1. DON VERANO DESCANSABA TRANQUILO EN SU SILLÓN. DE REPENTE OYÓ UN RUIDO Y EL OTOÑO APARECIÓ.

2. ESTIRANDO, ESTIRANDO, QUISO OCUPAR SU SILLÓN Y EL VERANO CONTESTÓ: ¡DE AQUÍ NO ME MUEVO YO!

3. EL OTOÑO ESTÁ MUY TRISTE, TIENE GANAS DE LLORAR. SUELTA RAYOS Y TORMENTAS, CON UN FUERTE VENDAVAL.

4. AL VERANO NO LE GUSTAN LOS CAPRICHOS DEL OTOÑO, QUIEN BUSCANDO SOLUCIÓN, SE LO PIDE “POR FAVOR”.

5. ENTONCES EL VERANO ENTRA POR FIN EN RAZÓN, CADA NOVENTA DÍAS LLEGA EL CAMBIO DE ESTACIÓN. EL OTOÑO LE DESPIDE, EL VERANO DICE ADIÓS. A OTRO AÑO LES VEREMOS LUCHANDO POR EL SILLÓN.