Belleza caducada ¡Cuánta belleza en el mundo! Belleza triste, belleza con sabor a fracaso, belleza que se pudre. Agonizante flor humana Juventud egoísta Narcisismo desesperado Lucha a muerte con el tiempo. Concurso de almas vacías Demostración de estupidez. Bellas flores convertidas en monstruos sin escrúpulos. ¡Cuánta belleza y qué triste! ¡Cuánta belleza que se acaba! Cuánta belleza escondida, tras las puertas de un mundo en calma Blasfemia contra el Espíritu Santo Qué hay en esos ojos que invitan a morir Camino por el infierno y el olvido me da fuerza Pierdo mi alma y su azul me hace persona Qué hay en ese mundo interior que no puedo alcanzar La melodía colma mi alma. Me pregunta, respondo; mis ojos se desbordan cuando te miro.

Ahora puedo dormir para siempre Tu recuerdo es mío, nada lo podrá cambiar y sonrío por ello. El mito déjalo para Ulises Yo muero en islas con nombre de mujer Devoro mundos en constante cambio Seco mares con palabras injustas Desemboco en ríos que aman la libertad. Yo no miro al hombre con ojos austeros Le regalo mi palabra y un corazón, que se esconde, que se muestra, que germina los campos en flor Yo no sueño con lugares eternos Una vida me basta para poder encontrar, un alma clara como el cielo que saque mis demonios a pasear Ser humano es un logro Ser persona, la finalidad El objetivo de la vida es no pensarlo Al fin, sólo queda la levedad. Pobre pero con estilo El universo me contempla, a mí y a muchos otros. El universo no dice nada,

se mantiene expectante. Un día fuimos arrojados a un mundo cruel Crecimos, aprendimos sonidos y nos enseñaron a dar gracias. Nos hicimos de provecho, éramos los números uno y buscamos cobijo debajo de algún puente. La vida era bonita y yo sonreía. La vida era bonita y yo aspiraba su aroma. La vida era todo lo que tenía y tuve que descubrirla. La vida era eterna, pero los días pasaban sin concesiones para mí Ni supe ni quise madurar Pasé la eternidad soñando con volar. No aprendí a pisar al otro, por eso no llegué a millonario. Caí en la tentación y viví como los dioses Me dijeron que iría al infierno, mas me pareció fantástico. Ahora estoy aquí, viviendo para mí. De reojo miro al otro y lo invito a esta gran fiesta que es la vida. Delirio blanco

Muertos antes de vivir. Decrépitos cuerpos inertes. Mentes dormidas por palabras necias Mundo envuelto en sombras. Poesía absurda, versos inservibles. Manía persecutoria de la razón, razón desordenada por el cambio, cambio que odia a la razón. Corazón que late a su ritmo. Locura ambulante Distorsión de los sentidos, alma que anhela el recuerdo, recuerdo que me sume en la sustancia. Dejá vu de la conciencia, voluptuosidad de la belleza Pensamiento descorazonador, estimulantes de mi yo. ¡Qué la luna se suicide! ¡Qué el sol caiga en picado cual cometa desviado de su órbita! Discurso Escatológico ¡No quiero recordarte! Tu cara quedará en la noche, escondida tras alguna puerta. Así, cada día te conoceré de nuevo, y nunca sabré si, ya estuve contigo o fue sólo un sueño. ¡No voy a recordarte! Viviré de lo que digan de ti, crearé una imagen falsa y mañana no sabré quién eras. Despertaré a tu lado

y como un extraño, me iré si hacer ruido; pero en cada puesta de sol, volveré contigo. Seré ingenuo e inocente, mas llenarás una página de mi vida. Del alma y las calles Fuera, todo está parado. El tiempo se congela, las lágrimas no caen, los ojos ya no contemplan. Dentro, el orden se hace caos, la música se para, y ese torbellino gira y gira. Fuera, la enfermedad se propaga, la sonrisa se esconde y la palabra se muere Dentro, el corazón late, la personalidad se desborda y el amor duele. Fuera, los pasos son cansados, la vorágine te devora El batallón de los hombres desfilan por las calles de la tierra. Dentro, la vida se va a otra parte, el momento pasa pronto y la noche no se detiene. Fuera, vivo bajo leyes

Dentro, gobierna la tristeza. Fuera, es libre el que no piensa Dentro, el pensamiento te encarcela. Ni dentro ni fuera me quiero hallar Ni fuera ni dentro, llevadme al mar Pensamiento y realidad, calles y sentimientos. Lo caduco, lo eterno; lo que no puede soportar el inexorable paso del tiempo. Llena de cuerpos ¿Por qué está todo tan parado? El cancerígeno sol destruye las ilusiones. Todo parece flotar y retroceder. En la calle nada cambia: Parece vacía y sin sentido, parece vacía y llena de cuerpos. Los cuerpos están muertos, los muertos ya no hablan, los muertos ya no sienten, los muertos son libres, porque ya no pertenecen a estas calles. Los pies están pegados al asfalto, por siempre unidos a la tierra, por siempre anclados en algún suburbio. La imaginación sueña con salir de allí El sueño imagina otro paisaje diferente, pero ni el uno ni la otra, pueden levantarse del suelo El mundo es todo lo que veo El mundo es todo lo que tengo, pero, dónde cojones estoy ahora Mi mente divaga, escapa; deserta de mi cuerpo,

y mientras, mi culo sigue pegado a una silla, no sé, cuántos siglos llevo aquí, demasiados quizás... Levántate y arde ¡Levántate y arde! Que tu mente sea una llama incombustible y viva. ¡Levántate y arde! Que tu sombra no gobierne las palabras vacías. ¡Levántate y grita! El mundo es tu medida, el tiempo tu horizonte y tus ojos son tu guía. ¡Levántate! Aletargado cuerpo inerte. Eres dueño de tu destino ¡Levántate y guía tus pasos! Construye a empujones tu vida ¡Ponte en pie! Ostentador de eternidad, artesano de la palabra, mercenario de lo bello. Abre tu cuerpo al abismo, recorre las calles oscuras, encuentra de nuevo tu alma y mira de frente a la locura ¡Levántate y arde!

De bar en bar recogiendo tus besos Respiro, para que pase otro día. Suspiro, para que no llegue la noche Perdido, por buscar mi sentido, mas no encuentro la razón de tus ojos ausentes. Fuiste la llama de mi infierno El licor de mi embriaguez La pus de mi herida abierta El delirium tremens que vuelve a aparecer. Por ti, los versos no riman Fuimos dueños del universo Quiero otra noche solo con la luna De bar en bar recogiendo tus besos Solitario despojo humano Cúmulo de miedos e inseguridades Asustadizo lobo en su guarida Ser que no encuentra las verdades. Se me quedó: La voz en un suspiro, El grito en el cielo Los ojos sin mirada y mi reloj sin tiempo Arde la ciudad ¿Es ésta la mierda de mundo que hemos construidos? Unos viven escondidos, otros se beben la vida. Mira en la calle ¿Qué ves? Deja de decir: ¡Yo, yo y yo!

Y escucha la voz del sufrimiento. No te quedes sentado. Arde la ciudad y tú dejas que todo se queme. Todos somos mendigos y sin hogar Todos somos huérfanos, niños, apestados y extranjeros. Náufragos en urbes repletas de oro. No me hables de sistemas y políticas ideales No quiero puño levantado, ni señal de victoria Abre los putos ojos y mira de cerca el miedo. Así me siento, desheredado, sin tiempo pero con vida. Éxodo Medianoche para escapar Medianoche para hacerte olvidar, olvidar para sentir el arte, arte para cambiar el mundo. Dejo mi vida atrás Siento de lleno lo bello Estética de lo vulgar, mis palabras Rotos cristales sin reflejo Soy un hombre y desafío lo eterno Rompo el aire con mi alma y toco el cielo con mis dedos Soy un hombre y me acerco a la nada He sido arrojado al desierto Pasaré una vida buscando mi destino

Callejones oscuros serán mi templo. Mis sirenas serán putas y mi patria el infierno, de los hombres, de la duda y el desconcierto Seré rey, monarca, deshecho. Buscando una luna, me arrastraré por el suelo y cambiaré tu cuerpo por escarcha. Aspiraré, el aroma de las calles, y cubriré mi cuerpo con palabras, estúpidas, dulces, claras; palabras vacías que viven en un cajón abandonadas. El arte me ha confundido Bebo vino barato en mi cueva para hacerte presente. Es el fin y no los medios, es el medio el que me lleva a ti. Bebo vino y el mundo se ríe, de mí, de mis palabras, de cualquiera. El mundo se parece a un bar, donde tú me dices que me aparte y yo te digo que me voy. El mundo se parece a ti, y a esa imagen cuando despierto Ahora me siento poeta, artista, charlatán de feria Ahora no podré volver a tus ojos Ahora no volveré a verte, porque el arte me ha confundido y no sé cómo quitarme esta máscara. Mi rostro ya no es bello y mi verso sólo es retórica.

No nos quedaba nada No nos quedaba nada, sólo días y amaneceres, sólo programas de televisión y muchas resacas No nos quedaba nada, sólo palabras huecas y miradas deformes. No nos quedaba nada, quizás aumentar la tristeza y algunas botellas vacías Sólo carreteras infinitas y pasos sobre pasos No nos quedaba nada, porque la vida iba a otro ritmo, y nosotros no sabíamos cómo parar No pretendíamos nada, porque el otoño ya había llegado y sólo necesitábamos, un lugar para resguardarnos La lluvia caía y caía, y sólo nos quedaban lágrimas y botellas vacías. ---------------- Sólo quedó un vaso con hielo y otra noche de insomnio. Una vida normal, cansada de no cambiar y mucho silencio.

El arte era mi forma de vida El arte me hacía eterno, pero los momentos pasaban y no sabíamos cómo dejarnos llevar. Yo soñé con una vida Yo no podía soñar Y sólo quedaron, un montón de recuerdos y esa vida que dejé pasar. No supimos verlo Habíamos heredado el mundo La realidad como legado. Nos dejaron esta luz y muchas noches Nos dejaron esta luz y este tránsito interior. Nos dijeron que la vida era nuestro tesoro, pero no nos hablaron de tristeza y olvido; pero no nos hablaron de lágrimas. Pero no nos hablaron... Nos dejaron todo lo que podíamos ver, y no supimos verlo. Nos hablaron de generaciones, de modas, de momentos mas no supimos encajar en nuestro tiempo. Todo parecía ridículo, todo parecía grotesco, y no afrontamos el momento.

Tuvimos miedo de ser únicos Tuvimos miedo de ser eternos, y no nos bastaron las palabras, y no supimos verlo... Un día más, un muerto más El sol ha salido de nuevo un día más La gente ha vuelto a colmar las aceras. Sin pena ni gloria, sólo gente Con pena y sin futuro, sólo gente Sin espacio ni vida, sólo gente Solamente gente que sueña con no perder la cabeza Solamente gente ausente que sueña con no olvidar, que sueña con no ser olvidado. Persiguiendo un absurdo La guerra no ha acabado, bebemos vino y comemos bien Pero el mundo está revuelto, y la gente no vale nada El juicio final no ha llegado, pero pagamos las deudas con creces; y no sabemos cómo salvarnos, porque la calle está llena: de sudor, de sexo y saliva, de gente que camina en línea recta, de gritos, de putas, de medios días. La botella está medio vacía, el tren no ha salido, y nosotros seguimos andando por las vías. Toda la vida buscando, cómo no meternos en problemas Toda la vida buscando un absurdo

Nuestros bolsillos están vacíos y nuestras gargantas calientes, por eso no nos quejamos, por eso olvidamos, por eso morimos La guerra no ha acabado El hombre sigue cagándola y no ha conseguido saber quién es Otra copa, otro sueño El otoño llegó a empujones Las calles estaban mojadas y nuestros zapatos rotos Nos calentábamos en una hoguera, pero nuestros corazones seguían fríos. Nos calentábamos con licor, pero nuestras vidas se escapaban Un día tras otro sentados en un banco, esperando a que algo pasase Nosotros construimos una vida pero nada funcionaba. Soñábamos con una cama caliente y una mujer que escuchase nuestras palabras Y sólo conseguimos algunos cartones y muchas lágrimas La gente vende su alma por dinero y yo sólo pido una copa más Yo soñé con gobernar el mundo, y sólo conseguí ser uno más Mi felicidad se basa, en seguir un día más vivo. Bebo para olvidad lo que quise ser Bebo para olvidar lo que soy Bebo para olvidar.

Botas sucias La ciudad seguía vacía y mi cabeza demasiado llena Los bares abundaban en esos tiempos. Nos faltaba algo de razón y algunos besos sinceros No podíamos seguir así, porque estábamos perdiendo la cabeza, y naufragando en el intento Nos refugiábamos en caricias, nos refugiábamos en versos, en habitaciones vacías y en corazones desiertos La esperanza no la perdimos, pero perdimos otras muchas cosas ¿Cómo ser justo si nuestra vida se hundía sin justicia? ¿Cómo ser normal si nos trataban como muebles viejos? La ciudad seguía allí: Inamovible, ruidosa y eterna; y no podíamos encontrar algo de paz Las ratas nos acompañaban, y la lluvia cubría nuestros cuerpos Pero estar vivo era la mayor prueba Pero estar vivo era nuestro sueño. Vivíamos para caer Vivíamos para levantarnos Y nos toco crecer y crecer, y de crecer ya nos cansamos Soñábamos con un poco de vida, con un rincón en el pasado, con un lugar donde esconder, nuestra existencia perdida

Vivo de cuentos Ayer yo era como tú Hoy soy distinto, y no me arrepiento por ello Las palabras se sucedieron y el silencio colmó los momentos Yo sabía reír, yo sabía sentir; pero las sensaciones se volvieron angustia, y la angustia me devolvió al desierto Yo pretendí cambiar el mundo Joven, loco e inexperto Yo pretendí cambiar mi tiempo, pero me quedé en la duda, pero me quedé en el intento Ahora no hay ahora, ahora trazo otro camino Hacia la nada, hacia la vida, hacia el cuento Cansado de cansarme Envejezco con arrugas y muero con versos Quise escribir la realidad con un poema Quise pintar la vida en un lienzo Quise ponerle música a las palabras; pero no encontré ni el color, ni la armonía, ni los versos. Mi garganta caliente Todo se va, nada permanece

Eso dicen Pero la mala suerte, dura cien años y en cien años nadie mantiene la cordura Las horas pasan, los años naufragan y yo no encuentro nada: nada bueno, nada honesto; nada pegado a mi espalda, nada ahí fuera Buscando el olvido, nadie me busca. Buscando el sentido, nadie lo busca Buscando, qué cojones busco --------------------- La poesía apesta. Verso a verso, se hace cansina, espesa Delicada en su clase Intento sacar mi llanto pero, mis lágrimas están congeladas, mis ojos secos, mi alma seca, mi corazón herido. Eso sí, mi garganta caliente Los años pasajeros y los mundos rotos Los mundos rotos y los años se acaban; sin concesiones, sin miramientos Mil a mil, uno y no cientos A tientas por el mundo, prefiero estar y no muerto A tientas por las calles, prefiero molestar

y no quedarme quieto. Soy el hombre, no la máquina ¿Puedes escuchar esta voz que muere? Está tan cerca que araña el alma Está tan lejos que un adiós es poca cosa ¿Recuerdas todavía esas palabras? “No me olvides nunca, no te vayas de mi lado” Yo he perdido el control y no alcanzo a tocar el cielo Yo he perdido el control y no logro verte Vivo dentro de esta máquina que se apaga. Vivo dentro de este cuerpo, que quiere y no puede Yo soy el hombre y no la máquina Yo soy el hombre que lucha con la muerte Estoy aquí por algo que no entiendo Estoy aquí por alguna razón Estoy aquí y eso basta. La vida es una palabra No quiero más noches solo, aunque la compañía me de asco. Con nauseas camino por ahí, sin apreciar a nadie No fijo mis ojos en el espacio, lo atravieso y rompo el silencio en dos Lo atravieso y rompo mi vida,

mi vida no se rompe, siempre sale a flote para hundirse de nuevo. Mi vida es sólo una palabra que no significa: “Eso que duele hasta asfixiar” Mi vida está llena de palabras de escenas, de desconciertos. Eran otros los que vivían Vivíamos engañados desde el principio Vivíamos engañados con una falsa sonrisa Vivíamos engañados y eran otros los que vivían. No tuvimos muchas oportunidades Siempre nos dieron de lado Nacimos con un estigma en la piel: construir una risa con mucho trabajo Nacimos sin libro de instrucciones y nos arrojaron a un mundo sin pasado Nos hablaron del amor, del corazón del respeto al ser humano; y ahora qué ha quedado, sólo una huella en el asfalto y otro lamento lanzado al aire Y ahora qué ha quedado, sólo el vaho de mi boca y una esquina solitaria en un bar. Camino sin determinación hacia una parada de autobús, que me llevará a alguna parte; un destino demasiado incierto, demasiados andenes libres

en la misma estación. Vértigo ¿Dónde estás ahora, caminando por las calles, recogiendo soles del suelo, trazando caminos torcidos, recuperando tus recuerdos? ¿Dónde te perdiste, en el humo de un cigarrillo, en un callejón oscuro, en medio de tu cuerpo? Qué quieres que te diga: Que nada es suficiente Que el mundo ya no gira Que siento de nuevo ese vértigo Que cierro los ojos para no verte Que niego la realidad que llevo dentro Que aprendí a ser un extraño Que preferí morir a estar muerto Y qué puedo hacer, si mis manos están desiertas y tu rostro es de papel Y qué decir, si mi risa se ha torcido y mi papel se ha vuelto a escribir

Todos locos Qué fue del amor Dónde lo escondiste Qué fue de la cordura, si ahora estamos todos locos y nos reímos por ello. Qué fue de la pregunta, si vivimos y no miramos atrás Qué fue lo que pasó, si la poesía vive de la tristeza y el poeta navega en el mar de la duda, y el poeta permanece anclado en el pasado. Qué fue de la memoria si todo lo he olvidado. Esas imágenes que quedaron no soy yo Quizás fui yo Quizás fue algún otro, alguna vida abriéndose al mundo Quizás fue una ilusión. Qué fue de la memoria, si no me recuerdan en ningún lado Si no me recuerdo en ningún lado Si ya no recuerdo... Vomitar un “te quiero” Todo se reduce a un estado Todo se reduce a una vida Todo se condensa en miles de anocheceres Todo se explica desde el final Vida, teatro, película mala No sé qué nombre es el apropiado

Búsqueda, epopeya, dignidad ¿Qué sé yo? Una canción sin verso Un verso sin métrica Un instante eterno Un momento de indecisión Qué mejor que sentirse confuso Qué mejor que saborear el tiempo En la medida no está el vivir En la medida no está el verso Poema abierto es la vida Soneto libre el viento Canción inconclusa tus palabras Clave de sol rige tus besos Cursilería barata Escapa entre mis dedos Cursilería barata, vomitar un “te quiero”. In the year 2006 Ni los Beatles Ni las flores Ni el amor libre Ni el Glam Ni el Brit-pop Ni las etiquetas Todo eso acabó y se quedó en un grito Ni la movida Ni los viajes Ni el Grunge

Ni la adicción Nada de esto existe, sólo fue una idea fugaz Ni la generación Beat Ni los poetas malditos Ni las bombas atómicas Ni la América yanki, pudieron cambiar el mundo, ninguno de ellos lo hicieron mejor