ÉTICA DE LA COMPETICIÓN DEPORTIVA

8/19/2019 ÉTICA DE LA COMPETICIÓN DEPORTIVA

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ÉTICA DE LA COMPETICIÓN DEPORTIVA: VALORES YCONTRAVALORES DEL DEPORTE COMPETITIVO

Para entender en toda su complejidad tanto las potencialidades comolas limitaciones de la competición deportiva para educar y transmitir valoresconsideramos esencial dirigir nuestra atención a la reflexión ética del deporte,y más concretamente a las dos líneas de pensamiento divergente sobre elvalor ético de la competición deportiva. Para algunos autores en la naturalezacompetitiva del deporte encontramos una esencia profundamente ética ytransmisora de valores, mientras que para otros en dic a esencia competitivaradica el mayor problema ético del fenómeno deportivo.

La competición deporti a como !a "acia #a propia e$ce#encia

!a ética tiene que ver con la potencialidad virtuosa del ser umano.!legamos a este mundo con unas características personales "biológicas,genéticas# y en unos contextos sociales "familiares, educativos, económicos,políticos# de los que no somos responsables, que nos vienen adjudicados enuna verdadera lotería genética y social . $ pesar del enorme condicionanteque esas circunstancias implican, es indudable que a lo largo de nuestra vida,con nuestro propio esfuerzo y con nuestras m%ltiples elecciones,conquistamos libre y responsablemente nuestra personalidad moral. &ndefinitiva, nos vamos aciendo mejores o peores personas. !a verdaderaesencia y principal finalidad de la ética, es la mejora de uno mismo.'i bien es cierto que el sentido o intención de progreso, de mejora, deb%squeda de perfeccionamiento, no es patrimonio exclusivo de ningunaactividad umana específica, no lo es menos que el deporte, en cuanto a lab%squeda de superación y logro de la excelencia, reflejaría de alg%n modociertos valores morales. &l entrenamiento duro y continuado de un deportistaes el mejor símil del carácter moral. (e a í que en la figura del campeón seencarnen los valores moralizadores de toda meta alcanzada por lasuperación umana.

&n la b%squeda de la excelencia deportiva es indudable que la

competición juega un papel primordial. )ompitiendo, midiéndome con losmejores adversarios, es cuando me veo obligado a esforzarme al máximopara sacar lo mejor de mi mismo. &se es el verdadero valor ético de lacompetición deportiva, *jugar cada partido mejor que el anterior. +ugar bien,ese es el triunfo verdadero .

!a sana competitividad es la que nos lleva *a esforzarnos, a dar lomejor de nosotros mismos, a progresar, a buscar nuevas estrategias parasuperarnos, a descubrir yaprender de nuestros errores y a buscar nuevassoluciones para mejorar. 'in ella no progresaríamos. )ompetir es bueno,siempre que entienda que con quien compito es conmigo mismo. -o mecomparo con los demás. e comparo conmigo, y fruto de esta comparaciónvaloro mi progreso y mi crecimiento. &n esta idea de competición no ayadversario, y no me preocupa el resultado, sino dar lo mejor de mí. &s



nuestra responsabilidad educar a nuestros ijos en una competitividad sana,donde seamos capaces de premiar el esfuerzo, el buen juego en el partido yno el resultado, a menudo aleatorio.

&l deporte, en tanto juego competitivo, configura, con sus victorias yderrotas, una especie de representación microcósmica de la sociedad. Perocon una gran diferencia, en el deporte estas consecuencias no son trágicascomo en otras esferas de la vida. (e a í que para ni/os y ni/as lasexperiencias deportivas conlleven, gracias a las sanas jerarquías yenriquecedoras diferencias que se fomentan con su práctica, un alto valor educativo y un verdadero aprendizaje para la vida. !os ni/os pueden adquirir0en la victoria, seguridad en sí mismos, autoafirmación, modestia ygenerosidad con los derrotados1 y en la derrota, un sano ábito de aceptar frustraciones y b%squeda de nuevos recursos personales para la superación.&l deporte además puede favorecer la amistad, el compa/erismo, lasociabilidad, el trabajo en equipo, y también puede ayudar a aceptar las

reglas, a obedecer a la autoridad "árbitro, juez#, y a comprender el sentido dela justicia.Para garantizar precisamente ese valor ético de justicia que representa

el deporte, debemos alcanzar una igualdad máxima en dos momentos de lacompetición deportiva0 "i# previa a la competición "que nadie salga conventaja#1 y "ii# durante la competición "mismas reglas para todos y mismaaplicación de éstas#. 2er enfrentarse a deportistas y equipos en igualdad den%mero y condiciones es de los máximos atractivos del deporte y condiciónsino que non éste se desarrolle. 3no de los principales argumentos contra eldopaje en el deporte apunta precisamente al ec o de vulnerar el principioesencial de igualdad previa en la competición. 4especto a la justicia durantela competición a la ora de aplicar el reglamento y sancionar las posiblesinfracciones en el juego, nos parece un paso adelante en la ética deportiva laintroducción de ayudas tecnológicas en la toma de decisiones arbitrales por favorecer una mayor racionalidad y objetividad en su difícil labor.

La competición %ometida a #a cooperación

!os autores que comparten una valoración ética positiva de lacompetición deportiva ponen como condición esencial que dic o elementocompetitivo esté sometido a una segunda "pero primera en importancia ética#condición estructural del ec o deportivo0 la cooperación. Por supuesto queel deporte consiste básicamente en competir, en enfrentarse a otrosdeportistas por obtener una victoria, un triunfo, que sólo uno puede lograr. $ ora bien para que dic a competición deportiva pueda realizarse serequiere previamente de un acuerdo com%n entre los contendientes. Paracompetir deportivamente, antes, emos tenido que ponernos de acuerdo enla aceptación de unas normas que agan posible nuestro enfrentamiento. 'inesa asociación y cooperación previa es indudable que la competición nopuede tener lugar.

&l rasgo esencial que distingue a las competiciones deportivas deotras formas de conflicto es que su punto de partida no es el desacuerdo



sino, antes bien, el acuerdo de los oponentes en luc ar por una metaincompatible 5 sólo uno de ellos puede ganar5 dentro de las limitaciones queimpone un marco normativo aceptado mutuamente. &l deporte competitivopor tanto no debe considerarse como una forma desenfrenada de conflicto,sino como una práctica institucionalizada regida por reglas de rivalidadamistosas, justas y aplicables a todos los participantes, lo que exige unaprevia intención de cooperar para que se llegue a desarrollar. 6uienesbuscan a toda costa someter o exterminar a los otros no son los máscompetitivos, sino todo lo contrario0 lo que pretenden es acabar de competir cuanto antes.

-o es difícil verificar como el deporte competitivo facilita sobre todovalores instrumentales, valores que resultan muy %tiles para lograr buenosresultados deportivos mejorando nuestro rendimiento personal "motivación,esfuerzo, superación7# y colectivo "trabajo en equipo, cooperación,compromiso7#, aciéndonos más competitivos, jugar mejor y ganar a

nuestros rivales7.1 pero se nos reconocerá que estos valores no aportanconsideraciones éticas o morales respecto de nuestros semejantes. (ic o deotro modo0 a medida que avanzamos en el valor de los valores, más difícilresulta encontrarlos y trabajarlos en contextos deportivos competitivos deganador %nico.

!a explicación del porqué el deporte competitivo no favorece elprogreso ético y moral, el paso de la preocupación por uno mismo "egoísmo,egocentrismo, interés propio# a la preocupación por el otro8los otros "interésajeno#, es relativamente sencilla. 'e ace muy difícil en un contextocompetitivo de ganador %nico, en el que tenemos que enfrentarnos alotro8otros por una meta que solo uno de los dos puede alcanzar "la victoria#,inculcar en los deportistas la preocupación por los sentimientos ajenos"contrincantes, oponentes o rivales#, y más difícil a%n alcanzar actitudesaltruistas de máximo nivel ético donde uno puede llegar al propio sacrificiopor el bienestar del otro.

Re%peto a #a% re&#a% de '(e&o) a #o% ri a#e%) a (no mi%mo

!a diferencia que existe entre *intentar ganar cuando se compite, ytratar de acerlo a cualquier precio , nos está mostrando uno de los principiosesenciales que deben guiar las competiciones deportivas0 el máximo respetoa las reglas de juego como base de la existencia del propio juego. 9ticamenteson inadmisibles las trampas. -i siquiera la pillería, tan abitual y valorada enalgunos deportes por su rentabilidad utilitarista competitiva, debe ser aceptada.

4espetar al rival y a nosotros mismos en el sentido de ser másonestos se refuerzan mutuamente. &l reto es trabajar esa onradez, esos

principios éticos de fair play y deportividad, para mantenerlos no sólo ensituaciones competitivas favorables sino también, y sobre todo, en losmomentos más difíciles, cuando nos supongan una desventaja o ándicapcompetitivo. &sa es la clave de aber alcanzado el máximo nivel ético.



4esulta muy difícil mantener la motivación y el interés en el juego anterivales muy superiores o muy inferiores. )omo también resulta evidente queun buen deportista progresará más en su juego si tiene oportunidades de jugar entre buenos jugadores. )uando obligamos a que todos los deportistas jueguen el mismo tiempo, con independencia de sus abilidades motrices ytécnicas, o cuando formamos equipos muy equilibrados "con jugadoresbuenos, regulares y malos técnicamente# para que la competición sedesarrolle en situación de máxima igualdad, estamos tratando de favorecer en los menos ábiles su autoestima y motivación, y de transmitir a todo elequipo valores como el respeto o la igualdad.

!a aportación de mayor valor del deporte a la sociedad, mejor a%n, asus ciudadanos, es el favorecer la salud ayudando a crear ábitos físico5deportivos saludables de por vida en ellos. Para consolidar estas buenascostumbres resulta esencial mantener el carácter l%dico y el disfrute en supráctica. (isfrute que a su vez se refuerza dotando de competencia al

practicante, acerle sentir diestro, abilidoso1 la sensación de aprendizaje, deprogreso, de dominio del propio deporte es esencial para mantener lapráctica deportiva. )uanto mejor dominamos una actividad, una técnica, másdisfrutamos de ella y más fácil resultará perseverar en la conducta.

Dopa'e *dopin&+ en e# deporte

:omando como referencia las marcas deportivas alcanzadas en el altorendimiento, día con día se buscan nuevos métodos y técnicas para tratar desuperar dic os parámetros. 3na forma externa de influir en el desempe/ofísico del atleta a sido mediante el consumo de sustancias pro ibidas por losreglamentos de las organizaciones deportivas. &stas sustancias, al ser ingeridas, provocan un aumento artificial delrendimiento deportivo1 pero que de alguna forma desestabilizan las funcionesfisiológicas del organismo en detrimento de la salud. 'u utilización se opone a la filosofía que dio surgimiento al )omité ;límpico<nternacional");<# en =>?@, promoviendo todo un conjunto de valores éticos,morales, pedagógicos y umanistas in erentes al deporte para lograr undesarrollo integral de la personalidad de los deportistas y mejorando lacomunicación entre los pueblos con el objetivo de salvaguardar la paz ")arta;límpica#. &sta concepción filosófica se a ignorado AolímpicamenteA, con lautilización de sustancias tóxicas que colocan en desigualdad de posibilidadescompetitivas a los deportistas. Por ese motivo, el );< a solicitado a susorganismos agremiados su apoyo para evitar la proliferación de esta practicanociva que destruye completamente los valores umanos que debenprevalecer en toda competencia deportiva.

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