echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 01

CELEBRAR LA EUCARISTÍA CON LOS NIÑOS/l

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CELEBRAR Y ORAR

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Colección CELEBRAR Y ORAR

ÚLTIMOS TÍTULOS PUBLICADOS

33. Símbolos y plegarías en la Tercera Edad. Emeterio Sorazu 34. Eterno amor de Madre. Santiago Alcalde/Juan Carlos Martín 35. Celebrar la Confirmación. Mario Pardos 36. ¿Qué te pasó, Jesús? José María Rueda 37. Celebraciones con disminuidos psíquicos. Juan Bautista Lunares 38. Símbolos y expresión religiosa. Emeterio Sorazu/Juan R. Larrañaga 39. Días de Madre. Luis G. Gredilla 40. Saludos vocacionales. Mario Pardos 41. El Triduo Pascual. Alvaro Ginel 42. Desde el regazo de María. Toño Fernández 43. Lecturas mañanas. José Alegre 44. Celebrar la Eucaristía con los niños/1. José Ramón Echeverría 45. Oraciones de la mañana. Ana Prieto López 46. Tiempo de vivir en esperanza. Nando García 47. Meditaciones breves en Cuaresma. Roberto Cortés 48. ... Y prepararon la Pascua/1. Isidro Lozano/José L. Rodríguez Pacheco 49. Celebraciones del Signo. José Miguel Burgui 50. ... Y prepararon la Pascua/2. Isidro Lozano/José L. Rodríguez Pacheco 51 . Un Rosario para cada día. Javier Mané Vila 52. Celebrar la Eucaristía con los niños/2. José Ramón Echeverría 53. Camino hacia la Pascua. Nando García 54. ... Y prepararon la Pascua/3. Isidro Lozano/José L. Rodríguez Pacheco 55. Meditar y orar con el Antiguo Testamento. Gianfranco Barbieri. 56. Oraciones para rezar quien no sabe. José Ma Rueda Alcántara, S.J. 57. Plegarias para iniciar el día. Isidro Lozano 58. María, Reina de los santos. Antonio González 59. Prepararla Navidad. Almudena Colorado 60. Celebraciones de la Eucaristía y de la Palabra. Isidro Lozano 61 . Celebrar los acontecimientos de la vida. Emeterio Sorazu 62. Oraciones para jóvenes. Ana Prieto/ Manuela Guzmán 63. Este Adviento y esta Navidad. Alvaro Ginel 64. Recrearla Cuaresma, la Pascua y Pentecostés. Adolfo Lucas Maqueda 65. Fiestas y plegarias de las grandes religiones. Pierre Cuperly 66. Mosaico de lecturas sobre la Virgen. Bautista Araiz 67. Recrear el Adviento, la Navidad y la Epifanía. Adolfo Lucas Maqueda 68. Venid, adoremos. Maximiliano Calvo

COLECCIÓN «CELEBRAR Y ORAR»

JOSÉ RAMÓN ECHEVERRÍA

M. SS. CC

CELEBRAR LA EUCARISTÍA

CON LOS NIÑOS/1

Adviento • Cuaresma • Pascua

EDITORIAL CCS

Quinta edición: noviembre 2004.

Página web de Editorial CCS: www.editorialccs.com

© 2000. José Ramón Echeverría, M.SS.CC. © 2000. EDITORIAL CCS, Alcalá, 166 / 28028 MADRID

Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública y transformación de esta obra sin contar con autorización de los titulares de la propiedad intelectual. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (arts. 270 y ss. del Código Penal). El Centro Español de Derechos Reprográficos (www.cedro.org) vela por el respeto de los citados derechos.

Diseño de portada: Olga R. Gambarte ISBN: 978-84-8316-343-6 Depósito legal: M-2296-2010 Fotocomposición: M&A, Becerril de la Sierra (Madrid) Imprime: Print House, marca registrada de Copiar, S.A.

A los que durante veinticinco años en un momento o en otro,

vivieron la aventura de hacerse como niños.

http://www.editorialccs.com

http://www.cedro.org

INTRODUCCIÓN

Muchas comunidades cristianas sienten la necesidad de ofrecer un espacio de celebración a los niños y niñas que están en período cate-quético. Se trata de iniciarles poco a poco en la celebración del sacramento primero y principal de los cristianos...

Hay muchos ensayos y tentativas. No nos es fácil hacer una celebración adaptada a los niños... En ocasiones lo que solemos hacer es una celebración con más preguntas y respuestas dirigidas a los niños. La participación se reduce a que se les pregunta más a los niños y niñas.

Con miedo y con un sincero deseo de poner en común mi experiencia pastoral en este campo, ofrezco la experiencia que he ido acumulando a lo largo de varios años.

En el curso 98-99, estando en la Parroquia Mare de Déu del Coll, en Barcelona, empecé a cotejar, organizar, unir, sintetizar... todos los materiales sobre las misas de niños acumulados a lo largo de veinte años de práctica pastoral en la Parroquia Virgen de Lluc, de Madrid, y a darles una unidad por ciclos A-B-C, y por tiempos, Adviento-Cuaresma-Pascua.

La experiencia fue altamente positiva porque me dio respuesta a dos interrogantes, preocupaciones o dificultades de todos esos años, siempre con la idea de que los niños sean y se sientan los protagonistas de la celebración, mediante la escucha, la actividad, la preparación y la participación, es decir, sean miembros activos y atentos. Los interrogantes eran:

1. ¿Cómo hacer para que la Palabra de Dios de cada domingo llegue a los niños tal cual está escrita?

Los intentos para responder a esta pregunta han sido muchos: no leer algunos textos de la liturgia del propio domingo por ininteligibles para los niños; cambiarlos por otros más asequibles; servirse de textos, historietas, cuentos, medios técnicos... Hoy a muchos jóvenes que vienen a casarse por la Iglesia, los textos fundamentales de la Escritura ni les suenan.

2. ¿Cómo hacer para que la Eucaristía vaya dirigida también a las personas mayores y puedan participar en ella?

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Es un hecho que, aunque hablamos de «misa con niños», la asamblea no está constituida sólo y únicamente por niños. También hay adultos, y generalmente en mayor cantidad, que quedan reducidos a meros espectadores y oyentes de lo que hacen y dicen los niños. Con la dificultad para los sacerdotes de no saber a quién dirigirse en muchas ocasiones.

A partir de esa experiencia de la unidad temática por tiempos litúrgicos, los niños eran los protagonistas, entendían bien y también me podía dirigir más fácilmente a las personas mayores. Todos se sentían más implicados en la celebración. Por eso me pareció que eran muy válidos los esquemas y decidí aplicarlo a la elaboración de los otros dos ciclos que presento conjuntamente.

En el índice quedan reflejas esas unidades temáticas tanto de tiempos como de ciclos. En cada misa también se acentúa una idea. Los guiones pueden realizarse tal como vienen, o bien se pueden adaptar. Mandan los destinatarios y el presidente de la celebración, así como de las oportunidades con que la asamblea reunida cuenta. Lo que es importante, en el diálogo comentado, es adaptar la explicación a los niños. Por eso hemos formulado unas preguntas muy sencillas y de su mundo.

Un dato a señalar: la escenificación puede ser muy sencilla y requerir muy poca preparación. Bastaría leer los textos. También pueden prepararse escenificaciones más completas, requerirá más ensayo que podrá aprovecharse incluso para hacer catequesis. Donde sea posible, es bueno implicar a algunos adultos. Por eso consideramos que la edad adecuada a la que van dirigidas es la postcomunión, de 9 a 13 o 14 años.

UNA ACLARACIÓN

En la presentación de dones hemos omitido de manera habitual la presentación del pan y del vino.

Somos conscientes de ello. Y somos conscientes de que una presentación de dones que no incluya el pan y el vino falla por completo, puesto que lo esencial en la celebración es el pan y el vino.

Presuponemos que el presidente de la celebración y el equipo litúrgico prepararán en cada momento una presentación de estas dos ofrendas esenciales. Es aquí donde dejamos abierto el espacio a la creatividad y a la concreción de cada comunidad.

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ADVIENTO

CICLO A

La Palabra de Dios se escribió para nuestra conversión

PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO

Mensaje La palabra de Dios nos instruye, es juez y arbitro.

Comentario La Palabra de Dios es la que da unidad a todo el Adviento. Hoy leemos la primera lectura del profeta Isaías y el evangelio de san Maleo. Destacamos la idea de que la Palabra de Dios nos instruye (enseña, dirige, estimula...) y cuando no la seguimos nos amonesta y juzga nuestros comportamientos. Es lo que hacen todos los educadores: padres, maestros, catequistas, sacerdotes...

Materiales Una Biblia, una vela para la corona de Adviento y los objetos para las ofrendas: reglamento, silbato, tarjetas amarillas y rojas, balanza y maza.

Observaciones

En el panel está dibujada la Biblia abierta; en la página izquierda pone Palabra de Dios, en la derecha cada domingo se escribe el mensaje correspondiente. En este primero: Es juez y arbitro. Encendemos la vela de la corona después de la oración como monición a las lecturas, ya que las frases que destacamos están sacadas de las lecturas.

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A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA

Se lleva la Biblia que presidirá la celebración, una vela de la corona de Adviento con la palabra Sabiduría, y las ofrendas. Dos niños vestidos de arbitro y juez, podrán presentar las ofrendas.

2. CANTO

3. SALUDO

Comenzamos el tiempo de Adviento, tiempo de preparación, de vigilancia, de estar ojo avizor...

Nos reunimos convocados y en torno a la Palabra de Dios que nos instruye para una misión...

4. RITO DEL PERDÓN

— La Palabra de Dios prepara los caminos del Señor. Porque no los recorremos.

— La Palabra de Dios abre caminos a la paz. Porque los cerramos con nuestras discusiones.

— La Palabra de Dios nos enseña los caminos de la justicia. Porque aprendemos más fácilmente los de la injusticia.

5. ORACIÓN

Señor, que tu Palabra sea la luz segura que nos instruya en la vida, el fuego que caliente nuestros corazones y el libro vivo que sacie las ansias de saber de nuestra mente. Por Jesucristo nuestro Señor.

6. MONICIÓN PARA ENCENDER LAS VELAS DE LA CORONA

Encendemos, Señor, esta luz, como aquel que enciende una lámpara para salir de noche al encuentro del amigo que viene. Queremos pre-

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pararnos para recibirte con alegría. Para ello queremos ser despiertos y estar vigilantes, porque Tú eres el juez y el arbitro que nos traes la luz, para que sepamos conducirnos y elegir lo bueno. Nos das la paz y la alegría si elegimos bien.

\Ven, Señor, Jesús. Ven, Señor, Jesúsl

B. LITURGIA DE LA PALABRA

7. LECTURA del profeta Isaías 11,1-10

B. CANTO

9. LECTURA del evangelio según san Mateo 24, 37-44

10. COMENTARIO DIALOGADO

¿Quiénes son las personas que nos enseñan y de las que aprendemos? ¿Qué nos suelen decir? ¿Les hacemos caso?

Cuando no les hacemos caso, ¿qué hacen? ¿Nos amonestan? ¿Nos castigan?

¿Qué nos enseña y hemos aprendido de Jesús? ¿Nos juzga o nos perdona?

¿Cuándo no nos portamos como amigos suyos?

C. LITURGIA EUCARÍSTICA

11. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

— Presentamos hoy la Biblia, la Palabra de Dios, arbitro de las naciones y y'uez de los pueblos. Tenemos que atender sus llamadas de atención, para que veamos a su luz cómo somos y cómo nos comportamos.

— Para poder jugar a cualquier juego todos nos hemos de someter a unas reglas. No podemos hacer cada uno lo que nos da la gana.

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Lo que más nos gusta a los niños ahora es «jugar». Presentamos este reglamento como expresión de que aceptamos la reglas del juego, aunque a veces las reglas nos sienten fatal.

— Muchas veces jugamos mal, hacemos trampas a los compañeros, excluimos a algunos de nuestros juegos, hacemos regates a los papas y profesores cuando nos mandan algo que no nos gusta. Y suena el «pü, pii, pii» del arbitro. Esta tarjeta amarilla que presentamos simboliza todas las llamadas de atención que hemos de aceptar cuando nos las hagan.

— A veces cometemos faltas reiteradas, o nos emperramos en nuestros caprichos y encabritamos con nuestras rabietas, malhumores, genios... El arbitro da un solo pitido y muy fuerte «piiiiiiiiiiiiii». Somos merecedores de tarjeta roja directa. Que nunca demos pie con nuestro comportamiento a que nos la saquen.

— ¡Qué difícil nos resulta ser justos y ecuánimes, tener el fiel en el punto medio como esfa balanza que presentamos! Más bien aplicamos la ley del embudo: lo ancho y bueno para mí, lo estrecho y malo para los demás. Invertir esta ley del embudo quizá sea mucho, pero acercarnos al fiel de la balanza, sí que podemos hacerlo en este Adviento.

— Visto para sentencia: Veinte años de condena de cárcel, y la maza suena ¡nmisericorde. Cuántas veces nuestra maza suena inmiseri-corde: «Me las pagarás». Que esta maza que presentamos, su ruido, nos recuerde que con Jesús ya han pasado las horas de juicio y condenas, y ha comenzado ya la hora de espabilarse, de vigilar, de estar preparados.

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SECUNDO DOMINGO DE ADVIENTO ^ ¡

Mensaje La Palabra de Dios da enseñanza y consuelo.

Comentario Ya estamos en torno a la Palabra de Dios. Hoy leemos la lectura de san Pablo que habla de la Palabra de Dios y el evangelio de san Mateo. La Palabra de Dios es fuente de paciencia, consuelo y esperanza. Tres virtudes propias del Adviento para remarcar este domingo.

Materiales Biblia y objetos para las ofrendas.

Observaciones

En la página derecha de la Biblia dibujada en el panel se escribe el mensaje de este domingo: «Da enseñanza y consuelo».

A. RITOS INICIALES


Se lleva la Palabra de Dios que preside la celebración, la vela de la corona de Adviento con la palabra Paciencia y los objetos de las ofrendas.

2. CANTO

3. ORACIÓN

Todos tenemos necesidad de cambiar porque nos cansamos y aburrimos, a veces nos ponemos tristes. Otras veces estamos contentos

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con nuestros egoísmos y caprichos. Hoy Juan Bautista nos dice que nos convirtamos, que seamos distintos. Haznos, Señor, como Tú quieres: buenos, bondadosos, pacientes, alegres... Por Jesucristo nuestro Señor.


Los profetas anunciaban la palabra de Dios para mantener encendida la esperanza de Israel. Es lo que contiene y enseña la Biblia.

Nosotros como un símbolo encendemos hoy dos velas. Que cada uno de nosotros, Señor, te abra su vida para que te encarnes en nuestro corazón y así nos des el consuelo y la alegría que mantengan nuestra esperanza.

¡Ven pronto, Señor. Ven, Salvador!


5. LECTURA de la carta a los Romanos 15, 4-9

6. CANTO

7. LECTURA del evangelio según san Mateo 3,1-12


¿Qué cosas nos enfadan, irritan, impacientan? ¿Y qué cosas nos alegran y consuelan?

¿Cómo nos sentimos cuando la gente se enfada y riñe?

¿Conocemos personas pacientes sobre todo con nosotros? ¿Por qué son tan pacientes?

Jesús nos dice que aprendamos de Él que es manso (paciente) y humilde de corazón, que vayamos a Él que encontraremos descanso y consuelo, ¿cuando te enfadas piensas sólo en ti mismo, o eres capaz de pensar que tienes que ser paciente como Jesús?

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¿Haces enfadar mucho a los papas? ¿Irritas a tus hermanitos? ¿Cabreas a los «profes» en el «colé»?



— La Palabra de Dios se escribió para nuestra enseñanza. Importa mucho que la conozcamos; aún nos la tienen que leer para que la aprendamos y explicar para que la comprendamos. Pero al presentarla hoy expresamos que queremos tener siempre abiertos los oídos para escucharla.

— Es necesario mantener y fortalecer la esperanza, nos ha dicho san Pablo. Pero la esperanza es imposible sin mucha paciencia. Nosotros no podemos estar quietos, somos rápidos, caprichosos, lo queremos todo «ya», enseguida. Que esta maceta nos recuerde que somos plantas pequeñas y delicadas, y que se crece poco a poco y con cuidado, porque los obstáculos son muchos.

— Las flores son débiles, delicadas, bonitas. Por eso ilusionan. Nuestra tarea es cultivar las flores de la paz, la bondad, el servicio, el perdón... que nos unen y nos alegran. Por eso son muy necesarias. Hemos de reconocer que también a veces somos espinas o cardos que hacen enfadar, sufrir, sangrar a los papas, a los compañeros... Esta flor nos recuerda la obligación de ser como ella, que produce siempre ilusión, alegría y consuelo.

— Cada día el periódico y la tele nos cuentan las guerras, los robos, los malos tratos, los niños que mueren de hambre en el mundo... Nosotros no hemos de querer un mundo al revés, donde los malos sean buenos y los buenos malos; sino un mundo en que todos seamos buenos, como el que Dios sueña. Al ofrecerte el periódico, nos ofrecemos también nosotros para realizar esta tarea de ser buenos ya desde ahora.

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TERCEÍDOMINCO DE ADVIENTO | ¡ ¡ |

Mensaje La Palabra de Dios anuncia una buena noticia.

Comentario La carta de Santiago nos puede servir para continuar con el mensaje sobre la paciencia del domingo anterior; pero nos centramos en la idea de la primera lectura y del evangelio. La Palabra de Dios anuncia una buena noticia a los pobres y a los que sufren: ciegos, sordos, mudos, cojos... Son muchos en nuestro mundo con todo tipo de cegueras, cojeras, sorderas...

Materiales Biblia y objetos para las ofrendas: programa de Caritas, medicinas, pañuelo, pandereta, juguetes...

Observaciones En la página derecha de la Biblia dibujada en el panel, se escribe el mensaje: Anuncia una buena noticia.

A. RITOS INICIALES


Con la Biblia que preside la celebración, la vela de la corona con la palabra Amor y las ofrendas.

2. CANTO

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3. RITO DEL PERDÓN

— Por la vida que nos regalas cada día y que nosotros no aprovechamos.

— Por las oportunidades que tenemos de celebrar nuestra fe con alegría y que nosotros no compartimos.

— Por lo difícil que nos es aprender el amor que Jesús nos enseñó.


Hoy se nos anuncia una Buena Noticia: el Señor va a llegar. Su llegada será Buena Notica para los pobres.

Preparad sus caminos porque ya se acerca. Adornad vuestra alma como una novia se pone guapa para su boda.

Al encender hoy tres velas, decimos que cada uno quiere ser antorcha para que el Señor brille y llama para que su amor nos caliente.

¡Ven Señor, Jesús, a salvarnos. Envuélvenos en tu luz y caliéntanos en tu amor!


5. LECTURA del profeta Isaías 35,1-6.10

6. CANTO



La última buena noticia que te han dado, ¿cuál ha sido? ¿Por qué fue para ti buena noticia? ¿Te sentiste contento?

¿Qué buenas noticias puedes dar a los que sufren: ciegos, cojos, sordos, mudos... para que se sientan contentos? ¿Tú tienes alguna" ceguera, cojera, sordera...?

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La Buena Noticia de Jesús es que quiere ser tu amigo, ¿te pone contento? ¿Por qué?

¿Sabes que como amigo de Jesús, ésa es la Buena Noticia que tú tienes que dar?



— ¿Está o no está el Señor entre nosotros? ¿Está Dios entre nosotros? Su palabra aquí está. Al presentarla nos ofrecemos para cumplirla, para hacer siempre lo que Él quiere: que nos amemos y seamos amigos los unos de los otros. Es la forma como Él está entre nosotros si la cumplimos.

— Presentamos estos programas y planes de Caritas. Todos podemos prolongar con nuestras manos, bocas, pies... el amor de Dios a nuestros hermanos. La llamada a hacerlo no es sólo para unos cuantos voluntarios que se entregan generosamente. Es para todos. Todos hemos de hacer visible ese amor de Dios en nuestras obras.

— Las enfermedades son de todo tipo en el cuerpo y en el alma. Cuando nos insultamos, peleamos, enfadamos... nos hacemos sufrir mucho. Nosotros queremos ser como estas medicinas que presentamos, para continuar las acciones curativas y liberadoras de Jesús, para que todos puedan seguir viéndole y oyéndole en nosotros.

— ¡Qué de cosas se pueden expresar con un pañuelo: recuerdos, despedidas, limpieza de mocos y suciedades, enjugar lágrimas! Y de todo ello, ¡cuánto hacemos y se hace en nuestro mundo! Si somos pañuelo que hacemos todo eso, Jesús grabará su rostro, su foto, en él, en nosotros.

— No queremos terminar las ofrendas sin presentar esta pandereta, payaso, juguete, guitarra..., que nos recuerde la alegría con la que hemos de realizar esos servicios y esas obras. Que la alegría sea la luz que siempre ilumine nuestra cara.

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10. ACCIÓN DE GRACIAS

Te damos gracias, Señor, porque por medio de Jesús nos has enseñado que es posible cambiar las cosas de este mundo. A su lado no existía la tristeza, el pobre volvía a sonreír y los pecadores encontraron un rostro acogedor.

Tú nos enseñaste que es posible caminar cogidos de la mano, que lo que soñamos lo podemos hacer realidad por medio del amor.

Y que podemos esperar un día que al levantar la vista veamos una tierra de libertad, justicia y amor.

D. DESPEDIDA

11. DIÁLOGO

Id y anunciad lo que habéis visto...

Hemos visto... ¿qué?

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| ¡ | Í |UART0 DOMINO DE ADVIENTO ^

Mensaje

La misión de la Palabra de Dios es que todos se abran a la fe.

Comentario Cercana ya la Navidad, el mensaje a destacar en este domingo es que Jesús viene para todos. De ahí que la misión de la Palabra de Dios es hacer que todos lleguen a la fe, a conocerle. Es lo que nos dice san Pablo en la segunda lectura.

Materiales Biblia y objetos para las ofrendas: declaración de los derechos humanos, oro, incienso, mirra y una cuna.

Observaciones

En la página derecha de la Biblia dibujada en el panel, el mensaje-. Que todos se abran a la fe.

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A. RITOS INICIALES


Con la Biblia que preside la celebración, la vela de la corona con la palabra Fe y los objetos para las ofrendas.

2. CANTO

3. DIÁLOGO

Nacidos según lo humano, nos basta...

Constituidos según el Espíritu, necesitamos...

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4. RITO DEL PERDÓN

— Porque no creemos en las cosas pequeñas y sencillas de la vida.

— Porque no creemos que con amor podemos hacer más cosas que con la fuerza.

— Porque hacemos las cosas a nuestra manera y no a la de Dios.

5. ORACIÓN

Señor, nos dices que estás con nosotros en Jesús, y Jesús nos dice que está en los demás; que no nos empeñemos en buscarte en otra parte, y que caigamos en la cuenta de que lo que hacemos a los demás te lo hacemos a Ti. Por Jesucristo nuestro Señor.


Al encender estas cuatro velas en el último domingo de Adviento, pensamos en ella, la Virgen, tu madre y nuestra madre. Nadie te esperó con más ansia, con más ternura, con más amor. Nadie te recibió con más alegría. En sus manos encontraste la cuna más hermosa.

La pequeña llama de la cuarta vela simboliza nuestra fe. En nuestra fe, en nuestro amor, en el trabajo de cada día, queremos que encuentres una cuna acogedora para así responder a tu venida.

¡Ven pronto, Señor!


7. LECTURA de la carta a los Romanos 1,1-7

8. CANTO



¿Los niños de tu clase conocen a Jesús? ¿Qué conocen y dicen de Él?

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¿Qué conoces tú de Jesús y del Evangelio? ¿Qué dices tú de Él?

Si te preguntasen a ti sobre Jesús, ¿qué les contarías? ¿Piensas que te creerían?

Si no sabes decirles nada, ¿al menos les dices que eres su amigo con tu comportamiento?

¿Les convence?



— Presentamos la Palabra de Dios que se ha escrito para que «vosotros también creáis», y para que «todos lleguen a la fe». Que todo lo que hacemos cada día sea traducir y escribir la Palabra de Dios que los demás han de leer y creer.

— Presentamos la Declaración de los derechos humanos donde se recogen las aspiraciones de todos los hombres y todos los pueblos. Al presentártela deseamos que se vayan cumpliendo para que aparezca ese niño nuevo y esa niña nueva que todos deseamos y que nace en Navidad.

— Los primeros gentiles que respondieron a la fe fueron los Reyes Magos que tan simpáticos nos caen. Como ellos, también nosotros te presentamos el oro, nuestro corazón, lo mejor de nosotros mismos; el incienso, nuestra vida, que queremos se queme en servicio y ayuda a los hermanos, y la mirra de nuestra acogida y adoración, porque queremos que Tú seas siempre el más importante entre nosotros.

— Que su llegada nos pille preparados. Esta cuna, pobre y modesto lugar que queremos ser nosotros, la queremos cálida y acogedora. Aunque más bien, sé Tú el que nos anime y calientes con tu nacimiento.

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ADVIENTO

CICLO B

Un hombre nuevo para un pueblo unido

PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO

Mensaje Vuélvete por amor a nosotros.

Comentario El tiempo de Adviento es tiempo de preparación para la Navidad, para que nazca Jesús en nosotros y para que crezcamos hasta alcanzar la medida de Cristo. Hemos de cambiar y preparar nuestra cabeza, corazón, manos y pies para que sean nuevos. Cada domingo leemos las lecturas que aluden a esos miembros e incidimos en uno de ellos. En este primer domingo nos centramos en la cabeza. Cuando nos portamos mal nos avergonzamos; «Dios nos oculta su rostro, se avergüenza de nosotros»; ante Cristo crucificado y todos los crucificados se vuelven los rostros, porque nos repugnan. Nosotros le decimos al Señor que vuelva su rostro por amor a nosotros. Y como fácilmente nos comportamos mal, hemos de ser comprensivos con el mal comportamiento de otros.

Materiales — En un panel colocamos una silueta grande de hombre. — Unas tiras de cartulina con las frases de las lecturas que aluden

a la cabeza, corazón, manos y pies. — Unas siluetas de una cabeza, un corazón, unas manos y unos

pies, para la presentación de las ofrendas.

A. RITOS INICIALES

1. DIALOGO

Empezar un año es empezar una nueva etapa... hay muchas cosas que hacer... las esperanzas e ilusiones se renuevan... ¿Cómo te gustaría ser a ti mismo? ¿Qué cosas cambiarías?

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2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

Si Tú bajases se acabarían nuestros miedos y tristezas.

Si Tú bajases se acabarían las tiranías de nuestros caprichos y egoísmos.

Si Tú bajases se acabarían nuestras peleas y nos daríamos la mano como amigos.

4. ORACIÓN

¡Ojalá rasgases el cielo y bajases! Nadie se sentiría ya solo. Unimos nuestro deseo al del profeta. Que nos preparemos en este Adviento para esa bajada, para que tu venida nos convierta en hombres nuevos. Por Jesucristo nuestro Señor.


(Los niños van colocando las tiras de cartulina sobre la silueta del panel cuando se lee su frase correspondiente.)

Encendemos, Señor, estas luces como aquél que enciende su lámpara para mantenerse en vela. En esta primera semana de Adviento, te decimos con Isaías: ¡Ojalá rasgases el cielo y bajases!, pues te necesitamos para ser mejores. Por eso:

Vuélvete por amor a nosotros. (Cabeza) Aparta nuestras culpas. (Corazón) Sal a nuestro encuentro. (Pies)

Tan mal nos portamos que preferimos decir: ¡Ojalá no bajes! ¡Quédate ahí en el cielo! No vengas a molestarnos porque nos va bien con nuestras cosas, nuestros caprichos y nuestros juegos.

Pero Señor, Tú eres nuestro Padre y sabes cómo tratarnos aunque seamos rebeldes. Nos va a hacer mucho bien oír:

Somos obra de tus manos. (Manos)

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6. LECTURA del profeta Isaías 63,16-17; 64,1.3-8

7. SALMO

Señor, Tú eres nuestro Padre, nosotros la arcilla y Tú el alfarero.

¿Por qué me has hecho como soy? ¿Qué pensabas cuando me moldeabas como una vasija de barro? ¿Para qué quieres que sirva?

Tus manos, Padre, han modelado mi capacidad de dar y de servir, de recibir y de acoger.

No quiero quedarme para mí todo lo que Tú me has dado.

Cántaro, jarra, jarrón, vasija esbelta o bajita, honda u ancha, ¿qué más da?

Quiero ser vaso de barro para Ti, Señor, que estás en mis hermanos.

8. LECTURA del evangelio según san Marcos 13, 33-37


¿Qué comportamiento nuestro nos avergüenza más? ¿Quisiéramos que nos viesen entonces? ¿Por qué nos sucede eso?

¿Qué realidades de nuestro mundo no nos gusta ver y por eso cerramos los ojos o giramos la cabeza?

¿Sueles pensar mal de algún compañero?

¿Cómo te sientes cuando piensan mal de ti y te dicen que eres un tal y un cual? ¿A que no te gusta?

¿Intentas comprender a todos y no sólo a tus amiguitos?

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— Nosotros también ocultamos el rostro, la cara, cuando nos portamos mal y nos avergonzamos; cuando nos sentimos acomplejados porque se ríen de nosotros, y cuando muchas veces tendríamos que dar la cara por algo o por alguien. ¡Y no te digo lo difícil que es poner la otra mejilla! Aquí nos tienes, Señor, enséñanos a dar la cara aunque nos la partan. (Cabeza)

— Nosotros, Señor, también endurecemos el corazón. ¡Qué blandi-tos y flojitos somos con los que nos caen bien o nos halagan porque jugamos bien o por lo listos que somos, y qué duros con los que nos aventajan!

Aquí nos tienes, Señor, enséñanos tu corazón, celoso sí, pero de tu gloria que es nuestra vida, y misericordioso con nuestra envidia que es nuestra muerte. {Corazón)

— ¡Qué poco necesitamos, Señor, para perdernos y alejarnos de tus caminos! Somos especialistas en hacer lo contrario de lo que tenemos que hacer. Si nos dicen estudiar, nosotros queremos jugar; si nos dicen jugar, nosotros queremos ver la «tele»; si nos dicen ver la «tele», nosotros a hacer «monadas»; siempre lo contrario de lo que se nos manda. No quiero ni contarte si tuviésemos que hacer lo que nos dices Tú: lo de ser misericordiosos, pacíficos, limpios de corazón... lo de amar a todos. Aquí nos tienes, Señor, menos mal que tus caminos no son nuestros caminos, porque sino ¡listos estábamos! (Pies)

— ¡Qué bonito! Somos la arcilla, el barro, Tú el alfarero. Somos todos obra de tus manos. Pero, ¡qué difícil dejarnos modelar! A veces con nuestro comportamiento no nos conoce ni la madre que... nos modeló. Nosotros queremos modelar nuestro espíritu, que tenga fuerza para ir siempre con la verdad por delante, y que sea flexible para comprender a los otros.

Aquí nos tienes, Señor, que no se nos olvide esta imagen tan bonita, para dejarnos educar por papas, profesores, pero sobre todo por Ti, que eres el mejor alfarero. (Manos)

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0D0|lN(||¡= ADVIENTO f f

Mensaje Consolad a mi pueblo, habladle al corazón.

Comentario Hoy nos centramos en el corazón, signo fácilmente inteligible para los niños, pues lo identificamos como el centro de donde brotan todos los sentimientos. Dios quiere hombres con un corazón nuevo. Por eso sus palabras hablan al corazón, porque son palabras de misericordia y de perdón, de generosidad y de cariño. Así han de ser nuestros sentimientos y palabras.

Materiales — En un panel colocamos una silueta grande de hombre. — Unas tiras de cartulina con las frases de las lecturas que aluden

a cabeza, corazón, manos y pies. — Unas siluetas de cartulina de una cabeza, un corazón, unas ma

nos y unos pies para la presentación de las ofrendas.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Por las veces en que nuestro corazón funciona como un músculo y no es sensible a las necesidades de los demás.

— Porque nos cuesta perdonar de corazón y a veces se nos queda duro como una piedra.

— Porque emplea más tiempo en crear egoísmo y no en dejar que brote el amor.

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(Los niños van colocando las tiras de cartulina en el miembro correspondiente de la silueta al leer las frases que contienen.)

Hoy las palabras de Isaías nos van a hablar a nosotros niños egoístas, aburridos y a veces agresivos. Su palabra es:

Esperanzadora: Se revelará la gloria del Señor. (Cabeza)

Consoladora: Consolad a mi pueblo, habladle al corazón. (Corazón)

Generosa: De la mano del Señor ha recibido doble paga por sus pecados. (Manos)

Exigente: Preparadle un camino al Señor. (Pies)

Hoy no hablamos al corazón y además decimos palabras malsonantes, palabrotas, palabras hirientes y ofensivas.

Hablemos, pues, al corazón con palabras cariñosas y simpáticas.


4. LECTURA del profeta Isaías 40,1-5.9-11

5. CANTO

6. LECTURA del evangelio según san Marcos 1,1-8


¿De quién decimos «tiene un buen-gran corazón»? ¿Sientes tú y te comportas de la misma manera?

¿Qué es lo que más te emociona? ¿Ante quién te compadeces más?

¿Eres sensible para captar las necesidades de amistad y cariño de las personas?

¿Dominas tu genio y tu rabia para no herir con tus palabras?

¿Sabes que preparar los caminos del Señor es quitar los montones de egoísmo, chulería, envidia, que hay en tu corazón? ¿Y llenar los pozos de cariño, ternura, simpatía?

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(Unos niños con las siluetas ante la asamblea, mientras se hace este recitado a modo de oración.)

Aquí nos tienes Señor, hemos venido a preparar el camino para que Tú vengas:

— el camino de la fe para creer que Tú siempre nos quieres;

— el camino para que te abramos la puerta del corazón cuando vengas;

— el camino del limpiar porque a Ti te gustan los corazones limpios y el nuestro está muy sucio;

— el camino de liberar porque la casa la tenemos llena de cosas y de caprichos;

— el camino de la humildad para liberar el corazón de nosotros mismos, seres orgullosos y «fanfas» donde los haya;

— el camino del crecer para que Tú seas el alimento del corazón y que todo nos hable de Ti;

— el camino del rezar, ¡qué fácil decir «sí-hágase» como María! pero ¡qué poco lo hacemos! sólo de boquilla; y Padre Nuestro que perdonas y pagas por los pecados;

— el camino del amar porque si le hablásemos a Dios de los otros, ¡cuánto más les amaríamos! y si les amásemos, ¡cuánto más amaríamos a Dios!

Nuestros hechos serían palabras que llegarían al corazón, y hechos que llegan al corazón son palabras de consuelo.

Nuestros hechos manifestarían tu gloria.

Los hombres te glorificarían al ver nuestras obras y tu gloria la verían todos los hombres, porque tu gloria lo llenaría todo.

Pero, Señor, esto no son por ahora más que ilusiones y sueños. Nuestras obras no manifiestan por ahora tu gloria, sino nuestros defectos y pecados: egoísmo, orgullo, envidia, odio, ira...

¡Ven, Señor, con tu paga, no la disminuyas! Que tu paga, Señor, sea siempre «paga doble».

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ERSER D0MINB)E ADVIENTO

Mensaje La alegría es fruto de vivir la Buena Noticia.

Comentario La alegría es la característica a destacar este domingo de Adviento, fruto del anuncio de la Buena Noticia, y sobre todo de su realización en obras y tareas de curación, de sanación, de vendar los corazones rotos y desgarrados. Por eso hoy nos centramos en el simbolismo de las manos.

Materiales Los mismos de cada domingo.

A. RITOS INICIALES

1. DIÁLOGO

En medio de vosotros hay uno que no conocéis.

Jesús, ¿dónde está? ¿Cómo conocerle?

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Porque nuestros brazos y manos con frecuencia no trabajan, ni sirven, ni aman.

— Porque a veces sólo sirven para romper y destruir.

— Porque con nuestras obras no anunciamos la Buena Noticia.

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4. ORACIÓN

Queremos conocer y reconocer en este tiempo de Adviento, que el Señor nos ha bautizado y ungido para dar y realizar la Buena Nueva de la llegada del Reino a los que sufren. Esa es tu voluntad, Señor, como lo es también que estemos alegres. Danos fuerza para realizarla, así estaremos alegres y viviremos. Por Jesucristo nuestro Señor.


Nos estamos preparando para la venida de Jesús, nuestro Salvador. Isaías nos dice cómo va a ser:

Ungido: El Señor me ha ungido. (Cabeza)

Consolador: Desbordo de gozo y me alegro con mi Salvador. (Corazón)

Médico: Vendarlos corazones desgarrados. (Manos)

Liberador: Me ha enviado a dar la buena noticia a los que sufren. (Pies)

Cuando venga nos dirá que hemos de ser y actuar como Él. ¡Ojalá nos convirtamos hoy en testigos suyos, encenderíamos muchas luces en nuestro mundo!


6. LECTURA del profeta Isaías 61,1 -2.10-11

7. CANTO

8. LECTURA del evangelio según san Juan 1, 6-8.19-28


¿Qué cosas hacemos con nuestras manos? De todas ellas, cuál te gusta más?

¿Cómo puedo ayudar con mis manos a los demás?

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¿Qué quiere decir que tu mano izquierda no sepa lo que hace tu mano derecha?

¿En qué ocasiones cierras las manos?

La Buena Noticia es que Jesús es nuestro amigo, ¿hacemos con las manos lo mismo que Él?



Entre los datos que daríamos para responder a la pregunta: tú, ¿quién eres?, en qué pocos carnés de los cristianos se encontraría la palabra «ungido». Esto quiere decir que no hemos asumido nuestro Bautismo donde se nos ungió con aceite perfumado como a Jesús, para pasar haciendo el bien como Él.

Nosotros pasamos como el caballo de Atila, rompiendo todo. O pasamos de todo y de todos como Caín: ¿Acaso soy yo el guardián de mi hermano? O pasamos como el caballo del Malo, lento, lento, por nuestros deberes y obligaciones.

— Aquí está nuestra cabeza con nuestros ojos para ver las necesidades del prójimo, con nuestros oídos para escuchar los lamentos de los que sufren oprimidos.

— Aquí está nuestro corazón duro y endurecido, como para poder palpitar al unísono de tantos corazones desgarrados que sufren.

— Aquí están nuestras manos avariciosas y acaparadoras por nuestro egoísmo y cerradas por nuestra ira y rencor.

— Aquí están nuestros pies ágiles para correr tras nuestros deseos y caprichos y para huir de tus llamadas en los hermanos.

Te los presentamos, Señor. Úngelos de nuevo. Que tu ungüento los fortalezca y los perfume. Envíanos de nuevo a prolongar tus pasos y actualizar tus gestos y palabras. Hoy necesitas nuestras manos, nuestros pies y nuestra voz. Nosotros necesitamos el latido de tu corazón, para que lata el nuestro al son de los corazones desgarrados.

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CUARTO DOMINGO DE ADVIENTO

Mensaje Decir a Dios «hágase» es ponernos en camino de servicio.

Comentario A lo largo del Adviento nos hemos preparado y hemos crecido a la medida de Jesús si nos hemos llenado de amor y de gracia como María, figura central de este tiempo. Hemos crecido si Jesús nos ha llenado de su amor y de su amistad. Nos fijamos hoy en Ella y decimos como Ella: «Hágase», lo que implica ponernos de camino enseguida para el servicio de quien nos necesita. Destacamos hoy el simbolismo de los pies.

Materiales Los mismos de cada domingo de Adviento.

I '

A. RITOS INICIALES

1. DIÁLOGO

Todo el mundo tiene espectativas y esperanzas...

Otros preparan el nacimiento de Jesús...

¿Qué preparamos nosotros? ¿Qué esperamos? ¿Tú qué esperas?

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Porque nuestros pies a veces están quietos, no dan pasos que hagan avanzar el amor y el perdón.

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— Porque toman el camino de la separación y no el del acercamiento y el encuentro.

— Porque en todo lo que hacemos te tenemos poco en cuenta.


Al encender hoy las velas pensamos en la Virgen nuestra madre. Dios quiso para nacer una casa pequeña, María:

Alégrate llena de gracia; el Señor está contigo. {Corazón)

¿Quieres tener por hijo al mismo Hijo de Dios?

A Cristo Jesús, revelación del misterio escondido. {Cabeza)

María con humildad y docilidad respondió:

Hágase en mí según tu palabra. (Manos)

Dios quiere casas parecidas a la de María. ¿Queremos serlo también nosotros? Si decimos que «sí», como María, Dios nos dirá como a David:

Yo estaré contigo en todas tus empresas. {Pies)


5. LECTURA del segundo libro de Samuel 7, 1-5.8-11.16. {Se puede

hacer dialogada)

6. CANTO

7. LECTURA de la carta a los Romanos 16, 25-27

8. LECTURA del evangelio según san Lucas 1, 26-38. (Se puede hacer dialogada)


¿Cómo caminas: deprisa, despacio, a saltos, a gatas, confiando, tropezando...?

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¿Qué cosas buenas hacemos con los pies; qué cosas malas? ¿Qué huellas dejamos a nuestro paso?

¿Eres rápido y decidido para hacer lo que te mandan y para servir? ¿Sabes decir fácilmente «sí-hágase»?

¿Te has hecho en este Adviento más amigo de Jesús? ¿Te has llenado de amor? ¿Vas a ser capaz de emprender algún camino nuevo a partir de Navidad?



Hoy te decimos como María: «Aquí estamos».

Hoy te toca hablar a Ti; ser Tú el que nos pidas. Nosotros somos muy habladores, charlatanes y chillones, pero aquí en la Iglesia hablamos poco y sólo para pedirte cosas. Hoy pídenos Tú:

Pídenos una cabeza que siempre la tengamos sobre los hombros, ya que muchas veces pensamos con los pies y tenemos unas salidas de «pata de banco». Una cabeza para comprender lo que Tú nos dices en Jesús, porque conocer a Jesús es conocerte a Ti, el misterio escondido. Por eso que cada día tengamos más ganas de conocerle.

Pídenos un corazón como el de María, ya que Tú quieres casas parecidas a la de ella.

Pídenos un corazón limpio porque sólo los corazones limpios ven a Dios.

Pídenos un corazón verdadero porque sólo los corazones verdaderos adoran a Dios.

Pídenos un corazón manso y humilde como el de Jesús. Sólo estos corazones pueden aprender de Jesús.

Pídenos un corazón de carne, al que el dolor y el sufrimiento del hermano le traspase.

Pídenos unas manos entregadas a curar, sanar y vendar corazones desgarrados, delicadas para acariciar a los niños y ayudar a los ancianos; que nunca se queden en paro ante las necesidades, y ca-

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ballerosas para con los amigos. Que no metamos mano ni metamos la mano donde no debemos.

Pídenos unos pies ágiles y ligeros para el servicio, como los de María; que acuden prestos a la llamada del que los necesita. Unos pies decididos porque nunca se echan atrás ante las dificultades. Unos pies seguros ante las convicciones que caminen tras el que nos ha ofendido y delante del cansado y desanimado. Unos pies pacientes para que a la mínima no den patadas ni coces.

Hoy dinos: Alégrate llena de gracia, el Señor está contigo.

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ADVIENTO

CICLO C

Sólo un pueblo unido es un pueblo de Dios

I PRIMER DOMINGO DE ADVIENTO | ¡ ¡

Mensaje Se acerca vuestra liberación. Estad siempre despiertos... y manteneos en pie ante el Hijo del Hombre.

Comentario En este Adviento el mensaje que queremos vivir es: Sólo un pueblo unido es pueblo de Dios. Cada domingo entresacamos de las lecturas cinco rasgos que debe tener ese pueblo. Como el Adviento es tiempo de preparación, de cambio, se trata de adquirir y asimilar esos rasgos para ser ese pueblo de Dios, libre y liberador. Un pueblo así es un pueblo que canta su liberación. Esos rasgos serían las notas musicales de un pentagrama que deberíamos cantar. De ahí el simbolismo elegido. Cada domingo se pueden trabajar todos o elegir y remarcar algunos que consideremos más ade-

• cuados. En esta primera semana templamos voces e instrumentos.

Materiales — Sobre un panel grande hay colocado un pentagrama musical. — Cinco tiras de cartulina; en cada una, una frase entresacada de

las lecturas que caracterizan a ese pueblo y que colocaremos sobre el pentagrama cuando se lean en la monición para encender las velas.

— Una vela, una guitarra, unas notas musicales, unas flores y una cuna para la presentación de las ofrendas.

Observaciones Encendemos las velas de la corona de Adviento después de la Oración, como introducción a las lecturas.

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A. RITOS INICIALES

1. SALUDO

Hoy comenzamos el tiempo litúrgico de Adviento. Las semanas van tan aprisa que nos vamos acostumbrando y caemos en la rutina. Es tiempo de despertar y preparar la celebración de la Navidad. Que la Palabra de Dios nos sirva de despertador para avanzar hacia ella.

2. CANTO

3. RITO DEL PERDÓN

— Porque dejamos de lado a los compañeros que no nos caen bien.

— Porque nos aprovechamos de los esfuerzos y de las cosas de los demás.

— Porque somos egoístas en casa, en el juego y a todas horas.

4. ORACIÓN

Señor, nuestra vida está llena de alegrías y tristezas. Queremos estar atentos a lo que sucede a nuestro alrededor. Tú nos invitas a que esperemos tu venida desde el comienzo del Adviento. Ayúdanos a descubrir cómo te haces presente en nuestra vida y cómo podemos ser felices de verdad. Por Jesucristo nuestro Señor.


Encendemos esta primera vela como señal de esperanza y vigilancia. Esta vela que representa al Señor que es nuestra justicia. Queremos que nos ilumine en este tiempo de Adviento para mantenernos en pie ante el Hijo del Hombre. Porque queremos ser un pueblo que rebosa de amor mutuo y que agrada a Dios con su proceder.

Así, cuando el Señor venga nos encontrará santos e irreprochables.

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6. LECTURA del profeta Jeremías 33,14-16

7. SALMO

(Se puede recitar y cantar el estribillo: «A Ti levanto mis ojos».)

8. LECTURA de la primera carta a los Tesalonicenses 3,12-4,2

9. LECTURA del evangelio según san Lucas 21, 25-28

(A modo de telediario se pueden intercalar noticias de actualidad malas y de catástrofes después de «las potencias del cielo temblarán»; y noticias buenas y esperanzadoras después de «se acerca vuestra liberación».)


¿Has presenciado lo que hacen los músicos y cantantes antes de un concierto?

Los discípulos de Jesús, ¿cómo tendríamos que entonar nuestras voces y armonizar los instrumentos?

Como cristianos, ¿en qué «carraspeamos», «desentonamos», «metemos ruido»...?

¿Somos capaces de llegar a esa nota «rebosar amor mutuo»?

¿Nos armonizamos en ser «santos e irreprochables»?

¿La melodía de nuestra vida es «agradar a Dios con nuestro proceder»?

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Empezamos este tiempo de Adviento, de preparación para la Navidad. En él se trata de ir formando un coro para que en la noche de Navidad nos unamos a la sinfonía de los ángeles que cantan: Gloria a Dios en el cielo y paz a los hombres que ama el Señor.

En esta primera semana se trata de templar voces e instrumentos:

— Presentamos una vela encendida, queremos que de nuestra garganta surja una voz clara y nítida para cantar lo que somos, discípulos y amigos de Jesús, como Dios canta con voz clara: Yo soy fiel, soy vuestra justicia.

— Presentamos esta guitarra porque el Señor nos da muchos tonos para entonar y uno demasiado alto para nuestra voz: Rebosar de amor mutuo. Cuántas veces al querer llegar a ese tono se nos rompen las cuerdas vocales como la guitarra. Que Él siempre nos las reponga.

— Presentamos estas notas, ¡qué cortito es el tiempo y el compás lo que te agrada de nuestro proceder!, el amor a los demás, no dura lo que una semifusa. ¡Qué largos y pesados los tiempos desagradables de nuestro egoísmo, duran como las notas blancas!

— Presentamos esfas flores, pues nos has constituido santos e irreprochables. Queremos que sean nuestro adorno y nuestro perfume para que demos sonidos melodiosos y armoniosos, no trompetazos ni bocinazos.

— Presentamos esta cuna, la mejor invitación a la acogida de Jesús, a mantenernos en pie ante el Hijo del Hombre para que las carrasperas y toses de nuestra vida que son muchas: pesimismos, desilusiones, desencantos... sean cada vez menos y no nos turben.

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| SEGUNDO DOMINGO DE ADVIENTO

Mensaje El pueblo de Dios crece en amor más y más.

Comentario Hoy las lecturas son ricas en rasgos y características de ese pueblo: las podemos centrar todas en «comunidad de amor» que Pablo llama a la comunidad de Filipos. En esta semana formamos el coro, cada uno con su traje, en su sitio y en su voz correspondiente.

Materiales — Un panel grande con un pentagrama musical. — Cinco tiras de cartulina, en cada una de ellas una frase escrita

entresacada de las lecturas, que caracterizan a ese pueblo y que colocaremos sobre el pentagrama cuando se lean en la monición para encender las velas.

— Una vela, una guitarra, unas notas musicales, unas flores y una cuna para la presentación de las ofrendas.

Observaciones Cada semana se puede ir encendiendo una vela; por tanto esta semana se encienden dos. En la liturgia de la Palabra ponemos las tres lecturas porque los rasgos que sacamos son de las tres. Por razones de brevedad, se pueden seleccionar.

I

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Porque no creemos que Tú, Jesús, estás entre nosotros y puedes llenarnos de alegría.

— Porque no creemos que el amor entre nosotros es capaz de hacer de las montañas, llanuras.

— Porque creemos que compartir es perder algo de lo que tenemos.

3. ORACIÓN

Estamos aquí, Padre, para escuchar y acoger tu Palabra. Sabes y sabemos lo difícil que nos resulta cumplirla. Ayúdanos a que nuestro cristianismo no se quede sólo en palabras, sino que se convierta con nuestras obras de amor en testimonio y vida. Por Jesucristo nuestro Señor.


Esta segunda vela que encendemos es la luz que queremos que ilumine nuestra vida. Es la luz de la paz en la justicia y la gloria de la piedad. En este tiempo de Adviento queremos ponernos: «mantos, galas, diademas», el vestido de la gracia y de la justicia de Dios, del que crece en amor más y más, para caminar con seguridad guiados por la gloria, justicia y misericordia de Dios. Y así llegar al día de Cristo limpios e irreprochables, cargados de frutos de justicia.


5. LECTURA del profeta Baruc 5,1 -9

6. CANTO

7. LECTURA de la carta a los Filipenses 1,4-6. 8-11

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8, LECTURA del evangelio según san Lucas 3,1-8


¿Te has fijado que un buen coro lo componen muchas voces y también solistas?

¿Cómo te gusta cantar, a coro o fuera del coro?

¿Eres de los que le gusta dar la nota?

¿Creces cada día en el amor porque le das distintos tonos?

El tono más alto es el perdón de las ofensas, ¿aún no llegas a él?



Ya estamos en pie ante el Señor que ya viene. En esta semana se trata de ir formando el coro. Con la presentación de las ofrendas hoy le decimos al Señor que nos coloque a cada uno en su voz correspondiente.

— Te presentamos, Señor, esta vela encendida y te decimos que Tú seas el director del coro al que todos miremos porque Tú eres paz en la justicia y gloria en la piedad. Tres cualidades muy luminosas y llamativas: paz, justicia y piedad.

— Te presentamos, Señor, las notas porque queremos crecer más y más en el amor, adornándolo de muchas características: respeto, cariño, perdón... las notas de la escala musical con las que cantar hermosas melodías.

— Te presentamos esta guitarra, danos Señor buenos tonos, adecuados a tenores y bajos para que cantemos con seguridad dirigidos por la gloria, justicia y misericordia de Dios.

— Te presentamos, Señor, estas flores de adorno que representan el vestido de la gracia y de la justicia de Dios y que queremos sea el uniforme de nuestro coro.

— Te presentamos Señor esta cuna vacía, que la llenemos con nuestras canciones para que lleguemos al día de Navidad limpios e irreprochables cargados de frutos de justicia.

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Mensaje Estad siempre alegres.

Comentario El mensaje de este domingo es el de la alegría. Dios es buena noticia que llena de felicidad. Por eso nuestra alegría no es de carácter, temperamental sobre todo, sino fruto de esa noticia y don del Espíritu.


Observaciones La liturgia de la Palabra será una pequeña escenificación entre el sacerdote y los niños. Para ello comienza la eucaristía sin revestirse.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Porque nos preocupamos más de nosotros mismos que de los que tenemos a nuestro lado.

— Porque no tenemos la alegría que nos debería distinguir como amigos de Jesús, sino que andamos preocupados por tener más y mejores cosas.

— Porque no nos preparamos adecuadamente para la venida de Jesús.

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3. ORACIÓN

Padre nuestro, queremos que cuando Jesús venga en Navidad encuentre unos corazones amigos. Por eso te pedimos que nos enseñes a esperar siempre y en todo momento que es posible encontrarte y ser amigo tuyo. Por Jesucristo nuestro Señor.


Hoy el tercer domingo de Adviento nos invita a la alegría. Nuestro gozo es que el Señor está cerca, por eso encendemos esta tercera vela. Que su venida nos haga un pueblo alegre, orante y pacífico, que compartimos sin exigencias y no denunciamos ni acusamos, porque todos estamos bautizados con espíritu y fuego. Los que aman y sirven como Él tienen a Dios por rey.


5. ESCENIFICACIÓN

SACERDOTE: ¡Huy! ¡Qué despiste! Voy a revestirme.

(Mientras los niños se portan mal y arman follón. El sacerdote aparece revestido y echa una reprimenda: "No se os puede dejar solos»... «sois un desastre»... cuando acaba:)

NIÑO: ¿Qué hemos de hacer?

SACERDOTE: Escuchad lo que dice el evangelio de hoy.

6. LECTURA del evangelio según san Lucas 3, 10-18. (Se puede hacer dialogada)

(Los niños ante esta lectura quedan como apenados y compungidos. El sacerdote les exhorta y anima a la alegría: «el cristiano es un llamado a /a alegría»... «Dios es alegre»... «la religión de una buena noticia y no una pesada carga»... Otro niño ante la exhortación dice:)

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NIÑO: ¿Qué hemos de hacer?

SACERDOTE: Escuchad lo que dice san Pablo.

7. LECTURA de la carta a los Filipenses 4, 4-7

8. CANTO


¿Qué es lo que más te gusta? ¿La verdad o los piropos, halagos y alabanzas?

¿Sabes escuchar los consejos de los papas, las enseñanzas de los maestros, las exigencias de Jesús?

¿Qué palabras y voces te molestan más en los oídos? ¿Ante qué llamadas estás sordo?

¿Tus canciones son de alegría y paz, o berridos de insultos, palabrotas y acusaciones?

¿Sabes cantar la canción del dar y compartir sin exigir?



Ya tenemos formado el coro y cada cual está en su voz correspondiente. Para llegar al día del Señor hemos de afinar el oído y no desentonar con nuestras canciones. Por eso:

— Presentamos esta vela encendida como signo de que fe tenemos por rey. Eres el otorrino que tienes que quitarnos los tapones de los oídos para que escuchemos claramente los lamentos y necesidades del prójimo.

— Presentamos estas notas: compartir sin exigencias y no denunciar ni acusar. Son buenas notas para nuestra convivencia. ¡Lástima que pongamos a veces esos medios tonos, esos sostenidos de críticas, acusaciones e insultos que nos hacen desafinar!

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Presentamos esta guitarra, con ella queremos cantar la música que a Ti más te agrada: somos un pueblo (coro) alegre, orante y pacífico.

Presentamos estas flores, con ellas queremos atender las necesidades y sufrimientos de los demás, porque los bautizados en Espíritu y fuego no podemos conformarnos con tener el oído limpio y fino para escucharlos. Hay que atenderlos y remediarlos.

Presentamos esta cuna porque el Señor está cerca. En ella queremos acogerte. Y vamos a preparar unas nanas para con ellas mecerte.

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Mensaje

El pueblo de Dios es un pueblo que hace su voluntad.

Comentario Es la característica que aparece en dos lecturas, expresión de la postura existencial de Jesús: aquí estoy para hacer tu voluntad, y de María: hágase. En esta semana nos proponemos dar y damos el «Do de pecho».


Observaciones

El domingo pasado aparecían en boca de Juan como tres personajes: el egoísta, el acusica y el exigente. Tres niños en el rito del perdón hacen como una pequeña reflexión consigo mismos.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Dicen que soy egoísta porque no dejo nada de lo mío. Para eso es mío, ¿no? Dicen que si soy cristiano debo compartirlo todo: cosas, juguetes... pero, ¿lo comparten los demás conmigo? Entonces, ¿por qué me dicen que soy un egoísta si todos hacen igual que yo? ¿Por qué me acusan y no me dejan en paz?

— Dicen que lo cuento todo, que soy un chismoso y un chivato. Pero, ¿no se dan cuenta de que lo hago por su bien? ¿Que así no

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volverán a portarse mal? Lo que pasa es que me tienen envidia porque yo paso por un niño bueno y ejemplar, y eso es bueno para mí porque así me tienen miedo y me respetan.

— ¿Por qué yo no puedo exigir a los demás lo que los demás me exigen a mí? Creo que puedo decir lo que me parece mal, lo que no me gusta de aquello que hacen, como los demás dicen lo que no les parece bien de mí. No pensarán que voy a hacer siempre lo que a ellos se les antoje.

3. ORACIÓN

Antes de que llegue la Navidad, Tú nos envías muchos mensajeros que nos mandan recados tuyos de alegría y de esperanza. Ayúdanos a escucharles y a hacer lo que ellos nos han dicho. Por Jesucristo nuestro Señor.


A las puertas de Navidad encendemos la cuarta vela de la corona. Corona luminosa que representa la luz de Dios. Una luz para el pueblo:

Pastoreado por Dios que es su paz. Vive tranquilo porque Dios es grande. Hace su voluntad. Santificado por la oblación de Cristo. Cree en las promesas del Señor.

Nosotros también somos luz si la acogemos, y tanto más luminosos seremos cuanto como Él gustemos de lo pequeño.


5. LECTURA del profeta Miqueas 5, 2-5

6. CANTO

7. LECTURA de la carta a los Hebreos 10, 5-10

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NARRADOR: Reunidos en casa de Marcos, María nos iba contando los recuerdos antiguos de cuando era muchacha, de cuando Dios comenzó a cumplir sus promesas hechas a Abraham.

MARÍA: Cuando mi madre Ana se enteró de que yo estaba en estado, me dijo mil cosas y una más. ¡Ahora me río, pero en aquellos momentos!

ANA: ¡Ay qué vergüenza! ¡Qué humillación en una familia como la nuestra!

MARÍA: Pero mamá, ya te dije que esto es cosa de Dios.

ANA: ¡De Dios, sí! ¡Metemos la pata y luego le cargamos el mochuelo a Dios!

MARÍA: ¡Mamá, tienes que creerme!

ANA: ¡Parece mentira que una niña como tú tan bien educada!

MARÍA: Tengo quince años, ya no soy una niña.

ANA: ¡Ya lo veo...! ¡Lo que eres es una desvergonzada!

MARÍA: Mamá... yo... yo...

ANA: ¡Ay, Señor! ¡Cómo saldremos de este lío! María, sea lo que sea, tienes que irte de Nazaret. Esta aldea es muy pequeña y los vecinos tienen una lengua que se la pisan.

MARÍA: Yo no puedo irme de aquí, mamá. José y yo vamos a casarnos... es mi novio...

ANA: Si se entera de esto es capaz de matarte a pedradas... ¡y razón tendría! ¡Ay hija! Las cosas se piensan antes de hacerlas. Ahora ya no hay remedio, así que a lo hecho pecho.

MARÍA: ¡Pero es que yo no he hecho nada!

ANA: Escucha. La próxima semana te vas a casa de Isabel y Zacarías. Allí estarás bien cuidada.

MARÍA: A la semana siguiente nos pusimos en camino. Yo nunca había salido de casa. Después de tres semanas llegamos a Ain Karem en Judea.

ISABEL: ¿Que tú eres María? ¡Cuánto has crecido y qué guapa estás! Sabes, ¡estoy esperando un hijo! ¡A la vejez viruelas, como dicen! Pero ven, entra para que conozcas a tu

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tío Zacarías. El pobre cuando se enteró de que iba a ser papá, se quedó mudo del susto.

MARÍA: Tía Isabel fue muy cariñosa conmigo y me ayudó mucho. Sobre todo aquel día en que estaba lavando la ropa... me caí...

MARÍA: Es el calor, tía...

ISABEL: ¿Y no será otra cosa...? Mira que una ya es vieja...

MARÍA: Yo... yo... tengo que decirle una cosa...

ISABEL: Que estás en cinta, ¿no? Desahógate... que si no el alma es como la tripa, cuando tienes muchas cosas dentro, se indigesta... (Gesticula como que le está comentando algo.)

Así que vas a tener un hijo...

MARÍA: Pero tía, ¿usted me cree lo que le he contado?

ISABEL: ¡Claro que sí, hija! ¿Por qué no? Dios es grande y hace cosas grandes. ¡Si lo sabré yo...! Yo estaba como la mujer de Abraham y Zacarías ya viejo. Cuando le dije que estaba en cinta se quedó mudo del susto. Ya va para siete meses y continúa con la lengua atada. ¡Las cosas de Dios!

MARÍA: ¡Qué historia tan bonita tía Isabel!

ISABEL: ¡Pues la tuya aún lo será más!

MARÍA: Dios tuvo misericordia contigo...

ISABEL: ¡Y que lo digas hija! ¡Que si Él no mete mano lo que es por Zacarías! Oye, me gusta lo de misericordia. Si me sale varón lo llamaré Juan por lo de la misericordia.


¿Sabes lo que es dar el «Do de pecho»?

Como seguidor de Jesús, ¿hasta dónde llegas? ¿Sólo a amar a los amigos y a perdonar alguna vez? ¿Andas aún muy bajo por la escala musical porque sólo haces tus caprichos?

¿Das el «Do de pecho» gloria a Dios en las alturas, o das la nota gloria a N. en las bajuras?

¿La música de tu cara es de felicidad porque crees en Jesús?

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No sólo queremos cantar música suave y ligera, unas nanas para el Niño. Con oído fino y afinado queremos ser cantantes de ópera dispuestos a dar el «Do de pecho»:

— Porque con esfa vela encendida cantamos que somos un pueblo pastoreado por Dios que es nuestra paz. Es el «Do de pecho» de los sopranos.

— Porque con estas notas cantamos que somos un pueblo santificado por la oblación de Cristo. Es el «Do de pecho» de los contraltos.

— Porque con esta guitarra cantamos que somos un pueblo que vive tranquilo porque Dios es grande. Es el «Do de pecho» de los barítonos.

— Porque con estas flores cantamos que somos un pueblo que hace su voluntad. Es el «Do de pecho» de tenores y bajos.

— Porque con esta cuna cantamos todos a coro que somos un pueblo que cree en las promesas de Dios, que se harán visibles en ella. Es el «Do de pecho» de todo el coro: «Gloria a Dios en las alturas y paz a los hombres que ama el Señor».

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CUARESMA

CICLO A

Javi de camino a la bondad

f^ SEXTO DOMINGO

Mensaje Se dijo... Yo digo... Pero nosotros decimos.

Comentario La liturgia de este domingo nos sirve de punto de partida para el recorrido cuaresmal. Jesús nos pide a sus seguidores una justicia superior, «ser mejores que los letrados y fariseos» (Evangelio). No basta ser cumplidores de normas y leyes, tenemos que ser personas penetradas por el Espíritu de amor (2a lectura).

Materiales Preparar la escenificación del cuento y del Evangelio, o una lectura dialogada.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Se dijo: «no matarás», pero nosotros decimos: «por algún motivo podremos insultar y pelear».

— Yo digo: «amad a vuestros enemigos», pero nosotros decimos: «en ciertos casos nos tendremos que hacer respetar».

— Yo digo: «sed perfectos», pero nosotros decimos: «seamos realistas, yo soy como soy».

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3. LECTURA de la primera carta a los Corintios 2, 6-10

4. CANTO

5. ESCENIFICACIÓN DE CUENTO

NARRADOR: Érase una vez un chico que se llamaba Javi. En el colegio siempre estaba entre los primeros, nunca suspendía. La peor nota solía sacarla en Educación Física. En lo demás, de notable para arriba. Siempre obedecía. No hacía travesuras ni se peleaba con sus hermanos. Sus padres lo ponían de modelo a sus hermanos; jamás les quitaba un juguete a sus hermanos pequeños y a los mayores nunca les hacía rabiar.

Era como un reloj, puntualísimo; nunca llegaba tarde a ningún sitio. Las amigas y vecinas de Javi siempre le comentaban a su madre.

AMIGA: ¡Hay que ver, chica! ¡Qué suerte la tuya con ese niño, es un encanto! Siempre va limpio y no te da ninguna guerra. ¿Cómo has hecho para que te salga tan formal?

NARRADOR: Y es que Javi jamás hacía una gamberrada. Cuando los otros chicos o sus hermanos hacían travesuras, él nunca se metía en eso. Por eso las otras madres le ponían constantemente de modelo. Cuando sus hijos hacían de las suyas, les decían:

AMIGA: ¿No ves a Javi? Ese sí que es un chico como Dios manda; mira qué notas saca... por eso, porque es estudioso, obediente y formal y no como tú... ¡Qué suerte tienen algunas madres!

NARRADOR: Javi, además era muy piadoso. Nunca faltaba a misa los domingos, y en la iglesia estaba formalísimo... Además tenía una hucha y en ella guardaba su dinero. Tenía bastante porque nunca gastaba nada.

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Un día se compró un balón y le duró muchísimo, porque según decían sus padres, era muy cuidadoso, y no como sus hermanos que lo rompían todo enseguida.

Pero a pesar de lo que decía todo el mundo, Javi era ¡una birria de chaval!

«Javi sacaba buenas notas», pero...

JAVI: Sí, Señor profesor, la lección está muy clara, pero en la clase no se estudia, ni se me deja estudiar.

NARRADOR: Nunca ayudaba a un compañero. No hacía travesuras por miedo, pero sobre todo porque era bastante pelota de los profesores, ni jugaba a nada y por eso no estropeaba el balón, sólo lo llevaba para lucirse.

«Javi siempre obedecía», pero...

JAVI: Sí mamá, como tú digas, voy enseguida.

NARRADOR: Obedecía por no discutir con sus padres o sus hermanos. Aunque en realidad todo le daba igual; lo importante era no disgustarles.

«Nunca llegaba tarde», pero...

JAVI: He dicho que no, que no os acompaño, llevadlo vosotros a su casa.

NARRADOR: Nunca se preocupaba para nada de sus amigos: si estaban tristes, Íes dolía la cabeza o tenían ganas de jugar.

«Tampoco gastaba sus ahorros», pero...

JAVI: Si quieres unas pinturas, vas y te las compras.

NARRADOR: Nunca compraba nada para repartir, ni prestaba sus tebeos o dejaba sus lapiceros. Así tenía siempre todo a punto y podían decir que era muy ordenado.

JAVI: ¡¡¡Ufffü! ¡Qué rollo!

NARRADOR: Se aburría como una ostra como les sucede a la mayoría de los chicos en misa, pero no lo decía para que no se enfadasen sus papas. No se le ocurría que podía ir a otra más al estilo de los niños, porque a lo mejor le hacían hablar o leer y eso era demasiado esfuerzo.

«Y así en todas las cosas.»

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De modo que su vida de puro formal se iba convirtiendo en gris, monótona. No había entendido nada de lo de ser sal y luz de Jesús para que la vida tenga olor, sabor y color.


DISCÍPULO 1: Maestro, dices que debemos ser sal y luz para todos, y eso es bastante difícil.

DISCÍPULO 2: Es verdad, Jesús, creo que nos pides demasiado; me parece que a nuestros padres no les exiges tanto.

DISCÍPULO 3: ¿No habrás venido tú a quitar la ley de Moisés y enseñar lo que nos enseñaron los profetas?

SACERDOTE: Yo no he venido a quitar la ley sino a darle plenitud, y os aseguro que desaparecerán el cielo y la tierra antes que deje de cumplirse una letra o tilde de esa ley.

DISCÍPULO 4: Oye, Maestro, ¿y si nos saltamos algo de lo que dice la ley? ¿O se lo enseñamos mal a otros?

SACERDOTE: El que haga eso será el menos importante en el reino de los cielos.

DISCÍPULO 5: ¿Y si nos esforzamos por hacerlo todo bien y ayudamos a los demás a hacer como nosotros?

SACERDOTE: Entonces seréis importantes en el Cielo y sal y luz en la tierra.

DISCÍPULO 6: Maestro, ¿cómo podemos entrar en el Reino de los Cielos?

SACERDOTE: Tenéis que ser mejores que los letrados y fariseos. A ellos se les dijo: «no matarás, y si uno mata será condenado por el tribunal». Pues yo os digo: todo el que trate mal a su hermano será condenado.

DISCÍPULO 7: ¡ Pero Jesús, eso es muy difícil de cumplir! Además... ¿qué pasa si a mi hermano sólo le insulto?

SACERDOTE: Serás condenado.

DISCÍPULO 7: Entonces... ¡Así no se salva nadie! Con la de veces que nos insultamos todos.

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DISCÍPULO 8: Escucha, Maestro, el otro día al ir a comulgar recordé que un campanero estaba enfadado conmigo, ¡y con toda razón del mundo!

SACERDOTE: ¿Qué hiciste?

DISCÍPULO 8: ¿Yooo?, Pues comulgar.

SACERDOTE: No, amigo, no. Tenías que haberlo dejado todo, ir a pedir perdón al compañero, hacer las paces con él y, sólo entonces, acercarte a comulgar.

DISCÍPULO 9: Jesús, yo a veces miro lo que no debo.

SACERDOTE: Eso tiene solución. Si tu ojo te hace pecar, ¡sácatelo! Más te conviene perder un ojo que ser echado entero al fuego.

DISCÍPULO 10: ¿Y si alguna vez cogemos cosas que no son nuestras? También se puede pecar con las manos.

SACERDOTE: Si tu mano te pone en peligro córtatela y tírala. Mejor es perder una mano que caer entero en el abismo.

DISCÍPULO 11: Al menos nos dejarás jurar... si no lo hacemos en falso.

SACERDOTE: No, no debéis jurar en absoluto. Ni por el cielo, ni por la tierra, ni por Jerusalén, ni por nada. A vosotros os debe bastar con decir sí o no.

DISCÍPULO 12: Maestro, dices las cosas muy claras y son tan difíciles de cumplir que te puedes quedar más solo que la una.

SACERDOTE: ¿No os gusta? ¿No os parece bien? Pues... ¡marchaos!

DISCÍPULO 13: No Jesús, eso no. No nos ofreces un camino de rosas, pero la meta merece la pena. ¿A que sí?

TODOS: ¡Sí, sí, claro que sí!

DISCÍPULO 14: Maestro, te seguiremos a donde Tú vayas, y si el camino se hace difícil, en Ti encontraremos la fuerza necesaria.

7. CANTO

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¿Nos comportamos frecuentemente como Javi? ¿En qué cosas somos sobre todo egoístas? ¿Los demás pueden contar contigo fácilmente?

¿También a vosotros os parece difícil hacer lo que nos pide Jesús? ¿Cómo podemos conseguir que nos resulte más fácil?

¿Qué diferencia hay entre hacer el bien, y hacer bien las cosas? ¿Tú eres bueno porque haces bien las cosas, o porque haces el bien (amas) siempre y a todos?

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PRIMER DOMINGO DE CUARESMA^

Mensaje Tenemos que vencer las tentaciones.

Comentario Iniciamos el camino cuaresmal a la búsqueda del bien y la bondad. El punto de partida es mirar nuestra realidad inclinada al mal. Somos tentados por muchas manzanas con las que satisfacer nuestros deseos egoístas y deseos acaparadores. Y somos seducidos por muchas serpientes engañosas que nos atan a nuestras perezas y caprichos.

Materiales — Preparación de la escenificación o lectura dialogada. — Piedras y manzanas para la presentación de las ofrendas.

Observaciones Para la escenificación basta colocar a Javi con un micro portátil sentado tras una mesa y frente a la asamblea. Desde un ambón se leen los personajes, y desde el otro las tentaciones. También se puede hacer la escenificación más complicada, montando las escenas aprendidas de memoria.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. SALUDO

Vamos a pasar cinco domingos preparándonos para esos días tan importantes de Semana Santa, en que celebramos la muerte y resurrec-

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ción de Jesús. Estos domingos tienen el nombre de Cuaresma. Estaremos de camino para descubrir el Espíritu de Jesús, que es Espíritu de vida y de bondad.

3. PETICIONES DE PERDÓN

— Pedimos perdón por las veces que dejamos todo lo que tenemos que estudiar para el último momento, por ser tan vagos.

— Pedimos perdón porque nunca nos cansamos de tener, tener y tener; comprar, comprar y comprar... y nunca estamos satisfechos.

— Pedimos perdón porque sí nos cansamos de ser buenos y de hacer el bien.


4. LECTURA del libro del Génesis 2, 7-9; 3, 1-7

(Se puede hacer dialogada)

5. CANTO


7. ESCENIFICACIÓN NARRADOR: Javi iba aprendiendo en qué consistía ser bueno, me

jor dicho, ser discípulo y amigo de Jesús, hacer siempre el bien. Pero el hacerlo ya era otra cosa. Durante el día le pasaba lo mismo que nos pasa a todos desde la mañana hasta la tarde.

PADRE: Javi ¡levántate! ¡Ya es hora de ir al colé!

TENTACIÓN: Con lo a gustito que se está en la cama, ¿te vas a levantar? ¿No te has dado cuenta de lo blandito que está el colchón y lo suaves que son las sábanas? ¿Sabes el frío que hace esta mañana en la calle?

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JAVI: El caso es que tiene razón, pero me tendría que levantar. Pero, es que se está tan calentito que... no sé...

PADRE: Javi ¡¡levántate ya!!

JAVI: Contra pereza, diligencia.

NARRADOR: Cuando llegó al «colé» empezaron las clases tan aburridas y rollo como siempre. Si hablara con su amigo Lui-sito sería más divertido.

PROFESOR: El producto es la operación... por la que sumando...

TENTACIÓN: ¡¡Psshhü ¡Psshhü Javi, Luisito está tan aburrido como tú. Cuéntale algo o gástale alguna broma, así pasaréis un rato más divertido.

JAVI: Sí, pero si nos pilla el «profe» nos la cargamos; pero claro, si no nos arriesgamos...

PROFESOR: ¡Javi, quieres atender!

JAVI: ¡Combatiré el aburrimiento con esfuerzo!

NARRADOR: Y Javi salió del «colé», llegó a casa y su madre le mandó a por el pan. Le dio 200 pesetas.

VENDEDOR: ¡Han salido los últimos de la colección... los últimos...!

TENTACIÓN: ¡Con los pocos cromos que te faltan para tenerla completa...! Total... podías decir que se te han perdido las pesetas y no iba a pasar nada.

JAVI: Es verdad, si me lo gasto y luego digo que se me han perdido las «pelas», mi madre no se iba a enterar, y es que esos cromos...

VENDEDOR: ¡Niño, cuántos quieres...!

JAVI: ¡Fuera caprichos tontos!

NARRADOR: Javi llegó a casa y la comida ya estaba en la mesa. A Javi no le gustan las acelgas y ese día ¡¡¡acelgas!!!, así que se hacía el «locatis».

MADRE: Javi ¡¡a comer!!

TENTACIÓN: ¡¡Psshhü ¡¡Psshhü Javi, ¿por qué te tienes que comer las acelgas si te dan arcadas? Vete retrasándote, porque con las prisas de tu padre por ir al trabajo, con suerte te quitan el plato de delante...

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JAVI: ¡O me gano un tortazo! Pero, ¿por qué me voy a comer las acelgas si me dan arcadas?

MADRE: ¡¡Javi, ven a comer de una vez!!

JAVI: Me disciplinaré con lo bueno y lo justo.

NARRADOR: Javi, con la cuchara en la mano derecha y con la izquierda tapándose la nariz ¡¡comió!! Y se fue de nuevo al colé. Pero ¡hacía tan bueno!, ¡encerrarse otra vez! Por allí venía el Toni, el empollón y listorro de la clase.

COMPAÑERO: ¿Te has estudiado la lección y has hecho los ejercicios?

TENTACIÓN: ¡Fíjate lo bueno que hace! En la Taconera estarías ¡guay del Paraguay! ¡Ir a clase con el plomo del Toni a morirte de aburrimiento!

JAVI: No voy a clase. ¿Y si llaman a casa? ¡No, no llamarán! Y con suerte ni pasan lista. Al «profe» y al Toni, ¡que les den morcilla!

COMPAÑERO: Javi, ¿te vienes a clase o no?

JAVI: El esfuerzo será mi norma.

NARRADOR: Y al salir de clase se fueron los amiguetes a dar una vuelta. De repente se le ocurrió a Pablo, el cabecilla de la panda, ir a burlarse de la gente en la plaza del Castillo.

AMIGO: Esta tarde nos vamos a divertir, vamos a reírnos de la gente.

TENTACIÓN: No es que tengas que hacer siempre lo que diga Pablo que os maneja y os somete a todos, pero la propuesta de esta tarde es tan buena... ¡aprovecha!

JAVI: Ya sé que no está nada bien reírse de los demás, pero una acción así no la vamos a repetir todos los días, así que...

AMIGO: Javi, ¿te vienes o no?

JAVI: La amistad no es reírse de los demás.

NARRADOR: Y al llegar a casa tenía que estudiar para el examen de «mate» del día siguiente, pero el «Game Boy», se le había roto.

PADRE: Javi, ¡estudia que vas a volver a suspender la evaluación!

7 0 -

TENTACIÓN: Ya estudiarás luego, arregla primero el juego. Estudias todos los días, el juego se te estropeó el domingo y aún no lo has arreglado.

JAVI: Voy a arreglar el «Game Boy». Mañana me pedirán el cuaderno, pero ya meteré alguna «bola», y en el examen ya me pasarán alguna chuleta...

PADRE: Javi, ¿estás estudiando?

JAVI: Templaré mi voluntad con el esfuerzo.

NARRADOR. Y llegó la hora de acostarse. En la tele daban «Los Simpson» que era «demasiado» y no era plan perdérselo.

MADRE: Javi, ¡a la cama que ya es hora!

TENTACIÓN: Hazte el remolón un rato y al final te quedas, ya lo verás, porque a ellos también les gusta; ya dormirás el sábado.

JAVI: Además, mañana todos habrán visto el programa menos yo, y hago el ridículo. Me paso la vida durmiendo, ¡no sé qué quieren!

. MADRE: Javi, ¡que mañana no hay quien te levante!

JAVI: Enfadarme no sirve para nada.

NARRADOR: Así es como Javi fue haciendo las cosas bien, porque venciendo las tentaciones era como se superaba.


¿Pasas tú, como Javi, por las mismas tentaciones que él a lo largo del día? ¿Cuál es la más fuerte para ti? ¿Caes fácilmente en ella? ¿Cómo la superas?

¿Te dejas engañar fácilmente como Eva? ¿O eres decidido y valiente como Javi para vencer las tentaciones?

¿Ayudas a los demás a superarse, a ser mejores, a vencer las tentaciones? ¿Cómo?

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— Te presentamos Señor, estas piedras, símbolo de nuestro corazón de piedra; conviértelas en corazón de carne; saca de ellas hijos de Abraham; que trabajemos y las convirtamos en pan; golpéalas y saca de ellas agua viva.

— Te presentamos Señor, estas manzanas muy bonitas, símbolo de las muchas tentaciones que tenemos y que no nos ayudan a ser como Tú quieres. No queremos comerlas, sino sólo a Ti y a tu Palabra.

10. PADRENUESTRO

... No nos dejes caer en la tentación:

— de creer que no tenemos tentaciones;

— de creer que somos tan buenos que no tenemos nada que cambiar;

— de creer que podemos vencerlas solos sin recurrir a Ti;

— de nuestros cansancios y abandonos en el camino cristiano;

— de creer que la ruta del Evangelio es un aguafiestas para la vida;

— de querer conseguirlo todo a golpe de varita mágica, sin esfuerzo ni lucha.

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SEGUNDO DOMINGO DE CUARESMA # í

Mensaje Todos queremos crecer y ser mejores.

Comentario Además de la tendencia al mal, también tenemos deseos de superación y aspiraciones al bien, al amor, a la verdad, a la paz... los valores del Reino. Cuando se cumplen y satisfacen, nos llenan de felicidad: ¡Qué bien se está aquí! Pero son sólo momentos. La vida es esfuerzo y brega cada día.

Materiales Mochilas para la presentación de ofrendas.

Observaciones Misma escenografía del domingo pasado. Javi tras una mesa ante la asamblea. Se pueden hacer las lecturas dialogadas.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. DIÁLOGO

Entonces Javi le preguntó en voz baja: ¿Cómo se debe amar a Dios, Padre mío?

Amando a los hombres, hijo mío.

¿Y cómo se debe amar a los hombres?

Esforzándose en guiarles por el buen camino.

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¿Y cuál es el buen camino?

El que sube.

¿Dónde hemos de subir? ¿Cómo? ¿Por qué?...

3. ORACIÓN

Nosotros, Señor, somos egoístas, sólo pensamos en nosotros mismos sin preocuparnos para nada de los demás. Te pedimos que caminando por la vida con tu ayuda, superemos las dificultades y logremos transformar el mundo y nuestra vida. Por Jesucristo nuestro Señor.


4. LECTURA del libro del Génesis 12,1-4

5. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Javi, al vencer las tentaciones iba cambiando y se iba superando. Pero para cambiar y superarse, cual pequeño Abraham, tuvo que salir de su tierra, ponerse en camino y partir de viaje.

AZAFATA: Señores pasajeros; les habla la azafata del vuelo setenta veces siete con destino al perdón y la reconciliación. Va a iniciarse el despegue; sobrevolaremos por encima del odio, la envidia y el rencor. ¡Por favor, abróchense los cinturones y desconecten los móviles!

JAVI: «Quiero crecer»; quiero tener un espíritu grande, universal. Una mirada clara, serena. Compararme con los demás y envidiar sus cosas me hace más canijo y encoge mi alma, mi cara se pone triste y mis ojos llorosos. Quiero tener más y mejores amigos.

VOZ EN OFF: ¡Sal de tu tierra, Javi; sal de ti mismo, pequeño Abraham!

CAPITÁN: ¡Atención, atención! Les habla el capitán en nombre de la tripulación. Levadas las anclas y soltadas las amarras,

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zarparemos con rumbo a la verdad y a la autenticidad. Rodearemos el triángulo de la mentira, las apariencias y la hipocresía, zonas muy peligrosas y dañinas. En caso de peligro les rogamos mantengan la calma y se dirijan a los botes salvavidas. ¡Buen viaje!

JAVI: «Quiero crecer»; que mis papas, profesores y amigos me crean, se fíen y confíen en mí. Jamás diré una «trola», ni la más pequeña mentirijilla. Quiero que los demás me quieran tal como soy y por lo que soy. ¡Qué asco me dan los chuletas y los fanfarrones! ¡No quiero ser como ellos!

VOZ EN OFF: ¡Sal de tu tierra, Javi; sai de ti mismo, pequeño Abraham!

JEFE ESTACIÓN: El tren con destino al amor que se halla en la vía de la generosidad, va a efectuar su salida dentro de breves instantes. ¡Viajeros al tren!

JAVI: «Quiero crecer, no ser siempre un bebé al que le dan todo hecho; que mis pies sean ligeros y mis manos laboriosas para ayudar a los demás. Mi egoísmo, el todo para mí, quiero convertirlo en amor a todos».

VOZ EN OFF: ¡Sal de tu tierra, Javi; sal de ti mismo, pequeño Abraham!


7. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Pero en la vida también hay llegadas; momentos de fracaso y cansancio que nos invitan a abandonar los ideales. También hay momentos de triunfo que nos invitan a pararnos, a sentirnos satisfechos con lo realizado y orgullosos con lo conseguido, a montar las tiendas, y a disfrutar con nuestro bienestar.

AZAFATA: De nuevo con ustedes la azafata del vuelo setenta veces siete. Estamos sobrevolando el perdón y la reconciliación. Vamos a aterrizar dentro de breves instantes. Rogamos se abrochen los cinturones. Esperamos hayan tenido un feliz vuelo. ¡Muchas gracias!

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JAVI: ¡Tantas ganas de ser mayor y de amar a todos! Querer ser amigo de todos equivale a que nadie te tenga en cuenta, ya que todos te toman por tonto; y una cosa es ser bueno y otra ser tonto. Mucho mejor se está con los amigos de siempre, aunque alguna vez te aburras.

VOZ EN OFF: ¡Escucha, amigo Javi! ¡Levántate y no temas! ¡Baja a tus hermanos, buen Pedro!

CAPITÁN: ¡Atención, atención! El capitán y la tripulación les desean hayan tenido una feliz travesía. Gracias por su colaboración. ¡Les deseamos una feliz estancia!

JAVI: Fui de un sitio a otro sin pararme nunca con la verdad por delante, pero no conocí a nadie a fondo. Todos aparentan y presumen: que he estado de vacaciones en la playa, que si me compré una Barbi que llora, que si me compré unos patines, que si me regalaron unas Ree-boock... Mostrarse tal cual se es no conduce más que a que te las den todas en el mismo carrillo. ¡Eso de hacerse como niños es una engañifa!

VOZ EN OFF: ¡Escucha, amigo Javi! ¡Levántate y no temas! ¡Baja a tus hermanos, buen Pedro!

JEFE ESTACIÓN: El tren procedente del amor va a hacer su entrada por la vía del recuerdo.

JAVI: Cuanto más generoso era y mejor creía que hacía las cosas y más a gusto me encontraba conmigo mismo, el parecer de todos era que lo estaba haciendo mal, porque todos se aprovechaban de mí. ¡Me decían que era bobo!, que no tenía amigos ni eran auténticos, sino unos aprovechados. ¡Qué pena que la realidad sea muchas veces así!

VOZ EN OFF: Escucha, amigo Javi. ¡Levántate y no temas! ¡Baja a tus hermanos, buen Pedro!

NARRADOR: No nos olvidemos que la vida es caminar siempre hacia adelante, que no se detiene nunca, que siempre tenemos que salir de donde estamos para subir las montañas del cansancio, desánimo y fracasos, y bajar de las montañas de nuestras conquistas, éxitos y triunfos. No olvidemos que caminamos hacia nuestra última transformación y hacia la total transfiguración.

7 6 -


Como Javi, ¿tienes ganas y deseos de crecer? ¿Cuáles son los mejores? ¿Has conseguido alguno?

¿Te dicen tus papas, profesores, compañeros que eres mejor chaval cada día?

¿Te desanimas fácilmente ante las dificultades y lo poco que consigues?

¿Estás dispuesto a empezar cada día?



Te ofrecemos, Padre, estas mochilas con las que queremos hacer el camino siguiendo a Jesús. Acompáñanos siempre por el desierto y danos un corazón bueno para ayudar a los demás a caminar.

D. DESPEDIDA

10. DIÁLOGO

Entonces, Javi le preguntó en voz baja, ¿cómo se debe amar al prójimo, padre mío?

Amando a Dios sobre todas las cosas, hijo mío.

¿Y cómo se debe amar a Dios?

Esforzándose en seguir el buen camino.

¿Y cuál es el buen camino?

El camino que baja.

¿Hemos de bajar? ¿A dónde? ¿Cómo? ¿Por qué?

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TERCER DÜMING l lfflráfifí;!;^'::!^,

Mensaje Jesús sacia nuestros deseos de crecer y ser mejores.

Comentario Las aspiraciones y deseos que tenemos de ser mejores, al bien, al amor... reflejo de nuestra sed de felicidad, las intentamos satisfacer en distintas fuentes, en distintos pozos, de distintas maneras, con aguas edulcoradas, en muchos momentos de la vida. Peor sería no experimentarlas. Jesús es el pozo, la fuente, el agua viva, que calma todos nuestros deseos, nuestra sed.

Materiales Preparar escenificación.

Observaciones Misma escenografía del domingo anterior. En los primeros bancos de la asamblea se colocarán los niños a los que se dirigirá Javi. Otro grupo de niños para la segunda escenificación. Una niña hará de samaritana.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Porque pensamos que la felicidad está en seguir la comodidad y en encerrarnos en nuestro egoísmo.

— Porque queremos caminar por el desierto bien cargados de cosas que pesan más que nosotros mismos.

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— Porque buscamos calmar la sed con tonterías y chucherías en vez de buscar las fuentes de agua viva.


3. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Así que Javi, confundido entre su deseo de ser mejor, de salir de sí mismo cual pequeño Abraham, y lo poco que conseguía, decidió salir a la calle, bajar a sus hermanos cual buen Pedro, a ver si a los demás les pasaba lo mismo. Y cual pequeño periodista temeroso fue acercándose y preguntando a otros niños:

JAVI: Hola, ¿a dónde vais tan adormilados?

NIÑO: ¿No ves nuestras carteras? ¡A aguantar el rollo de los profesores!

JAVI: ¡Deberíais ir con más ilusión por aprender!

NIÑO: ¡Sí, pero nos torturan con muchos deberes y trabajos!

NARRADOR: A la hora del recreo:

JAVI: ¿Por qué habláis siempre de lo mismo: que si Raúl... que si el Madrid...?

COMPAÑERO: ¡No querrás que hablemos del Barga!

JAVI: Mejor sería que jugaseis e hicieseis deporte vosotros.

COMPAÑERO: Demasiado esfuerzo, preferimos divertirnos así.

NARRADOR: Ya por la tarde:

JAVI: ¿A dónde vas con tu mamá?

NIÑA: Voy de compras al Corte Inglés, a comprarme unos juguetes.

JAVI: Pero, ¿no te gustaría más jugar con tus amiguitas?

NIÑA: ¡Son unas cursis y me torturan con sus tonterías!

NARRADOR: A la hora de merendar:

JAVI: ¡Eh! ¡Oye! ¿A dónde vais tan contentos?

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AMIGO: Vamos al Burger a comer hamburguesas, beber Coca-Cola y divertirnos un rato.

JAVI: ¿Pero no estaríais mejor en casa con vuestros padres?

AMIGO: ¡Son unos pesados! ¡Siempre nos están torturando con sus recados y obligaciones!

NARRADOR: Un tanto desilusionado del mundo de los niños, se acercó aún con más miedo a unos jóvenes con sus motos:

JAVI: ¿A dónde os dirigís con tantas prisas?

JOVEN: Vamos «de marcha» a la discoteca.

JAVI: ¿Qué es eso «de marcha»?

JOVEN: ¡No nos molestes con tus preguntas que tenemos prisa!

NARRADOR: Aún más perplejo se acercó a un señor mayor que llevaba unos boletos en la mano:

JAVI: ¿Para qué son esos boletos?

HOMBRE: A ver si tengo suerte y me cae un «pellizco» en la Primitiva.

JAVI: Pero eso, ¿le haría mejor a usted?

HOMBRE: Mira chaval, el dinero lo soluciona todo, y más vale pájaro en mano que ciento volando.

NARRADOR: Vistas las respuestas que obtenía, decidió volver a casa. Por el camino iba preguntándose: ¿Qué puedo hacer yo con todos estos que van y vienen de un sitio a otro para satisfacer sus deseos y su sed? Y en estas estaba cuando se quedó dormido.

4. LECTURA del libro del Éxodo 17, 37

5. CANTO

6. LECTURA del evangelio según san Juan 4, 5-42

LECTOR: Jesús iba de camino con sus discípulos por el desierto y llegaron a un pueblo que se llamaba Sicar. En un monte había un pozo conocido por el nombre de Jacob. Jesús estaba cansado y se sentó junto al pozo. Era más o menos la hora de la comida. En esto llegó por allí una mujer

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que era de Samaría. (Sale y se pone delante de Javi que está dormido.)

Y por cierto, no sé si sabéis que los judíos y los de Samaría se llevaban fatal. La mujer se acercó al pozo a buscar agua. Estaba un poco sorprendida de ver allí a un hombre.

SACERDOTE: Oye mujer, ¿me das un poco de agua?

SAMARITANA: ¿Cómo Tú siendo judío, me pides agua a mí que soy samaritana? Porque Tú eres judío, se te nota en los ojos.

SACERDOTE: Si supieras quién te pide agua, le pedirías tú a Él y Él te daría a ti de beber.

SAMARITANA: No me hagas reír... Sin caldero ni nada, ¿cómo la vas a sacar del pozo, si se puede saber?

SACERDOTE: Si bebes de este pozo volverás a tener sed: Yo no te estoy hablando de esta agua. Esta agua no quita la sed. Yo tengo un agua que no se saca de este pozo.

SAMARITANA: Oye, pues dame de ese agua.

SACERDOTE: Vale. Vete a llamar a tu marido y vuelve con él.

SAMARITANA: No tengo marido.

SACERDOTE: Eso sí que es verdad. Ya has tenido cinco y el de ahora no es tu marido.

SAMARITANA: Veo que conoces mi vida y que me conoces a mí. Eres un profeta.

NARRADOR: La samaritana decía esto porque era en ese monte donde estaba el pozo y donde los samaritanos adoraban a Dios. En cambio los judíos lo hacían en Jerusalén. Por eso la samaritana le preguntó:

SAMARITANA: Oye, ¿dónde hay que adorar a Dios? ¿En el monte o en Jerusalén?

SACERDOTE: El sitio no importa. Lo que importa es hacerlo de corazón, con espíritu y verdad, porque así quiere Dios Padre que se haga. Él no quiere estar encerrado en los templos, sino que quiere relacionarse con nosotros.

SAMARITANA: Cuando venga el Mesías nos aclarará todo esto.

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SACERDOTE: ¿Y si fuese yo el Mesías?

LECTOR: En aquel momento llegaron los discípulos. (Sale un grupo de niños distintos de los seis anteriores.) La mujer se fue corriendo a decírselo a todos los del pueblo porque estaba emocionada con el encuentro de Jesús.

7. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Al despertar Javi, allí estaba ella, allí estaban ellos, los que creen que el agua no da la felicidad, que no está en ningún pozo sino en el corazón, en el espíritu, en la autenticidad, en la verdad. Así que decidieron seguir caminando y ofrecer su agua a los que se encontrasen por el camino:

JAVI: ¡Hola! ¿A dónde vais tan adormilados?

NIÑO: ¿No ves nuestras carteras?

JAVI: ¿No sabéis lo contentos que estaríais, lo felices que haríais a vuestros padres y el bien que podríais hacer a los demás, si os esforzaseis?

NIÑO: ¡Mira los sabiondos y empollones! ¡Se os está quedando la cara lacia de aburrimiento!

NARRADOR: ¡Tú no veas el corte que se llevaron! A la hora del recreo:

JAVI: ¿Por qué habláis siempre de lo mismo: que si Raúl... que si el Madrid...?

COMPAÑERO: ¡No querrás que hablemos del Barga!

JAVI: ¿Echamos unas carreras, o un partido de futbito?

COMPAÑERO: ¡Jugad vosotros si tantas ganas tenéis!

NARRADOR: No pudieron convencerles. Ya por la tarde:

JAVI: ¿A dónde vas con tu mamá?

NIÑA: Voy de compras al Corte Inglés a comprarme unos juguetes.

JAVI: ¿Por qué no te vienes con nosotros y eres amiga nuestra?

NIÑA: ¡No os necesito, ya estoy bien así!

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NARRADOR: Se negó a querer salir de sí misma. A la hora de merendar:

JAVI: ¡¡EN! ¡Oye! ¿Dónde vais tan contentos?

AMIGO: Vamos al Burger a comer hamburguesas, beber Coca-Cola y divertirnos un rato.

JAVI: Creo que seríamos más amigos si fuésemos a merendar a casa de NN.

AMIGO: ¡Mira los niños modelo! ¡Los niños como Dios manda!

NARRADOR: El corte que se llevaron fue monumental. Un tanto desilusionado del mundo de los niños, se acercó a unos jóvenes con sus motos:

JAVI: ¿A dónde os dirigís con tanta prisa?

JOVEN: ¡Vamos «de marcha» a la discoteca!

JAVI: Nosotros también estamos de camino, «de marcha». ¿Podemos ir?

JOVEN: ¡No, que todavía sois unos niñatos!

NARRADOR: Aunque la respuesta era para enfadarse, no lo hicieron. Al contrario, se acercaron simpáticamente a un señor mayor que llevaba unos boletos en la mano:

JAVI: ¿Para que son esos boletos?

HOMBRE: A ver si tengo un golpe de suerte y me cae un pellizco en la Primitiva.

JAVI: ¿Pero no es feliz oyendo cantar a los pájaros y viendo jugar y reír a los niños?

HOMBRE: ¡Que vuestra inocencia os dure muchos años!

NARRADOR: A pesar de las vergüenzas, de los cortes, de los enfados, de que todos los tomasen por ingenuos, tontos o locos, siguieron caminando y buscando a los que ofrecer su agua.

- 8 3 -


¿Qué les pasaba a las personas a las que se acercó Javi? ¿Por qué no querían ser mejores?

¿Dónde ponían su felicidad? ¿Por qué les costaba tanto esforzarse?

¿A ti también te desanima o acompleja, el que a veces seas tú sólo el que se porta bien?

¿En esas ocasiones encuentras en Jesús la compañía, el agua viva?

- 8 4 -

CUARTO DOMINGO DE CUARESMA

Mensaje Con los ojos del corazón se ve de distinta manera.

Comentario Jesús es el agua viva que nos llena el corazón de bondad y amor, para que miremos y veamos las cosas y las personas de distinta manera y descubramos su lado positivo, su bondad. Él con su amor, cura nuestras cegueras. Sin su amor somos y estamos ciegos y encerrados en nosotros mismos.

Materiales — Preparación de la escenificación. — Tiras de cartulina con las que taparse los ojos, y en las que es

tarán escritas las frases del guión. — Unos ojos dibujados para las ofrendas.

Observaciones La escenografía es la de cada domingo. Los niños de los primeros bancos de la asamblea tendrán las cartulinas que se pondrán delante de los ojos para que Javi las lea.

T

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. ORACIÓN

Como el ciego de nacimiento, también fuimos llevados a la pila bautismal, nueva piscina de Siloé. Las escamas de nuestros ojos caen cuando nos ponemos en manos de Dios y en camino de los herma-

- 8 5 -

nos. Haznos, Señor, recuperar la vista cuando caminamos hacia nosotros mismos. Por Jesucristo nuestro Señor.


3. ESCENIFICACIÓN

PREGONERO: Por orden del Sanedrín y de los Sumos Sacerdotes, todo aquel que reconozca que Jesús de Nazaret es el Mesías será expulsado de la Sinagoga y perderá los derechos de ciudadanía.

4. LECTURA del evangelio según san Juan 9,1 -41

LECTOR: Del evangelio de san Juan. En aquel tiempo había en Galilea muchos ciegos de nacimiento. (Los niños se ponen ante los ojos carteles con frases.) Al pasar vio Jesús un ciego de nacimiento.

NARRADOR: Javi llevaba un aire cansado y resignado. No eran las dificultades del camino y del desierto lo que le cansaba, sino encontrarse con ciegos que no se dejan curar y se sienten a gusto con su suerte.

(Se dirige cansinamente a leer los carteles.)

JAVI: ¿Qué hay amigo? ¿Todo va bien?

NIÑO: ¡Vaya, qué preguntita! ¿No ves el cartel que llevo? Pues léelo. ¡Así me van las cosas! ¡Estoy harto, hasta las narices!

JAVI: (Leyendo.) «Estoy solo y nadie me quiere».

JAVI: ¡Pues bien empezamos el día! ¡Menudo optimismo! ¡Anda, si hay muchos más como este!

«¡Es que no puedo!» «¡Todo el mundo es malo!» «¡Me tienen manía!»

«¡Siempre tengo que ser yo el malo!» «¡Ella empezó primero!»

«¡Los amigos no existen, sólo hay aprovechados!»

- 8 6 -

«Los profesores abusan de nosotros» «¡Dejadme en paz!»

«Nunca tenemos tiempo para jugar»

«¿Para qué voy a preguntar si no me van a hacer caso?»

«¿Para qué voy a obedecer si la culpa siempre la tengo yo?»

«¡Pues me quedo en casa y ya está!» «¡Es que ese es tonto!»

«¡Es que es un vago y no estudia nunca!» ¡Pues se lo tiene merecido!»

JAVI: ¡Qué barbaridad! Hoy me he tropezado con todos los optimistas del mundo... pero eso me recuerda una historia que me contaron mis papas de pequeño, cuando el profeta Samuel buscaba un rey para Israel y fue a ver a Eliab que tenía muchos hijos. Eliab, al ver desfilar a sus hijos delante de Samuel veía unas cosas, pero Samuel que tenía otra forma de mirar veía otras... Escuchad:

5. LECTURA del primer libro de Samuel 16,1.6-7.10-13

6. CANTO

LECTOR: Al pasar vio Jesús un ciego de nacimiento.

DISCÍPULO: Maestro, ¿quién pecó, éste o sus padres, para que naciera ciego?

SACERDOTE: Ni él, ni sus padres; está ciego para que se manifiesten en él las obras de Dios. Mientras es de día tenemos que hacer las obras que nos encarga el que me envió. Se acerca la noche en que no se puede trabajar. Mientras estoy en el mundo soy la luz del mundo.

LECTOR: Entonces escupió en tierra, hizo barro con la saliva, se lo untó en los ojos al ciego y le dijo:

SACERDOTE: Ve a lavarte a la piscina de Siloé (que significa Enviado).

NARRADOR: Javi habló enseguida de sus experiencias, de otras cosas y de otros mundos, de otros cielos, de la posibilidad de ver mejor las cosas y las personas si se miraba desde el corazón y al corazón:

- 8 7 -

(Pasa diciendo a cada niño una frase y le quita el cartel.)

«Dios te quiere» «Tú puedes, pero no quieres»

«¿Por qué piensas sólo en ti mismo?» «¡Déjate querer!»

«Piensa en los demás» «¡Ven y sigúeme!» «Dichoso si crees»

«Ama a tu hermano» «Amaos como yo»

«Amad a vuestros enemigos» «Haced vosotros lo mismo»

«Bienaventurados los pacíficos» «Perdonad de corazón»

«Hablad bien del que os maldice» «Así seréis hijos de vuestro Padre»

NARRADOR: Muchos no creyeron en sus palabras, decían: «Demasiado bonito para ser verdad». «Mejor lo malo conocido, que lo bueno por conocer». Sólo algunos, pocos, se quisieron curar de su ceguera y se unieron a su caminar

LECTOR: Llevaron ante los fariseos al que había sido ciego. El día que Jesús hizo barro y le abrió los ojos era sábado.

FARISEO: ¿Cómo has adquirido la vista?

CIEGO: Me puso barro en los ojos, me lavé y veo.

FARISEO: Ese hombre no guarda el sábado, no puede venir de parte de Dios. ¿Cómo puede un pecador realizar semejantes señales? A ti te ha abierto los ojos, ¿qué piensas tú de Él?

CIEGO: Que es un profeta.

FARISEO: Empecatado naciste tú de pies a cabeza, ¿y nos vas a dar lecciones a nosotros?

LECTOR: Y lo expulsaron. Oyó Jesús que lo habían expulsado, lo encontró y le dijo:

SACERDOTE: ¿Crees tú en el Hijo del Hombre?

CIEGO: ¿Y quién es, Señor, para que crea en Él?

SACERDOTE: Lo estás viendo; el que está hablando, Ése es.

CIEGO: Creo, Señor.

LECTOR: Y se postró ante Él.

8 8 -

7. CANTO


¿Cuándo tú te sientes como esos niños con los que Javi se encontró?

¿Qué es lo que más te entristece: que te insulten, que te den de lado, que te renieguen...?

¿Recuerdas alguna palabra de ánimo que te dijeron cuando estabas en esa situación? ¿Cómo te hizo sentir?

¿Tú también sabes animar a los que se encuentran de esa manera?



Te presentamos, Señor, nuestros ojos miopes, dudosos y ciegos. Ilumínalos con tu luz para que miren con ilusión, cariño y comprensión y vean al hermano necesitado.

Danos tus ojos para que miremos como Tú miraste. Pon saliva y barro en los nuestros y dinos que veamos para que venga la calma.

- 8 9 -

Mensaje El Espíritu de Jesús es espíritu de vida.

Comentario En todos nosotros hay muchas realidades de mal, de enfermedad, de muerte que nos impiden avanzar, que impiden el crecimiento del bien y del amor. A ello se unen nuestros desánimos y cansancios. El Espíritu de Jesús es un espíritu de amor y de unión. Es sobre todo quien nos da vida y quien hace que seamos y vivamos felices.


Observaciones Misma escenografía. Javi está dormido sobre la mesa hasta la escenificación. Seis niños de la asamblea que intervienen en la escenificación estarán dormidos.

A. LITURGIA DE LA PALABRA

1. ESCENIFICACIÓN


LECTOR: Lázaro era un buen amigo de Jesús y tenía dos hermanas: Marta y María. Como Lázaro estaba enfermo mandaron recado a Jesús diciéndole:

MENSAJERO: Por fin doy contigo. Te escondes mejor que los topos en sus cuevas. Te busco para decirte que tu amigo Láza-

- 9 0 -

ro, el hermano de Marta y María, está muy enfermo: ni come, ni ríe, se va a morir.

SACERDOTE: La enfermedad de nuestro amigo Lázaro nos hará dar gloria a Dios.

LECTOR: A los dos días de haber recibido al mensajero, Jesús dijo a sus discípulos:

SACERDOTE: Mañana en cuanto amanezca iremos de nuevo a Ju-dea. Lázaro nos está esperando. Nuestro amigo Lázaro se ha dormido y voy a despertarlo.

LECTOR: Los discípulos no entendieron que Jesús se refería a que Lázaro había muerto. A la mañana siguiente se pusieron en camino. Al llegar al pueblo, Marta salió al encuentro.

MARTA: Jesús, por fin has llegado. Mi hermano hace cuatro días que está muerto. Si Tú hubieras estado aquí no habría muerto.

SACERDOTE: Tu hermano no está muerto, está dormido. Y Dios se encargará de resucitarlo.

MARTA: No, Jesús, no nos engañes. Con la muerte se termina todo.

SACERDOTE: Al contrario, con la muerte comienza todo. También se muere la semilla y de ella nace un árbol nuevo que da flores y fruto. Pues Dios se encargará de hacer lo mismo con tu hermano: lo resucitará.

MARTA- Sí, pero, ¿cuándo será eso?

SACERDOTE: Pronto, porque Yo soy la resurrección y la vida. El que tiene fe en mí, aunque muera vivirá. ¿Crees esto?

MARTA: Sí. Creo que Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios.

SACERDOTE: ¿Dónde lo habéis enterrado?

MARTA: Ven a verlo, Jesús.

LECTOR: Al decir esto todos se pusieron en camino hacia el sitio indicado. Jesús andaba callado. Poco a poco se le fueron empañando los ojos de tristeza por su amigo y tuvo que sacar el pañuelo para secarse las lágrimas. Mientras la gente comentaba: ¡Mirad cuánto le quería a su amigo! Al llegar al sepulcro que era una cueva tapada con una losa, dijo Jesús:

- 9 1 -

SACERDOTE: Quitad la losa. Padre, te doy gracias porque siempre me escuchas. En tus manos está la vida porque Tú eres la vida misma. Te pido que Lázaro resucite. ¡Lázaro sal fuera! ¡Ven con nosotros!

(Un niño se coloca delante de Javi que está dormido.)

LÁZARO: Lázaro salió y se abrazó a Jesús. De los judíos que estaban allí presentes, al ver esto unos creyeron en Él. Sin embargo otros, viendo no entendieron, sino que se escabulleron entre la gente y fueron donde los fariseos a contárselo para que les diera más rabia todavía.

3. CANTO

4. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Cuando Javi volvió en sí de sus sueños e ideales, tan bonitos que casi no eran verdad.

JAVI: Pero, ¿qué pasa aquí?, ¿quién eres tú? (Se refiere al niño que tiene delante, Lázaro.) ¿Qué hacen todos esos medio dormidos? (Se refiere a otros niños que están en los bancos.) ¿O es que se han muerto?

LÁZARO: Más bien parecen moribundos. Fíjate en ese. {Señala a uno y van hacia él.)

JAVI: ¿Qué te pasa?

NIÑO 1: ¡Me muero de aburrimiento... esto de caminar y luchar para ser mejores es un rollo!

LÁZARO: ¿Y ese otro?

NIÑO 2: Estamos venga a animar a los demás a caminar y nadie nos hace caso... ¡Me muero de asco!

LÁZARO: ¿Y ese?

NIÑO 3: Tanto andar y andar, tanto animar a todos, tanto ayudar... ¿y qué saco? ¡Nada! ¡Me muero de cansancio!

LÁZARO: Mira ese.

NIÑO 4: ¡Que me saquen de aquí! ¡Tengo hambre! ¡Quiero manzanas y chupa-chups! ¡Me muero!

- 9 2 -

NIÑO 5: ¿Se puede saber cuándo acaba el desierto, el esfuerzo? ¡Ya no puedo más; me muero!

NIÑO 6: ¡Esto no se acaba nunca! ¡Yo abandono!

JAVI: ¡Pero bueno! ¿Esto es un desierto o un hospital?

LÁZARO: Más bien un cementerio con sus tumbas.

JAVI: ¿Y qué hacemos?

LÁZARO: Esas enfermedades son más graves de lo que uno se imagina, y si uno no se levanta pronto la pringas... Como me pasó a mí, y eso me parece que es lo que les está pasando.

JAVI: ¿Entonces no podemos hacer nada?

LÁZARO: ¿Cómo que no podemos hacer nada? ¿Todavía no te has enterado y llevamos tanto tiempo juntos?

JAVI: ¿De qué tengo que enterarme?

LÁZARO: De que para el hombre esto es imposible, pero no para Dios.

JAVI: ¿Qué quieres decir con eso?

LÁZARO: Lo que les falta es oxígeno. No pueden respirar. Hay que enchufarles el respirador y darles oxígeno en los pulmones. Y verás cómo se curan. ¿No recuerdas lo que decía el profeta Ezequiel?

JAVI: ¿Qué tiene que ver el oxígeno con los profetas?

LÁZARO: Escucha, escucha a Ezequiel. Él lo llamaba «Espíritu» y nosotros lo llamamos oxígeno, pero es lo mismo.

5. LECTURA del profeta Ezequiel 37,12-14

6. CANTO

JAVI: Bueno, y ¿de dónde sacamos el oxígeno?

LÁZARO: Muy sencillo: yo era amigo de Jesús. Ese es el respirador. Escucha:

VOZ EN OFF: «Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando».

- 9 3 -

(Se puede cantar aquí «Yo tengo un amigo que me ama».)

«El que se busca a sí mismo se muere, y el que se olvida de sí mismo resucita.»

«Si tienes fe como un grano de arena moverás una montaña.»

«No sólo de manzanas vive el hombre, sino del cariño de Dios que es un Padre.»

«El Reino de Dios está en medio de vosotros.»

«Deja lo que tienes y vente conmigo. Serás pescador, pero de hombres.»

«Es mucho más bonito dar que recibir.»

NARRADOR: Jesús ayudó a muchos a levantarse y seguir andando aunque parecía que estaban medio muertos. Les faltaba el oxígeno, espíritu, ánimo y aliento. Jesús les tomaba de la mano y les presentaba a sus amigos que antes habían sido ciegos, cojos y estaban sedientos, y ahora eran felices porque vivían y caminaban juntos y alegres. Y la alegría, el oxígeno del grupo se contagiaba a todos. Y todos se iban levantando y añadiéndose al grupo de Jesús. Porque el Espíritu que Dios había prometido era como una corriente eléctrica que se comunicaba de unos a otros.

JAVI: ¿Quién se viene conmigo?

NIÑO 1: ¿Dónde vas?

JAVI: A seguir el camino del esfuerzo.

NIÑO 2: ¡Pues vamos contigo!

JAVI: El camino va a ser duro. Pueden insultarme, reírse de mí, odiarme y matarme.

NIÑO 3: Pues iremos contigo y correremos la misma suerte.

NARRADOR: Y siguieron caminando, pero todos juntos. Así se animaban unos a otros para llegar hasta el final.


¿Has descubierto a lo largo de la Cuaresma que todo (lo negativo) se supera con el bien? ¿Que el amor es lo que nos hace buenos y felices?

- 9 4 -

Podemos hacer las cosas mal; podemos hacerlas porque nos mandan; podemos hacerlas porque nos gusta; en cada una de esas maneras de hacer, ¿cómo te sientes?

¿Sabes que como cristiano tienes que comportarte con el mismo espíritu de Jesús, que es espíritu de amistad y amor a todos?

- 9 5 -

CUARESMA

CICLO B

Javi de camino a la Luz

Mensaje Nuestras obras han de ser luminosas.

Comentario Como Pablo, somos seguidores de Cristo, de ahí que nuestro actuar ha de ser como el suyo, impregnado de amor. Porque no somos meros cumplidores, hagamos lo que hagamos, ha de brillar esa luz de nuestro amor de tal forma que los hombres «viendo vuestras buenas obras, glorifiquen a vuestro Padre», vean la gloria de Dios. Este será el punto de partida del recorrido cuaresmal.

I


1. LECTURA de la primera carta a los Corintios 10,31-11,1

2. CANTO

3. LECTURA del evangelio según san Marcos 1, 4-45

4. CUENTO «El hombrecito vestido de gris».

Había una vez un hombrecito que siempre iba vestido de gris. Tenía un traje gris, tenía un sombrero gris, tenía una corbata gris y un bigo-tito gris.

El hombrecito vestido de gris hacía cada día las mismas cosas. Se levantaba al son del despertador. Al son de la radio hacía un poco de gimnasia. Tomaba una ducha que siempre estaba bastante fría; tomaba el desayuno que siempre estaba bastante caliente; tomaba el

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autobús que siempre estaba bastante lleno; y leía el periódico que siempre decía las mismas cosas. Y todos los días a la misma hora se sentaba en su mesa de la oficina.

Todo era siempre igual, nada cambiaba de color. Y por eso nuestro hombrecito del traje gris tenía también la mirada gris.

Pero resulta que nuestro hombrecito era gris sólo por fuera. Por dentro era un verdadero Arco Iris: soñaba con ser cantante de ópera. ¡Famoso! Y entonces llevaría los trajes de color rojo, azul, amarillo, ¡trajes brillantes!

Cuando pensaba en estas cosas se emocionaba. El pecho se le hinchaba de notas musicales. Parecía que le iba a estallar. Y los ojos... los ojos le brillaban de emoción. Se le ponían casi rojos... Entonces corría a la terraza y se ponía a cantar: «¡la, la, la, la, lara!». Pero nadie apreciaba su arte. Nadie, ¡absolutamente nadie...!

Al oírle cantar, los vecinos que regaban las plantas le echaban agua con sus regaderas y el hombrecito entraba en su casa calado hasta los huesos.

Otro día fue peor. Era en primavera: volaban las golondrinas, las flores lucían en los rosales, por las ventanas se colaba un olor a jardín recién regado... Nuestro hombrecillo se ponía como las propias rosas.

Cuando llegó a la oficina se puso a cantar: «¡Granadaaaaaa...!» Pero en la oficina nadie le entendió y el jefe le amenazó con expulsarlo...

Otra vez le sucedió algo semejante en una cafetería: se puso a cantar. El dueño le mostró enseguida un letrero que decía: «Prohibido cantar», y con malos modales lo sacó hasta la calle.

Con todas estas cosas nuestro hombrecito sintió que se apagaban por dentro todas las luces de su fantástico Arco Iris. No le decía nada la primavera, ni las flores, ni los rosales...

Entonces nuestro hombrecito de bigote gris y del traje gris, y de los ojos grises iba por la calle con un pañuelón grande que casi le tapaba la cara, una cara gris... Y el pañuelón era gris.

Es que no me quieren, pensaba por dentro. Y su vida era gris, ¡como un día con mucha niebla!

Pero una noche el hombrecito gris se puso a cantar con nostalgia, muy bajito, sin entusiasmo.

- 1 0 0 -

Era una noche gris... junto a la fuente del parque. Casi no pasaba nadie por allí. De pronto un señor se detuvo junto a él:

«¡Cante, cante —le dijo— que lo hace usted muy bien!».

El hombrecito se fue entusiasmando. Cada vez cantaba con más ganas. Y sintió que por dentro le brotaba otra vez la primavera... Y empezó a saludar con su canto a las flores y a las rosas que estaban junto a la fuente del parque.

Al día siguiente el hombrecillo quemó su traje gris, se afeitó su bigote de color gris y rompió el pañuelo de color gris, y...

¡Y nunca, nunca volvió a tener la mirada de color gris...!

Cuando se asomaba a la terraza la gente seguía regando sus plantas y nuestro hombrecito pensaba: «Todos necesitamos querer y que nos quieran».

Y sus ojos brillaban como dos estrellas.


¿Qué es lo que más te ha gustado del cuento? ¿Por qué el hombrecito era gris? ¿Qué cosas le entristecían?

¿Qué cosas te entristecen a ti? ¿Cómo son tus vestidos? ¿Los colores de tus vestidos también están en tu corazón?

¿Qué colores dan luz y brillo a tu vida? ¿Tu comportamiento es luminoso? ¿Actúas como y para que los demás descubran a Dios?

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PRIMER DOMINGO DE C U A R E S M A | ¡ § ^

Mensaje Vivimos muchas situaciones de oscuridad.

Comentario Iniciamos el camino cuaresmal hacia la luz, partiendo de nuestra realidad oscura y sombría que apaga nuestra vida. La tentación en un primer momento y en apariencia, luce y brilla; si la seguimos, a la larga, nos entristece y nos complica la vida. Tenemos el juramento y la promesa de Dios que nunca se apagará su Arco-Iris.

Observaciones Para la escenificación, Javi se encuentra sentado tras una mesa ante la asamblea y con un micro móvil. Desde los micros de los ambones, a sus espaldas, se leen las tentaciones. La escenificación la vamos intercalando en la lectura del Génesis.

I

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. ORACIÓN

Iniciamos Señor, esta marcha de cuarenta días hacia la Pascua, la fiesta de la luz. No todos los caminos nos llevan a donde queremos ir aunque sean agradables y recorridos por la mayoría. Que tu luz nos ilumine el verdadero camino. Por Jesucristo nuestro Señor.

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3. LECTURA del evangelio según san Marcos 1,12-15

4. CANTO

5. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Javi, como el hombrecito vestido de gris, también llevaba una vida monótona y siempre igual: levantarse, ir al colé, hacer los deberes, soportar al «profe» de «Mate»... La mirada, también a él se le empezaba a poner de color gris. Pero por dentro como el hombrecito gris, era un verdadero Arco Iris. Tenía muchos sueños y deseos, sobre todo el de ser mejor cada día. Corría peligro que su vida se ennegreciese.

LECTOR: Dios miró a la tierra, y he aquí que estaba viciada (negra), porque todos los hombres tenían una conducta culpable.

• NARRADOR: Porque la tentación le rondaba continuamente:

TENTACIÓN 1: Di a tu mamá que te compre los juguetes, así al salir del «colé» te podrás divertir en vez de aburrirte con los deberes de «Mate».

TENTACIÓN 2: ¡Estudia! ¿No ves que tienes que aventajar a Luisi-to? Así los profesores te querrán más y los compañeros te admirarán y envidiarán.

TENTACIÓN 3: ¡Cómete esos dos pasteles! ¡No te pillará mamá! Están muy buenos, como para lamerse los labios y chuparse los dedos, y si colocas bien los que dejes no se notará.

JAVI: La verdad que por una vez que lo haga, aunque me pillen no va a pasar nada; a lo más una pequeña regañina de mi mamá.

NARRADOR: Tentaciones que le introducían en el camino fácil y cómodo, y que le apagaban su Arco Iris.

LECTOR: Viendo Dios que la maldad del hombre cubría la tierra, se arrepintió e indignó profundamente. Entonces dijo: ¡Voy a borrar de la superficie de la tierra al hombre!

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TENTACIÓN 1: Si los demás te tienen envidia ¡tú no permitas que nadie se te suba a las barbas!

TENTACIÓN 2: Antes de que te den, ¡da tú! El que da primero da dos veces. Lo de poner la mejilla es para bobos y tú no lo eres.

TENTACIÓN 3: Sobre todo no le pases una a tu hermana, ¿no ves que todo lo bueno se lo dan a ella?

JAVI: La verdad es que la tonta de mi hermana y la cursi de su amiguita me revuelven las tripas. ¡Ya estoy hasta las narices! La próxima que me hagan algo les parto las narices.

LECTOR: Noé fue el hombre más justo y cabal de su tiempo. Noé andaba con Dios.

Y dijo Dios a Noé y a sus hijos: «Yo hago un pacto con vosotros y con vuestros descendientes. El diluvio no volverá a destruir la vida ni habrá otro diluvio que devaste la tierra.

«Esta es la señal del pacto que hago con vosotros. Pondré mi arco en el cielo como señal de mi pacto. Cuando traiga nubes sobre la tierra aparecerá en las nubes el arco y recordaré mi pacto con vosotros».

NARRADOR: A trancas y barrancas Javi iba superando las tentaciones, siempre aplazándolas para la próxima ocasión. El Arco Iris que Dios había puesto en su corazón, con alguna nube que otra y a veces con algún nubarrón, se mantenía luminoso.


Como Javi, ¿sientes en tu interior esas voces? ¿A través de quién te vienen? ¿Cuál te suena con más fuerza: la de la envidia, el amor propio, la de la pereza...?

Cuando haces lo que te proponen, ¿cómo te sientes? ¿Qué haces para desoírlas? ¿Las superas con esfuerzo, disponibilidad y servicio?

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C. LITURGIA EUCARISTICA

7. PADRENUESTRO

... no nos dejes caer en la tentación:

— de la autosuficiencia, de querer tener todo y de todo; — de consumir todo lo que nos ofrecen; — de creernos los únicos y los mejores; — de confiar sólo en nosotros y no en Ti; — de vivir de puro capricho y llenos de caprichos.

Mensaje Nuestra vida es lucha entre luz y oscuridad.

Comentario Además de esas estrellas que nos incitan al mal, también hay otras estrellas buenas que tiran de nosotros. Son como estrellas fugaces que por un motivo u otro se apagan o quedan deslumbradas por otra luz superior. Como la luz que supuso para Abraham tener un hijo y que quedó deslumbrada por la gran luz de su fidelidad a Dios.


Observaciones Misma escenografía. Salen niños de dos en dos, y se colocan delante de Javi, para dialogar las escenas.


1. LECTURA del libro del Génesis 22,1-2.9.10-13.15-18 (Lectura dialogada)

2. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Javi, al vencer las tentaciones, iba iluminando su cara y su vida, ya no eran tan grises. Como Abraham, al que Dios una noche le encendió infinidad de estrellas y otra le dejó a oscuras con un apagón total, a Javi le pasaba otro tanto de lo mismo. No de noche —aún era muy niño—, sino durante el día.

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PADRE: ¡Javi, Javi! ¡Ven, hijo mío!

JAVI: ¡Aquí estoy!

PADRE: Este año iremos de vacaciones al extranjero.

NARRADOR: A Javi se le enciende una estrella y se le ilumina la cara. (Cara sonriente.) Pero:

MADRE: ¡Antonio, Antonio! ¡Que se me ha roto el lavavajillas! [Javi pone cara triste.)

PADRE: ¡Hay que gibarse! ¡Cada año igual, por una cosa u otra tenemos que irnos al pueblo!


NARRADOR: Como Abraham tiene que sacrificar su hijo primogénito, eso que momentáneamente le ilumina la cara.

PROFESOR: ¡Muy bien, Javi, has sacado un «sobre» en el examen! (Cara alegre.)


ALUMNO: ¡Señor profesor se ha copiao! (Cara triste.)


AMIGO: Javi, vamos a casa de Carlos a jugar con su Geiper Man.


MADRE: Acuérdate de que tienes que hacer las compras a la abuela.


PADRE: Javi, como esta semana has estudiado y sacado buenas notas toma el doble de paga.


POBRE: ¡Por favor! ¡Una limosnita, no tengo trabajo y llevo dos días sin comer!


MADRE: ¡Javi, toma mil pesetas para la hucha!


CATEQUISTA: ¿Cuánto vas a dar para la campaña de Manos Unidas?

NARRADOR: Y así sucesivamente, cada día se le iluminaba y se le apagaba la cara infinidad de veces. Cada día se le pedía como a Abraham, subir al monte a sacrificar lo que más

- 1 0 7 -

quería, lo que más le alegraba, lo que más le satisfacía, con lo que más se encariñaba. Pero él seguía adelante buscando más luz.

Hoy en el Evangelio, vamos a escuchar a Jesús que también subió a un monte, el Tabor, donde irradió una luz que salía de su interior y que ha de iluminar el nuestro. Luz que hace brillar nuestro Arco Iris cuando vencemos la tentación de nuestros caprichos, cuando servimos a los demás, cuando compartimos lo nuestro, cuando sabemos perder...

3. SALMO (Recitado por Javi)

Caminar es crecer y superarse.

Caminar en presencia del Señor es sentir su cercanía, dejarse guiar por sus deseos, dejarse envolver por su ternura.

Caminar hacia el país de la luz es luchar contra la oscuridad.

Pero, ¿dónde está, Señor, el país de la luz?

¿Dónde se encuentra la montaña de la luz? ¿Dónde la tierra del amor?

Porque, ¡cuántas tristezas y desánimos!

Dime, Señor, cuál es el país de la luz y llévame de tu mano, y me dejaré guiar.

Caminaré en presencia del Señor en el país de la luz, porque Tú eres el país de la luz y del amor.

Bendito seas, Señor, mi camino, mi luz y mi alegría.

4. LECTURA del evangelio según san Marcos 9, 1 -9


¿Qué cosas has querido hacer durante la semana y no las has hecho porque no has podido, no te han dejado, o porque te han propuesto hacer todo lo contrario?

¿Cómo te has sentido? ¿Que contrariedad te ha disgustado más? ¿Has superado el disgusto fácilmente?

¿Estás dispuesto a sacrificarte siempre por hacer el bien?

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TERCER DOMINGO DE C U A R E S M A U *

Mensaje Necesitamos luces para el camino.

Comentario Los mandamientos por su formulación negativa, más que luces para el camino son llamadas de atención. Si en su horizonte no está el Arco Iris de Dios Padre que nos hermana, son pesada carga, incluidos los mandatos y prácticas de tipo religioso que nos convierten en cumplidores. La gran luz que los ilumina a todos es: «Yo soy el Señor, tu Dios».

Materiales — Preparación de la escenificación. — Preparar preguntas y respuestas adecuadas a la escenificación,

además de-dejar espontaneidad en las respuestas.

Observaciones Para empezar la escenificación, el sacerdote recuerda la reflexión del domingo pasado.

I "~~

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. ORACIÓN

Señor, tu ley es perfecta, justa y verdadera; la has escrito en nuestro corazón. Te pedimos que el amor que tiene que iluminar nuestra vida se manifieste cuando la cumplimos. Por Jesucristo nuestro Señor.

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3. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Así que Javí, confundido entre lo que a primera vista iluminaba su cara y lo que de verdad iluminaba su corazón decidió salir a la calle a ver y a preguntar a la gente lo que hacía y por qué lo hacía. Y cual pequeño periodista se fue acercando y preguntando a los niños.

(Se levanta con el micro y va entrevistándoles. Se preparan preguntas de tipo: tú cómo vives, qué haces, por qué lo haces, a quién obedeces, por qué... Dejar espontaneidad en las respuestas.)

NARRADOR: Cansado y confundido por las respuestas que obtenía, decidió volver a casa. Por el camino se comía los sesos.

JAVI: ¡Madre mía! ¡Qué lío, qué caos! ¡Qué confusión!

NARRADOR: Tan confundido estaba que no sabía ni por dónde se andaba. De pronto se encontró ante una iglesia. Decidió entrar a descansar y a ver si se aclaraba. Cuando entró oyó que por los altavoces se leía. (El lector lee: Yo soy el Señor tu Dios...)

4. LECTURA del Éxodo 20,1 -17 (Lectura abreviada)

LECTOR: Yo soy el Señor tu Dios...

5. CANTO

NARRADOR: Eso ya le aclaró un poco la cabeza. Pero enseguida le vinieron los interrogantes: ¿Será eso verdad? ¿Serán esos mandamientos la luz que yo busco? ¿Todos estos que los escuchan los cumplirán? ¿Si no los cumplen a qué habrán venido? Voy a preguntárselo.

(De nuevo con el micro va a entrevistar, mejor a la gente mayor. Preguntas del tipo anterior. Preparar respuestas del tipo: A rezar, a pedir cosas a Dios, es decir, a negociar con Dios para conseguirlas.)

- 1 1 0 -

NARRADOR: Esta vez no se quedó confundido pero sí perplejo. No se le iluminó la cara ni se le oscureció, se le pusieron los ojos como platos. Y con esa cara de sorpresa se dirigió al sacerdote.

JAVI: ¿Usted qué opina de todo esto?

SACERDOTE: (Lee estas o parecidas palabras para introducir la lectura del Evangelio)

¡Bueno, chaval, qué quieres que te diga! La verdad es que mucha gente viene a cumplir una obligación, a rezar y a pedirle a Dios, a negociar con Él. Y eso está muy bien. Lo malo es cuando todo se queda en eso, no se participa y no se forma comunidad. Se corre el peligro de aburrirse, de renegar de Dios porque no nos oye ni concede lo que le pedimos. Y es que la misa no es en primer y único lugar un comercio. Yo creo que a Jesús le darán muchas veces ganas de hacer lo que hizo en el templo de Jerusalén. Vamos a escucharlo.

6. LECTURA del evangelio según san Juan 2,13-25

NARRADOR: Javi quedó si no más aclarado e iluminado, sí más tranquilizado. Su Arco Iris no se iluminó mucho más que otro día cualquiera. Así que siguió caminando en búsqueda de la luz, de su luz.


¿Te gusta venir con los demás niños a misa? ¿Por qué?

¿A qué venimos a misa? ¿Cómo estamos en misa? ¿Se nota durante la semana que venimos a misa? ¿Traemos nuestros problemi-llas, nuestros logros, nuestras alegrías a misa?

Si no es así, ¿por qué venimos?

¿Algún día has salido contento de misa? ¿Por qué?

-111 -

Mensaje Jesús es nuestra luz.

Comentario En la carta a los Efesios y en Evangelio se dice explícitamente que la luz es Cristo y creer en Él. Cristo es nuestra vida, nuestra resurrección, la bondad de Dios. Nuestras obras desde Cristo son buenas y luminosas. Por eso se trata de parecemos a Él en nuestro actuar.

Materiales — Misma escenografía. — Preparar escenificación. Se preparan unos niños para que re-

pondan a Javi en la entrevista.


1. LECTURA de la carta a los Efesios 2, 4-10

2. CANTO

3. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Javi siguió dándole vueltas a la cabeza durante toda la semana para ver si se aclaraba, si encontraba alguna luz. ¡Pero ni por esas! Así que al domingo siguiente decidió volver de nuevo a la Iglesia a preguntarle al cura.

JAVI: (Coge el micro y va al sacerdote.)

Osea que a Dios no le gusta ni quiere que la gente venga a cumplir una obligación, a rezar y a pedir. ¿Cogería un látigo y nos echaría a todos?

— 112 —

I

SACERDOTE: No, no. No quise decir tanto. Quizá me expresé mal el otro domingo debido al malestar y la insatisfacción que la situación nos produce a los curas. Pero no es eso. Escucha lo que dice el Evangelio este domingo.


NARRADOR: Al oír la palabra luz, la luz de su Arco Iris le salía por los ojos. El corazón le saltaba en el pecho de contento. Había descubierto por fin lo que buscaba.

JAVI: (Grita.) «La luz».

NARRADOR: Luz que era hacer, lo que Dios quiere. Así que a toda velocidad fue a decírselo a sus amigos. A ver si ellos también hacían lo que Dios quería. (Va a los niños.)

JAVI: ¿A ti qué es lo que te gusta hacer? ¿Qué es lo que quieres? ¿Y a ti... y a ti...?

NIÑO 1: Yo quiero muchas cosas y todas para mí; como todos los niños que son como yo y quieren todo para ellos.

NIÑO 2: Yo quiero que me compren muchos juguetes.

NIÑO 3: Quiero que mis padres me den de todo.

NIÑO 4: Quiero que todo el año sean vacaciones.

NIÑO 5: Quiero que hoy gane el Madrid y Raúl meta dos goles.

NIÑO 6: Que mis profesores no manden tantos deberes ni castiguen tanto.

NIÑO 7: Quiero pasarlo siempre bien.

NARRADOR: Cada respuesta le entristecía el corazón y apagaba la luz de sus ojos, hasta que totalmente desilusionado y rendido se quedó dormido. Pero su cerebro no estaba derrotado, como en sueños oía:

JAVI: (Dormido sobre la mesa y con su propia voz entrecortada.) Dios quiere que creamos en Jesús.

VOZ EN OFF: «Este es mi hijo amado, escuchadle».

JAVI: Dios no quiere que el hombre perezca.

- 1 1 3 -

VOZ EN OFF: «Tu fe te ha salvado, vete en paz».

JAVI: Dios no quiere condenar al mundo.

VOZ EN OFF: «Nadie te condena, yo tampoco; vete y no vuelvas a pecar».

JAVI: Dios quiere salvar al mundo.

VOZ EN OFF: «Hoy estarás conmigo en el paraíso».

JAVI: Dios quiere que prefiramos la luz.

VOZ EN OFF: «Mientras es de día, caminad en la luz».

JAVI: Dios quiere que obremos a su luz.

VOZ EN OFF: «Brille así vuestra luz entre los hombres».

JAVI: Dios no quiere que obremos perversamente.

VOZ EN OFF: «Que vuestras obras sean rectas».

JAVI: Dios quiere que realicemos la verdad.

VOZ EN OFF: «Que vuestro sí, sea sí».

JAVI: Dios quiere que obremos según Dios.

VOZ EN OFF: «Amaos los unos a los otros, como yo os he amado».

NARRADOR: Al despertar (se despierta) la cabeza le dolía de tanto martilleo, pero estaba contento porque había descubierto la luz: «Creer en Jesús» que es la luz y hacer lo que Dios quiere, que hay que escucharle y mirarle. Al decirse esto se acordó de la fábula que la catequista le había contado en Catequesis.

JAVI: (Invita a contarla a una catequista.)

Cuéntanosla a todos para que dejemos tantos caprichos y nos parezcamos más a Jesús.

CATEQUISTA: Aquel muchacho, casi un niño, iba a la montaña con su abuelo a cuidar las ovejas. Su pueblo vivía sometido a otro por conquista, eran pastores y no estaban preparados para la guerra.

Escucha: ya eres mayor y puedes participar del secreto. ¿Ves la peña en la cima? El viento y las lluvias han labrado una cara. Fíjate bien. Tiene que nacer en nuestro pueblo un libertador que nos libere de nuestros enemigos.

— 114 —

Ha de ser un hombre fuerte, valiente, generoso y muy inteligente.

¿Cómo sabremos quién es?

Tenemos una señal. Será aquél cuyo rostro se parezca al de la peña.

Mientras pastoreaba las ovejas, el pequeño pastor se pasaba largas horas contemplando el rostro de la peña. Deseaba con todas sus fuerzas parecerse a él.

Murió el abuelo y el nieto también sin que se cumpliera el anhelo. Muchos están en el monte contemplando la peña. Algunos bajan al pueblo con la pretensión de que ya se asemejan al rostro de la peña. Pronto se descubre su impostura.

NARRADOR: Javi había descubierto la luz. Ahora se trataba de ser luz, de parecerse al de la peña. Así que tuvo que seguir caminando.


¿En qué se parece lo que nos gusta hacer a nosotros con lo que Dios quiere?

¿Hay mucha diferencia entre lo que nosotros queremos y lo que quiere Dios? ¿Cuál es la principal?

¿Escuchas mucho a Jesús para saber y hacer lo que dice? ¿Qué es lo más importante que te dice a ti?

¿Sabes cómo se ama como Jesús? ¿En qué te pareces a Él?

- 1 1 5 -

' ^ S | Í Ñ T O DOMINGO DE CUARESMA

Mensaje El amor de Dios en nuestros corazones ha de iluminar nuestra vida.

Comentario Hoy las lecturas de Isaías y el Evangelio remarcan de nuevo que Dios es la luz del cristiano. Pero el matiz que podemos acentuar hoy es que nuestro actuar debe ir por el camino del perder, del abajarse, del morir como el grano de trigo. Así es como Dios nos glorifica, nos ilumina, y como nosotros somos luz e iluminamos.


I

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. DIÁLOGO

(Sacerdote con un reloj en la mano)

¿Cuáles son vuestras horas mejores, peores...? ¿Por qué?

¿Cómo son vuestras horas: tristes, aburridas, luminosas...? ¿Por qué?

3. ORACIÓN

Señor, Tú has venido hasta nosotros, nos hablas y tus palabras son luces luminosas que nos indican el camino. Tú nos manifiestas el ros-

— 116 —

tro de Dios, nos das tu vida y te quedas con nosotros. Concédenos que estas tres luces iluminen siempre nuestra vida. Por Jesucristo nuestro Señor.


4. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Pero en su camino ya no era todo como antes. Cuando empezó a caminar todo era monótono, gris, él era gris: hora de levantarse, hora de desayunar, hora de ir al colé, hora de comer... y así un día y otro. Ahora ya había descubierto la luz. Se trataba de parecerse a Él, a Jesús. ¿Qué tenía que hacer, estarse mirando la peña (estandarte, cruz) para parecerse a Jesús o hacer todo lo que había oído en sueños?


LECTOR: En aquel tiempo... (hasta) decírselo a Jesús. (El grupo de niños se acerca donde está Javi.)

NIÑO 1: Somos los niños con los que hablaste el otro día, los que hacemos lo que nos mandan y nuestros caprichos. Por eso nuestra vida es monótona y aburrida, gris, nosotros somos grises.

NIÑO 2: Por eso también queremos ver a Jesús.

(Javi les señala al sacerdote al que se dirigen.)

LECTOR: Jesús les contestó:

SACERDOTE: Ha llegado la hora... (hasta) Padre, glorifica tu nombre.

NIÑO 3: ¡Qué rollazo! ¡Habla búlgaro, no se le entiende nada!

(Bajan decepcionados donde se encuentra Javi.)

NIÑO 4: Estamos fuera de juego, no le hemos entendido nada. Que si ha llegado la hora.

NIÑO 5: Que el que se ama se pierde, el que se aborrece se guarda, que si se muere se da fruto... ¡Un verdadero lío! Un grupo de palabras parecido a un trabalenguas.

- 1 1 7 -

JAVI: Pues yo sí que empiezo a entender. Mi vida como la vuestra era monótona y triste, pero he descubierto la luz que es Jesús, y por eso me encuentro en un momento y una hora importantes. Tengo que elegir entre la vida gris de antes, o la vida luminosa con Jesús de amor a todos, pues me parece que si camino con Él habrá muchos momentos oscuros de encontrarme sólo, en que se reirán de mí, que me insultarán y me odiarán...

LECTOR: Entonces vino una voz del cielo.

VOZ EN OFF: «Lo he glorificado y volveré a glorificarlo».

LECTOR: La gente que estaba allí decía que había sido un trueno, otros decían que le había hablado un ángel.

NIÑO 6: ¿Qué ha sido eso? ¿A quién se le ha escapado?

NIÑO 7: No se le ha escapado a nadie, ha sido una voz ¡que la he oído muy bien!

NIÑO 8: Vamos a ver si el cura lo ha oído bien y nos lo explica esta vez mejor.

(Van de nuevo todos al sacerdote.)

LECTOR: Jesús tomó la palabra y dijo:

SACERDOTE: Esta voz... (hasta) a todos hacia Mí.

LECTOR: Esto lo decía dando a entender la muerte de que iba a morir.

JAVI: ¡Ya lo tengo! ¡Está clarísimo! ¡Ya sé qué hay que hacer! ¡Amar siempre y hasta la muerte si es necesario! Ese es el «Arco Iris» que tiene que iluminar nuestro corazón, nuestra cara, todo y toda nuestra vida. No el Arco Iris de Noé que se apaga y se enciende, sino el que anunciaron los profetas.

6. LECTURA del profeta Jeremías 31, 31 -34

7. CANTO

JAVI: ¡Está requete, requete clarísimo! Ese amor que Dios ha puesto en nuestro corazón es el mismo Dios.

— 118 —

NARRADOR: Y siguieron caminando, pero todos juntos. Así se animaban para que brillase ese Arco Iris en su vida y su vida fuera un Arco Iris.


¿Habéis puesto en clase de «Natu» alguna semilla para ver cómo germina? ¿Qué le sucedió? ¿Se murió? ¿Por qué? ¿Por falta de cuidado, por falta de atención, el sol la abrasó?

¿Germinó? ¿Cómo? ¿Dio flores y frutos? Al darlos, ¿qué le pasó a ella?

Si el amor es Dios mismo, es una semilla en nuestro corazón, ¿cómo cuidarla para que germine y no se muera?

¿Estás dispuesto a pudrirte como la semilla para dar flores y frutos?

- 1 1 9 -

CUARESMA

CICLO C

Javi de camino a la Verdad

SEXTO DOMINGO w »- -

Mensaje El Evangelio es una buena noticia de felicidad.

Comentario Como en los ciclos A y B este domingo nos sirve de punto de partida para el recorrido cuaresmal. El cristiano no es un hombre que se conduce por la ley, sino por el Evangelio. No es fundamentalmente un hombre cumplidor, sino un hombre de Bienaventuranzas.

Materiales — Preparar la escenificación del cuento.

I

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Porque somos ricos y todavía nos quejamos de no tener todo lo que queremos.

— Porque tenemos lo que nos gusta y otros necesitan.

— Porque creemos que ser hombres de provecho es llegar a ser ricos y estar bien situados.

3. ORACIÓN

Señor, Tú nos dijiste que los que tienen un corazón noble y honrado son amables con los demás, se preocupan cuando alguien sufre y constru-

- 1 2 3 -

yen la paz, son felices. Queremos creerlo pero nos cuesta mucho. Por eso, ayúdanos a parecemos a Ti. Por Jesucristo nuestro Señor.


4. LECTURA del profeta Jeremías 17, 5-8

5. SALMO (recitado)

Dichoso el que confía en el Señor y no en los fuertes, porque será como un árbol frondoso junto al río que da sombra y frutos.

Dichoso el que no vive para tener y acaparar, porque será feliz y le irá bien si comparte y ayuda a los que necesitan.

Dichoso el que no se deja engañar por la publicidad y el consumo, porque será libre y no será marioneta de los tiempos.

Dichoso el que no vive para sí y es servicial con los otros, porque todos le ayudarán y Dios le bendecirá con abundancia.

6. LECTURA del evangelio según san Lucas 6,17.20-26

7. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Javi era un niño bueno, se puso enfermo, tan enfermo que un día se murió. Las vecinas lloraban.

GRUPO NIÑAS: ¡¡¡Pobre Javi, con lo bueno que era!!! Listo... Obediente... Guapo... Ordenado...

Estudioso... ¡¡Pobre, Javi!! ¡¡Era tan buenoooooooü

NARRADOR: (Aparece.) Javi cogió, dejó a sus papas y vecinas plantadas y se fue al cielo, porque siempre le habían dicho que allí van los niños buenos. Llamó al timbre.

NICODEMO: ¡Buenas eternidades!... ¿Qué desea?

NARRADOR: Era san Nicodemo, que esos días sustituía a san Pedro en la portería, porque había agarrado un gripón de no te menees... A san Nicodemo se le notaba muchísimo que había sido fariseo en sus años mozos y tenía un tufillo a ley que clamaba al cielo.

- 1 2 4 -

NICODEMO: Bueno, bueno, no se quede ahí parado. Le he preguntado qué quiere.

JAVI: Es que... me he muerto y a mí siempre me han dicho que los niños buenos van al cielo, y como soy muy bueno porque mi mamá siempre me lo dice, pues he venido al cielo para quedarme.

NICODEMO: A ver, a ver, déjame que te mire. Mmmmmmmm un poco debilucho me andas, pero ya veremos qué se puede hacer. (Revuelve papeles.) Veamos. ¿Nombre?

JAVI: Javi.

NICODEMO: ¿Edad?

JAVI: Diez años.

NICODEMO: Vamos a ver... ¿te sabes el Padre Nuestro?

JAVI: Padre Nuestro, tú que estás en los que aman la verdad...

NICODEMO: No, no, no, nada de conciertos, para eso ya están los coros angélicos. El Padre Nuestro de verdad.

NARRADOR: Pero Javi no se sabía el Padre Nuestro, ni el antiguo, ni el nuevo.

NICODEMO: Veamos los mandamientos.

JAVI: El primero... amar a Dios sobre todas las cosas. El segundo no matar.

NICODEMO: ¿Qué es eso del segundo no matar? ¡Ese es el quinto!

JAVI: El tercero, no formicar.

NICODEMO: ¡Fornicar, leñe, fornicar! ¡Y de tercero nada, que ese es el sexto!

NARRADOR: Javi hizo el más solemne de los ridículos de toda su carrera de exámenes en el colé.

NICODEMO: Lo siento mucho, Javi... sin saberse esas cosas no se puede entrar en el cielo. Te vuelves a la tierra a aprenderte todo eso, y a cumplir todos los mandamientos uno por uno.

NARRADOR: Javi se puso a desandar el camino. Cuando llegó a casa todavía estaban llorando las vecinas.

GRUPO DE NIÑAS: ¡¡Qué bueno eraaaaaaaü

- 1 2 5 -

NARRADOR: Javi se volvió a meter en la cama dentro de su cuerpo, volvió a respirar, y por fin se puso bueno. Ahora cumplía los mandamientos al pie de la letra sin dejarse ni uno. Tenía un defecto que le preocupaba, se mordía las uñas.

MADRE: ¡Javi, deja de morderte las uñas!

NARRADOR: Y Javi dejaba de modérselas. Pero entonces se metía en dedo en la nariz y empezaba a hacer bolitas...

PADRE: ¡Javi, deja de meterte el dedo en la nariz y de hacer guarradas!

NARRADOR: Y Javi dejaba de meterse el dedo en la nariz. Pero volvía a comerse las uñas. En el «colé» todo seguía muy bien. Nunca suspendía. No se pegaba con nadie y cumplía el quinto mandamiento a la perfección. Ni siquiera el día en que todos riñeron a tortazo limpio.

Pero de pronto un día empezó a sentirse mal otra vez. Volvió a morirse. Y las vecinas volvieron a llorar.


NARRADOR: Javi, que ya se sabía el camino, se fue andando otra vez por las nubes hasta el cielo. Tocó el timbre y apareció, no san Nicodemo sino el mismísimo san Pedro, vie-jecito y simpático, que le dio un beso en la nariz.

JAVI: ¡Anda! ¿Pero no está san Nicodemo?

PEDRO: No, hijo, no. San Nicodemo está encargado ahora de la limpieza. Me han vuelto a poner a mí que en esto del cielo sé un poquito más. Aunque mucho me costó entenderle a Jesús lo que es bueno y es mal; que yo era muy bruto.

NARRADOR: Javi volvió a repetir lo mismo que la otra vez. Así que vuelta a las preguntas.

PEDRO: Vamos a ver Javi.

JAVI: Padrenuestroqueestásenlos cielossantificadoseatunom-bre...

PEDRO: Pero niño... ¡¡qué pasa contigoooooü

JAVI: ElprimeroamaraDiossobretodaaslascosas. Elsegundo...

- 1 2 6 -

PEDRO: ¡Vale, vale, vale! ¡Que no, tío, que no! ¿Cómo te has portado ahí abajo?

NARRADOR: Javi volvió a repasar todos los mandamientos; san Pedro se le quedó mirando de arriba abajo.

PEDRO: ¡Chiquillo! ¡Vaya empanada que te traes!

JAVI: ¿Pero es que no vale lo que he dicho?

PEDRO: Sí, pero no como lo cuentas, que eres santo, santísimo, y no es tan sencillo. Si así fuera el cielo estaría lleno de gente rara que nunca ha roto un plato.

JAVI: Bueno, también es verdad que me mordía las uñas... y me metía el dedo en la nariz.

PEDRO: Bueno... que no es eso lo que me interesa. Vamos a ver, ¿qué pasó el día que os peleasteis a tortazo limpio?

NARRADOR: Javi se quedó de piedra.

PEDRO: ¿Por qué no separaste a los que se peleaban? Claro, con tu manera de pensar no hay quien se convierta. Hay muchas cosas que no sabes, y es que no te has enterado de la fiesta a pesar de tanta catequesis.

NARRADOR: Y Javi volvió a bajar del cielo resignado, volvió a meterse en su cuerpo, a vivir otra vez, y a dejar boquiabiertas a las vecinas que seguían diciendo como tontas:



¿Qué es lo que te ha gustado más de la historieta? ¿Por qué las vecinas exclamaban ¡qué bueno era!? ¿Dicen lo mismo de ti?

¿Sabes la diferencia que hay entre bueno y formal? ¿Tú qué eres bueno o formal?

¿Se puede ser una cosa y no la otra? ¿Por qué?

¿Por qué lo importante es ser bueno y tener un buen corazón?

- 1 2 7 -

Mensaje

No nos dejemos engañar, ni manipular.

Comentario Iniciamos el camino hacia la verdad. Partimos de la realidad en que nos encontramos: un mundo que nos seduce, nos engaña, nos tienta con la propaganda. Un mundo engañoso que nos manipula y que nos promete el cielo, pero nos mantiene siempre insatisfechos por alcanzarlo, o frustrados porque nunca lo conseguimos.

Materiales — Preparación de la escenificación.

Observaciones Para la escenificación, Javi se encuentra sentado tras una mesa ante la asamblea con un micro móvil. Desde los micros de los ambones se leen los anuncios. Elegir los más actuales.

I

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Tenemos los oídos tapados por muchos ruidos y voces y no distinguimos tu voz.

— Decimos que queremos seguirte pero no pensamos como Tú, ni nos interesa lo que a Ti te gusta.

— La comodidad nos deja parados y no avanzamos como Tú quieres.

- 1 2 8 -

3. ORACIÓN

Padre nuestro, queremos oír tu voz. Queremos seguir tus caminos. Danos fuerza para no quedarnos quietos e ir avanzando cada día por tus caminos, que son los caminos del bien y del amor. Por Jesucristo nuestro Señor.


4. LECTURA del evangelio según san Lucas 4,1-13 (Se puede hacer dialogada)

5. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Javi, además de ser muy bueno aunque con algunos defectillos, quería ser muy feliz y soñaba mucho. Tan feliz y tan soñador que se iba hasta el cielo. Entre sus defectos estaba que le gustaba la tele. Y entonces se olvidaba de hacer los deberes.

MADRE: ¡Javi, los deberes!

JAVI: ¡Qué pesada eres mamá! Ahora voy.

NARRADOR: Y ese ahora nunca llegaba. El programa «Los Simp-son» le tenía comido el «coco». También le gustaban los anuncios que le prometían el cielo y le hacían olvidar el otro cielo, el de san Nicodemo y san Pedro.

ANUNCIOS

Los chicles de dos sabores. Top, guay.

La nueva Barbi te gustará, puedes teñirle y después se va.

¿Por qué en Holly day? ¡Poque me gusta!

La muñecas de Famosa se dirigen al portal, para ver y dar al Niño su cariño y amistad.

NARRADOR: Era como decirle: feliz tú si tienes muchas cosas, juguetes, golosinas, dineros para gastar...

MADRE: Javi, ¡quieres apagar la tele!

- 1 2 9 -

JAVI: ¡Ya va mamá!

ANUNCIOS

Ariel Oro, el único detergente que deja la ropa limpia.

Prueba el nuevo champú ultra suave, para que tu pelo esté sano y fuerte. De Wash and Go.

El suavizante Bold con suavizante incorporado no deja ni una mancha. ¡Ahí va! ¡Ahí Bold!

¡Hola, soy Edu! ¡Feliz Navidad! ¡Hola, soy Edu! ¡Feliz Navidad!

NARRADOR: Era una invitación a sentirse importante, el centro de todo si quería ser feliz. Que los demás le hicieran caso e hicieran sus caprichos.

MADRE: ¡¡Javi, vas a ir a estudiar de una vez!!

JAVI: ¡Medio minuto más que ya voy!

ANUNCIOS

Del Caserío me fío. Y cuando llegue a casa Nescafé Capuchino.

Bea, Bea me gatea. Está aprendiendo a andar. Bea, la nueva muñeca que encontrarás. En Toy R'us todos los juguetes tendrás.

Hoy he ido a la piscina y me duele la cabeza. Aspirina te sentará bien para todo.

Vuelve a casa, vuelve. Vuelve a tu hogar. Que hoy es Nochebuena, vive la felicidad. Vuelve a casa por Navidad.

NARRADOR: Y él escuchaba: ¡Disfruta, disfruta!, ¡ya estudiarás mañana!

Al final vencía esas tentaciones y acababa sentado ante el infierno de sus deberes. Tendría que subir y bajar muchas veces al cielo, si quería que san Pedro le dejase pasar definitivamente.


¿Sueles ver mucho la tele? ¿Qué programas te gustan más? ¿Qué aprendes de ellos?

- 1 3 0 -

¿Qué anuncios llaman más tu atención? ¿Te has fijado bien en lo que te dicen y cómo te engañan?

¿Tú mientes a los demás? ¿Y a ti mismo?

¿De quién te fías siempre? ¿Quién te dice siempre la verdad y nunca te defrauda? ¿Por qué?

-131 -

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Mensaje La verdad está en nuestro interior.

Comentario La vida es siempre un camino de superación. Como Abraham, dudamos si conseguiremos las metas que nos proponemos. Si nos esforzamos por superar las dudas y conseguir nuestras metas, la verdad nos hará libres. ¿Seguimos a nuestro vientre, nuestras vergüenzas (lo que nos pide el cuerpo; 2a lectura), o a Jesús, el Hijo amado?

Materiales Preparación de la escenificación.

Observaciones

La escenografía es la misma del domingo anterior. Los personajes leen desde los ambones. La expresión de Javi «¿y cómo sabré que voy a ser yo mismo?» responde a la pregunta que Abraham hacía a Dios, «¿y cómo sabré que voy a poseerla» (la tierra)? En la lectura dialogada del Génesis introducimos pequeños comentarios.

T

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

Por las veces que nos quedamos apegados a nuestras cosas sin ser capaces de compartir.

- 1 3 2 -

— Por las veces que hemos dominado, insultado y despreciado a los demás.

— Porque no ayudamos a los débiles y a los que más nos necesitan.

3. ORACIÓN

Ven Señor en ayuda de nuestra debilidad. No acertamos a seguir tus pisadas. A todas horas seguimos siendo injustos y egoístas los unos con los otros. Danos tu luz para que veamos claro. Por Jesucristo nuestro Señor.


4. LECTURA del libro del Génesis 15, 5-12.17-18

LECTOR: En aquellos días Dios sacó afuera a Abrán y le dijo:

VOZ EN OFF: Mira el cielo, cuenta las estrellas si puedes. Así será tu descendencia.

LECTOR: Abrán creyó al Señor y se le contó en su haber.

COMENTARIO 1: Como Abrán también nosotros nos lamentamos de no recoger ningún fruto a pesar de nuestros esfuerzos. Al contrario, nos cansa la rutina de cada día. Todas las horas el mismo rollo. Ya no nos preocupa nada.

COMENTARIO 2: Y sin embargo, este Abrán sin hijos, cada uno de nosotros, rutinarios y aburridos, somos invitados por Dios a una aventura nueva.

LECTOR: El Señor le dijo:

VOZ EN OFF: Yo soy el Señor que te sacó de Ur de los Caldeos para darte en posesión esta tierra.

ABRAHAM: Señor Dios, ¿cómo sabré que voy a poseerla?

VOZ EN OFF: Tráeme una ternera de tres años, una cabra de tres años, una tórtola y un pichón.

LECTOR: Abrán los trajo y los cortó por medio, colocando cada mitad frente a la otra, pero no descuartizó las aves. Los buitres bajaban a los cadáveres y Abrán los espantaba.

- 1 3 3 -

Cuando iba a ponerse el sol, un sueño profundo invadió a Abrán, y un terror intenso y oscuro cayó sobre él.

El sol se puso y vino la oscuridad. Una humareda de horno y una antorcha ardiendo pasaban entre los miembros descuartizados.

COMENTARIO 1: Dios también nos llama a nosotros. No tolera que nos quedemos quietos y nos introduce en el riesgo, la preocupación, el miedo... en las sombras del miedo al fracaso, de la vergüenza, del qué dirán... que son como buitres que revolotean en nuestra cabeza.

COMENTARIO 2: Como Abrán somos invitados a la aventura de la fe. Fue en esa oscuridad como Dios se le reveló como antorcha luminosa.

LECTOR: Aquel día el Señor hizo Alianza con Abrán en estos términos:

VOZ EN OFF: A tus descendientes les daré esta tierra desde el río de Egipto hasta el gran río.

COMENTARIO 1: A los cristianos también nos molesta la duda, la incertidumbre, vivir en búsqueda, creer en la energía de Dios, como nos lo expresa la carta de san Pablo de hoy.

5. LECTURA de la carta a los Filipenses 3,17-4,1

6. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: Javi, al vencer las tentaciones aprendía que no se pueden seguir tantos caminos como nos proponen. Ni hay que subir y bajar tantas veces. Que como Abraham hay que recorrer un único camino: el camino hacia uno mismo, a la propia tierra. Así que empezó a caminar dispuesto a escuchar a sus papas, que sabía que le querían mucho y bien.

PADRE: Porque te queremos mucho queremos lo mejor para ti: que seas un buen chaval con tus compañeros, no les hagas lo que no quieres que te hagan, haz caso a los profesores y estudia mucho para ser un hombre de provecho, el mejor en aquello que tú quieras ser.

- 1 3 4 -

JAVI: ¿Y cómo sabré que voy a ser yo mismo?

NARRADOR: Aunque los abuelos le cansaban ya con sus batallitas, también empezó a hacer caso a sus consejos.

ABUELA: Obra siempre según tu conciencia que es la voz de Dios, y no tendrás nunca nada de qué arrepentirte. Te habla la voz de la experiencia.


NARRADOR: Con los amigos empezó a compartir no sólo travesuras y meterse con las niñas, sino también cosas más importantes.

AMIGO: Si hemos de ser sinceros, seríamos más felices si no nos metiéramos tanto con las niñas. Si jugásemos a otras cosas hasta seríamos más amigos.


NARRADOR: También empezó a hacer caso a los pelmazos de los profesores.

PROFESOR: Trabaja y estudia más. Sobre todo di siempre la verdad, muéstrate como eres, no trates de engañarnos porque al único que engañas es a ti mismo.


NARRADOR: Y sobre todo empezó a hablar a Jesús y a escucharle:

VOZ EN OFF: Dichoso serás tú si eres sencillo, misericordioso, limpio de corazón, pacífico...


NARRADOR: Y es que la sombra del fracaso, del qué dirán, del sentir vergüenza, del miedo y cobardía, de las dudas... revoloteaban sobre su cabeza como buitres amenazadores.


LECTOR: ... escuchadle:

VOZ EN OFF: No os preocupéis por la vida... pensad que vuestro Padre sabe lo que necesitáis.

Si quieres ser perfecto, vete a vender todo lo que posees... y luego vuelve y sigúeme.

- 1 3 5 -

El que quiera seguirme que renuncie a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga.

Yo soy el camino, la verdad y la vida.

LECTOR: Cuando sonó la voz...

NARRADOR: Javi emprendió ese único camino hacia sí mismo. Ese «escuchadle» quedó grabado en su mente y en su corazón; y fe ayudó a matar esos buitres amenazadores y a estar siempre de camino sin paradas y sin vueltas atrás.


¿Quién influye más en tu vida? ¿A quién haces más caso?

¿Crees que lo que los papas y profesores te dicen es para fastidiarte? ¿Entonces por qué no les haces más caso?

¿Por qué a veces haces más caso a tus amiguetes?

¿Te das cuenta de que si te avergüenzas ante ellos y tienes miedo a que se rían de ti, más te engañas a ti mismo?

¿Escucharás y serás siempre amigo de Jesús porque nunca os mentís?

- 1 3 6 -

OMINCO DE CUARESMA **¿

Mensaje Dios liberador de nuestras mentiras nos invita a cambiar.

Comentario El mensaje de las lecturas de este domingo es claro: Dios es la Verdad. Jesús es nuestra verdad. Nuestra vida tiene que consistir en buscarles y escucharles para encontrar nuestra verdad, convertirnos y cambiar nuestras mentiras.

Materiales — Preparar la escenificación. — Una cuerda o cadenas para las ofrendas.

Observaciones La misma escenografía. A parte de las respuestas espontáneas, preparar unas cuantas respuestas que darán los niños y las personas mayores en la entrevista de Javi.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. DIÁLOGO

¿Es verdad que el que la hace la paga?

¿Es cierto que siempre pagan los que no tienen la culpa?

¿Podemos disculparnos con «la culpa la tienen los otros»?

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3. RITO DEL PERDÓN

— Porque siempre nos preocupamos de nosotros mismos y no tenemos un corazón grande y generoso.

— Porque no nos damos cuenta de que lo que hacemos a los demás te lo hacemos a Ti.

— Porque no queremos verte en las personas que nos rodean y pasamos de largo.


4. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: «Escuchadle» «Escuchadle». Era lo que a Javi le martilleaba en la cabeza mientras caminaba hacia la verdad de sí mismo, hacia la autenticidad.

LECTOR: Hoy la primera lectura nos dice cómo Moisés descubrió su verdad y la Verdad con mayúsculas, a Dios.

5. LECTURA del libro del Éxodo 3, 1-8.13-15

LECTOR: En aquellos días pastoreaba Moisés el rebaño de su suegro Jetró, sacerdote de Madián. Llevó el rebaño transhu-mando por el desierto hasta llegar a Horeb, el monte de Dios. El ángel del Señor se le apareció en una llamarada entre las zarzas. Moisés se fijó. La zarza ardía sin consumirse. Moisés se dijo:

MOISÉS: Voy a acercarme a mirar este espectáculo admirable, a ver cómo es que no se quema la zarza.

COMENTARIO: El primer paso es ser curiosos como los niños. Mirar la realidad, lo que pasa. No para satisfacer la curiosidad, admirarnos o lamentarnos de lo que pasa, sino para mirarla en profundidad, ver su sentido y asumir nuestra responsabilidad.

LECTOR: Viendo el Señor que Moisés se acercaba a mirar, lo llamó desde la zarza.

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VOZ EN OFF: ¡Moisés, Moisés!

MOISÉS: ¡Aquí estoy!

VOZ EN OFF: No te acerques. Quítate las sandalias de los pies, pues el sitio que pisas es terreno sagrado. Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac, el Dios de Jacob.

COMENTARIO: Dios ordena acercarnos a Él sin sandalias, es decir, sin caretas ni máscaras, sin mentiras, sin apariencias... despojados de nosotros mismos.

LECTOR: Moisés se tapó la cara temeroso de ver a Dios. El Señor le dijo:

VOZ EN OFF: He visto la opresión de mi pueblo en Egipto, he oído sus quejas contra los opresores, me he fijado en sus sufrimientos. Voy a bajar a liberarlos de los egipcios, a sacarlos de esta tierra para llevarlos a una tierra fértil y espaciosa, tierra que mana leche y miel.

COMENTARIO: Más que el cielo, a Dios le gusta bajar, estar a nuestro lado, acompañarnos aunque no le veamos, para así elevarnos y transformarnos.

MOISÉS: Mira, yo iré a los israelitas y les diré: el Dios de vuestros padres me ha enviado a vosotros. Si ellos me preguntan cómo se llama este Dios, ¿qué les respondo?

VOZ EN OFF: «Soy el que soy». Esto dirás a los israelitas: «Yo soy» me envía a vosotros.

COMENTARIO: De nuevo nos repite que es el Dios cercano y presente; que nos habla y actúa en nuestra vida.

VOZ EN OFF: Esto dirás a los israelitas: el Señor de vuestros padres, Dios de Abraham, Dios de Isaac, Dios de Jacob, me envía a vosotros. Este es mi nombre para siempre. Así me llamaréis de generación en generación.

COMENTARIO: Gracias a este Dios son posibles todas las pascuas, es decir, salir de nuestras mentiras para vivir como hijos de la verdad que hace libres.

NARRADOR: Javi con el «escuchadle, escuchadle» estaba atentísimo y no perdía ripio. Así que le encantaba lo que oía. No

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sabía si era la primera vez que lo escuchaba, pero sí le sonaba y nunca se había parado a pensar eso de quién era Dios. No tenía ni idea. Así que cual pequeño periodista fue a ver si a la gente le pasaba lo mismo.

JAVI: (Entrevista a unos cuantos niños, fijados de antemano y les pregunta.)

¿Quién es Dios? ¿Cómo se llama? ¿Dónde está? ¿Qué hace?

(Respuestas preparadas.)

NIÑO 1: ¡Y yo qué sé! Yo no lo he visto nunca, debe ser transparente.

NIÑO2: Debe estar sordo porque a mí nunca me hace caso cuando le pido algo.

NIÑO 3: Pues a mí me han dicho que a los niños malos los manda al infierno.

NIÑO 4: ¡Eso, eso! Siempre nos está vigilando para ver cuándo nos portamos mal.

NIÑO 5: Si es tan bueno como dicen no sé por qué permitió que se muriese mi abuelita.

NIÑO 6: A lo mejor no nos hace caso porque se ha ido de vacaciones al extranjero y no está en el cielo.

NIÑO 7: Si queréis saberlo, leed la Biblia.

NIÑO 8: ¿Y si resulta que después de comernos tanto el «coco» no existe?

NARRADOR: A Javi las ocurrencias le hacían gracia y a la vez también le entristecían. Así que se sentó de nuevo para seguir escuchando atentamente.

6. LECTURA del evangelio sengún san Lucas 13,1-9

NARRADOR: El que Jesús repitiera por dos veces «si no os convertís, todos pereceréis» le llamó la atención. Empezó a re-sonarle como antes le había resonado el «Escuchadle, escuchadle». Era como si dijese «cambia, cambia».

Pero cambiar ¿qué? Cogió de nuevo el micro y salió a preguntar, pero esta vez no a los niños. Por lo que ha-

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bía oído antes, poco le podían aportar. Se dirigió a los mayores.

JAVI: (Se dirige a personas mayores:)

¿Qué tengo que cambiar?

(Respuestas preparadas:)

ADULTO 1: Así, a primera vista... no sé... yo te diría que si no haces caso a los papas les obedezcas más.

ADULTO 2: Siguiendo lo que te ha dicho ese señor puedes cambiar muchos verbos: si mientes, decir la verdad; si acaparas, compartir...

ADULTO 3: También puedes cambiar las manos. En lugar de llevarlas cerradas, llevarlas abiertas.

ADULTO 4: Puedes cambiar el gesto. Si vas serio y triste, ir alegre y sonriente.

ADULTO 5: Yo creo que todos hemos de ser distintos, de otra manera, para ser nosotros mismos.

JAVI: ¿Eh? ¿Qué dice? ¿Como es eso?

ADULTO 5: No sé cómo explicarte, pero yo ya me entiendo.

NARRADOR: «Escuchadle», «Cambia», «Sé tú mismo». Cada vez se aseguraba más de que estaba en el camino adecuado.


¿Dios no es algo más serio y más importante que lo respondido anteriormente? ¿Qué es y quién es Dios para cada uno de nosotros?

¿Hablas con Él o sólo le rezas? ¿Le pides cosas o escuchas lo que Él te pide?

Jesús te pide cambiar, ¿pero sabes qué tienes que cambiar? ¿Por dónde tienes que empezar?

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Jesús nos llama a caminar con Él. No nos quiere egoístas, envidiosos y fanfarrones porque así nos dividimos en buenos y malos. Y Él nos ha dicho que somos iguales, todos pecadores y necesitados de cambio y conversión. Por eso presentamos esta cadena y estas cuerdas como símbolo de nuestras esclavitudes y a la vez de nuestra solidaridad, de sentirnos soldados unos con otros por nuestra amistad con Jesús.

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¡SPCUARTO DOMINGO DE CUARESMAR

Mensaje Nuestra verdad es ser y actuar como Jesús.

Comentario La verdad de Dios es que es misericordia y perdón. Es lo que nos reconcilia con Él en Cristo. Esa es también nuestra tarea y nuestra verdad. Todos somos hijos pródigos engañados por las seducciones del mundo, o hijos mayores autoengañados con lo que creemos es nuestro bien. Nuestro bien es ese Dios misericordia y perdón que desea seamos y hagamos como Él.

Materiales — Preparar escenificación.

Observaciones La misma escenografía de los otros domingos. Además de las respuestas espontáneas, también se preparan hoy algunas respuestas para la entrevista de Javi.

T

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Tú nos invitas a la mesa, nosotros preferimos separarnos y celebrar solos.

— Tú nos llamas a la fiesta, nosotros no aceptamos sentarnos con los que no conocemos, con los que nos caen mal, con los que nos la juegan.

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— Tú nos preparas la mesa para hacernos felices, nosotros preferimos no compartir nuestras cosas, ni nuestra amistad.

3. ORACIÓN

Queremos, Señor, estar contigo en la mesa redonda y sin esquinas que preparas para los hombres de la tierra. Danos, Señor, el gozo y la alegría de sentirnos hermanos y amigos que se sientan en tu mesa cada día. Por Jesucristo nuestro Señor.


4. ESCENIFICACIÓN

NARRADOR: «Escuchadle», «Cambia», «Sé tú mismo». Ese era el pensamiento con el que caminó durante toda la semana, y cada vez le gustaba más venir a la Eucaristía a escuchar a Jesús.

5. LECTURA de la segunda carta a los Corintios 5,17-21

LECTOR: El que es de Cristo es una creatura nueva, lo antiguo ha pasado, lo nuevo ha comenzado. Todo esto viene de Dios que por medio de Cristo nos reconcilió consigo y nos encargó el servicio de reconciliar. Es decir, Dios mismo estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo sin pedirle cuentas de sus pecados, y a nosotros nos ha confiado el mensaje de la reconciliación.

NARRADOR: No entendió muy bien esto y por eso estaba ansioso por ver lo que contaba Jesús en el Evangelio.

6. LECTURA del evangelio según san Lucas 15, 1-3.11-32

SACERDOTE: Un hombre tenía dos hijos. El menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte que me toca de la fortuna.

COMENTARIO: Así sin más... ¿Se le puede dar un disgusto tan grande al padre? ¡Este hijo no tiene corazón!

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SACERDOTE: El padre repartió los bienes. No muchos días después el hijo menor juntando todo lo suyo emigró a un país lejano, y allí derrochó su fortuna viviendo perdidamente.

COMENTARIO: ¡Vaya pieza!... ¡Qué hijo más sinvergüenza!... Lo único que le interesaba era el dinero... el juego... la juerga. Pero lo más gordo sin duda fue abandonar a su padre.

SACERDOTE: Cuando lo había gastado todo, vino por aquella tierra un hambre terrible y empezó a pasar necesidad. Fue entonces y tanto insistió a un habitante de aquel país que lo mandó a sus campos a guardar cerdos. Le entraban ganas de llenarse el estómago de las bellotas que comían los cerdos y nadie le daba de comer.

COMENTARIO: ¡Pero bueno! ¿Qué ha pasado?... ¿Dónde están sus amiguetes?... ¡Qué bajo ha caído! ¡Hasta dónde ha llegado! Sucio... sucio... sucio... sobre todo en su corazón. ¿Qué hará ahora? ¿Se hundirá para siempre?

SACERDOTE: Recapacitando entonces se dijo: Cuántos jornaleros de mi padre tienen abundancia de pan mientras yo aquí me muero de hambre. Me pondré en camino adonde está mi padre y le diré: «Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, ya no merezco llamarme hijo tuyo, trátame como a uno de tus jornaleros».

COMENTARIO: Él piensa... recuerda triste y hundido...

Allí en casa, tanto cariño, tanta ternura... y el bueno de su padre...

Y aquí... hambre... suciedad... la soledad de los amigos... la soledad del corazón...

Y volvió a pensar... ¡me levanto!... ¡me voy!...

SACERDOTE: Se puso en camino adonde estaba su padre. Cuando todavía estaba lejos su padre lo vio y se conmovió. Echando a correr se le echó al cuello y se puso a besarlo.

COMENTARIO: Vamos a callarnos... es tanta la emoción... ¡hacía tanto tiempo que no le tenía entre sus brazos...!

SACERDOTE: Su hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, ya no merezco llamarme hijo tuyo. Pero el pa-

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dre dijo a sus criados: Sacad enseguida el mejor traje y vestidlo. Ponedle un anillo en la mano y sandalias en los pies. Traed el ternero cebado y matadlo. Celebremos un banquete porque este hijo mío estaba muerto y ha revivido, estaba perdido y lo hemos encontrado. Y empezaron el banquete.

COMENTARIO: ¡¡Emocionante!!... Limpio, con traje nuevo... con el anillo...

El anillo, la alianza para sentarse de nuevo a la mesa del padre...

Y empezaron la fiesta, la gran fiesta del perdón. (Hace ademán de marcharse.)

¡Ah, bueno! Me olvidaba... del hijo mayor.

SACERDOTE: Su hijo mayor estaba en el campo. Cuando al volver se acercaba a la casa oyó la música y el baile, y llamando a uno de los mozos le preguntó qué pasaba. Éste le contestó: Ha vuelto tu hermano y tu padre ha matado el ternero cebado porque lo ha recobrado con salud. Él se indignó y se negaba a entrar, pero su padre salió e intentaba persuadirlo. Y él replicó a su padre: Mira, en tantos años como te sirvo sin desobedecer nunca una orden tuya, a mí nunca me has dado un cabrito para tener un banquete con mis amigos. Y cuando ha venido ese hijo tuyo que se ha comido tus bienes con malas mujeres le matas el ternero cebado. El padre le dijo: Hijo, tú estás siempre conmigo y todo lo mío es tuyo, deberías alegrarte porque este hermano tuyo estaba muerto y ha revivido, estaba perdido y lo hemos encontrado.

COMENTARIO: Paira el hijo mayor ni una palabra... mejor el abucheo... ¡Sería egoísta el fresco!

NARRADOR: Si lo que escuchó el domingo pasado le gustó, todo esto que acababa de oír le entusiasmó. Así que fue a preguntar y a ver si hoy tenía más suerte.

(Puede preguntar a varios niños ese tipo de preguntas:)

JAVI: ¿Ya has aprendido quién es Dios?

NIÑO 1: ¡Jopelines! ¡Sí sé quién es Dios! Un papá muy bueno.

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JAVI: Y tú ¿cómo eres, como el hijo pequeño o como el mayor?

NIÑO 1: Así... así... unas veces el pequeño y otras el mayor.

NIÑO 2: Lo que está es claro que siempre que nos portamos mal, que somos egoístas, molestones, malhablados, presumidos, cuando mentimos, somos como ei pequeño.

NIÑO 3: Y también está claro que cuando no admitimos a los demás cuando se equivocan, cuando por creernos buenos no nos fiamos de los demás, cuando nos sentimos seguros y no admitimos las equivocaciones, seguro también, que somos como el mayor.

NARRADOR: (Javi se sienta.) A Javi, ver que habían entendido le llenaba de alegría y satisfacción. Pero una nueva idea empezó a rondarle por la cabeza, ¿estará mi verdad, el ser yo mismo en el perdón? Así que tuvo que seguir caminando en búsqueda de la verdad.


¿Por qué el hijo menor se marcha y el mayor se queda? ¿Qué hace el Padre con los dos?

¿Te ves reflejado en ellos?

¿Cuando piensas que eres más tú mismo, cuando sigues tus caprichos y tus cabezonadas, o cuando haces caso, comprendes y perdonas?

¿Comprendes y perdonas a los otros fácilmente?

¿Cómo calificarías a los dos hijos?

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Mensaje La verdad que hace libres es el amor hecho perdón.

Comentario Nuestra vida cristiana es correr y alcanzar a Cristo, la verdad, para así vivir con su justicia que es la del perdón, y no la de la ley que nos hace justicieros. A esa justicia se llega por la fe y el amor y no por el cumplimiento.

Materiales — Preparar la escenificación. — Dos mesas a modo de tribunales. Una para la justicia humana,

las cuatro primeras causas; la otra para la justicia divina, la quinta causa, el Evangelio.

Observaciones Se trata de hacer un juicio de los comportamientos de Javi a lo largo de los domingos de Cuaresma. En la primera mesa estarán el juez, el fiscal y el abogado defensor; dos policías irán trayendo los reos. En la otra mesa sólo el que hace de Jesús.

A. RITOS INICIALES

1. DIÁLOGO

— Mirar bien a los demás equivale a...

— Al pasado borrón y cuenta nueva...

2. CANTO

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3. RITO DEL PERDÓN

— Padre, Tú no te cansas de amarnos cada día, de darnos tus dones. Nosotros, en cambio, nos cansamos de hacer las cosas bien.

— Señor, Tú te acercas a todos y les das tu amor y tu perdón. Nosotros en cambio no somos capaces de olvidar a los que nos ofenden.

— Padre, Tú llenas todo de luz y alegría. Nosotros, en cambio, andamos tristes y no damos esperanza a los que están a nuestro lado.


4. ESCENIFICACIÓN

JUEZ: Se abre la sesión. Primera causa: que pase el niño entontecido por la «tele».

FISCAL: Te acuso no de ser tonto, sino de que te estás entonteciendo con tanta «tele», con tantos anuncios, y te estás volviendo malo con tantas películas de tiros. Te vas a convertir en un muñeco, una marioneta o en un violento, y todo eso por ser tan vago y comodón.

ABOGADO: De eso no tiene la culpa el niño. Más bien sus padres que no le estimulan y los profesores que le cargan de deberes, lo que le sume en la impotencia y en la frustración. Eso no sucedería si la sociedad le ofreciese más espacios verdes para jugar.

JUEZ: Como el delito es menor, se te condena a un fin de semana sin «tele».

Segunda causa: que pase «Javi Caminero que no sabe por dónde va».

FISCAL: ¡Javi! ¡El que al cielo sube y baja y en el «colé» no trabaja! ¿A quién pretendes engañar con tus subidas y bajadas al cielo? Aunque eres un papagayo en cosas de religión y rezando, te acuso de vago, irresponsable, mentiroso y embaucador.

- 1 4 9 -

ABOGADO: ¡Protesto señoría! No se puede insultar a mi defendido de esa manera.

JUEZ: Se admite la protesta.

ABOGADO: Esos viajes al cielo no eran más que sueños que no se los creía ni él. Sólo los contaba para hacerse el gracioso. Si de algo se le puede acusar es de pasarse en sus gracias y faltar alguna vez al respeto. A mí me consta que no sube ni baja sino que trabaja, que ya sabe lo que quiere y por dónde va, y que va recto por la vida.

JUEZ: Como no haces mal a nadie se te condena a no contar viajes al cielo y a contar cinco chistes al día.

Tercera causa: que pase «la ignorante de Dios».

FISCAL: Te acuso de ser tan ignorante en una cuestión tan importante. De no saber decir más que tonterías: que si Dios es transparente, que si está sordo, que si es un policía, que si se ha marchado al extranjero. ¿Cómo se puede hablar así de algo que se ha respetado durante dos mil años? ¡Maldad! Ninguna. Simplemente ignorancia.

ABOGADO: Si no tiene maldad tampoco es culpable, como su señoría ha dicho. Además, ¿cómo quiere su señoría que sepa sobre Dios si sus padres no le dicen nada, si los profesores se lo explican mal y en la catequesis no hacen más que pintar monigotes y jugar? La niña es inocente.

JUEZ: El delito no es ni menor, ni mayor, es de bulto. Se te condena a pedir explicaciones a los papas, a los profesores y catequistas.

Cuarta causa: que pase «el hijo menor, el pródigo».

FISCAL: Éste señorías, sí que es un golfo, no da ni golpe y se aprovecha del esfuerzo de los demás. Como golfo y juerguista es un «pavo» y un «fanfa». No hace más que chulearse de sus «pelas», de sus «marcas» y de sus «ligues». Espero una condena severa para él.

ABOGADO: Señorías, a mí me da lástima. ¡Pródigo!, como su nombre indica, anda perdido por la vida, sin rumbo, sin norte, sin ilusión. Su golfería y altanería no es más que despecho. En el fondo de su corazón se encuentra vacío. Yo para él más que condena pido compasión y lástima.

1 5 0 -

JUEZ: Para que recuerdes viejos tiempos, hoy de postre ¡bellotas!

Quinta causa: que pase «la pecadora pública».


NARRADOR: En aquel tiempo Jesús se retiró al monte de los Olivos. Al amanecer se presentó de nuevo en el templo y todo el pueblo acudía a Él, y sentándose les enseñaba. Los letrados y los fariseos le traen una mujer sorprendida en adulterio (policías traen una rea), y colocándola en medio le dijeron:

FARISEOS: Maestro, esta mujer ha sido sorprendida en flagrante adulterio. La ley de Moisés nos manda apedrear a las adúlteras: Tú, ¿qué dices?

NARRADOR: Le preguntaban esto para comprometerlo y poder acusarlo. Pero Jesús escribía con el dedo en el suelo. Como insistían en preguntarle, se incorporó y les dijo:

JESÚS: El que esté sin pecado que tire la primera piedra.

NARRADOR: E inclinándose otra vez siguió escribiendo. Ellos al oírlo se fueron escabullendo uno a uno, empezando por los más viejos hasta el último. Y quedó solo Jesús, y la mujer en medio de pie. Jesús se incorporó y le preguntó:

JESÚS: Mujer, ¿dónde están tus acusadores? ¿Ninguno te ha condenado?

PECADORA: Ninguno, Señor.

JESÚS: Tampoco yo te condeno. Anda y en adelante no peques más.

NARRADOR: Ya no había ninguna duda. Ese era su camino, el que tenía que recorrer para descubrir la verdad que nos hace libres: el amor hecho perdón.

6. CANTO

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7. LECTURA de la carta a los Filipenses 3, 8-14

Todo lo estimo pérdida comparado con la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor. Por Él lo perdí todo y todo lo estimo basura con tal de ganar a Cristo y existir en Él, no con una justicia mía —la de la ley—, sino con la que viene de la fe de Cristo, la justicia que viene de Dios y se apoya en la fe.

Sólo busco una cosa: olvidándome de lo que queda atrás y lanzándome hacia lo que está por delante, corro hacia la meta para ganar el premio al que Dios desde arriba llama en Cristo Jesús.


¿Qué cosas te cuesta más perdonar y a quién?

¿Ante qué ofensas dices «me las pagarás?

¿Has descubierto a lo largo de la Cuaresma que cuanto más perdonas, mejor eres?

¿Cuando te engañan crees que te toman por tonto y rompes amistades, o pides explicaciones, comprendes y perdonas?

C. DESPEDIDA

— Yo quiero ser un corredor de fondo que conoce sus fuerzas y sabe a dónde va, por eso me lanzo hacia adelante.

— Yo quiero ser un saltador de obstáculos que quiere superar las dificultades, así que a trancas y barrancas me lanzo hacia adelante.

— Yo quiero ser un corredor de relevos, alguien que ha recibido un testigo y lo ha de entregar, por eso me lanzo hacia adelante.

— Yo quiero ser un corredor de campo a través, compito conmigo mismo sin otra meta, por eso me lanzo hacia adelante.

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PASCUA

CICLO A

Los apóstoles dieron testimonio de la Resurrección

PRIMER DOMINGO DE PASCUA m

Mensaje Dios lo resucitó y nos lo hizo ver.

Comentario Durante los domingos de Pascua narramos los distintos encuentros de los Apóstoles con Jesús resucitado. Nuestra fe cristiana se remonta a lo que otros nos han contado. Los primeros que empezaron a contar fueron los primeros apóstoles. Nos contaron cómo se encontraron con Jesús resucitado que les hizo salir de su situación de miedo, duda, abandono... de su no fe a la fe. Lo importante es que les creamos, que también nosotros nos encontremos con Jesús resucitado y se lo contemos a otros.

Materiales Un baúl con los objetos que sacarán los diferentes testigos cada domingo: una túnica, unas sandalias, un cayado, una brújula, un mapa, unos rollos de pergamino.

Observaciones Este primer domingo el testimonio de Juan, que entra con dos sábanas que depositará en el baúl.

T

A. RITOS INICIALES

1. PROCESIÓN DE ENTRADA CON EL BAÚL

2. CANTO

3. PREGÓN

Vístanse los cristianos con vestidos nuevos. Sea Cristo tu vestido.

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Canten canciones nuevas que digan: Aleluya. Sea Cristo tu canción.

Nútranse los cristianos con los panes nuevos. Sea Cristo tu comida.

Vivan los cristianos vida del todo nueva. Sea Cristo tu vida.


4. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de Juan.

JUAN: (Entra corriendo, sofocado, con un par de sábanas en las manos) ¡¡Que sí!! ¡¡Que sí!! ¡¡Que ha resucitado!! ¡¡Que os lo digo yo!! (Se serena y se sienta delante.)

¡Hola! Soy Juan, el apóstol más joven, casi no tengo barba todavía, y no sé si por ser el más joven, el enchufado de Jesús. Quizá por todo eso fui al que menos le costó creer que Jesús había resucitado.

Uno, cuanto más joven es más fácil se convence de las cosas, aunque también más fácilmente mete la pata, como aquel día que junto con mi hermano Santiago tuvimos la osadía de pedirle a Jesús que nos diera los dos ministerios más importantes de su Reino.

Qué ignorantes debíamos ser, pues nos dijo: ¿De qué vais? ¡No sabéis lo que pedís! Mi ignorancia, aunque más bien mi ingenuidad, debió caerle bien, resultarle simpática, pues me hizo su amigo; siempre quería tenerme a su lado con mi hermano y con Pedro; aunque al final el verdaderamente amigo, amigo, lo que se dice el amigo íntimo era yo.

En la Última Cena me dejó recostarme en su pecho y me dijo en secreto quién era el traidor de la «panda».

Ya os he dicho que a mí, al contrario de todos los demás, me resultó bastante fácil el creer que había resucitado. Los otros por miedo, por cobardía, por cabezone-ría, por qué sé yo, tardaron ¡ni se sabe! ¡Qué duros de mollera eran! Yo como estuve al pie de la cruz en los últimos momentos, no sé si por valentía o por inconsciencia

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juvenil, y como fui el primero en ver el sepulcro vacío, creí enseguida. Estas sábanas es lo único que encontramos. ¡Guardadlas siempre en el baúl! (Las deja en el baúl). Os servirán también para creer, como nos sirvieron a Pedro y a mí.

Por eso me decidí a contar y a escribir todo lo que nos pasó esos días, para que vosotros también creáis y os resulte tan fácil como a mí. Escuchad lo primero que escribí de la Resurrección. Lee tú... (Señala uno que lee el Evangelio).


JUAN: Como sois inteligentes, ya habréis adivinado que el otro discípulo a quien quería Jesús y que corría más, era yo.

Los demás domingos los otros de la «panda» ya os irán contando lo que les pasó a ellos, tal como me lo contaron a mí, y que yo lo escribí en el Evangelio lo más fielmente posible. Escuchadlo atentamente para enteraros bien, y sobre todo escuchad cada domingo a Pedro que delante de Jesús se hacía el valiente, pero era un «gallina». Cuando Jesús ya no estaba fue un valiente de verdad, que se la jugaba, como vais a escuchar ahora mismo:

6. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 10, 34. 37-43

7. CANTO


¿Sabéis quién era Juan, su familia, su profesión, cómo le llamó Jesús? ¿Cuáles eran sus máximas aspiraciones?

¿Conocéis algún pasaje más del Evangelio en que aparezca?

¿Te sirven las pequeñas cosas, los pequeños gestos de los que te quieren para creer?

¿Tú también pasas por todos los sitios y en todos los momentos haciendo el bien?

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I SECUNDO DOMINC

Mensaje Hemos nacido a una esperanza viva.

Materiales — Baúl con los objetos para los testimonios. — Preparar la escenificación.

A. RITOS INICIALES


2. CANTO


3. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de Tomás.

TOMÁS: (Entra dándose golpes en la cabeza.) ¡Pero qué cabezón que soy! ¡Tener que llegar a meter los dedos, tener que llegar a tanta evidencia para vencer mi tozudez!.

¡Hola! Yo soy Tomás, el Mellizo, del que a costa de mi cabezonería para creer, los curas se ponen las botas en sus sermones. De modo que me han convertido en el prototipo, en modelo de la duda, de la desconfianza, de la terquedad, del desencanto. Dicen que soy como un n¡-

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ño que todo lo quiere curiosear y palpar, por una parte; y por otra, porque caí de rodillas humildemente ante la evidencia, como modelo de creyente, hasta llegar a decir que bauticé a I os Reyes Magos.

¡Tonterías! Yo era como todos los demás. Un poco especial, eso sí. Me gustaba ir a mi aire, salirme del grupo, vivir mi vida, seguir mi camino. Y es que con Jesús tampoco lo teníamos muy claro, de ahí que en la Última Cena le preguntase: Si no sabemos a dónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?

Aunque por otra parte con Él nos sentíamos seguros y valientes, hasta el punto de ser atrevidos como Pedro que fanfarroneaba: «Aunque todos te abandonen yo no»; y luego va y le niega. O yo mismo, que llegué a decir: «Vayamos y muramos con Él» ¡Qué osadía!

Ya os he dicho que ante la presencia de Jesús caí derrotado y humillado. Y es que, así como la mentira tiene las patas muy cortas, el orgullo, la tozudez, la fanfarronería, todos estos defectos, las tienen muy flojas y débiles. Por eso para que lo aprendáis bien, y porque nos conviene a todos hacer muchos actos de arrepentimiento y humildad, vamos a repetir para revivirlo el pasaje tal como me sucedió a mí. ¡Vale! (Coge la túnica del baúl y se la pone. Basta que en la lectura él haga los gestos de caer de rodillas y meter los dedos.)


NARRADOR: Al anochecer de aquel día, el día primero de la semana, estaban los discípulos en una casa con las puertas cerradas por miedo a los judíos. Y en esto entró Jesús, se puso en medio y les dijo:

SACERDOTE: Paz a vosotros.

NARRADOR: Y diciendo esto les enseñó las manos y les dijo:

SACERDOTE: Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado, así también os envío yo.

NARRADOR: Y dicho esto exhaló su aliento sobre ellos y les dijo:

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SACERDOTE: Recibid el Espíritu Santo, a quienes perdonéis los pecados les quedan perdonados, a quienes se los retengáis les quedan retenidos.

NARRADOR: Tomás (entra en escena), uno de los doce llamado «el Mellizo», no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los otros discípulos le decían:

DISCÍPULO: Hemos visto al Señor.

NARRADOR: Pero él les contestó:

TOMÁS: Si no veo en sus manos la señal de los clavos, si no meto el dedo en los agujeros de los clavos y no meto la mano en su costado, no lo creo.

NARRADOR: A los ocho días estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús estando las puertas cerradas, se puso en medio y dijo:

SACERDOTE: Paz a vosotros.

NARRADOR: Luego dijo a Tomás:

SACERDOTE: Trae tu dedo, aquí tienes mis manos, trae tu mano y métela en mi costado, y no seas incrédulo, sino creyente.

TOMÁS: (De rodillas.) ¡Señor mío y Dios mío!

SACERDOTE: ¿Porque me has visto has creído? Dichosos los que crean sin haber visto.

NARRADOR: Muchos otros signos que no están en este libro hizo Jesús a la vista de sus discípulos. Estos se han escrito para que creáis que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que, creyendo, tengáis vida en su nombre.

TOMÁS: (Se quita la túnica y la deja en el baúl, mientras dice:)

Que esta túnica os recuerde siempre la presencia de Jesús, y no os pase como a mí, pues lo tenéis que amar, creer en Él y alegraros como os dice Pedro ahora en su carta.

5. CANTO

6. LECTURA de la primera carta de san Pedro 1, 3-9

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¿Conocéis quién era Tomás? ¿Cómo le llamó Jesús? Tenía un defecto muy grande, ¿cuál?

¿Qué le pasó cuando Jesús le enseñó las manos y los pies?

¿También vosotros tenéis el mismo defecto? ¿En qué ocasiones?

¿Te han de razonar todo, ya no sólo mandar, para que obedezcas y hagas las cosas?

¿Sabes reconocer que te equivocas y pedir perdón?

¿Contribuyes con tu comportamiento y alegría a la unidad y armonía en casa, en el «colé», con los amigos?

- 1 6 1 -

Mensaje A los amigos de Jesús les arde el corazón.

Comentario Es la consecuencia del encuentro con Cristo. Se abren los ojos pa-ra mirar y comprender las cosas y las personas de distinta manera, y hace arder el corazón para amarlos.

Materiales — Baúl con los objetos para los testimonios. — Biblia y cirio pascual para traerlos en procesión y hacer las lec

turas. — Manteles, flores, velas... para preparar la

de las ofrendas. — Preparar escenificación.

Observaciones Celebraremos la Eucaristía sobre la narración ría Magdalena.

mesa en el momento

que irá haciendo Ma-

I

A. RITOS INICIALES


2. CANTO

3. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de María Magdalena.

SACERDOTE: El evangelio de Lucas de este domingo nos invita a realizar a medida que lo leemos, su mismo contenido so-

- 1 6 2 -

bre la Eucaristía, haciendo de él un evangelio en acto. Iremos, pues, celebrando la Eucaristía al hilo de la lectura de Lucas. En el nombre...

NARRADOR: El Domingo pasado veíamos cómo Jesús resucitado estaba en medio de sus discípulos, en medio de nosotros, y nos comunicaba paz, alegría y perdón. Jesús a veces, se hace también caminante. Y camina en medio de nosotros y con nosotros, aunque nosotros medio atontados, no seamos capaces de reconocerle.

4. RITO DEL PERDÓN

(Sale María Magdalena, triste y compungida, coge las sandalias del baúl y se sienta. Golpean y entran...)

DISCÍPULO: ¡Eh, eh, eh, abridnos!

CLEOFÁS: ¡Pedro, Juan! ¡Abrid la puerta! ¡Tenéis razón! ¡Lo hemos visto este y yo!

DISCÍPULO: Sí amigos, parece mentira pero es purísima verdad. ¡Jesús está vivo! ¡Lo hemos visto!

CLEOFÁS: ¡Hay que gritarlo a los cuatro vientos! ¡Que lo sepan todos! ¡Que todo el mundo se entere! ¡Que Jesús está vivo!

MAGDALENA: Ya os decía yo que aunque locamente enamorada de Jesús, no eran locuras lo que me daban ni estrellitas lo que veía. ¡Claro que está vivo! Tranquilizaos y sentaros.

¡Hola! Soy María Magdalena. Así de alborotados llegaron Marcos y Cleofás cuando estábamos escondidos por miedo a los guardias. Y así de alborotados estábamos todos aquella mañana yendo de aquí para allá sin norte fijo. Buenos testigos de tantas correrías y de los encuentros con Jesús son estas sandalias desgastadas de tanto correr.

Marcos y Cleofás nos contaron lo que les había pasado a ellos por el camino y cómo lo habían reconocido al partir el pan. Nos lo contaron de la siguiente manera:

Iban andando aquel mismo día, el primero de la semana, a una aldea llamada Emaús, distante dos leguas de Jeru-

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salen. Iban comentando todo lo que había sucedido. Mientras conversaban y discutían, Jesús en persona se acercó y se puso a caminar con ellos. Pero sus ojos no eran capaces de reconocerlo.

SACERDOTE: Con todos los niños nos preguntamos qué cosas nos ponen tristes como a los discípulos de Emaús. Pedimos perdón por ello:

— Por nuestras dudas y miedos. — Por nuestra falta de esperanza y desánimos. — Por nuestros cansancios y desilusiones.

5. ORACIÓN

Señor, nos gusta mirar, aunque nuestros ojos no ven más allá de lo inmediato. Danos Señor, ojos inmensos para poderte ver recorriendo resucitado esos caminos de Emaús que Tú haces con nosotros. Por Jesucristo nuestro Señor.


NARRADOR: En la Eucaristía Jesús viene y se hace presente, en primer lugar cuando nos ponemos a caminar juntos. También se hace presente en el Evangelio, cuando leemos su palabra, como se hizo presente a los discípulos de Emaús.

MAGDALENA: Él les dijo:

¿Qué conversación es esa que traéis mientras vais de camino?

Ellos se detuvieron preocupados. Y uno de ellos que se llamaba Cleofás le replicó:

¿Eres tú el único forastero en Jerusalén que no sabe lo que ha pasado allí estos días?

Él les preguntó: ¿Qué?

Ellos le contestaron:

Lo de Jesús el Nazareno, que fue profeta poderoso en obras y palabras ante Dios y todo el pueblo. Cómo lo en-

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tregaron los sumos sacerdotes y nuestros jefes para que lo condenaran a muerte y lo crucificaron. Nosotros esperábamos que fuera el liberador de Israel. Y ya ves, hace dos días que sucedió esto. Es verdad que algunas mujeres de nuestro grupo nos han sobresaltado, pues fueron muy de mañana al sepulcro, no encontraron su cuerpo, e incluso vinieron diciendo que habían visto una aparición de ángeles que les habían dicho que estaba vivo. Algunos de los nuestros fueron al sepulcro y lo encontraron como habían dicho las mujeres, pero a Él no le vieron.

Entonces Jesús les dijo:

¡Qué necios y torpes sois para creer lo que anunciaron los profetas! ¿No era necesario que el Mesías padeciera esto para entrar en su gloria?

Y comenzando por Moisés y siguiendo por los profetas, les explicó lo que se refería a Él en toda la Escritura.

NARRADOR: Por eso vamos a traer en procesión el libro de los Evangelios y lo colocamos en un sitio bien visible.

(Procesión del libro y cirio.)

6. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 2,14.22-28


¿Sabéis quién era María Magdalena? ¿Conocéis algún pasaje más del Evangelio donde aparezca?

¿Sabéis que aunque estaba muy enamorada de Jesús no le reconoció en un primer momento cuando se le apareció? Cuando le reconoció, ¿qué le dijo Jesús?

Como los discípulos de Emaús, ¿tú también te desilusionas a veces? ¿En qué ocasiones?

¿Te alegra y te llena de gozo venir a la Eucaristía? ¿Cómo le hablas y qué le dices a Jesús cuando vienes y estás aquí?

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NARRADOR: Los discípulos todavía no se habían dado cuenta de nada. No se daban cuenta de que Jesús estaba con ellos caminando, leyendo y explicando la Palabra de Dios. Pero Jesús quería estar con ellos de un modo especial. Por eso se dejó invitar.

MAGDALENA: Ya cerca de la aldea donde iban, Él hizo ademán de seguir adelante, pero ellos le apremiaron diciendo:

Quédate con nosotros porque atardece y el día va de caída. Y entró para quedarse con ellos.

NARRADOR: Jesús nos invita también a nosotros a compartir con Él la comida. Por eso preparamos la mesa.

(Unos preparan la mesa, otros traen las ofrendas...)

9. PLEGARIA EUCARÍSTICA

SACERDOTE: Prefacio:

Te glorificamos Padre Santo, porque estás siempre con nosotros en el camino de la vida, sobre todo cuando Cristo, tu Hijo, nos congrega para el banquete pascual de su amor. Como hizo en otro tiempo con los discípulos de Emaús Él nos explica las Escrituras y parte con nosotros el pan ... «Santo»...

MAGDALENA: Sentado a la mesa con ellos tomó el pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo dio.

SACERDOTE: Lo mismo hizo en la Última Cena cuando...

10. COMUNIÓN

NARRADOR: Los discípulos de Emaús reconocieron a Jesús que estaba en medio de ellos en el partir el pan, es decir, en la Eucaristía. Y es que entonces recordaron el momento

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de la Ultima Cena, cuando Jesús partió e! pan con ellos dejándonos así su recuerdo y su presencia.

MAGDALENA: A ellos se les abrieron los ojos y lo reconocieron. Pero Él desapareció. Y ellos comentaron:

¿No ardía nuestro corazón mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba las Escrituras?

D. DESPEDIDA

NARRADOR: Nosotros esta mañana, como los discípulos de Emaús nos hemos animado a ponernos a caminar juntos. Jesús camina con nosotros. Y hemos escuchado su palabra. Hemos partido y compartido el pan, y le hemos reconocido en medio de nuestra comunidad que comparte las cosas y la vida. Ahora, como aquellos, estamos alegres y tenemos ganas de contar a los demás lo que hemos vivido, lo mismo que hicieron los de Emaús.

MAGDALENA: Y levantándose al momento se volvieron a Jerusalén donde encontraron reunidos a los once con sus compañeros que estaban diciendo:

Era verdad, ha resucitado el Señor y se ha aparecido a Simón.

Estas sandalias os recuerden a vosotros siempre que tenéis que seguir corriendo a anunciar la Buena Nueva de Jesús.

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Mensaje Jesús, Buen Pastor, es nuestro guía y nuestro líder.

Materiales — Baúl con los objetos para los testimonios. — Objetos para las ofrendas: comida, ropa, libros, dinero, reloj. — Preparar escenificación.

Observaciones En la narración del testimonio de Pedro, otros niños escenifican la parábola.

A. RITOS INICIALES


2. CANTO


3. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 2, 14.36-41

4. CANTO

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5. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de Pedro.

PEDRO: (Entra como predicando.)

Convertios y bautizaos todos en nombre de Jesucrito para que se os perdonen los pecados y recibiréis el Espíritu Santo.

¡Hola! Soy Pedro, el tozudo fanfarrón, pero a la hora de la verdad más cobarde que una gallina. Yo también me encontré con Jesús el día de Pascua y me encomendó que apacentase sus corderos y sus ovejas. (Saca del baúl el cayado.)

Ya en vida nos había dicho que «la gente le daba lástima, porque andaba como ovejas sin pastor». Por eso un día nos contó una parábola que molestó mucho a los fariseos:.

(Salen niños, forman círculo.)

Nos dijo que Dios nunca había dejado solos a los hombres, que les había dado pastores para que los cuidasen, enseñasen y amasen.

(Salen dos y se colocan de pie tras el circulo.)

Pero ellos en vez de cuidarlas, las maltrataban y se aprovechaban de ellas para vivir ellos mejor. Y así unas adelgazaban, otras enfermaban, otras morían y todas se desperdigaban.

(Espaldas, caen, cojean, se van...)

Entonces Dios se enfadó con los pastores, y dijo: «me voy a enfrentar e ellos, les quitaré su trabajo, yo mismo buscaré a mis ovejas y las apacentaré como es debido. Y las dejaré en manos de un único pastor que las pastoree y enseñe a otros pastores a cuidar de las ovejas como Él lo hace».

(Se van levantando; los dos se van.)

Y acabó diciendo que «todos los que han venido antes de Mí son bandidos y ladrones», y «Yo soy el Buen Pastor». Escuchadle a Él.

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(Mientras se lee el Evangelio van subiendo.)

PEDRO: Cuando Jesús murió en la cruz y resucitó, me encomendó a mí, como os decía al principio, apacentar las ovejas. Pero quiere que todos seamos pastores los unos de los otros. El que no quiera ser pastor de su hermano es como Caín, porque todos necesitamos quien nos vigile amistosamente, nos defienda eficazmente y nos encauce positivamente.


¿Sabéis quién era Pedro, su familia, sus defectos y cualidades, su profesión? ¿Os acordáis de alguna «fanfarronada» suya?

¿Conocéis el pasaje de las negaciones? ¿Qué pasó?

¿Tú también has negado y traicionado a algún amigo? ¿Te atreves a contarlo?

¿Qué le pasó a Pedro cuando se encontró con Jesús después de las negaciones? ¿Y después de su encuentro con Jesús resucitado?

¿Has llorado por alguna amistad perdida? ¿Has dudado alguna vez de tu amistad con Jesús?



Seamos todos pastores responsables todos unos de otros. Especialmente:

Los padres: (comida, vestido, juguetes...)

— En ellos se cumple con toda verdad que dan vida y dan la vida. Gloria de los padres es que los hijos crezcan aunque ellos disminuyan.

— Para que las preocupaciones materiales de cada día no les hagan olvidar que la vida que nos dan requiere también bie-

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nes espirituales: escucharnos, acompañarnos, entretenernos, alegramos...

Los educadores: (libros)

— Son los padres y pastores del espíritu. Son pastores que han de querer a sus ovejas si quieren ser escuchados.

— Para que nos conozcan y reconozcan, sepan las potencialidades que tenemos y los peligros que nos encontramos, para que no regateen dedicación y esfuerzo y sean testigos del amor de Dios.

Los gobernantes: (dinero)

— Son considerados como los pastores de los pueblos, apliqúense pues, las cualidades del Buen Pastor.

— Para que quieran el bien de los ciudadanos sin aprovecharse de ellos, cuiden no sólo el progreso material sino también el progreso integral, ofrezcan valores, defiendan libertades, estimulen la participación y la solidaridad, y utilicen el poder no para servirse, sino para servir.

Los obispos y sacedotes: (reloj)

— Cristo es su modelo. Son la presencia actualizada de Cristo. Ellos sí que tienen que dar vida, dar la vida y querer a sus ovejas hasta el sacrificio.

— Para que siempre estén a punto, a la hora, para ser testigos de la misericordia de Dios, defensores de la justicia, celosos no tanto de la doctrina como de la caridad, que prefieran a los más pequeños.

- 1 7 1 -

QUINTfiJbMINGff DE PASCUA

Mensaje Jesús es el camino, la verdad y la vida.

Comentario Jesús nos ha dejado sus huellas que nos guían con seguridad a la casa del Padre. Con Él estamos convencidos de que no andamos perdidos, ni caminamos sin saber a dónde vamos.

Materiales — Baúl con los objetos para los testimonios. — Preparar la escenificación.

A. RITOS INICIALES


2. CANTO


3. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de Felipe.


NARRADOR: En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos:

SACERDOTE: No perdáis la calma, creed en Dios y creed también en Mí. En la casa de mi Padre hay muchas estancias; si

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no os lo habría dicho, y me voy a prepararos sitio. Cuando vaya y os prepare sitio volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy Yo, estéis también vosotros. Y a donde Yo voy, ya sabéis el camino.

NARRADOR: Tomás le dice:

TOMÁS: No sabemos a dónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?

SACERDOTE: Yo soy el camino y la verdad y la vida. Nadie va al Padre sino por Mí. Si me conocierais a Mí conoceríais también a mi Padre. Ahora ya lo conocéis y lo habéis visto.

NARRADOR: Felipe le dice: (Sale entonces.)

FELIPE: Señor, muéstranos al Padre y nos basta.

SACERDOTE: Hace tanto que estoy con vosotros ¿y no me conoces Felipe? Quien me ha visto a Mí ha visto al Padre. ¿Cómo dices tú: «muéstranos al Padre»? Lo que Yo os digo no lo hablo por cuenta propia. El Padre que permanece en Mí, Él mismo hace las obras. Creedme, Yo estoy en el Padre y el Padre en Mí. Si no, creed a las obras. Os lo aseguro, el que cree en Mí también él hará las obras que Yo hago, y aun mayores. Porque me voy al Padre.

FELIPE: ¡Hola! Yo soy Felipe, el de la higuera. El que antes de encontrar a Jesús, Él le había visto debajo de la higuera. ¡En la higuera debía estar yo cuando le hice esa pregunta! No, no es que yo tuviera pretensiones de conocer a Dios, más bien no sabía lo que preguntaba. ¡Estaba en la higuera, en babia!

Como nos sucedía muchas veces, yo no entendí nada de la respuesta de Jesús, pero poco a poco fuimos comprendiendo sus palabras. En este baúl de la vida que contiene nuestros encuentros con Jesús hay un atillo con un mapa y una brújula. Sacadlo y leedlo. Os indicará el camino concreto que habéis de seguir en la vida. Tened-lo presente para que nunca estéis en la higuera como yo.

(Unos niños sacan, despliegan y leen.)

1) No perdáis la calma.

2) Creed en Dios.

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3) Creed también en Mí.

4) Os llevaré conmigo.

5) Yo soy el camino.

6) Creed a las obras.

7) El que cree en Mí, hará las obras que yo hago.

FELIPE: Escuchad ahora a Pedro como cada domingo, para conocer quiénes sois y cuál es vuestra misión.

5. LECTURA de la primera carta de san Pedro 2, 4-9

6. CANTO


Ante tantas palabras, enseñanzas, consejos como nos llegan, ¿nos hacemos el «longuis»?

¿Conocemos y queremos a Jesús cada vez más? ¿Hacemos lo que nos dice? ¿Alguna de nuestras obras merece la pena ser mirada e imitada?

¿Sabes que un cristiano tiene que ser servidor de todos y siempre?

- 1 7 4 -

SEXTO DOMINGO DE P A S C U A ? ^ :

Mensaje Los amigos de Jesús somos sus testigos.

Comentario De palabra porque damos razón de nuestra fe y de nuestra esperanza. Y de obra porque cumplimos los mandamientos de Jesús, amamos a todos.

Materiales — Baúl para los testimonios, que hoy también se presenta de

ofrenda. — Preparar la escenificación.

A. RITOS INICIALES


2. CANTO


3. LECTURA de la primera carta de san Pedro 3,15-18

4. CANTO


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6. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de Judas.

JUDAS: Cuando Jesús acabó estas palabras le pregunté: Señor, ¿por qué hablas de mostrarte solamente a nosotros y no al mundo?

¡Hola! Yo soy Judas, pero como fácilmente podéis adivinar no el Iscariote, que el pobrecillo se ahorcó porque no pudo soportar su culpa.

Yo debía estar un poco sordo o ser un poco tonto, porque Jesús me volvió a repetir las mismas palabras, de ahí su importancia. A ver si están en el baúl.

(Busca, saca rollos que desenvuelve y lee, hasta que...)

Sí, este es, aquí están.

Os las voy a volver a leer, no porque estéis sordos o seáis tontos como yo, sino para que se os queden bien grabadas como a mí, en la memoria y en el corazón y no sólo en este pergamino.

«Si alguien me ama, guardará mis palabras y mi Padre le amará y vendremos a él para hacer nuestra morada en él.»

Me vino a decir que como seguidores míos, no os limitéis a decir que Dios existe, o que por allí arriba en las nubes hay algo, sino amaos como hermanos para sentir a Dios dentro de vosotros y no encontraros nunca sin padre en la vida.

Por eso hoy en las peticiones, como Jesús pedid al Padre, el Espíritu de la verdad, el Defensor, el Consolador. La vida tiene muchos problemas, dificultades y sufrimientos y los hombres no podemos vivir sin consuelo, especialmente los enfermos cuyo día celebramos hoy.


(Se puede invitar a visitadoras de enfermos a dar su testimonio.)

¿Qué te ha gustado de los testimonios que has escuchado? ¿Tú conoces algún enfermo? ¿Le haces alguna visita? ¿Cómo se ha sentido?

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¿Cuando tú estás enfermo te gusta que alguien esté a tu lado? ¿Por qué? ¿Qué se siente?

¿Qué palabras sabes y guardas de Jesús? Di alguna.

¿Te das cuenta de que si no sabes ninguna, no le amas? ¿Estás como solo, como enfermo?

¿Qué nos dice Jesús que hemos de hacer con los enfermos? ¿Tú sabes consolarles? ¿Cómo lo haces?

8. PRECES

Señor, Jesús, antes de volver al Padre nos prometiste que seguirías estando siempre con nosotros y has cumplido tu palabra.

Es cierto que no te podemos ver, ni oír, como puedo ver u oír a mi mamá. Pero tampoco la oigo, ni la veo a ella cuando está en el trabajo o se va a hacer la compra. Y sin embargo yo sé que no me olvida.

Tú Señor, también nos recuerdas que estás ahí, dentro de nosotros, y que nos quieres, y nos lo muestras de mil modos. Todas las cosas nos recuerdan tu voz, tus palabras, tu vida.

Cuando te despides no das tus últimos consejos o recomendaciones del que se va lejos y nos abandona, sino que nos aseguras una presencia tuya continuada por el Espíritu.

Te pedimos que lo sintamos presente, vivo y actuante en nosotros y no vivamos sólo de recuerdos.



Te presentamos el baúl de la vida. Contiene los encuentros tuyos con tus discípulos, después de tu Resurrección. Los hemos recordado en estos domingos de Pascua, porque nosotros también queremos encontrarnos contigo en tu Palabra, en la Eucaristía y en el caminar con los hermanos, para que sigas pasando liberadoramente por nuestra vida.

- 1 7 7 -

PASCUA

CICLO B

Los cristianos han dado testimonio de la Resurrección

PRIMER DOMINGO DE P A S C U A M | a O JPB&f

Mensaje Nosotros somos testigos.

Comentario En este ciclo continuamos narrando testimonios de otros cristianos a través de los cuales nos llega la fe en la Resurrección. Los primeros cristianos con su predicación la anunciaron, pero además la vida de las primeras comunidades era significativa para todos. Al testimonio que se nos da, asociaremos cada domingo un rasgo de esa vida y un símbolo adecuado de los que se encuentran en el baúl.

Materiales — Un baúl con los objetos que irán sacando los diferentes testi

gos cada domingo: libro grande apergaminado, unas redes, llaves, piedras, alforja y una Biblia.

— Cirio pascual tapado con una cortina y una cartulina a modo de lápida que pone: Al Dios desconocido.

— Cartulinas a modo de lápidas con frases de personajes famosos. — Preparar escenificación.

A. RITOS INICIALES


2. CANTO

3. PREGÓN

Por fin la alegría, la paz indefinible, que nadie se abandone a la tristeza,

181 -

removida la losa, el amor ha triunfado. Cantemos a la vida, a Jesús resucitado, alegra nuestra vida con tu presencia amistosa. Quédate con nosotros, venceremos la noche con el sol de tu pan y tu palabra.


4. ESCENIFICACIÓN

(Habrá dos grupos de niños: uno en torno al cirio pascual, otro grupo disfrazados de turistas que recorrerá la iglesia en gira turística haciendo paradas ante las lápidas o placas.)

NARRADOR: Hoy es día de fiesta en la ciudad de «Cristia». Fue muy famosa hace dos mil años. Todo el mundo admiraba a sus habitantes por lo buena gente que eran. En «Cristia» se celebran muchas fiestas (grupo de niños en torno al cirio tapado con sábana y placa) en honor de personajes famosos que vivieron, despertaron muchas esperanzas, pero murieron. A ellos se les levantaron monumentos, estatuas y placas en su recuerdo. (Placas por la iglesia.)

«Cristia» ya no es admirada hoy en día, pero sí mirada por muchos curiosos que vienen a visitarla. (Sale grupo de niños caracterizados de turistas.)

CICERONE: Y esta placa es un homenaje a san Agustín que dice: Hombres son voluntades.

TURISTA: ¿Y qué hizo san Agustín por este pueblo?

CICERONE: De un gran predicador se convirtió en un gran doctor que les enseñó muchas cosas. (Pasan a otra.)

Esta otra está dedicada a san León Magno y dice: Somos portadores de quien y con quien hemos resucitado.

TURISTA: ¿Y qué fue san León Magno?

CICERONE: Fue un papa grande-Magno como su nombre indica. (Pasan.)

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Esta está dedicada a san Isidoro de Sevilla: La Pascua no es noche de tinieblas sino de luz.

TURISTA: De Sevilla, como Curro.

CICERONE: Sí, pero san Isidoro fue un gran obispo.

Esta otra se la dedicaron a santa Clara que era monja: Mira a Cristo pobre y entregado y sigúelo pobre y entregada.

CICERONE: Esta está dedicada a Teresa de Calcuta: La vida es una oportunidad, aprovéchala.

TURISTA: Se imaginó la Madre Teresa que su placa sólo serviría para tapar un agujero en la pared.

CICERONE: Ella aunque pequeña, era una gran monja.

Esta es de Gustavo Gutiérrez: Ser testigo de la resurrección es dar la vida.

TURISTA: Pero vive todavía, ¿no?

CICERONE: Y con esta llegamos al final del recorrido: La luz de Cristo es luz sin noche. Es de Máximo de Turín.

TURISTA: Y ¿quién es es?

CICERONE: Aunque no es famoso, su nombre está en la oscundad de la noche.

PUEBLO: (Gritos confusos.)

¡Que viene el...! ¡Ya llega el...! ¡Viva el...!

UNO: ... va a dirigirles la palabra.

PABLO: (Entra en escena.) Cristianos todos, veo que sois sobremanera religiosos. Al pasar y ver las placas he leído en una: «Al Dios desconocido». Pues ese Dios que sin conocer celebráis y adoráis es el que os anuncio. Ese Dios tiene fijado el día en que va a juzgar a todos por un hombre que lo resucitó de entre los muertos y que es la piedra angular de la nueva construcción.

UNO: Corta el «rollo», ya te volveremos a escuchar otro día.

NARRADOR: Después de los Apóstoles que convivieron con Jesús, Pablo fue el primer testigo de la Resurrección.

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Muchísimos otros han venido después, unos con placa admirados y realzados, y otros sin ella, pero igualmente admirables. Pero Cristia como tal ya no es admirada. Los cristianos del siglo xx hemos de conseguir que de nuevo sea admirada.

5. CANTO



¿Tus papas te han llevado a ver algún monumento, iglesia o catedral importantes? ¿Cuál? ¿Te han impresionado?

¿Los visitaste como un turista al que se le explica la historia y el arte?

¿Te contaron la vida y la fe de los personajes, o la de los que la construyeron?

¿Dios es un desconocido para ti como lo era para los atenienses? ¿Qué sabes de Él?

- 1 8 4 -

SEGUNDO DOMINGO DE PASCUA

Mensaje Creemos que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios.

Comentario En el diálogo destacamos el primer elemento de la vida cristiana que pone Lucas en los Hechos: «Eran constantes en la oración», y «todo lo hacían orando, alabando y dando gracias a Dios».

Materiales — Baúl con los objetos para los testimonios. — Preparación de la escenificación.

T

A. RITOS INICIALES


2. CANTO

3. PREGÓN

Os anuncio una gran alegría. Jesús ha resucitado y vive para siempre.

Sus amigos estaban tristes. Era de noche.

Pero en medio de la noche amaneció una gran luz que brilla desde entonces.

- 1 8 5 -


4. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de Lucas.

(Desde el principio de la misa en lugar visible está escribiendo. Empieza a leer como que está escribiendo.)

LUCAS: Teófilo, yo escribí en mi primer libro todo lo que Jesús hizo y enseñó desde el principio hasta el día en que fue llevado al cielo. Después de su pasión se les presentó, dándoles muchas pruebas de que vivía. (Deja de escribir y se dirige a los niños.)

¡Hola! Yo soy Lucas y estoy escribiendo el prólogo de mi segundo libro a mi amigo Teófilo. Yo nací en Antioquía, donde empezó a llamarse a los seguidores de Jesús «cristianos». Soy médico, aunque mi verdadera pasión es la historia. Fui compañero de aventuras de Pablo, pues le acompañé en muchos viajes.

Como historiador que me siento, investigué los datos de la vida de Jesús y se los escribí también a Teófilo en el primer libro.

(Saca un libro viejo del baúl.)

¡A ver, a ver! (Ojea.) Ya está... Leélo tú... (Se lo da a un niño para que lea.)

NIÑO: Muchos han tratado de narrar las cosas que pasaron entre nosotros a partir de los datos que nos dieron los que fueron testigos desde el principio. Yo también he decidido investigar hasta el origen y componer para ti, excelente Teófilo, un relato ordenado de todo. Con esto todas aquellas cosas que te han enseñado cobrarán plena claridad.

LUCAS: Si queréis conocer a Jesús y ser sus amigos tendréis que leer todo el libro. En este segundo libro le cuento a Teófilo la vida y las andanzas de los primeros cristianos, a los que la gente veía muy bien y admiraba y de los que se hacían lenguas.

(Pasa unas páginas de lo que escribe.)

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Lee tú, por ejemplo, este párrafo.

(Un niño hace la primera lectura del día.)

5. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 2, 42- 47

LUCAS: Y todo lo hacían orando, alabando y dando gracias a Dios que era muy importante para ellos.

6. CANTO



¿Sabes cuántos evangelios hay? ¿Cuáles? ¿Te gusta leerlos? ¿Se puede seguir a Jesús, conocerle y ser amigo suyo sin leerlos? ¿Por qué?

Los primeros cristianos lo hacían todo orando, nos dice Lucas, ¿a ti te gusta rezar?

Cuando lo haces, ¿qué le dices y qué le pides a Jesús?

¿Le pides que te haga más valiente como a los primeros cristianos?

- 1 8 7 -

Mensaje

Dios los resucitó y nosotros somos testigos.

Comentario Hoy destacamos el segundo elemento que pone Lucas de la vida cristiana. «Eran constantes en la enseñanza de los Apóstoles.»

Materiales

— Baúl con los objetos para los testimonios. — Preparación de la escenificación. — Siluetas en cartulina de unas manos para las ofrendas.

Observaciones

El diálogo inicial lo hacemos sobre el miedo que encerraba y paralizaba a los discípulos y que nos encierra y paraliza a nosotros. También señalamos hoy el mensaje de paz.

I

A. RITOS INICIALES


2. CANTO

3. PREGÓN

Hemos visto salir el sol esta mañana y nuestro primer canto es para Jesús.

Él es tu palabra, la luz del mundo, nuestro amigo fiel, tu palabra al mundo.

Él resucitó para nosotros. Nuestra confianza descansa en Él.

- 1 8 8 -

4. DIALOGO

¿A qué tenemos miedo?... a estar solo... a decir la verdad... a perder amigos...

¿Por qué?... (Reconocer lo que paraliza.)

Si no tuviera miedo podría hacer...

Los amigos de Jesús tenían miedo...


5. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 3,13-15.17-19

6. CANTO

7. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de Pablo.

PABLO: A mí no llegaron a matarme por entonces, pero me azotaron muchas veces y me metieron en la cárcel.

¡Hola! Soy Pablo, el que hace quince días estaba inaugurando el monumento. Eso me pasó en el Areópago de Atenas. Como allí, pocos éxitos tuve en mi vida y más bien muchos fracasos. Toda mi vida me he sentido poca cosa, el menor de los apóstoles, de tal forma que no soy digno de llamarme apóstol porque perseguí a la Iglesia de Dios.

Todo esto me pasó porque conocí al Señor en el camino de Damasco. ¡Menudo trompazo me pegó cuando me tiró del caballo! Hasta entonces había sido un brillante y fanático fariseo; desde entonces, más que fanático me siento tan seguro y tan fuerte, que hasta puedo fanfarronear y decir: «He trabajado más que todos ellos. Aunque no he sido yo, sino la gracia de Dios en mí, porque es Cristo resucitado quien vive en mí».

Él me hizo escapar de ciudades, cárceles, azotes, naufragios... pues yo viajaba mucho y siempre me ocurría algo de eso. Para que os hagáis una idea, me azotaron no

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sé si tres o cuatro veces. Viajaba para predicar la Resurrección de Jesús y echar la redes para pescar hombres, como les había encargado Jesús a los otros apóstoles. (Saca del baúl unas redes.)

En todas partes venía gente a que le enseñase lo que a mí me enseñó Ananías. El juntarnos para escuchar las enseñanzas de los apóstoles y aprender, era para nosotros la cosa más normal del mundo.

Luego les escribía cartas para resolver los problemas que les surgían. Las tenéis en el Nuevo Testamento. Leedlas también vosotros para aprender a ser mejores cristianos, porque vosotros también tenéis que seguir echando las redes (se las da) y, ¡ojalá no tengáis que avergonzaos, ni acomplejaros de ser cristianos, testigos de Jesús!



¿Sabéis quién era el apóstol Pablo? ¿Cómo se convirtió y cambió?

¿Te gusta recibir cartas? ¿Las lees con ansias?

San Pablo te manda cada domingo una, ¿la lees o escuchas con las mismas ansias? ¿O te suenan a «rollo»?

Pedro decía convertios, ¿a ti Jesús te cambia algo?



Un hombre llegó ante el Señor, le enseñó sus manos y le dijo:

—Mira, Señor, mis manos están limpias.

Dios le contestó: Sí... pero están vacías.

Que nuestras manos sepan levantar al caído, saludar al amigo, enjugar lágrimas, aplaudir lo bien hecho, regalar una flor, elevarse al cielo, compartir nuestras cosas.

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D. DESPEDIDA

Tú me defiendes, Señor. A veces logro superar el miedo y respirar a pleno pulmón. Sé que Tú estás conmigo y que me das unas fuerzas que no tengo. Por la noche me acuesto tranquilo, porque estoy en tus manos y así me duermo en paz. Tú, Señor, me haces vivir tranquilo. Muchas gracias. Ayúdanos a vivir como hermanos y a extender tu paz a nuestro alrededor.

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Mensaje Los cristianos conocemos y reconocemos a Jesús.

Comentario De modo especial en la Eucaristía. Por eso este domingo el ele' mentó que destacamos es: «Eran constantes en el partir el pan».

Materiales — Baúl con los objetos para los testimonios. — Preparar escenificación. — Unas piedras para las ofrendas.

A. RITOS INICIALES


2. CANTO


3. ESCENIFICACIÓN: Testimonio del papado.

(Entra el que hace de papa leyendo)... y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia.

¡Hola! Yo soy el Papa. Sí, sí, no os riáis. Aunque mejor dicho represento al papado, esa institución que estableció Jesús cuando le dijo a Pedro: «Tú eres Pedro, sobre esta

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piedra edificaré mi Iglesia». No confundáis esa primera piedra con la piedra angular que es Jesús. La piedra angular es la que da unidad a todo el edificio.

Escuchad como lo dice Pedro en la lectura de los Hechos.

4. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 4, 8-12

5. CANTO

(Papa): Esa es mi tarea: cuidar que esa unidad se mantenga, aunque en algunas épocas se ha roto precisamente por mi culpa, pues ha habido Papas muy buenos como Juan XXIII, muchos Papas santos, Papas normales y papas guerreros, que les gustaba pelearse como a vosotros.

Esa unidad se hace y mantiene en torno a la mesa como en la familia. Así nos dicen que hacían los primeros cristianos que partían el pan en las casas con alegría y dando gracias a Dios. A Jesús le conocían al partir el pan. Eso se ha hecho a lo largo de 20 siglos y lo estáis haciendo ahora vosotros.

También (se dirige al baúl y coge las llaves) le entregó a Pedro estas llaves diciéndole: «Lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo». Dándole el poder de perdonar los pecados.

Ahora bien, la tarea principal que le encomendó a Pedro fue la que hizo Jesús con sus discípulos. Escuchadla:


(Papa): Esta tarea se la encomendó a Pedro, no os olvidéis que le había negado tres veces, cuando le dijo: «Apacienta mis ovejas». Pero nadie, ni el mismo Pedro las ha apacentado como Él. Como en todo, Jesús es el modelo perfecto. A nosotros sólo nos cabe ser ovejas dóciles y pastorearnos unos a otros.

SI Pedro es la primera piedra y Jesús la piedra angular del edificio, todos somos piedras de construcción del edificio. Cada uno ha de aportar su piedra.

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(Saca una o dos piedras del baúl y las pone sobre el altar.) Os las dejo aquí para que os recuerden que venir a partir el pan

es venir a construir el edificio que es la Iglesia.


¿Quién es el primero de casa, de España, de la Iglesia? ¿Qué hacen?

¿Has visto por «la tele» alguna vez al Papa? ¿Qué hace? ¿Qué dice?

¿Has oído hablar de otros Papas?

Sentarse en torno a la mesa une a la familia, ¿sabes que la mesa de la Eucaristía nos une a los cristianos como a una familia? ¿Que venimos a misa para construir esa unidad de famiia? ¿Que cuando estamos reñidos no se puede participar en esa mesa?



Todos tenemos que participar en la construcción de la Iglesia cuya piedra angular es Cristo, y nosotros hemos de ser piedras vivas. Por eso cada uno presentamos nuestra piedra para dicha construcción:

— La piedra del pensar y querer como Jesús, la piedra de la caridad y el servicio para con todos;

— la piedra del esfuerzo para construirnos a nosotros mismos;

— la piedra de la alegría que brota del corazón;

— la piedra de la generosidad y del compartir nuestras cosas.

Acéptalas, Señor, y colócalas en el lugar más adecuado.

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QUINTO DOMINGO DE PASCUA ^

Mensaje Dios nos dio el Espiritu de amor.

Comentario Los cristianos compartían todo lo que tenían, repartían según las necesidades de cada uno, lo poseían todo en común, nadie consideraba como suyo nada de lo que tenía.

Materiales

— Baúl con los objetos para los testimonios. — Preparar la escenificación.

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A. RITOS INICIALES


2. CANTO

3. ORACIÓN

Señor, Tú has querido darnos vida y para ello plantaste en el mundo una vid que es Jesús, para que estuviésemos unidos a Él y entre nosotros como están los sarmientos. Míranos con cariño y ayúdanos a vivir contentos y alegres unidos a Jesús, como las ramas están unidas al árbol en el que han nacido. Por Jesucristo nuestro Señor.

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4. ESCENIFICACIÓN: Testimonio de san Francisco de Asís.

FRANCISCO: (Entra orando.) Loado sea por toda criatura, mi Señor.

Y en especial loado por el hermano Sol.

y por la hermana muerte, mi Señor.

¡Hola! Yo soy Francisco de Asís el hijo del Bernardone. Mi padre era un rico mercader y pensaba sólo en el dinero. Como en mi casa había mucho yo no me ahorraba ningún capricho. Ya cuando fui mayor soñaba con hazañas caballerescas y llegar a ser muy famoso. Como no me faltaba ni dinero, ni arrogancia, me gustaba mucho el buen vivir y el lujo. Pero no creáis que todo era malo, también tenía mi corazoncito bueno que me hacía sentir generoso con la gente pobre.

Un día Jesús me preparó una buena encerrona a través de un leproso. Me hizo descubrir el sufrimiento humano con mi corazón y con mi alma, que aunque eran muy buenos albergaban muchas lepras. Hasta que otro día me encontré con el Cristo de san Damián que me hizo cambiar completamente de vida.

Empecé a leer la Palabra de Dios. Os invito a leer un párrafo que me hizo mucha mella:

5. LECTURA de la primera carta de san Juan 3,18-24

6. CANTO

FRANCISCO: Este y otros textos me hicieron dar todo a los pobres, devolver mis vestidos a mi padre y ser perseguido y encarcelado por mi propio padre. Y ese fue luego el ideal de mi vida, seguir a Cristo pobre y predicarlo por Europa y en tierra de sarracenos.

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Aquí está esta alforja (la saca del baúl), signo de esa iti-nerancia que Jesús nos dijo de no llevar nada: ni alforja, ni sandalias, ni nada. Traté de vivir el Evangelio sin glosa, sin interpretaciones y eso mismo encargué a mis compañeros; por eso para mí todos y todo, animales y cosas eran mis hermanos.

Ese desprendimiento total me llevó a una alegría total, a una identificación tan grande con Cristo crucificado que siento pudor y vergüenza decirlo: fui estigmatizado con sus llagas, de tal forma que quise morir lo más pobre posible, desnudo y en el suelo.

Y es que Cristo para mí era lo principal de mi vida.

7. LECTURA del evanglio según san Juan 15, 1-8


¿Te ha gustado ese testimonio de san Francisco? ¿Qué destacarías de lo que has oído?

Para san Francisco todo y todos eran hermanos, ¿y para ti?

¿Eres capaz de desprenderte de alguna cosita y compartir?

¿Cómo sabes que tus papas te quieren? ¿Te lo demuestran de boquilla o con hechos? ¿Tú también les amas con hechos? ¿Y a los demás también?

¿Te impresiona la pobreza total de san Francisco?

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Mensaje Somos amigos de Jesús si nos amamos.

Comentario Las tres lecturas de hoy dan un mensaje de amor y de unidad. Por eso este domingo destacamos «vivían unidos, pensaban y sentían lo mismo».

Materiales — Baúl con los objetos para los testimonios. — Objetos para las ofrendas: listas, medicinas-óleos, flores, Biblia,

pan y vino

Observaciones Hoy los niños leen testimonios de cristianos, mejor si hubiese testimonios vivos. Habría que decir el último para sacar la Biblia del baúl. En las ofrendas tenemos en cuenta que es el día del enfermo.

A. RITOS INICIALES


2. CANTO


3. LECTURA de la primera carta de san Juan 4, 7-10

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4. CANTO


6. LECTURA DE TESTIMONIOS

Todos podemos y debemos ser testigos de la Resurrección:

(Ofrecemos estos testimonios, puede servirse de otros dichos por los propios niños.)

1. «¡Hola! Soy yo, uno de tantos, uno cualquiera que como todos nací pequeño, feúcho y pelón. Fui un niño normal. Hice las cosas normales de niño: reñir, pelearme, desobedecer, algún novillo, algunas palabrotas, y eso sí, muchas rabietas...

De joven fui un estudiante normal, las «mates» se me atravesaban. En la mili me desmadré un poco. A la vuelta de la mili quise tomarme las cosas en serio.

Un domingo en el atrio de una iglesia leí un cartel: «Muchos jóvenes son rebeldes sin causa, ¿quieres conocer la causa de un rebelde?» Y eso es lo que estoy haciendo, conocerle. Creo que me he encontrado con Él, pues mi vida es normal como antes, pero totalmente distinta. Creo que me estoy revistiendo de Cristo.

2. «¡Me maravilla cómo personas tan distintas podemos entendernos y querernos! Creo que lo hace posible nuestra común experiencia de la fe en Cristo Jesús resucitado, vivo y presente hoy entre nosotros. Soy feliz como no lo he sido nunca, pues he descubierto a Cristo en mi vida a través de los demás.»

3. «Una mujer joven que pertenece a Jesús (les impresiona mucho que no me haya casado) ha venido a vivir con nosotros.

»No me pedían más que esto: que viviera con ellos. Pero para que reconocieran que realmente soy de Jesús, me tenía que poner a su servicio, tenía que mostrar con mi vida de discípulo de Jesús que Dios está con todos nosotros, que está con nosotros si nos amamos como hermanos y si tenemos preferencia por los más débiles.

«Así he intentado responder a la llamada de Cristo: "Id por todo el mundo y predicad el Evangelio".

»Yo planté mi tienda en un país de África, no podría ir por todo el mundo. Y no tanto a predicar, sino para dar testimonio de mi fe. Yo creo en Jesús y tengo que hablar de Él con toda mi vida.»

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4. «A mis 25 años he descubierto a Cristo y mi vida ha cambiado. Antes en mi ambiente de trabajo por ejemplo, no me decidía a confesarme cristiano, tenía miedo al desprecio de los demás. Hoy lo hago y me mantengo firme, pues tengo la impresión de tener detrás de mí a Alguien que me da la fuerza que yo no tengo. He encontrado una cierta alegría de vivir, aunque eso no quiere decir que mis dificultades hayan desaparecido.»

5. «Tengo 27 años. Trabajo en una oficina. Me bautizaron siendo niño. Mis padres cristianos de toda la vida, no sé si por convicción o por costumbre. Durante años yo había dejado toda inquietud religiosa. Un día me encontré con Clara. Hacía tiempo que no nos veíamos. Me dijo que había encontrado a Cristo. No se lo podía callar. Hablamos mucho aquella tarde y las otras sucesivas. Me regaló una Biblia que cada vez aprecio más. (Saca una Biblia del baúl.) Hoy puedo reconocer que aquel día recibí algo más que un libro. Me regalaron a Cristo.»

Regalaos también vosotros una. Es el mejor regalo que os podéis hacer si queréis ser discípulos y testigos de Jesús. (La pone sobre el altar.)


¿Cuál de estos testimonios te ha gustado? ¿Por qué?

¿Cómo sería tu testimonio como cristiano? ¿Qué dirías?

Dios no hace distinción de personas, ¿tú de quién te separas o a quién separas en clase, en el patio, en la calle, en el parque...?

¿Sabes que el testimonio de amor es el primero que has de dar tú, y el de unidad el primero que hemos de dar todos los cristianos?



— Todos tenemos nuestra lista negra de personas que nos caen mal y que rechazamos. Nos avergonzamos de que sea así y no queremos que se vean sus nombres. Por eso son negras. Queremos Se-

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ñor, que nuestras listas sean blancas y que cada día contengan más nombres impresos. Hoy te presentamos esta lista de enfermos a los que tenemos que cuidar.

— ¡Qué maravillas hacen las medicinas cuando nuestros cuerpos están malitos! Con ellas te presentamos los óleos con que nos ungieron en nuestro bautismo para fortalecernos en la fe, y con el que a continuación se ungirá a los ancianos y enfermos para que se mantengan en la esperanza. Así la vida de los cristianos será sana.

— Hoy queremos tributar un homenaje a nuestros mayores, sobre todo a nuestros abuelitos y abuelitas. Estas flores son expresión de nuestro respeto y cariño por ellos. La Biblia es nuestra expresión cristiana de agradecimiento por habernos transmitido la fe.

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PASCUA

CICLO C

Como cristianos damos testimonio de la Resurrección

PRIMER DOMINGO DE PASCUA ! Í | t

Mensaje En el Bautismo hemos resucitado con Cristo.

Comentario La fe nos ha llegado a través del testimonio de otros y nosotros hemos de continuar esa transmisión. La misión de todo cristiano es ser testigo de la Resurrección. Tarea que se nos encomienda en nuestro Bautismo. Por eso en este ciclo nos centramos en el Bautismo. Cada domingo tendremos en cuenta un símbolo del Bautismo, el más adecuado a la liturgia del día. Con él haremos un gesto para asumir nuestro propio Bautismo y nuestro compromiso de ser testigos. El comentario dialogado versará sobre la Palabra de Dios del día. Este domingo de Pascua señalamos el agua como elemento de purificación y de vida. Los bautizados nacemos a la vida nueva de hijos de Dios, porque Dios habita en nosotros.

Materiales Ponemos en lugar destacado la pila bautismal con agua.

Observaciones Cada domingo de Pacua los niños renuevan su Bautismo. Para ello hacen un gesto adecuado con el símbolo bautismal que tenemos presente ese domingo. En la liturgia de la Palabra de las dos primeras lecturas elegimos la que más se adecué al tema del Bautismo.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. PREGÓN

Este es el día en que actuó el Señor, que sea un día de gozo y alegría.

Este es el día en que Cristo salió vivo y victorioso del sepulcro.

Este es el día que lava las culpas y devuelve la inocencia.

Hoy cantamos tu victoria, celebramos tu misericordia y proclamamos tu bondad y tu ternura.

Que sea para nosotros el gran día que no se aparte nunca de nuestra memoria, y que sea el comienzo de una vida nueva de esperanza, de amor y de alegría.


3. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 10, 34.37-43

4. CANTO

5. LECTURA de la primera carta a los Corintios 5, 6-8



¿Has asistido a algún bautizo? ¿Qué se hacía?

¿Qué te han explicado del Bautismo? ¿Qué sabes decir? ¿Qué te han contado del tuyo?

Como a Jesús a ti también te han bautizado, ¿pasas como Él haciendo siempre y a todos el bien? ¿O pasas de todo y de todos?

¿Te comportas cada vez más como hijo de Dios?

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8. RENUNCIAS Y PROFESIÓN DE FE

— ¿Renunciáis al mal, como signo del pecado en el mundo?

— ¿Renunciáis a vuestras envidias y odios, vuestras perezas e indiferencias, vuestras cobardías y complejos, tristezas y desconfianzas, a creeros que sois los más importantes de todos, a vuestra falta de fe, esperanza y caridad?

— ¿Creéis que Dios es nuestro Padre que nos ama y permanece fiel en su amor?

— ¿Creéis en Jesucristo que murió y resucitó y vive en el hermano, sobre todo en los más pobres y en los que más sufren?

— ¿Creéis en el Espíritu que nos une como amigos y nos ayuda a caminar a un mundo nuevo?

— ¿Creéis en la Iglesia que formamos todos los que creemos en Jesús?

— ¿Creéis en el perdón de los pecados y que todos los hombres y mujeres tenemos un final feliz en Dios?

En esta fe nos vamos a rebautizar y vamos a resucitar.

9. GESTO

Pasan por la pila y se santiguan con el agua bendita...

10. TESTIMONIO

¡Felices Pascuas a todos!

— A Pedro y a todos los que como Pedro sois muy bravucones con las palabras, pero muy débiles con la voluntad.

— A Pilato y a todos los pelotas y enchufados como Pilato y pilatillos que tanto abundan, pero que a la hora de la verdad os laváis las manos como Pilato.

— Felices Pacuas a todos los tristes, desencantados, cenizos, que como los discípulos en Emaús comentáis que esto no hay Dios que lo arregle.

— Felices Pascuas a todos los que no sabéis celebrar la Pascua, pero os pasáis la vida haciendo la pascua a todos.

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— Felices Pascuas a todos los que sois testigos de la Pascua: Cristo ha resucitado.

11. PRECES



Hoy Señor te presentamos el agua en que nos hemos rebautizado para ser tus testigos, siendo hombres nuevos. ¡Cuánta suciedad nos cae encima!, desde la suciedad de nuestras perezas y mentiras, pasando por la suciedad de nuestras malas intenciones y pensamientos, hasta la que nos echan los demás con sus insultos que nos duelen y las críticas que nos hieren. Que frecuentemente vengamos a lavarnos en esta agua.

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SEGUNDO DOMINGO DE PASCUA

Mensaje En las cruces de hoy vemos a Jesús.

Comentario Y no sólo vemos y encontramos a Jesús, sino que como Tomás hemos de estar dispuestos a meter los dedos y las manos en las llagas que ellas producen y a curar como los Apóstoles.

Materiales Ponemos en lugar destacado un crucifijo. Para señalarlo como un distintivo de vida cristiana, ya que no es una cosa trivial. Al hacer la señal de la cruz, anunciamos quiénes somos y que queremos amar hasta la muerte.

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A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. ORACIÓN

Señor, queremos palpar tus cinco llagas en el niño desnudo y con hambre, en el pobre con sus harapos, en las tragedias de terremotos e inundaciones, en los enfermos y ancianos. Ahí queremos verte y encontrarte. Por Jesucristo nuestro Señor.

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3. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 5,12-16

4. CANTO

5. LECTURA del evangelio según san Juan 20, 19-31 (Se puede hacer dialogada)


¿Sabes hacer la señal de la cruz? ¿Cuándo y para qué la hacemos los cristianos? ¿Te da vergüenza hacerla?

¿Qué piensas cuando ves a un futbolista santiguarse cuando salta al campo o va a tirar un penalti?

¿Sabes que al hacerla los cristianos decimos quiénes somos? ¿Que estamos dispuestos a amar hasta la muerte? ¿A correr la misma suerte de Jesús?

7. DESPUÉS DE LA PROFESIÓN DE FE

Si queremos resucitar con Cristo hay que crucificar, meter en las llagas de Cristo todo lo negativo, lo malo, el niño malo. Hay que morir con Cristo. Es lo que pide nuestro Bautismo.

Pon ahí en la cruz, tus soberbias y chulerías, tus deseos de ser importante, el mejor, tus deseos de prevalecer, para que tu cabeza no sufra dolores, ni mareos.

Mete en las llagas de Cristo:

— El niño «fanfa» que hay en ti.

— El niño consumista que hay en ti con tus ansias de que te compren todo y lo mejor: los mejores juguetes, las mejores marcas, chucherías, helados... para que tus manos no se cierren egoístamente.

— El niño caprichoso que hay en ti con tus perezas y tus como-donerías, con tus ansias de pasártelo siempre «guay», para que tu corazón no sea seducido por engaños.

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— Mete en las llagas de Cristo el niño egoísta que hay en ti, con tu tozudez y cabezonería, tus cobardías y tus rabietas, con tu cerrazón y morros largos, para que pueda nacerte un corazón nuevo.

Así, crucificado el niño viejo nacerá el niño nuevo, testigo de la resurrección, pequeño Cristo resucitado.

8. GESTO

Los niños pasan a besar la cruz.

9. TESTIMONIO

Testigos de la Resurrección. Cada uno de nosotros.

— Que no queramos ser servidos, sino servir.

— Que no queramos acaparar, sino compartir.

— Que no queramos prevalecer, sino unir.

— Que no vivamos para sí, sino para los demás.

— Que no sembremos discordia, sino paz.

— Que no anunciemos catástrofes, sino que despertemos esperanza.

— Que no nos fiemos de nosotros mismos, sino de Dios.

Así sea. ¡Feliz Pascua de Resurrección!

10. PRECES



Te presentamos Señor, la cruz donde hemos clavado nuestro niño viejo. Te la hemos hecho más pesada. Sabemos que aguantas todo lo que te echemos, pero te prometemos que desde hoy te ayudaremos a llevarla porque vamos a tener un comportamiento mejor.

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Mensaje Obedecemos a Dios antes que a los hombres.

Materiales Ponemos en lugar señalado la Biblia que tenemos que conocer a Jesús, sus palabras y lo a todos.

sus hechos, vivir su vida y leer para enseñar-


1. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 5, 27-32.40-41

2. CANTO

3. LECTURA del evangelio según san Juan 21, 1-19 (Se puede hacer dialogada)


¿Te gusta leer la Biblia? ¿Sabes qué son el Antiguo y el Nuevo Testamento?

¿Conoces algunos pasajes importantes?

¿Por qué llamamos a este libro Palabra de Dios? ¿Por qué decimos que Jesús es la Palabra de Dios?

¿Te das cuenta de que al hablar de Jesús dices la Palabra de Dios?

Palabra de Dios. Te alabamos Señor. Si así contestamos, decir que es un «rollo» ¿no será menospreciarla?

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Toda la Escritura se ha escrito para enseñanza nuestra, de modo que entre nuestra constancia y el consuelo que dan las Escrituras, mantengamos la esperanza de vida.

Ella te sacia con flor de harina, envía su mensaje a la tierra y corre veloz, anuncia sus mandatos y decretos a Israel.

Hay que encariñarse con ella, pararse a pensarla, empaparse de ella, vivir bajo su cobijo, adentrarla en nuestra alma.

Hay que descansar en ella, soñar con ella y despertarse con ella, Hay que persuadirse de que ella y sólo ella es pan, y que sólo de ella hemos de tener sed y hambre.

Dios quiso hacerla más sonora y cercana, más cálida y viva, más entrañable y palpable. Se acercó tanto al hombre que se revistió de carne.

Acércate tú a ella para que a ti también te hable, y sea «tu amén» firme, seguro, reconfortante.

6. GESTO

Pasan delante de la Biblia y poniendo la mano encima de ella dicen: «Amén».

7. TESTIMONIO

¡Sé testigo de la Palabra!

Anuncia el Evangelio a todo el mundo, lleva su mensaje de amor, perdón y paz.

Sé pequeña palabra viva de la Gran Palabra de Dios; sé palabra verdadera de la única palabra de Dios; canta palabras liberadoras de la salvadora Palabra de Dios.

Sea tu palabra amiga de la misericordiosa Palabra de Dios; sé tú palabra luminosa porque luminosa es la Palabra de Dios.

Habla de corazón a corazón porque así te habla la palabra de Dios.

Destierra de tu boca las palabras malsonantes e hirientes porque así no te habla la Palabra de Dios.

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Habla así, que así se habla. ¡Feliz Pascua de Resurrección!

8. PRECES

B. LITURGIA EUCARÍSTICA


Al presentarte la Biblia te decimos que tenemos hambre de tu Pala bra. Transfórmala junto con el pan y el vino en alimento que al comer lo se haga carne en cada uno de nosotros.

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CUARTO DOMINGO DE PASCUA mm;

Mensaje Anunciamos la Palabra de Dios.

Materiales Ponemos en lugar destacado una túnica blanca, como expresión de la vida nueva a la que nacemos los bautizados. Nuestra vida cristiana es «lavar y blanquear las túnicas en la sangre del Cordero», como dice la segunda lectura de hoy.

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A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. DIÁLOGO

¿Somos ovejas ideales? ¿Cuándo?

¿Somos ovejas negras? ¿Cuándo?

¿Somos pastores o mercenarios? ¿Cuándo?

¿Somos lobos rapaces? ¿Cuándo?

3. RITO DEL PERDÓN

— Porque sólo prestamos favores a quien antes nos los ha prestado.

— Porque sólo amamos a los que nos aman.

— Porque queremos seguir el ejemplo del Buen Pastor.

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4. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 13,14.43-52

5. CANTO



Va hecho un Adán, se ha puesto como un Cristo, son expresiones normales, ¿sabes qué significan?

¿Te gustaría tener un maillot de Induráin o una camiseta de Raúl o Rivaldo? ¿Por qué y para qué?

El vestido dice lo que somos, el disfraz nos oculta. ¿De qué te gusta disfrazarte? ¿Qué es lo que no quieres que se vea de ti?

¿Sabes que vestirse o revestirse de Cristo te compromete a vivir como Él?


Los que nos revestimos de Cristo nos acoplamos a su manera de ser y de pensar, abandonamos nuestro mal pensar y accedemos a una nueva mentalidad, revestidos hoy así:

TODOS: «Caminamos en una vida nueva».

Los que nos revestimos de Cristo nos acoplamos a su manera de ser, a su talante, nos despojamos de actitudes impropias y adoptamos un estilo de vida nuevo. Revestidos hoy así:


Los que nos revestimos de Cristo nos acoplamos a su forma de sentir, dejamos el sin sentir y accedemos al consentir, revestidos hoy así:


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Los que nos revestimos de Cristo nos acoplamos a su modo de proceder, de conducirse, nos apartamos de malos comportamientos y adoptamos conductas nuevas, revestidos hoy así:


Los que nos revestimos de Cristo nos acoplamos a su proyecto de instaurar el reino, desechemos los caminos torcidos y aprendamos derroteros derechos, revestidos hoy así:


9. GESTO

Se impone cuando pasan por delante una túnica recogida en las manos.

10. TESTIMONIO

Los testigos de Cristo vestiremos siempre vestidos de alegría y fiesta.

Quien no aporte motivos de risa y alegría, ni tampoco los que no tienen nada que agradecer, ni los aguafiestas y pesimistas son testigos de la Resurrección.

Los testigos de la Resurrección con nuestros miedos, complejos y desánimos recorremos los caminos de la comunidad revestidos de fantasmas.

Denunciamos a los que entre nosotros se visten de negro porque todo lo ven mal, dicen que todo es una «m», y que este mundo no hay quien lo arregle porque cada vez vamos peor.

Al lavar nuestro vestido procuraremos que no se nos encoja porque junto con la suciedad se nos vayan trozos de bondad, delicadeza, cariño, comprensión, respeto y amor.

Llevaremos en el vestido la etiqueta, la marca de hijos de Dios porque correremos el riesgo y la aventura de hacer felices a los demás.

Que así sea. ¡Feliz Pascua de Resurrección!

11. PRECES

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Te ofrecemos este vestido blanco que nos acabamos de poner. Que lo mantengamos así para que todos vean que somos niños nuevos que ya hemos resucitado contigo.

- 2 1 8 -

Mensaje El amor es nuestro distintivo.

Materiales Ponemos en lugar destacado el Cirio Pascual, que representa a Cristo Resucitado. Él ha de iluminar nuestra vida. La luz que nosotros hemos de encender y por la que nos han de reconocer es el amor.

I


1. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 14, 20-26

2. CANTO



Cada cual puede hacer las preguntas pertinentes sobre el precepto de amor, o los cielos nuevos y tierra nueva consecuencia de ese amor. {Temas de las lecturas.)

¿Tú, hasta dónde, a quién, cómo, para qué amas?


«La luz de Cristo brilla en la ciudad.» (Repetir.)

- 2 1 9 -

— Dios quiere que hagamos una ciudad sin murallas y de puertas abiertas, un lugar donde quepamos todos: blancos y negros, jóvenes y viejos, niños y niñas, guapos y feos... Una ciudad donde nadie se sienta extraño.

— Dios quiere que hagamos una ciudad con casas grandes y hermosas, con estancias confortables para todos: donde jueguen los niños, se caliente a los ancianos y se cure a los enfermos, donde dialoguen los jóvenes y los mayores compartan, una ciudad donde sentirse a gusto con todos.

— Dios quiere una ciudad con espacios comunes donde vernos y tratarnos, saludar y pasearnos, con espacios verdes donde jueguen los niños y tomen el sol los ancianos.

— Dios quiere que construyamos una ciudad donde vivamos dichosamente, convivamos en paz, donde todos tengan trabajo y trabajemos en algo digno y atendamos las necesidades de nuestros vecinos.

Encendamos esa luz en la ciudad.

6. GESTO

Pasan y encienden una vela. (Puede ser la del propio bautismo.)

7. TESTIMONIO

Somos testigos de esa luz en la ciudad si:

— donde hay odio ponemos amor;

— donde hay división ponemos comunión;

— donde hay desencanto ponemos esperanza;

— donde hay miedo ponemos fortaleza;

— donde hay tristeza ponemos alegría;

— donde hay egoísmo ponemos fraternidad;

— donde hay vacío ponemos plenitud;

— donde hay soledad ponemos cercanía;

— donde hay duda ponemos fe;

— donde no está Cristo pongámosle vivo y resucitado.

Así sea. ¡Feliz Pascua de Resurrección!

- 2 2 0 -

8. PRECES

B. LITURGIA EUCARÍSTICA


Te presentamos Señor, este cirio y estas velas. Tú eres la luz y nosotros tenemos que ser luz en nuestra ciudad que todavía no es la que Tú quieres. Esas luces las pondremos con lo mejor de nosotros mismos: la sonrisa de la cara.

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SEXTO DOMINGO DE PA

Mensaje Dios me ama, me da su Espíritu y su paz.

Materiales

Ponemos en lugar destacado los óleos o un frasco de colonia. Somos ungidos como Jesús con la fuerza de su Espíritu para continuar su misión.

A. RITOS INICIALES

1. CANTO

2. RITO DEL PERDÓN

— Tú hiciste la tierra buena y generosa, pero nosotros la esquilmamos; reconcilíanos con la tierra.

— Tú nos hiciste a tu imagen, pero nosotros la estropeamos; reconcilíanos con tu imagen.

— Tú nos hiciste tu pueblo, pero nosotros nos portamos como enemigos; reconcilíanos para ser amigos.


3. LECTURA de los Hechos de los Apóstoles 15, 1-2.22-29

4. CANTO

- 2 2 2 -



¿Te han dado alguna vez masajes o friegas? ¿Para qué?

¿Por qué a los deportistas se les da masajes o echa el agua «milagrosa»? ¿Para qué se engrasan los motores?

¿Sabes que a los cristianos se nos echó aceite (ungió) en el Bautismo para lo mismo?

¿Tú qué eres un cristiano flojillo, del montón o valiente y decidido?


Porque Cristo ha resucitado:

— Ya no hay lugar para la tristeza porque Cristo nuestro gozo te sonríe. Habrá sí, dolor y sufrimiento, tú les puedes poner consuelo. Sé tú, sonrisa de Cristo para todos, especialmente para los enfermos.

— Ya no habrá lugar para la desesperanza porque nuestro sol te ilumina y sostiene. Habrá sí problemas y desengaños, tú puedes iluminarlos. Sé tú, mano tendida y teléfono de la esperanza.

— Ya no hay lugar para la soledad porque Cristo amigo te acompaña. Habrá sí soledades y olvidos, tú puedes ofrecer compañía. Sé presencia de Cristo y amistad ofrecida.

— Ya no habrá lugar para el odio porque Cristo el amor te quiere, Habrá sí envidias y desprecios, tú puedes ser compasivo. Tú ten entrañas de misericordia.

— Ya no habrá lugar para la muerte porque Cristo nuestra vida resucita en ti. Habrá hambres, guerra, vicios, enfermedades, tú resucitado, sé testigo de la Resurrección. Esparce semillas de vida y expande el perfume de Cristo.

8. GESTO

Pasan y se les perfuman las manos.

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9. TESTIMONIO

Somos testigos de Cristo porque hemos convertido el corazón de piedra en corazón de carne.

Somos testigos de Cristo porque tenemos y hacemos la experiencia del perdón.

Somos testigos de Cristo porque mana en nosotros una fuente de alegría, que nadie nos puede arrebatar.

Somos testigos de Cristo porque tenemos paz, la paz de Cristo.

Somos testigos de Cristo porque quitamos todos los miedos.

Somos testigos de Cristo porque sentimos amor a todos los hermanos.

Somos testigos de Cristo porque tenemos siempre fresca la flor de la esperanza.

Somos testigos de Cristo porque vemos en el pobre el rostro del Señor.

Somos testigos de Cristo porque sabemos que nunca estamos solos porque Cristo vive.

¡Feliz Pascua de Resurrección!

10. PRECES



Te ofrecemos estos óleos, perfume, incienso... Encerrados en cajas o frascos no sirven para nada, como la sal encerrada en el salero. Que nosotros derramemos y expandamos el perfume de las buenas obras, para que todos perciban la presencia de Cristo en nosotros y glorifiquen a nuestro Padre del cielo.

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12. MONICIÓN PARA LA PAZ

Si crees que una sonrisa es más poderosa que un arma.

Si crees que una mirada con ternura es más fuerte que un rostro hosco.

Si estás dispuesto a dar el primer paso antes que el otro.

Si prefieres que te ofendan antes que hacer daño tú.

Si el otro es para ti y ante todo un hermano.

Entonces eres como Jesús, eres un instrumento de su Paz.

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ÍNDICE GENERAL

Introducción 7

ADVIENTO

CICLO A: La Palabra de Dios se escribió para nuestra conversión 9

Primer domingo de Adviento: La Palabra de Dios es juez y arbitro 11 Segundo domingo de Adviento: La Palabra de Dios da enseñanza y

consuelo 15 Tercer domingo de Adviento: La Palabra de Dios anuncia una

Buena Noticia 18 Cuarto domingo de Adviento: Su misión, que todos se abran a la fe.... 22

CICLO B: Un Hombre nuevo para un pueblo unido 25

Primer domingo de Adviento: Vuelve tu rostro a nosotros 27 Segundo domingo de Adviento: Hablad al corazón de mi pueblo 31 Tercer domingo de Adviento: Anunciad y haced el bien 34 Cuarto domingo de Adviento: Emprended el camino del servicio 37

CICLO C: Sólo un pueblo unido es un pueblo de Dios 41

Primer domingo de Adviento: Un pueblo que agrada a Dios 43 Segundo domingo de Adviento: Un pueblo que crece en amor 47

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Tercer domingo de Adviento: Un pueblo alegre, orante y pacífico 50

Cuarto domingo de Adviento: Un pueblo que cree en las promesas .... 54

CUARESMA

CICLO A: Javi de camino a la bondad 59

Sexto domingo: Una justicia superior 61

Primer domingo de Cuaresma: Vencemos las tentaciones 67

Segundo domingo de Cuaresma: Queremos crecer y ser mejores 73

Tercer domingo de Cuaresma: Jesús sacia los deseos de ser

mejores 78

Cuarto domingo de Cuaresma: Con sus ojos miramos de otra

manera 85 Quinto domingo de Cuaresma: Su espíritu es de amor y de vida 90

CICLO B: Javi de camino a la luz 97

Sexto domingo: Ha de brillar nuestra luz 99

Primer domingo de Cuaresma: Vivimos situaciones de oscuridad 102

Segundo domingo de Cuaresma: Combatimos entre luz y oscuridad.... 106

Tercer domingo de Cuaresma: Necesitamos luces para el camino 109

Cuarto domingo de Cuaresma: Jesús es nuestra luz 112

Quinto domingo de Cuaresma: Su amor ilumina nuestra vida 116

CICLO C: Javi de camino a la Verdad 121

Sexto domingo: Somos hombres de Bienaventuranzas 123

Primer domingo de Cuaresma: No nos dejamos engañar, ni manipular.. 128

Segundo domingo de Cuaresma: La verdad está en nuestro interior 132

Tercer domingo de Cuaresma: Dios nos invita a cambiar nuestras

mentiras 137

Cuarto domingo de Cuaresma: Nuestra verdad: ser y actuar como

Jesús 143

Quinto domingo de Cuaresma: La verdad que libera: el amor hecho

perdón 148

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PASCUA

CICLO A: Los apóstoles dieron testimonio de la Resurrección.. 153

Primer domingo de Pascua: Testimonio de Juan 155 Segundo domingo de Pascua: Testimonio de Tomás 158 Tercer domingo de Pascua: Testimonio de Magdalena 162 Cuarto domingo de Pascua: Testimonio de Pedro 168 Quinto domingo de Pascua: Testimonio de Felipe 172 Sexto domingo de Pascua: Testimonio de Judas 175

CICLO B: Los cristianos han dado testimonio de la Resurrección 179

Primer domingo de Pascua: Los cristianos somos testigos 181 Segundo domingo de Pascua: Testimonio de Lucas. Eran constantes en

la oración 185 Tercer domingo de Pascua: Testimonio de Pablo. Eran constantes

en la enseñanza 188 Cuarto domingo de Pascua: Testimonio del papado. Eran constantes

en el partir el pan 192 Quinto domingo de Pascua: Testimonio de san Francisco. Lo poseían

todo en común 195 Sexto domingo de Pascua: Testimonios varios: Vivían unidos 198

CICLO C: Como cristianos damos testimonio de la Resurrección.. 203

Primer domingo de Pascua: Nos bautizamos en Cristo 205 Segundo domingo de Pascua: Amamos hasta la muerte 209 Tercer domingo de Pascua: Anunciamos el Evangelio 212 Cuarto domingo de Pascua: Nos revestimos de Cristo 215 Quinto domingo de Pascua: Iluminados por la luz de Cristo 219 Sexto domingo de Pascua: Ungidos por el Espíritu 222

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echevarria, jose ramon - celebrar la eucaristia con los niños 01

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