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Edad Media. Contexto histórico, social y cultural. El esplendor de Roma se manifestó en el siglo II , pero el siglo III marca el comienzo de la crisis. En la decadencia de Roma se ubica el inicio de la Edad Media . El concepto de Edad media fue establecido por los historiadores del siglo XVII, quienes fijaron su comienzo en la caída del Imperio Romano (476) y su término, en la caída de Constantinopla en poder de los turcos. La periodización medieval : lo que los historiadores denominan Edad Media comprende diez siglos , desde la caída del Imperio Romano de Occidente (476 ) hasta el comienzo de los tiempos modernos, con el Renacimiento (siglo XV ), aunque el giro de la crisis comience en el siglo XIV . En esta larga etapa, a menudo se reconocen tres momentos. La Temprana Edad Media: desde la crisis del Imperio hasta Carlomagno (siglo V al IX ). En el siglo VIII los árabes invaden la Península Ibérica y la dinastía 1 carolingia organiza el Imperio. En ese tiempo, se produjo la lenta asimilación de los pueblos germánicos 2 por la cultura latina y la separación cada vez más profunda entre Occidente latino y el Oriente griego. En el plano cultural , la Iglesia cristiana actuó como salvaguarda 3 de los restos de la cultura latina: fue un tiempo de supervivencia frente a condiciones políticas y sociales adversas en el que los monasterios, aislados en el campo o la montaña, atesoraron los códices 4 con las obras de los autores clásicos (Virgilio, Horacio, Ovidio). La expansión de los árabes a lo largo del siglo VII por el Cercano Oriente y el norte de África provocó un enfrentamiento entre cristiano y musulmanes 5 que sólo terminó a principios del siglo XX con la desaparición del Imperio Turco. A principios del siglo VIII , lo árabes invadieron España y la isla de Sicilia. Cruzaron los montes Pirineos para avanzar sobre toda Europa, pero fueron derrotados en Poitiers por un caudillo franco, Carlos Martel. Uno de los descendientes de este guerrero fue Carlomagno , fundador de un imperio que aseguró las fronteras del Occidentes europeo contra todos los invasores (árabes desde el Sur, vikingos desde el Norte) 1 Serie de príncipes soberanos en un determinado país, pertenecientes a una familia. Familia en cuyos individuos se perpetúa el poder o la influencia política, económica, cultural, etc. 2 Perteneciente o relativo a Alemania. 3 Custodia, amparo, garantía. 4 Libro anterior a la invención de la imprenta. Libro manuscrito de cierta antigüedad 5 Que profesa la religión de Mahoma.

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Edad Media. Contexto histórico, social y cultural .

El esplendor de Roma se manifestó en e l s iglo II , pero el s iglo III marca e l comienzo de la cr is is . En la decadencia de Roma se ubica e l inicio de la Edad Media . El concepto de Edad media fue establecido por los his toriadores del s iglo XVII, quienes f i ja ron su comienzo en la caída del Imperio Romano (476) y su término, en la caída de Constantinopla en poder de los turcos.

La periodización medieval : lo que los his toriadores denominan Edad Media comprende diez s iglos , desde la ca ída del Imperio Romano de Occidente (476 ) hasta e l comienzo de los t iempos modernos, con el Renacimiento (s iglo XV ) , aunque el gi ro de la cr is is comience en e l s iglo XIV . En esta la rga e tapa, a menudo se reconocen t res momentos.

La Temprana Edad Media: desde la cr is is del Imper io hasta Carlomagno (s iglo

V al IX ) . En e l s iglo VIII los árabes invaden la Península Ibér ica y la dinast ía 1

carol ingia organiza el Imperio. En ese t iempo, se produjo la lenta asimilación de los pueblos germánicos 2 por la cultura lat ina y la separación cada vez más profunda entre Occidente lat ino y el Or iente griego.

En e l plano cultural , la Iglesia cr ist iana actuó como salvaguarda 3 de los res tos de la cul tura lat ina: fue un t iempo de supervivencia frente a condiciones pol í t icas y sociales adversas en e l que los monasterios , ais lados en e l campo o la montaña , atesoraron los códices 4 con las obras de los autores c lás icos (Virgi l io , Horacio, Ovidio) . La expansión de los árabes a lo la rgo del s iglo VII por el Cercano Oriente y el nor te de África provocó un enfrentamiento entre cr is t iano y musulmanes 5 que sólo terminó a pr inc ipios de l s iglo XX con la desaparición del Imper io Turco.

A principios del s iglo VIII , lo árabes invadieron España y la is la de Sici l ia . Cruzaron los montes Pir ineos para avanzar sobre toda Europa, pero fueron derrotados en Poi t iers por un caudi l lo franco, Carlos Martel . Uno de los descendientes de este guerrero fue Carlomagno , fundador de un imper io que aseguró las fronteras de l Occidentes europeo contra todos los invasores (árabes desde el Sur, vikingos desde el Nor te)

La Alta Edad Media: (s iglos IX al XIII) , considerada como la etapa de conformación y consolidación del paradigma 6 medieval , sobre todo por la organización feudal , las Cruzadas, e l contacto entre Occidente y Oriente, el surgimiento de las univers idades y el origen de la c iudad europea. La Alta Edad Media se inic ia con Car lomagno.

Hubo un importante f lorecimiento de la cul tura. Los monjes erudi tos 7

impulsaron la recuperación de los autores c lás icos y el perfeccionamiento del la t ín como lengua l i teraria . La educación y la cul tura l i te raria estuvieron a cargo de escuelas monásticas 8 , s i tuadas en los monaster ios , ais ladas del mundo en lugares apartados.

Pero estas comunidades aún primit ivas , al imentadas por una economía rural de subsis tencia, vivían a la defensiva f rente a los a taques externos de vikingos y normando. Esta s i tuación perduró hasta el año 1000; luego hubo un cambio, producto del es tablecimiento de rutas comercia les , una mayor producción de la t ier ra, un aumento del bienestar de la población y una primera acumulación de r iquezas . En esas nuevas condic iones, e l Occidente europeo pasó a la ofensiva y atacó a l Is lam :

1 Serie de príncipes soberanos en un determinado país, pertenecientes a una familia. Familia en cuyos individuos se perpetúa el poder o la influencia política, económica, cultural, etc.2 Perteneciente o relativo a Alemania.3 Custodia, amparo, garantía.4 Libro anterior a la invención de la imprenta. Libro manuscrito de cierta antigüedad5 Que profesa la religión de Mahoma.6 Ejemplo o ejemplar.7 Instruido en varias ciencias, artes y otras materias.8 Perteneciente o relativo al estado de los monjes o al monasterio.

así se dio inic io a las Cruzadas , expedic iones para recuperar Jerusa lén y los lugares santos .

Esta Plena Edad Media (s iglos XII y XIII) , correspondió a una cul tura urbana, sostenida en una nueva inst i tución educat iva, las escuelas catedral icias (ubicadas junto a la catedra l y dir igidas por el obispo, por lo tanto, ya no asi ladas en un monasterio cerrado, s ino en contacto con todo el mundo en e l centro de la ciudad) . Al l í surgió el movimiento l i te rar io de los modernos que seguían a sus modelos admirados (Virgi l io y Ovidio) y se consideraban en condic iones de igualarlos en su obra, escri ta en la t ín , pero también t raducida a las lenguas romances, es decir las que habían nacido de la combinación del lat ín vulgar con los idiomas vernáculos 9 , hablados or iginalmente en cada región, para dar origen a los modernos i tal iano, francés , etc .

De este impulso renovador en la cultura y la l i teratura nació una insti tución fundamenta l para Occidente: la universidad . A princ ipios del s iglo XIII , a lgunas de las más afamadas escuelas ca tedra lic ias , en París , en Oxford, en Bolonia, se ampliaron hasta convert irse en estudios generales o universal idades , con planes de estudios más ambiciosos y renovados. El rec ibimiento de la f i losofía griega provocó una revolución en e l pensamiento occidental .

A esta etapa corresponde e l auge del feudalismo en lo pol í t ico y en lo económico. El feudalismo era un modo de producción basado en la explotación de la t ie rra mediante contratos personales entre un señor y un vasal lo . El señor proveía protección (mili tar y polí t ica) , e l vasa l lo proveía a l imentos , bienes, servicio mili tar , consejo pol í t ico, según fuera su posic ión en la escala socia l . Los reyes ocupaban el es t ra to super ior de es ta pi rámide, pero su poder se disgregó por de legación en los grandes nobles del re ino, lo que generó permanentes confl ictos entre la monarquía y la ar is tocrac ia 1 0 .

La Baja Edad Media: a part ir del s iglo XIV y XV , se produce la cr is is de es te s is tema pol í t ico y económico. El agotamiento del s is tema de explotac ión de t ie rra , cuyos medios de producción no estaban en condic iones de sa tisfacer las necesidades de una población crec iente , sumado al largo ciclo de depresión económica agravado por sequías y epidemias generó una cris is pol í t ica general cuyas consecuencias perduraron hasta f ines del s iglo XV.

Además, la aparición de una nueva fuente de r iqueza, e l dinero , que fue desplazando a la propiedad de la t ierra, unida a l surgimiento de un nuevo grupo social , la burguesía 1 1 , que basaba su poder en e l dinero, puso en cris is la ideología señoria l y caballeresca, y abr ió el camino para que los reyes af ianzaran su poder y sentaran las bases de los es tados nacionales de la Europa moderna . En este cl ima de inestabi l idad polí t ica y social , conocida como “el orden feudo-burgués”, tuvo lugar paradój icamente un fenómeno de auge cul tural y l i te rario, ya no sostenido por la Iglesia s ino por cí rculos let rados laicos 1 2 reunidos en torno al rey o un gran señor . La l i teratura en lenguas romances alcanzó su máximo desarrol lo y es tuvo en condiciones de compet i r en pie de igualdad con la l i te ra tura escri ta en la t ín .

Característ icas de la Edad Media .

Fundamentación teocéntr ica de la imagen del mundo: Dios es el centro del mundo.Auge de la cul tura monást ica, desarrollada en los conventos, que nucleaba a los clér igos intelec tuales let rados, y que poseía un carác ter marcadamente rel igioso.Pr imacía de un ideal de t rascendencia colec tiva , en el que las relaciones socia les se establecían sobre la base del vínculo señor-vasa l lo .

9 Dicho especialmente del idioma o lengua: Doméstico, nativo, de nuestra casa o país.10 En ciertas épocas, ejercicio del poder político por una clase privilegiada, generalmente hereditaria. Clase noble de una nación, de una provincia, etc11 En la Edad Media, clase social formada especialmente por comerciantes, artesanos libres y personas que no estaban sometidas a los señores feudales. Grupo social constituido por personas de clase media acomodada.12 Que no tiene órdenes clericales. Independiente de cualquier organización o confesión religiosa.

Modo de t ransmisión oral de la t radición y de la cul tura.

Cristianismo y cultura clásica

Los textos de Aris tóteles provocaron un fuerte impacto sobre el mundo cr is t iano y sufr ieron los embates de la censura rel igiosa, especia lmente a causa del racional ismo 1 3 gr iego, que contrastaba notablemente con la fe medieval . Esta s i tuación obl igó a los intelec tuales de la Iglesia a un profundo proceso de reconsideración del mundo pagano 1 4 . A veces debieron conci l ia r o “acomodar” sus creencias con las del mundo griego; por eso, la ref lexión se adaptó a la búsqueda de un pensamiento que unif icara fe y razón. La Escolást ica 1 5 adaptó las bases racionales de la cul tura gr iega a la t radic ión de la Iglesia , para que la razón fuera el punto de apoyo de la fe . Santo Tomás de Aquino fue la f igura más representa t iva de la Escolást ica . En su obra centra l , la Suma Teológica , propuso que la razón era el medio principal para a lcanzar la verdad y, por lo tanto, el fundamento de la fe .

Religión espiri tual idad y arte

La fuerza de la re l igión sobre todas las act ividades humanas y el poder temporal y espir i tua l de la Iglesia hace que las ar tes , fundamentalmente la arquitec tura, la pintura , y la escul tura, se consagren en el ámbito de las ca tedra les y monasterios . Paralelamente, e l s is tema feudal promueve la construcción de cast i l los en lugares importantes para la defensa de una región y res idencia de autor idades locales.

Los templos se decoran con murales y mosaicos que representan escenas bíblicas , y en los al tares y en las puertas abundan las pinturas sobre madera y las tal las .

El rol de la Iglesia en la Edad Media.

Uno de los acontecimientos más relevantes de la época medieval es la organización del Papado (gobierno de la Iglesia) . En ese período los papas lograron var ios cambios destacados, entre los que se cuentan la independencia de la Iglesia de la monarquía, y e l intento de los papas de t ransformarse en autoridades pol í t icas universa les , para gobernar igual que los reyes y emperadores.

En la sociedad e l c lero 1 6 desempeñó un papel pr imordia l frente a la anarquía 1 7

social exis tente, imponiendo e l pr inc ipio del orden, prestando ayuda a los débi les y conservando los res tos de civi l ización.

En la Edad Media los países cr is t ianos se encontraban divididos en diócesis 1 8 , cada una de el las di r igida por un obispo.

Los obispos, sacerdotes y párrocos vivían entre los f ieles, y se les denominaba seculares o seglares 1 9 porque pertenecían a la sociedad. Junto a es te clero secular exis t ía ot ro, cuyos miembros se sometían a un est i lo de vida con est r ictas reglas que l imitaban toda su existencia. Eran los l lamados regulares 2 0 o

13 Doctrina filosófica cuya base es la omnipotencia e independencia de la razón humana. Sistema filosófico que funda sobre la sola razón las creencias religiosas. 14 Se dice de los idólatras y politeístas, especialmente de los antiguos griegos y romanos.15 Filosofía de la Edad Media, cristiana, arábiga y judaica, en la que domina la enseñanza de las doctrinas de Aristóteles, concertada con las respectivas doctrinas religiosas. 16 Clase sacerdotal en la Iglesia católica.17 Ausencia de poder público18 Distrito o territorio en que tiene y ejerce jurisdicción espiritual un prelado, como un arzobispo, un obispo, etc. 19 Dicho de un sacerdote o del clero: Que vive en el siglo, a distinción del que vive en clausura. Perteneciente o relativo a la vida, estado o costumbre del siglo o mundo20 Se dice de las personas que viven bajo una regla o instituto religioso, y de lo que pertenece a su estado

monjes , quienes habitaban los monasterios o abadías 2 1 , y cuya agrupación se conocía como orden. La de los benedic t inos era la más ant igua, y la regla de su fundador —San Beni to— sirvió de modelo a los demás fundadores de órdenes 2 2 .

Los benedict inos debían cumpli r compromisos esenciales (votos) , como la obediencia, la pobreza y el t rabajo. Su labor inte lectual fue bastante destacada, por cuanto diariamente consagraban dos horas a leer y escribi r , s iendo la base del saber medieval. Los f ranciscanos predicaron el ideal de pobreza y humildad, mientras que los dominicos se ocuparon principalmente de la enseñanza y el es tudio teológico en las univers idades.

Pero el aporte de los regulares no se l imitó solo al saber inte lectual . Su influencia además repercut ió en e l desarrol lo de poblaciones y en la as is tencia social , ya que era la Iglesia quien se preocupaba de los pobres , enfermos, viudas e indigentes . En el siglo XII y XIII se fundaron numerosos hospi tales o casas de Dios, incluso en los pueblos más pequeños.

La iglesia y la enseñanza

Durante la Edad Media la ausencia de textos escri tos de terminó el predominio de la enseñanza oral .

La enseñanza durante el Medioevo se dictaba en lat ín y era gra tuita . Estaba exclusivamente en manos del clero, tanto de los sacerdotes en las parroquias como de los monjes en las abadías.

Las escuelas es taban abiertas a todo el mundo y gracias a e l lo fue que personas de muy baja condición económica pudieron educarse y aprender materias como gramática, re tór ica 2 3 , teología , dialéc tica , ar i tmét ica , as t ronomía y música

La cabal ler ía

En un contexto marcado por la invasión permanente y e l confl icto entre los feudos, el ideal de vida exaltaba el espír i tu guerrero. Este marco de heroísmo dio origen a la cabal ler ía . E l va lor de la arrogancia, la f idel idad a l señor, la veracidad y el ansia de gloria const i tuyeron los valores híncales de estos varones nobles . Cuando la Iglesia tomó par t ido en esta ci rcunstancia , le dio un carác ter más servicial : la defensa de los débi les , indefensos y ancianos; la obediencia a los superiores; la cor tes ía , e l enaltecimiento de la mujer y e l al t ruismo 2 4 . Así , e l heroísmo

21 Iglesia y monasterio con territorio propio regidos por un abad o una abadesa.22 Instituto religioso aprobado por el Papa y cuyos individuos viven bajo las reglas establecidas por su fundador o por sus reformadores, y emiten votos solemnes.23 Arte de bien decir, de dar al lenguaje escrito o hablado eficacia bastante para deleitar, persuadir o conmover

quedaba asociado a la fe . El cabal lero seguía una est r icta educación que comenzaba con el t r ibuto a una dama y que continuaba con la preparación para la guerra: la conducción del cabal lo , e l ajedrez (aprendía con esto táct icas de guerra) y las habi l idades musicales. Al f inal izar l legaba la invest idura, una ceremonia de gran solemnidad en la que se lo nombraba cabal lero

Literatura medieval

Toda obra l i te rar ia se or iginaba en la oral idad o en la manuscr i tura , es decir , que la act ividad l i te rar ia dependía de la voz y de la mano. Si , además, se t iene en cuenta que la gran mayor ía de la población era analfabeta , se comprenderá la enorme impor tancia de la di fusión oral . Casi toda la l i tera tura medieval fue compuesta para ser escuchada, ya fuera mediante la reci tac ión o la lectura en voz a l ta .

La composic ión de las obras .

El hecho de saber que la obra l i teraria que se compone no va a ser leída s ino que va a ser escuchada, forzosamente afecta e l modo de componerla : la expresión será más enfát ica, se apelará a diversos t ipos de repet ic iones, en f in , se usarán todos los recursos para dejar una impresión fuerte en la imaginación de la audiencia y para asegurar una correcta comprensión del sentido. Por supuesto que el públ ico medieval tenía una memoria audi t iva muchís imo más desarrol lada, y es ta fue una condición fundamenta l para que e l fenómeno l i terario fuera posible.

A esto habría que agregar que la palabra pronunciada y la palabra escri ta no t ienen la es tabi l idad y la exact i tud mecánica de la palabra impresa. Cada vez que un poema oral se reci taba , cada vez que una obra escri ta se copiaba inevi tablemente se producían cambios y variac iones, involuntarios o premedi tados. En consecuencia, la obra l i te rar ia medieval era muy inestable , es taba en proceso de variación permanente.

Esta inestabil idad no era para todos lo géneros. Si se t ra taba de t ransmit ir la Bibl ia o a los autores clás icos de la Ant igüedad, escri tos en lat ín , e l prestigio y la re levancia de estos modelos provocaba en los copis tas un afán por respetarlos minuciosamente y no int roducir la menor modificación. En cambio, s i se t ra taba de una obra escri ta en lengua vernácula ( lengua moderna de raíz lat ina o germánica, según los países , hablada por cada nación) , se la consideraba par te de un patr imonio común en cuya e laboración podían par t ic ipar todos los que se considerasen dignos de hacerlo.

Una úl t ima diferencia t iene que ver con los contenidos y la extensión de lo que entendía por l i tera tura. En e l amplio campo del fenómeno l i terar io medieval se encuentra , además de la poesía y de la f icción, núcleo de lo que hoy se ent iende por l i teratura propiamente dicha, ot ro t ipo de obras , ta les como bestiar ios (sobres animales) , lapidar ios ( t ra tados sobre las propiedades de las piedras) , l ibros de viajes , crónicas y hasta un género que se podría l lamar de autoayuda, con consejos para bien vivir .

Trovadores y juglares

24 Diligencia en procurar el bien ajeno aun a costa del propio.

Durante la Al ta Edad Media y hasta f ines de l s iglo XII , en una sociedad casi comple tamente i le trada donde la oral idad era dominante , la f igura más impor tante era la de l juglar y su ac tividad, la ac tividad juglaresca , fue la principal práct ica l i terar ia . Apoyándose en el ejercicio adiestrado de la memoria, y e l dominio de la gestual idad y el espacio de actuación – la escena juglaresca, en torno de la cual se congregaba e l públ ico- , el juglar componía o repet ía poemas épicos y l ír icos . Precisamente, el poema épico, o cantar de gesta , e ra su real izac ión más importante .

Los juglares fueron durante es te per íodo toda una inst i tuc ión cul tural , porque cumplían la función de intermediarios entre la memoria colec t iva y la comunidad, de custodios del patr imonio cul tural comuni tar io . Su rec itación y su canto no sólo servían para entretener al públ ico, s ino que const i tuían un ac to de ce lebración de la ident idad compar tida .

Entre f ina les del s iglo XI y princ ipios del XIV, la l i te ratura se pract ica apoyada en el ant iguo concepto griego de composición vocal . Los trovadores , pertenecientes a la región de Provenza , son los pr imeros que hacen una l i tera tura en lengua no la t ina. Emplean nuevas formas, melodías y r i tmos de la música popular . La t radic ión trovadoresca entronca con la cabal leresca: nobles y reyes concebían el canto como una manifestación más de ese ideal . Desarrol laban su arte en la cor te y ce lebraban torneos o compet iciones musicales , con temas referidos a l amor, la cabal ler ía , la rel igión, la guerra y la pol í t ica . Contrataban a músicos i t inerantes , los juglares , para que interpre taran sus obras . Los juglares eran músicos, reci tadores , mimos ambulantes .

Hacia el s iglo XIII los clér igos recluidos en los monasterios comenzaron a producir poesía de tema re ligioso, amoroso o legendario con propósitos moral izantes . A estas producciones se las engloba bajo el nombre de mester de clerecía (poesía culta , escri ta por c lér igos, de tono moral izante, modelo de la cual es e l Libro de Buen Amor , del Arcipreste de Hita) , en oposición a la poesía juglaresca (mester 2 5 de juglaría, poesía popular de tema his tórico y heroico compuesta por juglares , cuya creación más

25 Arte, oficio

impor tante es e l Poema de Mío Cid , de autor anónimo).

El surgimiento del verso escrito. A lo largo del s iglo XII se produjo un cambio en la act i tud de la Iglesia , a la que per tenecía la minoría le trada de la sociedad, que comenzó a preocuparse por l legar a un público más amplio que no sabía leer y que ya no entendía el lat ín . Para e l lo , comenzó a valorar los recursos del juglar y a componer obras en lengua vernáculas . En este momento, la escri tura empezó a desplazar a la oral idad: los cantares de gesta ora les empezaron a ponerse por escri to y los poemas épicos tardíos se compusieron directamente por escri to . Aparecieron poemas l í r icos y narrat ivos cul tos que referían nuevas his tor ias : histor ias de la antigüedad, como las hazañas del Alejandro magno; histor ias de cabal ler ía , como las aventuras del Rey Arturo y los cabal leros de la Tabla Redonda; histor ias sagradas, como los milagros de la Virgen María.

A lo largo del s iglo XIII la escri tura s iguió desarrol lándose y encarando empresas l i terarias más ambic iosas , ya no sólo en verso s ino también en prosa: aparec ieron las t raducciones de la Bibl ia al f rancés y castel lano ant iguo, crónicas universa les y compilaciones de todas las aventuras del c ic lo de l rey Arturo. Todas estas obras enormes sólo fueron posibles por una innovación tecnológica : la difusión del papel , sopor te de la escr i tura , mucho más barato y disponible que el pergamino 2 6 . Por supuesto que la aparic ión de una nueva forma no s ignif icó la desaparic ión de las anter iores: la ora l idad y la escri tura convivieron hasta e l f in de la Edad Media y aún después de la aparición de la imprenta.

La épica .

Un género que se destaca en la Edad Media es e l de la poesía épica que t iene sus ra íces en la épica germánica, pero sólo f lorec ió a f ines del s iglo XI en Francia y de a l l í se extendió por el res to de la Europa occidental . Comparte los rasgos carac terís t icos de toda poesía heroica. Las carac terís t icas de este t ipo de poesía son las s iguientes:

1 . es una poesía centrada en la f igura de un héroe: a t ravés del cual se exal tan las vi r tudes más apreciadas por una comunidad ( fuerza, va lent ía , voluntad, ingenio, as tucia) . El héroe épico otorga dignidad al género humano, porque muestra lo que es capaz de lograr el hombre, ensancha los l ímites de su experiencia , encarna el afán de superar la fragi l idad humana para a lcanzar una vida más plena . Es necesar io ac larar , por úl t imo, que el héroe épico no posee poderes sobrenaturales (no vuela , no lanza rayos ni ve a t ravés de los muros) , s ino las capacidades de cualquier mortal , sólo que en grado super lat ivo.

2. es poesía de acción: porque el héroe manif ies ta sus vi r tudes en la acción, de eso resul ta una poesía esencialmente narrat iva que at rae e l interés hacia su héroe mostrando lo que hace: buscar el honor a t ravés de l r iesgo. En esto aprovecha la tendencia genera l de todo públ ico a disf rutar de un re lato bien contado y a rechazar las moral izac iones y los adoctr inamientos; por eso, la poesía heroica carece de comentar ios e intromisiones del narrador en la his toria contada .

3. su narración es objetiva y de carácter real ista: por lo tanto no hay introspección 2 7 ps icológica de los personajes y sus acc iones transcurren no en ámbitos fantást icos (un mundo submarino o un re ino aéreo) , s ino en ambientes cot idianos para el públ ico: casti l los, bosques, caminos, monaster ios , poblac iones.

4. posee l inealidad y unidad de acción: e l argumento rela ta las hazañas del héroe en forma cont inua s in dis traerse en digresiones ni abordar argumentos secundarios .

5. su unidad de composición es el verso: no la es t rofa ; la vers i f icación se organiza en t i radas de versos de extensión muy variada .

26 Piel de la res, limpia del vellón o del pelo, raída, adobada y estirada, que sirve para escribir en ella, para forrar libros o para otros usos.27 Observación interior de los propios actos o estados de ánimo o de conciencia.

6. se trata de poesía de génesis oral: de a l l í su carác ter l ineal y su vers i f icación no est róf ica, porque para hacer la comprensible y memorizable debía tener una est ructura s imple .

7 . remite a una edad heroica: es decir que los hechos que narra se ubican en un t iempo pasado en que esa comunidad habría alcanzado su máxima gloria . Ese t iempo heroico s i rve de modelo que los hombres de cada comunidad intentan alcanzar y es mot ivo de orgul lo y de af i rmación de una ident idad cultural . Como se ve , la referencia a una edad heroica es tá l igada a la función social que cumple la poesía épica, que consis te en la exal tac ión de los valores de un pueblo o de los valores de un grupo socia l ( los guerreros , por ejemplo) que ofrecen como modelo para toda la comunidad (además, por supuesto, de la función recrea tiva y la conmemorat iva , la épica también es una forma popular de la his toria .

His tór icamente la épica t iene que ver con la exal tación de un héroe que reúne carac terís t icas paradigmát icas de una comunidad. El héroe épico encarna los valores de una colec tividad; sus at r ibutos personales son un resumen de la colec t ividad de la que habla. No es un individuo en el sentido moderno de la pa labra, sus acc iones es tán s iempre subordinadas a una t rascendencia comuni tar ia . Es por esta razón que la épica se asocia frecuentemente a la nacional idad ( los poemas épicos, además, se t ransmiten de generación en generación, se inc luyen como tema educativo: los jóvenes deben asimilar esos va lores heroicos) . Construye un ideal de patr ia , en cuyos valores reconoce la comunidad toda. La Edad media es e l contexto más propicio para la épica, porque es en ese período cuando comienzan a surgir las lenguas vernáculas , es decir , los primeros rasgos de una cier ta idea de nacionalidad. Y por la guerra que diferencia a un grupo de otro para dotar lo de ident idad. La forma específ ica de este género es e l cantar de gesta.

Cantares de gesta.

Fueron los juglares los que difundieron los Cantares de Gesta , extensos poemas en verso que por sus caracterís t icas eran:

Épicos: re lacionados con la construcción de la nacional idad, narraban hazañas, (gestas) de héroes . Tenían t rasfondo his tórico. Planteaban al héroe como figura paradigmát ica, encarnación de valores y vir tudes.Orales: estaban dest inados a la rec itación pública.Anónimos: de autor desconocido.Tradic ionales: la t ransición oral de generación en generación los conservaba en la memoria y garantizaba e l va lor y la antigüedad de los textos .De métrica irregular: (versos de entre 13 y 16 s í labas) y r ima asonantada.

Cantar de Mío Cid.

En e l caso de la poesía épica española, se ha conservado uno de los poemas de mayor cal idad ar t ís t ica de toda la épica medieval: el l lamado Cantar de Mío Cid , que está basado l ibremente en la par te f inal de la vida de un personaje histórico, Ruy Díaz de Vivar, e l Cid campeador, famoso guerrero que vivió entre los años 1043 y 1099, s irvió al rey Alfonso VI de Cast i l la , fue dester rado en dos oportunidades y con un ejérci to propio conquis tó la ciudad y re ino de Valencia, en poder de los moros. Su ac tuación tuvo como marco his tórico la Guerra de la Reconquis ta que enfrentó a cr is t ianos y moros en España durante s iete s iglos , desde la invasión de los árabes en 711 hasta la conquis ta de Granada por los Reyes ca tól icos en 1492.

Pero e l poema no re la ta con f ide l idad de cronis ta la gran empresa pol í t ica y mil i tar de l Cid, s ino que selecciona algunas hechos de su vida (primeros éxi tos guerreros , la conquis ta de Valencia) e inventa otros (e l matr imonio de sus hi jas , su af renta por los infantes de Carrión, el juicio y los duelos resul tantes) de acuerdo con los pa trones épicos comunes a todas las obras del géneros.

Organización del poema

El poema se organiza en t res cantares que la cr í t ica ha l lamado el “ Cantar del dest ierro”, el “Cantar de las Bodas ” y e l “Cantar de la Afrenta de Corpes ”, pero en r igor su est ructura argumenta l t iene dos partes : se narra un doble proceso de pérdida y recuperación de la honra.

La pr imera l ínea argumenta l comienza con e l dest ierro del héroe , injustamente castigado por el rey Alfonso, que ha prestado oídos a falsas acusaciones de los cor tesanos enemigos del Cid ( la pérdida del pr imer fol io del único manuscri to conservado del poema impide saber cuáles fueron esas acusaciones) . Una vez en t ie rra de moros, logra una ser ie de vic tor ias que van acrecentando sus r iquezas y que van acercando más a guerreros que quieren compart i r su gloria , hasta que alcanza su mayor t r iunfo con la conquis ta de Valencia. Luego de enviar t res embajadas con regalos al rey Alfonso, consigue reunirse con su famil ia en Valencia y, por úl t imo, se reconcil ia con su rey a ori l las del r ío Tajo. Como se ve, el tema central de esta l ínea narrativa es la re lación entre e l señor y el vasal lo : e l Cid demuestra ser un buen vasal lo y, f inalmente, el rey se convierte en un buen señor.

La segunda l ínea argumental comienza al l í mismo con la concertac ión de las bodas de las hi jas de l héroe con los infantes de Carr ión, hi jos del conde de Carrión y, por lo tanto, miembros de la al ta nobleza enemiga del Cid, que como infanzón, per tenece a la baja nobleza rural . Los infantes de Carr ión se revelan como cobardes tanto en e palac io de Cid (episodio del león) como en la batal la y , ante tal deshonra , planean vengarse golpeando y torturando a sus esposas . El Cid rec lama just icia al rey, que convoca a un juic io en Toledo. El juic io termina con unos duelos donde los infantes son vencidos y deshonrados, a l t iempo que las hijas del Cid se casan con mejores par t idos: los infantes de Navarra y de Aragón. El tema central aquí es el enfrentamiento entre la al ta nobleza y la baja nobleza en e l marco de las re laciones domést icas de la famil ia de l héroe .

La f igura del héroe en e l Cantar de mío Cid.

El héroe épico reúne en su f igura las vi r tudes más apreciadas por la comunidad en la que surge e l cantar de gesta . Encarna los deseos de la humanidad de superar su fragi l idad y ampliar los l ímites de su experiencia vi ta l . Sus hazañas son la prueba de lo que el hombre es capaz. Y esto es as í porque el héroe épico no posee poderes sobrenaturales: sus facul tades son las mismas que las de cualquier persona, sólo que las t iene en grado superlat ivo. Según la cualidad que predomine en él , e l héroe resultará el más val iente, e l más fuerte o e l más astuto de los mortales .

En el mundo épico, no hay lugar para las ambigüedades: los buenos son claramente buenos y los malos son despreciablemente malos . También son extremadas las pasiones que mueven a los personajes: el vi l lano de la his toria sufre algún t ipo de ofensa que lo mueve a cumpli r una terr ible venganza sobre e l héroe o su clan que , a su vez , el héroe cast igará de manera sangrienta.

Un personaje virtuoso.

El Cid aparece como un personaje vi r tuoso, caracter izado por la mesura (es decir , la prudencia y e l buen sent ido). No es un héroe épico definido por la ferocidad guerrera o la rebeldía, s ino un personaje que enfrenta las desgracias y se lanza a l combate con prudencia y sensatez : en eso reside su grandeza . El Cid asume con resignación las injust icias que sufre y evita responder de manera violenta y ai rada. Tanto es as í , que la reparación de su honor manci l lado por la te rr ible afrenta que recibe de los infantes de Carrión no se logra mediante una venganza sangr ienta, s ino mediante un proceso judicial expresamente sol ic i tado por e l Cid. También se manif ies ta esa mesura del héroe en el hecho de que, pese a l injusto dest ierro que sufre , no desea nunca enfrentarse con su rey y s igue respetando el vínculo de vasallaje (aunque la costumbre de la época le permit ía romper e l vasa lla je y aun atacar las t ie rras del rey s in ser considerado un t ra idor) .

Otros deta lles que muestran esa sensatez pr imordia l del héroe son su preocupación por el bienestar de los integrantes de su hueste y su generosidad con los vencidos .

Dos aspectos más ayudan a configurar ese perf i l : su piedad re ligiosa y su amor por la famil ia. En e l episodio en la entrada en Burgos camino del dest ierro, pese a la s i tuación de desamparo y a la comprobación del desamor del rey, momento de mayor desgracia del héroe , mant iene su fe re l igiosa y acude a la igles ia de santa María para rezar antes de la par t ida. Si se añaden a es to los numerosos fugares en que el héroe invoca a Dios, a la Virgen y a los santos, en demanda de ayuda o como agradecimiento, se hace evidente su rel igiosidad.

Entre la famil ia y el deber.

En cuanto a l amor famil iar de l Cid, queda de re l ieve en t res aspectos que basta con mencionar: lo dramático de la despedida entre el héroe y su famil ia cuando par te a l dest ierro, la alegría del reencuentro en Valencia, en la escena en que muestra orgul loso sus r icas conquis tas a su mujer y a sus hi jas , que miran asombradas la grandeza de los dominios de l Cid, y por úl t imo, e l hecho de que la peor deshonra rec ibida sea la que le causan a t ravés de la afrenta a sus hijas .

Esto no anula la face ta de guerrero valeroso e intel igente que , como héroe épico, e l Cid debe mostrar . Esa faceta br i l la especia lmente cuando vence a los reyes moros Fáriz y Galbe, y cuando personalmente mata a l rey Búcar con un golpe extraordinar io.

Finalmente , la superioridad de su f igura y la dimensión mítica que a lcanza se hacen muy evidentes en e l episodio del león. Mientras que los infantes de Carrión huyen a terror izados (uno se ar roja en un lagar , y el otro se esconde bajo e l escaño donde duerme e l Cid) y los hombres del Cid rodean el escaño enrol lando sus mantos en e l brazo izquierdo a modo de escudo para defenderse y defender a su señor del león suel to , el Cid se levanta con toda clama y, s in tomar ninguna precaución, enfrenta a la f iera . El león se humil la ante el Cid y se de ja conducir mansamente de regreso a la red – no exis t ían entonces jaulas con barrotes de hierro-: es te hecho extraordinar io marca el agudo contraste entre la bajeza de los vil lanos y la estatura superior del héroe , ante quien hasta la na turaleza se r inde.

El héroe y sus compañeros

La f igura del Cid queda nít idamente del ineada como un compendio de valor y habi lidad guerreros junto con mesura , prudencia y sensatez . Definido así el héroe épico, la trama del Cantar de mío Cid se t raza como un doble proceso de pérdida y recuperación de la honra por parte del héroe, vence ambas pruebas y a lcanza la cumbre de toda buena for tuna.

Al lado del protagonis ta se encuentran otros personajes secundarios que también poseen rasgos de heroic idad . Está en primer lugar, Minaya Álvar Fáñez, sobrino del Cid y su principal lugarteniente , que se destaca por su f ide lidad, su valent ía y su buen consejo. Otro de sus sobrinos, que se encuentra en un escalón infer ior , es pedro Bermúdez, guerrero temerar io e inquie to que, por su misma impaciencia y ansiedad, arrastrando tras de sí a toda la hueste caste l lana; pero también, en otros momentos de la his toria , demuestra su corazón noble y una lea ltad incondicional a su t ío y señor .

Por úl t imo, en el poema, se observan dos recursos fundamentales de la composición ora l: las fórmulas y los epítetos . Estas especies de cl ichés expresivos s irven de comodines para i r a rmando los versos mientras se es tá rec itando. El epí te to épico se apl ica s is temát icamente para caracterizar a un personaje , por lo que viene a ser el equivalente de la fórmula aplicada a personas. Los más frecuentes son los refer idos al Cid: el Campeador, e l que en buena hora ciñó espada, el que en buena hora nació . Pero también otros personajes aparecen señalados con epí tetos: Álvar Fáñez , mi diestro brazo; J imena, mi mujer honrada

Los nuevos cabal leros

Entre los s iglos XII y XIII , el papel de los cabal leros en las batal las cambió sustancialmente. Con el advenimiento de las Cruzadas, el enemigo dejó de estar cerca para encontrarse en terr i torios alejados y desconocidos. Surgió así el espír i tu de aventura entre los señores de occidente , quienes comenzaron a soñar con lugares distantes , l lenos de encanto y de mister ios . Estos sueños se sumaron a un nuevo factor: e l nacimiento del espír i tu cor tesano, carac terizado por el ref inamiento de las costumbres . Entonces, los cabal leros ya no sólo debían hacer ga la de su valentía o su fuerza , s ino también de la elegancia, la gracia y la f inura que se cul t ivaba en las cor tes . Quienes encarnaron estos nuevos valores fueron el rey Arturo y sus cabal leros.

La leyenda del rey Arturo.

Cuenta la leyenda que l rey Uther Pendragrón estaba enamorado de Igra ine , la mujer de su enemigo, el duque de Tintagel . Como Igraine no correspondía a su amor, e l mago Merl ín le ayudó a conquis tar la , con la condición de que le fuera entregado el hi jo que naciera de la unión. Esa noche, el duque murió. Luego, Uther se casó con Igra ine. Cuando nació e l niño, fue l lamado Arturo y entregado a Merl ín , quien lo puso en manos de Héctor y lo cr ió junto con su propio hi jo , Kay.

Más tarde, Uther enfermó y murió. El re ino quedó s in monarca y sumido en la guerra civi l durante años. Un día, se descubrió una espada clavada en una piedra con esta inscripción: “Quienquiera que saque esta espada de esta piedra es legí t imo rey de toda Ingla terra”. Pero nadie podía cumpli r la profec ía , hasta que Arturo lo logró. Sin embargo, los barones no creían que tuviera sangre noble y, por lo tanto, no lo aceptaron como gobernante. Aconsejado por Merl ín , Ar turo fue ganando bata l las y prest igio hasta que logró imponerse como rey. Luego, se enamoró de Ginebra y se casó con el la .

Un día , Ar turo pasó junto a un lago del que surgió una espada maravi l losa: apareció entonces la Dama del Lago y le entregó Excal ibur , e l arma que lo hizo invencible en la ba ta l la . Arturo establec ió su corte en el casti l lo de Camelot , y su fama at ra jo a los más val ientes cabal leros . Se sentaban al rededor de una gran mesa ci rcular , la Tabla Redonda, donde todos se consideraban iguales en dignidad y en derechos, incluso e l rey. Un solo asiento estaba vacío, la Sil la Pel igrosa.

Los cabal leros se dedicaban a buscar aventuras ya dar su amor a las damas de la cor te . El mejor cabal lero del mundo era Lancelot (o Lanzarote ) . Él y Ginebra se enamoraron y se convir t ieron en amantes . Al mismo t iempo, Arturo fue hechizado por el hada Morgana, su media hermana, con quien tuvo un hi jo , Mordred, que se convir t ió en la ruina de Camelot .

No se sabe s i Arturo exis t ió realmente, pero se dice que vivió en la Ingla terra de pr inc ipios del s iglo VI. La t radición ora l mantuvo viva su memoria hasta el s iglo IX, cuando el monje galés Nennius lo mencionó en su Historia Brit tonum, escri ta en lat ín . Esa es la primera referencia documentada que existe acerca de su persona. A par t i r de entonces, muchos escri tores reelaboraron la materia

Edad Media. Contexto histórico, social y cultural .

1 . Lee e l texto de la Edad Media. Contexto histórico, social y cultural y responde.

a. Subraya las ideas princ ipalesb. Confecciona un cuadro comparativo con las tres e tapas de la Edad Media en

el que consignes: fechas, datos his tóricos , aspecto cul tura l .c . ¿Qué es e l feudalismo?d. Enumera las carac terís t icas de la Edad Media .e . ¿Qué carac terís t icas t iene la re l igión en este período? ¿Qué es la escolást ica?

¿Cómo se re laciona con el ar te? ¿Y con la enseñanza?f. ¿Qué es e l feudalismo? ¿Qué es la cabal ler ía?

2. Lee e l texto Literatura medievala. Subraya las ideas princ ipales .b. ¿Cómo era la ac t ividad l i teraria en este período, por qué?c. ¿Quiénes eran los t rovadores y quiénes los juglares?d. ¿Qué diferencias exis ten entre el mester de juglaría y e l mester de clerecía?e. ¿Qué cambios se producen en el s iglo XII?f . ¿Qué es la épica? Confeccione un mapa, red conceptual o esquema con sus

carac terís t icas . g . ¿Qué carac terís t ica posee e l héroe medieval?h. ¿Qué es e l cantar de gesta? Confeccione un mapa, red conceptual o esquema

con sus caracter ís t icas

3. Confecciona un mapa o red conceptual con los contenidos trabajados.

4 . Observa la película “El rey Arturo” y analiza. a. Compara el argumento de la pe lícula con la leyenda le ída y es tablece

semejanzas y di ferencias . b . Relata brevemente el argumento de la his toria .c . Caracter iza a Arturo según las caracter ís t icas del héroe medieval ,

e jempli f icando con acciones del protagonis ta . d . ¿Por qué luchaba Arturo y sus cabal leros?

e. Caracter iza a los cabal leros seguidores de Arturo. Ejempli f ica con escenas y acciones de los personajes .

f . Menciona caracter ís t icas propias de la Edad Media que se observen en la pel ícula.