Entre Misioneros . . .

Boletín N° 156, abril 6 de 2010

Enero 12

Un día normal, a las 4:45 de la tarde, nos estábamos prepa-rando para el culto de oración y subiendo los instrumentos al carro, yo estaba en la casa, con mi esposa y mi hija Yensy, Jhazmin estaba abajo con su hermanito Esteban y el pastor interprete, cuando comenzó el terremoto que desbastó la capital de Haití. Cada uno en su lugar invoco el Nombre de Jesús, la casa se estremecía de una manera impresionante, el estruendo que se escucho fue horrible gritos llanto y mucho dolor era el ambiente que se percibía, después bajamos de la casa para saber como se encontraban mis hijos, gracias a Dios porque el nos guardo a todos. Salimos de la casa porque seguía temblando y allí fue donde nos dimos cuenta real-mente la dimensión de la catástrofe, las casas a nuestro alre-dedor todas se habían, caído muchos de nuestros vecinos y conocidos muertos, una columna de polvo cubrió la capital haitiana, muerte y desesperación era los único que se ve-ía. Después de eso recibimos dos llamadas telefónicas de Colombia la primera del hno. Vicente Arango preguntando el estado en que nos encontrábamos, le alcance a decir que estábamos bien que por la gracia de Dios no nos había pasa-do nada y en esas se corto la llamada, después llamo mi hijo John Jairo muy preocupado, le dije que estábamos todos bien, y se corto la llamada, ya no teníamos comunicación, el sistema de las comunicaciones colapso.

VISITAS RECIBIDAS. Enero 17.

Recibimos la primera visita de nuestro Hno. Reynel Ruiz, Mi-sionero de República Dominicana, comisionado por el Hno. Vicente Arango, el vino a saber el estado en que nos en-

NOTICIAS DESDE HAITI. Nuestro misionero, el hno Cle-mente Espinoza y su familia, nos comparten este informe. Presentamos nuestro saludo cristiano en el Nombre de Jesús, Al honorable consistorio de Ancianos, al Hno. Álvaro Torres presidente de nuestra Iglesia, al Hno. Vicente Arango, Director de Misiones extranje-ras, a los Misioneros, al Pasto-rado en general y a la Amada iglesia de Dios en Colombia. Para nosotros como Misioneros en Haití, es de grande bendi-ción poderles compartir las bendiciones que Dios ha dado a su pueblo: pese a todas las dificultades y la catástrofe que hemos vivido en este país, Dios se ha manifestado de una manera poderosa y grande prueba de esto, es que nos ha reservado la vida y la vida de sus santos en Haití. Gracias mis hermanos por las oraciones de hecho que no son en vano y Dios las ha escuchado. Sigan orando por nosotros aquí en la República de Haití.

Comenzamos el ano con mucha disponibilidad para trabajar; El día 9 de Enero nos desplazamos al lugar de Maissade, una provincia que se encuentra ubicada a 7 horas de la capital, en ese lugar el pastor es el Hno. Carlos Pierre, un joven que Dios ha bendecido mucho, en ese lugar ya se comenzó la cons-trucción, actualmente es la iglesia mas grande, a nivel de construcción y numéricamente. Ya que cuenta con una mem-brecía de 300 perso-nas, 200 bautizados y 100 simpatizantes in-cluidos los niños.

Ese día se celebro una confraternidad, pre-sentación de niños y bautismos, 10 perso-nas fueron bautizadas en el nombre de Jesús, para perdón de sus pecados.

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cho aliciente poder verle y compartir algunos momentos con el.

Hablamos con el Hno. Arango, para ver como nos podían ayu-dar en Haití en cuestión del salón de predicación, ya que las dos piezas que teníamos como salón de predicación se cayo, hablamos con el hno. Vicente y el Hno. Reinel Ruiz acerca de una estructura metálica que tenían en República Dominica-na, para traerla Haití y poderla adecuar como salón de predi-cación, y así se hizo.

El día 6 de abril llegaron los hnos delegados del hno. Rey-nel para realizar el trabajo, ar-maron la estructura metálica con muchas dificultades, pero Dios nos ayudo a terminar el trabajo, agradecemos muy es-pecialmente a nuestros hnos Vicente Arango y Reynel Ruiz por la iniciativa en ayudarnos .

H e r m a n o s recibiendo la ayuda envia-da por la iglesia en Colombia.

contrábamos, gracias a Dios su visita fue muy reconfortante.

Enero 27

Recibimos la grata visita de Nuestro Hno. Vicente Arango Director de misiones extranjeras, el Hno. Eimer Lucumi, y el Hno. Reynel Ruiz, En esa ocasión hicimos un recorrido por la capital de Haití, fuimos a la 2da iglesia donde es pastor el Hno. Anob, también visitamos al pastor Darius y su familia en Duvivier, allí se habían construido 2 piezas que se cayeron por el terremoto, ahora están durmiendo en carpas.

Febrero 5

En esa ocasión nos sentimos muy felices como en todas las visitas recibidas, nos visito mi hijo John Jairo, Misionero en África, hacia mas de 2 años que no, nos veíamos y fue de mu-

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PALABRAS FINALES.

Estamos bien junto con mi familia, peor seguimos necesitan-do las oraciones del pueblo de Dios.

Las autoridades locales nos han felicitado por el esquema de ayuda y asistencia que hemos presentamos ante el pueblo haitiano, incluso nos habla de implementar este mismos mo-delo.

La gloria sea para Dios, ahora y siempre !

Clemente Espinoza

Misionero IPUC Haití.

BAUTISMOS.

5 jóvenes sobrevivientes al terremoto, fueron bautizados en el Nombre de Jesús. La bendición es tan grande que ese mis-mo día dos personas más se entregaron al Señor y están per-severando.

La alegría fue muy grande ese día,

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