Esto Es Lo Que Sucede en El Cerebro de Una Mujer Cuando Se Convierte en Madre

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Esto es lo que sucede en el cerebro de una mujer cuando se convierte en madre TWITTEAR COMPARTIR Por Carolina Mila Este artículo fue escrito originalmente por Adrienne Lafrance para The Atlantic

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Esto es lo que sucede en el cerebro de una mujer cuando se convierte en madreTWITTEARCOMPARTIR

PorCarolina MilaEste artculo fue escrito originalmente por Adrienne Lafrancepara The AtlanticDesde dicha y apego hasta ansiedad y el deseo de proteger, el comportamiento maternal comienza con reacciones bioqumicas.La artistaSarah Walkerme dijo una vez que el convertirse en madre es como descubrir la experiencia de tener un nuevo cuarto en la casa en la que ya vives. Siempre me gust la descripcin de Walker porque es ms precisa que lo que la que muchos dan cuando llega un recin nacido a su vida:Todo cambia.Porque muchas cosas s cambian, claro, pero para las madres primerizas, algunas de las diferencias ms duras son tambin las ms ntimas: los cambios emocionales.Los cuales, resulta, son en gran parte neurolgicos.Varios neurlogos me dijeron que incluso antes de que una mujer d a luz, el embarazo altera la estructura misma de su cerebro. Despus de siglos de observar cambios en el comportamiento de las nuevas madres, solo recientemente los cientficos han comenzado a vincular de forma definitiva la forma en la cual la mujer acta con lo que est sucediendo en su corteza pre frontal, mesencfalo, lbulos parietales, y en el resto del cerebro. La materia gris se vuelve ms concentrada.La actividad aumenta en las regiones que controlan la empata, ansiedad, e interaccin social.Estos cambios, incluso en un nivel bsico, inducidos por una inundacin de hormonas durante el embarazo y en el periodo de post parto, ayudan a que la madre sea atrada hacia su nuevo beb. En otras palabras, esos sentimientos maternales de amor sobrecogedor, proteccin feroz, y preocupacin constante comienzan con reacciones en el cerebro.

Muchos cientficos creen, adems, que el hacer un mapa del cerebro maternal es la clave para entender porqu tantas madres primerizas sufren de serias ansiedades y depresiones.Se estima que una de cada seis mujeres sufren de depresin post parto, y en muchas de ellas surgen comportamientos como el lavarse las manos compulsivamente y revisar obsesivamente para asegurarse de que el beb est respirando.Esto es parte de casi todos los comportamientos obsesivos compulsivos durante los primeros meses luego de la llegada del beb, me dijo la investigadora de cerebros maternales,Pilyoung Kim. Las madres reportan niveles muy altos de patrones que siguen pensamientos de cosas que no pueden controlar. Estn pensando constantemente sobre el beb. Est sano? Enfermo? Satisfecho?En las mams primerizas, hay cambios en muchas reas del cerebro, contina Kim. Hay un crecimiento en regiones cerebrales involucradas en la regulacin de las emociones, regiones relacionadas con la empata, pero tambin con lo que llamamos motivacin maternal, y yo creo que esta regin puede estar asociada en gran parte a comportamientos obsesivo compulsivos.Tanto en los animales como en los humanos, durante el periodo de post parto, hay un enorme deseo de cuidar a su hijo.Hay varias regiones cerebrales interconectadas que ayudan a impulsar comportamientos y nimos maternales.

Cientficos le han seguido el rastro a la actividad cerebral de las mujeres viendo fotos de sus bebs y de bebs de otras personas que no conocen. (Sociedad de Neurociencia)Los investigadores estn particularmente interesados en el set de neuronas con forma de almendras conocida como la amgdala, la cual ayuda a procesar los recuerdos e impulsa reacciones emocionales como el miedo, la ansiedad, y la agresin.En un cerebro normal, la actividad en la amgdala crece en las semanas y meses luego de haber dado a luz. Los investigadores creen que este crecimiento tiene correlacin con el comportamiento de una madre primeriza una amgdala que se ha vuelto ms grande hace que ella tenga una hipersensibilidad hacia las necesidades de su beb mientras un coctel de hormonas, el cual encuentra ms receptores en amgdalas ms grandes, ayudan a crear un ciclo de retroalimentacin positiva para motivar los comportamientos maternales. Los cientficos han descubierto envarios estudiosque con solo mirar a su beb, el centro de recompensas del cerebro de una madre comenzar a funcionar.El circuito del cerebro maternal influencia en la forma dulce que tiene una madre para hablarle a su hijo, en lo atenta que es, e incluso en el afecto que sienta hacia su beb.Por lo tanto, no debera resultar sorprendente que una amgdala daada sea asociada con niveles ms altos de depresin en las madres.El dao en la amgdala de los bebs tambin podra afectar la unin entre madre e hijo. En unestudio publicado en 2004 en elJournal of Neuroscience, se descubri que era menos probable que bebs de monos con lesiones en sus amgdalas vocalizaran su angustia, o que escogieran a sus propias madres por sobre el resto de los monos adultos.La capacidad de un recin nacido de distinguir entre su madre y cualquier otra persona est vinculada con su amgdala.

La actividad en la amgdala tambin es asociada con los fuertes sentimientos de una madre sobre su propio beb versus los bebs en general. En unestudio sobre la respuesta de la amgdala en madres primerizas llevado a cabo en el 2011, las mujeres reportaron sentirse ms positivas viendo fotos en los que se viera a sus propios bebs sonriendo en comparacin con fotos de bebs desconocidos sonriendo, y su actividad cerebral reflej esa discrepancia. Los cientficos tienen registros de respuestas cerebrales muy marcadas en la amgdala, tlamos, y en todas partes entre las madres cuando miraban las fotos de sus propios bebs.Los investigadores asociaron una respuesta mayor por parte de la amgdala cuando vean las fotos de sus propios hijos fue con una menor ansiedad maternal y con menos sntomas de depresin. En otras palabras, el cerebro de una madre primeriza cambia para ayudarla a sentirse motivada para cuidar a su beb pero tambin puede ayudar a estabilizar su propio estado emocional. En el estudio se puede leer lo siguiente:As, una respuesta mayor por parte de la amgdala al rostro de un beb propio, tal como se observa en nuestro estudio, probablemente refleja una respuesta, sentimientos, y experiencia maternal con aspectos pro-sociales ms positivos.Las madres que experimentaron niveles ms altos de ansiedad y niveles ms bajos de nimo demostraron tener una respuesta menor por parte de la amgdala a su propio beb y reportaron tener actitudes y experiencias parentales ms estresantes y negativas.Mucho de lo que sucede en la amgdala de una madre primeriza tiene que ver con las hormonas que fluyen hacia ella. La regin tiene una alta concentracin de receptores hormonales, como la oxitocina, la cual surge durante el embarazo.

Vemos cambios a niveles hormonales y cerebrales, me dijo en un correo electrnico la investigadora de cerebros, Ruth Feldman. Los niveles maternales de oxitocina el sistema responsable por la unin entre madre e hijo a lo largo de todas las especies mamferas aumenta dramticamente durante el [periodo] de embarazo y post parto y mientras ms involucrada est la madre en el cuidado del beb, mayor es el aumento en la oxitocina.La oxitocina tambin aumenta cuando las mujeres miran a sus bebs, o escuchan los ruidos y llantos de sus bebs, o cuando se acurrucan con sus bebs.Un aumento en la oxitocina mientras amamantan puede ayudar a explicar el por qu los investigadores han descubierto que las madres que dan de amamantar a sus hijos son ms sensibles al sonido se los llantos de sus bebs que las madres que no les den de amamantar. Las madres que amamantan muestran un nivel mas grande de respuestas [cerebrales] hacia el llanto de sus hijos en comparacin con las madres que alimentan a sus bebs con frmulas en el primer mes despus del parto, dijo Kim. Es realmente interesante. No sabemos si es el acto de amamantar o la oxitocina u otro factor.De acuerdo a Feldman, lo que los cientficos s saben es que el convertirse en madre se ve por lo menos en el cerebro muy parecido como el enamorarse. Lo cual ayuda a explicar el por qu muchos padres y madres primerizos describen ese sentimiento cuando conocen a su recin nacido. A nivel cerebral, las redes que se vuelven especialmente sensibles son aquellas que implican una dimensin social y de vigilancia la amgdala as como tambin redes de dopamina que incentivan el priorizar al beb.En nuestra investigacin, descubrimos que los periodos de unin social involucran cambios en los mismos circuitos de afiliacin, dijo Feldman.Demostramos que durante los primeros meses del enamoramiento suceden algunos cambios similares entre parejas romnticas. Incidentalmente,investigadores descubrieron en un estudio del 2013que este es el mismo circuito es el que hace que los bebs tengan un olor tan atractivo para sus madres.

Las asociaciones neuronales entre el amor maternal y romntico, 2003 (University College London)Los mayores cambios cerebrales ocurren cuando la madre tiene a su primer hijo, aunque no est claro si el cerebro de una madre vuelve a ser lo que era antes del parto, segn lo que me dijeron varios neurlogos. Y, sin embargo, los cambios cerebrales no se hacen presentes solamente en las madres primerizas.Los hombres muestran cambios similares cuando estn profundamente involucrados en el cuidado de sus hijos. Peor la oxitocina no parece impulsar el comportamiento carioso de la misma forma que lo hace en las madres, descubrieron Feldman y otros investigadoresen un estudio del ao pasado. En vez de eso, el cerebro paternal de los hombres cuenta con el apoyo de una red socio cognitiva que se desarrolla en el cerebro de ambos sexos ms tarde en la vida, mientras que las mujeres parecen haber evolucionado para tener una constelacin de comportamientos de cerebro-hormonas que las prepara automticamente para la maternidad.Otra forma de mirarlo: los planos para el comportamiento maternal existe en el cerebro de las mujeres incluso antes de que tengan hijos.Entonces, quizs la maternidad es realmente como un espacio secreto en el cerebro de la mujer, esperando a ser descubierto. A pesar de que solo las madres experimentan lo que es el embarazo, el parto, y la lactancia, y que estas las preparan de una forma poderosa para entregar un cuidado maternal por medio de la sensibilizacin de la amgdala, la evolucin cre otros caminos para la adaptacin al rol parental en los hombres humanos, y esos caminos alternativos van de la mano de la prctica, sintonizacin, y con la entrega de cuidado y cario da a da,escribieron los investigadores.En otras palabras, el simple acto de cuidar a tu beb crea nuevos caminos neuronales an no descubiertas en el cerebro de los padres.