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Los grandes obstáculos

Denise RennisPriscila Albino

En un pueblito que casi nadie habitaba, había un castillo y en él se escondía un grandioso tesoro. Pero para poder descubrirlo debían derribar algunos obstáculos que impedían su ingreso.

A ese pueblito se dirigió una valiente joven llamada Karina. Sólo quería encontrar una familia que la quiera como ella la necesitaba.

Allí había un guerrero de madera que tenía vida. Además era muy malo y no le gustaba que lo molesten. Tenía carácter fuerte, le gustaba comer barniz porque le hacía bien a la panza y tenía acumuladas doscientas latas de barniz.

La única forma de pasar por allí era diciendo la oración de los duendes que dicía: - ¡Oh ,duende mágico ayúdame a derrotar a este guerrero malo!- ¡Oh duende.!Así logró pasar la segunda puerta.

Allí en la segunda puerta había dos escorpiones venenosos, grandes y horribles que no les gustaba el calor. Ellos se derretían porque eran especiales y volvían a aparecer en el invierno, a principios de otoño.

La única forma que pudo pasar Karina fue dándole una cajita con comida que adentro tenía fuego.Así logró pasar a la tercera puerta.

En la tercera puerta había un monstruo terriblemente horrible, serio, amargado y odioso.El tenía un secreto que a nadie se lo dijo solo a los familiares. Era que solo te deja pasar si le regalas un chocolate de color rosa que no se conseguía por ningún lado.

Karina tenía en su bolso un chocolate de color rosa, hizo trampa porque el chocolate tenía que ser de ese color pero sin colorantesLa joven así logró pasar a la cuarta puerta.

Al acercarse a la cuarta puerta se escuchó una música que adormecía poco a poco. Estaba muy fuerte. Para lograr pasar era condición no taparse los oídos.Karina lo que hizo fue dormir antes veinte horas para después no dormirse con nada y se había tomado una pastilla para no adormecerse.Así logró pasar a la quinta puerta.

Delante de la puerta había un árbol gigante, estaba plantado, si alguien se le acercaba las ramas lo iban atrapando. No se podía cortar el árbol. Allí siempre estaba un joven que todos los días protegía de que nadie lo arruinara y si alguien de confianza quería pasar tendría que hacer un trato con el así, el joven le ataría las ramas al árbol y poder pasar ya que este tendría las ramas atadas.

El trato que más había pensado la valiente joven es encontrarle la rosa que siempre quiso tener el chico. La flor la tenía escondida en el árbol, ella era muy pequeñita, entonces la muchacha tenía un microscopio en su bolso para encontrarla.Así logró pasar a la sexta puerta

En la sexta puerta había un rebaño de cabras que se reían a carcajadas, saltaban y se revolcaban.

Lo que hizo la chica para poder pasar fue darles cebollas para que las coman. Al olerlas se pusieron a llorar. Finalmente llegó a la última puerta

En esta puerta no hay ningún obstáculo. Nadie impedía su ingreso, las personas que entraban allí veían todo lo que necesitaban y que querían, puede ser real o imaginario. Allí estaba todo lo que te gusta.

Pero de todo eso debería elegir una de cada una. Karina tomó mucha ropa para los pobres una familia para tener amor ,que es lo que le faltaba por último pan porque necesitaba comida.Así llegó al final.

FINALAl final, la chica valiente, Karina. Pudo pasar por suerte todos los obstáculos que tenían las puertas.

Y colorín colorado este cuento se ha

acabado…