pri-sioneros bolivianos han ar-ribado al puerto a trabajaren las minas de Rancagua…los otros se destinaran aSan Bernardo….”

Diario El Ferrocarrilito | Valparaíso, Chile

Algunos prisioneros arribaban a los puer-tos de Caldera y Valparaíso. Eran desti-nados según a su oficio en Bolivia afaena minera o agricultura.

“...el arrojo que ha tenidoque desplegar nuestra di-visión..., luchando contralos batallones “Coloradosde Daza”, “Aroma”, io t r o . . . ” .

Diario El Atacama | Copiapó, Chile

Citando palabras del Jefe del BatallónArtillería Naval de Chile, después de laBatalla del Alto de la Alianza.

palda.

GU E R R AD E LPA C Í F I C O130 años de enclaustramiento marítimo

Lunes 23 de marzo, 20094

I CO N V E N C I Ó N D E GI N E B RA(O C H O A RT Í CU LOS S U SC R I TOS E N 1 879 )ARTÍCULO 5

Los habitantes del país que presten socorro a losheridos serán respetados y permanecerán libres.

ARTÍCULO 6Todo militar herido o enfermo será recogido y cui-

dado, sin importar su nacionalidad. Así también, losComandantes en Jefe tendrían la facultad de entre-gar inmediatamente a las avanzadas enemigas losmilitares heridos durante el combate, cuando las cir-cunstancias lo permitieran y con el consentimientode ambas partes.

CO N F E R E N C I A D E BRU S E L AS

De la que emanó un proyecto de Declaración de 56artículos que establecía una primera definición de losusos de la guerra terrestre.

DEC L A RAC I Ó N D E SA N

PE T E R S B U RG OIntentó reglamentar, condicionar y limitar las hostili-

dades tan sólo hacia las fuerzas militares de un país. Yprocuró restringir el uso de armas que agravasen inú-tilmente los sufrimientos de los hombres puestos fuerade combate.

IN ST RU CC I O N ES PA RA EJ É RC I TOS

D E E E .U U. E N CA M PA Ñ A

Principios extraídos de la I Convención de Ginebra.Los aspectos humanitarios en las acciones militares,fueron el eje de estos principios. En Chile, normaban laprotección de los heridos y los prisioneros de guerra.

INSTRUCCIONES PARA EJÉRCITOS

DE EEUU EN CAMPAÑA

ARTÍCULO 56 Un prisionero de guerra, en su calidad de enemigo público, no

está sujeto apena alguna; ningún tormento ni dolor puede impo-nérsele involuntariamente o por la vía de represalias; no puede seraprisionado ni privado de alimento, ni mutilado, ni sentenciado amuerte; en una palabra, no puede ser objeto de ningún tratamien-to bárbaro.

ARTÍCULO 75 Los prisioneros de guerra pueden ser internados o encarcela-

dos, siempre que e creyere necesario, para evitar su evasión; perono puede hacérsele sufrir voluntariamente ningún ultraje ni mal-trato. Su internación y la manera de tratarlos durante su cautivi-dad, puede variar según lo exijan las medidas de seguridad quesea necesario tomar respecto de ellos.

ARTÍCULO 76Los prisioneros de guerra es cuanto sea posible, serán alimen-

tados convenientemente y tratados con humildad.

DEL CONGRESO INTERNACIONAL

DE BRUSELAS

ARTÍCULO 25 Los prisioneros de guerra pueden ser empleados en ciertos tra-

bajos públicos que no tengan directa relación con las operacionesen el teatro de la guerra, y que no sean excesivos ni humillantespara su grado militar, si pertenecían al Ejército, o par su posiciónoficial o social, sino formaren parte de él. Podrán participar en laindustria privada, ajustándose a las disposiciones reglamentariasque fije la autoridad militar. Su salario servirá para mejorar sucondición o les será entregado en el momento de ser puestos enlibertad. En tal caso, los gastos de manutención podrán ser dedu-cidos de este salario.

Se puede hacer fuego sobre un prisionero de guerra que seevade, o matarlo de cualquiera manera en su fuga, pero ni lamuerte ni ninguna pena se le impondrá por el solo hecho de sutentativa de evasión.

TRATADOS QUE REVISA CHILE

NORMAS APLICADAS

A LOS PRISIONEROS

TRATO AL PRISIONERO

DE GUERRA

“Hubo muerte y to rt u ra de p ri s i o n e ro s ”

¿ Qué dice la historia de losp r i s i o n e ros bolivianos enC h i l e ?

En las primeras ca m p a ñ a sse ofrecía la alternat i va del Ju-ramento de no vo l ver a leva n-tar armas co n t ra la nación, p e-ro en “el ra p t o”, que se da enlas campañas po s t e r i o res co nmenos hidalguía, se llega a lam u e rte y tort u ra de prisione-ro s, m u j e res y niños.¿Cómo se trataba a los pri-s i o n e ros en Co p i a p ó ?

El Municipio Copiapino lesco m p raba ropa y les daba ali-m e n ta c i ó n , no solamente alp r i s i o n e ro, sino a la mujer. E s-to yo lo denomino “el sentirs a m a r i ta n o”, una especie debe n evolencia o caridad cristia-na que tiene la población y elsoldado chileno frente al sol-dado bo l i v i a n o.¿ Por qué la be n e vo l e n c i acon el boliviano y no con elp e r u a n o ?

Los mayo res hechos de gue-r ra y tort u ra se dieron entrechilenos y peruanos. Al solda-do boliviano se le tiene penapo rque se ve a un soldado quefue llevado a la guerra casi fo r-z a d o, sin pert rechos mínimosy con uniformes desgasta d o s.Con fusiles que no son fusiles,son arca b u ces de mecha, ymal alimenta d o s.¿ Qué re p e rcusiones co n c re-tas tuvo en los Aliados estea p a rente buen trat o ?

La mentada Alianza entrePerú y Bolivia siempre fuet e n s a . Luego del desastre deTacna para los Aliados, las tro-pas bolivianas que huyen sont ratadas muy mal por los pe-ruanos a su paso por el Alti-p l a n o. En el desbande, los bo-livianos ata can pueblos perua-n o s, d e s t r u ye n , ro b a n .¿Soldado boliviano traidor yco b a rd e ?

N o, p e ro sí se tiene la ideaen Chile de que hay un engan-che forzado de indígenas yuna ca rencia de pat r i o t i s m o.En Bolivia y Perú existe unag ran población indígena, e lco n cepto de patria no estáa r raigado en este núcleo.

“ ‘ S o l d a d i to boliviano‘ esp a te rn a l i sta ”¿ Por qué se escribe tan pocos o b re los prisioneros bo l i-v i a n o s ?

La Guerra del Pa c í f i co tienem ayor significación milita rtanto para Chile como paraPe r ú , po rque Bolivia part i c i p ae n t re el 79 y mayo del 80,m i e n t ras que la guerra termi-na para Perú y Chile en el 83 yel número más alto de prisio-n e ros es sin duda peruano.¿El soldado boliviano es mi-rado con be n e volencia enC h i l e, po rq u é ?

En toda la lectura interna-cional sobre el soldado bo l i-v i a n o, la ex p resión es “ s o l d a d i-t o” boliviano que tiene un to-que de paternalismo y de co n-m i s e ra c i ó n . Esto se ex p l i ca pri-m e ro por la nat u ra l eza de larelación que tiene el indígenaboliviano con el Estado bo l i-v i a n o, es analfa beto y no ha-bla castellano pro p i a m e n t e, l aco n t ex t u ra de los quechuas yay m a ras co m p a rados con loscriollos europeos es de bajae s tat u ra . E n t o n ce s, h ay unaactitud displicente del mandoboliviano y en co n s e c u e n c i auna actitud co n d e s ce n d i e n t edel Ejército chileno.¿Cuál es la re l e vancia de lahistoria de Ya ñ ez a los 130años de la guerra ?

Muy grande po rque te co l o-ca en el plano humano el co n-flicto que está trabajado siem-p re en la dimensión gra n d e.La re co n s t r u cción de este epi-s odio es muy interesante po r-que tiene un ca rácter simbó l i-co. El lado humano de la co n-f ro n tación está ex p resada dem a n e ra ex ce pcional po rq u em a rca una vinculación de ca-rácter emocional de un hom-b re ex co m b atiente bo l i v i a n oen territorio de Chile. Y el he-cho de que al final de su vida,él done una parte de su fo rt u-na a Bolivia quiere decir queno ha roto sus vínculos emo-cionales con el país, los tiened i v i d i d o s.

El sentimiento de la soc i e-dad no necesariamente esigual al sentimiento de los go-b i e r n o s.

Dentro del ejército era muy comúnel uso de abarcas, calzado indígena.

No era por pobreza, sino comomanifestación de su identidad

nacional (al igual que el morral de lana).

B ATALLON DE INFANTERIA DE LINEA

Nº1 “DA Z A” GRANADEROS DE LA

GUARDIA (COLORADOS) O “A L I A N Z A”

Nº1 DE LINEA

El calzado consistía en abarcas, osandalias de cuero crudo, que fabricabacada cual (ojotas). Usa morrión y casa-

ca roja, pantalón de color blanco conuna franja roja. En el frente del morrión,

como insignia, una granada de metal. Vi-vos del cuello y bocamangas color lacre.La casaca lleva una hilera de botones al

frente y 6 botones en la bocamanga.

B ATALLON DE INFANTERIA “A R O M A”

Nº2 DE COCHABAMBA

En noviembre de 1879, usaba el sol-dado, chaqueta de color roja y pantalón

de color gris.