echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

111
CELEBRAR LA HJCARISTfA CON LOS NIÑOS/2 Douúsigps> ütl 'ílswpsj OiúhmrlD \VÍ CELEBRAR Y ORAR ditóFinl CCS

Transcript of echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

Page 1: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

CELEBRAR LA HJCARISTfA CON LOS NIÑOS/2 Douúsigps> ütl 'ílswpsj OiúhmrlD

\VÍ CELEBRAR Y O R A R

ditóFinl CCS

Page 2: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

Colección

CELEBRAR Y ORAR

ÚLTIMOS TÍTULOS PUBLICADOS

30. Vía Crucis. 30 formularios. Martín Irure. 33. Símbolos y plegarias en la Tercera Edad. Emeterio Sorazu. 34. Eterno amor de Madre. Santiago Alcalde/Juan Carlos Martín. 36. ¿Qué te pasó, Jesús? José María Rueda. 37. Celebraciones con disminuidos psíquicos. Juan Bautista Lunares. 38. Símbolos y expresión religiosa. Emeterio Sorazu/Juan R. Larrañaga. 39. Días de Madre. Luis G. Gredilla. 40. Saludos vocacionales. Mario Pardos. 41 . El Triduo Pascual. Alvaro Ginel. 42. Desde el regazo de María. Toño Fernández. 43. Lecturas mañanas. José Alegre. 44. Celebrar la Eucaristía con los niños/1. José Ramón Echeverría. 45. Oraciones de la mañana. Ana Prieto López. 46. Tiempo de vivir en esperanza. Nando García. 47. Meditaciones breves en Cuaresma. Roberto Cortés. 48. ...Yprepararon la Pascua/1. Isidro Lozano/José L. Rodríguez Pacheco. 49. Celebraciones del Signo. José Miguel Burgui. 50. ...Yprepararon la Pascua/2. Isidro Lozano/José L. Rodríguez Pacheco. 51 . Un Rosario para cada día. Javier Mané Vila. 52. Celebrar la Eucaristía con los niños/2. José Ramón Echeverría. 53. Camino hacia la Pascua. Nando García. 54. ...Yprepararon la Pascua/3. Isidro Lozano/José L. Rodríguez Pacheco. 55. Meditar y orar con el Antiguo Testamento. Gianfranco Barbieri. 56. Oraciones para rezar quien no sabe. José M.a Rueda Alcántara, S.J. 57. Plegarias para iniciar el día. Isidro Lozano. 58. María, Reina de los santos. Antonio González. 59. Preparar la Navidad. Almudena Colorado. 60. Celebraciones de la Eucaristía y de la Palabra. Isidro Lozano. 61. Celebrar los acontecimientos de la vida. Emeterio Sorazu. 62. Oraciones para jóvenes. Ana Prieto/ Manuela Guzmán. 63. Este Adviento y esta Navidad. Alvaro Ginel. 64. Recrearla Cuaresma, la Pascua y Pentecostés. Adolfo Lucas Maqueda. 65. Fiestas y plegarias de las grandes religiones. Pierre Cuperly. 66. Mosaico de lecturas sobre la Virgen. Bautista Araiz. 67. Recrear el Adviento, la Navidad y la Epifanía. Adolfo Lucas Maqueda.

COLECCIÓN "CELEBRAR Y ORAR"

JOSÉ RAMÓN ECHEVERRÍA M.SS.CC.

CELEBRAR LA EUCARISTÍA

CON LOS NIÑOS/2

DOMINGOS DEL TIEMPO ORDINARIO

EDITORIAL CCS

Page 3: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

Segunda edición: noviembre 2006.

Página web de EDITORIAL CCS: www.editorialccs.com

© José Ramón Echeverría, M. SS. CC. © 2002. EDITORIAL CCS, Alcalá, 166/28028 MADRID

Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública y transformación de esta obra sin contar con autorización de tos titulares de la propiedad intelectual. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (arts. 270 y ss. del Código Penal). El Centro Español de Derechos Reprográficos (www.cedro.org) vela por el respeto de los citados derechos.

Diseño de portada: Olga R. Gambarte ISBN: 978-84-8316-546-1 Depósito legal: M-30784-2008 Fotocomposición: M&A, Becerril de la Sierra (Madrid) Imprime: Reprográficas Malpe, S.A.

A todos los que quieren y no pueden, no pueden porque no saben,

no saben y se excusan, se excusan y no se comprometen,

no se comprometen y no aman.

¡Ama! Y te comprometerás, si te comprometes, no te excusarás,

no te excuses y sabrás, sabrás y podrás, podrás y querrás.

Aunque querer y amar no son lo mismo, se encuentran a mitad y al final del camino.

Page 4: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

INTRODUCCIÓN

El culpable de que este libro salga a la luz es usted que lo tiene entre las manos. Jamás pensé sacar este segundo libro, ya que la tarea de elaborar los distintos materiales acumulados durante más de veinte años, y sobre todo darles una unidad temática, requiere disponer de tiempo suficiente y supone bastante esfuerzo.

«Con miedo y con un sincero deseo de poner en común mi expe­riencia pastoral en este campo...», decía en la «Introducción» del otro libro, el de los Tiempos Fuertes; el miedo se ha disipado al ver la bue­na acogida que ha tenido. Queda vencer la resistencia a ponerse ma­nos a la obra por el esfuerzo que supone. La Editorial me anima a ha­cerlo al decirme que muchos clientes piden un libro como el anterior de los Domingos Ordinarios, pues a muchos les ha resultado útil y provechoso el de los Tiempos Fuertes.

Puesto manos a la obra, me resultó más fácil de lo esperado en­contrar las unidades temáticas de los seis bloques que ofrezco, así que continué en la tarea y aquí está el resultado. Espero sea igual de útil y provechoso que el anterior.

He seguido la misma estructura y la misma metodología, por eso me remito a la «Introducción» del anterior para ver su uso y manejo.

Entre los dos libros queda cubierto todo el curso escolar en el he­misferio Norte, que es cuando normalmente se celebra la Eucaristía con los niños. Poco más o menos desde el domingo 25 del tiempo ordinario hacia mediados de septiembre hasta la festividad de Cristo Rey, Adviento, seis o siete domingos ordinarios después de Navidad, Cuaresma y Pascua. A finales de mayo suelen tener lugar las Prime­ras Comuniones con las que se cierran las actividades catequéticas en las parroquias.

- 7 -

Page 5: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

DOMINGOS DEL TIEMPO ORDINARIO

Desde el ll-V

CICLO A

Jesús viene a decirnos quién es Él y quiénes somos nosotros

Page 6: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

SEGUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús es el Siervo de Yavé y el Cordero de Dios que quita el pe­cado del mundo.

Comentario

Jesús viene a revelarnos quién es Dios (lo veremos a partir del do­mingo veinticinco), quién es Él y quiénes somos nosotros. Estos dos temas serán los que darán unidad a estos cuatro domingos.

Materiales Preparar la escenificación. Elementos distintivos que caracterizan a los personajes.

Observaciones Se preparan las escenitas del guión que se representarán delante de los niños. El narrador las introduce. Conforme las escenifican, se van retirando.

I

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

¿Quién eres Tú, Señor, a quien el mundo no conoce e ignora y de quien se siente lejano porque no te experimenta presente? Nosotros venimos aquí a buscarte porque queremos encontrarte. Habíanos, Señor, y dinos con palabras claras quién eres, para que cada día te conozcamos mejor y te acojamos.

- 1 1 -

Page 7: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Cordero de Dios, ambicionamos tener cada vez más: dinero, ju­guetes, ropa... Hoy queremos elegirte a Ti como nuestro único bien. Líbranos de nuestros egoísmos interesados.

TODOS: Señor, ten piedad.

— Cordero de Dios, también ambicionamos seguridades. No nos gusta quedar mal ni que se rían de nosotros. Líbranos de todos nuestros miedos.

TODOS: Cristo, ten piedad.

— Cordero de Dios, nos encanta presumir de nuestro equipo favorito o decir que somos «fans» del cantante de moda, pero no que so­mos seguidores tuyos. Líbranos de nuestras cobardías.

TODOS: Señor, ten piedad.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA del Profeta Isaías 49,3.5-6

5. CANTO

6. LECTURA del santo Evangelio según San Juan 1,29-34

7. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Siempre hay alguien a quien echamos la culpa, alguno de quien nos reímos, alguien en quien descargamos nuestro mal humor. Los que normalmente llamamos «ca­beza de turco» o «chivo expiatorio».

PROFESOR: (Sale) A ver, ¿quién ha sido el que ha dado con el ba­lón y se ha cargado el cristal de la ventana?

NIÑOS: ¡Ese, ese, ese! (Señalan con el dedo a uno que se mar­cha encogido y avergonzado)

- 1 2 -

NARRADOR: Otras veces la envidia nos hace llegar hasta el insulto.

PROFESOR: (Sale) A ver, ¿quién quiere llevar estos exámenes al profesor del aula de abajo?

/ALUMNO: ¡Yo, yo, yo...!

NIÑOS: ¡Pelota, pelota, pelota!

NARRADOR: Siempre hay alguien, esos personajes típicos, de quien nos podemos reír.

(Aparece en escena el personaje típico «el tonto del pue­blo»)

UNO: Nano, ¿cuándo te casas?

NANO: La semana que no tenga Jueves.

UNO: Pero, ¿ya tienes novia?

NANO: Ayer estaba con tu hija y «paicía» que sí.

NARRADOR: En las familias está el típico personaje de la «suegra» al que casi siempre se le tiene manía.

ESPOSA: Gregorio, deja que mi madre venga al campo con noso­tros.

ESPOSO: Que no, es mejor que no venga, ¡es una pesada!

SUEGRA: ¿En qué hora te casarías con él?

ESPOSO: ¡Si lo sé me caso con una huérfana!

SUEGRA: ¡Qué disgusto más grande! Yo me voy a una residencia. (Se va)

ESPOSO: ¡A ver si es verdad! (Canta) Cuando se muera mi suegra, Todos:... egra la enterraré boca abajo, Todos:... ajo. por si se quiere salir, Todos:... ir que se vaya más pa'abajo.

TODOS: (Cantando) Carrasclás, carrasclás, ¡qué bonita serenata! Carrasclás, carrasclás, ¡que me estás dando la lata!

NARRADOR: Otro personaje típico en el que descargamos nuestra agresividad en el estadio de fútbol, es el arbitro.

ARBITRO: (Aparece con liniers, y va tarjeteando a todos)

TODOS: ¡Arbitrucho, arbitrucho!

- 1 3 -

Page 8: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NARRADOR: Con Jesús pasó otro tanto de lo mismo. Fue precisa­mente en su pueblo donde lo abuchearon.

JESÚS: El Espíritu del Señor está sobre mí, me ha ungido... Hoy se cumple esta escritura que acabáis de oír.

UNO: ¿No es este el hijo de José?

JESÚS: Sin duda me diréis: Médico, cúrate a ti mismo... Os ase­guro que ningún profeta es bien mirado en su tierra.

TODOS: ¡Fuera, fuera! ¿Quién te has creído que eres?

NARRADOR: Otros sí le reconocieron y se vieron libres de sus pe­cados y sus culpas.

JESÚS: Hombre, tus pecados te son perdonados.

FARISEOS: ¿Quién es este que así blasfema?

JESÚS: Para que veáis que tengo poder para perdonar pecados: levántate, coge tu camilla y vete.

TODOS: Hoy hemos visto cosas admirables.

8. COMENTARIO DIALOGADO

¿Qué personajes «típicos» me hacen reír? ¿Me río y me burlo de ellos?

¿Me gusta que los demás se rían y se burlen de mí?

Si se burlan y se ríen, ¿adopto el estilo de mansedumbre y dulzu­ra del cordero? ¿O no reacciono por timidez o cobardía y me dejo pi­sotear? ¿O reacciono con agresividad y violencia?

¿Soy consciente de que cuando reacciono con mansedumbre, soy luminoso como el Cordero de Dios?

- 1 4 -

TERCER uuiviiivuu DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús es la luz de las naciones.

Materiales Preparar las escenificaciones. Se puede caracterizar a los que ha­cen de Abrahán, Moisés y profetas.

Observaciones Hacemos una escenificación como introducción a la Palabra de Dios. En ella los que hacen de Abrahán, Moisés y profetas salen de los laterales con velas encendidas. Jesús viene procesional-mente desde el fondo con la Palabra de Dios. Hacemos otra escenificación después de la lectura del Evangelio. Del Evangelio leemos hasta el versículo 18.

I

A. LITURGIA DE LA PALABRA

1. MONICIÓN

Seguir a Jesús tiene que producir una alegría inmensa. Además es fuente y reposo para cuando nos sentimos cansados. Cuando la gen­te anda persiguiendo a una persona a quien ama, en el momento de encontrarla siente un gran gozo. Así lo expresa un gran amigo de Dios, llamado Isaías.

2. LECTURA del Profeta Isaías 9,1-4

fflmBnsBBBKfb'

• - 1 5 -

Page 9: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

3. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Desde el principio de los tiempos hay muchas cosas que el hombre no sabe explicarse del todo. Busca acla­rarlas y desea encontrarse con Dios. Pero Dios mismo sale al camino y se comunica con él. La Palabra de Dios rasgó el silencio y habló sencillamente en el sol, el mar, la hierba fresca, la flor, el pájaro, el viento... Y su Palabra es luz para el hombre.

A lo largo de la historia unos hombres escogidos por Dios fueron ayudando a los demás a descubrir su volun­tad y su palabra. Entre otros Abrahán (Sale del lateral con luz encendida), pastor que cuidaba sus rebaños y que sintió que Dios le llamaba:

VOZ EN OFF: «Abrahán, ponte en camino. Yo haré de ti un gran pueblo. En tu nombre serán benditas todas las familias del mundo».

NARRADOR: Abrahán se fio de Dios y ayudó a que otros también le conociesen y se fiasen de Él. Fue como una luz para mu­chas personas.

Pasaron los años. Los descendientes de Abrahán llega­ron a construir un pueblo. Pero estaba sometido a la es­clavitud en Egipto. Y Dios envió a Moisés. (Sale del late­ral con luz encendida)

VOZ EN OFF: «Moisés, yo soy el Dios de tus padres. Escuché los lamentos de mi pueblo esclavizado en Egipto. Vete a li­brarlo en mi nombre».

NARRADOR: Y Moisés bajó a Egipto, comunicó al pueblo la Pala­bra de Dios y les ayudó. Fue como una luz para muchas personas.

(Salen varios Profetas) El pueblo llegó a la tierra prometi­da. Pero con frecuencia se olvidaba del Señor y cometía injusticias. Dios llamó a los Profetas para que hablasen en su nombre:

VOZ EN OFF: «Yo te escogí y te nombré profeta. Diles lo que yo te mande. No tengas miedo. Yo estoy contigo».

- 1 6 -

NARRADOR: Los Profetas fueron luz para muchas personas.

Y en la plenitud de los tiempos, Dios envió a su Hijo Je­sucristo. Él nos comunica con su vida y con su mensaje la Palabra más clara y definitiva de Dios. Él es «la luz del mundo». (Viene desde el fondo con la Palabra)

VOZ EN OFF: «En múltiples ocasiones y de muchas maneras habló Dios antiguamente a nuestros padres por los Profetas. Ahora, en esta etapa final, nos ha hablado por medio de su Hijo Jesús».

NARRADOR: Pero la Palabra de Jesús no quedó congelada en un libro ni pertenece sólo al pasado. Es una Palabra viva que nos sigue hablando hoy a nosotros.

4. CANTO

5. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 4,12-17

6. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Hoy como en tiempos de Isaías, como hace veinte si­glos, hay niños que siguen viviendo en tinieblas.

NIÑO 1: ¡Soy un desastre! ¡Nada me sale bien! Lo intento y me esfuerzo, pero no atino en nada.

NARRADOR: Hay niños que no saben a dónde van.

NIÑO 2: Y además, ¿para qué saberlo? Tendría que hacer siem­pre lo que me mandasen los demás y no lo que a mí me dé la gana.

NARRADOR: Hay niños que no saben lo que hacer con su vida.

NIÑO 3: Si me ocupo de mis deberes me dicen que soy un egoísta y que sólo voy a lo mío; si ayudo a los demás me dicen que soy un irresponsable; si me muevo tengo que estar quieto; si me estoy quieto soy un vago. ¡Un verdadero lío!

NARRADOR: Hay muchos niños que ya se encuentran desconsola­dos, incomprendidos, solos.

NIÑO 4: Yo no tengo amigos, ¡es tan triste no tener amigos! No tener con quién estar, jugar y hablar. Por eso a mí tam­bién los demás me importan un pepino.

- 1 7 -

Page 10: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NARRADOR: Cuatro ejemplos de las innumerables personas que caminan en tinieblas. Jesús vino a sacarnos de las tinie­blas. El ser luz es una misión que Jesús nos encargó ex­presamente a sus discípulos. Nuestro único modelo váli­do es Jesús. Fijémonos en Él.

7. COMENTARIO DIALOGADO

¿Qué quiere decir que Jesús es la luz? ¿Qué palabras y qué hechos de su vida te dicen más? ¿Por qué?

Si Él es la luz, ¿por qué no la vieron ni reconocieron los hombres?

Si tú la has recibido, ¿qué partes de tu persona y de tu vida te ilu­mina Él?

Tú, ¿cómo eres luz? ¿Qué testimonio puedes dar?

- 1 8 -

CUARTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Somos hombres y mujeres de Bienaventuranzas.

Materiales Preparar la escenificación. Una bolsa con monedas, unos libros, un espejo y unos juguetes.

Observaciones En la escenificación los cuatro niños que portan objetos pueden estar situados frente a los otros niños a lo largo del presbiterio. La puerta donde empieza la escenificación, se simula en un lateral. Se puede elegir cualquiera de las dos lecturas, la que a cada cual le sugiera más para el comentario dialogado.

T

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Cuando hablamos con los demás les podemos decir cosas con voz fuerte, chillona, desagradable... o se las podemos decir con amabili­dad, con la sonrisa en los labios. Si lo hacemos así, si hablamos «mansamente», y si sabemos escuchar con una sonrisa, haremos feli­ces a los demás, seremos amigos de Dios y Dios nos devolverá la sonrisa. Incluso oiremos sus piropos, porque Dios a los que ama les dice cosas bonitas. Por ejemplo a la Virgen le llamaba «bendita», «lle­na de gracia». Y Jesús a los pobres, a los pacíficos, a los limpios... les llama «bienaventurados».

- 1 9 -

Page 11: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Cuando hacemos daño a los demás es como si la sonrisa de Dios quedara cortada. Señor, ten piedad.

— A veces nos reímos con maldad de los defectos ajenos. Esa no es la sonrisa que Dios quiere. Cristo, ten piedad.

— Cuando nos niegan algunos caprichos fruncimos el ceño, nos en­furruñamos y no queremos saber nada de los demás. Señor, ten piedad.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA del Profeta Sofonías 2,3 - 3,12-13

5. CANTO

6. LECTURA de la primera carta del Apóstol San Pablo a los Corin­

tios 1,26-31

7. CANTO

8. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 5,1 -12

9. ESCENIFICACIÓN NARRADOR: A la puerta de la felicidad llegó un día un niño corrien­

do y saltando y con ganas de conseguir lo que allí se anunciaba. Llamó y apareció el guardián.

GUARDIÁN: ¿Qué quieres?

NIÑO: ¿Es esta la puerta de la felicidad?

GUARDIÁN: Sí, pero aún no puedes entrar. Aún no ha llegado tu hora.

- 2 0 -

NARRADOR: El guardián le dio con la puerta en las narices. Bus­cando una respuesta, comenzó a caminar y encontró a un niño con una bolsa de dinero.

NIÑO: ¿Qué guardas en esa bolsa?

NIÑO 2: Las propinas de los domingos.

NIÑO: ¿Has llegado a la puerta de la felicidad?

NIÑO 2: La tengo en mis manos.

NIÑO: Yo no quiero la felicidad embolsada.

NARRADOR; Siguió andando y encontró a un niño serio y estudiando.

NIÑO: ¿Qué haces?

NIÑO 3: Estudio, ¿no lo ves?

NIÑO: ¿Por qué y para qué estudias?

NIÑO 3: Para ser ingeniero, situarme en la vida y ponerme por en­cima de los demás.

NIÑO: ¡Ah, ya! Yo no quiero ser feliz a costa de los demás.

NARRADOR: Por el camino se encontró con una niña linda mirán­dose a un espejo.

NIÑO: ¿Qué haces?

NIÑA: Admiro mi propia belleza.

NIÑO: ¿Eres feliz admirando tu propia belleza?

NIÑA: ¿No eres feliz tú mirándome? ¿No te gusto?

NIÑO: No. Mi caminar es duradero y estoy cansado.

NARRADOR: Siguió andando y se encontró con un niño rodeado de cosas y de juguetes.

NIÑO: ¿Qué haces?

NIÑO 4: Jugar, ¿no lo ves?

NIÑO: ¿Puedo jugar contigo?

NIÑO 4: No, me estropearías los juguetes; yo ya estoy bien así.

NIÑO: Bueno, lo importante es caminar y no entretenerse.

NARRADOR: Así siguió durante meses y años. Muy cansado llegó de nuevo a puerta de la felicidad. Llamó de nuevo y vol­vió a aparecer el guardián.

- 2 1 -

Page 12: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

GUARDIÁN: ¿Qué quieres?

NIÑO: Pasar. ¿Puedo?

GUARDIÁN: No puedes pasar; aún no ha llegado tu hora.

NIÑO: ¿Y cuál es mi hora? ¿Qué tengo que hacer? ¿Puede pa­sar alguien?

GUARDIÁN: Por esta no, es la tuya. Muchos pasan por la suya.

NIÑO: ¿Quiénes?

GUARDIÁN: Los sencillos, los mansos, ios misericordiosos, los ser­viciales, los pacíficos, los que saben amar. Vete, aprén­delo y podrás pasar.

NARRADOR: Y el niño siguió caminando, esforzándose en pasar por su puerta.

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Qué es lo que a ti te hace feliz? ¿Las cosas, el pasártelo bien, el que te alaben, el «ira la tuya»...?

¿Te sabes las Bienaventuranzas? ¿Cuál de ellas te llama más la atención y te gusta más? ¿Por qué?

¿Dónde te parece a ti que Jesús se muestra más como hombre de Bienaventuranzas?

- 2 2 -

QUINTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Somos la sal y la luz del mundo.

Materiales Preparar la escenificación. Los mismos materiales y la misma es­cenografía.

Observaciones La escenificación comienza con el final de la anterior. Una vez que el niño se pregunta ¿qué tendré que hacer para pasar...?, se sienta delante de los otros niños de cara al público. Mientras, ellos hacen su reflexión.

A. LITURGIA DE LA PALABRA

1. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Así siguió durante meses y años. Muy cansado llegó de nuevo a la puerta de la felicidad. Llamó y volvió a aparecer el guardián.

GUARDIÁN: ¿Qué quieres?

NIÑO: Pasar. ¿Puedo?

GUARDIÁN: No puedes pasar. Aún no ha llegado tu hora.

NIÑO: ¿Y cuál es mi hora? ¿Qué tengo que hacer? ¿Puede pa­sar alguien?

GUARDIÁN: Por esta no, es la tuya. Muchos pasan por la suya.

- 2 3 -

Page 13: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NIÑO: ¿Quiénes?

GUARDIÁN: Los sencillos, los mansos, los misericordiosos, los ser­viciales, los pacíficos, los que saben amar. Vete, aprén­delo y podrás pasar.

NARRADOR: Y el niño siguió caminando esforzándose en pasar por la puerta.

NIÑO: ¿Qué tendré que hacer para pasar por mi puerta? Yo creo que todos esos niños con los que hablé el otro día tampoco son felices. (Se sienta delante de ellos)

NIÑO 2: Puede ser que tuviera razón ese niño. ¿Para qué quiero tanto dinero? Más de alguna vez he ido al cumpleaños de algún compañero y no le he regalado nada por no gastar. Yo nunca he invitado a nadie. Siempre estoy de «gorrón». No sé cómo me hablan todavía.

TODOS: Perdón, Señor, porque no sabemos compartir.

NIÑO 3: Es verdad, no sé para qué estudio tanto, si sólo tengo tiempo para estudiar. Además, ¿qué quiere decir «ser al­guien», si no sé convivir y compartir? Voy a ayudar más a mis compañeros.

TODOS: Perdón, Señor, porque no sabemos ayudar.

NIÑA: Puede ser verdad que a la gente no le parezca tan linda. Además, aunque lo sea, ¿qué gana la gente con mirar­me? Si yo supiera contar cuentos bonitos mis amigos se lo pasarían mejor y podría hacerles felices.

TODOS: Perdón, Señor, porque sólo pensamos en nosotros mis­mos.

NIÑO 4: Me aburro y a lo mejor no es porque no tengo el último juguete que ha aparecido en la tele, sino porque estoy solo. Puede ser que ese niño tenga razón, que si jugara con él y con otros niños me lo pasaría mejor.

TODOS: Perdón, Señor, por no querer estar con los otros.

NIÑO: Oye, ¿queréis buscar la felicidad conmigo?

TODOS: ¿Qué hemos de hacer?

2 4 -

2. LECTURA del Profeta Isaías 58,7-10

TODOS: Vamos a buscar la felicidad.

NIÑO: Vamos a mi puerta de la felicidad, a lo mejor podemos entrar.

(Van a la puerta, llaman y aparece el guardián)

NIÑO: ¿Podemos pasar?

GUARDIÁN: ¿Crees tú que podéis pasar?

NIÑO 3: Yo creo que sí porque vamos a cambiar para ser felices.

MÑA- Y además hemos pensado que todos juntos va a ser más fácil.

NIÑO 2: Pero, ¿tú crees que siendo esta la puerta de nuestro ami­go podremos entrar todos?

GUARDIÁN: Vuestro amigo sólo puede pasar si vais juntos, porque la felicidad para ser tal ha de ser felicidad compartida. Ahora podéis pasar, porque juntos seréis felices y po­dréis contagiarla a los demás. Así seréis sal y luz.

3. CANTO

4. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 5,13-16

5. COMENTARIO DIALOGADO

¿Cómo eres tú sal y luz? ¿Qué testimonio das tú?

¿Te crees sal y luz cuando haces gracias y monerías, o cuando haces alguna obra buena? ¿Por qué?

¿Experimentas que eres más feliz cuando haces felices a los de­más?

Page 14: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

B. LITURGIA EUCARISTICA

6. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

Aquí te presentamos, Señor, estas monedas, estos libros, este espejo y estos juguetes, que Tú has puesto en nuestras manos y que noso­tros utilizamos solamente para satisfacer nuestros egoísmos y capri­chos, nuestra ambición y orgullo, nuestra vanidad y nuestra comodi­dad. Que participar en la Eucaristía sea un aprender a ponerlos en manos de los demás, para que nuestra vida sea una vida generosa y compartida con los hermanos y los amigos.

- 2 6 -

DOMINGOS DEL TIEMPO ORDINARIO

Desde el ll-V

CICLO B

Jesús nos invita a seguirle

Page 15: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

SEGUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Venid y veréis.

Comentario Estos cuatro domingos los unificamos con el tema del seguimien­to que es el más sobresaliente. La primera actuación de Jesús es invitar a seguirle. Nosotros le seguimos porque se nos presenta como el Camino, la Verdad y la Vida. Cada domingo veremos una de esas definiciones.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones En las escenificaciones se añaden unos pequeños comentarios hechos por dos lectores. El salmo lo recita el niño que hace de Samuel. Cada cual monta las escenas según su parecer, pues son muy sencillas y fáciles de representar.

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

El domingo pasado escuchamos la voz de Dios que nos presentaba a su Hijo, el Preferido. Jesús al bautizarse asume la misión que el Padre le confía y decide con la fuerza del Espíritu empezar el anuncio de la Buena Nueva.

• - 2 9 -

Page 16: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

Jesús invita a algunos jóvenes a acompañarlo en su camino, a que le sigan muy de cerca para enviarlos después a anunciar el Rei­no. Jesús también nos hace esta invitación a nosotros.

En la primera lectura escucharemos cómo el joven Samuel siente la llamada del Señor. Y en cuanto la oye se pone a su servicio.

Hoy tenemos en cuenta las llamadas del Señor y nuestra actitud de respuesta:

«Llamo a tu puerta» «Habla, Señor, que tu siervo escucha» «De pequeño te llamé» «Aquí estoy porque me has llamado» «El Maestro está aquí y te llama» «Aquí me tienes, envíame» «Déjalo todo y sigúeme» «Soy la esclava del Señor, hágase en mí» «Aquí estoy para hacer tu voluntad»

2. CANTO

B. LITURGIA DE LA PALABRA

3. ESCENIFICACIÓN

4. LECTURA del primer Libro de Samuel 3,3-10.19

NARRADOR: En aquellos días Samuel estaba acostado en el tem­plo donde estaba el arca de Dios. El Señor llamó a Sa­muel y él respondió:

SAMUEL: Aquí estoy.

NARRADOR: Fue corriendo a donde estaba Eli y le dijo:

SAMUEL: Aquí estoy; vengo porque me has llamado.

ELÍ: No te he llamado, vuelve a acostarte.

NARRADOR: Samuel volvió a acostarse. Volvió a llamar el Señor a Samuel. Él se levantó y fue a donde estaba Eli y le dijo:

- 3 0 -

SAMUEL: Aquí estoy, vengo porque me has llamado.

ELÍ: NO te he llamado, vuelve a acostarte.

NARRADOR: Aún no conocía Samuel al Señor, pues no le había si­do revelada la palabra del Señor.

LECTOR 1: Uno cree saber todo o casi todo respecto de Dios. ¡Cla­ro! Mientras no te habla, su voluntad no tiene secretos para ti. Pero cuando esa voluntad es precisa para ti, no conoces la voz de Dios, como Samuel, que la confundía con la de Eli.

LECTOR 2: Lo que pasa es que Dios la mayoría de las veces no se expresa en nuestros lenguajes. Su voz es discreta, una llamada con frecuencia oscura, una invitación susurrada, una pregunta que no sabes cómo se ha despertado.

NARRADOR: Por tercera vez llamó el Señor a Samuel y él se fue a donde estaba Eli y le dijo:

SAMUEL: Aquí estoy, vengo porque me has llamado.

NARRADOR: Eli comprendió que era el Señor quien llamaba al mu­chacho y dijo a Samuel:

ELÍ: Anda, acuéstate, y si te llama alguien responde: «Habla, Señor, que tu siervo escucha».

NARRADOR: Samuel se fue y se acostó en su sitio.

LECTOR 1: Se necesita a alguien como Eli que nos ayude a escu­char e interpretar la voz de Dios, después tiene que qui­tarse de en medio, desaparecer.

LECTOR 2: Su papel es provocar al discípulo a decir «aquí estoy». Su tarea es hacer salir al discípulo de la inercia para afrontar los riesgos de un consentimiento personal.

NARRADOR: El Señor se presentó y le llamó como antes:

VOZENOFF: ¡Samuel, Samuel!

SAMUEL: Habla, Señor, que tu siervo escucha.

NARRADOR: Samuel crecía, Dios estaba con él y ninguna de sus palabras dejó de cumplirse.

5. CANTO

- 3 1 -

Page 17: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

6. GUIÓN Y SALMO RECITADO

NARRADOR: En el terreno de la fe, del compromiso, nos gusta ser suplentes, chupar banquillo. Delegamos en otros jugar los partidos. Así:

LECTOR 1: Encargamos a los profetas que juzguen y hablen claro en nuestro nombre. A los misioneros que anuncien el Evangelio. Encargamos a las monjas que cuiden a los enfermos y ancianos. A los monjes que nos sustituyan en la oración. A los voluntarios que se pongan desinteresadamente al servicio de los demás.

NARRADOR: Nosotros vivimos el Evangelio por suplencia y somos capaces hasta de designar tareas.

LECTOR 2: Encargamos a la limosna que nos haga asentir buenos y generosos. A una oración que aprobemos el examen. A una buena acción que nos garantice una buena con­ciencia. A alguna revista que nos suministre buenos sentimientos.

NARRADOR: Sentados cómodamente en el banquillo juzgamos el juego de los demás y criticamos si lo hacen mal. Hay que ponerse en pie como Samuel (Aparece y se coloca en el centro frente a todos), y pronunciar estas simples palabras, pero comprometidas:

SAMUEL: «Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad».

(Repiten todos y Samuel recita el salmo)

Yo he esperado siempre a Dios con muchas ganas.

Y Dios se inclinó hasta mí y escuchó mi llamada. Y me enseñó a cantar una canción nueva, un himno para Él. Tú no quieres sacrificios, Señor, ni que te ofrezcamos cosas. En cambio, me has abierto los oídos, y entonces yo digo:

Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad. Eso es lo que quiero, Señor, porque tengo mi corazón puesto en lo que a Ti te gusta.

- 3 2 -

Yo soy capaz de ponerme de pie delante de todos para contarles todo lo bueno que eres. Tú sabes, Señor, que aunque sienta vergüenza, soy ca­paz de hacerlo por lo mucho que me quieres.

7. LECTURA del santo Evangelio según San Juan 1,35-42

NARRADOR: En aquel tiempo estaba Juan con dos discípulos y fi­jándose en Jesús que pasaba dijo:

JUAN: Este es el Cordero de Dios.

NARRADOR: Los dos discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Je­sús. Jesús se volvió y al ver que lo seguían les preguntó:

SACERDOTE: ¿Qué buscáis?

DISCÍPULOS: Rabí (que significa Maestro), ¿dónde vives?

LECTOR 1: El discípulo se siente movido a preguntar: ¿Qué debo hacer? ¿Dónde vives? Siempre encontrará maestros que le impongan programas, horarios, esquemas, normas...

LECTOR 2: Solamente Cristo rechaza responder y satisfacer esas peticiones infantiles de seguridad que impiden el creci­miento personal.

NARRADOR: Él les dijo:

SACERDOTE: Venid y lo veréis.

LECTOR 1: Respuesta seca. Más que saber todo de antemano, los discípulos deben descubrir progresivamente. Jesús les pone en camino, a lo largo del cual se hace un creyente.

LECTOR 2: Jesús propone un camino, no un molde que fabrica dis­cípulos en serie.

NARRADOR: Entonces fueron, vieron donde vivía y se quedaron con Él aquel día; eran las cuatro de la tarde.

LECTOR 1: No existe escuela, ni iglesia que pueda sustituir este instante: las cuatro de la tarde. Si faltas a esta cita de las «cuatro de la tarde» has perdido el tiempo.

LECTOR 2: Lo decisivo en la fe es la respuesta a uno que pasa, el contacto con Él en lo cotidiano, el sentirse tocado por su palabra.

• - 3 3 -

Page 18: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NARRADOR: Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los que oyeron a Juan y siguieron a Jesús. Encontró primero a su hermano Simón y le dijo:

ANDRÉS: Hemos encontrado al Mesías (que significa Cristo).

LECTOR 1: Palabras que brotan incontenibles de una experiencia perturbadora, no de un aprendizaje.

LECTOR 2: Es lo que hemos de anunciar, no una doctrina sino un encuentro, un descubrimiento.

NARRADOR: Y lo llevó a Jesús. Jesús se le quedó mirando y le dijo:

SACERDOTE: Tú eres Simón, el hijo de Juan. Tú te llamarás Cefas (que significa Pedro).

8. COMENTARIO DIALOGADO

¿Has escuchado la voz de Dios a otras personas, en otros lugares distintos de la Iglesia? ¿Dónde y a través de quién más te habla?

¿Haces siempre tus gustos y caprichos o sabes plantarte y decir «aquí estoy»?

¿Cómo entiendes tú eso de seguir a Jesús?

Como cristiano, ¿eres seguidor de Jesús o cumplidor de manda­mientos?

- 3 4 -

TERCER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús es el Camino.

Comentario Nueva llamada al seguimiento y en ese seguimiento recorrer el camino que nos conduce a los hermanos para predicar la conver­sión y la Buena Noticia, y así ser pescadores de hombres.

Materiales Preparar las escenificaciones.

Observaciones Un narrador hace las introducciones a las lecturas. En primer lugar hacemos una lectura escenificada del Evangelio resumen del libro Un tal Jesús. En la segunda lectura intercalamos comentarios. Al final de la tercera lectura aparece uno que hace de Pablo y re­cuerda que el momento es apremiante.

i • • •••••• -

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Las lecturas de este domingo nos presentan las llamadas de Dios a unas personas bien concretas. Dios cuenta con los hombres. Nos ne­cesita para llevar a cabo su proyecto de salvación. Confía unas misio­nes concretas a unas personas determinadas.

• - 3 5 -

Page 19: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Por las veces que no hemos querido escucharte cuando nos ha­blas.

— Por las veces que no prestamos atención a la Palabra de Dios.

— Por las veces que no hemos cumplido tu voluntad.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. MONICIÓN

NARRADOR: Decíamos el domingo pasado que Dios nos llama, que nos habla. Y nos llama para algo. No solamente nos lla­ma para que le sigamos como Samuel: «Aquí estoy». Vea­mos hoy en la Palabra de Dios para qué nos llama.

En primer lugar para que demos a conocer el Evangelio: «Os haré pescadores de hombres».

5. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 1,14-20

NARRADOR: En Cafarnaún, cuando los gallos todavía dormían, nos levantábamos los pescadores y nos reuníamos en el pe­queño muelle de la ciudad.

ANDRÉS: Oye, Pedro, ese que viene por la orilla es Jesús, ¿ver­dad?

JESÚS: Eso de tirar las redes debe ser difícil, ¿no?

ANDRÉS: ¡Qué va! No creas. Todo es cuestión de acostumbrarse y trabajar en grupo... Ya irás aprendiendo.

PEDRO: ¡A ese tendremos que enseñarle a nadar, que los campesi­nos no saben ni eso!

JESÚS: Tienes razón, Pedro. El agua y yo no nos llevamos muy bien que digamos. Bueno, Pedro, el Profeta Juan sigue

- 3 6 -

preso y ya no hay nadie que levante la voz. Y mientras tanto nosotros, ¿qué? Hablamos mucho pero con los brazos cruzados.

PEDRO: Eso mismo digo yo, mucho bautismo, mucha palabrería, pero a la hora de la verdad todos dejamos solo al Profeta.

ANDRÉS: ¿Y qué has pensado Tú, Jesús, tienes algún plan?

JESÚS: Nada especial, Andrés, pero... no sé, viéndoos echar las redes se me ocurrió que... ¿por qué no comenzamos a hacer algo, pero juntos, como hacéis para pescar?

PEDRO: Eso digo yo: Hablar menos y hacer más. Me gusta la idea.

JESÚS: Pedro. Lo importante ahora es unirnos. Formar un grupo o algo así...

PEDRO: Te digo que me gusta la idea, sí señor. A donde va uno vamos todos. El peligro lo corremos todos juntos y la vic­toria la celebramos juntos.

ANDRÉS: Espérate Pedro. Esto no está claro. Un grupo... para ha­cer qué, Jesús...

JESÚS: Bueno, Andrés, para... continuar el trabajo del Profeta Juan, para hablarle a la gente y decirle: Ahora sí, ahora le toca a Dios. Dios va a echar las redes por estos mares y hay que estar alerta. A Dios no le gusta cómo van las cosas.

PEDRO: ¡Bien dicho! ¿Cuándo comenzamos?

ANDRÉS: Con calma, Pedro. Eso que dice Jesús está bien... pero hay que ir con cuidado. Si organizamos algo tenemos que medir bien los pasos.

JESÚS: ¿Tienes miedo Andrés?

ANDRÉS: Miedo no, Jesús. Pero tampoco quiero hacer el primo.

PEDRO: ¿Miedo yo? ¡Yo no conozco a ese señor!

JESÚS: Pues yo sí. En el desierto comprendí que lo que tenía era miedo. Miedo a arriesgar el pellejo. Pero Dios nos irá dando fuerzas para echar «pa'lante». ¿No os parece?

PEDRO: Claro que sí. De los cobardes no se ha escrito nada. Ven­ga, vamos a hablar con Santiago y Juan.

- 3 7 -

Page 20: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

JESÚS: Vosotros mismos me habéis dicho que un buen pesca­dor no hace mucha bulla porque se espantan los peces. Eso es lo que hay que hacer ahora. Así comenzó Dios cuando le dijo a Moisés que organizara a todos los israe­litas para escaparse del faraón.

PEDRO: Bien dicho Jesús. Y yo creo que hay muchos que se uni­rán a nosotros si sabemos tirar bien la red.

ANDRÉS: Podemos avisar a Felipe y a Natanael el de Cana.

JESÚS: ¿Entonces qué? ¿Nos decidimos a hacer algo? Tú, San­tiago, ¿qué opinas?

SANTIAGO: Está bien, Jesús. Me uno al grupo. Ya veremos por dónde empezamos. Mano con mano.

JESÚS: Y tú, Juan, ¿estás de acuerdo?

JUAN: Yo también, contad conmigo.

JESÚS: Y tú, Pedro, ¿qué hay contigo?

PEDRO: ¿Me preguntas a mí, Jesús? ¡Yo no doy un paso atrás ni para impulsarme! Yo digo: sí, sí, sí...

NARRADOR: Y así en aquel muelle de Cafarnaún comenzamos nuestro grupo. Éramos sólo cinco.

6. CANTO

7. MONICIÓN

NARRADOR: En segundo lugar nos llama para invitarnos a la peni­tencia y a la conversión.

8. LECTURA del Profeta Jonás 3,1-5.10

NARRADOR: En aquellos días vino de nuevo la palabra del Señor a Jonás:

VOZ EN OFF: Levántate

LECTOR: Que es igual que decir «ponte en actitud de centinela», mira el horizonte y alcanza con tu corazón las necesida­des de los otros que sufren.

- 3 8 -

VOZ EN OFF: Vete a Nínive, la gran capital.

LECTOR: Que es igual a decir «ponte en marcha», fíate de mi pala­bra y toma un rumbo y una meta.

VOZ EN OFF: Y pregona allí el pregón que te diré.

LECTOR: Sé profeta, lleva mi mensaje a aquellos que quiero salvar. Mensaje mío, no tuyo.

NARRADOR: Se levantó Jonás y fue a Nínive, como le había man­dado el Señor. (Nínive era una ciudad enorme, tres días hacían falta para atravesarla.) Comenzó Jonás a entrar por la ciudad y caminó durante un día pregonando:

JONÁS: Dentro de cuarenta días Nínive será arrasada.

NARRADOR: Los ninivitas creyeron en Dios, proclamaron ayuno y se vistieron de sayal, grandes y pequeños.

Cuando vio Dios sus obras y cómo se convertían de su mala vida, tuvo piedad de su pueblo el Señor, Dios nuestro.

9. CANTO

10. MONICIÓN

En tercer lugar nos llama para ser signos y testigos suyos, porque no sobrevaloramos ninguna realidad de este mundo.

11. LECTURA de la primera carta del Apóstol San Pablo a los Corin­tios 7,29-31

(Al final de la lectura sale el que hace de Pablo y dice:)

— A los que no pensáis más que en pasarlo bien, os digo: «El mo­mento es apremiante».

— A los que sólo buscáis que os admiren, os digo: «El momento es apremiante».

— A los que no pensáis más que en vosotros mismos, os digo: «El momento es apremiante».

— A los que venís a misa pero no hacéis nada por los demás, os di­go: «El momento es apremiante».

• - 3 9 -

Page 21: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

— A los que envidiáis, juzgáis y criticáis, os digo: «El momento es apremiante».

— A los que no sois consecuentes con lo que creéis, os digo: «El momento es apremiante».

12. COMENTARIO DIALOGADO

Ante lo que te dicen y enseñan los mayores, ¿«no pescas ni una»?

En tus relaciones con tus compañeros y compañeras, ¿«vas de pesca»? ¿Te dejas pescar por cualquiera?

¿El ser discípulo de Jesús te cambia algo? ¿Significa algo para ti?

¿Te avergüenza decir que eres discípulo, amigo de Jesús?

- 4 0 -

CUARTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús es la Verdad.

Comentario Sólo tiene autoridad quien dice la verdad y hace lo que dice. Es en este aspecto que nos centramos en la celebración de hoy de­jando de lado la curación en la sinagoga. Jesús habla con autori­dad porque dice la verdad. Es la Verdad.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones Las lecturas pueden hacerse escenificadas con los distintos perso­najes que aparecen. En la escenificación preparamos esas peque­ñas escenas que uno o varios grupos de niños representan ante los demás.

i

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Jesús es un buen israelita. El sábado, que es el día de descanso y de la plegaria para los judíos, va a la sinagoga, la iglesia del pueblo, para escuchar la lectura de la Tora y para rezar los Salmos. A veces Él mis­mo hace la lectura de la Palabra de Dios y la comenta.

Hoy, precisamente, es uno de esos sábados en que Jesús co­menta la Palabra de Dios. Todos los asistentes están admirados. No

- 4 1 -

Page 22: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

enseña como los demás. Él habla con autoridad. No se contenta con repetir lo que ya se ha dicho tantas veces. Este joven da una interpre­tación nueva a la Palabra de Dios. Una interpretación llena de vida y de amor. ¿Quién debe ser? ¿En nombre de quién habla?

La sorpresa de los asistentes aún es mayor cuando Jesús libera a un hombre poseído por el espíritu del mal. Y lo hacía un sábado con­tra las normas y sin tener en cuenta la tradición.

Imaginemos cómo se debía quedar la gente. Nunca habían visto una cosa parecida. Aunque en aquel tiempo no había ni periódicos, ni radio, ni televisión, la noticia se extendió por toda la región. Intrigada la gente se preguntaba: ¿Quién puede ser este joven predicador?

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Porque preferimos nuestra sabiduría que todo lo controla y lo tie­ne seguro a la tuya que abre futuros.

— Porque preferimos creer más en un Jesús maestro de doctrina que en un Jesús activo frente a lo demoníaco del mundo.

— Porque confesamos a Cristo pero no nos atrevemos a vivir como Él en lucha permanente contra lo que mata a los hombres.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA del Libro del Deuteronomio 18,5-20

5. CANTO

6. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 1,21-28

7. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Yo no sé por qué, pero todos tenemos la manía de en­señar. Nos gusta enseñar a todo el mundo cómo tiene que comportarse. Nos creemos con el derecho de decir

- 4 2 -

lo que está bien y lo que está mal. Luego a la hora de ha­cerlo se nos olvidan esas cosas. Y lo vemos en casa to­dos los días.

PADRE: Pero vamos a ver Juanito, ¿cuántas veces tengo que de­cirte que no se debe mentir?

MADRE: Este niño no sabe decir una verdad. Yo no sé dónde ha­brá aprendido a decir tantas mentiras.

PADRE: ¿Tú me oyes a mí decir mentiras?

NIÑO: No, papá.

PADRE: Pues aprende de mí y no vuelvas a mentir.

NIÑO: Sí, papá, aprenderé de ti.

PADRE: Oye, María. Hoy no tengo ganas de ir a la oficina. Llama al jefe y dile que estoy con gripe.

NIÑO: (Como hablándose) Tomo ejemplo. O tomo nota.

NARRADOR: Y cuando salimos de casa y vamos al colegio nos pa­sa lo mismo.

PROFESOR 1: A ver, ¿quién ha roto el cristal? ¿No contesta nadie? A ver si aprendéis que la cobardía es inadmisible. Hay que ser responsable de lo que se hace, esté bien o esté mal hecho. Y gritar muy alto ¡eso lo he hecho yo! ¿Quién ha roto el cristal?

NIÑO: (Atemorizado) He sido yo.

PROFESOR 1: Así me gusta, que asumáis vuestras responsabilida­des. Que respondáis de todo lo que hacéis. Yo por ejem­plo, he puesto un cartel en la sala de profesores y espero que los compañeros me feliciten por ello. Pero aunque así no sea, siempre responderé de lo que he hecho. Ha­ced como yo.

PROFESOR 2: (Llega) Oye, que dice el director que si has sido tú el idiota que ha puesto ese cartel en la sala de profesores.

PROFESOR 1: ¿Un cartel? ¿En la sala de profesores? No sabía ni que estuviera. No, yo no he sido.

NIÑOS: Haremos como él.

- - 4 3 -

Page 23: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NARRADOR: Pero no es sólo cosa de mayores, también entre los niños hay quienes se creen con derecho a decir esto es así y luego hacerlo de manera opuesta.

NIÑO 1: Desde luego cómo sois. No sé por qué le tenéis tanta manía a Pili.

NIÑA 1: Porque es tonta perdida.

NIÑO 1: Pero tenemos que ser todos amigos.

NIÑA 2: Además es una «cursi».

NIÑO 1: La habrán criado así. Pero yo he hablado con Pili y es muy simpática.

NIÑO 2: A lo mejor al hablar con ella sí que lo es.

NIÑO 1: De verdad, tenemos que procurar ser amigos suyos. Pili es algo tonta pero tiene buen corazón.

MADRE: (En casa) José, te llama Pili por teléfono.

NIÑO 1: ¡Buenooo! ¡Esa pesada! Dile que no estoy.

MADRE: Dice José que no está... Espera que ahora se lo pregun­to. .. Dice que a qué hora vienes.

NÑOS: Tenemos que ser todos amigos.

NARRADOR: También en la Catequesis algunas veces se nos en­señan algunas cosas que ni los propios catequistas hacen.

CATEQUISTA: ¡Sentaos de una vez! Aquí venimos a trabajar y a es­tar serios. Para armar jaleo vais al parque. ¿Pero qué es eso de pegarse con las sillas? ¿Qué es eso de correr por toda la sala? ¡Y no os riáis que esto es algo muy serio! ¿Me río yo acaso de lo que decís vosotros?

NIÑOS: No señor.

CATEQUISTA: Pues respetad si queréis que se os respete. Vamos a ver, seguid hablando de la familia.

NIÑO: Pues en mi casa vivimos tres, yo, mi mamá que se llama Teresa, y mi papá que se llama Próculo.

CATEQUISTA: ¿Próculo? Ja, ja, ja... ¡qué risa!

NIÑOS: Respetaremos si queremos que se nos respete.

- 4 4 -

NARRADOR: Vamos a misa y allí sobre todo es donde nos dicen, esto se hace, esto no se hace, y donde más se hace lo que no se debe hacer.

SACERDOTE: (Sermoneando) Porque, queridos hermanos, siempre hemos de estar abiertos para socorrer al hermano. No podemos decir ante la necesidad del otro que tenemos prisa o es demasiado tarde. Porque se es cristiano las veinticuatro horas del día. Se es cristiano antes que nada y sobre todas las cosas.

Yo que tengo mi vocación y mis deberes, no digo nunca que ahora no puedo y siempre estoy dispuesto a soco­rrer al hermano.

FELIGRESES: Así sea.

MENDIGO: Señor cura, que venía a ver sí me puede dar algo para un bocadillo porque hace tres días que no como.

SACERDOTE: Ahora no. Mañana en Caritas de 8 a 9.

MENDIGO: Pero es que tengo hambre.

SACERDOTE: Algo encontrará hasta mañana.

FELIGRESES: Amén.

8. COMENTARIO DIALOGADO

¿Dices siempre lo que piensas y haces lo que dices?

¿Te han pillado alguna vez en alguna mentira? ¿Cómo te has sen­tido?

¿Eres consciente de que si te pillan en mentiras bajas en aprecio y estima por parte de los demás y disminuye la confianza mutua?

¿Por qué crees tú que todas las palabras de Jesús son verdad, ¿que Él es la verdad?

. - 4 5 -

Page 24: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

QUINTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús es la Vida.

Materiales Preparar la escenificación. Tres cartulinas con las palabras Familia, Colegio, Televisión.

Observaciones Se puede elegir cualquiera de las dos lecturas. En el Evangelio se puede hacer la lectura dialogada del libro Un tal Jesús. Como es un tanto larga nos remitimos a ella. Si se pre­para bien resulta entretenida y sobre todo rebosa humanidad, que es fácil unir con el tema de la vida. Jesús es la vida. En la escenificación que presentamos, tres niños con la corres­pondiente cartulina que les caracteriza, dan respuesta con las fra­ses que normalmente se dicen a las preguntas que se le hacen al niño, sentado y de espaldas a los otros tres niños.

A. LITURGIA DE LA PALABRA

1. LECTURA del Libro de Job 7,1-4.6-7

2. CANTO

3. LECTURA de la primera carta del Apóstol San Pablo a los Corin­tios 9,16-19.22-23

4. CANTO

- 4 6 -

LICTURA del santo Evangelio según San Marcos 1,29-39

•8CENIFICACIÓN

NIN<.): (Sale saltando y alegre) Yo voy a la vida porque quiero vi­vir mi vida. Las palabras de la vida me hablan de su be­lleza y de su dureza. Quiero jugar y vivir mi vida a pesar de que siempre oiga las mismas palabras, los mismos consejos, los mismos mandatos...

VOZ EN OFF: ¿Tú quién eres?

FAMILIA: La pulga bonita de la casa. Un psicópata que rompe to­do. Un monicaco que no pinto nada. Un cero a la izquier­da. Un estorbo. Uno que no le gusta hacer lo que le mandan. Un vago.

COLEGIO: Un cabeza buque. Un chico tonto que hace gracias para hacer reír a los demás. Un interrogante porque no sé lo que soy. Una oveja más del rebaño. Una ficha más en el archivo. Alguien que tiene heridas en los codos. Un pe­queño filósofo.

TELEVISIÓN: Un don nadie. Un objeto de placer que bebe Coca-Cola para sentirme bien con Coca-Cola, y tiene cosas que anuncian allí. Un consumidor constante. Un imbécil que hay que dragar.

TODOS: «¡Que trague y estudie!».

VOZ EN OFF: ¿De dónde vienes?

i AMIUA: De París porque nos lo dicen en casa. Me trajeron. Del limbo con amor. De buscar las llaves en el fondo del mar.

COLEGIO: De armar cachondeo. De aprender. Del dinero porque si no, no entramos. De un sitio donde he tenido un colo­quio con los libros.

TELEVISIÓN: De tomarme una horchata en la luna. De por ahí, un sitio lejano. De la base Alfa.

TODOS: «¡No lo sabe, no lo sabe!».

VOZ EN OFF: ¿Adonde vas?

FAMILIA: Igual que me trajeron me llevarán. De habitación en habi­tación. A lo desconocido, porque no se sabe a dónde

- 4 7 -

Page 25: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

vas. A un oficio porque así nos enseñan. A un lugar don­de no hay libertad.

COLEGIO: A aburrirme aguantando al profesor. A ninguna parte. A la deriva. A ser un gran sabio. A lo que salga. A septiem­bre a recuperar. A seguir la vida sin hacer nada nuevo. A protestar a asuntos sociales.

TELEVISIÓN: A ver películas. A tomar potitos Bledine. Al país de las maravillas. A hacerme muy rico. A las Cortes como pro­curador. A la fama. Intentamos descubrir el planeta X-53.

TODOS: «¡No le importa, no le importa!».

VOZ EN OFF: ¿Qué quieres ser?

FAMILIA: Yo quiero ser un hombre. Un chico respetado. Una afir­mación, no un interrogante, porque no somos nada. ¿Y a ti qué te importa?

COLEGIO: El inteligente. Uno de tantos. El mejor. Una máquina. As­pirar a lo más alto. Un Einstein cualquiera.

TELEVISIÓN: Que no me pasen por la computadora. El superman. Jhon «el rápido». Tan blanco como Ariel. Un traje lleno de algo. Uno que consume, consume y consume.

TODOS: «¡Se lo cree, se lo cree!».

NIÑO: (Se pone de pie dando un salto y gritando) Dejadme. No, no sé quién soy. Ni lo que quiero ser. Ni de dónde vengo ni a dónde voy. Pero quiero ser. Quiero vivir. Quiero ser y vivir.

TODOS: «¡Camina, lucha, hazte! ¡Camina, lucha, hazte!».

NIÑO: Dime Cristo quién eres, que yo quiero ser y vivir como Tú.

VOZ EN OFF: Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida.

Yo he venido para que tengas Vida.

Yo soy la Palabra y vengo a decir tu nombre, a llamarte por tu nombre.

NIÑO: (Recitado) Durante siete años no puede dar un paso.

Cuando fui al gran médico, me preguntó: ¿Por qué llevas muletas?

Y yo le dije: Porque estoy tullido.

4 8 -

No es extraño, me dijo. Prueba a caminar.

Son esos trastos los que te impiden andar.

¡Anda, atrévete, arrástrate a cuatro patas!

Riendo como un monstruo, me quitó mis hermosas mu­letas.

Las rompió en mis espaldas y, sin dejar de reír, las arrojó al fuego.

Ahora estoy curado. Ando. Me curó una carcajada.

Tan sólo a veces, cuando veo palos, camino algo peor por unas horas.

7. COMENTARIO DIALOGADO

¿Qué cosas te pesan, te cargan, no te dejan vivir?

Las obligaciones que te suponen esfuerzo, ¿las experimentas co­mo superación, como vida?

¿Sabes levantar el ánimo de los niños solos y tristes?

Jesús se nos presenta como la Vida, ¿por qué?

Jesús alimentaba su vida hablando con Dios, ¿alimentas tu vida cristiana hablando con Jesús?

• - 4 9 -

Page 26: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

DOMINGOS DEL TIEMPO ORDINARIO

Desde el ll-V

CICLO C

Jesús viene a casarse con nosotros

Page 27: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

SEGUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús es nuestro novio/a.

Comentario Estos cuatro domingos los unificamos con el desposorio de Dios con la humanidad que viene a realizar Jesús. Él viene a casarse con una alianza de bodas perpetua.

Materiales Preparar la lectura dialogada del Evangelio. Algunas cajas envueltas en papel de regalo para las ofrendas. Se preparan algunos niños que hagan de animadores en el desa­rrollo de la celebración.

Observaciones En la lectura dialogada del Evangelio, intercalamos dos comentarios. A lo largo de la celebración de la Eucaristía veremos los distintos momentos de una boda y lo que se hace en ellos, explicando y dialogando con los niños. Es una celebración que también se puede utilizar el domingo VIII del ciclo B.

X

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Todos sabemos que en Cana de Galilea Jesús hizo su primer milagro en unas bodas. ¡Quién lo iba a decir! El agua de las seis tinajas desti­nadas a la purificación de los judíos se convierte en vino de primera calidad.

- 5 3 -

Page 28: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

Los apóstoles empiezan a comprenderlo: con Jesús lo que pare­ce imposible, es posible. Nuestra vida nos parece pobre y aburrida. Agua sin sabor. Si hiciéramos como los criados y pusiéramos las cua­lidades que tenemos al servicio de los demás, Él nos daría fuerzas y vida. Estaríamos siempre de fiesta, de bodas.

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Porque somos muy egoístas y pocas veces pensamos en lo que los demás necesitan.

— Porque muchas veces estamos distraídos y no pensamos en Jesús.

— Porque las cualidades que Dios nos ha dado las usamos en nues­tro provecho y no para ayudar a los demás.

4. ORACIÓN

Queremos hablar contigo, Padre nuestro, porque Tú nos escuchas. Y queremos que nuestra vida esté al servicio de la vida y la paz que Tú quieres darnos.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. ESCENIFICACIÓN

6. DIÁLOGO

SACERDOTE: (Después de la oración, el Sacerdote comienza un diálogo con los niños que mantendrá a lo largo de toda la celebración)

Todos habéis asistido a algún funeral, ¿cómo está la gente?

También habéis asistido a alguna boda, ¿cómo está la gente?

- 5 4 -

i invita a algún niño a ponerse delante)

i )6mo ves tú las caras de la gente, como en una boda o umo en un funeral?

• lumos venido a una boda, porque eso significa venir a la i UOirlstla. Pues vamonos de boda.

(' / •¡ncerdote va con los niños animadores y algunos más i' '< <ndo y entran al son de la marcha nupcial)

• ñuños a la boda con un regalo para el novio/a. Pero, . i ii mde está el novio/a? ¿Quién es? ¿No ha venido y nos luí dado plantón?

I Iny la Palabra de Dios nos lo va a decir.

i W) MIMA del Profeta Isaías 65,1-5

<> • ANIO

>• MlAlOQO

fi^i t IUH)TE: Tus papas te llenan de piropos: cielo, sol, tesoro, ley...

I )los nos dice lo mismo: Somos sus novios/as, sus favo-illos/as...

En Navidad viene, y viene a casarse con nosotros. Le pi­ropeamos.

Nos quedamos contentos y alegres, de bodas.

No siempre estamos así, en estado de gracia, de bodas. La rutina, el «rollo» de cada día nos agua la fiesta. Algo así les pasó a unos novios en su boda a la que estaba in­vitado Jesús en Cana de Galilea.

10. LECTURA del santo Evangelio según San Juan 2,1-12

NARRADOR: En aquel tiempo había una boda en Cana de Galilea y la madre de Jesús estaba allí; Jesús y sus discípulos también estaban invitados a la boda. Faltó el vino y la madre de Jesús le dijo:

- 5 5 -

Page 29: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

MARÍA: No les queda vino.

NARRADOR: A ti te falta el vino:

LECTOR 1: Cuando no tienes ganas de estudiar y te cansan los de­beres.

Cuando los amigos no te hacen caso y te encuentras solo.

Cuando las cosas no te salen, o te salen mal y te desanimas.

Cuando no consigues lo que te propones.

Cuando envidias al que crees que es más valorado y querido.

Cuando la tristeza llena tus ojos de lágrimas.

Cuando la sonrisa desaparece de tu cara y muestras un rostro sombrío.

Cuando te enfadas y peleas, y rompes la armonía de ca­sa y del aula.

Cuando no sabes excusar y perdonar los fallos de los demás.

NARRADOR: Jesús le contestó:

SACERDOTE: Mujer, déjame, todavía no ha llegado mi hora.

NARRADOR: Su madre dijo a los sirvientes:

MARÍA: Haced lo que Él os diga.

NARRADOR: Había allí colocadas seis tinajas de piedra para las pu­rificaciones de los judíos, de unos cien litros cada una. Jesús les dijo:

SACERDOTE: Llenad las tinajas de agua.

NARRADOR: Y las llenaron hasta arriba. Entonces les mandó:

SACERDOTE: Sacad ahora y llevádselo al mayordomo.

LECTOR 2: Ama la vida, canta a la vida, abraza a la vida.

Pon siempre buena cara, que acalle los percances que tengas.

Apiádate de los más débiles y compadécete de los que sufren.

No te entrometas en la vida de nadie.

- 5 6 -

Ama siempre lo simple, el perfume de las flores y el can­to de los pájaros.

Camina siempre hacia delante con ilusión y alegría.

No hagas distinciones entre los compañeros.

No critiques ni juzgues mal a los demás.

Mira y agradece la vida de cada día como don de Dios.

Reaviva el entusiasmo, la sonrisa y la alegría en cada amanecer.

NARRADOR: Nuestra vida se alegrará así con el vino nuevo.

Ellos lo llevaron. El mayordomo probó el agua convertida en vino sin saber de dónde venía (los sirvientes sí lo sa­bían, pues habían sacado el agua), y entonces llamó al novio y le dijo:

MAYORDOMO: Todo el mundo pone primero el vino bueno, y cuan­do ya todos están bebidos entonces ponen el peor; tú en cambio, has guardado el vino bueno hasta ahora.

NARRADOR: Así, en Cana de Galilea, Jesús comenzó sus signos, manifestó su gloria y creció la fe de sus discípulos en Él.

Después bajó a Cafarnaún con su madre y sus hermanos y sus discípulos, pero no se quedaron allí muchos días.

11. DIÁLOGO

¿Cada domingo venimos a celebrar nuestra boda con Jesús o a cum­plir una obligación?

Con Jesús hemos de estar siempre de bodas, de fiesta, alegres, en alianza perpetua... ¿Cómo y cuándo se nos agua la vida? ¿Cómo mantendremos siempre la fiesta y la alegría?

C. LITURGIA EUCARISTICA

12. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

(Los portadores de las cajas-regalo las ofrecen diciendo alguna cosa al novio/a)

- 5 7 -

Page 30: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

13. SANTO

(Le aclamamos como el mejor, lo más importante para nosotros)

14. CONSAGRACIÓN

(Jesús en la consagración establece su alianza con nosotros como los novios se dan su sí, su consentimiento)

15. ACLAMACIÓN

(Por Él, con Él y en Él... equivale a un brindis. Invitamos a los niños a brindar por el novio/a).

16. FRACCIÓN DEL PAN

(Jesús se parte y se reparte. Los novios parten y reparten la tarta nup­cial como signo de vida compartida)

17. COMUNIÓN

(En los banquetes de bodas se dan «Vivas»: ¡Viva el novio!, ¡Viva la no­via!, ¡Viva el padre de la novia!, ¡Viva la madre del novio!... Se invita a los novios a hacerlo)

18. BAILE FINAL

(Así concluye la boda. Se pone un vals y los niños bailan)

- 5 8 -

TERCER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos presenta su programa.

Materiales Preparar la escenificación. Vendas para los niños que hacen de ciegos, sordos, mudos... que se presentarán en las ofrendas.

Observaciones Como el domingo anterior, el sacerdote va dirigiendo la celebra­ción en diálogo con los niños. La segunda lectura se resume y se hace abreviada. El salmo se re­cita, ya que hace alusión al tema. Los niños que escenifican se irán colocando delante del sacerdote para que haga el gesto de liberación.

I

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Jesús viene al mundo y quiere que el mundo sea un banquete de bo­das, como una fiesta. Jesús es el vino, como veíamos el domingo pa­sado, que transforma nuestra agua, para que también nosotros sea­mos vino para el mundo. Hoy nos vamos a preguntar, ¿cómo seremos vino para el mundo, para los demás?

2. CANTO

- 5 9 -

Page 31: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

3. RITO DEL PERDÓN

— Porque no te escuchamos cuando hablas en nuestra conciencia.

— Porque no escuchamos con respeto y atención la proclamación de tu Palabra.

— Porque no cumplimos tu voluntad manifestada por medio de tu Palabra.

4. ORACIÓN

Padre Nuestro, Tú has transformado el agua de nuestra vida en el vi­no de tu amor. Ayúdanos a conservar siempre ese vino para poder alegrar a todo el mundo.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. DIÁLOGO

SACERDOTE: El domingo pasado se nos invitaba a estar siempre de bodas, de fiesta, pero la rutina, el «rollo» de cada día nos agua la fiesta, nos carga y a veces nos duele. ¿Qué es lo que más te ha cansado y cargado a lo largo de la semana?

La primera lectura nos dice cómo el pueblo de Israel re­cuperaba el ánimo y la alegría.

6. LECTURA del libro de Nehemías 8,2-4.5-6.8-10

7. SALMO

8. DIÁLOGO

SACERDOTE: También decíamos el domingo pasado que los ami­gos de Jesús somos vino para el mundo. ¿Para quiénes hemos de ser vino de alegría y esperanza?

En el mundo hay muchos niños que están:

- 6 0 -

CIEGOS: (Salen) Estamos ciegos porque no sabemos hacer otra cosa que ver la tele y comer pipas y porquerías, jugar a las máquinas y gastarnos toda la propina en bobadas sin pensar en los demás.

COJOS: (Salen) Nosotros no sabemos hacer nada solos y siem­pre pedimos a los demás que hagan las cosas por noso­tros. También somos unos mandones que necesitamos tener siempre a alguien a quien mandar.

SORDOS: (Salen) Nosotros estamos sordos porque sólo pensamos en nosotros mimos y no compartimos nada con nadie. Siempre nos estamos peleando con los demás y sólo sa­bemos escucharnos a nosotros mismos y a nuestros ca­prichos.

MUDOS: (Salen) Porque nuestro miedo y cobardía nos impide de­cir la verdad de nuestras fechorías si no es para chulear­nos. Porque la envidia nos ata la lengua para que no ha­blemos bien de los compañeros. También porque la rabia nos hace hablar mal o decir palabrotas.

MANCOS: (Salen) Estamos mancos porque no prestamos ningún servicio en casa o lo dejamos todo tirado para que lo re­coja la mamá, ni tendemos la mano al que necesita nuestra ayuda.

SACERDOTE: ... Son todos los niños y personas de los que Jesús nos habla en el Evangelio.

9. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 1,1-4; 4,14-21

(Al acabar la lectura, baja donde se encuentran los niños y corta y li­bera de los vendajes.)

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Quiénes a nuestro alrededor son esos niños o personas mayores que están ciegos, sordos... por otras razones que no hemos dicho?

¿Qué podemos hacer para ser manos, pies, boca, etc., de Jesús y dar la Buena Nueva a todas las personas?

- 6 1 -

Page 32: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

C. PLEGARIA EUCARÍSTICA

11. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

Hoy con el pan y el vino te presentamos estos vendajes que nos ha­cen ciegos para ver las necesidades de los demás, que nos mantie­nen cojos sin dejarnos hacer nada por nosotros mismos, que nos de­jan sordos y sólo nos escuchamos a nosotros mismos y a nuestros caprichos, que nos convierten en mudos para decir la verdad, que nos mantienen mancos para prestar el más mínimo servicio. Conviér­telos en tu cuerpo y sangre para que nos alimenten, nos liberen y nos hagan liberadores como Jesús.

- 6 2 -

CUARTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos elige.

Comentario Jesús nos elige desde el seno materno como a Jeremías para lle­var adelante su programa, para cumplir y desempeñar el papel de profetas aunque nos cueste el rechazo como a Él.

Materiales Preparar la escenificación El Evangelio puede hacerse dialogado, hasta el versículo 25.

Observaciones La escenificación es un resumen de Juan Salvador Gaviota. Basta que el volar se refleje arriba de las gradas y el comer abajo.

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Muchas veces los que queremos ser amigos de Jesús tenemos mie­do a ser diferentes. Nos sentimos a gusto cuando vivimos como los demás siguiendo las corrientes de la moda, de la tele...

Ser «diferente» al estilo de Jesús supone no vivir cómodamente, saber decir «no» algunas veces, no dejarse llevar por los caprichos, lo que se lleva, lo que es más caro porque tiene una marca o una eti­queta. En definitiva esto nos lleva en algunas ocasiones ante los de-

- 6 3 -

Page 33: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

más, ante nuestro grupo o «pandilla» a ser raros, diferentes, distin­tos... y a esto es a lo que no queremos llegar.

En el Evangelio de hoy vamos a ver que Jesús también fue dife­rente, no siguió la corriente de la gente de su tiempo; pero, ¿en qué fue diferente?

2. CANTO

B. LITURGIA DE LA PALABRA

3. LECTURA del Profeta Jeremías 1,4-5.17-19

4. CANTO

5. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 4,21-30

6. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Amanecía y el nuevo sol pintaba de oro las sombras de un mar tranquilo. Chapoteaba un pesquero a un kiló­metro de la costa, cuando de pronto rasgó el aire la voz llamando a la bandada para la comida y una multitud de gaviotas se reunió (Salen). Estas gaviotas no se molesta­ban más que en aprender lo elemental: volar sobre la playa y comer, el comer era lo que más les importaba.

En este grupo de gaviotas había una, Juan Salvador, que más que comer prefería volar (Sube las gradas); volaba muy alto, caso que a las demás les extrañaba y decían:

GAVIOTA 1: ¡Ya está otra vez esa loca!

GAVIOTA 2: ¡Se está quedando en el esqueleto, no es más que huesos y plumas!

GAVIOTA 3: Nos quiere enseñar nuevas formas de volar. ¡Es muy lista!

- 6 4 -

GAVIOTA 4: ¡Ten cuidado, todo eso lo haces por no ser como las demás!

NARRADOR: Un día, después de haber conseguido volar a gran altu­ra, llegó a la playa cansada pero llena de gozo (Baja). Allí estaba la bandada reunida; cuando la vieron le dijeron:

GAVIOTAS: ¡Loca! ¡Revolucionaria! ¡Rebelde!... ¡Fuera, Fuera!

NARRADOR: La gaviota desapareció. Algunas gaviotas que habían empezado a sentir admiración por los descubrimientos que había hecho Juan Salvador, intentaron poco a poco y con miedo hacer pequeños vuelos. Al cabo del tiempo ya era un pequeño grupo el que seguía los pasos de Juan Salvador porque ya no soportaban aquella socie­dad de consumo de peces en la playa.

Poco a poco estas gaviotas fueron descubriendo un mundo en el que se podía ser más libre. (Suben algunas)

En uno de sus altos vuelos se encontraron con Juan Sal­vador. Todas juntas decidieron volver a la bandada que­riendo hacer partícipes a todas las gaviotas del gozo que se siente cuando se busca una forma nueva de vivir.

Pero a pesar de todo en la bandada seguían con las alas cerradas, no estaban dispuestas a escuchar.

7. COMENTARIO DIALOGADO

¿Tienes sueños, ideales, ganas de volar? ¿Cuáles?

¿Te conformas con comer, consumir y dormir? ¿Te da miedo ser distinto?

¿Recuerdas el programa de vida que Jesús nos mostraba el do­mingo pasado? ¿Cómo reaccionó la gente? ¿Aceptaron esa nueva forma de vida? Jesús, ¿qué les dijo?

¿Qué forma de vida nos presenta la televisión? ¿Tiene algún pare­cido con la forma que Jesús nos propone?

- 6 5 -

Page 34: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

• • & .

QUINTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos llama.

Materiales Tres niños caracterizados de Isaías, Pablo y Pedro harán la escenifi­cación y leerán la lectura correspondiente. El Evangelio hay que le­erlo dialogado para que pueda intervenir Pedro.

Observaciones Una vez leídas las lecturas, quedarán los tres alineados delante de los niños para continuar con el guión. Para el ofertorio sugerimos el canto: «Necesitas nuestras manos».

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Jesús es la luz que debemos llevar con nosotros para que otros niños que viven en las tinieblas de la pobreza, la incultura, el abandono, el hambre y la muerte, puedan tener alguna esperanza. Con pequeños gestos de solidaridad queremos estar cercanos a ellos, para que nuestra solidaridad sea «Buena Noticia» para ellos. A través nuestra Jesús se hace luz para ellos.

2. RITO DEL PERDÓN

— Te pedimos perdón, Padre, porque nos cuesta acercarnos a los niños que no son amigos nuestros, pero son hijos tuyos y herma­nos nuestros.

- 6 6 -

— Te pedimos perdón, Padre, porque nos cuesta querer a los niños que son diferentes porque tenemos muchos prejuicios sobre ellos.

— Te pedimos, perdón, Padre, porque no nos interesan los proble­mas de los niños más pobres que nosotros y gastamos sin ser solidarios.

3. ORACIÓN

Todos los niños del mundo formamos una familia de hermanos por­que te tenemos a Ti por Padre. Te pedimos que nos ayudes a cuidar unos de otros, los que estamos cerca y los que están más lejos y pa­san necesidad.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. MONICIÓN

NARRADOR: Las lecturas de este domingo nos presentan el «sí» de unos hombres que al escuchar la llamada de Dios, tuvie­ron la valentía de dejarlo todo para ponerse a su servicio.

ISAÍAS: Es el primero. (Sale y se coloca delante de los niños) Es consciente de su indignidad, pero experimenta en él la fuerza de Dios que lo purifica y lo prepara para la misión. Se ofrece generosamente a Dios para ser su enviado.

PABLO: (Sale y se coloca delante de los niños) No se avergüenza de reconocer su actitud de perseguidor de los discípulos de Jesús, pero constata la llamada del Señor y la fuerza de su gracia que ha sido capaz de transformarlo en el más de­cidido de los apóstoles.

PEDRO: (Sale y se coloca delante de los niños) Y los pescadores amigos del lago de Galilea, no pueden resistir la mirada y las palabras de Jesús y en un gesto decidido, dejando las barcas, redes y familia, se van con Él.

- 6 7 -

Page 35: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

5. LECTURA del Profeta Isaías 6,1-2. 3-8

6. CANTO

7. LECTURA de la primera carta del Apóstol San Pablo a los Corin­

tios 15,1-11

8. CANTO

9. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 5,1-11

10. ESCENIFICACIÓN NARRADOR: Son tres figuras, tres ases, tres campeones en la his­

toria de salvación, en la respuesta que dieron a la llama­da de Dios. Fijémonos y veamos sus coincidencias. En primer lugar los tres tienen una sensación profunda de indignidad, de incapacidad.

ISAÍAS: «¡Ay de mí, estoy perdido! Yo, hombre de labios impuros que habito en medio de un pueblo de labios impuros».

PABLO: «... No soy digno de llamarme apóstol, porque he perse­guido a la Iglesia de Dios».

PEDRO: «¡Apártate de mí, Señor, que soy un pecador!».

LECTOR: ¿Quién es capaz de confesar que es pecador? ¿Noso­tros, tan buenos, tan simpáticos, tan guapos, tan genero­sos..., ¿pecadores? ¡Ni hablar! Yo no tengo pecados, so­lemos decir.

Creerse pecador ayuda a vernos tal cual somos. Ayuda a no juzgar, a comprender y a soportar a los demás.

Con Jesús, nuestras redes que envuelven tanto egoísmo y vanagloria, se rompen y son incapaces de aguantar tanta pesca de generosidad y amor como nos ofrece.

NARRADOR: Este sentimiento de pobreza personal les predispone para acoger la llamada del Señor y abrirle el corazón.

ISAÍAS: «Esto ha tocado tus labios, ha desaparecido tu culpa, está perdonado tu pecado».

- 6 8 -

PABLO: «Por la gracia de Dios soy lo que soy y la gracia no se ha frustrado en mí».

PEDRO: «No temas, desde ahora serás pescador de hombres».

LECTOR: ¿A quién con sentido común se le puede ocurrir enseñar a un pescador experto decirle cuándo y dónde tiene que echar las redes?

Maestro, ¿no sabes que los pescadores expertos se van a reír de nuestra temeridad?

Nos resulta difícil fiarnos de Dios que nos invita a salir de nosotros mismos. Preferimos más pájaro en mano.

NARRADOR: En tercer lugar la respuesta decidida y comprometida de la persona es indispensable.

ISAÍAS: «Aquí estoy, mándame».

PABLO: «He trabajado más que todos ellos. Aunque no he sido yo, sino la gracia de Dios conmigo».

LECTOR: El discípulo de Jesús vive en función de los otros que son la razón de su vida.

¿Cuántos cristianos somos capaces de vivir para los otros, orientados hacia los demás?

La mayoría vivimos para nuestro yo, al que cuidamos, mimamos y acariciamos. No nos queda tiempo para re­mar hacia los demás.

NARRADOR: Dios nos necesita a todos como a Isaías, Pablo o Pe­dro. ¿Estás dispuesto a llamarte seguidor de Jesús?

11. COMENTARIO DIALOGADO

¿Estás dispuesto a llamarte seguidor de Jesús?

Jesús nos envía a anunciarle, ¿le conoces cada día un poco más y un poco mejor? ¿Sabes hablar de tu fe con tus propias palabras?

¿Te da miedo, vergüenza... hablar de Él?

- 6 9 -

Page 36: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

C. PLEGARIA EUCARÍSTICA

12. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

Jesús, tú nos necesitas para continuar tu misión:

— Te ofrecemos nuestros ojos; haz que miremos con amor a las per­sonas que encontremos, como las mirabas Tú.

— Te ofrecemos nuestras palabras; haz que sean cálidas y agrada­bles, de comprensión y perdón como eran las tuyas.

— Te ofrecemos nuestros pies; haz que siempre estén a punto y dis­puestos a ir donde hay una persona necesitada.

— Te ofrecemos nuestras manos; haz que siempre estén abiertas para acoger y ayudar a los demás con alegría.

— Te ofrecemos nuestro corazón; haz que amen como el tuyo aun­que sea difícil y nos cueste mucho.

Jesús, queremos ser amigos tuyos. ¡Aquí nos tienes! ¡Dispon de nosotros! Como Isaías, Pablo y Pedro queremos decir SÍ a tu llamada.

- 7 0 -

DOMINGOS DEL TIEMPO ORDINARIO

Desde el XXV-XXXIV

CICLO A

Jesús nos revela a Dios

Page 37: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VIGESIMOQUINTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios paga a todos por igual.

Comentario A lo largo de estos domingos del año iremos viendo la revelación de Dios que hace Jesús a través de las parábolas y otras enseñan­zas. Lo que nos dice que Dios es y cómo actúa. Pues según es y actúa Dios, así debemos ser y actuar nosotros.

Materiales Preparar la lectura escenificada. Cartulina con un sol dibujado para colocar en el panel.

Observaciones El guión es un resumen del libro Un tal Jesús. Como es difícil es­cenificar, basta hacer una lectura lo más escenificada posible. Leemos la primera lectura que da una visión de Dios. Cada domingo iremos colocando en el panel un simbolismo de Dios dibujado en cartulina. Con él haremos la procesión de en­trada, presidirá la celebración y acentuaremos en el diálogo co­mentado y a lo largo de la celebración.

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA

2. CANTO

- 7 3 -

Page 38: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

3. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

Dios es este «sol de justicia» (Mal 3,20), no de la justicia que «a cada uno va a pagar lo que se merece» (Is 55,18), sino el Dios que paga por encima de nuestros méritos y merecimientos, porque es gracia y misericordia y «rico en perdón». Nosotros que pedimos y exigimos continuamente la «paga» de nuestros trabajos y por nuestros traba­jos, es importante que entremos en ese ámbito de lo que es gratis y trabajemos a todas horas en la viña del Reino.

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque trabajamos siempre y en todo con conciencia de asalariados.

— Porque pensamos que se nos deben pagar siempre nuestros esfuer­zos.

— Porque somos rácanos en la comprensión y el perdón.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del Profeta Isaías 55,6-9.

6. CANTO

7. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 20,1-16.

NARRADOR: En la plaza de Cafarnaún se reunían cada mañana los hombres buscando trabajo, cada uno con su herra­mienta.

DANIEL: ¡Ea, muchachos, venid a trabajar a mi viña! ¡Hay mucha uva esperando! ¡Un denario cuando se ponga el sol!

NARRADOR: Un grupo de hombres se echó a andar detrás de Da­niel. A la plaza también iba Jesús todos los días con sus clavos y su paleta esperando que lo contrataran.

OBRERO 1: ¡Eh, Jesús, tienes cara de sueño!

- 7 4 -

JESÚS: Ayer vine tarde y no me salió ningún trabajo. A ver qué pasa hoy.

OBRERO 1: Si no madrugas no consigues nada. Mira, Daniel acaba de contratar a unos cuantos para su viña.

JESÚS: ¿Y cuánto les paga?

OBRERO 1: Un denario como siempre. Si te dice que te lo paga, te lo paga. Es un buen tipo.

DUEÑO 2: ¡Un albañil para dos días, un albañil para dos días! ¡Te­cho y muro! ¡Techo y muro!

JESÚS: ¡No busques más, aquí está ese albañil!

DUEÑO 2: ¡Vamos! Un denario hoy y otro mañana. ¿De acuerdo?

JESÚS: De acuerdo.

OBRERO 1: Tuvo suerte. Bien pronto se enganchó.

OBRERO 3: Ni que lo digas. Yo hace tres días que estoy viniendo aquí y nada de nada. En este tiempo nadie esquila ovejas, ¡maldita sea! Cada día afilo la navaja y no sé para qué. Un día me cortaré con ella el pescuezo. Todos los días lo mismo: volver a casa con las manos vacías y ver que los muchachos tienen hambre. «No, hijo mío, no hay más que ese poquito de pan. Mañana... mañana habrá más». ¡Y diablos! Mañana es igual que hoy. No aguanto a mis hi­jos muñéndose de hambre. ¡No aguanto más!

NARRADOR: A las nueve de la mañana volvió por allí Daniel.

DANIEL: ¡Eh, muchachos! Necesito más brazos para trabajar en mi viña. ¿Quién quiere venir?

NARRADOR: Los que estaban en la plaza se fueron con Daniel.

DUEÑO 3: ¡Un herrero! ¡Un herrero para ponerles herraduras a cin­co mulos!

OBRERO 3: ¡Yo soy el mulo! Y ese, y aquel otro. Todos aquí no so­mos más que eso: ¡mulos! Sólo nos falta el rabo. Parece que no hemos nacido más que para eso, para doblar el lomo. Los pobres venimos a este mundo a doblar el lomo y a echar hijos para que sigan haciendo lo mismo que no­sotros: seguir doblando el lomo y tener las tripas vacías.

- 7 5 -

Page 39: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NARRADOR: A mediodía, todavía quedaban hombres esperando para conseguir algún trabajo.

ESPOSA: ¿Nada, Samuel?

ESPOSO: Nada, todavía nada.

ESPOSA: ¿Y qué vamos a comer hoy?

ESPOSO: Hierve una piedra, ¡a ver si sale algo!

ESPOSA: ¿Y qué quieres tú?

ESPOSO: ¿Qué quiero yo? Ser feliz. Eso solamente.

NARRADOR: A las tres de la tarde, volvió Daniel a buscar más tra­bajadores para su viña.

DANIEL: Pero, ¿qué hacéis bostezando y perdiendo el tiempo? ¡Y yo necesitando gente! ¿Quién viene conmigo? Aún le queda un puñado de horas al día.

NARRADOR: A las cinco de la tarde volvió Daniel una vez más por la plaza.

DANIEL: ¡Caramba, si todavía aquí hay algunos mirando a las nu­bes!

OBRERO 1: Nadie nos ha contratado. Ya ves, esperando a ver si cae algo.

DANIEL: En esta plaza lo único que cae es la basura de las palo­mas. Todavía el sol no se acuesta, ¡venid a mi viña!

NARRADOR: Cuando la luna ya dibujaba su silueta sobre la viña de Daniel...

DANIEL: ¡Muchachos, ya está bien de partirse el lomo! ¡Ya es hora de cobrar!

NARRADOR: Daniel llamó al capataz de su viña.

DANIEL Págales un denario a cada uno. Y hasta otro día compa­ñeros.

OBRERO 2: Un momento, Daniel. ¿Cuánto dijiste que nos ibas a pagar?

DANIEL: A cada uno un denario. ¿Qué pasa?

OBRERO 2: Es que... estos cuatro acaban de llegar, y aquí hay al­gunos que llevamos todo el día.

- 7 6 -

DANIEL: Bueno, ¿y qué? ¿No os contraté a todos por un denario?

OBRERO 2: Sí, pero no es justo pagarles a los últimos lo mismo que a nosotros.

DANIEL: ¿Ah no? ¿Por qué no es justo?

OBRERO2: Bueno, porque... porque...

DANIEL: ¿Tú tienes hijos verdad? ¿Y necesitas el denario para darles de comer? Por eso te doy a ti el denario. Este que llegó el último también tiene hijos y necesita el denario para darles de comer. ¿Dónde está la injusticia? Cada uno hizo lo que pudo.

OBRERO 2: Pero nosotros trabajamos más tiempo.

DANIEL: Di que esperasteis menos tiempo en la plaza. No amigo, no te quejes. Mañana cuando seas tú el último en llegar te alegrarás de recibir un denario completo. Porque to­dos necesitamos un denario para vivir.

AMIGO: Pues me contó Lía que hoy su marido y otros hombres estuvieron en la viña de Daniel trabajando. ¿Pero sabes una cosa Jesús? Que a la hora de pagar, el muy conde­nado les ha dado un denario a cada uno. A todos lo mis­mo, ¿te das cuenta? Es un patrón loco, ¡eso digo yo!

JESÚS: ¡Al contrario! Es el mejor patrón que hay por aquí, por Cafarnaún. ¿Y sabes lo que pienso? Que cuando Dios se pone a contratar peones para que trabajemos en este mundo, hace lo mismo que Daniel.

AMIGO: No entiendo lo que quieres decir.

JESÚS: Lo mismo que dijo Daniel. Que todos necesitamos un denario para vivir. Un denario de pan y un denario de es­peranza. Todos estamos sentados en la plaza esperando ser felices.

Y se nos ponen los ojos llenos de envidia al ver que algu­nos se levantan primero que nosotros. Pero tarde o tem­prano nos llegará el turno a nosotros. Y Dios hará como hizo Daniel: nos dará a todos un buen salario, a todos por igual, que es la mejor justicia. Al final cuando la plaza esté vacía, todos tendremos en la mano el mismo dena­rio, la misma felicidad que tanto esperamos.

- 7 7 -

Page 40: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

8. COMENTARIO DIALOGADO

¿Te parece adecuado el modo de proceder de Daniel a la hora de pagar?

¿Por qué te parece justo o injusto? ¿Te ilumina «ese sol de justi­cia», ese proceder de Dios?

¿Crees que merece la pena esforzarse si al final todos reciben el mismo premio?

Dios es rico en perdón y comprensión, ¿y tú?

- 7 8 -

VIGESIMOSEXTO DOMINGO I DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios exige fidelidad.

Materiales Preparar la escenificación Cartulina con un rayo o relámpago dibujado para colocar en el panel. Cuatro tiras de cartulina con las frases del guión que en la narración los niños las dirán fuerte y colocarán en el panel. Así servirán para el comentario dialogado.

Observaciones Se puede elegir cualquiera de las dos lecturas; como hablan de conductas y comportamientos, dan mucho para jugar con el «sí» y con el «no» del Evangelio. La lectura del Evangelio se puede hacer dialogada.

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA

2. CANTO

3. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

Dios es el «relámpago que brilla de un extremo a otro del horizonte» (Mt 17,24). En muchas ocasiones nuestro proceder no es como el de

- 7 9 -

Page 41: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

Dios. Los problemas se nos acumulan y la oscuridad va llenando nuestras personas y nuestras vidas. En esos momentos es cuando más necesitamos esos rayos, esos relámpagos de Dios que iluminen nuestros horizontes para mantenernos firmes y fieles.

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque no vivimos aquello que profesamos ni lo comunicamos a los demás.

— Porque no amamos con un amor auténtico que traspase las fron­teras de nuestro propio egoísmo.

— Porque no comunicamos a los demás la buena noticia del Evan­gelio ni trabajamos en la viña del Reino.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del Profeta Ezequiel 18,25-28

6. CANTO

7. LECTURA de la carta del Apóstol San Pablo a los Filipenses 2,1-11

8. CANTO

9. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 21,28-32

10. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: La parábola nos informa de que hay dos clases de hi­jos. Los hijos del «no» que se hace «sí», y los del «sí» que se hace «no». El «no» que se hace «sí» es la conducta rebelde, que más que rechazo es la afirmación de la pro­pia identidad. Es la actitud del niño-adolescente que necesita afirmarse como persona a través de muchos agresivos:

- 8 0 -

NIÑO 1: «No me da la gana».

NARRADOR: El «sí» que se hace «no» es la otra cara de la moneda. Confundir obediencia con sumisión es la postura «care­ta-máscara» con la que se aparenta lo que no se es:

NIÑO 2: «Lo que usted mande».

NARRADOR: La parábola no habla del tercer hijo que diga «voy» y lo haga; ni del cuarto hijo que diga «no voy» y se man­tenga fiel en su negativa.

Pero también a la parábola se le ha incorporado hoy día el personaje perezoso y comodón del:

NIÑO 3: «Ya voy. Ahora mismo voy».

NARRADOR: Y ese «ahora» nunca llega. Es el personaje que tanto desilusiona a los papas cuando nos mandan algo. Ojalá surja en nosotros el cuarto personaje, el del:

NIÑO 4: «Debo».

NARRADOR: Al que basta que se le señale la viña: trabajo, deber, recados..., para que se decida a acudir enseguida y dili­gentemente.

11. COMENTARIO DIALOGADO

¿Cuál de esas cuatro frases es la que yo más digo y me digo interna­mente cuando me mandan algo?

¿Soy diligente en \o fácil y en lo que me gusta, y negligente en lo difícil y que no me gusta?

¿Vas tomando conciencia de que a los deseos y palabras deben seguir las acciones?

¿Dios es el relámpago que ilumina tu vida, o el rayo o trueno que te atemoriza?

- 8 1 -

Page 42: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VICESIMOSEPTIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios busca frutos.

Comentario Las lecturas de este domingo invitarían a fijamos más en el «re­chazo, de los profetas y del hijo por parte de Israel. Pero preferi-m°s centrarnos en la revelación de Dios que vamos a ir llevando estos domingos del ciclo A.

Materiales Preparar la escenificación. Velas de cartulina para la procesión de entrada y una de mayor tamaño para colocar en el panel. La puede portar el sacerdote.

Observaciones El guión es resumen del libro Un tal Jesús. Como los personajes relevantes son dos: Viejo y Jesús, se puede escenificar. Un cate­quista puede hacer de Viejo rasgando una guitarra. La presentación de los símbolos se hace de cara al público con el sacerdote y los niños a ambos lados.

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA

2. CANTO

3. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

«Parte tu pan con el hambriento, hospeda a los pobres sin techo, vis­te al que va desnudo y no te cierres a tu propia carne, entonces brilla-

- 8 2 -

rá tu luz como la aurora» (Is 58,7-10). Cada vez que hacemos una obra buena, encendemos una «vela», damos el fruto que Dios espera de nosotros y su luz brillará en nosotros. «Será el Señor tu luz perpetua y tu Dios será tu esplendor» (Is 60,19).

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA del Profeta Isaías 5,1-7

5. CANTO

6. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 21,33-43

NARRADOR: Al llegar la primavera, Jerusalén abría sus doce puer­tas a miles de israelitas venidos de todo el país. Todos querían celebrar la gran fiesta de la Pascua.

VIEJO: Es la historia de mi amigo, la que os quiero contar. Permítanme comenzar: Mi buen amigo tenía una viña, y la quería con cariño sin igual. La limpió, sembró la tierra, una torre construyó, y un lagar edificó, esperando con sus uvas, llenar de vino las cubas, que también se fabricó.

JESÚS: Es bonita esa canción, abuelo.

VIEJO: Bonita y antigua, mi hijo. Es siete veces más vieja que yo. Dicen que la cantaba el profeta Isaías aquí mismo, junto al templo.

NARRADOR: Del templo salieron con sus túnicas y sus tiaras un grupo de sacerdotes y magistrados. Jesús los vio ense­guida y alzó la voz.

JESÚS: ¡Eh, abuelo! ¿Por qué no canta más coplas a la viña?

VIEJO: ¡Ay, mi hijo! Ya ni me acuerdo cómo siguen. ¿Y tú? A lo mejor tú eres un profeta cantor como Isaías o nuestro rey David.

JESÚS: ¡Qué va, abuelo! Yo canto peor que un sapo ronco... Pe­ro me sé la historia sin música... Y aquellos de allá atrás

- 8 3 -

Page 43: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

quieren oírla... Había un propietario que plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó en ella un lagar, la arrendó a unos labradores y se marchó de viaje. Pasó el tiempo y llegó la época de la vendimia.

VIÑADOR 1: ¡Mirad qué uvas, compañeros, parecen melones!

VIÑADOR 2: ¡Acortar racimos y a pisarlos en el lagar!

VIÑADOR 3: Luego a beber y a divertirnos. ¡Esta noche me emborra­cho yo como el ciego Noé! ¡Luego que venga el diluvio!

JESÚS: El amo envió sus criados a los viñadores para percibir los frutos que le correspondían. Pero los viñadores, agarran­do a los criados, apalearon a uno, mataron a otro y a otro lo apedrearon.

Envió de nuevo otros criados, más que la primera vez, e hicieron lo mismo con ellos. Por último les mandó a su hijo diciéndose: tendrán respeto a mi hijo. Pero los viña­dores al ver al hijo se dijeron:

VIÑADOR 2: Oye, ¿ese que viene por ahí no es el hijo del patrón?

VIÑADOR 3: ¡Esto es el colmo! ¡El patrón o está tonto o está chiflado!

VIÑADOR 1: ¡Esta es nuestra oportunidad! ¡Es el heredero! Si lo qui­tamos de en medio, ¡seremos los dueños! ¡Ea, compañe­ros, deprisa y sin mucha sangre!

JESÚS: Los viñadores le echaron mano al hijo del dueño y antes de que abriera la boca, lo cubrieron de insultos y de sali­vazos, lo patearon, lo molieron a palos y con un cuchillo afilado lo degollaron igual que a una oveja.

VIEJO: ¿Dónde pasó una historia así? ¿Allá en el norte?

JESÚS: En el norte y en el sur; aquí mismo está pasando. Abue­lo, haga memoria y cante la última copla de su canción.

VIEJO: Espérate, que ya me está viniendo a la mente: Escuchen ahora el final, de esta mi triste canción; la viña Dios la confió a los jefes de Israel, justicia esperaba él y sólo abusos recogió. Por eso les pongo un pleito; la viña a quitarles voy, y a los pobres se la doy, porque los otros han sido jornaleros corrompidos. ¡Ahora sabrán quién soy!

8 4 -

JESÚS: ¡Muy bien abuelo! Así es como termina la historia. Sí, Dios es el dueño de la finca y les va a ajustar las cuentas a los dirigentes de nuestro pueblo, y nos va a entregar la viña a nosotros.

SACERDOTE: ¿Qué estás insinuando, nazareno embaucador?

JESÚS: No digo nada nuevo. Las canciones de nuestro pueblo lo dicen claro. ¿No conoces el salmo que cantamos estos días de fiesta? La piedra que los albañiles despreciaron es ahora la piedra angular. Los viñadores han cerrado sus oí­dos a los mensajes del dueño de la viña. Así sois los jefes de Israel: ciegos y sordos. No perdonáis al que os echa en cara vuestra ambición. Vinieron los profetas: los golpeas­teis, perseguisteis y os reisteis de ellos. Vino Juan: le ta­pasteis la boca y cortasteis el pescuezo. Y ahora...

SACERDOTE: Ahora, ¿qué?

JESÚS: Ahora queréis hacer lo mismo con el Hijo: queréis matarlo.

NARRADOR: Se hizo un silencio. Lo rompió el chillido de uno de los sacerdotes:

SACERDOTE: ¿No lo habéis oído? ¡Dice que es el Hijo de Dios! ¡Blasfemo!

NARRADOR: Los sacerdotes se abalanzaron y arrojaron piedras contra Jesús. La multitud lo encubrió. El viejo de barba blanca quedó cantando.

VIEJO: Hombres de Jerusalén, habitantes de Judá, vengan todos a juzgar, ¿qué más podía yo hacer por la viña que planté?, ¿qué más le pude yo dar?

7. COMENTARIO DIALOGADO

¿Cuáles son los frutos que damos nosotros?

¿Cuáles son los frutos que Dios espera que demos?

¿Cuáles son los frutos que los papas y profesores esperan de no­sotros? ¿Coinciden?

¿Te das cuenta que llamas la atención cuando te portas mal y que eres luminoso cuando te portas bien?

- 8 5 -

Page 44: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VIGESIMOCTAVO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios nos invita a todos.

Comentario Hoy hay gran riqueza de temas y también los materiales son abundantes. Conviene no dispersarse en el comentario dialogado. Dependerá de las circunstancias de cada uno para incidir en uno u otro tema, sin olvidarse de acentuar el hilo conductor de estos domingos, la revelación de Dios.

Materiales Preparar la escenificación. Cartulina con una antorcha dibujada para colocar en el panel. Cartulinas con las palabras de la escenificación que se irán colo­cando en el panel.

Observaciones Un narrador dirige la escenificación. Un lector lee las lecturas. Un tercer lector las comenta con textos de Luther King. El sacerdote lee las palabras de Jesús en el Evangelio. Unos cuantos niños que harán de criados estarán con el sacerdote en el altar. Se sugiere el canto «Himno de la alegría» para el guión.

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Una de las cosas que primero se aprende es que en este mundo hay buenos y malos. Enseguida calificamos a uno de «buena persona» o de «mal bicho» según le vemos comportarse.

- 8 6 -

Erróneamente calificamos a uno de buen o mal cristiano si va o no a misa, si come o no come carne los viernes, o si reza o no el ro­sario.

Ser bueno o malo es cosa de conciencia y no de observancia, y se puede ser bueno o malo siendo cristiano, ateo, de derechas o de izquierdas.

Tendremos que ir pensando que esas prácticas son buenas y ne­cesarias, pero ser buen o mal cristiano va por la línea del Reino que Dios tiene preparado y al que nos invita a todos.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA

3. CANTO

4. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

Dios es ese banquete al que están invitados todos los hombres de la tierra. Es esa Jerusalén celestial a cuya luz confluirán todas las nacio­nes. Esta «antorcha» nos recuerda que no podemos ser castillos ce­rrados y oscuros donde malcomemos los que vivimos bien, y donde no pueden acceder los que malviven. Que seamos como Jerusalén, ciudades abiertas para todos.

5. RITO DEL PERDÓN

— Porque tenemos el vientre lleno y nos olvidamos de los que no comen.

— Porque nos olvidamos de que tenemos un corazón para amar y hacer el bien, y no obstante hacemos el mal.

— Porque nos apartamos y excluimos a los que no son ni piensan como nosotros.

- 8 7 -

Page 45: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. MONICIÓN

NARRADOR: Siempre los hombres soñamos con la felicidad. To­dos los profetas de ayer y de hoy la anuncian en forma de banquete donde calmaremos todas nuestras necesi­dades.

7. LECTURA del Profeta Isaías 25,6-10

LECTOR 1: Preparará el Señor de los Ejércitos para todos los pue­blos en este monte un festín de manjares suculentos, un festín de vinos de solera; manjares enjundiosos, vinos ge­nerosos. Y arrancará de este monte el velo que cubre a to­dos los pueblos, el paño que tapa todas las naciones.

LECTOR 2: Yo tengo la osadía de creer que todos los habitantes de la tierra podrán recibir tres comidas al día para salvación de su cuerpo, educación y cultura para la salvación de su es­píritu, igualdad y libertad para la salvación de su alma.

LECTOR 1: El Señor aniquilará la muerte para siempre. Enjugará las lágrimas de todos los rostros, y el oprobio de su pueblo lo alejará de todo el país, lo ha dicho el Señor. Aquel día se dirá: «Aquí está nuestro Dios, de quien esperábamos que nos salvara: celebremos y gocemos con su salva­ción». La mano del Señor, se posará sobre este monte.

LECTOR 2: Yo rechazo el creer que todos los pueblos caerán unos tras otros. Creo igualmente, que un día la humanidad se inclinará delante del poder de Dios.

8. CANTO: «Himno de la alegría».

9. MONICIÓN

NARRADOR: A este banquete de bodas todos somos invitados. No aceptar la invitación o eludir la respuesta es autoexcluir-se del mismo.

- 8 8 -

10. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 22,1-14

LECTOR 1: En aquel tiempo volvió a hablar Jesús en parábolas a los sumos sacerdotes y a los senadores del pueblo, di­ciendo:

SACERDOTE: El Reino de los Cielos se parece a un rey que cele­braba la boda de su hijo.

(Sube la palabra «amor»)

LECTOR 1: Mandó criados que avisaran a los convidados:

SACERDOTE: Id y decidles que va a comenzar el banquete.

(Van donde se encuentran los otros niños)

CRIADOS: El banquete está listo. Venid a la fiesta. No despreciéis la invitación.

Venid a las bodas. El rey os espera a todos.

(Los niños hacen movimientos negativos de cabeza)

LECTOR 1: Pero no quisieron ir. Volvió a mandar criados encargán­doles que les dijeran:

SACERDOTE: Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas y todo está a punto. Venid a la boda.

(Sube /a palabra «libertad»)

CRIADOS: Venid a la boda. Todo está a punto.

INVITADOS: Tenemos mucho que estudiar. Nos vamos a hacer los deberes.

Nosotros tenemos un partido de fútbol el martes y nos vamos a entrenar.

CRIADOS: Habrá jolgorio y bailes. ¡Es la fiesta del hijo del rey!

INVITADOS: Es más interesante la película de la tele.

También es el cumpleaños de mi padre y he invitado a estos.

Dejadnos en paz. ¡Qué nos importa esa fiesta!

LECTOR 1: Los convidados no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios, los demás echaron mano a los criados y los maltrataron hasta matarlos. El rey montó

- 8 9 -

Page 46: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

en cólera, envió sus tropas que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad. Luego dijo a sus criados:

SACERDOTE: La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos y a to­dos los que encontréis convidadlos a la boda.

(Sube la palabra «solidaridad»)

CRIADOS: Venid todos a la fiesta del Señor. Venid al banquete.

LECTOR 1: La sala se llenó de comensales.

(Sube la palabra «alegría»)

Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba el traje de fiesta y le dijo:

SACERDOTE: Amigo, ¿cómo es que has entrado aquí sin vestirte de fiesta?

LECTOR 1: El otro no abrió la boca. Entonces, el rey dijo a los ca­mareros:

SACERDOTE: Atadlo de pies y manos y arrojadlo fuera, a las tinie­blas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes. Porque muchos son los llamados y pocos los escogidos.

11. MONICIÓN

NARRADOR: Todos estamos invitados al banquete del Reino. Escu­chemos de nuevo a los profetas que nos dicen cómo nos hemos de preparar y revestir.

12. LECTURA de la carta del Apóstol San Pablo a los Fiiipenses 4,12-14.19-20

LECTOR 1: Sé vivir en pobreza y en abundancia. Estoy entrenado para todo: la hartura y el hambre, la abundancia y la pri­vación. Todo lo puedo en Aquel que me conforta.

LECTOR 2: A vuestra capacidad de infligir sufrimiento, nosotros ofreceremos nuestra capacidad de soportarlo. A vues­tra fuerza física, responderemos con nuestra fuerza es-

- 9 0 -

piritual. Haced cuanto queráis y nosotros seguiremos amando.

LECTOR 1: En todo caso hicisteis bien en compartir mi tribulación. En pago, mi Dios proveerá a todas vuestras necesidades con magnificencia, conforme a su riqueza en Cristo Je­sús. A Dios, nuestro Padre, la gloria por los siglos. Amén.

LECTOR 2: Enviadnos a prisión y os amaremos más... pero estad ciertos que nuestra capacidad de sufrir os dejará ex­haustos... Un día alcanzaremos la libertad.

13. CANTO: «Himno de ¡a alegría».

14. COMENTARIO DIALOGADO

¿Tú también sabes estar, jugar, trabajar... con todos?

¿A quiénes das de lado, no cuentas con ellos o rechazas? ¿Por qué?

¿Qué dificultades tienes o excusas pones para no participar en los juegos, fiestas o tareas que son de todos, o a las que alguien te invita?

¿Cuáles y cómo son los trajes de fiesta que el Señor quiere que vistamos? ¿Cuándo y con qué comportamientos los ensuciamos?

- 9 1 -

Page 47: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VICESIMONOVENO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios es el absoluto.

Materiales Preparar lectura escenificada. Cartulina con un horizonte dibujado para colocar en

Observaciones La escenificación es resumen del libro Un tal Jesús.

el panel.

Se puede es-cenificar con dos grupos de niños. A un lado los ciudadanos que protestan y al otro Pilato y Caifas.

I

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA

2. CANTO

3. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

«Yo soy el Señor y no hay otro, fuera de mí no hay Dios» (Is 45,5). No hay otros dioses, ídolos o cesares. Él tiene que ser lo más importante, el «horizonte» de nuestra vida. No se le puede encerrar en ninguna rea­lidad humana. Nadie lo puede sustituir, ni nosotros lo debemos meter en monedas con las que comprar y pagar a los becerros (ídolos) que nos construimos.

- 9 2 -

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque nos consideramos los más importantes del mundo. — Porque adoramos servilmente los ídolos de la sociedad. — Porque no servimos ni adoramos a Dios con sincero corazón.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del Profeta Isaías 45,1.4-6

6. CANTO

7. LECTURA ESCENIFICADA

FARISEO: Pero, gobernador, ¿no le parece un impuesto demasiado alto?

PILATO: Lo dicho, dicho está; pagarán seiscientos talentos, ni uno más ni uno menos.

FARISEO: ¡Muy bien! Pero me temo protestas y disturbios calleje­ros. Ya sabe que el pueblo judío es terco como una muía.

PILATO: El pescuezo de una muía se ablanda con unos buenos ga­rrotazos.

FARISEO: ¿Y qué dirá el sumo sacerdote Caifas?

PILATO: ¡Bah! Por ese gordo no pierdo el sueño. Por cierto, dile que quiero verlo para explicarle las nuevas medidas tri­butarias.

NARRADOR: El gobernador romano Poncio Pilato firmó la orden de nuevos impuestos. Las protestas populares no se hicie­ron esperar.

CIUDADANO 1: ¿Qué se ha creído Pilato? ¿Que va a estirar la cuer­da sin que se rompa?

CIUDADANO 2: ¡Chupópteros, eso es lo que son los romanos!

CIUDADANO 3: ¡Si no pagas no puedes entrar ni salir de la ciudad! ¡Lo tienen todo controlado! ¡Han convertido a Israel en una enorme ratonera!

- 9 3 -

Page 48: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

CIUDADANO 4: Y nosotros los ratones, ¿verdad? ¡Pues que se le seque la mano al que pague tributo al César!

NARRADOR: Los celotes se negaron a pagar; y otros inconformes se amotinaban en las puertas de la ciudad. Aquella tarde Caifas...

PILATO: Ilustre Caifas, en nombre de Roma le presento mis respe­tos...

CAIFAS: Y yo los míos. Recibí su invitación y aquí me tiene.

PILATO: Supongo que ya sabrá de qué se trata. Desde aquí se oyen las protestas de esos que no respetan la autoridad. ¿Ha pensado en cómo enfriar esas cabezas y esos áni­mos calientes?

CAIFAS: Perdone mi atrevimiento, ¿pero no le parece excesiva la suma de seiscientos talentos?

PILATO: Me extraña que haga esa pregunta. ¿No ha pensado en los enormes gastos del imperio y lo que nos cuesta man­tenerlo a usted sentado en el Sanedrín?

CAIFAS: ¡Ya comprendo, ya, sus sacrificios! Pero a pesar de eso...

PILATO: ¡A pesar de eso, nada! ¡Lo dicho, dicho está! Y si no reco­lectan ese dinero, lo pagará de su propio bolsillo.

CAIFAS: ¡Claro, claro! Daré orden ahora mismo para que...

PILATO: ¡Las órdenes las doy yo! Usted tiene que tranquilizar al pueblo, para eso es el representante de Dios en la tierra. Para ellos cuando ven su cogote, es como si estuvieran viendo a Dios. Pues bien, dígales a esos tercos que el César manda pagar impuestos. Y Dios manda lo mismo, porque Dios y el César son muy amigos... como usted y yo, ¿verdad?

CAIFAS: Desde luego, no faltaría más...

PILATO: Tranquiliza al pueblo; renovaré su designación como sumo sacerdote para el próximo año.

CAIFAS: Gracias, usted sabe que puede contar conmigo...

NARRADOR: A las pocas horas, toda la ciudad sabía que el sumo sacerdote Caifas apoyaba los impuestos. En las calles de Jerusalén no se hablaba de otra cosa.

9 4 -

8. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 22,15-21

NARRADOR: En aquel tiempo, los fariseos se retiraron y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregun­ta. Le enviaron unos discípulos, con unos partidarios de Herodes y le dijeron:

FARISEOS: Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad sin que te importe nadie, porque no te fijas en las apariencias. Dinos, pues, ¿qué opinas, es lícito pagar impuesto al César o no?

NARRADOR: Comprendiendo su mala voluntad les dijo Jesús:

SACERDOTE: ¡Hipócritas! ¿Por qué me tentáis? Enseñadme la mo­neda del impuesto.

NARRADOR: Le presentaron un denario. Él les preguntó:

SACERDOTE: ¿De quién son esta cara y esta inscripción?

FARISEOS: Del César.

SACERDOTE: Pues pagadle al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.

NARRADOR: Jesús tiró la moneda a los pies de los sacerdotes y de los maestros de la Ley, dio media vuelta y se fue.

DISCÍPULO: ¡Así se habla, qué caray! ¡Que viva el Nazareno!

FARISEO: ¡Coged a ese hombre! ¡No lo dejéis escapar!

NARRADOR: Los partidarios de Caifas quisieron prender a Jesús, pero también aquella vez se quedaron con las ganas.

9. COMENTARIO DIALOGADO

Para ti, ¿quiénes son los cesares: ídolos de la canción, del deporte... de nuestra sociedad?

¿Qué tributos les pagas? ¿Cuánto tiempo les dedicas?

¿Te distraen de tus obligaciones y de las cosas importantes?

¿Sabes armonizar y equilibrar lo que tienes que dedicar a unos y a otros?

- 9 5 -

Page 49: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

HIT TRICÉSIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios manda amar.

Materiales Preparar la escenificación. Cartulina con una hoguera dibujada para colocar ras de cartulina con las frases que irán colocando rante la escenificación.

Observaciones

en el panel. Ti-en el panel du-

En la lectura del guión, nueve niños tendrán las tiras de cartulina con las frases, que las dirán en voz alta llegado su momento y las colocarán en el panel para utilizar en el comentario dialogado.

TZZ

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Jesús se encontró con un sistema religioso muy complicado en el que no encajaba la imagen de un Dios Padre que constituía el fundamento de la Buena Noticia que Él anunciaba.

Su Evangelio se reduce al gran mandamiento del amor, auténtico, constante y a todos. Lo esencial de la vida cristiana siempre será el amor a Dios, a los demás y a uno mismo según nos dice hoy Jesús.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA

- 9 6 -

3. CANTO

4. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

«Ojalá rasgases el cielo y bajases... como un fuego que prende en los sarmientos» (Is 64,1). En esos sarmientos que nos van creciendo y que nos llenan de hojarasca porque seguimos imperativos que nos hacen creer que somos cabales y que nos separan de los demás. Son los sarmientos de nuestro egoísmo, envidias, mentiras... que necesita ese fuego de Dios. Esta «hoguera» que Jesús ha venido a prender y que quiere que arda en nosotros.

5. RITO DEL PERDÓN

— Perdón, Señor, porque a todo ponemos precio, incluso a la amistad.

— Perdón, Señor, porque nuestras intenciones hacia los demás mu­chas veces son turbias.

— Perdón, Señor, porque los colorines de los escaparates nos atraen más que las necesidades de los demás.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. LECTURA del libro del Éxodo 22,21 -22

7. CANTO

8. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: ¿Cuántos dioses hay? Aunque decimos que uno, que nos ama y que nos manda amar y amarnos como Él, to­dos tenemos muchos dioses, que con sus mandatos e imperativos, fortalecen esa tendencia nuestra a separar­nos y dividirnos de los demás.

NIÑO 1: «Estudiarás y sacarás un diez en los exámenes».

• - 9 7 -

Page 50: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NARRADOR: Y nos separa y clasifica a los niños en empollones, in­teligentes y listos; y en torpes, zoquetes y tontos.

NIÑO 2: «No quebrantarás el reglamento y la disciplina».

NARRADOR: Lo que nos da derecho a determinar lo que está bien y lo que está mal. Levantamos la frontera entre los justos y los injustos.

NIÑO 3: «Si obras mal te condenarás».

NARRADOR: Yo como obro bien soy el bueno; los que no obran co­mo yo son los malos.

NIÑO 4: «Devuelve ojo por ojo y diente por diente».

NARRADOR: Como somos fuertes somos intocables. Los que no saben defenderse, unas pobres gallinas.

NIÑO 5: «Irás con cara de palo».

NARRADOR: Así eres de los respetables del mundo. Sólo los débi­les o bobos se sonríen.

NIÑO 6: «No te esfuerces, nunca lograrás lo que los otros».

NARRADOR: Y entramos así en el club de los inútiles, frente a los mañosos que sirven para todo.

NIÑO 7: «No amarás a nadie. No harás feliz a nadie».

NARRADOR: Con nuestro egoísmo muchos son infelices, o no son tan felices como podrían serlo.

NIÑO 8: «Lucirás los encantos que te he dado».

NARRADOR: Y la frontera entre guapos y feos se convierte en fun­damento de prestigio social.

NIÑO 9: «No compartas. ¡Gana y ahorra!».

NARRADOR: Y nos dedicamos a ganar, a tener, a competir, aleján­donos de los pobres.

9. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 22, 34-40

10. COMENTARIO DIALOGADO

Todos esos mandamientos, normas, reglas..., ¿te llevan a amar a los demás o a amarte a ti mismo?

- 9 8 -

El amor a los demás, ¿te lleva al amor de Dios?

Como todos, seguro que dices que amas mucho a Dios, ¿pero lo demuestras con el amor a los demás?

C. LITURGIA EUCARÍSTICA

11. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

Te presentamos este mapamundi, donde se refleja un mundo dividido por muchas fronteras: territoriales, políticas, nacionales, raciales, reli­giosas y, sobre todo, económicas que hacen que vivamos en un mun­do injusto y violento. Un mundo que es reflejo de nuestro pequeño mundo de envidias, acepción de personas, rivalidades... con el que Tú, Señor, no estás de acuerdo.

Te presentamos este regalo, esta guitarra y estas flores, que son expresión de las cualidades con las que queremos adornar nuestro amor: un amor que sea gratis, un amor que sea alegre, un amor que tenga el perfume de Cristo.

Te presentamos el pan y el vino, para que transformados en tu cuerpo y en tu sangre, sean nuestra fuerza para trabajar por un mun­do nuevo, sin divisiones, sin fronteras, sin odios que nos enfrenten, sin discriminaciones de raza, color, sexo, edad, religión...

- 9 9 -

Page 51: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

TRICESIMOPRIMER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios nos despoja.

Comentario

El profeta Malaquías nos da hoy una definición de Dios: «Dios Soberano», pero es preferible la que hemos elegido porque refle­ja mejor las enseñanzas de Jesús en el Evangelio que son las exi­gencias que Él nos presenta.

Materiales Preparar la escenificación. Cartulina con arco iris dibujado para colocar en el panel. Objetos simbólicos para el momento del perdón.

Observaciones En el momento del perdón, el niño portador del objeto, se coloca ante los demás niños mientras se lee el párrafo correspondiente. La escenificación del Evangelio se hace en torno al altar y así el sacerdote puede hacer de Jesús.

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

El Evangelio de este domingo nos ofrece unos criterios bastante cla­ros para juzgar la autenticidad de las personas que se presentan con mensajes de salvación. Estos criterios son: el espíritu de servicio gra­tuito y desinteresado, y la humildad sencilla y sincera ante Dios y ante los hombres.

- 1 0 0 -

Jesús es nuestro maestro. Los discípulos de Jesús, si queremos serlo de veras, tenemos que actuar siempre con espíritu de servicio, que excluye la búsqueda de todo interés o ventajas personales.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA

3. CANTO

4. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

«Él hizo el cielo con maestría, porque es eterno su amor» (Sal 136,5). Es el horizonte de nuestra vida que vimos hace dos domingos. Hori­zonte que lo empequeñecemos con nuestras cortas aspiraciones que tanto nos turban, inquietan, atormentan y a veces destruyen. Este «arco iris» que Dios puso en el cielo con el compromiso de no volver a destruir la tierra, sirva para poner serenidad y paz en nues­tra vida.

5. RITO DEL PERDÓN

NIÑO 1: (Espada y corona) Soy el representante de los políticos. Vengo a presentar nuestro programa y nuestra alternativa de gobierno. Tendréis que obedecernos y respetarnos tratándonos de «sus señorías». Así habrá paz y estare­mos contentos.

SACERDOTE: Tú, que nos quieres unidos y hermanos, sin margina-ciones, ni poderosos, ni tiranos que opriman a su próji­mo. Señor, ten piedad.

NIÑO 2: (Libros) Somos los científicos. El mundo y su progreso están en la cultura y en la técnica, es decir, en nuestras manos. Tenéis que admirarnos y tratarnos de «eminentes doctores». Experimentaremos, y aunque contaminemos el agua y el aire, es en beneficio de todos. Y tranquilos, todo está controlado.

SACERDOTE: Tú, que dijiste bien claro, que debemos ser servido­res de los demás, sin servirnos nunca de los hombres. Cristo, ten piedad.

- 1 0 1 -

Page 52: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NIÑO 3: (Crucifijo) Somos los representantes de Dios. Tenemos el deber de extender su verdad en la tierra. El que no nos haga caso se condenará. Vuestra obligación es obede­cernos; la nuestra, las alabanzas divinas. Nos llamaréis «don» y «monseñor». Y que la bendición de Dios esté con vosotros.

SACERDOTE: Tú, que nos has enseñado que nuestro único padre y maestro es el del cielo, y que el primero entre nosotros será el que más sirva. Señor, ten piedad.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. LECTURA del Profeta Malaquías 1,1-4; 2,2.8-10

7. CANTO

8. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 23,1-12

DISCÍPULO: Maestro, los fariseos siempre te están molestando, ¿por qué se meten tanto contigo?

SACERDOTE: Ellos ocupan el lugar que ocupó Moisés y por eso creen que saben más que nadie. Haced y cumplid lo que os digan, pero no hagáis lo que ellos hacen, porque ellos no hacen lo que dicen.

DISCÍPULO: ¿Y qué es lo que ellos hacen?

SACERDOTE: Ellos lían fardos pesados e insoportables y se los cargan a la gente en los hombros, pero no están dis­puestos a mover un dedo para empujar.

DISCÍPULO: Entonces, ¿para qué hacen todas esas cosas que les vemos hacer?

SACERDOTE: Todo lo que hacen es para que los vea la gente: alar­gan las filacterias y ensanchan las franjas del manto, les gustan los primeros puestos en los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas, que les hagan reve­rencia por la calle y que la gente les llame «maestro».

- 1 0 2 -

DISCÍPULO: ¿Qué tenemos que hacer nosotros, Jesús?

SACERDOTE: Vosotros, en cambio, no os dejéis llamar maestro, porque uno sólo es vuestro Maestro y todos vosotros sois hermanos.

DISCÍPULO: Pues que nos llamen «padre» como a los curas.

SACERDOTE: No llaméis padre vuestro a nadie en la tierra porque uno sólo es vuestro Padre, el del cielo.

DISCÍPULO: ¡Pues que nos llamen jefes!

SACERDOTE: No, no os dejéis llamar jefes porque uno sólo es vuestro Señor, Cristo.

DISCÍPULO: Entonces, ¿cómo debemos actuar?

SACERDOTE: El primero entre vosotros será vuestro servidor.

DISCÍPULO: Y eso, ¿por qué?

SACERDOTE: Porque todo el que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido.

9. COMENTARIO DIALOGADO

¿Qué ambiciones vas teniendo en la vida? ¿A qué aspiras?

De lo que te dicen que tienes que hacer, ¿qué es lo que más te pesa? ¿Por qué?

¿Encuentras ejemplo y estímulo en aquellas personas: papas, profesores, sacerdotes... que te dicen lo que tienes que ser y hacer?

¿Aspiras a tener cosas, ser importante... o a ayudar y servir a los demás?

- 1 0 3 -

Page 53: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

TRIGESIMOSEGUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios es el esposo.

Comentario

Dios es el novio preparado para la boda que nos quiere siempre alerta y vigilantes. Que vivamos preparados en el presente y no instalados en él porque pensamos que tardará en llegar. Estar pre­parados es vivir la vida al estilo de Jesús, no dándose buena vida, sino dando vida buena a los demás.

Materiales Preparar las escenificaciones. Lámpara dibujada en cartulina para colocar en el panel. Frases del guión escritas en tiras de cartulina para colocar en el panel en la lectura del guión.

Observaciones Se puede elegir cualquiera de las dos lecturas del día. Terminada la escenificación del Evangelio, las vírgenes necias se retiran a un lateral y suben dos niños junto al sacerdote para conti­nuar la escenificación. En el guión, los niños leen las frases en voz alta y las colocan en el panel.

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Hoy Jesús nos invita a la vigilancia: «Velad, porque no sabéis el día ni la hora». Tenemos que tener la lámpara de nuestra vida encendida y

- 1 0 4 -

con reservas de amor, así estaremos preparados para acoger a Dios cuando venga. Sería lástima que en el momento del encuentro, nues­tras lámparas estuvieran apagadas y que no tuviéramos reservas de aceite. Eso no depende de Dios, ni de los demás, es responsabilidad nuestra.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA

3. CANTO

4. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

«El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré»? (Sal 27,1). Ni a los peligros, ni a las dificultades, ni a la oscuridad que tanto miedo nos da a los pequeños. Y metemos ruido para espantarlo. No necesi­tamos más ruidos, ya hay bastantes en nuestro mundo. Necesitamos luz. Esta «lámpara», nos recuerde siempre que con el salmista es lo que le hemos de pedir a Dios. «Señor, Tú enciendes mi lámpara. Dios mío, Tú alumbras mis tinieblas (Sal 18,29).

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. ESCENIFICACIÓN

6. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 25,1-13

NARRADOR: En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta pa­rábola:

SACERDOTE: El reino de los cielos se parecerá a diez doncellas que tomaron sus lámparas y salieron a esperar al esposo.

(Suben delante del altar.)

NARRADOR: Cinco de ellas eran necias y cinco eran sensatas.

(Muestran velas)

Las necias al tomar las lámparas se dejaron el aceite, en cambio las sensatas se llevaron alcuzas de aceite con

• - 1 0 5 -

Page 54: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

las lámparas. El esposo tardaba, les entró sueño a todas y se durmieron.

(Se duermen)

A media noche se oyó una voz:

VOZENOFF: «Que llega el esposo. ¡Salid a recibirlo!».

(Se levantan)

NARRADOR: Entonces se despertaron todas aquellas doncellas y se pusieron a preparar sus lámparas.

(Cinco encienden, las otras cinco se enfadan)

Y las necias dijeron a las sensatas:

NECIAS: Dadnos un poco de vuestro aceite que se nos apagan las lámparas.

NARRADOR: Pero las sensatas contestaron:

SENSATAS: Por si acaso no hay bastante para vosotras y nosotras, mejor es que vayáis a la tienda y lo compréis.

(Las necias se van)

NARRADOR: Mientras iban a comprarlo llegó el esposo.

(Entra desde el fondo con el cirio pascual)

Y las que estaban preparadas entraron con él al banque­te de bodas y se cerró la puerta. Más tarde llegaron tam­bién las otras doncellas diciendo:

(Llegan las necias)

NECIAS: «Señor, ábrenos».

NARRADOR: Pero él respondió:

NOVIO: «Os lo aseguro: no os conozco».

SACERDOTE: Por lo tanto, velad, porque no sabéis el día ni la hora.

7. CANTO

8. CONTINUACIÓN DE LA PARÁBOLA

PEDRO: ¿Y qué pasó entonces, Jesús? ¿Después de tanto espe­rar tuvieron que quedarse fuera sin entrar en la fiesta?

- 1 0 6 -

SACERDOTE: Bueno, Pedro, la verdad es que esas muchachas no supieron estar alerta. Y ya dicen que al que no vigila lo sacan de la fila.

SANTIAGO: Y bien merecido se lo tienen, por tontas y dormilonas.

PEDRO: Sí. Las muchachas no cumplieron. Pero el novio, ¿qué es lo que hizo el novio, Jesús? ¿No les abrió por fin la puerta?

SACERDOTE: El novio hizo lo que hacen todos los novios, Pedro. Cuando se enteró de lo que estaba ocurriendo fuera...

NOVIO: ¡Abrid la puerta de par en par! ¡Que entren esas cinco muchachas! ¡Ya han esperado mucho tiempo! ¡Abrid la puerta y que entren todos los que quieran! ¡Hoy es el día más feliz de mi vida y no quiero que nadie se quede fue­ra! ¡Quiero que todos estén conmigo! ¡Esto es una boda, sí señor, y la fiesta es para todos!

NARRADOR: Pero fuera estaban sentadas las cinco doncellas ne­cias discutiendo sobre cuál pudo ser el motivo culpable de la malograda oportunidad de sus vidas.

NECIA 1: Las mujeres somos las culpables por no tener solidaridad entre nosotras. Si se trata de ayudar a un hombre nos negamos a darnos aceite. Si nos hubiéramos plantado todas, el novio nos hubiera tenido que aceptar a todas.

NECIA 2: No. La culpa es la educación que hemos recibido. Se nos ha cultivado para el narcisismo, cada cual va a lo suyo. Hubiera sido igual entrar sin lámparas.

NECIA 3: Culpable es el sinvergüenza del tendero. Notó que está­bamos en apuros y subió descaradamente los precios del aceite. Si no hubiéramos estado discutiendo el precio del aceite, hace rato que estaríamos de vuelta.

NECIA 4: La culpa es más bien del novio, tenía que haberse dado cuenta de que con él estaban las doncellas más egoís­tas, ¡esas niñatas de escaparate!

NECIA 5: Pues no, la culpa es vuestra. A mí no me hubiera importa­do esperar, pero tuvisteis la estúpida idea de ir al vende­dor y por eso llegamos tarde.

NARRADOR: Al ver la discusión al novio le entraron remordimientos de conciencia. Se daba cuenta de que había sido un po-

- 1 0 7 -

Page 55: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

co rígido, que había hecho algo mal. Comenzó a serenar­las y a abrazarlas. Al poco comenzaba de nuevo la músi­ca. Cuando todas volvieron a su estado normal, la fiesta pudo celebrarse con gran alegría.

SACERDOTE: Sí. Todos los novios hacen lo mismo. Porque la ale­gría de la boda les pone el corazón así de grande. Y yo pienso que lo mismo hará Dios al final, a la medianoche, cuando llegaremos a su casa con poco aceite en nues­tras lámparas.

9. CANTO

10. GUIÓN

NARRADOR: Hoy Jesús nos exhorta a la vigilancia. Pero, ¿qué es la vigilancia? ¿Por qué es necesaria? ¿Qué se opone a la vigilancia? ¿Cuáles son los peligros que la amenazan? Veamos los diferentes tipos de vigilancia. Vigilancia instalada:

NIÑO 1: «¡Comamos y bebamos! ¡Mañana moriremos! ¡A vivir que son dos días!» (cartel).

NARRADOR: No se quiere saber nada del futuro, solamente pasarlo bien en el presente. Vigilancia pasiva:

NIÑO 2: «¡El tiempo todo lo arregla!» (cartel).

NARRADOR: ¿Entonces para qué preocuparse, ni atormentarse con obligaciones y deberes? Dios ya proveerá. Vigilancia dormida:

NIÑO 3: «¡Me las pagarás!» (cartel).

NARRADOR: Que no rompe las actividades de la noche, del mal, con las obras de las tinieblas. Vigilancia sustitutiva:

NIÑO 4: «Yo tengo una tía monja» (cartel).

NARRADOR: Se supone que aunque yo sea «un pinta» hay quien suple mi parte buena. Vigilancia miedosa:

- 1 0 8 -

NIÑO 5: «¡Que viene el lobo!» (cartel).

NARRADOR: Y nos arrimamos al que es más fuerte para que nos proteja hasta que venza. Vigilancia terrorífica:

NIÑO 6: «¡Que viene el coco!» (cartel).

NARRADOR: Y nos arrebujamos debajo de las sábanas, quisiéra­mos desaparecer del mapa. Vigilancia farisaica:

NIÑO 7: «¡Que viene el profesor!» (cartel).

NARRADOR: Y nos cuadramos en el pupitre, como si nunca hubié­ramos roto un plato. Vigilancia interesada:

NIÑO 8: «¡Que vienen los Reyes Magos!» (cartel).

NARRADOR: Y hasta somos buenos para que nos traigan lo que les hemos pedido. Vigilancia activa:

NIÑO 9: «¡Que llega el novio!» (cartel).

NARRADOR: ¡Entra mi amor y sé siempre mi Señor!

Ojalá le dijésemos esto siempre a Jesús para hacer siem­pre su voluntad. Así el aceite siempre será el nuestro.

11. COMENTARIO DIALOGADO

¿A ti te sobra tiempo o te falta tiempo? ¿Para qué cosas te sobra y para qué cosas te falta?

¿Piensas que la vida es sólo para pasarlo bien?

¿Sólo sabes vigilar para que no te pillen cuando haces algo mal o sueltas alguna mentira?

Cuando te sobra tiempo, ¿te aburres o estás alerta para ver y oír si alguien necesita de ti?

- 1 0 9 -

Page 56: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

r TRIGESIMOTERCER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Dios pide cuentas.

Comentario Comenzábamos este recorrido con la manifestación de Dios que paga por encima de nuestros merecimientos. No obstante, hoy Je­sús nos presenta un Dios que pide cuentas porque nos quiere res­ponsables de los muchos talentos, dones, cualidades que nos ha dado y con los que nos ha enriquecido.

Materiales Preparar la escenificación. Cartulina con estrellas dibujadas para colocar en el panel.

Observaciones Se presenta la parábola en dos formas para elegir la que más agrade. La primera es resumen del libro Un tal Jesús. El sacerdote puede ir narrando la parábola mientras los niños escenifican. Se puede leer la primera lectura más cercana al tema del Evangelio.

hzr —

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA

2. CANTO

3. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

«Cuando contemplo el cielo... y las estrellas que has creado, ¿qué es el hombre para que te acuerdes de él?» (Sal 8,5). Somos lo más gran-

- 1 1 0 -

de de la creación porque Dios nos ha enriquecido con talentos, do­nes, cualidades que nos hacen un poco como Él. Él quiere que los usemos y cultivemos sobre todo en beneficio de los demás. Estas «estrellas» son esos talentos que Dios nos ha dado para que las colo­quemos en el cielo gris y oscuro de nuestro mundo y así resultemos luminosos porque participamos de su luz.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA del libro de los Proverbios 31,10-13.19-20.30-31

5. CANTO

6. ESCENIFICACIÓN

7. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 25,14-30

SACERDOTE: En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta pa­rábola: Un hombre que se iba al extranjero llamó a sus empleados y los dejó encargados de sus bienes. A uno le dejó cinco talentos de plata:

PATRÓN: Leví, ya habrás oído que me voy durante un tiempo. Pues bien, te dejo cinco mil denarios... A ver qué negocio se te ocurre para aprovecharlos bien.

LEVÍ: No es por echarme incienso, mi amo. Pero tenga la se­guridad de que los deja en buenas manos. Vayase tran­quilo, que este capataz suyo es más listo que una zorra con hambre.

SACERDOTE: A otro le dejó dos.

PATRÓN: Te dejo dos mil denarios, contantes y sonantes. Trabaja con ellos. Sácales beneficio.

MATÍAS: ¡Patrón...! Tengo entre ceja y ceja una idea que... ¡ya ve­rá usted todo lo que voy a ganar con este dinero!

SACERDOTE: A otro le dejó uno.

PATRÓN: Aquí tienes, Matatías... mil denarios. ¡Tómalos, son tuyos!

- 1 1 1 -

Page 57: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

MATATÍAS: ¿Mil denarios? ¿A mí? ¿Y qué hago yo con tanto dinero?

PATRÓN: ¿Te parecen pocos? ¡Negocia con ellos! Compra, vende y sácales provecho.

MATATÍAS: Bueno... trataré de hacerlo lo mejor posible, ¡patrón!

SACERDOTE: El que recibió cinco talentos fue enseguida a nego­ciar con ellos y ganó otros cinco:

LEVÍ: Yo te compré los caballos por trescientos denarios. Más otros cincuenta de las herraduras y menos ciento setenta y cinco que se juntaron al pago de cien que tú me habías rebajado cuando yo te di los cinco denarios de los clavos.

SACERDOTE: El que recibió dos hizo lo mismo y ganó otros dos:

MATÍAS: Para ser buen prestamista hay que tener el ojo abierto y la mano cerrada. A mí no me falta ni una cosa ni la otra.

SACERDOTE: En cambio el que recibió uno hizo un hoyo en la tierra y escondió el denario de su amo.

MATATÍAS: ¿Y si probara en el comercio de Don Celio...? Sí, pero no le caigo simpático a ese gordo. No, mejor ni le pre­gunto. ¿Comprar entonces? Pero, ¿qué? ¿Aceitunas...? ¿Y si se me estropean? No, quítatelo de la cabeza, Mata­tías. El que compra tiene que vender y para vender hay que tener gracia... y yo soy un «desgraciao».

SACERDOTE: Al cabo de mucho tiempo volvió el Señor de aquellos empleados y se puso a ajusfar cuentas con ellos. Se acercó el que había recibido cinco talentos y le presentó otros cinco.

PATRÓN: ¿Qué tal esos negocios, Leví?

LEVÍ: ¡Ahí tiene mi amo! Cuente, cuente... ¡cinco mil me dio, otros cinco mil conseguí yo! Ya le dije yo que todo iría como miel sobre hojuelas... Yo soy como los gatos: ¡no hay tapia que no salte!

PATRÓN: Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor. Como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante. Pasa al banquete de tu señor.

SACERDOTE: Se acercó luego el que había recibido dos talentos.

PATRÓN: Y a ti, ¿cómo te han ido las cosas?

- 112 -

MATÍAS: ¡Mejor de lo que me las pinté en la cabeza! Soy un suer­tudo... Mire, fueron dos mil denarios, ¿verdad? Pues han hecho buena cría, aquí tiene otros dos mil.

PATRÓN: Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor. Como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante. Pasa al banquete de tu señor.

SACERDOTE: Finalmente se acercó el que había recibido un talento y dijo:

MATATÍAS: Señor, sabía que eres exigente, que siegas donde no siembras y recoges donde no esparces, tuve miedo y fui a esconder tu talento bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo. Hasta el último céntimo. Ni uno más, ni uno menos.

PATRÓN: ¿Pero no quedamos en que te lo daba para que consi­guieras más?

MATATÍAS: Quedar, quedamos en eso. Pero yo me dije: Matatías, con lo bruto que eres, si te pones a negociar vas a per­derlo todo en dos semanas. Mejor lo guardas y... bueno, hice un agujero en la tierra y ahí lo escondí hasta hoy.

¡Yo no sirvo para nada, patrón! Los chicos en la escuela se reían de mí porque era siempre el último... Mi madre también me lo dijo: Naciste torcido y no habrá viento que te enderece... Usted lo sabe, no sirvo para nada.

PATRÓN: Eres un empleado negligente y holgazán. ¿Conque sa­bías que siego donde no siembro y recojo donde no es­parzo? Pues debías haber puesto mi dinero en el banco para que al volver yo pudiera recoger lo mío con los inte­reses.

Quitadle el talento y dádselo al que tiene cinco. Porque ai que tiene se le dará y le sobrará, pero al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene. Y a ese empleado inútil echadlo fuera, a las tinieblas, allí será el llanto y el rechi­nar de dientes.

SACERDOTE: Pero la historia no acabó ahí.

PATRÓN: ¡No sirvo para nada, no sirvo para nada! Y mientras más lo repites, más te lo crees y más te hundes. Pero óyeme

• - 1 1 3 -

Page 58: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

bien: la próxima vez te arranco las orejas si no inventas algo para hacer rendir lo que tienes.

MATATÍAS: La próxima vez... pero, ¿me daría otra oportunidad a mí, patrón?

PATRÓN: Sí, te la voy a dar. Porque tú puedes salir adelante. Tú puedes hacer algo que valga la pena...

SACERDOTE: Tiempo después el dueño tuvo que irse nuevamente de viaje. Volvió a llamar a los empleados y les entregó sus bienes.

PATRÓN: ¡Negociad con ese dinero hasta que regrese! ¡Trabajad duro y con ánimo!

SACERDOTE: Esta vez el viaje fue más corto. De regreso les llamó de nuevo.

LEVÍ: Esta vez he tomado las cosas con calma, ¿usted com­prende? No hay prisa, me dije, tú eres más listo que el mismísimo diablo y el caso es que...

PATRÓN: Que no has trabajado nada. Que confiaste en tu ingenio, ¿no? Parece mentira, Leví...

SACERDOTE: Después entró el segundo empleado:

PATRÓN: ¿Cómo tres monedas solamente...? ¿Cómo has ganado tan poco?

MATÍAS: Bueno, patrón, la vida se ha complicado, ¿usted sabe? Las cosas ya no son como antes.

PATRÓN: ¡Tú no eres como antes! También te entró sueño y te dor­miste sobre tu fama.

SACERDOTE: Al final llegó Matatías corriendo y con todos los pelos alborotados.

MATATÍAS: ¡Patrón! Mire, cuente... ¡Usted me dio mil, tengo otros mil! ¡He ganado mil denarios, mire! ¡Lo conseguí!

PATRÓN: Estaba seguro de que saldrías adelante. Estaba seguro.

MATATÍAS: Y eso fue lo que me empujó. Que usted puso tanta confianza en mí. Tenía miedo, sí, pero me acordé de lo que usted me dijo: ¡Tú puedes hacerlo, Matatías, puedes hacerlo!

- 114 -

PATRÓN: Y lo hiciste.

MATATÍAS: Sí, me lancé. Cerré los ojos y me fui a comprar toma­tes. Y después los cambié por lana. Y con la lana monté un taller y el negocio no fue tan mal, ya usted ve... ¡he ganado mil denarios!

PATRÓN: Has trabajado muy bien, Matatías. Has sido valiente con poca cosa. Ahora te daré más dinero y más responsabili­dad. Y también saldrás adelante. Porque el que sabe ser fiel con poco, también sabe serlo con mucho...

SACERDOTE: Dios es ese patrón. Siempre da una nueva oportuni­dad. Y así como le dio una nueva oportunidad a Matatías, también les dará una tercera a ese par de dormilones que se cansaron antes de tiempo. No dos ni tres... siempre.

8. OTRA POSIBILIDAD

SACERDOTE: En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta pa­rábola: Un hombre que se iba al extranjero, llamó a sus empleados y les dejó encargados de sus bienes.

PATRÓN: Yo tengo que ausentarme y tardaré mucho tiempo en vol­ver. Por eso os voy a dejar mi hacienda y todos mis bie­nes para que los cuidéis y que no se pierdan.

SACERDOTE: A uno le dejó cinco talentos de plata.

PATRÓN: A ti, Juan Español, te dejo el respeto, la comprensión, el cariño, el amor y la alegría. Estáte atento a mi regreso por­que no sé el día y la hora en que vendré a pedirte cuentas.

SACERDOTE: A otro le dejó dos talentos.

PATRÓN: A ti, Bernard Nobeles, te dejo la sabiduría y la creatividad. Trabaja con ellos y espérame atentamente a que vuelva.

SACERDOTE: A otro le dejó un talento solamente.

PATRÓN: A ti, Cristian Cristiani, te dejo mi Buena Nueva. Cuídala y propágala mientras esperas mi regreso.

SACERDOTE: Dejó a cada uno según su capacidad. Luego se marchó.

El que recibió cinco talentos fue enseguida a negociar con ellos y ganó otros cinco.

- 1 1 5 -

Page 59: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

EMPLEADO 1: El amor es lo mejor que hay y se hace mayor cuanto más se ama, empezando por los más cercanos y llegan­do hasta los que nadie ama, amando a todos e incluso a los enemigos. Además, he de amar como sé que mi amo me ama.

SACERDOTE: El que recibió dos talentos hizo lo mismo y ganó otros dos:

EMPLEADO 2: Ya que mi amo me ha hecho este regalo voy a culti­varlo. Buscaré quien me enseñe, aprenderé todo lo que pueda para mejor ayudar a los demás. Sería un gran error que mi amo no me perdonaría, el que sólo yo o unos pocos disfrutásemos de él. Pero lo más importante será que encuentre la verdadera sabiduría, la que me ha­rá feliz, la de la vida, la de mi amo. Así estará contento a su vuelta.

SACERDOTE: En cambio, el que recibió un talento hizo un hoyo en la tierra y escondió el talento de su señor.

EMPLEADO 3: ¿Qué haré con el talento de mi amo? Creo que debo cuidarlo y ser generoso con el que lo quiera compartir conmigo. Pero, ¿para qué? ¿Si me avergüenzo por nada, o se me pierde entre tanta gente, o me lo roba la gentuza que anda suelta por ahí? Lo mejor será guardarlo, al me­nos así se lo podré devolver hermoso y bonito como me lo dio mi amo.

SACERDOTE: Al cabo de mucho tiempo volvió el señor de aquellos empleados y se puso a ajusfar cuentas con ellos.

PATRÓN: Quiero ver lo que habéis hecho con mis bienes.

SACERDOTE: Se acercó el que había recibido cinco talentos y le presentó otros cinco diciendo:

EMPLEADO 1: Señor, a mí me dejaste tu amor. He amado a todos los hombres. Algunos no me lo han aceptado, pero la mayoría sí. También me han amado a mí. Ahora hay el doble de amor del que Tú me diste. Cinco talentos me dejaste. Mira, he ganado otros cinco.

PATRÓN: Muy bien, eres un empleado fiel y cumplidor; como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante. Pasa al banquete de tu señor.

— 116 -

SACERDOTE: Se acercó luego el que había recibido dos talentos y dijo:

EMPLEADO 2: Señor me dejaste dos talentos, tu sabiduría y creati­vidad. He estudiado y trabajado. Ahora hay el doble de lo que tú me diste. He ganado otros dos.

PATRÓN: Muy bien. Eres un empleado fiel y cumplidor. Como has sido fiel en lo poco, te daré un cargo importante. Pasa al banquete de tu señor.

SACERDOTE: Finalmente se acercó el que había recibido un talento y dijo:

EMPLEADO 3: Señor, tu talento era muy hermoso, tanto que correr un riesgo con él me pareció muy peligroso. Lo guardé y aquí lo tienes, tal cual me lo dejaste. Así lo hice porque sabía que eres exigente, que siegas donde no siembras y recoges donde no esparces. Tuve miedo y fui a esconder tu talento bajo tierra. Aquí tienes lo tuyo.

PATRÓN: Eres un empleado negligente y holgazán. ¿Conque sabías que siego donde no siembro y recojo donde no esparzo? Pues debías haber puesto mi dinero en el banco para que al volver yo pudiera recoger lo mío con los intereses.

Quitadle el talento y dádselo al que tiene diez. Porque al que tiene se le dará y le sobrará, pero al que no tiene se le quitará hasta lo que tiene. Y a ese empleado inútil echadlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechi­nar de dientes.

9. COMENTARIO DIALOGADO

¿Cuáles son los talentos, dones, cualidades que Dios te ha dado? ¿Los dones que Dios te ha dado los proteges y guardas para ti solo, o los usas, gastas y distribuyes en favor de los demás?

¿Quién es para ti Dios? ¿Un padre que te da sus dones o un con­table f iscalizador que te pide cuentas?

¿Cuando no cultivas tus dones es por pereza, por vergüenza, por­que temes que se aprovechen de ti?

¿El talento de la fe es el que más cultivas?

- 1 1 7 -

Page 60: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

SOLEMNIDAD DE CRISTO REY

Mensaje Dios se revela en los andrajosos.

Materiales Preparar la escenificación. Los personajes: hambriento, sedien­to..., pueden estar caracterizados. Cartulina con un faro dibujado para colocar en el panel.

Observaciones

Basta leer una lectura. Elegir la que mejor convenga al comenta­rio dialogado que se va a realizar. En la escenificación, el sacerdote la conduce como narrador, los justos a un lado y los malvados al otro. Allí se van dirigiendo los personajes caracterizados.

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA

2. CANTO

3. PRESENTACIÓN Y COLOCACIÓN DEL SÍMBOLO EN EL PANEL

No nos gusta mirar y rehuimos lo sucio, lo feo, lo roto. No nos resulta atrayente. Pero Jesús nos dice que es sobre todo ahí, donde le debe-

- 118 —

mos ver y encontrar. Nos gusta más lo bonito, lo lindo y luminoso. Es­te «faro» que simboliza a Jesús y que se encuentra en esas circuns­tancias, sea la luz donde dirijamos nuestro rumbo en la vida y enca­minemos nuestros pasos a atender las necesidades del prójimo.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA del Profeta Ezequiel 34,11-12.15-17

5. CANTO

6. LECTURA de la primera carta del Apóstol San Pablo a los Corin­tios 15,20-26.28

7. CANTO

8. ESCENIFICACIÓN

9. LECTURA del santo Evangelio según San Mateo 25,31-46

SACERDOTE: En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: Cuando venga el Hijo del Hombre en su gloria y todos los ángeles con Él, se sentará en el trono de su gloria, y serán reuni­das ante Él todas las naciones. (Se colocan los niños frente a él)

Él separará a unos de otros como un pastor separa las ovejas de las cabras. Y pondrá las ovejas a su derecha, (Unos niños van a su derecha) y las cabras a su izquier­da. (Otros niños a su izquierda)

Entonces dirá el rey a los de su derecha: Venid vosotros, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vo­sotros desde la creación del mundo. Porque tuve hambre...

HAMBRIENTO: (Frente al grupo de justos) Por favor, hace dos días que no como, ¿podrían socorrerme con algo? Comeré lo que sea, ¡me da igual! Es preferible morir de enfermedad o vejez, que no de hambre.

- 1 1 9 -

Page 61: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

JUSTO 1: Ten, toma los que he comprado para hoy; ya hablaremos también de un trabajo que conozco y que a lo mejor te interesa.

SACERDOTE:... y me disteis de comer. (Se retira el hambriento a su sitio) Tuve sed...

SEDIENTO: A pesar de tener de todo tengo sed. Cuanto más com­pro y consumo, más insatisfecho estoy y más sed tengo. Nada me llena y no consigo ser feliz.

JUSTO 2: Yo no puedo darte nada puesto que tienes de todo, sólo mi mano amiga y mi verdad para llegar a ser auténticos amigos.

SACERDOTE:... y me disteis de beber. (Se retira el sediento) Fui fo­rastero...

EMIGRANTE: No conozco a nadie en este país. He dejado familia y amigos en mi tierra y he tenido que venir a trabajar. Estoy solo, no conozco a nadie. ¿Queréis acompañarme en mi soledad?

JUSTO 3: Vente con nosotros; te pagaremos la entrada del partido de fútbol. Así hablaremos un rato y nos contarás cosas de tu país.

SACERDOTE:... y me hospedasteis. (Se retira el emigrante) Estuve desnudo...

DESPOJADO: Tengo frío. No tengo apenas ropa, y ahora que se acerca el invierno tengo mucho frío. ¿No tendréis un abri­go de sobra para prestarme?

JUSTO 4: Un abrigo de más no tenemos, pero sí una manta: le ha­cemos un agujero, metes por ahí la cabeza y tienes un poncho confortable para el invierno, de algo te servirá.

SACERDOTE: ... y me vestísteis (Se retira el despojado). Estuve en­fermo...

ENFERMO: Llevo dos semanas sin salir de casa y creo que no sal­dré en mucho tiempo porque estoy muy enfermo. Al prin­cipio todos veníais a verme y yo me sentía mucho mejor. Ahora hace mucho que no venís y me siento muy solo. No tengáis miedo a contagiaros.

- 1 2 0 -

JUSTO 5: Esta tarde, mejor ahora mismo, iremos a verte. Teníamos un plan para divertirnos esta tarde, pero estando juntos lo pasaremos mejor.

SACERDOTE:... y me visitasteis (Se retira el enfermo). Estuve en la cárcel...

PRESO: Posiblemente estaré preso muchos años, saldré marcado cuando sea viejo y tendré que irme a un asilo. Estoy aquí y no hago nada. ¡Es tan horrible no poder hacer nada! Si al menos tuviera la alegría de hablar con un amigo que viniera a verme de vez en cuando.

JUSTO 6: Te visitaremos, nos contarás lo poco que haces y nosotros te contaremos lo que pasa por el mundo. Te dejaremos li­bros y revistas y así el tiempo se te pasará más rápido.

SACERDOTE:... y vinisteis a verme (Se retira el preso). Entonces los justos le contestarán:

JUSTOS: Señor, ¿cuándo te vimos con hambre y te alimentamos, o con sed y te dimos de beber? ¿Cuándo te vimos foraste­ro y te hospedamos, o desnudo y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte?

SACERDOTE: Y el rey les dirá: Os aseguro que cada vez que lo hi­cisteis con uno de éstos, humildes hermanos, conmigo lo hicisteis. Y entonces dirá a los de su izquierda:

Apartaos de mí malditos, id al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles. Porque tuve hambre...

HAMBRIENTO: (Frente al grupo de malvados) Por favor, hace dos días que no como, ¿podrían socorrerme con algo? Co­meré lo que sea, ¡me da igual! Es preferible morir de en­fermedad o vejez, que no de hambre.

MALVADO 1: Bueno, ya que ha aguantado dos días sin comer po­drá aguantar tres. Además, a usted le atenderán en Cari­tas los martes de 10 a 12 de la mañana. Los horarios son fijos e inevitables. Vuelva usted pasado mañana.

SACERDOTE: ... y no me disteis de comer. (Se retira al sitio) Tuve sed...

SEDIENTO: A pesar de tener de todo, tengo sed. Cuanto más com­pro y consumo, más insatisfecho estoy y más sed tengo. Nada me llena, y no consigo ser feliz.

- 1 2 1 -

Page 62: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

MALVADO 2: Todo el mundo tiene sed, de eso se encargan los ba­res y las máquinas. Si quiere agua, estos días que llueve tanto ponga un cubo en la ventana. Del otro «rollo», allá usted con su problema.

SACERDOTE: ... y no me disteis de beber (Se retira al sitio). Fui fo­rastero...

EMIGRANTE: No conozco a nadie en este país. He dejado mi fami­lia y mis amigos en mi tierra, y he tenido que venir a tra­bajar. Estoy solo, no conozco a nadie. ¿Queréis acompa­ñarme en mi soledad?

MALVADO 3: ¡Emigrantes! Venís a quitarnos el poco trabajo que hay. Mire, lo mejor que puede hacer es volverse a su ca­sa. Además no empleamos a mayores de 35 años.

SACERDOTE: ... y no me hospedasteis (Se retira al sitio). Estuve desnudo...

DESPOJADO: Tengo frío. No tengo apenas ropa, y ahora que se acerca el invierno, tengo mucho frío. ¿No tendríais un abrigo de sobra que prestarme?

MALVADO 4: Sí, pero no es de su talla. Iría haciendo el ridículo. Pe­ro no desespere, siga buscando que Dios le amparará.

SACERDOTE:... y no me vestísteis (Se retira al sitio). Estuve enfermo...

ENFERMO: Llevo dos semanas sin salir de casa, y creo que no sal­dré en mucho tiempo, porque estoy muy enfermo. Al principio todos veníais a verme, y yo me sentía mucho mejor, ahora hace mucho que no venís y me siento muy solo. No tengáis miedo a contagiaros.

MALVADO 5: ¡Uff! Con lo contagioso que es lo que usted tiene. No puedo ir a verle pero ya le llamaré un día de estos por te­léfono. ¿De acuerdo?

SACERDOTE:... y no me visitasteis (Se retira al sitio). Estuve en la cárcel...

PRESO: Posiblemente estaré preso muchos años; saldré marca­do, cuando sea viejo y tendré que irme a un asilo. Estoy aquí y no hago nada. ¡Es tan horrible no poder hacer na­da! Si al menos tuviera la alegría de hablar con un amigo que viniera a verme de vez en cuando.

- 1 2 2 -

MALVADO 6: ¡Sólo faltaba eso, que yo fuera a visitar presos! Claro que en la cárcel se pasa mal, pero eso tenía que haberlo pensado antes de hacer lo que hizo. Si la cárcel fuera un hotel, ¿quién no robaría? En el fondo todos son unos sin­vergüenzas.

SACERDOTE:... y no vinisteis a verme (Se retira al sitio). Entonces también éstos contestarán:

MALVADOS: Señor, ¿cuándo te vimos con hambre o con sed, o fo­rastero o desnudo, o enfermo o en la cárcel y no te asis­timos?

SACERDOTE: Y él replicará: Os aseguro que cada vez que no lo hi­cisteis con uno de éstos, los humildes, tampoco lo hicis­teis conmigo.

Y éstos irán al castigo eterno y los justos a la vida eterna.

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Sabes ver a Dios en el hambre, la sed, la prisión, la cama del hospi­tal... o sólo en la Iglesia?

¿Te das cuenta de que lo que haces a los demás se lo haces a Dios?

¿Te das cuenta de que Dios no controla si rezas, sino si atiendes a los demás?

¿Cuando dices que amas das de comer, de beber, visitas... o es sólo una vaguedad?

- 1 2 3 -

Page 63: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

DOMINGOS DEL TIEMPO ORDINARIO

Desde el XXV-XXXIV

CICLO B

Jesús nos cura y nos sana

Page 64: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VIGESIMOQUINTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos cura de toda clase de males.

Comentario Todos estos domingos los unificamos con la actividad de Jesús. «Él pasó la vida haciendo el bien y curando toda enfermedad y dolen­cia.» Cada domingo según la lectura del Evangelio destacamos la do­lencia de la que nos cura y sana.

Material Preparar un botiquín. Con él haremos todos los domingos la procesión de entrada. Estará colocado en lugar destacado como símbolo que preside la celebración. De él iremos sacando los objetos para la oración y presentación del símbolo propio de ca­da domingo. El botiquín contiene alcohol, tiritas, esparadrapo, mercromina, lin­terna, fósforos, aspirinas, vendas, gasa y algodón y unas tijeras.

Observaciones Destacamos este domingo el momento del perdón donde se reco­gen distintas dolencias. También como ofrendas presentamos los distintos objetos del botiquín que iremos sacando cada domingo.

X

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

2. CANTO

- 1 2 7 -

Page 65: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

3. RITO DEL PERDÓN

— Perdón por los problemas que causo con mi mal comportamiento.

— Perdón porque me peleo con mis hermanos y desobedezco a mis padres.

— Pido perdón por todas las cosas malas que he hecho a mis ami­gos, a mis padres y mis familiares.

— Pido perdón porque mi mal genio hace que no me porte bien con los demás, que quiera tener siempre la razón y no me gusta que me lleven la contraria.

— Perdón por los pecados cometidos con el prójimo burlándome, insultando y pegando.

— Pido perdón porque en casa me enfado mucho.

— Pido perdón por todas las mentiras que he dicho y todas las faltas que he cometido en el colegio.

— Pido perdón por criticar a las amigas cuando no están y por ser avariciosa.

— Perdón por todo lo que tengo que hacer y que no hago, y por lo que no tengo que hacer y hago.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA de la carta del Apóstol Santiago 3,16-4.3

5. CANTO

6. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 9,29-36

7. COMENTARIO DIALOGADO

¿Cuáles son los males más comunes entre los niños y niñas como nosotros? ¿A qué se deben? ¿A malos momentos o a que somos ár­boles dañados?

- 1 2 8 -

¿Por qué queriendo ser buenos nos portamos a veces tan mal? ¿Por envidia, porque queremos ser los más importantes...?

¿Crees que Jesús muerto y resucitado es el remedio de todos los males? ¿Que Él es el botiquín que contiene la solución a todas nues­tras enfermedades? ¿Cómo lo explicarías tú?

8. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

Jesús es la salud y la alegría, es nuestra medicina y nuestro ungüento, porque comparte nuestros sufrimientos y nos cura con su amor y simpatía.

Sufrió en la Pasión nuestros males y lloró nuestras penas y lamentos, en la cruz asumió nuestros tormentos y de su corazón brotó agua saludable.

Bebamos todos en esa fuente, limpiemos en ella nuestras heridas, que a veces nos son tan queridas y a veces nos ponen al borde de la muerte. Cúranos, buen Jesús, Salud divina, que todos podamos ser tu medicina.

C. LITURGIA EUCARISTICA

9. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

— Presentamos estos algodones, gasas y vendas que sirven para cubrir y limpiar las heridas y para sujetar las luxaciones y fracturas que se producen en nuestro cuerpo. Pero no son menos ni menos dolorosas las que se producen en el alma. Que ellas hagan que no nos quedemos heridos para siempre.

— Presentamos estas tiritas y esparadrapos porque la vida ordinaria de cada día nos produce pequeñas heridas que también merecen nuestro cuidado: roces, enfados, disgustos, malas palabras... Sin

- 1 2 9 -

Page 66: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

ser nada grave, necesitan cuidado para que no nos infecten el or­ganismo y contaminen el ambiente.

— Pero antes de taparlas con las tiritas se requiere que las limpie­mos y desinfectemos. Este alcohol y mercromina que presenta­mos es lo que queremos usar para limpiarlas aunque nos escue­zan y nos duelan.

— Presentamos estas aspirinas, un medicamento sencillo y barato, pero ¡qué efectivo!, para tantos dolores de cabeza y fiebres que nos produce esta sociedad de las prisas, del estrés, de violencia, de corrupción...

— Presentamos estas tijeras que sirven para cortar y descubrir heri­das que a veces se nos infectan y no bastan los otros remedios. Es necesario cortar y sajar. Que el Señor las use para cortar esos tumores que nos crecen y enferman todo nuestro organismo.

- 1 3 0 -

VICESIMOSEXTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos cura de nuestras envidias.

Materiales Preparar la escenificación. Tres letras grandes en cartulina.

Observaciones La primera lectura y el Evangelio están unidos por el mismo tema. Es preferible centrarse en ellos. Aunque también puede servir la segunda lectura por los temas que tocamos todos estos domingos. Tres niños discuten con las letras hasta que dan con la palabra «Paz».

I

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

2. CANTO

B. LITURGIA DE LA PALABRA

3. LECTURA del Libro de los Números 11,25-29

4. CANTO

5. LECTURA de la carta del Apóstol Santiago 5,1-6

- 1 3 1

Page 67: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

6. CANTO

7. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 9,37-42.44

8. ESCENIFICACIÓN

NIÑO 1: (Sale) ¡Yo quiero la paz!

NIÑO 2: (Sale) ¡Yo quiero la paz!

NIÑO 3: (Sale) ¡Yo quiero la paz!

NIÑO 1: ¡Pero yo la quiero más!

NIÑO 2: ¡Yo la quiero más que tú!

NIÑO 3: ¡Yo la quiero más que vosotros!

NIÑO 1: ¡Pero tu letra es fea!

NIÑO 2: ¡Y está muy mal pintada!

NIÑO 3: ¡Pero está bien trazada!

NIÑO 1: ¡Mi letra es bonita!

NIÑO 2: ¡La mía lo es más!

NIÑO 3: ¡Pero están torcidas!

NIÑO 1: ¡Yo quiero la paz!

NIÑO 2: ¡Yo también!

NIÑO 3: ¡Pero yo más!

NIÑO 1: ¡Me gusta poner mi letra la primera!

NIÑO 2: ¡A mí también!

NIÑO 3: ¡La mía es más importante!

NIÑO 1: ¡Por eso me gusta ponerla arriba!

NIÑO 2: ¡A mí más arriba!

NIÑO 3: ¡La mía es la más alta!

NIÑO 1: ¿Por qué no las revolvemos?

ZAP - AZP - PZA - PAZ

NIÑO 1: ¡A mí me gusta que se vea bien!

NIÑO 2: ¡Mejor es que miren a la mía!

- 1 3 2 -

NINO 3:

NIÑO 1:

NIÑO 2:

NIÑO 3:

NIÑO 1:

NIÑO 2:

NIÑO 3:

La mía sí que merece la pena!

No hay una más que otra!

Solas no valen nada!

Juntas tienen sentido!

Yo quiero la PAZ!

Yo quiero la PAZ!

Yo quiero la PAZ!

9. COMENTARIO DIALOGADO

¿A qué clase de niños envidias tú? ¿Te das cuenta de que la envidia impide que el corazón crezca?

¿Admiras y alabas las cualidades de los demás o las envidias? ¿Cómo te sientes cuando se valora y alaba a tus compañeros?

¿Te molesta que para el juego, para el trabajo, para... se cuente más con otros que contigo?

10. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

¿Hay alguien que no tiene envidia de su hermano? Es el mal, el virus que más emponzoña nuestro corazón. Por envidia mató Caín a Abel. Por envidia asesinamos en nuestro corazón al que tiene, sabe o pue­de más que yo. En el fondo todos somos asesinos de nuestros her­manos. Necesitamos un agua fuerte que corroa esta enfermedad. Que este alcohol sea esa agua fuerte que queme esa ponzoña de nuestro interior para que una vez sanados podamos amar a los de­más con un corazón limpio. Roguemos al Señor.

• - 1 3 3 -

Page 68: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VIGESIMOSEPTIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos cura de la terquedad, tozudez y dureza del corazón.

Observaciones El tema unificador de la primera lectura y el Evangelio es lejano para los niños y quizá doloroso para muchos de ellos que tenga­mos delante. Habrá que acercárselo en el comentario dialogado y tratarlo con mucha delicadeza. Normalmente la primera lectura y el Evangelio están unificados por el mismo tema. No obstante, a partir de este domingo se lee la carta a los Hebreos de segunda lectura, cuya temática se puede unir muy bien con el símbolo del botiquín: «Porque Cristo ha pa­sado por todo, puede curarnos».

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Perdón, Señor, por nuestra cabezonería, que nos lleva a creer só­lo en lo que nosotros hacemos y no reconocer y respetar lo que hacen los otros, haciendo que nos limitemos solamente a los que nos dan la razón.

- 1 3 4 -

— Perdón, Señor, por nuestra tozudez y obstinación, que nos lleva a no hacer caso a lo que nos mandan y que redunda en nuestro bien y en bien de los demás, sobre todo cuando estamos hacien­do algo que nos gusta.

— Perdón, Señor, por nuestra dureza de corazón, con la que vamos por la vida y que hace que no nos fijemos en los problemas, las necesidades y los sufrimientos de los demás y que pasemos de largo.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA del Libro del Génesis 2,18-24

5. CANTO

6. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 10,2-16

7. COMENTARIO DIALOGADO

¿Con quién has roto últimamente y por qué?

¿Te das cuenta de que la tozudez, la obstinación, la dureza del corazón, no une sino que separa, divorcia a las personas?

¿A ti qué es lo que más te molesta y enfada? ¿Vas de duro por la vida?

¿Sabes que el hacerse como niños es ser sencillo, amable, com­prensivo y sensible?

8. PETICIONES

— Tú nos dijiste que los que tienen el corazón atado al dinero lo tie­nen duro y no son felices. Por eso te decimos:

TODOS: Ablanda nuestros corazones.

— Tú nos dijiste que los que son sensibles y se preocupan cuando alguien sufre, son felices. Por eso te decimos:

TODOS: Ablanda nuestros corazones.

- - 1 3 5 -

Page 69: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

— Tú nos dijiste que los que son sencillos y amables, y no se dejan llevar por la terquedad, son felices. Por eso te decimos:

TODOS: Ablanda nuestros corazones.

— Tú nos dijiste que los que trabajan por la paz y no son obstinados en defender sus puntos de vista, son felices. Por eso te decimos:

TODOS: Ablanda nuestros corazones.

— Tú nos dijiste que los que comparten lo que tienen y no defienden con tozudez su egoísmo, son felices. Por eso te decimos:

TODOS: Ablanda nuestros corazones.

— Tú nos dijiste que los que no tienen el corazón duro sino noble y honrado, son felices. Por eso te decimos:

TODOS: Ablanda nuestros corazones.

9. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

Jesús constantemente se veía rodeado de enfermos a los que acogía con compasión, comprensión y misericordia que es la mejor medici­na, porque todo Él irradiaba salud, «salía de El una fuerza curativa» (Le 5, 17), era portador de vida. Jesús quería curar a todos sus heri­das y sus miserias, las propias y las que nos causan los demás.

El dolor hace que nos defendamos de ellas, que nos encerremos cada vez más en nosotros mismos, que nos carguemos de prejuicios y barreras de exclusión, nos hagamos obstinados y duros de cora­zón. Si queremos volvernos y ser nosotros mismos, de nuevo tene­mos que cortar y sajar. Que estas tiritas hagan que no sangremos y que no nos duela mucho. Roguemos al Señor.

- 1 3 6 -

VIGESIMOCTAVO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos cura de la ambición de riquezas.

Materiales Preparar la escenificación. Una mesa con un televisoí

Observaciones

y un taburete.

En la escenificación, a un lado ponemos una mesa con un televi­sor desde donde habla uno que hace de locutor, y al otro lado un taburete que simula una montaña desde donde habla uno que hace de Jesús.

I

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Por tantas veces que preferimos ser más que los demás en vez de aceptarnos como somos.

— Porque nos vamos llenando de cosas y cosas y no nos preocupa­mos de estar con las personas y hacer cada vez más amigos.

— Por tantas veces en que Jesús nos llama para que seamos sus amigos y nosotros nos hacemos los despistados mirando hacia otra parte... donde tenemos muchas cosas.

- 1 3 7 -

Page 70: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

4. ORACIÓN

Padre bueno, Tú nos quieres de verdad. Enséñanos a tratar bien a los que nos rodean, especialmente a los que tienen menos que nosotros, de manera que vayamos haciendo entre todos un mundo más bonito y alegre donde todos vivamos como hermanos.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del Libro de la Sabiduría 7,7-11

6. CANTO

7. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 10,17-30

8. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: ¿Qué programa prefieres? ¿El que la sociedad te pro­pone a través de la televisión?

LOCUTOR: Sé rico. No te preocupes de dónde vienen las riquezas, ni cómo se ganan. Lo importante es tenerlas. Tendrás tantas como quieras y podrás comprar lo que desees.

NARRADOR: ¿O el programa de Jesús?

JESÚS: Bienaventurados los pobres de corazón. Que tu corazón esté al servicio de Dios y de los demás. No te creas au-tosuficiente y comparte tus bienes, sobre todo con los más necesitados.

LOCUTOR: Sé poderoso. Podrás ocupar el primer puesto. Podrás imponer tu ley y sacar provecho del lugar que ocupas. La justicia no podrá contra ti porque gozarás de inmunidad total. ¡El mundo será tuyo!

JESÚS: Sé solidario con los que sufren o son despreciados y marginados, sin esperar ninguna recompensa.

LOCUTOR: Sé linda y bella. Visita los mejores salones de belleza. Hazte la cirujía estética y cuida tu silueta para que todos te admiren y te aclamen.

- 1 3 8 -

JESÚS: Ten un corazón limpio y transparente donde no quepa la mentira y la hipocresía. Un corazón sencillo y confiado como el de un niño.

LOCUTOR: Toma estas pildoras para cuidar tu salud. Con ellas po­drás comer y beber lo que quieras sin engordar.

JESÚS: Ten hambre y sed de justicia. Preocúpate de ayudar a los demás a ser felices y a vivir en paz.

LOCUTOR: Goza lo que puedas. Todo está permitido. Te daremos lo que quieras en tu casa o en centros especializados. Tendrás a tu disposición todas las cosas y personas que desees.

JESÚS: Estáte dispuesto a padecer lo que haga falta para ser fiel a Dios y a los hermanos, porque no hay amor más gran­de que dar la vida por los que amamos.

LOCUTOR: ¡Con mis ofertas te lo pasarás bien!

JESÚS: Con mis ofertas serás Hijo de Dios y hermano de todos aquí en la tierra y en la eternidad.

LOCUTOR: Aviso para caminantes: «El que tiene muchas cosas no puede seguir a Jesús».

— Porque está muy «enrollao».

— Porque se preocupa de tener cada vez más cosas y se olvida de la gente.

— Porque desprecia lo que en verdad vale la pena bus­car y tener: amistad, cariño, solidaridad...

— Porque prefiere el ordenador, los juguetes... a los amigos.

— Porque no entiende a Jesús que le invita a ser su amigo «sin un fardo encima», y piensa que «por qué no con ese fardo».

— Porque Jesús camina siempre muy ligero, y con un fardo de cosas no se puede ir muy ligero, ni durante mucho tiempo, ni muy lejos.

- 1 3 9 -

Page 71: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

9. COMENTARIO DIALOGADO

¿Qué valor le das al dinero? ¿Poco o mucho?

¿Crees que hay cosas, valores más importantes que el dinero? ¿Cuáles?

¿Cuántas cosas de las que tengo no me son necesarias para ser feliz? ¿Qué es lo que a mí me hace verdaderamente feliz?

¿Para qué me sirven las cosas si pierdo la amistad? ¿Sé compar­tirlas con los demás?

10. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

A las riquezas y a las cosas es donde más se nos pega el corazón sin que tengamos conciencia de estar enfermos, porque no nos duele na­da ni a primera vista a nadie hacemos sufrir. Pero son el gran obstáculo para descubrir dónde se encuentra la verdadera felicidad, dónde hay más vida. Eso le pasó al joven rico, prefirió no despegarse de la vida que llevaba aunque buscaba más vida. Que estos esparadrapos no nos tengan el corazón pegado, atado y agarrado a las cosas, sino que ten­gamos siempre un corazón libre y generoso. Roguemos al Señor.

C. LITURGIA EUCARÍSTICA

11. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

— Para ir a dormir nos despojamos de las prendas que llevamos du­rante el día y nos ponemos el pijama. Lo presentamos porque hoy Jesús en el Evangelio nos invita a seguirle ligeros de ropa y de equipaje, y para que nos recuerde que se puede ser feliz viviendo con mucha más sencillez.

— Esta vela gastada no sirve ya para mucho, pero sí ha servido mu­cho tiempo para alumbrar y ayudar a caminar sin tropiezos. Nues­tra vida tiene que ser algo así: gastarse para ayudar al que lo ne­cesite.

— Un candado sirve para guardar la casa, un baúl, una hucha... Las personas podemos estar cerradas como este candado que pre-

- 1 4 0 -

sentamos. Seguir a Jesús es hacerlo abiertamente y que puedan contar con nosotros siempre.

Te presentamos, Señor, este pan y este vino, símbolo de la comi­da que se comparte. Que nuestra vida sea también un continuo compartir con los demás las cosas que sentimos, que tenemos y que sabemos hacer.

- - 1 4 1 -

Page 72: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VIGESIMONOVENO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje

Jesús nos cura de la ambición de poder.

Materiales

Preparar la lectura escenificada.

Observaciones

El guión que sirve de introducción a la lectura del Evangelio es del libro Un tal Jesús.

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Jesús no vino a mandar, gobernar, dictar leyes y vivir en un palacio. Jesús vino para enseñarnos a vivir juntos, «en corro», y ser Él uno más —el primero— de ese corro. Jesús quiere que el Reino sea «vivir en corro», porque sabe que, aunque la gente se empeñe en vivir co­mo una pirámide, unos encima de otros, todos los hombres tenemos derecho a vivir unos junto a otros, unidos de las manos como Él hizo. Por eso Jesús y su vida son «un derecho para todos los hombres». Pero, para vivir así, tenemos que dejar de querer dominar para estar siempre al servicio los unos de los otros.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

3. CANTO

- 1 4 2 -

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque no siempre ayudamos a los demás con actitud de servicio sino para que nos valoren.

— Porque no siempre tratamos a los demás como iguales, sino que nos gusta imponernos y mandar.

— Porque ponemos etiquetas a los demás y les hacemos mala pro­paganda.

5. ORACIÓN

Padre, nuestro, sabemos que estás siempre a nuestro lado. Enséña­nos a quererte como mereces y a relacionarnos con los demás como iguales, sin creernos más que nadie y en actitud de servicio.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. LECTURA del Profeta Isaías 53,10-11

7. CANTO

8. ESCENIFICACIÓN

9. LECURA del santo Evangelio según San Marcos 10,35-45

NARRADOR: Cuando salimos de Cafarnaún, íbamos los doce del grupo con María, la madre de Jesús, su vecina Susana, Salomé, la madre de los Zebedeos, y María la Magdale­na. Jesús abría la marcha. Llegamos a una pequeña ciu­dad entre Samaría y Galilea.

SALOMÉ: Con estos huesos de pollo que me traje hago una sopa que se van a chupar los dedos.

SUSANA: Buena idea, Salomé. A ver si les calentamos las tripas a estos tragones para que duerman mejor.

MAGDALENA: Aquí está el tomillo.

• - 1 4 3 -

Page 73: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

MARÍA: Vamos a sacar un poco de queso también, ¿no?

SALOMÉ: No, María. Con la sopa y unas aceitunas ya tienen bas­tante...

MAGDALENA: ¡Pues dice Pedro que tiene un hambre...!

SALOMÉ: Siempre la tiene. Parece un saco sin fondo. No se llena con nada.

MAGDALENA: ¡Y así de fuerte está el tipo! Por algo Jesús lo tiene de brazo derecho.

SALOMÉ: Brazo derecho ¿de qué? ¡Eres una enredadora, Magdale­na, una lengua larga!

MAGDALENA: ¿Yo una enredadora? ¡Pues fíjese! Yo oí decir por ahí y a sus mismos hijos, esas buenas piezas, que si a Jesús le pasaba alguna desgracia, que Dios no lo quiera, al que le tocaba agarrar el timón del barco era a Pedro.

SALOMÉ: ¿Pero, por qué a Pedro, a ver, por qué?

MAGDALENA: Mire, señora, Jesús tiene buen ojo y entre todos esos bandidos ha sabido escoger al que es un tantico así más decente, ¡caramba! Tiene sus cosas, sí, pero también tiene palabra... No es como... «otros»...

SALOMÉ: ¿Por quién dices eso?

MAGDALENA: Por... «nadie».

MARÍA: Bueno, dejad de pincharos y ve a decir a los hombres que vengan, que la sopa está hirviendo...

SALOMÉ: Oye, Jesús, ahora que estamos solos, yo quería decirte algo.

JESÚS: Pues dígalo, Salomé.

SALOMÉ: Se trata de esa Magdalenita, Jesús... ¡Caramba con la niña!

JESÚS: ¡Qué pasa! ¿Habéis discutido?

SALOMÉ: A mí no me gusta hablar, ¿sabes? Pero esa mujer y Pe­dro... No es que yo quiera ser mal pensada, pero o Pe­dro la engatusa a ella o ella está engatusando a Pedro. Aquí no hay trigo limpio.

- 1 4 4 -

¡Pero no me diga una cosa así, Doña Salomé!

¡Ay si Rufina hubiera venido! Sí, sí, el asunto es con Pe­dro... Para Magdalena, Pedro lo tiene todo. Que si fuer­te, que si el más valiente de todos, que si es el mejor... Se le nota demasiado, Jesús. No lo sabe disimular...

Y lo peor no es eso. Ahora anda diciendo que Tú dijiste que Pedro es tu brazo derecho. Y que después de Ti, Pedro. Yo no lo puedo creer. Todos lo conocemos: ¡mu­cho ruido y pocas nueces! ¡Dice que valiente! Pero con un estornudo lo espantan... En fin, ¿para qué hablar?

JESÚS: No, no siga hablando...

SALOMÉ: Mira, dicen que el diablo sabe más por viejo que por dia­blo. Y yo ya tengo canas. ¿Quieres un consejo?

JESÚS: Venga ese consejo...

SALOMÉ: Con un brazo derecho como Pedro... ¡mejor estar man­co! Tú necesitas dos buenos brazos, dispuestos, firmes, que te ayuden y te defiendan.

JESÚS: ¿En quién estás pensando?

SALOMÉ: En mis hijos. Y no porque lo sean, sino porque lo valen. Son capaces hasta de dar la última gota de sangre por Ti. Apóyate en mis hijos; uno a tu derecha y otro a tu iz­quierda.

SACERDOTE: No sabéis lo que pedís, ¿sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber, o de bautizaros con el bautis­mo con que yo me voy a bautizar?

DISCÍPULOS: Lo somos.

SACERDOTE: El cáliz que yo voy a beber lo beberéis, y os bautiza­réis con el bautismo con que yo me voy a bautizar, pero sentarse a mi derecha o a mi izquierda no me toca a mí concederlo, está ya reservado.

NARRADOR: Los otros diez, al oír aquello, se indignaron contra Santiago y Juan. Jesús, reuniéndolos, les dijo:

JESÚS: Sabéis que los que son reconocidos jefes de los pueblos los tiranizan y que los grandes los oprimen. Vosotros na­da de eso. El que quiera ser grande sea vuestro servidor,

JESÚS:

SALOMÉ:

- 1 4 5 -

Page 74: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

y el que quiera ser el primero sea el esclavo de todos. Porque el Hijo del Hombre no ha venido para que le sir­van, sino para servir y dar su vida en rescate por todos.

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Quién es el más importante a los ojos de Dios? ¿Con qué criterios nos juzga Jesús?

¿Sabes ser seguidor de Jesús a «las duras y a las maduras» por­que su camino no es de ambiciones sino de servicio?

¿Te gusta imponer tu voluntad y que siempre se haga lo que tú quieres?

11. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

Todos queremos sobresalir, ponernos por encima de los demás, ser importantes y famosos. A nadie le gusta ser el segundo de la fila. Aunque a veces so capa de falsa humildad que más bien es vergüen­za o cobardía decimos «yo no sé», «yo no valgo», «yo no puedo», pe­ro en el fondo de nosotros mismos experimentamos lo contrario. Que esta mercromina nos desinfecte esa contradicción que vivimos y nos cure esa ambición de poder para que nos volvamos serviciales y que­ramos ser los primeros y destacar en el servicio. Roguemos al Señor.

C. PLEGARIA EUCARÍSTICA

12. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

— Cantar una canción es unirnos todos en una voz, sin que la de uno destaque sobre las demás. Este cancionero hace que todos podamos cantar juntos. Al presentarlo nos recuerde que también nosotros debemos estar al servicio los unos de los otros.

— La planta es signo de vida pues adorna y alegra la vida de las per­sonas. Nosotros queremos ser como ésta que presentamos por­que queremos adornar y alegrar la vida de los demás con un ser­vicio desinteresado.

- 1 4 6 -

— Todos sabemos para qué sirve un paraguas. Este que presenta­mos es un símbolo de acogida y protección cuando llueve. Noso­tros queremos prestar ese servicio cuando las personas padezcan la intemperie de sus días malos.

— Te presentamos, Señor, el pan y el vino de los que luego vamos a participar todos. Haz que lo que vamos a realizar en esta celebra­ción se traduzca en nosotros en un mayor servicio para una ma­yor fraternidad.

- 1 4 7 -

Page 75: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

TRIGÉSIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos cura de nuestras cegueras.

Materiales

Preparar la lectura escenificada.

Observaciones Para la escenificación basta que el ciego se coloque delante del sacerdote. A su derecha cinco niños que le remedan diciendo ca­da uno una frase y a la izquierda otros cinco niños que remedan a los que le reniegan y le llaman.

I

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Todos tenemos ojos, pero sólo con los ojos no podemos ver todas las cosas que nos rodean. Jesús quiere darnos una nueva mirada para estar atentos a la realidad y aprender a mirar más a fondo, desde una mirada limpia y clara, sin légañas, miopías ni cataratas. Con esos ojos nuevos sabremos ver a Jesús en la gente que pasa a nuestro lado y que necesita que le echen una mano.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

3. CANTO

- 1 4 8 -

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque el egoísmo, la revancha y la envidia no nos dejan ver a los demás con claridad.

— Porque nuestra comodidad, el miedo o los prejuicios no nos dejan ver a los que necesitan de nosotros para que les echemos una mano.

— Porque hay demasiadas cosas que nos deslumhran o nos nublan la mirada y sólo tenemos ojos para ellas y no para las personas.

5. ORACIÓN

Padre, venimos a la Eucaristía dándonos cuenta de lo difícil que es ser amigos de todos y tener una actitud de servicio. Ábrenos los ojos del corazón para saber mirar la realidad y hacernos generosos.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. LECTURA del Profeta Jeremías 31,7-9

7. CANTO

8. LECTURA de la carta a los Hebreos 5,1-6

9. CANTO

10. ESCENIFICACIÓN

11. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 10,46-52

NARRADOR: En aquel tiempo, al salir Jesús de Jericó con sus dis­cípulos y bastante gente, el ciego Bartimeo (el hijo de Ti-meo) estaba sentado al borde del camino pidiendo li­mosna. Al oír que era Jesús Nazareno empezó a gritar:

BARTIMEO: ¡Hijo de David, ten compasión de mí!

- 1 4 9 -

Page 76: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NIÑO 1: Señor, ayúdame a llevar mejor mis estudios.

NIÑO 2: Señor, ayúdame a construir un mundo mejor.

NIÑO 3: Señor, ayúdame a tener paciencia y a ayudar a los demás.

NIÑO 4: Señor, ayúdame a ser sincero conmigo y con los demás.

NIÑO 5: Señor, haznos fuertes y que seamos mejores amigos.

NARRADOR: Muchos le regañaban para que se callara:

NIÑO 1: Si no dejas de ser niño no crecerás nunca.

NIÑO 2: Si no fueras tan dejado podrías conseguir algo.

NIÑO 3: No seas tonto, mirando al cielo no conseguirás nada.

NIÑO 4: Si no te conoces, nunca llegarás a conocer a los demás.

NIÑO 5: Si no ayudas a los demás no serás buen cristiano.

NARRADOR: Pero él gritaba más:

BARTIMEO: ¡Hijo de David, ten compasión de mí!

NIÑO 1: Tengo que conseguir lo que me he propuesto.

NIÑO 2: Señor, ayúdame a ser algo en la vida.

NIÑO 3: Por favor, que tenga ganas de tener fuerza de voluntad.

NIÑO 4: Señor, que nuestro futuro tenga algo de felicidad.

NIÑO 5: Señor, ayúdanos y guíanos en el camino.

NARRADOR: Jesús se detuvo y dijo:

SACERDOTE: Llamadlo.

NARRADOR: Llamaron al ciego diciéndole:

NIÑO 1: No te rindas, sigue intentándolo, otra vez será.

NIÑO 2: Si eres constante conseguirás lo que te propongas.

NIÑO 3: El camino es largo pero se acaba llegando. Si quieres, puedes.

NIÑO 4: Lucha por ser tú mismo y no cambies tu personalidad por nadie.

NIÑO 5: Aunque tropieces y te equivoques sigue adelante.

TODOS: ¡Ánimo, levántate! Que te llama.

NARRADOR: Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús.

- 1 5 0 -

NIÑO 1: Pensaré mejor lo que voy a hacer y no lo haré a lo loco.

NIÑO 2: Trataré de superarme a mí mismo.

NIÑO 3: Abandonaré mi egoísmo, no pisaré a los demás y com­partiré las cosas.

NIÑO 4: Abandonaré mi pereza, ¡estoy aburrido de no hacer nada!

NIÑO 5: Abandonaré mi desconsideración y seré amigo de los demás.

NARRADOR: Jesús le dijo:

SACERDOTE: ¿Qué quieres que haga por ti?

NARRADOR: El ciego le contestó:

TODOS: ¡Que podamos ver!

NARRADOR: Jesús le dijo:

SACERDOTE: Anda, tu fe te ha curado.

NARRADOR: Y al momento recobró la vista y lo seguía por el camino.

12. COMENTARIO DIALOGADO

Yo que creo ver, ¿me conozco suficientemente? ¿Sé quién soy?

Yo que creo ver, ¿veo a todos los que están tirados al borde del camino?

Yo que creo ver, ¿me fijo sólo en los defectos de los demás?

¿Presumo de que a mí nadie me «la pega» porque voy «con vista» por la vida?

13. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

¡Señor, que vea! La linterna y los fósforos no son imprescindibles en un botiquín porque normalmente curamos y sanamos a la luz del día. Pero también se producen muchos accidentes por la noche o por fal­ta de visibilidad. En nosotros es al revés, cada accidente, mal com­portamiento, produce oscuridad y noche en nuestra persona y en nuestra vida. Hoy como el ciego de nacimiento digamos y pidamos: ¡Señor, que vea! Que me porte cada vez mejor, que sea más fiel se­guidor tuyo, que ame más a los hermanos y así no esté a oscuras y sea luminoso. Roguemos al Señor.

• - 151 -

Page 77: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

TRIGESIMOPRIMER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje

Jesús nos cura de nuestros egoísmos.

Materiales

Preparar la escenificación.

Observaciones

La lectura del Evangelio puede

1

hacerse dialogada.

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Todos tenemos la sensación de fastidio al tener que repetir cosas tan sabidas como las que leemos hoy. A los que predicamos nos entra la tentación de lo inútil; a los que escucháis como oír llover y os cansa: ¡Qué rollo! ¡Siempre lo mismo! Y sin embargo, no hay nada tan urgen­te como proclamar una y otra vez lo que todos sabemos.

El mismo Dios repite a su pueblo la misma lección «Escucha, Israel».

Y es que no basta oír, es necesario escuchar para poner en prác­tica. Por eso hoy de nuevo dice Dios: «Escucha».

Quién sabe si alguno no se dedicará a escuchar por primera vez cosas bastante viejas y a ponerlas en práctica.

Uno no se hace cristiano cuando acumula una cantidad suficiente de saber, sino cuando comienza a escuchar aquello que ha aprendi­do. Por tanto: «Escucha».

- 1 5 2 -

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

3. CANTO

4. RITO DEL PERDÓN

— Pecamos cuando nos olvidamos de los demás. Señor, ten piedad.

— Pecamos cuando somos caprichosos y tacaños. Señor, ten piedad.

— Pecamos cuando todo lo queremos para nosotros. Cristo, ten piedad.

— Pecamos cuando nos peleamos unos con otros. Cristo, ten piedad.

— Pecamos cuando rechazamos a los que nos caen mal. Señor, ten piedad.

— Pecamos cuando somos rencorosos y no queremos hacer las pa­ces. Señor, ten piedad.

— Pecamos cuando...

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del Libro del Deuteronomio 6,2-6

6. CANTO

7. LECTURA de la carta a los Hebreos 7,23-28

8. CANTO

9. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 12,28-34

10. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Hoy nos vamos a fijar en el cómo debemos amar. Dos voluntarios nos van a contar un cuento de cómo dos no se pelean si uno no quiere. Uno será Pedro, un «cacha­zas»; el otro será Pablo, un «peleón».

• - 1 5 3 -

Page 78: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

PABLO: Oye, Pedro, vamos a pelearnos.

PEDRO: ¿Cómo? ¿Qué dices? ¿Pelearnos nosotros?

PABLO: Ya verás. Tú te quedas aquí y yo me voy allá. Cuando te diga: «Pedro, ven aquí», tú me contestas: «No me da la gana». Y ya quedaremos enfrentados y con motivos para discutir. Probemos. Tú me dices: «Pablo, ven aquí». Yo te contesto que no y nos enzarzamos. ¿Vale?

PEDRO: (Desganado) ¿Empezamos ya?

PABLO: No, espera. Yo primero me voy allá y te hago señal. ¡Ya!

PEDRO: (Sin ningún entusiasmo) Pablo, ven aquí.

PABLO: (Con énfasis) Te digo que no me muevo. No me da la ga­na. ¿Habrase visto? ¡Que no! ¡Que no me muevo de aquí!

PEDRO: (Condescendiendo bondadosamente) Bueno hombre, no te preocupes... Si tienes que molestarte, ya voy yo.

NARRADOR: Así ya empezaríamos a cambiar algo. Nuestra convi­vencia sería más agradable si todos nos esforzáramos en respetar al menos las normas de conducta, y mucho más si ayudáramos a los demás. Por ejemplo, qué sucedería si en un viaje de autobús, tengamos presente que la vida es un viaje, todos nos portáramos así:

VOZ EN OFF: Antes de entrar dejen salir. Se ruega no escupir en los coches. Por favor, pasen hacia delante. ¿Me permite? Perdón, no sabe cuánto lo siento. ¿Baja usted en la próxima? Si no le molesta, ¿puedo abrir la ventanilla? ¿Quiere usted sentarse? ¿Le molesta si el niño va junto a la ventanilla? ¡Qué bien! Este conductor frena sin brusquedades. ¿Me avisará en la parada anterior al final? ¡Por favor, ayude a bajar a ese ciego!

NARRADOR: Pero lo que sucede y lo que vemos es otra cosa: apretujones, desconsideraciones, malos modos, falta de respeto a las personas débiles, pisotones, brusqueda­des, etc. Todo, consecuencia del:

VOZ EN OFF: «Ojo por ojo, diente, por diente».

1 5 4 -

11. COMENTARIO DIALOGADO

¿Has experimentado que las enemistades y odios empiezan por pe­queñas peleas? ¿Podrías contar alguna experiencia?

¿Sabes hacerte respetar sin recurrir a los malos modos y violen­cias? ¿Pones buenos modos y modales en tu convivencia con los de­más?

¿Qué personas ocupan el lugar más importante en tu corazón? ¿Están todos los que debieran estar?

¿Qué sitio ocupa Dios en tu corazón? ¿Está en el centro o en un rincón?

12. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

Nuestro mundo con ser la obra bella de Dios está enfermo y son mu­chas las enfermedades y dolencias producidas por falta de amor. En nuestro mundo hay un gran déficit de amor. Nosotros poco podemos hacer. Sólo aportar nuestro granito de arena. Eso es lo que represen­tan estas aspirinas, pequeños remedios, es decir, simples gestos y detalles con los que curar algún mal por pequeño que sea: un saludo a los que nos consideramos distintos, una sonrisa al niño que se en­cuentra solo, un «gracias» por cualquier favor que nos hagan, una mano tendida al que se siente fracasado... contribuyen a desinfectar esta atmósfera tan cargada de egoísmo. Roguemos al Señor.

C. PLEGARIA EUCARÍSTICA

13. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

— Te presentamos, Señor, este corazón; en él, nuestro cariño a nues­tros padres, el intento de ser buenos compañeros en clase y bue­nos vecinos en el barrio, y el quererte a Ti queriendo a los demás.

— Te presentamos, Señor, esta cruz; con ella, nuestro amor y tam­bién nuestras faltas de amor, para que nos libres de ellas y nos enseñe cómo hemos de amar y nos dé fuerza para amar a los que no amamos.

- 1 5 5 -

Page 79: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

— Te presentamos este pan y este vino, y en ellos, todas las accio­nes que haremos durante la semana: el estudio, las ayudas y obe­diencias en casa, la amabilidad. Todo esto lo traemos como rega­lo a Dios nuestro Padre.

- 1 5 6 -

TRICESIMOSECUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos cura de la avaricia y las apariencias.

Materiales Preparar la lectura escenificada.

Observaciones La lectura escenificada es resumen del libro Un tal Jesús. Aunque en el comentario dialogado acentuemos el gesto de la viuda, también nos podemos fijar en el mundo de apariencias, ya que son dos mundos muy relacionados. Las ofrendas se pueden hacer a dos micros, a modo de oración recitada.

i '

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Es un hecho que en casa muchas veces echamos a perder la comida y somos muy delicados: esto no me gusta, esto no... mientras que por la televisión vemos reportajes de pueblos que pasan hambre y comprobamos que para ellos todo es bueno y no desperdician ni una migaja.

Constatamos que la abundancia de bienes impide que aprecie­mos el valor de lo que tenemos. Nos cuesta compartir y dar lo que es nuestro. Acostumbramos a dar alguna migaja de lo que nos sobra, como los ricos de los que nos habla el Evangelio.

• - 1 5 7 -

Page 80: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

Jesús nos dice que su Reino está formado de personas que son capaces de emocionarse ante los gestos de generosidad que hacen personas muy sencillas y en las que nadie se fija.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

3. CANTO

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque creemos que ser buenos es ser listos, sacar buenas no­tas, tener éxito en los deportes, caerle bien a la gente, en vez de tener buen corazón. Señor, ten piedad.

— Porque admiramos a la gente famosa en los deportes, en la músi­ca, en la tele y no nos fijamos en la buena gente que vive a nues­tro alrededor y no es nada famosa. Cristo, ten piedad.

— Porque nos dejamos llevar por los que más hablan, por los que saben contar chistes, por los que más «fardan» o llevan mejores marcas, y no nos fijamos en los que son sencillamente buenos. Señor, ten piedad.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del primer Libro de los Reyes 17,10-16

6. CANTO

7. LECTURA de la carta a los Hebreos 9,24-28

8. CANTO

9. ESCENIFICACIÓN

10. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 12,38-44

NARRADOR: Aquella mañana subimos al templo a rezar las oracio­nes de Pascua.

- 1 5 8 -

MENDIGO: ¡Por el amor de Dios, una ayuda para este pobre ciego! ¡Dios se lo pagará!

MENDIGA: ¡Forasteros, miren estas llagas y sientan lástima de mí!

NARRADOR: Durante los días de Pascua muchos venían a dar sus limosnas para el culto y el mantenimiento del Templo. Cuando llegamos, un rico comerciante dejaba caer en el cepillo un puñado de denarios.

RICO: ¡Para que nuestro templo brille siempre como brillan es­tas monedas de plata, amén!

HOMBRE 1: ¡Pssst! ¿Sabes quién es ese? ¡Uno de los sobrinos del viejo Anas! Vive en la costa y le lleva el negocio de vacas por allá... Mira qué anillo tiene. Con el precio de ese ani­llo se podría dar de comer a todos los infelices de la puerta.

HOMBRE 2: ¡Pues mira aquel otro! Ese trata mejor a sus caballos que a sus sirvientes.

RICO: ¡Para que nunca falte incienso en el altar de Dios, amén!

NARRADOR: Nosotros también nos acercamos para echar nuestras limosnas.

Una pobre viuda llegó, desató con cuidado un pañuelo y aparecieron dos centavos que venía a ofrecer.

RICO: ¡Tanta historia por dos miserables centavos! ¡Vete y no ensucies el tesoro del Templo con tus sucias monedas!

NARRADOR: Del empujón, los dos centavos rodaron por el suelo.

JESÚS: ¡Aquí hay una! ¡Tome usted!

VIUDA: ¡Ay mi'hijo, gracias, porque estoy más cegata que un to­po! ¡Qué muchachos tan educados!

NARRADOR: La viuda se acercó nuevamente a la caja de las ofrendas.

RICO: ¿Otra vez? ¡Te dije que te fueras de aquí!

JESÚS: ¿Y por qué se tiene que ir si se puede saber? Ella viene al templo como tú y como todos.

RICO: Ella viene a dar dos centavos roñosos que no sirven ni para comprar la mecha de una de las velas, ¿me oyes?

- 1 5 9 -

Page 81: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

JESÚS: Pues mira, esta vieja, como dices, va a echar más limos­na que tú.

RICO: ¿Ah, sí? ¿No me digas? ¿Y cómo sabes tú lo que voy a echar yo?

JESÚS: No lo sé, ni me interesa. Pero estoy seguro de que tú echas de lo que te sobra. Y esta pobre viuda da lo poco que tiene para vivir. La limosna de ella vale más a los ojos de Dios.

RICO: ¡Qué gracioso este galileo! ¡A los ojos de Dios, a los ojos de Dios! Pero ocurre que las cortinas y las copas del al­tar y los ornamentos de los sacerdotes no se pagan con centavos de viuda, sino con billetes gordos.

El templo es un lugar santo y todo lo que se haga para embellecer el templo es poco, porque Dios se merece eso y mucho más.

JESÚS: El verdadero templo de Dios es el hombre. Dios no vive entre piedras, sino en la carne de todos esos que están gritando de hambre junto a la puerta.

RICO: ¡Lo que me faltaba por oír! Ya no hay respeto para las cosas sagradas ni para la religión.

NARRADOR: En ese momento pasó un sacerdote.

SACERDOTE: A ver ¡qué chachara es esa que se traen! ¿Eh? Si no van a dar limosna, vayanse a otra parte y no molesten.

JESÚS: ¡Vamos, abuela, eche las monedas y vuelva a casa!

VIUDA: ¿Cómo dice mi'hijo?

JESÚS: Mire, si quiere, no las eche aquí. Déselas a aquel mendi­go de la puerta.

VIUDA: Habla más fuerte, mi'hijo, que yo estoy sorda y no me entero de nada.

JESÚS: No, qué va, los sordos somos nosotros que no queremos oír el grito de tantos que se mueren de hambre mientras la casa de Dios tiene las arcas llenas.

SACERDOTE: ¡Vamos, vamos, deprisa, que hay muchos esperando! Bendito sea Dios que siempre encuentra almas genero­sas para sostener el culto y el esplendor del templo.

- 1 6 0 -

NARRADOR: Y la viuda acabó echando sus dos centavos en el te­soro del Templo.

11. COMENTARIO DIALOGADO

¿Te gusta presumir de lo que tienes? ¿Te crees más que los demás porque presumes de tener muchas cosas? ¿Te acomplejas ante lo que tienen otros?

¿Sabes dar esos dos centavos de amabilidad, ternura, renuncia al pequeño consumo, etc.?

¿Eres generoso en las grandes campañas de solidaridad de Ma­nos Unidas, Domund, Cruz Roja, etc.?

12. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

La avaricia encoge el cuerpo y arruga el espíritu. Hace a la persona un viejo prematuro, pues nos seca el corazón. ¡Qué corazón más fres­co el de la viuda que entrega todo lo que tiene para vivir! Que estas vendas sirvan para sujetar las fracturas provocadas por la ambición de tener y acaparar en nuestras relaciones con los demás, pues nos introducen en el mundo de las apariencias. Que no sean esas filacte-rias y esos ropajes que llevaban los fariseos con los que aparentaban lo que no eran, ni esa mortaja con que están envueltos esos cadáve­res que llamamos momias. Roguemos al Señor.

C. PLEGARIA EUCARÍSTICA

13. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

La entrega no es cuestión de cantidad. La viuda pobre ha echado lo que tenía para vivir: se ha entregado. Y en la entrega de la vida, qué importante es lo pequeño, lo que parece no tener importancia:

— Te presentamos, Señor, esos dos centavos de amabilidad, de ter­nura, de renuncia al juicio y condena de los demás.

— Te presentamos esos dos centavos de renuncia a tantos capri­chos consumistas, a no decir nunca «esta comida no me gusta».

-161 -

Page 82: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

— Te presentamos, Señor, esos dos centavos de agradecer el en­contrar la mesa preparada y todo a punto.

— Te presentamos esos dos centavos de servir en casa poniendo la mesa, de arreglar nuestras cosas y colaborar en todo.

— Te presentamos, Señor, esos dos centavos de detalles, de caer en la cuenta de que el otro está siempre a mi lado.

— Te presentamos, Señor, esos dos centavos de lo que somos; del amor, que si no lo entregamos no vale nada.

— Te presentamos el pan y el vino; acepta con ellos, Padre, nuestro corazón, que quiere abrirse y ser sensible como el de Jesús para valorar lo bueno que hay en las cosas y en las personas que son sencillas.

- 1 6 2 -

TRIGESIMOTERCER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos cura de nuestros miedos.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones La escenificación puede ser muy sencilla. Desde dos sitios bien señalados, dos lectores van llevando el guión. Un niño colocado en el centro. En un primer momento de espaldas a los otros ni­ños, al final lee de cara a ellos.

l ~

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Hoy de una manera realista Jesús quiere despertar nuestras esperan­zas haciéndonos comprender que, más allá del esfuerzo de la vida ac­tual, siempre hay una certeza de la vida plena que nos ofrece el Padre.

Jesús nos insiste en dos características del Reino: la «Vigilancia» (no nos podemos dejar llevar por el ambiente, de lo que otros dicen o hacen, de lo que todo el mundo ve como normal), por eso es necesa­rio «Discernir» lo que es de Dios y lo que no lo es.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

3. CANTO

- 1 6 3 -

Page 83: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque solemos dejarnos llevar por lo que todo el mundo cree que es lo «normal», «lo lógico» y «natural» y no sabemos mante­nernos firmes en lo que quiere Jesús.

— Porque creemos que Dios es alguien que está en las nubes y que no podemos verle, y no miramos a fondo las cosas y las personas para poderle descubrir entre nosotros.

— Porque creemos que lo que nos gusta a nosotros, lo que nos ape­tece, así, sin más, es lo que le gusta a Dios.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del Profeta Daniel 12,1-3

6. CANTO

7. LECTURA de la carta a los Hebreos 10.11 -14.18

8. CANTO

9. LECTURA del santo Evangelio según San Marcos 13,24-32

10. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: El Hijo del Hombre vendrá. Pero antes hemos de pro­ducir con nuestras obras sus signos. Por eso cuando leemos el periódico o nos ponemos ante el televisor, qué vemos:

LECTOR 1: Que las ramas se ponen tiernas y brotan las yemas:

(Sale un niño con un periódico y lee noticias buenas ac­tualizadas)

LECTOR 2:0 que los ejércitos celestiales tiemblan:

(Sale otro niño con un periódico y lee noticias malas ac­tualizadas)

- 1 6 4 -

NARRADOR: Nos encontramos ante la alternativa de escoger con perspectivas diferentes:

LECTOR 1: ¿Nos añadimos a la fila de los catastrofistas que hasta precisan la fecha del fin del mundo?

LECTOR 2: ¿O nos colocamos al lado de los discípulos invitados a la vigilancia, a la paciencia, al compromiso sin envidias ni violencias?

LECTOR 1: ¿El miedo paralizador ante la alarma del fin del mundo?

LECTOR 2: ¿O asumimos las responsabilidades frente al quehacer de cada día para crear un mundo nuevo?

NARRADOR: En nuestras vidas nos unimos al plan de Dios:

LECTOR 1: Llenad la tierra y sometedla. Amaos los unos a los otros como yo os he amado. Para que vivamos la libertad nos ha liberado Cristo.

NARRADOR: O nos agarramos al becerro del consumo:

LECTOR 2: Si tú no tienes... ¡eres un pobre hombre! Si tú no eres rico, elegante... ¡haz como si lo fueses! Si tú no sabes mentir, hacerte valer y respetar... ¡eres un fracasado!

(Sale un niño que se coloca en medio)

VOZ EN OFF: Tú, ¿quién eres?

NIÑO: Yo seré mañana. Hoy no soy nada.

VOZ EN OFF: ¿Pero tú, qué quieres ser?

NIÑO: Quiero ser yo, yo, yo...

VOZ EN OFF: Pues camina, esfuérzate, lucha.

NIÑO: No me dejan. Yo quiero ser... y ellos no me dejan. Yo quiero ser distinto y ellos no me dejan.

VOZ EN OFF: ¿Quién no te deja ser distinto?

NIÑO: Los iguales. Los iguales.

VOZ EN OFF: ¿Es en casa, en el colegio, en la iglesia, desde la tele como te quieren hacer los iguales?

NIÑO: Sí, en todos los sitios me dicen lo que he de pensar, lo que he de vestir, lo que he de comer y beber...

- 1 6 5 -

Page 84: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VOZ EN OFF: ¿Y por qué quieres ser distinto?

NIÑO: Porque quiero preparar un mañana y un mundo mejor. Quiero ser responsable.

NARRADOR: Por eso es necesario discernir y elegir lo que nos con­viene, lo que nos construye, lo que Dios quiere, lo que es de nuestro amigo Jesús y lo que no lo es. Por eso:

(Vuelto hacia los otros niños, lee)

NIÑO: Cuando te hablen de los otros no digas nunca: «Es su problema».

Cuando no estén de acuerdo contigo no digas nunca: «No vale la pena dialogar».

Cuando pidan tu colaboración no digas nunca: «Ahora no puedo».

Cuando se trate de tus obligaciones no digas nunca: «No tengo tiempo».

Cuando se trate de tus defectos no digas nunca: «Yo soy así».

Cuando uses mal tu libertad no digas nunca: «No soy un niño».

No podemos lavarnos las manos con el futuro de nuestro mundo. Todos somos responsables.

11. COMENTARIO DIALOGADO

¿Te dejas llevar por lo que todo el mundo cree que es «lo normal», «lo natural», o sabes pensar por tu cuenta?

¿Te opones a lo que está mal y a lo que es normal para tener cri­terios propios y ser más responsable? ¿O te sientes poca cosa, mie­doso y cobarde?

¿En qué y en quiénes ves los signos del reino de Dios?

12. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

Si Jesús es nuestro amigo y nosotros los suyos no hay motivo para tener miedo, aunque se caigan las estrellas o las torres gemelas se

- 1 6 6 -

derrumben. El miedo es la enfermedad que nos paraliza, y nos lo pro­ducen tanto las circunstancias externas como el modo de ser interno. Tenemos miedo a hablar y expresarnos, a decir lo que pensamos, a que se burlen y rían de nosotros, en definitiva el miedo cobarde. Que este algodón nos proteja de todo aquello que nos atemoriza y estas gasas cubran y tapen nuestros puntos débiles. Roguemos al Señor.

C. PLEGARIA EUCARÍSTICA

13. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

— Estos periódicos son el reflejo de la realidad de nuestro mundo. En ellos se nos habla más de las estrellas que caen que de los reto­ños que brotan. Te los presentamos en señal de nuestro compro­miso de poner en el mundo más amor, responsabilidad y alegría.

— Cuando vemos que brotan los tallos, sabemos que llega la prima­vera. Cuando las hojas se ponen amarillas, que estamos en oto­ño. Cuando sacamos el traje de baño, sabemos que podemos ir a la piscina porque es verano; en otoño lo volvemos a guardar. También Dios nos da pistas en la vida de cada día, como si nos guiñase un ojo y dijese «estoy aquí».

— La gente que es miope o corta de vista usa gafas para poder ver bien las cosas y no confundirse. También nosotros necesitamos unas gafas especiales para vigilar en todo momento y poder des­cubrir a Dios en las cosas de cada día.

— Te presentamos, Padre, el pan y el vino de la Eucaristía. Enséña­nos a vivir siempre alegres y confiados, a contagiar a los demás nuestra alegría y a saber vigilar atentamente para poderte encon­trar. Te pedimos que nos ayudes a conseguirlo.

- 1 6 7 -

Page 85: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

? I SOLEMNIDAD DE CRISTO REY

Mensaje Jesús nos cura de nuestras mentiras.

Materiales Preparar la escenificación. Cartulinas con frases y símbolos de los imperios en la segunda escenificación.

Observaciones Hoy elegimos la segunda lectura. Ofrecemos dos escenificaciones para poder elegir. En la primera escenificación se pueden caracterizar los persona­jes o sacar el símbolo correspondiente a cada rey. En la segunda, cada niño dice su mitin delante de los otros niños y se van retirando a ambos lados hasta que los seis quedan aline­ados por encima de ellos.

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Hoy es la fiesta de Cristo Rey. A lo largo de todos estos domingos Él nos ha ido curando de nuestras enfermedades e infecciones para ser mejores cristianos. Él con su vida nos enseñó cómo vivir y comportar­nos. Por eso es nuestro Rey.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BOTIQUÍN

- 1 6 8 -

3. CANTO

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque a pesar de lo que decimos con la boca, nuestro rey sigue siendo el ordenador, las marcas de ropa, la tele.

— Porque nos dejamos llevar de lo fácil y normalmente desertamos cuando las cosas se ponen difíciles o hay que dar la cara para de­fender los valores de Jesús.

— Porque solemos ser buenos cuando se trata de rezar, de ir a mi­sa..., pero cuando salimos a la calle ya es otra cosa.

5. ORACIÓN

Padre nuestro, llevamos seis domingos aprendiendo cómo es el Rei­no que nos enseñó Jesús. Ayúdanos a conocerle a Él que es el Rey de este Reino, para aprender a seguir sus mismos pasos y hacernos dignos de su Reino.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. LECTURA del Libro del Apocalipsis 1,5-8

7. CANTO

8. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Nos ha de quedar muy claro que el Reino de Dios no es como los de este mundo que se imponen por la fuer­za y están simbolizados por los cuatro reyes de la baraja:

NIÑO 1: (Sale) Soy el rey de oros, el que más deseáis y admiráis. El dinero. Por tenerme sois capaces de venderos a voso­tros mismos. (Se retira a un lado)

NIÑO 2: (Sale) Soy el rey de espadas, el rey de la violencia, de la agresividad, del «ya me las pagarás». Quiero reinar sobre

• - 1 6 9 -

Page 86: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

vosotros para haceros más fuertes que los demás. (Se retira al otro lado)

NIÑO 3: (Sale) Soy el rey de bastos, primohermano del de espa­das. No tan violento pero igual de tirano. En mi mano es­tá el mamporro para golpear la libertad. Y es que todos queréis que los otros sean, piensen y actúen como voso­tros.

NIÑO 4: (Sale) Soy el rey de copas, el rey de los vagos, de los pe­rezosos, de la buena vida. Todos queréis estar en perpe­tuo estado de vacaciones y no con la molestia del estu­dio y del trabajo diario.

NIÑO 5: (Sale) Soy un rey diferente que viví en un país pequeño y extraño. Anduve por los caminos. A los demás reyes no les gustaba y me mandaron decir que me comportara de un modo más real. Pero como no hacía caso, decidieron pasar a la acción. Me encontraron contando cuentos en la plaza del pueblo. Entre golpes y empujones me lleva­ron a la gran sala del palacio de los reyes.

(Los cuatro quedan frente a los demás niños; el quinto en el centro)

9. LECTURA del santo Evangelio según San Juan 18, 33-37

NARRADOR: En aquel tiempo preguntó Pilato a Jesús:

PILATO: ¿Eres tú el rey de los judíos?

SACERDOTE: ¿Dices eso por tu cuenta o te lo han dicho otros de Mí?

PILATO: ¿Acaso soy yo judío? Tu gente y los sumos sacerdotes te han entregado a mí, ¿qué has hecho?

SACERDOTE: Mi reino no es de este mundo. Si mi reino fuera de este mundo, mi guardia habría luchado para que no ca­yera en manos de los judíos. Pero mi reino no es de aquí.

PILATO: Conque, ¿tú eres rey?

SACERDOTE: Tú lo dices: soy rey. Yo para eso he nacido y para es­to he venido al mundo, para ser testigo de la verdad. To­do el que es de la verdad escucha mi voz.

- 1 7 0 -

NARRADOR: Le preguntaron muchas cosas más, pero no dijo nada. Le llamaron mentiroso y truhán. Le ordenaron que no hi­ciera tanto ruido con el corazón porque si no se lo para­rían a trastazos. Y se lo pararon. Aunque cuenta la leyen­da que no lo pararon, sino que desde entonces es:

NIÑO 6: (Sale con un corazón) Habría que introducir este rey en la baraja. Es la tarea y responsabilidad de los cristianos, porque Jesús es el rey de los que aman y sirven. Con su corona y su cruz nos salva de la ambición y de la envidia.

NARRADOR: Hoy es la fiesta de Cristo Rey. Hoy Jesús nos dice que seamos de la verdad, que seamos verdad, que ha­gamos verdad.

10. OTRA POSIBILIDAD

NARRADOR: En todos nosotros existe el deseo de tener poder, de ponernos por encima de los demás, de ser reyes y em­peradores. Todos aspiramos a tenerlo y luchamos por conquistarlo.

NIÑO 1: (Mitineando) Soy el representante de los grandes impe­rios que han existido en la historia de la humanidad: el persa, el romano, el español... que hemos tenido millo­nes de hombres bajo nuestro poder y hemos ejecutado a muchos pueblos. Hemos ejercido nuestro dominio en mi­les de kilómetros, en nuestros territorios no se ponía el sol. Hemos impuesto e impondremos nuestra cultura, nuestras costumbres, nuestra religión, unas veces por las buenas y otras con la espada, la pistola, la bomba o la publicidad.

Hemos sido, somos y seremos: «Los más poderosos».

(Se retira a un lado)

NIÑO 2: Somos los representantes de ese pequeño imperio que ha sido siempre la familia y somos esos padres y madres em­peradores en sus hogares. Hemos tenido siempre bajo nuestro dominio a los hijos, a los que con una buena rega­ñina o una buena paliza hemos impuesto nuestra volun­tad. Sin nuestro permiso no se mueve una silla en la casa,

• - 1 7 1 -

Page 87: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

ni se cae una miga al suelo sin una buena bronca. Hemos impuesto a los hijos nuestras ideas, nuestra tendencia po­lítica, la hora de volver a casa y toda nuestra forma de vida en general, porque pobrecitos ¡ellos no piensan!

Hemos sido, somos y seremos: «Los amos de la vida de nuestros hijos».

(Se retira al otro lado)

NIÑO 3: Represento el imperio contrario al anterior, el de los hijos, que aprovechándose del amor de los padres imponen su voluntad y su capricho, haciendo de la casa su imperio. Hemos tenido bajo nuestro poder a los padres porque con solo soltar unas lágrimas o coger una rabieta hace­mos todo lo que queremos. Hemos impuesto nuestros caprichos: las comidas que nos gustan, los programas de televisión que nos interesan, el desorden en toda la casa. Al fin y al cabo somos la alegría del hogar.

Hemos sido, somos y seremos: «Los reyes de la casa».

NIÑO 4: Represento a los cabecillas de grupo, a los jefes de la «panda». A los que obligan a sus amigos a pensar y so­bre todo a actuar de una manera determinada. Tenemos bajo nuestro domino a todos los miembros gracias a nuestra arrolladura personalidad y «ligamos» a todas las niñas gracias a nuestra fuerza y belleza. Dominamos to­da la clase, a veces al colegio entero. Imponemos nues­tra manera de vestir, nuestra manera de hablar, nuestra manera de divertirnos, nuestros conjuntos musicales, nuestros programas de radio y nuestro equipo de fútbol.

Hemos sido, somos y seremos: «Los mejores».

NIÑO 5: (Sermoneando) Represento a los grandes imperios reli­giosos que desde Egipto han determinado la historia hu­mana. Hemos dominado incluso a los emperadores y te­nido en nuestras manos territorios y riquezas que los hombres ofrecían a Dios y que administrábamos como representantes suyos. Hemos impuesto nuestros mitos, nuestros ritos, nuestra voluntad, nuestro concepto de bien y mal y nuestra conveniencia por ser la divina.

Hemos sido, somos y seremos: «Los elegidos de Dios».

1 7 2 -

NIÑO 6: Soy un miembro del Pueblo de Dios, de los que creen el Evangelio y queremos que su Reino se instaure entre los hombres, aunque se nos persiga por luchar por ello. En­tre nosotros los más importantes son los que no cuentan en nuestra sociedad. Queremos vivir según el Maestro, ofreciendo nuestro amor y siendo amigos de todos.

Queremos ser, vivir y realizar: «La verdad».

NARRADOR: Pero todos hemos visto a lo largo de la historia cómo un pequeño «canto rodado» ha tirado por tierra estos im­perios, pues en su misma fuerza se halla su debilidad.

CANTO 1: Yo soy vuestro «canto rodado», grandes imperios: el mal gobernante, la sequía, la recesión económica... ¡Morid para siempre! (Sube, rompe la cartulina, se sien­ta el portador de la misma y él permanece de pie cual otro imperio)

CANTO 2: Yo soy vuestro «canto rodado», padres déspotas: el hijo problema, el que se revela, el que huye de casa... ¡Morid para siempre! (Sube, rompe la cartulina, se sienta el porta­dor de la misma y él permanece de pie cual otro imperio)

CANTO 3: Yo soy vuestro «canto rodado», niños caprichosos: el tortazo a tiempo, la llegada de un hermanito... ¡Morid pa­ra siempre! (Sube y rompe la cartulina...)

CANTO 4: Yo soy vuestro «canto rodado», jefes de panda: las dis­putas, la pandilla más fuerte... ¡Morid para siempre! (Su­be y rompe la cartulina...)

CANTO 5: Yo soy vuestro «canto rodado», grandes religiones: el sectarismo, el ateísmo... ¡Morid para siempre! (Sube y rompe la cartulina...)

CANTO 6: Nosotros somos legión, padecemos en nuestra carne el dolor, la pobreza, el hambre, el abandono. Todos nos desprecian. Nadie nos hace caso, solamente contamos para Ti. ¡Haznos vivir para siempre!

VOZ EN OFF: Todo el que es de la verdad escucha mi voz, la del Rey que no es de este mundo. Los que crean en Mí no morirán para siempre.

TODOS: (Levantándose) ¡Construyamos ese Reino de Vida!

- 1 7 3 -

Page 88: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

11. COMENTARIO DIALOGADO

¿Te gusta destacar, llamar la atención, imponer tu voluntad, verte ro­deado por otros niños...?

Normalmente a todos se nos escapan mentirijillas. ¿Por qué y pa­ra qué mentimos? ¿Tú por qué lo haces, para excusarte o disculparte, o para inflarte y envalentonarte?

Jesús es el Rey de la Verdad, ¿por qué?

12. ORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL SÍMBOLO

¡Cuánto nos gusta farolear! Nos creemos los reyes de la creación. Y si para ello hay que mentir, se miente. Tenemos una lengua muy larga que habla más de la cuenta. Que estas tijeras corten todas las pala­bras vanas, inútiles y mentirosas que pronunciamos y así nos vaya­mos modelando como ese Rey de la Verdad que es Jesús y que nos hace libres. Roguemos al Señor.

- 1 7 4 -

DOMINGOS DEL TIEMPO ORDINARIO

Desde el XXV-XXXIV

CICLO C

Jesús, el maestro, nos enseña

Page 89: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VIGESIMOQUIIMTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a poner la amistad por encima del dinero.

Comentario Jesús «nos enseña» es el núcleo en que vamos a agrupar este blo­que de domingos. Lucas escribe su Evangelio como un camino que recorre Jesús de subida a Jerusalén. En esa subida Jesús va dando sus enseñanzas como respuesta a la pregunta que le hace el joven rico: ¿Qué tengo que hacer para ganar la vida eterna? (Domingo XV), y la pregunta que le hace otro: ¿Serán pocos los que se sal­ven? (Domingo XXI). Unas veces la enseñanza es directa y otras a través de las parábolas que concluyen con una enseñanza en la que Jesús nos dice cómo hemos de ser y qué hemos de hacer para salvarnos. Es lo que veremos todos estos domingos.

Material Preparar la escenificación.

Observaciones Un niño caracterizado de «maestro», entrará en la procesión y ocu­pará un lugar destacado en la celebración, dirigirá las escenifica­ciones a la vez que nos irá dando las enseñanzas. Hoy desarrolla el guión. La parábola se puede hacer con una lectura dialogada o una sen­cilla escenificación.

I " ' ' . -

- 1 7 7 -

Page 90: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Todo en la vida es importante. Jesús nos enseña a poner un orden en la importancia de las cosas. Nos dice que por encima del amor y de la amistad, nada. Que la amistad es más importante que el dinero. Nuestro saber, nuestra astucia y sagacidad las hemos de emplear en descubrir esto.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

3. CANTO

4. RITO DEL PERDÓN

— Porque con nuestra manera de ser nos hacemos enemigos y lue­go nos cuesta reconciliarnos con ellos.

— Porque cuando tenemos problemas con los demás creemos que lo mejor es demostrar lo astutos que somos vengándonos.

— Porque nos cuesta ser generosos y cariñosos sin esperar nada a cambio.

5. ORACIÓN

Te pedimos, Padre nuestro, que abras nuestros oídos, nuestra mente y nuestro corazón para escuchar lo que nos dice Jesús que quiere poner luz dentro de nosotros por medio de sus enseñanzas.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. LECTURA del Profeta Amos 8,4-7

7. CANTO

- 1 7 8 -

8. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 16,1-13

9. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Jesús nos enseña que el administrador infiel descubre que el amor y la amistad son más importantes que el di­nero. A lo largo del Evangelio nos da unas cuantas lec­ciones para que amemos, no de cualquier manera, sino como Él, al estilo de Dios.

VOZ EN OFF: «Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando».

MAESTRO: Lo cual significa que le tenemos que conocer y querer. Y para conocerle y amarle tenemos que escuchar su Pa­labra para ver lo que quiere.

VOZ EN OFF: «Amad al prójimo como a vosotros mismos».

MAESTRO: Nadie puede excusarse ni alegar ignorancia, porque na­die como uno mismo sabe con qué ganas, decisión y te­nacidad defendemos y nos entregamos a lo nuestro. De la misma manera hemos de amar a los demás.

VOZ EN OFF: «Amaos... como yo os he amado».

MAESTRO: Es el ideal y el modelo del amor, hasta la muerte. Un buen ejercicio sería preguntarnos siempre: ¿Cómo haría, cómo amaría Jesús?

VOF EN OFF: «Conocerán que sois mis discípulos en que os amáis los unos a los otros».

MAESTRO: Se trata de nuestro distintivo, nuestra insignia más her­mosa. Desde esta lección no tienen sentido las barreras ni las diferencias.

VOZ EN OFF: «Cualquier cosa que hagáis a uno de estos mis her­manos, me la hacéis a Mí».

MAESTRO: Se trata de ver en todos a Jesús. Camina a nuestro la­do: el charlatán y el sucio, el pelmazo y el matón. Hay que amarles como a Jesús.

VOZ EN OFF: «Amad a vuestros enemigos y prestad sin esperar nada».

• - 1 7 9 -

Page 91: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

MAESTRO: Si amamos a los que nos aman, hacemos lo que todo el mundo. Jesús nos pide y exige más.

VOZ EN OFF: «Tratad a los demás como queréis que ellos os tra­ten».

MAESTRO: Es el resumen de todas estas enseñanzas.

Si lo hiciésemos así nuestras relaciones serían mejores y habría más amistad entre nosotros.

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Empleas la sagacidad y la astucia para hacer malicias y maldades a los compañeros o para descubrir lo que te conviene y es mejor para ti?

De las siete lecciones, ¿cuál es la más importante para ti? ¿En qué orden las colocarías?

¿Tú tienes amigos o sabes ser amigo? Es decir, ¿tu amistad es in­teresada o desinteresada?

- 1 8 0 -

VIGESIMOSEXTO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a fijarnos en los necesitados.

Materiales Preparar la lectura dialogada del Evangelio.

Observaciones Se puede elegir cualquiera de las dos lecturas, preferentemente la primera. El niño «maestro» introduce la lectura del Evangelio, que se pue­de hacer dialogada. A continuación se les cuenta el cuento.

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

2. CANTO

B. LITURGIA DE LA PALABRA

3. LECTURA del Profeta Amos 6.1.4-7

4. CANTO

5. LECTURA de la primera carta del Apóstol San Pablo a Timoteo 6,11-16

- 1 8 1 -

Page 92: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

6. CANTO

7. ENSEÑANZA DEL «MAESTRO»

Jesús nos cuenta esta parábola para enseñarnos a los niños a tener unos ojos que miren y vean la realidad, sobre todo la de los necesita­dos. Si no tenemos ojos ahora que somos niños para mirar esa reali­dad, nuestro corazón se endurecerá y con un corazón endurecido tampoco veremos esa realidad cuando seamos mayores, como le pa­saba al rico Epulón.

8. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 16,19-31

9. CUENTO

Había una vez un hombre muy rico, muy rico.

Un buen día su chófer se despistó y dio con el coche en un barrio mísero de chabolas. El hombre rico nunca había contemplado tanta miseria. Sabía que existían esas cosas, pero nunca las había visto personalmente. Como el hombre inmensamente rico era además, co­sa muy rara, inmensamente bueno, no pudo dormir en toda la noche.

A la mañana siguiente se dijo el hombre rico y bueno:

«Tengo que solucionar el problema de aquella pobre gente».

Se le ocurrió en un primer momento comprar aquel terreno y construirles casas dignas, colegios y centros de salud. Todo ello se lo regalaría.

Era una solución, pero el hombre rico y bueno recordó de pronto el proverbio chino: «Si quieres que un hombre no pase hambre, dale un pez. Pero si quieres que jamás vuelva a pasar hambre, dale una caña y enséñale a pescar». Entonces el hombre rico y bueno tomó una determinación:

«Dejaré todas mis riquezas y me construiré una chabola en el ba­rrio mísero, así me aceptarán como uno de los suyos y me escucha­rán. Cuando me consideren uno de los suyos, les enseñaré a salir de la miseria. Serán ellos los que se liberen. Tardarán mucho más tiempo en conseguirlo, pero ya nunca volverán a ser miserables».

- 1 8 2 -

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Qué diferencias y semejanzas encuentras entre el rico del cuento y el rico Epulón?

¿Te gusta ver la realidad bonita de colorines, los escaparates, etc.? ¿Te desagrada mirar la realidad fea y sucia?

¿Qué sientes cuando ves un niño esquelético por causa del hambre?

11. PRECES

— Tú nos dijiste que los que no tienen el corazón atado al dinero ni a las riquezas son verdaderamente felices. Queremos creerte, pero nos cuesta. Por eso:

TODOS: Ayúdanos a parecemos a Ti.

— Tú nos dijiste que los que son amables con los demás son verda­deramente felices. Queremos creerte, pero nos cuesta. Por eso:

TODOS: Ayúdanos a parecemos a Ti.

— Tú nos dijiste que los que trabajan para que seamos cada día más hermanos y los que comparten lo que tienen, son verdaderamen­te felices. Queremos creerte, pero nos cuesta. Por eso:

TODOS: Ayúdanos a parecemos a Ti.

— Tú nos dijiste que los que se preocupan de veras cuando alguien sufre son verdaderamente felices. Queremos creerte, pero nos cuesta. Por eso:

TODOS: Ayúdanos a parecemos a Ti.

— Tú nos dijiste que los que ayudan a los demás y se olvidan de sí mismos son verdaderamente felices. Queremos creerte, pero nos cuesta. Por eso:

TODOS: Ayúdanos a parecemos a Ti.

— Tú nos dijiste que los que tienen un corazón noble y honrado son verdaderamente felices. Queremos creerte, pero nos cuesta. Por eso:

TODOS: Ayúdanos a parecemos a Ti.

- 1 8 3 -

Page 93: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

— Tú nos dijiste que los que trabajan para construir la paz a su alre­dedor y en todo el mundo son verdaderamente felices. Queremos creerte, pero nos cuesta. Por eso:

TODOS: Ayúdanos a parecemos a Ti.

— Tú nos dijiste que los que son perseguidos por construir fraterni­dad y por ser solidarios con los más pobres son verdaderamente felices. Queremos creerte, pero nos cuesta. Por eso:

TODOS: Ayúdanos a parecemos a Ti.

SACERDOTE: Padre nuestro, queremos ser solidarios en un mundo donde la mayoría de los hombres, mujeres y niños, son pobres. Aunque nos cuesta, te ofrecemos el pan y el vino de nuestra comida en prenda de nuestros deseos de austeridad solidaria.

- 1 8 4 -

VIGESIMOSEPTIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a pedir la fe con fe.

Comentario A partir de hoy durante cuatro domingos, Jesús con motivo de la oración nos da unas enseñanzas sobre la misma y cómo hemos de ser en nuestras relaciones con Dios y con los demás.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones Se puede leer cualquiera de las dos lecturas. Se colocarán tres reclinatorios de cara al presbiterio donde orarán tres niños. Al hacerlo de espaldas a los demás niños no necesitarán aprender los textos de memoria, sino leerlos con gracia. Cada uno los puede abreviar a su gusto, pues son muy largos. El niño «maestro» dirigirá la escenificación.

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

2. CANTO

• - 1 8 5

Page 94: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

B. LITURGIA DE LA PALABRA

3. LECTURA del Profeta Habacuc 1,2-3; 2, 2-4

4. CANTO

5. LECTURA de la segunda carta del Apóstol San Pablo a Timoteo 1,

6-8.13-14

6. CANTO

7. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 17,5-10

8. ESCENIFICACIÓN

MAESTRO: Nuestras relaciones con los demás y con Dios están muy unidas. Según nos relacionamos con los demás nos relacionamos con Dios, y según oramos y nos relaciona­mos con Dios nos relacionamos con los demás. Vamos a verlo con unas oraciones. Hay muchos niños incoheren­tes e incongruentes que oran así:

INCOHERENTE 1: Te pido de todo corazón que no se mueran las personas. Que Jesús juegue conmigo. Que nazcamos grandes. Que se pueda subir al cielo como los ángeles. Que poniendo una manzana, se hicieran los deberes di­ciendo: «Manzanita, hazme los deberes».

INCOHERENTE 2: Señor te pido que no me sueltes y me lleves de tu mano, que tengo tacones y me caigo. Y si no lo en­tiendes te lo diré mejor: los tacones son cada cuerno del diablo en cada pierna, y si me sueltas y me dejas con el diablo me caigo.

INCOHERENTE 3: Que por el día salgan las estrellas y la luna, y el sol por las noches. Que cuando sea viejo vuelva a nacer. Que los pájaros sean buenos y me dejen cogerlos. Que conozca un hombre de mil años. O sea: que toda la gen­te fuese buena y agradable.

- 1 8 6 -

MAESTRO: Los hay que son muy exigentes con los papas, con los demás y con Dios:

EXIGENTE 1: Por favor, te pido de corazón que ningún niño muera de hambre. Y por favor, salva y que engorden los albañi-les y todos.

EXIGENTE 2: Pues cuando sea mayor me haces alta y no baja que se rían todos de mí. Antes quería ser monja, pero ahora azafata. Por eso te pido ser alta y no baja.

EXIGENTE 3: Y me tienes que premiar. Dicen que Tú premias a los buenos. Yo no soy bueno pero tengo principios. Pero no he notado ningún premio que me hayas dado. Además puede que sea travieso, pero soy educado y a veces bueno.

MAESTRO: Los hay que tienen miedo:

MIEDOSO 1: Tú, que eres invencible y triunfas siempre de todos y matas a quien quieres. Y tú dices: «¡Moriros!», y nos mo­rimos. Tú, que matas a los malos, ayúdame en los exá­menes y que sea el primero este mes en clase.

MIEDOSO 2: Y te pido por favor que no me lleves al infierno. Y que me lleves al cielo. Por favor, ¡a las llamas no! Y si voy al infierno, acuérdate de mí, pero si voy al cielo mejor. Y si voy al purgatorio, saldré pronto para no quemarme con las llamas.

MIEDOSO 3: Querido Dios: Te voy a pedir cosas importantes para mí. Yo todavía soy muy pequeño para morirme, pero to­do podía ser. Quiero que cuando me muera y vaya a las puertas del cielo me juzgues bien. Pues si yo he sido bueno en la tierra tengo derecho a entrar en el cielo. Quiero que lo tengas en cuenta y no se te olvide. Yo tra­taré de ser bueno. Pero es que si a mí se me olvida no me recibirás bien y me mandarás abajo. Pero si se me ol­vida ser bueno, ya me repondré, aunque sea al final de mi vida, y por lo menos iré al Purgatorio. Por eso te pido que no se te olvide.

MAESTRO: Otros se lo toman todo a broma y a risa:

JOCOSO 1: ¡Hola, amiguito de los niños! Me lo paso de rechupete comiendo plátanos. ¿Quieres un poco? Cuando oigo en

- 1 8 7 -

Page 95: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

la televisión que hay guerras, me figuro que habrá niños queriendo comer un plátano como este. No me gusta tanta cosa mala. Y tengo dos canarios.

JOCOSO 2: Dios, te echo cañonazos de amor.

JOCOSO 3: Yo digo que Adán y Eva fueron unos cochinos. Por su culpa estoy suspenso este mes. ¡Ay de mí! ¿Qué será cuando crezca? ¿Seré barrendero, cirujano o torero? ¿Cómo seré yo? Gracias por no haberme matado ya y por la comida, el tocino, la morcilla y el gazpacho.

MAESTRO: Otros se pasan en la amistad y hasta son cariñosos:

AMIGO 1: Dios, yo te quiero mucho. Mis hermanos yo los quiero mucho. Mi papá nos quiere mucho. Yo te quiero mucho. Y mis amigos me quieren mucho. Y yo los quiero tam­bién mucho. Y a Dios le quiero mucho.

AMIGO 2: Dios, porque no haya ido a misa no habremos perdido las amistades. Tú lo puedes hacer todo y lo ves todo. Yo creo en todo eso. Tú, que eres amigo mío, ¿por qué no vienes conmigo a jugar? Tú, que puedes bajar del cielo cuando quieras, ¿por qué no vienes a que te vea?

AMIGO 3: ¡Hola, Niño Dios! ¿Que te parece si vamos a dar un pa­seo? Bien, pues venga, ¡vamos! Al parque que allí hace mucho rico sol. Mira qué pajarito más bonito, ¿verdad? Mira, vamonos a sentar en ese banco porque hace mu­cho calor. Bueno, pues ya es muy tarde, y a estas horas todos están merendando en sus casas y viendo la tele que echan dibujos animados. Así que vamos a ver la te­le. Así que, adiós. Se despide de Ti un buen amigo tuyo. ¡Ah se me olvidaba! Perdóname los pecados, porque tengo muchos.

MAESTRO: Finalmente están los que saben relacionarse de cora­zón a corazón con profundidad, sinceridad y confianza:

CONFIADO 1: Sabes que mi padre siempre estaba alegre sentado en su sillón favorito mientras fumaba la pipa y veía la te­levisión y jugaba con Andresito y conmigo. Pero hace unos meses no está alegre. Mi madre murió. Cuando vie­ne del trabajo está triste y decaído. Ya no se sienta en su sillón favorito, ni fuma su pipa. Y no hace caso de la tele-

1 8 8 -

visión. Tú, que eres bueno, podrás hacerle igual que an­tes en su sillón y con su pipa y poniéndose las babuchas y jugando con Andresito, siempre tan contento. ¿Lo ha­rás? Confío que sí, porque eres bueno.

CONFIADO 2: Hola, ¿qué tal? Una vez más, me siento defraudada y todo lo veo negro. Es uno de esos momentos en que necesito desahogarme y sólo te he encontrado a Ti pa­ra ello. Los demás están muy preocupados por vivir su vida. Hoy he comprendido algo terrible. Hoy he visto por primera vez en mi vida que sí, que existe pobreza para muchos, y miseria, y hambre, y discriminación. Bien sabes que grité pero no me hicieron caso. No quieren hablar de esas cosas desagradables. Sus pa­dres son muy ricos y tienen su vida solucionada. ¿Por qué hay miseria, pobreza y discriminación? ¿Por qué hay niños rebuscando comida en los cubos de la basu­ra? He deseado ser muy pequeña para no darme cuen­ta de esta podedumbre.

CONFIADO 3: Señor, creo en Ti. La prueba es que te rezo. Pero ves bien que vivo como si no creyera. Tal vez tenga yo un poco de culpa en ello. Pero lo que más me ha aleja­do de Ti es ver que quienes me aconsejan un camino en la práctica de una virtud o la frecuencia de un con­tacto contigo eran, precisamente, quienes hacían lo contrario. Yo a eso lo llamo hipocresía. Por eso, si no he de cumplir más que de labios para afuera, prefiero no cumplir. Dirás, Señor, que soy un poco niño, pero me considero lo suficientemente mayor como para ver fari­seos, hipócritas, muchos hipócritas a mi alrededor. Y antes de ser como ellos prefiero mi actitud de no practi­cante e indiferencia. Con ella te haré sufrir, Señor. No lo dudo. Y a pesar de ello, pienso que Tú tienes que apro­bar mi sinceridad más que la hipocresía de ellos. Antes te temía. Ahora ni eso. A veces siento pena al encon­trarme sin ganas de cambiar. Temerte no te temo. El te­mor es absurdo y triste. Lo hermoso es amar, amar mu­cho, amar a todos, amar siempre.

- 1 8 9 -

Page 96: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

9. COMENTARIO DIALOGADO

¿A qué grupo de esos seis perteneces tú? De esos seis rasgos, ¿cuál es el que más acentuado tienes tú? ¿Te manifiestas así en todas oca­siones y con todos? ¿O con unos de una manera y con otros de otra?

¿Solamente rezas para pedirle cosas a Dios? ¿Sabes expresarte tú y pedir por ti y por los demás en la oración?

- 1 9 0 -

VIGESIMOCTAVO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a decir«

Materiales Preparar la escenificación

Observaciones La escenificación es muy el lugar destacado donde sus lecciones.

gracias»

sencilla,

y ser agradecidos.

pues basta que se desarrolle en se encuentra el niño «maestro» que dará

I

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Cuántas cosas hacen por nosotros nuestros padres y profesores por­que nos quieren y es su deber. Y como nos parece que es lo normal ni se nos ocurre darles las gracias.

Por eso, cuántas veces oímos la misma queja: «Nadie me agrade­ce lo que hago». Expresión de desencanto y frustración que hace perder la ilusión en el trabajo. Y lo que debiera ser fuente de comuni­cación es fuente de incomprensión.

En la vida de cada día nos cuesta hacer este gesto tan sencillo y humano como es el agradecer lo que otros hacen por nosotros. Por eso tampoco sabemos agradecer y «darle gracias a Dios» por lo que hace por nosotros. Sólo sabemos pedirle cosas. Es a lo que venimos a la Eucaristía y lo que vamos a reflexionar este domingo.

- 1 9 1 -

Page 97: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

3. CANTO

4. PERDÓN

— Por lo exigente que somos con los demás cuando queremos algo. — Por lo egoístas que somos cuando se trata de dar algo. — Por lo poco que sabemos agradecer lo que hacen por nosotros.

5. ORACIÓN

Padre nuestro, necesitamos que Tú nos acompañes en cada momen­to del día para que no dejemos nunca de hacer el bien. Por eso te pe­dimos que nos ayudes a acordarnos de Ti y a darte gracias.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. LECTURA del segundo libro de los Reyes 5,14-17

7. CANTO

8. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 17,11-19

9. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Todos estamos afectados o infectados por alguna le­pra, y aunque parecemos normales, jugamos al fútbol, los papas nos quieren, casi todos tenemos metida la le­pra de la envidia, del compararnos con los otros, de po­nernos por encima de los demás.

(Salen diez niños del lado opuesto donde se encuentra el niño «maestro»)

NIÑOS: ¡Anda la Osa! Si allí está el «maestro», vamos a ver qué nos enseña hoy.

- 1 9 2 -

NARRADOR: Cuando llegaron, los que se consideran listorros, los empollones, le dijeron:

LISTOS: «Sabemos mucho pero no somos felices».

MAESTRO: Marchad y buscad a la gente, hablad con ella como si fuerais iguales a ellos.

NARRADOR: En la convivencia con los demás aprendieron que no hay ni superiores ni inferiores, que no hay que mirar por encima del hombro ni despreciar a nadie.

Los considerados inteligentes le dijeron:

INTELIGENTES: «Somos inteligentes pero estamos solos».

MAESTRO: Id, respetad y comprended a todos. Entenderos entre vosotros y con los demás.

NARRADOR: Se acercaron a todos y abriéndose a los demás aprendieron a sonreír.

La gran masa de los vulgares también se dirigió al «maes­tro» y le dijeron:

VULGARES: «Somos del montón y queremos ser distintos».

NARRADOR: Al «maestro» son los que más le preocupan e inquietan.

MAESTRO: Por no ser ni fríos ni calientes... Por ser «ni chicha ni lí-moná»... Tenéis el derecho y el deber de ser de manera distinta. Trabajad por superaros.

NARRADOR: En el esfuerzo y con sudor descubrieron su verdadera satisfacción.

Un grupo que nos sirve de hazmerreír y que marginamos también se dirigió al «maestro»:

TORPES: «Somos el pelotón de los tontos y no queremos serlo».

NARRADOR: El «maestro» con sonrisa limpia los consoló:

MAESTRO: Intentad aprender. Aunque no podáis estudiar tanto co­mo otros, intentad por todos los medios ser como ellos.

NARRADOR: Aprendieron a valorarse a sí mismo y a apreciar aque­llo que les empequeñecía ante los demás.

Y mientras iban recorriendo el camino de la vida, todos fueron encontrando la verdadera felicidad. (Se van por donde han venido)

- 1 9 3 -

Page 98: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

El grupo de los torpes al verse valorado y apreciado co­mo los demás, volvió a dar gracias al «maestro» (Dos vuelven), mientras los otros, creyéndose los artífices de su felicidad, se les mofaban de nuevo:

NIÑOS: «¡Nosotros, nosotros lo hemos conseguido!».

NARRADOR: Los torpes se postraron ante el «maestro» y le daban gracias:

TORPES: «Muchas gracias, eres y serás nuestro Maestro».

NARRADOR: En lo profundo de su corazón experimentaron la con­fianza en sí mismos y encontraron una gran luz para sus vidas.

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Te crees el centro, el ombligo de todo y de todos?

¿Eres de los que se infravaloran o de los que se sobrevaloran? ¿En qué cosas te ves por encima de los demás y en cuáles por debajo?

¿Eres exigente o agradecido? Cuando dices «gracias», ¿es por educación o porque te sale del corazón?

- 1 9 4 -

VIGESIMONOVENO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a orar sin desanimarse.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones La escenografía será como la de hace dos domingos, pero en lu­gar de tres reclinatorios habrá dos. Dos niños escenificarán lo mejor posible lo que el niño «maestro» les introducirá como lec­ciones que les imparte.

i

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

2. CANTO

B. LITURGIA DE LA PALABRA

3. LECTURA del libro del Éxodo 17,8-13

4. CANTO

5. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 18,1-8

• - 1 9 5

Page 99: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

6. ESCENIFICACIÓN

MAESTRO: Cuando oramos debemos hacerlo dejando un poco de lado las ocupaciones y preocupaciones de cada día, dis­trayéndonos lo menos posible:

NIÑO 1: (Hace mímica mirando a las nubes alternativamente a iz­quierda y derecha)

MAESTRO: Y centrándonos con atención e intención en lo que ha­cemos.

NIÑO 2: (Hace mímica con una postura de recogimiento)

MAESTRO: La oración no puede ser el lugar donde descarguemos la agresividad acumulada o el odio que sentimos hacia los que nos caen mal:

NIÑO 1: ... Y que a mi vecino le salga una úlcera de estómago y se rompa la crisma. ¡Amén, amén y amén!

MAESTRO: Si no un encuentro amoroso con Dios que nos lleve a la reconciliación con los hermanos:

NIÑO 2: Padre, perdónanos porque la mayoría de las veces no sabemos lo que hacemos.

MAESTRO: Tampoco es ir a negociar con Dios como lo hacemos cuando vamos al mercado:

NIÑO 1: Tú haces que me toque la primitiva o los ciegos y yo me comprometo a ayudar en Caritas, ¿vale?

MAESTRO: Sino ponernos en sus manos esperando todo en la vida de Él:

NIÑO 2: ... Que no nos afanemos por el vestido, la comida o la bebida. Que busquemos, Señor, tu Reino y su justicia y danos lo demás por añadidura.

MAESTRO: No sólo se trata de no negociar, tampoco hay que co­accionar a Dios:

NIÑO 1: Y si no me das lo que te he pedido dejo de venir a misa y me hago ateo. ¡Palabra!

MAESTRO: Si no sabiendo que Él nos conoce y nos concede lo que necesitamos:

- 1 9 6 -

NIÑ0 2: ... Y ya que no permites que ni un solo pelo de nuestra cabeza caiga sin tu voluntad, concédenos a nosotros, hombres de poca fe, lo que...

MAESTRO: En la oración aceptamos lo que somos, lo bueno y extra­ordinario que tenemos, junto con nuestras limitaciones:

NIÑO 1: Quiero ser perfecto, genial, el mejor, el más simpático y el más inteligente.

MAESTRO: Porque es la forma de no hacer esfuerzos inútiles y va­nos, y ponernos en sus manos:

NIÑO 2: El Señor me lo dio, el Señor me lo quitó. Bendito sea su santo nombre.

MAESTRO: Es inútil que en la oración intentemos convencer a Dios con nuestros argumentos y razonamientos:

NIÑO 1: Ten en cuenta que en la actual coyuntura socio-religiosa de ateísmo e indiferencia te conviene invertir en peticio­nes como la mía, porque...

MAESTRO: Lo que Dios nos pide es nuestra entrega y generosidad incondicionales:

NIÑO2: Padre, si es posible pase de nosotros... pero no se haga lo que nosotros queremos, sino tu voluntad.

MAESTRO: No es necesario que en la oración anotemos y llevemos la contabilidad:

NIÑO 1: Y en lo que va de semana te llevo rezados veinticinco Padrenuestros, treinta y tres Avemarias y quince oracio­nes varias, lo que suma un total de...

MAESTRO: Sino que en nuestra vida todo se convierta en oración:

NIÑO 2: Padre, Tú que ves en lo escondido y conoces las cosas de las que tenemos necesidad, antes de que te las pidamos...

MAESTRO: Lo que de ninguna manera admite Dios es nuestra au­tosuficiencia y orgullo:

NIÑO 1: ¡Oh Dios! Gracias porque no soy como los demás: egoís­ta, envidioso, desobediente... Cumplo con mis obligacio­nes y hago los deberes. Incluso doy limosna a los po­bres.

- 1 9 7 -

Page 100: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

MAESTRO: Pero acoge la oración hecha con sencillez:

NIÑO 2: ¡Oh Señor! Ten compasión de mí que soy un gran pecador.

MAESTRO: La hemos de hacer convencidos de que siempre nos escucha:

NIÑO 1: ¡Eh, eh, eh, Señor de los cielos! ¿Estás ahí?

MAESTRO: Porque Dios siempre está pendiente de nosotros:

NIÑO 2: No temas, tu plegaria ha sido escuchada y has hallado gracia delante de Dios.

MAESTRO: Y finalmente como hemos escuchado en el Evangelio de hoy, siendo constantes y perseverantes.

NIÑO 2: ¿Pero vas a perder justamente al justo con el malvado? Lejos de Ti obrar así. Si se hallaran cincuenta justos, ¿no perdonarías a todos?

NIÑO 1: Si de los cincuenta faltaran cinco, ¿destruirías a todos?

NIÑO 2: ¿Y si se hallaran cuarenta?

NIÑO 1: No te incomodes todavía, ¿y si se hallaran treinta justos?

NIÑO 2: Señor, ya que comenzamos a hablar, ¿y si se hallasen veinte?

NIÑO 1: No te incomodes todavía, ¿y si se hallasen diez?

VOZ EN OFF: Bueno, bueno. No regateéis tanto. Yo ya os he salva­do a todos por uno solo. Seguidle siempre a Él. No mi­réis nunca atrás ni os detengáis en ninguna parte. Así os salvaréis a vosotros mismos.

7. COMENTARIO DIALOGADO

¿Distingues al menos un poco la diferencia entre rezar y orar? ¿En qué?

¿Qué es lo que más haces tú, orar o rezar? ¿Lo haces frecuente­mente, insistentemente?

¿Le pides muchas cosas a Dios? ¿Le pides para ti o para los de­más?

- 1 9 8 -

TRIGÉSIMO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a reconocernos como somos.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones La misma escenografía que el domingo anterior, pero de nuevo con tres reclinatorios. Hoy el niño «maestro» concluye las oracio­nes con una enseñanza.

i

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Para muchos cristianos resulta muy fácil recitar oraciones que no comprometen y además consuelan porque nos dan la sensación de estar cerca de Dios y amarle. Pero ponerse ante Dios con humildad y sencillez, como ante un espejo, para ver lo que realmente somos, nos cuesta.

Delante de Él tenemos que ser humildes y auténticos. Tenemos que reconocer nuestros pecados y nuestros límites, pero también darle gracias por nuestras cualidades y cosas buenas; eso sí, sin creer­nos superiores a los demás y sin menospreciarlos como hizo el fari­seo de la parábola.

Si somos auténticos ante Dios, Él nos ayudará a amarnos, aunque seamos pecadores, y nos ayudará a amar y apreciar a los demás.

• - 1 9 9 -

Page 101: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

3. CANTO

4. ORACIÓN

Señor, Tú no te dejas engañar por los vestidos de los escribas ni los billetes de los ricos. Detestas la oración del orgulloso y la limosna del autosuficiente. Pero acoges y admiras la ofrenda de la viuda, la gene­rosidad del samaritano, la oración del publicano, el vaso de agua da­do por amor. Danos un corazón sencillo y transparente para que po­damos actuar siempre con un amor responsable y solidario.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del libro del Eclesiástico 35,15-17.20-22

6. CANTO

7. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 18,9-14

8. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Las expresiones «gracias a Dios» o «a Dios gracias» son frecuentes en nuestra manera de hablar. Pero con­viene que veamos cómo damos gracias a Dios, no vaya a ser que a Dios le haga muy poca gracia. Así muchas veces damos gracias como el fariseo:

NIÑO 1: Te doy gracias porque no soy como los demás: ladrón, injusto, adúltero...

NIÑO 2: Ahora me va muy bien en el «colé». Gracias a Dios me aprobaron. Al fin se reconoce mis méritos.

NIÑO 3: A Dios gracias, también me va bien en casa. Para Reyes la bicicleta.

NARRADOR: Cuando debiéramos dar gracias como Jesús:

- 2 0 0 -

MAESTRO: Te doy gracias, Señor, porque has escondido estas co­sas a los sabios y entendidos y se las has revelado a los sencillos.

NARRADOR: Otras veces damos gracias a Dios por la suerte en que hoy día ponemos nuestras esperanzas:

NIÑO 1: Cuando recuerdo el cacharrazo que me di en la cabeza, tengo que dar gracias a Dios por poderlo contar.

NIÑO 2: ¡Por fin! Gracias a Dios se casa mi hermana; ya la veía­mos soltera para toda la vida.

NIÑO 3: Gracias a Dios que no se ha enterado mi padre, si no ¡adiós a la bici!

NARRADOR: Cuando debiéramos darle gracias por la suerte de te­ner a Jesús como Señor:

MAESTRO: Continuamente doy gracias a Dios por vosotros, por el favor que os ha concedido mediante el Mesías, Jesús, pues por su medio os ha hecho ricos en todo.

NARRADOR: En fin, damos gracias a Dios porque creemos que lo que nos sucede es siempre por su voluntad:

NIÑO 1: Gracias a Dios, por los pelos no me pilló el «profe» en el examen.

NIÑO 2: ¡Gracias Dios mío! Tendrás el cirio que te prometí si me aprobaban.

NIÑO 3: ¡Qué suerte! Gracias a Dios nos ha tocado la lotería. Ya era hora de que pudiéramos ir de veraneo a la costa.

NARRADOR: Cuando debiéramos darlas porque estamos siempre disponibles para hacer su voluntad.

MAESTRO: ¡Qué agradecido estoy al que me dio fuerzas, al Mesías Jesús, Señor nuestro, por la confianza que tuvo en mí al designarme para su servicio!

NARRADOR: Demos siempre gracias a Dios por todo lo que en nuestra vida lleva la señal de Dios: vida, amistad, alegría, bienestar..., pero no atribuyamos a Dios y su voluntad lo que son nuestras trampas y trapícheos. Por ellas como el publicano digamos:

MAESTRO: ¡Ten compasión de este pecador!

• - 201 -

Page 102: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

9. COMENTARIO DIALOGADO

¿Por qué le sueles dar gracias a Dios? ¿Empleas la fórmula «gracias a Dios» o «a Dios gracias»? Si la empleas, ¿la dices como suerte de que te has librado de algo o con sincero agradecimiento?

¿En cuál de los dos personajes de la parábola te sientes mejor re­tratado?

¿Sabes verte tal como eres y reconocer tus fallos?

¿Que te caiga mejor el publicano significa que no tienes ningún rasgo del fariseo? ¿Sabrías ver y decir alguno?

- 2 0 2 -

TRIGESIMOPRIMER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a compartir los bienes.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones Se puede elegir cualquiera de las dos lecturas, la que a cada uno le resulte más fácil de unir con la acción del «maestro». La escenificación se hace lo más sencilla posible. Hoy el «maestro» no enseña nada, ejecuta una acción simbólica. Cuando todos están sentados, antes de la Liturgia de la Palabra, se dirige a los niños e intercaladamente a unos les hace los peores gestos que pueda, los insulta y les dice malas palabras, y a los otros buenos gestos, saludos cariñosos, bonitas palabras. Queremos destacar que en el encuentro con los demás lo positivo nos hace sentir y reaccionar bien, y lo negativo encerrarnos en no­sotros mismos y en nuestras posturas.

i

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

La participación en la Eucaristía de hoy es una invitación a acercar­nos a los demás, recordando el encuentro de Jesús con Zaqueo. Je­sús pasa. ¡Jesús siempre pasa por nuestras vidas! Quizá como a Za­queo nos falta talla, estatura para poder ver todo lo que no sea ganancia fácil. Somos los Zaqueos que no nos preocupamos de na-

- 2 0 3 -

Page 103: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

die, ni de nada, aprovechándonos de todos y de todo, traicionando nuestros propios principios y valores cristianos.

Jesús hoy va a pasar de nuevo invitándonos a acercarnos, a no pasar de largo por y en la vida de los demás. Él espera nuestra res­puesta.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

3. CANTO

4. RITO DEL PERDÓN

— Se invita a los niños a tomar en las manos cualquier objeto que porten sobre ellos mismos.

— Lo miramos atentamente y dialogamos con él: ¿Qué me dice? ¿Para qué me sirve? ¿Cómo mueve mi vida? ¿Lo utilizo para servir a los demás?...

— Se lo paso al de mi derecha sintiéndome perdonado por su mala utilización, por mi egoísmo...

— Recibo el de mi izquierda, otorgando mi acogida y perdón.

TODOS: Señor, ten piedad...

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. ACCIÓN DEL «MAESTRO»

6. LECTURA del libro de la Sabiduría 11,23-12,2

7. CANTO

8. LECTURA de la segunda carta del Apóstol Pablo a los Tesaloni-censes 1,11-2,2

9. CANTO

- 2 0 4 -

10. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 19,1-10

11. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Había una vez un zapatero de pueblo, que un día mientras oraba recibió una buena noticia de parte de un personaje misterioso.

VOZ EN OFF: «Juan, tu vida es agradable a Dios. Te anuncio que el Señor Jesús te visitará».

NARRADOR: El zapatero empezó a barrer y ordenar la tienda, hizo algo más de comida que de costumbre, se vistió su me­jor jersey. De repente entró en la tienda una mujer que te­nía pésima fama en el pueblo. (Enfra /a mujer) Mientras hablaba con ella pensaba:

JUAN: ¡Ay de mí si viene Jesús en este momento y me halla ha­blando con esta mujer! No podré recibirlo como es debido.

NARRADOR: Sin embargo, no le dio prisa para que se marchara. Cuando se quedó solo no cesaba de preguntarse:

JUAN: ¿Cómo debe ser Jesús?

NARRADOR: Mientras pensaba esto, no se dio cuenta de que habí­an entrado unos nuevos visitantes:

POBRE: ¡Buenos días, Juan!

JUAN: ¡Ay, qué susto! Pensaba que era... otra persona. Veo que traes a tu pequeño. Está flaco este chico. Toma una manzana, chaval.

NIÑO: Gracias, señor Juan. Mamá, mira, ¡una manzana!

NARRADOR: Aquel día la madre y el niño salieron de casa de Juan con un par de zapatos cada uno. Él se quedó en la tien­da anhelando la anunciada visita. Pero la visita de Cristo parecía imposible, pues de nuevo se abrió la puerta con estruendo y apareció un hombre lleno de vino.

BORRACHO: ¿No tienes un vaso de aguardiente? Hace tantos días que sólo bebo vino, que ahora tengo sed de agua... ar­diente.

JUAN: Ven, siéntate. Lo que sí tengo es una jarra de agua fresca y comida que nos vamos a repartir. ¡Hala, entra!

- 2 0 5 -

Page 104: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

NARRADOR: El zapatero compartió la comida, hablaron y rieron un buen rato. El borracho salió con ganas de tomarse la vi­da con más valor.

Juan no tuvo más visitas aquel día y en la plegaria ves­pertina se quejaba apesadumbrado:

JUAN: Señor, ¿cómo es que no has venido? Yo te esperaba...

VOZ EN OFF: «Juan, te he visitado cada vez que alguien ha llamado a tu puerta».

12. COMENTARIO DIALOGADO

¿Cómo te has sentido ante lo que el «maestro» te ha hecho o dicho? ¿Qué enseñanza has recibido?

El encuentro con otras personas, ¿nos supone un encuentro con Cristo? ¿Vemos en ellas a Jesús?

El encuentro de cada domingo en la Eucaristía, ¿nos cambia y transforma, y nos hace descubrir la alegría de dar, compartir, convivir, o continuamos dominados por otros afanes e intereses?

C. LITURGIA EUCARÍSTICA

13. RITO DE LA PAZ

Reconciliados nos damos con un sencillo gesto o un sencillo mensaje la paz, a la vez que nos devolvemos los objetos entregados en el rito del perdón.

- 2 0 6 -

TRICESIMOSECUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a vivir y ser felices.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones El niño «maestro» hoy da su lección como introducción a nificación, que será una presentación de los personajes.

la esce-

T

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Hoy se dan demasiadas muertes evitables. Hambre, injusticia, guerra y terrorismo acaban en cada momento con miles de personas. La Pa­labra de Dios nos habla de la vida en plenitud, de la resurrección. En consonancia con todo ello, nuestro cristianismo no puede ser una fe para «bien morir», sino para vivir y ser felices. Nuestro aprecio de este mundo y nuestra responsabilidad sobre él no deben verse disminui­dos por nuestra fe en un más allá.

Nuestro Dios es Dios de vida y de vivos. Eso es lo que celebra­mos, de eso somos testigos, por esa vida queremos luchar y trabajar en la seguridad de que aunque la perdamos aquí, la volveremos a en­contrar para siempre junto al Padre.

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

- 2 0 7 -

Page 105: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

3. CANTO

4. ORACIÓN

Esta mañana, Padre, queremos reconocer lo ignorantes que somos cuando queremos decir más de lo que sabemos. Por eso te pedimos que Tú nos ilumines para poder escuchar tu palabra y no inventarnos nosotros las cosas inútilmente.

B. LITURGIA DE LA PALABRA

5. LECTURA del segundo libro de los Macabeos 7,1-2.9-14

6. CANTO

7. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 20,27-38

8. ESCENIFICACIÓN

MAESTRO: Jesús nos enseña que Dios es Dios de vivos, y nos quiere vivos y felices siempre. Lo difícil es encontrar lo que nos puede hacer felices. Jesús nos enseña que hacer la voluntad de Dios es el camino de la felicidad. Y la vo­luntad de Dios es que hagamos siempre el bien en las pe­queñas cosas de cada día, haciéndolas bien. Veamos có­mo son felices los miembros de esta familia. (Sale niño)

FELISÍN: Yo soy Felisín y soy un chico feliz. A los nueve años, di­réis, todos los niños son felices. Pero yo soy feliz porque creo en las personas, en la vida, en mí mismo y en Dios. Mi familia me quiere, voy al colegio todos los días y jue­go con mis amigos y por la noche juego a la brisca con mi abuela. Me gustan mucho los juguetes, pero más te­ner amigos y jugar con ellos. Yo soy feliz con las perso­nas y no con las cosas.

MAESTRO: Su hermana Felicitas también es una niña feliz. (Sale niña).

- 2 0 8 -

FELICITAS: Como soy muy pequeña todo el mundo me dice Felici­tas. Yo quiero mucho a mi hermano Felisín y vamos al colegio juntos, y tengo muchas amigas, y muchos jugue­tes, y juego mucho con ellos. Yo soy feliz con mis muñe­cas y mis cosas.

MAESTRO: Los papas de Felicitas y de Felisín también son felices, son un matrimonio feliz. (Salen)

FÉLIX: Soy el papá de Felisín y Felicitas. Siempre estoy muy ocupado en mis negocios y preocupado por los míos. En mi vida he sufrido contratiempos, reveses, contrarieda­des. Me han salido mal un montón de cosas. Pero a pe­sar de todo soy feliz porque quiero mucho a mi familia, que es donde uno se siente verdaderamente feliz.

FELICIDAD: Me llamo Felicidad, pero la gente me dice Feli. Mi vida es sencilla, siempre metida en casa porque siempre ten­go cosas que hacer. La vida me ha enseñado que uno es feliz cuando ama y es difícil cuando no se ama. Por eso yo me siento muy feliz con los míos viéndoles felices y sanos.

MAESTRO: Los abuelos sí que son felices porque ellos han descu­bierto y tienen el secreto de la felicidad. (Salen)

FELICIANO: Yo soy el abuelo Feliciano. A mí ya se me han roto las esperanzas en que cuando somos jóvenes ponemos la felicidad: la belleza, el placer, la comodidad, el dinero... son juguetes que se rompen entre las manos. A mí sólo me queda una esperanza, la que no se rompe nunca: la esperanza en Dios. Eso me hace encontrar la felicidad en las cosas pequeñas: jugando al «mus» con los amigos en el bar, hablando con ellos y estando alegres. Así nos olvi­damos de los problemas de la pensión, del colesterol...

FELISA: Yo soy la abuela Felisa. Aunque cansada por los acha­ques de la vejez y del reúma también soy feliz. Y soy feliz porque he repartido la capacidad de amar que Dios me ha dado, en amar a los demás sin guardarla para amar­me a mí misma. Y aunque los nietos me marean y me ha­cen rezongar a veces, me hacen muy feliz.

- 2 0 9 -

Page 106: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

9. COMENTARIO DIALOGADO

¿Qué es lo que a ti te hace feliz: hacer gamberradas, portarte mal, reírte de los demás, cumplir con tus deberes, estar con los amigos...?

¿Buscas siempre pasártelo bien o hacer felices a los demás?

¿Sabes encontrar gusto en las pequeñas cosas de cada día aun­que te supongan esfuerzo?

- 2 1 0 -

TRICESIMOTERCER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Mensaje Jesús nos enseña a vivir despiertos y no dejarnos engañar.

Materiales Preparar la escenificación. Preparar cinco carteles con motivos alusivos a los temas de: per­sonajes, ciencia, guerra, salud, dinero, el «Hijo del Hombre».

Observaciones Se puede elegir cualquiera de las dos lecturas. La escenificación, más bien, es una mimificación. Unos niños son los que gesticulan y otros los que portan los carteles y dan voces perti­nentes. Cada uno mira cómo los coloca. Si hay gradas es fácil, los que gesticulan abajo y los otros pasan con los carteles por arriba. Hoy el niño «maestro» no entra en la procesión de entrada. Saldrá a realizar la quinta escena.

i ~

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Participar en la Eucaristía es confesar nuestra fe en el Señor Jesús y en su causa, el Reino de Dios. Poniendo nuestra vida al servicio del Reino y permaneciendo fieles alcanzaremos la vida.

No obstante, da la impresión de que muchas veces vivimos re­molcados por las normas, los acontecimientos, la rutina. La Eucaristía ha de sacarnos de esa apatía insolidaria y hacernos recobrar la ale­gría de vivir una fe activa.

- 2 1 1 -

Page 107: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

2. PROCESIÓN DE ENTRADA

3. CANTO

B. LITURGIA DE LA PALABRA

4. LECTURA del Profeta Malaquías 4,1-2

5. CANTO

6. LECTURA de la segunda carta del Apóstol San Pablo a los Tesalo-

nicenses 3,7-12

7. CANTO

8. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 21,5-19

9. ESCENIFICACIÓN PRIMERA ESCENA:

Carteles sobre los personajes famosos. Voces: Yo soy, soy yo... Gestos: Se tapan los oídos; gestos de sordera y aturdimiento.

SEGUNDA ESCENA:

Carteles sobre la ciencia, la técnica y sus consecuencias. Voces: Ya llega, ya viene... Gestos: De rechazo levantando las manos con las palmas de frente.

TERCERA ESCENA:

Carteles sobre la guerra, el terrorismo, etc. Voces: ¡Ave César! Y otros tributados a caudillos. Gestos: Se agrupan y aprietan por el miedo.

- 2 1 2 -

CUARTA ESCENA:

Carteles sobre la salud, el dinero, el placer, etc. Voces: ¡La chispa de la vida! Y otras de los anuncios. Gestos de desilusión y abatimiento.

10. CANTO: «Envuelto en sombría noche».

QUINTA ESCENA:

Cartel: «El Hijo del Hombre». Voz: Vigilad y perseverad. Gestos de alegría y exultación.

11. COMENTARIO DIALOGADO

¿Te dejas engañar, embobar, manipular... fácilmente por los eslóga-nes de la propaganda?

¿A quién haces más caso, a los que te quieren o a los que satisfa­cen tus caprichos?

De los compañeros, ¿quiénes se te imponen? ¿Por qué?

Jesús y sus palabras, ¿son la verdad que tú tienes que creer y seguir?

- 2 1 3 -

Page 108: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

SOLEMNIDAD DE CRISTO REY

Mensaje Jesús nos enseña un Reino de... gracia y misericordia.

Comentario Hoy cerramos el ciclo litúrgico con la proclamación y aclamación de Cristo como Rey del Universo.

Materiales Preparar la escenificación.

Observaciones Hoy leemos las tres lecturas. La segunda en el momento de la aclamación: «Por Cristo, con Él y en Él», que los niños repetirán varias veces alzando las manos en señal de aclamación. La leerá el niño «maestro». También destacamos hoy el momento del perdón.

T

A. RITOS INICIALES

1. MONICIÓN

Hoy terminamos el ciclo litúrgico, y lo terminamos proclamando a Je­sús, nuestro Señor, Rey del Universo. Cristo Jesús se ha hecho nues­tro Rey en la medida en que por amor a la grandeza con que Dios ha creado a todos los hombres y mujeres de este mundo, se nos ha ma­nifestado con su vida y sus enseñanzas como el auténticamente rico y poderoso en la pobreza y la humildad. Proclamemos a lo largo de la celebración a Cristo como Rey y cantemos «Hosanna al Hijo de Dios». En primer lugar invoquemos su perdón y misericordia.

- 2 1 4 -

2. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL NIÑO «MAESTRO»

3. CANTO

4. RITO DEL PERDÓN

SACERDOTE: Por nuestros juicios, críticas y condenas de los de­más.

LECTOR; Ha blasfemado. Acabáis de oír la blasfemia. ¿Qué os pa­rece?

TODOS: ¡Reo es de muerte!

SACERDOTE: Señor, ten piedad.

SACERDOTE: Por nuestras falsas y perjudiciales elecciones.

LECTOR: ¿A quién queréis que os suelte, a Barrabás o a Jesús el llamado Mesías?

TODOS: ¡A Barrabás, a Barrabás!

SACERDOTE: Cristo, ten piedad.

SACERDOTE: Por nuestras envidias, odios y venganzas.

LECTOR: ¿Qué queréis que haga con Jesús el llamado Mesías?

TODOS: ¡Crucifícale, crucifícale!

LECTOR: ¿Y qué mal ha hecho?

TODOS: ¡Crucifícale, crucifícale!

SACERDOTE: Señor, ten piedad.

5. ORACIÓN

Oh Dios, queremos ser luz en un mundo en tinieblas, paz en el mundo de odios, servidores en un mundo de jefes aparentes. Ayúdanos a ce­lebrar gozosos la salvación que Tú trajiste a este mundo y a mantener viva la esperanza de tu Reino.

- 2 1 5 -

Page 109: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

B. LITURGIA DE LA PALABRA

6. LECTURA del libro segundo de Samuel 5,1-3

7. CANTO

8. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Es una dimensión importante y muy humana los can­tos y gestos de proclamación y aclamación. Proclama­mos y aclamamos cosas y personas importantes que va­loramos. Así, aclamamos a los reyes.

REY: (Sale un niño que discursea imitando al rey) Estamos aquí la reina y yo, para conocer vuestros problemas, y en es­tos momentos emotivos...

TODOS: (Aplausos) ¡Viva el rey! ¡Viva la reina!

NARRADOR: Aclamamos también a las personas que nos preparan y nos dan lo que nos gusta.

MAMÁ: Y hoy para postre he preparado unas natillas que...

TODOS: ¡Bien por mamá, bien! ¡Bien, bien, bien, bien, bien!

NARRADOR: Aclamamos a los compañeros que se muestran gene­rosos.

COMPAÑERO: Y hoy como es mi cumpleaños, ¡piruletas para todos!

TODOS: ¡Es un muchacho excelente! (ter): Y siempre lo será (bis).

NARRADOR: También aclamamos a las personas en sus días espe­ciales.

AMIGO: Hoy cumplo xx años.

TODOS: Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, te deseamos todos...

NARRADOR: También aclamamos a nuestros deportistas favoritos y en los partidos importantes:

LOCUTOR: Raúl remata y ¡goooool!

TODOS: (Palmas) ¡España! ¡España!

NARRADOR: Aclamamos la buena salud y nuestro bienestar.

- 2 1 6 -

PRESENTADOR: ¿Cómo están ustedes?

TODOS: ¡Bien! (bis).

NARRADOR: Gritamos y aclamamos en los grupos sociales en los que convivimos.

PROFESOR: ¡Y copiaréis cien veces: «No se juega ni se grita en clase»!

TODOS: ¡La clase unida, jamás será vencida!

NARRADOR: También, cuando venimos a misa muchas veces sin darnos cuenta de lo que decimos, aclamamos a Cristo como lo hicieron los judíos.

LECTOR: Tomaron ramas de olivo y salieron a su encuentro gritando:

TODOS: (Canto) «Hosanna al Hijo de David».

NARRADOR: Pero lo que Cristo quiere sobre todo, es que además de aclamarle como Rey, construyamos su reino...

9. LECTURA del santo Evangelio según San Lucas 23,35-43

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Te gusta que te reconozcan y aclamen? ¿Qué sientes cuando se re­conoce y aclama a otros compañeros que se lo merecen menos que tú? ¿Y qué sientes cuando se reconoce y aclama a otros que se lo merecen mucho más que tú?

¿Qué te dice a ti el que Jesús muera perdonando al ladrón y a los que le matan?

C. LITURGIA EUCARÍSTICA

11. ACLAMACIÓN

12. LECTURA de la carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses 1,12-20

MAESTRO: Hermanos: Damos gracias a Dios Padre, que nos ha hecho capaces de compartir la herencia del pueblo santo en la luz. Él nos ha sacado del dominio de las tinieblas y

- 2 1 7 -

Page 110: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

nos ha trasladado al Reino de su Hijo querido, por cuya sangre hemos recibido la redención, el perdón de los pe­cados.

TODOS: (Manos alzadas) «Por Cristo, con Él y en Él, a Ti Dios Pa­dre, todo honor y gloria».

MAESTRO: Él es imagen de Dios invisible, primogénito de toda criatura; porque por medio de Él fueron creadas todas las cosas: celestes y terrestres, visibles e invisibles, Tro­nos, Dominaciones, Principados, Potestades; todo fue creado por Él y para Él.

TODOS: «Por Cristo, con Él y en Él, a Ti Dios Padre, todo honor y gloria».

MAESTRO: Él es anterior a todo y todo se mantiene en Él. Él es también la cabeza del cuerpo: de la Iglesia. Él es el prin­cipio, el primogénito de entre los muertos, y así es el pri­mero en todo.

TODOS: «Por Cristo, con Él y en Él, a Ti Dios Padre, todo honor y gloria».

NARRADOR: Porque en Él quiso Dios que residiera toda plenitud.

TODOS: «Por Cristo, con Él y en Él, a Ti Dios Padre, todo honor y gloria».

NARRADOR: Y por Él quiso reconciliar consigo todas los seres: los del cielo y los de la tierra, haciendo la paz por la sangre de su cruz.

TODOS: «Por Cristo, con Él y en Él, a Ti Dios Padre, todo honor y gloria».

- 2 1 8 -

Introducción 7

DOMINGOS DEL TIEMPO ORDINARIO

Ciclo A: Jesús viene a decirnos quién es Él y quiénes somos nosotros 9

SEGUNDO DOMINGO: Jesús es el Siervo de Yavé y el Cordero de Dios 11 TERCER DOMINGO: Jesús es la luz de las naciones 15 CUARTO DOMINGO: Somos hombres y mujeres de Bienaventuranzas 19 QUINTO DOMINGO: Somos la sal y la luz del mundo 23

Ciclo B: Jesús nos invita a seguirle 27

SEGUNDO DOMINGO: Venidy veréis 29 TERCER DOMINGO: Jesús es el Camino 35 CUARTO DOMINGO: Jesús es la Verdad 41 QUINTO DOMINGO: Jesús es la Vida 46

Ciclo C: Jesús viene a casarse con nosotros 51

SEGUNDO DOMINGO: Jesús es nuestro novio/a 53 TERCER DOMINGO: Jesús nos presenta su programa 59 CUARTO DOMINGO: Jesús nos elige 63 QUINTO DOMINGO: Jesús nos llama 66

Ciclo A: Jesús nos revela a Dios 71

VIGESIMOQUINTO DOMINGO: Dios paga a todos por igual 73 VIGESIMOSEXTO DOMINGO: Dios exige fidelidad 79

Page 111: echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 02

VIGESIMOSEPTIMO DOMINGO: Dios busca frutos 82

VIGESIMOCTAVO DOMINGO: Dios nos invita a todos 86

VIGESIMONOVENO DOMINGO: Dios es el absoluto 92

TRIGÉSIMO DOMINGO: Dios manda amar 96

TRIGESIMOPRIMER DOMINGO: Dios nos despoja 100

TRIGESIMOSEGUNDO DOMINGO: Dios es el esposo 104

TRIGESIMOTERCER DOMINGO: Dios pide cuentas 110

SOLEMNIDAD DE CRISTO REY: Dios se revela en los andrajosos 118

Ciclo B: Jesús nos cura y nos sana 125

VIGESIMOQUINTO DOMINGO: Jesús nos cura de toda clase de males 127

VIGESIMOSEXTO DOMINGO: Jesús nos cura de nuestras envidias 131

VIGESIMOSEPTIMO DOMINGO: Jesús nos cura de la dureza del corazón . 134

VIGESIMOCTAVO DOMINGO: Jesús nos cura de la ambición de riquezas.... 137

VIGESIMONOVENO DOMINGO: Jesús nos cura de la ambición de poder . 142

TRIGÉSIMO DOMINGO: Jesús nos cura de nuestras cegueras 148

TRIGESIMOPRIMER DOMINGO: Jesús nos cura de nuestros egoísmos .... 152

TRIGESIMOSEGUNDO DOMINGO: Jesús nos cura de la avaricia y las apariencias 157

TRIGESIMOTERCER DOMINGO: Jesús nos cura de nuestros miedos 163

SOLEMNIDAD DE CRISTO REY: Jesús nos cura de nuestras mentiras 168

Ciclo C: Jesús, el maestro, nos enseña 175

VIGESIMOQUINTO DOMINGO: A poner la amistad por encima del dinero . 177

VIGESIMOSEXTO DOMINGO: A fijarnos en los necesitados 181

VIGESIMOSEPTIMO DOMINGO: A pedir la fe con fe 185

VIGESIMOCTAVO DOMINGO: A decir «gracias» y ser agradecidos 191

VIGESIMONOVENO DOMINGO: A orar sin desanimarse 195

TRIGÉSIMO DOMINGO: A reconocernos como somos 199

TRIGESIMOPRIMER DOMINGO: A compartir los bienes 203

TRIGESIMOSEGUNDO DOMINGO: ¿ vivir y ser felices 207

TRIGESIMOTERCER DOMINGO: A vivir despiertos y no dejarnos engañar 211

SOLEMNIDAD DE CRISTO REY: Un Reino de... gracia y misericordia 214

- 2 2 0 -