En oracion en accion de gracias

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Julio 20/ 2014 Mensaje Dominical Pst. Parrish Jácome Hernández El Gran Panorama Texto: Colosenses 4: 2 - 4 www.iglesiabautistaisrael.com [email protected] La vida de oración es imprescindible en la vida del creyente, esa dependencia absoluta en el Señor es vital para entender que los caminos, puertas, vías cerradas, sólo podrán ser abiertas cuando la manifestación del Señor se haga presente. Esta vida de oración se asume con gratitud, en acción de gracias entendiendo que en todo momento y en toda circunstancia, en buenos o malos momentos la gracia del Señor se expresará. La oración no puede ser ritualista, expresándose sólo en ciertos momentos y olvidándose en la vida cotidiana, donde la necesidad de estar en comunión con el Padre es fundamental para alcanzar ese conocimiento de lo espiritual que se produce en sabiduría y entendimiento. La perseverancia en la oración permitirá que el ser interior vaya siendo tallado, pulido en aquellas áreas donde le cuesta estar sometido y en dependencia del Señor. La intercesión no puede ser olvidada, se necesita presentar de forma permanente a quienes están en primera línea presentado el evangelio en condiciones complejas, diversas, donde sólo el poder del Señor manifestó de forma contundente podrá tocar y acercar una vida de forma total. Orar pidiendo las palabras precisas, indicadas, adecuadas, unida a la manifestación del poder del Señor es fundamental para quienes comparten el evangelio en lugares de profunda oscuridad. La vida cristiana debe ser transitada en oración constante y en acción de gracias, estas marcas dejarán huellas en quienes nos están acompañando en este caminar de fe y de compromiso de vida. ¿Consideras que tu vida está marcada por la oración y las acciones de gracia? La experiencia de Jesús, los apóstoles y los hombres que influyeron nuestras vidas han estado marcadas por la oración. Leyendo este texto de Pablo, ¿cuál piensas que es la razón? La necesidad de orar pidiendo conocimiento, que se exprese en sabiduría y entendimiento es vital para no perderse en el camino. ¿Lo estás pidiendo para tu vida y para la de otros? La oración abre puertas para que la palabra sea anunciada con poder y autoridad. ¿Estás orando por algún pastor, misionero, que necesita ese respaldo del Señor; sino es así quisieras comprometerme en hacerlo por un siervo? Escribe el nombre de la persona. El poder del evangelio debe manifestarse con toda autoridad en lugares donde las puertas están cerradas. ¿Puedes tomar un minuto cada día para orar por esos países y ciudades? Escríbele el lugar por el cual intercederás. La vida de oración perseverante y acción de gracias debe caracterizar a todo creyente en cualquier tiempo o circunstancia, siendo así, se necesitan tomar acciones para que acontezcan; ¿Qué ajustes o cambios deben provocarse en tu vida para que esta marca se distinga? Ƥ Considere las siguientes preguntas, reflexione en ellas y responda con claridad. × Disfruta de la oración, persevera y da gracias. El crecimiento notorio del humanismo en el mundo occidental capaz de enfocar y centrar todo en el hombre, ha provocado severos cambios en la espiritualidad del hombre moderno, generando vías o espacios donde el peso e importancia de la fe cristiana con su valores de vida ha sido lento pero sistemáticamente desplazado. Esta realidad a muchos los ha animado a definir esta época como un tiempo pos cristiano, que ha crecido con fuerza en los llamados países del primer mundo en Europa. Hablar de oración en un mundo con fuerte raíces cristianas parece impropio, innecesario, inadecuado para las nuevas generaciones que tomaron distancia de estas vivencias espirituales, abrazando opciones donde la relación con el creador no es prioridad, al desconocer su existencia o minimizar su importancia en la vida cotidiana. La oración en muchos ambientes quedó instituida como una expresión del culto cristiano, que por tradición se mantiene presente en ciertos espacios. La realidad del mundo oriental en nuestros tiempos es diferente, influenciada por los valores religiosos que marcan su identidad y cultura. Pocas son las ciudades de trasfondo musulmán donde sus ciudadanos no mantienen sus prácticas espirituales, tomando distancia de las tradiciones que fueron inculcadas en la vida cotidiana. El Ramadán, caracterizado por su llamado al ayuno y la oración es una clara manifestación del vigor religioso del pueblo musulmán. La oración para el pueblo cristiano necesita ser revitalizada, fortalecida, no puede perder la centralidad que siempre tuvo, evidenciando esa dependencia absoluta de la guía, orientación y accionar del creador. Esta experiencia debe superar el ambiente cultico, ritualista, presente en toda religión, donde las acciones se realizan para cumplir un mandato o alcanzar un favor, la oración para el cristiano es la comunión permanente con el Padre celestial. La vida de oración debe ser una marca, una huella imborrable de quienes abrazando la fe en Jesucristo, disfrutan de esa relación permanente donde no existen inquietudes, preocupaciones, alegrías, que no puedan ser compartidas con el Padre. Disfrutar esta relación permitiría que todo sea encaminado en oración y en acción de gracias, con la convicción que su gracia y amor siempre estarán manifestándose en todo momento y en toda circunstancia. En Oración, y en Acción Gracias

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La vida de oración debe ser una marca, una huella imborrable de quienes abrazando la fe en Jesucristo, disfrutan de esa relación permanente donde no existen inquietudes, preocupaciones, alegrías, que no puedan ser compartidas con el Padre. Pst. Parrish Jácome H. Iglesia Bautista Israel www.iglesiabautistaisrael

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Julio 20/ 2014Mensaje Dominical

Pst. Parrish Jácome Hernández

El Gran PanoramaTexto: Colosenses 4: 2 - 4

[email protected]

La vida de oración es imprescindible en la vida del creyente, esa dependencia absoluta en el Señor es vital para entender que los caminos, puertas, vías cerradas, sólo podrán ser abiertas cuando la manifestación del Señor se haga presente. Esta vida de oración se asume con gratitud, en acción de gracias entendiendo que en todo momento y en toda circunstancia, en buenos o malos momentos la gracia del Señor se expresará.La oración no puede ser ritualista, expresándose sólo en ciertos momentos y olvidándose en la vida cotidiana, donde la necesidad de estar en comunión con el Padre es fundamental para alcanzar ese conocimiento de lo espiritual que se produce en sabiduría y entendimiento. La perseverancia en la oración permitirá que el ser interior vaya siendo tallado, pulido en aquellas áreas donde le cuesta estar sometido y en dependencia del Señor.La intercesión no puede ser olvidada, se necesita presentar de forma permanente a quienes están en primera línea presentado el evangelio en condiciones complejas, diversas, donde sólo el poder del Señor manifestó de forma contundente podrá tocar y acercar una vida de forma total. Orar pidiendo las palabras precisas, indicadas, adecuadas, unida a la manifestación del poder del Señor es fundamental para quienes comparten el evangelio en lugares de profunda oscuridad. La vida cristiana debe ser transitada en oración constante y en acción de gracias, estas marcas dejarán huellas en quienes nos están acompañando en este caminar de fe y de compromiso de vida.

¿Consideras que tu vida está marcada por la oración y las acciones de gracia?La experiencia de Jesús, los apóstoles y los hombres que influyeron nuestras vidas han estado marcadas por la oración. Leyendo este texto de Pablo, ¿cuál piensas que es la razón?La necesidad de orar pidiendo conocimiento, que se exprese en sabiduría y entendimiento es vital para no perderse en el camino. ¿Lo estás pidiendo para tu vida y para la de otros?La oración abre puertas para que la palabra sea anunciada con poder y autoridad. ¿Estás orando por algún pastor, misionero, que necesita ese respaldo del Señor; sino es así quisieras comprometerme en hacerlo por un siervo? Escribe el nombre de la persona.El poder del evangelio debe manifestarse con toda autoridad en lugares donde las puertas están cerradas. ¿Puedes tomar un minuto cada día para orar por esos países y ciudades? Escríbele el lugar por el cual intercederás.La vida de oración perseverante y acción de gracias debe caracterizar a todo creyente en cualquier tiempo o circunstancia, siendo así, se necesitan tomar acciones para que acontezcan; ¿Qué ajustes o cambios deben provocarse en tu vida para que esta marca se distinga?

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Considere las siguientes preguntas, reflexione en ellas y responda con claridad.

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Disfruta de la oración, persevera y da gracias.

El crecimiento notorio del humanismo en el mundo occidental capaz de enfocar y centrar todo en el hombre, ha provocado severos cambios en la espiritualidad del hombre moderno, generando vías o espacios donde el peso e importancia de la fe cristiana con su valores de vida ha sido lento pero sistemáticamente desplazado. Esta realidad a muchos los ha animado a definir esta época como un tiempo pos cristiano, que ha crecido con fuerza en los llamados países del primer mundo en Europa.Hablar de oración en un mundo con fuerte raíces cristianas parece impropio, innecesario, inadecuado para las nuevas generaciones que tomaron distancia de estas vivencias espirituales, abrazando opciones donde la relación con el creador no es prioridad, al desconocer su existencia o minimizar su importancia en la vida cotidiana. La oración en muchos ambientes quedó instituida como una expresión del culto cristiano, que por tradición se mantiene presente en ciertos espacios.La realidad del mundo oriental en nuestros tiempos es diferente, influenciada por los valores religiosos que marcan su identidad y cultura. Pocas son las ciudades de trasfondo musulmán donde sus ciudadanos no mantienen sus prácticas espirituales, tomando distancia de las tradiciones que fueron inculcadas en la vida cotidiana. El Ramadán, caracterizado por su llamado al ayuno y la oración es una clara manifestación del vigor religioso del pueblo musulmán. La oración para el pueblo cristiano necesita ser revitalizada, fortalecida, no puede perder la centralidad que siempre tuvo, evidenciando esa dependencia absoluta de la guía, orientación y accionar del creador. Esta experiencia debe superar el ambiente cultico, ritualista, presente en toda religión, donde las acciones se realizan para cumplir un mandato o alcanzar un favor, la oración para el cristiano es la comunión permanente con el Padre celestial. La vida de oración debe ser una marca, una huella imborrable de quienes abrazando la fe en Jesucristo, disfrutan de esa relación permanente donde no existen inquietudes, preocupaciones, alegrías, que no puedan ser compartidas con el Padre. Disfrutar esta relación permitiría que todo sea encaminado en oración y en acción de gracias, con la convicción que su gracia y amor siempre estarán manifestándose en todo momento y en toda circunstancia.

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Oración,y en Acción

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La carta del apóstol Pablo a los creyentes de la ciudad de Colosas está marcada por dos elementos incuestionables, la oración y la acción de gracias. Pablo comienza su epístola compartiéndoles el impacto que produjo en su vida conocer de las conversiones y cambios que se habían operado. El testimonio de la obra del Espíritu Santo había sido tan contundente que había llegado a sus oídos para animarlo en medio de los momentos difíciles que atravesaba.Acompañar a esta nueva congregación era el deseo más vehemente del apóstol, escribiéndoles una carta donde les comparte su cercanía por medio de la oración. Los Colosenses son motivos de sus plegarias diarias al Señor, hay alegría, hay preocupación, hay necesidad, teniendo claro que sólo el poder y la presencia del Eterno sería determinante para encausar de forma sabia a este pueblo que está dando sus primeros pasos de fe. Pablo encausa todos estos motivos en oración, una clara lección a quienes iniciando su experiencia de caminar en la fe de Jesucristo necesitan entender que allí radica la fuerza para superar toda adversidad o complejidad no prevista. Las acciones del apóstol no pasarán desapercibidas a una congregación que está en su búsqueda cotidiana, donde las corrientes religiosas no perderán su oportunidad de incluir elementos que en el evangelio puro de la gracia no están presentes. La vocación pastoral de Pablo es manifiesta, con una actitud paternal anima y encausa sus preocupaciones, nunca pretende usar su bien ganada autoridad espiritual para conseguir el sometimiento de los creyentes, contrariamente su estilo siempre va por la reflexión que concientiza, capaz de alcanzar esas decisiones que llegaron por decisión propia y por completa convicción.El recorrido que Pablo realiza en esta carta centra su interés en desarrollar conciencia de una vida nueva, donde la decisión de seguir a Jesucristo no puede ser reducida a una experiencia religiosa de la sinagoga o templo. Hay demandas que esta nueva vida trae, debiéndose entender que se requiere mostrarlas como una evidencia indiscutible de la vida plena que en el Mesías han alcanzado. El apóstol entiende que estas demandas lucharán con las actitudes propias de la naturaleza humana, donde no siempre el corazón estará dispuesto a someterse, necesitando de la fuerza y el poder espiritual que viene del cielo. Pablo ora por esta comunidad, no son oraciones escasas, comparta en esta carta que lo hace de forma incesante, permanente, clamando al Señor para que esta experiencia de caminar en la fe no se oscurezca. La petición de Pablo es clara, contundente, para quienes necesitan procesar cada experiencia nueva que con el maestro están disfrutando. Que el conocimiento de toda la voluntad del Señor, manifiesta en toda sabiduría e inteligencia espiritual se haga presente es el incesante clamor, sostenida con una pasión y compromiso incuestionable de quien estando en la cárcel no deja de pensar en quienes han llegado a la verdad de Jesucristo. La vinculación magistral de Pablo en esta carta es útil para no perder los distintivos de la fe, expresados en una dependencia absoluta en el Señor a quien se busca para que provea sabiduría, con la acción del hombre que se manifiesta en ese andar digno que honra al creador. El Eterno es quien comienza todo buscando pacientemente al hombre, correspondiéndole luego a la criatura cuidar y valorar esa hermosa e inmerecida salvación recibida.

" Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cedamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en

toda sabiduría e inteligencia espiritual" Colosenses 1: 9La presencia del poder y gloria del Señor no puede pasar desapercibida, debe ser motivo de gozo constante, manifiesto en acciones de gracias que presenten su reconocimiento al Señor por aquello que cada día está realizando. Este reconocimiento se centra en la libertad y autoridad que su pueblo ha recibido al ser liberado de la potestad de las tinieblas, derrotadas contundentemente por la obra de Jesucristo en la cruz.

El Texto No es un PretextoEl mensaje central de la cruz aparece de forma permanente, los Colosenses deben tener claro que esta nueva vida es posible por la acción contundente del Señor, quien por medio de su entrega de amor alcanza recuperar esa vida plena y abundante. El trabajo del adversario es neutralizado y superado al haberle quitado la opción de acusación que recurre, al obtener por su sangre el perdón de los pecados.Jesucristo es levantado como la imagen del Dios invisible, quien recibe el honor de ser reconocido como participe de todo lo creado, quien estuvo siempre presente formando y dando sentido a todo lo que se constituye en la creación. Un distintivo determinante para distinguirlo como la manifestación encarnada del Eterno, quien desarrolla ese ministerio necesario de la reconciliación, de forma tan perfecta que le conceda al hombre esa oportunidad de acceder directo al Padre.Las bases que coloca el apóstol mediante esta carta son sólidas, contrarrestando toda falacia o mentiras que pretenden menoscabar la obra de Jesucristo en la cruz, invitando a los Colosenses a recurrir a rituales y sacrificios que ya no tienen sentido, por la obra completa del Mesías. Un fundamento firme para buscar siempre ese respaldo necesario para no claudicar frente a toda adversidad o lucha que siempre se hará presente.El llamado a los Colosenses invita a considerar la actitud y la acción de Pablo cuando supo lo que acontecía en sus vidas. La oración es imprescindible, necesaria en todo momento, no se reduce cuando las cosas están mal, se necesita con intensidad cuando los caminos parecen en paz, solicitándose al Señor que tome control de todo peligro que pudiera estarse fraguando en el presente o en futuro no lejano. La oración debe ser constante, por eso la exhortación es a perseverar, mantenerse en todo tiempo y en toda circunstancia, en esa relación que al irse afirmando va disfrutando el compartir toda experiencia por intrascendente que esta parezca. Una comunión que descansa en la soberanía del Señor por eso se atreve siempre a dar gracias, en buenos o malos momentos, entendiendo que en medio de ellos, siempre la mano bondadosa del creador se expresará y acompañará.La oración debe superar el exclusivismo de quienes la ven como un recurso personal, donde son mis inquietudes, necesidades, anhelos, que utilizando esta plataforma de gracia estoy siempre dispuesto a utilizar para mi beneficio. Orar por los otros, por sus necesidades, por sus anhelos, por aquellos motivos que se compartan siempre enriquecerá al creyente, mostrando que esa preocupación genuina produce una aprobación del Padre, quien de goza por ese fruto de madurez espiritual.Pablo quien ha orado por ellos con perseverancia, solicita la oración de sus hermanos de Colosas, manifestando motivos claros que deben ser presentados al Padre para que la palabra pueda correr con libertad. Un motivo que ya manifiesta los obstáculos que en varios lugares los apóstoles tuvieron que enfrentar para compartir el mensaje de esperanza y vida eterna. Una oración que produzca revelación, abriendo los ojos y el entendimiento de quienes al ser expuestos al mensaje del evangelio de Jesucristo puedan comprender el misterio la encarnación del Dios hecho hombre y posteriormente la obra salvífica que se concreta en la entrega plena del Mesías en la cruz. Una obra que no puede ser entendida con la lógica humana, requiere que sea el mismo espíritu quien lo haga conocer, siendo necesario la oración para que esto acontezca, una y otra y otra vez en medio de quienes no le conocen. La oración abre puertas, es el poder del Dios Eterno quien se expresa de forma sobrenatural para convencer y certificar a quienes reciben el mensaje, que se trata de él, el único e indiscutible Señor de todo y de todos. Una oración que traerá las palabras precisas, indicadas, adecuadas para que el evangelio llegue con tal claridad que no hay manera de resistir la invitación del Eterno y caer rendido a sus pies para adorarlo y servirlo. Orar es el camino, es la vía, es la llave que abrirá todas las puertas que mostrándose cerradas, necesitan conocer el poder sobrenatural y pleno del Dios Eterno. La predicación que se sustenta en la oración intercesora siempre contará con ese respaldo, prometido a quienes entendiendo que el evangelio es poder de Dios para salvación, lo están buscando y manifestando sin vergüenza o temor alguno.

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