Desayuno sobre la hierba. Manet
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Transcript of Desayuno sobre la hierba. Manet
Desayuno en la hierba
Figurativa.Óleo sobre lienzo.
(1862-63)
208 cm.
265,
5 cm
.
En ella observamos como en un claro del bosque dos hombres, vestidos con trajes de la época, conversan junto a una mujer desnuda
mientras otra se baña en un río
El almuerzo se interpone entre
nosotros y la modelo…….
…..que mira directamente al
espectador.
Victorine Meurend.Cuerpo crudamente iluminado.
Sentada sobre una tela azul.
Los dos hombres son el hermano de Manet, Gustave y su futuro cuñado, el escultor
holandés Ferdinand Leenhoff. Están vestidos como dandis. Los hombres parecen estar
ocupados conversando, ignorando a la mujer.
En frente de ellos, se muestran las ropas de la mujer, una cesta de frutas, y un pan
redondo, como en un bodegón.
En el fondo, una mujer ligeramente vestida vadea una
corriente.
Demasiado grande en
comparación con las figuras del
primer plano, ella parece flotar.
La desproporción entre la mujer del fondo y la barca a la
derecha se consideraba una impericia de parte del pintor
¡Qué escándalo!
Manet trastoca los principios académicos de la técnica pictórica
Temas, degradados,
perspectiva….
Manet rompe con la perspectiva tradicional al suprimir el fundido de los planos. Los personajes aparecen recortados, casi sin relieve, planos aunque
aparecen en escorzo y dispuestos ante el paisaje que se utiliza como un simple decorado.
Sólo en la naturaleza muerta se atiene el pintor a la perspectiva tradicional: en
ella observamos profundidad y un ligero modelado.
El fondo pintado toscamente carece de profundidad, dando al
espectador la impresión de que la escena no tiene lugar en el exterior,
sino en un estudio.
Esta impresión se refuerza por el uso de una intensa luz
«fotográfica», que casi no deja sombras: de hecho, la
iluminación de la escena es inconsistente y nada natural.
El hombre a la derecha luce un sombrero plano con una borla, de la clase que normalmente se usa en los interiores.
El estilo de la pintura rompe con las tradiciones académicas de la época. Manet usó una luz cruda,
«fotográfica» que elimina los tonos medios.
Se considera un cuadro «preimpresionista» por usar un motivo del entorno inmediato del artista. La hechura es conscientemente clásica. Sin embargo, no intentó ocultar las pinceladas: de hecho, la pintura parece inacabada en algunas partes de la escena
Para captar la realidad y su fugacidad se hizo
inevitable la utilización de una pincelada rápida y
empastada.
Este rasgo es el que después identifica al
Impresionismo.
Sin duda, podría afirmarse que con Manet se inaugura la pintura moderna.
La composición carece de unidad, es cerrada,
plana.
La visión de la escena queda en
la superficie a través de una
rigurosa estructura
formada por la disposición de las
figuras (en una serie de
diagonales cruzadas),
el primer plano donde aparece la naturaleza muerta, y la visión del
plano de fondo, donde la mujer agachada, los
reflejos del agua y los árboles adquieren matices de variada interpretación.
Manet destaca la importancia de la incidencia de la luz sobre los objetos que con su pintura bidimensional, de colores casi planos, consigue captar la atmósfera y el ambiente con otros valores compositivos.
El color se aplica a base de grandes manchas de colores planos, yuxtaponiendo las tonalidades
claras (desnudo, camisa blanca,…) con las oscuras (zapatos, gorro, chaquetas) de forma violenta, sin
gradaciones.
El uso de los colores sorprende por el contraste lumínico, el negro de los trajes frente al blanco puro del cuerpo de la mujer. Parte de los colores puros, y
los envuelve en un ambiente cargado de tonalidades, marcando así los focos importantes y
concentrando la atención en los contrates.
Este resaltado uso del negro fue una de las
razones para el rechazo por los académicos.
Destaca también el uso de azules, amarillos y rojos en la naturaleza muerta, y de gran variedad de verdes en el paisaje. Es el color el que sugiere los volúmenes.
En lo que se refiere al tratamiento de la luz, observamos como, al
desaparecer el claroscuro tradicional, los cuerpos
parecen faltos de volumen.
Hay fuertes contrastes de luces y sombras, en las que el negro ha sido sustituido
por distintos matices de verde.
Además, Manet ha invertido el foco lumínico
haciendo que la luz proceda del
fondo de la escena.
Predominio de los aspectos plásticos frente a los pictóricos: el dibujo
no tiene apenas importancia; Los personajes presentan
formas recortadas;
Los fondos del follaje y los reflejos del agua
están sólo esbozados, insinuados con leves
pinceladas.
En el fondo del lienzo utiliza una técnica que dota a la obra de su carácter de modernidad: Manet aboceta las formas insinuando así la profundidad Y la sensación de que el aire envuelve a la escena.
El empleo del negro puro no era muy académico, por lo que las obras de Manet siempre eran
censuradas por críticos y jurados oficiales.
El fuerte foco de luz incide directamente sobre el grupo, sin
apenas crear sombras, apreciándose aquí la influencia de
la estampa japonesa.