Dulce final, silvia

1
Dulce final No soportaba más su calvario. El estigma del suicidio que perseguía a su familia le impedía poder llevar a cabo el doloroso ritual . Aunque era imposible a esta altura rebelarse ante tanto sufrimiento , sabía que la solución estaba en sus manos . Sintió cómo la gruesa soga rozaba de modo impertinente su cuello y, antes de saltar , un frio y suave sudor recorrió su cuerpo. Sólo se dio cuenta de que lloraba al sentir el sabor acre y salado de las lágrimas. Lo último que escuchó fue el golpe de la cabeza contra el piso y sus uñas arañando la pared en un último intento por impedir el irrevocable final. Todo había terminado. Ya no reía ni lloraba , ya no amaba ni odiaba . Sintió un gran alivio , su espíritu había sanado. Algo dentro de ese cuerpo lívido , ya sin vida, comenzó a elevarse lentamente. Ese algo percibía todo lo que pasaba allá abajo, gritos y llanto, corridas y rezos. Sólo había desesperación entre los que rodeaban al cuerpo . Incredulidad ante la decisión que había tomado. Pero él sólo sentía que había sido alcanzado por un bálsamo sanador, un agradable paliativo para el alma. Sintió un inconfundible aroma a rosas y supo que había llegado a destino y que por fin podría descansar . Silvia Bureau Este texto fue elaborado en el Taller Literario por la autora a partir de la siguiente consigna: 1. Elegir al azar, entre todos los integrantes de taller, 12 sustantivos, 12 adjetivos y 12 verbos, sin ninguna conexión aparente entre sí. 2. Tomar un mínimo de 24 palabras de las elegidas (las subrayadas en el texto), y componer en texto libre en un tiempo máximo de 15 minutos.

Transcript of Dulce final, silvia

Page 1: Dulce final, silvia

Dulce final

No soportaba más su calvario. El estigma del suicidio que perseguía a su

familia le impedía poder llevar a cabo el doloroso ritual. Aunque era

imposible a esta altura rebelarse ante tanto sufrimiento, sabía que la

solución estaba en sus manos. Sintió cómo la gruesa soga rozaba de modo

impertinente su cuello y, antes de saltar, un frio y suave sudor recorrió su

cuerpo. Sólo se dio cuenta de que lloraba al sentir el sabor acre y salado de

las lágrimas. Lo último que escuchó fue el golpe de la cabeza contra el piso y

sus uñas arañando la pared en un último intento por impedir el irrevocable

final.

Todo había terminado. Ya no reía ni lloraba, ya no amaba ni odiaba. Sintió un

gran alivio, su espíritu había sanado. Algo dentro de ese cuerpo lívido, ya sin

vida, comenzó a elevarse lentamente. Ese algo percibía todo lo que pasaba

allá abajo, gritos y llanto, corridas y rezos. Sólo había desesperación entre los

que rodeaban al cuerpo. Incredulidad ante la decisión que había tomado.

Pero él sólo sentía que había sido alcanzado por un bálsamo sanador, un

agradable paliativo para el alma. Sintió un inconfundible aroma a rosas y

supo que había llegado a destino y que por fin podría descansar.

Silvia Bureau

Este texto fue elaborado en el Taller Literario por la autora a partir de la

siguiente consigna:

1. Elegir al azar, entre todos los integrantes de taller, 12 sustantivos, 12

adjetivos y 12 verbos, sin ninguna conexión aparente entre sí.

2. Tomar un mínimo de 24 palabras de las elegidas (las subrayadas en el

texto), y componer en texto libre en un tiempo máximo de 15 minutos.