Cuento infantil

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DORIS VEGA PICHILINGUE

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CUENTOSINFANTILES

DORIS VEGA PICHILINGUE

Haba una vez, un nio pobre, llamado Javier, que viva con sus padres en una humilde casita de madera.Eran tan pobres que haba das en los que no tenan para cenar, solo tenan un trozo de pan duro y un vaso de leche, que su madre se encargaba de repartir para los tres.

EL NIO RICO Y EL NIO POBRE

Un da, mientras Javier caminaba por la calle, encontr un baln de ftbol precioso, y al ir a cogerlo escuch una voz detrs de el que le dijo:

-Qutale las mano de encima, pobretn.

Era Luis, el nio mas rico del pueblo, quin, quitndole la pelota de un violento tirn, y, apartando a Javier de un empujn, se fue a dejarla con las otras treinta de su coleccin.

-Esta hace la nmero treinta y uno.- Dijo con voz orgullosa el nio rico. Y que sepas que maana tendr otra mas por mi cumpleaos, aunque tu, con lo pobre que eres, seguro que no sabes lo que es un cumpleaos.

Javier se fue a su casa. Claro que lo saba, porque ese da era su cumpleaos.Al llegar a casa, le estaban esperando sus padres tristes .-Qu os pasa?-Pregunt Javier.

-Javier, hoy es tu cumpleaos, pero no tenemos dinero para comprarte nada. Lo nico que podemos regalarte es este Jersey que te he cosido, y esta tableta de chocolate que a tu padre le han regalado en el trabajo.- Dijo su madre.

Javier sonri y abraz a sus padres y se prob el Jersey, que le quedaba un poco grande, luego Cogi la tableta de chocolate y la parti en tres trozos, repartindola, con lo que esa noche cenaron pan duro con chocolate.

Al irse a la cama, les abraz y les dijo:-Son los mejores paps del mundo. Con tenerlos a mi lado, ya no necesito ningn regalo.- Y se fue a dormir muy feliz.

Al da siguiente, se volvi a encontrar con Luis en la calle, pero esta vez, estaba muy triste y bastante enfadado. A lo que Javier se le acerc y le pregunt qu le ocurra.

Pues que mis paps se han olvidado de mi cumpleaos porque estn todo el da trabajando. No me han regalado una pelota nueva y solamente tengo treinta y una pelotas, pero yo no quiero jugar con ninguna, yo quiero la de mi cumpleaos.

Javier se marcho de nuevo a su casa y continu siendo feliz toda su vida, pues tena todo lo necesario para vivir, mientras que Luis, con su carcter egosta y ambicioso, siempre estaba triste y enfadado, por lo que lleg a caer enfermo y tuvo que guardar cama.

FIN