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061La fragilidad de las democraciasde América Latinapor Torcuato S. 01 TelLala dem ocracia está consolidada, lo frág il son las sociedades.s us sectores empresa ria les, cultura les y s indicales .

161 El SUBCONTINENTE AMERICANO

181 Populismo y caudillaje. Una vieja historiapor Adrián Bonilla y Alexei Páezla ambigüedad del popul ismo es tan manifiesta como labrutalidad de Las dictad uras que tos caudillos legaron.

251Los indicadores econ ómicosy el bienestar socialpor Dr.AntonioOrta MenaEl neohberalisrnc. e l Consenso de Washington y lagtobalización son los condicionantes del futuro.

321La ley de la pobrezapor Hemando de SotoEl problema está en definir el concepto de propiedad: a lospobres no se les permite usar sus activos como a los ricos .

341Las relaciones con Estados Unidos.Tiempo tormentosopor Juan Gab riel TokatUanEl unilateraUsmo de Washing ton -m tereses económicos ydeseguridad- afecta las relaciones con América Latina.

371Contigo en la distancia. Los lazos con laUnión Europea tras la Cumbre de Madridpor José Antonio SanahujaA pesar de la eu foria de las cumbres de Rioy de Madrid, lasrelaciones eurolalinoamerica nas est án estancadas.

411 Las inversiones españolas. ¿Una apuestaarriesgada?por Álvaro CalderónLa ráp ida expansión de las em presas españolas empezó atener probtemas en 2000. La banca ha sido la más afectada .

461Ciudades paranoicas. Miradasdesde América Latinapor Néstor García CancUnlMás del 70 por ciento de los lat inoamericanos vive en grandesciudades . El proceso de las conurbaciones se afianza.

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o .

531Las poblaciones indígenas. Un viejofantasma recorre América Latinapor Arturo AriasELmovim iento indíge na, que atraviesa un momento inédi to.sigue avanzando en medio de conflictos no resueltos.

581 LIBERTAD, DESIGUALDAD Y DIVERSIDAD

591Brasilpor Bolívar Lamounier "J Carlos Piola elección de Lula confirma el éxito de la transición políticay demuestra que la democracia es una re alida d consolidada.

641Méxicopor Lorenzo MeyerCossl'olas tremendas desigualdades sociales obstaculizan lademocracia inaugurada por Fax en las elecciones de 2000.

671J\rgentinapor Roberto GargareUa¿Qué le espera a un país con un millón dejóvenes sin trabajoyque ha perdido La confianza en su propia sociedad?

701LiDERES, CAUDILLOS YTíTERES

721Venezuelapor Luis E. Landery Margarita L6pezMayaEl petróleo está detrá s de la crisis polít ica qu e am ena za conhacer suc umb ir eLproyecto populis ta de Hugo Chávez.

751Chilepor Manuel Antonio Garret6n M.Aunque se haya recuperado el régimen democrático. éste esincompleto yde pobre calida d.

781Colombiapor Eduardo Pizarro y Ana Naría Bejarano¿Qué sufre el pa ís? ¿Una guerra civil. una guerra con tra lasocied ad. una guerra ambigua o una guerra antiterrorista?

811 Perúpor JuUo CorterUna creciente minoría de indigena s emerge ya nticipacambios en el actual patrón del poder.

841Cubapor Rafael RojasEl sistema cuba no es un capitalismo ce Estado que sejus tifica con una retórica nacionalista .

971iNDICE DEL AÑO 2002

PARA SABER MÁS87 LIBROS

90 LITERATURA

92 CINE

94 VIAJES

96 WEB5

VANGUARDIA DOSSIER_......,_......N"men> 4 f NfllOJ"'''RZO ZOO3

Edil..,... .... 0ad 6, c.,.~ de G0d6c.n.... _---Jose ...........~-toOIj..\-.~Balllla

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Populismoy caudillajeuna vieja historia

Adrián 8onilJ3 y A\exei PáezPRon,soRES DI! 1..\ I'ACUrrAD I.A"IJl'OAMERI<:.Al',\

oEo F.NClAS SOClAl..ES 11'1 .AC.~OI ENECUADOR

l. E\ importante señalar qll!' 02'1 concep to "populisrno" es de una enor­me ambigü edad. yaque bajo l':'11' l('rmino se han identificado los másdiversos tipos dr polírícas. Ha sido un concepto ) NJnJKW 1S. bajoel cualpu ede cobijarse casi cualquier contenido. por lo que cucstíonar su uJi.lida d an a lítica ha sido una tradición dc' la, cienci as sociales latino­americanas. Sin embarg o. el populismo•. A'X iSI~1

....._ N EL AÑO 2002 LULA LLEGÓ

finalmente a la presi­dencia de Brasil. LucioCuriérrez gan ólas elec­ciones en Ecuador, El in­dígena cocalero EvoMorales estuvo a punto

••••_ de ser presidente boli­viano. El ex presidente Carlos Menemse presenta como uno de los candida­tos más fuertes en Argentina. ElAPRAperuano obtuvo una victoria impor­tante en las elecciones locales. El pre­sidenre Ch évez sobrevive en Venezue­la. Todosellos han sido motejados depopulistas. En todos los paises latino­americanos persiste una vieja tradi­ción política que interpela al "pue­blo", que rompe con los convenciona­lismos del swblishnlL'11t. que tiene lahabilidad de usar múltiples ideologías,que eventualruente moviliza a las ma­sas. yque generalmente se organiza de­trás del carisma de un caudillo.

16 ".NGU/.RDI/' I DOSSIER

Desde mediados de los años 80. enLatinoamérica renació un fenómenopolítico que se consideraba extinto: elpopulismo. Asociado a Jos quiebros in­ternos de estas sociedades, en particu­lar al choque supuesto entre "trad i­cionaíidad ~ y ..mod emidad ~ polirica. elpopulismo ya había sido una formapreeminente de discurso y moviliza­ción política en la América Latina en­tre los años 30 y60 del siglo pasado. Lastradiciones sociológicas weberianassupusieron que desaparecería comoconsecuencia de la modernización deesos países, pero esto no ocurrió.

Movimientos y lideraz­gos de muy diverso ti­po. e ideologías, emer­gieron en los años80 en el continen­te, identificadoscon la imagen de"populisrno''.'En el Perú, el

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LOS IJOERE5 POPULARESy EL DICTADOR

Enel primer cuarto delsigLo XX se fraguarondiversoslocos deinsurrecciónsocialcontra el poder deLEstado oligárquicoencabezados porpersonajes capacesdeorganizarla guerrilla.En México son EmiüanoZapata (fotode laderecha) y Pancho Villa(entre los generaLesÁlvaro Ob~ón y elestadounidenseJohn PershingJ. y enNicaragua. CésarAugustoSandino (acabeücl. la otra carade la moneda fueRafael LeónidasTrujillo. que implantóuna férrea dictadura demás de 30 añosen laRepúbLica Dominicana.

gobiernodeAlancarcía fue asociadocon el populismo "clásico" debido asus políticas redistributivas. su desa­fio al sistema flnanciem internacio­nal o a su política exterior distantedeEstadosUnidos. Enel mismo Perú,elsiguiente gobierno. el de AlbertoFujimori. también fue llamado po­pulista. pero <'1 mismo orientó suspolíticas hacia la privatización. yhada una alianza con los organis­mos financieros.

Dos rivales locales y un mismomodo de clasificarlos: el peruanoAlanGarcíaseencontraba emparen-

tado muy cercanamente con el pro­yecto del viejo partido fundado enlos años 20. la Alianza Popular Re­volucíonaria Americana (APRA) bajolasombra de un caudillo tipiro latino­americano: Vietor Haya de la Torre.quien se definía a si mismo comoanticomunista y antiimperialista.mientras que Fujimori. como Menemen la Argentina. expresarla el emer­ger de una nueva forma populista.distinta a la anterior. liberal en loeconómico.autoritaria en lopolitice.peroigualmente levantada en un dis­curso antielitista no convencional.

El popuUsmo comoformade régimen político

B populismo en Latinoamérica.nació asociado a un proyecto histó­rico. el de la conformación del mo­delo de Estado nacional-popular al­rededor de losaños 40.Ainiciosdelsiglo pasado se deteriora el modeloprimario agrícola latinoamericano.basado en exportaciones de frutas.cerealeso azúcar. así romo la formade Estado asociada al mismo: elEstadoliberal-oligárquico. que se ea­racterizaba por la concentración delpoder en elites sociales aristocráti-

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p o P U l. I S M O y e A u n I L L A J E. U N A V I F! J A H 1ST o l{ I A

GIS terratenientes y exportadoras. ElEstado carecía de autonomía frente aestos grupos. su poder era muy limi­tado. yla sociedad de aquella época erarural aunque había centros urbanosmedianos en todo el continente.

El modelo estatal prepopulista fa­vorecía la concentración del poder enel reducido grupo que se asociaba almismo. Patriarcas y familias localesconcentraban el poder económico ypolítico de las regiones. Sin embargo.la misma lógica de acumulación im­plícita al modelo libera] oligárquicodesató el crecimiento de centros urba­nos y acumulaciones poblacionales,en especial en los puertos. necesarias

, -

para la exportación. con el consiguien­tedesarrollo de industrias de servicios.

En los años 20y30 elel sigloXX apa­recen nuevosgrupos sociales excluidosde la partid pación política ycon capa­cidades organizativas crecientes: tra­bajadores industriales. artesanos, maes­tros profesionales libera les. El des­arrollo de movimientos comunistas.socialistas y anarquistas de inrelecrua­les y trabajadores como la FederaciónObrera Revol ucionaria Argentina (PO­RA) i1USTTdn eIconfl ietopresente en lassociedades i\ inicios de siglo.Lame51iórrsocial aparece en escena. y las dernan­das de amplia ción del sistema políticoe institucional están a la orden del día.Emergenlos partidosde izquierda mar­xista y socialismos nacionales. que sesuman a los liberales. conservadores yradicales laicos de finalesdel siglo XIX.

El carácter cerrado del Estado olí­garquico imposibilitaba la inclusión deestos nuevos sectores. Elpaisaje mismose transforma con dinámicas acelera­dísímas de crecimiento urbano. Bue­nos Aires es en los años 30. por ejem­plo. una de las ciudades más pobladasdel mundo. El ritmo vertiginoso decrecimiento de Méxicoempieza a des­pegar y ciudades como Río de [aneiroson la epítome de urbe global de esostiempos. El Estado oligárquico se ten­siena y esincapaz de cubrir el proble­ma social y la producción de identida­des ciudadanas que lo legitimen anteel conjunto de la población,

Con la Primera Cuerra Mundial se

LA APOTEOSIS

CASTRISTA

Cuba es el único

país del continente

con un régimen

comunista. En

pugna permanente

con Estados

Unidos. la crisis

mas grave -te delos misiles-se vivió en octubre

de 1962_

inicia la desarticulación de las econo­mías latinoamericanas frente al mer­cado mundial. la crisis a raíz del oct:u­bn.' negro de Wall Streety su impactode­vast ador sobre los mercados deexportación produce el contexto histó­rico en que emergen los primeros mo­vimientos populistas latinoamerica­nos: la caída de un régimen de acumu­lación produjo la búsqueda de nuevosmodelos, tanto en la e-conomía cornoen la política,que incorporaron secto­res populares urbanos en el Estadoy enla producción de identidad nacional.

La aparición de las U masas" supusotambién la construcción de liderazgosautoritarios yel antagonismo pueblo-

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POPUI.ISMO y CAUDILLAJE. UNA VIEJA HISTORTA

oligarquía. lo que se expresaría en losmodelos de Cenilio Vargas(1930-1945)2YJuan Dom ingo Perón (1946-1976\.enBrasil y Argentina, respectivamente.o en las proclamas de Caitán (1948) enColombia. el aprisrno de Haya de IdTorre en Perú y el discurso de VelascoIbarra (1936-1970) en Ecuador,

Estas tendencias sociales produci­rían en las décadas siguientes deman­das económicas. que se expresaron enun creciente activisrno del Estado en laeconomía. La industrialización susti­tutiva de importaciones fue u na nece­sidad para la reconstrucción cconó­mi ca, y mucho antes de ser expresadapor la Comisión Económica de las

abierta y expresiva de la gente comúnen las calles. apoyando el proceso.

El Estado populista imagina la na­ción teniendo lo "popular" como eje.Un trípode politico se construye en­rre los empresarios "nacionales". lostrabajadores organizados y el Estado,que empuja políticas de crecimientopara el mercado nacional, en contra­posición a la orientación exportadoradel modelo liberal oligárquico. Éstafue la temprana premonición del mo­delo CEPAL de los años 50 y 60. Esteproceso tiene sus referentes más clarosen las políticas de Lázaro Cárdenas.-nacionalíza el petróleo en México-.Getúlio Vargas en Brasil y Juan Perón

movilizan. El carácter de las sociedadeslatinoamericanas se ha representadocomo la imagen de "repúbli cas sin ciu­dadanos", marcadas por el racismo y eldesprecio elitísta.por la exdusióny poruna democracia reducida al mero ri­tual electoral. Estos elementos de laimagen del poder no han variado sus­tancialmente en los últimos 70 años enlas percepciones ; por ello, el reto alstablishmcnt traza el puente entre losviejosy nuevos caudillos.

El discurso populista como prácri­ca atraviesa el espectáculo de la políti­ca: la campana electoral, la demagogiade la oferta, Todos los candidatos en al­gún momento son populistas: neoli-

LA REVOLUCiÓN IMPOS IBLE. La muerte del carisrn ático Ernes to

Che Guevara en la sierra boliviana en 1967 frustró el intento de

trasladar la revolución marxista cubana al continente.

LA CONTUNDENCIA DEL PODER. México, plaza de las Tres Culturas

en Tlatelolco. noviembre de 1968. El ejercito del PRI reprime a

sangre y fuego -unos 300 muertos- la rebeldía estudiantil.

Naciones Unidas para América Latina(aPAl1948), fue una política en eje­cución inconsciente. Esta lógica eco­nómica incrementó la relevancia delos asalariados y aceleró procesos deinclusión de amplios sectores en lagestión gubernamental, Ni la clase me­dia. ni los trabajadores, .o.i los campe­sinos fueron relevantes en el Estado oli­gárquico liberal.

Así. durante los años 30 y 40 emer­ge el Estado nacional-popular, que in­tenta la incorporación e inclusión delas "masas" en el proceso político, me­diante mecanismos verticales. con li­derazgos y discursos cargados de sím­bolos que aluden al pueblo ya la na­ción, así como con la pa.rticípacién

en Argentina. que montan proyectosgigantescos de industrialización.

Populistas y caudillos comoescenografía y conducta

Una gran parte de la literatura serbre el populismo enfatiza los aspectosreferidos al "espectáculo", a los meca­nismos de comunicación política, a laspClformarues asociadas a los mism os.

Si hay algún elemento discerniblede continuidad entre el populismo dá­sico, como aquel del ecuatoriano Velas­ca Ibarra o del peruano Haya de la To­rre, y los neopopulismos de los años 90y del siglo XX1, como los de Lula o Hu­go Chávez,serían las dimensiones siro­bólicas que los dos procesos aluden y

berales y socialdemócratas. Desde la vi­sión del discurso, en cambio no codosson populistas, pueden ser de izquier­da o de derecha, por ejemplo, El po­pulisrno proporcionaría un sucedá­neo de participación polírica. mediadapor los rituales de la calle; la sensaciónde poder social, por la imagen de co­munidad: la Venezuela Bolivariana deChávez. o el Perú Posible de Fujirnori,la potencia Argentina de Menern. Estetipo de participación termina contras­tando la idea de "democracia" con larealidad de iniquidad, evidencia ycues­tiona, aunque no necesariamente re-

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POPUL1SMO y CAUDILLAJE. UN!\ VJfJA TTISTORTA

forma. la exclusión de sociedades ra­cistas. clasistas y jerárquicas.

Laimagen que genera el populismomuchas veces se asienta sobre ideasantagónicas que legitiman eventual­mente contenidos autoritarios. Imá­genes como la lucha entre "pueblo" y"oligarquía". entre "nosotros" y "losotros", en un contexto de democraciaineficiente, fertilizan el terreno para laconfrontación. El carácter del liderazgoque dirige la movilización populistaes individualizado. extremadamenteconcentrador, y puede induso aludir aimágenes religiosas. cosa que puede

LA ViASOCIA LISTA,

BOMBARDEADA

La experienc ia

socialista de

Salvador Allende

en Chite fue

boicoteada

primero por la

derecha

dernocristiana ydinamitada

después por

Augusto Pinochel

en 1973. La

dictadura seprolooqaria hasta

entrados los 90.

22 IJANBUAROlh [) (I<' ~lfR

verse con da ridad en el mesianismo dePerón y Evita. en Menem y Bucaram, enFuj imori, Uribe o Chávez,

La espectacularidad dramática delpopulismo cobra un nuevo ¡ÚVl'1, araíz de la orientación mediálica de lassociedades actuales. Los instrumentosde comunicación generan un escena­rio donde se despliegan nuevos gé­neros coruunicacionales y de relaciónentre el líder con las U masas". CarlosMenem habló en público 3 -con co­bertura televisiva- 222 veces durante1992. y 298 ocasiones él lo largo de1993. a lo que cabría sumar sus viajes

al extranjero, también cubiertos ex­tensivamente por los medios.

E] liderazgo también realiza lasfantasías de ascenso social y los sueñossociales de los grupos convocados porel discurso: el líder canta con el gTUpO

de rock de moda en los 60 (Bucaram).juega fútbol y secasacon una ex missUniverso (Mcnern) o es el "chino" quelogra ascender al pináculo del poder(Fujimori). Este líder utiliza un lengua­je rnístico. aludiendo a la patria encaronada en el pueblo al que redimirá.

Una característica importante delpopulísrno conternporaneo es la pre­eminencia del "movimiento" sobre lasestructuras formales -partido o sindi­catos- que le prestan sustento. Conello se evidencia aún más el carácter in­dividual del liderazgo. ya que el parti­do en general sirve como mero dispo­sitivo electoral que se subordina ple­namente al caudillo. quien a su vezdefine los limites y procesos del movi­miento populista.

No es posible imaginar el populis­mo latinoamericano sin pensar en lasdinámicas que le dan existencia: ma­quinarias electorales, que funcionansobre la base del intercambio de leal­tadespor servicios o recursos-clienre­lismo- y jefes locales -caciquismo-.son características centrales en la po­lítica latinoamericana. rl dicnrclisrnoimplica una visión pragmática de la po­lítica. que articula los factores simbó­licos de la negociación. Por ello. el po­pulismo desata también una dinámicade producción de identidades socia­les. regionales. étnicas. culturales don­de existe un dinámico intercambio en­tre las clientelas. los caciquesy el líder.Éste seriael casode la construccióndela imagen de los "descamisados" arogenrinos, o de revalorización culturalde los indígenas ecuatorianos o boli­vianos. así como de los pobres elelas fa·velas brasileñas.

El popu lis mo, hoyA finales de Jos años 60 e inicios de

los 70 el modelo deEstado nacional-po-

3. Jos... Nun relata esto en su texto l t ¡ltd lSlf h! . r,'p l t'

X'II l<ln OII y m<-n<mí.<lI/v.

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!)OPULlSMO y CAUDILLAJE- UNA VIEJA HISTORIA

El DRAMAARGENTINO. EL popuLismo se person aliza en América con el triunfo de Perón (19461 y eL carisma de Evita lo consolida. EL

modelo de Estado nacionaL-popular, interrumpido por los miLitares en 1955. se recupera en 1972 y vueLve a caer en 1976 bajo el sable

de Videla. Tras el fiasco de Las Malvinas. Alfonsín abre en 1983 un período acosado por un neopoputismo de gestos y esquilmador.

pular se agotó. en un con texto signadopor la crisissocial. económica y políri­ca, especialmente en los países delCono Sur, crisis que dieron paso a lasbrutales dictaduras militares. Lacaídade este modelo de Estado surgió de lacombi nación de varios factores.Primero, seasistió a una crisis del cre­cimiento económico, que eliminó unapata del "trípode" en el que se asenta­bael madeja: cayó la capacidad distri­butiva del Estado. Esto se debió a la im­posibilidad de transitar de la fase "sim­ple" de sustitución de importaciones-la de los bienes de consumo masivo­a la siguiente fase, la producción debienes de capital. Las economías lati­noamericanas ruvieron que flexibili­zarse. Sonlas reformas que empiezana emprender gobernantes como elgeneral Pinocher.

Por otra parte. los trabajadores or­ganizados y la izquierda radicalizandramáticamente sus posiciones políti­cas. levantando proyectos revolucio­narios que retan la existencia del m-denpolítico vigente. Al lende eselegido pre­sidente en Chile. Perón vuelve nueva­mente el poder. aupado por los sindi­catos. dictaduras izquierdistas se im­ponen en Ecuador y Perú. Lacrisis delos regímenes de la década de los 60desembocó en la instauración de lasdictaduras militares de derecha, quedestruyen a sangre y fuego las organi­zaciones sociales y los partidos de iz­quierda. desestructurando las basesmismas que sustentaban los proyec­tos nacional-populares, y planteandouna nueva alianza con las empresastrasnacionales, los sectores interna­cionalizados del Estado y los ernpre-

sarios orientados hacia el mercadoexterno. Este modelo de Estado buro­crático-autoritario es el primero engestionar una política económica decarácter neoliberal, que también -teó­ricamente- debió haber sepultado alpopulismo, (>0 nombre de UD manejotecnocrático de la economía. articula­da por el mercado y su magia.

Los modelos militares no pudie­ron estabilizar un nuevo Estado apolí­tico, porque en 1982 se desató unanueva crisis económica en AméricaLatina, provocada por la deuda ex­terna. Ellos empiezan los procesos deajuste estructural: privatízacíones, dis­ciplina fiscal. políticas monetarias tes­

trictivas y desmonte de los mecanis­mos de intervención estatal. sobre elmercado -subsidios, aranceles, políti­cas de desarrollo industrial,

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POPULISMO y CAUDILLAJE. UNA VIOJA H1STORIA

GUERRILLAVCAMBIO. La figura del indigenista subcornandante Marcos convive hoy en el

México de Vicente Fox, el hombre que pudo con el enquistado PRI.

Este nuevo régimen es cualitativa­mente distinto al del Estado desarro­Uistade los60. Los sectoresorganizadosde t rabajadores bajan enormemente superfil, dando paso a un proceso de ato­mización y destrucción del tejido so­cialdurante los 80 y 90.]l1s[(unente poreso la base social populista se repro­dujo porque las condiciones de la ex­clusión resucitan: por el contrario, enel contexto de disolución y concentra­ción de la riqueza de los 90, la retóricapopulista cobra nuevo brío, ya que enmedio de la anemia proporciona un

elemento clave para la población: unsistema identitario que reconstruye lasensación de pertenencia.

Los populisrnos contemporáneosviven en la esquizofrenia del discursoelectoral. Las alianzas electorales pue­den hacerse con sectores gremiales ode izquierda y centro izquierda, cues­donadores de las polí ticas existentes.pero en la práctica de gobierno, por elcontrario. las coaliciones previas y losdiscursos electorales se descomponenaceleradamente, y los liderazgos adop­tan las recetas que antes cuestionaban.Menern llegó al poder en brazos de lostrabajadores y peleando contra el neo­liberalismo. pero su alianza fue con lossectores económicos más poderosos.Fujirnori ganó su primera elección re­chazando el neoliberalisrno "salvaje"de Vargas Llosa,y una de sus primerasmedidas fue un ajuste económico másallá de las previsiones del propio FMI.

Terminó su gestión construyendo unbrutal y cínico sistema de gobierno. baosado en la polida secreta y una alianzacon la cúpula militar. Po líticamente,los populísrnos buscan su continui­dad temporal mediante transforma­ciones ínstüucíonales que pueden pa­sar por un golpe de Estado -casoFujimOli- o búsqueda plebiscitaria delcam bio de las reglas de juego -casoMcncm o mm Guivez.

La gestión de gobierno de los po­pulismos contemporáneos se caracte­riza por ser E'I otro lado de la medalla

de lo propuesto por el populisrno clá­sico. La movilización social solamenteseda en loscontextos electorales. comomaquinarias políticas y clientelares,al contrario del modelo de mediadosdel siglo XX. donde las movilizacionessociales fueron un factor determinan­te de la vida política, la cont inuidad ysupervivencia misma del gobierno, co­mo puede observarse en el arquetípicocaso del peronísmo. LaVenezuela cha­vista es una excepción.

El popuLismo, laglobaLización y el futuro

Los inicios del siglo XXI parecenes­tar orientando a Latinoamérica en unanueva dirección política. El triunfo deHugo Chávez en Venezuela a finales delos 90 y sus subsiguientes victoriaselectorales por cinco ocasiones en pro­cesos plebiscitarios parecieron dar elprimer campanazo de atención acerca

de este cambio cualitativo que se per­cibe en el ambiente. Sibien el Gobiernode Cnávezseencuentra abocado a unacrisis de grandes proporciones, queimplica confrontación social abierta ypolarización de la sociedad. su pre­sencia en Venezuela será de largo pla­zo, lo mismo que ocurrió con Pcrón enArgentinaen el pasado.

El triunfo de Luis Ignacio da Silva.ulla. en Brasil forma parte central de es­ta reorientación en proceso. En Ecua­dor se asiste J I;} victoria en segundavuelta de un candidato de origen mi­litar, vinculado a los movimientos so­daíes, las organizaciones indígenas ylanueva izquierda ecuatoriana. La polí­ticaque plantea Lucio Gutiérrezestaríaen sintonía con la nueva orientaciónantes señalada. cercana al nacionalis­mo y las interpelaciones a lo popular,pero en un nuevo contexto. Alan Gar­cíay Fujimorigozan de buena salud enel Perú, y las expectativas en Argentinay Uruguay son las de un nuevo forra­lecirniento de los populismos.

Vistas las circunstancias, cabe pre­guntarsesi estará germinando un nue­vo populismo. que expresa opcionespolíticas diferentes a las que domina­ron la escena los últimos 15 años. Estepopulismo neoclásico supondría ciertarecuperación del histórico nacionalis­mo la tinoarn« ricanr-, ';J se iI provechaJiade la tormenta de criticas alas políticaseconómicas impulsadas por los orga­nismosfinancieros internacionales.

Parece ime resan te realizar u na ú l·tima constatación: el carácter del pro­ceso democrático institucional ('TI

América Latina esdeñnitivarnente di­ferente al de los modelos europeos oc­cidentales. y las instituciones globalesdeberían dar cuenta de aquella parti­cularidad. Lapregunta que queda en elaire es de qué manera articular esasrealidades a procesos de profundiza­ción democrática, resolución de I?S in­iquidades. confrontación de la pobre­za e inclusión social, sin rensionar losprocesos institucionales hasta un pun­to sin retorno. con lo cual, en el peor delos escenarios. América Latina puedevolver a modelos autoritarios. represi­vosy excluyentes.