Fátima, Procesión de antorchas - Passiochristi.org€¦ · pacho, es fácil también escuchar:...

Edita:PASIONISTAS - Madrid

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PP. Reparadores - Tel. 916 751 536Preimpresión: Francisco Antón

SUMARIO

❚ Desde mi ventana MIGUEL GONZÁLEZ, C.P.

❚ La “Belleza” del Crucificado JOSÉ LUIS QUINTERO SÁNCHEZ, C.P.

❚ Santa Gema, hermana mayor nuestra M.G.

❚ Familia y vida JULIA MERODIO A.

❚ María, la siempre ocupada RAFAEL REY, O.C.D.

❚ Fátima, oraciones, y alegría del encuentro MIGUEL GONZÁLEZ, C.P.

❚ El Papa Francisco, a los jóvenes❚ ¿Cómo sería un mundo sin abuelos? Con ellos, todo es posible. Sin ellos... “DIDO TOLA”

❚ El evangelio cada día ANTONIO SAN JUAN

❚ Pasionistas en misión JUAN IGNACIO VILLAR (VILY)

❚ El hilo de la vida (Parte 1) JUAN CARLOS PRIETO TORRES

❚ Desde la otra orilla GREGORIO SANTOS ZAYAS

❚ Carlos Mego se explica ALBERTO BUSTO

❚ Encuentros al caminar PEPE FERNÁNDEZ DEL CACHO

❚ Escuela de S. Pablo de la Cruz SOR CATI DE LA SS. TRINIDAD, C.P.

❚ “Misión Madrid-Pan Bendito”. Las memorias de Don Hilario HILARIO PEÑA ROJO

❚ Entrevistas al caminar RODRIGO SEVILLANO

❚ Rincón familiar “Santa Gema”


Sí, por ellos. Por todos, y primordial-mente, por los abuelos “que ejercen”.

Y por los que evangelizan.

¿Y por qué ahora, precisamente? Por-que el 26 de julio ellos celebran su fiesta,la fiesta más grande, la fiesta de San Joa-quín y Santa Ana, los padres de María,“abuelos de Jesús”, el NIÑO por excelen-cia.

De Joaquín y Ana sabemos muy pocascosas, algunas, a partir de los evangeliosapócrifos. De Jesús Niño sabemos pocotambién, pero lo suficiente: Belén, Nazaret,la pérdida en el templo. Estos múltiplesdatos, y aquellos poquitos, nos permitenya brindar por Joaquín y Ana, por JesúsNiño, y... por todoslos abuelos.

Yo escuché,hace años, viajandode Madrid a Astu-rias, a dos chicasque comentabanbajito: “Los abuelos,con lo buenos queson, no tenían quemorírsenos nunca”.Y hoy en día y enla sala de esperade cualquier des-

pacho, es fácil también escuchar: “Yo, sinmis abuelos, ya jubilados, no podría trabajarcomo trabajo ni vivir como yo vivo”.

Coincidimos plenamente, porque losabuelos, en su mayoría, ejercen comoabuelos “para todo servicio”. Ejercen deabogados pacificadores, de confesores,de catequistas, de evangelizadores. Mu-chos niños lo reconocen así: “Yo tengo ypractico la fe como y porque me ense-ñaron mis abuelos. Es por eso y pormucho más que yo los quiero tanto”.Igualmente, todos los abuelos merecenaprecio y agradecimiento, y mucha com-prensión, por parte de todos. Tambiénpor parte de una Iglesia, de parroquias,de familias, que cada día los necesitan

más. A ellos, sí, alos abuelos.

Revista Pasio-nario se suma atantos elogios yreconocimientos,y en su día tanespecial, aplaude,reza y brinda portodos nuestrosabuelos.

❚ MIGUEL

GONZÁLEZ, C.P.

Brindis por los abuelos

Desde mi ventana

Revista Pasionario | 183

1 PASIONARIO 183 a 195.qxp 23/05/17 08:34 Página 183

COMENTARIOA LA IMAGEN

Esta representación dramá-tica creada para el altar deIsenheim es la obra supremade Grünewald: Reúne en sí lapoética de un artista que tra-bajando fuera de los grandescentros artísticos, ha inventadoun lenguaje pictórico personaly ha creado un fantástico re-pertorio de imágenes apropia-das para definir la verdad de lafe católica, impactando juntocon el entendimiento el senti-miento y la emoción.

Matthias Grünewald enrealidad se llamaba Mathis Got-hardt Neithardt; el nombre queha permanecido ligado a suobra fue inventado por el pintorJoachim von Sandrart que en1675 intentó escribir su biogra-fía. La gran Crucifixión forma

grarse en el preexistente altarcon estatuas de Nicolás de Ha-guenau y encargada por elAbad del Monasterio de Isen-heim, Guido Guersi, quesin duda influye en elartista en la con-fección del pro-grama iconográ-fico.

La Crucifixiónes una represen-tación altamentedramática. El cuerpode Cristo está destro-zado y en todo él se contemplael dolor del Hombre-Cristo. Laacentuación de la deformidadde los miembros y la crudezade las heridas, el profuso des-garro de la piel, han hecho quemuchos comentaristas hayanquerido ver una referencia di-recta a los enfermos que entorno al monasterio de Isen-

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La “Belleza” del Crucificado

“Lo vimos sin aspecto atrayente... llevandonuestras dolencias” (Is 53,2-4; 1ª Ped. 2,24)

LA CRUCIFIXIÓN DE ISENHEIM MATTHIAS GRÜNEWALD (1470-1528)

CRISTO DEL DOLOR

Es imposible permanecer indiferente ante la gran Cruci-fixión de Grünewald, imagen insuperable de la representa-ción de la atrocidad del suplicio de Cristo. Cada palmo de lapiel de Jesús está marcado por las heridas de los flagelos,mientras el espasmo de la carne y de los huesos dolienteses casi palpable. El cuerpo martirizado de Cristo es presenciasolidaria y por ello vivificante de la fe en muchas iglesias.“Lo nuestro está en Él para que nosotros recibamos lo suyo”,afirma San Agustín. Es la expresión del “admirabile comer-cium”. Esto esta presente en la imagen de un Cristo en cruzexpresivamente doliente suscitando y sosteniendo la radi-cación de la devoción compasiva y agradecida al Crucifijo.Su solidaridad mueve al agradecimiento de la compasión ya la confianza de la “expiación salvadora” ante el Padre. No se trata solo del sentir popular, segu-ramente muy sensible al realismo de la pasión, sino de una espiritualidad que quería subrayarcómo el padecer de Jesús es para el cristiano motivo de salvación. Entre los que han preferido lafigura del Crucifijo doloroso se puede señalar a Jerónimo Savoranola que en la Florencia delsiglo XV dio directivas para que las imágenes, si a la vista humana no podían sino provocar unajusta repulsión, por la gracia de Dios debía suscitar amor y deseo de seguimiento. Se da aquí unpaso novedoso: Del Crucifijo Majestad al Crucificado Pasional.

parte de un complejo altar queincluye el llanto sobre el Cristomuerto, San Sebastián, San An-tonio, los santos ermitaños An-tonio y Pablo, las tentacionesde San Antonio, la Anunciación,la Resurrección y la alegoría dela Natividad. La obra fue reali-zada en torno a 1515 para inte-



heim, reconocían en Él el pro-pio sufrimiento. Este modo deexpresión tiene su origen tam-bién en la religiosidad de laépoca con referencia a una tra-dición vivísima del Christus do-lorosus que estuvo muy exten-dida en gran parte de la Europacentral y que es testimoniadapor los grandes crucifijos en-vueltos de devoción. En la zonarenana se extendió la repre-sentación de la cruz en formade Y, llamada Gabelkreuz. Estaforma de cruz permitía estirarlos brazos de Cristo mostrandoasí su doloroso desgarro. Laiconografía del Cristus doloro-sus nace en el siglo XIV, gene-rada por diversos influjos queconfluyen en la necesidad deexpresar la compasión ante elreal sufrimiento y muerte deCristo. El gótico tardío ha que-rido etiquetar esta Crucifixióndesde el punto de vista icono-gráfico inscribiéndola en unalínea de reflexión sobre lamuerte de Cristo en cruz, queresponde a una espiritualidadparticularmente atenta al as-pecto doloroso de la misiónredentora de Cristo. El dolor deCristo expresa su apropiacióndel sufrimiento y del pecadode la humanidad. Esta apropia-ción lo hace representantenuestro ante el Padre. El dolorcompartido y asumido alivia el de la humanidad y a su vezrealiza nuestra salvación pues“satisface” la justicia divina.

La Crucifixión de Isenheimno es la única obra en laque Grünewald abordael tema de la Cruci-fixión. También lohace en la Cruci-

fixión de Karlsruhepintada entre 1523 y

1525. Mientras queen esta última lasfiguras del con-torno, San Juanapóstol y la Vir-gen Dolorosa, es-tán colocadas si-métricamente al

El paisaje que se despliegaa partir del patíbulo en un cre-púsculo de muerte, permitevislumbrar las aguas estanca-das de un río. Este Cristo es-pantoso, moribundo sobre elaltar del hospicio de Isemheimparece hecho a imagen de losafectados por el “fuego sa-grado” de la enfermedad y laexclusión que le rezaban, y seconsolaban con el pensa-miento que el Dios al que im-ploraban había probado susmismos tormentos. Le agrade-cerían que se hubiese encar-nado en una forma repugnantecomo la de ellos, y se sentíanasí menos desventurados ymenos despreciables.

El autor con esta originalcomposición pretende añadir ala meditación sobre el sufri-miento del Crucificado su di-mensión soteriológica. En con-traste con el humano padecerde Cristo, la imagen de Juan elBautista abre el horizonte a la“justicia” de Dios que aquí es unaincomprensible y sobrehumanagracia difícil de comprender yque solo se descubre cuando sedeja iluminar por la Escritura querevela en el Crucifica al Corderoque como Siervo sufrientemuestra cómo sus heridas noscuran. En el ambiente estaba laidea de apropiación que elmismo Lutero refleja en algunosde sus textos: “Esta es la másgozosa de todas las doctrinas,la pletórica de consuelo: Nosenseña que poseemos esta mi-

lado de la cruz, siendo casi in-significantes ante el gran Cristocentral, en la figura de Isen-heim captan la atención yguían la reflexión de quien mirael misterio de la muerte de Je-sús en cruz. La representaciónrompe todo esquema realista:No hay proporción: En losmiembros de Cristo hay un de-sequilibrio que hoy llamaría-mos impresionista; María Mag-dalena que está a los pies de lacruz es visiblemente despro-porcionada respecto de Cristo.Es todavía más sorprendente eldesequilibrio entre las tres fi-guras colocadas a la izquierday Juan el Bautista, colocado ala derecha Este aparece comoextraño a la composición puesno se muestra en él ningúngesto de compasión por el su-frimiento de Cristo como enlos otros personajes. Juan, depie, firme, bien asentado conel libro de la Escritura en sumano señala con el dedo elcuerpo lívido e inanimado deJesús. Viste una pelliza de pelode camello; tiene estatura ele-vada, los cabellos revueltos yuna barba descuidada; lleva enla mano las Escrituras, y conun índice desmesurado, señaladidácticamente la figura de

Cristo. A sus pies, elCordero de Dios (sím-bolo de aquel Jesúsque él ha bautizado)

tiene el pecho herido yuna copa –cáliz euca-rístico– que recoge el

fluir de la sangre quede su costado brota. A

sus espaldas, en elagujero de penum-bra que envuelve el

angustioso silenciode la escena, se lee Illum opor-tet crescere, me autem minui(“Es preciso que él crezca y queyo disminuya”), extraído delEvangelio según san Juan(3,30), donde el Bautista declarahaber sido enviado para anun-ciar a Cristo, señalarlo, revelarsu identidad y retirarse.


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sericordia inefable e inestimablede Dios, su caridad. Lo queequivale a decir que cuando elPadre misericordioso se diocuenta de que estábamos abru-mados por la ley y sujetos a lamaldición, que nada podía libe-rarnos de ello, envío a su Hijo almundo, y amontonando todosnuestros pecados en él, le dijo:Tú serás Pedro, ese renegado;Pablo el perseguidor, ese serblasfemo y violento… Entoncesllega la ley y dice: Ahí está esepecador, lleva sobre sí los pe-cados de todos los humanos yfuera de él no veo ningún pe-cado; que muera por tanto, enla cruz…Si subsistiera aún algúnresto de pecado, Dios lo pasarápor alto a causa de este sol quees Cristo”.

PINCELADAS CREYENTES:El desconcertantedolor del Hijo

La obra muestra al Crucifi-cado con una sorprendente einquietante dramaticidad. Noes la simple asunción pasiva deldolor y la enfermedad llagantessino que la tensión de sus ma-

nos pretendetrasmitir y visibili-zar el dolor y eldrama interno: Soli-daridad no solo conel sufrimiento sinotambién con el pe-cado. Sin embargo,parece que el autorno ha querido que elespectador se dejecautivar solo por estedolor al modo de Ma-ría Magdalena quereclama piedadante tanta sangrederramada y tanto dolor acu-mulado. La figura de Juan elBautista ofrece otro horizontede contemplación: No solo lavisión afectada sino la contem-plación sosegada que se dejailuminar por la Palabra y suconfesión de fe. El Cordero asus pies desvela el sentido delo que los ojos contemplan re-clamando con la compasión yla compunción la fe que acogey participa. Sin Juan el Bautistasolo veríamos el dolor que elhombre es capaz de infringir oel drama de la víctima que gritaen su impotencia. Con su gesto

SUS CICATRICES NOS CURARON

Del tratado de Teodoreto de Ciro, obispo, sobre la encarnación del Señor.(Núm. 28: PG 75, 1467-1470)

Los sufrimientos de nuestro Salvador son nuestra medicina. Es lo que enseña el profeta,cuando dice: Él soportó nuestros sufrimientos y aguantó nuestros dolores; nosotros lo estimamosleproso, herido de Dios y humillado; pero él fue traspasado por nuestras rebeliones, triturado por

nuestros crímenes. Nuestro castigo saludable cayó sobre él, sus cicatrices nos curaron. Todos errábamos comoovejas; por esto, como cordero llevado al matadero, como oveja ante el esquilador, enmudecía y no abría la boca.

Y, del mismo modo que el pastor, cuando ve a sus ovejas dispersas, toma a una de ellas y la conduce dondequiere, arrastrando así a las demás en pos de ella, así también la Palabra de Dios, viendo al género humano desca-rriado, tomó la naturaleza de esclavo, uniéndose a ella, y, de esta manera, hizo que volviesen a él todos los hombresy condujo a los pastos divinos a los que andaban por lugares peligrosos, expuestos a la rapacidad de los lobos.

Por esto, nuestro Salvador asumió nuestra naturaleza; por esto, Cristo, el Señor aceptó la pasión salvadora,se entregó a la muerte y fue sepultado; para sacarnos de aquella antigua tiranía y darnos la promesa de la inco-rrupción, a nosotros, que estábamos sujetos a la corrupción. En efecto, al restaurar, por su resurrección, el templodestruido de su cuerpo, manifestó a los muertos y a los que esperaban su resurrección la veracidad y firmeza desus promesas.

“Pues, del mismo modo —dice— que la naturaleza que tomé de vosotros, por su unión con la divinidad quehabita en ella, alcanzó la resurrección y, libre de la corrupción y del sufrimiento, pasó al estado de incorruptibilidade inmortalidad, así también vosotros seréis liberados de la dura esclavitud de la muerte y, dejada la corrupción yel sufrimiento, seréis revestidos de impasibilidad”.

Por este motivo, también comunicó a todos los hombres, por medio de los apóstoles, el don del bautismo, ya que les dijo: Id y haced discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y delEspíritu Santo. El bautismo es un símbolo y semejanza de la muerte del Señor, pues, como dice san Pablo, si nuestraexistencia está unida a él en una muerte como la suya, lo estará también en una resurrección como la suya.

–sin negar esta evi-dencia que im-pacta– somos lleva-

dos a un nuevohorizonte en el que semuestra cómo se des-

borda en Cristo –Cor-dero que se ofrece– elorigen de un dolor queasumido es redentor y porello desvelación de unamor que carga con la

humanidad doliente, ne-cesitada de liberación ylleva así al reconoci-miento de un Dios amo-

rosamente solidario y sal-vador. En Él, Dios estabareconciliando al mundo con-sigo (cf. 2ª Cort. 5,19). Quizá elautor, además, vive de la para-digmática afirmación bíblica,“lo hizo pecado por nosotros”(2ª Cort. 5,21). Con ambas re-alidades, el autor deja abiertoel horizonte para una mejorcompresión creyente del mo-do de la redención humanacomo acción de Diosen Cristo.

❚ JOSÉ LUIS QUINTERO

SÁNCHEZ, C.P.

La “Belleza” del Crucificado



Así llamó San Gabriel ala Dolorosa, desde el

cielo, a Gema: hermana.No coincidieron aquí en elsuelo. Gabriel había muertoantes de nacer Gema. Pero,por razones sublimes, paranosotros inabarcables.Gema y Gabriel mantuvie-ron relación estrecha. Ella,en el más acá, Gabriel, enel cielo. Dios así lo teníaprevisto y así lo quiso.

Gema, es hermana, her-mana mayor nuestra, tam-bién hoy. Hermana decuantos la cono-cen y la invocan.Hermana aliviadorade soledades, se-cadora de muchaslágrimas, salud demuchos enfermos.

Desde el cielo,en su santuario ypor doquier, cuan-do es invocada confe y con amor cre-yente, llamándolahermana mayor,hermana en el cie-lo, hermana santa.

Santa Gema,hermana mayor nuestra

Pero Santa Gema, ¿aúnhoy hace milagros? Sí, nolo dudamos, aun cuandono difundamos muchosdetalles acerca de esos mi-lagros, curaciones, etc., yaún cuando, ciertamente,no se trate de milagros“deslumbrantes”. Con todo,se trata siempre de signosclaros de la intervenciónespecial del Señor, por me-diación de Santa Gema, ensituaciones anímicas, etc.,difíciles, en soledades pro-fundas, cuando muchas vi-das se ven no ya de color

rosa sino más bien con to-nos grises. Cuando se di-visan solamente horizontesoscuros. También entoncesGema, hermana mayorsiempre, tiende su manobenéfica a cuantos a ellaacuden como a hermanaque está en el cielo.

Entiéndase bien, y quequede muy claro. Nuncadivinizamos a santa Gema,y a ningún otro santo. Sen-cillamente, estamos segu-ros, y la Iglesia así lo afirma,que los santos, santa

Gema, intercedenpor nosotros an-te el Señor, sien-do también ellosejemplares de vidaque desde el cieloestimulan y ayudanpara seguir sushuellas y sus ca-minos de fe. Acuantos peregrina-mos aquí en la tie-rra. En muy varia-das y a veces com-plejas situaciones.

❚ M.G.


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Familia y vida

Cuando seamos capa-ces de comprender,

que gran parte de nues-tras torpezas provienende haber perdido el con-tacto con el Resucitado,nos llegará la fuerza pa-ra perdonar, para amar,para comprometernos...para empujar la historiahacia el Reino de Dios.

Dios está igual de vivohoy, ayer y siempre. Poreso tenemos que acercar-nos a Él para que nos re-genere, para que nos de-vuelva el sentido de la vida.Esa vida estancada, está-tica, que tanto nos pesa, asu lado se regenera con-virtiéndose en tarea paraamar a Dios y al prójimo; yen esa conversión –regalodel Señor–, capaz de mo-ver nuestro corazón a fa-vor de los demás, ense-ñándonos a vivir desdeDios todos los aconteci-mientos de nuestra vida.

Con todo, y como sindarnos cuenta, seguimosencerrados en nuestrosmiedos, en nuestras segu-ridades, en nuestros fraca-sos..., lo mismo que se-guían encerrados losapóstoles en el Cenáculo.

Por eso, de nuevo tieneque intervenir Jesús. Élsabe bien que no es nor-mal creer en un resuci-tado, y mucho menosverlo. Por eso no cesa demostrarse una y otra vezpara demostrarlo.

tro tiempo! Sus llagas evo-can nuestro pecado la-vado en la sangre y el aguaque han sido derramadas.Ellas evocan el dolor detantos hermanos heridosen el cuerpo y en el alma.Sin embargo, nosotrospreferimos no verlas, pre-ferimos pasar de largopara no sentirnos delata-dos, para no comprome-ternos. ¡No a la guerra gri-tamos! ¡Qué se acabe lainjusticia! ¡Qué nadie pase

Jesús, un Dios muertoy Resucitado

SE APARECIÓ ALOS DISCÍPULOS

“Entrando en mediode ellos les enseñó lasmanos y los piesllagados”

Aquí tenemos el cuerpoherido de Jesús. Él haafrontado estas heridaspara salvarnos. De ellas habrotado el perdón y la mi-sericordia. ¡Qué catequesispara las personas de nues-

Él es la Resurrección y la Vida.



hambre...! Pero sin mover-nos, sin levantarnos denuestro cómodo sillón.

Os invito hoy, a miraresas heridas tomando con-ciencia de todo el amor quedestilan. A darnos cuenta deque Jesús no dudó en en-tregarse. Se entregó por ti ypor mí, por cada ser hu-mano, hasta llegar a lamuerte. Y pensemos que,hasta que no seamos capa-ces de comprender quenuestro pecado fue el quellevó a Jesús a la muerte,no podremos entrar en lavida del resucitado.

Por eso, necesitamosacercarnos al Señor, por-que necesitamos pedirle lagracia de comprender quéactitudes de nuestra vida,son las que siguen produ-ciendo hoy esas heridas alcuerpo de Cristo.

LAS MANOSY EL COSTADO

“Les enseñó las manosy los pies”

Cuando se nos pre-senta una opción que noshace renunciar a cosasmás atractivas, se oye confrecuencia: yo ni soy unhéroe, ni un santo. Es micarácter. Es que soy muymío. Yo soy bueno pero notonto...; frases y más frasespara justificar lo que ennuestro interior nos pareceinjustificable. ¡Cómo he-mos perdido en sentido deque esas heridas, que pro-ducen muerte, las causa-mos nosotros!

Lo que hacemos, no esalgo neutro, sin conse-cuencias. En el rostro deCristo están todas esas vi-

das segadas por la injusti-cia, por la miseria, por lamarginación, por la indife-rencia... El rostro de Cristono está en ese Dios queimaginamos por las nubes,está aquí abajo, en mediode nosotros. Y cuandoevadimos el sufrimiento deun ser humano, estamoseludiendo el sufrimientode un hijo de Dios, esta-mos pasando por alto queun hermano nuestro ca-mina hacia la muerte.

No nos engañemos, “nopodemos amar a Dios aquien no vemos, si no ama-mos a nuestro hermano alque vemos” (Juan).

CONTEMPLARPARA AMAR

Ahora, miremos denuevo las heridas de Jesússin miedo. Ellas nos ense-ñarán nuestro comporta-miento equivocado. Perosobre todo nos haráncomprender la infinita mi-sericordia de Dios.

Necesitamos sentir elcuerpo crucificado deCristo –ahora resucitado–porque de él brota: la mi-sericordia que regenera,que perdona, que salva. Yla persona de hoy tan car-gada de fardos pesados,necesita más que nunca,experimentar lo que su-pone sentirse amado yperdonado desde la gra-tuidad.

Hagamos saber a todoel mundo que, la misericor-dia es la que inunda almundo para que todo seregenere. Que la misericor-dia y la compasión, son lasúnicas que pueden salvar-nos del odio, la injusticia, eldesorden, el desamor... Yque caundo seamos capa-ces de descubrir los latidosdel corazón de Cristo, se-remos capaces de sabo-rear lo que es elamor.

❚ JULIA MERODIO [email protected] / Madrid


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Hay una página evan-gélica donde María juegaun papel importante: esen el primer milagro de

Jesús en las Bodas deCaná, que nos narra SanJuan, oído de labios deMaría.

Virgen del Carmen, Estrellade los mares. Protectorade navegantesy de caminantes.¡Madre y Protectorade todos!(FIESTA, EL 16 DE JULIO)

Nos preguntamos quéhace ella allí. No ha ido aser servida, sino a servir.Seguramente fue días an-tes para echar una manoen los preparativos. No labusquéis en la mesa delos esposos y padrinos,ni en un rincón rezando,ajena a cuanto pasa a sualrededor. Ella no es nin-gún aguafiestas, sabecompartir las alegrías hu-manas. María va de acápara allá con un delantalblanco para que no faltenada, para que no se ago-te la alegría... cuando ad-vierte que algo se avecina:la falta de vino.

Las bodas en Orienteson un gran aconteci-miento social, duran va-rios días y asiste todo elpueblo. Sólo ella advirtióla falta de vino, sólo ellase compadeció, sólo ellabuscó solución. Ni elmaestresala se enteró.

Cuando uno es egoístano ve las necesidades, noadvierte las carencias delos demás. Se buscan mil



razones para acallar laconciencia. Nos encerra-mos en el caparazón denuestro yo... y allá los de-más. De ayes estériles estáel mundo lleno y la co-fradía de quejicas cuentacon muchos adeptos.¿Qué hago yo para buscarsoluciones?

Me he fijado en un de-talle. No consta en elevangelio que le diesenlas gracias a María porevitar el bochorno aaquella pareja feliz. Hayque dar a fondo perdido,sin esperar nada a cambio,sin pasar el platillo de lasofrendas.

Allí, en Caná de Galilea,María empezó su misiónde intercesora, de me-dianera entre Dios, in-

mensamente rico, y loshombres, inmensamentepobres. Digo empezó,pero no acabó. Si subióal cielo no fue para de-sentenderse sino parabrindar soluciones a losproblemas humanos.

Si se preocupó de algotan fútil, tan baladí comola falta de vino, cuántomás de los grandes pro-blemas de sus hijos. Ella,nos dice el Concilio, “pro-cede y acompaña al pue-blo de Dios”.

La siempre ocupadaestá muy cerca de Dios ycerca de nosotros parahacer más eficaz y valiosasu ayuda maternal.

❚ RAFAEL REY, O.C.D.MADRID

Ante el veranoque ya llegó,nuestra revista,su “revistaPasionario” setoma unasvacaciones unpoco más largas.Por eso, estenúmero de larevistacomprende losmeses de junio yjulio. El siguientenúmerocorresponderá alos meses deagosto yseptiembre.Una vez más,deseamos anuestrosredactores,corresponsales ylectores, y a todoslos devotos deSanta Gema, muyfelices ygratificantesvacaciones.

Ante el veranoque ya llegó,nuestra revista,su “revistaPasionario” setoma unasvacaciones unpoco más largas.Por eso, estenúmero de larevistacomprende losmeses de junio yjulio. El siguientenúmerocorresponderá alos meses deagosto yseptiembre.Una vez más,deseamos anuestrosredactores,corresponsales ylectores, y a todoslos devotos deSanta Gema, muyfelices ygratificantesvacaciones.

María, alivio de la carga de nuestros pesares.


Los días 12 y 13 demayo, el Papa Franciscorevolucionó Portugal, lle-nándolo de alegría, desdeFátima. Durante esos dosdías, la pequeña capilla delas apariciones de la Virgeny la enorme plaza adya-cente, se convirtieron entemplo y altar mayor paratoda la cristiandad, y enpunto de encuentro uni-versal. Todo ello con Maríade Fátima como “causa dealegría” para millones decreyentes, entonando can-ciones, desgranando ro-sarios, derramando lágri-mas. Los días 13-14 demayo de manera muy es-pecial, pero también cual-quier otro día y cualquiermes del año, salvo cuandoarrecian los fríos invernales,Fátima, siempre lugar pri-vilegiado para el encuentro,los rezos compartidos ylas incomparables alegrías.

PEREGRINAR A FÁTIMA

Peregrinar a Fátima essiempre un lujo para el es-píritu, y Fátima, un surtidorde las más dulces conso-laciones. Yo peregriné aFátima en mayo, con ungrupo de peregrinos. Ape-nas aterrizados, celebrandoya nuestra Eucaristía, co-menzamos a saborear las

emociones y las alegríasdel encuentro con Maríaen este lugar privilegiado.Eucaristía compartida conveinte sacerdotes más ycon cientos de peregrinosllegados de los más diver-sos confines. Hace frío,pero la oración de gratitudy alabanza brota espon-tánea en esta “capelinha”singular, y con el “arbolitode las apariciones” comotelón de fondo. El PapaFrancisco, fue acogido yaclamado por más de unmillón de fieles, en estemismo escenario, procla-

mó las grandezas y lasbondades de María y susllamadas a la solidaridad,la justicia y la reconcilia-ción universal, en este pre-ciso momento de nuestrahistoria. Una Eucaristíaaquí, así, será siempre difícilde olvidar.

Luego, en la tarde-no-che, rezo del rosario y pro-cesión de antorchas. Quin-ce misterios del Rosario,que se hacen cortos, y mi-llares de antorchas encen-didas, ya por la noche,compitiendo con las es-trellas, elevándose también

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Fátima,oraciones, y alegría del encuentro


al cielo como gritos de sú-plica, de gozo y de espe-ranza.

Como noches de “fe yalegría” pudieran muy biendefinirse estas noches deencuentro privilegiado, aquíen Fátima.

LOS NIÑOS,LOS PASTORES,Y EL VALOR DELAS COSAS SENCILLAS

En Fátima, el 13 demayo, el Papa Franciscocanonizó, proclamó santos,a Francisco y Jacinta, dos

de los tres niños que vierony hablaron con la Virgen.Es por demás claro que enla Iglesia de Jesús, y en elcielo, hay lugar para todos:niños, adultos, gente pobre,y otros no tanto. En nuestra

peregrinación a Fátima vi-sitamos, en Aljustrel, las ca-sas familiares de Francisco,de Jacinta y también la deLucía. Casa y contextos fa-miliares por demás humil-des, más bien pobres. Yellos, los niños videntes,también muy pobres, claroestá, pero profundamentecreyentes, con una fe yunos rezos elementales,que ellos, los niños, consus familias, vivían, y conlos que Jesús, María y losángeles del cielo, sintoni-zaban. Las apariciones y re-velaciones de la Virgen enFátima, transformaron las

“pequeñas” vidas de Fran-cisco, de Jacinta y de Lucía,llenándolas de nuevas ale-grías, convirtiendo a los treshumildes pastorcitos en“expertos” en las cosas deDios y del más allá.

A Francisco y a Jacinta,la Virgen les prometió quemuy pronto subirían alcielo; Lucía más tarde. Allí,en el alto cielo, se encuen-tran ya los tres, y desde elcielo siguen irradiandobondades. Proclamandoque en lo más sencillo, envidas y vivencias elemen-tales, y desde el amor cre-yente, es más fácil encon-trar a Dios, y más fácilescalar el cielo, invitados yconducidos por María, lade Fátima.

Con convicciones asíde claras, uno se propu-so regresar a casa, desde

Fátima, con alegrías y ferenovadas, luego de unaperegrinación y de en-cuentros ya para siempreinolvidables.

❚ MIGUEL GONZÁLEZ, C.P.


El árbol, memorial vivo, en el lugar de las apariciones de Fátima.


«Escuchada los ancianos»

Y quisiera terminar... —había un discurso es-

crito, pero después de ha-beros visto, de haber oídolos testimonios, he que-rido deciros esto–: habrámomentos en los que noentenderéis nada, mo-mentos oscuros, feos,momentos bonitos, mo-mentos luminosos... perohay una cosa que yo qui-siera subrayar. Nosotrosestamos en el presente. Ami edad, estamos para ir-nos... ¿no? [ríe] ¿Quién ga-rantiza la vida? Nadie.Vuestra edad tiene el fu-turo por delante. A los jó-venes, hoy, a los jóvenes,la vida les pide una misión,la Iglesia les pide una mi-sión, y yo quisiera encar-garos esta misión: volvedy hablad con los abuelos.Hoy más que nunca tene-mos necesidad, tenemosnecesidad de este puente,del diálogo entre los abue-los y los jóvenes, entre losviejos y los jóvenes. El pro-feta Joel, en el capítulotres, versículo dos, nosdice esto, como una pro-fecía: «Los ancianos ten-drán sueños, soñarán, y losjóvenes profetizarán», estoes, realizarán las profecíascon las cosas concretas.Esta es la tarea que yo os

doy en nombre de la Igle-sia: hablar con los ancianos.«Pero es aburrido..., dicensiempre las mismas cosas».No. Escucha al anciano.Habla, pregúntale cosas.Haz que ellos sueñen y sír-vete de esos sueños para iradelante, para profetizar ypara hacer concreta aquellaprofecía. Esta es vuestramisión hoy, esta es la mi-sión que hoy os pide laIglesia.

Queridos jóvenes, sedvalientes. «Pero, Padre, yohe pecado, caigo muchasveces...». Me viene a lamente una canción alpina,muy bonita, que cantan losalpinos: «En el arte de subir,lo importante no es nocaer, sino no quedarse caí-do». Adelante, ¿caes?, le-vántate y sigue caminando.

Pero piensa en aquello queha soñado el abuelo, queha soñado el anciano o laanciana., Hazles hablar,toma esas cosas y haz elpuente hacia el futuro. Estaes la tarea y la misión quehoy os da la Iglesia.

Muchas gracias porvuestra valentía, y... hastaPanamá. No sé si seré yo,pero estarán el Papa. Y elPapa, en Panamá, os harála pregunta: «Habéis ha-blado con los viejos? ¿Ha-béis hablado con los an-cianos? ¿Habéis tomadolos sueños del anciano ylos habéis transformado enprofecía concreta?». Estaes vuestra tarea. Qué elSeñor os bendiga. Rezadpor mí, y preparémonostodos juntos para el Sínodoy para Panamá. Gracias.

194 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

EL PAPA FRANCISCO, A LOS JÓVENESEN LA VIGILIA DE ORACIÓN PREPARATORIA DE LA EDICIÓN DIOCESANA

DE ROMA DE LA JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD, 8 DE ABRIL DE 2017


Seguro que todos conocemos casos de personas que después de haber criadouno o varios hijos, trabajar para darles lo mejor, pasar algunos apuros económicos

para conseguir mejores casas, mejores colegios, mejores vacaciones, en fin un mejorde todo, les llega el día de la jubilación, unos la viven con alegría, otros con pesar,pero todos coinciden en que es mejor llegar que quedarse en el camino.

Muchos sueñan con viajar a paraísos lejanos. Otros en realizar actividades diversasque van relegando a lo largo de su vida laboral, para cuando lleguen esos días en losque no tengan que estar pendientes del reloj, y tengan tiempo libre, ¡por fin!, poderrealizar lo que tanto tiempo han soñado. Otros tienen sueños menos laboriosos, esdecir, hacer lo que les venga en gana en cada momento sin el dichoso despertador,levantarse, desayunar despacio con el periódico o el libro o el crucigrama, sueños pe-queños pero de gran satisfacción mental, por lo menos cuando lo viven en su cabeza.

Ahora bien, entre los sueños a la realidad hay una gran brecha. Algunos logranque sea menos profunda, pero la gran mayoría continúan con el reloj en mano, conapuros económicos y sin realizar lo soñado.

–Papá, puedes ir mañana a buscar a la niña al cole, me ha surgido una reuniónque no puedo dejar y M... está de viaje.

–Mamá, esta semana te va a tocar quedarte con los niños, es la semana blanca yno me dan los días en la empresa.

–Tenemos planes para este finde. Os quedáis conlos peques, que les hace mucha ilusión estar con losabuelos.

–El próximo curso J. tiene natación después delcole Ni yo ni T... podemos salir a esa hora, es unapena que no vaya. Vosotros que tenéis tiempo, acer-caros a por él.

–Mamá estoy rendida, una semana espantosa detrabajo y encima me dices que no puedes dejar de ira las clases de macramé para poder echarme unamano con C... y con L...

–Esto de tener un hijo se me está haciendo muycuesta arriba y sin nadie que me ayude. Es que tú nosabes qué infierno estoy pasando, no tengo tiempo nide mirarme al espejo.

–Papa, nos ha llegado el pago de la hipoteca, ycomo también tenemos que pagar las vacaciones delverano no tenemos suficiente. Me prestarías estemes...

–Salimos el domingo a comer todos juntos, hace mucho que no lo hacemos, alos niños les apetece... He venido sin la tarjeta, papá paga tú que luego te lo doy.

“C´est la vie”!!! Como dirían los franceses, o como decimos en este País, “esto sonlentejas”...

❚ “DIDO TOLA”PROFESIONAL SANITARIA

MADRID


¿CÓMO SERÍA UN MUNDO SIN ABUELOS?CON ELLOS, TODO ES POSIBLE. SIN ELLOS...


196 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

Había mucho que ha-cer, porque la mies eramucha y los obreros pocos.Y Jesús cuenta enseguidaen compartir su misión conel grupo más grande dediscípulos, que también leseguía. Tenían que cola-borar con El en la venidade su Reino. Y envía a se-tenta y dos para que lepreparen el camino de lospueblos y lugares adondetenía que ir El.

Y envía de dos en dos acuantos convivían con Ely lo iban conociendo. Alos que ya le seguían losconvierte ahora en misio-neros de su Evangelio. Lo

196 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

El evangelio cada día

Tú, también Misionero

Misionero también tú. Designó además el Señor otros setenta y dos, y los mandópor delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir

él. Y les decía:–La mies es abundante y los obreros pocos: rogad pues al dueño que mande

obreros a su mies. Y vosotros ¡poneos en camino! Mirad que os mando como cor-deros en medio de lobos. No llevéis talega, ni alforja, ni sandalias; y no os detengáisa saludar a nadie por el camino.

Cuando entréis en una casa, decid primero: “Paz a esta casa”. Y si allí hay gentede paz, descansará sobre ellos vuestra paz; si no, volverá a vosotros. Quedaos en lamisma casa, comed y bebed de lo que tengan, porque el obrero merece su salario.

No andéis cambiando de casa. Si entráis en un pueblo y os reciben bien, comedlo que os pongan, curad a los enfermos que haya, y decid: “Está cerca de vosotrosel Reino de Dios”.

Los setenta y dos volvieron muy contentos y le dijeron: –Señor, hasta los demo-nios se nos someten en tu nombre.

El les contestó: -Veía a Satanás caer del cielo como un rayo. Mirad: os he dadopotestad para pisotear serpientes y escorpiones. Y no os harán daño alguno. Sinembargo, no estéis alegres porque se os someten los espíritus; estad alegres porquevuestros nombres están inscritos en el cielo.

(Lucas 10,1ss).

Tu palabrame da vida


Revista Pasionario | 197Revista Pasionario | 197

que quiere decir desde en-tonces que no podemosser seguidores de Jesús, sial mismo tiempo no somostestigos suyos.

Es decir, que entoncesy ahora solo pueden serapóstoles de Jesús los quehan sido y son íntimos su-yos. Serán sus representan-tes y testigos los que hansido sus compañeros decamino. Los que han es-cuchado sus palabras y hanvivido en amistad con El.

En el pueblo cristianosolemos que, para ser dis-cípulos suyos, basta conconocer su Evangelio y tra-tar de seguirle de cerca ennuestra vida personal. No.Para ser cristianos de ver-dad, hay que convertirseademás en testigos em-peñados en preparar suscaminos.

Como la Galilea detiempo de Jesús, estemundo nuestro está tannecesitado de Dios, porqueson tan escasos los testigosque anuncien su Evangelio.Y la urgencia es tan grande,que Jesús sigue pidiendoa los suyos el compromisode la oración: “Rogad alDueño que envíe obrerosa su mies”.

Nuestros nombres,inscritos en el cielo

Es decir, que en estaempresa del Reino no bastacon nuestra disponibilidady nuestra buena voluntad;

necesitamos sobretodo contar con laacción del mismoEspíritu que convir-tió a aquellos pri-meros discípulos entestigos de Jesús,hasta dar la vida porEl y su Evangelio.

Sabiendo muybien eso: que pediroperarios para sumies, nos pide tam-bién a todos poner-nos en camino.Para ser de verdaddiscípulos de Cristo,necesitamos com-prometernos conseguirle incondicio-nalmente y con re-presentarle en suanuncio del Reinode Dios. Además de pe-dirle nuevos operariospara su mies, hay que de-cirle de corazón al Señorque cuenten también connosotros para llevar su mi-sión adelante.

Hoy, como entonces,nos advierte Jesús que sermisioneros suyos en elmundo no es una cosa fa-cilona. Sus apóstoles detodos los tiempos nos se-guimos sintiendo comoovejas entre lobos. Tene-mos que ir además ligerosde equipaje, y únicamentecon la paz como equipajeimprescindible.

Pero sabiendo ademásque es Dios el que cuidacon providencia amorosade cuantos se comprome-


ten a anunciar en el mundosu Reino. Las atencionesdel apóstol de Jesús lasobtiene quien pone su co-razón en el anuncio delReino de Dios Padre.

El Maestro le pide po-breza al evangelizador en-viado. Pero también es ver-dad que la riqueza másgrande para él es la de lle-var ese Reino en su cora-zón y en sus labios.

Y terminamos dandogracias de todo corazónal Señor por la alegría desaber que “nuestros nom-bres están inscritos en elcielo”, en el corazónde nuestro PadreDios.

❚ ANTONIO SAN JUAN

Pedid al Dueñoque envíeobrerosa su mies


Pasionistas en misión

11 Chile:LA ALEGRÍA DE SER PASIONISTAReflexión de la Familia Pasionista de Chile

198 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

Ya estoy en el sur. Verano austral. Caloren Santiago y temperatura agradable

en Viña del Mar. Ciudad donde se en-cuentra la segunda comunidad pasionistade América (1887). La historia de la casanarra cómo un grupo de religiosos in-gleses vinieron a Chile para acompañarespiritualmente a la colonia irlandesa,afincada en Valparaíso, ciudad vecina. Elconvento es la octava edificación/casa,construida en lo que hoy es la ciudad deViña del Mar, de doscientos cincuentamil habitantes.

En Viña del Mar, hemos celebrado laasamblea de la Zona Andina (Chile, Boliviay Perú). Los Pasionistas chilenos se hanhecho mayores, pero con gran capacidadde trabajo, especialmente con los laicos.Un joven, dice querer ser pasionista. Loacabo de conocer; se llama Iván. Va a ini-ciar su formación entre nosotros.

En una de las salas de casa, encuentroun tema de reflexión, que acababan detrabajar un nutrido grupo de laicos Pasio-nistas. Se preparan para ir a una misión.Quiero compartirlo con vosotros. Dice así:

Vamos a revisar y compartir la vivenciapersonal y comunitaria de nuestra iden-tidad pasionista: ser pasionista es ser

CASA E IGLESIA DE SANTA GEMA


contemplativo, testigo y profeta de laPascua en la pasión propia y en la pasióndel mundo.

UN PASIONISTA ES CONTEMPLATIVO,TESTIGO Y PROFETA

a) Contemplativo: Persona que vive unaamistad con Cristo y que tiene ojos ycorazón bien abiertos, para mirar, confe profunda, las realidades más hondasde su vida personal, comunitaria, so-cial, eclesial y es capaz de ver elmundo con los ojos de Dios.

b) Testigo: Persona que no solamente esbuena o se porta bien, que cumple conlo establecido, sino que es coherentey vive en sintonía con los sentimientos,actitudes, gestos y valores de Cristo yel Evangelio. Vive al estilo de Jesús.

c) Profeta: Persona que no solo hablade Dios al mundo, sino que también

habla a Dios de lo que ocurre en elmundo. Profeta es el que levanta lavoz, hace gestos y expresa actitudespara defender la vida. Siente pasiónpor la vida. Sufre el dolor del mundocon el corazón del Crucificado y de-nuncia toda situación de injusticia.En esta oportunidad, antes de ir a la

misión, necesitamos rescatar algunosrasgos de ese misionero pasionista: Setrata de un hombre/mujer identificadocon el Señor, dentro de un contexto quele caracteriza y desde el que quiere vivirel seguimiento cristiano; esta caracterís-tica se adquiere con Jesús y por la res-puesta que Él espera de los suyos.

Respecto al contexto y al carácter dis-cipular misionero, el pasionista, en Lati-noamérica, ha de ser discípulo de Jesús,pues siente de Él mismo el llamado, nose trata de una vinculación de “siervos”,porque «el siervo no conoce lo que hacesu amo», sino de “amigo” y como “her-mano”. Pues el “amigo” ingresa a la casade Jesús, a su vida, a su familia, hacién-dolas propias.

El “hermano” de Jesús participa de lamisma vida que recibe el Hijo de su Pa-dre. La misión pasionista en Chile quiereser una misión de “hermanos” esencial-mente en fraternidad. Esto no implicauna comunidad de Jesús, perfecta, sinode hermanos que pasan por sus proce-sos de maduración, de crecimiento y deaceptación.

Por tanto nuestra misión como pasio-nistas nos exige escuchar y ver al Señor,en la escuela de los discípulos y misio-neros, para configurarnos con Él. Escu-


TA GEMA EN SANTIAGO DE CHILE


char y ver es la primera labor de un mi-sionero pasionista, la segunda, despuésde esta experiencia contemplativa, exigeconfigurarse con el Maestro, con su estiloy destino de vida.

De la contemplación-misión surge laPasión por el Reino, en un mundo queno siempre tiene su corazón en el Padrey en su Reino. Las consecuencias son: laexigencia de un testimonio audaz, y laofrenda de la vida en favor de los predi-lectos de Dios: pecadores y marginados.El misionero pasionista tendrá que re-nunciar a sí mismo y cargar con la cruz;estas dos condiciones del discipuladomarcan a fuego el estilo de vida del quesigue y anuncia el mensaje esperanzadordel crucificado - resucitado.

LA ALEGRÍA DE NUESTRA IDENTIDADPASIONISTAIluminaremos la alegría de nuestraidentidad pasionista con tres textosdel Documento de Aparecida y con elEvangelio de la Samaritana.

Contemplativo.–“Conocer a Je-sucristo por la fe es nuestro gozo: se-guirlo es una gracia. Con los ojos ilumi-nados por la luz de Jesucristo resucitadopodemos y queremos contemplar almundo, a la historia, a nuestros pueblosy a cada una de sus personas.” DA 18

Testigo.–“Conocer a Jesús es el me-jor regalo que puede recibir cualquierpersona; haberlo encontrado nosotroses lo mejor que nos ha ocurrido en lavida y darlo a conocer con nuestra pa-labra y obras (ser testigo) es nuestrogozo.” DA 29

Profeta.–“De nuestra fe en Cristo,brota también la solidaridad como acti-tud permanente de encuentro, herman-dad y servicio, que ha de manifestarseen opciones y gestos visibles, principal-mente en la defensa de la vida y de losderechos de los más vulnerables y ex-cluidos.” DA 394

Pasionistas en misión

200 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

VOLVER CON EL CANTARO AL POZO ¿La experiencia de la samaritana, en-riquece nuestra identidad pasionista?

(En la Biblia, el pozo es el lugar del en-cuentro de los hermanos; de los pastoresy sus rebaños; lugar del encuentro de laMujer Samaritana con Cristo. El pozo esCristo; el Agua es el Evangelio de la Pa-sión y el Carisma de Pablo de la Cruz.“La fe cristiana es un encuentro con Je-sucristo.”)

El papa emérito, Benedicto hace estareflexión en torno a la mujer samaritana:”No hay hombre o mujer que en su vida,como la mujer de Samaria, no se encuen-tre junto a un pozo con una vasija vacía,con la esperanza de saciar el deseo másprofundo de su corazón, aquel que sólopuede dar significado pleno a la existen-cia. Hoy son muchos los pozos que seofrecen a la sed del hombre, pero con-viene hacer discernimiento para evitaraguas contaminadas. Es urgente orientarbien la búsqueda, para no caer en desilu-siones que puedan ser ruinosas”.

Aplaudo el trabajo de misión que sedesarrolla en estas tierras, valoro la for-mación que implica un compromiso porla evangelización y agradezco que pa-sionistas -especialmente los laicos- des-cubran y proyecten en sus vidas las tresdimensiones que nos hacen ser Iglesiaen sintonía con el Evangelio.

❚ JUAN IGNACIO VILLAR (VILY)



Según una tradición tibetanaexiste un hilo invisible de co-

lor rojo que nos mantiene co-nectados a las personas a lasque amamos o con las que he-mos vivido experiencias signifi-cativas que hace que, aunqueel tiempo o la distancia nos se-paren, permanezcamos unidasy en una misteriosa intercone-xión; comunicándonos alientoy fuerza, aún sin saberlo.

Hay una mujer con la queyo tengo un vínculo especial:mi madre. Ahora que las cir-cunstancias han cambiado, quela relación es distinta, voy com-prendiendo mejor algunas co-sas de eso que llamamos unión.Mi madre nos dejó físicamentehace unos cuantos meses, an-tes de que el invierno hicierasu presencia, y una nueva pri-mavera estuviera a punto debrotar de forma inesperada. Unictus fue la señal de que algonuevo y distinto estaba por su-ceder, de que terminaba unaetapa y comenzaba otra, o másbien proseguía de forma dife-rente.

Ante la llegada de la muertese nos achica el alma y el cuer-po. La sociedad en la que vivi-mos cuando llegan estos mo-mentos, se lamenta y apenamás que dar ánimos y fuerzas.Sin ser casi conscientes, todosnos vemos nadando en unocéano de penas. Esa fue misensación mientras estábamosen el tanatorio. Se agradecenfrases como: “Te acompaño enel sentimiento”, pero sin dudayo hubiera agradecido más unasonrisa o una broma. Las penascon penas se multiplican y conalegría se desvanecen. Un buenchiste alivia mucho y afloja elnudo en la garganta que seforma en esas circunstancias.Por lo cual invito a contar máschascarrillos en los tanatoriosy cementerios, aunque social-mente no esté bien visto. Nose trata de cumplir protocolos,sino de hacer más llevadero el

dolor, de salpicarle con el sen-tido del humor para que no seacomode e instale; pues hastade la muerte podemos hacerunas risas.

Yo no me quedo en eselado de la frontera donde eldesánimo es el amo y señorde los sentimientos. Espiritual-mente me siento llamado a laesperanza, a celebrar la vida yla muerte, a revivir los buenossucesos; a decirme y transmitira otros frases como “¡Cuántosbuenos momentos pasamoscon tu madre!, ¿Te acuerdasde aquel día de campo tan di-vertido? ¡Menuda era cuandose ponía a animar a los demás!”Expresiones como esas nos re-vitalizan y levantan el ánimo.Es cuestión de creérselo y prac-ticarlo. Prueben, prueben, yaverán como todo se transfor-ma.

El agradecimiento comoactitud vital nos hace más lle-vadera la ausencia. Es cuestiónde perspectiva. De valorar eltiempo compartido con la per-sona que ya no está a nuestrolado. Si lo pensamos fríamente,10, 20, 30 o más años convivi-dos con alguien, son un regalototal frente a las mínimas horasque podemos disfrutar conotros. Llega el momento dedar gracias por lo aprendido,reñido, celebrado, discutido,por todo lo vivido, porque losingredientes de lo cotidianohan creado unos lazos espe-ciales.

Debemos aprender a des-pedirnos, a dejar que las per-sonas se marchen cuando ten-gan que hacerlo. Querer rete-nerlas no hace sino heridas porel tira y afloja. Soltar, aunquenos cueste, permite que lasdespedidas no sean tales. MaríaMagdalena se empeñaba enretener a Jesús Resucitado yeste le decía que le soltara…por algo sería.

Me pregunto por qué se-guimos yendo a los cemente-rios, cuando allí sólo queda lamateria de un cuerpo corrom-piéndose. No busquemos entrelos muertos a los que siguenvivos entre nosotros. Los ver-daderos santuarios donde si-guen habitando los que noshan dejado físicamente son lascasas donde han vivido, las ca-lles que han recorrido, los ob-jetos que han tocado y, sin em-bargo, les seguimos rindiendoculto en lugares de piedras fríasy flores secas. Como las mujeresel día de la Resurrección deJesús, seguimos añorandocuerpos y mortajas en lugar debailar sobre las baldosas quepisaron y acariciar cada muebleque tocaron en un acto de ter-nura eterna y sagrada.

Es cierto que un día nosvamos a morir, pero los otrosdías no.

(Continuará ...)

❚ JUAN CARLOS PRIETO TORRES

[email protected]

El hilo de la vida (Parte 1)


202 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

La labor social de laIglesia católica es

muy poco conocida.Este hecho contrastacon la enorme activi-dad que despliega a lolargo de todo el mun-do. Ninguna organiza-ción, pública o privada,puede esgrimir las ci-fras que maneja la Igle-sia en su actividad asis-tencial.

Tal vez sea solo unavisión personal, perosospecho que cada vezmás gente aprecia a laIglesia Católica; dondelas instituciones no llegan,allí está ella con sus brazosabiertos hacia los másabandonados y desprecia-dos de este mundo. Nuevemillones de personas mar-can la “X” en la declaraciónde sus rentas. El secretode la admiración por loscatólicos está a la vista, yse nota en el incrementoanual de estas aportacionesy la ayudan en su gran fun-ción social en favor de losmás necesitados. Es difícilcombatir con propagandalo que es evidente.

La Iglesia con la casilla“X” hace posible: el anunciodel Evangelio, la educaciónen la fe de millones de per-sonas, niños, jóvenes, ayu-dar a los sacerdotes queviven con más estrechezque abundancia, conser-

vación de su gran patri-monio cultural (catedrales,universidades, monasterios(...). La Iglesia Católica enlos tiempos más duros dela crisis económica ha sidoy es una de las institucionesque más se ha compro-metido con los más vul-nerables: ancianos, madressolteras, niños, ...

PREJUICIOSY PREVENCIONES

Hay un prejuicio contrala Iglesia, estrictamenteideológico, de aquellosirredentos laicistas y anti-clericales que alimentan elodio, ninguneando la laborsocial de aquella. ¿Hastacuándo la animadversión?Durante siglos las comu-nidades cristianas han

anunciado, celebradoy compartido el amorde Dios en el mundo.Más aún, la presenciade la Iglesia ha sidofecunda no solo en elaspecto religioso sinoen el ámbito de la cul-tura con la aportaciónde tantas universida-des, colegios y escue-las, en pueblos y ciu-dades, para la expan-sión de una educaciónde calidad. Millones deespañoles, de cual-quier creencia y con-dición, se han formado

y se forman en estos cen-tros en España, contribu-yendo al avance de nuestrasociedad y permitiendo sumodernización. Y qué deciren el campo asistencial:residencias, sanatorios, asi-los u orfanatos que hanrecogido durante siglos amillones de personas des-favorecidas.

Tal vez la raíz estribe endesconocer que la Iglesiano se limita a predicar lafe desde los templos y ad-ministrar los sacramentos.Una parte importante desu misión tiene que vercon la labor asistencial afavor de los sectores másdesfavorecidos.

Es difícil acallar todoesto con simples descali-ficaciones y manipulacio-nes interesadas cuando,

Desde la otra orilla

Iglesia Católica,una historia larga y fecunda

La Iglesia, Comunidadde discípulos del Señor,siempre caminantes,en búsqueda permanente.



solo en centros sociales,la Iglesia ha atendido acuatro millones de usuariosentre pobres, prostitutas,presos, familias con pro-blemas, enfermos o ancia-nos... el papel de miles dereligiosos y voluntarios queen las iglesias, asilos, cen-tros hospitalarios o en Cá-ritas, atienden “a los másnecesitados, sin pregun-tarles de dónde vienen, aquién votan y cuál es suorientación sexual”.

PERSONAS CON ROSTRO

Nadie ha conseguidoelaborar una teoría convin-cente que explique cómouna organización que cuen-ta con recursos tan limita-dos es capaz de tener unainfluencia tan grande en elmundo. Pese a los negativosaugurios sobre el futuro y

lores tradicionales, al mis-mo tiempo que se adecuaa las exigencias de la so-ciedad contemporánea.

Ella nos permite juzgarlos cambios de nuestra so-ciedad a la luz de la fe yde la sensibilidad cristianaen temas tan complejoscomo la militancia política,el servicio al bien común,la participación en la so-ciedad y en la cultura, elcompromiso en el mundodel trabajo y de la empresa,la acción contra la pobrezay la marginación... Ella nosayuda a discernir valoresauténticamente cristianosen medio de una sociedadabierta y plural. “El come-tido fundamental de la Igle-sia en todas las épocas yparticularmente en la nues-tra es “dirigir la mirada delhombre, orientar la con-ciencia y la experiencia detoda la humanidad haciael misterio de Cristo” (Re-demptoris missio nº 4).

Desgraciadamente hayuna mayoría de personas,incluidos muchos católi-cos, que ignoran la verda-dera misión de la Iglesia ysu trabajo silencioso sinafanes de protagonismo.Misión, que no es otra, quedirigirse a todos los hom-bres y mujeres en su propiaépoca, en su cultura, ensu orden social, su men-talidad, sus experiencias vi-tales y estilos devida, con el mensajeevangélico de suSalvación.

❚ GREGORIO SANTOS ZAYAS

BARCELONA


la salud de la Iglesia, la realidad dista mucho de laimagen que los medios decomunicación transmitencon frecuencia.

Puede que en el INEMconozcan las cifras de de-sempleados, pero sólo lasorganizaciones como Cá-ritas están en condicionesde poner rostro a las per-sonas que sufren las con-secuencias sociales de lacrisis económica. La verdades que las instituciones re-ligiosas nunca han consi-derado una prioridad la apa-rición en los medios de co-municación de masas, perolo que nadie discute es suprofundo conocimiento dela realidad social.

LA IGLESIA, DEFENSORADE VALORES PERENNES

A lo largo de la historia,la Iglesia católica ha tenidouna influencia innegableen la configuración del sis-tema político y de la co-hesión social. Hoy, en lassociedades democráticaslos estados son laicos oaconfesionales.

La Iglesia ha tenido queadecuarse a las nuevascondiciones de los siste-mas político, social, eco-nómico y cultural. Sin em-bargo, esto no significa quela institución haya cam-biado su esencia, sus idea-les, ni sus objetivos.

Si la Iglesia católica hasobrevivido a las transfor-maciones culturales y so-ciales, esto no se debe alazar, se debe a su capaci-dad de mantener sus va-

Los rostros de la pobrezapreocupación primordial

del Papa, de la Iglesia.


El día 29 de abril CarlosMego, religioso pasio-

nista de votos perpetuos,nacido en Perú, recibía laordenación del Diaconadoen la catedral Magistral delos Santos Niños Justo yPastor de Alcalá de Hena-res. Todo esto nos contó:

Son muchos los senti-mientos y emociones queen este momento invadenmi ser. Es un día especial yuna experiencia única, enel que unen muchos sen-timientos y emociones dealegría y gratitud. No puedodejar de dar gracias a Diospor el don de la vida y porhaberme regalado unospadres que se preocuparony se siguen preocupandopor dar a sus hijos una for-mación humana y cristianatestimoniada con peque-ños gestos de humildad,sencillez y amor. Es en mihogar donde aprendí adescubrir la mirada tiernay protectora de un DiosPadre y Madre que meamaba. Estas experienciasfueron las que me ayuda-ron a ir descubriendo mivocación misionera, ahoraconcretada en el carismay espiritualidad de la con-gregación de la Pasión deJesucristo, a quienes agra-dezco su acogida y con-fianza en cada una de lasetapas de formación.

Estoy muy contento depertenecer a Cristo y haberrecibido el ministerio deldiaconado, que me com-

promete a seguir a Diosdesde el servicio a su pue-blo, en el ministerio de laliturgia, de la palabra y dela caridad. Todo esto esuna prueba más de queDios me está mostrandoel proyecto que tiene pre-parado para mi vida y misalvación.

También es un regalode Dios que esta celebra-ción se haya llevado a caboen la Catedral Magistral deAlcalá de Henares, bajo laimposición de manos delOsbispo Juan Antonio RaigPla, teniendo como testi-gos no sólo a mis herma-nos pasionistas, sino tam-bién a algunos de mis fa-miliares, amigos, alumnosy profesores del colegioSan Gabriel, colegio en el

que vivo actualmente. Mehubiera hecho mucha ilu-sión haber podido contarcon la presencia de mispadres, pero por diferentescircunstancias no ha sidoposible. Sin embargo, a pe-sar de los miles de kiló-metros que nos separan(Perú-España), tengo lacerteza que desde allí sehan unido a este momentoa través de sus oraciones.Por eso, desde aquí os en-vío un abrazo en agrade-cimiento por su generosi-dad y comprensión por ha-ber donado al Señor de lavida a ocho de sus hijos.Queridos padres, es horade ir comprendiendo jun-tos que Dios llama dondequiere y a quienes quiere,y es motivo de alegría no

204 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

Carlos Mego se explica


de tristeza, porqueDios va manifestandosu misericordia, libre,amorosa y gratuita-mente.

Tú resides en nues-tro Colegio San Gabrielde Alcalá de Henares.Además de realizar tuaño de pastoral previoal sacerdocio ¿a quéte dedicas?

Hace un año quellegué al colegio SanGabriel y a además derealizar mi año de pas-toral, dicto clase dereligión, soy el coordinadorde la pastoral escolar y ex-traescolar. También tengoun espacio para compartircon los niños, jóvenes yprofesores en los diferentesrecreos. Estoy muy con-tento de poder compartircon todos los que hacenparte de este cole.

¿Cómo ves la juventudde ahora?

Los jóvenes de hoy sonjóvenes con muchos sue-ños, metas e ilusiones,pero lamentablemente,muchos de ellos viven almargen del proyecto deDios. Con esto, no quierodecir que los jóvenes dehoy sean una calamidad,porque tengo la certeza

que cada uno es hijo de sutiempo y de su realidad.Pero si somos realistas, po-demos decir que en lostiempos actuales ha au-mentado en un gran por-centaje la indiferencia e in-cluso el rechazo hacia loreligioso por parte de lamayoría de la juventud.Pero todo esto no nos pideque nos inventemos algonuevo para poder conectary ser más cercanos a ellos,sino que nos impulsan a ira las fuentes de nuestra fey hacernos discípulos y tes-tigos de Dios muerto y re-sucitado por nosotros.

Anima con tus palabrasa quienes hoy sienten lallamada de Dios a seguirlemás de cerca.

Queridos jóvenes,el Señor os necesita.Os llama a seguirle másde cerca y seguirle másde cerca significa sertestimonio vivo delamor de Dios. No ten-gáis miedo en aceptarla llamada de Dios, dejaque Dios trabaje en tucorazón y haga creceresa semilla de fe, deesperanza y de amor.Dios quiere que seáisprotagonistas de unmundo mejor, unmundo de justicia, depaz y de amor. Yo séque hoy en día es difícil

optar por seguir a Jesúsmás de cerca porque mu-chas veces te conviertesen burla para los amigos oincluso para los familiares.Es difícil aceptar la llamadade Dios porque por ser jó-venes nos seducen con mi-les de oportunidades queen el fondo son limitadas.Yo creo y sigo a Jesús y tepuedo decir que él es elque te transforma, es elque te renueva, es el queaviva la esperanza, la alegríay el que te da la felicidad.Sigue a Dios más decerca, que vale lapena ser testigo desu amor.

❚ ALBERTO BUSTO

[email protected]



Su padre fue minero,viviendo una infancia llenade carencias en la Españade la postguerra. Sebastiánfue aprendiz de zapatero,pero a los nueve años yaacudía a tentaderos y ca-peas en donde empezó aentender el arte de torear.Como maletilla le apoda-ron “El rata” por su vivaci-dad. Con 17 años se inicióprofesionalmente en la Pla-

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Encuentros al caminar

Brindando a la eternidad:Sebastián Palomo Linares

Hablamos el 30 de mar-zo en la presentación

del libro del amigo comúnJoaquín Martín “La radiode los prodigios”; el 21 deabril ingresaba en el Hos-pital Gregorio Marañónpara someterse a un doblebypass aortocoronario quese complicó con un de-rrame cerebral, falleciendoel 24 de abril de 2017. Tenía69 años, a punto de cum-

plir los 70. Descanse enpaz.

BIOGRAFÍA

Sebastián Palomo Mar-tínez nació en Linares(Jaén), el 27 de abril de1947, conocido por sunombre artístico “PalomoLinares”, fue torero, actorde cine, pintor y criadorde reses bravas.

Sebastián Palomo Linares y Pepe Fernándezdel Cacho en la presentación del libro deJoaquín Martín, “La radio de los prodigios”,el 30 de marzo de 2017, apenas veintidósdías antes del fallecimiento del torero.



za de Vista Alegre, de Ma-drid, como aspirante a to-rero en una novillada deconcurso. Debutó con pi-cadores un año más tardecortando las cuatro orejasde sus toros.

La faena de su vida to-rera fue en Las Ventas, altoro llamado “Cigarrón”,negro meano, con 566 ki-los de peso, pertenecientea la ganadería de AtanasioFernández. Fue el 22 demayo de 1972, y desde ha-cía 37 años no se cortabaun rabo en Madrid. Estehito suscitó la polémica enel mundo del toreo, perosin duda significó la cúspidepara Palomo Linares quiense convirtió en un fenó-meno social.

CINE

En lo más alto de suprofesión torera realizó dospelículas como protago-nista “Nuevo en esta plaza”y “Solos los dos”, en estajunto a Marisol, fueron pe-lículas de gran calado po-pular. También se le hizoreferencia en la película “Elespejo” de Andréi Tarkovski.Se retiró en 1995. Su pasióny plena dedicación al reti-rarse del toreo fue la pin-tura, su gran amor. En 1997contrae matrimonio conMarina Danko, con la quetiene tres hijos, Sebastián,Miguel y Andrés. Se sepa-raron en 2012. Sus últimosaños los compartió conConcha Azuara, magistraday jueza decana de Valde-moro.

LA PINTURA

No pudo asistir a su úl-tima exposición titulada“50 años de Pintura 1967-2017”. El lugar elegido elPalacio del Infante en Boa-dilla del Monte. La pinturafue para Sebastián PalomoLinares su “sosiego”, así ti-tuló una de sus exposicio-nes. Su color, el blanco yplata. Los colores del ama-necer eran sus destellosde vida.

FRASES PARALA POSTERIDAD

“Es más difícil cortar unrabo en la Plaza de Torosde Las Ventas que exponeren el Museo del Prado”.

“Llevo más de treintacornadas en mi cuerpo...Pero volvería a empezar...Mi universidad fue la calle”.

“Seguro que cuandomuera mis cuadros se re-valorizarán”.

“Mi mayor preocupaciónes la responsabilidad”.

“Según va pasando eltiempo voy disfrutando másde las cosas pequeñas dela vida, quizá porque ne-cesito menos para vivir yvaloro más lo que tengo.Estoy en una de esas etapasmás bonitas de mi vida, eneso he tenido mucha suer-te, porque he sabido guiar-me por el buen camino”.

“Ahora hablo más depintura que de toros, perono puedo evitar que lasconversaciones giren alre-dedor de lo que ha sidoimportante en mi vida”.

Cuéntenos cómo le vacon su revistaPASIONARIO. Lo quele agrada o agradamenos de la Revista.Todo con vistasa mejorarla.¡GRACIAS!

–Sebastián, ¿añoras eltiempo pasado?

–No, porque todo haevolucionado mucho y bue-no, sí me gustaría tener vein-te años menos, pero cuan-do miro hacia atrás lo hagocon satisfacción porque hecumplido mis sueños y misobligaciones, y porque nun-ca defraudé a los que pu-sieron la confianza en mí.Lo he dado todo...

–¿Tienes alguna asig-natura pendiente?

–Ninguna, he cumplidocon todos y, sobre todo,conmigo mismo. Si en al-guna ocasión no han salidolas cosas lo bien que quería,no hay que perder nuncala esperanza.

Nos hicimos la foto derecuerdo y al verla, me dijo,Pepe hay que hacerse otraque se nos vea mejor... Aquíestá la foto y el recuerdopara siempre. Al ingresaren el Hospital comentó:“No tengo miedo, en peo-res plazas he toreado”. Se-bastián Palomo Linaresgoza ya de la paz de Dios.

❚ PEPE FERNÁNDEZ

DEL CACHO


1. LA CLAUSURA EN EL MISTERIO DE DIOS

“El Padre está todo en elHijo, todo en el EspírituSanto, el Hijo está todo enel Padre, todo en el Espí-ritu Santo. El EspírituSanto está todo en el Padre,todo en el Hijo”

(Concilio de Florencia. Dz 1331).

Sorprendentemente,siendo Dios inmenso, in-conmensurable, omnipre-

Sólo tal realidad es con-sistente.”

(Benedicto XVI).

También el Misterio deCristo nos habla de laclausura. La divinidad seha introducido y ocultadoen la humanidad. Divini-dad y humanidad se en-cerraron en el seno deMaría. El Misterio de laEncarnación es, pues, unMisterio de clausura. Y,precisamente, en el senode la siempre Virgen, laclausura fue para Ella eldon de la esponsalidad yla maternidad.

Nuestras Constitucio-nes mencionan la vidahistórica de Cristo comofundamento de nuestraclausura: Él se retiraba aorar (Cf. Const. Nº 39);permanecer en la oraciónde Cristo es la razón devivir retiradas. “Respondea la exigencia, sentidacomo prioritaria, de estarcon el Señor” (Juan PabloII, V.C. 59).

El Misterio de Cristollega a su punto álgidoen la Cruz, también en élaparece la clausura entérminos de soledad yabandono de Dios, quese traduce en nuestra vida en comunión con Jesús ensu dolor y fecundidad en la Iglesia (Const. Nº40, 41).

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Escuela de S. Pablo de la Cruz

sente, es también clausu-ra, intimidad personal deamor y donación. El Mis-terio trinitario nos remite a ello: a la relación eternae infinita de las Tres divi-nas Personas. Podríamos decir: Dios mismo en su Trinidad personal es unclaustro de intimidad, deamor que, ciertamente, se

abre en donaciónal mundo, pero sindejar de ser eter-no Amante, Amado y Amor. Este es el Misterio dondenuestra clausurase forma, se sos-tiene, se nutre y se irradia. Por eso,nuestra clausurano es meramentefísica, psicológi-ca, y tampoco esimpuesta ni inso-portable. Todo locontrario; en suraíz, nuestra clau-sura es teológica,es trinitaria.

2. LA CLAUSURA EN EL MISTERIO DE CRISTO

Jesucristo esverdaderamente elHijo de Dios “Por

ello murieron los mártires,de ello viven los cristia-nos de todos los tiempos.

Pasión de Jesúsen la clausura monacal (2)

Como azucenasblancas enel jardín de Dios.


3. MISTERIO DE LA PASIÓN

“Aquellos que Dios Padreha predestinado para quevivan identificados a suDivino Hijo en la gloria,los quiere primero predes-tinados a vivir identifica-dos a él en pobreza y encruz.”

(S. Pablo de la Cruz, introducciónal voto de pobreza en nuestras

Constituciones).

Es, sin duda, en la cruz,donde la divinidad deCristo se oculta más a losojos del mundo, para serreconocida sólo con losojos de la fe. Sin la sabi-duría de la fe, sin la sabi-duría de Dios (1Co. 1,21),la cruz aparece como lamayor de las tragedias ylo más contrario y opues-to a Dios. Y, sin embargo,es el Hijo de Dios quienmuere en la cruz. Es poresto por lo que se nosofrece como un misteriode clausura: lo divino senos entrega, no sólo enlo humano sino en sucontrario, cuando esecontrario –el pecado dela humanidad– es asumi-do y cargado por amor.Ahí es donde verdadera-mente se revela que laclausura no es algo im-puesto desde fuera, sinovoluntariamente elegido,querido por amor a Diosy por amor al mundo:“Tanto amó Dios al mundoque dio a su Hijo único”(Jn 3,16). “Para que elmundo vea que Yo amoal Padre” (Jn 14,31).

Toda la carga de nega-tividad que los ojos mun-danos ven en la clausuraes irrelevante para quienesvivimos en ella: porque,para nosotras, es una ne-cesidad del corazón per-manecer con Cristo en lacruz y colaborar con Él enla redención del mundo.

S. Pablo de la Cruz,nuestro padre y fundador,recibió esa fe para ver elamor del Padre en el Hijocrucificado y muerto y enese amor somos introdu-cidas cuando se nos regalael carisma de la Pasión. Locual significa que en todosufrimiento, tragedia y

muerte que sucede en lahumanidad o a cada per-sona, hay una esperanzaabierta, un sentido ocultoen el amor del Padre; ynuestra oración y sacrificioayudan a desvelarlo, amostrarlo, a proclamarlo,precisamente viviendo enclausura. Entonces secumple que “más se ma-nifiesta cuanto más hondose esconde” (Himno de Epi-fanía) y que “la muerte ac-túa en nosotros y la vidaen vosotros” (2Co. 4,12).

❚ SOR CATI

DE LA SS. TRINIDAD, C.P.OVIEDO



un coordinar las agen-das entre los sacerdo-tes para asistir todo elclero a los funeralesque había en la sema-na en cada una de lasParroquias. Toda unaPastoral de difuntos.

El pueblo gitanoparticipa de este cultoa los muertos. El díade los Santos, teníaque abrirles la iglesiapor la tarde para en-cender, en un granbalde con serrín, ungran número de velas.Tantas como muertoshabía en la familia, aellas se las dedicabanconforme las iban en-cendiendo.

En los cementerios sussepulturas son de las máscuidadas y suntuosas.

Todo esto viene a cuen-to del suceso que os voy acontar:

Era domingo. Estaba yoen el confesonario, antesde la misa de 9 de la ma-ñana. Observé que un gru-po de gitanos, muy de ne-gro, esperaban y no paraconfesar.

–¿Qué os pasa?–¿Podría venir a sacar

unas fotas a un difuntoque tenemos en casa? Esen el Bloque cuarenta ycuatro, al otro lado de lacarretera.

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“Misión Madrid-Pan Bendito”. Las memorias de Don Hilario

Fotos al muertoEn la cultura nipona

“el duelo” tiene unagran importancia. Pue-de durar años. El es-píritu del difunto siguevivo y permanente ensu familia durante mu-cho tiempo.

En nuestra socie-dad, sin embargo, estáen decadencia el “due-lo”. La muerte rompenuestros proyectos, noes bienvenida, nosasusta y da miedo. Poreso, la apartamos denuestras caas. Y hemoscreado los bellos Ta-natorios, con sus dis-cretas salas y sus con-fortables cafeterías.Ahora, incluso, con laincineración, nos evitamoslos entierros. Muchos tiranlas cenizas en cualquierparte y ya nada nos re-cuerda al muerto.

En general el pueblocelta, como en la Bretañafrancesa y en nuestra Ga-licia, sigue más pegado asu tradición y mantienenmás fuerte el culto a susmuertos.

Predicando la Novenaa la Virgen del Carmen enCarril, un pueblo maris-quero de la Ría de Arosa,el Párroco recibió la lla-mada telefónica de su pa-dre para que fuésemos losdos al Funeral de la misaexequial por la mujer del

Alcalde de Santa Eugeniade Riveira, en donde él es-taba de Maestro, pues noencontraban sacerdotes.Pensé que no estaría másque el Cura del Pueblo, ypara la mujer del alcaldequerrían la solemnidad detener a tres Sacerdotes.Pero cuál no sería mi sor-presa cuando, al entrar enla iglesia, me encuentrocon otros 23 sacerdotesmás.

Y en otra Novena deÁnimas, predicada en Adi-na, la Parroquia de Porto-novo, el Párroco me invitóa asistir a la reunión sa-cerdotal del Arciprestazgo.La reunión se convirtió en



–Sí, pero hay una difi-cultad: que no tengo ca-rrete y hoy es domingo.

–No importa, Padre,nosotros buscaremos elcarrete de fotos.

–Bien, entonces encuanto termine la misa iré.A las diez estoy con voso-tros.

–Vale. Es que a las docele llevamos a Fuensalida,para enterrarle allí.

Se trataba de un chicojoven, casado, muerto porun disparo de la GuardiaCivil. Del Anatómico Fo-rense le habían traído a sucasa, antes de llevarle aenterrar en su pueblo.

Efectivamente, a las diezme presenté en su casa.Atravesé el numeroso gru-po de gitanos que había ala puerta. En el interior nocabía un alfiler. Me dieron

el carrete y mepuse a disparar fo-tos y más fotos.Con la mujer, conla madre, con todala familia. Fotos decuerpo entero, demedio cuerpo, decabeza nada más.En esta postura lafamilia, la mujerpor detrás. Yo se-guía las indicacio-nes. Ellos elegíanlas posturas másmelodramáticas. Yeso entre llantos ylágrimas. Lloros deverdad.

Me decía a mímismo, qué ridículoes esto. Cuando re-cogí las fotos ví quehabían quedadomuy bien. Escenasdramáticas. La-menté no habermeq u e d a d ocon copiaalguna.

❚ HILARIO PEÑA

ROJO

MADRID

Y desde su casa,a la casa del cielo.Dios siempreabraza y acoge,desde su Cruz.


212 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

Entrevistas al caminar

EL P. ÁNGEL “DE LA GUARDA”

Usted, que está tan lle-no de amor y generosidad,¿de dónde los saca?

De creer en Dios y decreer en las personas.

¿Dónde está Dios?Se lo preguntaron a Te-

resa de Jesús y contestómuy bien: “¡Hasta en lospucheros!” Y no porquequisiera que Dios se que-mase –se ríe–. Lo veo entodas partes, especialmen-te en los hombres.

¿En qué lugares lo echade menos?

No le echo de menos.Es verdad que a veces unose pregunta dónde estáDios cuando muere unniño enfermo, hay un aten-tado o un terremoto mataa miles de personas. Tam-bién se lo pregunta el papa,incluso Jesús en el huertode Getsemaní... A veceseché a Dios la culpa delos desastres naturales,pero dejé de hacerlo. Dios

En 1962, un joven seminarista asturiano llamado Ángel García fundó LaCruz de los Ángeles, una pequeña asociación de inspiración cristiana queaños más tarde se convertiría en la ONG “Mensajeros por la Paz”, que hoyestá presente en 50 países y que cuenta con más de 5.000 voluntarios y3.900 trabajadores, de los que el 98 por ciento son mujeres. Cerca de 63.000personas –entre niños, jóvenes y mayores– han sido atendidas en sus casasde familia, comedores sociales y residencias.

Hay dos cosas que el Padre Ángel siempre lleva consigo: un cargamentode compasión y su inconfundible corbata roja, aunque en esta ocasión coin-cidimos vestidos de alba y estola, en la sacristía de Sto. Toribio, en la esperalarga (que hizo posible esta conversación) previa a la celebración de laapertura de la puerta del perdón, en el inicio del año jubilar lebaniego.



no puede ser malo, de ver-dad.

¿Cómo hace para llegara tantos lugares y a tantaspersonas?

Cuando uno está go-zoso y feliz, lleno por den-tro, pendiente de tantagente a la que poder ha-cerle algún bien, sientesque los minutos del díason más largos y se apro-vechan mejor. El negocioque más rinde y más cundees el negocio de poder ha-cer el bien.

Abarcando con tu ayu-da humanitaria, práctica-mente, todos los estadiosde la población (disminui-dos, marginados, ancia-nos, etc...) es sobre todoconocida tu labor con losniños, ¿por qué?

Cuando nació la fun-dación hace más de 40años, yo estaba de capellánen un orfanato donde losniños eran un número, yyo veía que aquello era in-digno, así que me propuse

deshacer los orfanatos yhacer hogares de familiasdonde vivieran de 6 en 6 ode 7 en 7 y donde los her-manos pudieran vivir jun-tos. Ahí empezó la anda-dura de Mensajeros de laPaz, queriendo paliar la fal-ta de cariño y la soledadque sufrían algunos niñosque se encontraban aban-donados, incluso por sus

propios padres, en algunasocasiones.

¿Cuál es la mayor po-breza que usted conoce?

Sin duda, la soledad. Esmucho peor estar solo queno tener techo. Muchaspersonas que se acercannos lo comentan: “Ser in-diferente para los demás,sentir que pasan por de-lante de ti y te ignoran...

¿Dónde está Dios?Se lo preguntaron aTeresa de Jesús ycontestó muy bien:“¡Hasta en los pucheros!”Y no porque quisiera queDios se quemase–se ríe–. Lo veo en todaspartes, especialmenteen los hombres.


214 | Nº 1.028 | Junio-Julio 2017

Entrevistas al caminar

es horrible”. Si a todo elloañadimos la falta de re-cursos más necesarios paravivir dignamente... la po-breza ya es completa.

¿Por qué tantas perso-nas “se quedan por el ca-mino”?

Es evidente que las po-sibilidades de los políticospara superar esta situaciónson mayores que las nues-tras. Por eso les animo aque tomen siempre las de-cisiones más justas y fa-vorables a los que se hanquedado atrás. Les diríaque fueran un día al metroen silla de ruedas o conuna venda en los ojos. Oque pasaran un par de díassin comer, sin luz en casa...Que se pongan en el lugardel resto.

¿Cuál es la mayor in-justicia de la que ha sidotestigo?

Injusticia es que echena una familia de su casapor no pagar la luz. Injus-ticia es ir a Ceuta o Melillay seguir aguantando a losministros y a los jefes deturno decir que las vallasno cortan; yo he estadoen las vallas y cortan mu-cho. Injusticia es, y lo hadicho el Papa Francisco,que los niños tan pequeñosse mueran. En el mundohay muchas injusticias, tris-temente.

¿Qué le parece el papaFrancisco?

El papa es el cura delpueblo, el párroco que todos hemos admirado y

todos hemos querido ser.Es una bendición de Diospara nuestro mundo.

A menudo se le ve ro-deado de gente muy im-portante. ¿Son todos ami-gos suyos?

Más que amigos sonpersonas que te quieren yte respetan. Amigos sonlos que cuando te vas deviaje llamas para decir: “Yahe llegado”. Y yo no tengomás de dos o tres personasa las que puedo llamar paraeso. Al finl no tenemos 17amigos a los que les inte-resa saber si has llegado.

Qué piensa cuando di-cen que sale mucho en losmedios. Hasta le acusande ser puro marketing.

Sus razones tendrán.Creo que sé lo que hago.A veces es un sacrificio ira tantos sitios, pero siempreque uno pueda transmitirsu mensaje, siendo bueno,conviene hacerlo. Si ellospudieran, lo harían. Nuncahe ido a un plató a maldeciro a hablar mal de alguien.

Todos hemos oído hablar de su parroquia, “S. Antón”, en el centrode Madrid.

Todas las parroquias ha-cen mucho bien. Si acasoSan Antón se distingue porestar abierta las 24 horas deldía, como las farmacias deguardia, y eso es lo que lahace especial. Quiere ser unlugar de acogida para TO-DOS sin distinción. La gentellega, se sienta, reza, comesi tiene hambre y duermecuando lo necesita.

¿Cuál es su proyectomás próximo?

Es un proyecto perma-nente: Hacer que los ma-yores tengan una dignidadque siempre deberían ha-ber tenido y que a veceshan perdido debido alegoísmo, hacer que estahumanidad sea más soli-daria. Que la gente de to-das partes nos demos losbuenos días, nos preocu-páramos los unos de otros,nos saludemos, nos mire-mos a la cara, cedamos elpaso... nos queramos.

Entrevistó❚ RODRIGO SEVILLANO

PASIONISTAS, SANTANDER

¿Cuál es la mayorpobreza que ustedconoce?Sin duda, la soledad.Es mucho peor estarsolo que no tener techo.Muchas personas quese acercan nos locomentan: “Serindiferente para losdemás, sentir que pasanpor delante de ti y teignoran... es horrible”.Si a todo ello añadimosla falta de recursos másnecesarios para vivirdignamente... lapobreza ya es completa.


(En memoria del PadreLeandro G. Monge, Pasionista)

Donaciones

Una devota (Madrid) 10 €; A.Z. 20 €; Antonia Orta Pozo(Madrid) 6 €; Manuela Gutiérrez Isidro (Alovera, Guadalajara)20 €; Rafaela Gayoso Jiménez (Guadalajara); Unas devotas(La Cumbre, Cáceres) 30 €; Inmaculada Vega P. (Sta. Cruzde Tenerife) 20 €; Conchita Préstamo Piñán (Madrid) 50 €

Esta Beca se destina a la formación de jóvenesaspirantes al sacerdocio

y a la vida pasionista, en España y América.Colaboradores y amigos

de nuestras Misiones, ¡muchas gracias!

Agradecen y piden favores a Santa Gema

María Dolores de la Dueña (Cabo de Palos, Murcia).

Cuantos agradecen y piden favores a Santa Gema, si desean salir en esta página,deben dirigirse a REVISTA PASIONARIO,

C/ Leizarán, 24. 28002 Madrid, Teléfono 915 635 407.http://www.libreriaelpasionariomadrid.com

Descansan parasiempre en el Señor

Francisco García Matallana (Ce-hegin); María Teresa Muñoz Men-gual (Albaida, Valencia); CarlotaCarrasco Guirao (Caravaca de laCruz, Murcia); Matías MartínezMartínez (Cornella de Llobregat,Barcelona); Manuela GutiérrezIsidro (Alovera, Guadalajara)

Por su eterno descansocelebramos la Santa Misa

en el Santuarioel día 14 de cada mes

a las cuatro de la tarde

Rincón familiar “Santa Gema”

Santa Gema, imagen que se veneraen la Iglesia de San Antonio,

en Aranjuez (Madrid)

(ARCHIVO ICONOGRÁFICO DE

FRANCISCO SALLERAS)

Peregrinos de Xátiva (Valencia)Peregrinos de Xátiva (Valencia)


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