Medio informativo de las Organizaciones Sociales del Centro Oriente Colombianocorreo e: trochandosinfronteras@gmail.com - Página Web: www.organizacionessociales.org

CONTENIDO

“Defender nuestros ecosistemas de páramo y la Sierra Nevada de Chita, Guicán y el Cocuy,

es defender el territorio”

FORO AMBIENTAL HUMANITARIO DEL CENTRO ORIENTE COLOMBIANO

En el municipio del Cocuy, provincia de Gutiérrez (Boyacá), las comunidades campesinas, autoridades locales de la provincia, ambientalistas, estudiantes, organizaciones indígenas y sociales del Centro Oriente Colombiano convocan al Foro Ambiental Humanitario que se realizará los días 21 y 22 de julio del 2012.

Diversos sectores sociales comprometidos con la defensa y preservación de los páramos, la Sierra Nevada del Cocuy, Chiscas y Guicán, así como el territorio y los ecosistemas estratégicos para el futuro, se darán cita en esta importante región para reflexionar, debatir y concretar estrategias alrededor de los siguientes temas: territorio y conflictos, tejido social y derechos humanos en la región.

Los páramos están inmersos en conflictos ligados a proyectos de extracción de recursos naturales, a saber: diversos minerales entre ellos el agua, hidrocarburos, cultivos de interés comercial, proyectos de mercado de carbono, turismo a gran escala, concesiones y otros modelos de privatización, que vienen siendo implantados por capitales nacionales e internacionales con las orientaciones en materia “ambiental” que han dictaminado los organismos multilaterales, los planes de desarrollo y las políticas del gobierno nacional. En conclusión, estas regiones están siendo entregadas a las empresas multinacionales, a grupos económicos extranjeros y de inversión privada.

Por su lado, los indígenas, campesinos y las comunidades de alta montaña de la provincia y toda la región, que hacen el manejo y protección del territorio y lo han incorporado a su plan estratégico de vida, son amenazados por las proyecciones de megaproyectos sobre el territorio, desde los llamados “servicios ambientales” de la “locomotora minero energética” del gobierno Santos.

Este foro que se viene construyendo como un espacio propio de las comunidades construirá iniciativas que permitan comprender las complejidades que enmarcan el territorio como son: el uso del suelo, la importancia cultural y socio-ambiental de los ecosistemas para territorios periféricos como los llanos orientales, los santanderes y el centro de Boyacá.

El foro busca avanzar en el debate sobre la explotación minera, los impactos nocivos en las zonas frágiles de páramos y alta montaña, sensibilizar a las comunidades sobre la importancia de la defensa de estos complejos ecosistemas como reservas estratégicas para la vida en toda la macroregión, generar escenarios para la recomposición del tejido social y avanzar en la articulación de propuestas con dimensión de la región centro oriente.

Con estos propósitos y con la disposición de interlocutar con otros(as), compartir ideas, música carranguera, disfrutar de la exuberancia del paisaje y la imponencia

de la sierra nevada, llegarán al Cocuy delegaciones de la gran nación U’wa, estudiantes de varias universidades, comunidades del Meta, Casanare, Arauca, Santander, del centro de Boyacá, y por supuesto de los municipios de la provincia de Gutiérrez.

Quedan todos(as) cordialmente invitados a participar y con sus aportes contribuir para que hagamos realidad la consigna: “Defender nuestros ecosistemas de páramo y la Sierra Nevada de Chita, Guicán y el Cocuy, es defender el territorio”.

Pacific Rubiales Energy: ¿Responsabilidad social empresarial? ..................(pág 2)

¡AL 50! Por una exigencia de reducción al precio de los combustibles ..................(pág3)

Biografía Carlos Mesías Arriguí Cerquera ............(pág4)

Orígen del 20 de julio de 1810 ..................................(pág 5)

Mantener la memoria histórica ...........................(pág 5)

MANE Construyendo nueva educación ............... (pág 6 y 7)

Coronel del ejercito a juicio .............................................(pág 7)

Arauca: nuevas capturas masivas ............................(pág 8)

¿Cómo nos afecta el TLC con EEUU? ...............................(pág 9)

MEGA atenta contra el campesinado ..............(pág 10)

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En la realidad colombiana diferentes empresas vienen utilizando el término de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), para aparentar un compromiso con la sociedad, el medio ambiente y el crecimiento económico. En esta dinámica, lo más prudente es conocer la definición que las mismas empresas y los estados hacen de: “el compromiso voluntario que las organizaciones asumen frente a las expectativas concertadas que en materia de desarrollo humano integral se generan con las partes interesadas y que, partiendo del cumplimiento de las disposiciones legales, le permite a las organizaciones asegurar el crecimiento económico, el desarrollo social y el equilibrio ecológico” (Guía Técnica Colombiana de Responsabilidad Social¬ ICONTEC (Colombia)). Debe entenderse organizaciones como empresas; en esta lógica la trasnacional petrolera Pacific Rubiales Energy, ha venido realizando aportes económicos en el Festival de Verano de Puerto Gaitán, en el Torneo de Golf Pacific Rubiales y más recientemente en el patrocinio de la Selección colombiana de fútbol y del nuevo equipo de Fútbol de Villavicencio, Llaneros Fútbol Club.

Sin embargo estos gestos “voluntarios” de Pacific Rubiales, se ven desmantelados con algunos hechos que han sido noticia nacional. El primero de ellos, es el tema del Cabildo indígena El Turpial – La Victoria, donde la etnia Achagua y Piapoco, demandó a la empresa Meta Petroleum Limited (Filial de Pacific) por la construcción de un tramo del Oleoducto de los Llanos (ODL) en su territorio sin realizar la consulta previa; esta

acción, según la comunidad indígena ha ocasionado

el incremento de enfermedades

por contaminación de aguas, deserción estudiantil y embarazos en adolescentes.

El segundo hecho fue la jornada de protestas de los trabajadores de Campo Rubiales el año pasado (2011), que paralizaron la producción de dicho campo por alrededor de un mes, provocando enfrentamientos con la fuerza pública; en esta jornada los trabajadores denunciaron las precarias condiciones de trabajo, la tercerización laboral, la seguridad industrial deficiente, la contaminación ambiental, entre otras problemáticas.

El último acontecimiento se presentó en la zona limítrofe entre Casanare y Arauca, donde las Organizaciones Sociales del Centro Oriente Colombiano, en el marco de una jornada de protesta, bloquearon el Oleoducto Bicentenario (en el que Pacific Rubiales participa con el 32,9%); dichas organizaciones exigieron el pago de la deuda social de las empresas petroleras, la reparación ambiental, el respeto de los derechos indígenas, entre las reivindicaciones más importantes.

Los anteriores hechos muestran una clara contradicción entre el deber ser que fingen el Gobierno y las empresas petroleras y el descontento de las comunidades, que le ocasionaron a la trasnacional un fuerte golpe de opinión a nivel nacional e internacional y que de inmediato hizo bajar la cotización de las acciones de dicha empresa. Claro, nadie quiere tener negocios con personajes que mantienen a sus trabajadores en pésimas condiciones laborales, que violan los derechos de los indígenas o que no tienen en cuenta a las comunidades, porque esto siempre redundara en parálisis

en la producción, que de inmediato golpeara sus ambiciosos

bolsillos.

La empresa se enfrenta a la problematica en la cual, el uso

de la violencia para reprimir las manifestaciones genera una caída del precio de las acciones en la Bolsa de Valores (es decir, que afecta directamente sus ganancias), entonces, necesita

de otros instrumentos para disuadir la protesta y mantener su buena imagen; en este momento entra en escena una nueva

iniciativa, que es la Responsabilidad Social Empresarial.

Tres palabras que hacen feliz a cualquier empresa que tiene problemas con los trabajadores, los indígenas, los campesinos, mejor dicho con todo el pueblo trabajador: “Responsabilidad Social Empresarial”, en esta estrategia la trasnacional destinó 20 millones de dólares ($36.000 millones de pesos), como lo indica en su reporte de sostenibilidad del año 2011, ejecutándolos de manera voluntaria en proyectos “para las comunidades”; sin embargo, como es la voluntad de la empresa trasnacional, ésta decide qué aprueba y qué no, lamentablemente es una decisión unilateral; además de ello, estos proyectos se realizaron con aquellos sectores de la comunidad que simpatizan con las políticas de la empresa, es decir que no protestan. Pero ¿Por qué el pueblo trabajador insiste en luchar y no aceptar los dineros de la Responsabilidad Social Empresarial? La anterior pregunta se puede resolver con cuatro hechos que son contundentes:

1. En el 2011 Pacific Rubiales invirtió cerca de $30.000 millones en publicidad, es decir el 83.3% de lo que se destinó a la Responsabilidad Social.

2. Los salarios de los directivos-dueños de Pacific, quienes aparte de ganar como accionistas, ganan como directivos de la empresa la pequeña suma de 11,2 millones de dólares cada uno, como lo manifiesta la revista dinero, “Miguel de la Campa, José Francisco Arata, Serafino Iacono y Ronald Pantin se ubican en los puestos del 14 al 17, respectivamente, dentro de los 100 mejores pagos en Canadá. Cada uno recibió compensaciones en 2010 de aproximadamente 11,2 millones de dólares canadienses”, es decir, que en promedio, los salarios (si puede llamarse a esto salario) de los cuatro directivos son dos años de Responsabilidad Social.

3. Las utilidades de Pacific Rubiales en el 2011 ascendieron a 554 millones de dólares (Periódico El espectador, 2012), es decir que comparadas estas utilidades con lo destinado a Responsabilidad Social Empresarial, esta última representa tan solo el 3,6%.

4. Los dineros que se utilizan en la Responsabilidad Social generan una disminución en el pago de los impuestos que declara Pacific Rubiales.

Ahora la estrategia de Rubiales es mucho más clara, destinar algunas migajas de sus ganancias, en los proyectos que ellos quieran y con quienes quieran, para que las comunidades no protesten y permitan el saqueo de los recursos sin hacer alboroto y así mantener su imagen en lo más alto, allí donde también permanecerán los precios de sus acciones. Ante esta situación, el pueblo del Centro Oriente Colombiano, decide no aceptar las migajas de la Responsabilidad Social Empresarial y exigir la financiación de sus planes de vida en sus territorios, que sin ninguna duda requieren de una fuerte intervención en las ganancias de las trasnacionales, en este caso de Pacific

Rubiales Energy.

PACIFIC RUBIALES ENERGY: ¿RESPONSABILIDAD SOCIAL EMPRESARIAL?

Por: Corporación CHOAPO

La jugada de la reducción de $150 al precio del galón de gasolina y $100 al del ACPM, aparte de ser una burla para la economía de los colombianos frente al precio de los combustibles, permite adentrarse un poco a desentramar la estrategia política del estado colombiano en materia de hidrocarburos, la que podría resumirse de la siguiente manera: 1) Intensificación en la exploración y explotación petrolera en el último período, 2) Aumento significativo en la apropiación de renta petrolera por parte del Estado, 3) Centralización y redistribución de los recursos resumidos en megaproyectos, infraestructura e intensificación de la guerra.

En efecto, el Estado colombiano en los últimos 10 años, ha intensificado la exploración y explotación de los yacimientos petrolíferos. Del año 2002, en el que se producían alrededor de 200 millones de barriles anuales, hoy se producen más de 300 millones anuales, lo que significa que si bien, todavía falta para la meta del millón de barriles diarios, la producción ha experimentado un aumento importante. La primera conclusión evidente es que el país ha aumentado la exploración y explotación de crudo por un lado, pero por el otro, dicho aumento no se ha manifestado en una baja en el precio de los combustibles que paga el consumidor.

Entonces, si el aumento de la explotación de hidrocarburos es una realidad, ¿a dónde van a parar los beneficios, por lo menos económicos? Basta solo decir por ahora, que el capital foráneo e internacional es el gran ganador del aumento de la producción de crudo en Colombia. Y resulta lógico: nadie invierte en ningún negocio si este no le representa una alta tasa de ganancia. En el caso del petróleo, esta ganancia se agiganta, pues la fase de exploración, en la que existe un mayor riesgo de encontrar o no yacimientos productivos, no la asume el actor privado (es decir que minimizan el capital de riesgo porque invierten menos), lo asume Ecopetrol, quien es el encargado de la exploración en el país, los capitales internacionales entran directamente a la fase de extracción del mineral. Así, estas grandes cantidades de inversión extranjera tienen tasas de retorno

o ganancias impresionantes, que logran su punto de equilibrio en unos cuantos meses de explotación de crudo, es decir que logran recuperar rápidamente su inversión inicial.

Con solo las cantidades de crudo extraídas hay asegurado un gran negocio; más aún cuando los precios de venta a los que son colocados los productos como la gasolina, ACPM, querosene, etc. son altamente lucrativos para las empresas. Ejemplo de ello es el precio de la gasolina, que toma como referencia para su venta los precios del Golfo de los Estados Unidos, precios que se caracterizan por ser los más elevados en el mundo. Lo explicó muy bien el ministro de minas y energía Mauricio Cárdenas cuando afirmó que “de no asegurarles un precio de venta de tal magnitud a las transnacionales, estas podrían a partir de cláusulas existentes enviar la totalidad de la producción hacia el exterior”. Es decir que se les asegura el mejor negocio, con el mejor precio de venta a las transnacionales, en perjuicio de los consumidores, quienes tenemos que pagar los elevadísimos precios.

Porque más allá de las discusiones entre las diferentes bancadas del congreso, desde los amarillos, pasando por los rojos, hasta los azules y multicolores, así como los análisis de algunos expertos e incluso de las sugerencias de los mismos funcionarios del gabinete gubernamental quienes aseguran que el problema del alto costo de la gasolina se debe a los impuestos como

la sobretasa, que si bien es cierto, es un agravante, el principal factor del alza del precio, es el precio de venta internacional.

Vale la pena preguntarse por qué muchos de los países productores a nivel mundial, muchos de ellos participantes de la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), no regulan sus precios en función del mercado internacional, lo que les permite ofertar el combustible a mejores precios para los consumidores nacionales. La decisión opuesta que ha tomado el Estado colombiano, nos tiene a

los habitantes pagando uno de los precios más altos de la gaolina en el mundo (tercer lugar entre los países productores de petróleo).

Y es que esta desición de los gobiernos de turno a favor de los capitales extranjeros y en contra de las necesidades de las mayorías, no sólamente tiene efectos en el precio de los combustibles sino que como sabemos, los combustibles dada su importancia son un regulador económico de la mayoría de bienes. Así que si usted se pregunta por qué mes a mes los precios de la panela, del arroz, de la papa, la yuca, etc., no dejan de subir; ello lo explica en gran parte los precios amañádamente elevados de los combustibles.

Es por ello que la necesidad de reclamar y exigir la baja del precio de la gasolina y el ACPM debe ser una bandera de los transportadores, conductores de camiones, buses, taxis, motos, de las familias que cada vez se ven más acosadas al momento de hacer el mercado; es decir, de todos los trabajadores quienes son afectados diariamente por esta decisión política del gobierno de fijar precios altos. En estos tiempos de corrupción institucional, en el que mandatarios y políticos legislan a favor propio y de capitales foráneos en detrimento del bienestar nacional, la soberanía y los intereses de las mayorías, queda solamente el camino de la movilización, la denuncia y la organización social como mecanismo de conquistar derechos y procurar caminos para una gestión y administración digna y favorable de los recursos estratégicos de la nación.

La exigencia de la reducción del precio de los combustibles al 50%, bandera que ya empiezan a alzar varios sectores, debe convertirse en una exigencia inmediata de todo el pueblo colombiano. Queda claro que no es para nada descabellada esta exigencia, si se tiene en cuenta que tan solo depende de una decisión política, la cual solo será posible de tomar en la medida que exista una fuerza necesaria de la mayoría del pueblo para procurar que la balanza social se mueva a nuestro favor.

¡AL 50! POR UNA ExIGENCIA DE REDUCCIóN AL PRECIO DE LOS COMBUSTIBLES

Por: Grupo de Estudios Geopolíticos y Territoriales -GEGT-

CARLOS MESÍAS ARRIGUÍ CERQUERA“un hombre entregado a un pueblo, ejemplo de dignidad y lucha social”.

Don CARLOS, un líder campesino y dirigente popular nacido en Belén de los Andaquíes, departamento de Caquetá, al sur de Colombia. Su vida transcurrió entre el hogar que conformó con EDITA GUENIS la compañera de toda su vida, las labores del campo y ante todo el trabajo social y comunitario del movimiento campesino, las juntas de acción comunal y los sectores populares en varias regiones del país.

Su formación política y su ímpetu de dirigente social, fue resultado del ejercicio diario en cada comunidad, con sus vecinos, y compañeros(as) de trabajo; fue su fuerza, entrega y convencimiento de que los seres humanos “ponen en juego la potencialidad y el sentido de vida para consolidarse como sujeto social, mediante la palabra y la acción en escenarios colectivos de la vereda, el barrio y la región”.

Como dirigente social, don Carlos fue gestor de proyectos que se hicieron realidad con el aporte decidido y tesonero de las comunidades donde él los propuso, y trabajó hombro a hombro con sus vecinos, con cada junta para construir una escuela, el camino veredal, un centro de salud, la casa comunal, una urbanización, parcelación de tierras, tiendas cooperativas, entre muchas otras obras.

Este líder de hacha y machete, sembrador, recolector en la labranza, también fue constructor de ideas que tuvieron el fervor y la capacidad de organizar al campesinado en escenarios como la Federación Agraria Nacional -FANAL-, primer espacio político al que aportó desde muy joven en su región natal. Más tarde, en su paso por los municipios boyacenses Jericó y Pajarito, se destacó como directivo de las Juntas de Acción Comunal.

Luego, en el departamento de Casanare, y en época de las luchas reivindicativas por la tierra y la política agrícola en el país, se vinculó a la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos -ANUC-, una organización que el campesinado le arrebató al Estado y puso a su servicio bajo la consigna de “Tierra pal que la trabaja”, una organización que la hicieron desde la base como organización política, como escenario para protestar, reclamar el derecho a una vida digna, defender los derechos humanos y la tenencia de la tierra.

En la ANUC, don Carlos trabajó para la constitución de las asociaciones en cada municipio y en su gestión logró la conformación de alrededor de diez municipales, lo que permitió la constitución de la Asociación Departamental de Usuarios Campesinos de Casanare, haciendo de esta, una organización de reconocimiento y un actor político, en la que los campesinos participaron de las crecientes luchas cívicas.

Quienes compartieron con este trabajador social, reconocen en él su disciplina en el trabajo, pues era un hombre ordenado, puntual en sus compromisos y cumplidor de la palabra, entusiasta y creativo, práctico y de trabajo de campo, con la virtud de atender, siempre con el “tiempito para escuchar” a quien fuera. Se destacó por ser gran orador, eso sí, cuidadoso en la palabra para no ofrecer lo que no fuese posible. A lo que don Carlos le sacó el quite, fue al manejo de dineros; nunca aceptó ser el tesorero, el manejo de plata no lo desvelaba y su argumento era “que los recursos de la comunidad eran sagrados y para eso se necesitaba gente muy responsable”.

Su trabajo político y social coincidió con los hallazgos petroleros en la zona, entonces

acompañó a las comunidades en el diseño de planes y proyectos para el desarrollo de los sectores con las posibles regalías petroleras, a constituir organización para exigir inversión social en las áreas de “influencia petrolera”. Bonanza y regalías que se hicieron retórica y así con el pasar del tiempo, las comunidades se verían obligadas a protestar contra las empresas petroleras.

Con el talante y la seguridad que lo caracterizó, allí estuvo don Carlos representando a sus comunidades, dando la lucha en las mesas de negociación, motivando las jornadas de reunión junto con otros líderes, denunciando las sucias actuaciones de las petroleras, los políticos y funcionarios corruptos. Siempre fue un campesino humilde, pero un líder firme e insobornable.

La Asociación Comunitaria por el Desarrollo Social y Agroindustrial del Morro (ACDAINSO), el Comité pro-defensa de los sectores populares de Yopal, el Proyecto de vivienda por autogestión, La Unión San Carlos, la ADUC Casanare, las casas campesinas, fueron espacios desde donde promovió la tutela y el reconocimiento de los derechos del

campesinado, la defensa del territorio y la lucha contra las empresas trasnacionales.

Don Carlos fue un educador popular que supo recrear las ideas y la expresión para plasmarlas en acciones, tenía la capacidad de la palabra en el momento preciso. Con ella propuso y con sus acciones lo ratificó, siempre estuvo construyendo con su comunidad y desde el seno de la misma, caminó con ella, con ella celebró, pero también junto a ella asumió el costo del error o del revés si era el caso. Su aporte al movimiento campesino y social de la región, su entrega diaria, acuciosa y equilibrada, ha sido un capítulo en letras grandes.

El movimiento campesino y sus líderes incorruptibles, dignos veedores de los intereses sociales, políticos y económicos de la región, se convirtieron en “la piedra en el zapato” que incomodó a las petroleras, gamonales, gobernantes de turno, fuerzas militares y paramilitares, que en su ambición de poder, hicieron alianzas perversas para eliminar cualquier oposición. Las primeras víctimas de este macabro plan fueron los compañeros dirigentes GABRIEL FEDERICO ASENCIO y él, CARLOS MESÍAS ARRIGUÍ, quienes fueron asesinados el 13 de abril de 1995, cuando conversaban y jugaban ajedrez en la casa de éste último.

Las comunidades del piedemonte y la Corporación Social Para la Asesoría y Capacitación Comunitaria -COSPACC- hacen un merecido reconocimiento a la memoria de nuestro compañero, al desarrollar la Escuela Popular de líderes y lideresas “CARLOS MESIAS ARRIGUÍ”, proceso de capacitación que avanza con

éxito en los departamentos de Boyacá y Casanare.

Por: COSPACC(Belén de los Andaquíes, Caquetá 22 de mayo de 1.945 – El Yopal, Casanare, 13 de abril de 1.995)

ORIGEN DEL 20 DE JULIO DE 1810Por: Movimiento Social Comunero José Antonio Galán Zorro

Con la influencia de las ideas liberales que impulsaron en Europa las más importantes revoluciones sociales hasta ese entonces y con el detonante de las restricciones políticas y comerciales que asfixiaban a comerciantes y artesanos del Virreinato de la Nueva Granda, se crearon las condiciones necesarias que darían paso al descontento general, seguido de la crisis institucional española de 1808, que en pleno corazón del poder colonial, tendría como saldo la expulsión y arresto del virrey.

El movimiento popular consecuencia del descontento general dio paso a organizaciones cuya expresión eran las juntas, como sucedió en Socorro, Santander y Popayán, las que manifestaron independencia ante las autoridades españolas ocupantes del virreinato por un lado, pero por otro, jurando lealtad al rey español Fernando VII. Por su parte, la junta de Santa Fe, nombró como presidente, al hasta entonces Virrey Antonio Amar y Borbón, constituyéndose esta última, en la menos popular de las medidas. En efecto,

las autoridades españolas en América procuraron evitar el surgimiento de juntas propias. Ejemplo de ello es que en 1809, la junta rebelde formada en Quito fue duramente reprimida. Por ello es que en el Nuevo Reino de Granada, ninguna junta se atrevió a declarar la independencia absoluta de España.

El 5 de julio de 1811, la primera Junta en declarar la independencia contundente en el antiguo territorio del Virreinato fue Caracas, con un gran apoyo popular con marcada participación de mestizos, mulatos y negros. Vale señalar que Cartagena de Indias, segunda ciudad más importante del Nuevo Reino de Granada después de Santa Fe, y mucho más

integrada a la capital virreinal que Caracas, en su declaración de independencia, precipitó la proclamación de emancipación absoluta en las demás ciudades del Nuevo Reino.

El rey Carlos III, como inconfundible déspota, fomentó un poder político fuerte, en su guerra contra Inglaterra, comprometió el fisco y creo nuevos tributos. España había impuesto una serie de restricciones comerciales en las colonias, las cuales les imposibilitaba comerciar entre sí y mucho menos comerciar con otras naciones como el Reino Unido o los Estados Unidos. Todas las relaciones comerciales eran decididas desde España, que por otro lado, era incapaz de sostener la demanda en sus colonias.

Estos hechos provocaron en los años 1780 un rompimiento de la paz hispánica, que había regido a las colonias españolas desde su creación. La insurrección de los comuneros en la Nueva Granada y la sublevación de Tupac Amaru en el Perú

evidenciaron esta realidad.

En nuestro país, el hecho que sacudió por su impacto social, político y armado no solo la estructura colonial de la Nueva Granada, sino de toda la América, fue el levantamiento insurreccional del movimiento Comunero el 16 de marzo de 1781, en el municipio del Socorro, que se extendió a los departamentos de Santander, Norte de Santander, Casanare, Arauca, Boyacá, Cundinamarca, Huila, Tolima y Meta, regiones que hoy hacen parte del Centro Oriente Colombiano, con la conducción esencial de José Antonio Galán Zorro, el primer libertador de Colombia, como lo define el maestro historiador y escritor Germán Arciniegas.

Este acontecimiento, que abrió paso al primer grito de independencia (20 de julio de 1810) y a la batalla de Boyacá en 1819, sentaría las bases de una sociedad que logró emanciparse del yugo extranjero, pero que no logró sacudirse los amarres de las contradicciones internas, lo que se vería posteriormente reflejado en las 23 guerras civiles, así como en la llamada época de la violencia que vive nuestro país desde el año de 1948.

Una lucha del pueblo colombiano y latinoamericano quedó inconclusa, pues hoy la concentración de los medios de producción y del poder político, la aguda corrupción administrativa y la pobreza de millones de colombianos deja en evidencia el largo camino por recorrer. Las gestas comuneras son un legado que el pueblo colombiano debe valorar, pues hoy más que nunca, es necesario retomar las enseñanzas de lucha por una independencia y soberanía nacional, como único camino para superar los actuales tiempos de crisis.

Arauca ha sido una de las regiones contra las cuales se ha ensañado el Estado colombiano aplicando vehementemente sobre el pueblo, las organizaciones y sus dirigentes, los ejes de la judicialización, el paramilitarismo, las ejecuciones extrajudiciales, la militarización de la vida cotidiana de la población civil, la utilización de las mujeres, niñas y niños como fortín de guerra, y la corrupción política administrativa, que hacen parte de la estrategia de agresión con la que ha pretendido acallar las voces de protestas y las alternativas de vida, para garantizar el saqueo de nuestros recursos naturales, saciando así, los intereses voraces de las empresas trasnacionales.

Esta agresión ha dejado en nuestro pueblo araucano más de 3.000 judicializados, 10.000 muertes violentas, 63.492 personas desplazadas por la violencia y un alto número de masacres que dejaron por lo menos 100 víctimas.

Frente a estos crímenes el Estado amplía y perfecciona los mecanismos de impunidad como lo evidencian los proyectos para fortalecer el fuero militar, la reforma a la justicia, los show mediáticos para desacreditar a las víctimas y las ONGs Defensoras de derechos humanos, etc.

Es en este contexto en el que se hace indispensable mantener la memoria histórica como instrumento que permita entender los hechos de agresión sufridos, el por qué sucedieron, quiénes los cometieron y quienes se beneficiaron, cuáles son los intereses políticos y económicos que motivaron los crímenes, sin dejar de reivindicar y dignificar a las víctimas, su trabajo, el espacio organizativo en el cual participaba y sus propuestas de vida.

Por ello las organizaciones sociales de Arauca, hemos venido desarrollando acciones políticas, culturales y religiosas, encaminadas a derrotar la impunidad y evitar que el olvido se apodere de nuestro entramado social desapareciendo nuestra historia. El 5 de agosto fue declarado “Día para la exaltación de la memoria histórica y dignificación de las víctimas de Crímenes de Estado” en el marco de la conmemoración de un año más de la masacre contra los compañeros HÉCTOR ALIRIO MARTÍNEZ Presidente de la Asociación Departamental de Usuarios Campesinos ADUC, LEONEL GOYENECHE GOYENECHE miembro de la Central Unitaria de Trabajadores CUT, y JORGE EDUARDO PRIETO CHAMUCERO Presidente del Sindicato de Trabajadores de Clínicas y Hospitales de Colombia ANTHOC filial Arauca,

cometida por el Ejército Nacional, Grupo de Caballería Mecanizado No. 18 Gabriel Reveiz Pizarro, el 5 de agosto de 2004, en la vereda Caño Seco del municipio de Saravena, departamento de Arauca.

Este año, en un acto político, litúrgico, acompañado de actividades culturales conmemoraremos la vida y obra de todas y todos, hombres y mujeres, héroes y mártires de la lucha social, que por su trabajo y entrega a las causas populares, han sido perseguidos, estigmatizados, encarcelados, desaparecidos, torturados y ejecutados por el Estado colombiano en el departamento; con su ejemplo y legado como guía, reafirmaremos nuestro compromiso con el pueblo de defender la vida, los derechos humanos y la permanencia en nuestro territorio, materializando los programas y proyectos del Plan Alternativo de Equilibrio R e g i o n a l , nuestro PLAN DE VIDA.

MANTENER LA MEMORIA HISTóRICAPor: FDH Joel Sierra

MANE, CONSTRUYENDO NUEVA EDUCACIóN

Por: Identidad Estudiantil Villavicencio

Construir una nueva educación para un país con soberanía, democracia y paz, es la consigna que hoy rige el accionar de la MANE -Mesa Amplia Nacional Estudiantil-. Movimiento estudiantil, que en el segundo semestre del año pasado resurgió como actor protagónico en la escena política de nuestro país, en la que el gobierno de Juan Manuel Santos con la idea de darle rieles a sus locomotoras del plan nacional de desarrollo, propuso la nociva reforma a la ley 30 de 1992, que profundizaría la precaria realidad que hoy vive la universidad colombiana y consolidaría la privatización de la educación pública por medio de la figura de la educación con ánimo de lucro.

La postura de los estudiantes como se vio en los medios de comunicación y como se vivió en las calles de cada una de las ciudades del país fue de rechazo a este nocivo proyecto de reforma, en este rechazo generalizado también se unieron las voces de docentes, trabajadores, directivos, familiares,

simpatizantes y sociedad en general, y entre todos(as) recuperamos la expresión, la rebeldía y la creatividad que el país creía perdida. Fue esta unidad del movimiento social colombiano, la movilización y los elementos de propuesta que surgieron alrededor de ella, los que obligaron al gobierno a echar para atrás sus pretensiones reformistas. También nos permitió a los estudiantes articulados en la MANE entender que el problema de la educación va más allá de la reforma, teniendo éste sus orígenes en la concepción de la educación cuyo fin sea el lucro. Además, que para tener una educación interesada en las verdaderas necesidades del pueblo se debe propender por una nueva educación en todos los niveles (primaria, secundaria y superior).

De esta manera cuando los estudiantes definimos la suspensión del paro nacional, nos comprometimos con la sociedad, a que desde la normalidad de las clases, adelantaríamos una verdadera reforma y que construiríamos de manera amplia, democrática y participativa: una Propuesta

Alternativa de Educación Superior. Precisamente, en lo que va de este año, este proceso lo hemos venido construyendo desde las universidades públicas, privadas e institutos técnicos y tecnológicos del país. Guiados por una ruta de construcción programática que determinamos desde la MANE, que plantea dos grandes momentos: uno, la consolidación de una EXPOSICIÓN DE MOTIVOS y dos, la generación de un ARTICULADO DE LEY DE EDUCACIÓN SUPERIOR que será lanzado ante la opinión pública el próximo 12 de octubre.

Con el objetivo de construir el documento borrador que exponga los motivos que hacen necesaria la construcción de una nueva ley de educación superior, la MANE realizó el “PRIMER ENCUENTRO SOCIAL Y POPULAR POR UNA NUEVA EDUCACIÓN”, en la Universidad Nacional sede Bogotá los días 8, 9, 10 y 11 de junio de 2012.

Este encuentro fue instalado en la tarde del viernes 8 de junio con una marcha de antorchas y diversas actividades en conmemoración del día del estudiante revolucionario colombiano, jornada en la que se rescata la memoria y las luchas históricas que ha tenido el movimiento estudiantil colombiano desde las década de 1920, cuyas banderas reivindicativas y propositivas se constituyen como la base del programa mínimo de la MANE, en el cual se recoge la gran mayoría del estudiantado colombiano. Este primer día culminaría en el centro de Bogotá, en el teatro la Media Torta, con un concierto de bienvenida a las delegaciones provenientes de distintas partes del país.

El encuentro contó con la participación de más de 1000 asistentes, entre estudiantes de más de 50 universidades públicas y privadas, institutos técnicos y tecnológicos, la ESAP (escuela superior de administración pública), el SENA, la MANE Afro, comunidades indígenas como el CRIC (consejo regional indígena del Cauca), así como profesores, trabajadores y delegados de distintos sectores sociales, democráticos y populares. Las discusiones se adelantaron en 10 mesas de trabajo que se realizaron de manera simultánea el sábado, domingo y parte del lunes festivo. Las 6 mesas del programa mínimo (Financiación, Bienestar, Excelencia Académica, Relación Universidad-Sociedad, Autonomía y Democracia, Libertades Democráticas) tenían como objetivo profundizar en elementos de propuesta de educación superior.

Las restantes 4 mesas se desarrollaron con el objetivo de realizar discusiones sobre la táctica del movimiento estudiantil, definir el alcance del proceso programático y la realización de ajustes organizativos. Estas mesas discutieron el Diagnostico de la Educación superior, los Ejes Rectores de la propuesta alternativa de ley, las experiencias de Educación Propia que recoge los procesos autónomos de educación indígena, étnica y campesina, el Modelo de Universidad para un Modelo Sociedad y los Alcances y Objetivos de la nueva ley.

La realización de este Primer Encuentro Social y Popular se constituyó como un hecho de altísima importancia histórica para el país, pues así la MANE logró evidenciar que el momento político por el que atraviesa ha mezclado la movilización popular en las calles con los escenarios de debate y construcción de articulado de una

El pasado 18 de marzo el coronel del Ejército Nacional JUAN CARLOS CASTAÑEDA, fue acusado por 40 ‘falsos positivos’ en Casanare. Este personaje había sido nombrado como agregado militar de Colombia en Brasil, luego de lo cual protagonizó un escándalo por aparecer en el vídeo del matrimonio del narcotraficante NESTOR CARO.

La Fiscalía acusó al oficial de tener alianzas con el jefe paramilitar HÉCTOR BUITRAGO PARADA alias ‘MARTÍN LLANOS’ y de ser el autor intelectual de los crímenes cometidos contra habitantes de los municipios de Chámeza y Recetor (Casanare). Según el expediente penal, más de 40 personas fueron obligadas a acudir a las fincas de alias MARTÍN LLANOS, comandante de la estructura paramilitar conocida como “Autodefensas Campesinas del Casanare”;

en esos lugares las víctimas eran atadas, torturadas, asesinadas con tiros de fusil o degolladas con machete, para luego ser enterradas en fosas comunes.

De acuerdo a la acusación presentada por la Fiscalía, la lista de las víctimas era entregada por el mismo ex-alcalde de Recetor, FLAMINIO COCINERO COSTO, con la colaboración del coronel CASTAÑEDA, quien para ese momento se desempeñaba como comandante del batallón n° 44 Ramón Nonato Pérez.

Una de las pruebas valoradas por la Fiscalía para la acusación es el testimonio de un paramilitar de nombre JHON JAIRO GARCÍA, quien relató una reunión entre el coronel CASTAÑEDA y dos comandantes paramilitares (LUIS EDUARDO LINARES alias ‘HK’ y ALEXÁNDER GONZÁLEZ URBINA, alias ‘Careloco’), en la que se habría pactado una coordinación criminal entre las acciones de esa estructura ilegal con la Fuerza Pública “porque ya estaba todo hablado y delimitado”. Este acuerdo explica por qué que en la zona se movieron durante meses 400 paramilitares y dos batallones del Ejército “y nunca hubo un enfrentamiento”.

En tal sentido, para evitar enfrentamientos accidentales los grupos se movilizaban con las guías del bando contrario. “Lo que se le pidió al coronel fue que no fuera a mover la tropa hacia las veredas en las que iban a entrar las AUC”, señaló alias ‘Careloco’.

En el expediente contra CASTAÑEDA, capturado por el CTI en agosto del año pasado, está también el testimonio del paramilitar NELSON MANYIBER PARRA, quien señaló que el coronel era quien ‘limpiaba’ el camino para que las estructuras paramilitares pudieran “cometer las fechorías”.

JOSUÉ DARO ORJUELA, alias ‘Solín’, también señaló al coronel CASTAÑEDA y aseguró que se reunió con él para coordinar operaciones conjuntas: “llevábamos muchachas para atender al amigo coronel”. Otro paramilitar (JHON JAIRO GARCÍA, alias ‘Junior’) afirma que la coordinación llegó al punto de que las estructuras ilegales entregaron al coronel CASTAÑEDA varios hombres de su mismo grupo para ‘falsos positivos’: “‘HK’ habla con ‘Careloco’ y le dice que busque unos muchachos de la organización que tuvieran faltas gravísimas (...) era para darlos de baja y ser presentados como un positivo del batallón 44 por petición del coronel”. De los cuerpos, solo han sido recuperados once.

Como se hace evidente, esta es otra de las muchas pruebas de que los crímenes cometidos por estructuras paramilitares en Casanare son responsabilidad del Estado, tanto por permitir su accionar delictivo, como por ejecutar directamente los asesinatos selectivos y masacres a través de la fuerza pública.

Por: COSPACC

ley alternativa, y que es precisamente al calor de la movilización y con la fortaleza de la organización que se logra no solo entender y diagnosticar nuestra realidad sino a su vez transformarla. Además, los logros de este encuentro se pueden valorar en las siguientes tres dimensiones:

La primera, afirmar que la MANE como referente organizativo y unitario del estudiantado, como proceso histórico que recoge las experiencias, las luchas y las reivindicaciones históricas del movimiento estudiantil, siendo parte activa y propositiva del movimiento social, democrático y popular. Lo anterior nos da un carácter de oposición vehemente al capitalismo y a su fase neoliberal, que las clases dominantes a través de la historia colombiana han impuesto a sangre y fuego, para nuestro país y para nuestra educación.

La segunda, recoger los distintos aportes que alrededor de la propuesta educativa han elaborado los distintos sectores sociales, así como los estamentos estudiantil, profesoral y de trabajadores al interior de las instituciones de educación superior, lo que demuestra y nos reafirma en nuestro propósito de construir una propuesta

educativa junto a todos los sectores sociales del pueblo colombiano.

La tercera, definir los elementos generales de diagnóstico internacional y nacional que han generado la crisis que hoy vive la educación superior y en los que se enmarcará la propuesta de ley alternativa, los principios o ejes rectores de la misma, así como las concepciones políticas generales que sintetizan la nueva educación para que corresponda a la idea de un nuevo país cuyos pilares sean la soberanía, la democracia y la paz.

Por todo esto, la invitación a todos y cada uno de los procesos sociales y comunitarios, sectores democráticos y populares, a que nos sigamos sumando a este proceso

de construcción programática, amplia y participativa. Esta propuesta se ha venido nutriendo desde los aportes y visiones regionales, por lo tanto, como región del Centro Oriente de Colombia que hemos vivido históricamente un conflicto social producto de la explotación intensiva y extensiva de las multinacionales sobre nuestros recursos naturales, y que ha traído como consecuencia un conflicto armado que afecta a todos los habitantes de nuestra región, hoy tenemos el espacio de participación nacional para aportar en las álgidas discusiones

que han surgido al interior de la MANE sobre este y otros temas.

A su vez, las propuestas que han surgido del seno de la construcción programática del movimiento estudiantil, no serán recibidas con buenos ojos por parte del gobierno, ya que son totalmente contrarias a su propuesta de mercantilizar la educación y ponerla al servicio del capital privado. Por tal razón, también hacemos el llamado a que la sociedad en su conjunto critique nuestras propuestas, nutra las mismas y las respalde en las movilizaciones, porque así como tuvimos la capacidad de tumbar la reforma del gobierno, tendremos toda la capacidad de movilización para posicionar nuestras propuestas alternativas de país.

CORONEL DEL EJÉRCITO A JUICIO

ARAUCA: NUEVAS CAPTURAS MASIVAS Y SELECTIVAS

Hace más de un año se inició la campaña contra la judicialización, por la vida, la justicia y los derechos humanos en el centro oriente colombiano, como una herramienta nacida de las luchas sociales que históricamente se han desarrollado en esta región del país, a fin de contrarrestar esa política represiva del Estado y las empresas transnacionales, además de reivindicar la posibilidad de construir un plan de vida diferente al que pretende imponer el capitalismo. Pero por más que se ha demostrado hasta la saciedad que el encarcelamiento -masivo o selectivo-

de pobladores es injusto, arbitrario y obedece a una política sistemática de montajes judiciales que tiene por objetivo destruir el tejido social. Las entidades estatales y los medios de comunicación siguen implementando este mecanismo y mostrándolo como un resultado positivo en la guerra contrainsurgente.

En el caso de Arauca, por ser una de las zonas en las que la estrategia paramilitar no produjo los frutos que el régimen se propuso en su proyecto de asegurar el territorio para garantizar la explotación de sus habitantes y sus recursos naturales, las capturas masivas que iniciaron en el período del anterior gobierno -presidido por Álvaro Uribe- se convirtieron en pan de cada día.

Y no es que en este departamento no se hayan cometido asesinatos, desapariciones forzadas, torturas, amenazas, desplazamientos forzados y demás crímenes de Estado, sino que éste ha mostrado predilección por los montajes judiciales, pues con esto no sólo desintegra la familia, la comunidad y las organizaciones sociales, sino que, como se dijo, aumenta las siempre maquilladas cifras de “resultados positivos contra la insurgencia”.

El pasado 11 de junio se produjo la más reciente captura masiva en el municipio de Saravena, esta vez siendo víctimas dos dirigentes comunales (YORLEY BALLESTEROS ORTÍZ, de la vereda Bocas de Banadías y LUIS ENRIQUE GARAVITO DÍAZ del barrio Pablo

Antonio), un reconocido comerciante de víveres (VLADIMIR LIZCANO PRIETO), una madre de 4 menores de edad y cabeza de familia (LAUREN STEFANY BAUTISTA VERA) y una vendedora de pescado y directiva de la plaza de mercado de Saravena, la señora LUZ MILA GIRALDO RODRÍGUEZ, quien hace parte de una familia que ha sufrido una persecución brutal por parte del Estado: su esposo JOSÉ ORLANDO GAMBOA RICO y su hijo JHON JAIRO GAMBOA GIRALDO, fueron detenidos y judicializados en el año 2006 y recobraron su libertad luego de pasar más de 3 años en prisión, cuando el Juzgado Penal de Saravena reconoció su inocencia; y otro de sus hijos (JOSÉ DIOMEDEZ GAMBOA GIRALDO), fue detenido en en abril del año pasado encontrándose aún detenido en Cómbita.

Este último operativo de capturas masivas también tenía como objetivo la detención de ALEXIS SIERRA JÁUREGUI, quien fue requerido por miembros del Ejército Nacional en su sitio de trabajo. Este joven fue víctima de desaparición forzada y tortura junto con su hermana YAMILE SIERRA JÁUREGUI y el joven SAÚL GUALDRON SIERRA , por parte de la SIJIN de Arauca, crimen de lesa humanidad por el cual se encuentran detenidos y juzgados el mayor de la policía HÉCTOR GUTIÉRREZ ARROYO comandante de esa institución para la época, el Teniente EBERTO VILLALBA OSORIO

y los patrulleros MAURICIO ARLEY HERRERA LUENGAS, JHON FREDY ESTUPIÑÁN, XAVIER ALFREDO VÁSQUEZ y ERICSON NIÑO JERÓNIMO.

Además de las mencionadas, según la Fiscalía existen otras 12 órdenes de captura en el mismo proceso, por lo cual se hace imperativo al movimiento social del centro oriente y de Colombia exigir al Estado colombiano la libertad inmediata de estas personas, lo mismo que de todos los dirigentes sociales y políticos detenidos en las diferentes cárceles del país.

En este sentido, resaltamos que varios de los líderes indígenas y sociales de Arauca recuperaron su libertad, luego de casi un año y medio de inmerecido encarcelamiento, a causa de la incapacidad de los organismos de investigación y administración de justicia de mantener y desarrollar sus propios montajes, por lo cual terminan incumpliendo sus propias normas y procedimientos. Por eso el cacique U’wa ISMAEL UNCACÍA y los otros pobladores de Saravena se encuentran de nuevo dedicados a sus labores sociales, comunitarias y familiares, a pesar de la zozobra que genera el hecho de seguir siendo objeto del proceso penal que se adelanta en su contra.

Pero así como el Estado continúa intentando exterminar el histórico movimiento social del centro oriente colombiano, el pueblo de esta región persiste en la lucha por

materializar su Plan de Vida y la permanencia en el territorio.

Por: FDH Joel Sierra

Carlos Núñez (centro de la imagen con gorra blanca), presidente de la Asociación Departamental de Usuarios Campesinos (ADUC), fue detenido por la Policía Nacional el pasado 18 de febrero.

¿CóMO NOS AFECTA EL TLC CON ESTADOS UNIDOS?

Recientemente han surgido múltiples opiniones y reflexiones frente a las consecuencias del Tratado de Libre Comercio -TLC- con Estados Unidos, que ha entrado en vigencia desde el pasado mes de mayo, como también, y de manera más general, frente a los diferentes Tratados de ese tipo que se proyectan con varios países del mundo. Muchas de estas opiniones y preocupaciones son de inmensa validez, pero en muchos casos son reflexiones que tienden a ser superficiales o que abordan la profundidad del problema solo de manera tangencial.

Quizás el error más frecuente y evidente se remite a la noción de país y el destino que le espera con la implementación del TLC. Dicho error surge, en primer lugar, de pensar en los países como si fueran una sola persona o un solo actor, o un grupo de personas similares y con características idénticas, de ahí que se diga comúnmente que con el TLC «Colombia ganará o perderá». ¿En qué radica tal error? En suponer que toda la población colombiana se encuentra en una situación de igualdad frente a las dinámicas económicas y políticas, y por lo tanto que las reformas socio-económicas tienen un impacto equivalente para los más ricos y para los más pobres del país; o, peor aún, que cuando se habla de «Colombia», se invoque a una especie de ente aislado de la sociedad, es decir de los habitantes, como si Colombia fuera un «algo» ajeno a las y los colombianos.

Por el contrario, si hay algo que caracterice a nuestro país es la diversidad de actores sociales, los cuales se relacionan de manera muy distinta con los elementos que de manera estructural organizan a la sociedad. Por ello, bien sea que se trate de perjuicios o beneficios con respecto a los impactos del TLC, es evidente que se deben particularizar a los eventuales ganadores y perdedores.

De lo anterior se desarrollan por lo menos dos consecuencias lógicas. La primera, es la que tiene que ver con el aumento o disminución de la renta y por tanto con la generación de ganancia y riquezas. Como resulta obvio ésta se concentra en quienes tienen control de la producción y el comercio nacional, pues a nadie se le ocurre pensar que el pequeño productor o el artesano que vende sus productos en las ferias y mercados locales, ahora (gracias al TLC) tendrá cabida en los estantes de los megamercados de las ciudades norteamericanas, europeas, canadienses chinas o coreanas.

En otras palabras, si bien es verdad que algunas grandes, medianas y pequeñas empresas pueden entrar en quiebra (a razón de la competencia con sus rivales extranjeras), también es verdad que el libre mercado solamente genera beneficios significativos a las grandes empresas (a sus dueños para ser más precisos) con

capacidades de competir en el mercado internacional.

La otra cara de los impactos recae sobre quienes no tienen influencia alguna en los procesos productivos o comerciales, los cuales son la mayoría de la población. Frente a ellos son muchas las preocupaciones surgidas desde diferentes aristas políticas y desde los sectores académicos que han mirado con precaución los posibles impactos del TLC. Quizás la más grande de las preocupaciones se relacione con el empleo; dado que la competencia desregulada puede suponer la quiebra de muchas empresas, lo que dará paso a una bola de nieve de desempleo y disminución de la capacidad adquisitiva de los hogares. En tal sentido bien se puede decir que para una amplia porción de los colombianos, las mercancías extranjeras, aunque con precios más bajos, seguirán siendo inaccesibles porque la capacidad adquisitiva de muchos hogares es y será siendo muy baja para miles y miles de hogares en el país.

Al respecto, la publicidad resulta muy evidente: ahora nos dicen, “gracias al TLC con Estados Unidos, se pueden adquirir camionetas Nissan último modelo”. De ahí la pregunta lógica ¿cuántos hogares colombianos podrán estrenar 4x4 por tener la reducción de los aranceles? Para quien sepa que en Colombia todavía más de la mitad de las familias se ven con complicaciones para conseguir la comida, el techo o el vestido del día siguiente, le resultará indignante incluso la misma pregunta y aún más la respuesta.

Por consiguiente, se debe reiterar: es un error afirmar que «Colombia será beneficiada o perjudicada por el TLC». Así resulta más pertinente decir que en Colombia unos sectores limitados se verán realmente beneficiados, mientras otros tantos seguirán igual o peor de como están, bien sea que se trate de aquellos que verán sus empresas ir a bancarrota, de aquellos que quedarán sin empleo, de aquellos que mantendrán un empleo precario o de aquellos cuyas condiciones no pudieran empeorar.

Con esta mirada, resulta más que ingenuo pensar que el problema del TLC se limita a cuestiones coyunturales o superficiales. Es verdad que, por ejemplo, las limitadas infraestructuras debilitan o merman las potencialidades del crecimiento económico, del flujo comercial y por tanto de la competitividad, pero sería ingenuo pensar que entonces con mejores infraestructuras

las condiciones sociales de las mayorías cambiaran. ¿Acaso una troncal de doble vía que comunique el centro del país hacia el pacifico, el atlántico o los llanos, o un puerto con mayor capacidad que el de Barranquilla o Buenvaentura mejorará la vida más del 60% de la población económicamente activa que vive del denominado “rebusque”?

Lo mismo sucede con la revisión de los sectores

ganadores y perdedores con el TLC. No se puede decir que a «Colombia la va a ir bien» con el sector de flores y mal con el arrocero o viceversa. Ello de nuevo supondría pensar que el país es una especie de familia que comparte intereses similares y homogéneos, cuando por el contrario el conflicto social y de intereses caracteriza a la nación. Por tanto, si bien es cierto que muchos sectores padecerán los efectos del libre mercado, también es claro que no existe una relación proporcional entre una mayor competitividad, productividad y rentabilidad de un sector (como por ejemplo el de las flores) y un mejoramiento de las condiciones de trabajo y de vida de quienes laboran en dicho sector. La paradoja incluso es mayor si se tiene en cuenta que en muchos casos la competitividad, productividad y rentabilidad de un sector depende justamente de la reducción de las garantías y condiciones laborales.

Otras reflexiones pueden llamar a la simple lógica. De una parte surge la dificultad por evaluar si el lado de la balanza del crecimiento económico es más importante que el del bienestar social. Ténganse en cuenta que a cambio de dejar fluir «libremente las mercancías y los conocimientos de una lado a otro», se están perdiendo millones de dólares al mes por recaudo de aranceles, dinero con el cual se podía garantizar como derecho y no como servicio, la salud a los colombianos. A lo mejor la mayoría de las y los colombianos preferirían tener aranceles altos a los productos extranjeros pero una garantía de sus derechos, y no lo que el TLC implica: marcas foráneas con precios reducidos, y una vida mercantilizada e impagable que esquiva la posibilidad de acceder a los servicios básicos (téngase en cuenta que en este país el pago a la pensión y a la EPS puede alcanzar casi un 30% del salario mínimo).

Algunas otras reflexiones, quizás más cercanas a la profundidad del tema, pueden invocar a la indignación frente a la violación de la soberanía nacional, la cual evidentemente está puesta en cuestión con la implantación del Libre Comercio y su estructura legislativa. Lo cierto es que el problema de fondo no es el TLC o el neoliberalismo, pues estos son una expresión más de las dinámicas económicas y políticas a disposición de los intereses minoritarios de la oligarquía nacional y multinacional, y de cómo los discursos nacionalistas tienden a implorar por una unidad que solo es conveniente a quienes ostentan el poder político y económico.

Por: Grupo de Estudios Geopolíticos y Territoriales -GEGT-

MEGA, ATENTA CONTRA EL CAMPESINADO Y LA SOBERANÍA Por: Red Juvenil Itoco.

El pasado 15 de mayo empezó a funcionar formalmente el Tratado de libre comercio entre Colombia y Estados Unidos. El gobierno colombiano afirmó que esperaba que dicho acuerdo comercial creara poco más de 500.000 empleos y que el comercio entre los dos países creciera cerca de un 25%. Parte de esta afirmación viene cumpliéndose, es decir, existe un efectivo aumento del comercio entre las dos naciones: aumentaron las importaciones de alimentos realizadas por Colombia.

Para la muestra, uno de los sectores mas fuertes en términos productivos en Cundinamarca, y particularmente en la sabana de Bogotá, ha sido el de producción de leche y sus derivados. Ya con anterioridad el gobierno nacional, siguiendo las orientaciones de la Organización Mundial del Comercio -OMC- (ver por ejemplo ley 170 de 1994 y relacionar con decreto 616 y 2838 de 2006) había intentado entorpecer la producción de leche a mínima escala y su distribucion jarreada, realizada por los pequeños productores argumentando que solo los monopolios de la leche podrían garantizar las condiciones sanitarias para su producción. Ahora, con la firma del TLC, el ministerio de agricultura se encuentra alarmado por los altos volúmenes de suero lácteo que Colombia esta importando.

En el primer trimestre de este año el volumen de importaciones de leche creció en un 543% (publicado en Portafolio.com en mayo 28 de 2012). Por su parte, el ministro de agricultura, a sabiendas de la efectiva quiebra del sector lechero en la sabana de Bogotá, no tuvo mas que preguntarse cínicamente “¿Dónde estaban los gremios agropecuarios, los gremios lecheros, cuando se negoció el TLC con Estados Unidos liberando totalmente, de golpe y de porrazo, las importaciones de lactosueros?”, (publicado en el Boletín de prensa Nº 159. del Ministerio de agricultura, el 17 de mayo de 2012), como si el acuerdo lo hubieran firmado los campesinos y pequeños productores de leche.

De fondo existen una serie de contrariedades en lo que se refiere al tema productivo en la sabana de Bogotá, da la sensación de que los gobernantes quisieran garantizar que Colombia continúe en el atraso incluso violentando su soberanía alimentaria. Son este tipo de políticas las trazadas por proyectos que se llaman a si mismos “de desarrollo”, como es el caso del Modelo Empresarial de Gestión Agroindustrial, MEGA.

MEGA

A partir del 2001 se firma un acuerdo de voluntades entre la Gobernación de Cundinamarca y la alcaldía de Bogotá para hacer de la ciudad y del departamento una ciudad región. En el 2005 una comisión de expertos seleccionó los sectores productivos con mayor potencial de exportación y se propuso el desarrollo de proyectos con capacidad para elevar el volumen de exportaciones. Fue así como nació el MEGA.

El MEGA tiene por objetivo consolidar los sectores productivos con potencial de

exportación, los productos priorizados son fundamentalmente:

• Hortalizas y Tubérculos: papa, lechuga, espinaca, tomate, zanahoria.

• Frutas: mora, lulo, fresa, gulupa, tomate de árbol.

• Lácteos y derivados.

• Flores exóticas y follajes.

• Agroindustria (alimentos procesados).

Lejos de considerar el apoyo al pequeño productor, el MEGA busca la consolidación del monopolio de la producción y la distribución agrícola y agroindustrial en Bogotá y Cundinamarca, además, los esfuerzos presupuestales no se han concentrado en alimentar a la población de Bogotá y Cundinamarca, sino que se piensa elevar el nivel de producción y sus condiciones con el ánimo de exportar, sacar los alimentos de país. La modalidad para productos agrícolas es el monocultivo,

forma que por demás ya es cuestionable, en tanto causa un deterioro generalizado de la tierra y genera su infertilidad.

Optimizar la producción de Cundinamarca pasa por imponer una serie de estándares de calidad, esto significa impulsar la compra de determinados fertilizantes y agroquímicos (los que ellos venden), implantar una forma de organización del trabajo e incluso, dirigir la venta a determinados mercados (los que a ellos les interesa). Detrás del MEGA se esconde un discurso de desarrollo que propone al campesino y pequeño productor “el desarrollo y el progreso”, en una práctica que muestra excesivo paternalismo y que atenta contra la soberanía alimentaria.

Cuesta mucho al país y al centro oriente colombiano que proyectos como el MEGA se concentren en potenciar la producción con perspectiva a su exportación sin considerar los efectos que para el consumo interno traería esto. El MEGA se expande y crea redes de producción y consorcios de

exportación en Bogotá y Cundinamarca fomentando un modelo de ruralidad en donde se extingue el campesino y este pasa a ser trabajador agrícola. El tributo al empresario emprendedor simboliza un atentado en contra de la soberanía alimentaria porque mientras más avancen modelos como el enunciado, menos cultivos quedan para el pan coger y la alimentación de los y las pobladoras de Bogotá y Cundinamarca, pero también se afecta el tipo de alimentación y la forma de producir los alimentos.

Tal y como el Modelo Empresarial de Gestión Agroindustrial fomenta un tipo de producción, desincentiva otros. La producción de alimentos distintos a los elegidos por el grupo de expertos que diseña la estrategia MEGA, no contará con el apoyo de los socios MEGA, que son, nada mas y nada menos que la alcaldía de Bogotá, Proexport, ministerio de agricultura y desarrollo rural, SENA, Sociedad de agricultores de Colombia SAC, Fondo para el Financiamiento del

sector Agropecuario FINAGRO y la Gobernación de Cundinamarca.

Se trata de un proyecto que impone una manera de concebir la producción agrícola en Cundinamarca y afecta la autonomía de los pueblos en lo que se refiere a su manera que producir alimentos. El tema de los lácteos sigue y seguirá estando en el debate dado que no es tan cierto, que con la puesta en marcha del tratado de libre comercio con los Estados Unidos, el sector de la leche siga siendo tan promisorio como se pretendía hacer creer.

La estrategia busca fortalecer a empresarios de Cundinamarca para que sus productos se eleven en calidad y cantidad, es decir, busca apoyar solo a aquellos empresarios “emprendedores” que además, ya poseen medios para la producción. Para el 2015 se buscan exportar 1.500 millones de dólares, acaparar 30.000 hectáreas de cultivos certificados, generar 165.000 empleos directos e indirectos y alcanzar los 17 millones de dólares en inversión extranjera directa (publicado en Comisión regional de

Competitividad Bogotá-Cundinamarca, Plan regional de competitividad Bogotá-Cundinamarca 2010-2019 pág. 122). Alcanzar tales objetivos supone aumentar la concentracion de la tierra en muy pocas manos y destinar la produccion de alimentos especificamente a la exportacion, en el caso de los empleos hay que cuestionar en primer lugar que la meta sea alcanzable en términos cuantitativos, y en segundo lugar la calidad de los mismos. La propiedad de la tierra en la sabana ya es una problemática, es decir, muy pocos controlan la gran mayoría de la tierra y una verdadera estrategia de apoyo productivo para la región, tendría que pasar primero que todo, por afrontar una efectiva reforma agraria y por acordar otra manera de realizar la producción agrícola.

El modelo MEGA agudiza las contradicciones al interior de la ciudad y el departamento y camina hacia la extinción definitiva del campesinado en el departamento, esto constituye un ataque a

la soberanía alimentaria del país.

Deseo que sientas este alborotado Corazón, con tintes de colores que evocan

Tiempos clandestinosTiempos de revolución

De amor RojoTiempos de montañas espesas

Soñadoras y Húmedas De cielos Negros

Claros de agua y cantosDe sol

Cobijados bajo las utopías libertarias. Deseo que sientas, estas manos tibias

Que luchan bajo consignas de Amor eterno

Que aclaman el poder del pueblo y mueren

Por vivir eternamente, bajo el respiro De la revolución cálida de tus besos Y el emancipador roce de tu piel.

DESEOAnónimo