CMúsica en el Casino ONCIERTOS CICLOS RECITALES
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D e manera sencilla y directa, con ejemplos prácticos, así consiguió el periodista y guionista Manuel Moraga dar a conocer las bases del flamenco a los casi doscientos socios que abarrotaron el Salón Real del Casi- no de Madrid para asistir a la confe- rencia-concierto “Introducción al Sen- tir Flamenco”, que se celebró dentro del XIII Ciclo Musical. El Presidente del Casino de Ma- drid, Mariano Turiel de Castro, dio la bienvenida a todos los presentes, y se- ñaló que “en nuestro afán de innovar, de experimentar, queremos hoy aproxi- marnos a un arte, el flamenco, que tan- tos gustan, pero que tan pocos cono- cen”. Turiel de Castro afirmó que “los orígenes del flamenco son inciertos. Aún no se conocen con exactitud los auténticos mecanismos sociales y cultu- rales que hicieron posible el nacimiento de un arte popular donde se combinan los más ilustres sedimentos de la músi- ca oriental almacenados en Andalucía”. “Es posible imaginar la génesis mu- sical del flamenco como un crisol de muy profusos y entremezclados ingre- dientes orientales. Todos ellos fueron fundiéndose a lo largo de la historia en el solar andaluz”. El Presidente del Ca- sino de Madrid, tras hacer un breve re- corrido por la historia del flamenco (“una de las músicas más peculiares y reconocibles de Europa”) dio paso a los artistas: Manolo Moraga, Pedro Sanz, José Salinas, Juan José Ramos “Niño Manuela”, y Felisa de la Cruz. “Con todos ellos les dejo en la seguri- dad de que disfrutaremos de una tarde de música distinta, singular, que intro- duce una gran novedad en nuestros habituales programas , pero que estoy seguro ha de resultar del agrado de to- dos ustedes”. Así fue. La velada comenzó con un “cante a palo seco”, sin guitarra. “Así suena la angustia, el eco del dolor, del desengaño… –dijo Moraga– ¿Quién no necesita liberarse del dolor del al- ma?. Para sentir este arte no se necesi- ta ser rico ni pobre, ni gitano, ni anda- luz… porque la música recorre lo más profundo de la conciencia humana”. En primer lugar, los socios escucha- ron las “Siguiriyas”, “la expresión má- xima de la pena”, según Moraga, que también señaló que el flamenco “es un arte de extremos, transita entre la ale- gría y la desdicha”. Este arte, según 70 Casino de Madrid Una clase magistral CONCIERTOS ~ CICLOS ~ RECITALES Música en el Casino Manuel Moraga, junto con los cantaores Pedro Sanz y José Salinas, la bailaora Felisa de la Cruz, y el guitarrista Juan José Ramos, “Niño Manuela”, consiguieron, el pasado 18 de febrero, acercar el “Sentir Flamenco” a todos los asistentes al concierto-conferencia celebrado en el Casino de Madrid. El guitarrista Juan José Ramos, “Niño Manuela”. 70 a 72 MUSICA Flamenco 13/3/08 09:37 Página 70
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De manera sencilla y directa,con ejemplos prácticos, asíconsiguió el periodista yguionista Manuel Moragadar a conocer las bases del
flamenco a los casi doscientos sociosque abarrotaron el Salón Real del Casi-no de Madrid para asistir a la confe-rencia-concierto “Introducción al Sen-tir Flamenco”, que se celebró dentrodel XIII Ciclo Musical.
El Presidente del Casino de Ma-drid, Mariano Turiel de Castro, dio labienvenida a todos los presentes, y se-ñaló que “en nuestro afán de innovar,de experimentar, queremos hoy aproxi-marnos a un arte, el flamenco, que tan-tos gustan, pero que tan pocos cono-cen”. Turiel de Castro afirmó que “losorígenes del flamenco son inciertos.Aún no se conocen con exactitud los
auténticos mecanismos sociales y cultu-rales que hicieron posible el nacimientode un arte popular donde se combinanlos más ilustres sedimentos de la músi-ca oriental almacenados en Andalucía”.
“Es posible imaginar la génesis mu-sical del flamenco como un crisol demuy profusos y entremezclados ingre-dientes orientales. Todos ellos fueronfundiéndose a lo largo de la historia enel solar andaluz”. El Presidente del Ca-sino de Madrid, tras hacer un breve re-corrido por la historia del flamenco(“una de las músicas más peculiares yreconocibles de Europa”) dio paso alos artistas: Manolo Moraga, PedroSanz, José Salinas, Juan José Ramos“Niño Manuela”, y Felisa de la Cruz.“Con todos ellos les dejo en la seguri-dad de que disfrutaremos de una tardede música distinta, singular, que intro-duce una gran novedad en nuestroshabituales programas , pero que estoyseguro ha de resultar del agrado de to-dos ustedes”.
Así fue. La velada comenzó con un“cante a palo seco”, sin guitarra. “Asísuena la angustia, el eco del dolor, deldesengaño… –dijo Moraga– ¿Quiénno necesita liberarse del dolor del al-ma?. Para sentir este arte no se necesi-ta ser rico ni pobre, ni gitano, ni anda-luz… porque la música recorre lo másprofundo de la conciencia humana”.
En primer lugar, los socios escucha-ron las “Siguiriyas”, “la expresión má-xima de la pena”, según Moraga, quetambién señaló que el flamenco “es unarte de extremos, transita entre la ale-gría y la desdicha”. Este arte, según
70 Casino de Madrid
Una clase magistral
CONCIERTOS ~ CICLOS ~ RECITALES
Música en el Casino
Manuel Moraga, junto con los cantaores Pedro Sanz y José Salinas, la bailaora Felisa de la Cruz, yel guitarrista Juan José Ramos, “Niño Manuela”, consiguieron, el pasado 18 de febrero, acercar el“Sentir Flamenco” a todos los asistentes al concierto-conferencia celebrado en el Casino de Madrid.
El guitarrista Juan José Ramos, “NiñoManuela”.
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contó el conferenciante, nace en am-bientes marginales, en los que echa raízla desventura, y donde la música setransforma en una seña de identidadpara las familias gitanas. Hablamos deuna época, la del desarrollo del flamen-co, que abarca desde 1425 hasta elsiglo XVIII.
A continuación se in-terpretaron “Roman-ces”, unos palos ins-pirados en los viejosromances de morosy cristianos, caballe-ros y princesas. El fla-menco no surge a la luzpública hasta mediadosdel siglo XVIII, en elque ya hay referenciaescrita de su existen-cia. “Poco a poco, elflamenco se va con-virtiendo en, ademásde en una forma de sen-tir, en una forma de vivir”,dijo Moraga.
En el siglo XIX las bases del fla-menco ya han calado, se profesionalizagracias, entre otras cosas, a la apariciónde los llamados “cafés-cantantes”. Elflamenco sale del ámbito privado. Lallamada “Edad de Oro del flamenco” sesitúa entre los años 1860 a 1910, es enesta etapa cuando se fijan las estructu-ras del flamenco que ha llegado hastanuestros días.
La siguiente pieza interpretada fue-ron unos “Tientos-tangos”. Los tangosson un palo de fiesta, tal y como expli-có Manuel Morga: “la pena sólo se qui-ta cantando. Pero de la fiesta de los tan-gos, pasamos al infortunio, parando,frenando el compás… al parar el ritmo,se consigue espacio para la creación.De Tangos a Tientos”.
Llegó el turno de la “Malagueña”:
“los flamencos ralentizan los fandan-gos, les dan jondura, son cantos libres:malagueñas, minas, tarantos…”. SegúnMoraga, el sentir de los cantos es tre-mendamente distinto; conforme se pa-ran, van ganando en profundidad: “Los
territorios de la pena se transitanmejor despacio”.
También habló elconferenciante de laguitarra que, hoy endía, junto con el bai-le, es el motor deatracción del flamen-
co. Entre la tosque-dad primitiva, y la ac-tualidad, encontramos
muchos nombres quehan sido fundamen-tales para el desarro-llo del intrumento: lasaga de los Habi-
chuela, Víctor Mongeo Paco de Lucía. “La
mayor libertad de la que hagozado la guitarra, ha hecho evo-
lucionar el propio cante”.Precisamente la guitarra, es funda-
mental en uno de los palos básicos del
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Los cantaores Pedro Sanz y José Salina.
Mariano Turiel dirigeunas palabras a losasistentes al evento.
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flamenco, que escuchamos a continua-ción en el Salón Real: las “Soleá”, “elsentir de la melancolía, la rabia digeri-da…”.
En cuanto al baile, Moraga afirmóque surgió en las primeras reuniones decante flamenco, llamándose bailes “decandil” por hacerse en patios así ilumi-nados. El baile, que “surge para ser ex-hibido”, tiene unas características pro-pias: componente erótico, admite elbaile en solitario, es más personal (pa-rafraseando a Belmonte “se baila comose es”), busca el suelo, la fuerza de latierra…
La velada terminó con un baile por“Alegrías”, genuíno de Cádiz. Recor-dando al poeta Félix Grande, Moragaafirmó, para terminar su intervención:“Salvo algunos momentos de júbilo, la
esencia flamenca, es la metáfora deldesconsuelo de la conciencia humana”
Los asistentes, puesto en pié, aplau-dieron el excelente trabajo de ManuelMoraga, Felisa de la Cruz, Pedro Sanz,José Salinas, y Juan José Ramos, “Ni-ño Manuela”. Las palmas reconocieronla labor de los artistas; y lo hicieron, có-mo no, al compás.
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La bailaora Felisa de la Cruz.
Todos los integrantes de “Sentir Flamenco”, saludan y corresponden a los aplausos del público.
El periodista y guionista, Manuel Moraga.
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