Encuentro Con Los Representantes de La Ciencia en El Aula Magna de La Universidad de Ratisbona

7/24/2019 Encuentro Con Los Representantes de La Ciencia en El Aula Magna de La Universidad de Ratisbona

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Encuentro con los representantes de la ciencia en el Aula Magna de la Universidadde Ratisbona(12 de septiembre de 2006)

Fe, ra!n " universidadRecuerdos " re#le$iones

Eminencias;rectores magnficos;excelencias;ilustres seores; amables seoras:

Para m es un momento emocionante encontrarme de nuevo en esta universidad y poder impartir una vezms una leccin magistral. la vez! mi pensamiento vuelve a a"uellos aos en los "ue! tras un #ermosoperodo en el $nstituto superior de %reising! inici& mi actividad de profesor acad&mico en la universidad de'onn. Era el ao ()*)! cuando la antigua universidad todava tena profesores ordinarios. Para las ctedrasno existan ni asistentes ni dactilgrafos! pero en compensacin #aba un contacto muy directo con los

alumnos y sobre todo entre los profesores. +os reunamos antes y despu&s de las clases en las salas de losprofesores. ,os contactos con los #istoriadores! los filsofos! los fillogos y naturalmente tambi&n entre lasdos facultades teolgicas eran muy estrec#os. -na vez cada semestre #aba un dies academicus ! en el "uelos profesores de todas las facultades se presentaban ante los estudiantes de toda la universidad! #aciendoas posible una experiencia de universitas algo a lo "ue #ace poco tambi&n #a aludido usted! seor rector; es decir! la experiencia de "ue nosotros! a pesar de todas las especializaciones! "ue a veces nos impidencomunicarnos entre nosotros! formamos un todo y traba/amos en el todo de la 0nica razn con sus diferentesdimensiones! colaborando as tambi&n en la responsabilidad com0n por el recto uso de la razn. 1e tratabade una experiencia viva.

1in duda! la universidad tambi&n se senta orgullosa de sus dos facultades teolgicas. Estaba claro "uetambi&n ellas! interrogndose sobre la racionalidad de la fe! realizan un traba/o "ue necesariamente formaparte del 2todo2 de la universitas scientiarum ! aun"ue no todos podan compartir la fe! por cuya correlacincon la razn com0n se esfuerzan los telogos. Esta co#esin interior en el cosmos de la razn no se alter ni

si"uiera cuando! en cierta ocasin! se supo "ue uno de los profesores #aba dic#o "ue en nuestra universidad#aba algo extrao: dos facultades "ue se ocupaban de algo "ue no exista! de 3ios. En el con/unto de launiversidad exista la conviccin! "ue nadie pona en discusin! de "ue incluso frente a un escepticismo tanradical segua siendo necesario y razonable interrogarse sobre 3ios por medio de la razn y "ue se deba#acer en el contexto de la tradicin de la fe cristiana.

4ecord& todo esto recientemente cuando le la parte editada por el profesor 5#eodore 6#oury 789nster deldilogo "ue el docto emperador bizantino 8anuel $$ Palelogo! tal vez en los cuarteles de invierno del ao()( en n


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tambi&n en la relacin entre las 2tres ,eyes2! como se deca! o tres 2rdenes de vida2: ntiguo 5estamento!+uevo 5estamento y =orn. +o "uiero #ablar a#ora de eso en este discurso; slo "uisiera aludir a un aspectoms bien marginal en la estructura de todo el dilogo "ue! en el contexto del tema 2fe y razn2 me #afascinado y "ue servir como punto de partida para mis reflexiones sobre este tema. En el s&ptimo colo"uio 7

! controversia editado por el profesor 6#oury! el emperador toca el tema de la 2yi#ad2! la guerrasanta. 1eguramente el emperador saba "ue en la sura @! @*A est escrito: 2+inguna constriccin en lascosas de fe2. 1eg0n dicen los expertos! es una de las suras del perodo inicial! en el "ue 8a#oma mismo a0nno tena poder y estaba amenazado. Pero! naturalmente! el emperador conoca tambi&n las disposiciones!

desarrolladas sucesivamente y fi/adas en el =orn! acerca de la guerra santa.

1in detenerse en detalles! como la diferencia de trato entre los "ue poseen el 2,ibro2 y los 2incr&dulos2! conuna brus"uedad "ue nos sorprende! se dirige a su interlocutor simplemente con la pregunta central sobre larelacin entre religin y violencia en general! diciendo: 28u&strame tambi&n lo "ue 8a#oma #a trado denuevo! y encontrars solamente cosas malas e in#umanas! como su directriz de difundir por medio de laespada la fe "ue predicaba2.

El emperador! despu&s de pronunciarse de un modo tan duro! explica luego minuciosamente las razones porlas cuales la difusin de la fe mediante la violencia es algo irracional. ,a violencia est en contraste con lanaturaleza de 3ios y la naturaleza del alma. 23ios no se complace con la sangre dice; no actuar seg0n la

razn 7 es contrario a la naturaleza de 3ios. ,a fe es fruto del alma! no del cuerpo. Por tanto!"uien "uiere llevar a otra persona a la fe necesita la capacidad de #ablar bien y de razonar correctamente! yno recurrir a la violencia ni a las amenazas. 7... Para convencer a un alma razonable no #ay "ue recurrir al

propio brazo ni a instrumentos contundentes ni a ning0n otro medio con el "ue se pueda amenazar demuerte a una persona2>.En esta argumentacin contra la conversin mediante la violencia! la afirmacindecisiva es: no actuar seg0n la razn es contrario a la naturaleza de 3ios*.El editor! 5#eodore 6#oury!comenta: para el emperador! como bizantino educado en la filosofa griega! esta afirmacin es evidente. Encambio! para la doctrina musulmana! 3ios es absolutamente trascendente. 1u voluntad no est vinculada aninguna de nuestras categoras! ni si"uiera a la de la racionalidad A. En este contexto 6#oury cita una obra delconocido islamista franc&s 4. rnaldez! "uien observa "ue $bn Iazm llega a decir "ue 3ios no estaravinculado ni si"uiera por su misma palabra y "ue nada le obligara a revelarnos la verdad. 1i fuese suvoluntad! el #ombre debera practicar incluso la idolatra. "u se abre! en la comprensin de 3ios y portanto en la realizacin concreta de la religin! un dilema "ue #oy nos plantea un desafo muy directo. ,aconviccin de "ue actuar contra la razn est en contradiccin con la naturaleza de 3ios! Jes solamente unpensamiento griego o vale siempre y por s mismoK Pienso "ue en este punto se manifiesta la profundaconcordancia entre lo "ue es griego en el me/or sentido y lo "ue es fe en 3ios seg0n la 'iblia.

8odificando el primer versculo del libro del H&nesis! el primer versculo de toda la sagrada Escritura! san

Luan comenz el prlogo de su Evangelio con las palabras: 2En el principio exista el 2. Esta es

exactamente la palabra "ue usa el emperador: 3ios act0a ! con logos . Logos significa tanto razncomo palabra! una razn "ue es creadora y capaz de comunicarse! pero precisamente como razn. s sanLuan nos dio la palabra conclusiva sobre el concepto bblico de 3ios! la palabra en la "ue todos los caminos amenudo arduos y tortuosos de la fe bblica alcanzan su meta! encuentran su sntesis.

En el principio exista el logos ! y el logos es 3ios! nos dice el evangelista. El encuentro entre el mensa/ebblico y el pensamiento griego no era una simple casualidad. ,a visin de san Pablo! ante "uien se #abancerrado los caminos de sia y "ue en sueos vio un macedonio "ue le suplicaba: 2Pasa a 8acedonia y

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ay0danos2 7cf. Hch (A! AG(?! puede interpretarse como una 2condensacin2 de la necesidad intrnseca de unacercamiento entre la fe bblica y la filosofa griega.

En realidad! este acercamiento ya #aba comenzado desde #aca muc#o tiempo. Ma el nombre misterioso de3ios! pronunciado desde la zarza ardiente! "ue distingue a este 3ios del con/unto de las divinidades conm0ltiples nombres afirmando slo su 2Mo soy2! su ser! en comparacin con el mito es una respuesta con la"ue est en ntima analoga el intento de 1crates de vencer y superar al mito mismo N.El proceso iniciado/unto a la zarza alcanza! dentro del ntiguo 5estamento! una nueva madurez durante el destierro! donde el

3ios de $srael! entonces privado de la tierra y del culto! se anuncia como el 3ios del cielo y de la tierra!presentndose con una simple frmula "ue prolonga las palabras de la zarza: 2Mo soy2. Luntamente con estenuevo conocimiento de 3ios se da una especie de ilustracin! "ue se expresa drsticamente con la burla delas divinidades "ue no son sino obra de las manos del #ombre 7cf. Sal ((*. 3e este modo! a pesar de todala dureza del desacuerdo con los soberanos #elensticos! "ue "ueran obtener con la fuerza la adecuacin alestilo de vida griego y a su culto idoltrico! la fe bblica! durante la &poca #elenstica! sala interiormente alencuentro de lo me/or del pensamiento griego! #asta llegar a un contacto recproco "ue despu&s se dioespecialmente en la literatura sapiencial tarda.

Ioy sabemos "ue la traduccin griega del ntiguo 5estamento! realizada en le/andra la 'iblia de los21etenta2! es algo ms "ue una simple traduccin del texto #ebreo 7sobre la cual #abra "ue dar "uiz un/uicio poco positivo: en efecto! es un testimonio textual en s mismo y un importante paso especfico de la#istoria de la 4evelacin! en el cual se realiz este encuentro de un modo "ue tuvo un significado decisivopara el nacimiento del cristianismo y su divulgacin). En el fondo! se trata del encuentro entre fe y razn!

entre aut&ntica ilustracin y religin. Partiendo verdaderamente de la ntima naturaleza de la fe cristiana y! almismo tiempo! de la naturaleza del pensamiento griego ya fundido con la fe! 8anuel $$ poda decir: +oactuar 2con el logos 2 es contrario a la naturaleza de 3ios. Por #onradez! en este punto es preciso anotar"ue! en la tarda Edad 8edia! en la teologa se desarrollaron tendencias "ue rompen esta sntesis entreespritu griego y espritu cristiano. En contraposicin al as llamado intelectualismo agustiniano y tomista! conLuan 3uns Escoto comenz un planteamiento voluntarista "ue! tras sucesivos desarrollos! llev al final a laafirmacin de "ue slo conoceramos de 3ios la voluntas ordinata . 8s all de esta existira la libertad de3ios! en virtud de la cual &l #abra podido crear y #acer tambi&n lo contrario de todo lo "ue efectivamente #a#ec#o.

"u se perfilan posiciones "ue! sin lugar a dudas! pueden acercarse a las de $bn Iazm y podran llevarincluso a la imagen de un 3ios arbitrario! "ue no est vinculado ni si"uiera a la verdad y al bien. ,atrascendencia y la diversidad de 3ios se acent0an de una manera tan exagerada! "ue incluso nuestra razn!nuestro sentido de la verdad y del bien de/an de ser un aut&ntico espe/o de 3ios! cuyas posibilidadesabismales permanecen para nosotros eternamente inalcanzables y escondidas tras sus decisiones efectivas.

En contraposicin a esa visin! la fe de la $glesia se #a atenido siempre a la conviccin de "ue entre 3ios ynosotros! entre su eterno Espritu creador y nuestra razn creada! existe una verdadera analoga! en la "ueciertamente como dice el $O concilio de ,etrn! en el ao (@(* las diferencias son infinitamente msgrandes "ue las seme/anzas! pero a pesar de ello no llegan a abolir la analoga y su lengua/e. 3ios no se#ace ms divino por el #ec#o de "ue lo ale/emos de nosotros con un voluntarismo puro e impenetrable; el3ios verdaderamente divino es el 3ios "ue se #a manifestado como logos y #a actuado y act0acomo logos lleno de amor por nosotros. =iertamente el amor! como dice san Pablo! 2rebasa2 el conocimientoy por eso es capaz de percibir ms "ue el simple pensamiento 7cf. Ef ! (); sin embargo! sigue siendo el

amor del 3iosG Logos ! por lo cual el culto cristiano! como dice tambi&n san Pablo! es ! un culto"ue concuerda con el Oerbo eterno y con nuestra razn 7cf. Rm (@! ((?. Este acercamiento interior recproco!"ue se #a dado entre la fe bblica y el planteamiento filosfico del pensamiento griego! es un dato de

importancia decisiva no slo desde el punto de vista de la #istoria de las religiones! sino tambi&n desde el dela #istoria universal! un dato "ue se nos impone tambi&n #oy. 5eniendo en cuenta este encuentro! no essorprendente "ue el cristianismo! a pesar de su origen y de cierto importante desarrollo en riente! #aya

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encontrado por fin su #uella #istricamente decisiva en Europa. Podemos expresarlo tambi&n al contrario:este encuentro! al "ue se une sucesivamente el patrimonio de 4oma! cre a Europa y permanece comofundamento de lo "ue! con razn! se puede llamar Europa.

la tesis seg0n la cual el patrimonio griego! crticamente purificado! forma parte integrante de la fe cristianase opone la pretensin de la des#elenizacin del cristianismo! pretensin "ue desde el inicio de la &pocamoderna domina cada vez ms la investigacin teolgica. 1i se analiza con esmero! se pueden observar tresoleadas en el programa de la des#elenizacin: aun"ue estn vinculadas entre s! son claramente distintas la

una de la otra en sus motivaciones y en sus ob/etivos((. ,a des#elenizacin surge al inicio en conexin conlos postulados de la 4eforma del siglo QO$. =onsiderando la tradicin de las escuelas teolgicas! losreformadores se vean ante una sistematizacin de la fe condicionada totalmente por la filosofa! es decir!ante una determinacin de la fe desde el exterior en virtud de una manera de pensar "ue no derivaba deella. s la fe ya no apareca como palabra #istrica viva! sino como un elemento insertado en la estructurade un sistema filosfico.

,a sola Scriptura ! en cambio! busca la forma pura primordial de la fe! tal como est presenteoriginariamente en la Palabra bblica. ,a metafsica se presenta como un presupuesto "ue deriva de otrafuente! de la "ue es preciso liberar la fe para "ue vuelva a ser totalmente lo "ue era. =on su afirmacin de"ue #aba tenido "ue renunciar a pensar para de/ar espacio a la fe! 6ant actu seg0n este programa con unradicalismo "ue los reformadores no pudieron prever. 3e este modo! ancl la fe exclusivamente en la raznprctica! negndole el acceso a toda la realidad.

,a teologa liberal de los siglos Q$Q y QQ aport una segunda oleada en el programa de la des#elenizacin; surepresentante ms destacado es dolf von IarnacEn el trasfondo subyace la autolimitacin moderna de la razn! expresada de un modo clsico en las2crticas2 de 6ant! pero mientras tanto radicalizada ulteriormente por el pensamiento de las cienciasnaturales. Este concepto moderno de la razn se basa! por decirlo brevemente! en una sntesis entreplatonismo 7cartesianismo y empirismo! confirmada por el &xito de la t&cnica.

Por una parte! se presupone la estructura matemtica de la materia! por decirlo as! su racionalidad

intrnseca! "ue #ace posible comprenderla y utilizarla en su eficacia prctica: este presupuesto de fondo es!por decirlo as! el elemento platnico en el concepto moderno de la naturaleza. Por otra! se trata de laposibilidad de explotar la naturaleza para nuestros propsitos! y en este caso slo la posibilidad de controlarla verdad o la falsedad a trav&s de la experimentacin puede llevar a la certeza decisiva. El peso entre losdos polos! dependiendo de las circunstancias! puede estar ms en uno "ue en otro. -n pensador tanfuertemente positivista como L. 8onod se declar platnico convencido.

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Esto implica dos orientaciones fundamentales para nuestra cuestin. 1lo el tipo de certeza "ue deriva de lasinergia de matemtica y m&todo emprico puede considerarse cientfica. ,o "ue pretenda ser ciencia tiene"ue confrontarse con este criterio. 3e este modo! tambi&n las ciencias referidas al #ombre! como la #istoria!la psicologa! la sociologa y la filosofa! trataban de acercarse a este canon de valor cientfico. Por lo dems!para nuestras reflexiones es importante constatar "ue el m&todo como tal excluye el problema de 3ios!presentndolo como un problema aGcientfico o preGcientfico. Pero as nos encontramos ante una reduccindel mbito de la ciencia y de la razn "ue es preciso poner en discusin.

Oolver& ms tarde sobre este asunto. Por el momento basta tener presente "ue en un intento! a la luz deesta perspectiva! de conservar a la teologa el carcter de disciplina 2cientfica2! del cristianismo no "uedarams "ue un miserable fragmento. Pero debemos decir ms: si la ciencia en su con/unto es slo esto!entonces el #ombre mismo sufrira una reduccin! pues los interrogantes propiamente #umanos! es decir! 2dednde2 viene y 2a dnde2 va! los interrogantes de la religin y de la &tica! no pueden encontrar lugar en elespacio de la razn com0n descrita por la 2ciencia2 entendida de este modo y tienen "ue desplazarse almbito de lo sub/etivo. El su/eto! basndose en su experiencia! decide lo "ue considera sostenible en elmbito religioso! y la 2conciencia2 sub/etiva se convierte! en definitiva! en la 0nica instancia &tica.

1in embargo! de este modo la &tica y la religin pierden su poder de crear una comunidad y se convierten enun asunto totalmente personal. ,a situacin "ue se crea es peligrosa para la #umanidad! como se puedeconstatar en las patologas "ue amenazan a la religin y la razn! patologas "ue necesariamente debenexplotar cuando la razn se reduce #asta tal punto "ue las cuestiones de la religin y la &tica ya no leinteresan. ,o "ue "ueda de esos intentos de construir una &tica partiendo de las reglas de la evolucin! de la

psicologa o de la sociologa! es simplemente insuficiente.

ntes de llegar a las conclusiones a las "ue lleva todo este razonamiento! "uiero referirme brevemente a latercera oleada de la des#elenizacin! "ue se est difundiendo actualmente. 5eniendo en cuenta el encuentroentre m0ltiples culturas! se suele decir #oy "ue la sntesis con el #elenismo! realizada en la $glesia antigua!fue una primera inculturacin! "ue no debera ser vinculante para las dems culturas. Estas deberan tenerderec#o a volver atrs #asta el punto anterior a esa inculturacin! para descubrir el mensa/e fundamental del+uevo 5estamento e inculturarlo de nuevo en sus ambientes particulares.

Esta tesis no est totalmente e"uivocada! pero es torpe e imprecisa. En efecto! el +uevo 5estamento fueescrito en griego e implica el contacto con el espritu griego! un contacto "ue #aba madurado en eldesarrollo precedente del ntiguo 5estamento. =iertamente! en el proceso de formacin de la $glesia antigua#ay elementos "ue no deben integrarse en todas las culturas. 1in embargo! las decisiones fundamentales

"ue ataen precisamente a la relacin de la fe con la b0s"ueda de la razn #umana forman parte de la femisma y son sus desarrollos! acordes con su naturaleza.

s llego a la conclusin. Este intento! realizado slo a grandes rasgos! de crtica de la razn moderna desdesu interior! de ninguna manera incluye la opinin de "ue #ay "ue regresar al perodo anterior a la $lustracin!rec#azando las convicciones de la &poca moderna. 1e debe reconocer sin reservas lo "ue tiene de positivo eldesarrollo moderno del espritu: todos nos sentimos agradecidos por las maravillosas posibilidades "ue #aabierto al #ombre y por los progresos "ue se #an logrado en el campo #umano.

Por lo dems! la &tica de la investigacin cientfica como #a aludido usted! rector magnfico! debe implicaruna voluntad de obediencia a la verdad y! por tanto! debe ser expresin de una actitud "ue forma parte delas decisiones esenciales del espritu cristiano. Por consiguiente! nuestra intencin no es retirarnos o #aceruna crtica negativa! sino ampliar nuestro concepto de razn y de su uso. Por"ue! mientras nos alegramospor las nuevas posibilidades abiertas a la #umanidad! tambi&n vemos los peligros "ue emergen de estas

posibilidades y debemos preguntarnos cmo podemos evitarlos. 1lo lo lograremos si la razn y la fe sevuelven a encontrar unidas de un modo nuevo! si superamos la limitacin! autodecretada! de la razn a lo"ue se puede verificar con la experimentacin! y le abrimos nuevamente toda su amplitud. En este sentido!la teologa! no slo como disciplina #istrica y ciencia #umana! sino como teologa aut&ntica! es decir! comociencia "ue se interroga sobre la razn de la fe! debe encontrar espacio en la universidad y en el ampliodilogo de las ciencias.

1lo as se puede entablar un aut&ntico dilogo entre las culturas y las religiones! un dilogo "uenecesitamos con urgencia. En el mundo occidental est muy difundida la opinin seg0n la cual slo la raznpositivista y las formas de la filosofa derivadas de ella son universales. Pero las culturas profundamentereligiosas del mundo consideran "ue precisamente esta exclusin de lo divino de la universalidad de la razn


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constituye un ata"ue a sus convicciones ms ntimas. -na razn "ue sea sorda a lo divino y "ue relegue lareligin al mbito de las subculturas! es incapaz de entrar en el dilogo de las culturas. =on todo! como #etratado de demostrar! la razn moderna propia de las ciencias naturales! con su elemento platnicointrnseco! conlleva un interrogante "ue la trasciende! como trasciende las posibilidades de su m&todo.

,a razn moderna tiene "ue aceptar sencillamente la estructura racional de la materia y la correspondenciaentre nuestro espritu y las estructuras racionales "ue act0an en la naturaleza como un dato de #ec#o! en el"ue se basa su m&todo. Pero de #ec#o se plantea la pregunta sobre el por"u& de este dato! y las ciencias

naturales deben de/ar "ue respondan a ella otros niveles y otros modos de pensar! es decir! la filosofa y lateologa.

Para la filosofa y! de modo diferente! para la teologa! escuc#ar las grandes experiencias y convicciones delas tradiciones religiosas de la #umanidad! especialmente las de la fe cristiana! constituye una fuente deconocimiento; no aceptar esta fuente de conocimiento sera una grave limitacin de nuestra escuc#a ynuestra respuesta.

"u me vienen a la mente unas palabras "ue 1crates di/o a %edn. En los dilogos anteriores se #abanreferido muc#as opiniones filosficas errneas; y entonces 1crates dice: 21era fcilmente comprensible"ue alguien! a "uien le molestaran todas estas opiniones errneas! desdeara durante el resto de su vida yse burlara de toda conversacin sobre el ser; pero de esta forma renunciara a la verdad de la existencia ysufrira una gran p&rdida2(.

ccidente! desde #ace muc#o! est amenazado por esta aversin contra los interrogantes fundamentales desu razn! y as slo puede sufrir una gran p&rdida. ,a valenta para abrirse a la amplitud de la razn! y no lanegacin de su grandeza! es el programa con el "ue una teologa comprometida en la reflexin sobre la febblica entra en el debate de nuestro tiempo. 2+o actuar seg0n la razn! no actuar con el logos! es contrarioa la naturaleza de 3ios2! di/o 8anuel $$! partiendo de su imagen cristiana de 3ios! respondiendo a suinterlocutor persa. En el dilogo de las culturas invitamos a nuestros interlocutores a este gran logos! a estaamplitud de la razn. 4edescubrirla constantemente nosotros mismos es la gran tarea de la universidad.

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