El Caballero Carmelo

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El caballero Carmelo (cuento)El caballero De la Mershtha

AutorAbraham Valdelomar

Gnerocuento literario

IdiomaCastellano

EditorialLa Nacin(diario limeo)

CiudadLima

PasPer

Fecha de publicacin13 de noviembrede1913

Formatoperidico o diario(y reimpreso en colecciones)

El caballero Carmeloes un cuento delescritorperuanoAbraham Valdelomar, considerado por la crtica como lo mejor de toda su creacin ficticia y uno de los cuentos ms perfectos de la literatura peruana.1Publicado el13 de noviembrede1913en el diarioLa NacindeLima, encabeza el conjunto de los cuentos denominados criollos o criollistas, ambientadas durante la niez del autor transcurrida enPisco, una ciudad de la costa peruana, en medio del desierto.ndice[ocultar] 1Historia de su publicacin 2Contexto 3Argumento 4poca 5Resumen 6Escenarios 7Personajes 8Anlisis estructural 9Anlisis estilstico 10Anlisis temtico 11Entre la ficcin y la realidad 12Importancia 13Mensajes 14Referencias 15Bibliografa bsica 16Vase tambin 17Enlaces externos

Historia de su publicacin[editar]

Abraham Valdelomar en Roma, 1914.Desde agosto de1913, Valdelomar ejerca como diplomtico enItalia, cargo que le haba concedido el gobierno deGuillermo Billinghurst, en cuya campaa presidencial haba colaborado. Es posible que empezara a escribir El caballero Carmelo mucho antes de embarcarse a Europa; lo cierto es que lo concluy en la ciudad deRomapara luego presentarlo al concurso literario convocado por el diarioLa NacindeLima, ocultndose bajo el seudnimo de Paracas. A manera de adelanto de los trabajos presentados por los concursantes, el cuento de Valdelomar fue publicado en la edicin de dicho peridico del da13 de noviembrede1913.El jurado encargado de dirimir en el concurso estaba conformado por el historiadorCarlos Wiesse Portocarrero, el crtico y narrador Emilio Gutirrez de Quintanilla, y el poetaEnrique Bustamante y Ballivin, ste ltimo era adems el director del diarioLa Naciny gran amigo de Valdelomar, con quien mantuvo por entonces correspondencia. De este carteo se desprende que el escritor quera ganar el concurso para demostrar su vala a sus compaeros de laUniversidad de San Marcos, pues todava estaba con el mal sabor de la derrota de su candidatura a la presidencia del Centro Universitario (ver ms detalles en la biografa deAbraham Valdelomar). Transcribimos parte de una de las cartas que el escritor envo por entonces a Bustamante y Ballivin:He ledo en el primer nmero deLa Nacin, que es el nico que he recibido, las bases de un concurso literario. Usted sabe, Enrique, cunto necesito triunfar donde se me presente un honrado campo. Teniendo esto en consideracin, y sabiendo que usted es miembro del jurado, sin voto (que de otra manera no le confiara esto) porque no deseo bajo ningn punto que se me favorezca sin derecho y sin justicia, le digo lo siguiente: he sacado de mi libro de novelas cortas ese cuento que le envo, para entrar al concurso. Como usted sabe que me jodera completamente sacar un segundo o tercer premio, el favor que usted me va a hacer consiste en que entregue el cuento, al cual le pongo yo un seudnimo; para en caso de no sacar el premio, no se sepa mi nombre. Esto lo hago yo, su intervencin es esta otra: Si me dieran por chiripa el primer premio, entonces usted explica al jurado la razn que tuve para dar mi seudnimo y la carta que envo para garantizar la propiedad de mi cuento. Esto slo en el caso de que se trate del primer premio, pues si no, usted se quedar tan calladito y no se sabr que el cuento se es escrito por este pobre diablo. Otra cosa an. Como yo no quiero que hablen y critiquen mi actitud al ir a ese concurso, ni que digan que es cojudo2y que, yo desde Europa, les vaya a arrebatar triunfos a los de all, le incluyo un pliego en el cual renuncio al premio y cedo el dinero al que me suceda y, si ste no lo quisiera, al Centro Universitario o a cualquier sociedad.3Como era de esperar, el jurado otorg a El caballero Carmelo el primer lugar en el concurso de cuentos: el galardn vena acompaado de cien soles de premio (27 de diciembrede1913). Tal vez nadie entonces imagin que con ese episodio simblico se inauguraba una nueva etapa en las letras peruanas. En el nmero del3 de enerode1914La Nacinpublic los resultados del concurso. Valdelomar qued ms que feliz con la noticia, pero poco despus ocurri el golpe de estado del coronelOscar R. Benavidesque derroc al presidenteGuillermo Billinghurst: en protesta, el escritor renunci a su cargo de diplomtico. Por entonces se hallaba en tratos con una editorial deParspara dar a luz su libro de cuentos criollos, que encabezaraEl caballero Carmelo, pero este proyecto no se concret, y Valdelomar retorn al Per, en abril de1914.El cuento fue incluido despus en el libro del mismo nombre, de carcter miscelneo:El caballero Carmelo(Lima, 1918). Ello es una prueba de la resonancia que entonces tuvo el cuento, al punto que el autor lo tom para dar ttulo a su primera coleccin cuentstica.Contexto[editar]El ambiente de popularismo y democracia creado alrededor del corto perodo presidencial deGuillermo Billinghurst(1912-1914), poltico provinciano al igual que Valdelomar, tal vez tuvo algn influjo en el surgimiento del cuento criollo valdelomariano, tarea que debe entenderse como un cambio de perspectiva en lo que toca a la valorizacin de los espacios de la nacin peruana.4mbitos provincianos, considerados hasta entonces menores y normalmente relegados de la representacin literaria, aparecieron entonces en primera fila, recreados por una de las mayores plumas, sino la mayor, de la narrativa peruana delsiglo XX.Argumento[editar]Contado en primera persona con un lenguaje tierno y conmovedor, y ambientado en un entorno provinciano y rural, este cuento nos narra la historia de un viejo gallo de pelea llamado el Caballero Carmelo, que debe enfrentar a otro ms joven, el Ajiseco. El Carmelo, sacando fuerzas de flaqueza, gana, pero queda gravemente herido y poco despus muere, ante la consternacin de sus dueos. Este es el tema central.Como temas secundarios podemos mencionar la vida familiar en el hogar del protagonista-narrador (incluida las peripecias del gallo Pelado) y la vida de los pescadores de la aldea San Andrs, cercana a Pisco.poca[editar]Hay que distinguir la poca en que fue esbozado y escrito el cuento (entre los aos 1912-13) y la poca en que est ambientado el relato, lo cual podemos fechar, teniendo en cuenta su carcter autobiogrfico, entre los aos 1896-97, es decir cuando el protagonista-narrador tena entre 8 a 9 aos de edad. Prueba del talento del escritor es que, siendo un hombre mayor, se retrotrae a la poca de su lejana infancia y con la sensibilidad de un nio relata esta historia sencilla pero que bajo su pluma se convierte en maravillosa.Resumen[editar]

Representacin ficticia del duelo entre el Carmelo y el Ajiseco.Los hechos relatados transcurren enPisco, en torno a la familia del narrador, quien recuerda en primera persona un episodio imborrable que vivi en su niez, a fines del siglo XIX. Un da, despus de un largo viaje, Roberto, el hermano mayor de la familia, lleg cabalgando cargado de regalos para sus padres y hermanos. A cada uno entreg un regalo; pero el que ms impacto caus fue el que entreg a su padre: un gallo de pelea de impresionante color y porte. Le pusieron por nombre el Caballero Carmelo y pronto se convirti en un gran peleador, ganador en mltiples duelos gallsticos. Ya viejo, el gallo fue retirado del oficio y todos esperaban que culminara sus das de muerte natural. Pero cierto da el padre, herido en su amor propio cuando alguien se atrevi a decirle que su Carmelo no era un gallo de raza, para demostrar lo contrario pact una pelea con otro gallo de fama, el Ajiseco, que aunque no se igualaba en experiencia con el Carmelo, tena sin embargo la ventaja de ser ms joven. Hubo sentimiento de pena en toda la familia, pues saban que el Carmelo ya no estaba para esas lides. Pero no hubo marcha atrs, la pelea estaba pactada y se efectuara en el da de la Patria, el28 de julio, en el vecino pueblo de San Andrs. Llegado el da, los nios varones de la familia acudieron a observar el espectculo, acompaando al padre. Encontraron al pueblo engalanado, con sus habitantes vestidos con sus mejores trajes. Las peleas de gallos se realizaban en una pequea cancha adecuada para la ocasin. Luego de una interesante pelea gallstica les toc el turno al Ajiseco y al Carmelo. Las apuestas vinieron y como era de esperar, hasta en las tribunas llevaba la ventaja el Ajiseco. El Carmelo intentaba poner su filuda cuchilla en el pecho del contrincante y no picaba jams al adversario. En cambio, el Ajiseco pretenda imponerse a base de fuerza y aletazos. Repentinamente, vino una confrontacin en el aire, los dos contrincantes saltaron. El Carmelo sali en desventaja: un hilillo de sangre corri por su pierna. Las apuestas aumentaron a favor del Ajiseco. Pero el Carmelo no se dio por vencido; herido en carne propia pareci acordarse de sus viejos tiempos y arremeti con furia. La lucha fue cruel e indecisa y lleg un momento en que pareci que sucumba el Carmelo. Los partidarios del Ajiseco creyeron ganada la pelea, pero el juez, quien estaba atento, se dio cuenta que an estaba vivo y entonces grit. Todava no ha enterrado el pico seores!. Y, efectivamente, el Carmelo sac el coraje que slo los gallos de alcurnia poseen: cual soldado herido, arremeti con toda su fuerza y de una sola estocada hiri mortalmente al Ajiseco, quien termin por enterrar el pico. El Carmelo haba ganado la pelea pero qued gravemente herido. Todos felicitaron a su dueo por la victoria y se retiraron del circo contentos de haber visto una pelea tan reida. El Carmelo fue conducido por Abraham hacia la casa, y aunque toda la familia se prodig en su atencin, no lograron reanimarlo. Tras sobrevivir dos das, el Carmelo se levant al atardecer mirando el horizonte, bati las alas y cant por ltima vez, para luego desplomarse y morir apaciblemente, mirando amorosamente a sus amos. Toda la familia qued apesadumbrada y cen en silencio aquella noche. Segn palabras del autor, esa fue la historia de un gallo de raza, ltimo vstago de aquellos gallos de pelea que fueron orgullo por mucho tiempo del valle del Caucato, frtil regin de Ica donde se forjaban dichos paladines.Escenarios[editar]La casa donde conviva la numerosa familia del narrador, personajes de esta historia, se hallaba en laciudad de Pisco, situada frente al mar, con tres plazuelas (una de ellas la principal) y su muelle, ciudad que entonces ms pareca una aldea grande.Inmediata a dicho puerto, yendo por el camino de la playa hacia el sur, estaba la caleta deSan Andrs de los pescadores, aldea de gentes sencillas, que eleva sus casuchas entre la rumorosa orilla y el estril desierto. Esa es la aldea encantada que el autor evoca constantemente en sus cuentos criollos, la misma donde se realizaban peleas de gallos en el marco de la celebracin del aniversario patrio del28 de julio.En las cercanas de Pisco y en la ruta haciaIca, se extenda laHacienda Caucato, que ocupaba un verde y frtil valle, copioso de rboles frutales, explotado antao por losjesuitas. Era la tierra del Carmelo y de otros gallos de pelea de la regin.Personajes[editar]Caso inslito en la literatura peruana hasta ese entonces (aunque no en la hispanoamericana), que los personajes principales sean animales, en este caso dos gallos de pelea: ElCarmeloy, ElAjisecoEstos apelativos no son nombres propios, como se podra pensar, sino que aluden al color del plumaje de ese tipo de aves, tal como era costumbre clasificarlos entre la aficin gallstica peruana desde elsiglo XVII.Habra que mencionar tambin al galloPelado, el protagonista de la seccin II del cuento. Este es otro gallo de estirpe, que fue suplantado por elCarmeloen las preferencias de la familia.El otro personaje principal es elnarradory testigo de la historia, es decir el mismoAbraham Valdelomar, que cuando aquella transcurre deba tener entre 8 y 9 aos de edad, no ms (algunas versiones dicen que tena entonces 12 aos, pero esto es improbable, ya que cerca de cumplir 11 aos abandonPiscocon toda su familia y se fue a vivir aChincha).Luego estn los integrantes de la familia del narrador: Los padres(cuyos nombres no se mencionan). El padre, el aficionado de lagallstica, se levantaba temprano para ir a trabajar. La madre se dedicaba a las tareas del hogar y al cuidado de sus 6 hijos menores todava. Los hermanos: Roberto, el mayor, quien retorna al hogar luego de un largo viaje trayendo regalos. Anfiloquio, el protector del gallo Pelado. Rosa, la hermana mayor. Jess, una nia muy inquieta y sensible, de menor edad de Abraham. Hctor, sin duda muy pequeo an, pues no participa en la historia y solo se le menciona como uno de los receptores de los regalos del hermano mayor.5Finalmente, son mencionados tambin el panadero (un viejo dulce y bueno), el entrenador del Carmelo, el juez de las jugadas de gallos, el dueo del Ajiseco, los espectadores y apostadores de las peleas de gallos, los pescadores de la caleta de San Andrs.Anlisis estructural[editar]El cuento est dividido en seis secciones o captulos cortos. Cronolgicamente el relato es lineal, con la clsica secuencia: inicio desarrollo clmax desenlace. Inicio (la llegada del Carmelo). Desarrollo (la descripcin del entorno y los preparativos de la pelea entre el Carmelo y el Ajiseco). Clmax (la pelea entre el Carmelo y el Ajiseco, y el triunfo del primero). Desenlace (la muerte del Carmelo en el seno del hogar).En el inicio el autor sabe capturar a sus lectores, utilizando la llamada tcnica del anzuelo: en el relato irrumpe un jinete desconocido, lo que motiva a que el lector sea picado en su curiosidad y se adentre en la lectura, hasta llegar al nudo del relato. El final se puede interpretar tcnicamente como un anti-clmax pues el verdadero desenlace es cuando el Carmelo gana a su rival dos das antes.A continuacin, un resumen del cuento por captulos, para tener una visin global de su estructura.I.- El relato se inicia con la llegada de Roberto, hermano mayor del narrador, quien trae regalos para la familia. A su padre le obsequia un gallo carmelo, que ser conocido como el Caballero Carmelo y llegar a ser el preferido de todos.II.- Empieza describiendo el amanecer en Pisco, la partida del padre haca su trabajo, la llegada del panadero. Los nios se encargan de alimentar a los animales del corral, cuya descripcin detallada se hace. Entre estos destaca un gallo llamado el Pelado, quien, pendenciero y escandaloso, se escapa y se mete en el comedor causando destrozos. Enterado el padre, sentencia que el Pelado sera sacrificado para el almuerzo del domingo. El dueo del gallo, Anfiloquio (uno de los hermanos de Abraham), protesta por esta decisin y trata de argir razones para salvarlo. Pero la decisin ya estaba tomada. El muchacho entonces llora impotente, ante lo cual interviene la madre, quien le promete que no mataran a su gallo.III.- El narrador hace una descripcin de Pisco, frente al mar, con sus tres plazuelas y su puerto. Mas al sur, yendo por el camino de la costa, se llegaba a la aldea de San Andrs de los Pescadores, poblada de gentes sencillas, dedicadas a la pesca y el comercio, descendientes de las poblaciones nativas o hijos del sol. De estos aldeanos el narrador hace una descripcin idlica (en algunas versiones del cuento, sobre toda en aquellas destinadas a los escolares, se mutila inexplicablemente esta seccin).IV.- Comienza con la descripcin del gallo Carmelo, a quien el narrador pinta con trazos de caballero medieval. Haban pasado ya tres aos de que llegara el gallo a casa y haba envejecido, luego de ser ganador en varios duelos con otros gallos de la regin. Pero entonces la familia recibe una noticia aterradora: el padre, molesto porque alguien haba dicho que su gallo no era de raza, lo volvera a hacer pelear, esta vez con otro gallo ms joven, el Ajiseco. El duelo se pacta para el da 28 de julio, da de la patria, en la aldea de San Andrs. Un hombre viene seis das consecutivos para entrenar al Carmelo. Finalmente llega el da esperado y se llevan al Carmelo, ante las protestas de la madre y el llanto de las nias. Una de ellas, Jess, ruega a Abraham que lo siga y lo cuide.V.- El pueblo de San Andrs se halla engalanado para la fiesta. La pelea de los gallos se realiza en una pequea cancha, a la que asiste mucha gente, entre apostadores y espectadores. Al frente se halla el juez, es decir, el dirimente de la pelea. Luego de una pelea preliminar, empieza el duelo entre el Carmelo y el Ajiseco. El favorito de los apostadores era este ltimo, y todos crean que sera el ganador. Pero luego de una reida pelea, el Carmelo se alza con el triunfo, aunque queda gravemente herido. Todos felicitan al padre de Abraham por la victoria de su gallo de pelea. Abraham carga al Carmelo y se lo lleva a casa.VI.- Dos das estuvo el Carmelo sometido a toda clase de cuidados. Pero todo es en vano y expira, luego de dar su ltimo canto, ante la consternacin de toda la familia.Anlisis estilstico[editar]En El caballero Carmelo Valdelomar evoca con ternura y sencillez la vida de la infancia, del hogar, del puerto y de la provincia. Su lenguaje es claro, expresivo y breve, todo lo cual supone una admirable destreza tcnica.4En este cuento encontramos tambin descripciones de fino impresionismo y una prosa que pone en relieve detalles llenos de colorido, en una estrategia cuya pretensin es dar vitalidad a los hechos comunes, a las cosas sencillas,6como por ejemplo, la enumeracin de las viandas que el hermano mayor distribuye a los miembros de la familia:Quesos frescos y blancos envueltos por la cintura con paja de cebada, de la quebrada de Humay; chancacas hechas con cocos, nueces, man y almendras; frijoles colados, en sus redondas calabacitas, pintadas encima con un rectngulo de su propio dulce, que indicaba la tapa, de Chincha Baja; bizcochuelos, en sus cajas de papel, de yema de huevo y harina de papas, leves, esponjosos, amarillos y dulces7Ingenuas y encantadoras son tambin algunas descripciones, como la de los animales del corral:Vena hasta nosotros la cabra, refregando su cabeza en nuestras piernas; piaban los pollitos; tmidamente ese acercaban los conejos blancos con sus largas orejas, sus redondos ojos brillantes y su boca de nia presumida; los patitos, recin sacados, amarillos como yema de huevo, trepaban en unpantode agua; cantaba desde su rincn, entrabado, el Carmelo, y el pavo, siempre orgulloso, alharaquero y antiptico, haca por desdearnos, mientras los patos, balancendose como dueas gordas, hacan por lo bajo comentarios sobre la actitud poco gentil del petulante.7Al mismo tiempo, con este relato la subjetividad entr de lleno en la narrativa peruana. Los acontecimientos importan ms por las impresiones que producen en la conciencia de los protagonistas. El creador tiene una conciencia que valora y modula la realidad.8Por su lenguaje, materia y referencia, El caballero Carmelo y los dems cuentos criollos representaron una saludable superacin del artificio y cultismo extremo de la prosamodernista, todava en boga.4Anlisis temtico[editar]En este relato, Valdelomar maneja la animizacin, por la cual los seres o entidades de la naturaleza son caracterizados con atributos humanos. El Carmelo ha sido dotado con las virtudes humanas como la caballerosidad y la nobleza, aadidas al arrojo y la valenta. El narrador le endilga de eptetos como hidalgo, amigo ntimo, hroe, paladn y caballero medieval. El gallo es elparadigmao emblema de un tipo de conducta deseable, al mismo tiempo que smbolo evocador de todo lo que es sano y hermoso en el mundo: hogar, campo, cielo, mar, ruralidad laboriosa. Frente a l se alza la arrogancia y la ruindad de su joven rival, el Ajiseco quienno pareca ser un gallo fino de distinguida alcurniay quehaca cosas tan petulantes cuan humanas: miraba con desprecio a nuestro gallo y se paseaba como dueo de la cancha. Cuando el Carmelo lo vence, simboliza tambin el triunfo de la nobleza sobre la vileza, la caballerosidad sobre la villana, la autenticidad sobre la vanidad.9Entre la ficcin y la realidad[editar]

Pelea de gallos.Si bien hemos remarcado el carcter autobiogrfico del cuento, ello no necesariamente es una regla estricta, ya que el autor, como todo creador literario, sin duda ha debido recrear la historia, agregando muchos detalles ficticios o inventados. El mismo lo explicaba en una carta a su madre, al referirse a una coleccin de cuentos criollos, ambientados tambin en Pisco en los aos de su niez:Naturalmente, hay mucho de fantasa, pero mucho de verdad, sobre todo en la descripcin de ciertas cosas.10Tampoco Valdelomar se preocup de reconstruir con fidelidad los detalles referentes a laspeleas de gallosy a las caractersticas de estos animales, tal como lo ha demostradoMarco Aurelio Denegrien su libroArte y Ciencia de la Gallstica(Kavia Cobaya editores, Lima, 1999), citada por el bigrafo del escritor, Manuel Miguel del Priego: tanto en la descripcin del gallo Carmelo, como en la descripcin de la ria en que ste participa y su secuela, Valdelomar cae en errores de nomenclatura y de comprensin de lo que verdaderamente ocurre durante una pelea de gallos y an despus. As lo demuestra el polgrafo y experto en gallstica Marco Aurelio Denegri en su libro acerca del tema, quien, implacablemente, deja en cueros, con las plumas al viento, y privado hasta de su nombre al gallo de la narracin, porque, como lo pinta Valdelomar, tiene caractersticas distintas a las que distinguen a uncarmelo. Elcarmeloque lo es de verdad tiene el dorso, los hombros y el arco del ala, de color pardo rojizo, acanelado; la golilla y la silla, de color anaranjado o rojo acastaado; el resto del cuerpo, blanco, y tambin la cola. ElCarmelodel cuento, en cambio, adolece de imprecisin cromtica por ejemplo, no se llega a saber de qu color era su cola y deviene un remedo, un gallo de varios colores mal combinados, vale decir, un gallo de plumaje abigarrado, acaso un carmeloide. Pero las inexactitudes enumeradas por Denegri con relacin a muchos otros aspectos, y contenidas en el cuento, son tantas, que no nos animamos a reproducirlas, limitndonos a sealar que, en efecto al menos, segn nos parece Valdelomar de gallstica lo ignoraba todo, de pico a patas, y que, probablemente, no tuvo cmo documentarse acerca del tema estando en Roma, donde escribi su famoso relato slo con la memoria del corazn, a muchas millas de Pisco o Lima, y en 1913, y con apenas los datos del nio de ocho o nueve aos que era cuando probablemente tuvo lugar la ancdota que lo inspir.9Importancia[editar]Jorge Basadre Grohmann, quien adems de historiador es tambin uno de los ms lcidos crticos literarios, considera que con El caballero Carmelo se inicia el cuento criollo en el Per, en forma de cuento costeo que retrata la vida del hogar provinciano. Aunque la ms correcta definicin sera neocriollo, para diferenciarlo del antiguo criollismo, festivo y a menudo satrico, que contrasta con la nota de melancola con que estn teidos los cuentos criollos valdelomarianos. Habra que agregar que estos cuentos son los que han marcado con mayor intensidad y duracin el proceso de laliteratura peruana. Con ellos prcticamente la narrativa peruana ingresa a la modernidad. Basadre seala tambin que con Valdelomar aparece por primera vez el nio como protagonista en la narrativa peruana.Con elCaballero Carmelopuede decirse que comienza en el Per el cuento criollo. LasTradicionesdePalmaalgo de eso haban tenido en cuanto pintaban algunas caractersticas de nuestro ambiente pero fugazmente u opacadas por el paramento de la evocacin. LasTradiciones, tenan, adems, predominante sabor limeo. Valdelomar supo perennizar en los cuentos que inician aquel libro la vida de la provincia y, al mismo tiempo, la vida del hogar. ComoLpez Albjarhizo el cuento de la sierra, l hizo el cuento costeo. Adems, es aqu donde recin aparece el nio como protagonista de la literatura peruana, que haba sido tan adulta en el gimoteo romntico como en las risas de los epigramticos. Y al mismo tiempo, nuestra literatura donde escasea el sentimiento del paisaje, se enriquece con estas visiones lmpidas del puerto y del mar. La sensibilidad de Valdelomar, un poco femenina en su dulzura y en su delicadeza, se prestaba para miniar estas pginas autobiografiadas donde el recuerdo detallaba lo pintoresco11Mensajes[editar]Desde un punto de vista ideolgico, la pelea del Carmelo y el Ajiseco puede interpretarse como un smbolo de la lucha entre dos prototipos de personalidades: elCarmelorepresenta la nobleza (es de buena estirpe), la caballerosidad (no usa malas tretas y se limita a atacar con sus patas armadas) y la autenticidad (no presume lo que no es), mientras que elAjisecorepresenta la villana (no pareca ser de alcurnia), la vileza (trata de imponerse a aletazos y picotazos) y la vanidad (era presuntuoso). El Carmelo triunfa y con l todas sus cualidades buenas y ejemplares, pero a costa de su propia vida. Pero su recuerdo perdura imborrablemente y sin duda all es donde radica su mayor victoria.Algunos intentan dilucidar en el cuento un mensaje contrario a las peleas de gallos; sin embargo no es esa la intencin del escritor. Lo que entristece al nio Abraham y a sus hermanos es que se haga pelear a un animal ya viejo, con el grave riesgo de que sucumba frente a un rival ms joven. De acuerdo al contexto cultural de entonces (y aun de ahora) se considera que el gallo de pelea nace y vive para pelear (lo mismo se dira de untoro de lidia), al menos hasta donde las fuerzas lo permitan; no hay ninguna objecin al respecto, incluso el autor idealiza la lucha gallstica y la compara con los duelos de caballeros medievales. Si se quiere entresacar mensajes del relato, estos seran: El amor filial y fraternal. La unidad familiar. El hermano mayor que retorna al hogar luego de recorrer el pas (en busca de trabajo) y trae regalos para cada uno de los miembros de su familia (padres y hermanos). El entorno hogareo armnico. La madre, abnegada y cariosa, que cumple devotamente sus tareas conyugales y vela por su numerosa familia. El padre que sale temprano a trabajar y que regresa al atardecer al hogar. El respeto a la autoridad paterna; a pesar de que la decisin del padre causa pesar a la madre y a los hijos, ninguno de ellos se rebela de manera desaprensiva contra tal decisin. El sentimiento de sincero respeto y admiracin hacia la raza nativa, los hijos del sol; y en general hacia todas las personas sencillas dedicadas a tareas como la pesca y la artesana. La sensibilidad por el sufrimiento de un animal; cuando el Carmelo es llevado a casa gravemente herido es sometido a todo tipo de atenciones; cuando muere, toda la familia queda apesadumbrada.Referencias[editar]1. Antonio Cornejo Polar, crtico peruano ampliamente reconocido y prolfico autor, dice textualmente:El caballero Carmelo es con toda seguridad uno de los cuentos ms perfectos de la literatura peruana.(Historia de la literatura del Per republicano. Incluida en Historia del Per, Tomo VIII. Per Republicano, pg. 114. Lima, Editorial Meja Baca, 1980.ISBN 84-499-1618-6de la obra completa, cuarta edicin). El mismo autor cita a Armando F. Zubizarreta, quien califica el relato comohazaa del cuento criollo(Perfil y entraa de El caballero Carmelo [El arte del cuento criollo]. Lima, Editorial Universo, 1968).Luis Alberto Snchez, considerado un especialista de la obra valdelomariana, tampoco escatima elogios hacia el cuento: magnfico relato, primera muestra de un neocriollismo fragante de recuerdos, embalsamado de ingenuidad y melancola(Valdelomar o la Belle poque, pg. 125. Lima, tercera edicin, 1987). Otro escritor y crtico peruano,Alonso Cueto, ha dicho refirindose a la serie de cuentos criollos de Valdelomar:En esta misma coleccin, dos relatos, El Caballero Carmelo y El Vuelo de los Cndores, son casi perfectos(Abraham Valdelomar. Un agitador espiritual. Homenaje a Valdelomar publicado en el suplementoEl DominicaldeEl Comercio, edicin del 11 de marzo del 2001). Y las citas podran continuar, interminablemente.2. Cojudo: Peruanismo. Equivale a tonto, bobo, necio. SegnMarco Aurelio Denegri(en La funcin de la palabra, programa televisivo), es el ms antiguo registro documentado de dicho peruanismo. Aunque no queda claro el verdadero sentido que le da Valdelomar; podra equivaler a cojonudo.3. Fragmento de una carta de Abraham Valdelomar dirigida a Enrique Bustamante y Ballivin, fechada enRoma, el8 de octubrede1913. Citada porLuis Alberto SnchezenValdelomar o la Belle poque, Mxico, Fondo de Cultura Econmica, 1969.4. abcCornejo Polar, Antonio, 1980, pg. 113-114.5. En el cuento no se mencionan las edades de los hermanos ni del mismo Abraham, pero teniendo en cuenta su carcter autobiogrfico y que la historia se desenvuelve con toda probabilidad hacia 1896-1897, se puede dilucidar fcilmente dicha informacin. Roberto tena 18 aos al momento de retornar al hogar; Anfiloquio era un adolescente de 14 a 15 aos al momento de la historia del Pelado; Rosa tena de 9 a 10 aos; y Jess, la menor de Abraham, unos 6 aos. Hctor era an muy pequeo. En 1895 naci Mara, la menor de los hermanos (la que fue madre del pintorFernando de Szyszlo), que no es mencionada en el cuento. Cfr. Miguel de Priego, 2000, pg. 25.6. Saavedra Chvez, Olga: Entre la tradicin y la modernidad, prlogo deTextos escogidos / Antologa / Abraham Valdelomar, por Alonso Rab do Carmo. Publicacin de EditoraEl ComercioS.A., tomo 7, serie Peruanos imprescindibles. Lima, 2005.ISBN 9972-205-87-87. abValdelomar, Abraham:El caballero Carmelo(libro de cuentos). Lima, Talleres Tipogrficos de la Penitenciara, 1918.8. Cueto, Alonso: Abraham Valdelomar. Un agitador espiritual. Artculo publicado en homenaje a Valdelomar en el suplementoEl DominicaldeEl Comercio, 11 de marzo del 2001.9. abMiguel de Priego, 2000, pg. 356-357.10. Fragmento de una carta de Valdelomar a su madre, fechada el 22 de agosto de 1913, y publicado en el artculo de Csar Mir:Una carta indita de Abraham Valdelomar, enEl Comercio, Lima, 18 de mayo de 1952. Reproducida en:Valdelomar. Obras II, pg. 640. Lima, 1988.

Los ojos de JudasLos ojos de Judas

AutorAbraham Valdelomar

Gnerocuento literario

IdiomaCastellano

EditorialLa Opinin Nacional (diario limeo)

CiudadLima

PasPer

Fecha de publicacin1 de octubrede1914.

Formatoperidico o diario(y reimpreso en colecciones)

Los ojos de Judases un cuento delescritorperuanoAbraham Valdelomar, que forma parte del grupo de los llamados cuentos criollos o neo-criollos ambientados enPisco, durante la niez del autor. Escrito hacia1912-1913, fue publicado por primera vez en el diariolimeoLa Opinin Nacional, el1 de octubrede1914. La crtica lo considera como uno de los cuentos ms logrados de la literatura peruana.ndice[ocultar] 1Historia de su publicacin 2Argumento 3Sinopsis 4Estructura 5Personajes 5.1Principales 5.2Secundarios 6Escenarios 7Ficcin y realidad 8Anlisis estilstico 9Anlisis temtico 10Mensaje 11Referencias 12Bibliografa bsica 13Vase tambin 14Enlaces externos

Historia de su publicacin[editar]

Abraham Valdelomar en Roma, 1914.Valdelomar ya tena escrito el cuento antes de partir aItaliaen1913, tal como se desprende de la informacin consignada en la correspondencia que sostuvo entonces con su madre, la Sra. Carolina Pinto de Valdelomar, y con su amigo, el poetaEnrique Bustamante y Ballivin.En una de las cartas que enva a su madre, dice textualmente lo siguiente:el primer libro que publicar pronto ser un libro con tres novelitas cortas en que todo pasa en Pisco, pero me he olvidado algunos detalles. Son tres novelitas,Los ojos de Judas,que escrib en Lima,El buque negro, en el que vers cosas que te son conocidas de Pisco, y tambinEl vuelo de los cndores.1En una carta que dirigi a su amigo, el poetaEnrique Bustamante y Ballivin, le dijo lo siguiente:"He conseguido que Ollendorff me edite un libro que por ahora termino; es un libro de cuentos de sabor peruano, entre los cuales estLos ojos de Judasque ya Ud. conoce; hay adems,El buque negro,El vuelo de los cndoresyEl ciego. stos formarn mi primer libro".2El proyectado libro de cuentos criollos con el ttulo tentativo de La aldea encantada y que deba incluirLos ojos de Judas, no pudo ser editado entonces. El cuento apareci, como ya dijimos, publicado en octubre de 1914 en el diario limeoLa Opinin Nacional. Luego fue incluido en el libro de cuentos de carcter miscelneo, editado por el mismo autor:El caballero Carmelo(Lima,1918).Argumento[editar]El narrador cuenta un episodio terrible que presenci durante su niez en Pisco, en una noche de Sbado de Gloria (semana santa): el rescate del cadver de una mujer ahogada en el mar, teniendo como fondo ttrico la quema de un mueco que representaba al apstol Judas en una plazoleta cercana al mar.Sinopsis[editar]

Pisco Playa, uno de los escenarios de los cuentos criollos de Valdelomar.El narrador empieza describiendo al puerto de Pisco como una mansa aldea, de gran belleza. Menciona tambin a sus padres: su pap trabajaba en la Aduana recibiendo a los barcos, y su madre se dedicaba al hogar; a veces su pap por su trabajo llegaba muy tarde a casa. En una ocasin despert de madrugada y escuch a sus padres que hablaban sobre una pareja que haba tenido problemas. Mencionaban a una seora Luisa, que por salvar a su hijo haba delatado a su esposo Fernando, buscado por la justicia como sospechoso del asesinato de un tal Kerr. Dicha seora perdi tanto a su esposo, que fue encarcelado, como a su hijo, que le fue arrebatado. Abraham se sinti asustado, rez una oracin y volvi a dormirse. Al da siguiente fue a dar un paseo a la playa; de pronto se sinti algo raro y se ech a tomar una siesta; en ese trance vio a una mujer vestida de blanco que se acercaba, pero no pudo distinguir ms porque se qued dormido. Al despertar, pens en la imagen de la mujer pero no vio nada, solo not unas huellas de pisadas en la arena. Pensativo y temeroso, decidi volver a casa y cuando meti la mano a su bolsillo hall una medalla de plata de la Virgen Pursima. Imagin que posiblemente la mujer misteriosa lo haba colocado all mientras dorma. Cavilando en ello volvi a casa, pero no coment a nadie lo sucedido. Al da siguiente, que era martes de Semana Santa, regres al mismo lugar de la playa y a la misma hora. De pronto vio la misma silueta de mujer nuevamente acercarse; sinti miedo y quiso retirarse, pero se contuvo. Era una seora blanca, vestida de blanco y de mirada apacible, a quien salud con mucha cortesa. Conversaron. La mujer le pregunt si le gustaba el mar, a lo que Abraham respondi afirmativamente, agregando que vena todas las tardes.Y te quedas dormido?inquiri la mujer, por lo que Abraham le pregunt inquieto si ella haba venido el da anterior. La mujer dijo que no, comentndole que cuando los nios eran buenos y se dorman a la orilla del mar, un ngel les regalaba una medalla. Abraham sonri incrdulo. Cogidos de la mano, y amigablemente, retornaron a la poblacin donde vieron que en una plazuela unos hombres preparaban una especie de torre de caas. La mujer pregunt a Abraham qu hacan aquellos hombres y l respondi que preparaban el castillo donde quemaran la efigie de Judas el sbado de gloria. La mujer le pregunt si saba por qu lo quemaban y Abraham respondi que por traicionar al Seor Jess, y ante la pregunta de que si no le daba pena, respondi que no. Finalmente la mujer le pregunt si sera capaz de perdonar a Judas, a lo que Abraham respondi muy convencido que nunca, aduciendo que Dios se molestara con l si lo haca. Luego se separaron del camino y Abraham retorn a casa. Era martes de Semana Santa, y el resto de la semana Abraham no volvi a la playa, pero cuando lleg el Sbado de gloria, fue a dar su paseo habitual de la tarde. Al pasar por la plazuela vio que ya haban colocado al mueco de Judas; le llam la atencin sus ojos enormes, blancos e iracundos con que lo haban representado. Ya en la playa se encontr de nuevo con la seora blanca; esta vez la vio muy plida. Hablaron largo rato. La mujer volvi a preguntarle si perdonara a Judas, a lo que Abraham respondi con su persistente negativa. Tambin le dijo que vendra esa noche a ver la quema de Judas y le pidi que recordara bien su rostro para que la reconociera. Luego le pregunt hacia dnde miraban los ojos de Judas. Un tanto extraado por tal pltica, Abraham le respondi que miraban hacia el mar. Fueron juntos hacia la plazuela y pasaron cerca del Judas. La seora le volvi a preguntar hacia donde miraban sus ojos.Al mar, bien lejos, respondi Abraham. All se despidieron y ella le dio un beso muy largo en la frente. Al volver a casa, ya de noche, Abraham encontr a su madre muy intranquila pues su pap se haba quedado en el trabajo despachando a un buque. Abraham le pregunt si iran a ver la quema de Judas, a lo que respondi la madre que lo haran solo si su pap volva pronto. Enseguida se pusieron a orarpor los caminantes, navegantes cautivos cristianos y encarcelados. De pronto oyeron un alboroto en la calle y una voz que gritaba avisando un naufragio. Salieron entonces corriendo hacia la playa, y en el trayecto se encontraron con el pap, quien dijo que seguramente haba encallado el buque que haba despachado haca una hora. Algunos pobladores tenan linternas y farolillos y auscultaban el mar; vieron que extraamente el buque pareca alejarse. Luego de un rato la muchedumbre se disolvi, y todos fueron a ver la quema de Judas. Abraham y su padre hicieron lo mismo, pero la madre prefiri volver a casa. Un hombre prendi la fogata y comenz la larga y aterradora escena. Abraham contempl algo asustado como los ojos de Judas se tornaban rojos y amenazadores. De pronto se oy una voz fuerte anunciando que se haba divisado a un ahogado. En efecto, se vio como las olas arrastraban un cuerpo; algunos se lanzaron al mar y lo trajeron a la orilla. Como la luz de los faroles no era suficiente para reconocer al cadver, lo llevaron ante los pies de Judas, que an arda. Todo el pueblo se congreg a observar. Abraham y su pap se abrieron paso entre la multitud y llegaron cerca del cuerpo. Era el de una mujer semidesnuda, con las ropas destrozadas y el rostro cubierto con sus cabellos desgreados. Uno de los curiosos le descubri la cara. Fue entonces cuando Abraham tuvo la ms horrible sensacin de toda su vida al reconocer a la mujer:Pap, pap, es la seora blanca! La seora blanca, pap!..., grit con terror. Le pareci entonces ver que Judas pona sus ojos fieros sobre l y dio un segundo grito ms fuerte y terrible:S, perdono a Judas, seora blanca, s lo perdono!...Su padre lo abraz fuertemente y se lo llev a casa, mientras el nio vea por ltima vez los terribles ojos de Judas que le miraban sangrientos y acusadores. Queda por sobreentendido que aquella seora blanca no era sino la misma seora Luisa, cuya tragedia familiar haba escuchado Abraham das antes de boca de sus padres. Indirectamente haba tratado de pedir perdn al pequeo Abraham, quien tardamente se lo conceda.Estructura[editar]El cuento est dividido en seis secciones o captulos cortos, numerado con dgitos romanos y de extensin muy variable. El ms largo es el ltimo captulo.A continuacin, un resumen por captulos del cuento:I.- El narrador, es decir, Abraham, empieza rememorando su infancia en el puerto de Pisco, cuyas imgenes pinta con trazos nostlgicos y de triste dulzura. Cuenta adems cmo se levantaba temprano, tomaba el desayuno y se iba a la escuela. Volva a casa al medioda y en el trayecto se distraa paseando por la orilla del mar, recogiendo conchas y otros objetos.II.- El narrador describe a sus padres. Su padre trabajaba en la aduana y volva a casa al atardecer pero a veces retornaba muy tarde, pues deba quedarse a recibir las embarcaciones que llegaban al puerto. Luego cuenta cmo su madre lo llevaba a l y a su hermanita a la orilla a ver la puesta del sol. A esa hora ocurra en el muelle lo que llamaban la procesin de las luces: un marinero llegaba conduciendo un carro lleno de faroles, los cuales iba colocando en los postes del muelle. Luego la familia retornaba al hogar donde les esperaba la cena servida por la criada.III.- Una noche el padre tuvo que volver tarde. Abraham recordaba que en aquella ocasin despert sobresaltado, como a las dos de la madrugada, y escuch a sus padres que hablaban sobre la tragedia familiar de una seora llamada Luisa. Abraham se sinti asustado y rez por aquellas personas; luego se volvi a dormir.IV.- Al da siguiente Abraham se fue a caminar por la orilla del mar, tal como era su costumbre habitual, pero esta vez se alej ms, yendo por el camino que iba hacia el sur, hacia la aldea de San Andrs de los pescadores. De pronto le sobrevino un sopor, por lo que se acost en la arena, y en eso vio la silueta de una mujer que se acercaba pero no vio ms pues se qued dormido.V.- Al despertar Abraham se levant y regres a casa. Al da siguiente retorn a la playa y vio de nuevo a la mujer, quien era muy blanca y hablaba con mucha dulzura y bondad. Conversaron largo rato. Cogidos de la mano, y amigablemente, retornaron a la poblacin donde vieron que unos hombres preparaban el castillo de la quema de Judas. La mujer pregunt a Abraham, si l perdonara a Judas. Abraham contest que nunca; luego la mujer lo bes en la frente y se despidi.VI.- Durante el resto de la semana Abraham no volvi a la playa. Pero al llegar al da Sbado de Gloria, sali a dar su habitual paseo por la tarde. Se encontr otra vez con la mujer, quien de nuevo le pregunt si perdonaba a Judas. Abraham reiter su negativa. Luego la mujer se despidi, no sin antes decirle que vendra a ver la quema de Judas y que recordara bien su rostro para que lo reconociera. Abraham volvi a casa, ya entrada la noche, y de pronto oy ruidos en la calle y unas voces que alertaban un naufragio. Todos fueron a la carrera a la playa. Efectivamente, un buque haba naufragado. Luego de un rato la muchedumbre se disolvi y todos fueron a la plaza para ver la quema de Judas. Abraham y su pap hicieron lo mismo. De pronto una voz alert desde la playa:Un ahogado! Un ahogado!A los pocos minutos el cadver de una mujer era sacado del mar y llevado a la plaza. A la luz de la hoguera Abraham reconoci a la seora blanca y dio un grito de terror, diciendo que si perdonaba a Judas. El padre carg a Abraham y se lo llev, mientras el nio vea por ltima vez los ojos de Judas, que parecan mirarle amenazadores.Personajes[editar]Principales[editar] El nio-narrador, es decir Abraham Valdelomar, quien relata un episodio aterrador que vivi en su lejana niez ambientada en Pisco. Iba por entonces a la escuela del puerto, situada cerca de su casa y sola pasearse por la orilla del mar, tanto en el trayecto de ida como en el de vuelta. La seora blanca, una mujer muy blanca, vestida de blanco, con la que Abraham se encuentra en la playa reiteradamente, y con quien conversa largo rato. Era una seora que hablaba con mucha dulzura y pareca atormentada por alguna tristeza oculta. Su identidad la desconoca Abraham pero luego su cadver aparece en el mar empujado por las olas, siendo visto por todo el pueblo. Aunque el relato no lo dice de manera explcita, se tratara de la seora Luisa, que poco antes haba protagonizado un escndalo en el puerto: por salvar a su hijo haba delatado a su esposo Fernando, buscado por la justicia como sospechoso de un asesinato; al final perdi tanto a su esposo, que fue encarcelado, como a su hijo, que le fue arrebatado.Secundarios[editar] El padre, que era empleado en la Aduana y quien, fsicamente tena un hermoso tipo moreno. Faz tranquila, brillante mirada, bigote prdigo. Se levantaba temprano a trabajar y volva a casa al atardecer, aunque a veces deba quedarse hasta muy tarde en el trabajo, para despachar o esperar a algn barco. La madre, ama de casa, a quien se la describe como dulcemente triste. Se preocupaba mucho por su familia y sola inquietarse cuando su esposo tardaba de volver del trabajo. Muy devota, sola orar ante una imagen de laVirgen Mara. La hermanita menor. No se menciona su nombre. Tampoco se mencionan a otros hermanos. La criada del hogar. La gente del pueblo. Se mencionan a los marineros, los trabajadores del muelle, los cargadores de la Estacin, y el resto de los vecinos del puerto, quienes asisten en masa a la quema de Judas.Escenarios[editar]La accin transcurre en el puerto dePisco. Los escenarios son: La casa de la familia de Abraham, frente almar. Elmuelleo embarcadero. Laplaya La plazoleta del Castillo, una de las tres plazas de Pisco, donde se realizaba la quema del mueco de Judas, durante el Sbado deSemana Santa.Ficcin y realidad[editar]El relato, como ya queda dicho, es autobiogrfico. Los escenarios, la casa de la familia en Pisco Playa, los paseos del nio Abraham por la orilla del mar en su trayecto hacia la escuela del puerto, la costumbre de Semana Santa de quemar a un mueco de Judas en la plaza, el trajn habitual en el muelle, el naufragio ocasional de algn buque, todo ello es verdico. Suponemos tambin que la historia trgica de la seora Luisa debe tener algn fondo de realidad, tal vez fue fruto de unos rumores que corrieron en el puerto a fines del siglo XIX, y que Abraham recordaba aunque ya distorsionados por el paso del tiempo. Pero es indudable que el relato tiene una fuerte dosis de fantasa, tal como el mismo autor lo confiesa a su madre en una de sus cartas que conservamos, fechada en 1913.Al comenzar el cuento el narrador dice:El puerto de Pisco aparece en mis recuerdos como una manssima aldea, cuya belleza serena y extraa acrecentaba el mar En el puerto yo lo amaba todo y todo lo recuerdo porque all todo era bello y memorable. Tena nueve aos, empezaba el camino sinuoso de la vida, y estas primeras visiones de las cosas, que no se borran nunca, marcaron de manera tan dulcemente dolorosa y fantstica el recuerdo de mis primeros aos que as formse el fondo de mi vida triste.3Aunque Valdelomar afirma explcitamente que en ese entonces tena 9 aos, en realidad deba estar por cumplir 11 aos, si tenemos en cuenta la costumbre del escritor de quitarse 2 aos de edad.4Podemos pues, fechar tentativamente el relato en laSemana Santade 1898 1899. Por entonces, eran cinco los hermanos que formaban el hogar de los Valdelomar: Rosa, Abraham, Jess, Hctor y Mara. Los mayores, Jos y Roberto, trabajaban fuera de Pisco, y Anfiloquio se haba trasladado a Lima en 1897, para cursar la secundaria en elColegio Guadalupe. A comienzos de 1899, la familia se traslad aChincha.5Anlisis estilstico[editar]En este relato se reconocen muchas de las caractersticas propias de los celebrados cuentos criollos del autor, de los que forma parte tambinEl caballero Carmelo. Entre esas caractersticas estn: El lenguaje claro y sencillo, ya alejado del artificio y cultismo extremo de la prosamodernistade las primeras obras del autor. Se enmarca dentro del llamado posmodernismo. Su marcado carcterautobiogrficoy que hace que el relato sea una evocacin muy vvida de sucesos ocurridos durante la niez del autor. Tiene un manifiesto carcter nostlgico y evocador de un pasado ya lejano y perdido: el amor hogareo, la saludable infancia aldeana en medio de personas sencillas y laboriosas, teniendo como fondo un escenario situado entre el valle y el mar, describiendo la belleza de un paisaje a veces sereno, a veces tormentoso.6Anlisis temtico[editar]Tcnica y artsticamente, por la expresin y por el sentido, ste es sin duda uno de los cuentos ms logrados y admirables de Valdelomar. El escritor mantiene el inters dosificando las informaciones, y mostrando de modo gradual el paso de la inocencia a la revelacin de un nio de 9 aos, en una atmsfera angustiosa. El nudo de la trama es la tragedia familiar de la seora blanca, quien ve un reflejo de su desdicha en la figura deJudasque simblicamente es ajusticiado en la plaza pblica en Semana Santa. La seora blanca ha querido salvar a su hijo sacrificando a su esposo, pero al final pierde a ambos. Del mismo modo Judas, ha cometido un acto de traicin pero solo a cambio de eso es que puede ocurrir laRedencinde la humanidad. El nio-narrador niega el perdn que, de modo indirecto, la mujer le estaba pidiendo cuando insistentemente le preguntaba si perdonara a Judas. Cuando, al final del cuento consiente en drselo, es ya tarde: la seora blanca, es ahora solo un cadver sacado de entre las olas, del mismo punto del mar hacia donde miraban los ojos iracundos del mueco de Judas que en eso momentos arda en la plaza7Mensaje[editar]El mensaje central que nos trasmite este cuento es muy sublime: frente a la creencia generalizada de que existen faltas o pecados que son imperdonables, nos ensea que no debemos ser recalcitrantes o reacios a perdonar, mas aun cuando muchas veces las apariencias pueden engaarnos y que un acto aparentemente malo en realidad puede haber sido hecho en aras de un bien mayor. Si bien es cierto que el concepto del perdn proviene delcristianismo, el autor va ms all e incluso nos da entender que hasta el mismo traidor por antonomasia, Judas, merece una rehabilitacin, pues su acto fue necesario para que se realizara la Redencin de la humanidad.Referencias[editar]1. Fragmento de una carta de Valdelomar dirigida a su madre, fechada el 22 de agosto de 1913, y publicado en el artculo deCsar Mir:Una carta indita de Abraham Valdelomar, enEl Comercio, Lima, 18 de mayo de 1952. Reproducida en:Valdelomar. Obras II, pg. 640. Lima, 1988.2. Fragmento de una carta de Valdelomar a Enrique Bustamante y Ballivin, fechada enViareggio, el29 de agostode1913. Citada porLuis Alberto Snchezen:Valdelomar o la Belle poque, pg. 105. 3 edicin. Lima, 1987.3. Valdelomar, Abraham:El caballero Carmelo(libro de cuentos). Lima, Talleres Tipogrficos de la Penitenciara, 1918.4. En efecto, Valdelomar sola decir que haba nacido en 1890, cuando en realidad naci en 1888, segn su partida de nacimiento conservada en los archivos de la parroquia de San Jernimo de Ica. Cfr.: Snchez, Luis A.:Valdelomar o la Belle poque, pg. 29. 3 edicin. Lima, 1987.5. Miguel de Priego, 2000, pg. 36-37.6. Miguel de Priego, 2000, pg. 356.7. Miguel de Priego, 2000, pg. 359.Bibliografa bsica[editar] Cornejo Polar, Antonio:Historia de la literatura del Per republicano. Incluida en Historia del Per, Tomo VIII. Per Republicano. Lima, Editorial Meja Baca, 1980. Miguel de Priego, Manuel:Valdelomar, el conde plebeyo. Biografa. Lima, Fondo editorial del Congreso del Per, ao 2000.ISBN 9972-755-27-2 Snchez, Luis Alberto:Valdelomar o la Belle poque. Tercera edicin, primera peruana. Lima, INPROPESA, 1987. Valdelomar / Obras I y II.Recopilacin de las obras de Valdelomar. Edicin y prlogo de Luis Alberto Snchez. Lima, Ediciones Edubanco, 1988. Silva-Santisteban, Ricardo:Valdelomar por l mismo (Cartas, entrevistas, testimonios y documentos biogrficos e iconogrficos).Edicin, prlogo, cronologa y notas del autor. Fondo Editorial del Congreso del Per, 2,000. En 2 Tomos.ISBN 9972-755-22-1ISBN 9972-755-23-1Vase tambin[editar] Literatura peruana La aldea encantada El caballero CarmeloEnlaces externos[editar] Wikisourcecontiene obras originales de o sobreLos ojos de Judas. Todos los cuentos de Valdelomar en un volumen

El vuelo de los cndoresEl vuelo de los cndores

AutorAbraham Valdelomar

Gnerocuento literario

EditorialLa Opinin Nacional (diario limeo)

CiudadLima

PasPer

Fecha de publicacin28 de juniode1914

Formatoperidico o diario(y reimpreso en colecciones)

El vuelo de los cndoreses un cuento delescritorperuanoAbraham Valdelomar, que forma parte del grupo de los llamados cuentos criollos. Escrito en1913, fue publicada por primera vez el28 de juniode1914en el diariolimeoLa Opinin Nacional. Es unabella historia de ternura de hogar, de solidaridad social, de indignacin y del despertar adolescente a nuevos sentimientos.1ndice[ocultar] 1Historia de su publicacin 2Sinopsis 3Estructura 4Personajes 4.1Principales 4.2Secundarios 5Escenarios 6Crtica y anlisis estilstico 7Mensaje 8Referencias 9Bibliografa 10Vase tambin 11Enlaces externos

Historia de su publicacin[editar]

Abraham Valdelomar en Roma, 1914.Valdelomar debi tener ya en mente el proyecto del cuento antes de partir a Italia como diplomtico en1913. En la ciudad deRomalo escribi, con la idea de que formara parte de un proyectado libro de cuentos de sabor peruano. Todo estos datos se desprende de la correspondencia que el escritor sostuvo entonces con su amigo, el poetaEnrique Bustamante y Ballivin, y con su madre, la Sra. Carolina Pinto de Valdelomar.En una de las cartas que enva a su madre, dice textualmente lo siguiente:Contstame a vuelta de correo, escribe, estas preguntas que son indispensables porque el primer libro que publicar pronto ser un libro con tres novelitas cortas en que todo pasa en Pisco, pero me he olvidado algunos detalles. Son tres novelitas,Los ojos de Judas, que escrib en Lima,El buque negro, en el que vers cosas que te son conocidas de Pisco, y tambinEl vuelo de los cndores. Naturalmente, hay mucho de fantasa, pero mucho de verdad, sobre todo en la descripcin de ciertas cosas. Quiero saber, por ejemplo, cmo se llaman esas hojas redondas que hay en las acequias sobre el agua, en Pisco, verdes, que sirven para curar las paperas, y esa yerbecita verde que crece en las sangraderas, que haba mucho en Ica; dime cmo se llama la iglesia que est tapiada en Pisco, como quien va a un pepinal, pasando la iglesia de la Compaa y ya en las afueras; si fue iglesia y convento o simplemente iglesia; y si acaso te acuerdas de algunas de esas coplas que cantaban los payasos en las esquinas cuando salan a convidar por las tardes en Pisco; tambin dime si recuerdan ustedes que un circo Nelson y Vidal que hubo en Pisco, no tena una chiquilla que trabajaba en el circo y que se cay una noche haciendo una prueba y casi se mata o se mat2Es decir, el escritor le peda a su madre datos de referencia destinados a ambientar su cuento y a fijar verosmilmente al personaje principal: "Miss Orqudea". Conviene aclarar que era uso comn suyo llamar novelas o novelitas a lo que propiamente no eran sino cuentos, y que su proyectado libro de novelitas, del que hablaba con entusiasmo a su madre, no pudo editarse entonces. El cuento apareci, como ya dijimos, publicado el28 de juniode1914en el diario limeoLa Opinin Nacional. Luego fue incluido en el libro de cuentos de carcter miscelneo, del mismo autor:El caballero Carmelo(Lima,1918).Sinopsis[editar]

Pisco Playa, uno de los escenarios de los cuentos criollos de Valdelomar.La historia se desenvuelve en el puerto dePisco, en la costa desrtica peruana, a fines del siglo XIX. El autor narra una experiencia inolvidable que tuvo siendo nio: su encuentro con el mundo delcirco(una de las pocas distracciones de los nios en ese entonces), y su amor platnico por una hermosa nia que actuaba de trapecista en dicho circo. Aunque hay que sealar que su relato no es estrictamente autobiogrfico, sino que est recreado e idealizado, usando las licencias permitidas a los creadores literarios. El mismo escritor lo explica en la ya citada carta que dirige a su madre:Naturalmente, hay mucho de fantasa, pero mucho de verdad, sobre todo en la descripcin de ciertas cosas.Veamos el argumento. El nio Abraham, entonces de 9 aos de edad, se entusiasm sobremanera con la llegada del circo a su pueblo. A la salida de la escuela se fue al muelle a contemplar el desembarco de los artistas. Entre ellos vio a una nia rubia que le llam mucho la atencin. Tanta fue su impresin que el circo devino para l en una idea fija. Entre sueos, vio a todos los artistas desfilando delante suya, entre ellos a la nia rubia, que la miraba sonriente. De vuelta a la vida real, recibi una sorpresiva y grata noticia: su padre haba comprado entradas para que toda la familia fuera al circo a gozar con el espectculo. Leyendo el programa, Abraham se enter que uno de los nmeros ms emocionantes y peligrosos, denominado el Vuelo de los Cndores sera realizado por una nia trapecista, apodada Miss Orqudea, que no poda ser otra que la misma criatura bella que viera en el muelle. Muy emocionado Abraham asisti al espectculo. Ante sus ojos desfilaron el barrista que daba el salto mortal, el caballo que responda los problemas de aritmtica con movimientos de cabeza, el oso bailarn, el mono que haca formidables piruetas y los graciosos payasos. Sin embargo, el nmero central era "El Vuelo de los Cndores" cuya magnificencia se plasmaba en el ritmo gimnstico del movimiento y el suspenso generado en los asistentes. Se trataba de que Miss Orqudea cambiase de trapecio desde una altura muy elevada. La osada de la prueba fue tan impactante que de lejos fue el acto ms aplaudido. El clamor del pblico hizo que el dueo del circo ordenara la repeticin del acto, pese a su peligrosidad. Pero esta vez la nia se solt antes de tiempo y cay, salvndole de una muerte segura la red protectora, aunque result muy herida. Abraham qued muy apesadumbrado por este terrible accidente. El circo continu sus funciones aunque ya no dieron ms la acrobacia. Luego, en una de sus paseos habituales cerca al muelle, Abraham vio a Miss Orqudea postrada en un silln, en la terraza de una casa situada frente a la playa. La vio muy plida y delgada. Ocho das seguidos fue a contemplarla desde cierta distancia. La nia solo le sonrea. Al noveno da, Abraham ya no la encontr y entonces record que el circo estaba a punto de partir. Corri entonces hacia el muelle, y lleg justo antes de que los artistas empezaran a embarcarse. Entre ellos divis a la tierna artista, que tosa repetidamente; avanzando entre la muchedumbre logr alcanzarla. La nia lo mir e hizo un esfuerzo para brindarle una ltima sonrisa, dicindole "adis", que l correspondi de igual modo. Luego ya en el bote pequeo que la conduca al vapor, la nia sac su pauelo y de lejos lo flame como ltimo gesto de despedida. Abraham la contempl, moviendo la mano, hasta que la vio perderse definitivamente en el horizonte. El adis de Miss Orqudea fue triste pero, no obstante, la dulzura de su espritu qued eternamente grabada en la memoria de Abraham.Estructura[editar]Este cuento est dividido en siete secciones o captulos cortos.I.- Luego de salir de la escuela, a las 5 de la tarde, Abraham se detiene en el muelle, para ver el desembarco del circo. Observa a varios de los recin llegados, entre quienes la muchedumbre identifica al barrista, al domador y al payaso; ve tambin a una nia rubia y sonriente, que iba llevada de la mano de un hombre viejo y adusto. Esta distraccin le cost a Abraham llegar tarde a su casa, ante la preocupacin de su madre y sus hermanos. Lo castigan: sin dejarlo cenar lo mandan a su habitacin. Su pequea hermanita trata de consolarlo regalndole sus pequeos bienes: unas galletas, un trompo y unos centavos. A ella le cuenta sobre la llegada del circo y sus integrantes. Luego la madre sube a verle y le rie blandamente, para finalmente perdonarle.II.- Aquella noche,Abraham suea con el circo. Ve a todos los artistas, a los volantineros, incluyendo a la nia rubia que le sonre. Llega el da sbado y durante el almuerzo el padre da una grata sorpresa a sus hijos: saca de su bolsillo un sobre que contena entradas del circo, para toda la familia. Leyendo el programa Abraham se entera que uno de los actos ms temerarios y emocionantes, denominado el Vuelo de los cndores, ser realizado por una nia trapecista, que no podra ser otra sino la misma que haba visto en el muelle: Miss Orqudea.III.- Otro da se oye ruidos en la calle, y Abraham y sus hermanos salen a ver lo que ocurra. Era el desfile de los artistas y volantineros del circo. Precedidos por una orquesta de msicos, iban montados en sendos caballos la hermossima miss Blutner, el musculoso barrista Mister Kendall y la nia trapecista Miss Orqudea, una bellsima criatura, que sonrea tristemente. Ms atrs iba el mono, montado en un pequeo asno, y el payaso Confitito, que deleita a la muchachada con sus coplas burlescas. El cortejo se pierde al finalizar la calle, tras una inmensa polvareda.IV.- Llega el da tan esperado. Toda la familia asiste al circo. Abraham contempla emocionado el espectculo. Ante sus ojos desfilan el barrista que daba el salto mortal, el caballo que responda los problemas de aritmtica con movimientos de cabeza, el oso bailarn, el mono que haca formidables piruetas y los graciosos payasos. Luego se anuncia el nmero ms esperado: el Vuelo de los Cndores.V.- El acto de acrobacia llamado el Vuelo de los Cndores lo realiza Miss Orqudea una chica sencilla. La prueba consista en que la nia tomara el trapecio y, colgada de l, atravesara el espacio donde otro trapecio lo esperaba, debiendo en la gran altura cambiar de trapecio. Ante un pblico silencioso e inmvil, la nia logra con xito la riesgosa prueba. Se escuchan aplausos delirantes del pblico sorpresivamente del acto, lo que empuja al dueo del circo a ordenar la repeticin del acto. Pero en esta segunda oportunidad "Miss Orqudea" se suelta del trapecio, cae en la red y rebota repetidamente, golpendose de mala manera. Abraham ve con espanto cmo el pauelo de la delicada nia se mancha de sangre, al momento en que la auxilian.VI.- Pasan algunos das. Abraham recuerda an con tristeza a la pobre nia humilde. El padre de Abraham ya no quera que sus hijos fueran al circo, a pesar que ya no daba el Vuelo de los cndores. El sbado siguiente vuelve a pasar por la calle el cortejo del circo, pero "Miss Orqudea" ya no figura en l. Solo iba su caballo, con un listn negro.VII.- Algunos das despus, cuando iba a la escuela por el camino de la playa, Abraham descubre de lejos a "Miss Orqudea" postrada en un silln en la terraza de una casa frente al mar. La ve muy plida y delgada. Ocho das seguidos repite el ritual de contemplarla a la distancia. No cruzan palabras y solo se sonren mutuamente. Al noveno da, Abraham ya no la encuentra y entonces recuerda que el circo estaba a punto de partir. Corre entonces hacia el muelle, y justo llega cuando "Miss Orqudea" se dispona a subir al botecillo que la llevara al vapor en que se marcha el circo. Se cruzan las miradas. Musitan el adis. A la distancia el pauelo que "Mis Orqudea" agita despidindose semeja un ala rota, una paloma agonizante .Personajes[editar]Principales[editar] El narrador, es decir Abraham Valdelomar, quien relata un episodio que vivi en su lejana niez ambientada en Pisco, cuando tena 9 aos de edad. Miss Orqudea,una nia blanca, muy blanca, sonriente, de rubios cabellos, lindos y morenos ojos, que era trapecista de un circo que recorra itinerante las ciudades de la costa del Pacfico. Iba siempre acompaada de un seor de edad avanzada y de expresin muy adusta, que pareca ser su apoderado.Secundarios[editar] La familia del narrador: Los padres: El padre es el tpico jefe de hogar de clase media baja, que trabaja todo el da, riguroso e inflexible con sus hijos, aunque a la vez afectuoso con ellos. La madre, ama de casa, es dulce y bondadosa y tiene a su cargo la abrumadora tarea de velar por una numerosa familia. Los hermanos: Anfiloquio, el hermano mayor, adolescente, quien vigila a sus hermanos menores; La hermanita de Abraham, la hermana menor de Abraham, cuyo nombre no es mencionado,es la preferida de su hermano. Los artistas del circo: Mister Kendall, el barrista, apodado el hombre de goma. Gallardo y musculoso, con sus negros, espesos y retorcidos bigotes. Mister Glandys, el domador, con su oso bailarn. Miss Blutner, bellsima artista que iba con su caballo blanco, el caballo matemtico, que responda preguntas de aritmtica con movimientos de cabeza. El payaso Confitito, rey de lospayasosdel Pacfico, recitador decoplasburlescas, y su mono.Tambin habra que mencionar a la gente de Pisco, los granujas o chiquillos vagabundos, los ayudantes y trabajadores del circo, etc.Escenarios[editar]La accin transcurre en el puerto dePisco. Los escenarios son: La casa de la familia de Abraham, frente al mar. El muelle o embarcadero. La playa El circo, cuya enorme carpa se levanta en un corraln, situado entre unas callejuelas estrechas de la poblacin.Crtica y anlisis estilstico[editar]Evidentemente se trata de una historia muy sencilla y hasta podra decirse dulzona, pero con su habitual maestra Valdelomar construye alrededor de ella un mundo rico de sutiles emociones, donde podemos reconocernos, de algn modo, los seres humanos de cualquier latitud.1En este relato se reconocen muchas de las caractersticas propias de los celebrados cuentos criollos del autor, de los que forma parte tambinEl caballero Carmelo. Entre esas caractersticas estn: Su lenguaje claro y sencillo, ya alejado del artificio y cultismo extremo de la prosa modernista de las primeras obras del autor,3aunque conserva todava descripciones llenas de sensorialidad, color y relieve:Llegamos por fin al pueblo y poco despus al circo. Estaba ste en una estrecha calle. Un grupo de gente se estacionaba en la puerta que iluminaban dos grandes aparatos de bencina de cinco luces. A la entrada, en la acera, haba mesitas, con pequeos toldos, donde en floreados vasos con las armas de la patria estaba la espumosa blanca chicha de man, la amarilla de garbanzos y la dulce de "bonito", las butifarras que eran panes en cuya boca abierta el aj y la lechuga ocultaban la carne; los platos con cebollas picadas en vinagre, la fuente de "escabeche" con sus yacentes pescados, la "causa", sobre cuya blanda masa reposaba graciosamente el rojo de los camarones, el morado de las aceitunas, los pedazos de queso, los repollos verdes y el "pisco" oloroso, alabado por las vendedoras...4 Su marcado carcter autobiogrfico, que ya referimos, y que hace que el relato sea una evocacin vivencial de sucesos ocurridos durante la niez del autor. Pero sin duda, la nota ms relevante es su carcter de relato nostlgico y evocador de un pasado ya lejano y perdido: el amor hogareo, la saludable infancia aldeana en medio de personas sencillas y laboriosas, y teniendo como fondo un paisaje difuminado y melanclico, entre el valle y el mar.3Hay que sealar que esta nostalgia ha sido uno de los lados poco entendidos de la personalidad de Valdelomar, que aparentemente contrastaba con sus poses dedandyy su arrogancia frente a la elite intelectual de Lima.Mensaje[editar]Algunos ven en el relato una denuncia contra el abuso de los mayores hacia los menores de edad, ejemplarizado en el caso de la nia trapecista obligada por sus promotores a repetir una peligrosa acrobacia, y cmo un alma pura e inocente como la del nio Abraham descubre entonces en todo su magnitud la maldad humana:por primera vez comprend entonces que haba hombres muy malos, dice candorosamente. Es como un despertar brutal a la realidad prosaica del mundo. Asimismo, el relato nos muestra el despertar del amor de un nio (ya casi en la pubertad) hacia una nia, aunque todava de forma platnica. Sin duda, ese contraste entre la inocencia infantil y la maldad de algunos hombres es lo que hace tan cautivante el relato.El buque negroEl buque negro

AutorAbraham Valdelomar

Gnerocuento literario

EditorialLa Prensa(diario limeo)

CiudadLima

PasPer

Fecha de publicacin1917

FormatoAlmanaque(y reimpreso en colecciones)

El buque negroes uncuentodelescritorperuanoAbraham Valdelomar, que forma parte del grupo de los llamados cuentos criollos o neo-criollos ambientados enPisco, durante la niez del autor. Escrito hacia1913, fue publicado por primera vez en elAlmanaque de La Prensa, en1917.ndice[ocultar] 1Historia de su publicacin 2Sinopsis 3Estructura 4Escenarios 5Personajes 6Anlisis 7Referencias 8Bibliografa bsica 9Vase tambin 10Enlaces externos

Historia de su publicacin[editar]

Abraham Valdelomar en Roma, 1914.Valdelomar ya tena escrito el cuento durante su estancia enItalia(1913-14), tal como se desprende de la informacin consignada en la correspondencia que sostuvo entonces con su madre, la Sra. Carolina Pinto de Valdelomar, y con su amigo, el poetaEnrique Bustamante y Ballivin.En una de las cartas que enva a su madre, donde le informaba la inminente publicacin de su primer libro, dice textualmente lo siguiente:el primer libro que publicar pronto ser un libro con tres novelitas cortas en que todo pasa en Pisco, pero me he olvidado algunos detalles. Son tres novelitas,Los ojos de Judas, que escrib en Lima,El buque negro,en el que vers cosas que te son conocidas de Pisco, y tambinEl vuelo de los cndores.1En una carta que dirigi a su amigo, el poetaEnrique Bustamante y Ballivin, le dijo lo siguiente:"He conseguido que Ollendorff me edite un libro que por ahora termino; es un libro de cuentos2de sabor peruano, entre los cuales estLos ojos de Judasque ya Ud. conoce; hay adems,El buque negro,El vuelo de los cndoresyEl ciego. stos formarn mi primer libro".3El proyectado libro de cuentos criollos, con el ttulo tentativo de La aldea encantada y que deba incluirEl buque negro, no pudo ser editado entonces. El cuento apareci publicado, como ya dijimos, en elAlmanaque de La Prensa, es decir una publicacin anual de dicho diario limeo. Llevaba al pie una fecha: 17 de agosto de 1913.Desconocemos las razones por las que el cuento no fue incluido en el libro recopilatorioEl caballero Carmelo(1918); tal vez se debi a razones de espacio (para dar cabida a otras series) o porque el autor no la consider acabada o suficientemente digna de figurar en su antologa.4Sinopsis[editar]

Pisco Playa, uno de los escenarios de los cuentos criollos de Valdelomar.En el puerto de Pisco, el nio Abraham viva con su familia en una modesta pero apacible casa adornada por el follaje que ofreca un placentero frescor. La comida, el rezo y los relatos de la faena diaria que contaba su padre unan a la familia. Pero dicha felicidad se enturbi por la vida triste que llevaba Isabel, una vecina y amiga, la cual haba sido abandonada haca tiempo por su esposo, de nombre Chale, un hombre que hasta entonces haba sido muy bueno y carioso. Unos testigos dijeron que vieron a Chale ir apresuradamente almuellejunto con dos hombres desconocidos y desde esa ocasin no se supo ms de l. De eso ya haban pasado 18 aos e Isabel estaba segura que a su esposo lo haban embarcado a la fuerza en un misterioso buque negro que divis aquel mismo da de su desaparicin; pese al tiempo transcurrido tena la esperanza de su retorno.Un da, los padres de Abraham quisieron distraer a Isabel y la invitaron a dar un paseo por el campo. Todo el grupo familiar, incluidos los criados, partieron a hacer la excursin. Isabel iba plida y con un vestido negro. Al cruzar laPlaza de armas, Abraham not que todos estaban tristes. Ya en las afueras del pueblo, pasaron cerca de unaiglesiaabandonada, y la criada una vieja negra dijo que all penaban y que al amanecer se vea el espectro de un cura haciendomisa, acompaado de su sacristn. Abraham no resisti la curiosidad y se acerc a la iglesia. Por una rendija, vio los nichos de los altares sin santos, lanaveterrosa abandonada, elaltar mayorvaco; unmurcilagocruz de un rincn a otro y unosbhosvolaron gritando.El grupo lleg al fin al lugar elegido como destino, que era un pepinal o campo depepinos. Subieron todos a una pequea altura de donde se vea cerca la pequea choza del chacarero o encargado del terreno de cultivo. El labriego les salud de lejos a toda voz. Ya se disponan a bajar todos, cuando Isabel, quien se haba quedado contemplando el mar, grit:"El buque negro...!"Efectivamente, un buque negro de tres palos vease en las proximidades del puerto. Isabel baj muy alterada, pero los padres de Abraham la cogieron y casi la cargaron en brazos. Como se asomaba unaparaca(viento fuerte), decidieron regresar todos al puerto por el camino de la playa.La paraca empez a arreciar, se oscureci el cielo, los perros ladraron y una palidez domin a todo el grupo. Vieron en la plaza a la gente apresurada en busca de refugio. Isabel iba diciendo:"Ms de prisa, all est el buque negro; ms de prisa por Dios! ...". De pronto, dio un grito espantoso:"Se va! El buque negro se va! Se va!". Efectivamente, el buque se iba. La poblacin qued cubierta de un polvo amarillento, que era elguanopulverizado de las aves marinas que el viento arrastraba desde las islas adyacentes. Cuando la familia regres a casa recostaron a Isabel, ya extenuada, y cay una noche negra y lgubre. As culmin aquel da tan extrao.Estructura[editar]El cuento est dividido en cuatro secciones o captulos cortos, numerados con dgitos romanos.I.- Empieza el relato con la descripcin de la casa y la familia del narrador, que viven en una casa situada en el puerto de Pisco; se menciona tambin la desventura de la seora Isabel, que esperaba la vuelta de su marido desaparecido, en un buque negro en el que supuestamente haba partido haca 18 aos atrs. Para mitigar un tanto la pesadumbre de Isabel, los padres de Abraham anuncian que la invitaran a un paseo campestre.II.- Toda la familia de Abraham, junto con los criados, parten de maana rumbo al campo, llevando consigo a Isabel. Cruzan la plaza de armas y salen del pueblo.III.- Ya en las afueras del poblado, se encuentran con una iglesia abandonada. Abraham mira su interior y la ve desolada. Finalmente llegan a su destino, un campo de pepinos. Suben todos a una pequea loma y ven a un labriego que los saluda. De pronto, Isabel grita, sealando el mar:el buque negro!. En efecto, desde esa altura se divisa un buque en la baha. Como se avecinaba unaparacao viento fuerte, los padres de Abraham deciden volver a casa, llevando cogida de los brazos a Isabel.IV.- En el trayecto por el camino de la playa, Isabel insiste en apurar al resto. Crea que el buque negro se acercaba al muelle; pero el buque ya se retiraba. La paraca arrecia y cubre al poblado de guano de islas pulverizado. Finalmente la familia llega a casa y recuestan a Isabel en la cama. Aquella noche fue muy negra y lgubre.Escenarios[editar]La accin transcurre en el puerto dePiscoy en la campia aledaa.Personajes[editar] Elnarradory testigo de la historia, es decir el mismoAbraham Valdelomar, quien recuerda un episodio extrao de su infancia. Isabel, una vecina y amiga de la familia de Abraham, quien se haba casado con Chale, un hombre bueno, carioso y abnegado, el cual de pronto desapareci. Ella, pese al tiempo transcurrido, esperaba el retorno de su esposo en un misterioso buque negro donde crea que lo haban subido a la fuerza. La familia del narrador: Los padres(cuyos nombres no se mencionan). Son los tpicos jefes de una familia numerosa de clase media baja. Los hermanos: Roberto, el mayor. Anfiloquio, hermano mayor del narrador. Rosa, hermana mayor del narrador. Jess, hermana menor del narrador. Una vieja negra, que era la criada de la familia de Abraham. El chacarero o labriego, quien cultivaba un pepinal, en una parcela situada a las afueras de la poblacin.Anlisis[editar]En este relato se reconocen muchas de las caractersticas propias de los celebrados cuentos criollos del autor, de los que forma parte tambinEl caballero Carmelo. Entre esas caractersticas estn: El lenguaje claro y sencillo, ya alejado del artificio y cultismo extremo de la prosamodernista5de las primeras obras del autor. Se enmarca dentro del llamado posmodernismo. Su marcado carcterautobiogrficoy que hace que el relato sea una evocacin muy vvida de sucesos ocurridos durante la niez del autor. ste menciona a los miembros de su familia y a los criados de su casa; sus hermanos estn claramente identificados por sus nombres (Roberto, Anfiloquio, Rosa y Jess). En cuanto al tema central, al margen de la cuota de fantasa inevitable en un literato, es probable que el autor haya tomado como referencia dolorosos y trgicos sucesos propio de la agitada vida de puertos como Pisco, que a fines delsiglo XIXy comienzos delXXtuvo muchsimo movimiento. Aparte de la familia del autor, es muy probable que el resto de los personajes pertenezcan tambin a la vida real, aunque tal vez distorsionados por el paso del tiempo o por algn aadido fantasioso.6 Tiene un marcado carcter de relato nostlgico y evocador de un pasado ya lejano y perdido: el amor hogareo, la saludable infancia aldeana en medio de personas sencillas y laboriosas, teniendo como fondo un escenario situado entre el valle y el mar, describiendo la belleza de un paisaje a veces sereno, a veces tormentoso.7 La atmsfera angustiosa del relato nos recuerda a otro cuento del autor,Los ojos de Judas,8que se desenvuelve tambin en torno a una tragedia propia de los puertos como Pisco: un buque que se hunde cerca al muelle y el rescate del cuerpo de una seora blanca, una de las protagonistas del relato.Referencias[editar]1. Fragmento de una carta de Valdelomar a su madre, fechada el 22 de agosto de 1913, y publicado en el artculo deCsar Mir:Una carta indita de Abraham Valdelomar, enEl Comercio, Lima, 18 de mayo de 1952. Reproducida en:Valdelomar. Obras II, pg. 640. Lima, 1988.2. Valdelomar llamaba novelas lo que propiamente no eran sino cuentos, divididos en captulos o secciones.3. Fragmento de una carta de Valdelomar a Enrique Bustamante y Ballivin, fechada enViareggio, el29 de agostode1913. Citada porLuis Alberto Snchezen:Valdelomar o la Belle poque, pg. 105. 3 edicin. Lima, 1987.4. Miguel de Priego, 2000, pg. 355.5. Cornejo Polar, Antonio, 1980, pg. 113-114.6. Miguel de Priego, 2000, pg. 359-360.7. Miguel de Priego, 2000, pg. 356.8. Miguel de Priego, 2000, pg. 359.Yerba santa (cuento)Yerba santa

AutorAbraham Valdelomar

Gnerocuentoonovela corta

EditorialMundo limeo (revista)

CiudadLima

PasPer

Fecha de publicacin1917(en dos entregas).

FormatoRevista(y reimpreso en colecciones)

Yerba santaoYerbasanta, es una narracin delescritorperuanoAbraham Valdelomar, que se encuentra entre el lmite impreciso delcuentoy lanovela. Se lo define indistintamente como cuento largo o novela corta. Escrita hacia1904-1906, fue publicada por primera vez enLima, en la revistaMundo limeo, en1917. Pertenece al grupo de los cuentos criollos, es decir aquellos relatos cortos de Valdelomar ambientados durante su niez transcurrida enPiscoy parte enIca.ndice[ocultar] 1Redaccin y publicacin 2Contexto 3Argumento 4Estructura 5Personajes 6Escenarios 7Crtica y comentarios 8Referencias 9Bibliografa bsica 10Vase tambin 11Enlaces externos

Redaccin y publicacin[editar]La dedicatoria de la novela, llena de evocaciones y colorido, dice textualmente:Novela pastoril, escrita a los diez y seis aos, en mi triste y dolorosa niez, inquieta y pensativa, que exhumo en homenaje a mi hermano Jos.1Segn este testimonio, Valdelomar lo habra escrito hacia1904, es decir, al concluir su secundaria y estando para ingresar a la Universidad. Sin embargo, teniendo en cuenta que el escritor sola disminuirse la edad en dos aos, es ms probable que lo escribiera a los 18 aos, en1906.2Lo cierto es que no lo public sino aos despus, a travs de las pginas de la revistaMundo limeo, en dos entregas:30 de agostoy30 de septiembrede1917. Luego lo incluy en su libro de cuentosEl caballero Carmelo(Lima,1918).Contexto[editar]

Abraham Valdelomar en su casa de Barranco, 1916.Es posible que esta novela corta haya sido no slo retocada, sino, incluso, totalmente reescrita a tono con los progresos de Valdelomar en el oficio y con las nuevas experiencias suyas durante su estada enIcadurante laSemana Santade1916. Sin embargo, en el texto permaneci la historia central: el suicidio del adolescente Manuel, cuyo modelo real parece haber sido un familiar lejano del autor: Jos Manuel Cornejo (a quien llamaban Jos Cuneca). Con respecto al lugar y al tiempo del suceso relatado, puede afirmarse que son la ciudad y la playa de Pisco, la ciudad y el valle de Ica, durante la Semana Santa de un ao no posterior al de1896(en que muri Jos de la Rosa Valdelomar Quintana, to del autor, directamente aludido en la novela). El propio Abraham, autobiogrficamente comprometido, no tena entonces ms de ocho aos de edad.2Argumento[editar]Valdelomar relata un episodio triste que vivi en su niez. El principal protagonista de su narracin es Manuel, un muchacho que viva en su casa, en el puerto dePisco. Los hermanos Valdelomar lo vean como un hermano mayor y lo estimaban como tal. Era valiente, desprendido, afectuoso, leal y franco. Su pelo era ensortijado, sus ojos morenos, sus labios carnosos, sus cejas pobladsimas y siempre le dibujaba el rostro de una sonrisa de fresca melancola, jovial y exenta de amargura. Le agradaba el mar, el campo y los cuentos de las abuelas. Haca los juguetes para los menores, como gallos de papel, barcos de madera y hondas de camo. Cuando iban todos a pasear y cazar, l diriga el grupo. Mas, de pronto, una tristeza oculta lo envolvi. En el desembarcadero cant unyaravo cancin triste que evocaba un amor que nunca volvi. Tan mal se puso el joven que lo mandaron donde su madre, la seora Eufemia, quien radicaba enIca.

Foto de la procesin delSeor de Luren, Ica.EnSemana Santala familia Valdelomar viaj aIca, alojndose en la casa de la abuelita. All todo era bueno: las frutas, las comidas y las plantas. En Jueves Santo desfilaban los hacendados con sus ofrendas hacia la Iglesia delSeor de Luren. Llegaban con caballos de paso, en ambiente multitudinario, lleno del ruido caracterstico de fieles y vendedores. Durante la ceremonia los nios no podan cantar, ni jugar, ni hablar fuerte porque era el da de la muerte del Seor. La celebracin era imponente. La multitud segua vida la procesin delSeor de Lurenen medio del sahumerio, msica y el aire contrito contagioso.Terminada la festividad, la familia se prepar para retornar aPisco, pero antes fueron todos a la hacienda San Miguel, propiedad de los tos Jos y Joaquina, que antao haba pertenecido a los abuelos de Abraham. Les acompa en la excursin el joven Manuel. En la hacienda haba una vieja casona con un galpn donde antao eran recluidos los esclavos negros. Pasaron luego a visitar otra hacienda aledaa, perteneciente a una familia amiga. La tierra era fresca y fecunda, siempre hmeda y con rboles frutales muy altos. Ya de noche y a pedido de los mayores, Manuel cogi la vihuela y cant un yarav. Al terminar pidi permiso para retirarse, y montando su caballo, se perdi raudo por el camino. Un bho pas por el comedor, como mal presagio.Al da siguiente la familia volvi a Ica y all se enteraron de la desgracia: Manuel se haba suicidado. A los nios no se les permiti conocer los detalles del suceso. Durante el sepelio, un cortejo conformado mayormente por gente joven despidi para siempre al amado Manuel. La familia Valdelomar retorn a Pisco en medio de una tristeza que perdurara por mucho tiempo.Estructura[editar]La novela cuenta con una dedicatoria y un prlogo, y se divide en nueve secciones o captulos, de extensin muy variable.I.-Este captulo inicial es corto y muy emotivo. Una de las hermanitas de Abraham pregunta a Manuel por qu no estaba junto con su padre. Manuel inclina la cabeza y empieza a sollozar. Interviene la madre y le pide a sus hijos que no le molesten, pues era un nio muy desgraciado.II.- Se explica cmo se hizo querer Manuel por los chicos de la familia, a quienes siempre ayudaba en sus juegos y quehaceres.III.-El narrador hace una descripcin de Manuel.IV.-Un da Manuel llega a casa muy triste. Nadie descubre la razn. De noche se pone a cantar unyaravque mencionaba a un amor perdido.V.-Manuel se enferma y lo envan a la casa de su mam en Ica.VI.- En Semana Santa la familia de Abraham (la mam e hijos) viaja a Ica, para asistir a la procesin del Seor de Luren.VII.- Se describe la Iglesia del Seor de Luren, la llegada de los devotos y fieles, la procesin.VIII.- Terminada la festividad, la familia se alista para volver a Pisco, pero antes visitan la hacienda de los tos y la de otro pariente, situadas ambas en el valle de Ica. Manuel los acompaa, pero ya de noche pide permiso para volver a la ciudad.IX.- Al da siguiente la familia regresa a Ica y se enteran de la tragedia: Manuel se haba suicidado. Lo entierran en el cementerio y retornan a Pisco, en medio de una profunda tristeza que perdurara por mucho tiempo.Personajes[editar] El narrador, es decir Abraham, que cuenta una experiencia muy triste que ocurri cuando era muy nio, de entre 7 y 8 aos de edad Manuel, un muchacho que se haba criado con la familia de Abraham desde muy chico. Su madre, Eufemia, viva en Ica. Los chicos de la familia lo vean como a un hermano mayor. Su pelo era ensortijado, sus ojos morenos, sus labios carnosos, sus cejas pobladsimas y siempre le dibujaba el rostro de una sonrisa de fresca melancola, jovial y exenta de amargura. Valiente, desprendido, afectuoso, leal y franco. De pronto se vio imbuido de una tristeza oculta, posiblemente un amor tormentoso, que lo condujo al suicidio. La familia de Abraham.- La numerosa familia del narrador se compona de: Los padres.- Tpicos jefes de familia de clase media baja. Viven en el puerto de Pisco. Los hermanos.- De estos solo se menciona con nombre propio a la pequea Jess, que por entonces tendra entre 5 y 6 aos. La criada de la familia de Abraham. La abuelita, en cuya casa situada en Ica se aloja la familia de Abraham. El to Jos de la Rosa, poseedor de la Hacienda San Miguel, en el frtil valle de Ica, un viejo bonachn, gastador y alegre, casado con Joaquina, de los Fernndez Prada, viejita dulce y ms buena que el pan blanco y que muchos aos despus se muri de tristeza. Los parientes y amigos de la familia de Abraham que vivan en Ica. Los devotos y feligreses delSeor de Lurende Ica. Iban en masa a asistir a la fiesta y procesin.Escenarios[editar]La trama se desarrolla en dos escenarios: Laciudad de Pisco, en la casa apacible de los Valdelomar, frente al mar y la playa. La ciudad deIca, y sus haciendas aledaas. Esa era la tierra donde haban nacido Abraham y sus hermanos, y donde tenan muchos parientes y amigos. La familia sola ir all en Semana Santa, para asistir a las festividades en honor alSeor de Luren. En la hacienda San Miguel, que haba pertenecido a los abuelos, vivan el to Jos de la Rosa y su esposa Joaquina.Crtica y comentarios[editar]Se trata, si creemos en la versin del autor, del ms antiguo de sus cuentos criollos, es decir aquellos relatos que evocan su infancia, caracterizados por su ambiente aldeano, su contagiosa ternura hogarea y un elevado tono potico que singulariza al conjunto y lo diferencia de toda la dems narrativa criolla (donde predominan elementos costumbristas).2La tcnica empleada en este relato es an defectuosa, pero por el tema tratado es un relato sublime y conmovedor. Los dems cuentos criollos, ms logrados y maduros, los escribi el autor entre 1911 y 1912, y son los siguientes: El caballero Carmelo Los ojos de Judas El vuelo de los cndores El buque negro La paraca.Es un relato potico, semejante a algunos que en esos das publicabanGregorio Martnez SierrayRamn del Valle Incln, apretados de sentimientos msticos, de sollozante recordar, de juventud, inocencia y melancola; y, adems, teidos por un aniego de muerte, ubicuo personaje, sensacin plural que, como una maldicin, desde entonces baa todos los intersticios del alma de Valdelomar, en su adolescencia, hasta llegada la hora de su muerte, sin haber terminado su juventud.3