El Misterio de Cristo y su Iglesia

“¿Quién es esta que se muestra como el alba, hermosa

como la luna, esclarecida como el sol, imponente como

ejércitos en orden?”

Cantares 6:10

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El Misterio de Cristo y su Iglesia

Introducción

El apóstol Pablo, uno de los

pocos iluminados del primer siglo

escribió cosas muy profundas

revelando mediante la

Inspiración Divina en una buena

parte la Cristología,

conocimiento que no es nada

fácil de entender y mucho menos

creer, y en esto por supuesto no

podía faltar la revelación de

Cristo y su Iglesia, tópico este

que el apóstol define como un

gran Misterio: “Porque nadie

aborreció jamás a su propia carne,

sino que la sustenta y la cuida,

cómo también Cristo a la Iglesia,

porque somos miembros de su

cuerpo, de su carne, y de sus

huesos… Grande es este misterio;

mas yo digo esto con respecto a

Cristo y a la iglesia” Efesios 5: 29

al 33.

El inspirado apóstol toma de

base la alegoría del matrimonio,

que así como una pareja

legalmente unida no son dos si

no uno, igual Cristo con su

Iglesia, Pablo categóricamente

revela: “porque somos miembros

de su cuerpo, de su carne y de sus

huesos.” Su Iglesia es el cuerpo

Místico y Él es la cabeza:

“Porque el marido es cabeza de la

mujer, así como Cristo es cabeza

de la Iglesia”. Efesios 5:23. Al ser

el Cristo viviente la cabeza de

este cuerpo místico esto nos da a

entender que su Iglesia tiene que

pensar justamente como piensa

Cristo, pues es de la cabeza, del

cerebro de donde emanan todas

las órdenes para el cuerpo, y es

obvio entonces que su Iglesia

está sujeta a Él.

La Iglesia del Señor no es Bicéfala

Esto quiere decir que la Iglesia

no tiene dos cabezas, una en la

Tierra y otra en el Cielo, herejía

ésta que se introdujo en los

concilios de Nicea y Trento,

perspectiva que perdió gran

parte del cristianismo cuando se

dio la libertad de culto en el

imperio Romano siendo

emperador Constantino, fue en

Así como el Eterno sacó a Eva del costado de Adán igual la mística Eva la sacaron del costado del segundo Adán, quien es

Cristo.

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esos tiempos que surgió una

extraña figura política y religiosa

la cual tomó control absoluto de

una gran cantidad de discípulos

del Cristo Viviente auto

proclamándose el sumo

pontífice de la Iglesia del Señor,

diciéndose ser un apóstol

infalible, o sea que no se

equivoca, dogma este que ahora

es bastante cuestionado, claro

que esto fue un atrevimiento, y

esta herejía no fue aceptada por

muchos fieles, provocando

persecución, muerte y mucho

dolor en los que no aceptaban

ese nuevo pontífice, en esos

tiempos el remanente santo tenía

bien presente lo que habían

heredado de sus ancestros y

estaban dispuestos a morir por

esa causa, conocían

perfectamente lo que está

escrito:

No se trata de un sumo

sacerdote humano sino del

mismo Cristo, el que traspasó los

cielos y está sentado a la diestra

del Padre Dios y desde ese

santísimo lugar dirige su Iglesia, y

nos revela a través de su Espíritu

Santo en la misma carta a los

Hebreos 8:1: “Ahora bien, el

punto principal de lo que venimos

diciendo es que tenemos tal sumo

sacerdote, el cual se sentó a la

diestra del trono de la majestad en

los cielos” Este sumo sacerdote

no se envejece, es inmutable,

¿Cómo va a tener el cuerpo de

Cristo dos sumos sacerdotes, uno

en la Tierra y otro en el Cielo?

Esto es igual a que el cuerpo del

Señor tenga dos cabezas, sería un

fenómeno el cuerpo místico del

Cristo viviente.

Este punto por muy sencillo que

parezca fue el detonante para

que el cristianismo romano

tomara un camino diferente al

del remanente santo, unos se

quedaron con el poder político y

Esta herejía doctrinal

salió por la sed de poder y

se convirtió mas tarde en

una réplica de los

emperadores romanos que

ya para ese tiempo

estaban decayendo.

“Porque tal Sumo sacerdote nos convenía:

santo, inocente, sin mancha, apartado de los pecadores, y hecho más sublime que los mismos

cielos” Hebreos 7: 26

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económico de aquel imperio

construyendo suntuosas

catedrales disque en recuerdo de

los apóstoles, la sed de poder

siempre ha sido una mala

levadura que ha estado implícita

en el ser humano, muchos de

ellos habían dejado las frías

catacumbas de Roma y ahora se

miraban entronizados en el

imperio de la gran ciudad, el

poder los vislumbró y creyeron

que era una bendición de Dios

que les estaba dando a través de

Constantino el Grande, más no

era así, este personaje solamente

los utilizó para llegar al poder

por que él nunca se convirtió a la

Verdadera Fe, así trabaja el

enemigo como todo un

engañador; y los que no

aceptaron el nuevo sistema de

dos sumos sacerdotes tuvieron

que irse a vivir AL DESIERTO,

A LAS MONTAÑAS, a los

lugares donde no llegaran ahora

los falsos hermanos a perseguirles

para someterlos por la fuerza a

esa herejía de perdición que se

había cocinado en los concilios

de Nicea y Trento.

La Iglesia del Señor no puede Morir

Las Escrituras presentan a los

seguidores de Cristo como un

sacerdocio santo: “Mas vosotros

sois linaje escogido, real

sacerdocio, nación santa, pueblo

adquirido por Dios; para que

anuncies las virtudes de aquel que

os llamó de las tinieblas a su luz

admirable” 2 de Pedro 2: 9,

cambiado el sistema sacerdotal

de Aarón ahora el Eterno toma

de todos los pueblos para

hacerlos sacerdotes, según el

orden de Melquisedec, pero en

ninguna parte de las Escrituras

dice que dejó un sumo sacerdote

terrenal. Eso fue invención

humana la cual empezó a

conocerse a mediados del siglo

cuarto, y fue impuesta apoyados

por el ya moribundo imperio

romano.

Aunque el Cristo viviente está

ahora por un tiempo en el Cielo,

su cuerpo místico se encuentra

en la Tierra haciendo la labor

correspondiente de anunciar a

los hombres su gran retorno y la

instalación del Reino de Dios,

este cuerpo está alimentado por

un Espíritu como cualquier

persona viviente, el apóstol

Santiago escribió: “Porque así

como el cuerpo sin el espíritu está

muerto” Santiago 2: 26, igual el

cuerpo místico de Cristo, su

Iglesia tiene un Espíritu que le da

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vida, la mueve y la alimenta, y

ese es su Espíritu Santo: “el

Espíritu de verdad, al cual el

mundo no puede recibir, porque

no le ve, ni le conoce; pero

vosotros le conocéis, porque mora

con vosotros, y estará en

vosotros.” Evangelio de Juan

14:17. Cuán importante es

aprender a discernir el Espíritu

de Verdad, porque también el

enemigo de Dios ha creado

varios cuerpos que pretenden ser

el cuerpo de Cristo ostentando

poseer Espíritu Santo, el apóstol

de los gentiles inspirado por el

Divino Espíritu entendía que esta

falsedad entraría en el mundo y

que algunos discípulos que no

tenían bien acendrada la fe serían

confundidos: “Pero temo que, así

como la serpiente engañó a Eva

con su astucia, las mentes de

ustedes sean desviadas de la

sencillez y pureza de la devoción a

Cristo. Porque si alguien viene y

predica otro Jesús, a quien no

hemos predicado, o reciben un

espíritu diferente, que no han

recibido, o aceptan un evangelio

distinto, que no han aceptado,

bien lo toleran” 2 de corintios:

11: 3 y 4. Esto se cumplió y lo

vemos palpablemente, cómo la

cristiandad respira otro espíritu

que no es el del Señor Jesús,

podemos observar que el

cristianismo convencional no

cree en las Sagradas Escrituras

que tantas veces leen en sus

reuniones, usted mismo lo puede

notar, como el mundo religioso

hace todo lo contrario a lo que

la Palabra de Dios ordena; las

Escrituras señalan que el día

consagrado a Dios es el sábado

pero ellos creen que es el

domingo; uno de los

mandamientos apostólicos dice

que la mujer no puede tomar

autoridad sobre el varón, pero

hoy vemos muchas predicadoras

ministrando grandes

congregaciones, palpablemente

se nota que es otro espíritu que

estas congregaciones respiran y

no el de Cristo. En las Escrituras

se señala el orden jerárquico

divino, lo vemos de esta manera:

“Pero quiero que sepan que la

cabeza de todo hombre es Cristo,

y la cabeza de la mujer es el

hombre, y la cabeza de Cristo es

Dios” 1 de Corintios 11: 3, este

precepto no se respeta hoy, en el

nuevo desorden mundial

religioso este y tantos

mandamientos más

voluntariamente se han omitido,

y esto es clave para entender que

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no todas las organizaciones

cristianas tienen el Espíritu que le

da vida al cuerpo místico de

Cristo el cual es su Iglesia.

Cuando una Iglesia la ministra

una mujer ¿Quién será su

cabeza? No puede ser Cristo

porque Cristo es cabeza del

hombre y no de la mujer,

entonces esta Iglesia tiene a una

mujer por cabeza, y por lo tanto

no puede ser parte del místico

cuerpo de Cristo porque está

fuera del esquema que el Señor

ha trazado. No, usted no tiene la

culpa de haber sido atrapado en

una organización con este

esquema de rebeldía, sin darse

cuenta los hijos de Adam han

sido secuestrados por el maligno

con tantos engaños y solo

conociendo la Verdad de Dios

podemos ser libres: “y escapen

del lazo del diablo, en que están

cautivos a voluntad de él.” 2 de

Timoteo 2:26.

POR EL CUERPO MISTICO DE CRISTO

CIRCULA SU SANGRE

La preciosa sangre de Cristo

Jesús circula por el cuerpo de

Cristo que es su Iglesia:

“Entonces Jesús les dijo: En verdad

les digo, que si no comen la carne

del Hijo del Hombre y beben su

sangre, no tienen vida en ustedes”

Evangelio de Juan 6:53. Estas

Palabras de Jesús causaron un

gran revuelo entre los que las

oyeron: “Muchos de sus discípulos

dijeron: Dura es esta palabra;

¿Quién la puede oír?” Juan 6:60

Ciertamente que estas palabras se

sintieron fuertes: “Esto lo dijo

Jesús en la sinagoga, cuando

enseñaba en Capernaúm” Juan

6:59. Muchos de sus discípulos

cuando oyeron de parte de su

Maestro estas Palabras no se

imaginaron como era que tenían

que comerse el cuerpo de Cristo

y beberse su sangre, asunto que

la ley prohíbe, los judíos todo lo

entendían solo en el plano

material y nunca salieron de esa

vejes de letra, por eso no

encontraban otra forma como

era que Jesús les daría su cuerpo

y su sangre y el asunto era muy

serio porque solo de esa manera

podían llegar a tener Vida

Eterna. Pasaron los días y

aquellas palabras no se pudieron

entender, pero como está escrito

que todo tiene su tiempo, llegó

el momento en que lo dicho por

Jesús se cumplió, y eso fue

cuando Jesucristo celebró la

última Pascua e instituyó la

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primer Cena, ceremonia esta que

se ha olvidado por muchos y

degenerado por otros, pues

hemos dicho en varias

oportunidades que para recordar

este memorial hay una fecha y

momento instituido, pero hoy no

se le da importancia. ¿Qué fue lo

que el Señor hizo para que sus

apóstoles fueran partícipes de su

sangre y de su cuerpo?: “Y

mientras comían, tomó Jesús el

pan, y bendijo, y lo partió, y dio a

sus discípulos, y dijo: Tomad,

comed; esto es mi cuerpo. Y

tomando la copa, y habiendo dado

gracias, les dio, diciendo: bebed de

ella todos; porque esto es mi

sangre del nuevo pacto para

remisión de los pecados. Y os digo

que desde ahora no beberé más de

este fruto de la vid, hasta aquel día

en que lo beba nuevo con vosotros

en el reino de mi Padre” Mateo

26: 26 al 29.

Con ese mismo poder que puede

transformar todas las cosas Él

entró en aquella copa que

contenía jugo de uva y en aquel

pan sin levadura, y claramente

les dice: “este pan es mi cuerpo y

este jugo de la vid es mi sangre,

beban de ella todos”, de esta

manera los apóstoles se hicieron

uno con Cristo, estos once

varones se volvieron en los

depositarios de la sangre y del

cuerpo del Cristo viviente. Ellos

eran los depositarios de la

Palabra, del Verbo que se había

hecho carne y que después de

resucitar en espíritu volvería al

Padre y su cuerpo que es su

Iglesia quedaría en la Tierra

haciendo el trabajo, labor esta

que terminará hasta en la

consumación de los siglos.

El Cuerpo De Cristo está en Crecimiento

La Palabra del Señor dice: “Hay

un solo cuerpo y un solo Espíritu,

así como también ustedes fueron

llamados en una misma esperanza

de su vocación, un solo Señor, una

sola fe, un solo bautismo, un solo

Dios y Padre de todos, que está

sobre todos, por todos y en

todos… Y Él dio a algunos el ser

apóstoles, a otros profetas, a otros

Jesús en su primer milagro convirtió el agua en vino y cuando estaba

terminando su ministerio hizo otro gran milagro,

convirtió el jugo de la vid en su sangre y el pan lo convirtió en su cuerpo.

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evangelistas, a otros pastores y

maestros, a fin de capacitar a los

santos para la obra del ministerio,

para la edificación del cuerpo de

Cristo” Efesios 4: 4 al 12.

Es justamente de esta manera

que Jesucristo hace llegar hasta la

más recóndita célula de su

cuerpo el cual es su iglesia, su

sangre convertida ahora en su

enseñanza, su doctrina, para que

este cuerpo esté vivo y en

continuo crecimiento. Estos

dones o virtudes los da el Señor

a los hombres en forma directa y

exclusiva, nadie puede ordenar o

nombrar a otro Apóstol, aparte

de la suerte que echaron por

Matías para sustituir a Judas y

completar el número de los

doce.

No encontramos en las Escrituras

cuales son los requisitos para

ordenar a alguien Apóstol, eso es

trabajo del Espíritu y no del

hombre, se nota en el accionar

de cada miembro del cuerpo de

Cristo la facultad que le da, no

leemos en las Escrituras alguien

que se haya nombrado profeta,

pero claro que los hay en la

Iglesia del Señor, esa facultad es

completamente dada por el

Espíritu y no por el Presbiterio

de la Iglesia; este organismo solo

puede nombrar Diáconos y

Obispos, repito no puede

nombrar profetas, apóstoles,

evangelistas y el resto de las

dignidades que menciona la

Palabra, eso solo es competencia

del Espíritu de Dios. Hoy es muy

común encontrar aquí y allá

muchos pretenciosos ostentando

estas dignidades, que lo sean, eso

está por verse. Desde los mismos

tiempos apostólicos sé sentía esa

atmósfera cargada de mucha

falsedad pretendiendo tener esas

virtudes dadas por Dios, el

Eterno le escribe a la Iglesia de

Éfeso: “Yo conozco tus obras, tu

fatiga y tu perseverancia, y que no

puedes soportar a los malos, y has

sometido a prueba a los que se

dicen ser apóstoles y no lo son, y

los has hallado mentirosos”

Apocalipsis 2: 2.

La Cena Del Señor nos Recuerda que somos un

Cuerpo

Los humanos necesitamos que

nos estén recordando

continuamente las cosas, porque

por naturaleza tenemos una

mente olvidadiza mayormente

para las cosas buenas, por eso el

Señor deja instituida esta

ceremonia, para que todos los

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que hemos bebido de su mismo

Espíritu participemos y

revivamos así en nuestra mente y

corazón el recuerdo que somos

un cuerpo en Cristo.

Pablo escribió: “Les hablo como a

sabios; juzguen ustedes lo que

digo. La copa de bendición que

bendecimos, ¿No es la

participación de la sangre de

Cristo? El pan que partimos, ¿No

es la comunión del cuerpo de

Cristo? Puesto que el pan es uno,

nosotros, que somos muchos,

somos un cuerpo, porque todos

participamos de aquel mismo pan”

1 de Corintios 10: 15 al 17. Para

los hombres que no entienden las

cosas del Espíritu esta ceremonia

no significa nada pero para

nosotros simboliza la santa

comunión con el Cuerpo Místico

de Cristo, esto nos hace

sentirnos parte y tener vida para

un nuevo año, y esperar

pacientemente aquel añorado

momento cuando comamos y

bebamos con Cristo en su Reino

celebrando la victoria de una

lucha que ha durado muchos

siglos, cuando el Poderoso en

batalla, el invicto Jesús se reúna

personalmente con nosotros,

pues lo prometió diciendo estas

palabras: “Les digo que desde

ahora no beberé más del fruto de

la vid, hasta aquel día cuando lo

beba nuevo en el reino de mi

Padre” Mateo 26: 29. Será un

marco de indescriptible gloria la

que viviremos en aquel

momento: “Y vendrán del oriente,

y del occidente, del norte y del sur

y se sentarán a la mesa en el reino

de Dios” Lucas 13: 29.

La congregación que el Maestro

organizó, que Él fundó como

bien se lo dijo a los apóstoles, y

el evangelista Mateo registra

Mateo 16:18: “Y yo también te

digo, que tú eres Pedro, y sobre

esta roca edificaré mi iglesia; y las

puertas del Hades no prevalecerán

contra ella.”, en la profecía se

revela que este pueblo sería

portador de un interesante

Mensaje para la humanidad,

Pablo así nos lo revela: “para que

la multiforme sabiduría de Dios sea

ahora dada a conocer por medio

de la iglesia a los principados y

potestades en los lugares

celestiales, conforme al propósito

eterno que hizo en Cristo Jesús

nuestro Señor,” Efesios 3: 10 al

11. Para cumplir esta misión

necesitamos conciencia en cada

uno de los que formamos parte

de este organismo creado por

Jesucristo y trabajar según el don

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que se nos ha dado, Pablo uno

de los grandes hombres que

batalló por transmitir a la

generación venidera las noticias

de la multiforme sabiduría Divina

le recomendó a Timoteo: “No

descuides el don que hay en ti, que

te fue dado mediante profecía con

la imposición de las manos del

presbiterio.” 1 Timoteo 4:14, así

que mis hermanos siendo que

somos llamados para hacer cada

día más fuerte el anuncio del

Reino de Dios no nos cansemos

de cumplir con el propósito por

el cual fuimos llamados.

Tomemos las Palabras de nuestro

insigne apóstol, el que fue todo

corazón para anunciar las noticias

del Reino de Dios, trabajo

encomendado a la Iglesia, y él se

consideraba parte de esta labor y

nos dejó escrito: “Pues si anuncio

el evangelio, no tengo por qué

gloriarme; porque me es impuesta

necesidad; y ¡ay de mí si no

anunciare el evangelio! Por lo cual,

si lo hago de buena voluntad,

recompensa tendré; pero si de

mala voluntad, la comisión me ha

sido encomendada.” 1 Corintios

9:16 – 17. Así que ningún

miembro de la Iglesia del Señor

debe olvidar esta gran Comisión

de coadyuvar a comunicar las

noticias del Reino de Dios hasta

donde el Espíritu nos lo permita.

Hoy que tenemos una gran

puerta abierta, como se lo

dijeron a la Iglesia de Filadelfia:

“Yo conozco tus obras; he aquí, he

puesto delante de ti una puerta

abierta, la cual nadie puede cerrar;

porque aunque tienes poca fuerza,

has guardado mi palabra, y no has

negado mi nombre.” Apocalipsis

3:8. Esa puerta es la tecnología,

esa facilidad de comunicarse con

el mundo, y debemos

aprovecharla al máximo para

enviar estas noticias por los aires

hasta los más recónditos lugares

de la Tierra, y se cumpla lo

escrito: “Pero digo: ¿No han

oído? Antes bien, Por toda la

tierra ha salido la voz de ellos, Y

hasta los fines de la tierra sus

palabras.” Romanos 10:18

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Para que podamos anunciar el Evangelio Eterno con el Poderoso Sonido de una

Trompeta necesitamos la cooperación de

todos, trabajando en este mismo objetivo, para que el mundo sea iluminado con la luz

de la doctrina que hemos heredado: “Después de esto vi a otro ángel descender del cielo con gran poder; y la tierra fue alumbrada con su gloria.”

Apocalipsis 18:1

Este es el Tercer Ángel que en la profecía se

revela alumbrando al mundo y liberándolo de densas tinieblas.

Cada valor económico que depositemos en el alfolí del Señor sirve poderosamente para

proveernos de todas las herramientas que

necesitamos para hacer llegar estas noticias al Mundo.

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Escuche: “La Voz del Tercer Ángel”

Por Cadena Hondureña de Noticias

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de Lunes a viernes por la frecuencia:

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98.3 F.M. Súper “K”

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Alrededores

De Lunes a Sábado de 6:00 a 6:30 p.m.

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