DOS GENERACIONESDE VILLAR DEL ARZOBISPO

EN ACCIONLOS JOVENES

En el año 1972, una treintenade jóvenes de Villar del Arzobis-po (Valencia), con deseos de me-jorar su grado de capacitaciónagraria, constituyeron un Plantel,en el que vienen desarrollandoun buen número de actividadesque han servido para aumentarla formación profesional y fo-mentar el sentido de trabajo enequipo de estos jóvenes.

Sus problemas

Con el tiempo, la progresivaincorporación de algunos alum-nos, hoy ya casados, a sus res-pectivas explotaciones, les ha lle-vado a estudiar una serie de pro-blemas de mayor alcance, cuyassoluciones sólo podían lograrse através de acciones colectivas.

Por una parte, el rápido au-mento de la mecanización de laspequeñas explotaciones ha sor-prendido a muchos agricultores,escasamente preparados para lareparación de pequeñas averíasmecánicas, contratiempos que,presentados en épocas de reco-lección o de tratamientos fitosa-nitarios urgentes, da lugar a pér-didas de tiempo en los tallereslocales, con el consiguiente peli-gro de pérdida de cosecha o defalta de oportunidad en aquellostratamientos o trabajos.

En segundo lugar, el elevadocoste de la maquinaria y la pe-queña dimensión de las explota-ciones, no permite la adquisición

y utilización individual de lasmáquinas y aperos más adecua-dos para cada tipo de labor.

En tercer lugar, la continua su-bida del precio de los repuestospara maquinaria, incrementa demodo constante los gastos deproducción, reduciéndose parale-lamente los márgenes netos delas explotaciones.

Por último, la sustitución delos animales de labor por trac-tores y la progresiva disminuciónde la cabaña ganadera, ha lleva-do a estas tierras a una peligro-sa falta de materia orgánica.

En consecuencia, durante estosdos últimos años, los jóvenes delPlantel han estudiado y aborda-do la solución a estos cuatroproblemas: falta de formacióntécnica para el adecuado manejoy reparación de pequeñas averías;

Tratamientos tito-sanitarios conjun-

tos.

escasez de recursos y base terri-torial para una mecanizaciónrentable; encarecimiento constan-te de los repuestos de maquina-ria y aperos; y escasez y cares-tía del estiércol para sus cultivos.

Sus propias soluciones

Para resolver el primer proble-ma, debían contar primeramentecon un local adecuado para ins-talar un taller de pequeñas repa-raciones. Para ello, solicitaron dela cooperativa agrícola la cesiónde un edificio en desuso, que losjóvenes acondicionaron trabajan-do durante diez domingos con-secutivos, y en el que habilita-ron una zona para sala de reu-niones y otra para taller, dotadade torno, soldadura eléctrica, des-bastadora, etc. El presupuesto de

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esta actividad ascendió, sin con-tar las 400 horas trabajadas, a450.000 pesetas (200.000 pesetasen materiales y 250.000 pesetasen maquinaria y útiles de taller),y fue financiado mediante la apor-tación de 220.000 pesetas de suspropios recursos, un crédito de150.000 pesetas concedido por laCaja Rural de la Cooperativa, sininterés y a devolver en dos años,y 80.000 pesetas procedentes desus becas del Plantel durante losdos últimos años.

Para completar esta actividady potenciar la utilización del au-la-taller, que por otra parte estáregulada por unos estatutos ela-borados por los propios jóvenes,la Agencia desarrolló dos cursi-llos sobre soldadura y localiza-ción y reparación de pequeñasaverías, en los que colaborarondesinteresadamente varios mecá-nicos de la localidad, para losque la reparación de estas ave-rías menores suponían más untrastorno que un trabajo renta-ble, ya que eran horas robadasa reparaciones de mayor impor-tancia económica.

El segundo problema lo hanabordado mediante la adquisi-ción y utilización conjunta de lamaquinaria que van necesitando,y que, hasta este momento, seha materializado en la comprade un espolvoreador de gran ren-dimiento, acoplado al tractor,una cuba de distribución de abo-nos líquidos, una abonadora lo-calizadora y otra centrífuga, unremolque, una pala cargadora yotras máquinas menores. Por otraparte, para conseguir una mayoreficacia y un mayor ahorro, estaactividad se ve complementadacon el tratamiento conjunto con-tra plagas y enfermedades enunas 100 hectáreas de viñedo.

Para solucionar el tercer pro-blema también era necesaria lacompra en común de los repues-tos necesarios, tales como rejas,filtros de aceite y de gasóleo,

baterías, cubiertas, cámaras, bom-billas, tornillos, etc. En este caso,con una certificación de la Agen-cia y de la Cámara Agraria enel sentido de que los repuestosa adquirir serían utilizados porlos jóvenes en sus propias explo-taciones, y no para venderlos, elPlantel gestionó su compra enorigen, logrando una economíadel 25 al 55 por 100 respecto alprecio normal de venta al públi-co. Concretamente, durante elpasado mes de diciembre, , lascompras alcanzaron el millón depesetas con un ahorro estimadode unas 400.000 pesetas.

Respecto a esta actividad, hayque señalar que, a la vista delos favorables resultados conse-guidos, otros Planteles de la co-marca están siendo asesoradospor los jóvenes de Villar del Ar-zobispo para la puesta en mar-cha de operaciones similares decompra conjunta de repuestos.

Finalmente, por lo que se re-fiere al cuarto problema, ademásde adquirir en común diversaspartidas de estiércol hasta un to-tal de 500 toneladas, han dadorecientemente un importante pa-so para asegurar el suministro demateria prima orgánica, comohan sido la contratación, conuna importante granja avícola,de la retirada diaria y gratuita

del estiércol que supone unos900.000 kilos al año.

Por otra parte, están experi-mentando en estos momentos laelaboración de estiércol a partirde orujo de uva, mezclado congallinaza, para lo que en estacampaña han comprado a lacooperativa 100 toneladas, convistas al posible aprovechamien-to de un subproducto que alcan-ce las 1.000 toneladas al año.

En resumen, la actividad en es-te sentido está suponiendo la uti-lización de un millón de kilos debuen estiércol, del que, ademásdel trabajo personal en horas li-bres, únicamente han desembol-sado el valor del orujo de uva,a 0,84 pesetas el kilo, estimándo-se el ahorro conseguido en cer-ca del millón de pesetas al año.

Y hasta aquí la labor de estos30 jóvenes que están ofreciendoen su comarca un valioso ejem-plo de acción conjunta de caraa paliar los problemas técnico-económicos de sus explotaciones,soluciones colectivas que puedenllevarles, con el tiempo y segúnsus deseos, a la explotación co-munitaria de sus tierras.

Pero también estos jóvenes sepreocupan por los problemas so-ciales de su comunidad y buenejemplo de ello lo constituye laacción emprendida conjuntamen-te con los ancianos de Villar delArzobispo en orden a satisfaceruna vieja necesidad, demostran-do que dos generaciones distan-tes en su edad, pueden actuarestrechamente unidas.

LOS ANCIANOS

«Al levantarme cada mañanade invierno, mi única alegría esque luzca el sol. Así podré sen-tarme durante el día en las pie-dras de las afueras, para tenerun rato de charla con los de miedad. Esto me distrae y, por otraparte, no estorbo en casa. Perocuando hace frío, esto no es po-

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Construcción conaportación de ma-no de obra en

común.

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sible. En los bares no podemosestar todo el día. Las consumi-ciones son caras y rebasan nues-tro presupuesto. Las mesas lasquieren los dueños para los jó-venes, que gastan más. Hay queestar en casa solo, porque los fa-miliares tienen que atender susobligaciones. Hay que llegar aviejo para comprender el marti-rio que supone la soledad, elaburrimiento y el sentirse inútil.»

Así se expresaba un ancianoun día de 1976 en que los jó-venes de los Planteles de Villardel Arzobispo rindieron un mere-cido homenaje a sus mayores.

El problema

En los estudios realizados pos-teriormente por la Agencia, sedetectó la importancia y urgen-cia del problema. En efecto, enuna población de 3.700 habitan-tes, había 618 personas que supe-raban los 65 años, y otras 100,con más de 60 años, se encon-traban próximas a la edad de ju-bilación; cerca del 20 por 100 delos habitantes de Villar del Arzo-bispo estaban afectados por elproblema, dado que también lasancianas echaban de menos lacompañía de mujeres de su edaden los días desapacibles, ya queen el buen tiempo es costumbresalir a la calle y sentarse en co-rro mientras se hace punto y secharla.

Otro aspecto del problema,quizá el más llamativo, era laexistencia de ancianos que vivíansolos, por no haber tenido hijoso porque éstos habían emigrado;su incapacidad por prepararse lacomida, agravaba el problema.

La solución

Para promover la construcciónde un «Hogar del Jubilado» queacogiese a los ancianos, se nom-bró una comisión, compuesta porjóvenes del Plantel, representan-tes de entidades locales y algu-

nos jubilados, que se puso inme-diatamente en movimiento estu-diando las necesidades de local.

Se visitaron varios edificios yaconstruidos, tanto públicos comoprivados, pero ninguno reuníacondiciones; sólo un antiguo con-vento, propiedad del Ayunta-miento, podía servir, pero se uti-lizaba y aún se utiliza como par-vulario. Se hicieron gestiones an-te propietarios de solares que,por encontrarse en el extrarradioo con un precio muy alto, huboque desestimar.

Desde el punto 'de vista finan-ciero, las posibles ayudas oficia-les, como las del Ministerio deTrabajo, exigían que se tratasede una residencia, circunstanciaque no era la prevista, y queexistiese un número mínimo deafiliados a la Seguridad Social,que el conjunto de ancianos, ca-si todo ellos agricultores porcuenta propia, no cumplía. Se es-tudió después la posibilidad deun crédito sin interés y a largoplazo, a amortizar por todos losvecinos mediante aportacionesvoluntarias; esta solución, aun-que acogida con simpatía en unprincipio, hubo de rechazarse ala vista de la situación económi-

ca de la comarca, con tres añosseguidos de heladas, granizadasy ataques de mildiu en las viñas,que hacía prever una recauda-ción insuficiente. En el curso deestas gestiones, y con objeto decontar, al menos, con una orga-nización reglamentada, con per-sonalidad jurídica, se constituyóla «Asociación Local de Jubila-dos y Pensionistas», que se inte-gró poco después en las asocia-ciones provincial y nacional.

A la vista de tantas dificulta-des, se acudió por último a laCooperativa y Caja Rural de Vi-llar del Arzobispo y fue aquídonde comenzó a fraguarse lasolución. Después de estudiar eltema con el Consejo Rector, lacooperativa estaba dispuesta ainvertir parte del Fondo de ObrasSociales y a ceder un edificio enruinas de su propiedad que, pre-via demolición y nueva construc-ción, pudiera servir para los finesapetecidos. Poco después, enuna Asamblea General Extraordi-naria convocada al efecto, seaprobaba por unanimidad estasdos vías, si bien el presupuestode cuatro millones de pesetas re-basaba las posibilidades de lacooperativa.

Se sienten orgullososde la obra realizada.

nos aportaron, de sus propios aho-rros 500.000 pesetas que, juntocon una subvención de 75.000pesetas del Consejo del País Va-lenciano, otra de 25.000 pesetasde la Diputación Provincial y eldinero recaudado en varios actospúblicos (conciertos de la UniónMusical de Villar y obras de tea-tro a cargo de jóvenes y jubila-dos), y en ventas de lotería, fue-ron invertidas en la adquisiciónde una cafetera, un molinillo decafé y el menaje necesario parael bar.

En resumen, la financiaciónde Hogar del Juvilado se desglo-sa así:

Pesetas

Obras de demolición yconstrucción

Este nuevo problema fue abor-dado por la Cooperativa de Cons-trucción, integrada por albañiles,carpinteros, electricistas, fonta-neros, pintores, etc., quienes de-cidieron ofrecer gratuitamente susservicios. Llegados a este punto,sólo faltaba solucionar los aspec-tos de peonaje y de acarreo demateriales, trabajos de los que sehicieron cargo los jóvenes delPlantel y algunos agricultores. Contodo ello, la inversión en efecti-vo quedó reducida al valor delos materiales, 1.500.000 pesetas,

que pudo ser satisfecha íntegra-mente por el Fondo de ObrasSociales de la CooperativaAgrícola.

Terminada la construcción, fal-taba el mobiliario y las instala-ciones, cuyo coste se acercabaal millón y medio de pesetas.Pero nuevamente la comunidadse movilizó, aportando una coci-na completa (armarios, nevera,mesas, etc.), un televisor en co-lor, radiadores de calefacción,extractores, lámparas, percheros,etcétera. Por su parte, los anda-

— Materiales, por la Coopera-tiva Agrícola 1.500.000Mano de obra y transportede materiales por la Coope-rativa de Construcción, jó-venes y agricultores 2.500.000

Instalaciones y mobiliario

Donaciones de muebles,electrodomésticos, etc. 300.000

— En efectivo, por los propiosjubilados 500.000

— Recaudado por actos en be-neficio de la obra 150.000

— Aportación del Consejo delPaís Valenciano

75.000

— Aportación de la DiputaciónProvincial

25.000

Total 5.050.000

En el mes de mayo, cuatromeses después de iniciarse lasobras, se inauguraba el Hogardel Jubilado de Villar del Arzo-bispo, con asistencia de las auto-ridades provinciales y locales yla totalidad del vecindario. Conello, los ancianos que lo deseanacuden al comedor del Hogar,donde amas de casa colaborado-ras les preparan la comida y to-dos los demás tienen un lugarde reunión y convivencia en elque ocupar su tiempo libre.

Agencia de Villar del Arzobispo

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