Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico...

7
^ ^ ^ ; ^ ^ ^a ^,.^. ^^, Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina M.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA. FACULTAD DE VETERINARIA DE CÁCERES. EXTREMADURA. EI sector equino ha pasado de ser considerado elitista a ocupar una posición al alcance de wsi todos en la actualidad. No se puede negar el protagonismo conseguido últimamente en las actividades de ocio y práctica deportiva. En Andalucía, por ejemplo, el complejo hípico alcanza una producción efectiva superior as 35.000 millones de pesetas, con un valor añadido cercano a los 16.500 y un consumo de insumos intermedios superior a los 18.500 millones de pesetas, Rodriguez Alcaide (1999). Desconocemos la existencia de estudios económicos tan detallados referidos a otras regiones, sin embargo somos conocedores de la importancia que este sector viene alcanzando en Extremadura, donde curiosamente poseemos un censo de equinos/habitantes superior a Andalucía (Grajera, 1999). Pero no sólo son la cría y recría las que generan recursos económicos, existen otras actividades: doma, deportivas, etc. cada vez con mayor presencia en nuestro entorno, produdoras de riqueza y que requieren alta cualificación de mano de obra. finales de octubre e inicios de noviembre de 1998 se celebró en Trujillo el "I Congreso Internacional del Caballo de Pura Raza Espa- ñola", con este motivo FLJNDECYT, como organi- zador del evento, nos invitó a presentar una ponencia sobre: Principales Problemas de Patología Parasitaria de Preocupación Internacional (Habela, 1999). Centramos principalmente nuestra intervención en la Piroplasmosis equina, enfermedad febril y Babesiosis equina: decaimiento ytristeza. anemizante producida por un protozoo hemático (Babesia) que es transmitido por la picadura de garrapatas. La razón por la cual destacamos esta enfermedad sobre otras se debió a que representa una auténtica barrera a la comercialización de nuestros caballos PRE a países como Estados Unidos, Canadá, Japón, Australia; y a otros como México, Brasil, Chile y Ecuador, que aunque no son clientes preferenciales, ultimamente también han adoptado medidas sanitarias restrictivas en lo que a este proceso res- pecta. La reglamentación internacional y más concretamente el Código Zoosanitario Internacional (CZI), recoge las limitacio- nes de movimientos a los que se han de someter los équidos enfermos y portado- res asintomáticos de Piroplasmosis, cuando su destino es el de los países citados. Las repercusiones económicas de esta parasitosis sobre el comercio internacional de équidos son obvias, siendo precisa- mente España y Portugal dos de los paí- ses más afectados al encontrarse en zona endémica de enfermedad, lo cual limita la exportación del Pura Raza Español y del caballo Lusitano, ambas razas de recono- cido prestigio internacional. También la Piroplasmosis eyuina supone un condicionante para el tránsito internacional de caballos deportivos, tal y como ocurrió en las Olimpiadas de Mon- treal, donde se impidió la participación de caballos procedentes de Francia, Italia, Bélgica, Suiza, Polonia y a todo el equipo de Chile, debido a que eran portadores inaparentes de Babesia (Dorchies, 1976; Friedhoff, 1982). A estas pérdidas y en el caso de nues- tro país, debemos añadir las derivadas de la morbilidad y mortalidad que origina la enfermedad, así como los gastos ocasiona- dos por tratamientos y prevención. En España, los primeros casos de Piro- plasmosis equina conocidos datan de 19_^i4 y 1944, siendo ambos denunciados en Badajoz por Almarza Herranz y Bueso Gómez, respectivamente. Posteriormente el Indice Catálogo de Zooparásitos Ibéri- cos recoge descripciones de esta parasita- ción en las siguientes provincias: Badajoz, Cáceres, Ciudad Real, Córdoba, León, 62/MUNDO GANADERO/NOVIEMBRE 2000

Transcript of Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico...

Page 1: Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina M.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA.

^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^,

Diagnóstico ytratamientode la Piroplasmosis equinaM.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA. FACULTAD DE VETERINARIA DE CÁCERES. EXTREMADURA.

EI sector equino ha pasado de serconsiderado elitista a ocupar una posición alalcance de wsi todos en la actualidad. Nose puede negar el protagonismo conseguidoúltimamente en las actividades de ocio ypráctica deportiva.En Andalucía, por ejemplo, el complejohípico alcanza una producción efectivasuperior as 35.000 millones de pesetas, conun valor añadido cercano a los 16.500 y unconsumo de insumos intermedios superior alos 18.500 millones de pesetas, RodriguezAlcaide (1999).Desconocemos la existencia de estudioseconómicos tan detallados referidos a otrasregiones, sin embargo somos conocedoresde la importancia que este sector vienealcanzando en Extremadura, dondecuriosamente poseemos un censo deequinos/habitantes superior a Andalucía(Grajera, 1999).Pero no sólo son la cría y recría las quegeneran recursos económicos, existen otrasactividades: doma, deportivas, etc. cada vezcon mayor presencia en nuestro entorno,produdoras de riqueza y que requierenalta cualificación de mano de obra.

finales de octubre e iniciosde noviembre de 1998 secelebró en Trujillo el "ICongreso Internacional delCaballo de Pura Raza Espa-ñola", con este motivoFLJNDECYT, como organi-

zador del evento, nos invitó a presentaruna ponencia sobre: Principales Problemasde Patología Parasitaria de PreocupaciónInternacional (Habela, 1999). Centramosprincipalmente nuestra intervención en laPiroplasmosis equina, enfermedad febril y

Babesiosis equina: decaimiento ytristeza.

anemizante producida por un protozoohemático (Babesia) que es transmitido porla picadura de garrapatas.

La razón por la cual destacamos estaenfermedad sobre otras se debió a querepresenta una auténtica barrera a lacomercialización de nuestros caballos PREa países como Estados Unidos, Canadá,Japón, Australia; y a otros como México,Brasil, Chile y Ecuador, que aunque noson clientes preferenciales, ultimamentetambién han adoptado medidas sanitariasrestrictivas en lo que a este proceso res-pecta.

La reglamentación internacional y másconcretamente el Código ZoosanitarioInternacional (CZI), recoge las limitacio-nes de movimientos a los que se han desometer los équidos enfermos y portado-res asintomáticos de Piroplasmosis, cuandosu destino es el de los países citados.

Las repercusiones económicas de estaparasitosis sobre el comercio internacionalde équidos son obvias, siendo precisa-mente España y Portugal dos de los paí-ses más afectados al encontrarse en zonaendémica de enfermedad, lo cual limita la

exportación del Pura Raza Español y delcaballo Lusitano, ambas razas de recono-cido prestigio internacional.

También la Piroplasmosis eyuinasupone un condicionante para el tránsitointernacional de caballos deportivos, tal ycomo ocurrió en las Olimpiadas de Mon-treal, donde se impidió la participación decaballos procedentes de Francia, Italia,Bélgica, Suiza, Polonia y a todo el equipode Chile, debido a que eran portadoresinaparentes de Babesia (Dorchies, 1976;Friedhoff, 1982).

A estas pérdidas y en el caso de nues-tro país, debemos añadir las derivadas dela morbilidad y mortalidad que origina laenfermedad, así como los gastos ocasiona-dos por tratamientos y prevención.

En España, los primeros casos de Piro-plasmosis equina conocidos datan de 19_^i4y 1944, siendo ambos denunciados enBadajoz por Almarza Herranz y BuesoGómez, respectivamente. Posteriormenteel Indice Catálogo de Zooparásitos Ibéri-cos recoge descripciones de esta parasita-ción en las siguientes provincias: Badajoz,Cáceres, Ciudad Real, Córdoba, León,

62/MUNDO GANADERO/NOVIEMBRE 2000

Page 2: Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina M.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA.

EI futuro pasa necesariamente por soluciones innovadoras.La alimentación del futuro pasa por nosotros.

.••.^%^1t^^^

....TECHNIBERIANUTRICIÓN ANIMAL

C/ Campezo, nave 3. Pol. Las Mercedes 28022 MADRID Tel. 91 747 40 00 Fax. 91 747 78 42 e-mail: [email protected]

Page 3: Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina M.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA.

► ^ • ^i^^:^^^ ^._^^ SANIDAD._ ^^^.^f^

Navarra y Toledo (Cordero del Campillo,1994).

En la mayoría de los casos referidos,los autores correspondientes se limitarona realizar denuncias puntuales, sin entraren más detalle sobre esta parasitación.

La Piroplasmosis equina, conocida tam-bién bajo el nombre de Babesiosis, es unaenfermedad febril que afecta a caballos,asnos y sus híl^ridos, transmitida por garra-patas, pudiendo las cebras en determina-dos países tropicales comportarse comoreservorios de la enfermedad. La enfer-medad se encuentra ampliamente distri-buida por países con climatología tropicaly subtropical y también, aunque en menormedida por países de clima templado. Supresencia está asociada siempre a la deixódidos vectores.

Los agentes causales de la enfermedadson protozoos hemáticos del género Babe-sia, siendo dos las especies capaces deinfectar a los équidos: Bahesia equi y B.caballi, las cuales pueden actuar aisladaso asociadas. El encuadre taxonómico dela primera se encuentra en revisión,estando cada vez más próxima su inclu-sión en el género Theileria.

La infección por estos parásitos intrae-ritrocitrarios puede tener graves repercu-siones clinicas, sobre todo cuando B. equise encuentra involucrada, al ser esta espe-cie más patógena.

La sintomatología se presenta tras unperíodo de incubación que oscila entre 5-28 días, y consiste en: fiebre (39-42 °C),anemia hemolítica, ictericia, anorexia,depresión, a veces hemoglobinuria, pu-dicndo concluir el proceso en la muerte.

La importancia actual de la Babesiosisequina radica en la capacidad de difusiónde la enfermedad, la cual puede tenerlugar a través de équidos portadores o degarrapatas infectadas introducidas en áreaslihres.

Epidemiología

La Piroplasmosis equina es transmitidaen condiciones naturales por garrapatas delos géneros Dermacentor, Hyalomma yRhipicephalus. En nuestro país, es posibleque sean Dernracentor marginatus, Rhipi-cephahcs bursa, Rh. turanicus, Hyalommalusitanicccm y/o H. marginatum, los queintervienen en la transmisión, es decir, ixo-didos con ciclo biológico de dos o treshospedadores, teniendo lugar la inocula-ción de los esporozoitos a los 2-5 días defijarse el vector.

Otras formas de contagio citadas son através de jeringas contaminadas, transfu-siones sanguíneas o en caso de B. equi víatransplacentaria (Levine, 1985; Schein,19^).

Hemoblobinuria: Hemoglobinuria.

Las dos especies reseñadas coexisten enla mayoría de países y regiones, si bien lafrecuencia de presentación es superiorpara Babesia eqcri. Nosotros hemos diag-

e. caballi: Parásitos en interior de glóbulos rojos.

nósticado serológicamente la enfermedaden todo el territorio penínsular e islas.

Desde 1991 hasta la actualidad, hemostestado por inmunofluorescencia indirecta(IFT), más de 2.500 sueros de équidos pro-cedentes de todas las comunidades autó-nomas, la mayoría correspondientes a ani-males PRE aparentemente sanos(destinados a exportación) y el resto decaballos con clínica compatible.

Las cifras de seropositividad obtenidaspara el conjunto del país, alcanzan el52,5% frente a B. equi y el 21,3% paraB. caballi, predominando la primera en

64/MUNDO GANADERO/NOVIEMBRE 2000

centro, este, sur peninsular c islas y lasegunda en la cornisa cantábrica.

Datos preliminares sohre la seroepidc-miología de la enfermedad en Extrema-dura fueron publicados hace algunos años(Habela y cols., 19H9 ), aportando cifrasde seropositividad del 64,22% para B.cc^ui y del 28,13%> para B. cahalli.

Estudios posteriores en los que se haampliado el muestreo, revelan cifras paraB. equi del 46,7%, quedando la seropre-valencia comprendida entre un 15,7`%, yun 71,8% correspondientes a las comarcasde Jaraíz de la Vera y Valencia de Alc^ín-tara respectivamente (datos sin publicar).

Información más actualizada sobre laseroprevalencia hallada en Extremadura yAndalucía (comunidades donde asientangran número de yeguadas de PRE), es laque a continuación detallamos: 7K y 23%frente a B. equi y B. cahalli respectiva-mente, en la primera comunidad, y 53 y20% para la segunda.

Los datos obtenidos para Extremadurason muy similares a los yue aporta SahinoSerra (19fitŝ), en algunas regiones de Por-

tugal. Este trabajo, concluido en 19R4,refleja seroprevalencias para B. eyui com-prendidas entre el 54,7% para Ribatejo yOeste; y 22,5-23,3% para las regiones deCoimbra y Aveiro, respectivamente.

En cuanto a B. cabulli, en el citadoestudio, cifran la prevalencia entre el31,3% correspondiente a la región deRibatejo y Oeste y el 15-16,5% alcanzadoen Coimbra y Aveiro.

Sin embargo, Carvalo-Varela y cols.(1989), obtienen cifras para B. equi sensi-blemente superiores a las anteriormentecomentadas. Estos autores observan en

Page 4: Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina M.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA.

^ ' ^ ^ ^

^ '^, , ^ ^ , , '`. ,̂f ^ ^

µ'

Page 5: Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina M.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA.

Ribatejo una seroprevalencia del 46,78%,que se reduce en el caso de B. caballi al14,1%.

En este estudio se chequearon yeguasadultas, potros sin destetar y potros de 1 a3 años, así como animales estabulados.Estos últimos precisamente son los que

Conjunt. Pal: Ictericia.

menores índices de positividad mostraron,suponemos que debido a las medidas decontrol aplicadas contra las garrapatas vec-tores.

Es posible que los datos obtenidos pornosotros para Extremadura estén más pró-ximos a la situación de detemlinadas zonascomo Alentejo, ya que las característicasmedioambientales y sistemas de explota-ción en ambas regiones son similares.

En el sur peninsular por ejemplo,durante los primeros días de vida lospotros entran en contacto con las garra-patas vectores, estando precisamente enesos momentos protegidos pasivamentepor la inmunidad transferida vía calostro,siendo los casos de babesiosis clínica enjóvenes relativamente raros.

La transmisión de anticuerpos demadre a potro vía calostro la hemos po-dido constatar serológicamente por mediodel test de inmunofluorescencia indirecta,si bien la seropositividad desaparece apro-ximadamente a los 3 meses postnaci-miento.

Babesia equi tiene capacidad de persis-tir en los équidos durante años y quizásdurante toda la vida de los animales, cons-tituyendo éstos los reservorios de enfer-medad. B. caballi tiene garantizada susupervivencia a través de generaciones de

garrapatas, ya que se transmite transovári-camente.

Por tanto, la situación epidemiológicade la Babesiosis equina en nuestro paíspodemos caliñcarla como endémica ines-table en el norte, donde la relación entrehospedador, agente causal, vector y medio

ambiente es incompleta, lo que provocala aparición clinica de la enfermedad. Estasituación se estabiliza a medida que seavanza hacia el sur, pues existe una rela-ción más estrecha entre el parásito y loséquidos, que permite una virtual ausenciade enfermedad clínica.

Desde el punto de vista epidemiológicopodemos concluir diciendo que aproxima-damente 120 millones de équidos seencuentran expuestos a la babesiosis ysólo el 10% de la población mundialhabita en zonas libres de enfermedad. Losdeportes ecuestres, el comercio de équi-dos y la rapidez de los transportes propi-cian la difusión y el establecimiento de losvectores infectados en zonas geográfica-mente distantes.

Patogénesis y dínica

La acción patógena de estos parásitosse basa en la liberación de sustancias far-macológicamente activas (esterasas), queactivan la calicreína. Esta amina biógena asu vez provoca disturbios circulatorios(vasodilatación, incremento de penmeabi-lidad vascular, estasis circulatorio, schok ymuerte). Este mecanismo se ve comple-mentado por la destrucción de eritrocitos(hemolisis).

Por otra parte, B. equi centra inicial-mente su acción sobre el sistema mono-nuclear fagocítico (fase linfoproliferativa),para posteriormente provocar una severaanemia, ya que puede alcanzar elevadosniveles de parasitemia (alto grado deinfección en glóbulos rojos).

En ambos casos, están presentes losprocesos autoinmunes acompañados porfenómenos de eritrofagocitosis.

En cualquier caso el proceso clínico seinicia con hipertemia (39-42 °C), quepuede ser inten-nitente en infección por B.equi y persistente en caso de B. cahalli.Se puede apreciar: taquicardia (80-100p.p.m.), a veces con pulso yugular, disnea,depresión, anorexia, lacrimeo intenso, rino-rrea, sialorrea, anemia, hemoglobinuria,ictericia, cojeras, parálisis del tercio poste-rior, edema en partes ventrales (extremi-dades, genitales, subcutáneo, abdomen...),siendo igualmente común la presencia dehemorragias en mucosas (nasal, vaginal,conjuntiva, etc.).

La pérdida de peso es cada vez másmanifiesta, pudiéndose también presentartranstornos gastrointestinales (cólicos, dia-nreas, etc.), y graves síntomas bronconeu-mónicos derivados del edema de pulmón.

En infecciones por B. caballi son fre-cuentes las cojeras y las afecciones del sis-tema nervioso central (encefalitis) poroclusión de la luz de los capilares cerebra-les. En parasitaciones por B. equi se citanlos abortos ya que en esta especie latransmisión intrauterina es frecuente.

El cuadro lesional viene representadopor: edema subcutáneo, exudado serosoen cavidades incluido pericardio, ictericiageneralizada, edema de pulmón, hemorra-gias en endo y epicardio, hepatomegalia,esplenomegalia, glomerulopatías, linfoade-nopatías, etc.

Diagnóstico

- Clínico-epidemiológico: basado en lasintomatología típica, presencia de garra-patas, etc.

- Parasitológico directo: observación deformas parasitarias intralinfocíticas (B. equi)o intraeritrocitarias (ambas especies), trastinción de improntas ganglionares o exten-siones sanguíneas respectivamente. ResultaváGdo en fase aguda de enfermedad.

Dentro de los métodos directos, y gra-cias a los nuevos avances alcanzados enel campo de la biología molecular, esta-mos en condiciones de aplicar las técnicasde amplificación del ADN en el diagnós-tico de enfermedades protozoarias trans-mitidas por garrapatas.

La técnica de Reacción en Cadena dela Polimerasa (PCR) permite la identifica-ción de parásitos y diferenciar entre pobla-

66/MUNDO GANADERO/NOVIEMBRE 2000

Page 6: Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina M.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA.

• •

1 ' ' 1

^ • , ^ ^ ^ ^ ^ ^

1 ' ' 1

Page 7: Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina · ^ ^ ^ ; ^ ^ ^a^,.^. ^^, Diagnóstico ytratamiento de la Piroplasmosis equina M.A. HABELA. R.G. SEVILLA. E. CORCHERO. J. PEÑA.

ciones próximas. Su eficacia es superior ala de métodos convencionales.

- Parasitológico indirecto: serológico porreacción de fijación de complemento(RFC), o inmunofluorescencia indirecta(IFI). Ambos son métodos aceptadosinternacionalmente (Código ZoosanitarioInternacional), si bien el segundo es mássensible y específico. Poseen máxima apli-cabilidad para la detección de casos laten-tes.

El método ELISA debido a sus posi-bilidades de automatización es interesantepara la realización de amplios estudiosepidemiológicos, sin embargo de momentono está conseguida la correcta puriñcaciónantigénica, considerándose por ello algoinespecífico.

Los métodos indirectos de inmunodiag-nóstico son empleados para medir la res-puesta inmune, especialmente en portado-res crónicos. Son útiles tanto para eldiagnóstico individual como en colectivi-dades, en este último caso con el fm dedeter►ninar prevalencia y distribución enáreas geográficas más o menos extensas,y así poder planificar el control.

Tratamiento

La Piroplasmosis equina puede ser tra-tada con los siguientes babesicidas:

- Aceturato de diminaceno (Berenil®):resulta ser eficaz para tratar la infecciónpor B. caballi En caso de B. egui puedeser requerida la repetición del tratamiento,no llegando, en cualquier caso, a la esteri-lización del animal.

- Dipropionato de imidocarb (Imi-zol®): una única dosis de 2-3 mg/kg p.v.recupera de la infección por B. caballi,siendo necesaria la repetición a las 24horas para su eliminación. En infeccionespor B. equi, esta segunda inyección tera-péutica, a la misma dosis o superior, esnecesario repetirla a las 48 horas, no con-siguiéndose en cualquier caso la esterili-zación, y tan sólo un descenso transitoriode los títulos de anticuerpos fijadores decomplemento, aunque no de los fluores-centes.

La aplicación de dosis altas como 4inyecciones de 4 mg/kg p.v. cada 72 horaspuede tener graves problemas de intoxi-cación (antídoto sulfato de atropina), noalcanzándose tampoco la eliminación totaldel parásito.

Recientemente se ensayan drogas conpoder theilericida en el tratamiento de lainfección ocasionada por B. equi, talescomo la parvaquona (Clexon®) o labuparvaquona (Butalex®). Respecto a laprimera, la inyección intramuscular a ladosis de 20 mg/kg p.v. parece ser eficaz,aunque no se consigue la esterilización.

Del mismo modo, la buparvaquona resultaser terapéuticamente efectiva a la dosis de4-6 mg/kg p.v. vía intramuscular o endo-venosa, siendo igualmente ineficaz en laeliminación del estado de portador.

Legislación y control

La Ley de Epizootías y el Código Zoo-sanitario Internacional disponen de articu-

Edema ventral: Edema ventral.

lado específico para la Piroplasmosisequina, si bien es la reglamentación inter-nacional la más estricta, pues limita losmovimientos de équidos enfermos y por-tadores asintomáticos a determinados paí-ses importadores. En este sentido, especi-fica la necesidad de acompañar unCertificado Zoosanitario Internacionaldonde se indique:

- Ausencia de signos clinicos el día delembarque.

- Seronegatividad (IFI,RFC) 30 díasantes del embarque.

- Realización del tratamiento con ixo-dicidas 7 días antes del embarque.

Algunos países pueden restringir lasimportaciones a los periodos de inactivi-dad de garrapatas.

Por otra parte, esta reglamentacióninternacional (CZI) recoge artículos referi-dos a la importación temporal de caballosseropositivos de competición. Para éstosexige:

- Pasaporte (carta genealógica).- Certificado Zoosanitario Internacional

con indicación de: ausencia de signos cli-nicos y empleo de tratamiento ixodicida 7días antes del embarque.

La autoridad veterinaria del país de

destino velará por la permanencia de estosanimales en áreas bajo control de garra-patas y realizará exámenes perioclicos paraverificar la ausencia de éstas.

En síntesis y a modo de conclusiónpodemos señalar a esta enfermedad comocausa de graves pérdidas económicas alsector equino de nuestro país, por todoello resulta recomendable investigar yavanzar en los siguientes aspectos:

- Completar estudios epidemiológicos.- Determinar los vectores de la enfer-

medad.- Valorar pérdidas.- Desarrollar modelos experimentales.- Avanzar en el diagnóstico.- Investigar terápia eficaz contra B.e^ui

(therapia sterilisans magna).- Obtener vacunas.La puesta en práctica de medidas pre-

ventivas como el chequeo serológico paradetección de portadores, los tratamientoscon acaricidas, la quimioprevención y laaplicación de cuarentenas, tal y comorecomienda el Código Zoosanitario Inter-nacional, son aceptables medidas paraimpedir la difusión de la enfermedad azonas libres.

Los avances obtenidos en la vacunacióncontra otras especies de Babesia y Theile-ria posiblemente tengan, en breve, aplica-ción en Babesiosis equina.

Nuestra administración debería ser sen-sible ante este problema y potenciar lainvestigación en este campo, además dedesarrollar planes (previo análisis cos-to/beneficio), que ayudarán a reducir pér-didas y en un futuro a controlar esta en-fermedad. n

68/MUNDO GANADERO/NOVIEMBRE 2000