Temas

La diferencia de clases sociales: la baja clase social representada por un zapatero, un boticario, una mercera, aldeanos, un hostelero, un mozo de café, un servidor de las señoras y un criado. En cuanto a la alta clase social: hay señores, señoras, un barón y un conde. Los personajes masculinos de la alta clase social son “molestados” por los ruidos de las profesiones de los personajes de la baja clase social, como por ejemplo por el zapatero que arregla zapatos viejos o el boticario que machaca hierbas en el mortero.

La protección: (“celestinos”)

Señora Gertrudis→ Limoncillo (camarero).Moracchio—Juanita (su hermana): está bajo su “tutela”.Conde—Coronado: para poder casarse con Juanita. Conde—Barón: para pedirle a Gertrudis la mano de Cándida.

Las actividades de los personajes: las mujeres cosen e hilan y conversan, hacen cosas típicas de los roles femeninos de antaño. Están bajo la tutela de los hombres. Los hombres discuten, van de caza (Evaristo y el Barón) y cortejan a las mujeres.

El amor:*Crispín el zapatero--Juanita (ambos enamorados)*Coronado—Juanita (Coronado no es correspondido aunque Moracchio la ofrece a él)

El abanico: símbolo de feminidad. Sirve de como elemento de enredo y cortejo en esta comedia.

PRIMER ACTO

Cándida, la sobrina de Gertrudis usa un abanico como signo de feminidad y de clase alta. Evaristo bromea con Limoncillo acerca de su nombre. Gertrudis defiende a Limoncillo cuando el Barón y Evaristo bromean con su nombre ofreciéndole su “protección”. Ella tiene fama de ser una señora prudente y honesta. El Barón del Cedro opina que se lo tiene muy creído aunque el señor Evaristo la tiene en gran estima. El Barón del Cedro dice estimar mucho más a Cándida.

Juanita la aldeana es controlada al máximo por su hermano Moracchio, el cual sirve al señor Evaristo. Ella se dedica a sus labores y desea casarse pronto para librarse de su hermano controlador. El Barón y Evaristo se apenan de la situación de Juanita. Crispín el zapatero está enamorado de Juanita y desea casarse con ella para librarla de su hermano.

Gertrudis dice a Cándida que no se fie de quien no conozca perfectamente. En la despedida a Evaristo a Cándida se le cae el abanico y Evaristo va a la mercera Susana a comprarle otro para Cándida.Ésta, curiosa, ve que Evaristo sale de la mercería y que aún no se fue de caza, y se pregunta qué hacía allí. Evaristo no quiere decirle a Susana si es para la señorita Cándida o no. Llama a Juanita y dice que le entregue el abanico a Cándida en secreto ya que le tiene tanto aprecio con la disculpa de que Cándida le dijo a Evaristo que se interese por su hermano. Susana equícocamente cree que el abanico es para Juanita y no se lo acaba de creer. (PRIMER ENREDO). Cándida entiende que Evaristo se interesa por Susana la mercera y por Juanita y tampoco acaba de entender nada. Evaristo ruega a Juanita que le de el abanico de su parte pero sin levantar sospechas de la señora Gertrudis, o sea, que se lo dé en secreto. Cándida les ve hablando y se siente engañada por Evaristo al haberle dicho a ella antes que se iba de caza. Crispín y Coronado también están atentos viendo lo que hacen. A Evaristo le cuesta convencer a Juanita hasta que le dice si quiere casarse con Crispín. Susana se sorprende de que Juanita tenga tantos pretendientes. Evaristo le dice a Juanita que la señorita Cándida le suplicó que se interese por ella para que consiga la dote y se pueda casar con Crispín y ella accede a su petición. Crispín y Coronado ven que Evaristo le da algo a Juanita. Coronado dice a Juanita que Moracchio le ha dado su mano y entonces Crispín entra en rivalidad con él.

Coronado pregunta a Susana lo que Evaristo compró en su tienda y ella le dijo que un abanico. Coronado y Crispín pelean por Juanita. El Conde les separa. Coronado pide ayuda al Conde de Roca Marina para tener su protección y conquistar a Juanita para casarse con ella y el Conde accede al trato.

SEGUNDO ACTO

Susana la mercera se queja del tipo de gente con la que trata. Ella se siente superior y se lleva bien con Cándida. Susana siente celos de las atenciones que recibe Juanita, a la que considera una simple aldeana. Cándida quiere enterarse de lo que el señor Evaristo le ha dado a Juanita ya que le vio ir a su casa. Para ello va a ver a Susana la mercera. Cándida se apena de que haya pasado eso con su primer amor porque dice que nunca ha querido a nadie más que a él. Susana le dice a Cándida que pensaba que el señor Evaristo y ella se correspondían pero vio que se equivocaba puesto que el señor Evaristo le regaló el abanico a Juanita. Cándida se escandaliza y Susana se da cuenta de que ha metido la pata. Gertrudis aparece en la mercería y hablan de la pelea de Coronado y Crispín. Cándida le explica que fue por causa del amor por Juanita y Gertrudis dice que es una buena chica, pero Cándida, celosa, malmete contra Juanita diciéndole que Juanita ha hablado mal de Gertrudis.

El Conde promete al Barón serle de protector para que Gertrudis le de la mano de Cándida. A la vez Coronado el hostelero le regala barriles de vino al Conde por su protección para conseguir a Juanita. El Conde le dice a Gertrudis que el Barón del Cedro está enamorado de Cándida. Ella acepta y contesta que tiene que preguntarle su opinión a su sobrina Cándida. Juanita se dispone a ir a la casa de Cándida a darle el abanico del señor Evaristo. Pero el Conde le dice a Juanita que le debe la protección a Coronado el hostelero. Ella la rechaza pero entonces el Conde ofrece su protección para que Juanita se case con Crispín. El Conde comprueba que no puede obligar a Juanita a casarse con Coronado. Por venganza al señor Evaristo la señorita Cándida acepta casarse con el Barón del Cedro.

De pronto aparece Juanita con el abanico, pero oye que Cándida accedió a casarse con el Barón del Cedro y se apena del señor Evaristo, dándose cuenta de que es inútil darle el abanico a Cándida. Gertrudis reconoce estar equivocada al pensar que Cándida quería al señor Evaristo y no al Barón.

Juanita intenta darle el abanico a Cándida, pero ésta celosa la echa de su casa. Gertrudis da con la puerta en las narices tanto a Juanita como al Barón y al Conde, entonces estos se sienten humillados y el Barón reta con la espada y luego con las pistolas al Conde. Juanita da la voz de alarma. Gertrudis explica que sólo impedía la entrada de Juanita a la casa.

Juanita se encuentra con Evaristo y le devuelve el abanico contándole que no la han querido recibir en la casa de Cándida. Juanita le dice a Evaristo que Cándida ya se ha prometido con otro hombre, el Barón del Cedro. Evaristo intenta entrar en la casa pero Cándida le deniega la entrada. Evaristo le da el abanico a Juanita como regalo. Coronado contempla la escena. Juanita se compadece de Evaristo y dice que ojalá supiera consolarle, a lo que llega Crispín y oye todo así que cree que Juanita y Evaristo están juntos. Ella se lo intenta explicar pero Crispín no se lo cree. Juanita se lo explica todo mejor pero Crispín parece no enterarse de nada. Coronado le dice a Crispín que por fin se enteró de lo que le ha regalado el señor Evaristo a Juanita, un abanico! Juanita lo niega todo. Crispín huye con el abanico.

Cándida enferma. Crispín corre y tropieza, se le cae el abanico y Coronado se lo lleva.

TERCER ACTO

El conde y el Barón se lamentan de que Cándida se haya puesto enferma. El Barón le dice al Conde si se fijó en cómo la señora Gertrudis al salir del cuarto de Cándida con que prisa y admiración leía unas páginas. El Barón sospecha que el señor Evaristo y Cándida tienen algo. Juanita le reclama el abanico a Coronado, que dice habérselo olvidado en la cantina. Crispín lo ve en un barril de vino y se lo guarda para sí en secreto. Evaristo sale del jardín de Limoncillo hacia Juanita muy contento. Le explica el malentendido del abanico entre él, Cándida y Juanita. Y el hecho de que Cándida se quería casar con otro por despecho, no porque le quisiese. El dio con Cándida y le explicó todo llorando y ya es suya pero Cándida puso la condición de que le diera el abanico, pero Juanita le dice que no lo tiene. Ella dice que 3 se le abalanzaron a por el abanico: Moracchio y otros dos más, pero que se lo dio a Crispín aunque se lo ha quitado Coronado. Ëste dice que se lo han robado. Evaristo ofrece mucho dinero por el abanico. Cándida dice que el abanico está en manos de quien Evaristo se lo haya regalado. CRISPIN le da al Conde el abanico a condición de que no diga que se lo dio el. El Conde le sugiere la Barón del Cedro que le regale a Cándida el abanico. A Evaristo le dicen que el Conde tenía el abanico y se lo pide. Le pregunta a Evaristo si lo ha perdió y el otro le dice que sí. Evaristo le ofrece al Conde mucho dinero por el abanico. Evaristo le ofrece al Conde un cambio con una tabaquera de oro a cambio del abanico. El Conde le devuelve el abanico a Evaristo. El Conde ofrece Juanita a Crispín, no aceptando Moracchio esto. Hay una serie de confusiones y Evaristo pide a Susana la mercera que le aclare todo a Cándida. El Barón se queda estupefacto de semejante lío. Celebram el matrimonio y hacen las paces todos. Fín: Gertrudis invita a todos a comer.