16/09/2016

La Real Orquesta Sinfónica de Sevilla abre hoy su temporada con un concierto titulado «Homenaje a Carmen», en el Patio de la Montería del Real Alcázar. Bajo la batuta de su director titular, John Axelrod, la ROSS repasará los «grandes éxitos» de la popular ópera de Georges Bizet contando con la colaboración de cuatro cantantes en los principales

papeles: la mezzosoprano israelí Rinat Shaham (Carmen) —la bailaora Úrsula Moreno le dará la réplica en el papel de Carmen sobre el escenario—; el tenor Leonardo Capalbo, en el rol de Don José; el barítono Carlos Daza como Escamilla, y la soprano malagueña Berna Perles (Michaela). Pero además de ese toque clásico, esta «Carmen» —cuyo concierto se repetirá mañana— también tendrá un sabor a flamenco, ya que participará la compañía flamenca «Antonio Andrade», integrada por nueve bailaoras, tres bailaores y cinco músicos, bajo la coordinación de Cristina Hoyos. [CULTURA]

Una «Carmen» sinfónica con sabor a flamenco

David Palomar durante su actuación,

anoche, en el Lope de Vega

La ROSS abre su temporada en el Alcázar

El cantaor gaditano David Palomar presentó anoche en la Bienal de Flamenco su espectáculo «Denominación de origen». Claro seguidor de la escuela de Chano Lobato, tomó ayer en el teatro Lope de Vega la alternativa con gracia y empaque, pero sin la suficiente profundidad. El artista apostó más por el histrionismo en los gestos, lo cual provocaba que el exceso de artificio imperase sobre el cante en sí mismo. En todo caso, destacó con las sevillanas dedicadas a Lola Flores, Caracol, Paco de Lucía o Camarón, con una letra del propio cantaor. [CULTURA]

David Palomar, en la estela de Chano Lobato

Bienal de Flamenco

Rinat Shaham, John Axelrod, Leonardo

Capalbo, Carlos Daza, Úrsula Moreno y

Antonio Andrade, ayer en el Real Alcázar,

JUAN FLORES

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ALBERTO GARCÍA REYESSEVILLA

Palomar no es cantaor. Noestrictamente. Es otracosa. Es contaor de Cai. Ytiene en su petate lasmi-gajasque ledejóChanoLo-bato. Una botella de tinto

peleón, dos mojarras y un pellizco desal cayendo sobre los cantes. Por esotiene quebuscar en el embuste. Porquees un pícaro que se gana la vida con elfaro fenicio encendido que pescó Peri-cón en la Caleta. Cantando unamine-ra con zapatos de charol y de pie trasla voz de Mariana Cornejo. Recitandocomo los vividoresde las antiguas trou-pes algunos ripios entre los cantes paradarse alivio. Y contandoanécdotashas-ta dar con el callejón del duende, pos-tureando en el cante corto por bulerías,baluarte en tonosmayores de unama-nera de entender el flamenco que tie-ne su cuna en la bragueta delosmatarifes de Puerta Tie-rra. En la supervivencia delos juegosdepalabras, de losmanotazos, de los tercios deescaqueo. Ese cante de oja-naesuna joyapeligrosa.Por-que si no es natural es inso-portable. Y la virtud de Pa-lomar es que le ha cogido elvuelo a esa queja cobista deltirititrándeEspeleta y el gui-rigay deChano. Le está dan-do vida a un manojo demaestros que aprendierona cantar para comer. Pero tiene que te-ner cuidado con abusar de eso. Lame-dia voz le vale en lamalagueña del Ca-nario y en la corta del Mellizo que conla guitarra deRafael el Cabeza suena arezo. Perono en la serrana, cante ende-suso que lleva en su repertorio como

prueba de su búsqueda en esas raícessobre las que se yergue. El cambio deMaría Borrico exige mucho empuje yrepele el borricate. Ahí hay que cantar.O se echa espuma por la boca omejorse escoge otro estilo. El traspiés se arre-gla con los tangos sabrosones del Piya-yo y Triana. Con la puesta en escena,que es marchenista. Y con las sevilla-

nas dedicadas a Lola Flo-res, Caracol, Paco de Lu-cía oCamarón conuna le-tra del propio cantaor quetiene serios descuadresmétricos, pero que enca-ja golpes reconocibles delos cantes de los mons-truos a los que mienta.María Moreno las bailamejor que bien. Y juntoslogran generar un climaque justifica la entrada.Pero...

Pero el exceso de arti-ficios se come al cante. El toreo de capaen las alegrías dedicadas a los toreros.El histrionismo en los gestos. Yo nome lo creo. Demasiado teatro. Y un em-buste sólo es bueno si el que lo cuen-ta está convencido de que lo ha vivi-do. Palomar tiene la ventaja de que se

ha comido Cai y su voz es un palaciodesconchado por el salitre, una her-mosura decadente, un tronío sin es-plendor. Eso hace verosímil su peleacon las cantiñas. Y lo expone más dela cuenta por seguiriyas. La propia le-tra lo dice: «La ceniza que le rindes cul-to te daña y te ciega». Hay que buscaren otras escuelas para meterle manoalmacho con solvencia. Apretarse bienlas encías. Eso es lo que más me gus-ta. Que Palomar se inventa otro Palo-mar para echarle casta a la tragedia.Que le canta por soleá al baile de laMo-reno con los puños cerrados por de-bajo de la silla. Que no lo apuesta todoa vender crecepelo con gracia, sino quese maja las rodillas en los cantes deverdad, los quemiden el poderío de unartista joven que toma la alternativaen la mejor plaza del mundo. Y luegovuelve al por aquí te quiero ver de sudios, soniquete por rumba de garitooscuro. La negra Tomasa por aquí, ca-

Anabel VelosoLa bailaora almeriense presentasu espectáculo «El árbol conalas», una obra diseñada para elpúblico infantil. El estreno seráhoy en el Teatro Alameda a lasseis de la tarde.

Jesús GuerreroEl guitarrista gaditano ofrece suprimer concierto en solitario enla Bienal. Se titula «Calma» y sepodrá ver en la iglesia de SanLuis de los Franceses a las sietede la tarde.

Esperanza FernándezLa cantaora trianera estrena«¡Oh, vida!», un espectáculo en elque explora la relación delflamenco con el son cubano juntoal pianistaGonzaloRubalcaba.Maestranza. 20:30 horas.

MálagaEl hotel Triana acoge esta nocheun reunión de artistas malague-ños, como Luisa Palicio oVirginia Gámez, liderados por ellegendario Carrete. A las oncede la noche.

Agenda del día 1x de septiembre

David Palomar durante su actuación, anoche, en el Teatro Lope de Vega

David PalomarPuede ser que sí opuede ser que no∑El cantaor gaditano, claro seguidor dela escuela de Chano Lobato, tomóanoche la alternativa con gracia yempaque, pero sin profundidad

DENOMINACIÓN DEORIGEN !!!

Cante:David Palomar.Guitarra: José Quevedo«Bolita», Rafael Rodríguez«Cabeza», Óscar Lagos.Palmas: Anabel Rivera,Roberto Jaén y Reyes Martín.Baile:María Moreno. TeatroLope de Vega. 15 de septiembrede 2016

SaleroSu cante es purocompás, pero

tenía quehaberse sentadomás tiempo en

la silla

La rayuela deJuanmaMorenoLas rayuelas que ha pintado laBienal en las plazas y aceras dela ciudad para aprender ahacer compás están causandofuror en las redes. Unmontónde flamencos han publicadofotos jugando a hacer el ritmo,que se plantea de una formamuy sencilla: ta ta tá, ta ta tá,ta tá, ta tá, ta tá. Pero no sólohan picado los artistas delgénero. Ayer también colgóuna foto saltando en la pinturaJuanmaMorenoBonilla, ellíder del PP andaluz. «Imposi-ble resistirse», decía. Laverdad es que un poquito decompás no le vienemal.

64 CULTURA abcdesevilla.es/culturaVIERNES, 16 DE SEPTIEMBRE DE 2016 ABC

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Alberto CortésEl artista malagueño actuaráhoy en en los espectáculos decalle con una obra en la queplantea una evolución de laspandas de verdiales. Mercadode la calle Feria. 11:30 horas.

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A.G.R.SEVILLA

La toná fue lamedida exacta de loque el último eslabón de los Mén-dez, gitanosdeSanMiguel queven-denel pescadomáscarode Jerez, escapaz de llegar a ser. JesúsMéndezse presentó en la Bienal con la ideade salir del festival investido en fi-gura. Y ocurrió. Echó tres siglos decante por la boca en el martinete.Fuerza mairenista a raudales. Seacordó de los Puya y los Pelaos. Yen la grande se dejó la vida enme-moriadeTomásPavón.Nohaymásque hablar. Cuando se sale así a unescenario hay quematarse a oles.Trintrín, a la puerta llaman. Estechaval ya está aquí. Ha venidoparaquedarse. Para resucitarunaescue-la del cante que estaba perdida enlos Alcores. La del grito recto, sincurvas, siempre por el caminomáscorto. Por eso quizás su canteme-nos tenso fue la granaínay lamediade Chacón. Ahí faltó un poquito derepujado. Llegar arriba del todo. Sedio la vuelta antes de tiempo. Pero

en el resto del repertorio fue un ca-ballo desbocado. Un río anegandocon la garganta todas las riberasdelflamenco.

Quizás hay que reprocharle quea veces se excede con el volumen ylindael chillido.Tienequepulir esasembestidasque lemanandesu fuer-zanatural.Matizar comoen las ale-grías conesos trabalenguasque sontesorosdel compás.Enesecanteen-señó los graves, que son suzona so-nora más importante, y me dejómuerto.Y luego semetió enel líodela bamberapara empezar suhome-naje a la casa de los Pavón. Ole losquebebende las fuentes claras.Queuncantaor jerezano criado en el re-pertorio de su tierra se atreva ame-terlemanoa los columpiosdel can-

te es para hacer una fiesta. Si enci-ma lohacebien, cayendoa los tonosmenores con el brío de un toro, en-tonces es para comérselo.

Ese riesgo se lo aplaudo tambiénen los fandangos deHuelva, dondele faltó aire choquero, pero nuncaperdió elnorte. ElMéndez teníaunacita dura con elmédico y se la jugócon toda suverdadpordelante.Do-sificandoen los tientosy tangospas-toreños,probablementeel cantemásmecánicode la noche, elmás trilla-do. Fueunpasaje preparatorio enelque se remangóManuel Valencia,esperanza grandede la nuevabaja-ñí. FueunasubidaalmonteGurugúpara llegara los terrenos serios.Die-godelMorao le diouna entradaporsoleá que obligaba a cantar abrién-dose la camisa. Le tocó al siete porarriba para evitar caer en el aire dela soleá por bulería si le hacía el se-guimiento pormedio. Y los dos seaguantaron como bestias en el rit-mo lento de la Serneta, en las asa-durasdelMellizoyen loscuatropun-talitos de Triana.

Ya estaba lapuerta grandeabier-ta. Sólo faltaba saber si la iba a cru-zar andandooahombros. Y esepa-ñuelo siempre lo saca la seguiriya.Es verdad que el recital tuvo vaive-nes, que el grito necesitamás con-trol en ciertos cantes, que algunostercios suenanmásaprendidosquevividos y que todavía la candela deJesús tienequevenirse abajounpo-quito para que su cante sea un res-coldo buenode sarmiento. Pero untío que canta como cantó este chi-quillo la cabal del Sernita, dejándo-se la ropa a jironesde laPorverita aSantiago, no tienemás remedioqueser un cantaor grande. Se abrió ca-mino entre los ramajes deManuelTorre y Tío José de Paula. Estabanallí sentados el últimoMéndez, li-naje despavoridode laPaquera, y elúltimoMorao, herencia sublimedeltoque abismal. Es curioso: unhere-dero de doñaFrancisca, caracolerainsigne, cogiendo los trastosdeMai-rena.Diego ledio la entrada.Y Jesúspuso su bandera en todo lo alto. Sehizomayor. Llegó a la Bienal sien-dounapromesa y salió por la puer-tadel teatroCentral a lasdoceyme-dia de la noche convertido en figu-ra. Porque el cante vive. Quétranquilidadmásgrande,Diosmío.No hay quien acabe con esto.

Jesús Méndez,figura del cante

charrito por allá. Tanguillos verdero-nes del aljibe con la tortuguita que-riendo sacar la cabeza. Y una buleríade las entrañas de Gades, lejos ya delrecuerdo inicial a la Perla, que son elcaray de su sal. Cuarenta novias queyo tenía, eso son cosas que dice usted;las tendrá en fotografía, eso sí que pue-de ser. Soniquete lúdico que tiene enel estribillo la respuesta al futuro deeste cantaor: tiene buenas hechuras ysabe lo que hace, pero puede ser quesí o puede ser que no. Despacito.

PEPE ORTEGAJesús Méndez, conManuel Valencia

JESÚS MÉNDEZ !!!!

Cante: Jesús Méndez.Guitarra:Diego del Morao,Manuel Valencia. TeatroCentral. 14-09-2016

abcdesevilla.es/cultura CULTURA 65ABC VIERNES, 16 DE SEPTIEMBRE DE 2016

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David Palomar canta, baila, torea, cuenta an~cdotas y se mueve de maravilla por el escenario./Manue! G~me~

Un cantaor de pinceladasFLAMENCO

~lanuel Bo~rquez

S i hay algo que no pode-mos negarle al carism~ti-co cantaor David Palomar esque es muy gaditano y quetiene el arte pot arrobas, co-mo buen hijo de la Tacita.diz ha dado muchas figurasdel cante, desde Curro Dulcey E1 Mellizo hasta Peric6n yAurelio Sell6s, pero no ha da-do tantos cantaores pot dere-cho como Sevilla y Jerez, deesos que se agarran a las se-guiriyas, las soleares o las to-n~s. Sin embargo hay tantahistoria y solera cantanra enC~diz, que no paran de salirbuenos artistas y Palomar esuno de ellos, un cantaor demediana edad y con unos re-cursos incre~les cuando pisaun egcenario. Anoche tuvouna gran oportunidad en laBienal, presentando en el Lo-pe de Vega su filtimo disco,Denominaci6n de origen, obraque le est~ viniendo muybien para hacer festivales y

estar, por ejemplo, con untratamiento de figura en elmejor festival del mundo. Enmi opini6n no es afln una pri-mera figura, pero C~idiz nocuenta con muchos primerosnombres del cante y eso le vaa ayudar a hacer una carrerasegura y, sin duda, llena de6xitos, como el de anoche,con el teatro lleno y tantosol6s que podria haberse lleva-do un carro lleno para Cfidiz.En el 4xito de un conciertohay que tenet en cuenta va-rios aspectos fundamentales,el principal, que cante bien yalgunas cosas las hizo estu-pendarnente, como las bule-rias de su tierra, los tangui-llos, las alegrias y las soleares.No resolvi6 bien la malague-fia de El Canario en versi6n deChac6n (Corte), porque suscondiciones no tienen nadaque ver con las del genio Je-fez. Estuvo mejor en las de E1Mellizo, jugando bien con suvoz corta. En la serrana, conprefimbulo de liviana, careci6de jondura y, por cierto, te-niendo serios problemas conese micr6fono tan modernoque se coloca en una oreja.Estuvo todo el concierto to-cfindose las orejas, algo in-comprensible, porque el can-te jondo requiem una con- Un comunicador nato./MnnuelG~mez

centraci6n y eso lo sac6 unpoco del recital. Encantador ypersonal en el garrotin acaba-do pot tangos de E1 Piyayo yE1Titi de Triana, y espectacu-lar en las sevillanas, en lasque homenaje6 a genios delarte como Lola Flores, Cara-col y Carmen Amaya. En lasseguiriyas se agarr6 bien, en-treg~ndose hasta limites in-creoles, aunque en este can-te le falt6 profundidad. Pro-fundidad que, sin embargo,tuvo la joven bailaora MariaMomno, que no s6 si tienemenos de veinte afios y quesorpmndi6 con una maneramuy flamanca de bailar unpalo tan dificil. Esta colabora-ci6n y sus guitarristas, sobretodo E1 Bolita de Jerez y elmaestro sevillano Rafael Ro-driguez El Cabeza -hay quequitarse el sombrero con esteguitarrista-, le ayudaron atriunfar, aunque en mi opi-ni6n se pas6 un poco con lacharanga, pero es parte de supuesta en escena, las an6cdo-tas de Chano y E1 Chato de laIsla, sacar un capote al esce-nario y, en general, empefiar-seen cFlvertir al pOblico concosas para la galeria. Muybien Roberto Ja6n, que hastase clio la pataita pot buleriasde la noche. ̄

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DIARIO DE SEVILLA | Viernes 16 de Septiembre de 2016 43

Cervantesen OrienteCrítica de MúsicaEDUARDO PANIAGUA TRÍO★★★★★

XVII Noches en los Jardinesdel Real Alcázar. EduardoPaniagua Trío: César Carazo,canto y viola; Aníbal Soriano, gui-tarra y laúd barrocos; EduardoPaniagua, flautas, percusión y di-rección. Programa: ‘La GranSultana’. Lugar: Jardines del re-al Alcázar. Fecha: Miércoles 14de septiembre. Aforo: Tres cuar-tos de entrada.

Pablo J. Vayón

Programa en torno al teatrocervantino, que reflejó bienel conflicto del mundo me-diterráneo en el siglo XVI,ese mundo que Cervantes,cautivo en Argel, vencedor,aun herido, en Lepanto, co-noció a la perfección y refle-jó de un modo u otro en todasu obra literaria. A partir deLa Gran Sultana, típica co-media de cautivos, algunosde cuyos textos fueron em-pleados no sólo a través delrecitado, sino usando comobase un aire de canarios omediante el recurso al con-trafactum con la famosa me-lodía de La mañana de SanJuan de Diego Pisador, eltrío encabezado por Eduar-do Paniagua se paseó pormúsicas de los siglos XVI yXVII, en su inmensa mayoríaespañolas, desde esa Vues-tros ojos recopilada en su díapor Robert Dowland en suBanquete musical a la chaco-na de Arañés (presentadacon una curiosa línea meló-dica), las jácaras, folías, untono de Hidalgo, una piezaandalusí o una conocidacanción sefardí.

Pese a que el programaera en lo esencial puramen-te occidental, hubo rastrosde orientalismo aquí y allá.César Carazo mostró su voznatural y diáfana, su timbreinconfundible, su fraseofluido y una forma originalde ornamentar, con melis-mas de especial singulari-dad en la música sefardí.Dio intención expresiva atodo lo que cantó. Correctosacompañamientos de Aní-bal Soriano y Eduardo Pa-niagua, el laudista y guita-rrista más cómodo en losrasgueos y en los ritmos delas piezas más desenfada-das, con algún problema deagilidad el f lautista en unapieza de Van Eyck, que sonóalgo mortecina y fuera de si-tio, y en un Trompicábalas,Amor de Hidalgo no del to-do fluida. En cambio, fun-cionó a la perfección, porbrillo, vigor y flexibilidad,en la famosa jácara No hayque decir el primor, que serepitió con igual acierto enla propina.

Crítica de flamencoCINE

JESÚS MÉNDEZ★★★★★

Cante: Jesús Méndez. Guitarra: Ma-nuel Valencia, Diego del Morao. Palmas:Diego Montoya, Manuel Salado, Juan Die-go Valencia. Percusión: Luis Carrasco.Lugar: Teatro Central. Fecha: Miérco-les día 14. Aforo: Casi lleno.

J. Vergillos

Lo más destacado de Jesús Mén-dez es su enorme potencia vocal,que inyecta en todas y cada una desus interpretaciones, dando comoresultado una configuración de losestilos feroz y espectacular, aun-que algo monocorde. Esto le sirve,igualmente, para la toná a ritmode los nudillos en la mesa que abreel recital como para la frenética

bulería final. Lo mismo para lostientos y tangos que para la gra-naína. Por supuesto que en esteturbión el cante creado por Cha-cón y Vallejo pierde sus matices, setrasforma en otra cosa. Pero otracosa igualmente válida. Apela aotros estratos de la emoción. Laira, el frenesí. Y todo con un timbremate, perfectamente pulido, grue-so pero pulcro. Es la estética que seidentifica con Jerez desde la se-gunda mitad del siglo XX.

Asimismo, el toque se sitúa enesta onda con un Diego del Moraoque emuló fielmente a su tío Ma-nuel, a su padre Moraíto. Con untoque nervioso, que confiere alcompás enorme ductilidad. Y unManuel Valencia más rígido eigualmente solvente. Del Moraoescanció un par de falsetas bellísi-

mas en la soleá, sin duda el mo-mento más emotivo de la noche,donde Méndez demostró que,además de la tradición jerezana,conoce las de Cádiz y Triana. Fueel estilo más matizado. En la segui-riya, también con Diego del Mo-rao, la emotividad, la energía ytensión máximas se elevaron a laenésima potencia, con la brillantecabal del Loco Mateo como rema-te. Las bamberas a ritmo de soleá,fórmula que patentaron Paco deLucía y Naranjito de Triana paraeste cante de Pastora Pavón, tam-bién son nuevas en el repertorio deMéndez, como la granaína, y for-man parte del nuevo disco quepresentó el jerezano en el trasno-che del miércoles al jueves. Portangos se volvió a acordar Méndezde la Niña de los Peines, demos-trando que su interés por el patri-monio jondo no se limita, como di-go, a su barrio, su gente. Un recitalmuy físico, pleno de vitalidad.

El turbión de Jesús Méndez

ÓSCAR ROMERO / BIENAL

Jesús Méndez, ayer en el Central.

Crítica de FlamencoCINE

DENOMINACIÓN DE ORIGEN★★★★★

Cante: David Palomar. Guitarra: JoséQuevedo ‘Bolita’, Rafael Rodríguez, ÓscarLagos. Baile: María Moreno, Jeranys Pé-rez. Coros y palmas: Anabel Rivera,Reyes Martín. Percusión y coros: Ro-berto Jaén. Coro de Carnaval: Miem-bros del coro Luis Rivero. Lugar: TeatroLope de Vega. Fecha: Jueves 14 de sep-tiembre. Aforo: Casi lleno.

Juan Vergillos

Una obra divertida, llena de buenhumor y ángel. Gracia gaditana araudales: alegrías, tanguillos,rumbas y bulerías por partida tri-ple. También hubo sus momen-tos graves: el apunte por minerascon el que se abrió la noche, MiCai no tiene mina, toda una decla-ración de principios. Las mala-gueñas: para este cante David Pa-lomar buscó su inspiración, conacierto, en el gran Aurelio Sellés.Aunque la primera letra que dijoes de Chacón. Se la supo traer asu terreno con buen criterio y re-matar con un sobrecogedor y edí-pico cante del Mellizo. Tambiénhubo serranas, aunque la fórmu-la austera y enjundiosa de Pepede la Matrona, el transmisor con-temporáneo de estos cantes deSilverio, está aún más alejada dela estética de Palomar que la mi-nera. Y la seguiriya en la que elcantaor echó el resto, aunquequedó algo deslucida por una le-tra poco afortunada. Para la so-leá eligió las fórmulas melódicasde El Chozas aunque aquí cedióel protagonismo al baile de MaríaMoreno.

Las alegrías fueron lo mejor dela noche. Con el cantaor cantan-do en la boca del escenario eidentificándose con las letrastaurinas. Aquí pudimos gozar a

placer de una de las voces másbonitas y naturales del panoramaflamenco contemporáneo. Por-que Palomar tiene un timbre be-llísimo. Es un cantaor diáfano, declara dicción.

Es un superdotado con una fa-cilidad increíble para afrontarcualquier melodía y un sentidodel ritmo absoluto. Esta ligerezaaérea es una de las señas de iden-tidad del cante gaditano y, en es-te sentido, Palomar es sin dudasu mejor exponente actual. En lalínea de La Perla, que fue la elegi-da para la primera entrega por

bulerías. No faltaron los cantesfesteros con estribillo y coros, co-mo el que cerró el recital. Tampo-co faltó a la cita el bolero a ritmode bulería lenta, en este caso Bo-rrasca, un tema popularizado porNelson Pinedo. Convirtió el ga-rrotín, un homenaje a Chano Lo-bato, en un tango bailable, casihabanero, con cantes del Piyayoy de Triana. También se acordóde Chano para la rumba, enla-zando dos de los éxitos del grancantaor gaditano, Cacharrito yLa negra Tomasa. Las sevillanastienen una música muy intere-sante pero les sobran lugares co-munes en la letra y efectismos enla puesta en escena. Efectismosque un cantaor sobrado de condi-ciones como Palomar no necesi-ta. Para los tanguillos se hizoacompañar de cuatro miembrosdel coro de Luis Rivero. Puro sa-bor gaditano. Fue una pena que

no se entendiera la letra. De he-cho, Palomar estuvo toda la tar-de luchando con un sonido muydeficiente. También se echó enfalta una dirección en las pince-ladas de puesta en escena que tie-ne el espectáculo.

Para la rumba contó con el bai-le cubano de Jeranys Pérez quemezcló las formas propias de sutierra con el zapateado jondo.María Moreno hizo unos detallesde enorme gusto en las sevilla-nas, lírica y sentimental. Y estu-vo portentosa en la soleá, sobra-da de energía y compás pero almismo tiempo íntima y dulce. Esuna de las grandes bailaoras denuestro tiempo. Estuvieron muydestacados, asimismo, los tresguitarristas con un Bolita tan se-guro como inventivo, autor de al-gunos de los temas, y Rafael Ro-dríguez inventando universosnuevos desde la tradición.

La aérea ligereza de Cádiz

VÍCTOR RODRÍGUEZ

David Palomar presentó en el Lope de Vega ‘Denominación de origen’, su nuevo trabajo discográfico.

Palomar es el mejorexponente actual deese cante gaditanode formas sutiles

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