Dossier 26 05 2012

14
Dossier de trabajo Plataforma Radical Republicana Sevilla, 26 de Mayo de 2012 1

Transcript of Dossier 26 05 2012

Page 1: Dossier 26 05 2012

Dossier de trabajo

Plataforma Radical Republicana

Sevilla, 26 de Mayo de 2012

1

Page 2: Dossier 26 05 2012

Índice:

1.- Apuntes sobre el radicalismo republicano

2.- Discurso pronunciado por Don Manuel Azaña el 11 de febrero de 1930.

3.- Declaración 13 de abril de 2012

4.- Documento político de I.R.

5.- Programa político resumido de U.R.

6.- Debate sobre la conformación de la asociación política y pasos a seguir antes de legalizarla

2

Page 3: Dossier 26 05 2012

Apuntes sobre el radicalismo republicano

Para aquellos que desconozcan y se pregunten por la historia y el presente del radicalismo republicano bastaría con manifestarles: ha sido, y es, la historia comparada de dos doctrinas políticas. El Socialismo individualista e internacionalista de inspiración marxista. El Radicalismo solidario y universalista de imperturbable convicción humanista.Sin embargo, los historiadores han reservado la mayor parte de sus trabajos a la doctrina socialista, a sus primeros pensadores: Marx, Lenin y los innumerables exégetas y panegiristas del marxismo. Debido a hecho irrefutable, los marxistas han podido reinar en solitario durante casi un siglo y medio sin dejar prácticamente espacio a otras doctrinas humanistas y sociales. Si el radicalismo ha podido resistir, ha sido gracias a la potencia de su fondo doctrinal y la dimensión universalista de su concepción sobre el hombre. Debido a ciertos acontecimientos históricos que han tocado el corazón de los republicanos radicales, sería bueno reflexionar hoy, sobre la manera de ser radical, sobre la libertad, sobre la República y, en primer lugar, sobre lo que diferencia, básicamente, al radicalismo del socialismo.Veintitrés años después de la caída del muro de Berlín y, del retroceso del comunismo en el mundo y Europa, sería útil retroceder a las raíces del socialismo, esa gran utopía social que se ha hundido con la misma violencia que ella misma suscitó en todas las partes del mundo. Retroceso histórico, también necesario, para poder exhumar, las doctrinas sociales que el comunismo ha barrido a su paso, dejando para las universidades, el cuidado de conservar en el silencio de sus archivos, los puntos de vista, casi desconocidos hoy, de los socialistas utopistas franceses, Proudhon, Fourier y, más tarde, los de los grandes maestros del radicalismo, Gambetta, Bourgeois, Combes, Buisson, Pelletan, Caillaux etc.Para el socialismo de inspiración marxista, la libertad individual es ilusoria. El hombre no puede proponerse el crear sueños de falsas representaciones de independencia, ya que sólo sirven para compensar las frustraciones del egoísmo primitivo del hombre.Para el marxismo, estas ideas de libertad, en tanto que quimeras mentales e intelectuales, no son, contrariamente a la importancia que el hombre las concede, que simples representaciones que no aportan eficacia alguna. Las ideas y el universo de estas representaciones intelectuales del hombre, no son por tanto, debidas a una fuerza motriz propia. Las ideas, en resumen, obran muy débilmente a favor de una comprensión científica de la realidad que las reconoce un poder decisivo. Para el marxismo, la base económica y las condiciones materiales de la vida del hombre, le proporcionan una conciencia de clase que anula su conciencia individual.Para el radicalismo, las ideas, la capacidad de imaginación del hombre y su proyección intelectual, son fundamentales para el progreso humano. Los radicales, han estado siempre situados al lado de la fórmula que propagaba aquel gran sofista griego de la Antigüedad, Protagoras: “el hombre es la medida de todas las cosas” Los radicales de hoy y de siempre sostienen, que, no existe nada para el hombre, que no haya sido concebido y construido por él mismo y su inteligencia. Esta cuestión es fundamental para la izquierda política de hoy. Porque sin rechazar el aporte decisivo del marxismo para la comprensión de la relación entre el capital y el trabajo, del mecanismo de la formación de la plusvalía, las aclaraciones sociológicas sobre la conciencia de los grupos y el motor de su evolución, encontramos que, sobre las cuestiones fundamentales de la libertad, del individuo y del motor del progreso humano, existen otros puntos de referencia para la izquierda. Otro pensamiento de izquierdas que, ha debido resistir, frente al hegemonismo del marxismo, después del marxismo leninismo y, hoy, ahora mismo, de la socialdemocracia que, en su concepción primaria del hombre, se sitúa dentro de ésta filiación.La izquierda progresista que se reconoce hoy en el radicalismo, encuentra sus figuras emblemáticas entre los hombres que, desde la Revolución francesa, han escogido el campo progresista de las Luces, de los derechos individuales del hombre y, de sus derechos económicos y sociales al lado de los revolucionarios. Al lado de Rousseau y el contrato social, de Condorcet y su fe en el progreso humano, de August Comte y su creencia en los acontecimientos de la era científica relegando para siempre jamás las creencias religiosas y metafísicas. La izquierda de hoy debe perseguir la obra de progreso y profundización de la razón y de los derechos del hombre iniciada por los grandes hombres que trazaron la ruta de los valores republicanos para generaciones.La izquierda progresista de hoy debe rehabilitar a Proudhon, el pensador genial de la cuestión social, de la libre asociación, de la paridad de los contratos, del federalismo, de la primacía del

3

Page 4: Dossier 26 05 2012

individuo sobre la colectividad, del derecho a la iniciativa económica y a la libre empresa, de la propiedad privada, del mutualismo como modo de solidaridad social, económica y financiera porque aun hoy en día se revelan pertinentes y modernas y, porque éstas ideas proudonianas, también han contribuido a dar una mejor forma a la cuestión de Estado y a los contrapoderes ciudadanos.La izquierda progresista de hoy debe proceder de un radicalismo de combate que sepa federarse para realizar grandes reformas doctrinales referentes a la solidaridad, a una laicidad que sepa institucionalizar con sabiduría y, para siempre, la separación de las iglesias y el Estado, a la libre asociación que garantice la libre sindicación, a una economía verdaderamente solidaria basada en la progresividad de los impuestos sobre el beneficio y la propiedad inmobiliaria. Los radicales progresistas de hoy, deben contribuir con su voluntad política al servicio de una República descentralizada y progresista que sepa reunir y orquestar, en torno suyo, a todas las diferencias; deben entender, como los radicales de ayer, las reivindicaciones regionalistas y no juzgarlas como ilegítimas y antirrepublicanas porque ellas expresan el derecho a la diferencia. Deben estar convencidos: de que la República es, en sí misma, el equilibrio entre los derechos individuales y los de los grupos.Nadie debe ignorar que, la dimensión humana, la fuerza de los caracteres, la energía valiente y generosa de estos personajes son parte esencial del encadenamiento de hechos históricos, sobre todo, cuando las épocas se presentaron ásperas y reclamaban temperamentos de acero para amansar las pasiones colectivas y, al mismo tiempo, forzar el destino. En tanto que doctrina profundamente humanista, el radicalismo republicano no puede ser tratado que desde el punto de vista del hombre. Es a partir de él, de su dimensión carnal y apasionada, desde donde se deben observar los movimientos colectivos, analizar los sobresaltos de la historia, medir la fuerza de las ideas, el valor de lo elegido y, la importancia de los combates, a los que el hombre debe entregar con grandeza y sin reservas. Aunque muy minoritaria, una parte de la izquierda no se reconoce en la concepción marxista del hombre. Esta izquierda es, la familia radical, hija de los padres fundadores de la III República francesa, (1870-1940) (Gambetta, Clemenceau) que después de más de un siglo de vida partidista, trabaja sin descanso para mantener presentes la memoria de los republicanos laicos y progresistas, las ideas de grandeza del individuo y el progreso humano.Hoy en día, todas las corrientes de izquierda, de la extrema izquierda a la izquierda más centrada están atadas por la historia al marxismo, con la excepción del radicalismo.El radicalismo es la única filosofía política de izquierdas que, en cuestión del valor de las ideas sobre la conciencia individual y la libertad, está en contradicción con el marxismo. En esto, el radicalismo, es una ideología completamente definida.En España, los más insignes políticos republicanos fueron los que tomaron parte por esta idea republicana radical socialista. Sus principales exponentes fueron: Don Marcelino Domingo Sanjuán, Don Álvaro de Albornoz y Don Félix Gordon Ordás en tanto que cabezas visibles del Partido Republicano Radical Socialista Independiente que, en 1934, junto Acción Republicana de Don Manuel Azaña y la Organización Republicana Gallega de Don Santiago Casares Quiroga fundaron Izquierda Republicana. Por otro lado y, en la misma dirección, estaba Don Diego Martínez Barrio fundador del Partido Radical Demócrata que más tarde desembocaría en Unión Republicana.

Eduardo Calvo

4

Page 5: Dossier 26 05 2012

Discurso pronunciado por Don Manuel Azaña el 11 de febrero de 1930.

La política consiste en realizar. La política se parece al arte en ser creación. Una creación que se plasma en formas sacadas de nuestra inspiración, de nuestra sensibilidad, y logradas por nuestra energía. La política es, pues, confianza en el esfuerzo, optimismo. No hay política de hombres desengañados, de hombres tristes; no hay política de hombres circunspectos, que no quieren arriesgarse a fracasar; no hay política de hombres fútiles; la política está reñida con el esnobismo. Nosotros hemos rebasado aquella etapa decadente del espíritu español que contaba por meses y aun por días el tiempo que le faltaba para desaparecer. Desechamos la opresión del pasado y las añoranzas históricas. De frente a la realidad, por adversa que parezca, hemos de modelarla con nuestras propias manos.

A esto nos llaman la vocación y el deber. Iremos todos los españoles que quieran igualar esta condición con la de hombres libres. Todos ellos, pero ninguno más. Los tímidos, los espectadores benévolos, no los queremos; que pierdan su rancia doncellez y vengan con nosotros, o se vayan para siempre con el enemigo. Cualquiera que sea nuestro oficio, cualquiera que sea la formación mental y moral que hayamos recibido, los que entremos en este combate debemos ir poseídos del magnífico, envidiable e incontrastable fanatismo por la idea. Debéis templaros en ese fanatismo. Cuando todo está dicho, explicado y probado, es hora de conducirse creyendo a cierra ojos que la idea nos dará la verdad social española. No temáis que os llamen sectarios. Yo lo soy. Tengo la soberbia de ser, a mi modo, ardientemente sectario, y en un país como éste, enseñado a huir de la verdad, a transigir con la injusticia, a refrenar el libre examen y a soportar la opresión, ¡qué mejor sectarismo que el de seguir la secta de la verdad, de la justicia y del progreso social! Con este ánimo se trae la República, si queremos que nazca sana y vividera. La República no puede surgir como un mal menor, originado en la podredumbre y corrupción de un régimen, sino como criatura de nuestra energía, fecunda y activa, segura de sí misma. La República tendrá que combatir con una mano mientras edifica con la otra. Los tiempos serán entonces más difíciles que los actuales, porque habremos echado sobre nosotros la responsabilidad del porvenir de España. No nos bastará barrer de un escobazo el infecto clericalismo del Estado, ni acabar con la demagogia frailuna que a los liberales moderados de hace un siglo ya les parecía repugnante. Éstas son medidas policíacas que en una hora se conciben y se ejecutan en un día. No nos bastará concluir con el militarismo para que no vuelva a surgir en el pecho de algún general la extraña iluminación de querer redimirnos a fuerza de buena voluntad.

No nos bastará con asegurar la libertad de conciencia y la libertad religiosa con todas las consecuencias que ello trae en la vida civil y pública. No nos bastará ofrecer a todos los pueblos hispánicos aquellos términos de concordia que subsanen, si es posible, las aberraciones opresoras de quienes identifican la patria con el símbolo religioso y el símbolo regio. Necesitaremos dilatar la República en el tiempo, propagándola en las generaciones que nos sucedan, para lo cual la escuela deberá ser nuestra; y necesitaremos arraigarla en las más profundas capas de la democracia, para lo cual deberemos demostrar con actos que la República es la condición inexcusable del progreso social. La República cobijará sin duda a todos los españoles; a todos les ofrecerá justicia y libertad; pero no será una monarquía sin rey: tendrá que ser una República republicana, pensada por los republicanos, gobernada y dirigida según la voluntad de los republicanos. A esta obra llamamos a todos los que piensan como nosotros, sean jóvenes o viejos. Es vana en política esa distinción. En política, las gentes no se clasifican por edades, sino por opiniones. Hay viejos que son militantes gloriosos del republicanismo. Hay jóvenes que a título de modernidad remedan el pensamiento fascista. Nosotros queremos trabajar con nuestros iguales en ideas. Todos juntos acertaremos a darnos lo que más falta nos hace: una España libre a la que podamos servir sin amargura.

5

Page 6: Dossier 26 05 2012

Declaración 13 de abril de 2012

Después de 81 años de la proclamación de la República, los republicanos radicales volvemos con una sola voz dando cuenta de que…

Ni vivimos del pasado,ni damos cuerda al recuerdo.Somos, turbia y fresca, un agua que atropella sus comienzos

…….

No reniego de mi origenpero digo que seremosmucho más que lo sabido, los factores de un comienzo.

(Estrofas del poema “España en marcha” de Gabriel Celaya)

La opinión generalizada que tiene la sociedad de nosotros es la de ser una gente que viven en la añoranza de algo que fue, que queremos cambiar al monarca por un presidente y que nos dedicamos a excavar fosas. Todo eso es cierto, creemos que la legalidad republicana fue subvertida por un cruento golpe de estado, deseamos un presidente y queremos que nuestros muertos descansen en una sepultura digna.

Sin embargo, también queremos decirle a la sociedad a la que pertenecemos, que tenemos soluciones para esta crisis, porque a pesar de la invitación a la sumisión que nos hace el gobierno, que nos repite insistentemente, que no hay alternativa, y es falso. Lo que no hay alternativa es a las prioridades políticas, electorales y económicas de la señora Merkel.

Hay alternativas.

Cuando nosotros, los republicanos radicales, hablamos de reinstaurar la legalidad republicana, creemos que frente a el capitalismo voraz de los recortes sociales, de los recorte salariales, de los recortes en las inversiones públicas, de la privatización de la Naturaleza, de la privatización de los servicios públicos esenciales, de los grandes incentivos para ejecutivos, de la bajada de impuestos a los ricos, de los despidos masivos de trabajadores, de la socialización de las pérdidas bancarias y, la privatización de sus ganancias, los valores que históricamente inspiraron la República siguen plenamente vigentes hoy en día:

.- La defensa universal de los derechos humanos (derecho a una vivienda digna, derecho al trabajo, libertad de expresión, etc.).

.- La defensa de lo público (sanidad, escuelas, universidades, etc.)

.- La igualdad social

.- La independencia judicial

.- El establecimiento de un sistema electoral con listas abiertas, España como distrito electoral único y un sistema de financiación de partidos transparente y claro.

.- La implantación de la ética republicana tanto en la sociedad como en la política. Denunciando la corrupción y los comportamientos antidemocráticos allá donde se produzcan.

.- La laicidad; la enseñanza pública sin intromisión eclesiástica. La separación de la iglesia y el Estado a todos los niveles.

6

Page 7: Dossier 26 05 2012

.- El desarrollo de una cultura de respeto y cuidado del medioambiente como principal legado para nuestros descendientes.

.- La voluntad real de resolver los litigios sin recurrir a la guerra.

Pero estos valores no vendrán por sí mismos. Los republicanos necesitamos una herramienta, que para empezar, lleve nuestra voz, nuestras ideas a todas las instituciones del Estado.

Creemos que ha llegado el momento de que tengamos una sola voz y un solo mensaje, que tenemos algo que proponer, más allá de recuerdos y nostalgias; comprendemos la complejidad de la empresa, pero tenemos que salir de nuestras particulares catacumbas y decir como Celaya:

¡A la calle! que ya es hora de pasearnos a cuerpo

y mostrar que, pues vivimos, anunciamos algo nuevo.

En la antigua Roma, a un senador se le ocurrió la idea de que todos los esclavos debían de llevar un listón blanco alrededor del brazo para que pudieran ser identificados más fácilmente.

Pero un senador más listo lo detuvo y le dijo: "No, si los esclavos se dan cuenta de que son tantos, muy pronto tendremos un levantamiento". Si todos los que pensamos que hay alternativas, y están en el republicanismo radical, comenzamos a llevar un listón blanco en el brazo, podríamos parar esto y dejar de ser siervos y convertirnos en CIUDADANOS.

Así nos lo transmitió D. Manuel Azaña en una espléndida cita:

“La República cobijará sin duda a todos los españoles; a todos les ofrecerá justicia y libertad; pero no será una monarquía sin rey: tendrá que ser una República republicana, pensada por los republicanos, gobernada y dirigida según la voluntad de los republicanos.”

Por la unidad de acción de todos los republicanos radicales.

Viva la República

7

Page 8: Dossier 26 05 2012

Documento político de Izquierda Republicana (resumen)

A lo largo de los últimos treinta años vamos asistiendo al crecimiento y estallido de sucesivas burbujas necesarias para que los que dominan el sistema pueda incrementar espectacularmente sus beneficios y riquezas. Los efectos negativos de las sucesivas explosiones se han cebado en los países menos desarrollados y en las capas bajas y medias de las sociedades del mundo occidental. Es la dinámica perversa del capitalismo, un sistema cuyo valor supremo es la avaricia hasta el punto de devorarse a sí mismo.

Las contradicciones se han ido acumulado hasta el momento actual en el que el monstruo, asediado y temeroso de su final, da a conocer cada vez con mayor violencia su verdadera faz. Se quiere despojar de la máscara de la democracia representativa porque ya no sirve a sus intereses. El neoliberalismo no desea que la sociedad opine o piense por su cuenta. No le interesa la existencia de un ciudadano activo concienciado y consciente de sus derechos. Solo quiere trabajadores semiesclavos, sin derechos, consumibles de usar y tirar, consumidores, clientes, personas acríticas…

La democracia representativa ha sido un disfraz útil para imponer el interés de los poderosos de forma que parezca la elección de toda la sociedad. Pero cuando el sistema comienza a despertar la conciencia dormida de numerosos sectores sociales que ven en peligro sus trabajos, sus derechos, sus bienes, el bienestar de las futuras generaciones… la participación democrática, aún siendo tan raquítica como la que hemos podido ejercer, supone un serio problema para los intereses de la oligarquía financiera que nos domina.

En Europa y en España se inmola el Estado del Bienestar por la subordinación política a los intereses financieros, introduciéndose injustos recortes en el gasto público y en concreto el gasto social, reformas laborales de dominación o explotación e incluso en nuestro país se procede a reformas constitucionales sin refrendo popular en aras de satisfacer a los llamados “mercados”.

La crisis económica y financiera ha provocado que la preocupación por el deterioro ambiental del planeta y el cambio climático se haya reducido notablemente. Parece que es incompatible reclamar atención para los enormes retos que suponen los problemas ambientales con el hecho de abordar los urgentes problemas económicos. Este planteamiento excluyente es profundamente equivocado ya que la solución de los problemas ambientales forma parte de un cambio de sistema económico y este cambio no se puede dar en un planeta arrasado y sin recursos suficientes.

En este escenario la reivindicación republicana sigue presente en amplios sectores de la sociedad y si bien no se ha debilitado, tampoco podemos decir que haya dado un salto cualitativo como opción política. Es muy complicado explicar a los sectores menos ideologizados cuales son las diferencias que nos separan cuando hay una parte sustancial de nuestro discurso que es común a las diversas organizaciones.

Tenemos el deber de evitar ese escenario. En este sentido, hay dos planos en los que debemos de actuar. Por un lado hay que definir a qué nuevo sistema social, económico y político queremos ir. Y lo tenemos que hacer de forma clara y concisa, que nos entiendan grandes sectores de población, no solo los más cercanos y concienciados. Tenemos que explicar que lo que ofrecemos va a ser mucho mejor que lo que existe y dar respuestas concretas. También tenemos que decir cómo vamos a llegar a ese nuevo sistema desde el actual capitalismo.

Por otra parte, no se puede pasar por alto que a lo largo de las últimas décadas los ciudadanos como tales se han ido replegando en una serie de dimensiones de su vida abandonadas en beneficio de los que dirigen el sistema: El bien común y el interés público no forman parte de las preocupaciones de la gente y han pasado a ser administrados, empaquetados y vendidos como una mercancía más. De este modo, se eclipsa al ciudadano y surge el cliente, el consumidor, el usuario, que se desentiende de cualquier reocupación social y mira sólo por su interés individual. En este sentido hay que analizar la falta de participación ciudadana y el

8

Page 9: Dossier 26 05 2012

descenso del asociacionismo (partidos, sindicatos, asociaciones culturales, deportivas, de vecinos, de consumidores y usuarios…).Hay que reconquistar esos espacios perdidos, concienciando a los ciudadanos sobre la importancia de los intereses comunes a todos porque en definitiva lo que es de todos también es algo propio.

Centrándonos en nuestro país, hay que situar el escenario socioeconómico que hemos descrito en el contexto del agotamiento del régimen monárquico surgido de la transición, con un sistema electoral que oficializa el bipartidismo y una organización territorial ambigua, a camino entre el centralismo y el federalismo, que no resuelve el problema territorial español.

Tomando lo anterior en consideración a objetivos políticos, los republicanos proponemos:

.- Potenciar la economía social y nuevas formas de propiedad social republicana.

.- Asegurar la titularidad y gestión de sectores estratégicos para el bien común.

.- Reafirmar el carácter redistributivo del sistema impositivo, que ha de basarse en una fiscalidad equitativa y, en su carácter directo, progresiva..- Regulación de los mercados financieros transnacionales y erradicación de los paraísos fiscales..- Limitar la concentración o monopolización financiera..- Preservación del medioambiente y gestión racional de los recursos naturales como patrimonio común a todos en las decisiones económicas..- Creación de banca pública a partir de las entidades demandantes de fondos públicos..- La importancia del gasto público como elemento garantizador de la satisfacción de las necesidades básicas para todos..- Un sistema público de enseñanza que promueva la igualdad de oportunidades y las posibilidades de promoción social..- La extensión de la Renta Básica de Ciudadanía como factor importante de emancipación de los individuos y palanca para liberarlos de todo sometimiento..- Democracia radical, profundizando la democracia participativa mediante el auge de mecanismos deliberativos ciudadanos; división estricta de poderes desde su elección; control ciudadano de dichos poderes y de la financiación de los partidos políticos en cuanto que herramientas al servicio de la representación institucional de sus electores..- Laicismo de la vida pública, impidiendo la intromisión de voluntades ajenas a la soberanía democrática y los poderes civiles en el ámbito público (institucional, educativo…).- Un federalismo capaz de dar una respuesta adecuada al reto de la organización territorial del Estado..- Replanteamiento de la pertenencia a la UE. Somos europeístas, pero no es aceptable la deriva neoliberal que impone injustas e insostenibles restricciones sociales a los Estados individuales como España.

9

Page 10: Dossier 26 05 2012

Programa político de Unión Republicana (resumen)

Con pleno convencimiento, entendemos que la Republica, representa la democracia y, como tal, es la única opción capaz de proporcionar a la ciudadanía, la cultura, la honradez y la responsabilidad, palancas incuestionables, para alcanzar la l ibertad, la igualdad y la fraternidad entre todos los ciudadanos.

No somos herederos de nada ni nadie en particular, si lo somos: del acervo republicano español y de todos los grandes maestros que, en su conjunto, lo hicieron grande y admirado a la vista de todo el mundo civil izado. Las personas que nos hemos reunido en torno a ésta idea y, las que, sin duda, se unirán, pretendemos ser los proveedores de ideas y acciones nuevas que puedan acercarnos a la proclamación de la República lo antes posible para poner a España y, a su República, en la cota más alta que le corresponda en tanto que nación libre y soberana dentro del concierto de naciones.

Somos republicanos por principio y nos definimos como una entidad que no ha de estar al servicio de los intereses privados de una clase, y partidaria de una Democracia social, complemento indispensable de una autentica Democracia polít ica. Respondiendo así a una fi losofía humanista que ha inspirado siempre al republicanismo español y que valora al hombre como tal, intrínsecamente, antes y por encima de la clase social a que pertenezca.

Por todo ello propugnamos el siguiente modelo de Estado:

Un Estado Republicano. Porque todos los hombres y mujeres sin excepción, deben de ser iguales

ante la ley. Porque la Soberanía reside exclusivamente en el pueblo y nunca en una

persona o institución. Porque en una democracia, sólo puede ejercer el poder aquel que es

elegido en votación popular. Porque en una sociedad moderna, no puede existir más aristocracia que la

de la inteligencia y en trabajo

Un Estado Laico. Porque la l ibertad en todas sus manifestaciones, individual, colectiva, etc.,

debe de ser la piedra angular sobre la que se estructure nuestra sociedad. Porque el Estado, para se el garante de las l ibertades, debe declararse

neutral ante todas las confesiones religiosas. Porque ninguna confesión religiosa puede ni debe convertirse en

instrumento subvencionado del propio Estado; ya que el derecho a la diversidad y respeto a las minorías, constituyen las garantías más firmes de la democracia.

Un Estado solidario. Porque el Estado debe garantizar el derecho al trabajo de todos los

ciudadanos. Porque la educación debe ser una obligación esencial del Estado. Gratuita

desde la escuela infantil hasta la Universidad. Porque la Sanidad Pública debe ser universal, gratuita de calidad, tanto en

las prestaciones hospitalarias como farmacéuticas. Porque las prestaciones sociales deben asegurar una vida digna a los mas

desfavorecidos Porque el Estado y la sociedad, deben ser los garantes de un sistema de

pensiones, que asegure un adecuado nivel de vida para nuestros mayores.

10

Page 11: Dossier 26 05 2012

Un Estado pacif ista. Porque el Estado debe proteger igualmente la calidad del ecosistema y la

vida de quienes lo conforman, ambos elementos básicos para la sociedad del bienestar.

Porque el Estado debe ser un instrumento necesario en la búsqueda de la paz universal y en la eliminación de todos los agentes que la hacen imposible.

Porque el Estado debe garantizar el necesario equilibrio entre la paz social y el disfrute de los bienes adquiridos, con la imprescindible solidaridad de todos.

Un Estado federal. Porque la soberanía que reside en el pueblo, la recibe el Estado por

delegación de las Comunidades. Porque cada Comunidad, tiene el derecho de autogobierno en todas las

materias que no haya delegado el Estado. Porque la solidaridad entre las Comunidades es una tarea que debe de

articular el Estado. Porque el Estado Federal, encarna el proyecto común histórico de todos

los pueblos que conforman España. Porque todas las Comunidades deben tener los mismos derechos en el

Estado Federal.

Un Estado europeísta. Porque España es parte de Europa. Porque creemos en la Europa de los pueblos y no en la de los mercados Porque nos afirmamos en una Federación de Estados Europeos. Porque no creemos en la existencia de una moneda única sin una política

única y avalada por la voluntad de los pueblos europeos.

Este es el compromiso polít ico que ofrecemos a todos los republicanos, para que, bajo unas mismas siglas, seamos capaces de unirnos para conseguir una sola voz para la República.

- Por una sociedad justa: sin justicia, no hay democracia.- Porque un pueblo republicano, es el verdaderamente soberano.- Por un Estado laico y federal.

Viva la República

11

Page 12: Dossier 26 05 2012

Debate sobre la conformación de la asociación política y pasos a seguir antes de legalizarla

NOTAS

12

Page 13: Dossier 26 05 2012

13

Page 14: Dossier 26 05 2012

14